Hola, las siguientes palabras buscan ser una forma de redimirme y de sentirme bien conmigo mismo, es

una pequeña campaña, cruzada, redención propia, a través del perdón y la sinceridad, de sacar todas
esas cosas que no fuí capaz de expresar en su momento. No es nada grave (creo yo) pero siento que es
un paso muy importante que debo de dar si quiero continuar con mi vida y salir del estancamiento en el
que me encuentro, que no es más que un debilitamiento emocional causado por una serie de presiones
sociales, familiares y personales que no dejan de causarme pesadez y desánimo. Son heridas que no
duelen y que seguro no se comparan con las tuyas, puesto que pienso que has sufrido mucho más que
yo en todo sentido, y sin embargo, mis tropiezos, derrotas y reproches en estos últimos 3 o 4 años de mi
vida, no he sabido sopesarlos, ni siquiera me dí cuenta de que me afectaron al grado de estar en una
posición inconveniente en mi vida; un estancamiento que no solo se ha limitado al ámbito académico,
sino al profesional, al emocional, al afectivo e incluso al autoestima. Si estás leyendo estas líneas eres
parte de una lista privada, a la cuál se han ido agregando nombres y personas que merecen alguna
explicación o alguna disculpa, misma que será personalizada y muy personal. Expresaré cosas que debí
haber hecho hace tiempo y, que debido a nuestro vínculo (sea cuál sea) merece un trato y unas palabras
especiales por mi parte.

Probablemente, la tuya será de las más extensas y más difíciles de redactar, no porque ellos sea una
labor titánica, o porque los caracteres no alcancen. Más bien, será por el significado de estás líneas y por
el hecho de que me costará mucho trabajo redactar todo ésto, sin más demora... Aquí voy.

No sé por dónde comenzar, lo ideal será por lo general y por el motivo principal de todo. Desde que
llegué a la CDMX hace más de 4 años, no me imaginaba a lo que me iba a someter. Más allá de las
presiones y exigencias académicas de la universidad, que me emocionaba tenerlas otra vez, la verdad,
no estaba preparado para las demás presiones sociales, sobre todo aquellas concernientes al ámbito
doméstico con mis familiares, sin contar con el hecho de que estaría afectado por la nostalgia hacia mi
hogar y mi familia.

No me dí cuenta de ello hasta que fue demasiado tarde, y me ví arrastrado por el ambiente tóxico y el
desánimo generado por todo lo malo que constantemente me alteró. ¿Cómo es ésto? Bien, lo diré
directamente y sin tapujos; me he visto retrasado en mis estudios y objetivos desde hace como 2 años
más o menos. Me he sentido desanimado, confundido, desorientado y no encuentro verdadera paz y
calma en ningún lado, debido a todas esas penas, culpas y remordimientos que llevo conmigo a todos
lados. No me dejan concentrarme, y de hacerlo, no me dejan terminar mis objetivos, y de hacerlo, lo
saboteo todo para que no se logren o los tiro por la borda para volver a iniciar y estar satisfecho.
Satisfacción que nunca encontraría al no estar en paz y a gusto conmigo mismo. Me siento un poco mal
al confesar todo esto, porque siento que es defraudar a los míos y decepcionarles por todo lo que
piensan y opinan de mí, de ser una falsedad y un algo que en verdad no reflejo en la realidad.

Pero todo lo anterior no es el tópico más importante de todos, puesto que hay algunos extras que debo
poner en claro contigo. Y en éste caso se trata de los vínculos emocionales y afectivos que tal vez se han
manifestado entre tu y yo. Aunque no sé a ciencia cierta si sucedió en tu caso que hayas sentido
atracción por mí. Pero de mi parte, aseguro que así fué. Después de una perdida emocional muy grande,
de la cual creo que más o menos me recuperé, y me sentía listo para dar vuelta a la página y continuar
con mi vida. En ése entonces, tu y yo nos llevábamos más o menos bien, nuestra amistad comenzaba a
florecer después de algunas experiencias compartida. Y no te lo negaré, llegué a sentir atracción por tí,
por lo que hacías, por lo que decías, por como lo decías, por tu apariencia, por tu voz... Por todo.

Fue cuando decidí intentar cortejarte y acercarme mucho más a tí. Con la intención de que me
conocieras y que te sintieras vinculada a mi, ya no tanto que sintieras la misma atracción hacía mí, como
yo la sentía por ti. Si funcionó no lo sé, si logré algo tampoco lo sé, sólo estoy seguro de que hubo una
retroalimentación y una correspondencia en todo ello. Y me gustó, puesto que volví a tener a alguien
especial a mi lado y podría intentar algo especial. Aunque siento que no hice todo lo posible para
acercarme más de lo que deseaba. Creo que algo dentro de mi estaba mal, y me doy cuenta de que lo
sigue estando.

Siento que a pesar de todo lo vivido y experimentado, actúe con mucha frialdad y reserva, que no
permití arrastrarme y dejarme llevar por mis emociones y por lo que sentía hacía ti. Me hubiese gustado
haberlo hecho de otra forma, pero de alguna u otra manera me sentía muy afectado por las incontables
cosas que me había sucedido y que había estado llevando conmigo por largo tiempo: mi bajo
rendimiento escolar, «mi tosquedad» hacia la vida y los demás, a raíz de las críticas y el maltrato
silencioso y constante de mi entorno, mis heridas y nostalgias que me afectaban sin tener en cuenta
cuanto. Y lo más importante que me limitaba, era el miedo que sentía (y aún siento) por no ser una
pareja adecuada para ti. Y me doy cuenta de que no lo sería, por el hecho de aún ser un tanto tajante y
distante de todo. Pero no es porque me guste serlo, sino que es una consecuencia de todo lo que ha
pasado y que me ha cambiado conforme pasa el tiempo, y no daba solución a todo ello. Más que nada,
porque fuí incapaz de identificar el problema, algo muy lamentable, para alguien que es capaz de
identificarlos. Lo sé.

