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REPENSAR EXPERIENCIAS.

Evaluación (y diseño) de programas psicosociales. Metodologías y


técnicas.

Pau Pérez-Sales
Grupo de Acción Comunitaria
www.psicosocial.net
Trabajo psicosocial y comunitario: marco conceptual e intentos de definición. ...........................5
Programas psicosociales: la violencia y la exclusión como ejemplo. .................................5
Enfoque de necesidades o enfoque de vulnerabilidades y capacidades ..............................5
Programas psicosociales versus programas de salud mental. .............................................6
Concepto de comunidad y de desarrollo comunitario.........................................................7
¿Qué entendemos por participación comunitaria? ..............................................................8
Investigación externa versus investigación participativa: ventajas e inconvenientes .........9
Tipos de programas psicosociales. ....................................................................................10
Intervenciones psicosociales basadas en la evidencia y dogmas en crisis. .......................12
Evaluación de programas psicosociales. .......................................................................................18
1. Evaluar ¿para qué? : Algunos ejemplos .......................................................................18
El Salvador: organización tras un terremoto. ....................................................................18
Exhumaciones en Guatemala: medir el significado y el impacto psicosocial del proceso20
Acompañamiento a familiares mapuches de personas detenidas / desaparecidas o
ejecutadas por razones políticas ........................................................................................22
Programa de prevención de SIDA en el colectivo de trabajadoras del sexo de Casablanca
(Marruecos). ......................................................................................................................24
2. ¿Qué tipos de evaluación existen? ....................................................................................27
Elementos del proceso...................................................................................................................30
La evaluación y el diseño como senderos de ida y vuelta.........................................................30
Uso de indicadores epidemiológicos y estadísticos ..................................................................40
La recolección de datos básicos ........................................................................................43
Indicadores de vulnerabilidad / capacidad. .......................................................................48
Indicadores de base epidemiológica o administrativa para la planificación de servicios de
psicología, psiquiatría y de salud mental ..........................................................................49
Herramientas para los ciclos de planificación - evaluación – planificación de programas
psicosociales..............................................................................................................................57
Observación participante.......................................................................................................57
Análisis..............................................................................................................................62
Informantes-clave..............................................................................................................63
Guía para la realización de grupos focales desde un enfoque participativo......................64
Técnicas para la búsqueda de relaciones causales ................................................................70
Árbol de problemas / Espina de pescado o similares. .......................................................70
Guía para realización de un análisis DAFO ......................................................................71
Uso del mapa de redes en evaluación de programas.............................................................74
Cuantificación de redes sociales. Enfoques participativos................................................82
Análisis de vulnerabilidades-capacidades en la evaluación de programas psicosociales. ....86
Mapa de Decisión – Acción ..............................................................................................95
El Mapa del Poder de decisión: Planificación y evaluación de las acciones de presión
política y cabildeo ...........................................................................................................105
Escalas de Afrontamiento y Cohesión Comunitaria. Estrategias y métodos para medir
eficacia e impacto cuando el objetivo es la propia comunidad. ..........................................106
Guía de entrevista semi-estructurada del proceso de investigación-acción “Impacto
psicosocial de los procesos de ejecución extrajudicial y desaparición forzada desde una
perspectiva indígena” (1997-98) .....................................................................................114
Guía de entrevista sobre factores de afrontamiento comunitario en situación de crisis. El
Salvador (2001). ..............................................................................................................116
Escala de Afrontamiento y Cohesión Comunitaria (proyecto Menores No Acompañados).
Ceuta (2002)....................................................................................................................120
Escala de evaluación del impacto comunitario de los procesos de exhumaciones.
Guatemala (2003 / 2004).................................................................................................121
Escala de impacto comunitario tras los atentados del 11 de marzo del 2004 (Madrid)..122
Metodologías para evaluar el grado de satisfacción. Metodologías visuales......................123
Validación transcultural de instrumentos............................................................................125
El papel de la cultura.......................................................................................................127
Entender el contexto político...........................................................................................127
A modo de recordatorio…...................................................................................................129
Elaboración del informe final..............................................................................................131
Anexos.....................................................................................................................................132
Anexo 1. Diseños quasi-experimentales en la evaluación de proyectos psicosociales. Darío
Páez Rovira .........................................................................................................................132
Anexo 2. Selección de la muestra y Cálculo del tamaño muestral .....................................137
Anexo 3. Validación de Instrumentos psicométricos: sensibilidad, especificidad y valores
predictivos ...........................................................................................................................140
BIBLIOGRAFIA.........................................................................................................................143
Introducción.

Trabajo psicosocial y comunitario: marco conceptual e


intentos de definición.
Cuando en el trabajo educativo, sanitario y social se habla de un enfoque psicosocial y
comunitario nos referimos, en este libro, a la necesidad de mantener una perspectiva del trabajo
que contemple la interacción entre el individuo y el medio social y político en el que vive y en el
que prime un enfoque de trabajo transformador que trascienda al individuo. Desde esta óptica y
de manera específica, cuando se trabaja con las causas y consecuencias de las situaciones de
exclusión, violencia y marginación se busca entender al individuo en su contexto y al contexto
en función de los individuos que lo forman, como un todo indisoluble y en diálogo constante.
El trabajo psicosocial y comunitario, por tanto, no describe una determinada metodología
de aproximación a la acción (se confundiría en este sentido, con el uso de técnicas participativas,
que como tales sólo son técnicas, es decir, medios), sino un cierto modo de mirar y entender la
realidad, entroncando con, por ejemplo, la idea transformadora de Ignacio Martín-Baró (1990)
cuando hablaba de una psicología de la liberación, los postulados filosóficos y sociales de Paulo
Freire cuando defendía el uso una pedagogía del oprimido o de Orlando Fals-Borda cuando
describiendo sus postulados de la investigación-acción participativa consideraba que la
investigación sociológica debía ser aplicada a los problemas de la realidad y ser controlada por y
para aquellos a los que se aplicaba.

Trabajar con un enfoque psicosocial y comunitario es tener una mirada especial sobre la
realidad que considera al hombre como un todo en su medio. Dentro de esa mirada dos
elementos serán claves: la dignidad como condición irrenunciable, y la capacidad de control
sobre la propia vida.

Programas psicosociales: la violencia y la exclusión como ejemplo.

Una situación traumática es una situación de amenaza para la integridad física o


psicológica de un individuo o una comunidad. Considerando las comunidades y los grupos que
las conforman, la violencia implica una ruptura del tejido social (lo que significa la
desestructuración o destrucción de los mecanismos económicos, políticos y sociales de
regulación, organización y afrontamiento de la vida diaria). Desde el punto de vista de las
personas afectadas, la violencia y la exclusión afectarán una serie de ejes psicológicos
individuales relacionados con el sentido de seguridad, de confianza en los demás, de orden y
predictibilidad del mundo, de control sobre la propia vida o de comunicabilidad e intimidad,
entre otros, en términos negativos (pérdida de confianza) o, en ocasiones positivos (en términos
de crecimiento postraumático / resiliencia).

Enfoque de necesidades o enfoque de vulnerabilidades y capacidades

Al trabajar con personas o comunidades puede partirse de dos modos de conceptuar la


realidad. El primero, basado en la consideración de las necesidades entenderá como objetivos
aquellas carencias o déficit que presenta la persona o la comunidad respecto a estados anteriores
(por ejemplo tras una catástrofe) o respecto a estándares prefijados (por ejemplo, la media de
analfabetismo en el país). Desde esta óptica el objetivo de trabajo será atender a dichas
necesidades proveyendo aquellos elementos de que se carece.
Un enfoque alternativo es aquel que se basa en un análisis de aquellos factores que hacen
que una persona o comunidad esté en situaciones de desventaja permanente (lo que
denominaríamos factores de vulnerabilidad) y que recursos propios dispone para enfrentarlas
(análisis de capacidad). Las vulnerabilidades, entendidas en un sentido amplio (estructurales,
organizativas, políticas o de otro tipo) y las capacidades (entendidas como los recursos y modos
de afrontamiento propios) constituirán la matriz desde la que pensar como enfrentar los
problemas. La experiencia muestra como el trabajo en base a necesidades es cortoplacista, pocas
veces llega a los estándares que se propuso, y en tanto en cuanto no tiene por qué atacar
necesariamente los factores de vulnerabilidad, puede acabar siendo anulado por el círculo
crónico del problema.

El uso y abuso del término psicosocial, que se ha aplicado a múltiples realidades y tipos
de acciones ha llevado a un cierto desprestigio del término, que se ha asociado con frecuencia a
un cajón de sastre en el que cabe cualquier tipo de acción que saliera de los cánones típicos de un
programa de salud (mental). Este libro propugna que para poder proponer un paradigma y un
modelo de trabajo, debe demostrarse su utilidad y esto sólo es posible a través de procesos de
evaluación.
Si los programas psicosociales son aquellos que tiendan a minimizar los factores de
vulnerabilidad y a potenciar los de resistencia y crecimiento postraumático, desde esta
concepción, ¿cómo medimos eficacia manejándonos con términos tan difíciles de operativizar?
Si el trabajo en las comunidades persigue aumentar y potenciar las capacidades propias
de afrontamiento ante la adversidad y reconstruir el tejido social dañado por la violencia, ¿es
posible demostrar de algún modo que esto se ha logrado?

A reflexionar este reto se dedican estas páginas.

Programas psicosociales 1 versus programas de salud mental.

Programas de salud mental. Por salud mental, en sentido restringido, se entiende trabajar con
las enfermedades y trastornos mentales existentes en una comunidad. Se entiende, por tanto,
todas aquellas acciones que se ejecutan en relación a la prevención, atención, tratamiento y
rehabilitación de dichos problemas. Cuando queremos, en esta perspectiva, tener en cuenta el
papel de la comunidad hablamos de salud mental comunitaria (OPS, 2002).
Desde ésta óptica los programas de salud mental son un tipo concreto de programa
psicosocial.

Psicosocial como concepto transversal. Cuando la definición de psicosocial que dábamos en el


primer párrafo se aplica a los programas de desarrollo o de intervención en situaciones de
exclusión o violencia, hablamos tener una mirada global de la realidad y actuar en los diferentes
planos de la misma, de prevenir y actuar sobre aquellos ejes básicos que éstas situaciones

1
Obsérvese que se evita el término intervención psicosocial por una cuestión epistemológica. Intervenir alude al
hecho de incidir de manera externa en un proceso. La palabra acción o actuación evoca con mayor propiedad la idea
de un trabajo conjunto entre actores (comunidad con sus diferentes grupos de interés, agentes gubernamentales y no
gubernamentales, agentes de salud, asociaciones y grupos organizados, líderes o activistas), que si bien tienen
intereses y agendas diferentes y en ocasiones contrapuestas, buscan una relación deliberada de cooperación entre
pares.
cuestionan y que enumerábamos antes : concepto de uno mismo, uno mismo frente al mundo y
frente a los demás, y de considerar todos aquellos elementos que aumentan la capacidad de las
personas y comunidades para tomar el control sobre su futuro, entroncando con un concepto
humano de desarrollo. Esto tiene que ver con elementos de dignidad y de control sobre la propia
vida.
El término psicosocial, aplicado a estas situaciones, abarca, además, muchos otros elementos:

• Entronca con la tradición de salud pública que emana de la Declaración de Alma Ata y las
directrices de la Organización Mundial de la Salud que entienden ésta no sólo como la
ausencia de enfermedad sino como un estado de equilibrio y bienestar con componentes
físicos, psicológicos y sociales. Combate, por tanto, la posibilidad del reduccionismo
biomédico.
• Pone el énfasis no sólo en los aspectos curativos, sino en los preventivos, considerando
problemas médicos todos aquellos que sean agentes patógenos o factores de riesgo
constatables en el ser humano. En este sentido la marginación o la violencia son, por
ejemplo, problemas de salud, como así lo afirma la Organización Mundial de la Salud y
las principales sociedades médicas desde la década de los ochenta (OPS, 1999).

Concepto de comunidad y de desarrollo comunitario.

Puede definirse una comunidad como un espacio integral de desarrollo de un grupo


humano organizado como una colectividad.
Desde esta perspectiva, desarrollo es sinónimo de control sobre el propio destino. Desde
un punto de vista psicosocial, el desarrollo puede entenderse como el proceso por el que los
seres humanos (como individuos, comunidades o grupos sociales) alcanzan un mayor control
sobre su vida y sus circunstancias. (Escovar, 1979, Escobar, 1996). El énfasis, por tanto, es en el
ser humano y no en las condiciones materiales.
Las comunidades están formadas por grupos de interés que, por tanto, en ocasiones
funcionan de manera cooperativa y en otros de manera enfrentada y en el que se desarrollan
constantemente fenómenos de choques y alianzas. En este sentido no debe deificarse la
comunidad como un bloque homogéneo. Aunque hay una bien demostrada correlación entre
sentido de pertenencia y cohesión comunitaria, hay ocasiones en las que una comunidad puede
constituirse en una estructura opresiva o que tener un bajo sentido de pertenencia a la comunidad
puede ser un factor protector de supervivencia.
En un estudio realizado en los barrios del Bronx y Harlem, en Nueva York, se realizaron
historias de vida de mujeres que procediendo de escuelas con una alta tasa de fracaso escolar y
siendo madres solteras en la época de estudiante, habían llegado a ser posteriormente
profesionales. Se observó que uno de los elementos más relevantes era la distancia que
establecieron respecto a la vida del barrio que fue considerado un lugar de residencia, pero no de
vínculos y relación (Brodsky, 1995).

Lo importante, por tanto, es si tener un alto sentimiento de pertenencia a la comunidad y


participar en ella es o no adaptativo frente a las dificultades de la supervivencia y para lograr el
desarrollo en los términos antes descritos.
Una comunidad es resistente si se adapta bien a la adversidad. El miedo puede ser
adaptativo, la desconfianza puede permitir sobrevivir, la inacción (pasividad aparente) puede ser
la mejor táctica… Las reglas básicas del trabajo psicosocial tienen que ver con el respeto a las
formas locales de resolución de los problemas y a buscar la comunidad como forma de
proyección del individuo y al individuo como elemento de crecimiento comunitario, pero sin
visiones idealizadas ni preconceptos sobre cómo deben ser o dejar de ser las interacciones y
modos de funcionamiento. Lo cual no es incompatible con el principio de que cuando se logra
una armonización de intereses, poder actuar de modo unido y en bloque aumenta la eficacia y
multiplica el poder de transformación de los individuos. Cuando actuar de modo cohesionado no
es una obligación, sino una opción asumida, es sin duda cuando se logra el máximo poder
transformador de la realidad.

¿Qué entendemos por participación comunitaria?

No todas las comunidades están en condiciones de participar de igual modo en procesos


organizativos. Una emergencia requiere que se tomen decisiones y con frecuencia en
comunidades poco estructuradas o que han sido muy golpeadas no es posible disponer de todo el
tiempo necesario para realizar un trabajo previo de consolidación de la organización comunitaria.
Por ello una de las primeras y más delicadas tareas de un líder comunitario o de un agente
facilitador externo es evaluar la estrategia de participación comunitaria por la que se va a optar.

Todas las iniciativas que aparecen en


la siguiente tabla se denominan
participación comunitaria por quienes las
llevan a cabo, aunque detrás de cada una
hay grados muy diferentes de participación.

Si, por ejemplo, un grupo de


encuestadores pasa un cuestionario a una
muestra de personas de la comunidad para
saber su opinión respecto a las
problemáticas más relevantes y el modo de
enfrentarlas que se consideraría adecuado,
y éste no se acompaña de nada más, la participación de la comunidad es pasiva. No hay
participación real, sino análisis de la realidad Comunitaria.
Ahora bien, hay contextos en que ésta es la única vía posible, y puede ser un método
rápido y eficaz de pulsar la opinión cuando hay que tomar decisiones rápidas.
Esta misma metodología, cambia radicalmente en su capacidad de generar
fortalecimiento en la toma de decisiones organizativas cuando las preguntas han seguido un
camino de ida y vuelta y han sido pactadas en grupos focales o con las autoridades, o se realiza
una devolución de los resultados en grupos, en asamblea, a través de una hoja escrita con
metodología de educación popular o cualquier otra metodología, y se generan procesos de
puesta en común y discusión para elaborar planes comunitarios de acción.

En ocasiones las comunidades han sido muy golpeadas o la represión y la violencia han
mostrado a la gente los peligros de la participación comunitaria y les han hecho optar por el
silencio o el trabajo de bajo perfil. Fomentar participación Comunitaria en estos contextos puede
conllevar exponer a la población a riesgos. Esto es especialmente así cuando se trata de acciones
externas a la comunidad.
Toda acción encierra sus contradicciones.

Ejemplos de acciones muy dispares consideradas participación comunitaria


Iniciativas Peligros... Pero...
Las autoridades o las -No es un modo de -Si independientemente de cómo se
organizaciones plantean acciones participación comunitaria generó el proceso, la necesidad es
“comunitarias” que en realidad sino de abaratar costos. sentida por la población como
suponen que se suministran prioritaria, el proceso puede ser
materiales e insumos y la valorado como positivo.
comunidad aporta mano de obra
gratuita.
Se realiza un análisis de prioridades -Las autoridades u ONGs En comunidades muy golpeadas
con grupos comunitarios a través de recogen los datos y realizan puede ser un primer paso para que
una técnica de Debilidades- su planificación estratégica organicen sus propia voz.
Amenazas-Fortalezas-
Oportunidades (DAFO)
Se discute en conjunto los ¿Quién tiene funciones y -Si además de discutir un plan de
problemas y las prioridades. responsabilidades después? acción, se asignan fondos y se
¿Quién controla los fondos distribuyen funciones, puede generar
y toma las decisiones? mayor debate y participación

Investigación externa versus investigación participativa: ventajas e inconvenientes

Todas las herramientas de trabajo comunitario pueden ser utilizadas desde dos ópticas:
(a) aplicadas por el equipo que hace el diagnóstico y la evaluación, usando sus criterios, en
función de lo que la comunidad ha ido narrando (b) siguiendo metodologías de investigación-
acción participativa.
La segunda opción es sin duda preferible, aunque no siempre se dan las condiciones para
ello.

Evaluación externa Investigación-Acción Participativa


Metodología - El equipo administra el - El equipo explica el proceso a los implicados. Este es
instrumento de manera presentado no como algo externo (obtener datos /
individual, en grupo o analizar / aprender de su experiencia) sino interno
en asamblea. (mejorar el conocimiento que las personas o grupos
- Se anotan o graban los tienen de sí mismos, para poder enfrentar mejor un
resultados para determinado problema), Para ello en ocasiones hay que
trascripción posterior. consensuar el enfoque de la evaluación.
- Se evalúan y sintetizan - Los instrumentos son aplicados por miembros de la
las respuestas de modo comunidad, por los miembros del equipo o
cuantitativo o cualitativo conjuntamente.
y se elabora un informe - La información generada es ordenada (no
con los datos. interpretada) y devuelta a las personas afectadas en
reunión o asamblea, para que sean estas las que discutan
los resultados y hagan las valoraciones. Los miembros
del equipo pueden abstenerse de intervenir o aportan
elementos o reflexionan igual que el resto.
- El equipo, finalmente, realiza un documento de
síntesis en el que se separa y distingue lo que
constituyen valoraciones y soluciones surgidos de la
propia comunidad, de lo que son valoraciones del
proceso
Ventajas - Mayor rapidez - Mayor implicación de la comunidad. Posibilidad de
- Mayor claridad acceder a compromisos por parte de los propios
afectados. La comunidad como actor directo.
- Mayor fiabilidad de resultados y conclusiones
Inconvenientes - Subjetividad de - Deben darse condiciones, que no siempre se dan, de
análisis 1. Representatividad,
2. Alto nivel de participación
3. Implicación.

De no ser así puede ser peligroso por cuanto se toma


como “opinión de la comunidad” avalada por un
proceso de Investigación-Acción-Participativa, lo que
solo es la opinión de un grupo de la misma
- Las técnicas que controlan esto (mapa de actores y
redes, técnicas de muestreo, análisis de grupos...)
requieren un esfuerzo importante.

Tipos de programas psicosociales.

Existen múltiples programas que corresponden a lo que denominaríamos programa


psicosocial. El anexo a este capítulo muestra un listado no exhaustivo de posibilidades.
En general, y a efectos didácticos, pueden acogerse a una serie de grandes categorías, que
corresponden a diferentes niveles de actuación al diseñar acciones.

1. Farmacológicos. Detección y tratamiento sintomático de personas emocionalmente


afectadas.
2. Psicoterapia (individual o de grupo). En el trabajo comunitario (especialmente en violencia
o en exclusión) trabajar en base a enfoques de aconsejamiento breve de tipo pragmático.
3. Psicoeducación (individual o de grupo). El objetivo es hacer educación sanitaria a través de
aconsejamiento psicoeducativo individual o del uso de folletos. Estos deben centrarse en qué
hacer ante un problema que en catálogos de síntomas y trastornos que generen aún mayor
preocupación.
4. Trabajo con familias en riesgo.
5. Programas de formación de formadores. El objetivo es capacitar a personal voluntario,
líderes, personal paramédico o médico en herramientas básicas de diagnóstico y apoyo y
metodologías de educación popular, para que estos a su vez puedan desarrollar procesos de
capacitación en cascada. La formación puede basarse en elementos clínicos básicos o, más
raramente, de refuerzo comunitario.
En el caso de la capacitación en herramientas básicas de psicoterapia, el nivel de
formación es superior y obliga a considerar procesos a largo término de acompañamiento y
supervisión; el objetivo es constituir un grupo estable de personas capacitadas para dar una
atención psicológica más duradera y de mayor complejidad.
6. Programas psicosociales. Se suele considerar bajo este nombre una multiplicidad variada de
programas de apoyo a la población en problemas de la vida diaria, con componentes más
sociales que médicos : guardería y atención a niños, talleres lúdicos o pre-laborales,
programas a corto plazo de autoempleo y microempresa (huertos, manufacturas...) etc.
Aunque este tipo de programas constituyen espacios de encuentro e intercambio entre
personas, su objetivo principal no contempla una visión de conjunto ni están diseñados
específicamente para enfrentar las consecuencias emocionales de hechos comunitarios. La
denominación psicosocial, en este caso, puede acabar siendo un cajón de sastre que alude
simplemente a su carácter atípico, por lo que conviene evitarla y designarlos por su objetivo
específico real.
7. Experiencias de fortalecimiento o reconstrucción social. Acciones cuyo objetivo son
combatir la posible percepción de indefensión y vulnerabilidad, que buscan fortalecer los
espacios de gestión y de dignificación. Tiene que ver con el fomento de procesos
organizativos, apoyo a liderazgo, asesoría legal, conciencia social y trabajo en
vulnerabilidades motivacionales o actitudinales (ver más adelante), en capacitación en
técnicas de cabildeo o negociación etc .
8. Programas integrales, que incluyen uno o más de los componentes anteriores: detección y
tratamiento de personas afectadas clínicamente, capacitación, trabajo con grupos vulnerables
y experiencias de reconstrucción social.

En contextos de crisis suelen primar los enfoques de detección y tratamiento breve o de


formación (1 a 5). Con mayor tiempo, suelen desarrollarse programas estables de formación de
formadores (5) o programas de apoyo sociosanitario (6). Las experiencias de reconstrucción
social (7) y los programas integrales constituirían el auténtico estándar de calidad a lograr
cuando el compromiso va más allá del inmediato de una crisis.
En este manual se desarrollan algunas de las herramientas necesarias para evaluar el impacto
de todo este tipo de acciones.
¿Cuál es el papel del trabajador psicosocial? : una definición de consenso de la
UNESCO

“La práctica por ensayo y error durante décadas de proyectos fallidos ha mostrado la
convergencia en una serie de conclusiones (...) :

‰ El cambio solo puede provenir de poblaciones que sienten la necesidad de él


‰ Estas poblaciones tienen problemas que resolver (una expresión quizás más útil que
la de “desarrollo”)
‰ Situaciones como la pobreza o la violencia son el resultado de procesos micro-meso y
macro-sociales, que inducen secuencias de problemas cuyas soluciones deben ser
buscadas localmente.
‰ Sólo las poblaciones (grupos, comunidades) pueden formular estas cuestiones y dar
una respuesta apropiada en la forma de posibles soluciones; y no son siempre
conscientes de cuales son estos problemas en un estadio inicial.
‰ Un agente externo puede dar apoyo en la formulación o la resolución de sus
problemas, pero no puedo definirlos ni resolverlos por ellos.
‰ El agente externo puede haber imaginado otras soluciones, quizás soluciones mejores
(a pesar de que uno nunca puede estar seguro de esto), pero la experiencia de
aprender por uno mismo compensa con creces la pérdida de alguno de los aspectos
de una solución técnicamente óptima.
‰ A medida que la comunidad percibe los cambios durante la fase en que resuelve sus
propios problemas, los agentes externos deberían iniciar su propio proceso de auto-
crítica y su propio proceso de aprendizaje y cambio siguiendo las lógicas de la
dinámica de la interacción social de la que uno es también parte.
‰ El uso cuidadoso de las situaciones de cambio puede revelar nuevos recursos y
capacidades para la solución de problemas
‰ Una sociedad políticamente consciente se inicia cuando todo el mundo empieza a
percibir la interdependencia que tienen entre sí los diferentes problemas sus
soluciones y las situaciones de cambio asociadas a esto

Fuente : UNESCO. (2000).

Intervenciones psicosociales basadas en la evidencia y dogmas en crisis.

La Organización Mundial de la Salud ha empezado a hablar últimamente de


Intervenciones psicosociales basadas en la evidencia (OMS, 2004) definiéndolas como aquellas
acciones para las cuales hay una evidencia científica consistente de que actuarían mejorando la
situación de los “clientes” (sic). Enlaza esta necesidad con la responsabilidad de garantizar a
pacientes y familiares el tratamiento mejor y más efectivo. Las grandes dificultades para
establecer relaciones de causalidad clara entre intervenciones psicosociales y resultados finales
hace que en realidad la OMS reconozca que deba trabajarse en base al principio de la mejor
evidencia disponible. Y esto incluye, como criterio esencial, la propia subjetividad de los
“clientes” (sic).
Sin entrar al debate sobre si esto es posible o la realidad es tan polimorfa y multicausal y
la subjetividad de personas y grupos tan dependiente de las circunstancias, que el intento se
asemejaría más a una nueva construcción de la torre de Babel o a un nuevo intento de poner
puertas al mar, hay un fondo esencialmente legítimo detrás de este esfuerzo cientifista:
comprobar cómo la realidad, una y otra vez, se encarga de convertir en falsos axiomas que se
daban por ciertos y la responsabilidad ética de intentar hacer las cosas con el máximo rigor.
Un ejemplo muestra claramente esta idea. Uno de los axiomas considerados intocables
del trabajo en prevención de la salud era considerar que la psicoeducación constituía un pilar
fundamental del tratamiento rehabilitador y de prevención de recaídas en gran parte de la
patología psiquiátrica mayor y una herramienta fundamental para la detección precoz de caos
ante una situación de
vulnerabilidad.
Dos estudios
recientes han
cuestionado este
dogma. Por un lado
una revisión Cochrane
sobre la utilidad de la
psicoeducación en la
prevención de
recaídas en la
esquizofrenia
mostraba que su
efecto era muy
limitado (Pécala E,
Merinder L. (2002).
Más grave es lo que
sugiere un estudio
randomizado caso-
control sobre el
impacto de la
psicoeducación sobre
síntomas de estrés
postraumático en
supervivientes de
accidentes de tráfico
grave (Turpin, G,
Downs M, Mason S,
(2005). El grupo que
NO recibió
psicoeducación tuvo
una evolución más
favorable que aquella
que fue informada
sobre los posibles
síntomas a presentar
tras el accidente.
El debate no es tanto sobre estos dos trabajos en concreto. Por un lado las revisiones
Cochrane no niegan la utilidad de una técnica, sólo dicen si existen suficientes datos para afirmar
incontrovertiblemente su utilidad. Y el estudio de Turpin y cols tiene muchos claro oscuros
respecto al tipo de información que se daba: se sabe que los folletos de autoayuda centrados en
síntomas más que en estrategias y recomendaciones de salud, suelen tener un impacto negativo.
Lo relevante en ambos casos es las dudas que generan respecto a la idea naïf del “todo vale” y la
necesidad y el deber de objetivar que esto es así.
Esto plantea retos complejos, porque medir la eficacia de intervenciones en base a
criterios puramente clínicos es relativamente sencillo: existen numerosas escalas que miden
síntomas para casi todos los trastornos mentales. Mucho más complejo es ir más allá de esta
visión y medir el impacto global de las acciones sobre la vida real de los individuos y las
comunidades.

Anexo. Actuaciones psicosociales en el contexto de guerra o violencia organizada.


Ejemplos de programas

Guerra. Refugiados y Desplazados.

. Servicios psicológicos individuales para civiles. Atención clínica.


- Evaluación y tratamiento de casos de desplazados - refugiados.
- Aconsejamiento de niños, adultos, ancianos.
- Programas de psicoterapia para grupos 'especiales' :
- Personas violadas.
- Tortura
- (Ex)-presos. (Ex)-detenidos en campos de concentración.
- Apoyo psicológico a personas que trabajan en programas de ayuda humanitaria :
desgaste, agotamiento, traumatización secundaria.

. Trabajo psicológico en grupos terapéuticos.


. Grupos de contacto. Espacio de organización e intercambio no dirigido.
. Grupos de autoayuda para mujeres, adolescentes.
. Grupos de trauma para : - Mujeres violadas.
- Prisión.
- Tortura.

. Programas de apoyo y tratamiento psicológico para combatientes (soldados/guerrilla).


- Programas para combatientes con afectación psicológica severa.
- Programas especiales para niños-combatientes.
- Programas para familiares de combatientes. Ansiedad. Duelo.

. Programas de atención a lisiados de guerra civiles y no civiles. Apoyo económico. Atención


psicológica (TEPT, adaptación a minusvalías, adaptación a prótesis, deformaciones y problemas
de imagen corporal). Rehabilitación. Formación y educación. Capacitación laboral.

. Atención comunitaria de poblaciones vulnerables.


- Apoyo a ancianos (>60) que viven solos o con miembros de su familia que no pueden
cuidarles. Provisión de paquetes alimentarios /ropa/ medicamentos. Visitas. Referir para
tratamiento psicológico a aquellos que pudieran necesitarlo.
. Atención a niños huérfanos o que han perdido contacto con sus padres. Tareas de
albergue, alimentación y búsqueda y localización de familiares. Apoyo a programas
internacionales de adopción.
. Atención a personas con minusvalías psíquicas o físicas y a pacientes psiquiátricos
crónicos.

. Programas en centros de acogida o de refugio para mujeres que han sufrido violencia o abuso
o para niños de tiempo parcial (puntos de apoyo e intercambio) o completo (residencia).

. Programas en campos de refugiados. Organización colectiva. Empowerment.


. Programas de apoyo a exilio. Búsqueda de lugares de refugio. Trámites y documentación.
Viajes. Acogida en los países receptores. Vínculo con el país de origen.

. Actividades comunitarias y de servicios sociales.


Laboral-Servicios especiales a la comunidad.. Fabricación de prótesis ortopédicas.
Tareas de desescombro y reconstrucción.
Laboral-Generación de recursos. Ganchillo, costura, peluquería para hombres/mujeres,
construcción de juguetes, elaboración de artesanía, de velas, escribir cartas solicitando apoyo
económico y solidaridad, pintar calendarios o postales.....
Servicios comunitarios. Servicio de jardín de infancia, de traducción, de asesoría legal...
Educativas Clases de computación, mecanografía, idiomas, apoyo escolar, cursos de
primeros auxilios....
Ocio : Teatro, payasos, música, deporte, juegos, exposiciones....
Educación para la salud. Folletos de información sobre salud mental. Programas de radio
o tv local....

. Apoyo bibliográfico a centros de salud mental y hospitales.


- Bibliografía actual : libros y revistas. Actualización de fondos.
- Acceso a bases de datos internacionales.

. Programas de capacitación.
Para médicos generales.:
Para terapeutas locales : - TEPT
- Terapia de personas traumatizadas.
- Habilidades de aconsejamiento
- Relaciones terapéuticas.
- Duelo
- Intervención en crisis.
- Psicofarmacología. Uso de fármacos. Fármacos esenciales.

Para organizaciones : - Dinámicas de trabajo.


- Desgaste .

Para maestros y educadores : - Detección de síntomas de TEPT en niños.


- Apoyar al niño en situación de duelo .
- Seguimiento y apoyo regular y consultoría a los maestros.

Para otro personal no médico (trabajadores sociales, personal de Cruz Roja y


organizaciones humanitarias. etc) : - Técnicas de intervención en crisis.
- Detección de síntomas de TEPT.

Violencia estructural

. Trabajo con grupos de adolescentes con problemas de violencia (delincuentes, pandillas,


maras...).
- Técnicas de acción-participativa, autorreflexión y reivindicación : talleres de video,
teatro, elaboración de programas de radio o periódicos.
- Programas de formación laboral autogestionados.
- Capacitación y educación.
. Trabajo con adolescentes en riesgo.
- Sexualidad y embarazo.
- Prostitución.
- Alcoholismo y Toxicomanías.
- SIDA y enfermedades de transmisión sexual.

. Programas con niños de la calle.


- Consumo de inhalantes o drogas de síntesis.
- Albergues autogestionados.
- Programas de escolarización.
- Programas laborales.

. Programas de violencia intrafamiliar.


- Atención a mujeres u hombres maltratados.
- Programas de refugio e invisibilización.
- Aconsejamiento y terapia individual o grupal.
- Intervención en crisis.
- Teléfono permanente (Hot Line)

. Talleres de resolución no violenta de conflictos en escuelas, centros de salud, asociaciones y


colectivos.

. Programas de información y capacitación sobre Derechos Humanos.

. Acciones de mediación y resolución práctica de conflictos con acciones no violentas.


Mediación en conflictos de tierras, laborales etc, asesorando en técnicas de negociación.

. Elaboración de materiales de educación popular. Depresión, Suicidio, Alcoholismo,


Insomnio,Violencia, Epilepsia.

Violencia Política. Derechos Humanos

. Intervenciones comunitarias con poblaciones amenazadas.


-Reflexión comunitaria a través las metodologías locales y según las estructuras propias
de la comunidad. Origen y las causas de la violencia y modos colectivos de enfrentarla.
- Talleres de educación popular (dinámicas reflexivas, fiestas, sociodrama....).
- Elaboración de una memoria colectiva de la represión y la violencia. Testimonio como
elemento rehabilitador individual y colectivo.
- Apoyo a procesos colectivos de duelo y reparación (monumentos, recordatorios, actos
de homenaje y reivindicación).
- Formación de mediadores sociales (capacitación en la organización y dinamización de
grupos de autoayuda y reflexión).

. Intervención clínica con víctimas de violaciones a los Derechos Humanos.


- Apoyo a las Agrupaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos y de Ejecutados
Políticos.
- Apoyo psicológico a dirigentes y a trabajadores de organizaciones de derechos humanos.
- Apoyo psicológico a personas relegadas/exoneradas.
- Programas de apoyo a retornados.
- Apoyo a familiares y comunidad en procesos de exhumación tras masacres.

. Lucha contra la Impunidad como perpetuador del daño individual y colectivo.


- Apoyo a procesos legales de denuncia.
- Acompañamiento a personas o comunidades que desean dar testimonio de su situación.

. Acciones urgentes por correo, telegrama, correo electrónico.

. Protección de trabajadores de derechos humanos amenazados.


- Acompañamiento.
- Programas de invisibilización interior/exterior.
- Denuncia internacional de posibles agresores.

. Programas de protección y exilio. Búsqueda de lugares de refugio. Salida del país.


Organización en el país receptor.

. Acciones de presión en los países del Norte.


- Trabajo de presión (cabildeo) ante las instancias públicas.
- Denuncias en prensa y medios.
- Manifestaciones y actos públicos de protesta.
- Acciones no violentas contra intereses del país.
- Campañas de boicot a productos o representantes de la empresa o el país responsable.

. Asesoría legal y jurídica.


- Procedimientos de recogida de testimonios de violaciones a los Derechos Humanos.
- Elaboración de datos e informes.
- Procedimientos de denuncia ante los organismos internacionales de derechos humanos y
cortes de justicia internacional.

Desarrollo humano.

. Creación de redes de primer nivel de atención en salud mental.


- Capacitación de promotores de salud / brigadistas: detección de problemas de salud
mental, elementos básicos de intervención, criterios de referencia.

. Programas de Medicina Tradicional.


- Programas de diálogo intercultural con los sistemas médicos populares y tradicionales.
Comprensión y potenciación de los métodos tradicionales de tratamiento de los problemas
emocionales y psicológicos.
- Programas de recuperación y desarrollo de fitoterapia.

. Programas de Reforma de Instituciones Psiquiátricas.


- Programas de desinstitucionalización .
- Capacitación de profesionales de atención primaria en programas descentralizados.
- Asesoría y educación de familiares.
-
. Creación/Apoyo a estructuras intermedias (ambulatorios, centros de día, servicios de
rehabilitación).
Evaluación de programas psicosociales.

1. Evaluar ¿para qué? : Algunos ejemplos

La evaluación de programas es la única herramienta de que disponemos para aprender del


día a día y para avanzar en el trabajo psicosocial y comunitario. La evaluación es, por ello, ante
todo y por encima de todo, una herramienta de aprendizaje. La evaluación se refiere tanto al
pasado (lo que se hizo) como al futuro (por dónde seguir andando), es un camino de ida y vuelta
para que nuestra memoria y la memoria de las comunidades y las organizaciones acompañe los
procesos.
Evaluar surge como necesidad cuando, cada vez que se aplican metodologías de análisis
de la realidad surgen datos y elementos de reflexión que cuestionan y contradicen las ideas
preconcebidas que pudieran existir. En esta sección vamos a analizar algunas experiencias
participativas con resultados sorprendentes.

El Salvador: organización tras un terremoto.

El 13 de enero y 13 de febrero del 2001 El Salvador sufrió uno de los peores terremotos
del siglo, que provocó la destrucción de áreas importantes del centro del país. Las lluvias que lo
acompañaron provocaron el agrietamiento y el deslave del volcán que domina la ciudad,
provocando el sepultamiento de más de doscientas casas del barrio de Las Colinas. La población
se agrupó espontáneamente a lo largo de todo el país. Los dos mayores, en Nueva San Salvador,
fueron El Cafetalón y, unos meses después, Santa Gertrudis.
Los albergues asentaban sobre instalaciones deportivas municipales o privadas, estaban
constituidos por tiendas de campañas aportadas por el ejército u organismos internacionales. El
primero (El Cafetalón) llegó a albergar 12.000 personas, disminuyendo el tamaña a medida que
algunas familias encontraban acomodo en casa de familiares o iban reconstruyendo la propia,
estabilizándose a los tres meses en una población de alrededor de 4000 personas, que pasaron a ir
acomodando lo que era un albergue provisional como semi-definitivo, a la espera de que las
autoridades les dieran alguna solución de alojamiento. Con el tiempo y ante la necesidad de
reorganizar la zona, muchos fueron reubicados en el albergue Santa Gertrudis o en otros
albergues.
En esta fase de pasar de la emergencia a una cierta adaptación y estabilización en la
precariedad, un equipo de estudiantes y profesores de psicología de la Universidad
Centroamericana (UCA) y de psicólogos de la ONG Médicos Sin Fronteras - Holanda realizaron
un proceso de investigación-acción en los albergues para ver las actitudes frente al terremoto y
los hechos posteriores, la percepción de control sobre la situación, de apoyo mutuo y recursos
comunitarios, y trabajar conjuntamente un plan de acción que evitara que fueran desarrollándose
actitudes de desmotivación y dependencia de los que ya empezaba a haber signos.
Para ello se diseñó una entrevista a partir de información recogida en grupos focales y de
ideas y experiencias propias del equipo en anteriores situaciones similares (ver más adelante
Entrevista de Cohesión Comunitaria), se capacitó a un grupo de 10 entrevistadores (estudiantes
universitarios de psicología o trabajo social la mayoría), se realizó un muestro aleatorio
estratificado teniendo en cuenta el número asignado en el albergue a cada tienda de campaña y
controlando las entrevistas por las variables género y edad, sobretodo con la idea de recoger la
opinión de los jóvenes. En dos días se realizaron 115 entrevistas de aproximadamente 30
minutos cada una. Estas fueron posteriormente analizadas y tabuladas en un fin de semana,
estando en condiciones de hacer un taller de devolución y análisis con el equipo, líderes y
miembros de la comunidad en menos de una semana desde el inicio del proceso. Se
complementó con grupos focales con líderes comunitarios, autoridades y personas clave los
albergues.
Más adelante se incluyen datos de la entrevista y del análisis realizado. En la preparación
de la entrevista se habían realizado grupos focales con personas que trabajaban en los albergues
y algunos desplazados. La siguiente tabla muestra, ahora, algunos de los que podríamos
denominar “resultados no esperados” o contra la hipótesis que habría surgido del grupo focal o
del sentido común de quienes estaban en el equipo.

A priori La realidad
Las casas fueron sepultadas por las El terremoto se produjo por castigo de Dios por la mala conducta de
malas condiciones del terreno que los hombres (53%). Hay que orar y tener una conducta correcta.
provocaron el deslave. Hay que [Lo que no es incompatible, para el 75%, con reclamar por las
reclamar a la municipalidad y las condiciones de vida actuales].
autoridades.
Ha habido / hay muestras de Hubo solidaridad y apoyo mutuo en las primeras semanas. Después,
solidaridad y apoyo mutuo cada cual “jaló para su lado”. Ahora no hay unión. (63%).
[Aunque el 90% reconocen “haber hecho nuevos amigos en el
albergue” y varios refieren espontáneamente el deseo de ser
reubicados conjuntamente].
Hay una gran afectación emocional El 70% consideran que tienen recursos propios suficientes para
manejar sus emociones. El mas frecuente, orar (40%). También
pasear o conversar con otros. Solo el 16% consideran necesario un
apoyo psicológico individual, en algunos casos sobrevalorado
[“sólo el psicólogo sabe lo que se debe hacer”].
La actividad más valorada: La más valorada (92% de personas), las actividades lúdicas durante
distribución de ayudas de ropa, los fines de semana.
calzado o comida extra.
La gente desea participar en todas No hay demandas mayoritarias de mayores cuotas de poder o
las decisiones que les atañen. autogestión ni de sistemas de participación abierta. La mayoría de
los albergados (60%) prefieren delegar esta responsabilidad o
asumen que debe ser así. Se pide (a) estar informado (b) que los
líderes actúen de modo honesto. [se valoró este resultado
“sorprendente” a la luz de un país que aún vive bajo las secuelas de
décadas de conflicto armado, verticalismo y represión a la
participación social]
Se informa constantemente de todas El 40% se consideran mal o nulamente informados. Para el 60% su
las novedades por megáfonos que fuente de información son lo que comentan los vecinos (rumores).
dan vueltas
No se preguntó por temas de robos La seguridad sale repetidamente en las entrevistas. Más del 60% de
o seguridad albergados la citan como prioridad sin haber sido preguntados por
ella.
Problemas de aumento de consumo No se detecta. En todo caso disminución
de alcohol
Quejas hacia las autoridades. El 87% de los albergados aprueban y respaldan la gestión de la
Alcaldía (del FMLN en aquel momento) y no manifiestan ninguna
queja
Se trata de una situación Pese a todo, dos tercios de los albergados podían recordar
extremadamente traumática momentos de “felicidad”
Hay una actitud pesimista La actitud más frecuente (40%) no era optimista ni pesimista, sino
que cada día trae al siguiente y hay que mirar al ahora.
Una valoración inicial que podía poner el énfasis en fomentar la participación en las
tareas de organización y gestión del albergue para impedir la dependencia y pasividad, pasó a
convertirse en el énfasis en los factores de normalización de la vida cotidiana (reconstrucción de
casas, recuperación de puestos de trabajo) delegando las decisiones respecto a la vida del
albergue en las autoridades municipales y en líderes y autoridades comunitarias y solicitando ser
adecuadamente informados de todo cuanto tuviera que ver con temas sensibles (especialmente
los planes de reubicación).

