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FACULTAD DE MEDICINA HUMANA Y CIENCIAS DE LA SALUD

ESCUELA DE TECNOLOGIA MEDICA

ALUMNO: ACUÑA CERCADO JOSE ELMER


ASIGNATURA: TERAPIA FÍSICA EN ACTIVIDADES DEPORTIVAS
CICLO: VIII
DOCENTE: Mg. T. M. FRANSHESCA VANESSA DEL CARPIO
MORENO

TEMA: “ARCO REFLEJO”

CHICLAYO - 2020
ARCO REFLEJO

1. RESUMEN

ARCO REFLEJO:

Se denomina acto reflejo al mecanismo básico de acción de toda reacción del


organismo que surge como respuesta ante un estímulo y que se realiza
mediante el arco reflejo, el cual representa la unidad morfofuncional del
sistema nervioso constituido por un conjunto de estructuras que forman las
vías nerviosas.

Las estructuras fundamentales del arco reflejo son los receptores, las fibras
nerviosas aferentes o sensitivas, los centros nerviosos, las fibras nerviosas
eferentes o motoras y los efectores.

Los receptores son las estructuras situadas en las terminaciones nerviosas,


ampliamente distribuidas en el organismo y que están especializadas en captar
los estímulos y transformarlos en excitación que se propaga como impulso
nervioso. Las fibras nerviosas aferentes o sensitivas conducen el impulso
nervioso desde los receptores hacia los centros nerviosos.

ESTRUCTURA Y COMPONENTES:

Compone de distintas partes que funcionan de manera integrada y coordinada: los receptores, las
neuronas sensitivas o aferentes, las neuronas motoras o eferentes y los órganos efectores.

a) Los Receptores

Los receptores sensoriales ubicados en las distintas terminaciones nerviosas y distribuidos por todo el
cuerpo se encargan de transmitir la información que reciben del exterior en impulsos nerviosos. Estos
receptores se constituyen de neuronas especializadas que se encargan de transformar los estímulos en
función de su modalidad, ya sea ésta visual, olfativa, auditiva, gustativa o táctil (por prensión, dolor,
temperatura, etc.)

b) Neuronas Sensitivas O Aferentes


Una vez que los receptores han captado la información del exterior, las neuronas sensitivas o aferentes
se encargan de recogerla y transmitirla hasta los centros nerviosos (la sustancia gris) de la médula
espinal, el lugar donde se va a procesar la información para poder elaborar la respuesta que mejor se
adapte a las demandas ambientales.

c) Neuronas Motoras O Eferentes


Las neuronas motoras o eferentes conducen los impulsos nerviosos de las órdenes que se han elaborado
en la médula espinal y los centros nerviosos integradores hacia los órganos efectores que van a producir
la respuesta motora. • Los centros nerviosos integradores cumplen la función de conectar las neuronas
sensitivas con las motoras, permitiendo así la transmisión de la información de una parte a otra y la
consecuente respuesta automática

d) Órganos Efectores
Los órganos efectores constituyen el último componente del arco reflejo. Son las estructuras
encargadas de ejecutar la respuesta automática e involuntaria que proviene de los centros nerviosos de
la médula espinal. Existen de distintos tipos: pueden ser glándulas exocrinas (p. ej. las glándulas salivales
o las del sudor) y músculos (p. ej. músculos esqueléticos o el músculo cardíaco).

FUNCIONES
 Tienen como objetivo prevenirnos o responder de forma rápida y efectiva ante situaciones
potencialmente peligrosas. Por este motivo han sido y son tan necesarios para nuestra supervivencia:
nos alertan cuando existe un riesgo de exposición a elementos tóxicos, a través de los receptores del
olfato; o cuando estamos a punto de quemarnos, a través de los termorreceptores.
 En definitiva, existen distintos tipos de reflejos con diferentes funciones; algunos son necesarios
desde el nacimiento y se vuelven prescindibles con el tiempo; y otros permanecen de por vida
porque cumplen una función adaptativa esencial para la supervivencia y la conservación de la propia
especie humana

ORGANOS DE LOS SENTIDOS Y TIPOS DE RECEPTORES

Clásicamente se describen 5 órganos de los sentidos: tacto, gusto, olfato, vista y oído, mientras que los
receptores se clasifican de diversas maneras, al tener en cuenta distintos criterios.

De acuerdo con la naturaleza del estímulo y el carácter de las sensaciones se distinguen: los
mecanorreceptores (sensaciones del tacto, presión, audición y equilibrio), termorreceptores (sensaciones
de calor y frío), nocirreceptores (sensación de dolor), quimiorreceptores (sensaciones del gusto y olfato) y
fotorreceptores o receptores electromagnéticos (sensación visual).

Según su localización en el organismo los receptores se pueden clasificar en 2 grandes grupos: de las
sensibilidades general y especial, los cuales a su vez pueden ser somáticos y viscerales.

