Al existir malos hábitos alimenticos, se genera obesidad donde es
mayor la grasa que el musculo en las personas obesas lo que desencadena niveles altos de azúcar en la sangre, lo que contribuye a la aparición de cáncer, de igual modo el sobre peso afecta a muchos órganos como el corazón, los pulmones, el hígado, el aparato digestivo, al haber mal funcionamiento o deficiencia de un solo órgano se da paso al crecimiento de células cancerígenas. Es importante tener en cuenta que una persona obesa por lo general presenta cuadros depresivos, se sienten solos, aislados, juzgados, lo que hace que sus defensas bajen y el cáncer hace su aparición
2. Explique que factores de riesgo influyen el desarrollo de
las enfermedades no transmisibles. Los factores de riesgo que influyen en el desarrollo de enfermedades crónicas están malos hábitos alimenticios, falta de actividad física, tabaquismo, alto consumo de bebidas alcohólicas, Estrés, estados depresivos crónico, en algunos casos es genético y hereditario. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades no transmisibles o crónicas, son dolencias de larga duración y de un accionar lento casi que silencioso, pero en la mayoría de los casos son tan certeras que son las causantes de una gran mortalidad. Tenemos: Enfermedades respiratorias crónicas como: asma, neumopatía. Enfermedades cardiovasculares, siendo los infartos, ataque cerebrovascular, hipertensión arterial. Diferentes tipos de cáncer La diabetes Enfermedades del riñón 3. Mencione el tipo de cáncer que produce el consumo de tabaco. El tabaquismo produce diversos tipos de cáncer como: Pulmón Laringe Esófago Garganta Lengua, poco conocida pero últimamente es más visible este tipo de cáncer Cavidades nasales Estomago Riñón Hígado Páncreas Cuello uterino Colon Cérvix Leucemia Cáncer de huesos
4. Describa como por medio de la alimentación se puede
prevenir el cáncer. Desde tiempos inmemorables lo expuso Hipócrates “Que tu alimento sea tu medicina” Los alimentos ricos en antioxidantes como frutas y verduras hacen que nuestro sistema limite, elimine o no permita el crecimiento de células cancerígenas. Verduras como la coliflor, las acelgas, los berros, las zanahorias, de igual modo frutas como el aguacate, los tomates, los ajos, la cúrcuma, semillas de linaza, pescados como el Salmon, carnes magras, germinados, el jengibre, té verde, champiñones como el shiitake, la orellana, nueces.