Evaluación a los cuatro meses. Cuatro meses después se repitió el mismo análisis, incluyendo
elementos más instrumentales (gestión de agua, cocina, letrinas...) en una submuestra de 45
albergados. El 65% de los albergados salían durante el día fuera del albergue a trabajar y podían
aportar algún ingreso familiar, había aumentado la consideración de las muestras de solidaridad
y apoyo mutuo al 55% (aunque un 15% que no aparecía antes decían que era mejor no hablar
con nadie porque podían aprovecharse), había aumentado al 80% quienes consideraban que
podían manejar sus emociones por sí mismos, sólo el 15% consideraban la seguridad una
prioridad después del establecimiento de un código de conducta interno dentro del albergue, y
había empeorado al 60% la evaluación de la gestión de las autoridades ante la evidencia de que
se acercaba la época de lluvias y los albergados seguían en condiciones que no permitían
afrontarlas con garantías y empezaba a cundir el miedo. El número de personas que participaban
en algún tipo de tarea colectiva se había multiplicado por tres.

Exhumaciones en Guatemala: medir el significado y el impacto psicosocial del proceso

Desde mediados de los 80 en Guatemala diferentes organizaciones de derechos humanos


vienen impulsando procesos de exhumación de cementerios clandestinos de las masacres
realizadas por los diferentes regímenes militares que han gobernado el país y especialmente las
de los años 1981-82 en que bajo el gobierno del General Ríos Montt se perpetraron más de un
millar de asesinatos colectivos (ODHAG, 1999).
Se han realizado ya varios centenares de exhumaciones y, dentro de un proceso de
evaluación y re-planificación de actividades, la organización ECAP llevó a cabo un proceso de
investigación-acción en el municipio de Rabinal (Alta Verapaz). En este municipio se habían
realizado ya más de una veintena de exhumaciones, algunas de ellas de gran envergadura
simbólica, como por ejemplo la exhumación del patio del Instituto de Educación Secundaria, en
un lugar que anteriormente habían sido barracas militares. Aunque finalmente se hallaron
muchos menos restos de los esperados, el hecho, por su significado simbólico, conmocionó a
estudiantes y familiares.
En el marco de este proceso, cuando el Ejército se retira del destacamento militar de
Rabinal y las autoridades judiciales conceden a los familiares la posibilidad de exhumar en lo
que fueron sus instalaciones, ECAP decide realizar un proceso de evaluación y monitorización
del impacto psicosocial de la exhumación.

Para ello se diseñó una entrevista a partir de información recogida en procesos de


exhumación previos, en grupos focales y de ideas y experiencias propias del equipo en anteriores
situaciones similares (más adelante se incluye la Entrevista de Cohesión Comunitaria), se
capacitó a un grupo de 6 entrevistadores (miembros del equipo de acompañamiento psicosocial
de ECAP), se realizó un muestro aleatorio estratificado a partir del censo poblacional de Rabinal
(25.000 habitantes), controlando las entrevistas por las variables étnia (maya / ladino), género y
grupo de edad. Se realizaron a lo largo de 15 días en las semanas previas a la exhumación 335
entrevistas puerta a puerta en población general de Rabinal 2 . Tras la exhumación, que duró dos
meses, se realizaron 163 nuevas entrevistas, la mayoría, en esta ocasión a familiares.
Todos los datos fueron posteriormente analizados y tabulados por el equipo y discutidos
en grupos con la asociación de familiares de víctimas, los familiares y otros miembros del equipo
de exhumación no vinculados a ECAP (esencialmente, antropólogos forenses).
Más adelante se incluyen datos de la entrevista y del análisis realizado. La siguiente tabla
muestra, igual que en el caso de El Salvador, algunos de los que podríamos denominar
“resultados no esperados” o contra la hipótesis que habría surgido del grupo focal o del sentido
común de quienes estaban en el equipo.

A priori Entrevistas Pre-exhumación


(población general)
En una población en que cerca del Sólo el 16% rechazaron la entrevista y apenas el 1.5% alegaron
50% sufrieron directamente en su razones que pudieran tener que ver con “es mejor no hablar de estos
familia desaparición, ejecuciones o temas” o con el dolor emocional que pudiera causar.
desplazamiento y estas perduran en
la memoria colectiva, mucha gente
rechazará la entrevista por
desconfianza o miedo.
Habría dificultades derivadas de la 68% de los hombres (indígena y no-indígena) tuvo que participar en
posibilidad de encontrar entre los PAC, y 43.8% en servicio del ejército. Notoriamente, esto incluyo
entrevistados a ex miembros de las en 59.1% de familiares en el caso de PAC y 40.9% en el caso de
Patrullas de Autodefensa Civil. Se servicio militar.
previeron situaciones tipo.
Quienes participaron en PAC lo reconocían sin problemas y
mostraban buena predisposición a hablar de ello. No se observó
actitudes diferentes en el apoyo o rechazo a la exhumación ni entre
exPAC ni entre personas que debieron realizar el servicio militar
(que duraba años).
Rechazo de la población a las PAC - De aquellos entrevistados, 62.4% entienden que el Gobierno, el
como ejecutores de algunas de las Ejército guatemalteco o el PAC (se unió al Ejército) fueron los
peores masacres principales responsables de la violencia y asumen la responsabilidad
de las PAC.
- Pese a ello una abrumadora mayoría les considera a la vez
víctimas y mantiene actitudes ambivalentes respecto a la posibilidad
de sanción. En todo caso, sólo para elementos conocidos que
mostraron crueldad y ensañamiento.
Hipótesis de “todos tuvieron Sólo el 6.7% de las personas entrevistadas, independiente de su
responsabilidad” afiliación política, contestó que la guerrilla y el ejército fueron
igualmente responsables de los hechos de violencia. La abrumadora
mayoría señala al gobierno, gobierno y ejército o gobierno, ejército
y PAC
Importante desestructuración social 44.7% de las personas tenían algún tipo de actividad en la
como consecuencia de la violencia comunidad. Las personas estaban involucradas en comités de
organización de la comunidad (27%) o educación, salud o
actividades religiosas (17.3%). Rabinal parece ser un lugar donde la
participación es alta a pesar de la violencia que sufrió durante años.
La exhumación del destacamento Las entrevistas mostraron una aceptación amplia del proceso entre
sería un tema polémico, que la población general (no-familiares, 90.4%, y familiares 100%).
pudiera generar situaciones de

2
Medida de la muestra: estimación mínima del 7% de la población de Rabinal de mayores de 25 años2 (n=263). Se
tenía planeado 335 entrevistas, de la cuales 281 (83.9%) se lograron. La muestra final representa el 7.5% de las
personas mayores de 25 años del municipio de Rabinal.
violencia entre grupos polarizados
Es preferible mantener las Existía un consenso social sobre el derecho de los familiares a
actividades de los familiares con un encontrar los cuerpos de las personas desaparecidas durante la
“bajo perfil” para evitar amenazas o “Violencia.”. Se apelaba a razones de carácter humanitario (no
atentados político). Éste fue un hallazgo muy importante para los familiares
que a menudo pensaban que su trabajo no era bien por sus vecinos,
y preferían no decir nada a nadie sobre sus reuniones o actividades.

No hay casos constatados de amenazas a familiares promotores


Grupos sensibilizados de la El análisis cualitativo de las entrevistas mostró que la exhumación
comunidad podrían apoyar en la se percibió como un asunto privado por los familiares, como fin de
exhumación búsqueda y así realizar los rituales religiosos de entierro. No se vio
como una tarea de la comunidad o algo que involucrara a la
comunidad. No fue posible encontrar voluntarios para tareas de
excavación u otras pese a los llamados por la radio local o los
anuncios.

La Justicia es una prioridad de losSólo el 6.3% de familiares hablan de la justicia como razón para
familiares exhumar. Nadie de entre los no familiares.
La exhumación podría conllevar Sólo el 6.4% de familiares (9.5% durante el momento álgido de la
ideas de rabia o venganza exhumación) reconocieron haber tenido en algún momento ideas de
venganza. No se conoce ningún caso. Cerca del 40% de familiares
consideraban que podían o debían “perdonar” mientras alrededor
del 15% rechazaban rotundamente esta idea.
Es necesario permanecer No hubo, en meses de trabajo, que hacer ninguna intervención
constantemente en el lugar de la emocional en crisis. Todo se desarrolló con una emotividad, en
exhumación para dar apoyo ocasiones intensa, pero siempre autocontrolada.
emocional a familiares y vecinos

En resumen, la exhumación resultó ser un tema no polémico, apoyado verbalmente (no


con los hechos) por la práctica totalidad de la población, en base a razones humanas y religiosas
no políticas, y los conceptos de memoria histórica, verdad o justicia no formaban parte del
discurso mayoritario ni de la población general ni de los familiares.

En la evaluación post-exhumación se confirmaron todos estos datos y se pudo concluir


como de un esquema de trabajo muy centrado en dar apoyo emocional al grupo de familiares
promotores y mantener una cierta actitud de distanciamiento prudente respecto a la comunidad,
debía haberse optado por estar simplemente “a disposición” de los familiares, y acompañando en
momento críticos puntuales, y dedicar mucho más esfuerzo a trabajo de carácter comunitario
(sensibilización de autoridades, trabajo en escuelas, trabajo de memoria histórica, trabajo de
simbolización colectiva).

Acompañamiento a familiares mapuches de personas detenidas / desaparecidas o


ejecutadas por razones políticas

Entre 1996 y 1998 la Universidad Católica de Temuco desarrolló un programa en


colaboración con el Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos
(CINPRODH) para ver el impacto psicosocial de los fenómenos de ejecución extrajudicial y
desaparición forzada entre familiares de etnia mapuche y familiares de origen cultural
hispanochileno, y analizar el hecho diferencial étnico. El trabajo, además, pretendía hacer llegar
a los familiares noticias sobre sus derechos legales por la ley de reparación y ayudarles en
trámites que tuvieran pendientes, y crear redes de apoyo mutuo entre aquellos que vivieran en
comunidades cercanas. En el equipo de investigación-acción había un miembro del equipo que
realizó el informe de la CVR en la Región, y los propios miembros del CINPRODH, que
conocían a la práctica totalidad de los familiares de la región y permitían establecer el vínculo de
confianza.
Se partió para el estudio del listado oficial de víctimas del Informe de la Comisión de
Verdad y Reconciliación (Informe Rettig), realizándose un muestreo aleatorio estratificado de
víctimas de origen mapuche y no mapuche. De cada una de ellas el equipo intentó localizar a la
totalidad de sus familiares sobrevivientes, allí donde estuvieran (en Chile muchos, casi la mitad
desplazados internos o emigrantes a la capital del país, algunos exiliados en zonas fronterizas de
Argentina). El resultado final fueron 119 entrevistas (58 familiares de desaparecidos mapuches y
61 de no mapuches) de unas 4 horas de duración cada una.
La metodología de elaboración del instrumento constó de las siguientes fases: 1. Se
seleccionaron frases textuales, extraídas de entrevistas realizadas en los años anteriores a esta
investigación. Se trataría de 'modos de reaccionar' en palabras de sus propios protagonistas, sin
categorías preestablecidas. 2. Se realizó una criba de las cerca de 150 frases escogidas,
eliminando aquellas que eran excesivamente redundantes o que, por ser demasiado
circunstanciales a la persona que la dijo, difícilmente podrían ser identificadas por otros
familiares. 3. El grupo de frases resultante se recogió en cartulinas, de manera que aparecían una
(o varias frases similares) en cada cartulina.
En anexos se recogen las frases que finalmente se incluyeron en el cuestionario final.
Como puede observarse, para cada frase debían consignarse tres respuestas. La primera
(Inmediata), corresponde a si la persona cree que pensó o sintió lo que la frase describe en los
primeros seis meses después de la desaparición o la muerte del familiar. Se refiere, por tanto, a
las consecuencias agudas. La segunda (Persistente), si cree que lo que describe la frase le ocurrió
durante un período prolongado de tiempo, siempre superior a los 6 meses (consecuencias
persistentes). La tercera (Actual) refleja si la persona piensa que actualmente le ocurre lo que la
frase recoge. Existe una cuarta columna adicional que había de marcarse en caso de duda por ser
la respuesta ambigua.
Se confeccionó así una entrevista semi-estructurada que era en origen emic (expresiones
propias de los afectados), aunque pasada por un análisis y selección del equipo a partir de su
experiencia de trabajo en este y otros contextos (perspectiva etic). Además, pese a tratarse de un
estudio retrospectivo, se conseguía una cierta evaluación longitudinal del impacto de la
desaparición en los familiares.
Después de la primera respuesta inicial se le pedía si podía poner un ejemplo o ampliar
respecto a por qué se identificaba o no con esa expresión.
De este modo se obtenía inicialmente respuestas si/no, que permitía un análisis
cuantitativo posterior, y respuestas de profundización, que permitían una valoración cualitativa.
Los resultados, una vez más, arrojaron algunos datos lejos de los a priori del equipo de
los grupos de derechos humanos que llevaban mucho tiempo trabajando con las agrupaciones de
familiares (lo que no significa con todos los familiares, sino con aquellos que participan
activamente en las Agrupaciones).
El estudio es muy complejo y amplio, con decenas de datos impactantes. Los que siguen
son solo una pequeña muestra de hallazgos no esperados 3 .

3
Puede descargarse el libro entero Muerte y Desaparición Forzada en la Araucanía : Una perspectiva Étnica ede la
web www.psicosocial.net
A priori Entrevistas
Consenso en atribuir la - La población mapuche tiende a atribuir la desaparición a
desaparición al contexto político y problemas locales (falsas denuncias a carabineros por venganzas,
a la dictadura problemas de tierras o con animales). Aunque se acepta también el
contexto político y es posible moverse en ambos planos de
interpretación, prima la interpretación local y las consecuencias que
esto tuvo
- No hubo ningún familiar que expresara de manera abierta su
simpatía por la Dictadura, pero sí hubo algunos casos que mostraron
aceptación de las ideas con excepción de la represión política y las
muertes. Esto tiene que ver con haber vivido de modo negativo el
sistema de cooperativas campesinas de la Unidad Popular que
quebraba el modo tradicional comunitario de tenencia indígena de la
tierra, con el otorgamiento de títulos individuales de propiedad por
parte de la Dictadura, y con el hecho de traer electrificación y
caminos a algunas comunidades aisladas.
- Pese a que el principal agente responsable de desapariciones en la
zona fueron Carabineros de Chile, se mantiene en un porcentaje
mayoritario de familiares de origen rural el respeto por la Institución
y varios hijos de desaparecidos intentaron persistentemente entrar al
cuerpo, separando a quienes “actuaron en exceso” de la institución
en sí.

Era posible hablar de lo sucedido - En la gran mayoría de casos se habló en su momento y nunca más
en muchas ocasiones hace más de o no se había hablado nunca de los hechos, y los recuerdos
20 años. permanecían vivos y los duelos abiertos pese al paso de los años.
En el nuevo contexto político, los El 65% de hispanochilenos y 50% de mapuches en el momento en
familiares serían partidarios de el momento de la entrevista (antes de la detención de Pinochet en
denunciar a los perpetradores Londres) eran escépticos respecto al Estado y a la validez de la
(muchos viviendo en la actualidad Justicia chilena y rechazaban entrar en procedimientos judiciales.
en la misma comunidad).
El familiar desaparecido El 40 por ciento de los familiares chilenos y el 33 por ciento de los
constituiría un ejemplo para la mapuches rechazaban abiertamente las actividades políticas que se
familia. Mayores niveles de realizaron en aquella época considerando que todo lo que entonces
compromiso social. se hizo no sirvió en el fondo para nada- Alrededor del 25% negaban
las actividades políticas de su familiar (pese a las evidencias). Del
resto, aunque el 40% se muestran “orgullosas” de las actividades de
su familiar, sólo el 30% ha intentado “imitarle” en algún aspecto.
Encontrar los restos es el elemento Con el tiempo se han ido buscando formas de comunicación
más importante del trabajo con los simbólica con el desaparecido.
familiares

Programa de prevención de SIDA en el colectivo de trabajadoras del sexo de Casablanca


(Marruecos).

En el contexto de la evaluación de los resultados a los cuatro años de un programa de


prevención de HIV/SIDA en el colectivo de mujeres trabajadoras del sexo en la ciudad de
Marruecos (Casablanca), se realizó un proceso de investigación-acción a través grupos focales y
de entrevistas semi-estructuradas a mujeres. El proceso, facilitado por ex trabajadoras del sexo,
contratadas y entrenadas ahora como facilitadoras del proceso, consistió, en su parte cuantitativa,
en 40 entrevistas semi-estructuradas realizadas en la calle o en el local de una asociación a una
muestra de conveniencia estratificada por un procedimiento de cuadrado latino por edad, barrio
de trabajo y zona de procedencia (rural / urbana), y 12 entrevistas colectivas realizadas en grupos
de 4-5 mujeres.
El proceso, incluía, además, la detección de líderes por bola de nieve para trabajar la
posibilidad de creación de redes de apoyo mutuo y acción colectiva.

A priori Entrevistas
- Las trabajadoras del sexo tienen - Efectivamente, el 45% afirman no contar nunca sus proyectos a
escaso apoyo emocional nadie, y otro 37% solo tener una amiga de confianza. Los clientes
son vistos en ocasiones (7.5%) como “amigos” y “confidentes” y su
apoyo es tan importante como el de la familia. Apenas el 5% tienen
compañero sentimental, aunque más del 50% tienen hijos. El Islam
estigmatiza enormemente a la mujer sola y la percepción de fracaso
personal asociado a su condición de divorciadas, separadas o nunca
casadas es el elemento negativo más repetidamente mencionado. (en
la prostitución marroquí no hay la figura del “chulo” y las mujeres
trabajan por su cuenta).
- Una estrategia de difusión de información basadas en las propias
mujeres no funciona, porque no suelen dialogar entre ellas, pese a
conocerse, cuando no hay, directamente, temas de competición y
rivalidad

- La prostitución como última - Para más del 50% la prostitución es una opción personal. El 30%
opción económica (imagen social por que se gana mucho más que en el servicio doméstico, y el 26%
de vulnerabilidad) porque se gana más y se tiene libertad de horarios y de vida. El 20%
entraron por amigas. Sólo el 15% afirman que “necesitan dinero y
no tienen trabajo” y el 5% que alguien (familiar) las presiona para
que consigan dinero.
- El 50% alternan este trabajo con otros (fábricas, servicio
doméstico...). No se consideran trabajadoras del sexo, sino que
dedican unas horas a complementar su sueldo, y lo ven como algo
transitorio (aunque lleven años en ello).
- Algunas mujeres (jóvenes de zonas medias) ganan cantidades
impensables de conseguir de otro modo.
- Las estrategias asistencialistas basadas en capacitación laboral
(generalmente costura u otro tipo de trabajos manuales) no son
congruentes con un colectivo que no encaja en el estereotipo de la
“desesperación”.
- La prostitución es un trabajo que - El 80% expresan vivencias intensas de miedo en algún momento a
provoca emociones psicológicas lo largo de la semana y en el 40% hay el recuerdo de alguna
negativas o traumatizantes. situación de amenaza intensa
. Para el 15% su trabajo es fuente de “orgullo” o de “satisfacción”
(autoimagen de fortaleza y decisión)
- Marginación económica. Considerando indicadores de vivienda, acceso a servicios, y acceso
a sanidad privada, el promedio es superior al de la media de las
mujeres de su misma edad. Lo que no significa que no haya mujeres
en situación de gran precariedad.
Apoyo emocional - El 62.5% se definen como “normal” o “feliz”. El 33% como
“infeliz” o “muy infeliz”
- El 42.8% se consideran religiosas, y la religión es considerado el
principal mecanismo de autorregulación emocional en momentos
de miedo. Las otras estrategias tienen que ver con “huir” o “olvidar”
- El 65% consideran que están “peor” que la mayoría de mujeres de
su edad, y justifican su respuesta en el hecho de “no tener marido”
Escaso conocimiento de las vías de Buen conocimiento de las vías de transmisión. Rechazo frontal de
transmisión HIV/SIDA base cultural de los clientes a usar preservativo y pérdida de clientes
ante la presencia en la misma calle de otras muchas mujeres que
estaban dispuesta a tener relaciones sin protección. Escasas
habilidades de negociación frente a este problema.

En suma, de un programa orientado a la difusión de información a través de folletos,


charlas o videos, el proceso de investigación-acción puso en evidencia : (a) que era prioritario
trabajar estrategias de manejo del miedo (b) las mujeres solicitaban apoyo en desarrollar
estrategias de negociación (c) era prioritario el desarrollo de formas de solidaridad y apoyo entre
mujeres en lugar de las actuales de aislamiento y competición (d) evitar imágenes miserabilistas
del colectivo o hipotéticamente considerar que la mujer abandone la prostitución como objetivo
último del programa, dado que no era una demanda mayoritaria del colectivo (si de algunas
mujeres). Para ello se constató que (a) existía una sólida red de mujeres mayores que ya no
trabajaban ellas mismas, que “distribuían” a las mujeres protegiendo de alguna manera a las
trabajadoras mayores de las más jóvenes en cuanto a calles y horarios, y que éstas mujeres
veteranas desempeñaban un rol de autoridad respetada (b) algunas de ellas estaban muy
interesadas en poder trabajar procesos organizativos y aspectos relacionados con el HIV/SIDA
(c) existían experiencias aisladas de organización y protección mutua en forma cooperativa en
“casas”, evitando el trabajo de calle, que eran poco conocidas del resto de mujeres.
A partir de ello se pudo hacer un informe de evaluación que reconsideraba la orientación
actual del trabajo del equipo.

Los ejemplos anteriores muestran elementos que deben recordarse constantemente: (a) cada
circunstancia es diferente (b) cada grupo humano es peculiar (c) los programas tienen, con
frecuencia, efectos no previstos (positivos o negativos) y (d) efectos no deseados (es decir,
contrarios a lo esperado).
Sólo aprendiendo de ellos es posible avanzar. Los recuentos de experiencias suelen, por
desgracia, poner el énfasis en las situaciones de éxito, mientras que las experiencias con
aprendizajes negativos difícilmente se difunden.

Para el estudio sobre evaluación del impacto psicosocial de las exhumaciones el equipo de
investigación decidió traducir y validar en lengua Achí el General Health Questionnaire (GHQ-
12) como una medida de malestar psicológico general utilizada en más de 40 países en
diferentes versiones. Pese al trabajo de varias personas en procesos de traducción y contra
traducción, el análisis de contenidos ítem a ítem, y la colaboración de la Academia de lenguas
Mayas, no se logró una versión que diera, en las fases piloto, propiedades psicométricas de
consistencia interna y valores de fiabilidad, sensibilidad y especificidad aceptables. Finalmente
hubo de descartarse el intento. Sorprendentemente, revisando la literatura, no se pudo encontrar
ningún caso publicado de fracaso en la adaptación del GHQ a otra cultura. Los intentos
fallidos, no se publican.

Es por ello que, en la medida de lo posible, los programas deberían contemplar, integrado
dentro de sus actividades, sistemas de reflexión sobre lo hecho y sobre lo que se va a hacer: esto
y no otra cosa es la evaluación de programas.
La evaluación es lo que nos permitirá intentar saber al menos, cuatro cosas básicas:

‰ Si lo que se hace tiene sentido y responde a las demandas de la gente.


‰ Si se está produciendo un cambio real que puede atribuirse, en parte o en todo,
al trabajo que se está llevando a cabo (Gofin et alt, 1992).
‰ Si ese cambio concuerda con los objetivos iniciales que se propusieron
‰ Qué se puede aprender de todo ello

Para eso es necesario diseñar un sistema que, idealmente, tenga tres características:

(a) Sea un sistema participativo, es decir, que


• implique a todas las partes del proceso
• sea un camino de ida y vuelta y la información obtenida llegue a todos y
cada uno de los que participaron para que pueda ser usada como nueva
herramienta de reflexión y cambio.
(b) La evaluación esté integrada dentro de las rutinas de trabajo y no suponga
un esfuerzo adicional.
(c) Intente controlar las variables clave que pueden intervenir en el proceso.
(d) Contemple diversos momentos en el tiempo para poder establecer
comparaciones estadísticas 4 . Para ello se requiere definir desde el principio
cuales van a ser las metodologías de evaluación e integrarlas en el trabajo
diario.
(e) Sea una evaluación continúa, es decir, pueda constituirse como un sistema de
monitorización que nos ayude a ir mejorando nuestros pasos sobre la marcha.
(f) Sea una evaluación integral, es decir, que incluya todos los componentes del
proceso (estructurales, funcionales y humanas).

2. ¿Qué tipos de evaluación existen?

Existen tantos componentes evaluables como partes de un programa de actuación (UD-


Noraid / CEDEAL (1997) (ver cuadro).
A efectos prácticos, hay tres tipos básicos a considerar:

Evaluación de impacto, es decir, objetivar cuales han sido las consecuencias del programa. Un
caso especial de la evaluación de impacto es la evaluación de eficacia 5 6 , es decir, del grado de
cumplimiento que se está logrando de aquello que nos propusimos. Ello se asocia, por lo general,
con tener sistemas de indicadores (o construir cuestionarios o medidas) que puedan pasarse antes
y después de realizar el programa (o tras alguna fase especialmente importante).

4
Los estudios caso-control en evaluación de programas, aunque son posibles, suelen plantear importantes dilemas
éticos (ver más adelante).
5
Otro debate que excede los propósitos de esta guía es el de qué se considera “eficaz” y cuántos años hay que
esperar para considerar los resultados. Así, por ejemplo, en un programa dedicado aumentar la “resiliencia” en niños
en situación de vulnerabilidad. (W. van der Eyken, 1994; Cohen RN, 2004).
6
Formalmente se suele distinguir, en realidad, entre medir la eficacia (efficacy) de una acción cuando ésta se
desarrolla en condiciones quasi-experimentales o de laboratorio, y medir la efectividad (effectiveness) cuando se
intenta evaluar el impacto en las condiciones reales de la vida cotidiana. En nuestro caso, esta distinción no tiene
excesivo sentido.
Tipos de evaluación.

1. EFICACIA: Grado de cumplimiento de los objetivos que se propusieron con la acción


2. IMPACTO: Implica un estudio de los efectos conseguidos más allá de los objetivos propuestos Este estudio
debe incluir todos los efectos posibles (técnicos, económicos, sociales, culturales, políticos, ecológicos),
tanto positivos como negativos.
3. PERTINENCIA: Si la razón de ser de un proyecto está de acuerdo con las prioridades de la población y si
se han respondido a sus necesidades. Tendrá que ver con si se realizó en su momento un buen y completo
diagnóstico y una adecuada monitorización.
4. ESTRATEGIA DE INTERVENCIÓN: Se realiza respondiendo básicamente a las siguientes cuestiones
¿Está siendo apropiada la acción para resolver el problema existente? ¿Se escogió el mejor enfoque?
5. PROCESO: Medir que si tal como se han desarrollado las actividades se ajustan al modelo que se deseaba
seguir y se han cumplido los pasos y tareas que se determinaron.
6. GRADO DE SATISFACIÓN DE LOS PARTICIPANTES: Se trata de evaluar la percepción subjetiva de
cada uno de los participantes sobre el cumplimiento de los objetivos que se pretendía lograr.
7. SOSTENIBILIDAD O VIABILIDAD: Posibilidades de mantener ciertas acciones una vez eliminados los
apoyos exteriores, o sea, la capacidad de continuación de las acciones o de los servicios generados de
manera autónoma.
8. COSTO-EFICACIA / COSTO-BENEFICIO: Hace referencia a la siguiente cuestión ¿A qué costo se
logra el objetivo y si hubiera sido posible lograrlo a un costo menor? ¿Justifican los logros alcanzados los
recursos que se han invertido? Para responder a esta pregunta podemos segur el siguiente guión orientativo:
¾ Evaluación de la cobertura: ¿A cuanta gente se llegó? ¿Qué porcentaje representa del total de posibles
personas?
¾ Evaluación del rendimiento del equipo: En función de lo logrado en otros proyectos similares ¿Cómo
puede considerarse el grado de cobertura logrado respecto al número de profesionales y/o voluntarios
que intervinieron?
¾ Evaluación de costos (el dinero, recursos, materiales...): ¿Los recursos invertidos son proporcionales a
los resultados obtenidos? ¿Pudo haberse conseguido lo mismo con menor gasto de recursos?

Cuando la eficacia se pone en relación al esfuerzo y los costos, hablamos de Evaluación


de eficiencia (o dicho de otro modo, de evaluación de costo-eficacia) : ¿Justifican los logros
alcanzados los recursos que se han invertido 7 ?

Evaluación de proceso. Cuando no es posible medir resultados, al menos, medimos si tal y


como se han desarrollado las actividades se ajustan al modelo que se deseaba seguir y se han
cumplido los pasos y tareas que se determinaron.
Esta puede realizarse a partir del grado de cumplimiento de las actividades previstas o a
través de grupos de discusión y análisis con los diferentes actores implicados en el proceso.
Un adecuado proceso no garantiza resultados óptimos

Evaluación del grado de satisfacción de los participantes. La opinión principal será, en este
caso, la de la propia población, pero también resulta significativa la de las autoridades, los
equipos de trabajo en la zona o el propio equipo que desarrolló el programa. Se trata de evaluar
la percepción subjetiva de cada uno respecto a si se han cumplido los objetivos que se pretendía
lograr. Necesaria para la reformulación de programas, por múltiples razones pragmáticas,

7
En función de todo esto puede resultar, por ejemplo, que un programa que ha atendido con calidad extraordinaria a
un grupo de cincuenta supervivientes a través de diseño muy costoso pueda compararse con un programa más
sencillo pero que puede lograrse que llegue a miles de personas.
sociales y culturales, raramente dará resultados negativos: las comunidades suelen expresar su
satisfacción especialmente si quien pregunta es candidato a dar nuevos apoyos.
La evaluación de proceso y la evaluación de satisfacción son herramientas valiosas y
necesarias pero no demuestran la utilidad de un programa.
Sólo la evaluación de impacto permite establecer con un margen razonable 8 la
utilidad de un programa. Alrededor de cuatro de cada cinco evaluaciones de programas
psicosociales se realizan en la actualidad en base a criterios de proceso o de satisfacción.

8
Nunca con certeza dado que no trabajamos en condiciones experimentales y es difícil controlar todas las co-
variables de un proceso “en la vida real”.
Elementos del proceso.
La evaluación y el diseño como senderos de ida y vuelta.

Un sistema de evaluación debería, idealmente, entenderse dentro del marco de un proceso


participativo, como una herramienta de investigación-acción 9 en la que son constantes los
caminos de diálogo, ida y vuelta.

Diagnóstico y Detección de Problemas

Valoración y Análisis

Priorización

Objetivos

Plan de Acción

Desarrollo de las acciones comunitarias

Reconsiderar el
Evaluación proceso

Este proceso es un camino de diálogos constantes, en el que el propio proceso puede ser
una herramienta para consolidar a todos los que participan.

Desde el punto de vista del trabajo comunitario, la evaluación y el diseño son parte del
mismo proceso.

9
La Investigación Acción Participativa se define como el proceso de investigación en el que se adquiere
conocimiento a través de la acción y por la acción. En esta idea, en la investigación participativa (de la que la
evaluación de programas podría considerarse un caso especial), los estándares científicos de recolección y análisis
de información se aplican a la realidad para encontrar soluciones que promuevan el cambio social.
En este sentido es importante tener claro que la evaluación debe servir a la gente y no a la gente a la
evaluación.
La recolección de datos base puede realizarse en base a numerosas técnicas cuya
descripción minuciosa puede encontrarse en manuales de psicología comunitaria y que vamos a
condensar de manera práctica y con ejemplos.

Diagnóstico comunitario participativo :


Análisis interno

Búsqueda de datos
básicos - indicadores

Observación participante

Grupos Focales Objetivos


-comunitarios
Reuniones - Asambleas
- del equipo
Planificación
Análisis de redes conjunta de la
Mapa de Actores, Intereses y
Evaluación
Acciones
-intentar definir de
manera operativa los
objetivos-
Encuestas comunitarias -¿se pueden
cuantificar?
Plan de - ¿podemos escoger
Búsqueda de jerarquías indicadores que nos
causales: Acción ayuden?
Árbol de Problemas
Análisis DAFO etc
- comunitario
- del equipo

Análisis de Vulnerabilidades y
Capacidades

Mapa de Decisión-Acción

Análisis externo
Triangulación.

La información cualitativa (es decir, la procedente de entrevistas con informantes


clave o líderes, grupos focales, asambleas o reuniones) incluye muchos elementos de
subjetividad. Por eso, un principio básico es triangular toda la información antes de darla
por buena. Triangular significa que otras dos fuentes relevantes diferentes deben corroborar
el dato o la opinión obtenida. Las informaciones que no han podido ser adecuadamente
trianguladas deben constar simplemente como opiniones pendientes de contrastar.

En una reunión entre grupos de derechos humanos y el líder de una comunidad de desplazados por
la violencia política, éste afirmaba que existían condiciones para el retorno, que la mayoría de la gente lo
deseaba y que el principal problema era el transporte de casas y enseres. Al triangular la información en una
reunión del Club de Madres y con el grupo de promotores de catequesis emergieron dudas y rechazo, y gran
preocupación por temas de seguridad, alimentación, cobertura internacional y otros que no habían sido
considerados por el líder comunitario.

En un estudio previo sobre el impacto del tsunami en la población de Trincomalee (noreste del país),
se informó por una organización local de un estado crítico de los orfelinatos del distrito con posibles casos de
malnutrición y abandono. Triangulado con UNICEF y el Child Protection Officer de zona se pudo constatar
que se trataba de un rumor.

Los datos recogidos a través de las diferentes técnicas de participación comunitaria son
sometidos a un proceso de contraste y devolución, en diálogo constante con todos los actores
relevantes.
Recolección de datos base

Contraste con Contraste con Devolución y


autoridades grupos focales o Contraste con
líderes informantes clave

DURANTE el diagnóstico, DESPUÉS del análisis


trabajo activo de creación completo, devolución de los
de vínculos de confianza y resultados a los grupos de
consolidación de la discusión o a los líderes.
comunidad.
Devolución de una imagen
positiva.

Plan de Acción Acciones hipotéticas de la


del equipo comunidad
Este proceso no es algo estático y cerrado en el tiempo sino que, en la medida de las
posibilidades de la comunidad o el grupo, debería ser un proceso que retroalimentara y fuera
redefiniendo la idea inicial.

Este proceso se realiza, además, en espiral. El desarrollo del plan de acción conllevará el
registro de todas las actividades con especial seguimiento de algunos indicadores escogidos para
el monitoreo del plan, lo que permitirá, al cabo de algunos meses, re-examinar el proceso,
contrastar con los informadores, las autoridades o realizar nuevos grupos focales y rehacer el
diagnóstico para programar las siguientes fases del plan de acción.
El siguiente esquema resume las dos vías de trabajo (desde dentro de los propios
afectados y desde fuera, es decir, por parte de quienes trabajan en el apoyo), que deberían
combinarse para fijar objetivos compartidos y poder posteriormente negociar tareas y repartir
responsabilidades de manera coordinada, con algunas de las acciones posibles.
Tanto las autoridades, como la comunidad y cada una de las organizaciones que trabajen
en el apoyo podrán fijar objetivos, deslindando responsabilidades, y elaborar un plan de acción.

En todo este proceso es fundamental el análisis del contexto político y sus implicaciones
en cada fase en términos de oportunidades y dificultades potenciales.
Proceso de Grupo
Análisis de contexto y estrategia que
va a usarse
Plan de trabajo
1. Contexto global de la acción Trabajo
2. Técnicas de recogida de Evaluar el impacto del
información
3. Objetivos y estrategias 1. Objetivos programa a medio y
largo término.
-Análisis de Vulnerabilidad- 2. Estrategia
Capacidad -Seguimiento y -Seguimiento y Reacciones de actores
-Mapa de Decisión-Acción monitoreo monitoreo
3. Distribución de clave
-- Análisis de poder y formas
de cabildeo -- Evaluación papeles y de -- Evaluación
permanente
responsabilidades permanente Previsión de escenarios
- Contextos - Contextos
posibles. Implicaciones
Proceso Comunitario / emergentes emergentes
Institucional -Oportunidades -Oportunidades
políticas / sociales. políticas / sociales. Sostenibilidad
- Mandato
- Objetivos Externos Agenda
- Dilemas éticos y - Comunitaria
políticos Aprender de los errores - Institucional
es reforzar las propias
capacidades de análisis y
decisión

Nivel 1. Nivel 2. Nivel 3..

¿Dónde estamos? Control sobre el propio futuro de la Un alto formal en el


¿A dónde vamos? comunidad como un proceso. camino…
En este proceso de recolección de datos, hay elementos que conviene resaltar:

• Cada contexto y situación son únicos. Los datos que son útiles para planificar y evaluar
un programa después de un terremoto en Irán, pueden ser perfectamente inútiles unos
kilómetros más allá en Arabia, donde las condiciones sociales, políticas o culturales o el
tipo de afectación al tejido social pueden ser absolutamente diferentes. Por eso no es
posible proponer listas cerradas de elementos a trabajar, sino inventarios de elementos
potencialmente relevantes, de entre los que seleccionar aquel conjunto de indicadores que
puedan ser adecuados a la situación y el contexto.

• Muy pocas medidas, seleccionadas cuidadosamente. Ser excesivamente ambicioso en


la recolección de datos implica un análisis complejo y la imposibilidad de monitorizar
por el alto costo personal y grupal. Las energías que debían dedicarse a la acción en sí, se
desvían a la evaluación. La buena evaluación no es la que incluye más datos, sino la que
incluye los mejores.

En el estudio antes citado sobre impacto comunitario de procesos de exhumación colectiva en


Guatemala se esperaba que las implicaciones políticas del tema hicieran que éste fuera polémico
y complejo. Con esta idea se eligió una muestra amplia de casi 300 personas a entrevistar, que
pudiera permitir que hubiera un número suficiente de opiniones de todos los sectores (indígenas,
ladinos, hombres, mujeres, jóvenes, mayores). El resultado fue excelente, pero tan agotador que el
equipo se desanimó a mantener una monitorización. Un número menor de entrevistas, aunque
hubiera logrado menor precisión en los resultados, quizás habría logrado mejor su objetivo.

• No invasiva para la población. Con excesiva frecuencia los líderes y personas clave de
una comunidad son visitados una y otra vez por personas de organizaciones o agencias
que repiten cada vez las mismas preguntas que los que les precedieron para marcharse
con la información sin devolver nada. En otras se realizan encuestas asumiendo que las
personas entrevistadas deben disponer de todo el tiempo y la mejor disposición para
recibir a cualquiera que venga a hacer preguntas. El respeto al tiempo de los demás,
informarse antes de qué otras personas o agencias han hecho ya el mismo recorrido y
tener una relación de ida y vuelta, con un trabajo de servicio y verdaderamente en equipo
pueden permitir disminuir estos problemas.

• Buscar la información directa y no mediada. Siempre que sea posible, es preferible


hablar con las personas que van a participar directamente. Aunque deben respetarse los
canales de poder y decisión de cada comunidad, al mismo tiempo es importante facilitar
espacios de palabra para aquellos grupos que puedan tener mayor dificultad para hacerse
oír. Es importante apoyar y respetar a los líderes, aunque desde el conocimiento del
contexto social y político.

En muchas comunidades de la India el considerado “líder” es en realidad la persona de casta


superior, con más recursos económicos o el líder de un determinado partido político con fuerte y
exclusiva implantación local. Al preguntarle por los problemas de su comunidad puede contestar
refiriéndose exclusivamente a sus problemas, ignorando completamente los de las castas
inferiores o los de aquellos no afiliados al partido. Colectivos excluidos como, por ejemplo, el de
las viudas pueden resultar completamente ocultos, figuras con problemas graves de supervivencia,
pero socialmente inexistentes.

• Cuanto más EMIC mejor. En antropología suele distinguirse entre un análisis de la


realidad realizado desde dentro de la cultura o Emic, y un análisis de la realidad con
categorías externas o Etic. Un análisis Emic o interno de las consecuencias psicológicas
de una situación de tortura en una población de expresos políticos, escucharía la
descripción desde la cultura de lo que le ocurre a cada persona y preguntaría cuales son
las categorías locales para definir este estado, a qué se atribuye y cómo suele enfrentarse.
Un análisis Etic o externo traduciría y validaría al idioma del lugar una escala clínica (por
ejemplo de depresión o de estrés postraumático) y la aplicaría para saber la prevalencia
de dicha categoría entre la población de ex presos. Para el avance de la ciencia y para
poder comparar programas entre zonas distantes, las metodologías Etic o externas son
útiles. Para trabajar con las comunidades y cerca de la gente las categorías Emic o
internas son más congruentes. Dependiendo, por tanto, del para qué, ambos enfoques son
necesarios.

Para poder construir un sistema de evaluación es necesario:

1. Definir una línea base. Esta puede perfectamente ser la recogida inicial de datos de carácter
exploratorio y el propio diagnóstico comunitario que se hizo al iniciar el programa.

2. Seleccionar un conjunto de indicadores o variables potencialmente sensibles al cambio..


Por ejemplo, la frecuencia de respuesta a la pregunta “¿cree que ha encontrado apoyo en los
vecinos y amigos para salir adelante? da una idea respecto a si se han conseguido establecer
sistemas de fortalecimiento comunitario”.
Para saber si un indicador o una pregunta del diagnóstico comunitario es útil es
fundamental que pueda identificarse cómo se utilizarán las respuestas a esa pregunta. Si no
puedo responder a la pregunta ¿para qué me va a servir la información que obtenga de esta
pregunta / indicador? es probable que se trate de un dato interesante, pero prescindible.

