CENTRO UNIVERSITARIO

INTERAMERICANO
Plantel Cuautla

Licenciatura en Criminalística y
Criminología

Andrei Chikatilo: El Carnicero de Rostov

Que presenta:
Marcos Francisco Cruz Salgado

Cuautla, Mor. 26 de Marzo del 2012

Índice
Página

I. Introducción

II. Marco Teórico

III. Objetivos

IV. Metodología

V. Conclusiones y sugerencia

VI. Bibliografía

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I. Introducción

Andrei Chikatilo, tal vez, el asesino serial más famoso y sádico de toda la
historia, este hombre, nacido el 16 de Octubre de 1936, en Ucrania, es autor
de 53 asesinatos conocidos, cometidos con gran brutalidad y sadismo, de
índole sexual en todos los casos, este delincuente aparentemente no
presentaba, ningún rasgo de conducta delictiva, ya que en la sociedad se
desarrollaba como un hombre normal, con un trabajo como un hombre
respetable miembro de una partido comunista, maestro de una universidad,
como un marido atento y amable con su esposa e hijos, nadie se imaginaría
que Chikatilo se convertiría en un personaje tan siniestro que marcaría la
historia de Ucrania

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II. Marco Teórico

Andrei Chikatilo, nacido el 16 de Octubre de 1936, originario de

Yablochnoye, Ucrania, una pequeña aldea en tiempos de hambruna, donde
morían cientos de personas cuyos cadáveres se amontonan en las calles y
campos, durante su infancia el Andrei junto con su hermana, era
traumatizante para ambos, escuchar cuando su madre les contaba sobre su
hermano mayor, Stepan había sido raptado y devorado, aunque no era un
caso aislado en aquellos duros años treinta, de hambruna en Ucrania. Este
hecho marcaría notablemente al niño, quien se sentía en esos momentos
más solo que nunca, de hecho no existe ningún documento que informe
acerca del nacimiento o muerte de Stepan pero la manera en como su madre
se lo relataba hacia que la historia pareciera verídica.

En la escuela era un chico introvertido, negándose a usar gafas necesarias

para su salud, ya que padecía de miopía, evitando según él las burlas hacía
su persona, ya que era molestado por sus compañeros, limitándose solo a
escuchar y aguantar lo que le decían, se orinaba en la cama hasta los 12
años, a medida que iba creciendo Chikatilo se volvió más tímido con las
mujeres, a tal grado de fallar en su primer intento sexual, por eyacular a los
pocos segundos de estar abrazando una chica, de ahí se corrió el rumor de
que Chikatilo era impotente, como todos los soviéticos, realizó su servicio
militar entrando en activo, posteriormente de abandonar la milicia, se dedicó
a estudiar, se graduó en lengua, literatura rusa e ingeniería.

En 1971 se graduó de maestro, sintiendo una creciente atracción por las

menores de 12 años a tal punto de observarlas por la ventana en ropa
interior, y masturbándose con su mano dentro de su bolsillo, Chikatilo se
dedicó al estudio del comunismo, siendo fanático del mismo.
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A pesar de ser agobiado por su problema sexual, encontró a una esposa, y
aunque no podía mantener una erección, si eyaculaba, en contadas
ocasiones alcanzaba una erección con la cual fue capaz de embarazar a su
esposa en dos ocasiones, pero no se quitaba la idea de la mente sobre que
había sido castrado por la naturaleza al momento de su nacimiento, era un
marido trabajador y tranquilo, incapaz de si quiera levantar la voz a sus hijos,
un respetable miembro de un partido político, lector de periódicos y
actualizado en cuestión de información, Chikatilo aparentaba ser el ejemplo a
seguir del ciudadano promedio.

