Salió un pobre una mañana, donde un Cristo le contesto: ¡Madre de mi
rico se acerco, a pedir una limosna: corazón! ¡Qué pedido me has hecho que ¡señor por el amor de Dios! no te conceda yo!
El rico a lo que lo vio se hizo el que El demonio le dijo a Cristo: ¡cómo es
sonrió: ¡Qué gallardo que buen mozo posible Gran Señor! Que esta alma, que limosna me pidió! . Como siendo estando perdida haya alcanzado perdón. tan muchacho y niño de tan tierna edad Cristo le contesto: ¡quítate de aquí ¿Por qué no aprendes un oficio o sayón! ¡Es pedido de mi Madre que esta aprendes a trabajar? alma alcance perdón! Mi padre fue carpintero cual oficio no El demonio de corrida a los infiernos aprendí, me sucedió una desgracia por la cayó renegando de sí mismo que su cual me veo así. trabajo perdió. No es eso mi natural, no es eso mi El demonio está muy malo y no tiene proceder, de que carnes soy venido que mejoría, el rosario de María son balas de es tan grande mi poder. artillería que hasta el infierno tiembla Al tornar por una esquina una llaga le cuando digo Jesús, José y María. mostro: la llaga de su costado que al Que dichosa creatura que bajo en su punto se le cerró. redentor, encarnándose en María tan ¡Alerta! ¡Alerta señor! que un rico se solo por su amor. AMÉN. condeno por una corta limosna que al mismo Dios le negó.
María rogaba a Cristo: ¡hijo de mi
corazón! ¡Por estos pechos que has mamado que esta alma tenga perdón!