3. Al elaborar el programa esforzarse en definir objetivos concretos, específicos y medibles 1 .


Por ejemplo,
En lugar de El objetivo puede ser
(objetivo no medible) (objetivo medible)
Disminuir el problema Conseguir disminuir entre los supervivientes del terremoto las
de alcoholismo quejas o denuncias a la policía por problemas que tienen que ver
con el abuso de sustancias a menos de una a la semana (criterio de
eficacia)
Atender las demandas Atender de manera continuada un mínimo de 20 casos diarios de
por problemas modo individual por terapeuta. (criterio coste-eficacia)
psicológicos remitidos
por atención primaria.
Realizar asambleas por Realizar al menos una asamblea al mes por comunidad al que
comunidades para que asista al menos aproximadamente un tercio de los afectados de esa
discutan sus problemas zona (criterio de proceso)
Conseguir validar la Conseguir un grado elevado de satisfacción con el programa
metodología usada medido a través de una encuesta con cincuenta personas aleatorias
para su posterior escogidas entre los afectados, esperando que al menos el 75%
aplicación en otras hayan oído hablar del programa y que, de estos, al menos a la
comunidades mitad les haya parecido “útil” o “muy útil” (criterio de
satisfacción de los participantes)

Del cuadro anterior se deduce que al iniciar el programa es fundamental tener claros
cuales son los objetivos a alcanzar, definidos de una manera general, y a continuación pasar a
convertirlos en uno o más objetivos operacionales. Estos siempre serán estimativos (¿cómo saber
si conseguir que vengan un tercio de los afectados a una asamblea es un éxito o en el fondo es un
fracaso?) y el proceso de definirlos al principio suele ser incómodo e irritante cuando no se hace
de modo participativo o se requieren fuertes dosis de imaginación para crear indicadores, pero
paradójicamente esto después se convierte en una de las grandes fortalezas y herramientas de
análisis y avance. En la tabla siguiente se resume de manera sinóptica un sistema de indicadores
de un programa post-conflicto en una comunidad bosnia. En ella, con el paso del frente de
guerra, se produjo el asesinato masivo de hombres musulmanes por sus propios vecinos y de
mujeres con situaciones de violación múltiple por soldados en centros de reclusión clandestina,
en un contexto de gran aislamiento y privatización del daño en las mujeres, y de ruptura de

Objetivos
- Promover espacios de encuentro y conocimiento entre las mujeres de la localidad, musulmanas y
no musulmanas.
- Fomentar la conciencia de género entre todas las mujeres de la localidad.
- Luchar contra la violencia dirigida a las mujeres.
- Potenciar y acompañar en la creación de grupos de apoyo y/o ayuda mutua entre las mujeres de la
localidad, priorizando la participación de las mujeres musulmanas.
- Fomentar en las mujeres musulmanas y no musulmanas, inquietudes de participación y ejercicio
activo de la ciudadanía.
- Potenciar distintas actividades económicas a las que las mujeres (especialmente las viudas) puedan
adherirse para conseguir un (auto)empleo digno.
- Fortalecer el tejido social y asociativo de la localidad.

Actividades
- Diagnóstico participativo de necesidades, en los que intervengan las mujeres de la localidad, tanto
musulmanas como no musulmanas.
Ideas iniciales del equipo, a expensas del diagnóstico participativo:
- Creación de grupos de ayuda mutua dirigidos a las mujeres musulmanas en los que se trabajaran
entre otras temáticas: la conexión de la historia con el presente, la validación y resignificación de la
experiencia traumática, las emociones y las vivencias de culpa etc.
- Trabajo individual con aquellas mujeres en las que a partir de los grupos de ayuda mutua se haya
podido detectar cierta necesidad. Del mismo modo, asistencia legal en aquellos casos que se
considere necesario (violencia, etc.)
- Programación e implementación de talleres (relajación, artesanía, comunicación, expresión
creativa, defensa de sus derechos, ciudadanía, etc.) que propicien el encuentro de todas aquellas
mujeres interesadas, musulmanas y no musulmanas, intentado reanudar algunas de las relaciones
rotas por el conflicto.
- Creación de un servicio a las mujeres interesadas de guardería, cuidado de personas mayores, etc.
para facilitar su asistencia a los talleres. Sería especialmente positivo si estos servicios pudieran
prestarlos las mismas mujeres (cuando el taller no sea de su interés y tengan tiempo libre),
recibiendo una prestación económica por ello o el intercambio de servicios.
- Guía y/o acompañamiento en la hipotética creación de una asociación de mujeres: tanto
musulmanas como no musulmanas, nacida de las asistentes a los talleres.
- Creación de un programa de empleo o autoempleo
- Intercambios de experiencias con otras mujeres musulmanas de localidades cercanas.
- Valorar trabajo con los hijos a través de ellas.

- Proyecto de evaluación dinámico y flexible.


- Nº de participantes (musulmanas y no musulmanas) en los grupos de trabajo para la realización del
diagnóstico participativo respecto al total de población (estándar 5%).
- Nº de mujeres musulmanas respecto al total de población participantes en los grupos de autoayuda
(estándar 1 a 3%) o en la asociación (no estándar previo).
- Tiempo necesario para que el grupo de ayuda mutua no requiera la presencia de un facilitador
profesional (estándar 1 año para el grupo inicial; 3 para posteriores)
- Nº de mujeres tratadas individualmente (estándar 25% de las víctimas directas)
- Registro, en entrevistas semi-estructuradas, de la percepción de su situación por parte de las
participantes de los grupos de autoayuda en el momento de iniciar el grupo, a los 6 meses y al año.
- Nº de mujeres, musulmanas y no musulmanas, asistentes en cada uno de los talleres.
- Capacidad constatable de realización de proyectos, actividades, campañas, etc. Por los grupos de
autoayuda o la asociación.
- Nº de mujeres musulmanas y no musulmanas que han cambiado su situación laboral. (estándar
33%)
- Estado de la red de servicios creada por las mujeres asistentes a los talleres a los 3, 6 y 12 meses de
finalización de los mismos.
- Nº de encuentros con mujeres musulmanas de localidades próximas (estandar 3 anuales).
- Valoración de las asistentes a estos encuentros.
cualquier vínculo con los sectores no musulmanes del pueblo.

4. Establecer cuales serán los métodos para llevar a cabo la recogida de los datos que hemos
decidido que servirán de base para la evaluación. Por ejemplo, establecer una ficha de registro
por cada paciente que se vea, realizar un ficha de actividad por cada acción comunitaria (por
ejemplo reunión, grupo focal...) en que se especifiquen variables de proceso (numero de
asistentes, numero de “no asistentes”, objetivos logrados y no logrados, ¿quién llevó el peso de
la reunión? ¿se llegó a conclusiones o a propuestas de acción? problemas surgidos, propuestas de
mejora etc), elaborar una pequeña encuesta –dentro por ejemplo, del proceso de diagnóstico
comunitario – y establecer en qué momentos se va a administrar (por ejemplo al inicio del
programa, a los seis meses y al cierre), realizar algunas entrevistas en profundidad con
informadores clave al final, pedir una evaluación externa del programa por alguien que no
conozca nada de él y que opte por seguir la metodología de entrevistas o análisis de datos que
considere adecuada etc etc

5. Pero los datos fríos, carentes de contextualización, no suelen aportar elementos


suficientes para clarificar lo realizado. Es fundamental el uso de metodologías cualitativas
combinadas con las cuantitativas.
Una evaluación puede ser también el hecho de que alguien externo al programa,
aplicando técnicas de observación participante viva el proceso desde dentro y refleje en un
informe esa vivencia y las propuestas de cambio derivadas de ello o realizar una etnografía del
programa y su contexto en base a entrevistas en profundidad con personas implicadas. Ambos
enfoques (cuantitativo y cualitativo) se complementan. Mientras el primero da una visión
ajustada a los objetivos y permite justificar mejor las acciones y planificar los pasos futuros, el
segundo nos dará información sutil, más conectada con las relaciones entre las personas o de
éstas con las instituciones con elementos anclados en la subjetividad de cada actor que muchas
veces escapan a las metodologías de análisis cuantitativo.

El mejor instrumento de evaluación es aquel que combine una aproximación mixta a la


realidad: elementos objetivos, de carácter cuantitativo y espacios de palabra, abiertos o más o
menos estructurados, de carácter cualitativo, que den sentido a los datos.
Uso de indicadores epidemiológicos y estadísticos

El diagnóstico de una situación comprende al menos los siguientes elementos:

a. En el caso de una intervención de emergencia, primera estimación estadística de


la situación. Significa un análisis somero del número estimado de damnificados y de
posibles supervivientes, sus características, el nivel de dispersión y la accesibilidad.

Al iniciar un programa en un contexto de crisis, uno de los elementos más complejos de


prever desde los primeros momentos, es el establecimiento de un registro unificado de casos que
permita posteriormente desarrollar un programa de carácter pro-activo con los afectados.

Tras los atentados terroristas del 11 de marzo del 2003 en Madrid, que dejaron un saldo de
196 personas fallecidas y un número estimado de entre 1000 y 1500 heridos, aparecieron un
sinnúmero de organizaciones pequeñas y grandes de todo tipo, equipos vinculados a
entidades gubernamentales, regionales o locales, instituciones privadas etc, que brindaron
apoyo emocional a los afectados y sus familias en las horas y días siguientes a los hechos.
Especialmente destacable fue el dispositivo organizado por el Colegio de Psicólogos de
Madrid, y los dispositivos desde la red pública de salud mental. Pero al menos 40 grupos y
organizaciones más se personaron y actuaron durante la emergencia y en las semanas y
meses posteriores. Tras las primeras horas de trabajo en la morgue provisional instalada en
los pabellones de la Feria Internacional de Muestras de Madrid (IFEMA), se intentó,
espontáneamente y por iniciativas locales, un trabajo de centralización del apoyo a través
de equipos psicológicos vinculados a las municipalidades del lugar de procedencia de los
afectados, para, finalmente, a los cuatro días de los atentados, cursarse la orden desde la
consejería de sanidad de la Comunidad de Madrid,, de que todos los casos sin excepción
debían ser derivados a los centros de salud mental de la red pública y ser atendidos en
consulta psiquiátrica.

El gráfico muestra cómo cada institución llevó un registro ad-hoc de las atenciones
realizadas, en el que detallaba la información que consideraba adecuada. En algunos casos
se incluía información confidencial (como nombres, direcciones o teléfonos), en otros sólo
una definición general del tipo de intervención realizada..
Así, por ejemplo, el Colegio Oficial de Psicólogos montó un dispositivo en base a
voluntarios que actuaron in-situ, una línea de atención 24 horas, un servicio de atención a
domicilio con vehículos particulares y dispuso, posteriormente, espacios para la atención
individual de algunos casos en base a voluntarios durante algunas semanas después de los
atentados. Este fenomenal dispositivo, paralelo y no articulado ni con la red pública ni con
ONGs afirma haber realizado 5000 atenciones individuales y 10.000 telefónicas. Es
imposible saber qué pasó con estos casos, cuáles con una intervención mínima pudieron
seguir adelante, cuales duplicaron en otros dispositivos, y sobretodo cuales se perdieron por
el camino. Situaciones similares se dieron respecto al resto de actores del proceso: una
poderosa red con muchos nodos pobremente interconectados.

La ausencia de una base unificada de registro provocó que, en una situación de crisis
confusa como fueron los atentados: (a) se pudieran perder un estimado de entre el 30 y el
40% de familiares entre la atención inmediata en IFEMA y las consultas en el centro de
salud mental. Previsiblemente, y como el tiempo después sugería, los casos de afectación
emocional más severa fueron los que probablemente se encerraron por meses en sus casas y
no pidieron ayuda (b) fue completamente imposible desarrollar ningún tipo de trabajo en
red o proactivo en los meses posteriores 10 (c) se provocó una retraumatización de muchos
afectados, especialmente inmigrantes, que al intentar acogerse a los beneficios de la
condición de “afectado” se encontraban con funcionarios policiales o de servicios sociales
que cuestionaban la veracidad del testimonio o exigían documentación que avalara que
estaban en alguno de las estaciones o de los trenes en el momento de los atentados.

b. Primer diagnóstico del contexto. Implica una primera estimación de los


componentes políticos y económicos asociados a la situación. Factores que, en una
primera valoración, pudieran tener trascendencia tanto en el desencadenante (análisis
de factores de vulnerabilidad) como en el transcurso posterior de los hechos. Este, a
su vez, deberá tener dos componentes :

‰ Condicionantes estructurales y sociopolíticos de la ayuda (factores que van a


incidir en el quien, el cómo, canales posibles y determinantes de los mismos).
‰ Consecuencias de la acción. Es fundamental prever de qué manera cualquier
programa de acción va a incidir en un marco de partes quizás en conflicto. Cómo
puede ser interpretado por cada uno de los actores y de qué manera –quizás
inadvertida- estamos influyendo en la evolución de un determinado proceso social
o histórico avalando o no unas determinadas circunstancias. Este análisis debe
hacerse no desde la lógica propia del que ayuda, sino desde un intento por situarse
en la lógica de quien hace parte de la situación, de las diferentes lógicas de cada
uno de los actores implicados. Esto atañe tanto a los desastres provocados por el
hombre (guerra o violencia política) como a los naturales (análisis de las
condiciones estructurales y las vulnerabilidades directamente relacionadas con los
hechos).

La urgencia de una intervención no debe constituir una excusa para que no sea haga un
análisis del contexto, pensando que todos los actores van a compartir el concepto de
neutralidad ética.

c. Primer diagnóstico de las actuaciones. Conocer quienes están presentes en ese


instante en la zona y el tipo de programas en marcha, así como los mecanismos de
coordinación existentes para buscar formas de complementariedad en el trabajo.

10
Se entiende como trabajo de recepción de demanda el establecimiento de servicios que puedan atender las
solicitudes de apoyo que se generen desde los afectados. Se entiende como trabajo proactivo el que se basa en
acercamiento activo desde el equipo psicosocial hacia los afectados. El acercamiento proactivo considera que
solicitar ayuda es ya un signo de salud mental, y que fomentar el apoyo en redes y el conocimiento mutuo requiere
de un trabajo activo de aproximación. Si no se ha establecido un vínculo de confianza en las primeras horas, que
permita posteriormente un recontacto, las intervenciones preactivas pueden ser vistas como invasivas y un atentado
al derecho a la intimidad. Por eso es básico establecer un registro desde las primeras horas en el que se avise y se
solicite permiso para la posibilidad de un contacto proactivo de apoyo por parte del equipo psicosocial pasados unos
días.
Intervención inmediata

Derivación mínima o inexistente.


Seguimiento nulo. Pérdida de casos
IFEMA graves Dispositivo formal a partir de
la semana
- Más de 40 instituciones y
organizaciones presentes
dando “apoyo emocional”
con carácter oficial o
voluntario.
Orden de derivación a
Derivación mínima o inexistente.
Seguimiento nulo. Pérdida de casos Centros
graves Entre el 35 y el 50% de casos
de Salud Mental de la
Colegio de Psicólogos Seguimiento abandonaron el tratamiento por
posterior su cuenta en las tres primeras
Comunidad de Madrid citas
5000 atenciones
¿enfoque puramente clínico?
10.000 llamadas ¿mejoría con intervención mínima
(35 psiquiatras y 15
telefónicas de apoyo
Derivación sistemática de casos. psicologos contratados) de apoyo?
Seguimiento escaso. Sospecha de
pérdida de casos graves
Primera semana
Derivación de casos que solicitan apoyo emocional
(10-12%). Seguimiento posterior.
Orientación también a sector privado
Equipos municipales ¿Los casos más graves solicitan espontáneamente
ayuda?
Dispositivos ad-hoc Derivación sistemática de casos.
Seguimiento nulo. Sospecha de pérdida
de casos graves Ventanilla Única para Victimas del
Terrorismo del Ministerio del Interior
Puertas de
entrada Oficina Única de
posteriores Atención a víctimas Servicios Sociales
(Vallecas) municipales o de barrio

Atentados del 11 de marzo del 2004 en Madrid: Atención inmediata espontánea y dificultades para un trabajo pro-activo posterior
ante la ausencia de un registro unificado de casos.
La recolección de datos básicos

Los datos sociodemográficos y de contexto pueden con frecuencia obtenerse de los registros
de las autoridades nacionales o regionales, de los datos de las instituciones y servicios locales, de
otros equipos que trabajaban previamente en la zona o por estimados por el conocimiento de
comunidades cercanas. No interesa tanto la precisión del dato (más importante para el
epidemiólogo) como la tendencia (más importante para decidir las prioridades de un plan de
acción).

La siguiente tabla constituye una guía de indicadores a considerar para establecer la línea
basal de un programa en contexto de emergencia:

DATOS SOCIODEMOGRAFICOS
Datos ¿Por qué?. INDICADORES DE
Elementos de especial MONITORIZACIÓN
relevancia.

1 En caso de intervención en El censo de afectados es la ‰ Número de personas afectadas


crisis, número de personas pieza clave de todo el (p.e. en situación de desplazamiento
afectadas. ¿Existe un censo trabajo posterior. Si no o en alojamientos temporales)
realizado por las autoridades existe, vale la pena, antes ‰ Número de personas en
que permita identificar a las que cualquier otra actividad, situación de vulnerabilidad
familias? ¿Incluye a todas las colaborar en levantarlo. ‰ Número de personas afectadas a
personas (los que quedaron las que se ha logrado llegar
junto a sus pertenencias Podrá incluir el nombre de las ‰ Número de personas afectadas
negándose a abandonarlas, los personas que hay en la en programas de seguimiento y
que se refugiaron familia, edades, procedencia, monitorización proactiva
provisionalmente con datos socioeconómicos y
familiares, vecinos o amigos, psicosociales relevantes cara
los que acudieron a los puntos al futuro y necesidades
de concentración y albergues) especiales (sobretodo
presencia de enfermedades
físicas o mentales crónicas) y
vía de contacto para trabajo
pro-activo posterior.,

En contextos de violencia
política o donde pudiera haber
represalias, o en situaciones
potencialmente
estigmatizantes (como
supervivientes de abuso
sexual) se deberá evitar el uso
de nombres y usar sistemas de
claves protegidas
2 Edad. - Presencia de grupos
vulnerables (personas
mayores, especialmente no
acompañadas, mujeres
embarazadas...)

- Numero aproximado de
niños.
3 Dispersión familiar -Necesidad de un programa ‰ Número de solicitudes de
de reunificación familiar, localización de familiares.
especialmente en el caso de ‰ Tasa de casos resueltos
niños separados de sus padres.

4. Estructura del núcleo - Tipos de familia (nuclear y


familiar. Elementos ampliada) más frecuentes.
sociológicos y culturales. Niveles de solidaridad
intrafamiliar.
- Presencia de familias
monoparentales.
Vulnerabilidad que podría
significar en este contexto.
Posible necesidad de un apoyo
especial en determinadas
actividades (por ejemplo
sistemas de “guarderia”
comunitaria).
5 Procedencia. - Necesidad de un programa ‰ Indicadores del nivel de
de reunificación comunitaria agrupamiento comunitario (p.e.
(por ejemplo tras un éxodo número de comunidades de
masivo precipitado) procedencia de un barrio o una
comunidad de desplazados, como
¿Proceden todas las personas indicador previo a un plan de
de las cercanías o algunas reagrupamiento comunitario;
proceden de otras zonas más número de personas conocidas
lejanas? ¿A qué comunidad / previamente a la catástrofe de entre
barrio / región pertenecen? las 10 familias más cercanas a la
¿Qué grupos pueden trazarse propia familia)
en función de la procedencia?
¿Cuál es la relación entre
ellos? ¿se ha conservado o
puede detectarse algún
sistema de redes naturales?
¿pueden reconstruirse?
6 Distribución de la comunidad - Las personas con recursos
por clase social y nivel por lo general en pocos días
educativo. abandonarán la zona de
impacto central y buscarán por
su cuenta algún tipo de
alojamiento temporal, comida
o atención en salud. La
pobreza es un factor añadido
de vulnerabilidad e
indefensión
7 Ocupación -¿Destruyó la catástrofe los
puestos de trabajo (formal o ‰ Tasa de destrucción permanente
informal)? ¿Quiénes pueden de empleo entre afectados.
reintegrarse a medio plazo a ‰ Tasa de destrucción temporal
su trabajo habitual de empleo
remunerado y quienes también ‰ Tasa de afectados con
lo perdieron? ¿Qué actividades (formales o informales)
profesiones tienen? ¿Es de autosostenimiento.
posible integrarlos en el
proceso de reconstrucción?.
8 Papel de la religión. - Creencias mayoritarias. ‰ Existencia de espacios de
Importancia de las creencias expresión religiosa. Satisfacción
como estrategia de respecto a la posibilidad de
afrontamiento. Normas expresión de creencias.
relevantes. ‰ Valor de la religión y las
- Necesidad de espacios para creencias como autorreguladores
ceremonias. emocionales.
- Ritos de duelo y otros.
9 Escolarización ¿Estaban escolarizados los ‰ Tasas de escolarización
niños antes de la catástrofe? infantil
¿En qué estado quedaron las
escuelas? ¿Se prevee a medio
término que puedan
reiniciarse las actividades
aunque sea de modo
temporal?
10 Alojamiento Temporal ¿Cómo es el tipo de vivienda ‰ Número de personas por
Vivienda local? (adobe, edificios de tienda / albergue provisional.
apartamentos, casas Niveles de concentración,
aisladas...). ¿Cómo soportó la percepción comunitaria del mismo
catástrofe? ¿Es posible (percepción de agrupación versus
reconstruir o hay que hacinamiento).
rehacer?. ¿Se preveen ‰ Viviendas provisionales /
programas de reasentamiento definitivas
de la población?

El número de indicadores posibles en contextos de desarrollo comunitario es prácticamente


infinito, dependiente del contexto de cada país y su peculiar situación. La tabla siguiente, a
efectos meramente ilustrativos, da una selección de algunos de los indicadores clave sugeridos
por el PNUD dentro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio aprobados por la Asamblea de
Naciones Unidas.

Objetivos y metas Indicadores


Objetivo 1: Erradicar la pobreza extrema y el hambre
Meta 1: Reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, el 1. Porcentaje de la población cuyos ingresos son
porcentaje de personas cuyos ingresos sean inferiores a 1 inferiores a 1 dólar por día (valores de PPA)
dólar por día 2. Coeficiente de la brecha de pobreza (la incidencia de
la pobreza multiplicada por la gravedad de la pobreza)
3. Proporción del consumo nacional que corresponde a la
quinta parte más pobre de la población
Meta 2: Reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, el 4. Número de niños menores de 5 años de peso inferior al
porcentaje de personas que padezcan hambre normal
5. Porcentaje de la población por debajo del nivel
mínimo de consumo de energía alimentaria
Objetivo 2: Lograr la enseñanza primaria universal
Meta 3: Velar por que, para el año 2015, los niños y 6. Tasa de matrícula neta en la enseñanza primaria
niñas de todo el mundo puedan terminar un ciclo 7. Porcentaje de los estudiantes que comienzan el primer
completo de enseñanza primaria grado y llegan al quinto grado
8. Tasa de alfabetización de las personas de edades
comprendidas entre los 15 y los 24 años
Objetivo 3: Promover la igualdad entre los sexos y la autonomía de la mujer
Meta 4: Eliminar las desigualdades entre los géneros en 9. Relación entre niñas y niños en la educación primaria,
la enseñanza primaria y secundaria, preferiblemente para secundaria y superior
el año 2005, y en todos los niveles de la enseñanza antes 10.Relación entre las tasas de alfabetización de las
del fin del año 2015 mujeres y los hombres de edades comprendidas entre los
15 y los 24 años
11.Proporción de mujeres entre los empleados
remunerados en el sector no agrícola
12.Proporción de puestos ocupados por mujeres en el
parlamento nacional
Objetivo 4: Reducir la mortalidad infantil
Meta 5: Reducir en dos terceras partes, entre 1990 y 13.Tasa de mortalidad de los niños menores de 5 años
2015, la mortalidad de los niños menores de 5 años 14.Tasa de mortalidad infantil
15.Porcentaje de niños de 1 año vacunados contra el
sarampión

Objetivo 5: Mejorar la salud materna


Meta 6: Reducir, entre 1990 y 2015, la mortalidad 16.Tasa de mortalidad materna 17.Porcentaje de partos
materna en tres cuartas partes con asistencia de personal sanitario especializado
Objetivo 7: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente
Meta 10: Reducir a la mitad, para el año 2015, el 29.Proporción de la población con acceso sostenible a
porcentaje de personas que carezcan de acceso mejores fuentes de abastecimiento de agua
sostenible a agua potable
Objetivo 8 : Mejora de las condiciones de vida de la población en zonas marginales

Meta 11: Haber mejorado considerablemente, para el 30. Proporción de la población con acceso a mejores
año 2020, la vida de por lo menos 100 millones de servicios de saneamiento
habitantes de zonas marginales
31. Proporción de la población con derecho seguro a la
tenencia de tierra
Meta 16: En cooperación con los países en desarrollo, 45.Tasa de desempleo de las personas comprendidas entre
elaborar y aplicar estrategias que proporcionen a los los 15 y los 24 años
jóvenes un trabajo digno y productivo
Meta 17: En cooperación con las empresas 46.Proporción de la población con acceso estable a
farmacéuticas, proporcionar acceso a los medicamentos medicamentos esenciales a precios razonables
esenciales en los países en desarrollo
Meta 18: En colaboración con el sector privado, velar 47.Número de líneas de teléfono por 1.000 habitantes
por que se puedan aprovechar los beneficios de las 48.Número de computadoras personales por 1.000
nuevas tecnologías, en particular de las tecnologías de la habitantes Se determinarán además otros indicadores
información y de las comunicaciones

Fuente : PNUD (actualizaciones de indicadores del PNUD en http://www.undp.org/spanish/)


Un segundo nivel estará en relación con aspectos organizativos y comunitarios y
constituirá una profundización más documentado de algunos de los aspectos anteriores:

RECURSOS ORGANIZATIVOS Y COMUNITARIOS


1 Grupos con Especialmente en situaciones en relación con ‰ Cambios en el
objetivos políticos violencia política será necesario evaluar la presencia mapa de poder
definidos presentes y papel de actores externos con incidencia en la evaluados a través de
en la zona. comunidad (delincuencia organizada, narcotráfico sociogramas o mapas
....) de redes
2 Partidos políticos Es clave para quien no vivía en la zona entender el
mapa político local. Ello va a permitir anticipar - Mapa de actores
posibles dificultades en la coordinación entre - Posicionamiento
administraciones o estar atentos, por ejemplo, a la (negativo – neutro –
posibilidad de que la gestión de alguna de las positivo) respecto al
donaciones pudiera usarse de manera condicionada o problema o las posibles
como forma de proselitismo electoral. soluciones
2. Redes sociales Ver más adelante la confección de un mapa de redes - Alianzas, estrategias y
: asociaciones, grupos de autoapoyo, iglesias enfrentamientos.
presentes en la zona con servicios de voluntariado
etc...
3 Existencia de Personas con autoridad reconocida por el resto, bien
autoridades por los cargos que desempeñaban, bien por su peso
comunitarias moral, con capacidad de organización y liderazgo y
que deseen asumirlo pese a las circunstancias.
4 Líderes de otro Sacerdotes, responsables de asociaciones locales,
tipo personal de salud o maestros locales, dueños del
almacén de acopio o de la tienda, ancianos...
5 Medios de Actitud ante lo sucedido ‰ Análisis de
comunicación. Atribución de responsabilidades contenidos (a través de
Protección a la intimidad y derechos de los afectados software estadístico de
análisis de textos u otros)

Todo ello deberá complementarse con la información sobre los recursos oficiales en la
zona, previsiblemente recolectada y suministrada por las autoridades. De no ser así, será
prioritario recolectarla. La tabla siguiente es una guía :

RECURSOS OFICIALES
1 Sistema nacional de En caso de intervención post-catástrofe. :
emergencias Descripción. Puntos de localización y referencia.
Teléfonos de contacto. Funciones de los comités
locales y personas y vias de coordinación.
2 Sistema de atención - Localización de los recursos de atención primaria.
en salud. Evaluación del grado de funcionalidad.
- Localización de los recursos de segundo y tercer
nivel (hospitales generales, hospitales psiquiátricos,
centros pediátricos, clínicas...).
- Establecer los flujos de derivaciones que funcionan
en condiciones normales y en crisis
3 Programas de salud. - Existencia en la zona de programas de detección y - Ver más adelante
tratamiento de la desnutrición infantil. sección sobre
- Existencia de algún sistema de registro o de Indicadores de
localización de enfermos mentales crónicos. evaluación de servicios
- Existencia de enfermos psicóticos en estado de de salud mental
indefensión (por ejemplo por destrucción de
dispositivos).
- Previsión de reservas de tratamientos para
enfermedades graves (diabetes, cardiopatías, psicosis
de larga evolución...).

5 Presencia de - Existencia de formas de medicina tradicional.


sistemas de Posibilidad de detectar personas con autoridad que
medicina autóctona ejercen de sanadores en las comunidades. Posibilidad
de coordinarse con ellos y conseguir su colaboración.
Condiciones que requieren para poder trabajar.
4 Otra información - Estado de las comunicaciones (acceso a correo,
social teléfono...).
potencialmente - Estado de las vías de acceso y transporte a la zona.
relevante. etc

Indicadores de vulnerabilidad / capacidad.

A la hora de seleccionar áreas de trabajo con frecuencia se carece de criterios previos de


selección y la decisión de trabajar con una comunidad y no otra tiene más que ver con criterios
históricos, de accesibilidad, de existencia de espacios de confianza o de presencia de líderes
comunitarios que se manejan adecuadamente en el mundo de las instituciones gubernamentales o
no gubernamentales o son capaces de atraer la atención de éstas.
Existe la posibilidad de intentar construir sistemas de indicadores epidemiológicos que
ayuden a definir de un modo más objetivo cuales deberían ser las zonas prioritarias de actuación.

Una red de organizaciones internacionales que deseaban trabajar programas de alimentación y


desarrollo en zonas rurales de Sri Lanka, ante l dificultad para decidir dónde trabajar entre las miles de
comunidades que presentaban algún tipo de carencia, desarrollo un sistema de indicadores
epidemiológicos de vulnerabilidad / capacidad. Basándose en alrededor de 40 parámetros procedentes en
su mayoría de estadísticas oficiales, pudieron crear una jerarquía de zonas de máxima vulnerabilidad.
Los indicadores obedecían sobretodo a tres criterios que respondían al contexto de Sri Lanka en
estado de tregua entre la insurgencia Tamil y el gobierno: (1) estimación de niveles de afectación de la
población civil por la guerra (2) desnutrición y falta de acceso regular a alimentos (3) déficit de recursos
sociales. A partir de los indicadores, el equipo fue visitando cada una de las zonas para cotejar la
información y poder construir un mapa de zonas de riesgo por distritos, actualizable anualmente (ver
gráfico). Esta información se colocó en Internet a disposición de cualquier entidad gubernamental o no
gubernamental que quisiera utilizarla y pudo ser la base para establecer prioridades de acción en
programas psicosociales. El criterio inicial de selección de comunidades se basó en parámetros objetivos.

Posteriormente serán las circunstancias de cada zona los espacios de trabajo y la


viabilidad o no del mismo y la propia predisposición de la comunidad y de las autoridades y la
comunidad quienes acaben marcando las zonas reales de inicio del trabajo.
“La vida en comunidades es como un matrimonio, uno se casa con cada país al que va, con
cada comunidad, y hay matrimonios que no funcionan, químicas que no se dan, así es que
hay que aceptar que queremos divorciarnos muchas veces"
Sacerdote en taller de bienvenida a nuevos agentes pastorales. Perú.
Indicadores de base epidemiológica o administrativa para la planificación de servicios de
psicología, psiquiatría y de salud mental

La gestión de servicios sanitarios tiene, hoy en día, un corpus teórico desarrollado y


extenso en los países con sistemas sanitarios complejos.
Los indicadores, en estas situaciones, tienen más que ver con lo que se puede encontrar
que con lo que se desearía. Por ello el trabajo debe iniciarse acudiendo a las fuentes de
información local para investigar qué indicadores se recogen regularmente y cuales de ellos
pudieran ser potencialmente relevantes al programa.

- Hospital y centros de salud local


- Servicios de administración sanitaria o gestores locales. Autoridades locales o
regionales de salud, educación u otras
- Internet y páginas web 11
- Organizaciones sociales y comunitarias
- ONG’s locales, ONG’s internacionales y agencias multilaterales.

Indicadores de base epidemiológica

La mayoría parten de la necesidad de hacer un pequeño estudio epidemiológico previo en


el que sustentar los datos posteriores. Algo similar a una encuesta nutricional, pero referido al
aspecto de la salud mental o aspectos psicosociales que se deseen abordar en el programa.

a) La prevalencia de enfermedades psiquiátricas mayores (esquizofrenia, psicosis maniaco-


depresiva...) es relativamente constante en todas partes y oscila entre el 0,8 y el 1,2% de la población.
Por tanto no tiene sentido, salvo estudios culturales altamente especializados, realizar estudios
epidemiológicos de prevalencia de patología psiquiatrica mayor en un contexto de crisis humanitaria
o de sistemas básicos de gestión o sistemas con pocos recursos. Tendrán más sentido los indicadores
de utilización de servicios.

- Número de camas psiquiátricas por 100.000 hab. (Estándar mínimo: 5)


- Número de psicólogos / psiquiatras por 100.000 hab. (Estándar recomendado: 10)
- Número de casos tratados en los dispositivos de la zona. (Estándar: 3% de la población total de la
zona para trastornos psiquiátricos mayores)

b) La prevalencia de trastornos emocionales (ansiedad, depresión y otros) es muy variable y


dependiente del contexto. Como indicador epidemiológico hay diversas escalas de malestar
psicológico general que pueden usarse en una muestra aleatoria de población general, población de
una consulta de atención primaria o población diana (por ejemplo: refugiados tras una catástrofe)..
Pueden recomendarse dos aceptadas transculturalmente:

- General Health Questionnaire 12 items (GHQ-12). (ver Sección 4).


- Symptom Rating Questionnaire – 20 items (SRQ-20). Desarrollado por la OMS, se apoya en el uso de
viñetas.

• La prevalencia de trastornos emocionales es extraordinariamente variable entre culturas. En el


estudio multicéntrico de la Organización Mundial de la Salud sobre Prevalencia, Severidad y
Necesidades no Atendidas en Salud Mental, realizado en 14 países entre el año 2001 y 2003, se
realizaron más de 65.000 entrevistas puerta a puerta utilizando la entrevista CIDI que da
diagnóstico DSWM-IV y CIE/10. Los resultados mostraron “prevalencias” muy diferentes en
problemática “no psicótica”. Por ejemplo en Estados Unidos 5 veces más Trastornos de Ansiedad
o 12 veces más trastornos afectivos que en Nigeria (WHO, 2004).

País Trastornos de Trastornos Trastornos No % de población


11
Es posible encontrar países con sistemas de salud mental pendientes de desarrollo, como los Territorios Ocupados
Palestinos, que tienen en cambio una buena selección de indicadores recogidos de modo regular y a los que puede
accederse en Internet a través de las páginas oficiales de la autoridad nacional palestina o de autoridades locales o
regionales.
Ansiedad Afectivos Psicóticos (en con trastornos no
general) psicóticos graves
atendidos.
EUA 18.2% 9.6 % 26.4 % 52.3 %
Colombia 10.2% 6.8 % 17.8 % 23.7 %
México 6.8% 4.8 % 12.2 % 20.2 %
España 5.9% 4.9 % 9.2 % 64.5 %
Nigeria 3.3% 0.8 % 4.7 % -

Una primera explicación tiene que ver con elementos culturales. Palabras como ansiedad o
depresión forman parte del lenguaje cotidiano de los norteamericanos, probablemente menos de los
nigerianos. Además, contestar un cuestionario anónimo domiciliario puede ser algo aceptable
culturalmente, mientras que en Nigeria puede ser difícil “reconocer” ante un extraño que hay algún
problema emocional.
Lo relevante es el escaso valor de los estudios epidemiológicos para determinación de previsión
de necesidades en contextos de emergencia o de países con sistemas básicos de gestión. Existen
demasiados elementos de variabilidad de resultados, incluso usando metodologías y recursos de centros
de investigación de la OMS como para que merezca la pena el gran esfuerzo que conllevan.

• Cribado de patología. Un problema similar es el que se enfrenta referido al cribado de


enfermedad mental como técnica de trabajo. Durante los 80 y 90 se postuló el uso de
cuestionarios como el GHQ o el SRQ en atención primaria. La experiencia mostró que (a) es
difícil mantener una atención continuada en este tipo de acciones que requieren gran energía del
ya sobrecargado médico de AP, (b) la “detección” no conlleva ni percepción de problema por
parte del paciente, ni demanda de ayuda, (c) en salud mental, la oferta de servicios genera
demanda, en una secuencia sin límite, como demuestran los servicios de salud mental de los
países más ricos. Realizar labores de cribado de patología no psicótica es partir de un modelo de
“atención universal ilimitada”, y de la existencia de un pool cerrado de personas a las que detectar
y atender, y ambas cosas se han demostrado falsas. La atención, por tanto, debe tener en cuenta
los elementos de auto-selección (que conllevan percepción subjetiva de necesidad y demanda de
ayuda).

c) Para la prevalencia de problemas comunitarios existen diversas técnicas para evaluar y monitorizar
el estado emocional de un colectivo humano. Entre ellas es especialmente útil la Escala de Cohesión
Comunitaria descrita más adelante.
Indicadores de eficacia y actividad de un servicio de salud mental

El cuadro anexo recoge los indicadores cuantitativos recomendados de manera estándar 12


y la tabla adjunta algunas cifras del World Health Atlas de la OMS como orientación de valores
de referencia.

1. Indicadores del nivel de recursos.


1.1. Número de camas psiquiátricas / 10.000 habitantes
1.2. Índices de personal / cama
1.3. Proporción entre camas de corta y larga estancia.

2. Indicadores del nivel de actividad.


2.1. Número de ingresos.
2.2. Tasa de reingresos
2.3. Tasa de ocupación media de las camas
2.4. Estancia media hospitalaria
2.5. Altas por diagnóstico
2.6. Asistencias por diagnóstico

3. Indicadores del nivel de funcionamiento


3.1. Tiempo en lista de espera
3.2. Número de abandonos del tratamiento por diagnósticos
3.3. Número de pacientes con contactos interrumpidos
3.4. Número de urgencias por diagnósticos
3.5. Tiempo medio dedicado al paciente

Fuente: Soler PA, Gascón J (ed). (2005).

Una lista más sencilla y realista para contextos de gestión sencilla sería:

- Número de casos nuevos detectados. (No existe estándar de referencia)


- Número total de consultas / día. (Estándar: entre 5 y 20 consultas / día)
- Tasa de cobertura. Número de personas que frecuentan el servicio / prevalencia estimada / severidad
diagnóstica (Estándar : 60% de tiempo para cobertura de patología grave, 30% para cobertura de
patología moderada y 10% para cobertura de patología leve, según estándares de la OMS
(WHO,2004b)
- Accesibilidad. Número de personas referidas desde los servicios médicos o paramédicos / número de
personas atendidas. (Estándar : Menos de un 25% de pérdida de casos)
- Distribución geográfica / distancia al centro de los pacientes atendidos. (Estándar : La procedencia de
los pacientes es proporcional al número de habitantes de cada distrito, independientemente de la
distancia física al mismo).

Indicadores de eficiencia

12
Selección de indicadores de evaluación recomendados por la Fundación Avedis Donavedian para medida de la
calidad de gestión de servicios de salud mental.
- Tasas de seguimiento de casos: altas médicas, altas por abandono, altas por causas externas. Estándar:
30 % de altas médicas, 30% altas por abandono (incluye altas por mejora subjetiva, decididas por el
paciente), 20% de altas por causas externas y 20% de altas sin causa conocida.
- Tasas de derivación. Número de casos correctamente derivados al sistema de atención primaria de
salud local (si existe) o de trabajadores paramédicos y seguidos desde allí.
- Acceso a medicamentos. (Estándar : Suministro de medicamentos esenciales de la OMS para el 100%
de patologías severas)

Indicadores de eficacia

Medir la eficacia estará en relación con la monitorización de los indicadores anteriores y


establecer un sistema básico de registro de casos, actividades y resultados.

Ejemplos de Número de camas Número de Número de Índice Desarrollo


países psiquiatras psicólogos Humano (PNUD)
10.000 habitantes (camas en hospitales
psiquiátricos / camas en hospital 100.000 100.000
general1,2) habitantes habitantes
Guinea 0 0 0 172
Bissau
India 0.25 (0.2/0.05) 0.2 0.03 127
Guatemala 0.35 (0.32/0.03) 0.54 0.7 117
Kenia 0.4 (0.3/0.05) 0.2 0.01 154
China 1.06 (0.87 / 0.1) 1.29 85
Tailandia 1.4 (1.4/-) 0.6 0.2 73
Irán 1.6 (1.4/0.2) 1.9 2 99
Sri Lanka 1.8 (1.4/0.3) 0.2 0.02 93
Australia 3.9 (1.2/2.7) 14 5 3
España 4.4 (3.7/0.6) 3.6 1.9 21
Uruguay 5.4 (4.78/0.62) 22.9 15.1 46
Dinamarca 7.1 16 85 14
EUA 7.7 (3.1/1.3) 13.7 31.1 10
Azerbaijan 7.1 (6.9/0.11) 5 0.2 101
Bulgaria 8.3 (4.1/1.9) 9 0.9 55
Fuente : WHO. Mental Health Atlas 2005 ( http://www.who.int/mental_health/evidence/atlas/. 1Resto de camas,
en instituciones privadas. 2Países con un relativo alto número de camas pero concentrados en enormes
instituciones manicomiales en la capital, en realidad presentan una alta desprotección en el resto del país (p.e. Sri
Lanka, Azerbaijan, Bulgaria).

Indicadores cualitativos en la evaluación de servicios de salud mental

1. Indicadores de resultado.

A diferencia de otras ramas de la medicina, la salud mental en general y la psiquiatría en


particular tienen especiales dificultades para usar medidas de resultados. La complejidad de las
variables que intervienen en el proceso salud-enfermedad hacen que en muchas ocasiones sea
difícil atribuir la mejoría de un indicador epidemiológico a la intervención sanitaria.
Con todo, se trata de aquellos indicadores que pueden reflejar de modo más directo la
eficacia de la intervención.
Para seleccionar indicadores de resultado habrá que obtener datos epidemiológicos o de
uso de servicios de:

2.1.1 Patología psiquiátrica de mayor gravedad: psicosis (si la recolección de datos o


los archivos de que se dispone lo permite, se distinguirá entre subtipos de
psicosis).

2.1.2 Patología psiquiátrica prevenible de base orgánica: Por ejemplo: retraso mental
por déficit de iodo, psicosis por avitaminosis severas o epilepsias por anoxias o
traumatismos perinatales.

2.1.3 Patología psiquiátrica prevenible de base psicosocial :

2.1.3.1 Dependencia alcohol (monitorizable a través de indicadores de uso de


servicios médicos por complicaciones orgánicas asociadas a dependencia
alcohólica: hepatopatía, ascitis, varices esofágicas, encefalopatías, delirium...).
2.1.3.2 Uso de otras drogas (dependiendo del medio cultural, uso de opiodes,
pegamentos e inhalantes u otras). Las urgencias y complicaciones orgánicas
pueden ser nuevamente indicadores indirectos.
2.1.3.3 Suicidio. En algunas zonas del mundo (p.e. Sri Lanka) existen tasas de
suicidio hasta 20 veces superior a la media mundial. Periódicamente aparecen
(por ejemplo entre comunidades indígenas invadidas culturalmente y con
anomia generalizada) epidemias de suicidio adolescente.
2.1.3.4 Problemas considerados socialmente relevantes en este contexto, momento
sociopolítico o desde ésta cultura. Bien por tratarse de problemas
considerados importantes (p.e. el susto en niños) , bien por el contexto
sociopolíticos (p.e. lisiados y discapacitados de guerra).