Sin embargo en la escuela en la cual era profesor, los alumnos le apodaban

“El Ganso”, por su aspecto físico, llegaron a nombrarlo “afeminado”, no hacía
nada por evitar estos maltratos por parte de los alumnos fuese el grado de
crueldad que estos presentasen hacía su persona, llegó a tenerle tanto
miedo a sus alumnos que comenzó a llevar un cuchillo a su trabajo, tanta fue
la influencia de los alumnos y la sociedad que lo obligaron a tomar esta
decisión.

La carrera criminal de Chikatilo, comienza el 22 de Diciembre de 1978, al

tener 42 años, cuando mató por primera vez, convence a una niña de 9 años
para que se fuese con él a una cabaña de su propiedad, a las afueras de la
ciudad, una vez ahí la desvistió con violencia, provocándole un pequeño
rasguño del cual brotó un poco de sangre, provocándole una erección
instantánea a Chikatilo, estableciendo una desviación en su modo de pensar
al relacionar la sangre con el sexo, posteriormente de esto sacó un cuchillo y
se lo clavo a la niña en el estómago, cada puñalada se acercaba cada vez
más al orgasmo, por lo que no cesó hasta la eyaculación, su flacidez y burlas
de las mujeres que se lo recordaban a cada momento fue más de lo que
podía soportar, se dio cuenta de que su placer era acariciar los genitales
ajenos si no que maltratarlos, el cuerpo de la pequeña fue encontrado dos
días después en el rio Grushovka, y una mancha enorme de sangre cerca de

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la cabaña de Chikatilo, al cual la policía interrogó, pero inculpando a otro
agresor sexual Alexander Kravchenko por este acto tan grotesco.

Chikatilo era el típico marido sumiso y asexual, hacía todo lo que su mujer le
ordenaba, Ella solía desear los placeres del lecho con más frecuencia que él,
y eso les llevaba a frecuentes discusiones, a que ella le recordase en todo
momento su problema sexual. La acusación de haber molestado
sexualmente a sus estudiantes le costó el trabajo, pero consiguió uno nuevo
en una fábrica en el que tenía que estar viajando constantemente. Este
constante movimiento le ayudaba a escoger sus nuevas víctimas.

Tres años después de su primer asesinato, el 3 de Septiembre de 1981

asalto a su segunda víctima una prostituta de 17 años, la convenció de ir al
bosque con él para tener relaciones sexuales, pero sin conseguirlo la
prostituta se rió de él, esto enfureció a Chikatilo, el cual la estrangulo y
eyaculó sobre su cadáver, le mordió la garganta, le cortó los senos y se
comió sus pezones, luego comenzó a lanzar aullidos de guerra y a bailar
alrededor del cadáver con un palo enterrado, Chikatilo supo que volvería a
matar.

Su tercera víctima, raptada de la villa y apuñalada cuarenta veces en el

bosque, le mutiló los ojos, volviéndose esto algo común entre los asesinatos,
la firma mortal de Andrei Chikatilo, en ese año mató a otras tres víctimas,
entre ellas la primera víctima masculina, un niño de nueve años de edad, del
cual no se encontró el cuerpo, peor Andrei se adjudicó la culpa de dicho
hecho y de haberle arrancado los genitales. La atención de toda la Unión
Soviética, se enfocaba en el asesino serial, puesto que su modus operandi
era el mismo, sus víctimas siempre eran halladas en el bosque con indicios
de violencia y sadomasoquismo y en ocasiones les hacía falta una parte del
cuerpo a las víctimas, la mayoría de ellas eran jóvenes que se escapaban de

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casa o retrasados mentales facilitando el convencimiento que Chikatilo
ejercía sobre ellos.

En 1984 asesinó a 15 personas más, cada vez más mataba con más
frecuencia en menos tiempo, Chikatilo las elegía entre la multitud en
estaciones de transporte, y con algún pretexto, los convencía para que lo
siguieran a alguna zona boscosa. Una vez ahí les daba numerosas
puñaladas, casi todas las víctimas sufrían la mutilación de los ojos, a las
adolescentes o les seccionaba los pechos o los pezones, realizándolo con
sus afilados cuchillos o con los dientes, el útero era extirpado con tal
precisión que todos los cirujanos de la provincia de Rostov pasaron a ser
sospechosos en potencia.

