Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
PERFECCIONISTA
PERFECCIONISTA
conductual contextual
21/07/2020
Karemi Rodríguez Batista
“Soy perfeccionista”
Es muy frecuente que las personas lleguen a consulta con este tipo de etiquetas, incluso
nosotros y nosotras mismas las hayamos utilizado en algún momento. Esto no nos sirve, lo
primero que haremos es traducir ese “ser perfeccionista” en “comportamientos
perfeccionistas”, de forma muy específica, y seguidamente haremos un análisis funcional
sobre ellos. De esta forma, los comportamientos descritos a continuación, son vistos solo de
una forma morfológica y topográfica y, per se, no son problemáticos, lo serán si éstos se
tornan en patrones frecuentes y rígidos, como forma de control del malestar y nos aparten
de nuestra vida valiosa. Algunos tipos comunes de comportamientos perfeccionistas:
La forma en que damos sentido a lo que pasa a nuestro alrededor juega un papel importante
en el mantenimiento del perfeccionismo. Ya que son tantas las cosas que suceden a nuestro
alrededor en un momento dado, que solemos prestar atención e interpretar las cosas de
acuerdo con lo que esperamos que pase (sesgo de confirmación), y a menudo se tiene una
visión extrema de lo que es el éxito y el fracaso, sin término medio (por ejemplo: si cometo
un error en un momento puntual, ya soy un fracaso). Las personas perfeccionistas tienden a
ser extremadamente autocríticas, especialmente si no son capaces de cumplir con sus altos
estándares.
Todos y todas necesitamos reglas en la vida que nos ayuden a dar sentido al mundo y a
hacer frente a nuestra vida cotidiana. Así que tener reglas, en sí mismo, no es algo malo.
Las reglas son útiles en la medida que son realistas, flexibles y adaptables. Así, las reglas
poco útiles son inflexibles e irrazonables. Por ejemplo, la regla: “Nunca debo cometer
errores”, no nos es útil porque no es posible o razonable, ya que todo ser humano comete
errores, y además son necesarios para nuestro aprendizaje. Algunas reglas que comúnmente
sostienen el perfeccionismo incluyen:
Si cada vez que te sacabas notaza en un examen y eras elogiado o elogiada por tus figuras
de referencias (“Excelente trabajo”), esto te hizo sentir tan bien contigo misma que
probablemente comenzaste a desarrollar una regla tal como: “A mamá y papá les gusta que
me vaya bien en la escuela”, que más tarde puede haberse generalizado como: “La gente
estará orgullosa de mí si tengo éxito”. Esta creencia te animó para seguir persiguiendo
logros, desafortunadamente, con el tiempo, una creencia como ésta puede volverse rígida e
irrealista, por ejemplo, “La gente sólo estará orgullosa de mí si tengo éxito” (aprendizaje
por reforzamiento positivo).
Otro tipo de aprendizaje que puede influir en el desarrollo del perfeccionismo se produce
cuando se te castiga por tus errores. Por ejemplo, una madre puede alzar la voz y lanzar una
crítica a su hija por esparcir los juguetes mientras juega: “¡¿Cuántas veces tengo que decirte
que eres un desastre?!”. El castigo por los errores te hace sentir mal contigo misma y
puedes desarrollar una regla tal como: “Nunca debo hacer un desastre, siempre debo ser
ordenada” (aprendizaje por castigo positivo). A veces, sólo hay una ausencia de elogios,
por ejemplo, puedes haberte esforzado mucho y obtener una “B” en un examen y notar que
tus padres no te elogiaron por esto (aprendizaje por castigo negativo). En este caso puedes
desarrollar una creencia como: “A mamá y papá no les gusta cuando no obtengo As” y
generalizar a: “La gente no está orgullosa de mí cuando mi trabajo no es perfecto o
sobresaliente”.
Aprendizaje indirecto
Autocrítica Vs autocompasión
Cerrando
Las terapias contextuales en cualquier de sus formas, no solo la ACT, nos ofrecen
alternativas muy potentes y basadas en la evidencia para redireccionarnos a una vida
significativa, y de una forma más estable y flexible, trabajando en lo que realmente es
importante para nosotres a un nivel más trascendental si se quiere (aquí las metas nos
ayudan, claro, pero no nos definen), ayudándonos a aceptar el malestar inherente a estar
vivos/as, a cultivar tremendamente la autocompasión, y a desarrollar comportamientos
flexibles y eficaces que nos acerquen a esa persona que queremos ser.
Referencias bibliográficas:
Ong, C. W., Barney, J. L., Barrett, T. S., Lee, E. B., Levin, M. E., y Twohig, M. P. (2019).
The role of psychological inflexibility and self-compassion in acceptance and commitment
therapy for clinical perfectionism. Journal of Contextual Behavioral Science, 13, 7-16.
https://www.psyciencia.com/perfeccionismo-terapias-contextuales/