En todos estos casos el establecimiento de línea base y la monitorización debería establecerse


usando los registros normales de los dispositivos de salud de la zona.
Realizar estudios epidemiológicos de prevalencia de patología psiquiátrica en una
comunidad o un distrito es complejo (ver nota al pie) 13 . Requiere gran cantidad de recursos y
tiempo y raramente puede ser asumido por una institución que no sea de gobierno, una
universidad o una gran agencia internacional. Por eso los sistemas de monitorización basados en
el perfil de demanda deben basarse en los registros de casos que se elaboran en cada centro, es
decir, la pequeña estadística diaria de casos atendidos y los diagnósticos empleados.
Es preciso tener en cuenta :

13
Se trata habitualmente de lo que se denomina estudios de doble fase. En una primera fase se administra a una
muestra amplia de población general un cuestionario de cribado o screening (usualmente el General Health
Questionnaire (GHQ) de 60, 28 o 12 items o el Symptom Rating Questionnaire (SRQ) de 20 items. Aquellos casos
que dan positivo son entrevistados utilizando una entrevista semi-estructurada que de diagnósticos DSM-IV-TR o
CIE-10 (como la SCAN, la MINI u otras ). Para todo ello se requiere que ambos cuestionarios (el de screening y el
de diagnóstico) hayan sido previamente traducidos y validados a ese medio, a fin de poder determinar, además de
sus propiedades psicométricas básicas, el punto de corte idóneo para el cribado, la aceptabilidad cultural de los
ítems. Este proceso previo puede durar al menos 1 año. Con posterioridad el proceso sería mucho más sencillo,
porque traducido y validado el instrumento, cuando se quisiera obtener datos comparables, sólo habría que volver a
repetir el estudio de dos fases en población general. Estos estudios, como se comentó más arriba, están sometidos a
fuertes influencias culturales, y es dudosa su utilidad para la planificación de servicios.
‰ Utilizar las categorías más amplias posibles. En muchas zonas culturales no tiene sentido
distinguir entre los 4 subtipos clásicos de la esquizofrenia, o la precisión diagnóstica entre
esquizofrenia o trastorno bipolar puede ser baja. Con frecuencia la única distinción realmente
relevante es entre psicosis agudas y psicosis crónicas. Es mejor recoger, por ejemplo, sólo el dato
agregado de psicosis y que éste pueda ser posteriormente analizado con relativa facilidad, que
distinguir subtipos y que posteriormente, cambios aparentemente en el perfil de personas
atendidas se deban simplemente a algo tan banal como el cambio de lugar de trabajo de alguno
de los profesionales.

‰ Buscar unificar criterios. Suele ser útil recurrir a una clasificación diagnóstica sencilla e
internacionalmente aceptada, que ayude a unificar criterios entre los profesionales. Una buena
opción puede ser, por ejemplo, la clasificación de enfermedades mentales de la Organización
Mundial de la Salud en su versión para Atención Primaria. Traducida a múltiples idiomas,
contempla un pequeño número de categorías genéricas y es fácilmente manejable de un vistazo
por todos los profesionales de un equipo.

‰ Cada dato requerirá un análisis posterior y nunca es posible establecer relaciones


causa-efecto. Si por ejemplo se observa una disminución del número de muertes por suicidio
según la estadística de fallecimientos del hospital de distrito, es difícil poder afirmar que esto se
debe a la intervención del equipo de salud mental

Se sabe que uno de los factores que hacen que Sri Lanka tenga tasas de suicidio tan
elevadas es la facilidad con la que es posible disponer en el campo de plantas altamente tóxicas
que crecen junto a los caminos. Estas plantas, con altas concentraciones de digoxina, resultan
casi siempre fatales. En Nicaragua, donde las tasas son también de las más elevadas del mundo,
éstas se asocian a la libre disposición de pesticidas organofosforados, cuya ingestión, aunque
sea abajas dosis, suele ser letal. Una campaña de erradicación de plantas tóxicas en las
cercanías de los núcleos habitados o de control sobre el acceso y manipulación de insecticidas
organofosforados por parte de las autoridades puede implicar una disminución drástica de los
suicidios consumados.
Indicadores de satisfacción

Miden la opinión de los usuarios de los servicios. Es un concepto muy ligado a los
sistemas sanitarios de los países más desarrollados económicamente, aunque algunos elementos
podrían ser incluidos como indicador de evaluación en determinados contextos.

‰ Condiciones de accesibilidad. Si los recursos son percibidos como igualmente accesibles


independientemente de las condiciones económicas del lugar de residencia o de las
características de la persona.
‰ Actitud del personal (amabilidad, trato, capacidad para crear confianza...).
‰ Adherencia a las citas y al tratamiento y razones del abandono o el no cumplimiento
‰ Capacidad y deseo de las asociaciones para movilizar recursos comunitarios y crear redes de
autoapoyo. Apoyos recibidos.
‰ Satisfacción global del paciente con la atención recibida.

Indicadores de funcionalidad o de calidad de vida

Pueden elaborarse indicadores adaptados al medio social y cultural, que tengan que ver con:

‰ Influencia del tratamiento en la capacidad del paciente para mantener una actividad
laboral.
‰ Influencia del tratamiento en la capacidad del paciente para mantener una vida familiar.
‰ Influencia del tratamiento en la capacidad para mantener una vida social y de comunidad.

Todo ello en función de los referentes que pueda haber en el entorno inmediato. Para
establecer este tipo de indicadores debería hacerse un trabajo previo de documentación a
través de informadores clave o de grupos focales

Otros indicadores de evaluación de servicios de psiquiatría o salud mental.

Dependiendo del contexto social y cultural, pueden ser adecuados otro tipo de
indicadores:

‰ Satisfacción de familiares
‰ Nivel y calidad de la información suministrada a paciente y familiares
‰ Protección legal de los pacientes (uso de contenciones mecánicas, uso de ingresos
involuntarios, reclusión en cárceles de pacientes psiquiátricos, confidencialidad de la
información y custodia adecuada de los archivos...)
‰ Existencia y/o adecuación de sistemas de coordinación, derivación y referencia con
otros elementos del sistema de salud fuera del área psicosocial (especialistas, servicios
sociales, organizaciones de asistencia u otras).
‰ Razones y perfiles de no acceso adecuado y regular a la medicación básica de la lista
esencial
‰ Existencia o no de algún sistema de atención a emergencias (comunitario u
hospitalario).
‰ Competencia cultural. En caso de comunidades multilingües o multiculturales,
existencia de igualdad de acceso o atención para los miembros de todas las comunidades
étnicas.
Herramientas para los ciclos de planificación - evaluación –
planificación de programas psicosociales
Observación participante.

La observación participante es el método más simple de cuantos existen. Consiste


simplemente en estar con la gente, observar y mantener un “diario de a bordo” de las cosas que
suceden. Este “diario” puede incluir desde datos (¿Cuánta gente llegó a la celebración?) a
opiniones subjetivas propias (“Era un día asfixiante y era difícil realizar una asamblea así”) o de
otras (“doña Luisa se acercó a decirme que no estaba de acuerdo con la actitud de las autoridades
hacia los supervivientes”).
La información del “diario” puede después ser analizada simplemente confeccionando un
resumen por parte del propio observador o, de manera más rigurosa, a través de un software de
análisis de contenidos como
Atlas Ti ó N6, que ayuden a
la persona investigadora a
seleccionar conceptos clave,
a ver cómo se relacionan
entre sí y establecer “nodos”
de conceptos etc. No hay, con
todo, que deslumbrarse. Los
programas de análisis de
textos toman mucho tiempo y
los resultados no son muy
diferentes de las técnicas
clásicas manuales de
disponer de un margen
amplio junto al texto,
subrayar a mano y destacar
los conceptos clave.
El principal
inconveniente de la
observación participante
puede ser la gran cantidad de
tiempo que consume.
Especialmente en situaciones
lejanas a la realidad del
observador, en que hay que
estar mucho tiempo en esa
situación antes de tener una
mirada que pueda
comprender cabalmente.
Por otro lado una
observación que se prolongue
por varias semanas puede
generar libretas enteras de anotaciones, que luego son farragosas y difíciles de analizar.
Guía para la formación en Observación Participante 14

Una cuidadosa observación permite ver más cosas de las que se aprecian a simple vista.
En la exhumación el y la observador/a van a ser parte de la situación que observan y ello va a
permitir tener acceso a información que se le escaparía a cualquier observador/a externo. Se van
a recoger datos de modo sistemático y no intrusivo. La observación nos sirve para responder
preguntas que tenemos previamente, las preguntas deben estar formuladas de la forma más clara
posible.

Es necesario tener claro qué, cómo, cuándo y dónde se va a observar, especialmente qué es lo
que interesa saber: una definición concreta de lo que se va a registrar, y cuándo se va a hacer el
registro: si se realiza de forma inmediata (y entonces necesitamos dejar de observar para anotar)
o si se espera al final de la observación, con lo que lo más probable es que la memoria juegue
malas pasadas. Una posibilidad recomendable es hacer un registro por intervalos intercalando
intervalos de observación e intervalos de registro (por ejemplo, cada dos horas, buscar un
espacio para anotar, aunque sea una guía de cosas a “no olvidar”).

Las medidas en la observación son cinco:

La ocurrencia o registro de si un determinado fenómeno aparece o no durante el periodo de


observación.
La frecuencia o registro del número de veces que un determinado dato de observación aparece.
La latencia de respuesta es o tiempo que transcurre entre la aparición de un estímulo y la
aparición de la reacción ante el mismo.
La duración o tiempo durante el que se manifiesta el fenómeno bajo observación.
La intensidad es la fuerza con la que el fenómeno que estamos observando aparece en un
momento dado.

La entrada en el lugar de trabajo

Los primeros días en el lugar de trabajo constituyen un periodo en el cual el observador tratará
de que la gente se sienta cómoda y aprenderá a actuar adecuadamente en el contexto. Por lo
general – siempre hay excepciones, en función de la temática, -se debe hacer saber a la gente que
se está haciendo un registro y que lo que nos diga no será comunicado a otros.

El vínculo de confianza

Algunas ideas son:


1. Comunicar emociones sinceras
2. Ganar un espacio de legitimidad logrando transmitir la función que se desempeña.
3. Entender, aceptar y respetar espacios de intimidad individuales, familiares o
comunitarios.
4. Participar en el sentido amplio, lo que puede incluir colaborar en tareas y trabajar junto a
los demás, o participar de ceremonias.

Las personas que observan sólo pueden lograr la confianza si se acomodan a las rutinas y
modos de pensar de estos últimos, si actúan honestamente y con sinceridad, teniendo a la vez
presente que las personas que observan no deben interferir en los procesos ni adquirir

14
Esta sección ha sido elaborada conjuntamente con Sara Fresno
protagonismo. El intercambio casual de información personal es con frecuencia el vehículo
mediante el cual las personas que observan consiguen romper el hielo.
Es importante mantener una actitud de escucha activa, que no juzgue, que la gente sepa que
pueden expresar sin temor una evaluación negativa.
El observador y la observadora deben ser cuidadosos en cuanto a no revelar ciertas cosas que
los y las informantes han dicho, aunque no lo hayan hecho en privado, si piensan que esa
información no es relevante al objeto de la intervención y que puede generar controversia o
división comunitaria.
Los y las informantes pueden ser también renuentes a expresar lo que sienten si el observador
o la observadora actúan revelando opiniones de otros o revelando fuentes de modo inadecuado.
Hay que permitir que la gente hable con libertad e interesarse con lo que la gente tiene que decir.

Observador/a

El observador participante no debería rondar con libretas o cuestionarios, ni tomar notas o


formular una gran cantidad de preguntas estructuradas (para eso están las entrevistas semi-
estructuradas). Presentarse como extraños ingenuos pero interesados puede constituir un modo
eficaz de obtener datos. Es recomendable formular preguntas como para permitir que la gente
hable sobre lo que tiene en mente y lo que le preocupa sin forzarla a responder a los intereses,
preocupaciones o preconceptos del observador. Saber qué es lo que no debe preguntarse puede
ser tan importante como saber qué preguntar.
Es fundamental reflexionar sobre cómo formular las preguntas. De los enunciados debe
trascender una simpatía que dé apoyo a las definiciones de sí mismos de los y las informantes.
Es recomendable pedir aclaraciones sobre los comentarios de los informantes. “¿Qué entiende
usted por eso? Puede explicármelo de nuevo”.

Notas de campo

El registro se hará a través de los relatos narrativos. La Observación Participante depende del
registro de notas de campo completas, precisas y detalladas. Es recomendable tomar notas
después de cada observación. Las notas proporcionarán los datos, por lo que hay que esforzarse
por redactar las más amplias y completas notas de campo posible. Se requiere una enorme
disciplina aunque sea un trabajo muy penoso. Todo lo que ocurre en el campo constituye una
fuente de datos importante. Incluso la conversación trivial puede llevar a comprender las
perspectivas de las personas cuando se la sitúa en su contexto al cabo de cierto tiempo.
Las notas de campo deben incluir descripciones de personas, acontecimientos y conversaciones,
tanto como las acciones, los sentimientos, intuiciones o hipótesis de trabajo del observador/a. La
secuencia y duración de los acontecimientos y conversaciones se registra con la mayor precisión
posible. La estructura del escenario se describe detalladamente. Regla: si no está escrito, no
sucedió nunca.

Sugerencias para recordar palabras y acciones

El observador y la observadora deben esforzarse por lograr un nivel de concentración suficiente


para recordar la mayor parte de lo que ven, oyen, sienten y piensan mientras están en el campo.
Aunque el recuerdo preciso parezca una tarea difícil no es imposible. Las siguientes técnicas
pueden ser útiles para recordar:

1. Prestar atención: Observar, escuchar, concentrarse.


2. Cambiar la lente del objetivo: Pasar de una visión amplia a otra de ángulo pequeño. En
los lugares ajetreados las personas que observan quedan en general abrumados por la
cantidad de conversaciones y actividades que tienen lugar en el mismo tiempo. Una
técnica consiste en enfocar a una persona, interacción o actividades específicas, mientras
mentalmente se bloquean todas las otras.
3. Retener en la memoria palabras o frases claves de cada conversación que permitan
recordar el significado de las observaciones.
4. Concentrarse en las observaciones primera y última de cada conversación. Si podemos
recordar como empezó una conversación con frecuencia podremos retenerla completa
hasta el final.
5. Después de haber visto u oído algo repetirlo en la mente. Tratar de visualizar la escena u
observación. También es una buena idea hacer una pausa, dejar de hablar y observar,
durante unos instantes en el curso de una sesión, para reproducir mentalmente lo que ya
ha sucedido.
6. Abandonar el escenario en cuanto se haya observado todo lo que se esté en condiciones
de recordar.
7. Tomar las notas tan pronto como resulte posible después de la observación. Cuanto más
tiempo transcurre entre la observación y el registro de los datos, más será lo que se
olvide.
8. Dibujar un diagrama del escenario y trazar sus movimientos en él. Esto constituye una
ayuda valiosa para recordar acontecimientos y personas. Del mismo modo, también
puede ser útil un diagrama de los lugares en que cada cual estaba sentado. Este diagrama
ayudará a recordar quien hizo cada cosa y a las personas menos notables.
9. Después de haber dibujado un diagrama y trazado los movimientos, apuntemos los
acontecimientos y conversaciones específicos que tuvieron lugar en cada punto antes de
que tomáramos nuestras notas de campo. Esto nos puede ayudar a aproximar la secuencia
en la que ocurrieron los acontecimientos. El boceto sólo necesita palabra, escenas y
acontecimientos claves que se destaquen en nuestra mente.
10. Si se da un retraso entre el momento de la observación y el registro de las notas de
campo, grabar un resumen o bosquejo de la observación.
11. Dirigirse a algún lugar con privacidad, como por ejemplo el carro para anotar palabras o
frases claves que más tarde los ayudarán a recordar acontecimientos producidos durante
una sesión de observación prolongada.

La forma de las notas

Las notas siempre deben permitir la recuperación fácil de los datos y codificar
(fragmentar) los temas. Algunas guías son:

1. Comenzar cada conjunto de notas con una carátula titulada donde se indique la fecha, las
horas y el lugar de la observación y el día y el momento en que se realizó el registro por
escrito.
2. Incluir el diagrama del escenario al principio de las notas. Trazar los desplazamientos del
observador e indicar en qué pagina de las notas se describe cada movimiento. Esto servirá
como referencia cómoda cuando se deseen controlar acontecimientos específicos.
3. Dejar márgenes suficientemente amplios para comentarios del observador y de otras
personas. Los márgenes amplios también permiten añadir puntos olvidados en un
momento posterior al de la redacción, y codificar las notas en la etapa del análisis de la
investigación.
4. Utilizar con frecuencia el punto y aparte para cada acontecimiento, pensamiento o tema.
Para el análisis se cortan literalmente las notas y se agrupan los fragmentos por temas.
5. Emplear comillas para registrar conversaciones tanto como sea posible. Lo importante es
aprehender el significado y la expresión aproximada del comentario. Se puede emplear
comillas dobles para diferenciar el recuerdo exacto, comillas simples para indicar una
menor precisión en la expresión, y omitir las comillas para indicar un recuerdo
razonablemente aproximado.
6. Usar seudónimos para los nombres de las personas y los lugares. Entre todo lo que
podemos ver u oír nunca se sabe qué es lo que puede resultar comprometido para las
personas que se está estudiando si alguna otra persona lo conoce.
7. Las notas deben conservarse por lo menos triplicadas. Al comenzar a analizar los datos,
se necesitarán una o más copias adicionales para codificar y cortar los fragmentos.

Comentarios del observador/a. Las notas de campo no deberán incluir sólo descripciones de lo
que ocurre en un escenario, sino también un registro de los sentimientos, interpretaciones,
intuiciones, preconceptos del investigador/a y áreas futuras de investigación. Estos comentarios
subjetivos deben distinguirse claramente de los datos descriptivos mediante el empleo de
paréntesis y las iniciales “C. O.” (“Comentarios del observador/a”). El observador debería
intentar identificarse con las informantes, a tener vicariamente sus experiencias y a compartir sus
sufrimientos y goces. Lo que nosotros/as sentimos puede ser lo que los informantes sienten o tal
vez sintieron en el pasado. Al registrar esas definiciones subjetivas como “Comentarios del
observador/a”, identificamos áreas para investigaciones y análisis futuros. En los “Comentarios
del observador/a”, el observador y observadora participante también registra ideas e
interpretaciones emergentes. Estos comentarios proporcionan un registro corriente de los intentos
del observador/a por entender el escenario y se pueden llegar a convertir en extremadamente
valiosos durante la fase de análisis de la investigación.

Descripciones de escenarios y actividades. En las notas de campo debe describirse el escenario


y las actividades de las personas. Hay que esforzarse en describir el escenario y las actividades
con detalles suficientes como para dar forma a una imagen mental del lugar y de lo que en él
ocurre. Al tomar las notas de campo se debe tener cuidado de emplear términos descriptivos y no
evaluativos. Hay que registrar las actividades en términos descriptivos. Las sensaciones,
evaluaciones e interpretaciones del investigador/a deben ser incluidas en los “comentarios del
observador/a”.

Descripción de personas. Del mismo modo que los escenarios y las actividades, las personas
pueden ser cuidadosamente descritas en las notas. Cada persona transmite cosas importantes
sobre sí misma y asume supuestos respecto de otros sobre la base del modo de vestir, de llevar el
cabello, de las joyas que se usen, de los accesorios, del comportamiento y del aspecto general. El
“manejo de la impresión” es la designación del modo en que las personas tratan de influir
activamente sobre lo que los otros piensan acerca de ellas, a través de sus aspectos y acciones.
Debemos percibir esos rasgos de la gente que proporcionan comprensión sobre cómo ella se ve a
sí misma y quieren ser vistas por los otros. Las personas igual que los escenarios deben ser
descritas en términos concretos y no evaluativos. Palabras como tímido/a, ostentoso/a, agresivo/a
son interpretativas y no descriptivas. Nuestras propias impresiones y supuestos sobre las
personas basados en su aspecto encuentran su lugar propio en los “Comentarios del
observador/a”. Es importante también el status de la persona, los signos que revelan el status son
sutiles y serán descubiertos sólo después de cierto tiempo pasado en el campo.
Registro de detalles accesorios del dialogo. Los gestos, las comunicaciones no verbales, el tono
de la voz y la velocidad del discurso de las personas ayudan a interpretar el significado de sus
palabras. Estos detalles accesorios del diálogo son importantes para comprender la interacción y
deben ser incluidos en las notas de campo. Se debe también tratar de aprehender ritmos y pautas
de elaboración cuando pueden ser significativos, es decir, cuando expresan algo importante sobre
la persona o sobre el modo en que es probable que los otros la perciban.

Registro de las propias observaciones y acciones. Registrar la propia conducta en el campo.


Además, registrar y analizar las propias acciones, ayuda a pasar revista a las tácticas de campo o
a desarrollar otras nuevas.

Registro de lo que no se comprende. Puede que oigamos frases o conversaciones que no se


entienden por completo. Puesto que tales comentarios son difíciles de recordar con precisión,
puede aparecer la tendencia a omitirlos en las notas. Sin embargo, incluso los comentarios más
incomprensibles pueden adquirir su sentido cuando se los considera a la luz de acontecimientos o
conversaciones ulteriores. No hay que tratar de reconstruir lo que se ha oído para que se lea
mejor.

Triangulación. Una forma de triangular la información de la observación es el registro por parte


de dos o tres miembros del equipo.

Control de las narraciones. Es importante someter a control las narraciones e historias de los y
las informantes. Que una persona lea las notas de campo es probablemente el mejor modo de
motivarse para tomar notas sección tras sección durante cierto tiempo. Los y las lectores pueden
también desempeñar temas emergentes que se le escapan al observador u observadora.

Análisis.
Si se han mantenido las notas con márgenes amplios, el análisis posterior es sencillo :
¾ Se realiza una lectura detenida del texto subrayando ideas relevantes a las preguntas que
motivaron la observación
¾ Se definen categorías conceptuales y se agrupan por bloques (p.e. un bloque de emociones
(y dentro del mismo alegría, tristeza, rabia...), un bloque de actitudes (p.e. apoyo, rechazo,
aislamiento....), un bloque de pautas (personales, familiares, generales...) etc (actores,
problemas, soluciones, interacciones, relaciones...).
¾ A cada párrafo o elemento subrayado se le asigna a una o más de las categorías
conceptuales.
¾ Se realiza un corta-y-pega (literal con fotocopias o más cómodamente con el editor de
textos), juntando todos los párrafos referidos a una determinada categoría conceptual.
¾ Se realiza un análisis global y una redacción de conjunto, separando hechos objetivos y
opiniones o valoraciones del observador.
¾ Por último corresponderá dar coherencia y estructura al documento global y elaborar la
síntesis y conclusiones.

Es importante poder incluir la devolución y el contraste en el documento, bien sea el


contraste con informadores-clave, bien con grupos focales.
Informantes-clave.

La observación puede complementarse con el establecimiento de relaciones estrechas con


una o dos personas respetadas y conocedoras de la situación. Los y las informantes claves
pueden “apadrinar” al investigador/a y ayudarle a entender el contexto y favorecer la confianza.
A los y las informantes hostiles hay que darles la oportunidad de que cambien de idea.
Continuar siendo amistoso/a con ellos sin empujar a la interacción. De la misma manera, los y
las informantes pueden tener intereses contrapuestos y se debe registrar de esa manera, no
intentar consensuar los intereses si no es el caso. Hay que recordar, en todo caso, que un
informante-clave suele compartir aquellos aspectos de su vida y su trabajo que se prestan a una
visión favorable, y ocultarán otros más desfavorables, o por lo menos los llevarán a un segundo
plano.

Normas para el trabajo con informantes clave.

1. Para bien o para mal, es el método más usado porque encaja con lo que es
más natural al ser humano: conversar y preguntar para intentar entender.
2. La clave es la selección de los informantes-clave. Personas que por su
posición o papel tengan una opinión desarrollada sobre un tema. Debe
incluirse informantes que representen todo el abanico de opciones
socialmente relevantes.
3. El principal riesgo de la técnica es desarrollar una relación especial con un
informante que por su calidez, tipo de información, accesibilidad u otras
razones se convierte en “el referente”. Se desarrolla una relación entre quien
gusta de ser escuchado y quien gusta de preguntar que lleva a tomar lo que
puedan ser sus opiniones personales como “la opinión” de todo el grupo o de
esa cultura sobre un determinado tema. La antropología está llena de
etnografías construidas por la fascinación mutua de un informante y un
antropólogo que luego han resultado visiones muy personales de la realidad.
4. La entrevista debe estar preparada y deben pensarse las preguntas con
antelación, aunque luego la entrevista se desarrolle como un diálogo y ni
siquiera aparezcan las preguntas junto al café. Análogamente, es bueno que
haya un sistema de registro, aunque con frecuencia esto perturba el clima de
diálogo y es mejor resumir en caliente nada más salir de la entrevista.
5. Hay un gran riesgo de que el entrevistador malinterprete las palabras del
informante. Por eso es importante parafrasear (es decir, repetir lo dicho por
el entrevistado para asegurarnos de que se entendió bien) y resumir y cotejar
las conclusiones finales.
6. Buscar del informante más sus experiencias de vida y la información directa,
que lo que pueda narrar sobre cosas que ha oído o lo que han hecho otros.
7. Recordar siempre el principio de que toda información debe ser triangulada
antes de ser dada por válida.

La metodología de informantes-clave es más una herramienta generadora de


hipótesis de trabajo que después sean contrastadas, que de respuesta a preguntas
por sí solo.
Guía para la realización de grupos focales desde un enfoque participativo.

Los grupos focales son un método cualitativo de recogida de información que puede
utilizarse de modo complementario o como alternativa a una encuesta poblacional con
entrevistas u otros métodos cualitativos de recogida de información (p.e. informantes-clave). Un
grupo focal puede darse tanto cuando se convoca a un determinado colectivo con un criterio
consensuado de selección de los participantes – grupo focal formal-, como cuando, en un
momento determinado, es posible establecer una conversación entre un grupo de personas en un
lugar casual sin ningún criterio de selección preestablecido –grupo focal informal-.
Si bien los grupos focales son muy adecuados para recabar información en poco tiempo,
cabe recordar que tienen también importantes limitaciones:
Ventajas Inconvenientes
- Eficacia: mucha información en poco - Limitación: los resultados sólo pueden
tiempo. generalizarse a ese colectivo, no a toda
- Comprensibilidad: permite acceder a la comunidad.
poblaciones con bajo nivel de estudios - Presión de grupo: tendencia a la
- Adaptabilidad: permite trabajar con conformidad de los miembros
personas con diferencias culturales especialmente en sociedades
importantes y acostumbra a ser colectivistas.
congruente con la dinámica de la - Manipulabilidad: Posibilidades de
comunidad. conducir al grupo en una determinada
- Sencillez: pueden ser desarrollados por dirección por un moderador muy
personal no cualificado con un adecuado predispuesto a una opción.
entrenamiento. - Límites y finalidad: En ciertas
- Profundidad: permite aclarar in situ situaciones puede derivar hacia un
cuestiones confusas. grupo emocional, y escapar al control
de un facilitador poco experimentado.

El desarrollo del grupo focal no debería convertirse en una entrevista colectiva en la que
las personas van dando su opinión por turno, sino tener una estructura de debate. Para ello, lo
mejor es focalizar en uno o dos temas como máximo. Además, es fundamental, por un lado, que
los participantes tengan interés en el tema y que deseen participar de la discusión y que tengan
un nivel de experiencia similar respecto al tema. Por ejemplo, juntar a madres con sus hijas
adolescentes puede en ocasiones ser un error. O hablar de un tema muy importante para el
equipo pero que es considerado irrelevante por la comunidad requerirá de un trabajo previo de
sensibilización.
Formación del equipo.

Si se va a capacitar a personas para que realicen grupos focales y, posteriormente, compartir la


información que surja, debería realizarse un grupo previamente y hacer ejercicios de rol sobre
conducción de grupo, buscando las personas que tengan las siguientes características:

ƒ Capacidad de escucha: que hable poco, deje hablar a las personas, resuma lo que dicen si no
ha quedado claro, haga de intermediario entre quien habla y el resto del grupo.
ƒ Sepa resumir: para ello es útil que después del grupo “de ensayo” se le pida a cada persona
que haga un resumen de las conclusiones, para observar su capacidad de análisis y síntesis.
ƒ Capacidad de dirección: dar la palabra, agradecer las intervenciones, controlar a quienes
acaparan la palabra o actúan de “expertos” de manera indirecta, sin enfrentarse a ellos,
capacidad para animar a intervenir a los más tímidos.
ƒ Capte bien la idea de conjunto: tener claro para qué se realizan los grupos, el objetivo
último, y por tanto cual es la información realmente relevante.

Técnica. Diez pasos para llevar a cabo grupos focales con metodologías participativas

1. Definir el objetivo. Hay que centrarse en un único objetivo y tener en cuenta que de su adecuada
definición dependerá todo el proceso posterior.
2. Recolectar información. ¿Han preguntado otras personas cuestiones similares recientemente?
¿Existe información disponible que podemos utilizar sin duplicar esfuerzos ni cansar a la gente con
las mismas preguntas?
3. Preparar entre dos y diez preguntas, teniendo en cuenta que suele poder discutirse, por lo general,
las primeras cuatro o cinco. Es preferible empezar con una pregunta general, para luego pasar a
preguntas abiertas, pero más centradas en el objetivo. Por ejemplo :

Preguntas demasiado ambiguas Preguntas más dirigidas al foco


- ¿Cómo creen que está la gente? - Parece que a algunas personas se las ve bastante afectadas
por lo que pasó. ¿Creen que son muchas o pocas?
- ¿Cómo se sabe las que están mal y que quizá necesitan
ayuda?

- ¿Qué piensan de la - ¿Les parece que las personas tienen oportunidad de


organización? participar?
- - ¿Cómo le parece que se podría mejorar ese punto?

- ¿Qué va a pasar con las casas? - ¿Creen que es mejor aguantar aquí o que cuanto antes se
pueda regresar mejor?

Algunas ideas útiles para formular preguntas son:


ƒ Evitar preguntas que se responden con un si o un no, porque no generarán debate. A no
ser que se sospechen problemas relacionados con (a) manejo del poder por algunos
miembros del grupo sobre otros (b) traducción o mediación cultural inadecuada, con
excesiva interferencia en la comunicación. En ambos casos, un “si / no” inicial por cada
participante en el grupo focal, con preguntas aclaratorias posteriores, resultará más fiable y
clarificador.
ƒ Preguntar por la opinión concreta de los participantes en el grupo, en lugar de pedirles
qué les parece que piensa “la mayoría” de la comunidad.
ƒ Evitar preguntas que prejuzgan una postura como “¿Por qué la gente está en contra del
Ejército? en lugar de preguntar “¿Cómo ven ustedes el trabajo del Ejército?”
ƒ Evitar preguntas que puedan resultar culpabilizadoras o embarazosas para ser contestadas
en público.
ƒ Utilizar un lenguaje sencillo y frases lo más cortas posible.

4. Definir los actores. Para un buen diagnóstico del problema habría que hablar con cuantos
más actores posibles. Es preferible escoger bien todos los sectores e intentar hablar en
profundidad con al menos algún representante de cada uno, que realizar muchos grupos, pero
de sólo uno o dos de los sectores. Por ejemplo, si queremos saber por qué las personas
vuelven a sus casas en ruinas, pese al riesgo que esto supone, serían posibles actores:
personas que han regresado precipitadamente, personas que prefieren esperar y autoridades
responsables (para los dos primeros es posible hacer grupos y para el tercero una entrevista
en profundidad).

En un análisis con grupos focales sobre el ausentismo escolar en una comunidad de población
desplazada de la periferia de Lima, se planteó inicialmente realizar dos grupos focales con 12 mujeres con
sus hijos cada una, en la antesala del consultorio médico del barrio, mientras esperaban a ser atendidas o a
que atendieran a sus hijos.
Los grupos ofrecieron, por este orden, las siguientes explicaciones, como razones para el
absentismo: ausencia de transporte, peligrosidad para los niños al volver a casa cuando se ha puesto el
sol, mala conducta de los niños que no obedecen y no van, desidia de los maestros que no saben qué niños
tienen en clase, costo de los materiales escolares, deseo del padre de que el hijo trabaje con él. No se
aportó ninguna razón por la que sí había bastantes niños que iban a clase. El facilitador observó que casi
todas las madres callaban y sólo unas pocas hablaban.
En un segundo análisis se optó por hacer, en la misma sala de espera y complementar en
entrevistas puerta a puerta, 4 grupos focales de 4 a 5 personas cada uno, agrupados por su posición respecto
al problema. El número total de entrevistados fue el mismo, pero agrupados según las variables clave: a
favor / en contra ; madres / niños.

Grupo focal 1. Grupo focal 2.


5 madres de niños que no acuden 4 madres de niños que acuden
Grupo focal 3 Grupo focal 4
3 niños que no acuden 4 niños que acuden

Se intentó, sin éxito, un grupo focal con padres, que no acudieron a la cita. Se complementó con
entrevistas a informadores clave (organizaciones que trabajan con niños en la zona, maestros y
autoridades).

Además de las razones antes citadas se obtuvo (entre muchas otras cosas) que:
Grupo 2

(a) Hay madres que se organizan para turnarse y acompañar grupos de 5 a 10 niños al colegio y varios padres
hacen “rondas” para proteger el camino de acceso al barrio (unas escaleras hechas en la misma ladera de la
montaña) a la hora en que los niños volvían
(b) No se sabe de ningún caso real de robo o atraco a niños en el barrio.
(c) Hay fábricas que pagan por trabajo a domicilio a las “madres”. Los hijos se quedan para hacer ellos el trabajo
como si fueran las madres.
(d) Hay una organización que ayuda económicamente a los padres que tienen a sus hijos trabajando con ellos,
para que el niño pueda ir unas horas al colegio.
(e) Los niños deberían ir obligatoriamente al colegio, pero las autoridades no tienen ningún sistema de control, ni
toman ninguna medida con los padres que no cumplen.

Grupo 3 y 4

(a) Algunos maestros expulsan de clase a los niños que presentan mala conducta, pese a las prohibiciones de las
autoridades escolares
(b) Otros maestros, en cambio, pasan a buscar a los niños por sus casas con sus vehículos particulares. Hay
mucho enfrentamiento entre “maestros jóvenes” y “mayores”
(c) Existe en el barrio un alto consumo de inhalantes por parte de grupos de niños del que las madres
aparentemente no sabían nada.

En base a esta información se pudo organizar una entrevista comunitaria que sentara las bases de
un documento de exigencias a las autoridades educativas y un plan de acción vecinal contra el hecho de
que algunos niños no fueran a clase.

5. Considerar los recursos. Es posible que un objetivo excesivamente ambicioso signifique, un


retraso en el desarrollo del programa. Por eso hay que valorar la posibilidad de pedir apoyo y
capacitar a personas que nos ayuden, o limitar los objetivos.
Al realizar un análisis sobre la actitud de adolescentes de barrios marginales de una ciudad de
Ecuador sobre las relaciones sexuales, el embarazo y el SIDA, se propuso hacer al menos un grupo focal por
barrio, en algunos grupos separar hombres y mujeres y en otros hacerlos mixtos, y hacer al menos tres grupos
de edades. El resultado final eran 48 grupos focales, lo que significaba un plan de trabajo de alrededor de 9
meses. Hacer un muestreo entre los barrios y disminuir a 2 los grupos de edad, disminuyó los grupos a 14. La
colaboración de tres personas de una organización de mujeres del barrio permitió hacer todos los grupos
focales en un fin de semana.

6. Quienes participan. Puede variar mucho según el tema y el contexto cultural, pero suele
considerarse adecuado de 4 a 12 personas (8 de media), aunque en ocasiones puede trabajarse
con grupos bastante más grandes.

7. Quienes moderan. Se recomienda dos personas, una que coordina la actividad y la otra que
toma notas.

8. Duración. Suele ser recomendable una hora y media (dos horas como máximo), para evitar
el cansancio.

9. Desarrollo y fases del grupo focal

1. Introducción. El moderador recuerda el objetivo de la reunión y explica que se pretenden


resolver algunas dudas respecto a una determinada cuestión o conocer algunos aspectos
de lo que piensa el grupo para poder enfocar mejor el trabajo. Se explica la duración
prevista y las consignas: (a) participación, es decir, que todas las personas participen por
igual, ya que todas tienen conocimiento y su palabra es importante. Remarcar también la
(b) confidencialidad el moderador se compromete a que nada de lo conversado va a salir
del grupo, y pide a los demás lo mismo.
2. Ronda de presentaciones de las personas participantes.
3. Pregunta de apertura. Generalmente bastante abierta y para permitir ver por dónde va el
grupo de manera espontánea. Por ejemplo, “la idea que nos trae aquí es hablar de cómo
se está organizando el tema de la seguridad en las familias... No sé si alguna persona
querría empezar...”
4. Preguntas de focalización, siguiendo el guión previsto, pero adaptándolo a lo que se ha
detectado en la pregunta de apertura o las posteriores.
5. Explicitar de las opiniones recogidas. Este punto es clave y es uno de los que distingue
un grupo focal de otras técnicas. El facilitador introduce comentarios de resumen del tipo
“Parece que la mayoría opina que... ¿Es así?” o “Parece entonces que exceptuando a la
gente de ... el resto se inclina más porque se haga... “
6. Explicitar los acuerdos. El resumen que creo que se puede hacer de lo que ustedes opinan
sería: (leer el párrafo exacto). “¿Podemos tomar esto como un acuerdo?. ¿Refleja eso su
opinión o ustedes lo dirían de otro modo? ¿Me he dejado algo? ¿Algún matiz?”. En suma,
el grupo da acuerdo a aquello que el facilitador va a considerar “conclusiones” del grupo
focal, validándolo como trabajo propio y no como conclusiones elaboradas
subjetivamente por el facilitador.
7. Cierre. Hacer, si se considera necesario, un resumen final del trabajo realizado y las
conclusiones. Agradecer la participación y dejar la posibilidad de volver a conversar
dentro de un tiempo.

Análisis de la información. Al tomar notas es bueno hacerlo dejando un margen amplio a uno
de los lados de la hoja para introducir, posteriormente, un sistema de títulos que identifique los
distintos temas (por ejemplo, ideas sobre la muerte, organización, rumores, conflictos...). A la
hora de elaborar el informe se tratará de poner en común las notas de todos los grupos focales
realizados siguiendo estos pasos:

ƒ Ordenar con una secuencia lógica todos los títulos identificadores.


ƒ Resumir (incluyendo en lo posible citas textuales) las opiniones que han aparecido
respecto a cada uno de estos identificadores, señalando explícitamente cuando son
opiniones aisladas o cuando se ha llegado a un acuerdo.
ƒ Hacer una síntesis global centrada, primero, en el objetivo y las preguntas que nos
marcamos y recogiendo, después, otras ideas surgidas en los grupos.
ƒ Interpretar a la luz de otros datos, sólo si es imprescindible, y con mucha cautela.
ƒ Redactar conclusiones finales y sugerencias de acción, si procede. En algunos casos es
posible realizar aproximaciones cuantitativas (por ejemplo, cuántas personas en cada
grupo se decantan por una determinada opción...)

Devolución. Una vez puesta en común la información


con la de otros grupos focales, analizados los
resultados y realizado un informe es necesario,
siguiendo los principios básicos de la investigación-
acción, planificar cómo se va a devolver toda esta
información a la comunidad para que, a parte de una
fuente de conocimiento para el equipo, sirva también
como herramienta para el fortalecimiento, la
planificación y la toma de decisiones por parte de los
grupos o de la comunidad.

¿Qué diferencia a un grupo focal de carácter


participativo y a un grupo focal con fines de
investigación?

La sociología y la psicología social han


utilizado siempre los grupos focales como una de sus
herramientas principales. Las metodologías habituales
en un contexto de investigación académica tienen que
ver con, si la gente lo autoriza, grabar la sesión, para
posteriormente transcribirla de manera íntegra y, si es
posible, analizarla con un software cualitativo de
análisis de la información. Desde un punto de vista de
investigación-acción, esta metodología tiene un grave
problema: el equipo “se lleva” la información y el
proceso de devolución no existe, o si existe es difícil y
complejo, a no ser que el grupo focal se
correspondiera con algún grupo natural.
En la investigación-acción, como veíamos en
los puntos (5) y (6) de la metodología, se explicitan las opiniones y acuerdos in-situ. Es decir,
todos los miembros del grupo focal tienen claro al acabar el mismo cuales han sido las
conclusiones a las que se ha llegado, y la información pertenece a todos. Esta técnica, así
empleada:
• aumenta extraordinariamente la fiabilidad de los resultados. Al ser los propios
participantes los que expresan acuerdo o desacuerdo y “autorizan” el redactado final de
las conclusiones, disminuye la posibilidad de sesgos de interpretación por parte del
equipo investigador.
• El grupo focal se convierte en un camino de ida y vuelta que permite a las personas pensarse
a sí mismas y decidir.
Técnicas para la búsqueda de relaciones causales
Árbol de problemas / Espina de pescado o similares.

Existen muchas variantes, pero en suma consiste en una técnica de facilitación grupal del
análisis de las causas de un problema. El diferente nombre alude a la forma en que se colocan
gráficamente los elementos de análisis en la pizarra o papelógrafo.

Los pasos de la técnica consisten en:

1. Colocar en un espacio central el problema a analizar. A continuación el grupo propone,


en forma de tormenta de ideas o en forma razonada, posibles causas del mismo. Estas se
colocan como ramas del tronco o como espinas de la raspa de pescado.
2. Una vez completado este primer nivel de análisis, se van buscando para cada una de las
causas detalladas en el gráfico cuales pueden ser a su vez sus causas (causas de segundo
orden), con lo que se empiezan a observar elementos comunes y factores que influyen en
el problema por varias vías. Aunque el análisis puede seguirse más allá, generalmente el
dibujo se complica en exceso o aparecen causas demasiado “macro” y lejanas a las
posibilidades de intervención del equipo o la comunidad.
3. A continuación se sintetizan y ordenan las causas y se intenta formular en un esquema
lógico, permitiendo avanzar hacia otras técnicas de planificación.
Guía para realización de un análisis DAFO

El análisis DAFO (siglas de Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades 15 ) es


quizás la técnica más conocida y popular de diagnóstico de organizaciones. Se utiliza con
diferentes variaciones, en multitud de ámbitos, y permite diagnosticar y dibujar estrategias de
futuro a partir de la discusión participativa de un grupo que lleva a cabo un proceso estructurado
de diagnóstico de la situación. Como tal, es una técnica adecuada para el seguimiento y la
evaluación de programas. Permite identificar, para cada una de las temáticas abordadas, los
puntos débiles y fuertes, y plasmarlos en un cuadro que contemple la interrelación de los factores
internos y externos.

Técnica

Se trata de que las personas que participan en el diagnóstico rellenen los cuatro espacios
del cuadrado con su percepción de la situación que se plantea al grupo.