Mientras las violaba les machacaba la cara a golpes, para ocultar su

impotencia, a veces, con la ayuda de un palo, colocaba el semen en la
vagina de la víctima. En el caso de los niños, los atacaba nada más hallarse
a solas con ellos en el bosque: un golpe para aturdirlos con las manos
atadas y unos golpes de cuchillo poco profundos para establecer su dominio
sobre ellos. Posteriormente los mutilaba a mordiscos, les cortaba los
genitales o solamente extirpaba los testículos, que guardaba a modo de
trofeo. En algunas ocasiones realizaba estas amputaciones cuando la
víctima se hallaba aún con vida, aunque no consciente. En ninguno de los
casos se encontraron las partes del cuerpo seccionadas en las cercanías del
lugar de hechos

Además practicaba actos de canibalismo, en sus declaraciones confesaría

que le gustaba tragarse las partes del cuerpo más blandas. En 1981, se
convirtió en funcionario de abastecimiento de una fábrica, y el trabajo, que le
obligaba a recorrer una buena parte de la región, le proporcionaba la fachada
perfecta.

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El Instituto Serbsky de Moscú diseñó el perfil de un hombre ostensiblemente
normal, probablemente casado, con un trabajo regular. Por el semen hallado
en los cuerpos de sus víctimas, se supo que su sangre era del grupo AB. El
14 de septiembre de 1984, detuvieron a Chikatilo en el mercado de Rostov,
pues en líneas generales encajaba con la descripción del asesino, pero no
pudieron demostrar nada más, Chikatilo parecía un hombre respetable, y tras
hacerle un análisis de sangre, ésta resultó ser de grupo A, enseguida fue
puesto en libertad sin cargos, para esa fecha, los archivos de la policía
contenían datos de unos 26.500 sospechosos, cuando apareció el cadáver
número treinta, los periódicos empezaron a dar noticias del posible asesino
en serie, quienes todos creían un retrasado mental, a pesar que la policía no
estaba de acuerdo, esto puesto que la amplia dispersión territorial del
asesino indicaba que éste disponía de un vehículo, factor que en Rusia no
era escaso.

Después Chikatilo fue acusado de haber robado un rollo de linóleo de su

oficina, siete meses después, con ese caso aún pendiente, fue arrestado por
comportamiento impropio en la estación de autobuses de Rostov y fue
sentenciado a 15 días en prisión, la policía creía que él era el asesino, así
que compararon la sangre de Chikatilo con el semen encontrado en los
cuerpos de las víctimas e inexplicablemente no era el mismo tipo de sangre.
Fue sentenciado a un año en cárcel por el robo del linóleo, pero el juez
simpatizó con él y lo liberó antes.

El 17 de octubre de 1990 volvió a matar en un bosque cercano a la estación

de Donlesjoz, este crimen absorbió a toda la policía local y a una fuerza
antidisturbios de 100 hombres. Pero dos semanas después, Chikatilo volvió a
actuar, y ésta vez fueron unos 600 detectives los encargados de investigar a
lo largo de la línea de los bosques, en dónde montaban guardia tres o cuatro
oficiales en los apeaderos más aislados.

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El 6 de noviembre de 1990, uno de estos detectives, un sargento llamado
Igor Rybakov, vio surgir del bosque un hombre con traje y corbata. Mientras
observaba cómo éste se lavaba las manos en la fuente advirtió que tenía un
dedo vendado y una mejilla manchada de sangre. Le pidió los documentos y
elevó un informe de rutina. Cinco días después encontraban un nuevo
cadáver en ese mismo lugar el cual estimaron que llevaba muerto más o
menos una semana.

