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Ministerio de Participación Popular

Autonomías, Federalismo, Consociación, Diarquía.


Nuevas Visiones de país
y grandes tendencias del debate público pre-constitucional boliviano

Viceministerio de Fortalecimiento Prefectural


Unidad de Coordinación de la Asamblea Constituyente
Federación de Asociaciones Municipales
INDICE

Presentación

1. Introducción

1.1La crisis de la forma Estado Nación vista desde la perspectiva de la Asamblea


Constituyente, Javier Medina.
1.2 ¿Reforma o cambio de la Constitución?, Simón Yampara
1.3 Reforma y Refundación. Ajuste estructural y Asamblea Constituyente, Javier
Medina
1.4 Pachakuti-Kandiri en el Paititi, Simón Yampara
1.5 Occidente e Indianidad: los dos sistemas constitutivos de Bolivia, Javier Medina

2. Otras y nuevas visiones de país

2.1 El modelo del Ayllu, Fernando Untoja


2.2 ¿Qué Bolivia es posible y deseable? Javier Medina
2.3 Pueblos indígenas y Naciones originarias en el nuevo contexto del sistema, Simón
Yampara
2.4 Estructura y proceso de desarrollo del Qamaña /espacio de Bienestar, Mario Torrez
2.5 El modelo comunal, Felix Patzy
2.6 El Thakhi entre los Aimara y los Quechua o la Democracia en los gobiernos
comunales, Esteban Ticona
2.7 Reconstitución del Ayllu y Derechos de los Pueblos Indígenas, María Eugenia
Choque
2.8 Retorno a Uraqpacha. Chinkana Amayu, Mario Tórrez

3. La Asamblea Constituyente

3.1 La Asamblea Constituyente, UCAC


3.2 Reforma Constitucional y Asamblea Constituyente, Ricardo Paz
3.3 Movimiento indígena y Asamblea Constituyente en Bolivia, Idón Chivi
3.4 Propuesta multicultural a la Constituyente, Jorge Miranda,Félix Lopéz
3.5 Cómo Optimizar la Constituyente: Un enfoque desde el Análisis Económico, Félix
Huanca

4. La Constitución

4.1 Diagnóstico crítico de la Constitución boliviana, Jorge Miranda

5. Estado Unitario Descentralizado

5.1 Las Autonomías Departamentales, Juan Carlos Urenda


5.2 El Estado Triterritorial, Franz Barrios Suvelza
5.3 Reforma a la Constitución Política del Estado. Propuesta Municipal, FAM
6. Estados Autonómicos o Federales

6.1 Hacia la construcción de la Segunda República, Jorge Kafka et alt.


6.2 Autonomías indígenas, Alvaro García
6.3 La Autonomía y la Autodeterminación de la Nación Camba, Carlos Dabdoub
6.4 Tarija: por qué y para qué se lucha por autonomía, Roberto Ruiz

7 Consociación

7.1 Por una Consociación simbiótica de Municipios, Ayllus y Pueblos indígenas, Javier
Medina

7.2 El Estado Federativo de Municipios y Comunidades originarias, Juan del Granado

8. Diarquía

Conceptual

8.1 Quqi – Jaqi, Género y Diarquía, Simón Yampara y Mario Torrez


8.2 Derecho basado en el individuo y Derecho basado en la comunidad, Javier
Medina
8.3 Estructura del sistema político administrativo andino, Félix López Mamani
8.4 Principios y valores fundamentales para la elaboración de una constitución
multicultural, Jorge Miranda

Político

8.5 El proyecto de reconstrucción del Kollasuyu, Germán Choquewanka


8.6 Un Estado: dos sistemas, Javier Medina
8.7 De la Bolivia colonial a la Asamblea Constituyente, Mesa Indígena Pablo Zárate
Willka

Propuestas estatales

8.8 Propuesta de Constitución Política del Estado Qullana-Suyu, Jorge Miranda y


Félix López Mamani
8.9 Diarquía Federal / consociacional, Javier Medina
8.10 Hagamos la nueva Constitución Política, con Raíces de nuetra Identidad, Juan de
la Cruz Villca

9. Epílogo

9.1 ¿Son los indios poltpotianos?.Sobre los terrores que nos produce sólo pensar un
Estado dirigido por los indios, Javier Medina
“Hoy, no se decir bien quienes son los “otros”,
pero se que estamos interrelacionados. (…)
Un día caminaba junto a doña Máxima en busca de duraznos en el Valle alto.
Por algún motivo ella me dice: -“¿Habías caminado bien, no?
Le contesto: -“¿Por qué piensas que no se caminar, si soy igual que ustedes?”
Luego de un largo silencio, me mira, se mira y me dice otra vez:
“Sabes caminar, pero caminas de otra manera (se ríe y me imita).
Además ¿por qué quieres parecerte a nosotras?
Así como eres te queremos. Si fueras como nosotras, aburrido sería.
Cada uno, como es siempre, es mejor; así un poco diferentes.
De este modo conversamos más bonito y el camino se hace más corto.
Así te queremos; igual cariño vas a tener.
Si te dejas criar aquí, te vas a quedar, aunque te vayas.
No importa si no hablas quechua…(Sentimos que) nos comprendes…”.
Estas son expresiones que acompañan mi caminar
y afirman al “otro” dentro de mí y “a mí” dentro del otro”.

Teresa Alem Rojo


Presentación

Este Dossier ha sido compilado para complementar una visión más comprenhesiva del
debate y las conversaciones públicas que se están llevando a acabo en este país desde hace
ya un buen tiempo y que no son conocidas por todos. Tiene, por tanto, adrede, un sesgo
descentralizado e intercultural: recoge lo que se ha conversado, debatido y escrito en los
espacios locales, rurales, indígenas, municipales y marginales y que, por su naturaleza, no
siempre han sido publicados en los medios conocidos de opinión pública de las grandes
ciudades; muchos, es cierto, han circulado por internet, pero como que su publicación en
papel le añadiera un valor apreciado por todos aquellos que todavía vivimos con un pie en
la galaxia gutenberg.

Este Dossier, así mismo, quiere ser una herramienta para la gran Consulta que va a llevar a
cabo el Ministerio de Participación Popular en todos los departamentos con el objetivo de
recoger y evaluar la experiencia de diez años de descentralización municipal en Bolivia
como un insumo para rediseñar otras formas estatales y gubernamentales en la próxima
Asamblea Constituyente. Este es el papel que parece haber jugado la Participación popular:
preparar la cama para las bodas alquímicas de la Bolivia rural y la Bolivia urbana, la
Bolivia occidental y la Bolivia indígena. Quisiéramos cerrar bien un período y coadyubar a
abrir mejor el siguiente paso de nuestra andadura histórica como comunidad política.

Estamos seguros que para muchos lectores ésta será la primera vez que se encuentren con
algunos de los grandes pensadores indígenas interculturales de nuestro país. Para dar una
idea de la sorpresa que les espera, diré que al leer por primera vez a Mario Torrez sentí la
misma sensación de asombro y maravilla que cuando leí a Heidegger por primera vez en
alemán: degustar cómo el sentido emerge de la savia de las palabras mismas: de sus raíces,
prefijos y sufijos e incluso de sus meras letras. El aymara, para nosotros, es como el griego
o el hebreo para los europeos.

En la larga historia de Occidente, de la cual también nosotros somos parte (y también


somos parte de Oriente, a través de la indianidad) las raras y fecundas veces que Occidente
se abrió al Otro con inteligencia y generosidad, dando a luz nuevos Renacimientos y Siglos
de Oro, siempre estuvo presente la Kabbalah como su herramienta escondida para
establecer un vínculo interhumano de naturaleza universal, como hubiera dicho Roberto
Barberí. También en este Dossier aparece la Kabbalah haciendo el nexo de lo occidental
boliviano con la indianidad.

Los momentos creativos de Occidente están marcados por encuentros como el de Raimón
Llull, Cábala mediante, con el Islam; Giordano Bruno y Johannes Reuchlin en diálogo con
el paganismo neoplatónico, al igual que Agripa y Durero en conversación con el animismo
germánico; el Renacimiento italiano es incomprensible sin la Cábala cristiana de Pico de la
Mirandola y Marcillo Fiscino; como el Siglo de Oro español sin la mística marrana sufi-
cabalista de Miguel de Cervantes, Teresa de Jesús y Juan de la Cruz. El Renacimiento
isabelino es incomprensible sin sus secretos lazos con la Cábala hebrea: John Dee,
Christopher Marlowe, Shakespeare.
Del mismo modo, el diálogo de civilizaciones entre occidente y la indianidad tiene en la
estructura del Arbol sefirótico y el Diagrama Pachakuti Yanqui la clave para un
acercamiento creativo e innovador: la nación boliviana y las naciones indígenas, sin dejar
de ser lo que son, fermión y bosón, se encuentran en un taypi, a través de un tinku. Ese
taypi y ese tinku son la Asamblea Constituyente que podría alumbrar, si somos inteligentes
y generosos, un Estado compuesto por dos sistemas antagónicos pero complementarios. El
primer modelo cuántico de comunidad política del siglo XXI. Este rebasamiento del
principio de identidad y no contradicción occidental, desde el corazón de occidente, sólo lo
puede hacer posible la Kabbalah, la interfase con la civilización amerindia. No necesitamos
renunciar a nuestra identidad occidental para abrazarnos con la indianidad: sólo
sumergirnos en nuestras raíces esotéricas que, probadamente, han retoñado en todos los
grandes Renacimientos y Siglos de Oro de Occidente.

El debate pre-constitucional nos permitirá, así mismo, revisar ciertos esquemas que
subliminalmente han guiado las lógicas de comprendernos mutuamente y, por consiguiente,
de organizar nuestra vida en común.

C
El más tradicional es hegeliano: A B. A (tesis) y B (antítesis) desaparecen en C (síntesis).
Este esquema ha dado lugar a las teorías del mestizaje, sincretismo, religiosidad popular: C.
Su último empaquetamiento es la ideología de la “Unidad en la diversidad”; es obvio que la
Unidad no ha podido homogeneizar la diversidad: que es de lo que se trataba y hace de
tripas, corazón, es decir, comprender la diversidad hirsuta como remedos in fieri de
Occidente, C, cuya quintaesencia es el tercermundismo: plagiar a Occidente a destiempo
(negándose a sí mismo) y sin tener las condiciones de posibilidad para que el remedo
funcione: monoteísmo, instituciones burocráticas, separación de poderes, razón
instrumental, secularización, lógica de mediaciones abstractas: descorporeizadas…
d
Un siguiente esquema es el de Centro-periferias que anda bastante alicaído: b A c.
e
A
Otro esquema es el de la Subalternidad: B. Lo no occidental, B, es subalterno de
Occidente, A. Los nuevos estudios culturales ya no pueden seguir cerrando los ojos a su
imposible Aufhebung en C, pero, mecanicistamente, entienden a B como subdesarrollado y
subalterno: nunca llegará a homologarse con A y funcionará reactivamente respecto de A
que es el que lleva siempre la iniciativa. Cultivan el otro modelo hegeliano: el del Amo y el
Esclavo. Esta sigue siendo una visión exterior y monoteísta del dualismo, pero cada vez
menos maniquea. Los indios, los cholos, son buenas gentes pero subalternos y grotescos.

Un tercer esquema, que es el que proponemos para ser conversado de cara a diseñar nuestra
futura Constitución, proviene, por un lado, desde dentro: de la sabiduría amerindia:
Principio Chacha-Warmi y, por otro lado, desde fuera: del nuevo Paradigma occidental: el
Principio de Complementariedad de la física cuántica, Niels Bohr. A y B son diferentes,
opuestos, es más: son antagónicos, pero se complementan en un Tercero incluido, T, que
sin hacer desaparecer su antagonismo, A y B, produce un Tercero que es más que la suma
de sus partes y que se actualiza (Stéphane Lupasco) en el momento del encuentro; después,
se latentiza, mejor dicho está siempre virtual, in potentia, al acecho del encuentro de A y B
para pasar al Acto.

Este último esquema mental nos parece que es el que mejor nos cuadra. Por un lado, hace
justicia a la cosmovisión de la mayoría indígena (Principio democrático) y, por otro lado,
nos obliga a los que somos occidentales a aggiornarnos al nuevo paradigma científico
técnico de Occidente y a dejar de una buena vez a aspirar a una modernidad imposible que,
además, a estas alturas de la historia está ya obsoleta y en la que nos hemos aplazado
rotundamente, como muestran y demuestran todas los Informes de Naciones Unidas.

Este Dossier, igualmente, pretende mostrar las grandes visiones que distintos foros están
poniendo a la luz y que es preciso conocer con antelación, debatir, evaluar, sopesar pros y
contras, para llegar a la Asamblea con grandes consensos mínimos. Por un lado, tenemos
una tendencia que propugna los así llamados Gobiernos Departamentales Autonómicos de
relativamente larga data: ya a finales de los ochenta y comienzos de los noventa se debatió
esa posibilidad que quedó apagada por la vehemencia de la descentralización municipal;
ahora, ambas escuelas de descentralización se juntan en esta posibilidad de reorganizar el
Estado boliviano. Otra tendencia es la que apunta hacia un modelo federal, en base a
regiones que no necesariamente coinciden con los departamentos y, en señalados casos, se
sugiere que estas regiones podrían basarse sobre espacios de índole cultural. Una tercera
tendencia es la que proviene de los intelectuales indígenas sobre todo aymaras: la Diarquía,
basada en el “modelo del ayllu”: complementariedad de la parcialidad de arriba y la
parcialidad de abajo, aran y urin, que ahora es expandida a la complementariedad de la
“parcialidad occidental” y la “parcialidad indígena”, que tiene en la pareja: varón-mujer, su
unidad política básica (no en el individuo como los dos modelos anteriores). En la historia
de larga duración, la experiencia estatal indígena: Cuzco y Tiwanaku, se ha expresado en
este molde, del mismo modo que la experiencia estatal occidental es impensable sin los
arquetipos puestos en escena en Atenas y Roma; con una diferencia, empero: que el modelo
diárquico amerindio, en virtud a su software, puede incluir complementariamente el
modelo estatal europeo como su espejo, en tanto que el modelo monista occidental, no lo
puede hacer, por razones lógicas. Finalmente, una cuarta tendencia: la experiencia
municipal, proyectada estatalmente, ha producido un modelo consociacional post Estado
Nación de redes de gobiernos locales, de base orgánica: ayllus, pueblos indígenas y
municipios, con nodos gubernativos mayores en las mancomunidades municipales
metropolitanas, como una red neuronal meta-nacional insertada en una de las virtualidades
de la globalización: la federación mundial de gobiernos locales. La maduración de esta
virtualidad ha sido interrumpida, abruptamente, por la convocatoria de la Asamblea
Constituyente. Es una semilla que tendrá que germinar todavía en los niveles subnacionales
de un invernadero estatal clásico.

Agradezco a todos los que de una u otra forma ha contribuido a que este Dossier sea
compilado: Ramiro Duchen, Marcelo Renjel, Esteban Ticona, Jorge Miranda, Félix López
Mamani, Ludwig Valverde. Así mismo al ILDIS, Fundemos, al Colegio de Politólogos de
La Paz y, sobre todo, a todos y cada uno de los autores de esta miscelánea que nos han
permitido poder compilar este libro. Finalmente un agradecimiento especial a Roberto
Barberí por haber acogido y prologado este texto.
1. Introducción

1.1. La crisis de la forma Estado Nación vista desde la perspectiva de la Constituyente

Javier Medina

En el debate que se est á iniciando acerca de la Constituyente se pueden percibir dos


posiciones: una que acepta la idea de “refundar” el país; la otra, que le parecen suficientes
las “reformas” aprobadas en la Ley de necesidad de reforma de la Constitución.

Entre esa creciente mayoría que está por la “refundación”, la gama de posiciones es amplia;
pero podemos señalar sus extremos. Por un lado, profundizar la democratización del
sistema político: más poder al ciudadano: que elija de verdad, a costa de quitarle
competencias al representante, sin tocar, empero, el sistema político. El otro extremo tiene,
así mismo, su complejidad: desde las Autonomías que plantean las elites occidentales de
Tierras bajas: Santa Cruz, Tarija, hasta las Autonomías territoriales (soberanía sobre los
recursos naturales) propuestas por los pueblos indígenas.

Todas estas propuestas, incluida, por supuesto, la que sólo plantea “parches”
monoculturales a la Constitución, comparten una misma ceguera cognitiva e ignorancia
politológica, para decirlo cargando las tintas, respecto de la forma Estado Nación: los
hechos: los resultados, no les dan que pensar; aceptan nuestro simulacro estatal casi como
si fuera un dato de naturaleza, como al Illimani.

Sin embargo, de cara a la Constituyente, tenemos que tener mínimamente claro qué forma
estatal nos damos, que se adecue a nuestra ecología, culturas y época, dentro de una visión
no monista de la globalización (sólo la mundialización del Intercambio); pues, para seguir
con más de lo mismo, sería preferible solicitar ya nuestra anexión a la Unión americana y
desaparecer del mapa.

Los ingredientes de la crisis de la forma Estado Nación.

El Estado Nación sufre un embate de fuerzas internas y externas que cuestionan y disputan
sus funciones y responsabilidades clásicas. En el marco de la globalización, diversos
actores supra-nacionales reclaman para sí roles que por siglos retuvieron los estados
nacionales (seguridad y justicia, regulación comercial y financiera, lucha contra el delito, el
terrorismo y el tráfico de estupefacientes...). En el marco de una descentralización de tipo
federal o autonómica, estructuras subnacionales de autoridad, tales como gobiernos
regionales y gobiernos municipales, aspiran a participar con identidad e interlocución
propia en la formulación de políticas en áreas tradicionalmente reservadas al Estado Nación
(relaciones internacionales, recaudación, promoción de inversiones extranjeras,
negociaciones comerciales, cooperación técnica...). Digamos que este complejo crítico
tiene que ve r con la mundialización del Intercambio.
Otro embate, menos visible, que sufre el Estado Nación es la mundialización de la
Reciprocidad. Su punta de lanza tiene que ver, hoy, con el acelerado desarrollo de una
suerte de transnacionalismo no gubernamental, en el que un importante número de ONG´s
compiten con el Estado Nación en la gestión de complejas problemáticas derivadas del
proceso de globalización (defensa del medio ambiente, protección de los derechos
humanos, respeto de los derechos de los pueblos indígenas, lucha contra la discriminación y
el racismo, asedio a la corrupción, lucha contra la pobreza....). El mango de esta punta de
lanza lo constituyen las sociedades no occidentales del Tercer mundo que han impedido el
despliegue y florecimiento del capitalismo, comme il faut; especialmente notorio es este
fracaso en la región andina y, particularísimamente, en Bolivia que, hace poco, se ha dado
el lujo de despachar a Miami al representante más conspicuo del liberalismo neocolonial:
Sanchez de Lozada. Estas dos mundializaciones van separadas todavía. Sugiero leerlas,
desde un punto de vista cuántico, de acuerdo al principio de complementariedad de
opuestos.

Globalización: el factor exógeno

La globalización no es una novedad. Los marranos sefardíes, como resultado de la


expulsión de 1492, la tejieron el siglo XVI a través del mercantilismo; así llegamos hasta
Potosí, por el Rio de la Plata; funcionaba, a la sazón, en “tiempo carabela”. La
globalización actual funciona en “tiempo real”, gracias a la red telemática que ha originado
el nuevo paradigma científico-técnico, sobre todo en transporte y telecomunicaciones. Esta
red tiene efectos sistémicos: ha producido una infraestructura de alcance mundial para el
movimiento de capitales, datos, información, solidaridad, entretenimiento, personas y
bienes.

Hay teóricos que diferencian entre “globalización-situación”: globalismo de


comportamientos, relaciones sociales y formas de organización y “globalización-proceso”:
el conjunto de fuerzas que contribuye a la conformación de un sistema y una sociedad
globales.

En el primer sentido, la globalización no es una situación tan predominante o prevaleciente


como creen sobre todo las elites tercermundistas. Su dominio es todavía reducido, pues la
mayor parte de los comportamientos socio-políticos del género humano no se desarrollan a
escala global, sino que siguen concentrándose en el nivel local.

En el segundo sentido, en cambio, es innegable que el alcance y la densidad de los


comportamientos, relaciones sociales y formas de organización actuales señalan la
existencia de un “sistema global” en proceso de formación. El mundo vive una marcada
internacionalización de la producción, los negocios, las finanzas y las guerras. Sin
embargo, también es cierto que dic ho intercambio no implica que los ciudadanos de los
estados involucrados compartan ideas, ideales y valores que resulten en una “sociedad
global” con instituciones y reglas comunes orientadas a una cooperación mutua y
permanente. Al revés: el mundo va hacia una globalización compuesta por la
mundialización del intercambio (en lo que el Sur está subdesarrollado) y la mundialización
de la reciprocidad (en lo que el Norte está subdesarrollado). El ideal sería una
complementariedad de estas dos polaridades antagónicas.
El funcionamiento del “sistema de estados” en el Norte presenta una escalonamiento de tres
atributos esenciales: pluralidad de estados soberanos (estados); interacción sistémica entre
estados (sistema); valores, reglas e instituciones comunes (sociedad).

Nos encontraríamos, por tanto, ante un sistema global que no alcanza a ser una sociedad
global. Por ello, aún cuando la multidimensionalidad de la globalización (económica,
militar, ecológica, social y cultural) hace más compleja la asignación de roles y
responsabilidades, el Estado Nación sigue nomás siendo la principal fuente de identidad y
lealtad políticas; menos en Europa y más en América del norte y Japón. En los estados
nacionales más coherentes del Tercer Mundo, la cultura y la religió n parecen constituir las
principales referencias de identidad. Bolivia parece ser una excepción: es difícil encontrar
algo que compartan todos los bolivianos. Desde el punto de vista afectivo y simbólico se
podría decir que tampoco existe un “Nosotros boliviano”, sin lo cual, como se sabe, no hay
“Estado boliviano”. Ahora bien, compilando este Dossier, varios meses después de que
fuera escrito este texto, hay que decir que el reciente Referéndum sobre el gas parece
relativizar lo acabado de decir; como que, de cara a la Asamblea Constituyente, la sociedad
cerarra filas sobre sí misma, bajo el liderazgo oportuno y carismático del Presidente Carlos
Mesa.

No obstante ello, todo indica, empero, que el proceso de globalización ha puesto nomás en
tela de juicio el papel clásico del Estado Nación como unidad constitutiva del sistema
internacional. En el orden global, los conceptos de soberanía y autonomía están en franca
crisis. Los gobiernos nacionales se ven obligados a compartir cada vez más con otros
actores su autoridad sobre cuestiones políticamente antes exclusivas.

Semejante cuadro de situación se apoya en el hecho de que hoy en día el Estado se muestra
incapaz de sostener por sí solo la defensa y el desarrollo de su nación. Una visión clásica
de la economía política sostiene que las funciones esenciales del estado son la defensa de la
nación, la estabilidad de la moneda, el mantenimiento del sistema jurídico y la
administración de la seguridad social, pero numerosos fenómenos contemporáneos refutan
esta pretensión. Así, varios países europeos ya no son dueños individualmente de sus
políticas monetarias; el gobierno de los Estados Unidos necesita la ayuda de consorcios
transnacionales para desarrollar su sistema nacional de seguridad; las empresas
multinacionales líderes deciden sus disputas por sí mismas acordando qué ley nacional les
es más ventajosa; los tribunales internacionales de justicia ganan hegemonía ante,
justamente, la inoperancia de las leyes y cortes de los estados nacionales respecto de sus
dictadores y genocidas.

En consecuencia, las pretensiones monopólicas del Estado Nación de controlar el espacio y


el tiempo sociales se ven superadas por los flujos globales de capital, bienes, servicios,
tecnología y comunicación. Paradógicamente, el intento de los estados nacionales de
reafirmar su poder en el ámbito global, mediante el desarrollo de instituciones supra-
nacionales, socava aún más su soberanía. Y el esfuerzo por restaurar su legitimidad,
descentralizando el poder administrativo en instancias regionales o municipales, aumenta la
lejanía entre los ciudadanos y el nivel nacional de gobierno. De esta forma, el Estado
Nación westfaliano ha empezado a deconstruirse, controladamente en el Norte; en el Sur
no industrializado es ya pura fachada.

Así, pues, resumiendo el debate académico, algunos de los principales efectos, que la
globalización produce en el funcionamiento del Estado Nación, podrían ser los siguientes:

a) Alteración de los costos y beneficios involucrados en la selección de alternativas e


instrumentos de políticas públicas domésticas. Un buen ejemplo de ello se advierte en
cómo la liberalización financiera ha hecho que las autoridades nacionales prefieran
utilizar un instrumento de política monetaria de bajo costo, como la tasa de interés, en
desmedro de los tradicionales y onerosos controles de capital, requerimientos de
reservas o restricciones crediticias;

b) Modificación del equilibrio entre las opciones de políticas públicas de nivel nacional,
hemisférico y global, en especial en los campos de la economía y el medio ambiente.
Una serie de organismos supra- nacionales complejizan la oferta de políticas públicas y
compiten con los gobiernos nacionales en la solución de problemas sociales,
económicos y ambientales.

c) Erosión de la tradicional distinción interno / externo como consecuencia de la


cohabitación de estructuras internacionales, nacionales, regionales y locales de
autoridad. Esta superposición de diversas comunidades de facto, acentuada por la a-
territorialidad de la globalización, hace que el ejercicio de la autoridad se torne más
disperso y fragmentado;

d) Formación de nuevos escenarios de movilización política y emergencia de nuevas


coaliciones sociales (que empiezan a sacar a luz la mundialización de la reciprocidad ),
compuesto por jóvenes, sindicalistas, feministas, ambientalistas, campesinos y
productores rurales, consumidores, pueblos indígenas (llamados erroneamente
“antiglobalización”);

e) Reconfiguración de las agendas públicas e innovación institucional. Ello se percibe en


los esfuerzos del estado por internacionalizar las actividades de sus agencias
gubernamentales domésticas y en la articulación de nuevos modos de organización y
coordinación burocráticos con la intención de gerenciar la mundialización de la toma de
decisiones públicas;

f) Reorganización de las estructuras del estado en función de la maximización de la


ventaja competitiva nacional. En el actual orden económico, el sistema de producción y
comercialización globalizado ha creado un nuevo criterio de eficiencia que comparten
el sector público y el sector privado: la competitividad global (de la que el Sur está
excluido; por cierto, a sus elites les encanta la palabra competitividad: las palabras
suplen las cosas).

Es innegable que las fuertes presio nes de la competitividad global están forzando al Estado
Nación (en particular al Estado desarrollista de los países periféricos) a ajustar sus políticas
domésticas de acuerdo con los parámetros impuestos por una rígida disciplina fiscal que,
monitoreada desde afuera, actúa como “jaula de hierro” de las decisiones “soberanas” de
las naciones.

Los patrones de cambio global están modificando el contexto político en el que el Estado
debe actuar, creando un sistema de múltiples centros de poder y superpuestas esferas de
autoridad.

Finalmente, cabe afirmar que el Estado Nación se encuentra atrapado en medio de un


complejo y diverso mapa político cuya principal característica es la coexistencia del
tradicional sistema de estados con otras estructuras de autoridad superpuestas.

Estructuras locales de autoridad: el factor endógeno

A partir de los años sesenta los signos de desintegración de los estados nacionales se han
incrementado más aceleradamente. Desde entonces, naciones sin estado como Escocia,
Quebec, Euskadi, Gales, Cataluña, el Kollasuyo... pugnan por consolidar una identidad
propia y diferenciada con claras aspiraciones de representación extra nacional.
Paralelamente, similares señales de fragmentación del Estado Nación contemporáneo, pero
de signo inverso, han surgido en gran parte de África, la India, Indonesia y Turquía.
Simultáneamente otros estados nacionales han colapsado fácticamente: “Estados
quebrados” y “economías inviables” (como los países HPIC) que la cooperación
internacional, sin embargo, mantiene artificialmente para asegurarse, probablemente, un
acceso menos conflictivo a recursos estratégicos en el siglo XXI: biodiversidad, agua, gas...

Sin embargo, no son sólo estas conocidas tendencias secesionistas o implosiones de facto
las que cuestionan la representatividad de sus respectivos gobiernos centrales, sino que,
además, se están produciendo una serie de iniciativas políticas puntuales que lleva a
numerosos gobiernos provinciales, regionales y locales a exigir una mayor particip ación en
la toma de decisiones públicas que por mucho tiempo estuvieron en las manos exclusivas
del nivel nacional o federal.

Un ejemplo de ello lo ofrece la Unión Europea, donde la gestión de la educación, la política


social, la cultura, la vivienda, el medio ambiente y los servicios urbanos, ha pasado a la
responsabilidad de gobiernos regionales y municipales. Más aún, numerosas regiones y
ciudades europeas se han unido en redes institucionales que compiten con los estados
nacionales, constituyéndose en alternativas reales de poder público.

Es más, estas estructuras locales de autoridad juegan un papel tan activo en las
negociaciones con empresas multinacionales, inversores foráneos y gobiernos extranjeros
que se han convertido en unos de los más destacados actores del desarrollo económico de
sus países. De este modo, las iniciativas de jefes municipales, legisladores provinciales,
responsables de agencias estaduales, gobernadores y presidentes de regiones reclaman a los
respectivos gobiernos centrales su incorporación efectiva a los mecanismos de formulación
e implementación de políticas públicas. Podría decirse que se trata de un sistema de
autoridades superpuestas y lealtades múltiples.
En consecuencia, diversas unidades gubernamentales subnacionales han adquirido un
mayor protagonismo en el plano internacional. En los últimos quince años, casi todos los
gobiernos estaduales de los Estados Unidos han abierto oficinas de representación en el
exterior. Gobiernos provinciales de varios países son invitados a participar de reuniones
convocadas por la Organización Mundial de Comercio. Los Länder alemanes, algunas
Autonomías españolas y varios gobiernos locales británicos poseen agencias acreditadas
ante la Unión Europea en Bruselas. Regiones de la importancia de Rhône -Alpes, Alsacia-
Lorena, Renania del Norte-Westfalia, Midi Pyrenées, Baden-Wuttemberg, Cataluña,
Euskadi, Galicia... mantienen oficinas permanentes en los principales centros del comercio
mundial.

Asimismo, debe destacarse la noción de region state propuesta por Kenichi Ohmae a
efectos de señalar la conformación de virtuales zonas económicas naturales que pueden
estar compuestas por una parte de un estado nacional (sea ésta una provincia, un corredor
productivo o una región) o bien pueden extenderse a lo largo de los territorios de varios
países. De allí que el “estado-región” se defina como una unidad económica distintiva que
no siempre obedece a la geografía política clásica de los territorios nacionales. En este
sentido, pueden mencio narse las “regiones” del Valle del Mississippi, la zona San Diego -
Tijuana, la región de los Grandes Lagos, el sur del Brasil en torno a Sao Paulo,
Montevideo-Rosario -Buenos Aires...

De este modo, mientras se multiplican las relaciones de intercambio y de cooperación entre


las propias estructuras locales de autoridad bajo la forma de redes temáticas y asociaciones
geográficas de poderes regionales, provinciales y municipales, progresivamente se acepta la
legitimidad y la conveniencia de su actuación en la vida política, económica y cultural
internacional. Un ejemplo significativo de ello fue la Asamblea Mundial de Ciudades y
Autoridades Locales que se celebrara paralelamente a la Cumbre de las Ciudades de
Naciones Unidas.

La mundialización de la Reciprocidad: el transnacionalismo no-gubernamental

El fin de la Guerra Fría trajo aparejado una profunda redistribución de poder entre el
estado, el mercado y la sociedad civil, representada por sus ONG´s.

El Estado Nación parece verse obligado a compartir parte de su tradicional poder no sólo
con el sector privado con fines de lucro sino también con un complejo entramado de
organizaciones no-gubernamentales sin fines de lucro que son verdaderas redes sociales
informales que constituyen espacios participativos y eficientes que interconectan la
dinámica global / local. En cuasi Estados, como el nuestro, no sólo se oenegeiza la
sociedad civil sino el propio gobierno. De ahí que yo defina a Bolivia, desde una suerte de
fenomenología trágica como un “Proyectorado” de la cooperación internacional, más que
como un Estado nacional (para empezar ¿de qué nación: la aymara, quechua, criolla...?)

Semejante transformación se explica a partir de notables cambios en la estructura misma de


las organizaciones sociales: el paso de una rígida visión jerárquica a un concepto flexible de
redes y la transición de un centralismo compulsivo a una asociatividad voluntaria. De
acuerdo con esta visión, el motor principal de dichos procesos ha sido la reciente
revolución de la tecnología de la información. Una notable expansión de la capacidad
comunicacional ha permitido que nuevos actores, en especial las ONGs, dobleguen las
inclinaciones monopólicas del Estado Nación respecto del manejo de gigantescos paquetes
de información que, en el pasado, aseguraban su preponderancia.

De esta manera, las modernas tecnologías de la comunicación han potenciado la


conformación de vastas redes de ciudadanos y grupos sociales que, sin someterse a una
instancia pública jerárquica e indisputable, generan nuevos mapas de autoridad que no se
corresponden con las fronteras de poder de los estados nacionales. Un sinfín de
asociaciones civiles, empresas, organizaciones ciudadanas y grupos culturales o étnicos
están asumiendo mayores roles y responsabilidades en la gestión del interés público sin
detenerse en su acción ante aduanas o puestos migratorios. Poderosas fundaciones y ONGs
de la relevancia de Amnistía internacional, Médicos Sin Fronteras, Greenpeace, Care,
Transparencia internacional... poseen más recursos y expertise que varios gobiernos
nacionales. Jessica Mathews sostiene que el conjunto de las ONGs del mundo presta más
asistencia para el desarrollo a los países pobres que todo el sistema de Naciones Unidas
junto.

Al mismo tiempo, han surgido cuestiones tales como la contaminación ambiental, la


protección de los derechos humanos, las culturas populares, la promoción de la mujer, las
ferias de trueque y el dinero electrónico, problemáticas éstas que no necesariamente
reconocen los límites físicos de los estados nacionales. Este pujante transnacionalismo no -
gubernamental del principio de Reciprocidad, sumado al drástico achicamiento virtual de
las distancias y la consecuente relativización de la dialéctica lejanía / proximidad, está
cambiando el clásico sentido de comunidad nacional. Desde esta perspectiva, el resultado
de esa redistribución del poder, que se da después de la segunda guerra mundial, es un
nuevo orden internacional que, sin llegar a estar regulado por un gobierno mundial, sí
estaría fuertemente marcado por una especie de gobernanacia planetaria que vincula, por
medio de complejas redes informacionales, a actores tan diferentes como Microsoft, la
Iglesia católica, los cocaleros del Chapare, Amnistía Internacional y los (mal llamados)
movimientos “antiglobalización”. Huelga de hambre aymara en Radio San Gabriel, reguero
de huelgas en Sopocachi, San Miguel... Cochabamba, Potosí, Guarayamerin... Buenos
Aires, Ciudad de México, Barcelona, Ginebra...

Es evidente, pues, que el espíritu tra nsnacionalista de las organizaciones no -


gubernamentales pone en tela de juicio la tradicional autonomía del Estado Nación como
actor excluyente de las relaciones internacionales. Cada vez más, se observa cómo las
ONGs participan activamente en la elaboración de acuerdos bilaterales, regionales y
globales, sentadas en la misma mesa de negociación. A título de ejemplo puede
mencionarse el papel que jugaron las coaliciones transnacionales de ONGs en la
negociación de los acuerdos comerciales del TLC entre México, Canadá y Estados Unidos.
Asimismo, la presencia de organizaciones defensoras de los derechos de la mujer en la
Conferencia sobre Control de la Población del Cairo y Conferencia de la Mujer de Pekín,
así como la de grupos ambientalistas en la Cumbre Mundial de la Tierra de Río de Janeiro,
la Cumbre social de Porto Alegre, cuyo espíritu este mes se nos traslada a Santa Cruz...
El escenario que se vislumbra presenta así al Estado Nación compartiendo su papel de
articulador internacional de poder no sólo con organismos multilaterales como la ONU, la
OMC y la OEA sino además con una amplia red de ONGs transnacionales. Estas últimas
adquieren día a día mayor reconocimiento en su desempeño como global housekeepers, en
especial en campos tales como la preservación ecológica, la protección de los derechos
humanos, la ayuda humanitaria en casos de emergencia y la promoción de la salud y la
educación.

Conclusiones

El Estado Nación, en general, está pasando por una pronunciada crisis, pero esta crisis no
puede ser interpretada todavía como el preludio de su muerte. Por un tiempo más el Estado
Nación continuará siendo una unidad política y sobre todo simbólica dentro del sistema
internacional. Su desempeño tiene lugar en un escenario plural que incluye diversos actores
supra-nacionales, sub-nacionales y no-gubernamentales que compiten con él y entre sí por
un mayor espacio en la toma de decisiones públicas.

En el Norte, donde el Estado Nación, a través de la industrialización logra cumplir todas


sus metas, ya no es un actor soberano y autónomo en los términos absolutos del siglo XVII.
Pareciera que estos estados nacionales se están transformando en actores de baja soberanía
que lejos de actuar con anhelo autónomo, necesitan de la interdependencia, piloteada
empero desde una fuerte visión estratégica. Al estar su accionar fuertemente sometido a
variados condicionamientos internos, por parte de microfuerzas sub-nacionales, y externos,
por parte de macrofuerzas supra-nacionales, su objetivo parece consistir en ubicarse en el
mapa estratégico de la economía globalizada de forma tal que puedan maximizar los
beneficios que la misma ofrece y, simultáneamente, minimizar los costos negativos que ella
implica.

En el Sur, donde el Estado Nación, por no haber logrado un proceso de industrialziación


integral, debido al catolicismo y al animismo, se presentan dos escenarios: uno, el de
llamados “Estados emergentes” que tienen estado, sociedad civil, símbolos e intereses
comunes; a pesar de la pobreza y exclusión internas: tienen clases dominantes nacionalistas
que han logrado hegemonia sobre sus clases subalternas (México, Brasil, Chile...).

El otro escenario, son todos esos países que siguen siendo exportadores de materias primas,
y sus elites quieren seguir siéndolo; que no lograron crear una clase dominante y
tecnocrática: no conocen lo que es una burocracia estatal, ni quieren tenerla; que no han
conseguido ocupar administrativamente su territorio; que no han podido homogeneizar a
sus poblaciones (ni a través del lenguaje, la evangelización, el mercado, la escuela, el
hospital, el cuartel, la cárcel, el manicomio...); que no han creado un mercado interno
capitalista (ergo, sigue funcionado un mercado de reciprocidad); que no han sido capaces
de intitular la propiedad (ergo, sigue existiendo la comunidad) (y, en cuanto a la propiedad
privada, una propiedad puede tener media docena de títulos sobrepuestos de propietarios
ausentitas); que no han logrado (muchas veces ni quieren) incluir a sus clases subalternas
no occidentales; que públicamente hacen gala de haber perdido la más mínima soberanía
formal y simbolica; que ninguna política pública pueden llevar a cabo sin financiamiento
externo y asistencia técnica (que, por cierto, no producen los resultados previstos, por
razones culturales); que tampoco pueden cobrar impuestos (pues ello implica ciudadanía e
institucionalidad: existencia, justamente, de un “Nosotros público”); que, por no poder, ni
siquiera pueden cubrir su Presupuesto: imploran limosna para pagar los salarios de su
sector público; más trágico aún: no pueden ejecutar los recursos donados...que cada año, en
el Grupo Consultivo de Paris, se los vuelven a reempaquetar con un nuevo papel celofán.
De esta legión de países tercermundistas, los Estados acreedores han escogido un grupo
selecto: el de los irredimibles pero educaditos, a los que les han puesto sobre la frente un
sello, casi un tetragramaton: HPIC, del que sus elites políticas, por cierto, se ufanan y
vanaglorian. En rigor, el concepto de Estado Nació n a estos paises hace tiempo que ya no
les cabe.

Si lo estatal, en Bolivia, ha sido un gran fiasco, por ello mismo lo comunal es su mayor y
única baza si, como colectividad, quiere persistir en el ser. Ese “conato”, para decirlo con
palabras de la Etica spinozista, me vale la pena y por él me vengo jugando; por ello no
ignoro que la Constityente es la Oportunidad que tiene nuestra generación para empezar a
dejar de comer “el pan de la vergüenza” del que habla la Kabalah. En realidad, sólo
tenemos una opción: refundarnos de verdad: reconstituirnos. Yo vivo este kairos a la tenue
luz del tikun con el que mis antepasados se vislumbraron y engañaron, cierto, pero dieron
sentido a sus vidas.
1. 2. ¿Reforma o cambio de la constitución?

Simón Yampara H.1

Bolivia, geopolíticamente, es el corazón del Aynacha Awiayala, uno de los países


andinos con mayor peso demográfico “indígena”y de contraste de ecologías / ecosistemas
variados y complementarios simultáneamente, donde los bioecosistemas, la biodiversidad,
están interaccionadas con la biosfera.

Histórica, ecológica y culturalmente desde la meseta andino-amazónica aporta al


proceso de la humanidad con el desarrollo de las civilizaciones tiwanaquta y el Incario;
de los 103 ecosistemas existentes en el planeta tierra, 84 están concentrados en el espacio
andino-amazónico boliviano. La biodiversidad y la variedad cultural, como respuesta y
adaptación a esos ecosistemas, se han tejido por milenios: conocimientos, tecnología y
sabiduría, cultivando la riqueza y variedad de expresiones culturales emulativas, recreativas
en el proceso histórico y la cosmovisión andina; lo que nos enorgullece y nos da el sello, la
marca, de la identidad andina.

Hoy como ayer el proceso de las civilizaciones, la “modernidad”y la “post- modernidad”,


la globalización, la expansión de los mercados de las transnacionales, esta era cibernética,
nos exige nuevos aportes y estrategias de convivencia en “democracia” o “democracia
participativa”, la puesta en practica del diálogo de la interculturalidad de Pueblos, hasta
alcanzar un “multilogo” emulativo [ritualizado] con la comunidad biótica de la naturaleza,
para al menos aproximarnos a palabras mayores como “desarrollo sostenible” [summa
qamaña] las preocupacio nes de la “ciudadanización” como sinónimos de equidad de
oportunidades, de “libertad”, con un alto costo de abandono en la individualidad y la
soledad; frente a las prácticas de simultaneidad interaccionada de derechos entre lo familiar
/ privado y comunit ario/ público de los Pueblos andinos, así como un gobierno diárquico [
chacha-warmi ], interaccionado de género. En fin, este proceso histórico se traduce en
nuevos acuerdos / contrato social de convivencia de Pueblos “civilizadamente”
armonizados en derechos, en acceso a recursos (naturales y financieros), equidad en
oportunidades, cultivando el respeto mutuo de Pueblos.

Sin embargo, Bolivia al presente, como Estado, está al frente de al menos dos
diagnósticos: a) Para unos, es un Estado en crisis aguda; b) Para otros, es un Estado muerto,
donde asistimos a un velorio prolongado. Eso, no explicitan los políticos llamados
sistémicos y a-sistémicos, aunque se entretienen / enredan en discursos y debates de las
formas de reformar o re-constituir el nuevo Estado, muchas veces sin saber ¿cómo?. La
verdad es que ambos requieren de un tratamiento y/o una cirugía urgente. En el primer
caso, de reformas estructurales profundas, vía aplicación de la Constitución vigente;
mientras que el segundo nos avizora un cambio total de los órganos vitales y estructurales
del Estado, por medio de la Asamblea Constituyente y la participación plena / amplia de

1
El Alto, 26/03/02.
Pueblos originarios / indígenas y sectores representativos de la sociedad civil, a través de
sus organismos vitales.

Lo evidente es que el Estado Boliviano ha llegado a ese diagnóstico por un acelerado


crecimiento del virus de la corrupción, los narcovínculos, la conversión de valores de la
inmunidad por la impunidad, de las élites / castas empresariales, políticos gobernantes de
la oligarquía, con raíces coloniales, que sufre un síndrome patológico. Pero, a fin de
camuflar y no perder ese “privilegio”, practican la permanente exclusión de acceso al
territorio, a los recursos naturales y financieros, la proliferación de la injusticia, situando a
los Pueblos colonizados en una pobreza generalizada, por juegos de “democracias”
mercantilizadas y supuestos estados de derechos. Puesto que, en esos espacios campean la
inmunidad y la impunidad frente a los derechos y la justicia colonizadora, ajena en este
caso a los Pueblos indígenas / originarios y a la amplia gama de los sectores populares,
cuyos derechos están penalizados como la hoja de coca.

Así como el “virus patológico” no es un fenómeno nuevo, tiene secuelas coloniales, los
reclamos y las iniciativas del tratamiento tampoco son nuevos. Los políticos juran y
perjuran combatir y acabar con ellos, como pretenden pintar en el escenario de la coyuntura
política electoral actual. Muchos -por no decir todos- acaban infectados por ese síndrome.
Entre tanto las demandas, las preocupaciones e iniciativas de la sociedad civil duermen en
los archivos de la historia. Recordemos algunos escenarios públicos de demandas puestas
ante el Estado y los diferentes regímenes de gobierno. Desde la reapertura del proceso
democrático de la década del 80, explicitada por los movimientos sociales contemporáneos
en la década del 90, aunque buena parte de esto es consecuencia del DS 21060, tan
combatida por los movimientos sindicales afiliados a la COB; recordemos la famosa
relocalización de los trabajadores mineros que, en los hechos, era también la
desestructuración y relocalización de la COB.

Simultáneamente sale a flote y se pone manifiesto, la histórica e ignorada id entidad de


los Pueblos indígenas y originarios, expresados en marchas “por el Territorio y la
Dignidad” (agosto, septiembre 1990). Los Pueblos indígenas de la Amazonia han recorrido
600 km., desde la selva tropical hasta llegar a La Paz a los 3800 metros de altitud,
reclamando al Estado “Territorio y Dignidad de Pueblo”. Posteriormente, el 12 de octubre
de 1992, una concentración multitudinaria principalmente de aymaras, qhiswas, urus en la
Plaza de San Francisco, lastimosamente por mala dirección y asesor ía de la CSUTCB de
entonces, la concentración sufrió una escisión; los sindicalistas colonizados y controlados
por políticos del MBL y MNR traicionaron y frenaron el proceso con símbolos de los
partidos y una tenue asamblea de nacionalidades. Los otros, en proceso de descolonización,
desafiando al sistema, re-constituyeron en forma simbólica el Estado del Qullasuyu , bajo el
gobierno de dos INKAs: Waskar y Atawallpa. Esto fue, precisamente, un pre-anuncio de la
Asamblea Constituyente o re-constitución de un nuevo Estado.