Puntos débiles o negativos Puntos fuertes o positivos

DEBILIDADES FORTALEZAS
Factores a corregir a potenciar
internos
- Funcionamiento: ¿dónde nos - ¿Qué tenemos?
(factores equivocamos? - Nuestra historia y experiencia:
dependientes del - Equipo: capacidades a mejorar, ¿qué aprendizajes positivos.
grupo o la habilidades de grupo no están bien
organización)
- Equipo : capacidades actuales y
cubiertas? ¿hay dificultades de relación? capacidades no aprovechadas de los
- Medios: ¿son adecuados a la tarea? recursos humanos
- Información: ¿cómo se gestiona? - Clima : espíritu de equipo
¿cómo se difunde? - Estrategia: línea de trabajo y
- Toma de decisiones: ¿qué método? compromiso con los objetivos que
¿cómo se siguen? buscamos
- Medios: Análisis de la infraestructura.
- Contactos, relaciones, amigos.

AMENAZAS OPORTUNIDADES
Factores a afrontar a explotar
externos
- ¿Qué deseamos que no ocurra? ¿Cuales - ¿Qué nos gustaría que ocurriera para
(factores son los escenarios negativos que se mejorar la viabilidad? ¿Cuál es el mejor
dependientes del pueden dar? paisaje imaginable?
contexto y de las
circunstancias) - ¿Qué circunstancias bloquearían el - ¿Qué tendría que suceder para ello?
avance?

15
En algunos países se cambia el orden y se denomina análisis FODA.
El grupo puede trabajar con un guión de aspectos a considerar (como los ejemplos
recogidos en la tabla u otros, según cual sea el objetivo del DAFO) o trabajar de modo abierto,
dejando que salgan espontáneamente las Debilidades, Fortalezas, Amenazas y Oportunidades,
para, posteriormente, que una o dos personas del grupo actuando como facilitadores, intenten
ordenar y dar coherencia al conjunto y proponer los temas que el grupo debe pasar a debatir.
Otra posibilidad es trabajar en grupos grandes o dividirse en subgrupos de 2 ó 3 personas y que
cada subgrupo trabaje un cuadrante y comparta después sus resultados al grupo grande para que
el resto, sobre esta base, aporten nuevas ideas y debatan.

Doble tormenta de ideas. Una variante muy ágil y dinámica del análisis DAFO consiste en
realizar dos tormentas de ideas consecutivas. La primera arranca, como estímulo, con una
palabra problema (por ejemplo, “información”) recogiendo los preconceptos que el grupo pueda
tener alrededor de este tema. Las ideas surgidas se ordenan por parte del facilitador en una matriz
de análisis DAFO. La segunda tormenta de ideas plantea, a continuación, la relación del grupo
con ese problema en el pasado, el presente y el futuro (por ejemplo, con las preguntas
generadoras: ¿qué hemos hecho en el tema del manejo de información? / ¿Qué estamos
haciendo…? / ¿Qué podemos hacer al respecto….?). Las ideas que aparecen son también
reflejadas en una matriz de análisis DAFO. A continuación el grupo intenta poner en relación las
dos matrices: los preconceptos de la primera tormenta de ideas con las ideas surgidas de la
segunda.

Planificación. Si se trabaja en subgrupos heterogéneos, el análisis DAFO es una técnica con un


significativo valor de consenso intergrupal; si se trabaja en grupos homogéneos puede ofrecer
una visión sintética de los diferentes puntos de vista existentes con vistas, por ejemplo, a
contraponerlos posteriormente en una sesión plenaria. En cualquiera de los casos, la
interpretación de la matriz se puede completar haciendo un segundo cuadro donde se proyecte en
un eje el autodiagnóstico (debilidades y fortalezas) y en otro el análisis del entorno (amenazas y
oportunidades). El análisis conjunto de las Debilidades y las Amenazas ayudará a definir las
Estrategias de Supervivencia, las Oportunidades y las Debilidades, definen las Estrategias de
Reorientación del trabajo actual, el análisis conjunto de las Amenazas y las Fortalezas permite
diseñar las Estrategias Defensivas y las Oportunidades y las Fortalezas las Estrategias de
Potenciación:

AMENAZAS OPORTUNIDADES
Estrategias de supervivencia Estrategias de reorientación
(tareas de planificación estratégica (tareas de planificación estratégica cómo
DEBILIDADES sobre cómo afrontar las amenazas aprovechar las oportunidades teniendo en
teniendo presente las debilidades cuentas las carencias existentes)
internas).

Ej: La debilidad de una organización Ej: con la misma debilidad de


está en la financiación y se acerca la financiación, se pueden pensar
amenaza de reducción de estrategias para buscar nuevas fuentes
subvenciones: habrá que replantear el de ingresos.
coste de las actividades
Estrategias defensivas Estrategias de potenciación
(tareas de planificación estratégica (tareas de planificación estratégica sobre
FORTALEZAS sobre cómo aprovechar las fortalezas cómo aprovechar las oportunidades
para enfrentar las amenazas) utilizando las fortalezas del grupo).
Ej: ante un conflicto inminente, la Ej: aprovechar la fortaleza en términos
organización decide potenciar su de credibilidad de una organización
punto fuerte, que es la capacidad de para hacer de puente entre varios
convocatoria. actores.

Entre las principales ventajas del análisis DAFO está su transparencia: es un proceso
llevado por el grupo, en el que los facilitadores tienen un papel limitado de toma de notas en
hojas o papelógrafos y proponer resúmenes o nuevos puntos de discusión. A diferencia de otras
metodologías –como las encuestas o cuestionarios o los grupos focales- no hay un proceso de
elaboración opaco al grupo. Esto es fundamental en términos de investigación-acción, donde se
pretende, como se verá en la siguiente ficha, que los instrumentos de trabajo hagan una función
de espejo en la que la organización, el grupo o la comunidad puedan verse reflejados para decidir
vías futuras de acción individual o grupal.

Aplicación del análisis DAFO en la evaluación de programas psicosociales.

Existen numerosas posibilidades. Las dos más habituales, el seguimiento del análisis pre-
programa (funcionalmente más útil para el grupo), y el análisis pre-post (metodológicamente
preferible a efectos de evaluación de programas):

1. Seguimiento del análisis pre-programa. El grupo discute, a partir de la matriz del


DAFO que se realizó al inicio del programa, actualizando el diagnóstico, evaluando: (a)
situación actual (aumento/disminución del elemento del DAFO que se discute) (b) grado
de cumplimiento de los acuerdos alcanzados en el plan de trabajo. En función de esto
puede realizarse un análisis cualitativo y hasta cierto punto cuantitativo del programa.

2. Análisis pre-post. Se realiza el DAFO partiendo de cero que el evaluador comparará con
el original. El documento de comparación es posteriormente discutido y cotejado con
todo el grupo.
Uso del mapa de redes en evaluación de programas.

El mapa de redes – denominada en ocasiones sociograma - sirve para visualizar a las


personas, grupos, entidades u organizaciones (los “actores”) que pueden ejercer algún tipo de
influencia o cuya opinión es relevante frente a un determinado problema o colectivo e intentar
dibujar y cuantificar las relaciones sociales que giran alrededor del mismo.
Técnica
Generalmente, cuando se trata de realizar mapas de redes de sistemas sencillos (por
ejemplo, las personas que trabajan en programas de carácter psicosocial relacionados con un
determinado problema en una zona geográfica) se utiliza el método de detección de actores por
bola de nieve, es decir, que unos contactos llevan a otros y estos a su vez a otros.
En los sistemas complejos (por ejemplo, un barrio urbano) los pasos a seguir serían
fundamentalmente los mismos, aunque habría que establecer grandes categorías de actores
implicados y de cada una de ellas, hacer una selección de los interlocutores clave para programar
una ronda de entrevistas o de pequeños grupos focales. Con el conjunto de los resultados se
empezaría a dibujar la red de contactos.

Cuando no se sabe muy bien cómo empezar a colocar los núcleos de la red, puede
utilizarse un hecho relevante en la historia de la comunidad o la organización (por ejemplo, el
desplazamiento por la violencia política) y ver quien y cómo se fueron posicionando los
diferentes actores frente a esa situación, y a partir de ahí ampliar progresivamente el mapa.

Los pasos serian:

1. Confeccionar el mapa de actores.

Elaborar el Mapa de Actores significa construir un inventario de todas aquellas personas,


grupos o agentes sociales implicados de manera directa o indirecta con el proceso comunitario
que se está trabajando, y con capacidad potencial para influir en él.

El siguiente dibujo es una representación gráfica de los diferentes actores que podrían estar
implicados en una exhumación, partiendo del núcleo central (familiares denunciantes) y hasta
llegar a la periferia (agentes externos a la comunidad con influencia potencial).

El gráfico anexo es la resultante de un día de discusión colectiva de equipo para hacer el


mapa inicial de actores y la hipótesis de mapa de redes con la información disponible del
proyecto de niños de la calle.
Familiares
denunciante
s
Conjunto de
familiares

No
Familiares

Agentes
Organizado
s
Agentes
Externos

o Iglesia o Ministerio
católica Público
o Iglesia
evangélica o Grupos de
o Autoridades DDHH
o Agentes o Antropólogos
sociales o Equipo
• Asoc.
Culturales
• P. políticos
• Asoc.
Comerciantes

2. Escoger tres o cuatro hilos o cabezas de análisis desde los que iniciar el proceso, que
pertenezcan a ámbitos diferentes (por ejemplo, un líder vecinal, un dirigente de una ONG
muy activa, un político local, etc.) y preparar algunas preguntas básicas, siguiendo las pautas
habituales para el trabajo con informantes clave:

ƒ ¿Qué hace usted, la gente y/o la organización con la que usted trabaja?
ƒ ¿Con quien se coordinan?
ƒ ¿Qué otras personas o grupos conocen que trabajan en cuestiones similares?

3. Hacer una lista de los nuevos contactos obtenidos, seleccionar aquellos potencialmente más
relevantes y concertar nuevas entrevistas, que generarán a su vez nuevos contactos. Algunos
de estos actores serán nuevos y otros remitirán a personas, instituciones u organizaciones que
ya hemos visitado o de las que ya sabemos. A esto es a lo que se llama seguir un método en
“bola de nieve”.

4. Con el conjunto de la información establecer el mapa de la red social: quien hace qué, quien
se relaciona con quien, cómo y por qué. De una misma comunidad pueden, en ocasiones,
elaborarse diferentes mapas de redes no necesariamente coincidentes, según cuales sean los
objetivos de la elaboración del mapa, aunque en una exploración inicial lo lógico es mantener
un criterio abierto y no restringir excesivamente el criterio de contacto entre los miembros
A la hora de clasificar las relaciones del mapa de redes como fuertes o débiles (parecido a
lo que comúnmente llamamos amigos, compañeros y conocidos), hay que tener en cuenta tres
criterios:
ƒ Regularidad y tiempo dedicado a los contactos
ƒ Asumir o no responsabilidades conjuntas
ƒ Implicación emocional de los contactos.

4. El análisis de red puede incluirse como una actividad de investigación-acción participativa


con el grupo de personas con el que se está trabajando (una organización a la que se brinda
apoyo, un grupo de voluntarios que busca organizarse, etc...). La base es el trabajo conjunto
interactivo para la elaboración del mapa, y que éste sirva de proceso de reflexión de grupo.
En este caso puede emplearse cualquier técnica habitual (lluvia de ideas, discusión en
pequeño grupo y plenaria u otra) para que la gente que participa elabore el mapa a partir de
su conocimiento de la realidad. A partir de una lista de áreas puede iniciarse la reflexión:

¿Quién trabaja estos temas? ¿Qué sabemos de ellos? ¿Qué hacen? ¿Con quien se relacionan?
¿Por qué? ¿Cómo nos parece que es esa relación? ¿Con quienes no hay vínculos y son una
parte importante del proceso? ¿Por qué? ¿Debe hacerse algo? ¿Con quien no se han
aprovechado las potencialidades que tendría trabajar juntos? ¿Qué nos sugiere de cara al
trabajo comunitario? etc.

Un esquema con pocas relaciones fuertes suele ser frágil (muy endogámico), mientras que
uno con muchas relaciones aparentemente débiles puede significar, en cambio, la existencia
de una gran cantidad de potenciales apoyos no usados regularmente, hipotéticamente útiles
para el apoyo y la organización en crisis.

5. En la representación gráfica que facilita el análisis y la devolución de la información puede


elegirse un color o un símbolo a algunos de los siguientes elementos:

ƒ Núcleos medulares (zonas de alta densidad de coordinación interna).


ƒ Núcleos de poder o de reparto. Personas o grupos clave por su potencial de convocatoria
o aglutinador.
ƒ Zonas de relaciones difusas, es decir, grupos de gente o de instituciones no organizadas,
pero potencialmente interesadas.
ƒ Enlaces débiles. Contactos que no se activan regularmente, pero que en casos de
necesidad pueden ser extremadamente importantes.
ƒ Elementos aislados.
ƒ Zonas de fricción (áreas de división).

Los siguientes dos gráficos representan el mapa de redes en el caso del programa de
evaluación de impacto psicosocial de exhumaciones. El primero es el apoyo expresado, es decir,
el resultado de preguntar a cada uno de los actores su posición respecto a la exhumación y un
eventual apoyo a la misma. El segundo es el apoyo percibido, resultado de preguntar a los
propios familiares promotores del proceso el apoyo que están recibiendo de cada actor. En rojo
apoyos. En azul rechazo. Línea continua o punteada según intensidad del mismo.
Alcalde
ADIVIMA ECAP
MINUGUA

Procuraduría CONSEJO DE ANCIANOS


DDHH BELEJEE´B Q´IIJ

FAFG Iglesia Católica


Juzgado
Iglesia Evangélica

Ministerio
Público Dispensario Monjas

Asociación IXO´Q
Grupo de Familiares AJAW
Policía promotores COCODES
Nacional Civil
Oficina Municipal
Mujer
Asociación para el Cámara de Comercio
Desarrollo Juvenil
ALII-ALAA
ASECSA
Radio San Proyecto
Pablo Reconciliación Bufete Popular Museo Comunitario
CALDH Rabinal Achí

Instituciones legalmente implicadas.

Instituciones sociales directamente vinculadas al proceso de exhumación


MINUGUA : Misión de Naciones Unidas para Guatemala. FAFG : Fundación de antropología forense de Guatemala. ECAP. Equipo Comunitario y de
Instituciones sociales Acción Psicosocial, CALDH. Centro de Asesoría Legal en DDHH, ASECSA: Asociación de Servicios Comunitarios. COCODES : Comités
Comunitarios de Desarrollo. ADIVIMA: Asociación de Víctimas
Alcalde
ADIVIMA ECAP MINUGUA

Procuraduría
DDHH CONSEJO DE ANCIANOS
FAFG BELEJEE´B Q´IIJ

Juzgado Iglesia Católica

Iglesia Evangélica
Ministerio
Público
Dispensario Monjas

COCODES
Policía
Nacional Civil Grupo de Familiares
promotores Oficina Municipal
Mujer
Cámara de Comercio
Asociación para el
Desarrollo Juvenil
Asociación IXO´Q
ALII-ALAA
AJAW
Radio San Proyecto ASECSA
Pablo Reconciliación
Bufete Popular Museo Comunitario
CALDH Rabinal Achí
Instituciones legalmente implicadas

Instituciones sociales directamente vinculadas al proceso de exhumación

Instituciones sociales MINUGUA : Misión de Naciones Unidas para Guatemala. FAFG : Fundación de antropología forense de Guatemala. ECAP. Equipo Comunitario y de
Acción Psicosocial, CALDH. Centro de Asesoría Legal en DDHH, ASECSA: Asociación de Servicios Comunitarios. COCODES : Comités
Comunitarios de Desarrollo. ADIVIMA: Asociación de Víctimas
Un análisis somero de los dos gráficos anteriores da mucha información relevante :

Apoyo expresado.

‰ El municipio tiene una red asociativa importante, con grupos organizados de carácter social,
legal, religioso o comercial. Estos están coordinados entre sí en función de sus afinidades. La red
de densidad media de relaciones entre instituciones sociales que puede observarse en la zona
inferior derecha del cuadro así lo indica.
‰ La Iglesia Católica y el Bufete Popular son las dos instituciones sociales con mayor número
de coordinaciones y contactos.
‰ Esta amplia red se percibe a si misma como expresando apoyo a los familiares durante la
exhumación. El discurso en TODOS los actores sociales, exceptuando la iglesia evangélica, es
de decidido apoyo a la exhumación.
‰ En el polo superior izquierdo están las Instituciones legalmente implicadas en el proceso.
Tienen coordinaciones moderadas entre ellos y escasas con los familiares y actores sociales.

Apoyo percibido por los familiares.

El panorama cambia radicalmente en el segundo mapa de redes que refleja el apoyo que
realmente perciben los familiares:

‰ Prácticamente nulo apoyo de los actores sociales. Inexistente, en la realidad, desde las dos
instituciones con mayor trabajo de redes: la Iglesia Católica, que solo apoya de modo simbólico,
y el Bufete Popular, también de modo simbólico, puesto que no quiere entrar en conflicto de
competencias con ADIVIMA, que tiene sus propios abogados. Prácticamente nulo también del
resto de actores sociales, exceptuando la asociación juvenil Alii-Alaa, con un apoyo real, y el
Museo Comunitario, también con gestos simbólicos. Especialmente importante la ausencia del
alcalde.
‰ El Consejo de Ancianos, institución clave, no tiene ningún protagonismo, y la Iglesia
Evangélica se opone al proceso de exhumaciones.

En suma:

‰ Existe un núcleo de apoyo procedente de ADIVIMA (Asociación de víctimas), FAFG


(Equipo de antropólogos forenses) y ECAP (Equipo de acompañamiento psicosocial)
‰ Escaso o nulo apoyo de las instituciones legalmente responsables del proceso (Juzgado de
Paz, Ministerio Publico, Procuraduría de Derechos Humanos), que negligen en sus funciones, no
actuando de oficio, informan poco o nada a los familiares y tienen una presencia nula o
simbólica durante la exhumación.
‰ Escasa o nula presencia de instituciones sociales y de la vida del municipio. Por unas razones
u otras todas expresan su decidido apoyo verbal, pero en la práctica no han estado en el proceso
ni se ha traducido en acciones que hayan podido ser percibidas como “acompañamiento” desde
los familiares.
‰ Pocas alianzas entre sectores. Incapacidad para lograr el apoyo y la complicidad de sectores
“afines” (grupos de DDHH, asociaciones vecinales).
Uso del mapa de redes en la evaluación de programas. Los mapas de redes pueden
cuantificarse. Es posible obtener múltiples parámetros de monitorización.

En el caso anterior, por ejemplo, del apoyo expresado versus percibido, un primer análisis
podría ser :

23 actores.
Relaciones de apoyo o de coordinación: 51
Tasa media de contactos: 2.2 contactos por institución
Contactos en relación con el grupo de familiares, desde las instituciones: 18 (35%)
Contactos en relación con el grupo de familiares, desde la percepción de los familiares: 12 (23%)

Instituciones que expresan apoyo a la exhumación: 19 (82%). Instituciones percibidas por los
familiares como apoyándoles: 12 (52%) [4 (17%) un apoyo decidido y 8 (34%) un apoyo
formal].

Expresado por la Institución Percibido como real por los


familiares
Decidido apoyo a la 14 (60.8%) 4 (17%)
exhumación
Apoyo a la exhumación 4 (17%) 8 (34%)
desde una posición externa
No es su rol 3 (13%) 2 (8.5%)
Indiferencia - 8 (34%)
Oposición 1 (0.05%) 1 (0.05%)
Chisq (colapsando “indiferencia” y “no es su rol”), p<0.05

El balance final es que (a) los familiares han estado esencialmente solos en este proceso.
Las instituciones sociales del municipio se han limitado a expresar un apoyo verbal. (b) los
familiares (o las instituciones de acompañamiento, especialmente ADIVIMA y ECAP) no han
sabido tejer una red de alianzas dentro de la rica red asociativa del municipio que diera cobertura
a la exhumación y que garantizara un nivel adecuado de impacto social y de trabajo de
reconstrucción de memoria histórica.

En suma, la exhumación ha sido un proceso privatizado, vivido por los familiares en


términos de ceremonia privada y no de acto público y comunitario de reconstrucción de la
memoria histórica.

Monitorización y evaluación. Como medida del impacto del programa se podría repetir el
proceso al cabo de algunos meses y contrastar la información dada analizando cualitativa y
cuantitativamente los cambios en la red. Nunca podremos inferir relaciones causales porque en
este tiempo, además del programa, pueden haber ocurrido muchas cosas más y no de todas se
puede ser consciente, pero ayudará a tener una visión e hipótesis.

Cuantificación de redes sociales. Enfoques participativos.

El siguiente ejemplo muestra cómo aplicar la técnica para obtener algunos de los
indicadores para evaluar el impacto del trabajo de un equipo de educadores de calle que trabajan

82
con un grupo organizado de menores no acompañados. El grupo lo conforman una pandilla de
alrededor de 12 niños de entre 7 y 13 años que duermen en el barrio del puerto, consumidores de
elevadas dosis de inhalantes que sobreviven con actividades delictivas menores y son
considerados por las autoridades como un “problema policial”.

• Variables a evaluar como indicadores utilizando el mapa de redes: cohesión intragrupal


(b) nivel de afiliación-aislamiento de cada uno de los componentes (c) detección y rol
de liderazgos.
• Objetivos de trabajo de los educadores:
Corto término: Aumentar la cohesión y apoyo mutuo dentro del grupo de menores
y favorecer tácticas de supervivencia (b) evitar el aislamiento de miembros (c) favorecer
liderazgos que no constituyan relaciones de explotación entre pares.
Medio y Largo término: Trabajo individualizado para lograr reinserción tutelada
al medio familiar.

• Metodología: En uno de los días en que los educadores de calle no pueden hacer deporte
con ellos por el mal tiempo, les entregan a cada uno como un juego una hoja de papel
donde se colocan los nombres de todos los niños (y el de los educadores). A continuación
se les dan rotuladores y se le pide a cada niño que haga líneas rojas o azules con aquellos
que dentro del grupo sean amigos o “menos amigos” (con preguntas cómo “aquel a quien
siempre ayudarías”, “aquel que siempre te ayuda” etc) . Debe asegurarse que cada
persona haga el ejercicio a solas respecto a los otros y usarse terminología adecuada a la
edad y el medio para definir, por ejemplo :
Línea Azul Gruesa : Amigo inseparable; Línea Azul Delgada : Amigos; Sin línea : Indiferente, Línea Roja Delgada
No nos llevamos muy bien; Línea Roja Gruesa : Enemigos

Posteriormente los educadores, en privado, sobre una hoja grande (papelógrafo) van
dibujando cada uno de los trazados que han hecho los niños / jóvenes. El resultado final les
ofrece cuatro niveles iniciales de análisis cualitativo (pueden obtenerse muchos más):

a) Densidad global. Una gran densidad de líneas indica una alta implicación de los
miembros del grupo entre si (para bien o para mal), una baja densidad, una importante
desagregación.
b) Existencia de polos: niños muy populares (lideres) y muy impopulares (¿chivo
expiatorio? ¿Violento? ¿Pesado?))
c) Existencia de relaciones disparejas que ayuden a entender ciertos conflictos (jóvenes
que creen que otra persona es un amigo inseparable, cuando el aludido en cambio ni
siquiera le considera entre sus amigos importantes)
d) Jóvenes con actitud hostil generalizada (predominio de líneas rojas en su mapa
personal) o actitud colaboradora generalizada (predominio de líneas azules)

Todo esto es cuantificable y susceptible de análisis estadísticos y monitorización. Por


ejemplo, traduciendo cada línea a un valor numérico (+2, +1, 0, -1, -2), podría obtenerse:

1. Densidad global - Sumatorio (Positivo + Negativo), Media y Moda. [que indicarían clima
social global del grupo, calidad del vínculo promedio, tipo de vínculo más frecuente]
2. Índice de popularidad/hostilidad para cada niño – Sumatorio, Media y Moda de los valores
que le llegan a él de otros niños [que indicarían balance global de popularidad, tipo de vínculo
promedio de ese niño, tipo de vínculo más frecuente del niño].

83
3. Índice de afinidad y deseo de afiliación – Sumatorio, Media y Moda de los valores que él
otorga a su relación con los otros [indicadores de la percepción subjetiva de vínculo al grupo, de
la percepción subjetiva de vínculo promedio y de la percepción subjetiva de calidad de vínculo
más frecuente]
1. Balance de la relación de cada persona con el grupo – Diferencia entre (3) y (4)
2. Índice de cohesión grupal. Media de los valores de (4)

Estos índices pueden a su vez combinarse (por ejemplo, si realizamos 3 mapas del grupo en que
se reflexione sobre cohesión – manejo de conflictos – solidaridad, será posible combinar los
indicadores de la primera y tercera dimensiones y ver si los más populares lo son precisamente
por ser más agresivos y dar más confianza a los demás o más dialogantes y actuar de mediadores
naturales).
Este tipo de ejercicios, una vez entendidos, no toman más de 10 minutos. La reflexión y
devolución al grupo debe sopesarse y medir bien el alcance y modo de hacerla.

En la evaluación de proyectos, las medidas repetidas (por ejemplo, repetir el ejercicio cada
dos meses) permitirán tener una cuantificación de la evolución del trabajo en el tiempo y sus
resultados. Una buena evolución del programa se reflejaría en un aumento del indicador de
cohesión de grupo y en mejoras de los indicadores individuales, lo que es posible medir
estadísticamente.

Por ejemplo Medidas de Cohesión Intragrupal y afiliación. El análisis se realiza con un


gráfico por niño en hoja separada (que omitimos aquí) y un análisis global del conjunto.

Línea Azul Gruesa: Amigo inseparable (+2), Línea Azul Delgada: Amigos (+1), Sin línea: Indiferente (-), Línea Roja Delgada:
No nos llevamos muy bien (-1), Línea Roja Gruesa: Enemigos (-2)

Niño A: Emite al grupo +2-1: +1 Recibe del grupo : +2 –2 : 0. Balance: +1 C


Niño B: Emite: -1 Recibe –1 Balance: -2
Niño C: Emite: +2 Recibe: +3 Balance +5
(Máximo posible Emite + 4 Recibe +4 Balance +8)

Hipótesis: El Niño C es un niño popular y apreciado, frente al B que percibe mal a los demás
y recibe percepciones negativas y el A, que es una persona relativamente neutra.
Índice de densidad global : 5/6 (Sólo en 1 caso no hay linea, que indica indiferencia o no
relación. En el resto si hay interacción (buena o mala)

Calidad de relación : 2 personas con balance positivo y una con balance negativo.
Puntuación global : +1 –2 + 5 : +4 (Sobre un máximo posible de +8 x 3 : 24).
Predominan en conjunto las emociones positivas dentro del grupo, pero es un grupo cargado
de tensiones y con fuertes rivalidades internas (apenas 4/24).

84
Estos cálculos se aplicarían de idéntico modo al resto de parámetros del grupo.

Problemas en el uso del mapa de redes.

El resultado final depende de manera excesiva de las decisiones iniciales respecto a


quienes son “actores clave”.

En un mapa de redes sobre el posicionamiento de actores sociales frente a la violencia sexual y de género,
la cuantificación total y parcial del mapa de redes cambiaba de manera radical de considerar “las iglesias” como un
único actor (en cuyo caso había un balance de clima social positivo global al contrabalancearla con el resto de
actores), o de detallar cada iglesia (católica, evangélica, pentecostales de diferentes denominaciones…) como
actores diferentes cada una de ellas (en cuyo caso la visualización y cuantificación del mapa daba conclusiones
negativas hacia el programa).

En resumen:

(1) El Mapa de Redes es un ejercicio de reflexión, una herramienta para el


análisis de los procesos de influencia social, lobby y cabildeo que permite su
uso como herramienta de seguimiento y monitorización del impacto de los
programas.
(2) Su fiabilidad es mayor a efectos de monitorización (asumiendo que no se
realiza ningún cambio en el diseño del mapa de actores entre la primera
medida y las siguientes) que con una sola medida transversal (dónde pueden
pesar en exceso las decisiones que el grupo tome sobre quienes conforman el
mapa de actores).
(3) Metodológicamente alcanza su mayor valor cuando es realizada dentro de un
proceso de investigación-acción participativa, por cuanto, independientemente
de las decisiones que los participantes tomen respecto a quien consideran actor
con voz o no, es SU mapa de redes. El problema, entonces estribará –como
siempre en el trabajo comunitario – en ser muy cauto con los elementos de
representatividad de las personas que participan del proceso.

85
Análisis de vulnerabilidades-capacidades en la evaluación de programas
psicosociales.

En esta sección se describen brevemente dos técnicas que, a menudo, van estrechamente
vinculadas. La primera, el análisis de vulnerabilidades-capacidades (Anderson, Woodrow, 1988),
es adecuada para realizar un diagnóstico y detectar, desde la óptica de las personas afectadas o de
los equipos de intervención, no sólo los principales problemas o vulnerabilidades, sino también
las capacidades y las posibles acciones para fortalecerlas. La segunda técnica, la tabla de
decisión-acción, sirve para la toma de decisiones y la elaboración de un plan de acción a partir de
la priorización de las posibles soluciones que se derivan del diagnóstico anterior. Ambas son
excelentes herramientas, posteriormente, para la evaluación de programas.

Trabajar en base a necesidades o a


vulnerabilidades y capacidades

Análisis de vulnerabilidad – capacidad. Se definen las vulnerabilidades como el conjunto de


factores de larga duración que hacen a una comunidad más frágil. Se distingue de las
necesidades, que son requerimientos inmediatos para la supervivencia.

Los supervivientes de un deslizamiento de tierras pueden tener necesidades urgentes inmediatas,


como mantas o comida, y necesidades a corto y medio término, como que se reinstaure la
capacidad del sistema de salud para una adecuada atención sanitaria o disponer de
alojamientos temporales que posteriormente puedan ser definitivos. Por otro lado las
vulnerabilidades implicadas en la situación pueden tener que ver con factores que vienen de
lejos. Algunos tendrán que ver directamente con el deslizamiento: superpoblación, edificación
de casas precarias etc. Otros factores de vulnerabilidad tendrán que ver con los recursos de la
población para responder a la crisis y estarán en relación con los fenómenos de migración rural
por la falta de empleo en el campo, la falta de leyes que regulen la construcción y venta de
viviendas, la ausencia de organizaciones sociales fuertes en la zona, la pobreza recurrente etc.

Se denominan capacidades al conjunto de factores de larga evolución que hacen a una


comunidad más resistente frente a la adversidad.

86
Las actuaciones en situaciones de crisis parten en ocasiones de dos a priori falsos y que
conllevan muchos de los problemas posteriores:
• Asumir (casi siempre implícitamente) que el objetivo de la intervención es que “las
cosas vuelvan a ser como antes”. Dado que esto casi nunca se logra y como no se
abordan las vulnerabilidades que precedieron a la emergencia, sino las necesidades del
momento, la zona queda, al final del proceso, en mayor vulnerabilidad que antes. Es lo
que se denomina la espiral ascendente de la vulnerabilidad.
• La población carece de una capacidad de respuesta frente a la crisis. La realidad es que
las poblaciones –como las personas- no responden con pasividad. No saber rescatar y
potenciar las capacidades o intentar sustituirlas puede conllevar su anulación. Es lo que
podemos denominar la espiral descendente de la capacidad

Se han propuesto múltiples esquemas de análisis de las vulnerabilidades y las


capacidades de las poblaciones con las que trabajamos. El modelo más conocido (Anderson y
Woodrow, 1998) postula tres ejes en la conceptualización de las vulnerabilidades y capacidades.
De acuerdo con este enfoque, un trabajo de fortalecimiento, que vaya más allá de las necesidades
para atacar las vulnerabilidades, deberá tener como objetivos las mismas tres áreas:

VULNERABILIDADES Y CAPACIDADES

1. Vulnerabilidad física y material: Tiene que ver con todo aquello que consideraríamos
elementos palpables, físicos. Coincidiría con lo que se suele analizar cuando se habla
de necesidades. Así, desde ésta óptica, son más vulnerables las personas que viven en
áreas de riesgo, que viven en la pobreza o en situaciones de privación, con pocos
medios, sin acceso a la educación, a la salud y a los recursos productivos.

Fortalecimiento físico y material: será la dotación de recursos económicos y


materiales, el acceso a los recursos productivos, la dotación de infraestructuras y el acceso
a servicios básicos.

2. Vulnerabilidad social y organizativa: son más vulnerables las personas marginadas de


los sistemas económicos, políticos y sociales debido a procesos de exclusión basados
en razones políticas, económicas, religiosas, de raza, género, clase, casta u otras.
También son más vulnerables las personas y las comunidades cuyas instituciones son
ilegítimas e ineficaces, y están minadas por la corrupción, y se insertan en sociedades
desarticuladas y sin redes de solidaridad.

Fortalecimiento social y organizativo: existencia de instituciones locales y


nacionales representativas, eficaces y legítimas; de organizaciones sociales efectivas y de
amplia base y de redes de solidaridad y apoyo mutuo, y de valores y prácticas que
aseguran la plena participación de la población sin que existan situaciones de
discriminación.

3. Vulnerabilidad motivacional y actitudinal: son más vulnerables las personas y las


comunidades con actitudes fatalistas y con barreras culturales y religiosas
desfavorables al cambio, la participación o la solidaridad.

Fortalecimiento de habilidades y actitudes: las aptitudes, conocimientos y


formación que amplían las opciones de las personas y las comunidades, y los valores y
comportamientos favorables a la solidaridad, la innovación, la participación y la
tolerancia.

87
El Análisis de vulnerabilidad – capacidad constituye una guía de reflexión para la
elaboración de planes de acción. Requiere, bien de un conocimiento profundo de la realidad
local, bien de un proceso de trabajo conjunto con actores locales con dicho conocimiento.

TÉCNICA.

Los pasos a seguir para llevar a cabo todo el proceso son los siguientes:

1. Rellenar el cuadro de manera individual o grupal, por discusión abierta o a través de alguna
dinámica participativa, reflexionando sucesivamente sobre los aspectos de vulnerabilidad
física y material, social y organizativa y motivacional y actitudinal. A continuación intentar
consignar para cada área aquellos factores positivos que facilitan la resistencia del grupo o la
comunidad ante las adversidades o las fortalezas que el grupo tiene en esa área.
2. Después de completar las dos primeras columnas (como decíamos, por discusión y reflexión
en grupo, por una lluvia de ideas, individualmente, con grupos focales u otras técnicas) y se
anotan en la tercera columna: (a) para cada una de las vulnerabilidades detectadas se hace un
listado de las posibles soluciones y las acciones a llevar a cabo que esto requeriría. (b) para
cada una de las capacidades detectadas se hace un listado de los posibles planes y acciones
que lograran potenciarlas o fomentar otras relacionadas y se consignan también en la tercera
columna.

VULNERABILIDADES ACCIONES POSIBLES


CAPACIDADES
(físico+material)
estructurales
Elementos

organizativos
Elementos
sociales y
Motivacionales
Actitudinales y
Elementos

La siguiente tabla recoge el análisis realizado por un equipo para hacer el diseño y
planificación del trabajo a un año (Pérez-Sales, Jiménez, Elkarouaoui, Truñó, 2002). Recoge el
análisis de vulnerabilidad-capacidad de un programa de prevención de HIV/SIDA en el colectivo
de trabajadoras del sexo de la ciudad de Casablanca (Marruecos). Se realizaron un total de 120
entrevistas en profundidad estratificadas por barrio y zona de procedencia, edad y nivel
socioeconómico, y 10 grupos focales con diversos grupos de trabajadoras. Toda la información
acumulada en esas semanas de trabajo permitió al equipo (unas 11 personas) realizar un taller
interno y elaborar el análisis de vulnerabilidades (columna 1) y capacidades (columna 2).

88
Vulnerabilidades Capacidades Fortalecimiento
Conjunto de factores de larga duración que hacen a una
comunidad más fragil. Se distingue de las necesidades, que Conjunto de factores de larga evolución que hacen a Posibles puntos de trabajo, bien disminuyendo las vulnerabilidades, bien
son requerimientos inmediatos para la supervivencia. una comunidad más resistente frente a la adversidad. potenciando o desarrollando nuevas capacidades.

Elementos Vulnerabilidad física y material: son más vulnerables Capacidades físicas y materiales : Fortalecimiento físico y material: dotación de recursos
las personas que viven en áreas de riesgo, que viven en la elementos con que cuentan las mujeres para poder económicos y materiales, incluyendo las rentas e ingresos, el acceso a los
estructurales pobreza o en situaciones de privación, con pocos medios, sin enfrentar las dificultades de supervivencia, en recursos productivos, la dotación de infraestructuras y el acceso a la
acceso a la educación, a la salud y a los recursos productivos comparación con la población casablanquesa de educación y la salud
referencia (mujeres de origen diverso, generalmente
¾ Alta prevalencia de analfabetismo humilde) ¾ Potenciar sistemas que mejoren la cobertura
funcional horaria de las mujeres (acuerdos para cuidar
¾ Escasa utilización de los conocimientos ¾ Viven en áreas similares al resto mutuamente a los niños, análisis de los niveles de
respecto a los medios de transmisión : de la población. con similares escolarización y las razones de un hipotético
- Baja percepción de peligro condiciones de vivienda absentismo de los hijos)
- Atribución errónea de responsabilidad, ¾ Recursos económicos ¾ Potenciar los conocimientos sobre transmisión y
- Irregular capacidad de negociación con generalmente iguales o en ocasiones prevención de ITS-SIDA, pero sobretodo trabajar
los clientes algo superiores a los de otras mujeres todos los elementos relacionados con la necesidad
- Competitividad entre mujeres por de su misma extracción. percibida de usarlos, centrando más en ello los
retener a un cliente) ¾ Uso de los sistemas de salud aspectos formativos :
¾ Escasas posibilidades laborales equivalente al del resto de la - Responsabilidad del cliente en la transmisión.
- Posibilidades laborales generalmente población de su misma extracción. - Falso mito del sexto sentido
restringidas al ámbito del trabajo doméstico ¾ Aceptable conocimiento de los - Concepciones e ideas sobre preservativos y placer y
y algunas pocas fábricas medios de transmisión de ITS-SIDA alternativas.
- Dificultades para compatibilizar - Formas de uso del preservativo sin que el cliente lo
note (colocación con la boca u otras)
horarios teniendo en cuenta que viven
¾ Dar a conocer en Marruecos experiencias
generalmente solas
internacionales de trabajo en SIDA y prostitución
¾ La mayoría tienen una o más personas
(i.e. programa TAMPEP u otros) y posibles
dependiendo económicamente de ellas.
materiales producidos por estos que pudieran
adaptarse culturalmente desde las propias mujeres
trabajando de manera colectiva
¾ Hipotéticamente, a medio término, favorecer
aquellas iniciativas surgidas de ellas que exploren la
posibilidad del desarrollo de empleos alternativos.

90
Vulnerabilidades Capacidades Fortalecimiento
Conjunto de factores de larga duración que hacen a una
comunidad más fragil. Se distingue de las necesidades, que Conjunto de factores de larga evolución que hacen a Posibles puntos de trabajo, bien disminuyendo las vulnerabilidades, bien
son requerimientos inmediatos para la supervivencia. una comunidad más resistente frente a la adversidad. potenciando o desarrollando nuevas capacidades.

Elementos Vulnerabilidad social y organizativa: son más Capacidades sociales y organizativas : Fortalecimiento social y organizativo: existencia de
vulnerables las personas marginadas de los sistemas formas de autoorganización y apoyo mutuo entre las instituciones locales y nacionales representativas, eficaces y legítimas; de
sociales y económicos, políticos y sociales debido a procesos de exclusión mujeres, y elementos sociales y políticos que son organizaciones sociales efectivas y de amplia base y de redes de
organizativos basados en razones políticas, económicas, religiosas, de raza, elementos potencialmente positivos de apoyo y solidaridad y apoyo mutuo, y de valores y prácticas que aseguran la
género, clase, casta u otras. También son más vulnerables las cambio. plena participación de la población sin que existan situaciones de
personas y las comunidades que se insertan en sociedades discriminación
desarticuladas y sin redes de solidaridad.
¾ Analizar y discutir en grupo la relación con la
¾ Escaso apoyo de la familia de origen ¾ La mayoría mantienen contacto familia de origen en aquellas mujeres que perciban
porque la relación es complicada (por rechazo con la familia. esto como un problema, buscando puntos en común
o por aislamiento de ellas). ¾ Existencia de formas de apoyo y posibles enfoques.
¾ Desunión entre las mujeres. Percepción puntual : ¾ Potenciar las formas de apoyo frente a
de las otras como competidoras. El apoyo - En pequeños grupos de amigas situaciones concretas, en lugar de un concepto
mutuo no es la actitud general. (dos o tres) abstracto del apoyo mútuo : análisis de conflictos
¾ Ausencia de formas organizativas - Ante problemas puntuales paradigmáticos que hayan ocurrido o hayan oido
estructuradas entre las mujeres ni de sistemas (“malos” clientes, urgencias que han ocurrido y las ventajas y desventajas de un
de coordinación. económicas, soborno a policías, enfoque individual u organizado.
¾ Como consecuencia de ello, escasa violencia). ¾ Analizar las razones por las que la rivalidad es
difusión de mensajes de salud siguiendo ¾ Aunque el estudio no ha adaptativa para trabajar en base a ellas. Por ejemplo
metodologías de trabajo individual con permitido confirmarlo al no aplicarse :
expectativa de difusión por bola de nieve. todos los instrumentos propuestos, - Si rebelo mis secretos pierdo clientes (frente a la idea
¾ Ausencia de empresas formales existen indicios de la existencia de de que compartir determinados secretos (i.e. donde
vinculadas al mundo del sexo ante las que adquirir determinados preservativos de más calidad)
liderazgos en determinadas zonas :
plantear reivindicaciones de carácter formal puede beneficiar a todas.
- Mujeres de mayor edad
(contrato de trabajo, horarios regulados...). - Si pueden te van a pisar (frente a algunas podemos
- Mujeres con autoridad decidir no pisarnos entre nosotras)
¾ Ausencia de una política definida frente reconocida.
a la prostitución, con una legislación que ¾ Buscar metodologías de trabajo
prevé el encarcelamiento por esta causa complementarias a las actuales en las que se mejore
Estas mujeres : la accesibilidad al colectivo.
¾ Presión social por el estereotipo de vicio, - Repartirían las zonas de trabajo
perversión, pérdida de dignidad, - Programas pensados desde sus necesidades
en un grupo determinado de calles percibidas
¾ Presión religiosa derivada del contexto - Mediarían en los conflictos entre
islámico. - Con actitud proactiva (actividades en las zonas
mujeres y más raramente en de prostitución con preferencia a las actividades en
conflictos con las autoridades. el local de MSF)
- Contribuirían a crear un clima - Asumiendo que las tácticas de bola de nieve son
emocional positivo (reuniones útiles para cada uno de los pequeños microsectores
informales....) de prostitución y entre las fijas, pero no entre

91
Vulnerabilidades Capacidades Fortalecimiento
Conjunto de factores de larga duración que hacen a una
comunidad más fragil. Se distingue de las necesidades, que Conjunto de factores de larga evolución que hacen a Posibles puntos de trabajo, bien disminuyendo las vulnerabilidades, bien
son requerimientos inmediatos para la supervivencia. una comunidad más resistente frente a la adversidad. potenciando o desarrollando nuevas capacidades.
¾ Del estudio se desprende que la microsectores.
ley no se aplica y las detenciones ¾ Profundizar en el proceso de detección de
suelen ser negociables y en todo caso lideres, analizando su rol y capacitándolas en
no pasan de dos o tres días en elementos percibidos por ellas como necesarios
comisaría. (aspectos legales de la prostitución y modos de
¾ La fe religiosa y la oración son el afrontamiento; conciencia de colectivo y percepción
principal mecanismo de de necesidades comunes; eficacia de un enfoque de
afrontamiento reportado por las grupo en determinadas situaciones, experiencias en
mujeres en el estudio en situaciones otros lugares).
de miedo o conflicto ¾ Potenciar las formas de manifestación pública
(anónima o no) que actúen frente a los estereotipos u
otras formas de expresión de la propia voz de las
mujeres (libros, publicaciones)
¾ Establecer vínculos con asociaciones que
puedan posteriormente proveer asesoría legal o
jurídica a las prostitutas
¾ Apoyar acciones de lobby político (partidos
políticos) tendentes a la reforma de las leyes que
discriminan a las prostitutas o penalizan la
prostitución con cárcel.
¾ Potenciar los espacios de discusión sobre
religión y prostitución. Favorecer entre las mujeres
momentos religiosos o vinculados a la oración o la
fe que les permitan resolver la disonancia entre sus
creencias y la percepción social.
¾ Hipotéticamente (no de entrada, probablemente)
proveer de medios materiales que favorezcan formas
organizativas (un espacio físico para intercambio,
medios para acciones puntuales (difusión de
iniciativas, comidas o encuentros entre mujeres,
intercambios...)