Me gustaría escribir más cosas pero la verdad, creo que lo he cubierto casi todo lo que debía decir. Si
surgen más culpas o remordimientos los escribiré y te los haré saber en su momento. Por mientras sólo
quiero que leas todo ésto y me dejes desahogarme un poco. No me juzgues, no me odies. Tampoco me
abandones, a pesar de que me alejaré por una temporada de todo. Ya regresaré a que me respondas y
reclames por todo lo expuesto, pero por el momento, debo «cerrar ciclos» para poder avanzar y
sanarme después de todo este tiempo de virtual inactividad. También me disculpo por todo lo que te
puedan afectar estás palabras, se que no será bueno, pero debo confesar y contar muchas cosas a
muchas personas. Espero que ésto no te causé ningún daño, pero lo dudo, y me disculpo por ello.

Se que debería tratar todo ésto con todas las personas implicada, pero la verdad, prefiero iniciar ésto yo
solo, y después integrar a todos los demás para terminar con el asunto y tratarlo como las personas
civilizadas que somos. Debo descansar, y renovarme como no lo había hecho desde hace tiempo,
alejarme de todo y todos por un rato y disfrutar de mi y de los míos, mucho más, sin importarme lo
demás. Este paso será solo, y los siguientes serán con ayuda de los demás, al confrontarlos después de
sanar y tomar mi segundo aire. Y entre tu y yo, regresaré y seremos los mejores amigos que nos
merecemos, sin inhibiciones, ni arrepentimientos, ni limitaciones. Sin nada más que decir o agregar por
el momento... Te quiero mucho, espero que estés bien, cuídate mucho y cuida a los tuyos, aún falta
mucho por superar y enfrentar en esta pandemia, puesto que nuestra capacidad física no será lo único.
Espero verte en el futuro.

Y por favor, si tuviste la oportunidad y la gran humildad de leer todas estas palabras, te pido un favor:
No trates de responder a este mensaje, por muchas ganas que tengas de hacerlo o por muchas cosas
que me quieras reprochar o recomendar. De antemano, las aprecio y aprecio que te preocupes, pero ya
he decidido como llevar a cabo esta redención, la debo de emprender a mi manera y yo solo, y son todas
estas palabras parte de ello, un paso muy difícil que debo de dar, porque es el primero de muchos más.
Así que solo quiero que leas ésto, que lo guardes, y que lo aceptes, porque por el momento no lo
discutiré; sé que tendrás tus objeciones, dudas, reclamos, reproches, opiniones, sugerencias, puntos de
vista, preocupaciones, objeciones e incluso mentadas de madre y mil y un maneras de querer
asesinarme. Lo sé, y lo espero y los merezco, pero por el momento no voy a discutirlos, puesto que es un
paso muy grande haberlos puesto en evidencia y algo que me vuelve realmente vulnerable. Por ello te
pido tiempo para tratar todo ésto, porque tal vez lo que te diga pueda conmoverte de alguna forma,
para bien o para mal. Se que tienes el derecho de juzgarme, y fulminarme si gustas, pero no lo hagas, no
ahora, que sea después, porque necesito tiempo, tiempo para sopesar y reajustar mi vida, de alejarme
un poco de ése que ha sido mi todo por mucho tiempo, de recluirme un poco en mi y en lo que me
gusta, además de lo que ha sido mi vida en estos últimos años, de volver a ser un ermitaño que de
verdad necesitará descansar y reajustarse para volver al mundo con más ímpetu que nunca. No sé si lo
merezco o no, pero si siento que lo necesito, y que si no lo hago, creo que me hundiré un poco más en
mi mismo. Y descuida, no pienses mal, no voy a cometer suicidio o alguno de sus derivados, tampoco es
como que busque la total iluminación; conocía mi poder y mi temple de mi juventud pero no fueron
suficientes para las pruebas y verdades de la realidad, más allá de mi asertividad y «frialdad científica»,
hubo cosas de las cuales no le dí cuenta que estaban mal, y me terminaron envenenando poco a poco,
hasta que se llevaron mi lustre y mi fortaleza, dejándome como un ente vacío que solo vagaba y se
limitaba a existir. No me odies, no me comprendas, no me trates de entender, y mucho menos, me
trates de detener, es algo que he estado postergando demasiado. Sólo lee estas palabras y deséame
mucha suerte, pues la necesitaré. Que más me gustaría que me acompañases en mi odisea, pero la
verdad, en verdad, es algo que debo hacer yo solo con mis recursos y mi poder, pues me enfrento a mi
mismo y mis culpas para rescatarme y re-conocerme de nuevo.

Tampoco es que sea una llamada de atención o algo por el estilo, tampoco es que me una secta o a una
de esas cosas de ese tipo. Sólo te pongo sobre aviso de lo que voy a hacer, y porque limitaré muy al
mínimo mi contacto con todo y con todos. Ya lo verás, tendrás noticia de mí, antes de que te des cuenta.
Yo mismo te buscaré, «cuando esté listo para esa conversación» (tendré que hacerlo de alguna forma u
otra). Te aprecio mucho, y te quiero mucho no tengo reparo en decirlo con todas sus letras. Nos vemos
pronto. ¡Y por favor, guarda mi secreto!

Abstente de responder por favor, eliminaré mis redes sociales antes de que termines de leer ésto.