Un tercer hecho significativo y de movilización masiva ha sido entre septiembre y


octubre de 1996, previa a la promulgación de la Ley INRA, la marcha llamada del siglo:
“Por Tierra, Territorio, Identidad y Derecho de Pueblos / Nació n originaria”, de Tierras
altas, donde constataron que la Constitución Política del Estado vigente quedaba corta
frente a sus demandas históricas. Pero el gobierno de entonces MNR-MBL-MRTKL, salió
con reformas-parches a la continuidad colonial, como son las reformas: Educación, sobre
todo INRA, puesto que desde el 94, ya estaba en vigencia la Ley de Participación Popular
como una medida neo-Toledana de Municipalización del campo sobre la base de la
reducción de secciones como jurisdicciones municipales.

Esto que parcialmente es retomado en las movilizaciones con bloqueos de caminos de


los años 2000 y 2001 por Felipe Quispe, afirmando que hay dos Bolivias: la Bolivia de los
q’aras y la Bolivia profunda de los indios. A lo que se suma la agudización de la lucha de
los cocaleros del Chapare a la cabeza de Evo Morales. Estos elementos son suficientes
antecedentes justificativos para convocar al Pueblo Boliviano a una Asamblea
Constituyente y la reconstitución de un nuevo Estado que no sabemos si continuará
llamándose boliviano o será qullasuyano.

En este sentido, creo que tenemos la oportunidad de dar lecciones históricas, aportando
a la convivencia de los países de sud América, fortaleciendo la democracia, sin violencia,
privilegiando y practicando el diálogo de Pueblos y culturas: t’inkhus innovativos y
reproductivos, que requieren de correspondencia recíproca y saber escuchar y viabilizar las
demandas y enmendar las injusticias históricas en un proceso de un nuevo Orden Social de
Armonía.
1. 3. Reforma o Refundación. Ajuste estructural y Asamblea Constituyente

Javier Medina

Se acaba de dar una suerte de salto cuántico: de pronto hemos entrado a un tiempo-
espacio signado por la Asamblea Constituyente y hemos dejado atrás el espacio-tiempo
signado por el Ajuste estructural y el Consenso de Washington. Esta ruta crítica, 1985-
2005, se quiebra antes: el 2000, cuando es evidente que el mercado y el sector privado no
pudieron crear riqueza y el estado quiebra: no pue de pagar sus deudas externas e internas:
la deuda social. Entonces se construye una nueva ruta crítica para el Estado HIPC: el de la
EBRP: 2000-2015; esta “Política de Estado” se quiebra el 2003 con la expulsión de
Sánchez de Lozada después de una revuelta indígena. Aquí se abre un período de
transición: el gobierno Mesa: 2003-2007 que concluirá previsiblemente en la Asamblea
Constituyente que, se supone, rediseñará un Estado post- neocolonial. De la magnitud y
significación de este período de transición, entre la primera y la segunda república, por
decirlo con una metáfora francesa, la clase dominante no se quiere dar por enterada; esta
ceguera voluntaria es absolutamente comprensible, pero es fatal. Digamos, pues, que esta
inercia intelectual nos está empezando a jugar una mala pasada: seguimos hablando como
si todavía estuviéramos en la Bolivia reformista del Ajuste estructural. Esa Bolivia ya no
existe.

El espacio-tiempo del Ajuste, en sus mejores momentos: 1994-1997, 2000-2001, fue


un tiempo de reformas. Las elites se ciñeron a pensar sólo lo que es posible hacer en el
marco de las leyes vigentes. Y, válganos dios, había dentro de lo vigente mucha tela para
cortar, que cortamos. Pero he aquí que esa forma mentis se nos hizo rutina y flojera
intelectual y, ahora, que ya no estamos en ese contexto reformista, seguimos repitiendo los
mismos tópicos que, a la sazón, tenían sentido. Ahora, la agenda social y política, pública y
privada, pasa los próximos años por la Asamblea Constituyente y una nueva Constitución
intercultural. Nos guste o no.

Ahora bien, por ello mismo, ya no tiene sentido seguir hablando, por ejemplo, del
modelo boliviano de descentralización; ni siquiera de profundizar la descentralización;
menos aún de prefecturas o elección de prefectos. Los mismos departamentos y secciones
de provincia no tienen mucho sentido, desde el punto de vista técnico; son pesadas
herencias que han contribuido a nuestra pobreza: el proceso de ma ncomunización
municipal, por ejemplo, es fruto del absurdo de la Sección de provincia que no sirve para
producir riqueza. Hay que empezar a pensar, bajo el paraguas de la Constituyente, en
autonomía, federalización, consociación, diarquía, de nuevas regiones autonómicas o
federales; tenemos que olvidarnos de los departamentos actuales como espacios
autonómicos o federales: harían inviable al conjunto de la Unión. La Constituyente nos abre
un nuevo horizonte para la creatividad y la autopoiesis política.

La Constituyente, en efecto, abre un espacio de rediseño de los términos de referencia


del Contrato social entre individuos y del Pacto de reciprocidad entre comunidades
políticas: el ayllu y la res publica o la koinonia y la politeia, para decirlo aristotélicamente;
así como el estatuto entre individuo y comunidad. Pero no sólo eso, así mismo para sellar lo
que Michel Sérres llamó un “Contrato natural” con la Biosfera que los indígenas siempre
han respetado, pero que, ahora, tiene que ser constitucional. Eso significa aceptar la
concepción indígena y gaiana de Territorio.

Ya no tiene sentido poner parches progresistas a la Constitución y seguir chipándola


con regímenes especiales. Ya no tiene sentido pensar una Constitución monocultural. Si
después de la Constitución de 1995 teníamos la obligación intelectual de pensar una
Constitución intercultural, después de la rebelión indígena de Octubre tenemos, además,
una obligación moral. Para ello hay que abrir la participación a más escuelas de
pensamiento y darnos un tiempo razonable de reflexión colectiva. Convocar muy pronto a
la Constituyente podría ser una trampa para que los indígenas queden fuera de juego y
validen lo que los doctorcitos de Charcas saben hacer: ofrecer siempre lo mismo: una visión
monocultural del país.

Ya no tiene sentido pensar sólo en tierra, reforma agraria, ley INRA (aunque hay que
implementarla para resolver los problemas acumulados); hay que pensar Territorio como
Urakpacha y Gaia dentro de un paradigma ecológico y chamánico...de cara a la
Constitución

Ya no tiene sentido seguir autoengañándose con el Municipio productivo o el así


llamado Desarrollo económico local; hay que pensar en cómo reconocemos en la
Constitución el Principio económico de Reciprocidad como complementario del Principio
económico de Intercambio. O hay que bajar el volumen al discurso sobre las cadenas
productivas y aumentar el volumen a cómo recuperar la soberanía sobre nuestros recursos
naturales, su utilización y, en base a ello, crear empleo y exportar valor añadido, pero
pensando como bolivianos y no como ventrílocuos de las transnacionales.

Ya no se puede seguir hablando de modernización del Estado y seguir pensando en


Ventanilla única, Manuales de procedimientos, ajuste de PDM´s...incluso en reforma
institucional. Digámoslo rápido: han quedado obsoletos y minimizados la EBRP, el PSAC,
el PRI, el PDCR, el PASA, las Mancomunidades, el DUF: todos los grandes parches,
muletas, silla de ruedas, sueros, transfusiones de sangre al Estado fallido...que nuestra
colonización mental ya no ve como “parches” sino como parte del funcionamiento normal
de un Estado tercermundista. Tenemos que pensar qué competencias deben tener los
Gobiernos federales o autonómicos, los gobiernos municipales y el gobierno nacional.

Tenemos que pensar cuáles sean los sistemas de sentido de ambas civilizaciones.
Tenemos que negociar un espacio para el Animismo amerindio pero también para el
Monoteísmo occidental; tenemos que debatir cuanto espacio otorgamos a la Ecología
(espacio) y cuanto a la Historia (tiempo); tenemos que buscar un sabio equilibrio entre
Homeostasis amerindia y Progreso occidental. A lo mejor hay que determinar espacios para
uno y otro sistema. Liberar espacios para la Reciprocidad y precisar los espacios para el
Intercambio; la vida, luego, construirá las interfases de sistema.

Tenemos que empezar a pensar los Principios interculturales de nuestra nueva


Constitución. ¿Cuáles son los principios indígenas? (¿principio de relacionalidad, principio
de correspondencia, principio de reciprocidad?) ¿cuáles los occidentales? (¿principio de
identidad, principio de no contradicción, principio de tercero excluido?) ¿cuáles los
principios inter-culturales, los principios puente? (¿principio contradictorio, principio de
complementariedad, principio de tercero incluido?).

Tenemos que pensar los Valores constitucionales. ¿Cuáles son los valores
occidentales? (¿libertad, igualdad, individualidad?); ¿cuáles son los valores amerindios?
(¿religación, comunidad, responsabilidad?). ¿En qué valores fundamentales nos ponemos
de acuerdo?: ¿el derecho a la vida? ¿qué pensar respecto a los que creen que no hay una
separación entre vida y muerte; que conforman un continuo?. ¿Cuáles son los derechos y
obligaciones fundamentales para ambas civilizaciones?: ¿es la vida del individuo el bien
supremo o la vida de la comunidad biótica?. Como colectividad ¿nos pensamos sólo en el
tiempo? ¿o también como parte de la biosfera o, como las grandes civilizaciones: mayas,
incas o los astrofísicos actuales, también en el contexto de la galaxia?

Si el Ajuste estructural fue el tiempo de las reformas posibles dentro de la legalidad


vigente, la Constituyente, de golpe y porrazo, ha abierto la posibilidad de reinventarnos, de
refundarnos, a partir de nuestras raíces amerindias y del horizonte del nuevo paradigma
científico del siglo XXI que, como la serpiente cósmica, se vuelve a morder la cola: en
efecto, el pasado y el futuro se vuelven a encontrar, porque ambas (a diferencia de la
modernidad) comparten una misma visión orgánica y reencantada del universo.

Los peligros que nos amenazan son seguir anclados en un pasado, que ha acabado
abruptamente, y la ignorancia: ignorancia del otro : los amerindios, e ignorancia del nuevo
paradigma de la humanidad del siglo XXI. La ignorancia produce miedo; el miedo,
imponer con triquiñuelas la propia ignorancia; el miedo y la ignorancia son conservadores,
“prudentes”; buscan, so mil pretextos y peros, perpetuar los pequeños privilegios
conseguidos o heredados.

Démonos, como sociedad, el tiempo razonable para pensar, meditar y conversar una
Constitución intercultural y no perder nuestra última oportunidad de ocupar un lugar digno
y pionero en la comunidad de naciones de la nueva era. Los últimos serán los primeros.
1. 4. Pachakuti-Kandiri en el Paititi
Simón Yampara

RETORNO Y RETOMA DEL PACHAKUT'I Y PAYTITI


"Los Aymarás, Qhishwas, Waranies, Chiquitanos y otros, luego de 459 años de colonización y
colonialismo, hemos vivido una especie de siglos de oscurantismo y ¡a Pacha en Mach'a, o sea
prolongación de espacio y tiempo de escasez y sufrimiento; donde la curva cíclica ha sido
descendente para lo s originarios, pero a partir de ahora, iniciamos un nuevo ciclo ascendente, por
eso es importante despojarnos de ideologías y pensamientos foráneos, sean estas "nacionalistas,
revolucionarias, capitalistas o neoliberales", en el fondo son colonizadoras, que dan continuidad al
pensamiento y la estructura colonial...
Pensaren el Ayllu o Tekoa, es pensar y a firmar en lo propio, y lo propio es pensar con propiedad de sí
mismo es "Jaqi-Pacha", vida y fuente de vida, reproducción social y producción alimentaría,
proceso que se desdobla en tiempo y espacio, en Uma-Urqu, en Urin-Aran o simplemente en Chacha-
Warmi. Pero también es pensar en la propiedad; ésta relación, de propio y la propiedad denota un
régimen de apropiación, ésta relación conflictual es violencia o fuente de violencia. De ahí que, tanto
lo propio, la propiedad como ¡a violencia se canaliza a través de T'inkus pareados (Urin- Aran) y las
ceremonias rítualizadas periódicamente, como un proceso permanente de "Ponerse de acuerdo" las
sociedades entre ellas y con ¡a naturaleza PACHA". (Pag. 47,57y 58).

RETORNO Y RETOMA DE LA ESTRUCTURA Y PENSAMIENTO DE LAS NACIONES


ORIGINARIAS

Todos sabemos, o si aún algunos no saben, tenemos la obligación de "saber que "Bolivia no es
una nación", simplemente es un "Estado Territorial", heredada de la audiencia de Charcas, por eso
las instituciones republicanas también son herederas de las instituciones coloniales;
fundamentadas en la contradicción indígena no indígena; por tanto los no indígenas por la
práctica del colonizador y colonialista nos excluyen del sistema republicano de todo el espacio del
poder político y económico, pero entendamos ¿para qué?; para nadar en el mar de la corrupción y
el enriquecimiento ilícito de las castas oligárquicas, en este caso de los no indígenas. Para
perpetuarse en ese mar, defiende el sistema republicano y sus dispositivos jurídico-legales y
practican la política de exclusión, el desconocimiento de los derechos ancestrales de los
pueblos y naciones originarias, desestructuran a los Ayllus y la Marka territorialmente y en su
pensamiento. Por eso Bolivia prefiere ser un Estado sin Nación, manteniendo Naciones
Originarias sin Estado, sin poder poli tico y económico. En este sentido, las castas oligárquicas,
se han hecho de nacionalistas, neolatifundistas, izquierdistas empresarios, pero ambos hoy
comparten el neoliberalismo; contra las naciones originarias. Por eso hay necesidad no sólo
de reafirmar nuestro pensamiento, sino, continuar la lucha de nuestros antepasados. En otras
palabras proyectar el NAYRAXPACHA?
a) Sentido y Alcance del Pensamiento de las Naciones Originarias

Las naciones originarias con la filosofía y pensamiento de la Pacha, la lógica del Ayllu-Marka, Tenta-
Tekoa, actuamos armonizando los intereses privados y comunitarios, a través del desdoblamiento del derecho
propietario, en posesión privada familiar y propiedad comunitaria del Ayllu-Marka, que a nivel micro
del Ayllu esta reflejada en Sayaña-Aynuqa, a nivel regional en territorios del Ayllu y la Marka; a nivel
interregional y interecológico, la articulación y combinación y complementación de los
diversos espacios ecológicos, compartiendo y conviviendo en territorios continuos (Ayllus de Origen) y
territorios discontinuos (reproducción de otros Ayllus proyectivamente). En este sentido, no solo debemos
demandar, tierra-territorio, sino también el ejercicio del derecho ancestral originario, la estructura y
pensamiento andino-amazónico, hacia un proceso de liberación propia, para ello planteamos la
Asamblea Constituyente, como principio de participación activa de las naciones originarias en la vida
republicana, en ese debate para el cambio de la Constitución Política del Estado, no meras Reformas como
pretenden desarrollar, los oligarcas de derecha, izquierda y populistas.
Porque en esa Reforma, del Art. 1ro. de la CPE; tan solo se incluye los conceptos "multiétnica y pluricultural",
con eso no solo subliman los oligarcas, sino, quieren ocultar y desviar las reales demandas de las naciones
originarias, en otras palabras, quieren saludar a las "etnias", al "pluriculturalismo", excluyendo el
derecho ancestral originario; para perpetuar la corrupción y el enriquecimiento ilícito de las castas
oligárquicas criollas no indígenas y condenar a las naciones originarias en miserables mendigos tercer
mundistas, sin identidad, sin derecho, menos poder político y económico.
En este sentido, además de reclamar nuestras raíces culturales -desde Chullpas e Inkas- y los derechos
histórico ancestrales como naciones originarias, ratificamos las hazañas históricas contemporáneas
expresadas en el manifiesto de Ayo-Ayo de 1970; el manifiesto de Tiwanaku de 1974, de la cual surgen una
primera promoción de cuadros direccionales que viabilizaron el bloqueo de caminos de 1979, el congreso
de unidad sindical de 1983. Eventos de la cuales tenemos la tesis política de la CSUTCB; que no ha
sido superada aún por el movimiento sindical; en ella expresa justamente la transición de la Estructura
Sindical hacia lo Originario, es más, esas declaraciones y manifiestos han logrado mantener
la unidad en la diversidad. Desde entonces (1983) se ha vivido un manoseo de la CSUTCB, de los
políticos de la oligarquía criolla de izquierda y derecha, llevándonos a esa vía agotada, en la cual
agoniza el sindicalismo. Pero los Aymaras, Qhishwas, Urus, Chipayas, Waranies, no nos quedamos
en ella, sino, encaminamos y proyectamos hacia la retoma de lo originario.
Esta situación se clarifica nítidamente en la concentración masiva del 12 de octubre de 1992 en las
diferentes capitales de departamentos y en La Paz, en la plaza San Francisco, donde la dirección
de la CSUTCB, liderizada por el MBL y sus seguidores más las ONGs afiliadas a Unitas además
de financiar dicho evento, plantean, la "Asamblea de Nacionalidades y de Pueblos" con los colores
y sol, simbología del MBL, resultando en los hechos un fracaso de esa propuesta, que luego le
costará el serio cuestionamiento a su Secretario Ejecutivo y su posterior alejamiento. Sin
embargo, los Sindicatos de Base, las Organizaciones Originarias a falta de una propuesta
seria y responsable, hemos flameado miles de miles de "Samis del Kurmi" (arco iris), es
decir, las Wiphalas que simbolizaron la Pacha y el discurso de la Pluralidad y coexistencia
tanto de Naciones Originarias como el Estado Republicano de exclusión, desde entonces se ha
profundizado el debate sobre la estructura, el pensamiento, el afianzamiento y retoma de las
Organizaciones Originarias al interior del Sindicalismo, afiliados a la CSUTCB y la COB.
En este sentido, retomar lo originario, también quiere decir cultivar la espiritualidad y la
ritualidad andina, aquí tenemos los elementos de comunicación y armonización con la
naturaleza.
ORDEN DE LA NATURALEZA ARMÓNICA

a) Wiraqucha b) Pachaqama
Orden del universo Energía del Universo

l.-Askicha (resolver) 3.-Lurawi (hacer) 2.- Ch'ama (fuerza)

c) Tunupa
Fuego Agua
d) Illapu
Rayo Trueno Relámpago
Deidades de los fenómenos del suceso
b) Los Samis de la Kurmi y la Simbología Andina

Todos sabemos que en nuestra lucha, los Pueblos Indígenas y las Naciones Originarias hemos luchado para irradiar
los Samis de la Kurmi (colores de arco iris) en todos los espacios públicos y privados; vale decir la WIPHALA,
porque en ella está expresadoel sentido de la vida y los alcances de los derechos fundamentales, la convivencia armónica
de Pueblos, Nacionalidades y Naciones Originarias tanto de la Amazonia como de los Andes. Aquí no juega la
cantidad numérica, sino la cualidad y respeto a la diversidad y diferencia; con igualdad y armonía de
derechos. Lo importante es que esto es producto (nace) de la Interacción de una pareja de Kurmis macho-
hembra,(Chukiwanka 1993) que expresan la parcialidad de espacios territoriales y una manera de
emitir las energías de la Pachamama y los Achachilas, emulando la vida y la Cultura Andina, es
decir los Samis de los tejidos y la artesanía, que tiene que ver a su vez con todo el proceso de la
ritualidad andina.

Para nadie es extraño que las parcialidades de los Ayllus, las Markas, tienen sus distintivos en el
uso de su indumentaria, en ellos refleja la combinación de los SAMIS de la Kurmi. En este sentido, la
simbología, -los distintivos- varían de una región a otra, entre las parcialidades de los Ayllus, vale
decir Urin-Aran, Aynacha-Araxa, kupi/ch'iqa; Maasaya-Alaasaya.

Las culturas andina/amazónicas, el pareamiento desdoblamiento, han cultivado como parcialidades,


la reproducción como tripartición, para nuevamente parear, en esa sucesión se construye la
espiral de la Pacha, hasta llegar al PACHA-KUTT'I. O sea cualquier elemento impar, busca su
pareamiento, y esto su reproducción, hasta armonizarse con la Pacha.
SIMBOLISMO CON MAYOR "PROFUSIÓN ZOÓMORFICA DEL TAWANTINSUYU

Suyu Unidad Bipartición Tripartición Cuatripartición Espiral


Cultura
Cóndor
Chincha Jaguar
Jaguar/Puma Serpiente
Chavln Jaguar/Puma
Mochica
Casma
Serpiente
Pachakut'i

Kunti Cóndor J Jaguar/Ave _____


Jaguar
Parakas Puma
Nazcas
Qulla Serpiente
en tres
Pukara Centro mundos Cruz cuadrada
Cóndor Tunupa
Tiwanaku Cruz Cuadrada
Wari Inka Serpiente Cruz Cuadrada
Jaguar/Puma

Anti Inka Jguar/Puma


Serpiente

Total tipo le 4 3 3 1 1
animales

c) La Inalmama, parte de la vida de las Naciones Originarias

Al hacer referencia a las sentencias históricas, decíamos: "la Inalmama (hoja de coca), sagrada
salvará al 'indio' y ella será la perdición del hombre blanco", (Atawallpa 1533). Esta sentencia,
diferencia claramente, cual es el sentido del uso de la sagrada hoja de coca, puesto que para los
Pueblos y Naciones Originarías, desde milenios, es parte de nuestra vida, nuestra cultura y
espiritualidad, que nosotros sepamos, nunca ha provocado malestar alguno, más bien, es el
elemento primordial de reracionamiento entre las sociedades, el cosmos y la naturaleza, en otras palabras
es el elemento armonizador del holismo de la Pacha, por eso está presente en todos los actos sociales,
vale decir desde la Jaqicha, la producción y reproducción, la cosecha y todo el proceso productivo, por qué
no decir también en los actos de la muerte. Es más, es un elemento indispensable de los "sabios andinos",
maestros yatiris, amautas, para ellos es como la "Biblia" de la jerarquía eclesial cristiana, por eso precisamente
tiene que ver con la espiritualidad y la cultura andina. Esa práctica, junto a la coca, también es
negada, por la religión católica y protestantes, como también por las leyes del sistema republicano (4).
Por eso antes de fomentar su uso, se proscribe y desnaturaliza, el uso cultural.
d) Inalmama parcialidades y mankalli de la Marka

Alasa

Masa
MARKA ,Ayllus de Urinsaya Uo Ul U2 U3 U4
alásaya
Aransaya Ao Al A2 A3 A4
Ayllus de Aransaya A'o A'l A'2 A'3 A'4
Másaya
Urinsaya U'o U'l U'2 U'3 U'4

(4) Entendemos que cada cultura, tiene su manera de cultivar y emular su espiritualidad, es decir, sabe como comunicarse con el
cosmos, la naturaleza y sus antepasados. Unos como la cultura occidental a través de Cristo otros como la Andina a través de
la PACHAMAMA y los ACHACHILAS ver esquema Jaqi-Pacha. Por eso hay necesidad no solo respetar lo católico
evangélico, sino, también la espiritualidad y "religiosidad" Andina.

"grandes transnacionales cocaleras hace que estén produciendo en su propio territorio la hoja de coca, sin
embargo por otro lado propugnan la intervención militar y policíaca para destruir este recurso natural
benigno y de grandes bondades en la sociedad de la estructura cultural andina. Esos son también parte
de los postulados del neoliberalismo Latinoamericano y lo que en Bolivia va en destrucción de la
armonía social y cultural de la vivencia de los Pueblos y Naciones Originarías.

Por el momento, de esa expresión holista de la hoja de coca, sólo hemos hecho referencia a la
estructura cultural y la ritual espiritual, en todo caso, esto no solo tiene que ver con la
identidad, la soberanía, sino, sobre todo con la territorialidad y la complementariedad ecológica y socio-
cultural.

En otras palabras, la coca al ser un problema contemporáneo de está sociedad, es también un problema de
desarrollo y la lógica de vida.

Estos son los propósitos por el cual venimos luchando los Aymaras, Qhishwas, Waranies...para
transformar la CSUTCB en otra Organización Originaria con identidad y pensamiento propios y
proyectivamente con capacidad de enfrentar los siglos 'venideros, pero también nuestros
recursos naturales estratégicos, entre ellas el territorio y el derecho de usufructo y propietario

e) Los Amautas y los Yatiris Develadores del Pasado y Devenir de nuestros


Ajayus y Sentimientos

Cada Pueblo, cada Cultura, no solo es portadora de conocimientos y sabiduría, sino, tienen sus propios
mecanismos de canalización, cultivo y emulación espiritual, vale decir los Ajayus y
Sentimientos de cada pueblo, dependen de la idiosincrasia cultural. Pero también tienen sus
"maestros" comunicadores/ espirituales; maestros que emulan el Cosmos corría Naturaleza vale
decir, los Achachilas y la Pachamama, con las sociedades son los Amautas y Yatiris,
consagrados por Illapu (rayo) o predestinados naturalmente,(Huanca, 1989) sólo ellos
tienen este don de autoridad y consejería para vivir bien con/y en la PACHA (Qarnaña).
Son autoridades para predecir y emular el ir y venir de la PACHA, anunciando las bondades y
dificultades, las fortalezas y debilidades del tiempo y espacio; ellos son los que combinan y
emulan el poder natural del día y la noche, como de las montañas y la Pachamama. Ellos nos
comunican con las fuerzas vitales y la energía cósmica, a través de eventos y ceremonias
rituales.
Mientras la cultura occidental emula sus espíritus a través de la cristiandad, a la cual como
cultura respetamos. Los Andes, la Cultura Andina emula a través de los Achachilas, la
Pachamama, la Inalmama, los Illapus, haciendo una Comunidad de PACHA Achachilas y la
Umalmama. Ellos nos anuncian que el PACHAKUTT'I, es nuestro, es decir de los Pueblos
Indígenas y Naciones Originarias.

La curva que ha sido descendente a lo largo de casi alrededor de 5 siglos, ahora reiniciamos con
la etapa ascendente. Hemos descendido para ascender. Hemos vivido tiempos de sufrimiento,
sometimiento de explotación, sojuzgación, opresión, genocidio y etnocidio. Ahora recogiendo,
"Jawillando" los Ajayus, de ese proceso de sometimiento, tenemos que re-componer y re-
constituir los Ajayus y dar fisonomía a los Pueblos y Naciones Originarias. De eso se trata
nuestra lucha. Los descendientes de los invasores, tienen que aprender a respetar otras
culturas, entonces no solo exigir respeto a la estructura republicana y los dispositivos jurídicos
positivistas y neoliberales, primero deben aprender a respetar a los otros como Pueblos y
Naciones Originarias con Cultura Propia; sobre esta base ejercitar el respeto a diversidad y
la diferencia.

f) Pacha Achachilas y la Pachamama en el Retorno

Recuperados los Ajayus, quiere decir también retornar a la estructura y pensamiento


originarlo; y lo originario es vivir en y con la PACHA cultivando y emulando permanentemente
los Ajayus, haciendo una simbiosis, reciprocando y complementando las fuerzas y energías de las
parcialidades, respetando las diferencias, los distintiv os para reciprocar y complementar
hacia la armonización de esas fuerzas sean adversas o sobre desarrolladas. Estos son
realizados a través de eventos ritualizados de encuentros como los T'inqus.

Cuando se hace referencia a la PACHA los Achachilas y la Pachamama, también hacemos


referencia a nuestros antepasados (ancestro) y a la experiencia practicada por milenios. Pero
también es evidente, que no sólo el pasado está por delante, sino que nuestra visión histórica es
cíclica; por eso la PACHA camina, va y viene, es común afirmar y escuchar "Qhipha -Nayra
Uñtasisawa-Sartasipxañani". Cada movimiento y ciclo emite ciertas fuerzas y energías, genérica y
simbólicamente representadas en Achachilas y Pachamama; equiparadas con las fuerzas del
espacio y tiempo -PACHA- emuladas y armonizadas por la pareja humana -JAQICHA-.
Entonces Jaqi a través del tiempo y espacio hacen los PACHA Achachilas y la PACHAMAMA en ellos
están los AJAYUS y el Sentimiento de la Cultura Andina. Ese ir y venir de la PACHA se
reconoce como retorno, eso para los Aymara-Qhishwa, Waraní, se llama PACHAKUTTI-
retorno de otros tiempos y PAYTITI, como búsqueda de esos nuevos/viejos tiempos.

Jaqi-Pacha en la Cosmovisión Andina PACHA

TATA INTI PHAXSI MAMA A

U X U
R PACHA- ACHACHILAS PACHA-MAMA A M
o Y A
CHULLPA ACHACHILA CHULLPA AWICHA P
u Q
T i A A M
o INKA ACHACHILA INKA AWICHA C M A
u H A N
L NAYRA LAQ’A ACHACHILA AWICHA A Ñ Q.
L A
u ACHACHILA AWICHA J P
AWK1 TAYKA A A C
S WAYNA TAWAQU Q. C H
u YUQALLA IMILLA I H U
Y C A M
U WAWA WAWA H I
CHACHA WARMI P
A S
C U
H Y
A U

EL PACHAKUT'I Y PAYTITI DE LOS PUEBLOS Y NACIONES ORIGINARIAS


HACIA EL 3er. MILENIO

a) ¿Ahora qué queremos en este P r o c e s o de Pachakutt'i-Post 459 años de


Colonización del TAWANTINSUYU-?

Conviene recordar 3 sentencias históricas; que anuncian y granean el acontecer de los "500"
años de colonialismo: "la Inalmama ( h o j a de coca) sagrada salvará al 'indio' y ella será
la perdición del hombre blanco" (sentencia en la muerte de Atawallpa: 1533). El narcotráfico y la
corrupción de hoy a quiénes favorece?.-* Un pueblo que oprime a otro pueblo no puede ser libre"
(sentencia del Inka Yupanki) Bolivia es libre e independiente?- digan Uds. "Nayaruwa
Jlwayapxitanta, nayxaruxa, waranqa waranqanakawa kutt'anipxani, wara wararu uñtata" (Tupaj
Katar! 1781) -Ahí está el pensamiento y la estructura originaria, de Katari y el ………

Todos sabemos que en las reuniones comunitarias las Chaxwas, Luchiyas, Tinkus, y Chawpis de las
parcialidades de Urin y Aransaya de los Ayllus y las Markas, las ceremonias rituales y la jaqicha, no solo que
la mujer esta a la derecha sino todo el acto ritual comienza por la derecha hacia la izquierda; esto es
simbolización y práctica de la Pacha, en relación al Ayllu-Marka y la vida familiar, pero esto no se limita ni
termina ahí, sino, va en ciclos y períodos cortos, medianos y largos; que para la cultura andina e indígena
oriental, es el espacio y tiempo que va y viene, es la Pacha que camina de derecha a izquierda, haciendo
ciclos y combinando años de escasez, baja producción, cataclismos e inundaciones, calificados como ciclos de "mach'a
mará", como esto no es permanente, y la Pacha camina, entonces viene también ciclos de "suma
mará", años de buena producción y bonanza. Esto para definir las políticas de producción y
agropecuaria, quiere decir caminar juntos con la Pacha, es decir vivir y convivir con la Pacha.

Entonces, esos son los elementos de un proceso de Pachakuti, donde los Aymaras, Qhishwas, Waranies,
Chiquitanos y otros, luego de 459 años de colonización y colonialismo, hemos vivido una especie de siglos de
oscurantismo y la Pacha en Mach'a, o sea prolongación de espacio y tiempo de escasez y sufrimiento; donde la
curva cíclica ha sido descendente para los originarios, pero a partir de ahora, iniciamos un nuevo ciclo
ascendente, por eso es importante despojarnos de ideologías y pensamientos foráneos, sean estas
"nacionalistas, revolucionarias, capitalistas o neoliberales", en el fondo son colonizadoras, que dan continuidad al
pensamiento y la estructura colonial. A modo de ejemplo veamos como el nacimiento de
Bolivia, esta sobre la audiencia de Charcas, la Mit'a Colonial se produce como servicio
militar obligatorio y el servicio doméstico de las mujeres que fluctúan entre 16 a 22 años.
Servicio al Estado? El repartimiento colonial ahora se reproduce como programas de
alimentos donados.

THAKHICHA PACHAKUTI EN UN ORDEN DUAL PROPIO

Wisk’achani-II Tiwanaku Inka Narasuyu


15.000-12.000 a.j.c. 133 dc-1150 dc 1431-1532 dc dc.

Chullpa

Wisk’achani –I |Chiripa Qullasuyu Colonia


60.000 a 50.000 Wankarani 1.151-1500 d.c. 1532
años a.c. Tiwanaku Republica
1.200 a.c. -133 d.c. Bolivia
Perú
Ecuador

b) Década Indígena o Medio siglo de Desarrollo de un Nuevo Orden Social de los


Pueblos y Naciones Originarias

Todos parecen pensar, que los 459 años de colonización, mejor dicho "civilización homogeneizadora" ha
triunfado; no queda otra cosa que seguir la corriente. Luego de los 459 años contabilizados desde (12
Oct. 1492 - a 12 Oct. 1992): 1993 se ha declarado como "año Indígena", concluido eso, en un
encuentro en Cochabamba, se ha discutido el "Decenio Indígena"; se afirma que el año Indígena pasó
desapercibido, sin significación alguna; pero quién nos dice que la década será igual tal vez peor o con
alguna variación. Entonces cómo pensar proyectivamente? Pero ahora, con apoyo desde la oficialidad
boliviana, mejor dicho, la Política Indigenista desde la Vice Presidencia, busca encaminar y
programar la década indígena. La Década Indígena, si bien es coherente para "Centro América";
pero no es tanto así para el Tawantinsuyu, (Sud América) los invasores colonizadores de estos
territorios recién han pisado los años 15 3 2-3 5, lo que quiere decir que aún no se ha cumplido los
500 años, queda aún cerca a medio siglo, vale decir 40 años de reafirmación cultural.

Por eso, para los Aymaras-Qhishwas-Waranies estos 4 decenios significa el Proceso de


Pachakuti, proceso en el cuál deben reafirmar la estructura del pensamiento y la identidad
propia y la reconstituc ión del poder político de las Autoridades Originarias. Eso es nuestro
nuevo paradigma de lucha.

Entonces, hasta en el tratamiento del tema "Indígena" y entre Indígenas, mejor dicho
originarios, tenemos que ser plurales y coherentes con los procesos diferenciados. Por eso:
"vivir la pluralidad, quiere decir, superar procesos de 'civilización homogenizadora' y
enfoques de desarrollo unilineal y vertical", esto no sólo debe practicarse entre los indígenas
y no indígenas, sino también y sobre todo entre los Pueblos y Naciones Originarias, como
vienen afirmando los movimientos sociales andinos contemporáneos. Ahora otra cosa es que los
políticos y los que escriben sobre lo "Indígena", quieran negar y deslegitimar ese proceso.

El evento de Cochabamba, que fue inaugurado, con un acto ritual, sin los maestros
ritualistas, aún no han percibido y proyectado las discusiones dentro de paradigmas y
percepción plural de los Pueblos y Naciones Originarias. Aunque sabemos, que si bien hubo
representación internacional, mejor dicho delegaciones con afirmación de la identidad
indígena. En el caso boliviano, no sólo que la representación adoleció de la pluralidad y
legitimidad en la representación, sino sobre todo, están los allegados a la política oficialista del
gobierno y con financiamiento de ellos, pero, que aún no terminan de salir de la política "civilizatoria
y homogeríizadora" como afirman en Ley de Participación Popular, reconociendo a
comunidades campesinas y/o pueblos indígenas como OTBs. No diríamos que eso esta mal o que no
deben hacer, pero si es necesario también escuchar a los Aymarás, Qhishwas, Waranies, no
oficialistas, que tienen su propia percepción y visión; de esta manera practicar la pluralidad
al interior de los Pueblos y Naciones Originarias; para trabajar programas y acciones más
coherentes y originales; como eso de la década o medio siglo de desarrollo de un nuevo orden social
de armonía.

Estamos en las puertas del 3er. Milenio y aún no hemos aprendido a ser plurales entre
nosotros y con los otros. Como tampoco los otros (No Indígenas) con nosotros (Indígenas). No
sabemos, la estructura y mentalidad colonial hasta donde quiere homogenizar y civilizarnos.

La pena siempre es que, en este tipo de eventos; los Ayllus, las Markas, los Suyus, las lentas,
Tecoas; así como los Jilaqatas, los Mallkus, los Yatiris, los Capitanes Originarios (Mburuvisaguazu),
además de los investigadores, pensadores Aymaras, Qhishwas, Waranies, siempre son los
grandes ausentes en este tipo de eventos. Es más la política de Pueblos Originarios/Indígenas,
casi siempre es llevado por para indígenas o indigenistas trasnochados en querer aprender
la cultura occidental y con este paradigma querer comprender la causa de los Pueblos y
Naciones Originarias, sin la participación de los Originarios. ¿Hasta cuándo seguirá esta
política?

Por otro lado, si ahora se declara el decenio Indígena, no diríamos que esta mal,
simplemente entenderíamos que eso quiere decir que se toma como referencia cuando inicio
pisar Centro América el 12 deOct/1492; sin embargo a Sud América (Tawantinsuyu) recién
piso por los años 1535, ese tránsito (1492-1535) es el proceso de invasión colonial; para
proyectar el proceso de colonización que dura aún hasta hoy. Como verán en todo esto, trasluce dos
tendencias históricas, pero no incompatibles.

1.- La de hacer declarar el decenio Indígena cuya propuesta inicial ha sido planteada por el
premio Nóbel de La Paz R. Menchú, coadyuvado por el Vice Presidente de Bolivia V. H.
Cárdenas.
2.- Declarar medio siglo de desarrollo de l nuevo orden social, partiendo del proceso de
invasión colonial (1492-1535).

Decimos que ambos no son incompatibles, puesto que si nos limitamos al decenio, es
posible que nuevamente pase desapercibido y estemos demandando otro decenio, en este
sentido, si es que se declara el decenio, tenemos que entender como el inicio de un nuevo orden
social y parte del medio siglo (50 años) de Desarrollo de ese nuevo orden social. Eso para los
Andes y Tawantinsuyu se llama el proceso de Pachakuti. Pensando por el otro lado, y
tomando como base el año 1535, tendríamos los 40 años de reafirmación cultural dentro de
los 500 años, y concluido esto, el decenio, con lo cual igual llegamos a medio siglo.

Entonces, pensemos proyectivamente en la pluralidad y el medio siglo de desarrollo de un


nuevo orden social en armonía entre Indígenas; los Indígenas con los No Indígenas que hoy
reafirman la identidad de Naciones y Pueblos Originarios.
2.3 UNIDAD O ARMONÍA DE LAS PARCIALIDADES

Tenemos que partir de un principio básico y práctica milenaria de las sociedades andinas,
donde la coexistencia, convivencia, armonización de las parcialidades, con autonomía y
respeto mutuo han sido las reglas de juego de la Confederación de los Estados de las
Sociedades Originarias; por eso "Unidad no quiere decir necesariamente fusión total, pero
tampoco... separación. Unidad...es la permanente necesidad de retornar a la diversidad", en
esta concepción y pensamiento está el contenido filosófico de la Pacha, que hace un holismo y simbiosis de
elementos estructurantes de la cultura y sociedad andinas. En este sentido, la lucha de los Originarios quiere
decir también la lucha por la autonomía de las regiones reactualizando territorios de los Pakajaqis, Lupakas, Larikajas,
Karangas, Killakas, Uru Chipayas, Waranies, Chikitanos, Moxeños, Ayoreos, etc., hacia la constitución de
un nuevo Estado Multinacional y Pluricultural de Consenso Comunitario y Democrático, donde los
Originarios y no Originarios tengamos un pleno ejercicio de nuestros Derechos y Libertad de opiniones
sin privilegios ni exclusiones. En este Pachakutti - Paytití, los Originarios, Aymaras, Qhishwas, Waranies,...
vivimos y enfocamos otra manera de hacer unidad respetando las reglas de la diferencia, entre
culturas sociedades y éstas con la naturaleza y el cosmos; puesto que, como hemos dicho el libro de la naturaleza
es la Ley de las Sociedades Originarias.

Mapa ubicación de las Jach’a Markas Originarias Andinas y la transversalidad interecologica.

Croquis espacial de achachilas

En este sentido mientras el sindicato y los partidos políticos republicanos nos habla de unidad,
como sinónimo de uniformización; los Pueblos y Naciones Originarias, entendemos como la permanente
necesidad de retornar a la diversidad; la
armonización y cohesión de esa diversidad llamada parcialidades.*
a) Jaqi-Pacha y la Armonía de las Parcialidades

Nuestro elemento, fundamental y natural es la pareja humana, unida por la acción déla JAQICHA, allí el
hombre y la mujer son parcialidades heterogéneas y complementarías, que hacen la unidad de la
familia, armoniza fuerzas y energías de las parcialidades, ambos al organizar la familia se
ponen en condiciones iguales, armonizan y cohesionan, cultivan, reproducen y alimentan las
partes, como una totalidad. Pero esta totalid ad en relación a la Jatha, Ayllu y Marka, resulta siendo
también parcialidad; en este caso sea de Urin-Aran; pero que son emulados y armonizados por el TAYPI, o
sea por el encuentro y reencuentro de las parcialidades; a fin de armonizar las hostilidades de exceso o
carencia.

Esto es en realidad la Jatha y modelo de unidad que buscamosen la re-toma del proceso originario. Esto es
respuesta a debates de género y desarrollo. Puesto que entender la dinámica de género, como
parcialidad, lleva a extremos como feminismo o machismo. El problema esta entonces, no sólo
interactuar, complementar en sexo y la reproducción, sino también en la gestión, el rol político y el
desarrollo social, económico y cultural de los Pueblos y las Naciones Originarias y éstas con los No
Originarios. Lo contrario es apartheit o segregación.

b) Las Parcialidades Armonizadas por las Fuerzas del Taypi


Las parcialidades por si solas sueltas no son fuerza, ni energía, así como la mujer y el hombre aislados,
tampoco tendría sentido para y en la vida, ni cumplirán las leyes de reciprocidad y
complementariedad, en otras palabras estarían desarmonizados (entiéndase bien claro que hay
excepciones).

Las partes -parcialidades- se emulan en el TAYPI, hemos dicho por encuentros y re-encuentros
ceremoniales y ritualizados, resultando estos eventos sagrados al igual que hacer amor en la pareja,
pero ambos actos sirven para reciprocar y complementar energías, pero también para producir y
reproducir la especie, alimentos y riqueza. Allí entonces la importancia de la función del Taypi y la
Armonización, que es otro elemento que tiene que ver con nuestras luchas. Entonces no sólo tenemos
que buscar unidad entre hombres y mujeres -género- sino también entre las diversas partes y/o
sectores; en este proceso de reafirmación y retoma de lo originario. ¿Qué nos dicen los políticos y la
COB sobre esto? mantener la estructura republicana.
ORDEN ARMÓNICO DE LAS PARCIALIDADES

a)
Alaasaya
Nayraxa
N
Jalanta W taypi E Jalsu
Ch’iqa Kupi

S
Mäsa
Qhiphaxa

Nayraxa
Aranasaya Urinsaya
Paqallqu 7 6 Maqallqu
Sayt’a Sayt’a

Jalanta Taypi Jalsu

Paqallqu Maqallqu
Sayt’a 7 Qhiphaxa 6 Maqallqu

c) La Jaqicha en el Ayllu: Modelo de Unidad Armonizada

Pensar en la Jaqicha y el Ayllu, es también pensar en la PACHA, porque sólo a través del tiempo y
espacio, desarrollamos nuestras virtudes, defectos, potencialidades y debilidades. Si una familia
(pareja) no armoniza las fuerzas y energías de varón - mujer, es que esa pareja, no sólo que es mal
vista, sino también está inhabilitado para cumplir determinados roles en el Ayllu y la Marka. En
otras palabras la armonización de la pareja, tiene que ver con la ética de la pareja, sus familiares y
el Ayllu, por eso toda pareja en el Ayllu es una pieza importante en la función del Ayllu. Es aquí donde el
género cobra importancia, por las funciones sociales, productivas y reproductivas que cumple en
una cultura y sociedad. Este modelo tenemos que ampliar, proyectar y porque no decir retomar en la
estructura y la lucha de nuestras organizaciones originarias.

Pensar en el Ayllu o Tekoa, es pensar y afirmar en lo propio, y lo propio es pensar con propiedad de
sí mismo es "Jaqi-Pacha", vida y fuente de vida, reproducción social y producción alimentaría,
proceso que se desdobla en tiempo y espacio, en Uma-Urqu, en Urin-Aran o simplemente en
Chacha-Warmi. Por eso pensar en lo propio es pensar en la propiedad; ésta relación, de propio y la
propiedad denota un régimen de apropiación, ésta relación conflictual es violencia o fuente de
violencia. De ahí que, tanto lo propio, la propiedad como la violencia se canaliza a través de T'inkus
pareados (Urin-Aran) y las ceremonias ritualizadas periódicamente, como un proceso
permanente de "Ponerse de acuerdo" las sociedades entre ellas y con la naturaleza PACHA.

Esto marca, un código social propio y un modelo de sociedad también propia, recreativa y única,
propia con propiedad y milenaria como proyectiva, frente a modelos (capitalista y socialista)
parcelados en cuanto a propiedad (privada-estatal), totalizantes e invasores en cuanto a sistema.

El Ayllu, es entonces, ese régimen de apropiación, es la reproducción social y alimentaría en la


PACHA, es vida y fuente de vida, armonizada, por tinqus ceremoniales rituales, administradas
por la jerarquía de sus autoridades. Es toda una eurística andina y ética del "saber hacer" de las
culturas Andinas. Es parte del holismo de la PACHA.