92
Vulnerabilidades Capacidades Fortalecimiento
Conjunto de factores de larga duración que hacen a una
comunidad más fragil. Se distingue de las necesidades, que Conjunto de factores de larga evolución que hacen a Posibles puntos de trabajo, bien disminuyendo las vulnerabilidades, bien
son requerimientos inmediatos para la supervivencia. una comunidad más resistente frente a la adversidad. potenciando o desarrollando nuevas capacidades.

Elementos Vulnerabilidad motivacional y actitudinal: son más Capacidades motivacionales y Fortalecimiento de habilidades y actitudes: las aptitudes,
vulnerables las personas y las comunidades con actitudes actitudinales. Elementos de fortaleza que les conocimientos y formación que amplían las opciones de las personas y las
actitudinales y fatalistas y con barreras culturales y religiosas desfavorables al permiten enfrentar la situaciones cotidianas. comunidades, y los valores y comportamientos favorables a la
motivacionales cambio, la participación o la solidaridad solidaridad, la innovación, la participación y la tolerancia.

¾ Analizar los factores de los que depende el


¾ El miedo como emoción preponderante ¾ En aquellas en que la prostitución miedo y potenciar los recursos de afrontamiento del
recordada por las mujeres. es una opción elegida mismo que surjan desde las mujeres (técnicas de
¾ Fatalismo en la percepción de sí mismas (aproximadamente el 50%) existe control emocional; poner nombre a los miedos
como posibles actores de cambio. Atribución claramente la fortaleza y la inespecíficos para poder entonces articular
del cambio al destino u otros (“marido”, convicción de elegir una opción que, soluciones; formas de defensa ante agresiones;
“cambiar de empleo”) y no a acciones cuanto menos, no es fácil. formas de apoyo mutuo ante situaciones generadoras
concretas que ellas puedan desarrollar. ¾ Existencia de aprendizajes de miedo....)
¾ Dificultades en los procesos de propios del oficio (discreción, ¾ Valorar en algunos grupos de mujeres que
negociación con los clientes flexibilidad adaptativa ante las puedan percibir esto como prioridad o en algún
dificultades, aislamiento emocional grupo de mujeres en las que se detecte que esto
protector) pudiera ser prioritario por situaciones personales
¾ La rivalidad como mecanismo previas, el intercambio de experiencias y el
adaptativo de supervivencia aprendizaje a través de materiales educativos y
¾ Existencia de trucos para la dinámicas participativas sobre técnicas de
negociación con clientes negociación y resolución de conflictos (clientes,
¾ Sentido de la independencia (no policía...).
sujetas, generalmente a proxenetas ni ¾ Evitar en el contacto acciones o formas de
insertas dentro de empresas del sexo) relación de carácter vertical o paternalista que
potencien la visión de que todo cambio depende de
factores externos o del azar, aumentando a través de
un trato horizontal y respetuoso la percepción de
control sobre la propia vida.
¾ Analizar y trabajar preconcepciones de los que
dependen la rivalidad :
- Si no fuera por las otras, todos los hombres querrían
estar conmigo (presupone erróneamente que el hombre no
elige en función de criterios muy variables (edad, aspecto,
conversación, habilidades o expresión de afecto en
contactos anteriores con una mujer....)
- Si otras no utilizaran artimañas (penetración anal, no
usar preservativo, cobrar más barato) no tendría
problemas (presupone erróneamente que siempre que otra
mujer tiene clientes debe ser porque hace algo de esto). 93
¾ Trabajar las habilidades de negociación con los
clientes :
- Analizar y ¿compartir? trucos empleados en la
actualidad
Uso en la evaluación de programas.

El análisis puede repetirse para evaluar el impacto de las acciones realizadas:

1998 2000
Plan A Plan B

2002 2004
Plan C Plan D

Es posible introducir sistemas de cuantificación de resultados si se establecen indicadores


para todos y cada uno de los objetivos de trabajo obtenidos en el plan.

94
Mapa de Decisión – Acción

Un análisis de V-C produce una enorme riqueza de factores de muy distinto orden que, desde
el nivel más micro e individual al más global, influyen en la crisis que se aborda. Si cada uno de
los factores considerados genera a su vez tres o cuatro posibles vías de abordar el problema, el
conjunto resultante puede ser abrumador.
Otras técnicas de diagnóstico estructuradas (como el árbol de problemas o el DAFO) son
menos ricas en el resultado, pero ofrecen también una lista de posibles acciones que convendrá
jerarquizar.
El Mapa de Decisión-Acción constituye una guía para la elaboración de un plan de acción a
partir de las ideas surgidas en la primera fase de análisis. En este sentido, complementa a las
técnicas anteriores, aunque puede usarse en otros contextos.

Un análisis promedio de una situación de crisis humanitaria (por ejemplo la altísima mortalidad por SIDA
entre niñas prostitutas en Nepal) puede arrojar, por ejemplo, 3 elementos de vulnerabilidad y 2 de capacidad en
cada uno de los tres ejes, es decir 15 factores o elementos implicados en el problema. Si el equipo es capaz de
generar, en un ejercicio de tormenta de ideas, al menos 3 posibles soluciones o acciones por cada factor,
surgirían un total de 45 posibles soluciones o acciones.

Muchas de las ideas surgidas del análisis de V-C resultarán inviables, otras son
responsabilidad del Estado u otras instituciones y escapan del mandato de la organización o de la
que la comunidad se fija como tarea propia. En otras, finalmente, se tratará de acciones sin duda
interesantes, pero no prioritarias, dados los recursos disponibles.
En suma, para poder elaborar el plan de acción es necesario convertir el resultado del
ejercicio anterior en objetivos a corto, medio y largo término, ordenados según su prioridad,
viabilidad y nivel de responsabilidad. Esto es lo que se denomina un mapa de decisión-acción.

Para ello:

1. Se ordenan las posibles acciones surgidas del análisis de V-C

2. A continuación se añaden tres columnas más al lado de las posibles acciones de


fortalecimiento para fijar las prioridades de trabajo del proyecto a partir de la valoración de
cada una de las posibles acciones y del consenso en grupo de su prioridad, viabilidad y
responsabilidad.

Prioridad: valoración del grado en que dicha acción podría mejorar la situación de las
personas afectadas. Quienes participan en el proceso pueden valorarlo como:
1 = muy importante, 2 = importante, 3 = secundario.

Por ejemplo, a los quince días de llegar de nuevo a sus tierras una comunidad retornada que hubo de
huir del Ejército hace 15 años puede evaluarse como Alta prioridad mejorar la transparencia en la gestión
de las donaciones que han llegado para evitar que aparezcan rumores y divisiones, de prioridad Media
hacer gestiones para que haya más teléfonos públicos a disposición de los afectados, y de prioridad Baja
conseguir un aparato de megafonía. Esto último puede, en cambio, a los seis meses, ser de Alta prioridad.
Las personas implicadas en la toma de decisiones fijarán sus propios criterios.

Viabilidad: tiene que ver con hasta que punto es factible lograr esa solución. Puede valorarse
como: 1 = muy posible, 2 = posible, 3 = poco posible.

95
* Por ejemplo, un objetivo puede ser crear un espacio aislado dónde cada familia pueda velar en intimidad a
las personas fallecidas, pero en el contexto de desorganización y falta de espacio existente, el grupo puede
valorarlo como Poco Viable y optar por una ceremonia de duelo colectivo.

Responsabilidad: se evalúa a quien correspondería asumir dicha tarea, que puede ser
responsabilidad externa (por ejemplo de las autoridades), interna (de quienes están tomando
la decisión, sea una asociación, una ONG o la comunidad) o mixta.

VULNERABILIDADES CAPACIDADES FORTALECIMIENTO


Posibles acciones

Responsabilidad
Viabilidad
Prioridad
3. A partir de los resultados de la tabla anterior se descartan las líneas de acción peor valoradas
por su prioridad y viabilidad, o aquellas cuya responsabilidad el equipo o la comunidad
considera que no competen al campo de acción propio. Quedará un número limitado y
ordenado de objetivos y acciones.

4. Tras la jerarquización, con las líneas de acción restantes, se realiza una planificación
estratégica a corto, medio y largo plazo, distinguiendo si se trata de acciones internas (que
dependen de quienes realizan el proceso) o acciones externas o mixtas (que dependen en
parte o totalmente de otras personas distintas de quienes realizan el proceso y que implicarán
actividades de presión y cabildeo).

FORTALECIMIENTO Acciones Acciones Corto plazo Medio Largo


Posibles acciones internas externas o plazo plazo
mixtas
1.
2.
3.

Los plazos temporales son relativos. Para determinados problemas puede tratarse de dias,
semanas y meses. Para otros de períodos más prolongados (p.e. corto plazo 1 a 6 meses, medio
plazo hasta los dos años y largo plazo hasta los cinco).

5. Por último es recomendable nombrar una persona o pequeño grupo de personas responsables
de hacer el seguimiento de cada una de las acciones que se han decidido emprender. Puede
fijarse una nueva fecha en que se reevalúen los acuerdos, se vea el grado de cumplimiento y
se fijen nuevas metas.

La siguiente tabla recoge los mapas de decisión acción surgidos de los análisis de
vulnerabilidad-capacidad anteriores:

96
Tabla de decisión-acción desarrollada en el taller que siguió a la devolución de resultados del diagnóstico participativo en el ejemplo del terremoto de El
Salvador (2001).
Problemas Detectados
desde la óptica de los Posibles Soluciones. Prior Viabilid Responsabilidad
damnificados idad ad
Aparición de actitudes de - Hablar con las instituciones y la comunidad para saber en qué areas se
pasividad o dependencia entre considera que los desplazados pueden tomar decisiones sobre los problemas 1 Alta Mixta
los desplazados que les atañen. Definir campos posibles de decisión si hubiera organización. - Autoridades, líderes
- Intercambio de experiencias entre desplazados de diferentes departamentos
del país con experiencias distintas de organización 4 Media Mixta.
- Instituciones que provean
- Intercambios deportivos entre desplazados de diferentes albergues 4 transporte / alimentación
Media
Falta de apoyo mutuo entre las - Estimular la existencia de grupos de autoapoyo, especialmente entre 2
personas mujeres, sin presencia externa. Alta Interna en el arranque
- Posibilidad de establecer una carpa como espacio de mujeres 2
- Garantizar la asistencia real de los niños a la escuela y/o garantizar un 1 Media Externa
espacio permanente para ellos que libere a las mujeres de estar en la carpa - ¿Buscar una ONG?
todo el día
Media - Lideres, comunidad.
Estimular la Participación . Realización de videos comunitarios grabando las opiniones y vivencias de la 4 Externo.
comunitaria gente con posterior proyección y discusión comunitaria. Media - ¿Buscar una ONG?
. Colocar buzones de sugerencias para que no sean las asambleas el único 2 -Alumnos periodismo?
modo de dar la opinión Media Externo
- ¿Alcaldía? ¿Lideres?
. Trabajo psicosocial con los desplazados a través de talleres, sociodramas, 1 ¿Comisión informac.?
teatro, representaciones artísticas etc representando su situación desde una
óptica de pasividad o de empoderamiento Alta Interna
. Rescate, a través de estas técnicas, de experiencias anteriores de 2
organización comunitaria (por ejemplo durante la guerra)
Alta Interna

97
Comunidades demasiado . Trabajar la unión entre comunidades por ejemplo a través de actos o 1
volcadas hacia lo interno de sus asambleas generales o de actividades amplias de intercambio social Media Mixta
procesos estimulando la idea de la unión más allá de cada comunidad. (líderes, comunidades)
. Facilitar días de contacto con familias, vecinos, gente de la comunidad que 3
no están en el albergue.
. Escuela de padres como punto de contacto más allá de las comunidades. 2 Media Mixta
(Coord. pedagogos, escuela)

Existen personas aisladas “Acogimiento comunitario”. Que cada comunidad acoja dos o tres familias. 1 Media Externa

Información insuficiente . Fomentar que sean las autoridades las que informen directamente a los 1 Media -Externa (Cabildeo
Los canales son inadecuados damnificados institucional)
. Facilitar la existencia de 1 televisor y/o varios radios por comunidad 4 Baja -A evaluar

. ¿Promover una Comisión de Información entre los desplazados? 2 Media

. Dar información por escrito carpa por carpa (volante de información clave). 1 Alta Mixta
. Promover un Boletín informativo interno del Albergue. 3 Media (lideres, comunidad)
. Promover la participación de la comisión en la elaboración y mantenimiento 3 Media
de los paneles comunitarios de información.

Problemas en el trato con la . Capacitar en elementos de trato con la gente (¿relaciones humanas?) a 1
gente: personal de la alcaldía y a personas que atienden (especialmente cocina). Media
- por parte de quienes dan la
información. Interna del equipo
- por las personas que atienden a
los desplazados (cocina
especialmente)
Solicitud de actividades lúdicas, . Estimular la formación de una Comisión de Festejos entre los refugiados. 3 Media Mixta
en especial para adultos . Fomentar la realización de actividades lúdicas que incluyan adultos 2 (lideres, comunidad)
Alta Externa
(Instituciones / grupos que
hagan este tipo de activid)

98
Estimular actividades para . Estimular la formación de un Comité de Jóvenes. 2 Media Mixta
adolescente y jóvenes . Carpa como centro de jóvenes. 4 Baja (líderes, comunidad)
. Abrir espacios de discusión sobre la delincuencia y que propongan 3 Media Externa
soluciones (autoridades, lideres,
. Centro de cómputo para jóvenes 4 Baja comunidad, asociaciones
juveniles voluntarias)
- ¿Informática?
Necesidad de abordar una - Estimular actividades de ritualización. Mixta
elaboración de lo vivido desde . ceremonias 2 Alta - Lideres, Comunidad
una óptica positiva. Facilitar . aniversarios o conmemoraciones - Fomentar a los propios
procesos de duelo. . monumentos simbólicos artistas del albergue.
- Rescate de la memoria colectiva 3 Alta Interna
. teatro Externa
. narraciones - ¿Periodismo? ¿Pedagogía?
. recogida de testimonios y/o fotografías y sistematización
Valorar la tradición y la historia - Actividades en que los niños deban preguntar a los abuelos 4 Alta Mixta
- Responsables educación

- Fomentar la discusión sobre recobrar / reconstruir iglesias, monumentos, 4 Mixta


parques, en lugar de demoler y hacer nuevo. Hablar del valor de lo vivido. Baja - Lideres, comunidad
Las donaciones como factor de - Analizar la viabilidad de estimular un fondo común de donaciones
humillación por el modo en que gestionado por una comisión de los propios desplazados con presencia de la 2 Baja Mixta (con autoridades y
se reparten y la sensación de alcaldía (o con una composición mixta) líderes)
favor y no de derecho.
Percepción positiva del Alcalde - Poder dar retroalimentación a las autoridades tanto del agradecimiento y 1 Alta Externa (instituciones que
y positiva y negativa de los estímulo como de los aspectos mejorables, especialmente entre los respaldan el trabajo –
gestores directos subordinados. cabildeo MSF,
representantes UCA u otros)
Interna
- Sugerir a la Alcaldía la conveniencia de trabajar el desgaste de las personas 1 Alta
que atienden los albergues y ofrecer algún espacio de ventilación para ellos. Interna o Mixta (psicólogos
- Hacer un grupo focal con personas de la Alcaldía que trabajan en el propios de la Alcaldía?)
Albergue. ¿Perciben algún tipo de problema de comunicación u otro?. 2 Media

99
Explicación de lo ocurrido en - Valorar el papel de los medios de comunicación. Fomentar alguna 3 Media Externa.
términos de castigo divino. entrevista o campo publicitario (no pagado) en radios / periódicos / TV con - Contacto con periodistas
fines psicoeducativos.
- Pasividad, Mixta
- Resignación - Hacer charlas educativas o talleres con los desplazados sobre por qué 1 Media - ¿Coordinar con iglesia
- Desviación de la ocurren las catástrofes y si la resignación es la única respuesta. progresista?
responsabilidad política
- Elaboración de un folleto informativo Mixta
Paralelamente la religión es una 3 Media - ¿Coordinar con iglesia
fuente de fortaleza individual progresista?

- Control de las sectas e iglesias radicales que llegan a predicar 2 Media Externa.
- Lideres, Discusión y
decisión comunitaria
Actitud Fatalista de la población - Proponer que en el plan educativo del Ministerio se incluye conocimiento 3 Baja Mixta.
hacia la posible prevención de sobre catástrofes y/o formas seguras de construcción dentro de alguna - ¿Asesoría de algún
futuras catástrofes materia. departamento de Educación?
Externa
- Invitar a personas que hablen y/o brinden materiales informativos sobre 1 Alta - Buscar ingenieros –
formas de construcción segura acorde con las formas de edificación popular arquitectos. Proponer a
salvadoreña (Adobe reforzado contra sismos u otras) desplazados que lo busquen
Mixta
- Acompañar el reasentamiento de las comunidades. Trabajar la elaboración 1 Media - Organizaciones / equipos
de un mapa de riesgos y la organización comunitaria para enfrentarlos que ya hacen este tipo de
trabajo.

100
Trabajo como factor clave de . Estimular la creación de cooperativas internas 1 Baja
estabilización emocional - De profesionales de construcción y similar (albañiles, electricistas, Externa
presente y futura fontaneros...) que puedan ser contratados y que tal vez se mantengan al cerrar - Autoridades, líderes,
el albergue. Priorizarles a la hora de realizar algunas tareas de reconstrucción. Media comunidad.
- De venta de insumos, periódicos, fruta etc al interior del albergue - ONGs que apoyan en
- De artistas, que asuman la coordinación de actividades lúdicas u otras. Media reconstrucción

. Proponer un programa de “Reconstruir capacitando” sobretodo dirigido a 1 Baja Mixta


jóvenes. Ser capacitados a la vez que colaboran en tareas de reconstrucción. - lideres, comunidad
- ONGs de trabajo lúdico –
psicosocial.

. Fomentar la autogestión para la mejora de las áreas comunes en el albergue 1 Media Externa
(por ejemplo despejar y acondicionar un área para que jueguen los niños) - Autoridades
Mixta
- Autoridades, Lideres,
Comunidad
Capacitación como factor de . Clases autogestionarias de alfabetización para adultos 3 Baja Externa
fortalecimiento - Personas interesadas en el
propio albergue
Ser los protagonistas de su . Analizar las formas para hacer una devolución de este diagnóstico a la 1 Alta Interna
propio proceso población de los albergues que ha participado.

101
Propuestas de Acción que se derivan del diagnóstico participativo

En base a todo lo anterior sería posible formular una propuesta de trabajo de acompañamiento y
fortalecimiento psicosocial y comunitario de la población desplazada en los albergues en un programa de
3 a 6 meses de duración (en función del tiempo que duren aún los albergues) estructurado en los
siguientes niveles y prioridades:
‰ 1. Acciones a muy corto término.
1.1 Analizar las formas para hacer una devolución de este diagnóstico a la población de los albergues
que ha participado.
‰ 2. Acciones a corto término.
2.1 Hablar con las instituciones y la comunidad para saber en qué áreas se considera que los
desplazados pueden tomar decisiones sobre los problemas que les atañen. Definir campos
posibles de decisión si hubiera organización.
2.2 Trabajar la unión entre comunidades por ejemplo a través de actos o asambleas generales o de
actividades amplias de intercambio social estimulando la idea de la unión más allá de cada
comunidad.
2.3 . “Acogimiento comunitario”. Que cada comunidad acoja dos o tres familias.
2.4 . Fomentar que sean las autoridades las que informen directamente a los damnificados.
2.5 . Dar información por escrito carpa por carpa (volante de información clave).
2.6 . Capacitar en elementos de trato con la gente (¿relaciones humanas?) a personal de la alcaldía y
a personas que atienden (especialmente cocina).
2.7 - Poder dar retroalimentación a las autoridades tanto del agradecimiento y estímulo como de los
aspectos mejorables, especialmente entre los subordinados.
‰ 3. Acciones a medio término.
3.1 Trabajo psicosocial con los desplazados a través de talleres, sociodramas, teatro,
representaciones artísticas etc. representando su situación desde una óptica de pasividad o de
empoderamiento.
3.2 Sugerir a la Alcaldía la conveniencia de trabajar el desgaste de las personas que atienden los
albergues y ofrecer algún espacio de ventilación para ellos.
3.3 Invitar a personas que hablen y/o brinden materiales informativos sobre formas de
construcción segura acorde con las formas de edificación popular salvadoreña (adobe reforzado
contra sismos u otras).
3.4 Fomentar la autogestión para la mejora de las áreas comunes en el albergue (por ejemplo
despejar y acondicionar un área para que jueguen los niños).
4 Acciones a largo término
4.1 Hacer charlas educativas o talleres con los desplazados sobre por qué ocurren las catástrofes y
si la resignación es la única respuesta.
4.2 . Estimular la creación de cooperativas internas
- De profesionales de construcción y similar (albañiles, electricistas, fontaneros...) que puedan ser
contratados y que tal vez se mantengan al cerrar el albergue. Priorizarles a la hora de realizar algunas
tareas de reconstrucción.
- De venta de insumos, periódicos, fruta etc al interior del albergue
- De artistas, que asuman la coordinación de actividades lúdicas u otras.
4.3. Acompañar el reasentamiento de las comunidades. Trabajar la elaboración de un mapa de riesgos
y la organización comunitaria para enfrentarlos
A todo ello se sumaría
1. Seguir monitorizando y documentado las principales problemáticas de la población
atendida a través de la asistencia a la reunión semanal de líderes, el diálogo permanente
con los desplazados y muy ocasionalmente análisis de procesos específicos a través de
grupos focales.
2. Prestar atención clínica individual de los casos detectados en estos procesos de tipo
comunitario que requirieran de un apoyo con psicoterapia individual o de grupo o de
apoyo psicofarmacológico.

102
Análisis de la organización que desarrolla el programa de prevención HIV en el colectivo de
trabajadoras del sexo.

responsabilid
viabilidad 17
prioridad 16

ad 18
Fortalecimiento
Posibles líneas de acción

Fortalecimiento Estructural (físico y material)


3 2 Mixto
E1. Potenciar sistemas que mejoren la cobertura horaria de las mujeres (acuerdos para cuidar
mutuamente a los niños, análisis de los niveles de escolarización y las razones de un hipotético
absentismo de los hijos)
1 1 Interna
E2. Potenciar en los talleres los conocimientos sobre transmisión y prevención de ITS-
SIDA, pero sobre todo trabajar todos los elementos relacionados con la necesidad percibida de
usarlos, centrando más en ello los aspectos formativos:
- Responsabilidad del cliente en la transmisión.
- Falso mito del sexto sentido
- Concepciones e ideas sobre preservativos y placer y alternativas.
- Formas de uso del preservativo sin que el cliente lo note (colocación con la boca u otras)

E3. Dar a conocer en Marruecos experiencias internacionales de trabajo en SIDA y 2-3 1 Interna
prostitución (i.e. programa TAMPEP u otros) y posibles materiales producidos por estos que
pudieran adaptarse culturalmente desde las propias mujeres trabajando de manera colectiva

E4. Hipotéticamente, a medio término, favorecer aquellas iniciativas surgidas de ellas que
2-3 2 Mixto
exploren la posibilidad del desarrollo de empleos alternativos.
Fortalecimiento social y organizativo
2 2 Mixto
S1. Analizar y discutir en grupo la relación con la familia de origen en aquellas mujeres que
perciban esto como un problema, buscando puntos en común y posibles enfoques.

S2. Potenciar las formas de apoyo frente a situaciones concretas, en lugar de un concepto 3 1 Interna
abstracto del apoyo mutuo : análisis de conflictos paradigmáticos que hayan ocurrido o hayan
oído que han ocurrido y las ventajas y desventajas de un enfoque individual u organizado.

S3. Analizar las razones por las que la rivalidad es adaptativa para trabajar en base a ellas. Por
ejemplo : 2 2 mixto
- Si rebelo mis secretos pierdo clientes (frente a la idea de que compartir determinados secretos (i.e.
donde adquirir determinados preservativos de más calidad) puede beneficiar a todas.
- Si pueden te van a pisar (frente a algunas podemos decidir no pisarnos entre nosotras)

S4. Buscar metodologías de trabajo proactivo complementarias a las actuales en las que se
mejore la accesibilidad al colectivo. 1 1 mixto
- Programas pensados desde sus necesidades percibidas
- Con actitud proactiva (actividades en las zonas de prostitución con preferencia a las
actividades en el local de MSF)
- Asumiendo que las tácticas de bola de nieve son útiles para cada uno de los pequeños
microsectores de prostitución y entre las fijas, pero no entre microsectores.

S5. Profundizar en el proceso de detección de líderes, analizando su rol y capacitándolas en


elementos percibidos por ellas como necesarios (aspectos legales de la prostitución y modos de 1 1 Interna

16
PRIORIDAD: 1 muy importante, 2 importante, 3 secundario
17
VIABILIDAD: 1 muy posible, 2 posible, 3 poco posible
18
RESPONSABILIDAD: MSF, mixto, externo

103
afrontamiento; conciencia de colectivo y percepción de necesidades comunes; eficacia de un
enfoque de grupo en determinadas situaciones, experiencias en otros lugares).

S6. Potenciar las formas de manifestación pública (anónima o no) que actúen frente a los
estereotipos u otras formas de expresión de la propia voz de las mujeres (libros, publicaciones).
1 3 mixto
S7. Establecer vínculos con asociaciones que puedan posteriormente proveer asesoría legal o
jurídica a las prostitutas.

S8. Apoyar acciones de lobby político (partidos políticos) tendentes a la reforma de las leyes
1 1 mixto
que discriminan a las prostitutas o penalizan la prostitución con cárcel.

S9. Potenciar los espacios de discusión sobre religión y prostitución. Favorecer entre las 3 3 externo
mujeres momentos religiosos o vinculados a la oración o la fe que les permitan resolver la
disonancia entre sus creencias y la percepción social.

S10. Hipotéticamente (no de entrada, probablemente) proveer de medios materiales que - - -


favorezcan formas organizativas (un espacio físico para intercambio, medios para acciones
puntuales como encuentros entre mujeres, intercambios...)
2 2 mixto
Fortalecimiento motivacional (habilidades y actitudes)
M1. Analizar los factores de los que depende el miedo y potenciar los recursos de 1-2 2 Interna
afrontamiento del mismo que surjan desde las mujeres (técnicas de control emocional; poner
nombre a los miedos inespecíficos para poder entonces articular soluciones; formas de defensa
ante agresiones; formas de apoyo mútuo ante situaciones generadoras de miedo....).

M2. Valorar en algunos grupos de mujeres que puedan percibir esto como prioridad o en algún
grupo de mujeres en las que se detecte que esto pudiera ser prioritario por situaciones
2 1 Interna
personales previas, el intercambio de experiencias y el aprendizaje a través de materiales
educativos y dinámicas participativas sobre técnicas de negociación y resolución de conflictos
(clientes, policía...).
- Analizar y ¿compartir? trucos empleados en la actualidad.
- Desarrollar nuevas habilidades a través de procesos de educación participativa (rol-playing,
sociodrama u otras). 1 2 Interna

M3. Evitar en el contacto acciones o formas de relación de carácter vertical o paternalista que
potencien la visión de que todo cambio depende de factores externos o del azar, aumentando a
través de un trato horizontal y respetuoso la percepción de control sobre la propia vida.
2 2 mixto
M4. Analizar y trabajar preconcepciones de los que dependen la rivalidad :
- Si no fuera por las otras, todos los hombres querrían estar conmigo (presupone erróneamente que el
hombre no elige en función de criterios muy variables (edad, aspecto, conversación, habilidades o 2 2 mixto
expresión de afecto en contactos anteriores con una mujer....)
- Si otras no utilizaran artimañas (penetración anal, no usar preservativo, cobrar más barato) no tendría
problemas (presupone erróneamente que siempre que otra mujer tiene clientes debe ser porque hace algo
de esto).

Teniendo en cuenta estos tres criterios, la organización formuló el plan de acción del equipo psicosocial

1. Acciones Internas (que dependen de quienes realizan el proceso).


a) Acciones inmediatas o a corto término. Aquellas que tienen Alta Prioridad y Alta o Media Viabilidad.
b) Acciones a medio término. Aquellas que tienen prioridad Media y Alta o Media Viabilidad.
c) Acciones a largo término. Las restantes, si se decide continuar con ellas.

2. Acciones Externas o Mixtas (que dependen en parte o totalmente de otras personas distintas de quienes realizan el
proceso). Planificación de funciones de negociación, cabildeo o presión según cual sea el objetivo.

104
El Mapa del Poder de decisión: Planificación y evaluación de las acciones de presión
política y cabildeo

Ligado a todo lo anterior, está la monitorización y evaluación de las acciones de presión política asociadas
a los programas.
En ocasiones las acciones que desarrollan las personas y comunidades por hacer oír su voz no tienen el
efecto deseado porque no hay una planificación previa de cómo realizar un proceso de participación en la toma de
decisión.
Al realizar la tabla de decisión-acción se definían dos tipos de acciones: internas (que dependen de las
personas que desarrollan el programa) y externas o mixtas (cuando dependen de otros). Un método útil es realizar
un análisis en grupo del mapa del poder.
Entendemos por actividades de incidencia o cabildeo como todas aquellas que tratan de influir en las
personas que tienen poder de decisión. Es otra manera de participar.

Metodología:

a) Una vez detectado el problema y definidas las acciones posibles, deben seleccionarse aquellas sobre las que
queremos concentrar nuestras energías. Serán probablemente aquellas que, siguiendo el modelo anterior, sean
más prioritarias y más factibles.
b) Se elabora el mapa del poder. Una metodología posible es, debajo del problema, colocar el nombre de la
persona con capacidad para apoyar la propuesta. El grupo reflexiona sobre los posibles aliados, oponentes e
indecisos frente a dicha propuesta, anotando sus nombres en tarjetas de diferentes colores.
c) Se pone en común, dibujando un campo de fuerzas en el que se coloca a un lado a aquellas personas o
instituciones que pudieran apoyar la propuesta y que tienen las tarjetas de un color, al otro a quienes se
opondrían, de un color distinto, y arriba o abajo los indecisos, de un tercer color.
d) El grupo puede pasar a ordenarlos según su mayor a menor peso. Con el mapa delante el grupo puede evaluar:
- ¿Es posible acceder a las personas que directamente pueden apoyar la propuesta? ¿Cuál es la mejor
vía?
- ¿Qué apoyos es posible conseguir? (seleccionar dos o tres aliados o indecisos con los que contactar)
- ¿Qué influencias es necesario neutralizar? (seleccionar dos o tres posibles oponentes a los que habría
que intentar convencer).
e) Selección de la estrategia. ¿Cómo es posible hacer llegar la propuesta? ¿Puede pedirse una entrevista directa?
¿Es mejor otro tipo de iniciativas? (carta personal, documento público...). Discutir los argumentos.

Finalmente se elaborará el plan de acción de cabildeo, nombrándose responsables y fijando una nueva fecha
para evaluar el éxito o fracaso de las acciones emprendidas y reanalizar las posibilidades.

105
Escalas de Afrontamiento y Cohesión Comunitaria. Estrategias y métodos
para medir eficacia e impacto cuando el objetivo es la propia comunidad.

Uno de los principales problemas a la hora de formular indicadores de impacto y de


medirlos es lograr definir que se entiende por “éxito” o “fracaso” de un programa.

El ejido Río Nueva Esperanza, en México, tenía maestro rural solo tres meses al año, porque debían rotarlo
con otras comunidades de valles colindantes. Una organización departamental de Iglesia de acuerdo con las
autoridades de la comunidad planteó una reunión de todos los ejidatarios. En ella se veía que la única solución al
problema era que todas las comunidades del valle se pusieran de acuerdo en la construcción de una escuela común y
ver luego cómo conseguir que los niños pudieran ir hasta allá cada día. Tras más de un año de discusiones,
finalmente la nueva escuela se empezó a construir cerca de la cabecera del valle. El maestro estaría allí todo el año.
Tras la inauguración de la escuela en una gran fiesta, pronto se observó que la idea no funcionaba. Los
niños debían levantarse tan temprano para ir a la escuela que finalmente dejaban de acudir, y el absentismo escolar
aumentó enormemente. Finalmente las autoridades educativas decidieron volver al viejo esquema del maestro
rotativo. La organización hizo un balance de su trabajo pesimista, considerando que nada de lo que habían hecho
sirvió. Las comunidades, en cambio, hicieron una valoración positiva: el proyecto fue un éxito. Aunque la escuela
quedó para ser usada sólo por los alumnos que vivían cerca de la cabecera, era la primera vez en décadas que los
habitantes de los diferentes ejidos hablaban y se ponían de acuerdo para lograr llegar a algo común y el día de
euforia de la fiesta de inauguración todavía estaba en la memoria de todos.

¿Cuánto tiempo hay que esperar? ¿El tiempo de la gente y las comunidades o el tiempo
de los ciclos de los proyectos y las exigencias de las financieras?

“Las comunidades mapuches suelen hablar, mirando para atrás, de dos tiempos. El tiempo corto es el que
se remonta a los diez o veinte años inmediatamente posteriores, a los cambios que ha habido en esos años. El tiempo
largo se mide por generaciones y se remonta más allá de lo que las generaciones vivas pueden recordar.”. (J.
Quidel. Longko mapuche).

Si hablamos de sistemas de evaluación de eficacia de los programas psicosociales, la


primera posibilidad es consensuar entre todos los actores implicados qué se va a entender por
éxito y cual sería la mejor manera de medirlo.

Ejemplo: construcción de un sistema de indicadores de malestar emocional y problemas


psicosociales en el contexto de África.

Bolton (2000, 2005) propone el concepto de funcionalidad como el más útil para medir el
impacto de programas psicosociales en África. Para él los estudios sobre prevalencia de
enfermedades psiquiátricas siguiendo modelos occidentales no tienen sentido. Es más coherente
definir cómo se entiende el malestar en esta cultura y de qué modo el malestar afecta al día a día
del funcionamiento de los miembros de la comunidad. Para eso, propone una metodología que
puede resumirse del siguiente modo:

Paso 1. Tras pedir permiso a las autoridades e informar a los representantes sobre el estudio, se
forma a un grupo de entrevistadores que hacen entrevistas cualitativas en una muestra aleatoria
de unas 40 personas. En dichas entrevistas se pregunta
¿Cuáles son los problemas que afectan a esta comunidad?/ ¿Cuáles son los problemas
más frecuentes que tiene la gente en esta comunidad?

Los autores insisten en que debe usarse las palabras “problemas” y “comunidad”, que son
fácilmente entendidas, y no “salud mental” o “psicosociales”, y en anotar la respuesta de manera
literal.

106
De las respuestas, el entrevistador selecciona aquellos elementos que tienen que ver con
pensamientos, sentimientos o relaciones con los otros y vuelve a ellos
¿Puede describirme con más precisión qué ocurre cuando una persona….?
¿A quien se suele consultar en esos casos?

Finalmente, pregunta sobre la funcionalidad asociada a los síntomas. Considera que en


África hay que preguntar:
¿Cuáles son las tareas importantes que la mayoría de mujeres/hombres deben realizar de
modo regular para cuidar de sí mismos? ¿Y para cuidar de su familia? ¿Y para
contribuir a su comunidad?

Paso 2. Con todo esto se hace una lista de expresiones desde la cultura para expresar las
alteraciones en pensamientos, sentimientos y relaciones asociados a los problemas comunitarios,
y el modo en que esto repercute en la capacidad de las personas de seguir funcionando en el día a
día. Para comprobar si esta lista es adecuada, ampliarla o profundizar en algunos conceptos, se
realiza una ronda de entrevistas con informadores clave. Según los autores deben ser
conversaciones muy extensas, de varias tardes, y que no vayan muy directas al foco, sino que se
produzcan dentro del marco de una conversación más general.
Al final de este proceso se tendrá, según los autores, una lista de “síntomas locales de
malestar psicológico”, su posible equivalente en términos de la medicina occidental y el modo en
que esto afecta al funcionamiento de la persona.

Paso 3. A continuación proponen dibujar cada síntoma en una cartulina y hacer una entrevista a
una nueva muestra de unas 40 personas de la comunidad en la que se les pide que pongan las
cartulinas en montoncitos de cosas que se parezcan entre sí. El entrevistador anota que cartas
quedan en cada montoncito. Viendo las asociaciones que más se repiten, se definen “síndromes”.

Paso 4. De las respuestas a las preguntas de funcionalidad se seleccionan las 3 más mencionadas
de cada una de las categorías (uno mismo, la familia y la comunidad) y que cumplan los
siguientes criterios:
- no poder desarrollar esa función afecta claramente a los demás (p.e. no ganar dinero para
pagar la escuela de los hijos)
- la tarea es realizada por la gran mayoría de hombres/mujeres de la comunidad de manera
regular
Con ello se elaboran preguntas con un redactado del tipo : “Le voy a leer una lista de
cosas que otras personas de su comunidad consideran importante que una persona
pueda hacerlas. Para cada una de ellas le pediría que me dijera cuantas más
dificultad tiene en comparación con la mayoría de otros hombres/mujeres de su
edad. Debe decirme si no está teniendo más dificultades, está teniendo algo más,
moderadamente más, mucho más o prácticamente nunca puede hacerlo.

Paso 5. Finalmente se confecciona un instrumento que pregunte por (a) los síndromes locales
(paso 3) y (b) la funcionalidad (paso 4) y se realiza un estudio de prevalencia en una amplia
muestra (idealmente de alrededor de 300) personas de la comunidad. Cuando sea viable y se
observen claros paralelismos entre los “síndromes locales” y un concepto occidental de malestar
emocional (como la depresión o la ansiedad) propone traducir y validar un instrumento
occidental y usarlo también para poder obtener datos comparables.

107
Los resultados serán condensados en material culturalmente adecuado para poder realizar
algún tipo de devolución a la comunidad de los mismos.

Los autores proponen que ese mismo instrumento será el que podrá usarse al final de una
intervención psicosocial para medir el impacto de la intervención.

Resultados de las Listas Abiertas de problemas como consecuencia del Genocidio de 1994 en
Uganda
Problema Ranking Número de personas que
citaron el problema
Pobreza 1 41
Carencia de alimento 2 40
Falta de personas cercanas (por cualquier causa) 3 25
Desconfianza / interrupción de relaciones de amistad 4 23
Gran número de viudas y huérfanos 5 20
Carencia de cosas básicas de subsistencia - tierra, techo, 6 20
abrigo
Enfermedad (física) 7 15
Trauma Mental (Guhahamuka) 8 14
Falta de motivación / esperanza 9 14
Ausencia de justicia 10 14
Mucha gente en prisión, lo que causa escasez y que las 11 13
personas de fuera deban cuidar de ellos.
Carencia de escuelas 12 11
Discapacidades y Minusvalías Físicas 13 7
Pena (Agahinda) 14 7
Ignorancia 15 7
Programas del gobierno para reasentamiento campesino 16 5
Embriaguez 17 5
Desgana de cambiar nada 18 4
(Fuente : Bolton et alt, 1996)

Las personas que mencionaron “trauma mental” (Guhahamuka) elaboraron el concepto


con una o más de las descripciones siguientes:
• perder la mente
• sensación de aislamiento
• deseos de cometer suicidio
• carencias afectivas, de amor
• sensación de estar desesperado
• sensación que su vida no tiene sentido
• sensación de que mejor sería estar muerto
• envidiar a los muertos
• no tener ninguna esperanza.

El modo en que esto repercute en el funcionamiento diario tiene que ver (en el orden que
se obtuvieron, en el caso de hombres) con dejar de cuidarse, dejar de cultivar la tierra, no llevar
la casa, no hacer trabajo manual, no planear el futuro de la familia, no participar en tareas
comunitarias, no acudir a reuniones, no acudir a entierros y no hablar con los demás.

Esta metodología es interesante por la aproximación etnográfica que hace a la realidad.


Pero hay un enfoque eminentemente clínico subyacente que coloca el foco sobre el malestar
individual (expresado respecto a si mismo, la familia o la comunidad) y la repercusión en la

108
funcionalidad individual. No toma en consideraciones otros elementos y conceptos cuyo núcleo
de definición no es el individuo (ver más adelante). Por tanto, la propuesta, que puede adaptarse
de múltiples maneras a otros contextos y fines, plantea algunas reflexiones imprescindibles en la
construcción de instrumentos comunitarios :

1. ¿Es la comunidad una suma de individuos? Uno de los elementos más complejos a la
hora de construir indicadores comunitarios es que solemos preguntar a personas. Las
comunidades no hablan sino por boca de sus miembros. Esto en parte es compensado
cuando preguntamos a cada persona no por él mismo, sino por su comunidad.

Un objetivo deseable sería construir indicadores que tomen a la comunidad como


centro, y que no considere a la suma de problemas individuales como equivalente
a problemas de la comunidad.

2. Aunque si deben hablar todos los miembros de la comunidad. Lo que no significa que
las medidas ideales debieran ser en el contexto siempre de grupos o asambleas. Eso
puede conllevar, a la postre, que sólo algunas voces sean oídas. Hacer entrevistas
individuales a una muestra aleatoria de miembros de la comunidad garantiza que será
oída la opinión en una cierta intimidad y reserva de todos los miembros, incluidos los
sectores excluidos, minoritarios o que no suelen delegar su opinión.

3. ¿Dónde poner el foco? ¿En los “síntomas” y “síndromes”, aunque estos sean definidos
desde la cultura (visión médica) o en elementos psicosociales relevantes? ¿En el daño o
también en las formas cómo las comunidades enfrentan las dificultades diarias?

