Fuerzas tecnológicas

Cuando hacemos referencia al término tecnología es importante aclarar preconceptos

que podrían haberse establecidos, tecnología no se refiere a hardware o software, es
en realidad el conocimiento inmerso en estos, tecnología hacer referencia a todo
aquello que nos permite hacer más con menos, por tal para el desarrollo de una nación
es sumamente importante la capacidad de asimilación tecnológica, Diego Comin,
profesor de economía en Dartmouth College ha investigado como la asimilación
tecnológica entre los países genera la disparidad de la riqueza generada en estos,
siendo así crucial que los países puedan desarrollar capacidades tecnológicas de
manera rápida.

Desde la creación de la humanidad se han atravesado diferentes momentos de

avances tecnológicos, desde el descubrimiento del uso del fuego, la rueda, la máquina
a vapor, la electricidad, entre otros, agrupando los momentos más representativos
bajo la denominación de revoluciones industriales.

Es claro que, a partir de la 2da revolución industrial, destacada por la electricidad, es el

momento en el que inicia su actuar el sector estudiado en este trabajo, pues
representa el punto de partida para las empresas de energía eléctrica, a lo largo de sus
3 fases: Generación, Transformación y distribución.

La tercera revolución industrial identificada por las TICs, la automatización y el internet

ha abierto sin duda la puerta a un mundo nuevo de conectividad globalizada para todo
tipo de industria, no siendo la excepción la eléctrica, donde el uso de las
computadoras, a través de todas sus fases evolutivas con softwares especializados son
un gran soporte para la optimización en el manejo y gestión de la información, además
en el sector se evidencia la necesidad clara del uso de equipos altamente
automatizados cuya información es evaluando constantemente para la toma de
decisiones, como tercer punto destacar la importancia que hoy tiene el internet en la
industria podría parecer una aseveración demasiado obvia y redundante en sí misma,
pues se ha tornado hoy parte de la vida cotidiana a nivel personal y empresarial.

Finalmente nos encontramos hoy en la denominada 4ta revolución industrial, industria

4.0 o llamada también industria inteligente, caracterizada por productos, equipos y
máquinas inteligentes, hiperconectividad y almacenamiento de gran cantidad de datos
en la NUBE, contribuye a la adecuación de tecnologías exponenciales para el sector de
la energía en todos sus campos, permitiéndonos poder desarrollar una denominada
“Energía eléctrica digital e inteligente”, pero debiendo ver este escenario más allá de
solo automatizar y digitalizar procesos y modelos, no se trata de estar al servicio de la
tecnología, sino que esta contribuya a la generación de valor de la empresa. Las
empresas distribuidoras, han sido las pioneras en brindar una experiencia nueva a sus
usuarios, mediante el plan piloto que se viene ejecutando con la instalación de los
Smart meter o medidores inteligentes, que permiten para el cliente saber cuándo
la energía será más cara, cuándo usarla, cuándo debe desconectar los aparatos
eléctricos y qué días se consume más para poder organizarse y aprovechar los ahorros,
además le permite a la empresa distribuidora reducir los costos operativos de lectura,
corte y reconexión; la pandemia, ha generado también que las empresas, puedan
desarrollar múltiples alternativas para el desarrollo de sus actividades y atención
integral al usuario, habilitando nuevos canales de atención a los clientes, que logran
reducir por ejemplo las largas filas para trámites y pagos, los recibos electrónicos que
facilitan su revisión desde la comodidad del hogar, la instalación de módulos de auto
atención virtual entre otros.

Como usuarios, nuestro conocimiento del sector se limita solo al suministro que llega a
nuestras casas y empresas (a baja tensión), pero en realidad existe todo un mundo
detrás que permite que las empresas eléctricas puedan atender eficientemente la
demanda creciente, siendo interesante echar un vistazo a lo que ocurre dentro de las
instalaciones o a nivel de la alta y media tensión, así como la contribución que la
tecnología requerida puede desarrollar; donde las empresas generadoras,
transformadoras y distribuidoras deben atender día a día una serie de problemas y
necesidades que se presentan en los procesos de generación y transformación de la
energía, para garantizar un servicio de valor a sus clientes deben previamente contar
con infraestructuras que cubran la carga solicitada(demanda energética), con
instalaciones que operen las 24 horas del día, monitoreo en tiempo real del estado y
funcionamiento de equipos, disponibilidad y gestión de la información para toma de
decisiones, procedimientos de trabajo claros, operaciones seguras, con trabajadores
especializados comprometidos y alineados a las normas, protocolos y seguridad, pero
sobre todo que permitan una gestión integral rentable.

En el Perú para el monitoreo de equipos y subestaciones, las empresas del sector

cuentan con relés, salas de control y comunicación y vienen empleando para este fin el
sistema SCADA, que si bien les permite una visualización integral de todos los circuitos
y equipos conectados, y poder detectar fallos mediante disparo de alarmas, requiere
aún la presencia visual de una persona, así como muchas veces la intervención directa
física para la resolución de los problemas, es bajo esta premisa que se inicia la carreras
de las empresas por ofrecer al sector soluciones acordes a la industria 4.0, con equipos
de medición y monitoreo inteligentes, son softwares capaces de procesar y analizar
gran cantidad de información, un primer avance son los famosos PLC’s(Controladores
lógicos programables), quienes reciben señales a través de sus sensores, conexiones
Ethernet y antenas pudiendo conectarse con centrales de monitoreo e incluso entre
equipos, encajando así dentro de la tecnología del internet de las cosas.

La tecnología viene creciendo a pasos exponenciales, el sector de energía eléctrica es

uno de los que mayor demanda de nuevas propuestas de solución, sobretodo de la
industria inteligentes que coadyuve a la gestión de sus activos y de la información.