Informática

Formatos de placa base

Las placas base necesitan tener dimensiones compatibles con las cajas que las
contienen, de manera que se han establecido características mecánicas, llamadas factor
de forma. Definen la distribución de diversos componentes y las dimensiones físicas,
como por ejemplo el largo y ancho de la tarjeta, la posición de agujeros de sujeción y las
características de los conectores.

ATX: Las primeras placas base ATX llegan al

mercado en el año 1995 de la mano de Intel.
Este formato tiene unas dimensiones de 305
x 244 mm, y se convertido en estándar por
el que se realiza la producción de placas
base del mercado.
Su uso es muy variado.
Es normal encontrarlo en sistemas de
oficina, equipos para trabajar o
equipos gaming. Normalmente
tienen hasta 7 ranuras de expansión y
hasta 4 ranuras para módulos de memoria
RAM. Por lo general, este factor de forma
es el más empleado por la mayoría de usuarios domésticos.

Micro ATX: Un factor de forma evolucionado del ATX, pero un 25% más pequeño (sus
dimensiones son de 244 x 244 mm). Los 4 orificios superiores suelen coincidir con los de
la placa base ATX, pero los dos inferiores, no.
Generalmente, este tipo de placas es muy usada para ordenadores de oficina y para
ordenadores de pequeño tamaño. Como norma, suelen tener espacio para la instalación
de 5 tarjetas de expansión. También tienen espacio para la instalación de hasta 4
módulos de RAM.

Mini ATX: Este factor de forma fue desarrollado por el fabricante de placas VIA en el año
2001. Sus dimensiones habituales son de 170 x 170 mm y sus 4 orificios suelen coincidir
con los 4 situados en la parte izquierda y central que emplean las placas en formato ATX.
Estas placas suelen estar muy integradas, con una gran densidad de componentes por
cm2. Dado que todo está tan junto, muchas veces la instalación de disipadores de
grandes dimensiones acaba creando problemas de compatibilidad con la tarjeta gráfica
o con la memoria RAM. Solo llevan una ranura para tarjetas de expansión y es habitual
que lleven solo dos ranuras para módulos de RAM.

E-ATX: También denominado Extended ATX, es un factor de forma cuyas dimensiones

son de 305 x 330 mm, lo que las hace más grandes que las placas ATX, aunque sus
orificios son parcialmente compatibles con éstas.

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Se emplea bastante para ordenadores como estaciones de trabajo y servidores, con

placas bases donde se montan dos sockets y admiten, como norma, la instalación de
hasta 8 módulos de memoria RAM.