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A L∴ G∴ D∴ G∴ A∴ D∴ U∴

L∴ I∴ F∴

En el Oriente de Almería, a los 7 días del mes de 6015 de (v∴.l∴),


correspondiente al 7 de noviembre de 2015 (e∴ v∴ ).

V∴M∴ y QQ∴HH∴ en vuestros grados y cualidades paso a exponer mis

IMPRESIONES SURGIDAS EN MI INICIACIÓN

Mi deseo de ingresar en la Masonería viene de hace mucho tiempo.


Me surge ante la necesidad de continuar con un proceso ya iniciado de
perfeccionamiento personal, pero no sabía cómo darle un sentido, ni dónde ni cómo
hacerlo.
Era una necesidad que se fundamentaba de una forma global en todas las facetas de
mi vida. Necesitaba de una guía, de unas enseñanzas básicas aunque más adelante y
con mi trabajo personal se harán más complejas.

Este deseo unido con la casualidad de encontrarme con un H:. Masón, hizo que se
me facilitara el camino. Y unido a que un H:. de esta logia que muy amablemente me
aclaró todas las dudas, hizo que mi decisión se fortaleciera después de darme cuenta
que los principios de la masonería conectaban con los míos.

Pienso que los sentimientos, si son positivos, tienen el poder de crear vida. Y mis
sentimientos han sido muy poderosos.

Desde el momento en que se me notificó que podía ser iniciada, los sentimientos de
sorpresa y emoción me envolvieron.
Cuando llegó el día ya me levanté pensando: “hoy es un magnífico día” porque sabía
que pasaría a formar parte de esta institución de la que podía recibir sus
conocimientos y experiencias.

Mis sensaciones continuaron cuando tuve que esperar en el parque a que vinieran a
buscarme. La espera durante más de una hora, ya empezó a ponerme a prueba en la
paciencia, pero tuve todo este tiempo para seguir reafirmándome del paso que iba a
dar. Aprendí entonces que se trata de una experiencia en la que tienes que dominar los
sentimientos y las flaquezas para lograr lo que una quiere.

El corazón me dio un vuelco cuando dos hermanos me preguntaron si había llamado


a formar parte de los Hijos de la Viuda y si estaba dispuesta a someterme a las
pruebas que debía sufrir.

Después de ser vendados mis ojos, me sentí vulnerable e insegura, pero ahí estaba la
mano del H:. Exp que me daba seguridad en todo momento y las palabras fraternales
que escuchaba dándome confianza.

La primera prueba en la cámara de reflexión, me turbó en un primer momento. Me


sentí sola, profundamente incómoda. En esta situación fui impulsada por ese malestar
y empecé a buscar otra respuesta. Me ayudó mi imagen en el espejo y las frases en
la pared. Ha sido el único lugar donde me ha aflorado mi conciencia.

Otra vez con los ojos vendados, descalza del pié izquierdo, hombro desnudo y soga
en el cuello fui llevada a la puerta del Templo. Sentí que me dejaba atrás lo que hace
unos momentos ocurría.
Ahora comprendo que con esta apariencia física se me quería indicar que se me
despojaba de mis falsas ideas para revestirme de nuevos sentimientos.
El H:. Exp me quitó la incertidumbre invitándome a disfrutar de la ceremonia.

El tener inutilizada por segunda vez la visión ya no me sentía insegura, sin embargo
mi concentración se acentuó y también la capacidad de escuchar se hacía más nítida.
Se me afinaron todos mis sentidos. De esta manera mi atención estaba al máximo.

Al llamar el H:. Exp a las puertas del Templo, tuve la sensación de que no había
vuelta atrás y eso me congratulaba.

Fueron sensaciones violentas las llamadas fuerte a la puerta, las trabas que pusieron a
mi entrada, la espada en el pecho, los ruidos a la entrada, pero el H:. Exp me
presentó como una persona en tinieblas y que había ido por propia voluntad.
Creo que lo tenía como aliado porque apenas me salía la voz del cuerpo.