El homicida tenía que haber pasado por la estación, y el culpable no podía

ser otro que el sospechoso del informe de Rybakov. Lo arrestaron el 20 de
noviembre de 1990, sospechoso de haber asesinado a 36 víctimas, todos
ellos mujeres y niños. Su esperma, aunque no su sangre, sí era AB, el fiscal
general de la provincia de Rostov emitiría una orden de detención contra
Chikatilo, efectiva a partir del 20 de noviembre de 1990. Ese mismo día fue
retenido por la KGB, mientras éste con paso lento y senil decía "¿Cómo
pueden hacerle esto a una persona de mi edad?". En los interrogatorios,
afirmó que simplemente era un ciudadano normal, que no había cometido
ningún tipo de delito, y que era objeto de una persecución absurda por parte
de la policía.

El 27 de noviembre prometió que estaba dispuesto a aportar pruebas de sus

crímenes si no continuaban atosigándole con los interrogatorios que le
recordaban los detalles, y dos días después se derrumbó ante un psiquiatra
a quién acabó confesando 53 asesinatos. Posteriormente guió a los
investigadores a los distintos lugares con la esperanza de que el número de
muertes lo convirtiera en un "espécimen de estudio científico"

Lo que la policía dedujo que el asesino trataba de buscarse una posible

salida alegando una enfermedad mental, una obsesión de tratamiento
psiquiátrico, los psiquiatras del Instituto Serbsky, no obstante, lo veían como
un sádico prudente que no sufría ningún trastorno que pudiera impedirle ver

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que sus actos estaban mal, que eran actos premeditados, por esa razón, en
octubre de 1991 se dieron a conocer sus conclusiones, diagnosticando que
el asesino estaba "legalmente cuerdo", el juicio de Andrei Chikatilo se inició
en abril de 1992 y duraría hasta octubre de ese mismo año. Éste, con la
cabeza rasurada, presenció su juicio desde un cubículo de metal, los jueces
no dudaron en anunciar el veredicto que habían nominado: el 15 de octubre
de 1992 fue sentenciado a la pena capital, y ejecutado con un tiro en la nuca
en la prisión de Moscú el 14 de febrero de 1994.

Dándole así fin a uno de los asesinos seriales más despiadados, sádicos,
barbaros y famosos de todo el mundo, siendo como lo he mencionado antes
el único asesino serial de la historia de la Unión Soviética, siendo
posteriormente ídolo en películas inspiradas por él, como Ciudadano X o
Hannibal Lecter, en fin marcó la historia del mundo en cuanto a asesinos
seriales se trata.

III. Objetivos

Después de su captura final, Andrei Chikatilo, escribió una carta dirigida

hacia el Fiscal General, el texto era el siguiente:

“Me detuvieron el 20 de noviembre de 1990 y he permanecido bajo

custodia desde entonces. Quiero exponer mis sentimientos con sinceridad.
Me hallo en un estado de profunda depresión, y reconozco que tengo
impulsos sexuales perturbados, por eso he cometido ciertos actos.
Anteriormente busqué ayuda psiquiátrica por mis dolores de cabeza, por la
-pérdida de memoria, el insomnio y los trastornos sexuales. Pero los

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tratamientos que me aplicaron o que yo puse en práctica no dieron
resultados.

Tengo esposa y dos hijos y sufro una debilidad sexual, impotencia. La

gente se reía de mí porque no podía recordar nada. No me daba cuenta que
me tocaba los genitales a menudo, y sólo me lo dijeron más tarde. Me siento
humillado. La gente se burla de mí en el trabajo y en otras situaciones. Me he
sentido degradado desde la infancia, y siempre he sufrido. En mi época
escolar estaba hinchado a causa del hambre e iba vestido con harapos. Todo
el mundo se metía conmigo. En la escuela estudiaba con tanta intensidad
que a veces perdía la consciencia y me desmayaba. Soy un graduado
universitario. Quería demostrar mi valía en el trabajo y me entregué a él por
completo. La gente me valoraba pero se aprovechaba de mi carácter débil.
Ahora que soy mayor, el aspecto sexual no tiene tanta importancia para mí,
mis problemas son todos mentales.