Modelo que ha sido diseñado de la praxis y el saber hacer de las sociedades Andinas, que ha sido
sometido, enajenado y violentado de sus derechos, desnaturalizado en su sistema y estructura.
Sin embargo, hoy es un modelo alternativo que está esperando la fuerza y la energía de la PACHA de
sus hombres la potencialidad y creatividad que exige los siglos venideros. Es también retorno o
Kuti.

Entonces el Ayllu, no solo es una relación de parentesco como muchos repiten, sino todo un
régimen de apropiación del territorio y tierra. Este régimen estructura el espacio, como
propiedad común del Ayllu y posesión privada familiar, permitiendo el uso racional del
territorio en sus diferentes pisos ecológicos, como también el uso de la tierra en forma
privada, evitando la parcelación. Esta estructura territorial, engloba, el espacio de la fauna, la
flora, lo religioso y político, constituyéndose la coherencia del Ayllu de los Andes. En otras palabras es
una organización, territorial, cultural-ritual, económica y socio-política.

d) Derecho y Deber de Reconocernos y Reconocer la Raíz Histórico Cultural

Menos mal la década del 90, se caracteriza por la búsqueda de nuevos paradigmas, paradigmas de
pluralidad y emulación a la diferencia. Eso quiere decir también que ya se debaten propuestas y modelos de
desarrollo de "civilización homogenizadora" y procesos unilineales, lo plural quiere decir que
hay varios espacios culturales, por tanto maneras y visiones de desarrollo. El problema es que no se
reconoce ni queremos reconocernos como tales en esa pluralidad. Eso es la vergüenza de este país.
Veamos algunos ejemplos Bolivia como Bolivia, no reconoce a los Aymaras Qhishwas, Waranies, ni
cómo Pueblos, ni cómo Naciones Originarias (ver Ref. CPE) tan solo como campesinos. Otro la COB,
como COB, no admite el proceso originario, aún se mueve con la postura de la vanguardia obrerista-
salarialista (ver X Congreso y resultados de la COB).

Entonces cómo podemos vivir y convivir en la diferencia y pluralidad. Un primer derecho y deber
que debemos conquistar es reconocernos y respetarnos, pero también emularnos y armonizarnos
en un proceso de pluralidad, ese debate tenemos que profundizar y desarrollar en eventos de
discusión y profundización del diálogo.

e) La Solidaridad, Hospitalidad de las Naciones Originarias con las


Nacionalidades Extra-Continentales.

Una de las características tal vez peculiares de las Sociedades Andinas Originarias es la solidaridad y hospitalidad
con todos, vale decir con los no-Originarios o no "Indígenas", porque de otra manera no se entendería la
invasión y los 5 siglos de colonización y colonialismo. Lo que pasa es que mientras unos son solidarios y
hospitalarios, otros son invasores, hostiles y segregacionistas, pero también logocentristas. Por eso hay
necesidad de discutir, mejor dicho debatir la expectativa y la visión de la vida y cultura entre estas partes; no
con el fin de homogenizar, menos de imponer, sino de armonizar intereses, hacia metas mas coherentes. Aquí
tenemos que partir bajo el principio de que todos tienen vida y son importantes, como tales,
reconociéndonos tenemos que practicar y respetarnos, sólo así habrá una sociedad de armonía.

CAPITULO III

NAYRAXPACHA-URAQPACHA
HACIA EL NUEVO ORDEN SOCIAL DE ARMONÍA

"Pues sabemos, que la arqueopterix (ave-serpiente) en


un mismo cuerpo, no sólo vislumbra una especie de unión de cuerpos de distinta especie, sino que el
uno al expresarla altura y cordilleras como es el "Kunturi" (ave de tierras altas del Qullasuyu) y el otro
que se arrastra en la Pacha selvática katari (serpiente, délas tierras bajas selváticas, del Antisuyu),
estos hacen complementación de Pueblos y Naciones Originarias diversas.... Por eso, en acto de
complementación y reciprocidad, los selváticos no solo buscan la pluma de las aves de altura y la costa
para su indumentaria y su arma de guerra (hechas) sino que la búsqueda del Paytiti-Kandiri.
Entonces, el katarismo, es ideología, pensamiento y práctica política de los Pueblos indígenas y las
daciones Originarias, que practican la filosofía de la Pacha, es decir del NAYRAXPACHA, articulando,
tejiendo los SAMIS de la KURMI, donde los qalqus son espacios que denotan ciclos, kutis y retornos
indicando y pulsando pachas como un marca paso, en Pachas de bonanza y escasez". (Pag. 65y 67)
1.5. Una aproximación a los conceptos de occidente e indianidad: el software de la
nueva Constitución boliviana

Javier Medina
Cabe pensar –siguiendo el modelo cuántico- que lo humano, como sociedad, colapsa en dos
civilizaciones contrapuestas, al modo como el lóbulo derecho del cerebro (énfasis en la
intuición omniabarcante) se contrapone al lóbulo izquierdo (énfasis en la razón analítica) y
ambos, contrapuestos como son, conforman sin embargo el cerebro humano. Supuesto: la
metáfora del macrocosmos-microcosmos. Como es arriba es abajo; como es adentro es
afuera.

A nivel de sociedad digamos, pues, que la humanidad colapsa en la civilización occidental:


el lóbulo izquierdo, y en la civilización oriental: el lóbulo derecho, del cual la indianidad es
un subsistema. En adelante, puesto que pensamos desde Bolivia, nos referiremos a la
indianidad como lo contrapuesto de occidente: las dos civilizaciones que nos constituyen.
Al interior de ambos lóbulos civilizatorios se encuentran las culturas. En el caso de
occidente: las culturas portuguesa, italiana, inglesa, holandesa.. En el caso del oriente: las
culturas china, tibetana, aymara, quechua, guaraní, schuar, nahua, hopi... Por tanto, una
primera acepción de interculturalidad, en nuestro caso, es para referirse a las relaciones
entre aymaras, guaraníes, tacanas... que no es muy usual; una segunda acepción de
intercultural, más usual y menos exacta, es la que se refiere a las relaciones entre la cultura
hispano-criolla y las culturas indígenas. En este caso es más apropiado hablar de un diálogo
entre civilizaciones. Este es mi punto de vista y esto trataré de mostrar en este artículo.

Ahora bien, al interior de cada civilización se vuelve a dar la misma bipartición. Al interior
de occidente se dan la función onda y la función partícula: lo bosónico y lo fermiónico; sólo
que la función onda, representada por su trad ición apofática, mística y romántica, juega un
rol subordinado y la función partícula juega un rol hegemónico, sobre todo a partir del
diseño galileano de la ciencia nueva hasta, por poner una fecha simbólica, 1926, en que
hace su presentación en sociedad la mecánica cuántica. Ahora bien, Occidente se encuentra
en pleno proceso de mutación; a nivel científico técnico ya opera el nuevo paradigma, pero
a nivel político sigue la inercia del paradigma newtoniano.

Al interior de la indianidad se dan la función onda y la función partícula; sólo que de un


modo proporcionalmente inverso al caso occidental; en efecto, la función partícula,
digamos el vector individualista, juega un rol subordinado: no es que no exista, la
antropología la conoce bajo el concepto de faccionalismo; en tanto la función onda, el
vector comunitario, juega el rol hegemónico. La indianidad, así mismo, está viviendo un
proceso de transformación profundo que ellos llaman Pachakutik: un vuelco de lo que
Waman Poma llamara el “mundo al revés" de l siglo XVI.

Dos fines de época: el de la modernidad y el de la colonización (cara y sello de lo mismo:


la hegemonía euroamericana) que confluyen en un cambio de era que, probablemente, sea
de una complementariedad de opuestos y que, para nosotros, se podría expresar en un pacto
de reciprocidad intercivilizatorio constitucional.
Hacia algunas definiciones

Trataré de formular lo anterior en son de definición por mor de más claridad lógica. Nunca
se rebasa la subjetividad pero, siguiendo una vieja inercia mental, voy a tratar de definir
civilización y cultura a partir del software con que operan concretamente dichas
sociedades; en la edad media se llamaba a lo que ahora llamamos software con el nombre
de forma mentis que los alemanes popularizaron con la expresión Denkform y que
últimamente también se llama Programación neurolinguística. Recurro a este horizonte de
intelección para que mis definiciones sean lo menos vulnerables posible a discuciones
cargadas de emocionalidad, justamente porque la relación entre culturas diferentes y ya no
digamos entre civilizaciones antagónicas, Cristianismo y Animismo, es lo más emocional
que existe. A sabiendas que la realidad no se da así, reivindico metodológicamente el santo
y seña de mi civilización: la separación, por su utilidad; es como la escalera
wittgensteiniana: una vez comprendido, la podemos echar.

Civilización

Entiendo, pues, por Civilización el resultado de cómo la humanidad decide


hegemónicamente ante la dualidad (creador-creatura, bien- mal, materia-energía, espacio -
tiempo, sujeto -objeto, vida- muerte...) . Si la piensa excluyentemente, es decir,
dualistamente (“el imperio del Bien lucha contra el imperio del Mal”, G. W. Bush),
tenemos entonces la Civilización occidental cristiana. Si la dualidad se la piensa
incluyentemente, es decir, como unidad dual, no-dualidad, advaita... tenemos entonces a la
Civilización oriental, en nuestro caso, la Civilización amerindia animista.

Esta primera aproximación tiene la ventaja de que es simple: Occidente igual ex -clusión; la
Indianidad igual in -clusión; pero es oscura porque no informa todavía por las mediaciones
que llevan a una y otra caracterización. Siguiendo a Baruch Spinoza, sobre todo en ese
diáfano cristal que pulió en la Etica, las mediaciones que llevan a una y otra
caracterización las saco de la lógica; por ello preciso refrescar una serie de principios
lógicos que van a tornar diáfana y clara nuestras definiciones.

El Occidente cristiano, desde el punto de vista lógico, se construye sobre el Principiu m


contradictionis que, en castellano, se suele traducir como principio de no-contradicción.
Dice así: una proposición no puede ser verdadera y falsa a la vez y en el mismo sentido.
Por tanto, pues, se trata de un contradicción formal (- P(q &-q)) mas que de una
contradicción material. La lógica formal expresa la contradicción mediante la conjunción
de dos proposiciones contradictorias (q & -q), cuya matriz de valores lógicos siempre arroja
el valor de falsedad (0).

El principio de no contradicción tiene dos derivados:


El Principium identitatis, principio de identidad, que sostiene que cualquier ente es
necesariamente idéntico consigo mismo: A es igual a A y, por tanto, enfatiza la diferencia
con cualquier otro ente distinto. Siguiendo el razonamiento de Leibniz, el principio de
identidad es idéntico al principium individualitatis. Este es el asiento lógico del
individualismo moderno de los estados de derecho basados en la democracia representativa.

El otro principio es el Principium tertii non datur que, en castellano, se lo conoce como
Principio de Tercero excluido que sostiene que una proposición es o bien verdadera o bien
falsa y que, por consiguiente, no existe una tercera posibilidad, es decir, tanto verdadera
como falsa, ni verdadera ni falsa. Con otras palabras, este principio afirma la exclusión
mutua de los valores lógicos (verdad y falsedad)

Bien, estos son los principios lógicos que han modelado el cerebro y el alma de Occidente,
hasta el día de hoy. Una racionalidad de exclusión, basada en una lógica binaria que valora
sólo dos valores lógicos y elige uno contra el otro.

Ahora bien, los principios que han configurado a la civilización amerindia y están
empezando a conformar la civilización del siglo XXI son los siguientes:

Principio de complementariedad de opuestos : A y B son opuestos, pero se complementan


en una relación contradictoria que los completa al modo como jaqe integra a chacha y
warmi que son opuestos. Dicho cuánticamente, la materia-energía es continua y discontinua
a la vez: la energía es emitida y absorbida a pequeños trozos, quanta, y saltos (Constante de
Plank); un fotón es, simultaneamente, onda (Thomas Young) y partícula (Einstein). Este
principio formulado por Niels Bohr como complementariedad onda-partícula para el mundo
subatómico, Louis de Broglie lo extiende a todo el universo y Frohlich a los seres vivos.

El principio de complementariedad enlaza dos mediciones, la una que actualiza el


acontecimiento en una homogeneidad: continuidad: onda, que Dominique Temple, llama
Palabra de unión y la otra, al contrario, lo actualiza bajo la forma de una heterogeneidad de
singularidades: discontinuidad: partícula, que Temple llama Palabra de oposición. La
complementariedad de ambos principios se realiza en un Tercero contradictorio que los
incluye como A y B sin hacerlos desaparacer en un C, como hace la lógica hegeliana:
Aufhebung.

Principio de Tercero incluido: existe una tercera posibilidad más allá de la relación
contradictoria: la relación complementaria, justamente, que es un estado particular de
potencialidades coexistentes simétricas y contradictorias en sí mismas (el “estado T” de
Lupasco). El estado T corresponde a una situación particular en la que dos polaridades
antagónicas de un acontecimiento, son de intensidad igual y dan nacimiento a una tercera
potencia, en sí misma contradictoria: el tercero incluido. Lupasco considera las potencias
como “conciencias elementales”, con lo cual crea una interfase conceptual para ir del
mundo subatómico al de los sistemas vivos e incluso psíquicos. Temple valora esta
proposición de Lupasco “ya que una conciencia elemental que se relativiza por su
conciencia elemental antagónica, deja de ser una cuestión ciega respecto de sí misma,
mientras que adquiere una luz sobre sí misma a partir de la conciencia que le hace frente, la
cual adquiere una luz sobre sí misma, luz que puede describirse, luego, como luz de luz,
una conciencia de conciencias”. Desde esta perspactiva lee Temple la civilización
amerindia en su Teoría de la reciprocidad y la muestra constituida, justamente, sobre el
principio contradictorio. Toda la oposición entre Occidente y la Indianidad, entre el
cristianismo y el animismo, puede vislumbrarse en este hecho. Para el Occidente cristiano,
la verdad es el lugar de la no contradicción; por eso para Tomás de Aquino, la verdad es la
adecuación de cosa y pensamiento. Para la indianidad animista y el nuevo paradigma
científico la realidad (y, a fortiori, la verdad) es, justamente, el lugar de lo contradictorio.

La civilización oriental considera la contra-dicción como una contra-posición de dos


posiciones incluidas e integradas en un todo que las contiene. Josef Estermann sostiene,
con razón, que el pensamiento andino no niega por completo el principio de no -
contradicción; lo que sucede es que en Occidente, “la contradicción formal es concebida
como absoluta o excluyente, de tal manera que el uno (A) excluye al otro (B) y viceversa:
((A > -B) & (B > -A))” En cambio el pensamiento andino “interpreta la contradicción
formal como co ntrariedad material: A es distinto de B, y B es distinto de A, pero A y B
pueden coexistir como partes complementarias de una tercera entidad que es recién un todo
en sentido estricto”.

Es interesante, así mismo, la siguiente apostilla de Estermann: “La contrariedad en la


lógica occidental sólo se da (a nivel proposicional) mediante la cuantificación, pero no a
nivel de la cualidad (afirmación y negación), donde rige el principium tertii non datur. La
contrariedad, en cierto sentido, es el tercio intermedio entre plena identidad (A igual A) y
contradicción (A & -A). La suma de dos proposiciones contrarias de cualidad distinta
(algunos A son B; algunos A no son B) da una totalidad, una proposición universal con un
predicado disyuntivo (todos los A son B o no-B)”

Principio de Reciprocidad: a cada acto le corresponde un acto recíproco y, a saber, en y


entre todas las esferas del ser: el ayllu de los jaqe, el ayllu de la sallqa y el ayllu de las
waka. La reciprocidad amerindia no es, pues antropocéntrica; por ello no presupone una
relación de interacción libre; refleja más bien un orden cósmico del cual el ser humano
forma parte. Reciprocidad, por tanto, no es una categoría antropológica, como tendemos a
interpretarla los occidentales, sino cosmológica. Lo que, a su vez, no excluye la
reciprocidad en las relaciones interhumans: piénsese en la economía de reciprocidad: ayni,
minka y la actitud occidental: el economicidio; ni excluye lo político: su concepto de la
politica como servicio rotativo a los demás y la actitud occidental: el politicidio.

Dicho esto, hay que añadir que el principio de reciprocidad es incompatible con algunas
nociones trascendentales de la civilización occidental. Occidente es una civilización
unidimensional; con la física cuántica está empezando a cambiar desde su estrato
académico; por eso no quita que entienda las relaciones unidireccionalmente. Dios es un
actus purus, soberano, omnipotente, omnisapiente; no necesita de la creatura; si la crea es
como fruto libérrimo de su condescendencia, de su libertad: de su gracia; no espera
respuesta humana para ser. Traducido epistemológicamente significa que el sujeto conoce
activamente un objeto que es entendido como pasivo. Económicamente, que el hombre
explota, a través del trabajo y la tecnología, la tierra que es entendida como inerte y pasiva
y la transforma en producto, es decir, en riqueza. El “dios” amerindio, en cambio, acaece,
en el momento del ritual; precisa del ser humano para hacerse presente y viceversa; más
allá del ritual (el laboratorio), existe virtualmente en el cosmos como un fotón antes de la
medición en el acelerador de partículas: es un dios cuántico. Traducido
epistemológicamente, conocer es amar. Económicamente, trabajar es criar la vida. La
reciprocidad implica, pues, una comprensión interactiva de la realidad

Dicho con otras palabras, la reciprocidad es la búsqueda de un equilibrio contradictorio


entre las fuerzas de inclusión y las de exclusión.

Otra manera de decir lo mismo es la que utiliza Josef Estermann. Sostiene que la
civilización occidental se caracteriza por la no-relacionalidad, cuyo categoría básica es el
ens in quantun ens, es decir, la substancialidad de todo lo que existe, tanto en sentido
realista, como “ser-en-sí- mismo”, como en sentido trascendental, como “autonomía del
sujeto”. Por tanto, la existencia separada y monádica es lo primero; de ahí proviene, en
política, la primacía del Individualismo liberal, por ejemplo; por consiguiente, la relación
entre los entes (de donde proviene la primacía del comunitarismo amerindio) es lo segundo,
en occidente, es un accidens, como dice la ontología.

La civilización amerindia, en cambio, se caracteriza por la relacionalidad. “El universo es


ante todo un sistema de seres inter-relacionados, dependientes uno del otro, an-arquicos,
heterónomos, no sustanciales”. “La relación, que en Occidente es un accidens real o una
forma a priori de la razón, es la primera categoría ontológica; es –para decirlo en forma
paradógica- la verdadera sustancia no-substancial”.

Esterma nn, así mismo, nos recuerda las categorías básicas de la metafísica y ontología que
constituyen lo medular de la civilización occidental hasta el día de hoy: la Inmanencia
(existir-en-y-por-sí- mismo), independencia o soberanía (autosuficiencia), principalidad
(arjé como base) autonomía y substancialidad. Para la civilización amerindia, en cambio,
un ente particular, por así decir, ya está siempre en relación con otros (trascendencia), no es
autosuficiente, no puede ser principio en sí mismo (es an-arquico), se rige por una
normatividad exterior (heteronomía) y no existe en sí mismo (relacionalidad).

Respecto al principio de Tercero excluido, Estermann nos recuerda que el principium tertii
non datur sólo permite la disyuntiva excluyente entre dos conceptos contradictorios
(verdad- falsedad, finito-infinito...) “No existe mediación, sino separación entre los polos.
La lógica de inclusión afirma una transición continua entre dos extremos de tal manera que
pueden coexistir como equilibrio complementario”. Oriente, justamente, ofrece las
expresiones más manifiestas de complementariedad de opuestos: el yin yang del taoismo y
el chacha warmi andino.

Así, pues, al interior de ambas civilizaciones, como su contrapunto, está también su opuesto
pero de un modo subordinado. En ese sentido se puede hablar, por ejemplo, que lo
amerindio de Occidente son sus pulsiones holistas y ecológicas. Lo occidental de la
Indianidad son sus pulsiones reduccionistas, individualistas y faccionalistas.

Ya se que en la contrastación sale mal parado Occidente y ello causa resistencia a aceptar
esta manera de entender las relaciones entre occidente y la indianidad, entre cristianismo y
animismo amerindio en Bolivia. Lo siento; nos está pasando lo mismo que a los físicos el
primer cuarto del siglo XX cuando la experimentación científica iba cambiando la visión de
la materia-energía, del espacio -tiempo, de la vida-muerte y se resistían. “¿Es posible que la
naturaleza sea tan absurda como nos lo parece en estos experimentos atómicos?” Werner
Heisenberg.

Para dar una idea del cambio de visión que estamos proponiendo les ofrezco este cuadro
resumen de Gary Zukav de los dos modelos cosmológicos: el moderno y el cuántico.

Fisica newtoniana Mecánica cuántica


Puede representarse No puede representarse
Está basada en las percepciones ordinarias de los Está basada en el comportamiento de las partículas
sentidos subatómicas y sistemas que no pueden observarse
de modo directo
Describe cosas; objetos individuales en el espacio Describe conductas estadísticas de sistemas
y sus cambios en el tiempo
Predice sucesos Predice probabilidades
Acepta una realidad objetiva “fuera de aquí” No acepta una realidad objetiva aparte de nuestra
experiencia
Podemos observar algo sin modificarlo No podemos observar algo sin modificarlo
Proclama estar basada en la “verdad absoluta”, en Proclama sólo su capacidad de ordenar la
lo que la naturaleza es realmente, “entre experiencia correctamente
bastidores”

Como va siendo vada vez más evidente, la indianidad sólo puede ser comprendida desde un
paradigma cuántico, desde la dualidad onda/partícula. Desde el paradigma newtoniano la
incomprensión va seguir existiendo y en este debate ya abierto sobre la nueva Constitución
van a salir todos los trapitos sucios de nuestra obsoleta cosmovisión; eso es bueno;
precisamos de una catarsis epistemológica para hacer un buen pacto de reciprocidad con la
indianidad.

Usando una metáfora proveniente de la Mecánica cuántica, diría que, en la Era ecozoica
que empezamos, la “Función onda” la tendrá que jugar la civilización amerindia y la
“Función partícula” la civilización occidental. Ambas, en un equilibrio contradictorio, serán
la Unidad dual hacia la que marche la nueva humanidad. En este sentido, Occidente debe
cultivar, en su interior, su indianidad reprimida y la Indianidad tiene que cultivar, en su
interior, su occidente resistido; para ello, empero, todos debemos empezar por ajustar
cuentas con el colonialismo interno: los bolivianos occidentales y los bolivianos
amerindios.

Así, pues, de lo dicho se colige que, al interior de ambas Civilizaciones, se ubican las
Culturas que desarrollan las infinitas posibilidades de una arte combinatoria que interactúa
con su territorio, su habitat, sus ecosistemas: su biodiversidad, desde uno u otro
metaparadigma.

Cultura.
Pienso que la cultura, para ubicarnos bien en el siglo XXI, debe ser definida desde el punto
de vista de las interrelaciones. En este entendido, pues, ésta incluye los siguientes tipos de
relaciones:

(a) las relaciones de pare ntesco como núcleo primario de relaciones sociales
institucionalizadas;
(b) la relación hombre-naturaleza, transformada por la producción y el uso de objetos a
través de la tecnología;
(c) las relaciones que establecen los hombres y las sociedades al donar e intercambiar
dones, bienes y servicios económicos;
(d) las relaciones con la esfera invisible de sentido: el topos contradictorio de la
conjunción.

Estos cuatro tipos de relaciones, junto con el lenguaje, son constitutivos de cualquier
cultura y muestran que ésta es un fenómeno de significación y de comunicación y que
Humanidad y Sociedad existen sólo cuando se establecen relaciones de significación y
procesos de comunicación.

Así, pues, entiendo por Cultura un fenómeno de comunicación basado en sistemas de


significación.

No deseo terciar en la selva de definiciones que hay sobre cultura, monoculturalidad,


multiculturalidad, interculturalidad. Prefiero aportar con definiciones lógicas. En el estado
actual de mi comprensión de este tema, y también por razones del debate boliviano,
Interculturalidad y Dialogo inter-civilizatorio son para mi, lógicamente, intercambiables;
con la salvedad ya dicha: interculturalidad menta las relaciones entre dos culturas de la
misma civilización y diálogo intercivilizatorio menta la relación entre dos culturas de
distinta civilización, que es nuestro caso.

Monoculturalidad

Interculturalidad o Multiculturalidad
Diálogo inter-civilizatorio

Entendemos por Entendemos por Interculturalidad Entendemos por


Monoculturalidad el complejo o diálogo intercivilizatorio el Multiculturalidad el complejo
semántico compuesto por el complejo semántico compuesto semántico compuesto por el
Principio de Identidad, por el Principio de Identidad,
el Principio de no Contradicción, Principio de Reciprocidad, Principio de no Contradicción,
el Principio de Tercero excluido: Principio de Complementarie dad Principio de Tercero incluido:
de Opuestos,
Principio de Tercero incluido:
PI + PnC + T ex. PI + PnC + T in.
PR + CdO + T in.

Los Estados Nación occidentales se caracterizaron, formalmente, por ser más bien
monoculturales. En este momento están en una transición hacia modelos multiculturales de
facto: incluir al otro como minoría. Sus teóricos tienden a entender al Islam como si fuese
una civilización antagónica. En realidad, tanto el judaismo, el cristianimo como el islam
son tres ramas del mismo tronco: el monoteismo abrahámico. La alteridad radical de
occidente es el animimo amerindio

Las naciones amerindias se caracterizan por ser entre sí interculturales. Para desgracia suya
también lo fueron y lo son respecto de occidente. El principio de Tercero incluido produjo
lo que Temple ha llamado el Quid pro quo: el malentendido entre el don y el intercambio;
entre el don y la gratia (Teoría de la reciprocidad, tomo III). Su fortaleza y su
vulnerabilidad descansa en que su software contempla el principo de Tercero incluido. La
cosmología newtonianan y todo lo que ella implica: colonialismo, revolución industrial,
Estado Nación... no le fue favorable. La cosmología cuántica le es favorable; es más, la
indianidad es la puesta en escena social, política, teológica del nuevo paradigma. Esta es la
gran ventaja comparativa de Bolivia en el siglo XXI (y no su mano de obra barata...) y la
nueva Constitución es la oportunidad epocal de plasmarlo así.

Definiciones

Dicho con otras palabras y recapitulando.

Entiendo por Diálogo inter-civilizatorio la aplicación de un modelo no dualista de tipo


cuántico a las relaciones entre la Civilización patriarcal occidental y la Civilización
matrística amerindia. Este ideal se ha dado sólo a niveles individuales. Que acaezca
políticamente es la gran meta del nuevo milenio y de la nueva Constitución.

Entiendo por Modelo no dualista de tipo cuántico uno que se comporte como la Función
onda y la Función partícula respecto del Electrón; es decir, el Electrón colapsa como onda o
partícula según el observador haya preparado el experimento.

Entiendo por Civilización occidental a aquella que ante la dualidad se decide por un sistema
lógico que opera a través del Principio de identidad, el Principio no contradictorio y de
Tercero excluido. Entiendo por Civilización amerindia a aquella que ante la dualidad se
decide por un sistema lógico que opera a través del Principio de complementariedad de
opuestos y Tercero incluido.

Entiendo, pues, por Diálogo inter-civilizatorio la interacción, en tiempo-espacios definidos,


distintos pero complementarios, del Principio occidental: patriarcal, logocéntrico,
newtoniano, cartesiano, y el Principio amerindio: matrístico, semiocéntrico, animista,
holista.
Entiendo por Tiempo-espacios definidos, distintos y complementarios, lo siguiente: los
tiempo-espacios apropiados para el despliegue del Paradigma amerindio son los espacios
conviviales y cualitativos. Los tiempo-espacios apropiados para el despliegue del
Paradigma occidental son los espacios racionales y cuantitativos.

Entiendo por Espacios conviviales los espacios de la esfera vernácula en el que los actores
se conocen personalmente. Entiendo por Espacios racionales los espacios de la esfera
mercantil y estatal; por tanto, los espacios, impersonales.

He aquí, suscintamente, el software para pensar y conversar una nueva Constitución para
Bolivia y también para el mundo del siglo XXI. Las nuevas tecnologías nos llevan a todos
en esta dirección. En esto también Bolivia puede y debe marcar la primera inflexión,
siguiendo ya una reconocida tradición en el hemisferio.
2. Otras y nuevas visiones de país

2.1. Retorno al ayllu

Fernando Untoja Choque

Lo que opera en la generalización del Ayllu, es un modelo estratégico. El modelo que juega
es, aquel de la genealogía del Ayllu: es decir, el modelo de la fundación que conjura la
violencia de lo propio. El paradigma del doble, es una especie de ancestro bastante remoto
en el tiempo. Esta relación genealógica de lo propio, es comprendida, como un retorno y un
comienzo o como una marca de una inflexión: escisión, marca que puede ser entendida en
la categoría de lo común y de lo privado o como la violencia de la dualidad. Concreción en
la realidad que se expresa imprimiendo la estructuración dual en el espacio y la
medialización en el conflicto entre lo privado común.

El Ayllu se impone al campo político e imprime al Estado, como el resultado del


movimiento de propiedad, llevando la marca del ancestro orgánico. Esta marcha es la que
da la naturaleza y el carácter del Estado Inka hasta el inicio del proceso colonial. El
modelo del Ayllu, aparece como un espejo, en el cual cada comunidad concreta se
esfuerza de re-encontrar su imagen, las huellas de su existencia pasada y presente
buscando siempre el rigor de esta configuración. El Ayllu, como preformación del Estado
Inka, lugar de invención de elementos esenciales de lo social, origen y devenir, es en su
generalización la prueba de su evolución.

En la perspectiva de la generalización, el Ayllu es al mismo tiempo y por el movimiento


mismo, el modelo unificador y el productor de la forma-Estado, basado sobre la posesión
privada y la propiedad común: todo esto englobada por la propiedad colectiva.

Este reconocimiento de paternidad está acompañado inevitablemente por el juego dual de lo


propio. En la sociedad Inka, el poder no es la herencia o el dote de una cualquiera fracción
de la colectividad. Este no está al centro o, más exactamente, está excluido a la periferie de
la comunidad. Está al medio de la soledad inmanente al Ayllu. Los intereses y las pasiones
están limitados por la posesión privada y la comunidad.

En el Ayllu, como organización social, no existe carencia (escasez), como tratan de hacer
creer las corrientes etnológicas y la ciencia política. En efecto, no hay carencia de palabra,
pensamiento ni de bienes de consumo; la asociación habitual establecida entre la economía
de despotismo y de esclavismo está desprovista de sentido.

En el Ayllu, todo parece estar dirigido por la rotación del poder, o la eliminación de "los
poderes en el poder": eliminar, es conservarla como praxis política y ritual, impedir la
trascendencia y la del Estado. El Ayllu conserva el Estado en la misma organización
social. Es en este sentido, que el Estado, constituido sobre la base del Ayllu, parece ser
prisionero de la sociedad. Esta última, limita el campo de acción del Estado, gracias a la
estructura del espacio, de trabajo y de poder.

El Ayllu, en vez de trascender, al Estado: crea órganos intermedios, para prevenir la


reconstitución de cuerpos que buscarían autonomía y arrogaría al derecho de representar
el consenso de la comunid ad. Es por éstos órganos intermedios, que una cierta
planificación se impone sobre el territorio y, descentralizando por intermedio de los
Tampus, impide la aparición del comercio y la moneda.

Hemos dicho que esto es la praxis, la forma más seria de la act ividad política; ésta es la
capacidad de transformar las relaciones entre los Ayllus, las Markas y las etnias. El Ayllu-
Estado, no da ninguna seña en lo concerniente al Estado como autónomo y externo a la
comunidad. A través del Ayllu se puede comprender que una sociedad que conjura la
violencia de la propiedad; puede encontrar una situación atemperada; sin caer en la
trampa de la apropiación privada de la tierra. La historia nos enseña que la dominación de
lo privado en los diferentes aspectos de la vida social, es el generador de relaciones
mercantiles, del fetichismo de la mercancía, la acumulación y sus consecuencias.

Y por tanto, el Ayllu- Estado acumula bienes, pero el destino de éstos no siendo más que las
propias comunidades. Sería grosero y forzado sostener que el Estado desvía estos bienes
para su provecho. J. Murra, respecto a este propósito, observa la existencia de grandes
depósitos de bienes del Estado sobre todo el territorio. No existiendo el comercio, sería
curioso pensar que sólo los burócratas utilicen los bienes depositados, engordando sólo
ellos y reduciendo a las comunidades al esclavismo. Los Tampus no tenían ese objetivo, y
los cronistas y ciertos etnólogos, nos aclaran que la mayor preocupación del Estado Inka era
efectivamente la redistribución de los bienes, a través de los Tampus para alimentar el país.

Insistiendo sobre la importancia de los Tampus, un cronista menciona la existencia de


varios Tampus sobre la costa ecuatoriana donde, aproximadamente, 175 aventureros
encontraron tejidos y vestidos en cantidad suficiente como "para mantener a los españoles
por 3 o 4 años". El Ayllu es el organizador social; tiene por meta asegurar materialmente y
espiritualmente la existencia de las comunidades. Es, en consecuencia, perfectamente
normal y lógico que la generalización del Ayllu, bajo forma de Estado, continúa a
proseguir el mismo objetivo.

El Ayllu desde su génesis y en su generalización, instituye el trabajo bajo la forma de


reciprocidad. El Ayllu instituye la economía como desafio a lo propio, y la política como
medio de acción para mantener el juego conflictual de la propiedad: común y posesión
privada. Es únicamente sobre la relación de lo propio, que el Ayllu- Estado conserva la
estructura de organización del Ayllu.

En la estructuració n del Ayllu original al Ayllu-Estado: lo político, ideológico, económico


son el producto de la dinámica de la violencia de propiedad. Y es a partir de ahí que la
religión de los inkas o la ideología de la reciprocidad, aparece como un elemento interno
de al s relaciones de producción. Contrariamente a M. Godelier, no pensamos que esta
ideología, sea la base de cualquier explotación en la sociedad Inka. Es sobre este punto de
la ideología, que Godelier tiene el "mérito" de expresar en términos claros, sin más
preguntas:

"Estamos aquí frente a una de las formas antiguas de sociedad de clases en la cual la
base es todavía un conjunto de comunidades tribales. Pero en este contexto, nosotros
vemos que la ideología religiosa no es solamente la superficie, el reflejo fantasmático
(espectral) de las relaciones sociales. Ella constituye un elemento interno de la
relación de producción, funciona como un componente interno de la relación
económica-política de explotación de los campesinos por una aristocracia detentora de
poderes del Estado'521 ".

Lo que se expresa aquí, son las comunidades encarnando este elemento interno, que no es
una imposición exterior sino más bien el armazón invariante de la organización social.
Godelier, prosiguiendo en su demostración agrega:

"Esta creencia, en la eficacia natural del Inka (Godelier nada nos dice sobre la
creencia de la comunidad antes de la conquista de los Inkas y su aparición), creencia
compartida, tanto por el campesinado dominado (en lugar de las comunidades
tribales), como por la clase dominante, constituía no solamente una ideología
legitimando de hecho las relaciones de producción, sino también una parte de la
armadura interna de esas relaciones de producción"153'.

¿Cómo esta armadura interna, puede ser tan engañosa para una clase dominante, de la cual
saca beneficio para ella y para los dominados?

El mito del mallku

Con Levi Strauss, sabemos que los mitos no hablan para no decir nada, que ellos tienen un
sentido y confieren así a nuestra vida un nuevo prestigio.

"La enseñanza de los mitos sudamericanos ofrece un valor tópico para resolver los
problemas que conciernen a la naturaleza y al desarrollo del pensamiento"' 54 '.

La sociedad y la economía del Ayllu se caracterizan por el estatus de la propiedad en la


vida política económica y religiosa. El estatus de lo propio hace aparecer estructuras
jerarquizadas, horizontal y verticalmente, divididas en círculos de pertenencia: en los cuales
la propiedad define al individuo, el Ayllu y la comunidad superior (Marka > Suyu).

Es para comprender, todas estas extensiones horizontales y verticales, los grados de


cohesión, de violencia y de poder en el Ayllu; que el mito del Cóndor nos servirá para
mostrar cómo el modelo Ayllu es conservado en el mundo de los pájaros. Es de señalar que
este mito sirve como texto de base para el Jilaqata aun en nuestros días.

Es, a través del relato y el análisis del mito, que trataremos de comprender la extensión del
Ayllu, como modelo social. El mito al cual haremos referencia, es uno de los menos
conocidos por los etnólogos.

El mito se sitúa en el mundo de los pájaros: los hombres conservan el ideal del Ayllu a
través del mundo de los pájaros: el cóndor, el suri, lurinsullu... y todos cuantos pertenecen a
ese mundo. Los hombres conservan el ideal del Ayllu, la ideología y las leyes de su
funcionamiento, gracias a este mito contado por los Jilaqatas.

El mito y su análisis

"El Cóndor desciende sobre el Ayllu, rapta a una joven mujer; cogiéndola en sus
garras, la coloca sobre su lomo, mirando al rededor de él, para ver si alguien lo
observa sorprendido. Luego, serio y desconfiado, emprende su vuelo, viaja y
alcanza la cumbre de la montaña, lugar accesible únicamente para él..."(55).

El cóndor está solo, está excluido. Él es, en el conjunto de la sociedad, el único que no
funciona por la dualidad. La búsqueda de una compañera, se puede explicar de esa
manera. El sistema es, por consiguiente, incompleto, no cerrado, no perfecto. La exclusión
es el principio que asegura la coherencia del conjunto social. Es por esta lógica de la
exclusión que la sociedad, los Ayllus, los grupos humanos, permanecen juntos. La lógica
de la exclusión vigente es la misma para el Ayllu y el Estado.

"Allá en la montaña, el cóndor alimenta y mantiene durante meses a la joven, vive así
un amor y una pasión inimaginable. La comida está compuesta de carne (seca o
fresca y cruda) de pequeñas llamas. El cóndor y la Joven vivirán así, al rededor de 6 a
7 meses, en pareja".

"Durante esos meses, el Ayllu, del cual es originaria la joven; estará en desarmonía.
La desaparición de la joven, la pérdida de uno de los miembros de la comunidad,
provocarán un cuestionamiento de las relaciones de buena vecindad y del respeto a las
costumbres. La búsqueda de la muchacha se desenvuelve y se extiende a los demás
Ayllus. Nadie da señal alguna, y la duda nace: la gran trilogía comunitaria: "no seas
ladrón, no seas mentiroso, no seas flojo" es burlada. La búsqueda continúa y no
concluye. Todos los miembros de la comunidad se conocen, nadie ha percibido a la
joven, nadie la ha visto". No teniendo ninguna posibilidad de encontrar a la
muchacha, la familia y el jefe de la comunidad deciden como último recurso,
dirigirse a aquel "que sabe todo y que todo lo ve". Este es un simple pájaro y, tal vez,
el más pequeño de todos y solitario, pero "un personaje que ve todo, sabe todo".

A través de este episodio, vemos cómo las relaciones se deterioran. La ley ha sido violada.
Ha habido un robo. El Ayllu deviene "enfermo". En las relaciones entre comunidades reina
la desconfianza. La pérdida de salud y de cohesión, propaga inseguridad. Porque si bien la
comunidad es autónoma, no puede dejar de transmitir y propagar el malestar a las otras. La
negación del respeto a la ley comunitaria por el Estado, genera la invasión de la violencia
en las relaciones sociales del Ayllu.

"El pequeño pájaro busca a la muchacha. Solamente una mañana de invierno la


encuentra. La familia y el jefe del Ayllu se dirigen hacia él y le preguntan si ha visto
a la joven, y el pájaro responde que sí, "que la ví", y sabe además donde se encuentra.
Entonces, los parientes y el jefe le preguntan "¿dónde está?" y le piden si puede
indicarles el lugar exacto para ir a buscar a la joven. Pero este pájaro no está
habituado a hablar y a comunicar el secreto. Él responde simplemente que sabe, sin
añadir más. Este pájaro amaba particularmente todo lo que era verde y azul... la
preferencia por estos colores se explicaba porque éstos le convertían más o menos en
invisible.

En la discusión con los parientes y el jefe, el pájaro manifiesta su deseo de tener un


poncho verde y una chalina o bufanda azul. El no tenía nada propio, tampoco poseía
algo. El reflexiona y dice "si ustedes me dan un poncho verde y una bufanda azul, yo
les traigo en tres días a su hija...yo quiero un poncho de la mejor lana, un tejido
impermeable y fino capaz de resistir a toda lluvia..".
¿Qué representa el "hombre invisible" para la comunidad y para los parientes de la joven?
El pájaro está por todas partes. El azul evoca la fluidez, el agua que penetra: con el azul y
verde el pájaro se confunde, se mimetiza por sus colores con la naturaleza. El encarna la
transparencia de las comunidades. El es la ley comunitaria, la fuerza de la comunidad que
contrarresta la ley del Estado. Es el único instrumento del cual dispone la comunidad para
hacer frente al exceso del poder del Estado, la violación de la ley. Es el propio garante de la
comunidad. Restablece el orden de la comunidad, cuando éste ha sido perturbado por el
poder. La ley comunitaria tiene el poder de hacer fracasar las pretensiones exageradas del
Estado. Él restablece la ley sin decir nada, sin violencia. La ley es autónoma. Lo propio de
esta ley es restablecer el orden, regular y contrarrestar la violencia del Estado.

"Los parientes y el jefe, sin vacilación alguna, aceptan la demanda del pájaro y
concluyen este compromiso. Al cabo del tercer día, el pájaro se presenta a la cita, en
el mismo lugar de discusión. Los parientes y el jefe, presentes, entregan el poncho y
la bufanda, y el pájaro recíprocamente acompaña y entrega a la joven. Ninguna
explicación es dada por el pájaro. Cada una de las partes queda satisfecha de su
negociación.

"Por la noche, el cóndor vuelve a su cueva cargado de alimentos para la joven. Pero
el sitio está vacío. Piensa: "Mi mujer no pudo haberse ido sola; por otra parte, ella
está encinta y no pudo haberse bajado sola". Pero se pregunta aún "quién podrá subir,
además nadie sabe verdaderamente dónde vivo, quien se atrevería a subir, aún los
pájaros más grandes no podrían alcanzar mi lugar de habitación".

El cóndor se pone furioso, de no encontrar una respuesta, y al ver que "su" mujer ha
desaparecido. Él se dice: "Voy a reunir a todos los Jilaqatas de las comunidades. Cada
uno debe ser interrogado a fin de que la ley sea respetada, y que la trilogía, "no seas
ladrón, no seas mentiroso, no seas flojo", sea aplicada. Al día siguiente reúne a todos
los jefes de todas las comunidades de pájaros. Los jefes presentes: los cuervos, los
buitres, todos aquellos que volaban a una cierta altura muy cerca del Cóndor. El
Cóndor se dirige a ellos: "Aquí, ya no hay más respeto a la gran Trilogía, es el caos que
reina, ustedes mismos ya no guardan ni vigilan bien sus comunidades". Los jefes de
las comunidades escuchan y murmuran entre ellos, diciéndose: "se ha vuelto loco, ¿qué
es lo que no anda bien en nuestras comunidades?" El Cóndor rabioso prosigue su
discurso: "¿Quién ha robado mi mujer? Ustedes deben saber ¿dónde se encuentra mi
mujer?" Los jefes todos se miran entre sí; no comprenden la exp resión "mi mujer".
Como los jefes no responden nada, el Cóndor pronuncia sus últimas palabras
sentenciosas: "Les doy dos días para que encuentren a mi mujer". Pasados los días,
los jefes de los pájaros no traen ninguna información. El Cóndor furioso, decid e
dirigirse a todos y conmina a cada jefe, pidiéndoles que reúnan a sus comunidades
para que se presenten a una gran asamblea. Y será el Cóndor en persona, que hará
preguntas a la multitud. Y desea también dirigirse a todos y a cada uno por temor que
uno de los jefes le oculte algo".

En este pasaje, podemos notar la reacción de las comunidades frente al Poder. La ley del
Estado parecía ser absoluta. Los signos de altura, de las cumbres, la incomprensión del
Cóndor parecía significar la dificultad de transgr edir esta ley. Pero frente a esta ley que
parecía tan poderosa, la situación se invierte. El Cóndor que se creía tan fuerte, a tal punto
de violar la ley, es contrarrestado. Y éste no puede ejercer su despotismo.
Pero también, es la relación de las comunidades y del Estado que toma forma aquí. La
comunicación se hace muy rápidamente. La información circula veloz y muy bien. En un
primer momento, cada representante de comunidad es interpelado y, en un segundo
momento, es el conjunto de las comunidades que está presente. Las comunidades así
estructuradas facilitan el control y la información por el Estado. Hay que notar también, que
los jefes de los comunarios no reaccionan, sabiendo que la joven, quien es miembro del
Ayllu, no es verdaderamente la mujer del Cóndor.

"Al quinto día, el Cóndor se erige ante una otra asamblea importante, jamás vista
desde hace mucho tiempo. Cada Ayllu de pájaros está presente con todos sus
miembros. Ninguno falta. Cada jefe de Ayllu a la cabeza de su comunidad toma sitio
delante del Cóndor. El silencio es importante. Todo el mundo espera las preguntas del
Cóndor. Finalmente habla: "¿Quién de entre ustedes ha visto a mi mujer?"

"¿Cuál de ustedes ha hecho bajar a mi mujer de la cumbre, violando mi casa?" La


multitud escucha pero nad ie responde. El Cóndor vuelve a preguntar una vez más. La
multitud responde: "no sabemos nada" de la mujer.

El interrogatorio a la asamblea no concluye en nada, situación que al Cóndor le pone


más furioso. Expresando así: "Aquí las comunidades, los Ayllus ya no respetan las
leyes; éstas son burladas; las cosas no pueden continuar así". La multitud escucha
con paciencia. El Cóndor añade: "¿Falta alguien de la comunidad? La muchedumbre
murmura, responde que nadie falta, que están todos los Ayllus. En medio del
murmullo general se hace oír una voz: "Lurinsullu no pertenece a ningún Ayllu", es
el único que falta a esta asamblea. Pero eso es normal, él no asiste jamás a ninguna
reunión; él está por todas partes y en ninguna a la vez".