Entrevistas semi-estructuradas en población general

Una de las formas más potentes de trabajo de que disponemos es el uso de entrevistas
semi-estructuradas, realizadas en forma de diálogos con una cierta estructura conductora, y con
contenidos pensados desde la situación y el contexto, la problemática a abordar y la cultura,
combinando elementos idiosincrásicos y dependientes de la visión que la propia comunidad tiene
de sí (visión emic), con otros que procedan de extrapolaciones a partir de elementos ya
conocidos de trabajo en otras situaciones en las que el equipo ha estado dando apoyo,
acompañando o facilitando procesos (visión etic). Hay, desde ésta óptica, un proceso que,
dependiendo de las circunstancias y el momento, podrá basarse más en elementos elaborados por
el equipo o en elementos definidos por un trabajo previo con las personas afectadas, pero que
debe tender, idealmente, a basarse en ambos.

109
¿Qué preguntar?

Equipo Psicosocial Comunidad

Aspectos clave Cuestiones abiertas con enfoque


en el trabajo psicosocial puramente emic
[Fase de trabajo conceptual]

Subgrupo
pequeño: -Creación de categorías
Refinado - Preguntas semi-abiertas o cerradas usando
conceptual conceptos o incluso acotaciones literales
procedentes del trabajo previo.
[Fase de Cuantificación]

Ejes comunes relevantes en el - Ejes clave en este - Cuestiones consideradas desde una
Ejemplos de los tres grupos de preguntas que pueden potencialmente formar parte de una

trabajo psicosocial, bien contexto particular óptica local


conocidos por el equipo - Elementos relevantes a la
problemática a abordar
Liderazgo, cohesión P.e., en un programa con niños ¿Cuáles son los principales
comunitaria, formación de de la calle : problemas de la comunidad?
identidad de grupo / - Uso de drogas (inhalantes) ¿Qué es lo que más le preocupa a
entrevista semi-estructurada de diagnóstico (y por tanto de evaluación).

individual, Ayuda mutua, . Medidas directas (ventas de usted en este momento de cómo
Derecho consuetudinario, latas de pegamento en zonas están las cosas…. (en su vida /
Fuentes y flujos de críticas) familia / vecindario / comunidad…).
información, Rumores, . Medidas indirectas (p.e. ¿Cómo sabe usted que alguien que
Participación Comunitaria, urgencias hospitalarias ha sufrido [violencia] (….) se
Sistemas de toma de mensuales en pediatría por encuentra mal y pudiera necesitar
decisiones, Fortalezas inhalación). ayuda?
percibidas por el grupo, - Uso de servicios sociales ¿Cómo sabemos cuando una
Debilidades percibidas por el o de salud comunidad ha sido golpeada por la
grupo, Potencialidades y - Estrategias para resolver violencia? ¿En qué repercute [la
Oportunidades percibidas por problemas prácticos (comida, violencia] en la vida entre los
el grupo, Miedos, Percepción alojamiento…) vecinos o con las autoridades?
de la violencia, Uso del - Contacto (tipo y
tiempo libre, Futuro y frecuencia) con la familia de Ejemplos :
Esperanza, Percepción de origen - Sri Lanka: ¿Qué hacer con las
control sobre la propia vida - Violencia de/hacia viudas? (situación de máxima
comerciantes desprotección e indigencia en la
- Denuncias y actuaciones comunidad)
policiales - Angola: Meninos enfetichados,
- Formas de subempleo… ¿cómo puede manejarlo la
comunidad?
- Guatemala: Ambivalencia de la
comunidad hacia las patrullas de
Autodefensa Civil y su doble rol de
victimas y victimarios

110
Construcción de una Escala de Afrontamiento Comunitario

Así como existen numerosas medidas en salud mental de carácter individual, existen muy pocas
de carácter comunitario, que intenten la monitorización de aspectos relevantes de la dinámica de un grupo
en una situación de crisis 19 .

Es imposible delimitar una escala de uso universal (como no la existe a nivel individual o
familiar) dado que existen muy diversos elementos potencialmente relevantes en el trabajo
psicosocial y comunitario. Su importancia relativa dependerá del contexto (urbano / rural,
pautas culturales), el tamaño del grupo, las características sociodemográficas o la historia
previa compartida.
La psicología social y la experiencia del trabajo comunitario en diferentes contextos muestran la
siguiente lista de elementos potencialmente relevantes

Factores potencialmente relevantes, desde una perspectiva psicosocial en la dinámica


de un grupo que comparte una situación de crisis
1. Sentido de pertenencia a grupo
2. Identidad compartida – Identidades múltiples en coexistencia / Polarización
- Polarización social, “todos somos vecinos”, el caso vasco…
3. Dar significado a la experiencia (lógica compartida que dé sentido a la acción)
4. Búsqueda de soluciones comunitaria / pequeño grupo / individual
5. Confianza - Sinceridad / Desconfianza - Engaño
6. Solidaridad - Apoyo Mutuo / Insolidaridad
7. Diálogo – Espacios de palabra / Privatización del daño
8. Seguridad / Miedo
9. Existencia de Información / Confusión - Rumores
10. Sistemas horizontales – continuos / verticales – fragmentarios de flujo de la
información
11. Dignidad – Humanización / Humillación - Cosificación
12. Rutinas diarias - Normalización / Caos
13. Participación directa / delegada / nula
14. Sistemas de toma de decisión unipersonales / grupo / Comunitaria
15. Sistemas de liderazgo
16. Manejo cooperativo / competitivo / violento de conflictos
17. Iniciativa – Creatividad / Pasividad
18. Creencia en las propias posibilidades del grupo
19. Percepción positiva / negativa de futuro.
20. Reevaluación predominantemente positiva / negativa de los hechos
21. Presencia / carencia de espacios para emociones positivas (espacios lúdicos –
encuentros)

Fuente : Elaboración propia.

19
La más utilizada en Psicología Comunitaria es la Sense of Community Scale (McMillan & Chasis (1986)) conceptualmente
diseñada para estudios comunitarios en comunidades norteamericanas y dificil de usar en otros contextos. El Banco Mundial ha
desarrollado un sistema de indicadores que denomina Medidas de Capital Social, desarrollando un amplio programa de
implementación internacional de los mismos. Puede consultarse el marco teórico, propuestas de escalas y ejemplos de proyectos
en que se han utilizado en la página Web del programa (http://www.worldbank.org/poverty/scapital/). Aplicables a grandes
grupos de población y basados, en su mayoría, en el uso de las estadísticas oficiales de una determinada zona geográfica, tienen
una aplicación limitada para la planificación o la monitorización de programas psicosociales.

111
Proceso

A lo largo de la definición de la EACC y en el transcurso de la evaluación suele ser una


buena medida el constituir una pequeña comisión en que estén las partes implicadas
(organización, comunidad, líderes...). Cada una de ellas tendrá sus propias prioridades de
evaluación. En la medida de lo posible sería deseable poder tomar en cuenta las diferentes
ópticas y necesidades. Por ejemplo, para una autoridad municipal puede ser importante saber si
la población percibe que está bien informada, mientras que para un líder comunitario, saber, por
ejemplo, si la gente desea que para mejorar el orden se pongan normas y horarios para distribuir
el trabajo comunitario a realizar, o si por el contrario esto generaría rechazo y sensación de
imposición.
Haya o no un grupo de trabajo, cuando se tienen los resultados de la evaluación es
aconsejable – como venimos repitiendo una y otra vez - contrastarlos con las partes implicadas
antes de elaborar el informe final. Es una fase previa a la devolución formal y tiene que ver con –
en su forma extrema, consensuar las conclusiones - y en su forma más suave, dar la oportunidad
a cada uno de matizar aspectos o aportar información, argumentos o propuestas adicionales a las
conclusiones provisionales de quienes redactan el documento de síntesis..

Técnica

Elaborar una Escala de Cohesión Comunitaria consistirá en tomar aquellos elementos


potencialmente relevantes al grupo y al contexto y construir un instrumento con dos partes: (a)
una cuantitativa en la que se interroga a través de preguntas cerradas por éstos elementos
considerados clave (b) una cualitativa en que se pide a la persona que profundice en su respuesta
o se le pregunta por otros aspectos, anotándose y transcribiéndose la respuesta para análisis
posterior.
El instrumento es (auto)administrado a una muestra aleatoria de personas del colectivo o
comunidad 20 . Con un grupo importante de voluntarios entrenados previamente, el proceso puede
ser muy rápido. El resultado final, que puede combinarse con datos procedentes de grupos
focales o entrevistas a informantes clave, llevará a la detección de fortalezas / debilidades y por
tanto, a posibles vías de acción, susceptibles de ser analizadas con una tabla de decisión-acción.
Bajo un proceso de investigación-acción participante sería el propio grupo el que, al recibir
devolución de los resultados, decidiría futuras líneas de acción.

Se incluyen a continuación los tres ejemplos de Escalas de Afrontamiento y Cohesión


Comunitaria (EACC) diseñadas y usadas en los estudios citados al principio del libro y dos
adicionales: la del programa de Menores no Acompañados citado al hablar del sociograma y el
del proceso de IAP con familiares de personas desaparecidas en Chile :

1. EACC utilizada para analizar el impacto psicosocial de la desaparición forzada en familiares


y comunidades mapuches y no mapuches de Chile (Temuco, 1997)
2. EACC utilizada para realizar un diagnóstico psicosocial en los albergues El Cafetalón y
Santa Gertrudis, tras los terremotos de El Salvador de enero y febrero 2001 21 . Versión 1 (sin
20
Es difícil dar pautas del número de personas que es necesario entrevistar, pero a grosso modo, puede estimarse en
entre el 2 y el 5% del total del grupo, para un tamaño final de un mínimo de 50 entrevistas y un máximo de 500. Es
recomendable estratificar (controlar las características de las personas entrevistadas por el equipo al final del día
para tener, al final del proceso, un número similar en las variables consideradas clave (p.e. genero, etnia o grupo de
edad) – ver anexo sobre muestreo y cálculo del tamaño muestral-..
21
En colaboración con Priscila Cervellón, el equipo de la Univ. Centroamericana Jose Simeón Cañas y el equipo de
MSF-H. Pueden verse los resultados del proceso y un análisis de los mismos en Pérez-Sales et alt (2005) y
Vázquez,et alt (2004).

112
hipótesis de partida). Versión 2 (De monitorización a los 6 meses, y partiendo de los
resultados de la Versión 1 para cerrar parcialmente las respuestas).
3. EACC utilizada para realizar la monitorización de un programa de atención a Menores No
Acompañados en la calle en Ceuta (MSF-E, 2002) 22
4. EACC utilizada para realizar un estudio sobre impacto psicosocial de los procesos de
exhumación de masacres en Rabinal (Guatemala, 2003) 23
5. EACC utilizada para realizar un estudio sobre impacto psicosocial y estrategias de
afrontamiento individual y comunitario tras el atentado del 11 de marzo del 2004 en
Madrid 24

22
En colaboración con Zohra Abaakouk.
23
En colaboración con Susana Navarro, Sara Fresno y el equipo de ECAP – Guatemala.
24
En colaboración con Carmelo Vázquez.

113
Guía de entrevista semi-estructurada del proceso de investigación-acción “Impacto
psicosocial de los procesos de ejecución extrajudicial y desaparición forzada desde una
perspectiva indígena” (1997-98).

FRASES I P A
1 1a. No me cambiaría de casa porque de algún modo él está aquí.
1b. Yo siempre cocino más, porque siento como que podría aparecer en cualquier momento.
1c. Su ropa la tengo limpia y seca. Aunque no sé bien por qué, pero eso siempre será así.
1d. Como que ni tengo ganas de comer, yo siempre lo esperaba, comíamos juntos.
2 2a. Mi viejo era de su casa, se lo llevaron por error, porque un mal vecino le denunció.
2b. A mi hermano se lo llevaron por equivocación. El era muy trabajador, tranquilo y no participaba en nada,
menos en política.
2c. Prefiero no saber lo que pasó. ¿Para qué remover nada?.
3 3a. Aún hoy tengo miedo de contar lo que sé porque es posible que haya gente que pueda usar lo que contemos
y haya represalias. Nos pueden matar o desprestigiar.
3b. No estoy muy segura de poder hablar con confianza, porque tal vez no pensamos igual.
4 4a. Hay que conformarse. Así es la suerte del pobre, cada vez que trata de levantarse lo aplastan más.
4b. Yo pienso que en el mundo jamás va a haber justicia, siempre es así.
4c. No quiero más problemas, de ahora para adelante no más complicaciones, trabajar en paz. La pena la llevo
dentro.
4d. Yo no permito a mis hijos que se metan en nada, sus estudios, la casa y punto.
5 5a. Hemos resistido tantos años porque hemos sabido callar.
5b. Para salir adelante lo más sabio es hacerse notar lo menos posible y decir sí.
5c. La gente sabe, pero no quiere decir.
5d. Es mejor no meterse en nada, porque siempre lo engañan a uno.
6 6a. Hay cosas que no puedo recordar aunque quisiera.
6b. No quiero contar, no quiero recordar ese momento. Cuando desapareció, contaba lo que los demás querían
oír, lo que realmente me dolió no se lo conté a nadie.
6c. Me niego a hablar de ese tema. Me provoca demasiado dolor.
7 7a. Para no llorar y sentir la tristeza, multiplicaba el número de actividades y permanecía siempre ocupada en
cosas.
7b. Tapé la rabia y el dolor profundo que me produjo la muerte de mi hermano con el trabajo.
8 8a. El llanto, el dolor, el amor, eran símbolos de humillación y de ser menos.
8b. A mi marido no le pude llorar porque tenía muchos ojos encima de mí.
9 9a. El Juan no deja de venir de vez en cuando a verme; vino una vez a encargarme a los niños. Fue un sueño,
pero para mí fue real. Me sentí bien.
9b. Aún me despierto asustada por la noche por todo lo que sucedió.
9c. Suelo tener malos sueños.
1 10a. Yo no puedo ir a funerales porque no veo al finado, me parece que es mi familiar.
0 10b. Aún ahora a veces no puedo dormir o me despierto de noche y le doy muchas vueltas en la cabeza a todo
lo que pasó.
10c. Recordar algunos episodios me provoca llanto y soy incapaz de expresar lo que siento.
1 11a. Yo no puedo dormir tranquila, yo le reté esa mañana. Cuando se fue me miró muy triste y nos quedamos
1 con esa amargura.
11b. No hice todo lo que podría haber hecho para evitar lo que pasó.
11c. Hay razones para que nos sintamos culpables: ¿Por qué estoy yo viva y él no?. Mejor hubiera sido irse...
1 12a. Tantos años de lucha no han servido para nada. Estamos peor que antes.
2 12b. Las ideologías políticas han muerto.
1 13a. Mi viejo le dedicaba mucho tiempo a los demás, demasiado según nosotros, y quién le agradece; incluso
3 nos humillan ahora.
13b. Casi todos nos dieron la espalda.
13c. Yo sentía que no había nadie de confianza para hablar los problemas. Me sentía sola.
1 14a. A pesar del tiempo que ha pasado, la gente hace recuerdos de él.
4 14b. Nunca me he sentido sola, siempre ha habido gente que me ha acompañado.
14c. Nunca me había dado cuenta de cuanto lo querían y respetaban hasta que desapareció.
1 15a. Ahora nos falta todo, él traía las cosas y siempre trataba que no falte nada.
5 15b. Desde que no está no tenemos ropa, él compraba esas cosas. Ahora tengo que ver que alcance para cenar.
15c. Desde que él desapareció siempre he tenido problemas de encontrar trabajo.
1 16a. En las noches le cuento mis penas, también los avances de nuestros hijos, y lo hago en silencio para que
6 no crean que estoy loca. A mí me parece que está aquí, esté o no esté.
16b. Muchas veces hablo con él. La gente ve que muevo los labios o que digo alguna palabra y entonces me
callo para que no piensen mal, pero me gusta conversar todo con él.
1 17a. Me duele mucho la cabeza cada vez que me acuerdo de eso.
7 17b. En estos últimos años no he dejado de tener dolores. Estoy mal físicamente y los médicos no encuentran
que tengo.
17c. De esa época me han quedado ahogos, problemas de estómago, dolor de huesos... No estoy bien.
1 18a. A mí lo único que me queda es seguir su camino...
8 18b. Durante mucho tiempo lo que más quería era morir vengándolo.
18c. A veces imagino que todo vuelve a suceder pero que yo actúo distinto y las cosas terminan bien.

114
18d. Morir sería volver a encontrarme con él.
18e. Viví muchos años odiando.
1 19a. Desde aquello he perdido la capacidad de relacionarme con los demás. No sé por qué perdí esa capacidad
9 de relación, pero me niego a entrar en una relación más profunda.
19b. Tengo una tristeza que no se me quita desde que no está. A veces necesito llorar para que se me quite la
pena.
19c. Como que se me quitaron las ganas de reír. Ya no tengo alegría.
19d. Desde entonces la familia se desarmó, se deshizo.
19e. A mí me cambió la vida. Mis proyectos desaparecieron. Toda mi vida cambió y no nos hemos recuperado.
2 20a. A raíz de lo sucedido, yo quiero seguir las ideas de mi padre, pero con más fuerza, porque él era un gran
0 hombre y estoy orgulloso de él.
20b. Yo sigo sus ideas. El se jugó por los pobres, como nosotros, y yo también. Nunca me voy a quedar
callada, me siento orgullosa de él.
20c. A los muertos no se les llora, se les imita.
2 21a. Para encender un fuego hay que saber prender el fuego, si no, nos quemamos. El no sabía a lo que nos
1 exponía.
21b. Por su culpa nos vinculan a sus ideas.
21c. Fue un inconsciente, nos arrastró a todos.
21d. Quisiera verlo para decirle lo mal que lo pasamos por su culpa.
2 22a. El día antes que se fuera dijo que le tiritaban las piernas... Y le dijimos "algo le va a pasar". Le
2 recomendamos que se cuidara, pero no hizo caso.
22b. Yo tuve un aviso de que algo malo iba a pasar.
2 23a. Ahora no tenemos a quien preguntarle, él era el pilar de la casa.
3 23b. Mi papá murió. Cuando me convencí de que había muerto, tomé sus ideales. Es como una fuerza de él
que siempre me acompañó.
23c. Aunque yo nunca sería capaz de hacer lo que hacía él, no puedo dejar de admirarlo.
2 24a. Yo exijo que se investigue quien lo mató y todo lo que sucedió, porque no fue ningún perro el que
4 mataron...
24b. Dejamos de creer en la legalidad, en las leyes. No se puede confiar en el Estado.
24c. Hemos buscado por todas partes durante años.
24d. Necesito que se conozca la verdad.

115
Guía de entrevista sobre factores de afrontamiento comunitario en situación de crisis. El
Salvador (2001).

La primera versión corresponde a la línea base, cuando no existían hipótesis de partida de cuales
podrían ser las respuestas de la población. A los seis meses se realizó un estudio de evaluación
de impacto del programa y de monitorización, y se realizó una segunda versión de la escala en la
que se cerraban algunas de las preguntas en base al conocimiento que ya se tenía de las
respuestas en la primera ronda. Esto aumenta la precisión de las respuestas y tiene un valor
confirmatorio y de profundización.

Versión 1. (Basal)

Quisiera decirle una serie de cosas que suelen ayudar a la gente a enfrentar los problemas
para ver qué piensa usted., si me puede decir cuáles cree que más se han dado en el caso de aquí.

1. Dar significado a la experiencia. ¿Por qué cree que han ocurrido?

¿Cree usted que hay alguna razón para que se den los
terremotos?.

SI NO
2. Búsqueda de soluciones comunitarias. ¿Puede dar un ejemplo?

¿Considera usted que han logrado unirse para encontrar


solución a las cosas?.

SI NO

3. Autocontrol Emocional ¿Qué hizo para controlarse?

¿Cuándo se sintió mal, usted solo encontró la forma de


sentirse mejor?
¿Qué consejo daría a otra gente que viva la misma situación?
SI NO

4. Actividades Lúdicas ¿Recuerda alguna actividad que le gustó?

¿Siente usted que las actividades recreativas para niños y


adultos organizadas en el albergue le ayudaron?

SI NO

5. Prevención comunitaria de nuevas catástrofes ¿Cómo podría mejorar la preparación de la gente para otra
vez?
Después de lo que ha vivido ¿se siente más preparado para
enfrentar otro desastre?

SI NO
6. Participación. Mantener el control sobre la propia vida. ¿Qué cosas tendrían que hacerse para que usted sienta que
está participando más?
Sintió que su opinión fue considerada a la hora de tomar
decisiones relacionadas con su vida?

SI NO

116
7. Apoyo informativo. ¿Cree usted que fue la vía más adecuada?

¿Se ha sentido usted tranquilo de que estaba bien informado


de las cosas que pasaban?

SI NO

¿De qué forma se ha dado cuenta de las cosas que han pasado
en la comunidad?
8. Afrontamiento religioso.
¿Tuvo facilidades dentro del albergue para practicar sus
creencias religiosas?
¿Qué papel han jugado sus creencias religiosas para enfrentar
esta situación?

MUY IMPORTANTE
POCO O NADA IMPORTANTE

9. Mantener vínculos de confianza. Compartir la ¿Qué tipo de apoyo le han dado?


experiencia.

¿Ha logrado tener nuevos amigos en el albergue? Si responde NO: ¿Qué se podría hacer para mejorar esta
situación?
SI NO

10. Aprendizajes previos / Tradición oral. ¿Qué cosas sabía usted o decían ellos?

¿Ha sido importante lo que había aprendido usted hace años o


lo que han enseñado las personas mayores acerca de sus
experiencias en otros desastres?
- inundaciones
- terremotos
- erupciones volcánicas etc

11. Respeto a la dignidad personal. ¿Cuándo?

¿Se ha sentido usted humillado (que no le respetaban) alguna


vez en el albergue por el modo como funcionan las cosas?

SI NO

12. Normalización de la vida cotidiana. ¿Qué otras actividades le ayudarían más aún?

¿Qué actividades que ha realizado son las que más le


han ayudado a normalizar su vida?

13. Percepción de las fuentes externas de autoridad. ¿Qué ha hecho falta?

¿Ha sentido usted que las autoridades han apoyado las


necesidades de la comunidad?

SI NO
14. Confianza en el futuro. ¿Por qué?

¿Cómo se ve usted y su familia dentro de dos años?

PEOR QUE ESTAMOS


IGUAL QUE ESTAMOS
MEJOR QUE ESTAMOS

15. Reevaluación y aprendizaje positivo. ¿Por ejemplo?


Con todo lo que hemos hablado, ¿cree usted que después del
terremoto ha descubierto en usted cosas nuevas para enfrentar
situaciones como éstas?

117
16. Vivencias emocionales positivas ¿Qué momento fue?
A pesar de todo lo que ha vivido en estos meses, ¿puede
recordar algún momento en que se sintió feliz?

Información general

Nombre:
Género: Edad: Tienda:
Comunidad de Procedencia:
Albergue:
¿Forma parte de algún comité dentro del albergue?

Pregunta para el entrevistador.


Tal y como se ha desarrollado la entrevista usted diría que esta persona :

1. No está afectada emocionalmente.


2. Parece tener problemas de ansiedad importantes (necesitaría apoyo).
2.5. Parece tener problemas de ansiedad, pero no creo que necesite atención
3. Parece tener problemas de depresión importantes (necesitaría apoyo).
3.5 Parece tener problemas de depresión, pero no creo que necesite atención
4. Creo que tiene problemas emocionales de otro tipo (especificar)

5. No sé. Con lo que hemos hablado no puedo decirlo.

Versión 2. (a los 6 meses) Monitorización y evaluación del trabajo psicosocial.

1. Dar significado a la experiencia.


¿Cree usted que hay alguna razón para que se den los terremotos? ¿Por qué cree que han ocurrido?
Son hechos de la naturaleza / Castigo de Dios, por culpa de la violencia, por el pecado / Otros
(especificar)
Según lo que usted dice: ¿Cree que lo más sabio es aceptar el destino y resignarse o luchar contra él?

Aceptar las cosas como son / Cambiarlas.


¿Cómo se podría hacer?.
2. Búsqueda de soluciones comunitarias.
¿Considera usted que han logrado unirse para encontrar solución a las cosas?.
¿Puede dar un ejemplo?
3. Mantener vínculos de confianza. Compartir la experiencia.
¿Ha logrado tener nuevos amigos en el albergue?
¿Qué tipo de apoyo le han dado? ¿Cree usted que es bueno conversar los problemas con los demás?.
4. Estilos de Regulación Emocional
¿Cuándo está usted triste o enojado por algo, qué suele hacer :
Resignarse y aguantar / Protestar y quejarse / Hablar y organizarse para resolverlo / Otras opciones :
5. Actividades Lúdicas
¿Siente usted que las actividades recreativas para niños y adultos organizadas en el albergue le
ayudaron?
¿Recuerda alguna actividad que le ayudó?
6. Prevención comunitaria de nuevas catástrofes
Después de lo que ha vivido ¿se siente más preparado para enfrentar otro desastre?
¿Cómo podría mejorar la preparación de la gente para otra vez?
7. Participación. Mantener el control sobre la propia vida.
Sintió que su opinión fue considerada a la hora de tomar decisiones en el Albergue?
¿Le gustaría participar más?
¿Cómo?

118
8. Apoyo informativo.
¿De qué forma se ha dado cuenta de las cosas que han pasado en la comunidad?
¿Se ha sentido usted tranquilo de que estaba bien informado de las cosas que pasaban?
(Si contesta No : ¿ Qué sugeriría usted para estar mejor informado?)
9. Afrontamiento religioso.
¿Qué papel han jugado sus creencias religiosas para enfrentar esta situación? :
Muy importante / Poco importante
¿ La fe le ayudó sobretodo a:
Resignarse / Sentirse más unido a otros / A participar en actividades para mejorar el albergue
¿Tuvo facilidades dentro del albergue para practicar sus creencias religiosas?.
10. Aprendizajes previos / Tradición oral.
¿Ha sido importante lo que había aprendido usted hace años o lo que han enseñado las personas mayores
acerca de sus experiencias en otros desastres? inundaciones, terremotos, erupciones volcánicas etc
¿Qué cosas sabía usted o decían ellos?
11. Respeto a la dignidad personal.
¿Cree que en la medida de lo posible las condiciones del albergue intentan respetar la dignidad de las
personas?. (Si contesta No: Qué aspectos le han resultado humillantes?) :
¿Y el trato que recibe la gente? (Si contesta No : ¿Cuándo no ha sido así?):
12. Normalización de la vida cotidiana.
¿Qué actividades que ha realizado son las que más le han ayudado a normalizar su vida?
¿Qué otras actividades le ayudarían más aún?
13. ¿Alguien de la familia perdió su trabajo con el terremoto y ya no volvió a recuperarlo?.
¿Qué profesión tenía?
¿Trabaja alguien en la familia para poder ayudarse económicamente todos?.
¿En qué trabaja?
14. Percepción de las fuentes externas de autoridad.
a. ¿Ha sentido usted que las autoridades de la Alcaldía han apoyado las necesidades de la comunidad?
b. ¿Y las autoridades en el Albergue?
c. ¿Existe un líder de ustedes en este sector?
d. ¿Cree que representa a la gente?
¿Puede poner ejemplos?
15. Confianza en el futuro.
¿Cómo se ve usted y su familia dentro de dos años?. Peor que estamos / igual que estamos /
Mejor que estamos
¿Por qué?
16. Reevaluación y aprendizaje positivo.
Con todo lo que hemos hablado, ¿cree usted que en todos estos meses desde que pasó el terremoto ha
descubierto en usted cosas nuevas que no conocía?
¿Por ejemplo?
17. Vivencias emocionales positivas
Cuando piensa en todo lo que ha ocurrido en estos meses, ¿se le vienen a la mente más recuerdos buenos
o recuerdos malos?
‰ Malos. ¿Puede recordar algún momento bueno?.
‰ Bueno. ¿Por ejemplo?.
(1) Las preguntas en negrita se contestan si/no si no se indica lo contrario (valoración cuantitativa). Las preguntas en
cursiva son semiabiertas o abiertas y se anota la respuesta literal (valoración cualitativa).
(2) Esta entrevista se complementaba con (a) un cuestionario instrumental en el que se preguntaba por la percepción
del damnificado y sugerencias respecto a la gestión de cocina, atención en salud, Agua, Letrinas y Lavaderos,
Escuela, Seguridad, Rumores y Problemas prácticos entre comunidades (b) una medida ultra breve de despistaje de
estado emocional individual.

119
Escala de Afrontamiento y Cohesión Comunitaria (proyecto Menores No Acompañados).
Ceuta (2002)

Te voy a leer unas frases y quisiera saber si estas de acuerdo o no con ellas. Si quiere poner algún
ejemplo, puedes hacerlo también.

No es necesario respetar el orden de las preguntas. Es mejor que la conversación sea


fluida y relativamente espontánea que ser muy estrictos en el orden.

1. Iniciativa – cooperación. Aquí nadie coopera cuando tenemos un problema. Es difícil conseguir que los
otros niños participen.
2. Identificación con la comunidad. Me siento parte de un grupo. Creo que todos nosotros formamos un
grupo.
3. Futuro. Veo el futuro de nosotros de una manera pesimista. No sé que va a ser de nosotros.
4. Actividades y Tiempo libre. Entre nosotros encontramos todo lo que necesitamos. Incluso en el tiempo
libre procuramos estar juntos. Lo pasamos bien.
5. Liderazgo. Algunos de nosotros son de algún modo líderes, personas que son respetadas por las demás.
6. Control sobre la propia vida. Me considero una persona libre. Creo que tengo libertad para decidir cómo
quiero organizar mi vida.
7. Comunicación. Entre nosotros se hablan los problemas.
8. Apoyo Mutuo. Entre todos se ayuda a las personas que tienen problemas Por ejemplo, si alguien está
enfermo se busca cómo ayudarle.
9. Solidaridad. Cuando surge algún problema, nos unimos todos.
10. Seguridad. Uno puede estar tranquilo, porque sabe que aquí nadie le va a hacer daño o le va a robar. En
general me siento tranquilo y seguro dentro del grupo.
11. Cohesión social. Si tienes alguna iniciativa, acabas haciéndolo solo. Es mejor que cada una mire por sí
mismo.
12. Deterioro. En nuestra vida cada vez las cosas van a peor.
1. Todas las preguntas se contestan si/no (valoración cuantitativa) y a continuación se pide un ejemplo
(valoración cualitativa). Según quien fuera el entrevistado se usaba la terminología “niños” o “jóvenes”.

Esta escala era parte de una batería de entrevista que servía como sistema monitorización del
programa psicosocial (ver anexo).

120
Escala de evaluación del impacto comunitario de los procesos de exhumaciones. Guatemala
(2003 / 2004)

Le voy a leer unas frases y quisiera saber si está de acuerdo o no con ellas. Si quiere
poner algún ejemplo, puede hacerlo también
Ítems o preguntas
1. Cooperación.
M.B. La gente colabora en las tareas a realizar en la comunidad
M.F. La exhumación (nos) ayudó a que en adelante la gente colaborara más en las tareas a realizar en la
comunidad
2. Identidad.
M.B. Nos sentimos parte de un grupo
M.F. La exhumación (nos) ayudó a sentirnos parte de un grupo
3. Futuro.
M.B. No vemos el futuro con esperanza
M.F. La exhumación no (nos) ayudó a ver el futuro con esperanza.
4. Liderazgo.
M.B. En la comunidad hay lideres que son respetados por los demás como autoridad
M.F. La exhumación hizo que aparecieran nuevas personas respetadas por los demás como autoridad.
5. Percepción de control sobre la propia vida.
M.B. Creemos que no se pueden cambiar las cosas
M.F. La exhumación (nos) hizo ver que no se pueden cambiar las cosas
6. Miedo y Privatización del daño.
M.B. No tenemos miedo para platicar de los problemas
M.F. La exhumación (nos) ayudó a tener menos miedo para platicar de los problemas
7. Percepción de Apoyo Mutuo + Polarización – 6 (Confianza)
M.B. Nos ayudamos cuando hay problemas
M.F. La exhumación (nos) hizo ayudar más cuando había problemas
8. Percepción de Seguridad.
M.B. Hay inseguridad y violencia en la comunidad
M.F. La exhumación hizo que aumentara la inseguridad y la violencia en la comunidad
9. Polarización – 1
M.B. Siento mucho enojo hacia alguien
M.F. La exhumación hizo que sintiera mucho enojo hacia alguien
10. Polarización – 2
M.B. Siento deseos de venganza hacia alguien
M.F. La exhumación hizo que sintiera deseos de venganza hacia alguien
11. Polarización – 3
M.B. Entiendo por qué los que hicieron el daño actuaron así
M.F. La exhumación me ayudo a entender por qué los que hicieron el daño actuaron así
12. Polarización – 4
M.B. Puedo perdonar a quienes hicieron daño
M.F. La exhumación hizo que pudiera perdonar a quienes hicieron daño
13. Polarización – 5
M.B. Existen grupos enfrentados que no se pueden entender entre sí
M.F. La exhumación hizo que existieran grupos enfrentados que no se podrán entender entre sí
1. M.B. Medida Basal (Entrevista antes de la exhumación). M.F. Medida Final (Entrevistas tras la
exhumación).
2. Todas las preguntas se contestaban si/no (valoración cuantitativa) y a continuación se pedían ejemplos que
se anotaban textualmente (valoración cualitativa).

121
Escala de impacto comunitario tras los atentados del 11 de marzo del 2004 (Madrid)

Búsqueda de sentido -1
1. ¿Ha sido capaz, hablando en términos de seres humanos, de comprender a las personas que cometieron
el atentado?
Búsqueda de sentido - 2
2. ¿Ha sido capaz de dar algún sentido político o comprender en términos políticos lo sucedido el 11 de
Marzo?
Emociones básicas - 1
3. La respuesta dada por los ciudadanos ¿le crearon sentimientos positivos?
Emociones básicas - 2
4. ¿La respuesta dada por los ciudadanos le crearon sentimientos negativos?
Aprendizaje / Crecimiento postraumático - 1
5. Con todo lo que ha hablado, pensado y vivido después de lo sucedido en relación al atentado, ¿cree que
estará mejor preparado personalmente para afrontar situaciones semejantes en el futuro?
Aprendizaje / Crecimiento postraumático - 2
6. ¿Ha habido en su opinión algo bueno en todo lo relacionado con el atentado?
Aprendizaje / Crecimiento postraumático - 3
7. ¿Cree que hay que algo que se pueda aprender de la experiencia del atentado?
Sistema de creencias - 1
8. ¿Han jugado sus creencias religiosas o su sentido espiritual un papel positivo en su reacción a lo
sucedido el 11 de Marzo?
Sistema de creencias – 2.
9. ¿Han jugado sus creencias políticas un papel positivo en su reacción a lo sucedido el 11 de Marzo?
Solidaridad y Apoyo Mutuo
10. ¿Ha apreciado solidaridad del resto de la gente hacia lo sucedido?
Pertenencia a grupo / Cohesión social - 1
11. ¿Cree que lo sucedido con el atentado le ha servido a usted para sentirse más cercano a otros
ciudadanos o sentirse más perteneciente a la sociedad?
Pertenencia a grupo / Cohesión social - 2
12. ¿Cree ese trágico acontecimiento ha servido para cohesionar más a nuestra sociedad?
Pertenencia a grupo / Cohesión social - 3
13. ¿Cree que lo relacionado con el atentado ha servido para dividir más a nuestra sociedad?
Información
14. ¿Se sintió bien informado por las autoridades de lo que iba sucediendo tras la catástrofe?
Dignidad
15. Si ha necesitado ayuda, ¿se ha sentido bien atendido por los centros y profesionales? (Si no, deje esta
pregunta sin contestar)
Creencia en la bondad del ser humano
16. ¿Ha sentido que su confianza en el ser humano se desmoronaba de algún modo tras el atentado?
Creencias básicas de seguridad - 1
17. ¿Siente después de la catástrofe que su propia seguridad está amenazada?
Creencias básicas de seguridad - 1
18. ¿Tras el atentado, cree que ha empeorado la seguridad en el mundo cercano a usted?

Y por último,
Futuro / Esperanza - 1
19. ¿Cómo ve el futuro de la gente en general desde el 11 de Marzo?
Futuro / Esperanza - 1
20. ¿Cómo ve su futuro personal desde el 11 de Marzo?
Todas las preguntas se respondían como : Nada / Un poco / Moderadamente / Bastante / Mucho, excepto la 19 y 20
: Mucho peor / Peor / Igual / Mejor / Mucho mejor.

122
Metodologías para evaluar el grado de satisfacción. Metodologías visuales.

Para evaluar el grado de satisfacción son posibles tantas metodologías como formas de
compartir en grupo. Desde escenificaciones y sociodramas, hasta la discusión en grupos
pequeños o grandes. Quisiéramos citar, al menos, por ser menos conocidas y de resultados
brillantes, las técnicas visuales. Son útiles en contextos en que se dispone de pocos recursos y
tiempo y no se desea una cuantificación a efectos de evaluación posterior. Pueden considerarse
por ejemplo:

Video - Foro Comunitario. El equipo de trabajo, tras explicar la metodología a la comunidad y


realizar un minucioso trabajo previo de preparación y concienciación de los líderes y la gente,
realiza una jornada en que se estimula que las personas interaccionen con una cámara de video.
Se realizan entrevistas entre las personas bien de manera individual, bien en grupo, buscando una
actitud desenfadada y hasta cierto punto lúdica, pasando la cámara de un lado a otro, yendo a
buscar a una persona cuando ha sido nombrada por otra etc. Todo el material resultante es
editado hasta obtener un video de 30 a 60 minutos de duración. Posteriormente se organiza una
o más jornadas de discusión proyectando el video. La gente conversa de cómo se ven, de las
emociones que se despiertan, de las opiniones que salen... Con todo ello se elabora un
diagnóstico y surgen propuestas.

Técnica de Foto-Vida o Foto-Voz. Algunas personas, de entre los propios afectados, o un


fotógrafo profesional invitado por la comunidad, realiza fotografías del contexto y de las
personas en las que lo que importa no es la calidad sino la representatividad. Una vez reveladas
un grupo de informantes-clave (por ejemplo los líderes de la comunidad o personas
representando a diferentes sectores) escogen 10 ó 15 fotografías que les parecen especialmente
importantes o representativas de lo que está ocurriendo o de cómo se están haciendo las cosas. A
continuación se hacen entrevistas con las personas afectadas siguiendo una metodología
parecida a la de la encuesta, pero en la que se van dando a la persona entrevistada las fotos y se
le pregunta a partir de ellas como es su vida cotidiana, que piensa, que dificultades tiene, qué
propuestas se le ocurren. (Puede consultarse algunos ejemplos en diferentes países en la página
Web http://www.photovoice.com).

Uso de dibujos o collage para analizar el lugar y la organización. Una tercera versión es
utilizar dibujos o collage que representen a la comunidad. Se realizan grupos de 4-5 personas.
Entre todas dibujan en un papelógrafo grande el lugar en que están viviendo. A partir del
conjunto de dibujos se inicia la discusión sobre las debilidades, carencias o fortalezas que lo
definen. En un segundo momento se pasa a las cuestiones organizativas que pueden influir sobre
porqué las cosas están de ese modo. Con un collage la filosofía sería la misma. La diferencia es
que en este caso se utilizan productos del entorno (ramas, hojas, piedras...) o material de
deshecho (papeles viejos, cartones, plástico cortado en trocitos...). El equipo realiza una maqueta
del lugar en que están viviendo. La discusión empieza a partir de las maquetas.

Uso de dibujos o collage para analizar el estado de las personas. La misma técnica puede
usarse para ver el estado de las personas. Aquí se pide a los niños que dibujen su comunidad o a
personas de su comunidad. Después se juntan a los adultos en grupos, en especial a los padres, y
se les van mostrando los dibujos, trabajando en base a dos preguntas: ¿Qué es lo que se ve (en el
dibujo / collage)? Y una vez puesto en común, pasar a ¿qué es lo que no se ve (en el dibujo /
collage)?

123
Esta segunda pregunta va a funcionar de hecho como una hoja en blanco en la que los adultos
van a proyectar sus propias ideas sobre cómo está la comunidad, las debilidades y carencias. A
partir de ahí puede empezar a generarse discusión e ideas con los adultos.

124
Validación transcultural de instrumentos

La necesidad de poder comparar datos entre diferentes zonas ha llevado a la necesidad de


la adaptación transcultural de instrumentos. En general son muchas las razones por las que éste
proceso no sólo es complejo, sino hasta cierto punto imposible. Hay autores (Van Ommeren et
alt, 1999) que proponen como única posibilidad un trabajo conceptual y de validación ítem a
ítem, en un largo proceso que toma meses.
En general, debe distinguirse entre el proceso de traducción (que implica literalidad y que
busca no tanto capturar los conceptos subyacentes como ser fiel al original) y el de
interpretación (en el que se busca el concepto, aunque las palabras para llegar a ello puedan ser
completamente distintas). La versión final debería poder conjugar traducción e interpretación.
El cuadro adjunto describe el proceso siguiendo ese ideal y asumiendo la presencia de
miembros biculturales del equipo independientes en cada uno de los pasos.

En realidad, al final es la fase piloto la que determina la validez o no de la traducción.


Cada persona introduce toques personales o su peculiar manera de ver las cosas desde cada
cultura. Pero en cada cultura hay también estratos socioeconómicos, áreas geográficas o
generaciones diferentes y es la prueba de realidad de la fase piloto la que determina si el
resultado final es (a) Comprensible (¿entiende la gente lo que se le pregunta? ¿Son las preguntas
significativas? ¿Responden a conceptos socialmente reconocibles?) (b) Congruente (¿Tienen las
preguntas una lógica interna? ¿Hay un hilo conductor desde la óptica de la población?) (c)
Consistente (el patrón de respuestas obtenido muestra concordancia entre cosas entre las que
cabe esperar concordancia 25 – p.e. tristeza con cansancio, y no con hiperactividad -. (d) con
resultados plausibles y en cierto punto similares a los obtenidos en otras versiones validadas y
usadas en contextos diferentes (las medias y puntos de corte obtenidos en la fase piloto entran
dentro del marco de lo esperable – ver procedimientos de obtención de puntos de corte en
instrumentos psicométricos en anexos).

25
Estadísticamente esto se corresponde con el análisis de consistencia interna (cálculo del
coeficiente α de Cronbach (procedimiento ROC Análisis en SPSS).

125
Pasos para la validación transcultural de un instrumento de medida: Pasos para la
validación del General Health Questionnaire (GHQ) del castellano a lengua quechua.

Se requiere, en la situación ideal, un equipo de 5 personas: 3 personas quechua hablantes


nativas, 1 persona castellano hablante nativa y que no necesita entender quechua y 1 persona
que tiene el castellano como lengua materna pero que entienda también quechua.

Vía 1.

Paso 1. Una persona quechua hablante nativa (es decir, que el quechua es su idioma
materno), traduce el cuestionario del castellano al quéchua.
Paso 2. Otra persona distinta, también quechua-hablante nativa, contratraduce esa versión
de nuevo al castellano.
Paso 3. Una tercera persona, nativa en castellano, compara el original con la contra-
traducción y posteriormente se sienta a discutir con los dos traductores los matices y
diferencias que ha observado. Entre los tres pactan un redactado de los ítems

Vía 2.

Paso 1. Una persona quechua-hablante nativa hace una reinterpretación quechua del
cuestionario. Es decir, intenta ver cual sería el significado cultural de la frase, la idea que
hay detrás de ella, y busca un concepto similar dentro de la cultura quechua, una frase que
aunque no corresponda con la frase castellana, recoge la misma idea del autor.
Paso 2. Una segunda persona, quechua hablante, pero con castellano como lengua materna,
contra-interpreta el cuestionario al castellano
Paso 3. Una tercera persona, nativa castellano, compara el original y la contra-
reinterpretación, señalando las diferencias entre ambas. En reunión con los dos traductores
pacta la versión familiar.