En los actos sexuales perversos experimentaba una especie de furor, una

sensación de desenfreno. No podía controlar mis actos. Desde la niñez me
he sentido insuficiente como hombre y como persona. Lo que hice no fue por
el placer sexual, sino porque me proporcionaba cierta paz de mente y de
alma durante largos periodos. Sobre todo después de contemplar todo tipo
de películas sexuales. Lo que hice, lo hice después de mirar los vídeos de
actos sexuales perversos, crueldades y horrores.”

La policía dedujo que Andrei Chikatilo, se quería dar un estado de enfermo

mental para así evadir el castigo que se le tenía que dar, y por consiguiente
clasificar los trastornos que este sujeto tenia según los manuales de
psiquiatría disponibles en ese momento, afortunadamente, para nosotros los
de esta época, existe el manual DSM-IV, capaz de describir mediante una
entrevista, los rasgos de los trastornos de personalidad, que una persona
puede sufrir, empleado mediante una entrevista directa con el sujeto de

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estudio, para así darle un correcto tratamiento, que necesita la persona en su
rehabilitación personal.

Desafortunadamente o afortunadamente, para Andrei Chikatilo, se le aplicó

una pena de muerte directa, expedida por las autoridades que así lo
determinaron, y lo consideraron más viable, si este psicópata hubiese caído
en manos de las autoridades de nuestro país o de alguno que tenga una
cultura de la no pena de muerte, hubiese alcanzado una condena superior a
todas las condenas antes impuestas para cualquier delincuente, una cadena
perpetua o al menos setenta años de cárcel para esta persona que es
prácticamente una vida, de haberse declarado como enfermo mental Andrei
Chikatilo, hubiera recibido un correcto tratamiento para la reinserción social
pero de forma psicología es decir insertado en un CEFEREPSI, y no en un
CERESO como es costumbre de enviar a los imputados declarados
culpables de las conductas delictivas.

El prevenir este tipo de conductas delictivas es un poco complicado debido a

que se trata de una conducta psicótica, la cual depende de cada individuo en
su desarrollo y detonación de la misma, es decir no se puede generalizar un
factor o razón por la cual un individuo pervierte y desvía su personalidad,
llevándola a un ámbito socio patico, como lo es el de este sujeto que hemos
mencionado con anterioridad, pero podría aplicarse un plan de prevención
integral, el cual proponga diseñar e instrumentar la coordinación nacional que
permita combatir las causas que provocan la comisión de delitos y las
conductas antisociales, así como desarrollar programas y acciones de
fomento a los valores culturales y cívicos que induzcan el respeto a la
legalidad y a los derechos humanos, con el cual con la participación general
de la sociedad, puedan llevarse las estrategias fijadas en el plan desde lo
general (sociedad) a lo particular (familia).

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Una prevención Criminológica, que permita formular una política
criminológica de prevención del delito y las conductas infractoras de alcance
y observancia nacional, para contribuir a preservar el orden y la paz públicos
de manera coordinada con las entidades federativas y los municipios, es
decir una prevención por parte de las autoridades hacia los ciudadanos que
integran la sociedad misma, influyendo así en la formación de las nuevas
generaciones y la corrección de las actuales, previniendo así las conductas
antisociales que influyan al individuo y lo lleven a cometer actos delictivos
que desfavorezcan su integridad y libertad de su persona.

