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Hablar de esquema corporal es hablar de la imagen que el niño se forma de su

cuerpo a partir de la información que recibe, depende de la maduración neurológica


como también de las experiencias que el niño o la niña tenga.

Tomar conciencia es aprender a conocerse y cuidarse, para pasar por la vida en


equilibrio y armonía. La conciencia corporal reside en escuchar a nuestro cuerpo,
cuando realmente escuchamos lo que sentimos aumenta el control y nuestro sentido
perceptivo también aumenta buscando ser cada vez ser mejor, existe desde nuestros
primeros días de vida el cerebro va recopilando información centrando en este caso
el objetivo de aprender y memorizar el movimiento.

¿Cómo consigo desarrollar la conciencia corporal?


Pequeños gestos hacen la diferencia. No movernos a base de impulsos e inercias es una buena manera de
retomar la conciencia del cuerpo.
Tal y como estas ahora no te muevas solo piensa en:
 ¿Cómo está colocado tu pie derecho?, no lo mires solo piensa en el, haz lo mismo con el
pie izquierdo y con el resto de preguntas.
 ¿Cómo está tu rodilla derecha?, ¿la sientes de la misma manera que la izquierda?
 Imagino que estas sentado/a, ¿hay alguno de los dos glúteos que ejerza mayor presión
sobre tu asiento?
 ¿Cómo está tu cadera? ¿acaso esta de lado?
 ¿Cómo está tu columna?, ¿la notas inclinada?, ¿hacia que lado?
 ¿Uno de tus hombros esta mas elevado?
 ¿y el cuello?
 ¿tienes la cabeza ligeramente inclinada? ¿hacia que lado?
Estas pequeñas preguntas te ayudarán a que puedas evaluar y empezar a tomar conciencia de tu cuerpo, 
De cada uno depende su propio equilibrio. En la medida que yo me sienta sereno y
equilibrado podré irradiar a mi entorno serenidad y equilibrio. Y eso pasa por mi
mundo conversacional, mis emociones y mi cuerpo. Tenemos, por tanto, el deber de
observarnos y mantenernos bien.

Una sugerencia: aceptemos expresar nuestras emociones y aprendamos a escuchar


sin miedo nuestro cuerpo y sus reacciones.

Como coaches, nos debemos a la escucha integral de nuestros coachees. Nuestra


emoción y nuestro cuerpo son nuestros radares. El coaching es siempre “conciencia
corporal” porque la emoción y el lenguaje “son y existen” en el cuerpo
POSICION HORIZONTAL A LA VERTICAL

ETAPA DEL ESQUEMA CORPORAL

Etapa del cuerpo vivido (de 0 a 3 años). No existe diferencia entre lo afectivo y lo


cognitivo. Hacia los 3 años el niño ha sido capaz de conquistar el esqueleto de un “yo” a
través de la relación con el adulto y de su experiencia global. Se dan dos procesos
fundamentales para la maduración del niño: la marcha y el lenguaje.

Etapa del cuerpo percibido (de 3 a 7 años). Esta etapa se caracteriza por la discriminación
perceptiva; de forma progresiva el esquema corporal va consiguiendo una orientación al
tiempo que se afirma la lateralidad. Hacia el final de la etapa el niño es capaz de dirigir su
atención sobre la totalidad y sobre los segmentos de su cuerpo.

Etapa del cuerpo representado (de 7 a 12 años). El niño consigue la representación


mental de su cuerpo en movimiento, permitiéndole una mayor conciencia de su motricidad.
Domina su cuerpo y dispone de una gran independencia de sus acciones.
Organización dispone de los elementos en el espacio, en el tiempo o los dos a la vez
Orientación una habilidad básica para moverse y situarse dentro del espacio con
respecto a las referencias espaciales y puntos cardinales, en general,
situar los objetos y orientar nuestros movimientos en el espacio que nos rodea.
La lateralidad es un predominio funcional de un lado del cuerpo humano sobre el otro es
decir su derecha y su izquierda

Direccionalidad concepto que está asociado cuando el niño va tomando conciencia de la


lateralidad de su cuerpo es decir el trayecto que realiza el cuerpo al moverse, la tendencia
hacia una cierta meta o la guía que permite dirigir a alguien o algo.

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