Acuerdo
Las dos personas que han hecho la síntesis en la vía 1 y en la vía 2, se intercambian sus
versiones finales y las comparan entre sí. En una reunión final del equipo se consensúa la
versión final.

Prueba Piloto
Esta se administra a un pequeño grupo de personas (por ejemplo 60 alumnos quechua
hablantes (nativos o no) de secundaria de un colegio rural), junto a una escala global de
malestar psicológico en castellano (SRQ-20), de la que ya se dispone en la actualidad de
puntos de corte. Gracias a ello se puede:
o Evaluar : (a) aceptabilidad (b) nivel de comprensión de los ítems
o A través de un sencillo análisis estadístico – ver anexos del libro - se obtienen los
puntos de corte de nuestra escala

126
El papel de la cultura

Independientemente de los elementos propios de la validación transcultural de un


instrumento, la cultura juega un papel omnipresente en todo el proceso. Sólo algunos datos como
reflexión:

- En algunas sociedades no se acepta que se realicen preguntas directas (p.e. la


comunidad etiope en Israel). Es necesario recurrir siempre a preguntas abiertas.
- Existen sociedades en las que hay una marcada tendencia a manifestar acuerdo con
quien pregunta, especialmente si éste es desconocido o extranjero. La educación y el equilibrio
son, en este caso, una prioridad social de rango superior.
- Algunas veces la persona contesta lo que cree que el entrevistador quiere oír (p.e. que
está en una situación física mala), con la idea (muchas veces cierta) de que no recibirá ayuda si
su caso no es suficientemente severo.

Es necesario ser muy consciente de las connotaciones de las diferentes respuestas dentro
del marco cultural, un elemento que puede detectarse en fases piloto o “probando” la entrevista
con personas biculturales.

Entender el contexto político

Además, en la evaluación de proyectos, entender el contexto político, como se ha dicho


ya, es clave. Las preguntas pueden ser:
- ¿a quién (inicialmente no previsto) le puede ser útil nuestra acción?
- ¿qué efectos no intencionados de carácter político pueden estar sucediendo?

“La comunidad de Morelia siempre estuvo unida. Fue una de las comunidades más unidas.
Por eso se instaló en esa zona un Aguascalientes. Aquí fue uno de los puntos del Encuentro
Internacional. Hoy la comunidad está dividida y ese ha sido un trabajo bien planificado. Por un
lado se han producido entradas del Ejército en momentos clave del ciclo productivo, la
economía de la gente es frágil. La entrada en los momentos de siembra o recogida de la milpa
significan que va a haber hambre. A continuación aparecen los programas de las
organizaciones vinculadas al gobierno y ofrecen láminas de zinc o camiones de grava u otro
tipo de programas y la gente está mal. Siempre hay algunas familias que aceptan. Entonces ellos
dicen que para que el programa se pueda desarrollar toda la gente debe estar de acuerdo, que
tiene que haber acuerdo de la comunidad. Y ahí empieza la división y el enfrentamiento. O
cuando el Municipio decide impulsar un programa de educación y pide a ONGs internacionales
o a gente amiga capacitación para los promotores de la comunidad, aparece justo en ese
momento, cuando nunca lo había habido, una organización de la parte del gobierno y oferta a la
comunidad un programa con materiales gratuitos y un salario para los educadores, con título
oficial etc. El Municipio Autónomo sabe que es mentira y que es parte de la estrategia y decide
rechazar ese programa como una forma de resistencia, pero ya los educadores están divididos y
la mitad o más abandonan la capacitación que se estaba realizando. Otro caso que fue bien
claro es cuando el Municipio Autónomo decide detener la deforestación por un chingo de
razones. Al poco SEDESOL ofrece excelentes precios por la madera. Algunas familias deciden
desoír al municipio e ir a talar árboles. Otra gente intenta detenerlos y bloquea los caminos
para que los árboles no salgan y se llega al enfrentamiento físico entre la gente. Otra vez la
misma táctica. (…) Todo eso son factores que han ido provocando la actual división de Morelia

127
y los enfrentamientos internos.”. (Testimonio de un miembro de la Junta Directiva del
Aguascalientes de Morelia. De Pérez-Sales, Santiago, Álvarez. Ahora apuestan al cansancio.
Chiapas: Fundamentos psicológicos de una guerra contemporánea)).

128
A modo de recordatorio…

La siguiente lista pretende servir como guía rápida de chequeo de elementos de una
evaluación de un programa psicosocial y la tabla adjunta, como un banco de cuestiones
potenciales a tener en cuenta.

‰ Es importante que la evaluación pueda ser pactada previamente por todas las partes
implicadas (población, organizaciones, autoridades...). [Por ejemplo, desde sus respectivos
parámetros, un programa puede estar muy bien evaluado por las autoridades mientras que en cambio es rechazado por
la población o es valorado positivamente por las organizaciones pero no por las autoridades locales o por un equipo
técnico externo etc]. ¿Refleja la evaluación la posición de la mayoría de actores?

‰ Es especialmente importante separar la satisfacción de la población y su grado de


participación de otros indicadores de proceso y de eficacia. Búsqueda del máximo énfasis
en demostrar eficacia.

‰ Indicadores de calidad global del diseño.


- Tipo de participación de la población en el diagnóstico y la elaboración del programa.
- Adecuación del método de diagnóstico participativo usado al contexto, las necesidades
y las posibilidades de comprensión y participación de la población con la que se ha
desarrollado el proceso.
- La participación ¿ha venido condicionada por algún tipo de incentivo económico o
promesa?. ¿Se ha evaluado la sustentabilidad?
- Los técnicos externos que apoyan el programa ¿han actuado de manera sintónica al
contexto cultural y social? ¿Han sabido integrarse con la población?

‰ Indicadores del grado de participación de la población (convendría haberlos recogido a lo


largo de todo el proceso).
- Alguna medida de las personas implicadas en comisiones al principio y al final del
proceso.
- Indicadores del número de reuniones y asambleas
- Evolución de la asistencia promedio a las reuniones o asambleas
- Número de grupos auto formados desde que se inició el proceso.
- Número de consultas hechas a la población. Participación en las mismas.
- Comisiones y reuniones para la toma de decisiones. Nivel de eficiencia de sus
decisiones evaluado por el grado de cumplimiento de los acuerdos en actas.

‰ Indicadores referidos a la coordinación interinstitucional.


- Acción conjunta entre las estructuras de representación de la población y las estructuras
políticamente responsables de las tareas de coordinación y provisión de servicios
(municipales, regionales, estatales, internacionales).
- Grado de inserción y de respeto logrado por las formas de representación de la
población.
- Grado de participación de las estructuras locales (sistema de educación, de salud etc) y
en qué medida el proceso ha sido enriquecedor para ellos
- Indicadores referidos a la ejecución del plan de trabajo.
- Los medios utilizados ¿han sido proporcionados a las necesidades detectadas?
- Existiendo cuando existen razones políticas o de seguridad de fondo, ¿Ha existido
duplicidad de estructuras? ¿Se han reforzado las estructuras normales de la zona evitando
crear sistemas paralelos?

129
- ¿El programa tiene un inicio y un final establecidos? ¿Estaba prevista la sustentabilidad
o la transferencia a recursos normalizados desde el principio?
- Los representantes del tejido social ¿han participado en el proceso de ejecución con
capacidad decisiva real en los órganos de coordinación creados? ¿Cuál ha sido el
organigrama de hecho que ha funcionado durante la ejecución? ¿Corresponde al que se
había diseñado desde el principio?

‰ Indicadores referidos a los resultados obtenidos.


- Cambios en las redes sociales antes y después del programa. Enriquecimiento de redes y
elaboración de nuevos contactos y formas de apoyo (ver mapa de redes).
- Los resultados del programa ¿han supuesto abrir nuevas alternativas concretas de vida
para la población? ¿Obedecían a necesidades percibidas por la población o a necesidades
detectadas por los técnicos? ¿Hubo algún proceso de consenso de objetivos?
- Evaluación del clima social: existencia de una visión optimista /pesimista respecto al
futuro y a las potencialidades individuales / comunitarias, antes y después de la
intervención. Sensación de control y confianza en las posibilidades propias.
- Evaluación del costo personal. ¿Para las personas participantes, el programa ha sido una
fuente de reuniones y cargas a las que no se ve mucha utilidad práctica, o una manera de
coordinarse y optimizar los esfuerzos y recursos?

‰ Indicadores socio-políticos.
- Los resultados del programa ¿han creado alguna forma de dependencia de la
comunidad respecto a alguna entidad o instancia de poder? ¿Puede llegar esto a constituir
una vulnerabilidad para la gente?
- ¿Los resultados del programa han sido capitalizados por algún partido político o
instancia de poder con fines electorales o populistas?.

130
Elaboración del informe final

Puede considerarse como una estructura estándar habitual para un informe técnico:

(1) Resumen
(2) Describir el programa (origen, objetivos, participantes, personal etc)
(3) Descripción del modo en que se ha hecho el proceso de evaluación
(4) Resultados del proceso de evaluación
- Impresiones de cada una de las partes. Valoraciones cualitativas.
- Evaluaciones en base a indicadores
(5) Discusión de estos resultados
(6) Comentarios sobre relación coste-beneficio
(7) Conclusiones y recomendaciones.

Pero los documentos que salen destinados a un proceso de investigación-acción no


pueden tener esta estructura. Deberán desgranar datos junto con la voz de los protagonistas,
frases literales, emociones y textos con los que quien lo lea pueda identificarse. Estar redactado
como un espejo en que los grupos y las comunidades puedan verse reflejados. En estos casos es
mejor un redactado que hilvane las ideas principales y deje los datos en anexos, evitando en lo
posible salpicar con números la información.

1. Resumen
2. ¿Para qué?
3. ¿Cómo lo hicimos?
4. ¿Qué contó la gente?
Cosas para pensar…

131
Anexos
Anexo 1. Diseños quasi-experimentales en la evaluación de proyectos
psicosociales.
Darío Páez Rovira

La evaluación de intervenciones en poblaciones en peligro es una actividad poco


frecuente. Recientemente se ha insistido sobre la importancia de la evaluación de la dimensión
psicosocial de las intervenciones. Además de las dificultades prácticas evidentes, la evaluación
de los aspectos psicosociales requiere tener indicadores válidos culturalmente, y que eviten tanto
el reduccionismo psicologicista como una concepción "sobresocializada" de las personas. El
reemplazo del análisis del contexto y la dinámica social por la aplicación a la sociedad del
diagnóstico de PTSD es un ejemplo de lo primero. La suposición de que todos los sujetos de una
cultura colectivista y de alta distancia al poder actúan de la misma manera es un ejemplo de lo
segundo.
El hecho de que a lo largo del libro se haya defendido una metodología de trabajo de
investigación-acción participativa y se haya hecho alusión a los problemas de carácter ético de
los diseños clásicos de investigación caso-control aplicados al contexto de los programas
psicosociales, no significa que no sea posible intentar metodologías quasi-experimentales que
permitan aproximaciones razonablemente robustas.

Los diseños clásicos de evaluación de intervenciones psicosociales: el diseño de medidas


repetidas o series temporales y el diseño quasi-experimental

La forma más sólida de demostrar que una determinada intervención psicosocial provoca
cambios medibles sería, en una situación ideal, tomar medidas en diferentes momentos y,
suponiendo que todas las condiciones de alrededor se mantienen estables (situación “de
laboratorio”), medir los cambios que aparecen entre las diferentes medidas. Es evidente que en la
vida real, fuera del laboratorio, las circunstancias son cambiantes de manera constante.
Lejos de las condiciones experimentales, en los estudios reales, el nicho ecológico
cambia constantemente y hay múltiples variables que no controlamos (y probablemente
múltiples co-variables que ni tan siquiera conocemos (p.e. los desplazados por la violencia pasan
por momentos diferentes, los rumores o las noticias políticas afectan al grupo, las condiciones
económicas fluctúan etc etc).
Con todo, tomar diferentes medidas del mismo fenómeno en el tiempo intentando
controlar el resto de variables, sigue siendo la mejor manera de intentar demostrar relaciones
causa-efecto entre un programa psicosocial y el resultado del mismo.
Existen dos variantes: (a) el diseño longitudinal (que consiste en una encuesta repetida
de 2 a 8 mediciones. 2 sería simplemente antes y después; hasta 8 si “monitorizamos” las
medidas) o (b) el diseño de series temporales (que consiste en una medida realizada a un menor
número de sujetos pero muchas más veces o estimaciones repetidas de un agregado de casos,- al
menos más de 50 medidas en diferentes momentos). Ambas situaciones permiten asegurar
empíricamente la precedencia temporal de la causa sobre el efecto, pero, como decíamos, tienen
las limitaciones de las variables y relaciones omitidas potenciales.
Un ejemplo de diseño longitudinal, sería la medición repetida de las variables estrés,
apoyo social, y depresión en refugiados y comparar como evolucionan después de una
intervención (supongamos de Médicos del Mundo). Cuando se trabaja con indicadores que se
pueden obtener en grandes series que se repitan (mortalidad infantil anual, p.e.) se puede evaluar

132
como evoluciona éste después de una intervención psicosocial (tendríamos varias decenas de
datos estadísticos posteriores sobre los que comparar nuestras medidas actuales).
Una primera limitación importante de este diseño es que supone que se realizan registros
fiables y regulares. En muchos países estos o no suelen existir o son poco fiables o han sido
obstaculizadas por las situaciones de conflicto. Una segunda limitación es que es poco probable
que existan indicadores psicosociales (es más probable que existan indicadores
epidemiológicos). Las preguntas sobre satisfacción con la vida y salud, felicidad confianza
institucional, confianza en la gente, percepción de control, participación en asociaciones
disponibles en la encuesta World Values Survey aunque limitadas pueden servir como
indicadores – el WVS incluyen encuestas sobre muestras representativas de más de 80 naciones
del mundo y que obtienen información sobre el 70% de la población mundial. Hay menos
información sobre Africa y países islámicos en todo caso-. La mortalidad infantil es un ejemplo
de indicador epidemiológico. Las medidas de “capital social” como el número de asociaciones
cívicas existentes en una determinada zona geográfica sería un ejemplo de indicador psicosocial.

El diseño quasi-experimental en su versión fuerte agrega otro criterio de validez: la


precedencia y planificación de la causa

Otra variante menos potente, pero que también tiene una notable robustez metodológica
es el diseño clásico de caso-control. La situación ideal de laboratorio es aquella en la que los
sujetos son asignados de modo completamente al azar a uno de los dos grupos. A uno de los dos
grupos se le aplica la situación experimental (p.e una situación de inducción de conducta pro-
solidaria) y al otro o una situación control (p.e. llenar un cuestionario sobre dibujos animados) o
simplemente la no intervención.
¿Cómo puede aplicarse este modelo a un programa psicosocial?
El primer supuesto (asignación aleatoria de sujetos al programa o a “lista de espera”) es
éticamente inaceptable y probablemente irrealizable en la práctica. En algunos casos si se ha
utilizado el grupo control con otra situación (p.e. la comunidad A arranca un programa
psicosocial, mientras una comunidad B de características similares inicia un programa de
canalización de aguas fecales). Bajo estas condiciones el único dilema ético (que puede
resolverse con alguna forma de “consentimiento informado grupal” adecuado a la cultura) es
perturbar a la población de la comunidad B con preguntas y cuestionarios idénticos a los de la
comunidad A.
El supuesto de “no intervención” significaría, por ejemplo, que para constatar el efecto
beneficioso de los grupos de auto-ayuda en refugiados, se asignaría al azar un área de la ciudad
con ese programa y otra actuaría de control. En este caso el soporte social recibido a través de los
grupos de ayuda mutua sería la variable que diferenciaría a una y otra. En la versión débil se
compararía el efecto del estrés en la depresión de los refugiados que se integraron a grupos de
auto-ayuda con los que no lo hicieron -cuidado que los grupos al inicio sean iguales en nivel
depresivo y otras variables relevantes (nivel social, experiencia de guerra, etc.)-. En la versión
fuerte (claramente inviable en este caso) se asignaría al azar la pertenencia o no al programa de
grupos de auto-ayuda.
Un criterio contextual necesario para inferir causalidad es que la respuesta de los sujetos
o unidades afectadas a uno u otro tratamiento no resulte influida por a) el mecanismo por el que
el tratamiento se asigna (es decir, si alguien decide a través de un método cualquiera quien es
candidato o no a grupo de autoayuda y por tanto hay un sesgo de selección) y b) por el
tratamiento que otras unidades reciben (es decir, ¿es el grupo control realmente un grupo
control?).
Hay después otros problemas suscitados en la práctica. En la mayoría de estudios
publicados no se especifican suficientemente los procedimientos utilizados, los programas son de

133
una duración limitada (con frecuencia uno o dos años) y los períodos de seguimiento cortos (se
miran los efectos inmediatos). Además de los niveles de confianza utilizados, el tamaño de la
muestra, la magnitud del efecto del tratamiento y la fiabilidad de los instrumentos de medida son
muy variables en los diferentes estudios y dificultan en muchos casos llegar a conclusiones
determinantes. No son menores las dificultades éticas y prácticas planteadas para conseguir, en
diseños evaluativos de intervención psicosocial, muestras grandes y homogéneas y grupos de
control sin tratamiento que acepten períodos de seguimiento amplios sin experimentar un
abandono del contacto.

El meta-análisis como una forma de comparar una intervención con las intervenciones
acumuladas previas.

El meta-análisis posibilita la reevaluación "post hoc" de las evaluaciones de los


resultados psicosociales y, de este modo, proporciona una medida objetiva y cuantitativa para
evaluar la bibliografía sobre resultados, constituyendo una alternativa al diseño clásico de grupos
no equivalentes. Por ejemplo, podemos buscar todas las evaluaciones sobre la disminución del
TEPT en refugiados, producidas por grupos de auto-ayuda y psicoterapia grupal.
El meta-análisis es una técnica sumamente sencilla cuyos cálculos pueden realizarse a
mano y de la que existen diferentes guías disponibles.
La inexistencia de grupo control en muchas intervenciones, necesaria para obtener el
máximo rendimiento en la aplicación del meta-análisis, se puede compensar de dos modos. Una
primera forma es comparar las medias de los grupos de nuestra intervención con la media global
del instrumento en los grupos de control de investigaciones previas, por ejemplo, la media de un
cuestionario en nuestros grupos de autoayuda versus la media en una población general de
refugiados, la media en poblaciones de refugiados de una escala de PTSD. Este procedimiento
presupone la existencia de grupos diagnósticos homogéneos y la utilización de instrumentos de
medida comunes. Es decir, sólo es válido si aceptamos que el PTSD es un síndrome
relativamente homogéneo y existe una escala válida y fiable para evaluarlo. Una segunda
alternativa, consiste en comparar nuestros resultados con una muestra amplia de sujetos
"normales" administrándoles la misma escala.

Diseño de línea base no-casual construida: Comparación del grupo de intervención consigo
mismo antes o con una muestra de sujetos disfuncionales y/o funcionales amplia.

Se trata, por decirlo en breve, de tener una base de datos confeccionada previamente con
datos normalizados. En este caso, un diseño de evaluación de programas de intervención poco
costoso y factible de aplicación es el diseño de línea base no-causal construida. En este diseño, el
grupo de control no equivalente es reemplazado por la comparación con una puntuación
baremada de una muestra representativa.
Por ejemplo, si se construyera un baremo de percentiles (a partir, por ejemplo, de una
muestra representativa de 800 sujetos refugiados de una zona en conflicto) sobre ansiedad,
depresión, estrés post-traumático, apoyo social, o usando una versión adaptada al contexto de la
escala de cohesión comunitaria etc., se podría evaluar la eficacia de las intervenciones
psicosociales en un país determinado mediante la comparación con este baremo. En lugar de
comparar la evaluación pretratamiento con la evaluación post-tratamiento, con las limitaciones
de validez interna ya señaladas, se puede comparar el percentil medio en el pre-test con el
percentil medio en el post-test. La diferencia entre ambas medias permite estimar la fuerza de la
intervención y facilita los procedimientos de acumulación evaluativa mediante el meta-análisis.
Asimismo, si se igualan los grupos en edad, sexo y nivel de ingresos, por ejemplo, se pueden

134
comparar el pre-test y el post-test del grupo de tratamiento con un grupo apareado de la muestra
representativa.

Se ha criticado que los diseños de evaluación sólo contrastan el cambio cuantitativo sin
tomar en cuenta la significación clínica de éste, así como que los diseños evalúan el cambio
grupal medio y no el individual. El coeficiente de cambio preciso y la evaluación del cambio
individual permiten enfrentar este problema. Su descripción detallada puede hallarse en textos de
estadística. Su descripción detallada puede hallarse en textos de estadística. Aunque en esencia
consisten en encontrar un punto de corte entre la media de la población con problemas (p.e. 5 en
satisfacción con la vida o control de ella en una escala de 1 a 10) y una población bien adaptada
y funcional (p.e. 8), tomando en cuenta la dispersión de respuestas de al menos la población
normal (supongamos que la desviación típica sea de 1 en la población normal). En este caso el
punto de corte sería 5+8/2= 6.5 menos 1, igual a 5.5

Estudios naturalisticos.

Hablando strictu senso, la mejor manera de demostrar que las mejorías que ha habido en
la población son debidas a la acción de un programa y no al simple paso del tiempo (que casi
todo lo cura) sería el tener
Grupo Inicial
una comunidad “control”.
Existen toda clase de
razones éticas para
desaconsejar esto (¿cómo
hacer un diagnóstico
comunitario en una
comunidad en la que
Abandonan el programa y
Abandonan el programa posteriormente no se va a
Permanecen en el programa
hasta el final permanecen en la misma zona
y cambian de ambiente
intervenir?). Hay ocasiones
en que esto es posible
hacerlo sin que haya este
impedimento ético,
típicamente cuando se hace el diagnóstico en una zona entregándose posteriormente a las
autoridades sanitarias de esa zona y sobretodo a la propia comunidad, quienes decidirán o no
tomar estos datos en cuenta para desarrollar sus propios planes de acción. Volver de nuevo al
cabo de unos meses si nos permitirá obtener datos con los que comparar la eficacia del trabajo
realizado en nuestra (y su) zona y extraer conclusiones comparativas en función del tipo de
acciones desarrolladas en cada caso

Estudios retrospectivos.

La forma menos potente de medir el cambio es a través de estudios retrospectivos. Estos


están sometidos a sesgos de memoria y a sesgos de evaluación subjetiva (cuando haya simpatía
hacia el programa o el equipo o tendencia a gradar la respuesta será del estilo “un poquito mejor
si estamos…”, y si hay cierta animadversión la tendencia será a que cualquier estado pasado fue
mejor…).

- Estudios retrospectivos caso-control. La persona puntúa o responde cómo estaba antes y


cómo está ahora, o se le pide evaluar el cambio. Se compara con un grupo que no participó en el
programa.

135
- Estudio retrospectivo sin
grupo control. Basado solo en
las puntuaciones de las
Metan
personas. Una posibilidad que
alisis disminuye los sesgos consiste
en considerar dos grupos
procedentes de la misma
comunidad. A unos se les pide
Estudios longitudinales
(Monitoriz; Pre-Post) cómo estaban antes y a otros
Análisis de series diferentes cómo están ahora y
temporales
se comparan las puntuaciones.
Aunque se requiere un fuerte
Estudios caso-control tamaño muestral, se evita en
- Con grupo con programa distinto
- Naturalistico parte los sesgos de deseabilidad
- Diseño de línea causal no construida
social de respuesta.

Evaluación del cambio


Estudios retrospectivos
- Caso-control individual y no sólo el cambio
- Sin caso control, balanceando grupos medio del grupo

Una de las críticas


Diseños quasi-experimentales en evaluación de programas psicosociales, clásicas que se ha hecho a la
evaluación de intervenciones es
que, al basarse en comparaciones de medias, oculta los cambios individuales. Un tratamiento
puede aparecer como más eficaz, aunque mejore el estado de algunas personas solamente.
Asimismo, las medias pueden permanecer constantes y no revelar que un subgrupo ha mejorado
y otro empeorado. La validez individual es un componente y una profundización de la validez
interna. Se trata de una versión del clásico problema de la falacia ecológica y de la desagregación
de resultados. La validez individual es importante cuando los mecanismos estudiados (relación
entre dimensiones de actitudes, afectividad y procesos cognitivos, en general) se han formulado
teóricamente en un nivel individual.
Una solución a este problema es examinar las puntuaciones individuales de cambio,
clasificar a los sujetos en tres categorías (recuperados, mejorados pero no recuperados y sin
mejoría) y aplicar el Ji cuadrado, por ejemplo como estadístico de contraste.
Se ha criticado la fiabilidad de las puntuaciones individuales de cambio porque hay una
correlación inversa entre las puntuaciones de cambio y la puntuación inicial y porque las
puntuaciones de cambio dependen del nivel inicial. La alternativa es la puntuación de cambio
tipificada, que consiste en apreciar el cambio de cada sujeto a partir del cambio medio observado
en los sujetos que han partido del mismo nivel de puntuación.
En todos los casos anteriores se mantienen las limitaciones genéricas de los diseños
cuantitativos (prestar atención a la evaluación del resultado de las intervenciones psicosociales,
pero no así a la evaluación del proceso de las mismas, es decir, a cómo funcionan y a qué tipo de
factores se atribuye el cambio del comportamiento). Su solución se asocia a la necesidad de tener
indicadores de los mecanismos procesuales de la acción causal.
Finalmente, un problema central es el de tener indicadores propiamente psicosociales,
tanto de antecedentes, de procesos como de efectos.

136
Anexo 2. Selección de la muestra y Cálculo del tamaño muestral

Una de las decisiones más complejas al abordar un estudio de tipo epidemiológico o la


monitorización de un programa es ¿a cuánta gente es necesario entrevistar y con qué
características para que un estudio sea válido?.

1. Cálculo del tamaño muestral.

El cálculo del tamaño muestral se realiza a través de una fórmula en la que debe hacerse
una hipótesis del porcentaje de respuesta si/no que se esperan.

Donde Z es el riesgo que estamos dispuestos a aceptar, definido a través de la correspondiente


puntuación Z de la curva normal tipificada (en la práctica, usando el valor estándar de p<0.05, Z
seria 1.96), p correspondería a la proporción esperada de respuestas “si” q a la proporción
esperada de respuestas “no” y “d” la precisión del dato que queremos (el margen de error).

Parece complejo, pero es muy sencillo. Miremos primero un ejemplo correcto desde el
punto de vista científico, y luego desde el punto de vista “real”.

Ejemplo: ¿A cuantas personas tendríamos que estudiar para conocer la frecuencia con que,
dentro de la comunidad, las personas consideran que existe “apoyo mutuo”?.

Los valores estándar que la mayoría de investigadores propondrían sería:

Seguridad = 95%; Precisión = 3%: Proporción esperada = asumamos que puede ser próxima al
5% (5% consideran que hay apoyo mutuo y 95% que no)

donde:

• Zα 2 = 1.962 (ya que la seguridad es del 95%)


• p = proporción esperada (en este caso 5% = 0.05)
• q = 1 – p (en este caso 1 – 0.05 = 0.95)
• d = precisión (en este caso deseamos un 3%)

Deberíamos entrevistar a unas 200 personas.

137
Si no tuviésemos ninguna idea de dicha proporción deberíamos utilizar la opción de 50%
si y 50% no, lo que nos da el máximo tamaño muestral. En nuestro caso más de 1000 entrevistas.

La realidad es mucho más sencilla. Para un estudio del tipo del que realizamos no
es necesaria una precisión tan elevada. Imaginemos que toleramos hasta un 10% de error y que
seguimos suponiendo que hay un 5% de “si” y un 95% de “no”… el tamaño muestral requerido,
repitiendo los cálculos, sería de tan solo 18 entrevistas. Si asumimos la peor situación (no tengo
hipótesis y parto del 50% “si” y 50% “no”), el resultado sería 96 entrevistas. Una situación
intermedia requeriría unas 50 entrevistas.

En resumen, y dado que generalmente preguntamos muchas cosas y es de prever que en


alguna de ellas el resultado va a ser del 50%, una buena estimación podría ser:
- estudio mínimo: 50 entrevistas (asume una proporción 2/3 versus 1/3 y un 10% de
margen de error). Aceptable en la gran mayoría de casos en que contamos con
pocos recursos y el equipo no puede dedicar quitar demasiadas energías de otras
tareas. Resultados suficientes para planificar la acción, escasos para llegar a
conclusiones de investigación.
- estudio intermedio: 100 entrevistas (asume una proporción de ½ versus ½ y un
10% de margen de error).
- estudio robusto: 300 entrevistas (asume una proporción de 2/3 versus 1/3 y un 3%
de error). Además de para planificación, los resultados pueden permitir un grado
de elaboración científica de hipótesis.
Epi Info.

Para hacer los cálculos hay diferentes programas informáticos que lo automatizan. El más
sencillo, popular y conocido es Epi Info, un programa gratuito que se descarga de la
página WEB del Centro de Control de Enfermedades de Atlanta (EUA) o de la pagina
WEB de la Organización Mundial de la Salud, que entre otros múltiples cálculos
estadísticos, incluye el del tamaño muestral.
Puede descargarse con una guía e instrucciones de la dirección:

http://www.cica.es/epiinfo/

Comparaciones entre subgrupos.

La idea expuesta es útil tanto si vamos a trabajar con una comunidad de 1000 como de
100.000 personas. El tamaño muestral no cambia… siempre que se asuma que la comunidad
tiene una cierta homogeneidad.
La cuestión se complica algo si deseamos que en las entrevistas se puedan compara las
opiniones de diferentes grupos (las denominadas “variables de estratificación”). Las variables
más típicas son género (mujeres versus hombres), edad (niños, jóvenes, adultos, adultos
mayores) o etnia. En este caso sería recomendable un tamaño algo mayor. Un criterio puede ser
intentar que haya al menos 30 personas en cada cuadrícula que se forma por el cruce de las
variables de estratificación. Así, por ejemplo, en el caso anterior, considerando género, edad (en
dos grupos) y etnia (dos etnias), tendríamos una tabla de 2x2x2 = 8 celdas, a 30 personas por
celda = 240. Necesitaríamos entrevistar a 240 personas controlando las 3 variables para luego
poder tener los datos desglosados y poder comparar las opiniones de unos grupos y otros.

Garantizar la misma representación con el menor esfuerzo: elaboración de un


cuadrado latino.

138
Para controlar las entrevistas realizadas y lograr tener al final la proporción adecuada
dentro de cada variable de estratificación, es útil usar un cuadrado latino.
Consiste en dibujar un cuadrado que contemple las variables de interés. En el caso
anterior sería:

Etnia 1 Etnia 2 A medida que se van realizando las


Joven Adulto Joven Adulto entrevistas estás se sitúan en la casilla
Hombre correspondiente. Cuando en una de ellas se llega
Mujer al número deseado (por ejemplo 30), esa casilla se
cierra. Al final del proceso se buscará entrevistar
precisamente a aquellas personas que por sus características sociodemográficas completan el
cuadrado (por ejemplo, dos mujeres adultas de la etnia 1 y un hombre joven de la etnia 2). De
este modo no se realiza ni una sola entrevista más de las necesarias.

¿A quien debe entrevistarse?

Una última cuestión tiene que ver con ¿a quien entrevistar? Existen diferentes
posibilidades:

1. Muestro probabilístico. Se puede usar cuando se dispone de un censo. En este caso se


sortea las personas a entrevistar. En el caso, por ejemplo, del estudio con familiares de
desaparecidos de etnia mapuche y no mapuche se utilizó ésta técnica. A partir del listado oficial
de víctimas del informe de la Comisión Rettig, y usando una tabla de números aleatorios de un
libro de estadística, se seleccionaron 100 casos + 30 de “reemplazo” (es decir, una previsión de
casos no entrevistables). Podría haber usado, por ejemplo, un nombre de cada veinte siguiendo el
listado alfabético.
2. Muestreo sistemático o secuencial. Asumiendo que las personas se distribuyen en un
determinado orden, se asigna una rutina de entrevista. Eso fue lo que se hizo, por ejemplo, en el
estudio con supervivientes del terremoto de El Salvador. Sabiendo el número de tiendas de
campaña que había en el albergue, se dibujó un recorrido sobre un mapa del albergue y se
entrevistó a la primera persona que atendía en una tienda sí y tres no. Si no había nadie en la
tienda designada, se reemplaza por la siguiente inmediata. En este caso había que añadir el hacer
las visitas a diferentes horarios para evitar sesgos de aquellos que durante el día iban a trabajar
fuera del albergue en la reconstrucción.
3. Muestreo estratificado. Asumiendo que tenemos diferentes variables de estratificación
y seguimos un cuadrado latino, entrevistamos a cualquier persona de esa comunidad, asumiendo
que es el cuadrado latino el que controla la representatividad de la muestra. Puede adolecer de
sesgos ecológicos si existe alguna variable de estratificación importante en la que no hemos
reparado y que no se distribuye de modo aleatorio entre toda la comunidad.
4. Muestreo por grupos. Cuando, por ejemplo, queremos comparar comunidades que son
pequeñas. Puede decidirse que el muestreo sea hace entre comunidades, pero que una vez elegida
una comunidad por azar, se intentará entrevistar a todos sus miembros.

Lo que no sería aceptable sería ni una muestra no al azar (entrevistar a quien se cruce en
el camino), una muestra de conveniencia – es decir, por comodidad- (por ejemplo entrevistar a
los familiares de una asociación de víctimas que se reúnen periódicamente y considerarlos como
representativos del conjunto de las víctimas de una región) ni una muestra autoseleccionada
(pedir con avisos o de otra forma quien desea colaborar con el estudio y entrevistar a éstos)

139
Anexo 3. Validación de Instrumentos psicométricos: sensibilidad,
especificidad y valores predictivos

Todo instrumento de diagnostico (bioquímico, psicométrico, físico o de cualquiera otra


naturaleza) debe ser útil, objetivo, económico, seguro, y éticamente aplicable como requisitos
previos para considerar su uso.
A continuación debe demostrar su potencia a través de un proceso de análisis matemático
de sus propiedades (validación) y debe ser por fin calibrado (estandarizado) en una muestra de la
población en la que se va a usar.
Los dos parámetros fundamentales para validar un test son la sensibilidad (o capacidad de
dar como positivo a una persona que efectivamente es "caso") y la especificidad (o capacidad de
etiquetar como negativo a los "no casos").
Para estudiar esto se escoge un criterio de "verdad" y comparamos para cada sujeto el
resultado del "criterio de verdad" con el de la nueva prueba diagnostica que estamos probando
siguiendo una metodología de doble ciego. Esta relación se refleja en una tabla 2x2
Dependiendo del resultado del test que estamos probando y del "criterio de verdad" que
usemos, cada individuo podrá ser clasificado dentro de una de las categorías de Verdaderos
Positivos (VP), Falsos Positivos (FP), Verdaderos Negativos (VN) y Falsos Negativos (FN).

Criterio de Verdad + Criterio de Verdad -


Test + Verdadero Positivo Falso Positivo
Test - Falso Negativo Verdadero Negativo

En base a ellos se calculan los distintos coeficientes de validación según:

Sensibilidad : VP / VP + FN Especificidad : VN / VN + FP

- Sensibilidad: Probabilidad de que el test sea + si es efectivamente un caso +. P(T+/Caso)


- Valor Predictivo Positivo : Probabilidad de que sea un Caso si el Test da resultado +.
P(Caso/T+).
- Especificidad : Probabilidad de que el test sea - si es No Caso. P(T-/No Caso).
- Valor Predictivo Negativo : Probabilidad de ser No Caso si el Test es -. P(No Caso/T-).

Eficiencia del Test

Necesitamos, a partir de estos datos, definir parámetros que nos permiten tener una idea
de la eficiencia global de nuestro instrumento de diagnostico.

Definida S como la Sensibilidad y E como la Especificidad, una primera medida es el Indice de


Youden. El Indice de Youden es un indicador de eficiencia que no depende de la prevalencia del
problema en nuestra población sino exclusivamente del grado de acuerdo entre nuestro
instrumento diagnostico y el criterio de referencia

I=S+E-1

Si la prueba diagnostica fuera optima, S + E = 2, con lo que I = 1.

140
Ahora bien, si nosotros queremos saber que tan útil es nuestro test desde un punto de
vista epidemiológico, necesitamos ponderar el rendimiento de nuestro test en función de la
prevalencia del trastornó en cuestión 26 . Independientemente de la sensibilidad y la especificidad
del test, este aumentara nuestra capacidad de diagnóstico (esto es nuestro poder de "predicción")
en función de la prevalencia del trastorno 27 .
Por ello se definen el valor predictivo positivo y el valor predictivo negativo, y se calcula
a partir de ellos un Índice de Eficiencia que tenga en cuenta la prevalencia del trastorno (el
llamado Índice de Validez del Test)

IV : S.p + E.q donde S y E son la Sensibilidad y la Especificidad, p la prevalencia


estimada y q su complementario 1-p

Sustituyendo q por 1-p y sacando factor común fácilmente se llega a :

IF : E + (S-E)p

26
Si nosotros queremos saber que tan útil es nuestro test desde un punto de vista epidemiológico, necesitamos
ponderar el rendimiento del test en función de la prevalencia del trastorno en cuestión. Es decir, supongamos que
disponemos de un test que nos diagnostica Enfermedad de Lobstein (Osteogénesis imperfecta) con una sensibilidad
del 0.9 % y una especificidad del 0,75 %, otro que nos diagnostica alcoholismo con idéntica especificidad y
sensibilidad y un tercero por fin que hace lo propio con la caries con las mismas propiedades de validación. La
osteogenesis imperfecta tiene una prevalencia de 5/100.000 habitantes mientras que la prevalencia estimada de
alcoholismo es del 5-15% de la población general latinoamericana y la de caries ronda el 90% de la población adulta
de nuestro medio. En estas condiciones, si el primer test nos da positivo, ¿las probabilidades de que esa persona sea
efectivamente un niño con osteogénesis imperfecta son las mismas que las de ser alcohólico alguien a quien el
segundo test da como positivo o las de tener caries si es el tercero el que da positivo? Por supuesto que no…
27
Aplicandolo a nuestros tres ejemplos :

Enf. de Lobstein Alcoholismo Caries

S = 0.9 S = 0.9 S = 0.9


E = 0.75 E = 0.75 E = 0.75

p = 0.000005 p = 0.1 p = 0.9

VPP : 0.000036 VPP : 0.286 VPP : 0.97


VPN : 0.999994 VPN : 0.9854 VPN : 0.45

S:Sensibilidad E:Especificidad p:prevalencia estimada


VPP : Valor Predictivo Positivo VPN: Valor Pred. Negativo

Si el primer test da + tenemos apenas 36/100.000 posibilidades de que el niño tenga Enf. de Lobstein. Nuestra
prueba es poco útil en población general porque el trastorno es demasiado raro. Una sensibilidad de 0.9 significa
que se nos "cuela" 1 caso de cada diez como Falso Positivo. Cuando la prevalencia es muy alta, la distorsión que
esto supone puede ser despreciable, pero cuando el número de positivos que esperamos es bajo, una distorsión de
ese calibre invalida el test, pese a que sus propiedades "intrínsecas" sean buenas. Justo lo contrario se observa en los
otros 2 ejemplos: En el segundo caso, la probabilidad de ser alcohólico si el test es positivo es del 28,6 %. En el
último, la probabilidad de tener caries si el test es positivo es del 97%.(*)
En los 3 casos, si tuviéramos delante un enfermo, tendríamos un 90% de probabilidades de que el test diera
positivo (s=0.9), pero su utilidad, a juzgar por la tasa de VPP es muy distinta. Y a la inversa. Un negativo del
primer o el segundo test tiene un poder predictivo mucho mayor (VPN > 0.98) que uno del tercero (VPN = 0.45).
Obviamente, para que una prueba sea UTIL, el Valor Predictivo Positivo debe ser superior a la Prevalencia
del trastorno, es decir : P(Caso/T+) ò P(Caso)
y análogamente el VPN debe ser mayor que 1-prevalencia : P(No Caso/T-) ò P(No caso)

141
Esta es la expresión matemática de lo que habíamos deducido intuitivamente: la eficacia
de un test es función lineal directa de la prevalencia p.
Dos pruebas diagnosticas pueden compararse a través de la comparación de sus Índices
de Validez para cada prevalencia posible de 0 a 1 representándolo en coordenadas cartesianas.
Son las Rectas de Validez de nuestras pruebas diagnosticas.

Sensibilidad y especificidad son propiedades intrínsecas del test. El valor Predictivo


Positivo y Negativo son propiedades aplicadas a la situación clínico-epidemiológica concreta y
dependen de la prevalencia del trastorno a estudio.

Eficiencia de un test según puntos de corte.

Un problema adicional resulta de aquellas pruebas que pueden tener diferentes puntos de
corte para clasificar en "caso/no caso" . La eficiencia de la densidad de un mapa de redes como
indicador de Bloqueo de la actividad de un grupo varia si mi criterio "caso/no caso" es Densidad
> 0,19, Densidad > 0,4 o Densidad > 1. La manera de decidir cual es el mejor criterio es calcular
la eficiencia de nuestra prueba para cada uno de los posibles puntos de corte y buscar el que
brinde un rendimiento máximo.
Lógicamente, la especificidad y la sensibilidad dependen del punto de corte que
utilicemos como criterio de "caso/no-caso" en nuestro test. Si ponemos el nivel muy alto para
considerar algo como problemático, tendremos una alta especificidad pero una baja sensibilidad
y si el nivel es muy bajo ganaremos en sensibilidad pero perderemos en especificidad. Lo
primero nos convendrá cuando queramos utilizar el test para ensayos clínicos, lo segundo cuando
pretendamos utilizarlo en estudios de detección comunitaria.

La llamada Curva de Funcionamiento Operativo de un Test o Analisis R.O.C. (Relative


Operating Curve) es la resultante de representar gráficamente la eficiencia de un test
confrontando sensibilidad y especificidad. Dado que la tendencia es a que cuando una aumenta la
otra disminuye, se representa la sensibilidad en abscisas contra el inverso de la especificidad en
ordenadas (esto es, la tasa de falsos positivos) a fin de que ambos parámetros crezcan.

Puede confeccionarse una tabla en la que para cada posible punto de corte se considere su
especificidad, sensibilidad, VPP y VPN. Según el fin del instrumento, primaremos el punto de
corte que optimice sensibilidad (criterio epidemiológico) o especificidad (criterio clínico).

A medida que aumentamos el valor del punto de corte, vamos siendo mas exigentes para
considerar a algo como problema según el test. Así, para la misma muestra, en un cuestionario
de detección de problemas de alcohol, con un punto de corte de +/- 4 (4 ítems de los 5 totales han
de ser respondidos como positivos para considerar a alguien como alcohólico) la sensibilidad
baja al 42.85% y la especificidad sube al 95.34%. : Solo vamos a detectar al 42.85% de los
alcohólicos de una comunidad, pero aquellos que sean clasificados como tales, tenemos un 95%
de probabilidades de que efectivamente lo sean.

142
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