En este enfrentamiento entre la comunidad y el Estado, la fuerza de la comunidad


comienza a imponerse pero la fuerza del Cóndor degenera en la violencia. Las
comunidades no aceptan el intento de apropiación ejercida sobre una mujer del Ayllu. El
silencio de la comunidad constituye una repuesta que puede significar que las
comunidades no tienen por qué responder (de la joven) al Estado. La joven pertenece al
Ayllu. La ley comunitaria se revela más fuerte en el enfrentamiento entre el Cóndor y los
Ayllus.

La ley comunitaria está represe ntada y simbolizada por ese pequeño Lurinsullu, quien está y
ve en todo lugar: está en todas partes y en ninguna. Esta ley está presente e inmanente en la
comunidad. La ausencia del pajarito en la reunión significa la garantía de la cohesión.

"Al sexto día nada había avanzado, todo estaba en la misma situación. En la asamblea
estaban presentes todos menos Lurinsullu. El Cóndor desgarrado por la cólera, no sabía
cómo castigar a las comunidades y pronuncia un discurso de sentencia, diciendo que: "todo
el mundo era responsable y debe ser castigado". Pero ninguna forma de castigo le venía a la
mente. Justo en ese momento, aparece el zorro pasando de muy cerca de la asamblea,
dando saludos al Cóndor. El Cóndor decide llamarlo y pide al zorro que se trajera un gra n
bolsón. El zorro muy contento se va y vuelve con la bolsa. El Cóndor por fin encuentra el
castigo y dice, dirigiéndose a los miembros de la asamblea: "Puesto que no habéis cuidado
bien vuestras comunidades, pertenecereis ahora al zorro y el decidirá de vuestra suerte; solo
los jefes de las comunidades y algunos grandes pájaros se quedarán conmigo y los otros
tendrán que ir con el zorro". Así todos los jefes y los pájaros grandes pusieron ellos
mismos en la bolsa a todos los pajaritos".

Vemos entonces cómo se manifiesta la tendencia totalitaria del poder del Cóndor y de los
jefes de comunidades. Este abuso de poder, lo arbitrario del Cóndor se expresa en la
violación de la vida comunitaria. La tendencia totalitaria, resulta de la apropiación privada
ejercida contra un miembro de la comunidad y ésta quiere ser legitimada por el poder con
fines individuales. El poder se aleja así de su finalidad. Esta manifestación del poder bajo
la forma de lo privado, por aquel que está reputado de representar la unidad, la cohesión de
la totalidad en la sociedad: conduce al poder a expresarse bajo una forma extrema: el
totalitarismo. Es probable que históricamente tal tendencia se haya manifestado, pero las
estructuras de la gestión de la violencia en el Ayllu parecen haber contrarrestado la
predominancia de lo privado impidiendo la instauración de una "esclavitud generalizada".

La tendencia al totalitarismo parece originarse de una escisión entre la comunidad y la


"burocracia". El desequilibrio en la gestión de lo propio, provoca la formación de las
primeras castas, clases: divide la sociedad entre aquellos que se apropian y aquellos que
no tienen más que su fuerza de trabajo. Nos parece que toda la historia de las sociedades,
es la lucha del predominio de lo privado sobre lo común o viceversa. Cualquiera sea por
otra parte la dominación, ésta corresponde a una forma de totalitarismo que se ejerce en
contra del no-propietario de los medios de producción.

Volvamos al mito, lo que nos permitirá mostrar, cómo en la sociedad Andina, la tendencia
al totalitarismo es contrarrestada por la fuerza de las comunidades.

"El zorro, muy contento por el regalo, se va. En el recorrido del trayecto, discute con
los pájaros que viajan metidos en la gran bolsa.

En su camino encuentra al Suri un miembro de la comunidad de tejedores. Este tiene


la particularidad de ser un allegado del cóndor, por su saber y de estar relacionado
con todas las comunidades y siempre prodigando el saber en el arte del tejido. Frente
al golpe fatal, asestado en contra de las comunidades, Lurinsullu, quién sabía que el
zorro debía pasar necesariamente por la comunidad de artesanos, había ya
transmitido la mala noticia, la decisión del cóndor y la suerte sufrida por los
miembros de las comunidades. El zorro y el suri se saludan entablando una
conversación sobre la proximidad de las fiestas, cortando esta pequeña conversación
el zorro decide ausentarse del taller del Suri, descuidando el don del Cóndor. Tan
pronto como el zorro se alejó, el Suri desata la bolsa y libera a todos los pájaros..."

Así Lurinsullu, símbolo de la ley comunitaria, contrarresta una vez más el deseo de
apropiación privado y el poder despótico que tiende a instaurarse. Si nosotros hemos
optado por relatar este mito y de explicarlo, pues es el único que habla del Ayllu:
generalización, ley comunitaria, la voluntad manifiesta de rechazo a la apropiación privada
y sus consecuencias políticas, que tienden al despotismo.

Es también este mito, que en la realidad contribuye a la generalización del Ayllu, a su


mantenimiento y refuerza la ideología comunitaria. El mito del cóndor erigido en
ideología permite resolver conflictos potenciales que pueden expresarse en la apropiación
violenta. La gestión de lo propio en la sociedad Andina, corresponde a una manera
específica de resolver los conflictos sociales.

"La cuestión de saber si el régimen político de los Inkas era socialista o totalitaria ha hecho
correr ya mucha tinta. Resulta de todas maneras a ser, las fórmulas más modernas y estaba
en avance de varios siglos sobre los fenómenos europeos del mismo tipo".

Por otra parte, no son tanto esos aportes, en porciones entrecortadas, que deben
retener la atención: pues se corre el riesgo de recibir una idea doblemente falsa, de
una civilización mundial, compuesta como un hábito de Arlequín... Estos elementos
son menos importantes que la manera en la que cada cultura los agrupa, los retiene o
los excluye. Y lo que hace la originalidad de cada una de ellas reside más bien en su
modo particular de resolver los problemas, de poner en perspectiva esos valores, que
son aproximadamente los mismos para todos los hombres: pues todos los hombres sin
excepción poseen una lengua, técnicas, arte, conocimientos de tipo científico,
creencias religiosas, una organización social, económica y política.

El modelo del Ayllu

¿Qué es lo que mantiene en conjunto a los miembros del Ayllu? ¿Qué es lo que mantiene
juntos a los Ayllus, las Markas y los Suyus? Esta cuestión es una cuestión política por
excelencia, y se plantea desde que existe una sociedad, cualquiera sea su importancia
numérica: ella no se confunde con la cuestión del poder. Toda modalidad de organización
social, es una respuesta a esta pregunta, previo al discurso que rinde cuentas, y es un
discurso en acto.

En otros términos, esta cuestión, es la de la integración de deseos individuales para realizar


un deseo común: ¿Cómo a partir de particularidades se puede forjar la unidad del
conjunto?

Una respuesta clásica a esta pregunta, estructurada en modelo por J. Rousseau, en "El
contrato social", es que los individuos "suman" sus fuerzas, constituyen un "agregado" que
hace "cuerpo moral y colectivo" y hacen contrato, hacen pacto. Este pacto es un
compromiso recíproco, donde cada uno pierde su "libertad natural" y su "derecho ilimitado
a todo lo que le tienta", pero gana la "libertad civil"... "y la propiedad de todo lo que él
posee".

Es interesante notar aquí una diferencia en “El Discurso sobre los orígenes de la
desigualdad”: donde la instauración de la propiedad es el comienzo del fin del contrato
igualitario y la transformación del soberano legítimo en déspota o violencia de Estado.

En esta lógica aritmética, donde la adición hace fuerza de ley, la importancia numérica del
grupo no es anodina, porque el buen sentido calculador, puede uno bien, imaginar un
equilibrio de deseos e intereses privados, en un pequeño grupo. Pero, ese mismo buen
sentido, nos sorprende en el fondo que, el gran número justifica el recurso a la fuerza y al
Estado, a la violencia desnuda o disfrazada.
Más cuando planteamos la cuestión: ¿Qué es lo que mantiene en conjunto al Ayllu, las
Markas, los Suyus? Nosotros no menospreciamos esta dimensión y la cifra de "diez
millones" de habitantes en el Tawantinsuyu, en el momento de la invasión española (N.
Wachtel).

Nosotros formulamos la hipótesis que una otra lógica, aparte de la adicional, puede fundar
la unidad del conjunto; una lógica que resuelve diferentemente la cuestión de lo uno y de
lo múltiple que es también el centro de la cuestión política. Tres "datos" nos impulsan a
formular esta hipótesis.

El análisis de la experiencia del Ayllu-Marka da a la luz la repetición de un proceso que


tiene la figura de ser estructurante: que nosotros llamamos proceso de "sustracción" y del
cual buscamos si éste se repite a otros niveles.

Una reflexión ligada a un otro enfoque sobre la cuestión del Uno, producida por la
axiomática de números en la teoría de conjuntos. Ciertamente, a manejar con prudencia,
pero que no está muy desplazada, que el enfoque de la aritmética tradicional clásica.

La confrontación de nuestra reconstrucción, con ciertas hipótesis avanzadas por la


etnología y la antropología, sobre la cuestión del poder en las sociedades primitivas,
deslinda en que nosotros pensaremos el concepto de "unión" de la teoría de conjuntos y no
así la simple operación de "adición" de la aritmética clásica.

a) Un proceso estructurante

Pensamos que nuestra reconstrucción inductiva del Tawantinsuyu es homogénea al proceso


de generalización que se puso en obra y que ignoran varios autores que tratan esta sociedad.

Pensamos que es el conjunto Ayllu-Marka que permite comprender esta sociedad en todos
los niveles, y no su centro (el Inka) y siempre descrito, explicado partiendo de una otra
lógica. Porque el análisis de la experiencia Ayllu-Marka da a pensar, que ésta es una
estructura generalizada y no una organización empírica que pensadores, legisladores
hubieran erigido en modelo para imponerlo.

Supongamos una etnia "conquistada" por el Inka. Sobre la tierra que ésta poseía
colectivamente es proclamado el derecho eminente del Inka, a partir del cual éste da o
devuelve a la comunidad la parte más grande de la tierra en régimen de propiedad común.
De la tierra inicial (el Inka) sustrae una parte, llamada tierras del Inka y del Sol. La
comunidad puede disponer de esta tierra para la distribución anual. Esta tierra sirve
también para producir un sobre-producto.

Este sobre-producio (excedente) no es redistribuido inmediatamente, sino que pasa por el


Tampu de la Marka, que estampa la unión de los Ayllus. Puede ser distribuido en los
Ayllus concernientes por gestión directa de las Pirwa a cargo del Jilaqata; una parte
también puede estar en reserva en los grandes Tampus y ser redistribuida por instancias
regionales o directamente por el Inka. Se puede decir, que ese excedente (sobre-
producción) da lugar el mismo a una sustracción, que por el juego de la redistribución en
sus diferentes niveles, asegura y funda el pacto entre los conjuntos de Ayllus, luego de la
Marka dando la base material de su cohesión.

Esta parte, en menos, del usufructo familiar es una parte en más para la comunidad y
entonces también para cada familia, pero tomando en cuenta que ésta es el elemento de un
conjunto más vasto.

Podemos remarcar que el mismo proceso de "deducción" se encuentra en la generalización


del sistema de entre - ayuda en el Ayllu y más allá del Ayllu: la Mink'a, Mit'a. Miembros
del Ayllu que dejan temporalmente su Ayllu para participar en los trabajos decididos por la
comunidad y que la conciernen como unidad es tomada en un conjunto más vasto.
Recordemos que uno de los destinos del excedente, es el de asegurar el mantenimiento de
personas al servicio de la comunidad cuando los miembros realizan los trabajos de Minka o
la Mit'a.

Una cuestión clave es aquella que trata de las tierras dichas del Inka; ¿éstas obedecen a la
estructura del Ayllu? Recordemos que esas están sujetas a la regla de tripartición: una parte
(la más importante, sin duda, si se toma el conjunto del territorio) queda a disposición de la
comunidad, otra parte pertenece comunitariamente al Ayllu del Inka, finalmente solo una
parte es "propiedad del Inka". Se puede pensar en términos de estructura, que la propiedad
común para el Ayllu del Inka, corresponde a la propiedad común para el Ayllu: la parte que
va a la comunidad corresponde a la tierra llamada del Inka en el Ayllu, y la parte del Inka
corresponde a aquella llamada del Sol.

El Ayllu del Inka que algunos llaman la nobleza, es propietaria comunitariamente de la


"tierra del Inka" que le pertenece como a todo Ayllu. Pero, la herencia al nivel del Inka
puede contradecir el principio de la propiedad común. Porque el Inka "heredero" no hereda
tierras ni otros bienes que el debe reconstituir: Las tierras del Inka muerto quedan
adquiridas al muerto, culto al cual ellas sirven y a sus sucesores.

Si nosotros guardamos, en memoria, que el Ayllu es el elemento estructurante de la


sociedad fundada sobre la gestión de la violencia de lo propio: como propiedad común y la
posesión privada de tierras y de poder, se puede decir que, justamente, es el régimen del
territorio del Ayllu que funciona para el conjunto del "territorio del Inka". Incluso se puede
lanzar la hipótesis, que cada Inka y su descendencia constituyen un Ayllu distinto: referirse
al Valle de Chincha y región del Cuzco. En cuanto a los Yanakunas que trabajan esas
tierras, estaban allí temporalmente desplazados mas sus familias para la reparación pública
de una falta: Ellos portan una mancha negra (estigma, yana), por algo que habrían
cometido (kuna). El arrepentirse moral e individualmente no existe, la reparación de la
falta es social. En ese contexto, los yanakuna, también podían ser puestos al servicio de los
Tampus por un tiempo limitado.

Pero existe una versión que sostiene que los Yanas fueron una casta privilegiada que
disfrutaba de la protección del Inka; como no existen datos es difícil zanjar sobre el estatus
del Yana. Entonces después de haber seguido la estructuración de las tierras del Inka y del
Ayllu; estamos lejos de un proceso de apropiación privada de la tierra.
Ahora ¿qué pasa con la estructura para cuestión del Poder? Nosotros hemos visto, y es
también por un proceso llamado por la comunidad que emerge el Jilaqata; éste recibe la
calidad de hermano y su esposa que toma parte a la función, recibe el nombre de Mama
Jilaqata. Así sustraída la pareja por un tiempo limitado en el Ayllu; cumple los deberes que
le son atribuidos. Si se quisiese caracterizar el espacio que es lo Suyu, éste sería más bien el
borde y no el centro: espacio-contado con los otros Ayllus, espacio de intercambios (tierra-
productos) intra e inter-Ayllus, espacio de la mediación entre los hombres y las
divinidades, y lugar de la palabra en el cual el juzgamiento y el orden son excluidos.

¿Se puede hacer la hipótesis que la figura del Inka obedece a la misma lógica? Si así fuese,
entonces se prestase él a esta función de unidad como lo hace el Jilaqata de la cual el
fundamento estaría en la experiencia social originaria. El discurso de cronistas e
historiadores sostiene una hipótesis contraria, que tiende a convertirse en una evidencia, sin
inquietarse del desconocimiento de los principios reales del Tawantinsuyu.

Consideremos algunos elementos que sostienen la hipótesis despótica y sus diferentes


avalares. No insistiremos sobre la explotación de los campesinos, de la cual pensamos
haber mostrado la incoherencia y la fragilidad. Ni sobre la potencia de la organización y de
grandes realizaciones que no bastan para construir la figura déspota. Se puede explicar por
la generalización a gran escala, en particular del sistema de reciprocidad: Ayni, Minka.
Mit'a. Quedan, la transmisión hereditaria de la función, la riqueza, ver la opulencia, la
justificación religiosa que ha hecho calificar el sistema de teocrático.

Volvamos al mito de origen, que por una parte ocupaba el lugar de historia. En la escena de
origen del Lago Titikaka, Manko Kapak y Mama Uqllu, esposos, aparecen enviados por el
Inti, el padre, para fundar el Tawantinsuyu. No olvidemos que ya Tiwanaku ha sido una
especie de Federación de Ayllus de gran expansión y sobre una larga duración. Emerge un
Ayllu entre otros, ¿se hace o es hecho? Portador de esta función de unificación y de
cohesión, deja la región del lago y parte por la región del Cuzco... En un momento de esta
historia, la pareja (Jilaqata) dada toma en el discurso, la dimensión simbólica que enuncia
el Mito. En la versión peruana del mito de origen: de cuatro ventanas de una caverna salen
cuatro hermanos y hermanas “esposas”: Ayar Manku y Mama Uqllu se ubican en la región
del Cuzco.

En los dos mitos, el lugar donde comienza el Tawantinsuyu, distinto del lugar donde se
origina es reconocido a la capacidad de clavar en la Pacha, y sin dificultad, un bastón de
oro: símbolo solar, paternal, agrario fecundando la Pachamama. Una pareja, hermano y
hermana, fundamenta fuera de ella (en el padre-Sol), la empresa de unificación y de
expansión de la experiencia fundamental del Ayllu: una experiencia que ya está ahí.

El mito de origen, como proceso real de la transmisión del cargo del Inka y de su hermana-
esposa, registra simbólicamente y legitiman los datos del Ayllu, lo que así es simbolizado
y legitimado es el Ayllu y sus reglas bien particulares, fundado sobre las relaciones de
parentesco endógamas y patronéales. Notemos al paso, que los mismos que califican de
déspota al Inka, le reconocen la generosidad de un padre... presentando tal vez alguna cosa
de la estructura del Tawantinsuyu.

Lo que esta simbolizado igualmente es que esta ley no solo concierne a las relacio nes de
los hombres, entre ellos, sino también la relación de los hombres a la Pacha y a la
naturaleza en general. La relación con la Pacha es pensada bajo el modelo de Alianza, en
el registro de la fundación. El gesto originario de Manku Kapak y Mama Uqllu es repetido
cada año por el Inka y también por el Apu, en cada Suyu y en la fiesta consagrada al Inti
Raymi y a la siembra del maíz. Pero, recordemos que La fiesta de la Pachamama es tan
importante como la del Inti. Como lo muestran el conjunto de fiestas religiosas donde se
manifiesta: la relación estrecha con la vida agraria, la relación con la naturaleza,
presentándose como una alianza que excluye, la lucha y la violencia contra la naturaleza.

La estructura del Ayllu, se hace discurso en el mito. Un pue sto, un lugar, es asignado a la
estructura, en exterioridad con relación a la sociedad, como para garantizar la efectuación.
Este puesto es ocupado por el Inka. Lo que hereda el Inka, no son tierras y riquezas, es el
nombre y las reglas del Linaje. Hereda un gran rol simbólico que se expresa en las fiestas;
pero se puede hacer la hipótesis, que este modo de transmisión es un signo o rasgo de la
estructura en sí.

Queda un asunto de suma importancia: de este puesto en exterioridad, en el cual el


Tawantinsuyu exhibe su estructura, tiene una posición de poder separado: ¿la distancia ha
sido franqueada? Dicho de otra manera; ¿el Inka se presenta a ese rol como se presta el
Jilaqata (en el Ayllu); o se toma por el jefe único y central?

Sin pretender cerrar, esta cuestión importante, avancemos dos argumentos, tomados del
registro religioso y de la historia: El primero, es que el Inka, sí es "padre" -y sin duda como
tal fundador de un "linaje" asimilable a un Ayllu, él no es más que el hijo del Inti- y no su
reencarnación. Incluso si él representa -en el sentido fuerte de la palabra de la ley del
"linaje", existe más allá, el Inti, y más allá de éste, el Wiraxucha, del cual es importante
notar que no da lugar a un culto, a una religión; pero se puede responder siempre que esté
en el orden de la racionalización justificadora.

El segundo argumento se sujeta a una interpretación, que se puede hacer, desde el momento
en que los españoles desembarcan. Parece que algo juega, ya alrededor de la legitimidad, ya
que un hijo de "linaje puro" Waskar y un "hijo no legítimo" Atawailpa, se enfrentan.
Paradójicamente es el hijo del linaje puro, quien se entrega a los españoles. Tomándolos
como enviados de Wiraxucha, obedeciendo según Garcilaso a los consejos de su padre
antes dé la muerte de este último. Y el hijo no legítimo se enfrenta y pelea contra los
españoles. Pero es el hermano de Waskar Manku que desengañado comenzará rápidamente
la resistencia y la lucha.

¿Error de concepción sobre la persona de los españoles (qui pro quo)?

¿Sumisión a los dioses? Lo uno o lo otro demostraría que la "visión del mundo" es más
fuerte que el beneficio en el hijo de "linaje puro", pero la "lucha fratricida" y la resistencia
de Atawailpa son el índice de una crisis, alrededor de la legitimidad y el comienzo de una
ruptura en el orden del poder. Lo cual puede ser cuestionado; el sometimiento de Waskar a
una trágica incomprensión. Una profecía del octavo Inka, relatada por Garcilaso de la
Vega y Huamán Poma, habría predicho que los Inkas no ocuparían este puesto más que
por un tiempo limitado, significado por un número limitado de Inkas-doce.

Esta profecía sorprendente, tan contraria a la imagen del déspota o de todo poder fundado
sobre un beneficio, y dando lugar a una dominación, nos obliga en el ma rco de nuestra
hipótesis, que una misma estructura juega a todos los niveles y plantear la cuestión
siguiente: ¿Estamos en presencia de un discurso, que retoma la regla de limitación del
poder, a la cual obedece el Jilaqata y a la cual se sometía también el Inka?

Así, para el régimen del poder como para la de la propiedad de la tierra, la estructura
funciona al nivel del Inka, con una diferencia, una disimetría, que parece remitir a una
posición simbólica privilegiada. Nosotros retomaremos después de un desvío, otros
elementos que signifiquen "la diferencia" del Inka.

En el punto en que se encuentra nuestra reconstrucción se vería entonces en obra


(Tawantinsuyu), una organización generalizándose casi hasta la formalización de un sistema
social donde las reglas de parentesco fundan un régimen de propiedad, de producción y de
intercambios comunitarios basado en reciprocidad. La cohesión del conjunto es asegurada
por una operación repetida de "sustracción", de exclusión, que proyecta sobre el borde de
una parte o un elemento del conjunto: territorio, productos, hombres y comprendido el
Inka.

Esta lógica de sustracción, más que de adición y de disimetría a partir de una equivalencia,
necesariamente nos ha hecho pensar a aquella que ha sido puesta a la luz desde ha ce un
siglo en el campo de las matemáticas, ya no solamente en la aritmética sino más bien el
reflexión sobre el número.

b) Construcción del Número y conjuntos humanos

La numeración de posición muy atrasada en la aritmética occidental, da al número, un


valor que depende del lugar que ocupa en la serie de números y de su posición con
relación a las otras cifras. Ese sistema no alcanza más que con la invención de un símbolo
representando la columna vacía permitiendo distinguir 32, de 320, de 30002, etc.

Es el cero como el símbolo de falta que permite determinar este lugar. Es el conjunto
vacío, el punto de partida de la construcción axiomática, de los números enteros, o sea un
conjunto en el cual los elementos verificarían el enunciado: X diferente de X. Ya que
ningún elemento puede verificar este enunciado. El elemento vacío localiza lo imposible,
lo encuentra una escritura: Y este conjunto del cual el único elemento es el conjunto vacío,
es llamado "uno". El "uno" es pues producido a partir de la falta de escritura, escritura de
un enunciado posible. "Dos", es producido a partir de la escritura del conjunto vacío: <> y
de "un"; "dos": es (<>, (<>); "tres" es el nombre del conjunto en el cual los elementos son:
el "tres", que nombra este conjunto no le pertenece'56 '.

Esta regla de engendramiento de números, en el orden original de la sucesión, llega a una


dificultad matemática, una paradoja. El conjunto de las ordinales no es un conjunto. Cuales
hayan sido los esfuerzos de formalización y de buena definición, la paradoja quedó como
tal. Esta ha dado lugar a una demostración, a un teorema, esa paradoja ha convertido
necesaria el axioma: existe un ordinal infinito.

Esta dificultad reencuentra una cuestión que está en el seno mismo del razonamiento
matemático por excelencia; el razonamiento por recurrencia, es decir, la inducción
propiamente matemática. Para Poincarée, la evidencia del razonamiento por recurrencia es
"solo la afirmación de la potencia del espíritu que es (sabe) capaz de concebir la repetición
indefinida de un mismo acto de que este acto es, una vez posible"157 '. Pero si se pregunta,
entonces, qué es lo que hay "detrás de esta capacidad del espíritu" podemos avanzar; que
matemáticamente se impone la idea del infinito, y se distingue de la repetición indefinida.

Es justamente, porque en el horizonte de enteros naturales (ordinales definidos) se sitúa un


ordinal no finito (axioma: existe un ordinal infinito) que los enteros naturales funcionan
como conjunto, es decir, como estructura y no simple agregado. Plantear la existencia del
infinito, tiene un efecto de estructuración sobre los conjuntos finitos por exclusión, sobre el
borde de un ordinal no finito. Eso produce un efecto de frontera, de limite, y entonces un
otro lugar de donde surge el nombre que unifica el conjunto de los enteros finitos
llamándolo N. Pero hemos visto que esta regla de exclusión funciona desde el momento
mismo de la construcción de los enteros, de ahí, entonces, se toma en cuenta el símbolo de
la falta.

Aclarando por esta lógica matemática, la cuestión de los conjuntos humanos lo que en esta
lógica nada prohíbe hacer, sino no nos confundimos de registros se puede decir, que
cuando se intenta poner juntos, todos los miembros de una comunidad, solo es posible por
un movimiento de exclusión, de "sustracción", que transporte a un miembro a un otro
lugar, que lo haga otro; solo gracias a esta frontera los miembros como conjunto pueden
funcionar juntos.

¿Qué es lo que permitiría a los conjuntos humanos, existir de otra manera, que por el
efecto de una imposición o de una obligación? Para que los deseos singulares hagan
"conjunto" y no solamente "suma" es necesario que se haya instaurado este efecto de
frontera y de falta. Ningún elemento no detiene en sí- mismo, al interior, este efecto de
unidad. Es por un efecto de exclusión que le sustrae al conjunto y dejando un vacío que
puede estar en posición de hacer existir el conjunto y nombrarlo. En la construcción de los
enteros, es el sucesor que está en posición, en un conjunto no ordenado cualq uier elemento
puede estar en esta posición.

Esta vuelta matemática puede ayudarnos a comprender la lógica que funciona en el modelo
social del Ayllu. Nosotros hemos puesto a la luz ese proceso de exclusión, de "sustracción"
para el régimen de la tierra territorio, la producción y la gestión del excédeme, la
organización de los trabajos y el desplazamiento territorial de los Ayllus. Ese proceso
permite la cohesión, no solamente del conjunto-AylIu, sino de sus conjuntos de conjuntos
que son la Marka, los Suyus. Es decir, estructurándose como modelo ampliado.

Comprendemos también; que la expansión del Tawantinsuyu, puede depender de una


lógica recurrente, tal que Poincare, la define. Lo que no excluye, que las razones materiales
(demográficas por ejemplo) le ha yan convertido "empíricamente" necesario.

Además, este recurso de razonamiento matemático, puede también ayudarnos a perfilar el


registro político, simbólico, y los espacios de "poder". La metáfora conjuntista, nos parece
para ello la más apropiada que la metáfora piramidal. Se podría pensar que la estructura de
la propiedad, del trabajo y los intercambios, tal cual hemos analizado, basta para mantener
juntos los Ayllus, las Markas, los Suyus. Pero, el puesto ocupado por el Jilaqata y aquél
ocupado por el Inka, muestra que él es nada, incluso en una sociedad tan bien
"reglamentada"; esto significa que una sociedad humana no se reduce solo a la gestión de
necesidades y de la economía.

Se puede decir, con al Ayllu y el Jilaqata, tenemos un conjunto no ordenado, donde


cualquier miembro puede ser llevado, llamado, para asegurar el puesto exterior que hace la
cohesión simbólica. Con el Inka la función de sucesor, de engendramiento y de filiación
está representada, integrada al puesto que él ocupa, produciendo un conjunto ordenado.

Se puede tratar de ver en la figura del Inka, como el elemento que reúne o mantiene unidos
(juntos los conjuntos finitos desmembrables (y efectivamente enumerados gracias al Kipu
(Ayllus-Markas-Suyus). Más esto es a la manera del Jilaqa ta en el Ayllu, con los límites
que le son puestos a su "poder". Es a título de conjunto no finito, que podría ocurrir si el
Inka tomara, y sea tomado por un jefe divino, ver un Dios. Pues nuestro análisis, nos
muestra más bien, en los diferentes registros, un Inka tomado en la estructura del Ayllu, y
comprendido sin lugar a dudas como un conjunto entre otros enumerado y ordenado: finito
y además limitado por el número doce. Un Inka no identificándose al sol ni al puesto del
poder que él ocupa e integrado en la representación de su función, e! modelo de la profecía
trágica de la historia. Un Inka prestándose a ocupar una función, de manera muy próxima a
la del Jilaqata, y por tanto esta función lo hacia Otro y diferente al Jilaqata. Es esta
diferencia, que nosotros trataremos de discernir ahora.

c) El poder en las Sociedades "Primitivas" y en el Modelo Social del Ayllu

Convenidos de que la organización del Tawantinsuyu se aclara a partir de la experiencia


fundamental "primitiva" y comprendida éste en el registro del poder, hemos buscado
confrontar nuestras hipótesis con ciertas reflexiones etnológicas. Nos basamos en los
trabajos de P. Clastres, sobre el poder de las sociedades "primitivas" sin Estado. A pesar de
que Clastres no hace una alusión frecuente a los Inkas, sino toma mas bien como horizonte
del cual él diferencia las sociedades que estudia, Clastres habla retomando el discurso
dominante (ver en particular mitos y ritos de los Indios de la América del Sur)!58) .

Aquí retenemos sólo las articulaciones concernientes al poder. Las sociedades "Indias"
están regidas por intercambios recíprocos e igualitarios; se dan un poder que asombra por
su impotencia a ejercerse, y no obstante persiste como tal. Este modelo estructural,
repetido, es un bien intencional y "colectivo". Este manifiesta una negación del poder y
una afirmación de la cultura. Estas sociedades tienen la intuición que el poder se ejerce
coercitivamente a partir de un más allá de la cultura y contra ella: modelo que tiene en
parte ligazón con la naturaleza.

Para defenderse, las sociedades hacen por consiguiente un espacio al poder, un puesto
exterior a la estructura del grupo; o sea un puesto al margen y que esta exterioridad misma
le convierte impotente. ¿Cuál es entonces esta figura del "jefe"?

El jefe tiene una tarea específica: asegurar la paz; dos obligaciones con referencia al grupo;
distribuir bienes propios y hablar, es decir, dar generosamente bienes y palabras; él tiene en
fin un privilegio: la poliginia, los bienes, las mujeres, las palabras, son considerados en la
sociedad como "objetos" de intercambio regulado por la reciprocidad, cesan a obedecer
esta reciprocidad, y devienen puros valores. Las mujeres del grupo van hacia el jefe, los
bienes y las palabras del jefe al grupo; una disimetría se establece, lo mismo que una
dependencia invertida: ya que él recibe porque él da, el jefe está bajo la dependencia de la
sociedad.

Pensamos que en el Tawantinsuyu, hay efectivamente una sociedad, que se da un modo de


poder coherente con sus reglas de base y no una racionalización, una modelizacíón
producida por un grupo separado y que se apoye sobre esto; su determinación. Y parece
que la sociedad Inka retoma bajo modalidades particulares, el modelo estructural revelado
por Clastres. Estas modalidades, permiten aprender mejor la diferencia entre el lugar que
ocupa el Inka de aquel de los Jilaqatas.

En este puesto de poder sobre el borde, en exterioridad, resultado del proceso de


sustracción, tanto el Inka, como e! Jilaqata tienen en común, un cierto número de deberes;
deben, tanto el uno como el otro, asegurar la paz y garantizar la alianza al interior del
Ayllu, entre Ayllus, y las etnias integradas, Esta obligación, de ser "garante" se efectúa
ampliamente por este otro deber: dar generosamente palabras o bienes, La distribución de
las palabras, en las cuales hay que incluir los ritos y la fiestas, les es común.

Previamente a la distribución de bienes, hay aquella específica de una sociedad agraria, la


distribución de tierras al interior del territorio. Como el Inka, que después de haber
proclamado su derecho eminente sobre el territorio, (procede a la división tripartita), el
Jilaqata tiene la tarea esencial de la distribución anual de las tierras. Cada miembro del
Ayllu recibe su parte; señal incesante y ritual de su pertenencia a la comunidad, de su
igualdad con los otros. Como en el pasaje de las "sociedades del territorio" a las
"sociedades de la tierra", (del cual nos habla P. Clastres), el mareaje que denota la
pertenencia de la persona al conjunto, se hace sobre la tierra y no así sobre el cuerpo. Pero
es a través de la división tripartita, de la repartición anual, que la misma práctica de
mareaje y de inscripción hace de cada uno, un miembro íntegro de la comunidad: ni nada
más ni nada menos, equivalentes (¿mejor que igual?) a los otros, en un conjunto no
jerarquizado.

La distribución de los bienes también, les es común, con diferencias según los niveles de
"gestión" (Ayllu, Marka, Suyu...) y la disimetría entre estas dos figuras. Sobre la base de su
derecho inminente, el Inka hace "don al Ayllu del territorio, que simbólicamente le es
propio, y hace "don" de los bienes producidos (por los Ayllus) sobre "su" territorio, lo que
permite decir a la vez, que la sociedad trabaja para ella misma, sin e xplotación ni
dominación y que el Inka cumple generosamente su obligación de dar. El Jilaqata, al
nivel del Ayllu, asegura la distribución de bienes, que están en un circuito de reciprocidad
(Pirwa), sin embargo, puede darse formas de "don" cuando el Jilaqata prodiga bienes a los
miembros de su Ayllu en ocasiones de ritual y de fiestas. La función del "don" es más
importante a nivel del Inka: que se trate de modalidades como la repartición de tierras y de
la redistribución de bienes, o de circunstancias particulares a las cuales los "dones" están
ligados de una manera más visible: fiestas, malas cosechas... Del mismo modo que el Inka,
tiene y tiende a dar más que a redistribuir, parece tener el privilegio de la poligenia y sin
duda una función más importante en las fiestas de Inti, de la Pachamama. Pero también, y a
diferencia del modelo del cual habla P. Clastres, él (Inka) puede juntar riquezas muy
importantes: trajes, decoración de templos, riquezas que él no las transmite al Inka sucesor.
Es pues como si la especificidad del Inka, produjera la disimetría, con relación a las otras
estructuras de poder/no poder; y ésta estaría representada por la opulencia. De esta
opulencia, Clastres nos dice que ella es "el sueño despierto del grupo", "la esperanza o la
nostalgia de un tiempo mítico, donde cada uno accedía a la plenitud de un gozo no limitado
por la existencia del intercambio". En el caso del Inka, ésta no está ni siquiera limitada por
la muerte, puesto que los rasgos u objetos de su gozo son adquiridos hasta en su muerte,
hay entonces disimetría en la figura del Inka, pero que no es asimilable a una división
social.

¿En qué circunstancias este gozo es signo de una disimetría y no de una división social,
fuente de dominación y explotación? ¿Qué es lo que nos aclara esta noción sobre el
Tawantinsuyu? La economía política, retiene más bien la categoría de la ganancia, y no así
del gozo; en efecto la noción de beneficio, parece aclarar con más precisión el problema de
la división social, donde predomina el proceso de acumulación. Pero confundir estas dos
categorías y no retener más que aquella de la ganancia, conduce a enceguecerse sobre la
naturaleza del poder (ver Pierre Legendre; "gozar del poder") y sobre otros modos de
organización social y económicas'591 .

Llegando a este punto, encontramos la cuestión del análisis Hegeliano de la relación amo -
esclavo. ¿El goce del amo y el Inka estarían en el mismo registro de poder? Recordaos
brevemente. Al término de una lucha a muerte por, el reconocimiento, el esclavo es aquel
que prefiere la esclavitud a la muerte, haciéndose esclavo de por vida y sometido al amo,
quien no teme enfrentar la muerte. Esta relación, en el análisis que hace Hegel, es
dialéctica. El amo goza de cosas que el esclavo elabora para él, éste las consume y
haciendo esto las hace desaparecer y niega al mundo. El esclavo que no goza, de lo que él
produce para el amo, se compromete en un trabajo de transformación del mundo
invirtiendo la situación. No solamente el amo depende del esclavo, pues su verdad está en
el esclavo que lo reconoce como amo, más por la transformación del mundo, que el
esclavo opera por su trabajo, produce el pensamiento de sí- mismo, el pensamiento corto y
la dominación sobre el mundo.

Este análisis nos da cuentas y elementos diferentes del Tawantinsuyu, contrariamente a


los que piensan y consideran como sociedad esclavista. La sociedad del Tawantinsuyu no
releva de una dialéctica del reconocimiento entre individuos, sino más bien de una lógica
de pertenencia, que por encima de los individuos les hace un lugar en el conjunto y hace a
algunos un espacio sobre el borde, necesario al funcionamiento de la estructura.

Hemos visto también que la comunidad trabaja para ella misma y no para el Inka, la
comunidad goza de lo que ella produce, pero este goce está limitado por la ley de la
reciprocidad, regulada de manera compleja por un proceso de "sustracción" y "o de
dominación". Hemos visto que lo esencial de lo que le ha sido quitado, vuelve a la
comunidad, pero una parte no regresa y se concentra de alguna manera sobre el Inka: de
ninguna manera como propiedad privada, más bien como un ejercicio de poder por la
sociedad. Es esto lo que sobresale del modelo estructural, aclarado por Clastres, y es el
sentimiento que se puede tener de la figur a del Inka, es como si una especie de
demostración fuese montada de manera espectacular. Este gozo es sin límite. Mientras que
la ley de la reciprocidad limita en la sociedad.
¿Puesta en escena de un sueño? ¿Exorcismo de relación presentida o pensada como
peligrosa entre poder, naturaleza y gozo? Exorcismo de ese peligro para que pueda advenir
y durar aquello del cual todos los ritos manifiestan el deseo: Una alianza entre los hombres
y la Pacha, y no una dominación de los hombres sobre la naturaleza.

Tal es quizá el sentido de esta metáfora de la elegía "Apu Inka Atawallpaman": "La
sombra que protege". El Inka "hijo del Inti" y padre fundador simbólico de la comunidad:
prestándose a esta puesta en escena, habría protegido a los hombres de esta luz
enceguecedora del Inti, que como la muerte no se la puede ver de frente.

Un abismo separa esta lógica de aquella de los españoles, quienes empujados por una sed
de gozo que no conocían como tal, y que los desencadena furiosamente cuando se enteran
que Perú es un mundo del Oro. Waskar se presenta y hace don de sus riquezas, éstas no le
pertenecen, ellas son del orden del sueño y él lo sabe.

Esta reconstrucción de un otro modelo, para el Tawantínsuyu, deja varias preguntas que
quedarían por abordar a través de una re- lectura de los documentos: La aparición y
funcionamiento del sistema de registros y de memoria (quipus), las modificaciones
internas, crisis, rupturas de este equilibrio complejo: el porqué del deseo y la necesidad de
expansión. Pero si una lógica de este tipo, está en funcionamiento en el Tawantinsuyu y
producida por la sociedad misma, comprendemos que la muerte del Inka sea evocada
como un duelo, un vacío donde:

"Todos y todos se esconden, desaparecen padeciendo. Muerta la sombra que protege,


lloramos. Con el martirio de la separación infinita, el corazón se rompe".

Pero también, llegando a 5 siglos, después de la invasión, de destrucción, la experiencia


inicial se prosigue, como veremos más tarde, es decir, que los Ayllus aun repiten
ritualmente el goce individual como comunitario.
La destotalitación

Nuestro proyecto de reactualización, en tanto que construcción de un todo, es una critica


del proyecto de sociedad, basado, en el aspecto únicamente privado de la propiedad y más
particularmente en Bolivia. Nuestro método se abre sobre una realidad y sobre la necesidad
de un otro posible, Ciertamente, tenemos que hacer frente a un todo que pretende ser
verdadero y que no tolera la diferencia.

Un pensamiento sobre el sistema del Ayllu, exige una madurez y un cierto tipo de
concepción política. En este sentido, el sistema del Ayllu llega tarde, después de muchos
estudios parciales, luego de una realidad que no hace más que entrar en un universo sin
sentido. Pensar en el Ayllu como sistema, es ya una tentativa, de un cierto pensamiento a
contra corriente. El Ayllu, aquí, es pensado como elemento estructurante de la totalidad y
los elementos sociales del Ayllu relacionados entre sí y con el todo, pueden ser mejor
aprehendidos.

En nuestro trabajo, el Ayllu es el punto de partida como totalidad, en tanto que realidad
social y mental. Se puede decir que el modelo social del Ayllu, es una totalidad que
trabaja desde su origen y que se expresa, solamente al final como Estado; como la
generalización del Ayllu. La totalidad del Ayllu, como sistema, trata de reconstruir el
campo económico y político, a partir del movimiento de la propiedad. Es eso lo que
hemos tratado de demostraren los precedentes capítulos, 7 sobre el Ayllu.

La idea de totalidad, no puede ser el privilegio, solamente de una sociedad dominante, de


una cultura, de una civilización, del simple hecho que los otros deben necesariamente
devenir elementos. Cada pueblo, cada civilización es un todo coherente: es éste, todo que
debe ser pensado. ¿Un pueblo puede ser estudiado como un objeto'? Si nosotros entendemos
por objeto lo que está aislado de un contexto, lo que es consecuentemente una relación
terminada, y definida como una máquina.

Es, en esos términos que se hace, cuando se habla de sociedades que no pueden entrar en
los grandes conceptos, Después de la clasificación o la tipologización de sociedades, se
continúa hablando de sociedades que no tienen más que faltas o carencias por todos los
lados (sociedad sin Estado, sociedad sin propiedad etc.). Por el contrario, comprender ¡as
sociedades como una totalidad a partir de la estructura de la propiedad (en nuestro caso
económico, político), es no someterse al universo de grandes conceptos: comprenderlo
político, lo económico, es reconstruir la lógica misma de tal o cual sociedad. De nada sirve
entonces calificar una sociedad de esclavista, despótica, primitiva, porque ninguna de esas
apelaciones no reconstituye la lógica interna del proceso social.

En nuestro trabajo de comprensión y del estudio de la lógica in terna del Ayllu, luego de
haber tratado de modelizar la totalidad del Tawantinsuyu a través del Ayllu (corno
estructurador de esta totalidad), nos toca ahora comprender, cómo se desestructura el
Ayllu, cómo una totalidad se "disuelve", como una totalidad ha estallado, cómo ese cuerpo
social a devenido hoy por hoy un "cadáver".
En el estudio de una totalidad, son las redes complejas de relaciones que se debe explicar:
la interconexión, la interdependencia. Así el principio de identidad, no es más que un caso
particular de todo un sistema. En una totalidad social, atarse sólo al problema del origen y
del fin, es plantear un falso problema. Del mismo modo, buscar si lo político determina lo
económico o si es lo contrario, es también plantear un falso problema. Sabemos también,
que después de haber seguido el movimiento de la propiedad, que lo uno y lo otro son co-
extensivos: el movimiento mismo de la apropiación, es ya político.

Estudiando el Ayllu, nosotros hemos buscado separare extraer la potencia de un sistema,


exponerlo de una manera analítica (la génesis de su invención) y de manera deductiva o
sintética (su culminación, el Estado). Para tener una idea de! Ayllu, hemos utilizado pre-
textos que no están escritos, que están en la "memoria del Ayllu", en la mitología, en las
prácticas de mareaje geográfico, político y económico. Todo esto aún no es un sistema.

Otros pre-textos también han sido utilizados. Estos son evidentemente textos escritos. Son
textos que corresponden a un cierto contexto histórico y mental: de los cronistas, viajeros,
etnólogos y economistas; textos escritos en el momento de la invasión y aún hoy en día,
sirviendo para justificar una cierta práctica política, y económica.

El Ayllu, como pensamiento y un todo, no llega sino después de un golpe, llega para
relacionar lo que no estaba relacionado en los textos diseminados. El sistema del Ayllu
llega a aclarar los textos "pre-AylIu", como no sistemático. Es imposible deducir el
sistema del Ayllu de dichos textos, porque, eso implicaría la reducción del todo a la parte.
El Ayllu como un todo no es otra que la relación entre partes, la relación es indiferente a
las partes y esta indiferencia es el signo de vida expresado por el sistema.

La idea del Ayllu como totalidad, hace del sistema común su propia vida; entonces el
Ayllu no se compone de partes, se compone de relaciones, independiente de las partes. El
Ayllu no puede existir más que como sistema comunitario, territorio -social y político. Esta
estructura de lo común, como dominante está inscrita en el funcionamiento mismo del
Ayllu. El Ayllu no está compuesto, ensamblado en partes, tampoco es una colección; pero
si una totalidad social.

Por qué no nos quedamos simplemente en los textos?. Pues en ese caso estaríamos en un
trabajo de remiendo y desarrollaríamos siempre los mismos estereotipos sobre el Ayllu; y
esta comprensión restringida del modelo o sistema, no nos servirá para nada en la
comprensión del Ayllu concreto, las comunidades y la posibilidad de elaboración de una
política como proyecto de sociedad. El Ayllu como totalidad, es aquello que es común "al
espíritu del pueblo", y a lo real: lo que es común es la reproducción. Es porque existe un
cierto acuerdo, entre relación y acción, que el Ayllu persiste como un todo-elemento.

El Ayllu como relación social y base del Tawantinsuyu, es un todo federativo de etnias
(integradas ya sea por la guerra o pacíficamente), y otorga a cada una de las partes su
independencia. Así el pluralismo de la experiencia no se opone a la ausencia de unidad,
pero una unidad flexible que sobrepasa el mundo geométrico determinado. El Ayllu como
sistema es ágil, cambiante, porque geográficamente, hay un movimiento centrífugo, y
centrípeto en el dominio económico y cambiante, ya que, el Ayllu permite la limitación de
los elementos de la comunidad a un número determinado de habitantes; es decir, en esta
sociedad el engrasamiento indefinido, el crecimiento demográfico, se opera y se viabiliza a
través del desplazamiento y la formación de nuevos Ayllus, situados en pisos ecológicos
diferentes; espacio geográfico que permite la apropiación de nuevos territorios.

