Presentado por: Aitana Moncayo Muñoz

Animal mitológico: Ave Fénix

Personificación: Mare Barrow (personaje ficticio de la saga “la reina roja”)

Monólogo:

“No importa, lo superare” fue así como inicié mi camino, como comencé a
levantarme hacia mi destino, porque no importa cómo nos trate la vida, podemos
seguir adelante siempre y cuando tengamos la voluntad de hacerlo, siempre y
cuando tengamos ganas de vivir.

Mi nombre es Mare Barrow, nací del lado bajo del mundo, los esclavos
prácticamente, las personas que les sirven a la elite de las familias y a los
privilegiados, solo porque son más fuertes que nosotros se creen que pueden
controlar nuestras vidas.

Pensé que había estado viviendo mi vita como todos los demás iguales a mí,
tratando de sobrevivir, y el día de aquel accidente pensé que todo terminaría ahí,
pero me equivoqué, fue ese momento el que me dio la vida, el momento donde
resurgí y me di cuenta de que podía vivir mi mida sin miedo, y pelear por mi
libertad, dependiendo únicamente de mi fuerza.
Mi vida, a partir de ese accidente se ha basado en honrar a la resistencia que me
dio un hogar y una segunda vida, y honrar su causa. “nos levantaremos, rojos
como el amanecer”
Al empezar mi lucha en mi camino conocí muchas personas, algunas llegaron para
quedarse y otras fueron un momento efímero en mi camino y otras cuantas dieron
su vida protegiéndome, por lo cual estaré agradecida por el resto de mi vida y
honraré su memoria hasta donde mi camino alcance su fin.
Los golpes que recibí en esta lucha me tumbaron al suelo, literal y figurativamente.
Pero tomé una decisión que pienso mantener, no rendirme hasta cumplir con mi
objetivo. Cambiar las cosas para mi pueblo de forma definitiva y si quiero lograrlo
tengo que ser fuerte, no siempre, pero si las veces necesarias para no perder mi
norte, y de paso mi lucha, mi guerra.
Resurgiré de las cenizas tantas veces como sea necesario, porque estoy segura de
que era mi destino nacer con este poder, con esta fuerza. Para defender a los
indefensos, hacer justicia al abuso que ha perdurado por tantos siglos.