En las siguientes pruebas, no tuve que esforzarme demasiado ya que se me iba


desvelando el sentido que tenían cada una de ellas.
La primera impresión en la interpretación, era que el camino que me esperaba era de
mucha dificultad y que para terminarlo necesitaría de los conocimientos para luchar
contra la adversidad y de la ayuda de los demás.
La segunda impresión era que con la perseverancia podría llegar a la virtud.
La tercera impresión es que si se persiste, la vida se vuelve apacible.

En el Altar y bajo las tres luces del Templo (el libro de la ley sagrada, el compás y la
escuadra), juro no revelar ningún secreto de la Francmasonería, y observar sus
principios. Las palabras de la V:.M me hacen mella en mi conciencia. Sin embargo mi
serenidad iba en aumento pero por el contrario mi voz disminuía.

El momento más impactante fue cuando se me quitó la venda de los ojos y pude ver
por primera vez el Templo y a los HH apuntándome son sus espadas.
La sensación no me resultó violenta, por el contrario, sublime. Las connotaciones que
se producen, no se puede explicar con palabras. De todos modos diré que fue una
emoción estética que me produjo lo bello de la situación, acompañada de
grandiosidad que me elevaba el entendimiento.
Lo que se sucedía en adelante eran frases que me reconfortaban cada vez más.

Se me vuelve a tapar los ojos y salgo del Templo para luego entrar como neófito en
un ambiente acogedor y con una música armoniosa que combinaba con la voz
humana y con las palabra acogedoras de la V:.M.

Me invitan a detectar algún enemigo, como se muestra en la escena del espejo. En


cierto sentido me alegré de ser yo misma mi posible enemiga porque, al tenerla cerca
y a mi alcance, podré conocerla mejor y así vencerla.

Con los ojos descubiertos y ante el Altar reafirmé mis juramentos ante las tres luces
y el triple abrazo fraternal. Esto sellaba mi ingreso y dejaba de ser profana hasta ese
momento, para convertirme en Masona.

Importante también es cuando soy invitada por el resto de los HH a unirme por
primera vez a la Cadena de Unión y este momento es tan importante como el anterior
ya que el ingresar por vez primera a dicha cadena significaba que mis hermanos me
reconocían como una más de ellos.
El conocer las herramientas me hace reflexionar sobre el trabajo que tengo que hacer
en mi persona.

La conclusión que he sacado de esta ceremonia de iniciación no es la iniciación


puntual sino el camino que he de llevar para hacer mi trabajo personal en ir
descubriendo aquello que me replantee en un principio como objetivo.

John H. Newman , escritor británico y clérigo dijo:


“En un mundo superior puede ser de otra manera pero aquí abajo, vivir es cambiar, y
ser perfecto es cambiar muchas veces .”
Cambiar me supone modificar la conducta.
El cambio puede que produzca incertidumbre porque a veces no sabremos manejar
situaciones diferentes. Pero hay que aceptarlo y recurrir a nuestras habilidades y a
nuestras fortalezas para examinar los obstáculos y perfeccionarlos.

Siempre he tenido presente que podemos aprender y podemos progresar.


Y que mejor en fraternidad, junto con los hermanos que me ayuden a entender y
posteriormente a dominar realmente mis pensamientos y sentimientos para poder así
crear mi propia realidad. Realidad que hará que logre mi libertad.

El motivo de esta plancha fué que expresara mis sentimientos surgidos en la


ceremonia y creo que he reflejado muchos sentimientos, desde el Interés (sentirme
interesada y abierta a nuevas experiencias), Inspiración (momentos edificantes),
Seguridad (cuando las cosas transcurrían bien), Esperanza (en que habrá cambios),
Orgullo (de sentirme digna de mis acciones), Asombro (sentirme impresionada). Pero
todos estos sentimientos han desembocado en el sentimiento de Amor, afecto y apego
fraternal.

He dicho, V.·. M.·.


Ap.·. Mª Rosa

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