Cambiando de lugar el Ayllu no cambia de naturaleza, el cambio de relación no se da por


asentamientos definitivos (fijos) sino más bien, tiene un carácter ambulatorio, es decir, que
son relaciones a diferentes momentos del mismo proceso. Una vez establecido el Ayllu
como sistema, podemos seguir el proceso de su destotalización, donde ésta es ÜP proceso
combinado que a lo largo de los cinco siglos es violencia física y violencia ideológica que
no solo deforma sino bloquea el proceso social.

Es capital, tomar este proceso, como un desgarramiento de la totalidad-AylIu; por la


expropiación dé territorios, tierras, bienes; por la desposesión material y mental; la
alienación, la interiorización de la moneda y los nuevos símbolos ideológicos, políticos. La
división de la totalidad en Estados Territoriales, creación de provincias, división de la
sociedad en clases sociales de una manera mecánica y geométrica. Todo este proceso es el
etnocidio donde los hombres están condenados a muerte lenta. Al nivel de consideraciones
teóricas, existe la proyección de la noción de "sociedad primitiva", que en el fondo no es
más que el reverso de la máscara occidental, idea según la cual, el Ayllu y sus habitantes
son estudiados como otros y minorías al interior de la sociedad boliviana tanto por
sociólogos, economistas y politólogos.

SÍ se considera una sociedad dada, una civilización; lo que se considera es una de sus
expresiones. La civilización corresponde a un modelo abstracto al cual a cada momento
ésta expresión se refiere. Así el Ayllu es la expresión de un modelo que es real o el ser
civilización de una comunidad concreta. Entre su expresión (el Ayllu) y el modelo hay
relaciones muy estrechas.

El Ayllu se define al nivel del problema del vivir. Este problema de vivir (Qamaña), tiene
para el Ayllu una formulación especifica. De la misma manera, que cada civilización
responde al problema de vivir y responde a ésta de una manera específica: el Ayllu responde
al problema de vivirá través de la gestión (o control) de la violencia de lo propio
(propiedad), violencia que se expresa en el conflicto entre lo común y lo privado, (orden
económico y político).

Lo que nos interesa en el Ayllu, es ciertamente, la manera cómo está planteada esta
respuesta al ser, en su calidad de miembro de la comunidad en cuestión. Pero la respuesta no
es la expresión de ese vivir. Su expresión, es la comunidad engendrada a partir del modelo
particular de la dualidad conflictual de lo propio (común-privado).

Entre esta comunidad engendrada, a partir de este modelo, es decir, la solución concreta
elaborada a cada momento por los hombres en función del bien vivir (Qamaña) y su
expresión, está presente el principio de adecuación. La solución no es simplemente para el
individuo una solución exístencial y donde el modelo sería esencial; el modelo del Ayllu y
el existir, son lo uno y lo otro, un testimonio de la invención del vivir.

Hay una búsqueda de adecuación de la realidad al modelo como propio: el régimen de


apropiación en la economía y el poder es rígido; el problema existencial lo aleja del
modelo. Este siempre está presente, pero existen otras maneras de vivir y en consecuencia
una tendencia a alejarse.

El problema, es aquel del momento que se expresa en todo momento y en el marco de la


sociedad que le es asociado. El Ayllu es una comunidad abierta: pero limitada en el
sentido que, una comunidad no es un conjunto indefinido o infinito. Ella está limitada por
el régimen mismo de la apropiación del territorio. Pese a estar limitada la comunidad
tiene sus expresiones propias: donde la identidad y las expresiones del vivir varían de
étnica y regionalmente.

Una comunidad, como parte del Ayllu, es una civilización, en la medida en que ésta
engendra, reproduce la comunidad concreta; un conjunto de hombres que se conocen y se
reconocen en el proceso del trabajo (Ayllu como unidad de producción), de circulación de
bienes (Pirwas, Tampu), del poder (Ulakas, Jilaqata): como un conjunto de hombres que
comparte y organiza una red compleja de relaciones especificas.

Estas relaciones no son únicamente religiosas (como las sectas), ni del orden del trabajo
(como los obreros de una fábrica). Los Ayllus constituidos, no son comunidades en el
sentido, en que ésta reúne individuos sobre un punto, un tema preciso, como la religión. La
comunidad es total en el sentido de unidad en la vida. Es un fenómeno social total. Son
relaciones cotidianas de comensabilidad, es decir, de producción, de cons umo, de cultura,
con quién, qué se trabaja y para hacer qué. Estas relaciones son también relaciones de
partición del espacio y lo social; cómo se organiza, se recorta y cuáles son las relaciones
que existen entre ellos; el sexo, la edad, los grupos de trabajo (Ayni, Mink'a....), y los
grupos de consumo; como relaciones (pirwa tampu). La pertenencia a una comunidad es la
que da una identidad. Todas estas relaciones forman una cadena. Esta tiene un sentido de
referirse a la totalidad y no así al corazón de eslabones específicos, Para cada Ayllu, cada
relación está cargada de un sentido, el que se refiere al conjunto, y este sentido es
necesariamente compartido por todos. Toda relación, todo ser y todo objeto es específico y
es esta particularidad que le confiere identidad, es el aspecto de lo propio como privado y
particular que se expresa.

Pero, la modificación de esta relación engendra cada vez más un vacío, la población
siendo percibida simplemente por su cantidad (tantos obreros, tantos campesinos, tantos
indígenas) y no por su calidad y su territorialidad. En efecto para que las relaciones tengan
un sentido (no solamente mítico), éstas se dan a través de la partición del territorio, de
bienes, del trabajo. Para ello, la reproducción incesante de la dualidad simbólica debe
cumplirse en todas las manifestaciones de la vida concreta. El territorio está marcado por
esta dualidad "simétrica" donde incluso los enclaves adquieren sentido, estructurados
todos por esta misma lógica. El Ayllu como comunidad tiene necesidad de otro, su doble,
solo así el Ayllu puede existir, lo doble siendo condición necesaria que define la
pertenencia y la identidad.

La des-territorialización colonial es a la vez espacial y mental; porque las relaciones entre


los Ayllus son interrumpidas. Esto provoca la desarticulación, la desestructuración, el
empobrecimiento de las relaciones entre los Ayllus y entre los miembros de una misma
comunidad. Lo que aquí se pierde es la referencia al territorio, es decir, pérdida de
identidad. Estas nuevas relaciones de des-territorialización no corresponden a relaciones
propias del Ayllu, puesto que no se trata de relaciones elaboradas, engendradas en función
de relaciones cotidianas que constituyen el conjunto anterior. Estas nuevas relaciones,
tendrán por propiedad, aumentar el volumen de las ciudades o de "comunidades" y
eventualmente de forzar dos comunidades a juntarse.

Esta agresión a la existencia misma de los Ayllus provocará nuevos referentes: la moneda
como vehículo de una medida, de una cuantificación de las relaciones humanas, la
reducción de los miembros del Ayllu en clases sociales, obreros-campesinos, con
reivindicaciones políticas dirigidas por partidos políticos, sindicatos e ideologías ajenas a
los hombres del Ayllu. Así todas las ciudades bolivianas son una conglomeración, una
multitud donde las relaciones que se traman son verdaderos laberintos para los comunarios.
Ellas permiten al mismo tiempo el aumento al infinito de la conglomeración humana y la
generalización de un modo de vida despersonalizante: la creación de un lumpen-
proletariado, la proliferación de pequeños comercios (llamados informales), y la
delincuencia: fenómenos sociales propios a la reproducción marginal del modo de vida de
los países occidentales.

Desterritorialización física y mental: Encomienda, Reducciones y Repartimientos

Existen tres momentos combinados de desestructuración física y mental que van


interiorizando las relaciones coloniales de explotación: en el primer momento, los Ayllus
con la política de la Encomienda pasan del estatus de autonomía, de hombres libres a aquel
del objeto poseído por el colono. Ellos no solamente perdieron sus territorios, sino también
la libertad. Poseer, ser propietario de los "Indios" es la regla general. Hay todo un
dispositivo que se implemento en este proceso colonial, aquel de la apropiación de las
tierras y hombres. La des-territorialización es la manifestación concreta, violenta de la
expresión de lo propio como privado, lo propio que se interioriza es del orden, la
dependencia espiritual y física, es en esta apropiación donde el colono es dueño del indio y
de las tierras cumpliendo misiones religiosas: la encomienda restablece la esclavitud para
institucionalizar como la forma de explotación más humana de los indios.

Un segundo movimiento de la des-territorialización es el de la reducción, proceso de


violencia donde se separa al hombre de la tierra y del territorio. El "esclavo" es liberado
pero adquiere la condición de siervo, se le atribuye una parcela de tierra, a condición de que
sirva al latifundio o a la Iglesia. No tiene nada en propio sino es apenas su cuerpo. Lo
propio bajo su aspecto privado es groseramente extendido al extremo mismo del
feudalismo.

No queremos decir que el feudalismo ha existido en América del Sur, pero hay que señalar
que la estructura de lo privado como modo de producción capitalista, en su despliegue a
escala continental, toma formas de apropiación dominadas por lo privado, formas de
explotación aproximándose del esclavismo y el feudalismo'60 '.

Cuando los Ayllus son des-territorializados, desposeídos de sus territorios y reunidos en


pueblos por la violencia a través de las "reducciones", los miembros de esas comunidades
son reducidos al estatuto de colonos y mitayos. El Ayllu, se constituye en una comunidad
negativa, donde en lugar de la reciprocidad, es la ruptura mutua que generaliza las
relaciones de dominación. La des-territorialización provocada por la colonización a través de
la guerra y la violencia de lo propio como privado, obliga a una concentración en
"comunidades" en una sola aglomeración: único medio para lo privado de ejercer su
dominación. Este proceso que se opera tiene por consecuencia, el estallido del Ayllu en su
estructura y una pérdida de referencia del hombre a su territorio, la desintegración del
universo espacial y mental. El Ayllu es una unidad, una entidad donde reina la ayuda
mutua, y un lugar de diferenciación entre Ayllus. La comunidad creada artificialmente, por
la reducción representa un lugar de desgarre, una comunidad negativa sin proyección
histórica.

Otra forma de desterritorialización es, de destruir la estructura de consumo, obligando a los


"Indios" la adquisición de mercancías no útiles para el consumo local. Esta política consiste
en someter al "indio" y destruir los Ayllus, endeudando al "indio" por generaciones y
restableciendo el esclavismo también por generaciones. Es de señalar que el repartimiento
como política de destrucción de la estructura de consumo continua practicándose aún hasta
nuestros días, solamente cambia el denominativo: ahora se llama ayuda en alimentos,
proyectos de desarrollo, auto desarrollo campesino, participación popular.

Cambios de referentes simbólicos: lengua, moneda

Hay un verdadero corte de la lengua, en sentido concreto y metafórico, no solamente


cambian los nombres de los dioses, los nombres de los lugares, de los ríos, de las montañas,
sino también los nombres de los individuos. Hay una política de mareaje del cuerpo
territorial y humano'61 '. Es una violencia del orden lingüístico que se ejerce, convirtiendo
afásicos a los hombres y Ayllus, esta afasia corta toda forma de relación con el otro entre
hombres. La lengua como vehículo común, es desplazada por una otra que no es propia al
Ayllu, algo exterior se va interiorizando a través de l lenguaje.

Esta, en lugar de crear una unidad en el Ayllu, opera una destrucción interna en el
individuo. Esta violencia destructiva es un instrumento que sirve para desarticular
totalmente a los individuos y el Ayllu; por este medio, se introduce toda la lógica de lo
privado, Es a través de la lógica de los nuevos términos, nombres y símbolos empleados
que el otro adquiere estatus de objeto e inicia su propia destrucción; la lengua no solo
instaura el silencio entre los hombres sino cambia la relación entre los hombres y Pacha.

El signo lingüístico toca la estructura interna misma de los hombres y establece una
relación de cambio y de sustitución. Mientras que el signo monetario como elemento des-
estructurante cambia las relaciones entre los hombres en relaciones puramente
cuantitativas, Veamos en qué consiste su efecto perturbador y sus consecuencias. En el
proceso de la destotalización, un hombre está frente a un intercambio, en el cual, en
principio desconoce al otro. Este último es aquél que esta en relación con la ciudad, los
centros de explotación minera.

En realidad él conoce a la persona con quien trata el comercio, pero poco a poco este
intercambio hace cuerpo con la tierra y los lugares donde los individuos se encuentran.
A medida que las relaciones mercantiles se intensifican entre ciudades y campo, cada
miembro del Ayllu puede intercambiar libremente los productos desconocidos, y con gente
que viene de otros lugares que le son también desconocidos.

Pero veamos lo que crea la moneda como engranaje, cuáles son sus efectos
desarticuladores. En la medida en que el objetivo de un individuo será a través de un juego
de ilusiones que tomara una forma compensadora la acumulación de moneda, el individuo
del Ayllu, buscará entraren un proceso donde procederá a un máximo de intercambios:
vender animales, productos, y finalmente tierra lo que al cabo del proceso le empujará al
mundo de la aglomeración o vender su fuerza de trabajo en los centros mineros.

A primera vista, la moneda no expresa una violencia en la incursión que ella hace en los
Ayllus. Tener más o menos moneda, no tiene sentido. El haber, es todavía el ser del Ayllu,
esto es lo que supone poseer un universo mental propio al Ayllu, pero allá donde la moneda
perfora con violencia y empuja a los ind ividuos a deshacerse de sus tierras y bienes es,
cuando ella engendra automáticamente el aumento del número de "necesidades".

El primer efecto de ilusión en el Ayllu, es que con la moneda todo puede ser adquirido,
entonces surge la necesidad primera, de procurarse el objeto- moneda. Si el objetivo, para el
individuo, es de tener mucho dinero, él buscará vender al máximo y producir un máximo
de objetos baladí, que corresponden a necesidades que él ignora; al mismo tiempo él
venderá al máximo para obtener nuevos objetos baladi- cosas, introducidos por comerciantes
venidos de afuera. Es decir, un afuera separado del universo Ayllu.

Lo propio de la introducción de la moneda en el Ayllu es de crear vecindades cercanas y


extranjeras, puesto que los verdaderos vecinos o parejas del Ayllu, con los cuales el
individuo comparte un universo cotidiano, se refieren a un otro universo que atañe a aquel
de la moneda. El Ayllu, como universo de lo común en sus relaciones, pasa
inevitablemente por la moneda. Así, la participación a los trabajos colectivos puede ser
reemplazada por un individuo de afuera teniendo el estatus de asalariado, estatus que
plantea un problema al nivel del funcionamiento como conjunto.

Con la introducción de la moneda, el Ayllu deviene una economía de subsistencia.


Entendemos por economía de subsistencia, algo que no es una economía de soledad
(orfandad) ni de pobreza, es más bien una economía de necesidad cada vez más inhumana.
Con la moneda, son los individuos que abandonan el Ayllu, se convierten en asalariados,
en las minas, emigran a las ciudades. En ciertos 'barrios de las ciudades, miles de
pequeños comerciantes se proliferan, vendiendo cosas ínfimas al detalle. El individuo
alienado deviene comerciante.

La moneda des-estructura al Ayllu. La moneda (todavía no el capital) permite el aumento


indefinido del volumen de la sociedad, en la cual, el individuo del Ayllu, tiene como
destino, el de deambular sin ninguna referencia política o ideología precisa. Con la
comunidad de parentesco en el Ayllu, el individuo tiene un lugar de referencia en espacio,
relaciones ínter- individuales, y una identidad. El está socializado por el Ayllu. Su espacio
es estructurado, su relación al territorio está marcada.

Con la des-estructuración del Ayllu, el individuo pierde sus referentes, el mundo deviene un
espacio ilimitado, inmenso. El hombre en la nueva estructura se ve perdido. Todo lo que él
consume, adquiere con la moneda le es extranjero; nuevas necesidades son creadas, y que no
hacen más que hundirle con más fuerza en esta etapa de orfandad (soledad) y en esta
economía de subsistencia.

El hombre deviene así, el verdadero "salvaje" imaginado por aquellos que presentan las
sociedades "primitivas", como una economía de subsistencia. La destotalización operada
por la lengua, por la violencia física, por la moneda, permitirán la transformación y la
integración de múltiples comunidades concretas en una sociedad indefinida, vacía en su
interioridad, las pocas relaciones cotidianas, que expresan aún lo propio del Ayllu, son
mínimas. Quedando así, y al mismo tiempo; las relaciones humanas, se transforman en
relaciones de papeles o de moneda, el sentido de la comunidad, como un saber-hacer se ve
privado de lo que tenia de inteligencia en la organización del trabajo y el funcionamiento
de la comunidad. Los hombres se convierten en mendigos permanentes, lo que hace que se
pierdan iniciativas en las comunidades; por eso se puede ver "campesinos" siempre
solicitando ayuda para realizar cualquier pequeño trabajo.

Está claro, que las funciones de la moneda no son solamente aquellas que permiten la
constitución de "comunidades" más grandes, difusas, indefinidas, pero también la
constitución de poderes, de todo orden, que le son asociados; la instauración de estructuras
jerárquicas basadas sobre la cantidad de dinero. Estas estructuras se erigen en el Ayllu
desestructurando los poderes locales y arrastrando a los otros. Ellas tienen como efecto la
ruptura de la relación de reciprocidad, de cooperación, de solidaridad en todas las
comunid ades. Estas estructuras engendran oposiciones en todo orden: partidos políticos,
sindicatos, sectas religiosas, etc.

Al nivel de las relaciones cotidianas hay rupturas entre aquellos que participan del Ayllu y
aquellos que están en el universo del mercado, oposición entre aquellos que consumen
poco y aquellos que consumen demasiado, ruptura entre aquellos que producen para ellos
mismos y aquellos que producen para otros. La ruptura se instala como ruptura entre
explotados y explotadores.
2. 2. ¿Qué Bolivia es posible y deseable?

Javier Medina

Nuestros recursos

Variedad y biodiversidad

Desde el punto de vista del territorio y de los recursos naturales, el dato básico es la
biodiversidad del espacio boliviano; la cantidad increíble de ecosistemas y microclimas que
se encadenan verticalmente. Este hecho natural trae consigo variedad.Vale decir que
Riqueza, en un espacio como éste, sólo es posible como cultivo de la variedad y
”desarrollo” como facilitación del acceso a la diversidad. Cuando nos empeñamos en lo
contrario en el fomento del monocultivo, como en los proyectos productivos del
Desarrollismo, lo que conseguimos es pobreza y escasez. Más de la mitad del territorio
boliviano lo constituyen los bosques de tierras bajas. Estos bosques están ya certificados;
pero no sólo la floresta maderable debe estar en nuestra mira sino toda la bioquímica del
bosque y su ecología que es aún más interesante. Aquí está la nueva frontera que tenemos
que criar con las tecnologías de punta.

Tener dos civilizaciones complementarias

Desde el punto de vista de la población, la potencialidad está en que tenemos dos


civilizaciones: una animista y otra monoteísta e interfases de sistema entre ambas, que
coexisten y se han articulado más por ósmosis que por una voluntad de diálogo de la
civilización dominante. Ahora bien, de esta suerte de tolerancia pasiva mutua,
filosóficamente hablando, y de agresión activa, desarrollistamente hablando,
debemos pasar a una coexistencia interactiva y dinámica: a una convivencia civilizada. Y
ésta es una potencialidad increíble que puesta en acto proveerá del know how de cómo,
con esta gente y en este espacio, podemos crear abundancia para que todos tengamos
calidad de vida.

Tener los dos Principios económicos: el de Intercambio y el de Reciprocidad

En lo que atañe a economía, nuestra potencialidad estriba en que, como fruto de lo anterior,
tenemos los dos Principios económicos diferentes y contrapuestos: el
Intercambio y la Reciprocidad, que son la cantera a partir de la cual la humanidad
reconstruirá la esfera ecológica y la esfera vernácula que precisa una ciencia económica
a la altura de los conocimientos actuales que posee la humanidad, para sacarla de la crisis
de exclusión, en el Norte, y de pobreza, en el Sur, y que son, paradójicamente, sus
condiciones de posibilidad, por otro lado. El aporte boliviano, en propio beneficio
y como contribución a la humanidad, consistiría, primero, en reconocer
públicamente que tenemos estos dos Principios económicos y dejemos de autoengañarnos
con rodeos que no llevan a ningún lado, teorizando monístamente acerca del ”Sector
informal”, como los seguidores de Hernando de Soto. Luego, analizar cómo están
funcionando de facto ambos Principios; tercero, averiguar cómo operan sus interfases
de sistema; cuarto, cómo diseñamos la complementariedad de ambos Principios
económicos en los Municipios, como política pública. Es decir, cómo creamos
territorialidades para la primacía de uno u otro Principio económico, según nuestras
conveniencias. Esto menta el concepto de Municipio multicultural.

Esta tarea es la única salida inteligente a las graves tentaciones de la inercia y el derroche
improductivo de recursos de los que quieren implementar “proyectos productivos
para la exportación”. Es más, es el gran aporte que podría hacer una “ciencia económica
boliviana” a esa “nueva era” que ya ha comenzado y que Jeremy Rifkin llama del “post-
mercado”. La noción de postmercado va ligada al reconocimiento público del Sector
comunitario, como Tercero incluido, entre el Sector público que se achica y el Sector
privado que produce, en el Norte, desempleo estructural debido a la automatización de la
producción y, en Bolivia, no empleo debido a la incapacidad que hasta ahora ha mostrado
nuestro Sector privado. Su prueba de fuego se ha abierto con la Ley de Preferencias
Arancelarias Andinas, ATPA, que ha aprobado el Congreso de los Estados Unidos el 6 de
agosto del 2002. Pero, ojo. Los que ayer nomás se llenaban la boca con la palabra
“Competitividad”, hoy se están atragantando con la búsqueda de “cupos” porque
sospechan que el Sector privado boliviano puede fallar. En vez de maniobrar, habría que
dar facilidades a los “informales”: a los productores y sincerarse, económicamente, de una
buena vez.

Así, pues, tenemos que pensar, al mismo tiempo, el Mercado y el más allá del Mercado; así
como el Estado y el más allá del Estado. Con otras palabras, hay que hacer funcionar la
lógica del Tercero incluido, las lógicas modales para zafarnos de los reduccionismos
excluyentes entre esos dos extremos fatídicos: o la idolatría del Estado o la idolatría del
Mercado. Es una buena nueva saber que hay un Tercer sector: el comunitario, en el que
Bolivia tiene obvias ventajas competitivas frente a cualquier otro país. Es hora de
introducirlo en una Const itución Política del Estado intercultural.

Estas racionalidades nos van a permitir encausar correctamente la necesidad de valores que
sentimos y que se expresan en propuestas afectivas y sentimentales, en el buen y noble
sentido de la palabra, pero inocuas: los discursos acerca de las ”Economías de solidaridad”,
las ”Economías campesinas” etc. que no son otra cosa que Economía de Intercambio más
sentimentalismo. El Principio económico del Intercambio produce inexorablemente la
cosificación de todo lo que toca; le quita el ajayu al producto de la labor creadora del ser
humano. Por tanto, produce desvalorización, individualismo, ruptura de los vínculos
sociales, exclusión. Es decir, aniquila los valores sin los cuales, por otro lado, no es
pensable lo humano. Sobre ello no debiera haber equívoco. También produce, como
sabemos, bienes materiales en serie, riqueza, abundancia de objetos etc. El Principio
económico del Intercambio es cuantitativo, por diseño.

Por el contrario, el Principio económico de la Reciprocidad, por diseño, es cualitativo y lo


que produce son los valores humanos, suscita socialidad, crea vínculos comunitarios; en
una palabra: produce calidad de vida. Revueltos, estos dos Principios son incompatibles;
por eso es que las dizque “Economías de solidaridad” son más bien un síntoma de la
necesidad de valores que sienten los hombres de finales de siglo XX, más que una
respuesta viable y seria. La solución va por aplicar la lógica de la complementariedad de
opuestos en territorialidades bien definidas. Este desafío que tiene planteada la humanidad,
si en algún lugar es posible implementarla ya, es en la Bolivia municipal de hoy.

La Participación popular ha tendido la cama para estas bodas. Los actores están
nombrados, la cancha está rayada, los recursos están ahí; sabemos que no es perfecta,
sabemos que es perfectible, sabemos que se puede modificar, por retroalimentación, de lo
étnico y lo ecológico. Pero no desechemos la Participación popular y la Municipalización,
nihilistamente, por el solo hecho de que no estamos, ahora, en
una arcadia municipal. No hay milagros; hay procesos.

Tener una Tecnología simbólica

Desde el punto de vista tecnológico, las civilizaciones amerindias han creado una
tecnología simbólica, que no tiene Occidente, que le permite, justamente, interactuar con
la naturaleza entendida como un ser vivo e inteligente. El Occidente cristiano, al partir
de otro supuesto, no tuvo necesidad de desarrollar esta tecnología que hoy precisa
reinventar la humanidad para construir la Casa común planetaria.

Cómo funciona la tecnología simbólica?. Al ser una tecnología holista, amarra la


complejidad de una manera muy pragmática. De acuerdo a Jan van Kessel sus
características son las siguientes: Es un estímulo psicológico. Las ceremonias del ritual de
producción dan seguridad y optimismo al hombre andino, abrumado por un entorno
incierto, azaroso, complejo, probalístico, expuesto a las inclemencias, incertidumbres y
riesgos de un ecosistema que tiende a los extremos con facilidad: sequía o inundación,
abundancia o carestía, etc. Es un controlador de la experimentación técnica. Puesto que no
puede correr el riesgo de equivocarse, como cuando se experimenta en un laboratorio, la
tecnología simbólica reduce el margen de riesgo de los experimentos a proporciones
socialmente aceptables, contribuyendo de este modo a la defensa necesaria contra la posible
turbulencia y destrucción que trae consigo cualquier experimento técnico. Van der Ploeg
sostiene que esta tecnología funciona como un conjunto necesario de símbolos que guían al
experimentador en un mundo probabilístico, incierto y complejo.

Es un integrador de valores. La explicación básica de la funcionalidad de la tecnología


simbólica proviene, según van Kessel, de la sensibilidad del hombre andino respecto de los
valores no materiales de la existencia: el misterio de la vida, la relación que existe entre su
propia existencia y su entorno natural. De este modo, el ciclo agrícola y el ciclo vital son
concebidos como una unidad. Se comprende el sentido de uno, si se entiende el otro y
viceversa. Y la ritualidad es, justamente, lo que garantiza que este sistema cognitivo
multirelacional pueda operar. Podríamos llamar con Varela, Thompson y Rosch y este
sistema de pensamiento de ”cognición incorporada”: embodied mind.

Es un marco y un método de observación. La tecnología simbólica provee de un método


contemplativo de observación y de sistematización de lo observado, así como de una
metodología adecuada de comunicación y aplicación. La observación contemplativa es una
tecnología muy eficiente para captar la interconexión de la complejidad de lo real.
Es una protectora contra el reduccionismo. Por ello mismo, la tecnología simbólica procura
un nexo, entre los valores económicos, ecológicos, éticos, políticos, etc.
No cabe para la tecnología andina una racionalidad puramente económica, autónoma,
descontrolada, liberada de normas éticas y religiosas.

Es una tecnología que acumula y reproduce más tecnología. La tecnología simbólica


representa el principal sis tema mnemotécnico y cumple la misma función que una
biblioteca en las sociedades occidentales. El sistema andino; es decir, la codificación de la
tecnología en formas rituales, probablemente sea menos exacto y preciso que el registro
escrito y guardado en bibliotecas, incluso puede que esté más expuesto al olvido y a la
pérdida de información, pero es más flexible, entendible, adecuado y reajustable a los
desarrollos locales, porque ofrece un recurso estratégico particular: está centrado en la
comunidad local, en el detalle, en la máxima variación posible.

Estímulo a la responsabilidad. Los rituales de producción interiorizan compromisos,


estimulando la corresponsabilidad para, de este modo, garantizar la cohesión del sistema
social, estableciendo límites y normas técnicas que son, a su vez, normas sociales,
religiosas, éticas y políticas.

Finalmente, por todo ello, justamente, es una garantía para el equilibrio ecológico del
sistema global. El ritual de pago a la tierra, por ejemplo, recuerda la obligació n, la
necesidad de guardar los equilibrios necesarios que acompañan el trabajo agrícola
y pastoril. Su intención es alimentar el biofeedback: devolver a la tierra lo que se
ha extraído de ella, devolver lo que ella ha regalado para que todo esté bien cumplido
en términos de tinku. Esto se refiere a la ley básica del buen equilibrio en el intercambio
de las tres comunidades del Ayllu cósmico.

Una concepción sinérgica del trabajo y la competitividad

El concepto indígena de trabajo tiene como fondo una cosmo visión animista. El hombre se
sabe parte de un cosmos vivo, sagrado, animado y de una tierra madre. El cosmos es entero,
no quebrado por la oposición materia-espíritu; ni desintegrado por la contradicción
religión-tecnología y del divorcio entre ética y economía; no partido por la separación del
hombre respecto de su trabajo y por la enajenación del producto de
su trabajo.

Trabajar, por tanto, significa, como dicen Grillo y Rengifo, ”criar la vida del mundo”, pero
vida en su sentido más pleno, como vida biológica, humana y espiritual. Como acota van
Kessel, el trabajo en los Andes es una actividad litúrgica y hasta sacramental. De ahí
dimana su sentido, así como de su ejecución comunitaria en diálogo e intercambio con la
comunidad de la sallq´a y la comunidad de las wakas. Por lo mismo, el trabajo es
contemplación, meditación y celebración y la chacra deviene, por ello mismo, en el
principal lugar de culto del hombre andino y, por lo tanto, en el punto de encuentro, diálogo
e intercambio de las tres comunidades que componen el Ayllu cósmico andino.

Por este carácter animista, el trabajo, en los Andes, no lleva a violentar el medio natural y
menos aún al trabajador; no conduce a un trato irrespetuoso de la vida, ni a abuso, maltrato
o agotamiento de la tierra, ni a la sobreexplotación de su fertilidad y riqueza, ni al
despilfarro y al consumismo. Produce frugalidad.
Así, pues, desde el punto de vista del trabajo, un activo importante que tenemos consiste en
la manera cómo los amerindios han ligado trabajo con juego, a través de la ritualidad, que
azuza una competitividad no antagónica sino de sinergia, sumamente importante, como
insumo, para la construcción de una civilización cualitativa.

El actual proceso de descentralización y municipalización

Desde el punto de vista administrativo, tenemos como activo importante el proceso de


descentralización y municipalización en curso. Ahora bien, la municipalización en este
momento se halla en un momento de indeterminación. La podemos entender y consolidar
hacia atrás, en la lógica de los compartimentos estancos del Estado Nacional; pero
también la podemos entender y consolidar hacia delante, en la lógica de la Red, de las
mancomunidades discontínuas o contíguas, que prefigura la ecumene del próximo siglo. De
nosotros depende si cuaja la función onda: red, o la función partícula: compartimento
estanco de la sección de provincia.

El saber botánico y bioquímico de las etnias de la Amazonia

Este saber es tanto más intrigante cuanto que nos está enfrentando con el origen mismo del
saber humano y su asombrosa relación con la estructura del ADN. Ilustraré lo dicho con el
ejemplo de la composición química de la Ayahuasca que nos reportara Jeremy Narby.

Esta mixtura alucinógena es una combinación de dos plantas. La primera contiene una
hormona que el cerebro humano produce naturalmente, la dimetiltriptamina, que, sin
embargo, es inactiva por vía oral, puesto que está inhibida por una enzima del aparato
digestivo, la monoamino oxidasa. Ahora bien, la segunda planta de la mixtura contiene,
precisamente, varias substancias que protegen la hormona del asalto de esa enzima. Esto ha
hecho decir a Richard Evans Schultes, el etnobotánico más renombrado del siglo XX: ”Uno
se pregunta cómo pueblos de sociedades primitivas, sin conocimiento ni de química ni de
psicología, han logrado encontrar una solución a la activación de un alcaloide vía
un inhibidor de monoamino oxidosa. ¿Por pura experimentación? Tal vez no. Los
ejemplos son demasiado numerosos y podrían aún ser más con investigaciones
suplementarias”.

He aquí, pues, como dice Narby, gente, sin microscopio electrónico ni formación
bioquímica, que selecciona, entre las aproximadamente ochenta mil especies
amazónicas de plantas superiores, hojas de un arbusto que contiene una hormona
cerebral precisa, las cuales combina con una substancia bloquedora de la acción de una
encima precisa del aparato digestivo, encontrada en un bejuco, con el fin de modificar
deliberadamente su estado de conciencia. Y todo esto desde hace aproximadamente cinco
mil años.

Cuando se les pregunta cómo saben esas cosas, responden con palabras que una mentalidad
racionalista y cristiana no puede entender: ”Es bebiendo ayahuasca como uno
aprende estas cosas”, ”Las plantas te enseñan”. Ahí la dejaremos.
Pues bien, todas las grandes civilizaciones que conocemos se configuraron y recibieron una
tonalidad específica a partir de un centro ritual donde se celebran Misterios que les
enseñaban; mejor dicho, les hacían sentir, a través de ritos iniciáticos de pasaje, cuál sea su
lugar en el cosmos. Este saber esotérico, por ejemplo, es perceptible en la serenidad y
mesura que irradian las esculturas griegas que han llegado hasta nosotros. Esa fue la
misión, precisamente, del santuario de Eleusis, en la Atenas que inventó la democracia, al
que peregrinaron todos los griegos por lo menos una vez en su vida. Pues bien, no hay
civilización sin un santuario donde los hombres se enteren, de verdad, de qué va la película
de esta vida.

Pues bien, la Amazonia, el Chaco y los Andes, son el santuario donde los hombres de la
civilización de la Casa común planetaria se volverán a reconectar con su animalidad,
con su vegetalidad, con su astralidad: en fin, con todo el proceso evolutivo de la especie
que llega hasta nosotros a travé s del código genético. De este reencuentro con la filogenia
de nuestro ser, brotará una nueva ética cósmica. La drogodependencia de las sociedades
modernas es no sólo la señal de la crisis de la civilización occidental, sino también es señal
de una búsqueda instintiva, cuyas respuestas, entendidas en cómo acceder a ellas, sin caer
en la locura o la muerte, la guardan nuestros chamanes.

El modelo lógico amerindio coincide y es funcional al nuevo paradigma científico-técnico

El paradigma lógico andino nos liga, al mismo tiempo, con nuestras raíces y con el nuevo
paradigma científico-técnico. Una condición excepcionalmente auspiciosa, como podemos
imaginarnos, para pensar nuestro desarrollo local en el contexto de la
globalización.

El paradigma lógico andino es un sistema formado por dos opuestos, mutuamente


excluyentes, en el que la actualización de uno de los polos implica la potencialización del
otro polo. Dichos opuestos complementarios se unifican en un paradójico tercer término
que incluye contradictoriamente a los dos, por igual y, a saber, simultáneamente. Esto es
posible porque cada término de la polaridad potencializa a su opuesto y al enfrentarse
ambos, estando igualados en un tenso equilibrio de fuerzas contrapuestas, los dos
términos de la polaridad terminan diseñando un estado intermedio entre acto y potencia,
entre ser y no ser; es decir, una tercera posibilidad que niega y afirma a la vez los dos polos
que le constituyen.

Cada uno de los opuestos prevalece alternadamente, por turno, mita, sobre el otro, en el
ciclo del Kuti. Al comienzo predomina; es decir, se actualiza, el primer término, mientras el
segundo término de la polaridad se halla subordinado; es decir, en estado potencial. Luego,
los dos términos se enfrentan diseñando un empate, donde ninguno predomina sobre el otro
o, dicho de otro modo, donde ambos predominan simultáneamente. Por último, se impone
el segundo término que se actualiza a expensas de la potencialización y la subordinación
del primero y, así, indefinidamente. El Tinku es la contraposición equilibrada de fuerzas
antagónicas que conforman la unidad contradictoria del Todo.

Pues bien, este modelo lógico es el que precisa, para ser ejecutada, la recomendación
del Club de Roma de poner ”límites de crecimiento”, o la Carta de la Tierra que la
humanidad va discutir en Rio+10: “buscar el equilibrio y la homeostasis global del sistema
Tierra”. Pero es más, este modelo lógico es similar al modelo lógico desarrollado por
Stephan Lupasco. Este autor, en efecto, plantea que todo sistema energético se basa
en la contradicción entre dos principios mutuamente excluyentes: el Orden, negentropía, y
el Caos, entropía. Ahora bien, resulta que en los sistemas físicos macroscópicos (teoría de
la relatividad) predomina el Principio de entropía. En los sistemas biológicos (el cosmos
newtoniano) prevalece el Principio de negentropía y en los sistemas subatómicos (mecánica
cuántica) y también en los sistemas psíquicos (noosfera) predominan los dos Principios
simultáneamente, en una unidad contradictoria virtual.

Por ejemplo, en el núcleo del átomo hay dos fuerzas antagónicas y contradictorias: las
fuerzas atractivas, negentropía, que forman la unidad del átomo y las fuerzas separadoras,
entropía, que impiden que las partículas se aglutinen y desaparezcan en un solo punto. El
núcleo atómico existe gracias al equilibrio simétrico entre dos polaridades antagónicas que
se complementan y hallan su unidad en un tercer estado que incluye a los opuestos de
manera contradictoria. Así, pues, el núcleo atómico se constituye por la tensión de
equilibrio simétrico entre actualización y potencialización; por tanto, nos las habemos con
un estado intermedio, por así decir, entre atracción y repulsión, integración y disgregación,
conjunción y disyunción.

Otro ejemp lo de esta lógica lo ofrece la dualidad Onda-Partícula de la mecánica cuántica, a


la que ya nos referimos anteriormente. La acción de medir la velocidad de una partícula
potencializa la posibilidad de medir su posición; es lo que se llama el Principio de
Indeterminación de Heisenberg. El hecho de actualizar su condición de partícula
potencializa su condición de onda, pues la partícula es, a la vez, onda y partícula; es decir,
un tenso equilibrio contradictorio entre dos posibilidades mutuamente excluyentes que
trasciende el Principio aristotélico del Tercer excluido.

En esta manera de ver las cosas, el desarrollo se da a través de los opuestos (en nuestro
caso: localmente: modernidad- indianidad; globalmente: Norte-Sur) a través de la
oscilación de un extremo a otro. La psique, como la biosfera y los cuerpos sociales, son
sistemas que se autoregulan, aunque los hombres lo ignoren o, incluso, a pesar de que
postulen ideológicamente lo contrario, como sucede con los desarrollistas del Occidente
moderno. No hay equilibrio, homeostasis, ni sistema alguno de autoregulación, sin que se
rija por la Ley de complementariedad de contrarios; se lo sepa o no. Mejor es no ser
ignorante.

La ritualidad como recurso para volver a conectar al Hombre con la esfera de


sentido: condición para hablar de calidad de vida

El sentido y la calidad de vida provienen de la religación del Hombre con la esfera


invisible, con el Orden implicado que soporta la realidad. La función partícula, exotérica,
de la tradición judeo-cristiana, puso las bases para la andadura de civilización que ahora
fenece y que se caracteriza por separar lo visible de lo invisible y mantener una débil
conexión, basada en la exclusión del cuerpo y la maximización del ”espíritu”, para lograr
”estados alterados de conciencia” o ”uniones místicas”, a través de un sistema litúrgico que
cada vez se seculariza más, hasta provocar una fragmentación y atomización planetaria de
los individuos que ya no saben reconocer la complejidad de los tiempos y espacios y los
procedimientos para morarlos conscientemente. Todo es lo mismo.

Pero he aquí que el hambre de lo sagrado no puede morir porque está inscrito en el ADN de
las células: la pulsión expansiva de la vida más allá de la frecuencia de onda
habitual en la que cada especie se estabiliza momentáneamente. Por eso es que hay
evolución de las especies, saltos cuánticos genéticos y astrofísicos; todo ésto se da por
la necesidad de trascender que tiene la vida, molecularmente entendida.

Ahora bien, como esto no se puede reprimir, los individuos atomizados y aislados de la
modernidad, buscan en las drogas químicas esa experiencia de lo sagrado, que el
cristianismo ya no puede vehiculizar, pero, por ello mismo, la buscan salvajemente, sin
reglas, etiquetas, tiempos, lugares; es decir, sin ritualidad, sin iniciación, sin preparación
y sin acompañamiento. Esta es la realidad y el significado de la toxicomanía y
drogodependencia contemporáneas.

Pues bien, el Monoteismo precisa, ahora, injertarse en el Animismo para que la


humanidad del próximo milenio pueda tener un aparato, un dispositivo, de sentido que
haga justicia, por un lado, a la maduración cognitiva de la humanidad y, por otro lado,
pueda producir sentido y calidad de vida en la civilización de la Casa común planetaria.

Nuestras oportunidades

Una sociedad convivial

Históricamente, el concepto de “cantidad” ha sobredeterminado a las sociedades


industriales; el de “calidad” a las sociedades vernáculas, como la amerindia. Ahora bien, la
República de Bolivia no ha llegado a ser una sociedad industrial; hay fábricas, cierto, pero
un par de golondrinas no hacen verano. En el deseo, empero, sí que es el modelo sobre el
cual se ha construido el imaginario de la Primera República. El modelo industrial, en un
país sin fábricas, es el generador del gran simulacro que somos. Vivimos en la
inautenticidad.

Ahora bien, desde el punto de vista de este análisis, tanto calidad como cantidad, tienen
como criterio operativo el concepto de herramienta. Las sociedades industriales trabajaron
sobre la hipótesis de que la herramienta podría sustituir al esclavo, retomando así la vieja
discusión aristotélica. En este desempeño la herramienta se convierte en “máquina -
herramienta” y destila, a través de la producción en serie, lo que se va a llamar la
productividad industrial, azuzada por el dogma desarrollista del crecimiento indefinido.

Terminada la revolución industrial sabemos que la máquina herramienta se ha


metamorfoseado en un implacable productor de servidumbre para el obrero y de
intoxicación para el consumidor. El señorío del hombre sobre la herramienta, como dice
Illich, fue reemplazado por el señorío de la herramienta sobre el hombre.

Por eso es que una “sociedad de calidad de vida” sólo se puede definir a partir de la
relación del hombre con la herramienta y su entorno.
Illich llama, a este tipo de herramienta, convivial y dice que para que sea tal tiene
que responder a tres requerimientos: (1) tiene que generar eficiencia sin degradar la
autonomía de las personas; (2) no debe producir ni amos ni esclavos; (3) debe
expandir el radio de acción de las personas.

Esto quiere decir que el hombre precisa de una herramienta con la cual trabajar y no
de instrumentos que trabajen en su lugar. Precisa de una tecnología que saque el mejor
partido de la energía y de la imaginación personales, no de una tecnología que le
avasalle y le programe. La escala óptima es aquella que permite al ser humano conjugar
eficacia y autonomía. La relación industrial entraña una suerte de reflejo condicionado a
mensajes emitidos por seres a quienes jamás se conocerá: abstracción y anonimidad; la
relación convivial, en cambio, implica interacción de personas que participan en la
creación de la vida social: personalización y localización.

La convivialidad es producida en el seno de una comunidad equipada con herramientas


eficaces. Illich llama convivial a aquella sociedad en la que la herramienta moderna está al
servicio de la persona integrada a la colectividad y no al servicio de un cuerpo de
especialistas. Convivial es la sociedad en la que el hombre controla la herramienta.

Una Bolivia convivial está más a la mano de los “pobres”: depende más de nosotros, que
una Bolivia industrial que depende de la inversión externa, seguridad jurídica para los
inversores, reglas de juego claras, respetadas por los tres Poderes del Estado, nfraestructura
vial, mano de obra calificada, menos corrupción gubernamental,
etc.

Una sociedad de frugalidad y calidad de vida

La inmensa mayoría de Bolivia: la Bolivia rural, periurbana, amerindia: los “pobres”, no


van a poder acceder nunca a los ritmos y tasas de consumo de las sociedades
industrializadas del Norte. Otras Bolivias, sí, como rebalse de la interacción de las elites
occidentales con la globalización, pero no tanto por la dinámica propia de nuestro aparato
productivo que apenas si rebasa el nivel de ser exportador de materias primas, con
aranceles preferenciales. Estos son los hechos.

Por lo que a nosotros atañe: una Estrategia de reducción de pobreza, debiera ser pragmática.
Si materialmente es imposible que el Sur pueda acceder a los mismos niveles de consumo
del Norte, entonces no debiéramos, en nuestras políticas públicas, aspirar a ello. Toda la
clave para salir del tercermundismo está en no aspirar, no desear, lo que no se va a poder
conseguir, máxime si encima ello, además de no posible, no es deseable; no aumenta la
calidad de vida.

Lo inteligente y lo sensato, en cualquier circunstancia, es aspirar a calidad de vida.


Ahora bien, resulta que a lo único que podemos aspirar, pragmáticamente hablando, es a
calidad de vida. En verdad, lo posible y lo bello es una Bolivia frugal y de calidad de vida y
no una Bolivia industrializada y consumista que, encima, no va a llegar nunca a ser una
realidad y que la estamos persiguiendo desde 1825. ¿No es éste un tiempo suficiente para
verificar una apuesta?

Una sociedad de alta sinergia

No debe haber una sociedad en la actualidad que disponga de un sistema tan sofisticado e
institucionalizado de circulación de información, energía, de bienes, servicios, dones, ayuda
mutua en base a reciprocidad: “capital social”, como las sociedades amerindias.

El Ayni, la ayuda mutua, ha permitido que esta civilización no sucumba ante la aplanadora
de la modernidad que ha traído consigo el individualismo, la atomización de la vida, la
primacía de la abstracción, la erosión de los valores humanos y la fragmentación de la
realidad. ElAyni es la ingeniería ritual del modelo de Red, con el que se tendrá que
construir el proyecto de la Casa Común Planetaria. Para dar una idea de la complejidad del
Ayni, habría que señalar cómo este sistema extiende su sistema de prestaciones recíprocas
más allá del Ayllu visible, de acuerdo al cosmos newtoniano, a losAyllus del Orden
implicado: el de las wakas y la sallq’a.