Los investigadores involucrados dentro de la investigación para la captura de

este singular personaje Andrei Chikatilo, aplicaron todas las técnicas
dactilares que tenían a su alcance incluso una prueba de índole biológico el
ADN, mediante el cual no obtuvieron resultados, no porque fuera
incorrectamente aplicado, solo que este personaje tenía una rara anomalía
en su sangre y semen, el cual no coincidían en el grupo sanguíneo, además
de las técnicas de rastreo, ubicación, observación, fijación de indicios, y una
correcta preservación del lugar de hechos, no eran suficientes para lograr la
captura de este hábil delincuente, teniendo en cuenta que Ucrania en ese
entonces no tenía bien capacitados a los miembros de las investigaciones de
servicios periciales, puesto que se desplegaron más de 600 detectives y
solamente uno dio por “casualidad” con Chikatilo, una cacería de brujas a mi
parecer, puesto que ejecutaron anteriormente a un sujeto que no era
Chikatilo adjudicándole su primer asesinato, en mi opinión pienso que se
resolvió este caso más por casualidad que por una correcta aplicación de los
servicios periciales, que hemos estudiado con anterioridad.

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IV. Metodología

Los rasgos de la personalidad de Chikatilo pueden ser descritos hoy en dia

por el manual DSM-IV, quedando fijados de la siguiente manera.

PENDIENTE…

V. Conclusiones y Sugerencias

En conclusión vemos que Andrei Chikatilo, es un vivo ejemplo de como una

persona aparentemente normal, puede presentar un perfil criminal tan
complejo, influenciado por diversos factores que durante la entrevista con el
mismo se van dando a relucir, como por ejemplo el hecho de que venia de
una lugar en el cual padecían hambruna durante los años treinta, y que su
madre les contaba la desgarradora historia de un hemano aparentemente
ficticio del cual no se tiene registro, además de sus problemas y desviaciones
sexuales que se vieron detonados por factores exógenos dentro del medio
abiente en donde se desarrollaba, además de las personas con las cuales
mantenía relación, orillaron a este sujeto a sacar lo peor de su persona a tal
grado de ser considerado el tercer asesino serial mas cruel de todos los
tiempos, además de ser el único asesino serial de la Unión Soviética, en fin
no se le puede juzgar a Andrei Chikatilo como un maldito que tenía
conciencia al cien por ciento de sus actos, si no como una victima de una
sociedad en decadencia, la cual lo discriminaba y lo obligo a llamar la
atención de una u otra forma, desafortunadamente no fue la mejor, pero
logró su objetivo, se hizo notar “el carnicero de Rostov”

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Mi sugerencia seria el implementar un plan integral de prevención en el cual
se incluya el apoyo no solo económico sino también psicológico para las
familias que más lo necesiten, con voluntarios que deseen ayudar o les
nazca realizar buenas acciones, que no se ven obligados para evitar una
distorcion en los objetivos principales de el plan de prevención, tratando de
talvez evitar una conducta delictiva o minimizar el impacto que tienen los
factores exógenos que rodean al individuo hacia la persona y su
personalidad, tener una correcta edicacion dentro del plan, en la cual se
definan bien las conductas correctas e incorrectas en la sociedad, sin llegar a
una manipulación, solo el tratar de no desviar las conductas favorables
dentro del libre albedrio que tenemos los seres humanos, suena difícil puesto
que no se puede generalizar un factor exógeno o alguna influencia que lleve
a una persona a delinquir, estoy seguro que si se planea de una forma
exhaustiva y tal vez intensa se logre minimizar la cantidad o frecuencia de
estas conductas que se den en la sociedad.

VI. Bibliografía

-Ciudadano X, HBO Home Video, 2000. (Esta película contiene muchos

ajustes para la parcela, así como los errores de hecho, pero tiene algunos
buenos momentos.)

-Krivich, Mikhail y Ol'gin Ol'gert camarada Chikatilo:. Psicopatología de la

famoso asesino en serie de Rusia. Fort Lee, Nueva Jersey: Barricade Books,
1993.

-Wrightsman, de Lawrence. "Los interrogatorios policiales y confesiones,"

Psicología Forense. Belmont, CA: Wadsworth, 2001.

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-Conti, Richard P. "La psicología de confesiones falsas," El diario de la
Evaluación de la credibilidad y la Psicología de Testigos. 1999, vol. 2, No. 1,
14-36.

-Asesinos seriales en la web http://www.asesinatoserial.net

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