Al estudiar los órganos de los sentidos hay que tener presente que los receptores no son estructuras
aisladas, sino que están íntimamente relacionados con el cerebro, y forman un sistema funcional
considerado por algunos autores como un “aparato sensorial” y denominado por Pavlov, “analizadores”,
que está compuesto por 3 partes asociadas:

1. La periférica constituida por los receptores

2. La conductora formada por las fibras nerviosas aferentes o sensitivas 3. La central localizada en la
corteza cerebral.

RECEPTORES DE LA SENSIBILIDAD GENERAL

Los receptores de la sensibilidad general están ampliamente distribuidos por el cuerpo, se localizan en la
parte somática (superficial y profunda) y en la parte visceral, constituyen los exteroceptores,
propioceptores e interoceptores.
Se pueden clasificar en 2 grupos principales: libres y encapsulados.

Entre los receptores libres o desnudos (no encapsulados) se destacan las terminaciones nerviosas libres,
las terminaciones nerviosas en los folículos pilosos y los corpúsculos nerviosos no encapsulados (meniscos
táctiles o discos de Merkel).

Las terminaciones nerviosas libres están relacionadas con la sensación de dolor y se localizan
principalmente en la piel, córnea y mucosa, donde forman un amplio plexo cuyas ramificaciones se
insinúan entre las células epiteliales de los órganos donde se encuentran.

Entre los receptores encapsulados que se encuentran en la dermis y la hipodermis se distinguen: los
corpúsculos táctiles (de Meissner), bulboideos (de Krause y Ruffini) y laminados (de Pacini)

Los corpúsculos bulboideos (de Krause) están relacionados con la sensación de frío, se ubican en el
espesor de la dermis.

Los corpúsculos bulboideos (de Ruffini) están relacionados con la sensación de calor, se encuentran en la
región profunda de la dermis, tienen la forma de un bulbo alargado

Los corpúsculos laminados (de Pacini) están relacionados con la sensación de presión, se hallan en la
hipodermis o tela subcutánea, el tejido conectivo que rodea los tendones, músculos y cápsula articular, en
las membranas mucosas y serosas.

Entre los receptores encapsulados también se destacan los husos neuromusculares y los husos
neurotendinosos situados en los músculos y tendones respectivamente, los cuales están relacionados con
las sensaciones de posición y movimiento del cuerpo

VIAS DE CONDUCCIÓN NERVIOSA

Las vías de conducción nerviosa son un conjunto de estructuras nerviosas que tienen la función de
transmitir el impulso nervioso en un solo sentido, desde la periferia (receptores) hasta los centros
nerviosos y a la inversa, desde los centros nerviosos hasta la periferia (efectores), lo que permite al
sistema nervioso la regulación e integración de todas las funciones del organismo y de relacionarlo con el
mundo circundante.

En general, las vías de conducción nerviosa se clasifican en 2 grandes grupos:

1. Vías de la sensibilidad o sensitivas (aferentes, ascendentes o centrípetas).

2. Vías de la motilidad o motoras (eferentes, descendentes o centrífugas).

VIAS DE LA SENSIBILIDA
Vías de la sensibilidad general procedente de la mayor parte del cuerpo: exteroceptiva o superficial (del
tacto, térmica y dolorosa), propioceptiva o profunda consciente (de presión, vibratoria y actitudes
segmentarias del cuerpo) e inconsciente (relacionada con el cerebelo en la regulación de la actividad
muscular), y la interoceptiva (de la actividad visceral).

Vías de la sensibilidad especial procedente de los órganos de los sentidos (gustativa, olfatoria, óptica,
auditiva y vestibular o del equilibrio estatocinético).
VIAS DE LA MOTILIDAD

En general comprende 2 tipos: cinética y estática.

• La motilidad estática mantiene el cuerpo o parte de este en una actitud o postura determinada,
mediante contracciones lentas y duraderas (contracciones tónicas).

• Las vías de la motilidad conducen los impulsos nerviosos desde los centros nerviosos superiores,
corticales y subcorticales, hasta los núcleos motores de los nervios espinales y craneales situados en la
médula espinal y el tronco encefálico, respectivamente, de donde parten los nervios que se dirigen hacia
los órganos efectores, representados por los músculos.

Estas vías se clasifican según sus funciones en 2 grupos muy relacionados:

1. Del movimiento voluntario o piramidal (tractos corticoespinal y corticonuclear)

2. Del movimiento involuntario o extrapiramidal (ejemplo, tractos tectoespinal, rubroespinal,


vestibuloespinal y reticuloespinal), que están influenciados por la acción moduladora del cerebelo y
subordinados a la corteza cerebral.
2. REPRESENT ACIÓN GRÁFICA DEL ARCO REFLEJO.

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