Ahora bien, lo que causa perplejidad es ver cómo teniendo semejante recurso, a la Bolivia
occidental no se le ha ocurrido usarlo para incrementar su riqueza. El Ayni debe aparecer
en los Planes de Desarrollo Municipales y en los Planes Anuales Operativos. Esto s
nstrumentos de gestión deben incluir elAyni, no sólo como el “aporte local” de los
pobrecitos beneficiarios que no tienen dinero. El Ayni tiene que romperle la hegemonía al
Dinero de ser considerado como el único medio capaz de mover al mundo. La crisis
argentina que de la noche a la mañana ha sumido en la pobreza a la mitad de su población
está redescubriendo el Ayni: en este momento, diez millones de argentinos intercambian
bienes, dones y servicios, sin la mediación del dinero del Banco Central y las leyes del
mercado. La Argentina del tango Cambalache está empezando a cantar los huayños
norpotosinos de Luzmila Carpio.

El Ayni es lo que están buscando los economistas de vanguardia del Norte para lo que, en
su búsqueda, llaman la “Economía ecológica” y la “Economía vernácula”. El proyecto Casa
Común Planetaria no será más que un deseo hasta que el Ayni no se convierta, primero, en
una política pública y segundo, empiece a equilibrar la posición del
Dinero en un Presupuesto.

De la noche a la mañana podr íamos, por lo bajo, duplicar nuestros recursos disponibles, si
involucráramos el Ayni en las finanzas públicas. Ahora bien, para que esto no sea un saludo
a la bandera, es preciso que las soluciones, vía Ayni, salgan de la iniciativa de la misma
gente; es decir, que se hayan generado desde abajo, en los talleres de planificación
participativa.

Los bolivianos tenemos que quitarnos las anteojeras del industrialismo; tenemos que
aprender a ver los otros recursos que tenemos, provenientes de la civilización amerindia;
tenemos que cultivar el orgullo de lo propio; dejar el complejo de inferioridad; tenemos que
cultivar la autoestima colectiva. La gran riqueza de Bolivia es el Ayni, su pobreza es el
dinero.
Una sociedad de baja entropía

Nicholas Georgescu-Roege n, desde las teorías del caos y la termodinámica, ha mostrado la


miopía suicida de la Economía de intercambio del industrialismo. Desde la perspectiva de
la Ley de entropía, el bendito crecimiento, en realidad, resulta una ilusión. En efecto, en la
medida que se produce más, en menos tiempo, mayor es la cantidad de energía no
reinvertible que se produce y, en consecuencia, menor es la cantidad de energía isponible.
Eso significa que a mayor crecimiento económico, mayor decrecimiento de la naturaleza.

Desde la Segunda ley de la termodinámica, la Economía de intercambio del industrialismo


avanza en forma de count down. Mientras más cree que avanza, más retrocede en los
hechos, globalmente. Mientras menos gastamos, más ganamos. De ahí que Georgescu-
Roegen proponga estimular economías de bajos niveles entrópicos o, como dice el, de
“economías sintrópicas”. Pues bien, eso es lo que son, justamente, las Economías de
reciprocidad.

Ahora bien, la tecnología andina, en especial, y las tecnologías indígenas, en general, son
tecnologías sintrópicas; es decir, intensivas en mano de obra y extremadamente eficientes
en el uso de la energía. Algo que necesita a gritos la Economía de intercambio que es
intensiva en capital y en gasto entrópico de energía.
V.M. Toledo ha de mostrado cómo, para producir 2 outputs de energía, la agricultura
americana necesita meter 9 inputs de petróleo, como abonos, pesticidas, diesel, etc. versus 4
inputs y 15 outputs, en la agricultura de policultivos de los Tsembaya de Nueva Guinea,
considerados los agricultores más primitivos del mundo, desde el punto de vista del
industrialismo, pero losmás eficaces desde el punto de vista de la eficiencia energética.

Pero, además, es que las tecnologías amerindias, por ello mismo, son integrales.
Por ejemplo, una andenería está, al mismo tiempo, creando suelo agrícola, donde no lo
había, dado el escaso humus en pendiente; está regulando el clima (la única tecnología
eficaz contra heladas y granizos) gracias al efecto de turbulencia que produce el
escalonamiento de la pendiente y gracias al efecto térmico que produce la piedra de la
andenería, al conservar el calor del día durante la noche. El sistema de canales no sólo
regula el uso del agua, sin que la almacena en los acuíferos del cerro, mantiene llenos los
manantiales y los dosifica y distribuye en todo el espacio cultivado en la ladera.

Otro tanto se puede detallar de las otras tecnologías amerindias, insuperables en el manejo
de energía. Si la Economía es la ciencia del manejo de la escasez para produc ir abundancia,
la tecnología y las economías amerindias son, otra vez, una inagotable fuente de inspiración
para construir la Casa Común Planetaria.

Una Bolivia posible es una que tenga sistemas económicos sintrópicos y no una quimérica
Bolivia industrializada con un sistema económico altamente entrópico.

Una sociedad de equilibrio


Conceptualmente, la sorda lucha y enfrentamiento entre la Bolivia occidental y la Bolivia
amerindia ha sido la pugna por instaurar un modelo de sociedad basado en privilegiar sólo
la variable cuantitativa, extractiva, reduccionistamente economista, versus el modelo de
sociedad amerindio, basado en tener en cuenta todas las variables: de ahí su complejidad y,
al mismo tiempo, basado en buscar su equilibrio: de ahí su homeostasis.

Por esta razón, las sociedades amerindias son básicamente sociedades antidesarrollo.
El desarrollo apuesta al crecimiento exponencial de una sola variable a costa de todo lo
demás.

Los amerindios se han resistido, como han podido, hasta el día de hoy, a este sistema. El
resultado de cinco siglos de pugna desigual, es una suerte de empate trágico: ni funciona
bien el modelo occidental, por eso somos coleros en los indicadores del Desarrollo; ni
funciona bien el modelo amerindio, por lo que éstos se tienen que contentar con resistir.

La Bolivia posible, por tanto, debería consistir en desbloquear ese impasse y facilitar que
los dos sistemas funcionen y dejen de bloquearse mutuamente. Probablemente, si así lo
hiciéramos, en los Municipios más urbanos cobre más fuerza la visión occidental de
crecimiento y en los Municipios más rurales e indígenas se imponga el modelo sistémico de
equilibrio homeostático de la civilización amerindia y de la civilización 4cuántica y
ecológica.

Para tomar estas decisiones ya no hace falta mirar a La Paz. La descentralización y


municipalización están, justamente, para que estas políticas puedan ser tomadas
autónomamente, siguiendo el Principio de subsidiaridad, a esos niveles y de acuerdo al
Principio de Subsunción. Pero, he aquí, que éste no es evidente. Cinco siglos no los vamos
a desmontar en cinco años; pero hay que persistir.

Así, pues, parece más factible una Bolivia de equilibrio que no una quimérica Bolivia
creciendo exponencialmente.

Una sociedad eco-simbiótica con su espacio

En cuanto al espacio ocurre también otro bloqueo conceptual y operativo. Se enfrentan la


visión europea de región, válida para espacios planos, de humus profundo, alta
pluviosidad, poca biodiversidad muy homogéneos, a la que se ha añadido la visión
cartesiana del espacio como una res extensa, inerte, plana, con la visión amerindia del
espacio, entendido como un ser vivo, inteligente, caprichoso, imprevisible y que se expresa
en la metáfora de”el Ayllu como animal”, que tiene las cuatro patas en la tierras bajas, el
estómago en los valles y la cabeza en tierras altas. Dicho conceptualmente, la conocida
estrategia de la ocupación vertical de un máximo de pisos ecológicos, por tanto discontinua,
pero en simbiosis interzonal y no como compartimentos estancos. Mancomunidades
discontinuas.

Volver a tejer ecosimbióticamente el espacio a partir de los Municipios, mediante el


concepto de Mancomunidad, es la estrategia más fácil, barata y a la mano para acceder a la
variedad que ofrece la biodiversidad boliviana. Morirse de hambre y estar desnutrido en
Bolivia, sólo es posible porque el lavado de cerebro ha sido muy profundo, se han
trastocado todos los valores, los propios y los ajenos, y la auto estima está por los suelos.

Propongo, pues, que nos pongamos metas pragmáticas, en vez de desear la quimera que
proponen los proyectos clásicos de promoción económica, desde 1953: que los amerindios
se conviertan en farmers blancos y protestantes, y la alta montaña
tropical se comporte como el medio oeste americano y los llanos amazónicos como la
pampa argentina, porque sólo semejantes ecosistemas podrían soportar esa estrategia
de transformación productiva del agro.

En vez de esa fatamorgana desarrollista propongo algo más obvio y a la mano: que
los amerindios desplieguen todas sus grandes cualidades como criadores de la vida,
expertos en biodiversidad, tejedores de la simbiosis interzonal, de modo que podamos
hacer de nuestra biodiversidad y multiculturalidad el insumo con el que podamos
articularnos a los post- mercados de la globalidad.

La ceguera de nuestras elites económicas estriba en que quieren articularse a la globalidad


industrialmente y, para mayor miopía, en el grado cero del modelo fabril: la
simple exportación de materias primas. Eso está bien; ni modo. Pero hay que darse cuenta
que la demanda de las economías cualitativas y hasta suntuarias de los post- mercados del
Norte apunta a variedad, localidad y renombre: poco de mucho y ya no mucho de poco,
como en la era industrial.

Así, pues, es más fácil tejer nuestra biodiversidad ecosimbióticamente, que llegar a hacer de
este espacio una llanura isotrópica como el medio oeste americano o la pampa
argentina.

Una sociedad de redes y flujos dinámicos

Un peligro latente del proceso de municipalización es entender los 320 municipios como
320 compartimentos estancos. Si se consolida esta manera de entender la municipalización,
se va a acelerar y agudizar la pobreza y se va a incrementar la migración a las ciudades del
eje central. Ahora somos pobres; entonces seremos
tercermundistas de verdad: miserables, hacinados y desraizados.

Pero también podemos entender la municipalización como las unidades básicas


para que la sociedad, no el Estado, recomponga el espacio en nuevas redes y
mancomunidades. Por eso el concep to de Mancomunidad, contigua y discontinua, es
estratégico para la sostenibilidad de la Participación Popular. Es preciso entender el espacio
como un espacio vivo. Para ello, como dijimos, es menester investigar por donde fluyen los
servicios, los bienes, la información, los dones, la energía; con otras palabras, cuáles son
los recorridos, en el tiempo y en el espacio, de nuestras ferias y mercados, los
trajines de la reciprocidad, los santuarios, las fiestas e incluso los eventos deportivos. Es
decir, cuáles son los nucleadores de la socialidad, los generadores de los vínculos y
las conexiones que tejen la sociedad, es decir, nuestros productores y generadores de
humanidad. En esto Bolivia es pródiga; su problema es que el Gobierno no diseña sus
políticas públicas en base a este insumo fundamental. La República de Bolivia no se
construye sobre sus fortalezas sino sobre sus debilidades y carencias.

Una sociedad de democracias locales directas

La dinámica natural de las organizaciones territoriales de base, cultiva una suerte de


Democracia de tipo consejista en el que la Asamblea, los talleres: la interacción cara a cara,
son el corazón del sistema. Pues bien, el florecimiento de este recurso que posee la
sociedad boliviana va a depender grandemente, por un lado, de que el Estado y, por otro,
las Entidades ejecutoras, no intervengan tecnocráticam ente, ora para sacarles nformación
científica, ora para misionar desarrollistamente y bajar la línea,
desvirtuando lo que son en realidad.

¿Qué son en realidad? El crisol de la integridad; el espacio donde emerge la inteligencia


colectiva, donde se garantiza la simbiosis a diferentes niveles de la sociedad, donde se
regula el sistema mediante un control jerárquico descendente y un control democrático
ascendente. Estas Asambleas son el lugar y el momento donde se ejerce la subsunción del
individuo y la pareja en conjuntos cada vez mayores; donde se favorece las organizaciones
paralelas territoriales, funcionales, rituales, etc.

Estas asambleas son el lugar y el momento desde donde se impulsan los círculos virtuosos;
se fractaliza el conocimiento, los saberes locales se interfecundan y complejizan
mutuamente, formando corpus cognitivos eficientes para tomar buenas decisiones. Estas
asambleas son el lugar y el momento desde donde la comunidad pilotea la co-evolución y la
cogestión de la Pacha. Aquí el verbo pilotear es usado en su sentido etimológico, kibernao,
como conducción y gobernancia.

Así, pues, circunscribamos la Democracia representativa y la “forma Partido” para el


manejo del Estado Nación y liberemos los espacios municipales para el florecimiento de las
Democracias participativas locales, sin la ”forma Partido”.
2. 3. Pueblos indígenas y Naciones originarias en el nuevo contexto del sistema
Simón Yampara

Introducción

En Bolivia y Latinoamérica, hay pueblos y naciones sin Estado y Estados sin pueblos, ni naciones,
cuesta evidenciar y reconocer esto, puesto que el chauvinismo estandarizante de "identidades
nacionales" y la unidad en el fondo, "racionaliza y oculta la crisis del Estado-Nación", como sujeto
capaz de hacer real aquella unidad que articularía las demandas y representaría los diversos intereses
que cobija su idea. Crisis disfrazada por los populismos y los desarrollismos... no asumiendo las
diferencias, sino subordinándolas a un Estado, que más que integrar lo que supo fue centralizar (1). En
este proceso ni la práctica democrática -por ese centralismo y hegemonización de grupos
privilegiados "etno-económicos"- parece ser un vehículo adecuado, puesto que emergen nuevos
actores y/o sujetos sociales, como son las "étnias", las regiones, el problema de género (sexos) y las
generaciones, que aún no participan en la estructura del poder político en este proceso democrático;
por eso aparecen con nuevas demandas, como, identificar modelos de sociedad, territorio,
espiritualidad y autogobierno; esas manifestaciones, cada vez abren más el abanico, de lo
meramente plural en pluralista; es decir, "el pluralismo como valor central del sistema
democrático. Así, se reivindica el derecho a la diferencia, los derechos propios y los derechos ajenos"
(2). No sólo para profundizar esto, sino para cotidianizar tanto la democracia, la práctica de los derechos
con identidades diferenciadas, parecen ser los desafíos que nos toca encarar en el futuro inmediato; para
ello como diría Lazarte: "La democracia debe internalizarse en todas las instituciones de la sociedad
civil y de la sociedad política... lo fundamental es asumir que el debate de las ideas significa aceptar la
legitimidad del otro, de sus propuestas; pero no solamente se trata de reconocer el derecho del otro a
discrepar, con respecto a nosotros también podemos equivocarnos" (3). Entonces cómo forjar el
proceso de inter-aprendizaje y alcanzar ese diálogo democrático con los diferentes actores y el
Estado, es decir, en ese diálogo "sur-sur" y el diálogo "norte-sur" (4); sin perder las identidades propias,
en un proceso de globalización del mercado, -como regulador de las relaciones entre los pueblos, las
naciones y las culturas- sin embargo, inversamente al lado de la globalización, el mundo también vive
"un proceso expansivo de fragmentación, a todos los niveles y en todos los planos", que tampoco condice
con la identidad de los Pueblos y las naciones originarias. El problema está entonces en cómo hacer que
tanto la globalización como la fragmentación y la identidad pluralista, puedan ser complementarios en
derechos y, cómo armonizar los diversos intereses. La democracia por si sola no resuelven estos
problemas, nuevamente viene la pregunta. ¿Cómo asumir la democracia y convertirla en un hecho
cotidiano, donde se respeten y practiquen tanto los derechos de los pueblos originarios y los criollos
mestizos?. Es decir, cómo nutrir a la democracia con otros valores, puesto que los valores de un Estado-
Nación "bolivariano", de esencia colonialista, no son suficientes para los pueblos Indígenas y Naciones
Originarias (5), por eso cada vez la demanda de estos pueblos van por territorio con "espiritualidad" y
autogobierno, lo que no debe entenderse como la destrucción del Estado territorial Boliviano, sino
como exigencia de ser parte activa, pero con dignidad y soberanía; en otras palabras, están demandando
participar de los recursos financieros externos e internos, es decir, de los recursos naturales
renovables y no renovables, con soberanía pluralista en tanto pueblos y un nuevo Estado Boliviano
sostenido por la democracia cotidiana, por eso demandan territorio como un fin estratégico; puesto
que, los 500 años de colonización y colonialismo privilegió a sectores oligárquicos ligados a
movimientos transnacionales y el mercado; usufructuaron dichos recursos, muchas veces en desmedro de
la propia sobre vivencia de los pueblos originarios.
De lo que ahora se trata es, cómo entrar y comprender la interioridad de la demanda de los pueblos; por
qué no están conformes con la oferta de las reformas estatales y las medidas (leyes) de ajuste estructural,
como dicen los políticos en función de gobierno; eso nos remite brevemente examinar proyectos y
visiones de vida sostenibles en el tiempo y espacio.
La armonización entre la reproducción de la especie y la producción de alimentos se llama "Qamaña"
(vivir bien). La Qamaña requiere del Ajayu (" Alma espíritu) Qamasa (energía natural). En otras palabras
estamos frente a un mundo o comunidad anímicamente viva, donde lo humano es parte de esa
comunidad y no la más importante. En tanto miembro de esa comunidad viva, cuerpo sistémico con
vida queremos pensar como la parcialidad de la Pachamama y los Pacha-Achachilas, donde el
Ajayu y la Qamasa dan el sentido de vida a las sociedades andinas; ahí la necesidad de recuperar y
proyectar.

Uraqpacha expresión hierática del territorio

Si queremos pensar en territorio Uraqpacha, no podemos pensar sin su autoridad, es decir sin su
gobierno, mas aún bajo la identidad de pueblo o nación. Es decir, pensar aisladamente de tierra/territorio,
es sinónimo a pensar de una sola parcialidad, análogamente es pensar de la esterilidad de una de las
parcialidades de la pareja humana, sin fertilidad reproductiva, como tal tampoco podemos pensar en
el vivir bien (Qamaña). Es decir, hay una especie de una triada entre URAQI JAQI-PACHA, el
problema es entonces, entender entre estos elementos cuáles son los espacios de articulación,
convivencia y tolerancia.
En este sentido, poco a poco queremos hacer un viaje al interior y la profundidad de Uraqpacha, de
esta manera comprender y explicarnos, por qué la demanda de territorio es una constante histórica de la
lucha de culturas, pueblos y naciones. De esta manera en el cuadro siguiente, mostramos la estructura
holística de uraqi; y la correspondiente jerarquía de sus autoridades aún sin la dimensión Pacha.

Estructura Holística de la Conformación "Territorial" y Social del Espacio Uraqi y Metafísica.

Tierra U R A Q I
Territori
o
De Mayor o Menor Espaciación

Espacio Continuo — E. Discontinuo — -

Uraq suyu Marka sayas Ayllu sayas Jathas Saraqas/


Maluri

Del Del De
Con Como
Urqti Urna Alasa Masa Jachuxa
Aran Urin Qamawi Sayt
Sayana 'as Sataqas
Aynuqas
Gobierno .Apu Mallku Mallku Marka .Mallku Ayllu Jilaqata Toman Jilir Tata
visible .Mama Apu .Mama Talla .Mama T’alla i Awatiri Jilir Mama
.Mama Tamani

. Qhapax Apu Jatun Kuraka? .Kuraka . .Kamayu


.Mama Qhapax .Mama Jatun? Mama Kuraka .Mama Kamayu
En el segundo cuadro esquemático, complementamos con la dimensión pacha en una
dimensión primaria, encontrando los elementos de autoridad, relacionando con la chakana
como ordenadores del espacio natural; veamos:
Estructura Holística de a conformación “territorial” y social URAQI y metafísics

Diseño Cósmico de la Tierra y Territorio"


Pacha Uraqi (Chakana)
Apu Titi
Qhapa Illa

Achachila Awicha

Gobierno A metafísico
Japhalla (espíritu invisible)

Inka Achachila Inka Awicha


Chullpa A chachila Chullpa Awicha

Mallku Nina
Mallku Wayra
Kuntur Mamani
Uywirinaka. Wak’anaka

Esta articulación e interacción -convivencia- solo se consigue en un proceso de armonización,


tanto de fuerzas y energías benignas complementarías y adversas (repulsivas). La articulación
de la Pachamama y Pacha-Achachila, está determinado por URAQPACHA, esta dimensión
veremos con mayor detenimiento en el punto 2.4.
Entonces, tener tierra/territorio sin Qamasa, es lo mismo a tener Uraq Pacha sin gobierno
político, sin espiritualidad \AJA YU\. Eso nos hace afirmar que la Pachamama para lo
sAymaras/Qhishwas al presente, por que no decir para los Pueblos y las Naciones Originarias, está
sin Qamasa y sin gobierno político; por que los "Q'aras", -"Karayanas"- desde la invasión a
mediados del siglo XVI, nos quitaron, usurparon y enajenaron, tanto el Ajayu, como el derecho
de la propiedad originaria para usarlo como una simple mercancía. Mercancía de usufructo con
exclusividad de ellos y hasta convirtiendo otros espacios culturales y sociedades en otra
mercancía, disponible por ellos. La república sirvió para sostener este proceso.
Los Aymarás, Qhishwas... afirman, "que si bien usufructúan parcialmente la Pachamama (30-40
cm. de espesor), no tienen el control ni autoridad sobre ella, ellos no pueden disponer ni ser parte
de los recursos naturales que contiene ella"; menos son vistos -por la población de vertiente
europea instalada en este espacio- como Pueblo o Nación con goce de sus derechos, es mas, están
sin gobierno político ni autoridad ritual "religiosa" oficializado; por eso no pueden re-encontrar ese
proceso de "Suma Qamaña" (vivir bien en armonía). Es decir, en armonía con otros
elementos hermanos de la naturaleza -Pacha-.
La Qamaña tiene que ver con el proyecto de vida sostenible de las sociedades; el aprecio de la
vida que se tiene en cualquier lugar y espacio cultural es distinto, para unos es estimado, para otra
pasa sin importancia. De esta manera, poco a poco diferenciemos para explicarnos la
comprensión -visión- en esa diferencia.
Por vida entendemos como la existencia y relaciones interactivas con su medio, [entorno] a su vez
esto es distinto; en las ciudades es algo más frío, con ciertos temores, problemas
económicos, salud, trabajo y familiares, poco comunicativo en las calles y en su medio
social, más que en el trabajo y su casa.
En tanto que en las comunidades, los ayllus y las markas rurales es más animado, alegre aún
sufriendo, tienen un alto aprecio por el trabajo, recreativo y reproductivo, por el fruto que
da la tierra, por los alimentos, forrajes, los animales con los que está conjunta y
cotidianamente conviviendo, en sus días de markas (ferias de los pueblos), sus fiestas familiares y
de la comunidad/ay//w, allí interactúan todos.

En cuanto al aprecio por terreno y casa propia, todos lo desean en las ciudades. En los espacios
culturales andinos -rurales- se habla de territorios agropecuarios -antes que la casa misma- y el respeto
por ellos por que la Pachamama, en interacción con los Pacha Achachilas, no solo provee
alimentos, sino al permitir la reproducción de la especie humana, también da energía natural y
vitalidad del TATA INTI (sol) y PHAXSIMAMA (luna), entonces, tierra y existencia son
agradecidos por los comunarios, para que en reciprocidad reciban alimentos y vida. Es una forma de
ponerse de acuerdo. Sin embargo, el concepto de terreno o tierra es entendido, y aludido
diferenciadamente.
El terreno para los de la ciudad es un espacio para su casa, una especie de hospedaje-comedor. En
cambio, para los andinos, el terreno es un espacio de parcela para cultivo y su casa; espacio de cultivo,
reproducción y re-creación de sus conocimientos.
Prosiguiendo el Análisis

a) Para los ciudadanos de más allá de su casa, puede pensarse entre varias personas ó comunidades
urbanas en territorio.
b) Para las familias Aymaras/Qhishwas, Comunidades Rurales- después de sus parcelas [Qallpas] va
pensando en su Sayaña y Aynuqa, luego ya piensa en el Ayllu y la Marka con visión mística política,
no conocen el concepto territorio (como suelo y recursos naturales). Pues cuando los pueblos "étnicos"
piensan en territorio como un todo, esto es el suelo, río, lago, árboles, bosques, praderas y debajo de la
tierra, la phasa, cal, minerales, aguas subterráneas de los pozos y otros.
Estas ideas muestran que se tienen diferentes conceptos de la naturaleza, sobre la tierra/territorio,
dándonos el signo que el mundo de la naturaleza; para el pensamiento occidental lo dividen,
puntualizan, piensan que son independientes sus principales elementos, y no tienen consideración de
respeto donde el territorio es una tierra. Mientras que para la cultura andina originaria interactúan
elementos que hacen un holismo en la Pacha. Por eso son rigurosos y cuidadosos con la ritualidad para
con la naturaleza, puesto que articular, regular y armonizar, todo un cuerpo sistémico convida, es
simplemente ser parte de ella y saber convivirla.
Relieve Transversal
Holismo UraqlMarka Uraqi y Territorio: Esto es, el todo en el territorio, el todo en el Uraq
Marka; tratemos de ver teniendo la idea esquemática del relieve transversal de la Región Andina,
referente a Bolivia y Qullasuyu.

Esquema fisiográfico de la Región Andina (relieve transversal)

La idea del relieve transversal de los pisos ecológicos y el concepto de territorio, nos ayuda a
comunicarnos con la república, en la comprensión del movimiento poblacional de las Markas de las
tierras altas a los llanos, y los del llano vienen a las sierras del contrafuerte cordillerano; además del
movimiento migratorio místico de los pueblos amazónicos y llanos moxeños a las sierras,
consiguiendo caza, pesca y prosiguiendo la búsqueda de su ansiado Paytiti en los contrafuertes
andinos.

Territorio

Porción de superficie terrestre perteneciente a una Nación, Dpto., Provincia y Comunidad, contienen
los siguientes elementos y niveles:
Recursos Naturales sobre suelo
Cerros mineralíferos .
Arboles/bosques/flora .
Praderas .Agua/lago/ríos .
Animales/fauna .
Placeres de oro clástico de ambientes fluviales y playa.
Fuente termal volcánica en forma de surtidor
Suelo es la capa superior del terreno, compuesto por .roca desintegrada, finamente dividida, en ella
se encuentra los horizontes A, B y C conteniendo mayor o menor cantidad de humus.
Horizonte A
Horizonte B
Horizonte C

Recursos Naturales bajo suelo


.Agua subterránea
.Depósitos salinos y minerales
.Hidrocarburos
.Vetas mineralógicas_____

Espaciación de los Pueblos y Naciones "étnicas"

El movimiento espacial de estos Pueblos y Naciones es un hecho histórico, en proceso


continuo con ciertas características, sentido y objetivo común; los pueblos de alasa/arriba y los
pueblos de masa/abajo, son de acción instintiva, naturalmente dirigida en su existencia por la tierra,
la interacción convivencia y el universo.

El Porqué de las Causas y Cosas


No estamos queriendo entender ni explicar el Qallta (inicio) y Tukuya (terminación) sobre la creación,
mas bien, es el principio de cómo pensamos y porqué actuamos de cierta forma y causa sobre un orden y
lógica, del proceso de nuestra existencia en este espacio. Y un ángulo de este proceso que tratamos
de comprender es el Uraqi respecto al "territorio".
Adecuándonos al pensamiento de los pueblos originarios, partimos axiomáticamente
(incontrovertible, evidente...) de que el universo cósmico refleja al universo social. Ahora el orden y
energía del cosmos viene expresado como parcialidades, donde estas parcialidades complementarias
son:

a) Wiraqhucha como ordenador del universo, Pachagama como creador y hacedor del universo

De manera que, avanzando un poco más llegamos a las expresiones Cha y Ja como afijos concentrando
conceptos en Pacha (tiempo-espacio) y Chakana (cruz del sur), Japhalla (espíritu/invisible) y Yurinja
(en el nacimiento).

Cha Cualidades de elementos de fenómenos visibles e visibles


Existencia, energía etérea de ser de los elementos

Aquí entre a) y b) se tiene muchos valores de esencia que no se discutirá, pero sí dejaremos que
fluya, y se entrelace con las migraciones o movimientos de los Pueblos y Naciones
Originarias, en un espacio llamado tierra que lo efectúa con causa lógica, en un determinado
orden y creando una estructura de hechos.
Esta estructura de hechos se muestra someramente en los siguientes pasos:

Designio cósmico de parcialidades complementarias


Designio "territorial" complementario
Designio parcialidades de administración territorial.

Designio Cósmico de Parcialidades Complementarios

Este designio cósmico viene siendo recordado, evidenciado lo antepasado de enunciados,


escritos, hechos y vivencias de costumbres que se practican en el medio social de las culturas,
con un lenguaje común entre los Yatiris (persona que hace prognosis para bienestar de la
sociedad) y ch'amakanis (persona/sacerdote que invoca a los espíritus de los Achachilas o
Wak'as para esclarecer). Con esto ya se entra al espacio de la deidad, donde el cosmos tiene una
dualidad de esa deidad.

PACHA Característica Conceptual


ACHACHILA Dualidad del designio Cósmico de
S la deidad
Wiraqhucha .Una parcialidad complementaria
del universo que se presenta
por un ordenador potencial,
esperando las existencias amorfas
de ella, ciertas condiciones de
movimiento para tener formas.
Pachaqama .Es la otra parcialidad del universo
que se caracteriza como creador,
sustentando fuerza, energía, que
¡Nota! De modo que la acción del complementa
orden y la elenergía
orden. caminan juntos
para formar la armonía del universo, el sostenimiento y la
construcción de la naturaleza.
Este sentido arquitectónico es mencionado... "En el siglo XVI, el cronista Aymara Yamki
Pachakutt'i Salkamaywa, transcribió el dibujo de la imagen cosmológica andina, representada
en el Altar mayor del templo de Qurikancha de Qusqu, el cual fue de principal importancia
en la época inca"
En este designio cósmico, juega un papel importantísimo la Chakana, divisado en las
construcciones de Tiwanaku, constelación cruz del sur (cruz australis), en la estructuración de
la naturaleza "territorial/uraqi), en las culturas originarias de Chavin, Tiwanaku, Wari, Casma,
Chimú, e Inka, que la simbolizan ampliamente en la topología de espaciación de la tierra, que en
nuestro caso es mejor conceptuado con el término URAQI, y por tanto, la configuración en detalle
armónico de los pisos ecológicos.

Alasaya Reflejo de alasaya


Masaya Reflejo a alasaya

Designio "Territorial" com plementario

La semántica simbólica de la sucesión dualística dentro la chakana (cruz cuadrada), se tiene de los dos
reflejos, a y a', un reflejo, que toman como un todo del Uraqi especificado en pisos: Pata-
sunilAltiplano, Qhirwa/ valles; Ch’umi/ Llanos; y laka quta/ Costa. Donde sigue manteniéndose el
concepto de la dualidad, articulados por un espacio taypi, en este es los andes -anti- (pata-suní).

Reflejo a del Chakana/Cruz del Sur


(Constelación crux australis)

X
Suni

Alásaya Qhirwa Qhirwa Alasa


Yunka Yunka
Laka Quta Ch'umi

Masaya Masa

Complementariedad Occidental Complementariedad Oriental de pisos


de pisos ecológicos ecológicos
Suni 3.500-4.000/ Suni 3.500-4.000/
altiplano 4.000- Altiplano 4.000-4.800m
4.800m Valle Occidental Valle Oriental 2.300-3.500m
2.300-3.500m Yungas marítimo Yungas fluvial 1. 000-2. 300m
500-2. 300m Costa hasta Amazonía/selva baja 80-400m
500 msnm.
Designio de Parcialidades de Administración "Territorial"

La evidencia es muy clara, en cuanto a la conformación espacial de la tierra en su orden dual y


articulado.

Unidad de Unidad de Parcialidades Complementarias de la Tierra

Laka quta-Suni Apachita/Urqusuyu Suni Apachita/Umasuyu - Ch'umi


(Costa - Altiplano Occidental) (Altiplano Oriental - Llanos)

En este seno, la integración de la Jacha Marka Uraqi (regiones "territoriales") en el


tawantinsuyu (cuatro grandes regiones), es mejor comprendido por pisos ecológicos, cuando se
consideran la región Qullasuyu yAntisuyu. Donde el Qulla tiene espacios en el Anti, y el Anti tiene
espacios en el Qulla; cuyos movimientos poblacionales tienen aspecto dinámico en la integración
armónica de complementariedad, lo que actualmente se conoce como Pueblos y Naciones
Originarias Andino Amazónico del Abya-yala (América), cuya proyección histórica de
crecimiento en el devenir del proceso Nayrapacha (tiempo y espacio del futuro en el pasado), es:

Chincha - Anti Norte


Kunti - Anti Centro
Qulla -Anti Sur

Nota: Esta unidad de parcialidades,


indica territorialización

Espaciación Ecosistemática de la Pachamama y los Achachilas

En la concepción y visión Aymara, todo parece a la inversa de lo que ocurre en esta época,
distorsión y separación entre sexo, etnias, exclusiones, juego e interacción de género incluido en
este proceso. La Pachamama y los Achachilas no cumplirían la función reproductiva en forma
aislada, es decir, serían mas o menos como asexuales; esa interacción reproductiva, se cumple
gracias a la acción del TATA INTI (sol) y PHAXSI MAMA (Movimiento de la luna), es decir, la
Umamama (lagos y ríos), pasando por la Quchamama (agua anegada, tierras húmedas),
permiten la reproducción alimentaría y generación de la serie de recursos naturales, sean estos
renovables y no renovables.
Por otro lado, si bien espacialmente la territorialidad andina se divide en Urqu-Umasuyu(6) con un
centro articulador, espacio de convivencia de las diferencias de tinqus rituales, y consagración de
los maestros yatiris, como es el lago Titicaca y la línea imaginaria que va desde Kajamarka,
Kusku, (pasando por el lago) TIWANAKU, Paria, Potosí; además, cada parcialidad de esto tiene
sus Achachilas que más son mitos; mitos a los cuales los pueblos originarios pretenden alcanzar,
ellos son el PACHAKUTT'I y PAYTITI (7). Eso no se limita ni queda ahí, así como hemos dicho
que territorio sin autoridad no es territorio, ni la autoridad sin autoridad es tal. En este sentido
desde la ritualidad, la orografía, la vegetación, los ríos, los lagos y la unión del territorio con
el mar, surge no una simple espaciación territorial, sino sobre todo, la pertenencia espacial de la
jerarquía de las autoridades de las Markas (ver gráfico), como son las ILLAS espacio de unión y
convivencia entre el territorio y las aguas del mar, es decir la costa; por otro lado, el espacio de
unión y convivencia entre el territorio con las cordilleras -nevados- están los APUS; el
espacio de convivencia de las diferencias es también donde los ríos, las lagunas, lagos de altura
que interaccionan con el territorio, a ese espacio se lo llama TITIS y finalmente la convivencia del
territorio con la vegetación densa -ch 'umi- es el espacio de los QHAPAS. En cada uno de estos
espacios de convivencia en la diferencia, está el elemento TA YPI, tanto como armonizador de las
fuerzas y energías adversas; o el espacio "auqa" eco climática, que tiene que ver con la gestión de
los espacios y la adecuación interaccionada de la ecología humana. Entonces, no es mera
toponimia ni nomenclatura caprichosa, sino está determinado por fuerzas de la naturaleza, es
decir, el libro mayor y abierto de la vida como es la naturaleza.
(6) Ver Therese Bowpse Cassagne, la organización dualista del Espacio Aymara en realidad esto
no tan dualista, sino tiene un tercer elemento que es el Taypi.
(7) Ver Simón Yampara H., Pachakutt'i Kandiri en el Paytiti
Uraqpacha en la Visión Andina
Al tratar de comunicarnos o mejor dicho de transcribir una lógica a otra lógica es
peligrosamente tergiversante, por que enturbia una de un color con una gota de otro color, sin
embargo, ya se percibe esto al querer aproximar términos y conceptos de la lógica andina
(originario), a la lógica republicana. Por tanto, sacrificamos ese aspecto al expresar:

Marka Uraqi. Tierra del pueblo/nación, alguna vez usamos el término Uraq Marka (Tierra
de Nación)

Pacha Uraqi. Tierra de culto a la deidad, usado muchas veces como Uraq Pacha, que
expresa el mundo como territorio con los antepasados
Uraqpacha. El mundo tierra, planeta con relación interactiva entre Marka Uraqi y Pacha
Uraqi, que sería como una nación con deidades propias. Territorios con
Qamasa.
Con este aludido veremos el Marka Uraqi que es algo similar al "territorio", que con las prácticas de
vivencia, rituales y ceremoniales es un afecto a la naturaleza; en esos momentos se muestra como Uraqi
Pacha con fuerte sentimiento de profundidad y amplitud espacial, mientras que simplemente Marka
Uraqi/Uraq es un Taqpacha Uraqi con poca fuerza catalítica. Ese trance Territorio-Pacha Uraqi se
muestra en el siguiente cuadro:

Territorio j
1 ("Marka Uraq ")
(Sun: Pata
2 Valle
Uraqi)
(Qhirwa Praderas Cordillera, monte
Animales (Apachita, Qullu)
(Jamach'i, Uywa,
3 Yungas Laq'u)
(Yunka Quqa) Lago U
(Urna Quta) R
Gente Suelo Río A
4 Llanos (iaqi) (Uraqi) (Urna Jala) Q
(Ch'umi p
A
C
5 Costa mar Líquido subterráneo Mina H
(Jach'a quta (Mik'ay Urna Uraqi) (Qhuya) A
Uraqi) (Mik'ay Umalllik'i
Uraqi)

URAQI AJAYCHAÑA QAMASANI Transformación y URAQI


cubierta por Pacha

1 Pacha Apu Uraq (Puna, Cordillera sierra Pacha uraqi


2 Pacha Titi Uraq (Tierras de lagos de alturas) Pacha achachila
3 Pacha Qhapa Uraq (Valles, Yungas, Llanos) Pacha quqamama
4 Pacha Illa Uraq (Tierra de Costa) Pacha qucha mama
Mik'ay Awicha Urna Uraqi Qhuya "tío" Achachila
Aquí es necesario aclarar y diferenciar la espaciación territorial en: Marka Uraqi de Pacha Uraqi, es
decir, el territorio en interacción y convivencia de la comunidad de los miembros de la naturaleza -que
en todo caso supera la dimensión de suelo o tierras- del territorio revestido de Pacha, es decir, del
territorio sacralizado en el lenguaje de Malu Sierra "Donde todo es altar"(8).

(8) Ver Malu Sierra, Donde todo es Altar, Aymaras los hijos del sol, Ed. Persona, Santiago Chile
1991. La articulación y convivencia de Marka-uraqi y Pacha-uraqi, da consistencia, sostenimiento y
sentido a URAQ-PA CHA, territorio sacralizado; es decir, URAQI con AJAYU y QAMASA, dimensión
manejada más por los Amawtas, Yatiris y chamakanis. En todo caso, es practicado por los aymaras en
la serie de ceremonias rituales a lo largo del calendario agropecuario, indistintamente llaman y se
comunican con la comunidad de especifidades y espacios naturales como las siguientes:
Pachamama como "Tierra" agropecuaria, y la Llumpaqmama como "tierra" virgen, ella
está conectada, complementado, acompañado en un todo de la naturaleza a los Achachilas
(montañas, cordilleras), Qhuchamama (lagos), Umamama (ríos), Q'uqamama
(vegetación/arbóreos), Ch'uwa Achachila (montañas/montículos dentro el agua/lago), Ch'uwa
Awicha (Tierra debajo del agua/lago), Wak'as vigías (representaciones pétreas de energía dentro y
encima la tierra, con espacios sagrados), Qalaqhuya (minerales de mina), Uywiris (espacios de
animales/gentes bajo el cuidado de las deidades respectivas). De modo que todo ello es el Uraqi
Pacha es un ser organizado/orgánico con los elementos naturales de las deidades.
Sigamos desentrañando la estructura del Pacha Uraqi tan solo por Uraqi, pues el prefijo Pacha
tiene en este caso un carácter Sacro, mientras que Uraqi (más que territorio) es un término
englobante, como se ve a continuación acompañado con Marka (pueblo, región).

Marka Uraqinakasa
Sun i - Marka uraqi Sierras/altiplano/puna
Qhirwa - " uraqi Valles mesotérmicos
Yunka - " uraqi Tierras cálidas en ladera de cordillera
Ch'umi - " uraqi Selva/Llanos.
Jach 'a - " uraqi Costa del mar
quta
laka
(...) Marka Uraqi denota espacios físicos característicos y Uraqpacha al mismo
tiempo como espacio sin fronteras (dentro el cual están las markas).

El Concepto Tierra con el Uraqi (Aborigen)

Conviene hablar cómo piensa y expresa cada sociedad, ahí la desinteligencia y la


incomprensión, así como su legislación; esto es, en las sociedades predominantes que son la
gente/población de la ciudad que más y mejor comprenden a sus héroes y a la República; por
otra parte la gente/población del Qullasuyu conoce a sus familias, la acción y recuerdo de sus
antepasados Achachilas, Mallkus y a su Marka.

La diferencia también radica en la manera de pensar, vivir y la expresión de esas ideas:

La sociedad originaria (excepto la gente educada bajo el civismo de la


república), piensa sobre un asunto con dos ideas al mismo tiempo, mientras
que la sociedad de la ciudad tiene el pensamiento sobre el asunto, una
idea puntual.________

Y de hecho, los conceptos sobre un asunto son diferentes, por ejemplo casi todas las cosas como
el agua, la tierra, la cordillera... y otros, son deificados; pues hasta "la cáscara de la papa no debe
pisarse, por que llora", mientras que para la sociedad republicana son cosas sin respeto. Ahora
veamos el significado de tierra, suelo, territorio y polvo, comparada mas o menos con la
significación Aymara.

Aproximaciones de Conceptos

O. Planeta = Globo Terráqueo = Akapacha = Tierra/Territorio y Deidades de, Alaxpacha


Manqhapacha

1 Tierra: Parte superficial del globo terráqueo no ocupado por mar


2 Suelo: Capa superior de la corteza terrestre, capaz de sostener la vida vegetal/territorio,
porción de superficie
terrestre
3 Territorio (*) Porción de la superficie terrestre perteneciente a una nación, región, provincia,
etc.
4 Polvo: Parte más menuda y deshecha de la tierra muy seca que con cualquier movimiento se
levanta en el
aire.

-Uraqi: Suelo, tierra, campo, terreno, "territorio", planeta que habitamos.


-Pachamami: Madre naturaleza, la tierra de producción agropecuaria y virgen, praderas
-Marka Uraqi: Suelo, campo, tierra, "territorio" de la nación/pueblo", territorios" del conjunto
de Ayllus de parcialidades de un pueblo
-Laq'a: Polvo, tierra menuda, tierra para sembrar.
* Se comprende también como la tierra y los recursos naturales dentro de ella y encima de ella.
Aquí está diseccionado los conceptos para una comparación aproximada:
Uraqpacha, globo terráqueo que comprende Alaxpacha-Manqhapacha, de hecho son
aproximaciones.
Uraqi, el término comprende varias especificaciones concretas que van del suelo,
hasta el planeta que habitamos, pasando por campo de producción y territorio. Mientras
que tierra, su conceptualización mayor es como la parte superficial del globo
terráqueo, su diferencia es notoria con Uraqi.
Pachamama es una parte del Uraqi armónicamente integrado dentro ella como Uraqi
agrícola, pecuaria, praderas y tierras vírgenes; en tanto que suelo es la capa superior de la
corteza terrestre, porción de superficie terrestre. Aquí el suelo es aproximado en su
concepto, su gran diferencia es que el suelo para los pueblos originarios es deificado
como la madre naturaleza.
Marka Uraqi, es ya el Uraqi de una población, lo que es semejantemente a territorio, pero
no entendida como jurisdicción.
Laq 'a es polvo, pero también es tierra para sembradíos/Vag'a Yapu Uraqi pero polvo es tan
solo parte menuda de tierra que se levanta en el aire, la diferencia conceptual es
grande. Pues el Aymara se enturbia con conceptos castellanos, como en algunos lugares
es enunciado.
Se puede apreciar que Uraqi es algo como un todo desde partículas de polvo hasta el planeta tierra,
esto conectado con la gente originaria, se hace alusión a Uraqini que es el markani-Jaqi,
originario del suelo en que vive y así tiene una expresión amplia que puede especificar ideas
concretas, Uma-Uraqi, Quq'a Uraqi, Thaya Uraqi, Ch'umi Uraqi, Uywa Uraqi, Qhuya Uraqi...
que conectado con pacha/tiempo y espacio (de característica energética), resulta Pacha-
Uraqi es un holismo de la naturaleza organizado con una vida sacra. Uraqpacha es
Pachamarka-Pachamama. Por tanto, el término Uraqi engloba a territorio, recursos naturales,
gente, clima, los fenómenos meteorológicos y espirituales; de modo que Uraqpacha o
Akapacha es el planeta tierra y su contorno estratosférico sagrado.

3. El tratamiento del territorio en la república

Trataremos de hablar lo que no se puede decir exactamente en castellano, lo que en aymara


se piensa; con esta observación entramos a expresar la problemática de los "pueblos indígenas y
naciones originarias, en el nuevo contexto del sistema".
La sociedad primaria como pueblos y naciones mas sus problemas en el espacio del sistema
de pensamiento republicano, expresa que:

Se ha repetido muchas veces los principales problemas de la sociedad originaria como


aborigen, autóctona, indígena, etnia; lo que aquí sostenemos es la forma como debió
decirse, por ejemplo pueblos y naciones originarias, y desde este ámbito real se habla de
un análisis reflexivo del problema en que nos vemos envuelto.
Uraqpacha Nayra Sariri (Hoy del pasado, territorio)

El suceso de "res nullius" tierra de nadie, enceguecido por el materialismo, haciendo abstracción de la
existencia de la vivencia organizada (ver cuadro) y del "Utti Posidettis Juris", habéis poseído, estás
poseyendo; con estas ideas fue desconocida nuestra razón de existir como pueblo, iniciándose la
imposición de injusticias por los visitantes, emprendido por colón y los subsiguientes. En cambio,
los pueblos y naciones de estas tierras del Abya-yala ni sabían que significaba eso, pero eso sí, los
visitantes que trajeron sus leyes y derechos, hicieron prevalecer sus intereses a su conveniencia,
otorgándose el derecho de conquista y apropiación, obligando a las leyes naturales y sistema de las
sociedades existentes de los pueblos originarios. De tal modo que incluso fue desconocido el derecho de
supervivencia como "animales" a la especie "Hominedae", que fue despojado de su medio,
expulsándolos, matándolos, oprimiéndolos.
Espacio de vivencia de las autoridades hombre-mujer

PACHA Ja
Espacio Tiempo Achachilas y Awichas
Pachamama Pachaqama
Uraq Uraq Unu Arum
Qh'ullita Puruma Qhana
Ch'amak

(Manqall-Pacha Uraqi)
Umasuyu (Warmi) Urqusuyu (Chacha) Paqu A. Paqu Q.
Apu Mallku Qhapak Apu
Mallku Jilaqata
Tamani Kamayu
Amanta A. AmautaQ.

Achu Jilaqaliya . . Uywa Tama Yatiri


Aynuqa . lik'iya . Pachaqamani
Saraqa . Anta . Yapaqu
Qallpa . Anaqa . Yapuqamani
Wasa achu Awatsu . Uywaqamani
(Agrícola) Wasa Uywa Kamani
(Pecuaria)
Uywa-Achuwi (Agropecuaria)

Luego la colonia hace su independencia y libertad para proseguir sometiendo por leyes inculcadas, y
consolidada en las nuevas repúblicas. Traducido en sus conceptos que dicen "Utti Posidettis Factum"
la victoria concede Derechos, peleándose los colonizadores mediante las repúblicas, empujando a las
sociedades originarias a que se maten entre ellos, y así obtener más territorios. En todo este proceso se
imprimió y privilegió el derecho divino y la propiedad privada, hasta se llega a crear derechos humanos
como defensa de la persona individualizada, en desmedro de las sociedades que articulan y conjuran lo
privado y comunitario en armonía.
Jichha Uraqpacha (Hoy del Presente, la "Civilización y Progreso")

a) Del contexto social y territorio; los objetivos de "progreso y civilización" conjuntamente con la
colonización en sus distintas formas y matices, accionados en nuestros territorios, potencia a
grupos sociales de occidente que depredan especies naturales y sociales, en desmedro de sociedades
que sobreviven unas 33 "etnias" de alrededor de las 100 que habían, de modo que no existe el
desarrollo humano (053), mas bien hay retroceso, pues las injusticias y formas de violencia que se
cometen en este sentido contra los pueblos del Suni y Ch'umi es lamentable, pues los sistemas de
articulaciones, de complementariedad que tenían entre los diversos espacios ecológicos, fueron
aislados y encasillado a un solo lugar, perdiéndose o debilitándose la fuerza de integración,
intercomunicación y seguridad alimentaría, dando solo 10 Ha en el altiplano y 3 Ha en el Valle; sin
embargo, a los grupos que detentan el poder se los da miles de Has -siendo varios cientos de personas
que no la trabajan- como es la de un ex Ministro de Educación con 150-200 mil Ha, y el Aymara,
Qhishwa y Warani no tienen derecho a sus propios territorios. Es decir, la Ley de Reforma Agraria
de 1953, al sellar la desestructuración colonial, afectó seriamente la convivencia complementaria de
pueblos y naciones originarias de los andes, los llanos y la amazonía oriental, las nuevas leyes de la
reforma del estado en este contexto, como la de Participación Popular y descentralización, al tomar
espacios de jurisdicciones de las secciones municipales, dentro de ellas las "comunidades
campesinas" como nuevos actores sociales, no solo es ratificar los desaciertos de la reforma agraria,
sino toma vigencia las reducciones coloniales por secciones municipales como medidas neo-
toledanas. En todo caso, así sea a modo recordatorio presentamos en el siguiente cuadro la
convivencia histórica de esos pueblos:

CONVIVENCIA COMPLEMENTARIA

Poniente Levante
Medio

Qhishwas Araona Pacaguara Chacobo More


Tacana Chamas Chapacura Baure
Kallawaya Leco Gavina Cayubaba Itonama
Chiman Reyesano Canichana Jora
Aymara Moseten Movima Moxos Pauserna
Yuracaré Guarayo Bororo
Chipaya Sirionó Zamuco
Chiquito Chamoco
Murato Chiriguano Otuque
Mataco

En ese mismo aspecto, ha y lo antitético al suceso de apoyo que prestan algunas agencias
internacionales -de los países industrializados a las repúblicas y países nuevos para que
sometan y colonicen a los pueblos primarios colonizados en su expresión amplia,
aparentemente para soportar y salir de problemas y necesidades, que sólo llegan para las
oligarquías que detentan y deciden el gobierno y la administración de la República. Empero,
los pueblos y naciones que se encuentran en ella/Bolivia, como los Aymaras, Qhishwa,
Warani, Tacana, Moxo, Chiman, Mataco... no conocen ni saben sobre estos favores que
reciben otros grupos sociales de Bolivia emparentados con la banca, industria, comercio y
gobierno.
b) Del contacto con la república, con la escuela, los medios de comunicación, las ciudades
de ellos y su sistema social, poco o nada sirven, mientras traten como extraños y perjudiciales
a esos pueblos, a pesar de que existe Derechos Humanos, los pueblos y naciones andinos-
amazónicos de ecosistemas complementarios tienen problemas comunes como:
1- Pérdida de las nacionalidades Aymara, Qhishwa, Warani... a otra nacionalidad
como boliviano, chileno, peruano, argentino y otros, separan, confunden y hacen
pelear.
2- El idioma de los pueblos amazónico-andino va desapareciendo gradualmente,
afectando seriamente la identidad de esos pueblos.
3. - La cultura y sus costumbres se desarticulan por leyes que se implantan, sobre tierras,
economía, educación y la planificación familiar; historias tejidas con hilos de egoísmo
y mentiras, ocultando y haciendo chauvinismos a las falsas independencias "patrias".
4.- De los servicios sin predisposición, pues se viven con elevada pobreza, desnutrición,
enfermedades, analfabetismo; tal es que en este segundo "Estado" de Bolivia, es
postergado de los servicios casi en la totalidad de las áreas rurales, corno agua potable,
saneamiento, salud y energía eléctrica.
5.- Poco o nada de cambio en lo positivo, pero sí en lo negativo, pues se evidencia ciertas formas
de esclavitud y sometimiento a la falta de oportunidades.
Pero sí cambió apreciablemente el número de hijos sin tierras, sin viviendas, malos hábitos en la
alimentación y costumbre. Y el cambio de nuestros territorios a las manos de los apátridas y
financieras transnacionales de la economía mundial.

Paradojas, las leyes para la injusticia sobre tierra y territorio

a) Tiempo de gestión
Refiriendo a algunas cifras se tiene que: las gentes^'aras) que están en el gobierno asociado a bancos,
comercio y empresas, tramitan tierras en una cuantas semanas de 20 a 50 mil Ha, mientras que para
losAymara, Qhishwa, Warani, se tramitan en 15-20 años.
b) Extensión, superficie de dotación

Irregularmente las dictaduras, y los que están en el gobierno tienen 50 mil -150 mil / Ha. por los Q'aras,
mientras que los sin favores se encuentran en los pueblos "primarios"
Aymarás 2,5 Ha. en Altiplano
Aymarás, Qhishwas 3,6 Ha. en el Valle
Waranis y otros 30,0 Ha. en el Oriente
Hijos de agricultores que ya no tienen tierras 0,0 Ha.
c) Concentración de tierras
Apreciándose mejor entre los grupos de gobernantes la aparición de latifundios en algunas regiones.
Prov. IturraldeyF. Tamayo6.300.00 Ha, concentrado en unas cuantas familias traducido en 6.971
"empresas".
Depto. Pando más de la mitad 66% aprox. 1 millón de Ha. en 84 unidades empresariales
Depto. Beni más de la mitad 61% aprox. 6,4 millones de Ha, se concentra en 317 unidades
empresariales.
En Santa Cruz lo saben los oligarcas, empresas neolatifundiarias.
Sin embargo, se conoce lo que sucede en el país pues del 100% de tierras útiles para la
agricultura y ganadería, están en poder 94,44% entre los grupos de familias, neolatifundiarias,
empresas, y colonia de políticos. En cambio nuestros pueblos y naciones están con solo
5,56% de tierras útiles.
d) De la subsistencia de los hijos
Además, hablando por los espacios de subsistencia, se nos inculcan -por las instituciones de la
república- que no tengan hijos, disminuyéndonos el nacimiento de nuestros hijos de 8-9
(período 1950-1976), a 4-5 (actualmente 1992-1995), sin que por ello haya mejorado la
situación de nuestras "etnias" pueblos/naciones, pues siguen hundidos peor en la indigencia.
e) Venta y enajenación de nuestras tierras

En esta paradoja los que detentan casi todas las tierras útiles obtenidas gratuitamente, nos
van a vender nuestros propios territorios para desarrollarnos, tal como se avizora con la nueva
Ley de Tierras. Sin embargo al margen de ello, muchas de las familias de empresas venden
tranquilamente ofertando tierras al exterior, sin que las autoridades no hagan nada al respecto,
a pesar de haberles apoyado a ellos los gobernantes y las agencias de la banca mundial,
inyectado con créditos en un pasado como:
1968 1969 1970 1971 1972
Agencia Internacional Desem. Amort. Desem. Amort.Desem. Amort.
Desem. Amort.Desem. Amort.
para el Desarrollo (AID) 32,9 2,2 25,6 2,5 17,5 2,8 15,0 1,7
25,8 3,3
Banco Mundial(BIRF/IDA) 0,7 -1,6 -1,8 - 19,1 - 11,7 -

Millones de Dólares

f ) Explotación de recursos forestales

En este tipo de dotaciones de recursos debemos citar también a las empresas madereras y
forestales de un reciente pasado. Que explotan alrededor de 58 principales especies en un
inicio, muchas de ellas van desapareciendo y los espacios de bosques también, y de hecho las
414.220 Km2 de área forestal en 1970; hoy están en unas cuantas manos, que echaron a perder en
su explotación mas del 60%, pudriéndose las troncas, y aprovechando solo las más apreciables,
como cahoba/mara. Aún en el presente con la pausa ecológica se desboscan intensamente hasta
hace unos años atrás -con respecto a 1988- como idea una parte de tierras adentro del
Antisuyu, en la que está el Depto. de Santa Cruz, de las 370.621 Km2 que tiene, 139.169 Km2
esto es 37,55% de bosques (1970), se otorgó 12.000,000 de Ha. (120.000 Km2) de bosque
cruceño a 59 empresas (1982) que fueron eliminando los árboles, por ende también los
animales y especies vegetales, incluso étnicas "como los yuquis; puede notarse que se entrega casi
todo el bosque de esa parte de las saraqas del Antisuyu. Así hay recursos que se destruyeron y
vaciaron como la plata y oro, y que en ese proceso van también dejando maltrecho a nuestra
Uraqpacha enfermándola.

Nayra Jutir Uraqpacha Amxa (Hoy del futuro, armonía de los pueblos y naciones)

Objetivos y esperanzas de las Comunidades, Ayllus y Markas, guardan un deseo y mística traducido
en el achakutt'i y Paytiti; reorganizarse para ser pueblos con dimensión grande hacia su
Desarrollo, cuya meta radica en:
Reterritorialización de las markas por las transversalidades regionales y
complementariedad con el
Antisuyu/tienas bajas del Ch'umi.
Armonía de los Pueblos y Naciones dentro de un proceso de crecimiento.
Nuevo orden social de armonía con transformación.
Representación de los Pueblos y Naciones en el contexto del gobierno y un Nuevo Estado, donde la
práctica de la democracia sea una cotidianidad.
Compartir los recursos entre los Pueblos, como se hizo con la papa para el mundo, como la que
se viene haciendo con la quinua, kuymi, la llama, la alpaca, vicuña y muchos otros medicamentos;
como las formas de pensamiento y sentimiento.
Pues la historia se encamina hacia ese nuevo orden social, para ser nuevamente un pueblo grande y
solidario, soberano
y autosostentable, donde tanto la democracia como el ejercicio pluralista de los derechos sea
una cotidianidad consensuada.
Sin embargo, para alcanzar esto se hace necesario hacer un auto-examen, es decir, tomar
conciencia de sistemas, estructuras y realidades diferenciadas superpuestas que conviven sin
armonizar intereses ni derechos, eso presentamos en el siguiente cuadro:

Superposición de pueblos y naciones con la república de Bolivia

Originario derecho-privado Comunitario republicano derecho privado


Qullasuyu (Andino-Antisuyu) Bolivia

1 2 Jach 'a Markas 9 Departamentos


(con saraqas quta y ch'umi)
.Markas Provincias
Jisk' a Markas Secciones municipales Cantones

.Ayllus Comunidades
. Ch’uli/churi Ayllus
Jathas Estancias Individualización

Latente Oficializado
Pachakutt'i Kandiri Paytiti

4. La armonía de los pueblos originarios en el nuevo contexto del sistema

Reformas del Estado

Luego de más de una década de la reapertura democrática, el sistema político Boliviano, decide
hacer reformas del Estado, no tanto por voluntad e iniciativa propia, sino por que las exigencias
de la correlación de las fuerzas en el ámbito de cooperación y financiera internacio nal así lo
indicaban, pero también la demanda -esta vez bajo nueva identidad de los Pueblos Indígenas y
Naciones Originarias- luego de las movilizaciones con motivo de los 500 años de colonización, la
declaración del año Indígena (1993) y la década indígena, coadyuvados por el convenio 169 de la
OIT, ratificado por Bolivia en 1991.

Este proceso no sólo evidenció movilizando reclamos sobre la coincidencia de la "mapa de


pobreza con territorios indígenas", sino que el cuadro de la bonanza de los políticos
empresarios coincide con la corrupción y los narco-vínculos. Es decir, pese a los programas de
cooperación financiera internacional, la pobreza crece y la bonanza de los políticos y empresarios
en espacios oligárquicos también crece, esta realidad casi obligó al sistema político boliviano,
tomar el camino llamado de "ajuste estructural"; reformas del Estado basados en el "Plan de
Todos", donde la implementación de esas medidas no tiene transparencia ni se buscan llegar a
consensos, los sistemas políticos y las instituciones estatales aún no se democratizan, pues el Estado
a través de su régimen político (coaliciones partidarias en función de gobierno), monopolizan la
toma de decisiones, a través del juego de "rodillos" oficialistas, sin importarle mucho los
consensos, ni incorporar otros valores a la democracia, la correlación de las fuerzas políticas
aparentemente grandes y fuertes, se mueven o son tales gracias al carácter ambiguo de las reglas
existentes, puesto que ellos son los actores políticos, que hacen las reglas para su propio juego. En
este sentido, con relación a los Pueblos Indígenas, tanto el artículo, como el 171 de la CPE, así
como la ratificación del convenio 169 de la OIT, la declaración de la Década Indígena, pecan de
ser declaraciones líricas enunciativas, antes de avanzar en procesos pluralistas y "multiétnicas"
mucho más transparentes. En los hechos son distractivos.
La implementación de la Ley de Participación Popular, por falta de una cultura democrática tanto
en los partidos como en el sistema político boliviano, desde el Estado y sus instituciones,
continúan con prácticas clientelistas, totalitarios, coercitivos y prebendalistas, tanto sobre los
Concejos, H. Alcaldes Municipales como sobre las OTBs, los Comités de Vigilancia y las
organizaciones sindicales; deslegitimando la constitucionalidad de las entidades locales y la
soberanía de sus actos, muchas veces confunden la sigla partidaria prestada con favores
políticos, puesto que deben acatar y comportarse bajo los designios [cocinadas] partidarias. Aquí
surge una brecha y debate, mientras las autoridades de los municipios son elegidas por el Pueblo
y, las direcciones partidarias solamente en el espacio de sus partidos.
Todo eso nos hace afirmar que, pese a los 14 años de reapertura democrática, aún no se ha dejado
códigos ni prácticas de los gobiernos de facto del pasado reciente y estos tienen una fuerte
herencia colonial, al menos en la relación conductual entre las Entidades Estatales, Entidades
locales, sistemas políticos, Pueblos Indígenas Originarios, que afectan no solo a la práctica de la
democracia sino sobre todo, a los derechos humanos, los derechos y la soberanía de los Pueblos
Indígenas y las Naciones Originarias. Tal es así que, hoy por hoy todos hablan de Participación
Popular como una medida acertada, que hay que buscar un desarrollo sostenible, "todos quieren
apoyar a los indígenas [hasta se ha declarado década indígena], pero pocos están dispuestos a
'jugarse' por el territorio de los mismos, sobre todo cuando hay otros intereses, sean empresariales o
políticos de por medio"(9).

H. Navajas, en Realidad Indígena: ¿Reivindicación o realidad virtual? Separata presentada en la mesa


indígena de ILDIS, La Paz 1995.

Todo esto requiere de una adecuada comprensión de sistemas y lógicas de vida que están de por medio,
que implican intereses y derechos contradictorios, muchas veces no conciliables.

Al coexistir en varios espacios culturales y al menos en dos sistemas: el de capital y mercado


globalizante (occidental) y el andino que se guía más por principios de reciprocidad. Entonces el
problema está en entender y entendernos en ambos sistemas, pero también clarificar por qué la oferta
del estado (gobierno) toma una dirección y, la demanda de los pueblos originarios y los sectores
populares otra. En la visión de los ofertantes, parece estar todo encaminado con la reforma de la
CPE y el conjunto de leyes que coadyuvan a ese proceso; pero, desde la visión de los
demandantes, no sólo califican de " leyes malditas", sino que hay demandas insatisfechas como es la
cuestión del TERRITORIO para los pueblos indígenas (lO).

Esa situación hace pensar que la correlación de fuerzas está por otro lado, pero ¿por qué sucede esto?
¿O es que unos son más bolivianos que otros, por eso continuarán teniendo los privilegios?.
Pero a nuestro entender, el gobierno no encara esta problemática, por una razón muy simple por
que afecta a los intereses oligárquicos, es decir, a los intereses de familias y políticos en gobierno o al
menos aparentados, entonces mientras existan esos intereses de por medio, no solo que no se tratará
adecuadamente esa demanda, sino que la cuestión TERRITORIAL continuará siendo una demanda
insatisfecha para los Pueblos Indígenas; además a esto se adiciona el ejercicio del poder político y la
práctica democrática, tanto en las instituciones Estatales como en los sistemas políticos.
Sin embargo, paradójicamente se quiere hacer participar y se da poderes locales atomizados como son
los Municipios y las OTBs, en un proceso de desestructuración colonial, a pesar de los 171 años de
vida republicana, la colonización, continúa hasta el día de hoy, al menos en lo que respecta a los
derechos de los Pueblos Indígenas, toma el aspecto de neocolonización; en la cuestión de tierras
vuelven los neo-melgarejistas, es decir, los neo-latifundistas preocupados en dar valor a sus extensas
propiedades adjudicadas ilícitamente, ahora se preocupan por la Ley de Mercado de Tierras, llamando
simplemente ley de tierras, distrayendo y explicando a los cuerpos directivos del sindicalismo
campesino, bajo la premisa de "dar valor a la tierra" que poseen desde la Reforma Agraria, ese
proceso se está iniciando con el Anteproyecto de la Ley del Instituto Nacional de Reforma Agraria,
INRA (fusión del Consejo Nal.. de Reforma Agraria, CNRA y el Instituto Nacional de Colonización
INC.), ley que tiene el carácter normativo y administrativo institucional, pero como eso debe ser
sancionado por el parlamento, está allí precisamente los
(9)En ese sentido, una comparación más global de dos procesos, (década 50-90) nos ilustraría mejor,
tomemos como ejemplo; la dictación de la Reforma Agraria 1953 y la ley de Participación Popular
(1993). En la dictación de la ley de Reforma Agraria, hace 42 años -por una inadecuada comprensión
de entonces- se ha aplaudido casi por 30 años esa medida y cada 2 de agosto se ponía ponchos y
lluch'us a los presidentes de turno sean civiles o militares; hasta que casi se hizo costumbre; pero resulta
que cuando se lanza la ley de Participación Popular, nadie aplaude, más bien califican de ley maldita, los
comunarios se quedan medio apáticos, no sólo que no dan contrapropuestas, si no también no ponen ni
poncho ni lluch'u a nadie entonces interesados y no los directos beneficiarios, es decir, al no
renunciar en mercantilizar sus neolatifundios, quieren peligrosamente empujar a los comunarios
minifundistas a ese proceso y, de esta manera continuar afectando la estructura cohesionada de las
comunidades originarias, y distraer la atención de la demanda territorial en tanto Pueblos.
Entonces, esto evidentemente nos hace pensar que no solo no hay una correlación, entre sistemas y
estructuras (andino y republicano) sino también no existe, una articulación entre lo que es la oferta y
la demanda. Desde mi punto de vista y en el fondo, esto es lo que busca, tanto la ley de Participación
Popular como el anteproyecto de la Ley INRA, ésta crítica seguramente no es compartida con los
proyectistas ni con el gobierno. Pero entonces este es el problema que se nos presenta, variedad
ecológica y territorial; diversidad organizativa y ancestro cultural. ¿Eso será posible simplemente
reducir y/o estandarizar en Secciones Municipales y OTBs? ¿Legislando la Ley INRA y de TIERRAS
se avanzará adecuadamente en la demanda indígena?.
Ahora, todo esto está alimentado, por la orientación del derecho divino y privado del carácter
privatista que tiene la propia Constitución Política del Estado, que ignora y desconoce los derechos
fundamentales de los Pueblos Indígenas y las Naciones Originarias.
Estos últimos por si no conozcan todavía, combinan sabiamente lo privado y lo comunitario, sin
embargo aquí, desde el derecho privado y divino se quiere aplicar la Participación Popular. Con eso, de
una u otra manera, si bien se quiere afectar a la práctica de la concentración y acumulación de recursos
naturales económicos en pocas familias, de alguna manera sacar algo, pero en el fondo no se varía
mucho. La redistribución desequilibrada de los recursos económicos del Estado, continúa, si bien se
dice en la ley, que se quiere equilibrar esa distribución, en el fondo no es así; por ejemplo, Miguel
mismo dijo, sólo se destina el 20% del presupuesto, y ¿qué se hace con el 80%? ¿Adonde va destinado
eso?. Aquí podemos jugar con una desproporcionalidad de que el 80% de la población de Bolivia
recibe el 20% vía participación popular y, el 15-20% de la Población recibe el 80% de los recursos
del país. ¿Dónde está entonces la justicia? ¿Dónde está ese equilibrio y vanagloriado justicia social?.
A esto se suma también una falta de ejercicio pleno de los derechos humanos de los Pueblos Indígenas,
de las Naciones Originarias con una identidad propia, hasta ahora, si bien se discute, convocado por
el sindicato, pero aún no están tomando sus derechos como tales, esto es otra cosa, eso requiere de
mayor profundización. Por todo lo anterior, entonces vamos a constatar una especie de
coincidencia, además no es mi constatación, ya lo han dicho otros, es que por ese proceso se dice que
la pobreza de los Pueblos Indígenas crece cada vez, hay menores posibilidades de acceso a la tierra, el
territorio está para el olvido y aquí es donde vemos esa constatación, de que "los territorios de los
Pueblos Indígenas coinciden con la mapa de pobreza", inversamente, por el otro lado si podemos
hablar de los empresarios privados, digamos de la bonanza o la rentabilidad de las empresas
privadas, esto coincide con la corrupción y los narco-vínculos, o sea, había que profundizar estas
hipótesis, por un lado ya está constatado que la mapa de pobreza coincide con territorios indígenas, y
además eso está claro porque las peores tierras están en manos de estos pueblos, las mayores y
mejores tierras están en manos de estos empresarios. En este último se requiere de mayores
investigaciones. Entonces, ¿cómo no va a coincidir la pobreza con los territorios indígenas? Los
otros, además de estar con territorios mejores, están metidos, y lo que falta es sostener eso, con la
corrupción en la administración Estatal y los narco-vínculos. Casi todos los empresarios prósperos
se mueven en esa situación. Entonces, esto está provocando mayor diferenciación, mayor
malestar, mayor convulsión, conflictos permanentes y fragilidad a la democracia, ahora aquí la
pregunta, es ¿qué hacemos los bolivianos para enfrentar esa diferencia y la agudización de la pobreza?.
Entonces ésta es la situación, y en este sentido, en ese proceso de desestructuración, de la erosión
continua de los suelos; se da esta medida de la Participación Popular. Resumiendo se puede decir, con
Participación Popular o sin ella, el proceso de consolidación de la colonización persiste y va a
persistir todavía, mientras no se reconozcan esas demandas insatisfechas como el territorio y un
ejercicio político pleno de los Pueblos Originarios, y con ella hacer un desarrollo autosostenible; la
situación de la pobreza y la marginalidad continuará, la contradicción indígena y no indígena se
agudizará.

Nueva Estructura del Estado, en el Nuevo Contexto del Sistema

a) Reterritorialización por complementariedad recíproca de regiones

Como hemos mostrado y analizado las prácticas y bondades de la complementariedad territorial


Inter.-ecológica, de regiones eco sistemáticas, puntos 2.2.3.sobre designio territorial complementario y
la armonía complementaria de los pueblos originarios en el cuadro del punto 3.2, bajo esa orientación
matricial, planteamos la reterritorialización del país en tres regiones de complementariedad espacial,
donde se articulan en 3 departamentos en cada región, buscando la complementación -armonización-
de bondades y riesgos de los ecosistemas agro climáticos y selvícolas, con orientación transversal.
Veamos esa relación en el cuadro siguiente:

ECOSISTEMAS DEPARTAMENTOS COMPLEMENTARIEDAD


ESPACIAL
La Paz Pando Beni Región I

Altiplano y 55.840 0 0
Cordillera. 41.056 0 0 37.089 Km. % 55.840 13.57
Valles y 63.827 213.564 41.056 9.98 314.480
Yungas...... 76.45
Llanos......

133.985 63.827 213.564 411.376 100.00


Oruro Cochab. Sta. Cruz Región II
Altiplano y 53.588 12.753 0 0 66.341 13.83 61.231
cordillera.. 30.683 30.548 12.76
Valles y
yungas......
Llanos...... 0 12.196 340.073 352.269 73.41
53.588 55.632 370.621 479.841 100.00
Potosí Chuquis. Tarija Región III
Altiplano y 111.240 10.074 2.759 124.73 59.83
Cordillera. 6.978 36.819 22.237 0 66.34 31.84 17.258 8.32
Valles y 4.631 12.627
Yungas......
Llanos......

118.218 51.524 37.623 207.365 100.00

b) Estado con Pueblos y Naciones

Retomando articulando y evaluando, el inciso que antecede los puntos 3.2. y complementando con
la estructura de los pueblos de los llanos orientales de la amazonía y del chaco, al cuadro del 3.3.
Sobre la superposición de los pueblos y las naciones con estructura de la república actual,
desarrollando el artículo de la CPE y la ley xxx, de ratificación del convenio 169, pluralizando y
democratizando tanto las instituciones estatales, con pleno ejercicio de los derechos de los pueblos
indígenas, serían las insumes bases para reconstruir un nuevo Estado con naciones y pueblos. El
problema está en renunciar tanto intereses oligárquicos como posiciones radicales etnocidiarias.
c) Complementariedad y Armonía
Ver el punto 3.3.
2.4. Estructura y proceso de desarrollo del Qamaña / espacio de bienestar

Mario Torrez E. 2

El escrito del Qamaña enfoca no solo su simple traducción con "estar, lugar de vivir", sino,
se ve mas allá en su proceso espiritual y material de vivencia de la gente principalmente,
aunque puede tratarse también del animal o vegetación su qamaña.
La oscuridad de ideas al respecto, viene de considerar el proceso de su desarrollo de ese
lugar, espacio de vivencia de la gente, como:
Qamasa/sitial del ser
Qamawi/lugar de convivencia
Oamasa/energía del s e r
Oamaña/lugar, espacio de bienesta
Y peor oscuro cuando se completa el asunto con el Jaka/vida, y jira/muerte"; es que donde
nos hundimos todos, cuando queremos interpretar accidentalmente. Pues, frente al modo de
p e n s a r occidental al cual queremos acercarnos somos ya "ignorantes", ya nos
encontramos con otros elementos de juicio y caemos con grandes equivocaciones, eso deja
invalidado la idea y pensamiento de nuestro pueblo; para evitar errores es mejor adecuar el
saber y modo de pensar occidental al nuestro.

1 El texto ha sido escrito en diálogo con Simón Yampara H.


2 Químico Industrial agrónomo, andinista y docente del Inti Andino y miembro del
Directorio de CADA.

En cuanto al desarrollo del Qamaña, lo que la gente-comunario lo experimenta, es


diferenc iar la unidad Qamaña y Jakaña concatenadas:

Jakaña / bienestar del hogar en la casa


Qamana / bienestar de la comunidad en el Ayllu

Y referido a la espiritualidad en el Qamaña, necesita acercarnos y concentrarnos a la trilogía


que tiene:

Qamasa - Existencia de nuestra energía del ser


Jakaza - Existencia de nuestra vida
Jiwasa - Terminación y nacimiento de nuestro ser, como transición

Finalmente se llega a los centros poblados/ciudad, donde el Qamaña/bienestar de la comunidad


en el Ayllu, es poco o nada notorio, se manifiesta más como Jakaña/bienestar del hogar en la
casa, exige seguir viviendo generando el Qullqa/despensa "riqueza " con su espejo Qallqu/
cantidad y valor, que nos dará la finalidad de los ayllus y markas, TRABAJAR -
ESPIRITUALIZAR (nos). De modo que Qamaña puede pervivir en las comunidades del campo
y comunidades de la ciudad.
1. Introducción

La relación interdependiente de los seres y sus problemas en animales, vegetales y gentes en su


existencia, nos lleva a sentir y reflexionar sobre nuestro bienestar interno, como personas
familias y especies con nuestro entorno. Preocupación manifestada del ser: en su Sitial. Vida y
Muerte: en que medida nos concierne en su desarrollo como gente, con espacios de acción y
tiempo de oportunidades perdidos o ganados de nuestro ser, estos conceptos en el idioma
aymara nos mantiene perplejos sus conceptos, hundiéndonos en la confusión, como se ve a
continuación:

4. Qama/Sitial
Lugar del ser
Jaka/vida
Ser integrado en la vida
Jiwa/muerte
Transición de lo bello
(Agradable)

3. Qamasa/Energia del ser


Nuestro lugar de ser
Jakasa/nuestra vida
Nuestro poder de vida
Jiwasa/nuestra agradabilidad

2. Qamawi/lugar de vivencia
Lugar de subsistir y convivencia
Jakawi/Lugar de vida
Lugar de convivir del ser
lugar de agradabilidad
Jiwawi/lugar de Muerte
Nuestro lugar de ser

1. Qamaña/Lugar de existir
Lugar de bienestar y Felicidad.
Jakaña/lugar de vivir
Lugar donde se desarrolla un ser.
Jiwaña/lugar de morir
Lugar agradable.

• Estas concepciones puntuales que se irán filtrando y reacomodando nos indicarán, cuales
conceptos, aglutinan o se entrelazan.

Confusión y Oscuridad
Si completamos estos factores incidiendo más en la muerte/Jiwa, encontramos que es
muy patético, sombrío y desolador para el común de la gente y se encuentran en la
oscuridad casi completa.
Muerte/Jiwa
Es un '"Ser que sale de la vida
La Muerte, para nuestros antepasados, es un espacio Jiwaki / Bonito, muerte en acción, Que es:
Preguntado Kunachak
Admirado y Kusachaki
Deseado Askiki

Nuestra existencia no percibe las cualidadedes de la vida, en su desarrollo compartido


con la muerte, que es bello y bueno por que da nacimiento a un sitial de la vida, en un
espacio de existencia.

De la oscuridad a la claridad.

Primero hagamos que exista un ser "imaginativo" movible y veamos la transversal 4 y 1 de


las columnas 1,2,3- Entonces nos acercaremos a comprender algo filtrando y
reacomodando los anteriores 12 conceptos, que se reducen a los 6 conceptos siguientes:

4 Qama/sitial Jaka/vida Jiwa/muerte

1 Qamaña/lugar de Jakaña/lugar de Jiwaña/lugar de


existir vivir morir

Estos 6 conceptos evidencian una clara correlación significante, a primera vista de la


"mente humana" occidental los conceptos se entrelazan en la oración siguiente:
4. La vida y la muerte tienen sus lugares (la casa y el cementerio) aquí, no indica
proceso.

1. El vivir y el morir tienen un lugar de existir (un espacio de acción) aquí, si indica acción.
Sin embargo en el concepto a y m a r a es más significativo, cuando se pregunta por el
Jiwaki/bonito, esa muerte agradable, se admira por lo extrañamente suave y bonito, y se
desea por que se reproduce la vida.
Finalmente, por tanto, los conceptos Qamaña, Jakaña y Jiwaña son integrantes, a su vez entre
ellas ocupan la posición siguiente:

Como se ve, aquí, el Jiwaña es parte del Jakaña; entonces el Qamaña y el Jakaña son mas
expresivos.

Concepto puntual del Qamaña y Jakaña

El Qamaña y Jakaña contiene elementos que caracterizan su razón de ser, y estos seres
son tres primariamente.
El desglose de conceptos afines al Qamaña, hecho en la introducción no ocasiona a
tener ideas puntuales diversas por cada persona dentro de una misma c ultura, y peor
para con otras.
Sin embargo, se ve algo común que se encuentra y se siente sobre la felicidad y
bienestar, en un determinado lugar/espacio, momento y situación, que buscan
aunque varíe el modo de sentir ese gusto y sensación de bienestar y felicidad, en
existir lo que el i n d i v i d u o puede tener sensaciones a través del espíritu.
El individuo como la familia, los cultivos y animales viven y existen, el suelo y agua
viven y existen también por que tienen la esencia espiritual de la naturaleza en cada
ser. Al no haber espíritu es considerado como muerto, esto es que simplemente tiene
energía pero sin razón, el espíritu es un ser, como la esencia dentro la parte material; de ahí
que el Qamaña sea un lugar respecto al individuo; y "espacio" convencionalmente se diga a
un lugar más amplio, como la de una comunidad; y el de todo los seres característicos de
un medio como los ecosistemas o piso ecológico suni/altiplano, qhishwa/valle, y
Yungas/Yunka son Qamañas para los seres que se mueven.
¡Qué lo hace! que en un lugar de ese espacio del Qamaña se sientan como bienestar y
adquieren cierta "felicidad", aunque seamos pobres?
La correlación de los elementos conceptuales se expresa de la siguiente forma ó manera:

Qamaña/lugar de existir

Espacio Presencia Presencia gente Presencia


externo vegetal
de existencia animal

Con instintos naturales

Espacio Reproducción Reproducción Reproducción


externo vegetal gente
de vivencia animal

Con emociones y pasiones

Ahora se debe advenir que hay otros seres complementarios que le dan la conformación
natural, tierra, agua, serranías y cordilleras, donde los seres espirituales están latentes.

2. el desarrollo en el qamaña

Nuestro pensar y lógica es deferente con el sistema y del Desarrollo parece ser diferente
también los conceptos, de hecho no son iguales, salvo en Algunos casos.

En nuestros ademanes y rasgos de tonalidad del vocablo en aymara mismo, nos indican a lo
que nos referimos en la pronunciación de una idea en su concepto, así una palabra puede
tener 2.3 hasta 5 6 6 conceptos diferentes. Y es mucho más la diferencia de una palabra
aymara con el español.

Nuestro pensar y lógica es diferente con el sistema, como se ve a continuación:


AYMARA. DEL AYMARA AL ESPAÑOL

Jiwaki 1. Muerte, 2. Bonito

Nairaxa? 1. Pasado, 2. Presente, 3 Futuro

Aliqa 1. Brotar, yemado del vegetal


2. Simple ó común,
3.Tranquilo,
4.Con movimiento,
5 Sin movimiento,
6.Agregado ó incluido.

La palabra en español indica:


Desarrollar-dar incremento

Para comprender el sentido de la expresión desarrollo, primero veremos lo que piensa el


sistema occidental de la república de Bolivia, y luego se verá el sentido aymara.

Desarrollo en Bolivia

Lo que muchas personas tienen su preocupación es sobre su bienestar y felicidad, donde


el Estado Boliviano también busca el desarrollo de la República como sinónimo de
bienestar, aun peor cuando dice que potenciando a las empresas privadas se
encontrará un bienestar de Bolivia, por que darán más trabajo a los obreros. Esto querría
decir que con el dinero encontrarán el bienestar, posiblemente sea la comida, la ropa,
educación de hijos y su salud.

Entonces, lo primero en el sistema, es tener dinero y luego la comida, con ese pensamiento, los
empresarios privados quieren más plata, que ratifica el Ministerio de Finanzas en su
expresión (6 de octubre de 2000) " De toda la plata que se presta Bolivia sólo va a unas
cuantas familias, de 3.000 millones de $us. Sólo manejan 30 familias, esto es (3.000 personas)
el 70% de ese dinero, no bastando eso, el Estado tiene que pagar sus quiebras, como las
empresas agropecuarias, empresas financieras principalmente y vinculados a la
oligarquía. Con este sistema de operaciones de leyes y prácticas de la democracia
republicana del Sistema; los pueblos originarios son empujados a comprender mal el
rumbo del desarrollo.

Desarrollo en las Qamañas de las Markas.

En el pensamiento y lógicas dentro los amawtas/pensadores, es conocido e interpretado la


Qamaña. Pero, esta vivencia en el común de los comunarios, aunque lo viven y dicen
instintivamente como la "existencia de vida en un espacio placentero y satisfecho de
bienestar (alejado del masoquismo, por veces incluido con ciertos rasgos) muchas veces
expresado como Suma Tamaña. Ese proceso del desarrollo que se suscita en el Qamaña se
muestra en el cuadro siguiente; en sentido hierático.

desarrollo hierático del qamaña


esto es el desarrollo en el qamaña. es una lucha
del bienestar a la vida

TIPIFICACIÓN DEL PROCESO ………..ESTRUCTURA PROCEDIMENTAL

4. TRANSFORMACIÓN: 2do. Aprender a morir


Sitial de la línea espiritual
Qmasa siqi
3. ADMINIOSTRACION: Dirigida a un fin
Cuidado físico espiritual
Qaman y Pachaqamana

2. REPRODUCCIÓN: 1ro. Desarrollar nuestro bienestar


Célula de la Vida
Del jakaña del Ayllu
1. DISPOSICIONES DE VALORES DEL SER
Unidad (1) de la Diversidad (6)
Quqi como Taqi Jaqi como Taypi
Género de seres Animales
Personas
Vegetales
0. DEFINICIÓN

Jakaña Qamaña
Bienestar del Hogar Bienestar de la
en la casa Comunidad en el Ayllu

Alaxpacha achachila Espirito de los universos cósmicos

Qullan apu Espirito que vive en toda la naturaleza

Pachaqama Espirito que está trasuntado en el día y noche


Espacio de tierra.
Gente, cultivo (vegetales) ganado (animales) etc.

Cuidado y manejo de la especie


En el manejo
• El jaqi, administrador de bienestar por parte del pachaqama, lo hace como:
Responsable del Responsable del Responsable del
Cuidado animal Cuidado de familia Cuidado agrícola
Denominado respectivamente:

Uvwa Qamana Jaqi Qamana Yapu Qamana

Esto es responsable del cuidado físico e instintos, de las emociones y pasiones.


Mira (Reproducir) Reproducción animal
Reproducción gente
Reproducción vegetal

SIPI Qamana, cuidador de las líneas de especies


Uywa qamana; cuida la especie animal
Jaqi qamana; cuida la gente
Yapu qamana; cuida la especie de cultivo
3.3. desarrollo material y espiritual

• El hombre y la mujer conviven con la E s p i r i t u a l i d a d administrativa de la


naturaleza.: En el tiempo y espacio del Jaqi
tiempo espacio gente
Pachaqama noche aran mujer
día urin hombre

• Necesidad y satisfacción complementarios (M y H) traducidos y practicado, confiado


y deseado, en el respecto a la creación y felicidad
• Donde el Jakaña da y recibe la vida del Ayllu en el mundo interno de la creación
pasional.

Donde qamaña es el mundo externo de la reproducción del bienestar del Vivir y


existir, siendo el motor de ella el Jakaña en la tierra del Ayllu. y el Jaqi.

Japhalla (Espirito) Manto espiritual de Pachaqama

Inkillu jiliri:
Crecimiento de lo mejor Penetra el espacio del desarrollo del bienestar de su Ser
de productos del Jaqi (gente) uywa (animal) yapu (vegetal) cultivo

La fuerza Jaqi/gente en el Desarrollo


Aquí se encuentra el Desarrollo equilibrado y complementario en lo material y espiritual en la
casa/uta del ayllu, donde la mujer juega la gran importancia social y biológica,, económica y
productiva en su fuerza de trabajo.
Urinsaya taypi Aransaya
Hombre vatu Mujer
Corroborado por la fuerza productiva de la Pachamana/mujer

Una fuerza continuada social y biológica


Fuerza productiva de la mujer
Dos fuerzas intermitentes, economía y productiva

Completado por el hombre en el ayllu

Dos fuerzas intermitentes


Fuerza productiva del hombre
Una fuerza continúa, económica y productiva

La competencia del desarrollo con el sistema


Hoy en día el desarrollo material nos empuja y obliga ha competir, sacrificando parte del
Qamaña, perdiendo algo de la complementariedad equilibrante. ¿Se corre el riesgo de la
subsistencia del bienestar?.
Si se piensa por el bien, podemos entrar a la producción Inkillu, cuidando la
complementariedad del qamaña, donde el Inkillu/lo mejor de los recursos naturales, en la
reproducción y producción o transformación dirigida; sin descuidar la espiritualidad
suprema equilibrante, y la espiritualidad natural de los recursos propios, humanos, animal,
vegetal, pachamama, umalmama, de aquí se abre la importancia del Quqi/especie, Siqi/línea y
Jaqi/gente.

Que necesita el concurso de los amautas / personas de saber y experiencia, para no perder
la manera de pensar de la línea humana de los ayllus, que necesariamente tenemos que usar lo
mejor de los inkullas en el T'inku/competencia.

4. espiritualidad en el qamaña.

En unas cuantas palabras, se dice, se expresa de algo nuestro: nuestra energía


espiritual/Qamasa, nuestra vida/jakasa, nuestra muerte/jiwasa, está relacionada estas
cualidades, en el QAMAÑA, concretizados, que conforman un tejido del bienestar
del espíritu, vida y muerte, donde lo material esta cementado por la espiritualidad.

Mostrándose con amplitud complementaria, que podíamos decir la conexión con lo


material de la energía del Qamaña/en el lugar del bienestar. Entre ambos e s t á n
conectados (pareciera existir diversos tipos de espiritualidades, mejor dicho
espíritu)

La energía espiritual del universo La energía espiritual de la


tierra

Qamaña
Lugar y espacio material
de seres de sentimiento e instinto,
Inmerso en la energía espiritual
Cuya representación visual de esa virtualidad, que manifiesta efectos en nuestro ser, que
manifiesta efectos en nuestro ser, fenómenos y efectos espirituales de la naturaleza ,
con cierto grado de incidencia en el comportamiento de los seres que se mueren.
Ese "su lugar de la vida de la gente/jaqi- jaqinakan utjawipa, se muestra como una
cosmovisión de los pueblos originarios en el siguiente esquema:
El concepto del bienestar de nuestro ser, en la naturaleza, concierne al Qamaña, y esa
cualidad de apreciación se nota en los siguientes elementos:

jaki - jaqinakan utjawipa

QAMASA JAKASA JIWASA

Existencia de nuestra Existencia de nuestra Terminación y


energía del Ser. vida nacimiento de nuestro
ser, como transición.

• Donde los complementos Alaxpacha y Uraqin (por extensión es uraqpachan), es "en


el espacio de las estrellas'' y "en el espacio de la tierra" respectivamente.
• Y el chakanan quiere decir "en la cruz del sur" y tiwanan "en la mesa de piedra", ambos son
reflejos de 4 direccionalidades de espacio.
• Donde el lugar del chakana como la cruz del Sur, es el espacio de lugar de la deidad
entre las wara-waran/con estrellas; y el lugar del tiwanan/en la mesa de piedra, es el
espacio de lugar del jaqi entre el Qamañan/con el lugar de bienestar, esto es de los Titi
(espacio de agua de tierras altas), Illa (espacio de agua de tierra baja costa) Apu (espacio
de tierras altas), y Ohapa (espacio de tierras bajas)
• Consecuentemente Waranqani quiere decir "con millones" en el wara-waran, de manera
análoga Qamirini quiere decir "con riqueza en el Qamañan.

En síntesis el Qamaña conjunciona la riqueza espiritual y la riqueza de bienes, en su amplia


concepción.

Jaki-Jaqinakan utjawipa

ALXPACHAN (A) Y URAQIN (A)


Chakanan Towanan

Titi

Illa Apu

Qhapa

Lugar de la deidad lugar de los jaqis


Wara waran Qamañan
Waranqani Qamirini
Hacen la complementariedad
Lo espiritual y material en el Tamaña

El tamaña en la ciudad

El Qamaña en el área rural, está conformado coherentemente sus condiciones, y manifestada


con mas intensidad su espiritualidad, donde los seres tienen sus energías.

. Vegetal .. gente . . animal .


tierra - cordillera - agua

Precisando el Qamaña en el área urbana, está perdido en el espacio de urbe ciudadana, donde
hay un valor de los principales elementos de la red holística: vegetal, gente, animal-tierra,
cordillera- agua.

Aquí, el espacio de poder del Qamaña se arrinconó extrañamente, sin presencia externa clara,
pero manifestado en el hogar, entonces el espacio del Qamaña se traduce al lugar del hogar, con
diferentes elementos de red holística.

Yapu . Jaqi Uywa

Producto Mujer Hijo Producto


Vegetal Hombre animal
Casa = hogar
Espacio deK'ultha ' trabajo
calles, sin espiritualidad
manifiesta •

Aquí funciona mas el jakaña/espacio del lugar de vivir- sobrevivir donde se desarrolla el
jaqi, aquí la actividad de campo kani de trabajo alegre se traduce a k'ultha, trabajo con
cierto grado de desazón; aquí el trabajo social con los cultivos y animales, ya no existe; sus
productos están en otras manos para servir como productos alimentarios.

El comunitarismo alcanza sólo cuando esta bien cultivado, y manejado con los utäk'a/vecinos;
donde el vegetal y animal, ya son vecinos como personas que necesitamos tratar, contra forma
y tipo de relación armónicamente. Hay que adaptarse a otros valores culturales hecho por
nosotros.

JAKAÑA

Yapu Jaqi Uywa


Masi juiracha Mujer Hijo Hombre Masi Jaqt’acha
Utaña Uyaña
Proveedor (casa) (morada) Proveedor
K’ultha/trabajo
Thakhi K’ullkunaka
(Calles)

Las familias rurales aymaras que emigran a las ciudades, ya que se ven extraños, se sienten
algo ajeno, aun en su propia territorialidad.

Aquí se evidencia la ausencia de la fuerza telúrica especial de la naturaleza, ya no hay la


esencia espiritual, se quedó en el área rural, sólo está el j a q i en otro espacio el tejido
holístico mediato a adquirir del jakaña, en otro espacio de convivencia natural que es
por el Ulaña/morada, luego por el Utaña/casa, cimentado con el k'ultha/trabajo;
simultáneamente nos relacionamos con el masi juiracha/personas que nos proveen
alimentos vegetales, y masi jaqt'acha/personas que nos proveen alimentos animales (ya
perdimos el producir conviviendo con los cultivos y animales, y la influencia espiritual de la
tierra, de las fuerzas espirituales de la naturaleza, y de los seres, con los cuales estuvimos
consubstanciados) y con el caminar en los espacios thakhi k'ullkunaka/ calles.

La espiritualidad mayor a desarrollar espacialmente del jakaña, depende de la práctica de


vida y existencia que tenga en su contorno, con los demás seres citados- masis, utaña, uyaña,
k'ultha, thakhi- k'ullkunaka y con los uták'a/vecinos, esa espiritualidad mayor es
justamente con las uták'a, que puede conformarse el "Qamaña" más plausible en la ciudad de
El Alto, y en zonas suburbanas y barrios marginales de otras ciudades.

El desarrollo d e l j a k a ñ a en las ciudades es posible llegar e s piritualmente al


"Qamaña". Si analizamos la espiritualidad, comprenderemos algo:

1 * Alaxpachan chakana
fuerza cósmica de la deidad
2 * Personificación en el
Qullan Apu
3 * Suprema deidad
que canaliza las energías espirituales
4 * Espiritualidad que se manifiestan
en determinados lugares de un espacio
5 * Pueden ser en el Qamaña
puede ser el jakaña.
6 * El jakaña puede
reconstruir el Tamaña

Estos conceptos clarifican la idea del espacio y lugar que ocupan el jakaña y qamaña; que pueden
conectarse con el Qamaña rural de la naturaleza.

QAMAÑA
Jakañ JAKAN Jakañ
Yapu JAQI Uywa
El proceso del desarrollo del Jakaña. y su "equivocación correcta" se aclara mucho mejor
por el concepto aymara del Pawnaqi/movimiento por encontrar lo correcto, esto es al
jakaña/vivir y el jaqi/chacha-warmi que quiere decir gente/hombre-mujer.

Ahora, la necesidad natural de vivir de los seres jaqi y uywa, son pedidas por el:
- a) Instinto natural del animal en acción ritual.
Ritual: costumbre, regla establecida por el comportamiento hierático.
- b) Pasión natural de la gente en acción instintual.
Instintual: impulso natural que determina los actos.
Referido al jaqi, que es donde se manifiesta la acción de vivir la pasión y el instinto por el
katu/encuentro por la supervivencia, este proceso de actos ordenado hieráticamente
(relativo a las cosas sagradas), es donde el jaqi demuestra el grado mayor de sentimientos
que concibe, en el esfuerzo por el bienestar de la existencia, por una supervivencia
espiritual un ser que percibe en otro ser material, cuya inferencia del proceso es:

Proceso de transmisión de seres

1.- Disposición de energía biológica Espíritu de hombre Espíritu de mujer


PaQalquel 7 Kimsa Qalqu el i

2.- Preparación Contraer fuerza (Katu)

3.- Transformación. Vida (Jaka)


En el acto''Mujuqa
Después del acto/jalaqa
Crear/Inuqa

4.- Producto Venido un cuerpo (Jalaqta)

Este mundo de prácticas de vivencia, tocada, es el espíritu de los corazones que


expresan su principio y finalidad del bienestar del jakaña/vivir, que teje en la virtud
del Qamaña/espacio de bienestar en una comunidad de seres materiales y
espirituales en existencia armónica ("felicidad"?).

Este pensamiento del Qamaña muestra una forma de la felicidad, que ayuda a comprender el
destino que labra cada una de las familias, y a escarbare! tesoro de conocimientos, como el
Mujuqa, jalaqa, inuqa, jalaqta, que expresan la riqueza espiritual, en metáforas realísticas que
nos empuja a apreciar la felicidad, la riqueza. En este sentido el inuqaña/contar con piedras
nos indica:

Pa Qallqu el 7 expresa el sentido de Quri/oro Sol u hombre


Kimsa Qallqu el 8 Qulqa/deposito y dispensa Qullqi/plata Luna o mujer
Que encierra el valor de la reproducción humana y mantener su bienestar con otras
especies de seres en un pueblo, con espacios de felicidad morir para vivir, pero seguir
existiendo.
2.5. Sistema comunal: una propuesta alternativa al sistema liberal

Felix Patzi

Superar el etnocentrismo indígena y el localismo agrario

Hasta el momento los estudios antropológicos y también las tendencias políticas del indigenismo y
del indianismo han enfatizado en el análisis del entorno de las sociedades indígenas, o sea en los
aspectos simbólicos o culturales. De ahí que, existen muchos estudios sobre la cultura quechua
aymara y poco respecto de los pueblos de tierras bajas. Hay estudios sobre la religión, es decir a
todo lo que se llama cosmovisión andina. Para la mayoría de los antropólogos por ejemplo las
sociedades andinas se reproducen mediante la reciprocidad y la redistribución, Tal como dice Albo
"cada comunario recibe de la comunidad, él a suvez debe también correspondería cumpliendo todas
las exigencias, incluido los cargos de autoridad cuando Te toque". Incluso los poderes de los
seres sobrenaturales se conciben con frecuencia dentro de esa lógica: cada año a alguno de los
cerros o achachilas tutelares le "toca" ser el principal protector de la comunidad, pasándose así el
turno de uno a otro"1.

Hacen ver como que los cargos públicos se hace por la acumulación del prestigio o sólo como
una obligación consensuada entre todos los comunarios y no como que esto se debe a la
obligación de hacer cargos políticos y religiosos para mantener o poder acceder a los recursos
materiales que es el ele mento central en la reproducción de las familias, de ahí para nosotros el
prestigio sólo es consecuencia o efecto de esta relación de obligatoriedad.

Otro de los espacios de la reciprocidad analizados por estos autores es los trabajos comunales
como la mink'a, el ayni. En este sentido, no analizan la propiedad comunal como un ele mento
central de la organización comunitaria que podría erigirse como alternativa a la organización
privada de recursos naturales. Por eso que últimamente, desde una posición más política, se
incorporó el tema de tierra y territorio considerándolo solo como una posibilidad de
conquista en los marcos de la legislación del Estado. Ven al territorio solamente desde el
punto de vista jurídico; o sea lo ven como algo desligado de la máquina social. Se puede
decir que el territorio, como una delimitación jurídica espacial de una porción del planeta, es un
concepto arquitectónico donde se remite solamente a establecer la extensión "continua". En
este sentido, es visto como algo inerte sin sentido social. En realidad el territorio no existe o
no tiene sentido sin la máquina social, y hablar de la máquina social ligada al territorio implica
hablar el tipo de gestión de recursos que existe sobre ella y la forma de la organización del
poder. Por lo tanto gestión y territorio son una unidad que obedece a la forma de
estructuración de la máquina social, donde se juegan diferentes intereses entre los diferentes
agentes sociales.

Con esto se afirma que el concepto de territorio, como un espacio físico expresado o
formalizado en términos jurídicos, no existe como existencia en sí misma sino que está
comprimida en un tipo de estructuración social que ha ido cambiando conforme a los ciclos
históricos. En la era capitalista, por ejemplo, la construcción de Estados nacionales y las
conquistas, las consolidaciones de los territorios nacionales expresa su sentido o su esencia en
la gestión de recursos en forma de propiedad privada y producción mercantil.

Este concepto nos lleva a cuestionar las definiciones de la noción de territorio del Estado, ya
que para ellos por ejemplo los criterios de delimitación de los territorios indígenas son:
• La cultura común.
• Un idioma.
• Espacio territorial.
Estas definiciones sólo toman en cuenta lo que denominamos el entorno del sistema
indígena, no el sistema mismo, ya que el sistema indígena se erige como un modelo
antagónico a la lógica capitalista (como veremos más adelante). Por eso que los recursos
estratégicos (madera, minerales, petróleo, etc.) existentes sobre el territorio indígena
reconocido siguen bajo el dominio de la propiedad del Estado y son explotados de acuerdo al
modelo de gestión privada y producción mercantil que es la base de su reproducción como
sistema.

Además estos criterios de conceptualización de territorio no son aplicables para las poblaciones
indígenas mayoritarias con territorios discontinuos (aymara y quechua) o sea territorios bajo
el modelo de control vertical de pisos ecológicos, estudia dos por Murra. Esto implica que en
términos de extensión sobrepasa inclusive la dimensión territorial de Bolivia (abarca desde
Colombia, Ecuador y Perú hasta Chile). Entonces, los que platean actualmente el
reconocimiento de territorios indígenas solo están admitiendo la consolidación de territorios
fragmentados durante la colonia y la época republicana. En este sentido, la reconstitución del
Tawantisuyo planteado por los aymarás y quechuas si bien tiene la posibilidad de generar
identidad en torno a ello, es imposible que pueda convertirse en una realidad. Por lo tanto, la
interpretación que ha dado el Estado en Bolivia sobre los territorios indígenas se refieren a
dichas fragmentaciones y que adquieren el nombre Tierras Comunitarias de Origen (TCO) y
Municipios Indígenas. El nuevo comunalismo del Estado no soluciona el problema de
soberanía y el tipo de gestión económica y política. La gestión comunitaria de recursos (por lo
menos en los recursos estratégicos) y la organización del poder comunal son temas relegados o
simplemente ignorados.

Por otro lado, las concepciones indigenistas e indianistas2 han llevado al error de concebir a
los indígenas como una identidad unitaria y armónica. Sin embargo, en el recurrido histórico
del colonialismo y particularmente desde la Revolución de 1952, en Bolivia, los indígenas
han ido cada vez diferenciándose los unos de los otros. En otras palabras, en términos de clase
o desde los intereses materiales o económicos no son nada homogéneos. Existen desde los
trabajadores manuales ocupados en diversas actividades productivas, profesionales,
comerciantes, transportistas hasta empresarios de gran envergadura. Estos últimos se han
convertido por ejemplo en una verdadera bur guesía que acumula el capital mediante la
explotación de la fuerza de trabajo, ya que tienen en algunos casos más de 50 trabajadores.
Obtienen mayores ganancias por medio de la prolongación de la jornada laboral, y del no pago
de beneficios sociales a los trabajadores. Para ello hábilmente han refuncionaliza-do la
reciprocidad andina, o sea, aprovechándose de las relaciones de compadrazgo religioso, de
padrinazgo y de relaciones de paisanaje hacen trabajar gratis o pagan muy poco, Por eso que
los trabajadores no pueden reclamar ni formar organizaciones contestatarias frente a sus
patrones, ya que las relaciones son más de tipo familiar que una relación externa o ajena tal
como ocurre con el propietario burgués criollo. Con todo esto se ha ido consolidando la
explotación de aymara a aymara, que evidentemente es una relación social ajena a la
cultura indígena, pero es una relación social contemporánea al interior de la sociedad
indígena. Por estas razones simples no podemos ver a los indígenas como una identidad
unitaria y única.

A raíz de estas diferencias económicas que se han ido cons truyendo en el recorrido histórico el
movimiento indígena no ha podido articular una sola propuesta polít ica, inclusive los fracasos
de los últimos movimientos sociales se deben a estos factores. Cada grupo social indígena
defenderá antes sus propios intereses de clase que de etnia. Por eso no es casual ver a los
indígenas que generan excedente económico, como militantes en los partidos de derecha
debido a que ven en ellos los únicos defensores de la actividad económica privada y como
peligro a sus intereses las posiciones comunitaristas. Frente a esto ¿qué hacer? ¿Mantener o
desarrollar esta diferenciación al interior del mundo indígena? En los intelectuales y políticos
que hablan de la reconstitución de las naciones originarias no queda nada claro, ya que
nunca se plantearon el tipo de economía que se pretende construir, particularmente en las
ciudades. No basta decir que en las sociedades indígenas existía armonía, paz y el equilibrio
entre la naturaleza y el hombre.

En este análisis también quisiera considerar respecto al tema de identidad, ya que es otro de
los postulados importantes que han ido enfatiza ndo los indigenistas y los propios indianistas.
Ambos han estado apelando a la identidad como necesidad de identificarse con la vida
histórica de los ancestros, es decir, con los rangos culturales como el idioma, la vestimenta, la
música, la religión. El conjunto de esos elementos es la expresión simbólica de las
sociedades; el entorno de los sistemas sociales. A partir de esta definición la élite política como
la élite intelectual indígena, la han convertido en una acción cotidiana de sus vidas. Por eso
que últimamente aparecieron en este círculo social personas con cabello largo, con
vestimenta que llevan símbolos que expresan la forma de vida de la población quechua o
aymara como la cruz cuadrada, wiphala y la hoja de coca. Aprovechan todo tipo de evento
para hacer ritualidades ancestrales como una forma de reivindicar lo que es lo indígena.
Piensan ellos que de esta manera se va construyendo una sociedad distinta a la sociedad
dominante criolla mestiza. Al parecer que nunca se preguntaron sobre las prácticas económicas
u ocupacionales y políticas en las cuales están insertos ellos mismos. Cuando se refieren al
concepto de ayllu, han enfatizado en la organización territorial geográfica. Se habla de
reconstitución de Qullasuyo pero nunca fue discutida la práctica económica o la forma de
propiedad y la forma de la práctica política como elementos de identidad diferenciadores de
los ejes centrales de la modernidad. En este sentido podemos decir que cuando se habla de
identidad más han primado los elementos culturales que el análisis económico y político.

Paradójicamente frente a esta tendencia de construcción de la identidad indígena vemos que los
jóvenes indígenas poco o casi nada quieren saber de sus ancestros. Son los que fácilmente se
incorporaron a los estilos de vida promocionados por la modernidad, de ahí que les guste vestirse
con ropas anchas, peinados de rock, escuchar o bailar música cumbia, tecno, etc. Poco o nada
saben de la música nativa, si es que saben solo lo hacen mediante los grupos nacio nales que ya
han estilizado esa música. La identidad ellos sólo la viven muy fugazmente, quizá en las fiestas
patronales u hora cívica de los colegios bailando t’inqhu o tobas como danzas más preteridas
por los jóvenes por tener la característica de agilidad para el movimiento del cuerpo. Se sienten
ajenos a sus ancestros o se consideran como no indígenas, pero tampoco pueden definirse a sí
mismos y por ello que, muy fácilmente, se identifican con grupos de pandilla. Desde ahí
reivindican valores propiamente modernos imitados a los programas de televisión. Hay muchos
que han llegado al extremo de castellanizar su apellido y de esta manera negar totalmente su
identidad indígena. Sin embargo, por las posibilidades económicas siempre están
condenados a un consumo cultural marginal, ya que la mayoría tiene padres y madres
ocupados en el comercio y el sector informal de la economía. Subjetivamente estos jóvenes siem-
pre tendrán una mirada hacia lo occidental o norteamericano como la mejor cultura y digno
de imitar. Para ellos hablar de identidad indígena es hablar de un retroceso como algo arcaico.

Entonces ¿cómo solucionar esta paradoja, es decir, unos que niegan y otros que refuerzan la
identidad indígena? Para los indigenistas y los indianistas tendrá que ocurrir una revolución
mental y una concientización a esta población para que después se reincorporen a su propia
identidad. Este sí es un planteamiento utópico ya que esto es difícil de revertirlo en un contexto de
globalización. Así, seguirán consumiendo lo que produce la modernidad. Como se trata de un
elemento del entorno no habría ninguna necesidad de cuestionar ni formular políticas al
respecto, ya que es una decisión individual que ocurre en el plano de la moralidad y que no
afecta al sistema comunal que plantearemos posteriormente.

Este análisis culturalista o romántico de las sociedades indígenas al resaltar solamente los
elementos del entorno han descuidado la presencia de los elementos del sistema comunal en las
estructuras organizativas modernas y organizaciones urbanas. Los migrantes no solamente
reprodujeron en las ciudades los sistemas simbólicos sino también se organizaron políticamente
bajo las formas comunitarias, tal es el caso de las organizaciones de Junta de Vecinos de los barrios
populares con población predominantemente de origen rural. En estas organizacio nes, por ejemplo
las decisiones son tomadas en la reunión de todos los miembros de la zona y la directiva de estas
organizaciones funge solamente como la expresión de la decisión de la asamblea. La elección de
la directiva, en unos casos, se hace mediante la competencia de frentes o a través de
nominación directa. Esto último es una posición intermedia entre lo comunal y lo liberal, ya que
para ser totalmente comunitario debía ser elegido mediante la rotación y obligación. Tampoco es
totalmente liberal ya que no recurre al voto secreto. Sin embargo, en ambos casos no son
representaciones autonomizadas tal como ocurre en la lógica liberal. Por lo tanto, la forma de
representación comunal o liberal dependerá mucho del grado de persistencia del elemento
comunal de cada organización barrial.

Como en las comunidades rurales, en muchas zonas urbanas, para acceder a los servicios
sociales como la luz, agua y educación, el miembro de la zona está obligado a realizar cargos
de la directiva o algunos tareas de servicios a la comunidad; además de asistir obligatoriamente
a las asambleas y trabajos comunales, que puede ser la construcción de la infraestructura
educativa, construcción o mejoramiento barrial, etc. Sin embargo, todas estas potencialidades
no han sido mostradas por los indigenistas.

De igual forma se encuentra el elemento comunal en las organizaciones más modernas, como
ser las organizaciones de sindicatos, comerciantes y artesanos. Por eso que aparte de que la
decisión se centra en la colectividad, éstos tienen la capacidad de cohesionar a todos los integrantes
del gremio para asistir en las movilizaciones sociales y en la adquisición de sus demandas.

Por tanto, a partir de estas observaciones podemos señalar diciendo que lo comunal no solamente
es una práctica social de las sociedades agrarias y antiguas, sino es también una práctica urbana y
moderna.

Sistema y entorno, una aproximación teórica para el análisis de las sociedades

Si bien estos conceptos, sistema y entorno, son rescatados de la teoría de sistemas de Niklas
Luhmann3 , sin embargo el contenido que plantearemos es totalmente distinto. En primer lugar,
Luhmann analiza la sociedad moderna, en la que los diferentes campos, como el campo
económico, político, cultural, religiosos, artístico, educativo, etc. se han ido cada vez
autonomizándose hasta el extremo de tener su propio nomos, o sea su propia ley. Son sistemas
que tienen la capacidad de producirse y autorreproducirse así mismas. Por ello, para el autor los
sistemas son operativamente cerrados o autopoiéticos. La diferencia que establece entre
sistema y entorno esencialmente se refiere al establecimiento que se da entre los sistemas. De
ahí que entienda Luhmann por sistema a un conjunto de elementos interrelacionados entre sí, cuya
unidad viene dada por la interacción de estos elementos y cuyas propiedades son siempre distintas
a las de la suma de las propiedades de los elementos del conjunto. Mientras que el entorno se
refiere al conjunto de elementos que tienen influjo sobre los elementos del sistema o que son
influidos por él, pero que no forman nunca parte del mismo sistema. El entorno sólo consigue su
unidad a partir de la relación con el sistema, pero él mismo no es un sistema y cada sistema tiene
uno diferente4.

En este sentido, para Luhmann el sistema social es un sistema omnicomprensivo que ordena
todas las comunicaciones posibles entre los hombres. En este postulado cada subsistema como
ser la política, la economía, la religión, la educación, la ciencia, la medicina, etc., se han
ido diferenciando unos de otros. Comprendido así, cada uno de estos subsistemas actualiza
la sociedad desde su respectivo punto de vista, según la correspondiente perspectiva
particular sistema/entorno. Vista de esta manera, el sistema científico y el sistema educativo
—dice el autor— pertenecen así al entorno social del sistema político, y este último
pertenece a su vez al entorno de la educación y de '?. economía5 .

Así una sociedad organizada en subsistemas, para Luhmann, es una sociedad que no dispone de
ningún órgano central. Es una sociedad sin vértice ni centro. Mientras mi planteamiento con-
siste en que toda sociedad tiene su esencia o centro y una periferia. Esta diferencia sin duda es
comprensible debido a que la preocupación de Luhmann es la de preservar la sociedad moderna,
por eso que podemos ubicarlo dentro el paradigma de una teoría general de estabilidad. Mientras
que nosotros proponemos como una teoría de transformación. Entonces veamos.

En mi análisis todas las sociedades siempre han desarrollado un centro y una periferia 6 , no
sólo en cuanto se refiere a la organización de la sociedad, sino fundamentalmente en cuanto
se refiere a su propia filosofía. El centro constituye el vórtice de la sociedad que es el
sistema mismo y la periferia es el entorno que en alguna medida actúa como legitimizadora del
sistema. Por lo tanto, el sistema es el núcleo que hace lo que una sociedad históricamente
se diferencia de una y otra. Mientras que el entorno sólo actúa como coadyuvador en el
desarrollo del sistema.

En este sentido, una sociedad, para garantizar su reproduc ción, necesariamente debe defender
el sistema aunque puede modificar el entorno; en otras palabras, puede acoplar opera -
cionalmente los entornos de otros sistemas incluso contradictorios a su propia sistema, a eso
podemos denominar política cíe reforma. Y una política de transformación o revolucionaria,
por lo tanto, seria aquella que sustit uye el sistema por otro sistema. Bajo esta perspectiva
teórica se observa inclusive que un sistema puede abandonar totalmente su entorno y puede
funcionar con el entorno de otro sistema.

En la actualidad por ejemplo la estrategia de los sistemas sociales contemporáneos es la de aco-


plar los entornos de los sistemas de las sociedades antiguas sin mover la esencia o sistema. En
ese análisis por lo tanto, un sistema se transforma totalmente cuando no tiene la capacidad de
reproducirse. Esto ocurre en el mo mento que se han fracturado el funcionamiento de los
elementos del sistema, esto sucede debido a la falta de capacidad evaluativa, y se acopla
estructuralmente otro sistema

Ahora ¿qué elementos constituyen el sistema y que elementos son del entorno? Eso nos lleva
a decir ¿a qué elementos no puede renunciar una sociedad y que es lo sí puede modificar e
incluso abandonar? El sistema en la teoría que proponemos está constituido por dos
elementos: gestión económica y gestión política. Elementos que cualquier tipo de sociedad
tiene como núcleo organizador de su estructura. Lo que diferencia unas épocas de otras, o
sea de un sistema a otro, no es lo que se hace, sino cómo está organizada la gestión económica
y política.

Por lo tanto, en el ámbito económico se trata de observar como están gestionados los
recursos naturales existentes en un país o sociedad, es decir, se refiere al tipo de propiedad
de los recursos y apropiación del trabajo. En este planteamiento no todo medio de
producción es considerado como parte del sistema, sino muchos de ellos constituyen el
entorno, tal es el caso de la tecnología y todo lo que se llama materiales de trabajo. Sin
embargo, también puede ocurrir que todos ellos (medio de trabajo y materiales de trabajo)
pueden constituir elementos del sistema económico cuando son los únicos del sistema, es el
caso por ejemplo de las industrias, ya que en este tipo de economía es sobre estos elementos
son la que se define el tipo de propie dad. Otro elemento a considerarse en la gestión
económica es el tipo de apropiación del trabajo, o sea, si la economía se desarrolla sobre la
base de la enajenación del trabajo o apropiación directa del propio trabajador. Evidentemente
este último ele mento nos lleva a considerar sobre si la economía se sustenta sobre la
explotación o no del trabajo.

En este análisis no es el tipo de tecnología o la utilización de los medios y materiales de


trabajo las que definen el tipo de sociedad sino es el tipo de propiedad sobre estos elementos.
Por ello el tipo de apropiación del trabajo es la que distingue económicamente una sociedad.
Por ejemplo, cuando la propiedad de los recursos esta en manos privadas y la apropiación del
trabajo es enajenada, se estaría hablando de una sociedad capitalista.

El otro elemento del sistema es la gestión política que denominaremos como gestión del poder. Su
función principal —aunque no la única— de este sistema es la de garantizar la gestión económica
y la de mantener en cierta medida cohesionados a los integrantes de la sociedad. Al igual que la
gestión económica, tiene dos elementos centrales que merecen ser observados: el tipo de
decisión y la forma de elección de los responsables de ese poder. El tipo de decisión se refiere
a que si éste está en manos privadas (puede ser una élite) o está en manos de la colectividad.
Y la forma de elección trata de cómo son seleccio nados los responsables de ese poder y el tipo de
relación que establecen con la colectividad; mas propiamente dicho que tipo de relación se teje
entre el representante y las bases.

Por este lado entonces, no solamente la gestión económica hace que la sociedad se diferencie el
uno del otro, sino también la organización del poder es otro de elementos diferenciadores.

Ahora, la gestión económica y política, como dos elementos del sistema, hacen la esencia de un
tipo de sociedad. Es una tecnología social estructurada por cada sociedad en forma histórica. En
unos casos los dos elementos citados funcionan como sistemas únicos, generalmente ocurre esto
en las sociedades consideradas antiguas. Mientras que en las sociedades modernas estos dos
elementos tienden a separarse y adquirir, cada una de ellas, su propia autonomía y la relación
que establecen entre ambos es de subsistema a subsistema.

Una vez explicado lo que es un sistema pasemos a teorizar lo que es un entorno. Una primera
aproximación de este concepto es todo aquello que se encuentra fuera del sistema (gestión
económica y gestión política); o sea el entono es, simplemente "todo lo demás". Por supuesto el
entorno es más complejo que el propio sistema ya que están constituidos por muchos elementos, y
muchas de ellos incluso pertenecen al sistema y pueden llevar a la confusión en su distinción.
Entonces los elementos del entorno están constituidos por ejemplo por la tecnología, por la
ciencia, por la educación, los sistemas culturales y religiosos, la vestimenta, el tipo de familia, la
medicina, el idioma, el tiempo, etc. En este sentido, como vemos no sólo están constituidos por
elementos culturales y simbólicos, sino muchos elementos del sistema forman parte del entorno.
En esta teoría incluso son considerados como entorno a otros sistemas sociales, por ejemplo el sistema
capitalista tienen como su entorno a los sistemas sociales antiguos. La acuñación del concepto
entorno interno y entorno externo nos puede ayudar a escudriñar más en el asunto.
El entorno interno es aquello que forma parte del propio sistema social, no son elementos
importados de otro sistema social. Son elementos que se encuentran fuera del sistema, pero que
forman parte del sistema social total. Mientras que el entorno externo es todo aquello que está
fuera del sistema social total, es decir, es otro sistema social constituido por sus dos elementos:
sistema y entorno. El gráfico siguiente nos ilustra esquemáticamente mejor nuestra teoría.

Sistema social total

Ahora, el entorno no es un elemento secundario dentro el sistema social total, sino tiene igual
importancia que el propio sistema. Mucho más cuando éste es el elemento legitimizador del
sistema. Sólo que no es un elemento diferenciador de otro' sistema total. Esta teoría establece la
diferencia de un sistema social con otro sistema social no en términos cuantitativos, sino
fundamente en términos cualitativos. No se trata de observar si una tecnología es más avanzada o
menos avanzada, sino cómo están organizadas.

Bajo este análisis un sistema social se reproduce bajo dos modalidades principales: a)
Sociedades que se estructuran en base fundamentalmente a su entorno interno, son reticentes a los
entornos externos, en ese caso podemos denominar que son sistemas sociales operacionalmente
cerrados. Entonces en este caso estaríamos hablando de sociedades más o menos endógenas que
tratan de fortalecer la identidad y la especificidad en sus dos elementos (sistema/entorno); y b)
Sociedades que se reproducen acoplando mayor cantidad de elementos del entorno externo, a
eso denominaremos sistemas sociales operacionalmente abiertos. En este caso no quiere decir
que un sistema social opte por acoplar integralmente (sistema/entorno) de otro sistema social, si
fuese así estaríamos hablando de un sistema pastiche que imita exactamente lo que hace otro
sistema.

Para tal efecto los conceptos de acoplamiento operacional y acoplamiento estructural nos
ayudarían a observar la realidad y fijar políticas al respecto. Decimos acoplamiento operacional a
todo aquello que un sistema social puede apropiarse los elementos del entorno externo pero no
los elementos del sistema (gestión económica y política); este acoplamiento generalmente no
afecta al sistema, por eso que puede haber sistemas sociales que funcionan con la mayor
cantidad de elementos del entorno externo. En muchos casos inclusive un sistema se ve re vital iza-
do. Mientras que el acoplamiento estructural se refiere a la apropiación del sistema (gestión
económica y política); en este caso estaríamos hablando de una total pérdida de identidad de su
elemento diferenciador como sistema. Sin embargo, eso no quiere decir que necesariamente u
obligatoriamente un sistema también debe acoplar todos los elementos del entorno del otro sis-
tema, sino que puede darse la situación de que un sistema mantenga inalterado e inclusive podría
fortalecerse los elementos del entorno interno. Tal es el caso de muchos sistemas sociales
antiguos, que se apropian el sistema moderno como producto de la imposición o la asume de
manera voluntaria pero van fortaleciendo el entorno interno (sistema cultural y simbólico).

Los dos tipos de acoplamiento (operacional y estructural) dependen mucho de la capacidad


organizativa del sistema social. Cada sociedad hace una evaluación de las salidas y entradas de los
elementos del entorno tanto como del sistema. Esta evaluación siempre la hace en función de su
sistema, o sea una sociedad puede renunciar a muchos de los elementos de su entorno como
también puede apropiarse el entorno de otro sistema, pero es poco probable que renuncie
voluntariamente a su sistema. Generalmente los cambios del sistema vienen dados por
acontecimientos de imposición o revolución. Esto significa observar la estructura de la sociedad en
cuanto al tipo de organización del sistema, ya que en su entorno puede darse una promiscuidad
respecto de sus elementos y que así mismo generalmente el sistema no queda afectado. A manera
de ejemplo la sociedad capitalista en cada época histórica ha sabido adaptarse en términos de
apropiación renuncia a su entorno, pero algo no modifica es su sistema. Podemos decir inclusive
que un sistema para perpetuarse a lo largo de la historia necesita que su entorno sea muy flexible.
Esta teoría rompe con el análisis estructuralista de las totalidades constituidas por partes y de las
relaciones constituidas entre las partes. También rompe con el análisis marxista de estructura
y superestructura, y trata de solucionar el problema de discusión de las ciencias sociales en los
países subalternos que es la polémica entre la identidad y modernidad.
Los sistemas comunales

Entendemos por concepto comunal o comunitario a la propiedad colectiva de los recursos y al


manejo o usufructo privado del mismo. Por eso esta categoría debe ser entendida no sólo
como algo referido a las sociedades rurales o agrarias, aunque son los que han sabido adaptarse
muy bien a los cambios contemporáneos. De ahí sin duda nuestro punto de partida para el
análisis de los sistemas comunales son las sociedades indígenas. A diferencia de las sociedades
modernas, las sociedades indígenas no han producido los esquemas de diferenciaciones ni tampoco
han generado la separación entre los campos (campo político, campo económico, campo cultural,
etc.) por eso funcionan como un único sistema que se relaciona tanto con el entorno interno
como con el entorno externo.

Nuestra propuesta al distinguir sistema/entorno rescata el sistema comunal como algo


universalizable y observa al entorno como un elemento que solamente coadyuva al sistema, debi-
do a que es el sistema el que se diferencia del sistema liberal. O mejor dicho, el sistema
comunal se erige como algo antagónico al sistema liberal, mientras que el entorno comunal es
flexible e inclusive apropiado por el sistema liberal, sin alterar su propio sistema; o cómo
también el sistema comunal puede apropiarse del entorno liberal sin que implique la
transforma ción de su sistema.

En este sentido, la teoría sistema/entorno rompe con los planteamientos de la búsqueda de


autodeterminación territorial y autonomía de las sociedades indígenas, Ya estos planteamientos sólo
se refieren a las reformas en el plano del entorno como hemos visto en el anterior capítulo. Mi
planteamiento es sustituir el sistema liberal por el sistema comunal, es decir, por las gestiones
económica y política comunales. Esto implica reconstruir el Estado a partir de estas lógicas como
alternativa a la organización económica basada en la propiedad privada y en la democracia
representativa.

Además la teoría de sistemas comunales rompe totalmente con la visión etnicista definida a partir
de la cultura, lengua y/o idioma, vestimenta, territorio, historia, etc., de las sociedades
indígenas, ya que para nosotros estos elementos sólo constituyen el entorno de las sociedades
indígenas y no el sistema mismo. Entonces ¿en qué consiste el sistema comunal? Veamos.
Sistema de gestión económica comunal

Entendemos por gestión económ ica comunal a la economía donde los medios de trabajo y los
recursos naturales son de propiedad comunal y/o colectiva con una distribución privada en
calidad de posesión, es decir, los miembros de una comunidad y/o el conjunto de trabajadores,
constituidos en asamblea, son los propietarios de los recursos existentes dentro del territorio
pero usufructuados y trabajados en forma privada y familiar. El manejo de tierras nos puede
ilustrar mejor lo que se viene afirmando. El indígena aymara o quechua, por ejemplo, usufructúa
las tierras en calidad de posición privada, pero no son propietarios privados de esas tierras. El
verdadero propietario es la comunidad. En este caso, el individuo o la familia son dueños de
su trabajo, no hay otro propietario que enajene su trabajo como ocurre en las sociedades
organizadas sobre la base de la propiedad privada. Por eso el indígena recoge todos los frutos
producidos por él y su familia (papa, cebada, quinua, etc.). Pero una vez terminada la cosecha,
estas tierras pasan a ser de uso común en forma de pastizales. De igual forma ocurre en el
manejo del ganado, donde los pastizales son totalmente colectivos pero el ganado es propiedad
privada de las familias.

A cambio de este usufructo privado y al mismo tiempo en tanto miembro de la comunidad quien
tiene además derecho de voz y voto. Pero además como poseedor privado de las parcelas está
obligado a prestar servicios a la comunidad en todo lo que es el sistema de autoridad, pasar fiestas o
ciertos trabajos comunales. Aunque esto varía en otros grupos indígenas especialmente en tierras
bajas, sin embargo, los recursos siguen siendo gestionados en forma colectiva y no en forma
privada7 .
En este modelo de sociedad vemos una propiedad colectiva de los recursos y una apropiación del
trabajo en forma familiar/individual. Entonces, estas características son las que distinguen del
modelo capitalista basado en la propiedad privada y el trabajo enajenado. Comparados los dos
modelos de manera sintética nos conduce a afirmar que el modelo la gestión económica comunal,
se erige como la única alternativa frente al modelo capitalista liberal. El sistema de gestión
económico comunal puede ser aplicado en economías modernizados como las industrias tanto en
áreas urbanas como en áreas rurales. Por ejemplo, en las fábricas más grandes los propietarios
de los medios de producción serán todos los trabajadores constituidos en asamblea y el tipo de
usufructo del mismo puede ser determinado por el conjunto de los trabajadores; la misma puede
ser asalariada o que cada miembro trabaje y se apropie de los bienes producidos por el mismo.

Entonces, el sistema comunal es un sistema controlado por la colectividad y/o por el conjunto
de trabajadores de una empresa o comunidad y no por una persona o un grupo de élite, tal como
ocurre en la sociedad capitalista. Esta teoría rompe nuevamente con los postulados de la
economía manejados por el Estado o con teorías que defienden el capitalismo de Estado, tal
como fue practicado en los Estados socialistas y sociedades latinoamericanos con el predominio
de la teoría de la Comisión económica para América Latina (CEPAL), por ejemplo. Por tanto el
sistema comunal se deslinda tanto de la economía privada (neo y liberalismo) como de la
economía manejada por el Estado (Estado empresa).

Ahora el planteamiento del modelo de sistema de gestión comunitaria de recursos naturales no


es una idea inventada a partir de las teorías o filosofías como utopías inalcanzables, sino es
rescatado de realidades que han subsistido dur ante el ejercicio del poder colonial. Son modelos
que han sabido adaptarse a los cambios históricos, por eso que hay experiencias de manejo
colectivo de recursos, tal el caso de los sistemas de riego. Este bien es fundamentalmente
controlado por las comunidades rurales pero que el usufructo del mismo es familiar e
individual.

Otro de los ejemplos son de algunas cooperativas agropecuarias en áreas rurales y la Asociación
de textiles en la ciudad de El Alto: estas empresas actualmente exportan los productos. En ellas
los medios de producción son fundamentalmente colectivos, pero el usufructo es privado. Aquí
cada miembro de la cooperativa trabaja de manera individual y produce conforme a su
capacidad y su necesidad. Bajo esta percepción se admite la existencia de cierta
diferenciación entre los trabajadores más ágiles y otro menos ágiles; los más y menos
necesitados, o sea, unos producen mayor cantidad que otros. Esto nos lleva a reflexionar que en
este modelo son admitidas las tipologías entre familias o individuos. También estas tipologías
existen las economías rurales: Pero no hay una diferenciación basada en la apropiación del
trabajo ajeno tal como ocurre en la sociedad capitalista.

No obstante, que no se entienda a las empresas comunales como aquellas que no solamente se
dedican a producir valores de usos materiales, sino también habrán empresas comunales
dedicados a la producción de valores de uso inmateriales o de productos puramente recreativos
(espectáculos, viajes, vaca ciones, arte, turismo); o sea, todo aquello que conforman los bienes
culturales.

En resumen, la propuesta apunta a sustituir la economía capitalista por empresas comunales


tanto en áreas rurales como urbanas. En esta forma de economía los trabajadores son dueños de
todos los medio s de trabajo y de los recursos naturales e inclusive de los bienes culturales.
Ellos son los que deciden su forma de uso y no una persona o un grupo de élite como lo es la *
sociedad capitalista. Este tipo de economía se la conoce en las sociedades aymarás y quechuas
como la economía del ayllu.
Lo que se trata entonces no es de mantener a la economía del ayllu en su estado original, sino
rescatar su dinámica de funciona miento y aprovechar todas las potencialidades tecnológicas
existentes en el occidente bajo un ethos comunal. En ese sentido la empresa comunal no es una
economía que desecha la tecnología occidental, sino más bien se apropia de todo aquello que
permite optimizar la producción y crear mayor cantidad de excedente, sólo que, a diferencia
de la sociedad capitalista, dicho excedente recae en el propio trabajador y no es enajenado por el
capitalista o por los burócratas del Estado como fue en las economías del socialismo real.

Esta forma de economía no niega la economía privada, basada en el trabajo individual y


familiar; o sea puede haber entidades económicas trabajadas por él mismo y su familia. Sólo
que su límite está en que esta entidad económica no crezca a costa del trabajo ajeno y que de
lugar a la superación de gente que trabaja y no a la gente que vive a costa del trabajo del otro.
Este tipo de sociedad evidentemente no es una sociedad igualitaria en términos de
homogeneización en cuanto a la economía, sino se fomenta el crecimiento en cada de las
entidades económicas conforme a su capacidad y su necesidad, sólo que no se permite que el
crecimiento sea a costa del otro. Para ello existe un sistema regulatorio en el nivel político y
cultural, como veremos en los siguientes puntos.

Sistema de gestión política comunal

Por gestión política comunal o por administración del poder comunal comprendemos a que
el poder o la decisión no está centrada en el individuo o en grupos de personas; o sea, el indi-
viduo o el grupo no tiene poder en sí mismo, como ocurre en el sistema de la democracia
representativa liberal, sino la asume la colectividad. De ahí que el representante solo exprese
la decisión adoptada por la colectividad en una reunión, asamblea o cabildo; en otras
palabras el control la ejerce el conjunto de personas constituidas en Asamblea, Junta,
Cabildo, etc., por eso que el representante es revocable en cualquier momento si es que no
cumple o no expresa la decisión de la colectividad.

En otras palabras —dirá Raquel Gutiérrez— "la capacidad de decisión individual y colectiva sobre
el asunto común radica directamente en la colectividad y si, a pesar de que tal capacidad soberana
se ejerza a través de representantes, el límite de la actividad de estos es la propia voluntad
colectiva que controla materialmente los medios de dicha soberanía, de modo tal que la función
de representación se limita a buscar los modos de dar curso a la voluntad común"8.

Entonces en la forma comunal de la política —continuará Gutiérrez— la soberanía social no se


delega sino que se ejerce directamente. No se parte de un hecho contractual de entrega (e
hipoteca) de la voluntad individual, sino que los mecanismos de gestión del asunto común se
construyen a partir de los acuerdos entre sujetos concretos que comparten actividades y destinos.

Raquel Gutiérrez acertadamente dice que dentro de esta forma de política también existe la
representación, pero la dife rencia es que el representante no es quien monopoliza el derecho de
decidir ni ha autonomizado técnicamente esa capacidad de decidir. La soberanía no se delega sino
que se mantiene en su fuente de surgimiento: la voluntad social desplegada y la energía colectiva
que confirma la disposición práctica de pertenencia a un colectivo que emprende proyectos en
común.

El representante, en esta forma de política, no es de ninguna manera el designado para mandar


sino simplemente para organizar el curso de la decisión común y coordinar con otros los pasos
concretos hacia objetivos colectivos. En este sentido, el que "manda" dentro de esta forma de
política, "manda porque obedece". Porque se sujeta a lo que es la decisión común, y sólo en tal
sentido adquiere su calidad de representante. El representante además no es voluntario como la
política liberal; sino ejerce como una obligatoriedad, como un deber, ya que, a diferencia de la
democracia representativa en el poder comunal, la lógica no es la de ganancia, sino la de servicio.
Esta forma de asunción de la política es general para casi todos los grupos indígenas, lo que
varía es el tipo de nombramiento de autoridad. Las autoridades en todas las poblaciones
indígenas siempre están subordinadas a la colectividad. En las sociedades aymara y quechua la
autoridad no es voluntaria, ni la educación es una variable importante para el ejercicio de la autoridad,
tampoco el tiempo excedente se hace necesario para dedicarse a la política como ocurre en la lógica
liberal. Entonces, los fundamentos centrales del poder comunal se basan en la obligación y rotación,
es decir, uno para ser autoridad no entra por voluntad propia, sino está obligado a realizar este
servicio a la comunidad, ya que si no lo hace puede perder el acceso a los recursos económicos
que pueden ser la tierra, el riego, los pastizales y otros, por eso la ejercen en forma rotativa. La
rotación y la obligación hacen que todos tengan la posibilidad de acceder a ciertos cargos públicos
por un periodo determinado por la colectividad. En este sentido, el poder es muy difícil que derive en
una especie de propiedad tal como ocurre en la lógica liberal. La práctica política es aprendida a través
del recurrido jerárquico de cargos instituidos por el sistema comunal. De ahí que en las comunidades
indígenas no rijan las reglas democráticas, sino una especie de autoritarismo basado en el consenso.
La autoridad no la tiene niel individuo ni grupos de individuos, sino la colectividad.

La estructura política comunal basada en la estructura comunitaria de producción, dentro el


cual el comunario, para mantener su posesión de tierras y poder usufructuar otros bienes
económicos que se encuentran en la comunidad, está obliga do a cumplir con ciertos deberes con la
comunidad. En anteriores textos decía: "que en esta forma de organización política nadie ejerce
ninguna autoridad por voluntad ni por prestigio, basándose en el derecho a ser 'libremente'
elegido y/o elegir. El punto de partida es distinto: un individuo se convierte en depositario de la
voluntad general en tanto deber y servicio. La jerarquía de cargos desde el inferior hasta la
autoridad máxima, es ejercida en función de la tenencia de la tierra (originarios, agregados y
pequeños ocupantes y/o jatun runas), ya que dentro de esa jerarquía los gastos económicos se
efectúan de acuerdo al cargo que se ejerce. Por ello que esta forma de ejercicio del poder
regula además, la diferenciación social"9.

La voluntad individual aquí, no es un bien transable—ni enajenable— sino una actitud práctica de
ratificación de la disposición a ser-en-común: es una acción de reinvención de la pertenencia que
define al conjunto social. Lo político deja de ser lo relativo a la capacidad de gobernar, de decidir de
manera privativa y de buscar los mecanismos para imponer dicha decisión la colectividad. Lo
político, y sobre todo la función de representación política, pasa a ser la habilidad para expresar y
ejecutar lo decidido por el conjunto social a partir del modo concreto de buscar equilibrios entre
capacidades y necesidades sociales. No hay delegación de la soberanía ni autonomización de la
capacidad de decisión: hay ejercicio directo de la decisión común, representación que se limita
a llevar adelante lo comúnmente decidido y mecanismos autorreguladores del sistema de relaciones
de poder que impongan los marcos de pertenencia al colectivo. Por eso, el representante sólo es
portador o expresión de la decisión de la colectividad.

Esta autorregulación en la forma comunal de la política está en que todos sin excepción, tienen
acceso al ejercicio del poder no por su voluntad, ni por la cualidad que tengan como personas sino
como un deber y servicio a la comunidad, a cambio de mantener su posesión de parcelas para
reproducirse económica y socialmente. Es por ello que el poder no se concentra en un individuo
sino en la comunidad reunida en Asamblea. La Asamblea nombra representantes por rotación
pero ese representante elegido de ninguna manera ejerce poder si no es obedeciéndola al poder
comunal.

Al ejercicio del poder asignado como expresión del poder comunal lo denominaremos posesión
del poder y no-propiedad del poder, ya que no existe tal propiedad ni el poder está concentrado
en un grupo o una persona, como ocurre en la democracia liberal. El poder de las autoridades en las
comunidades es asignado y no adquirido. Debe realizarse tenga o no se tenga capacidad, ya que
es un requisito para seguir siendo comunario el Poder no se adquiere por las facultades que
concentran un en individuo determinado, como sucede en la democracia liberal.
Los teóricos y apologistas del estado moderno y de la democracia representativa, critican a la
política comunal y otras formas directas de la administración del poder y de la política, en el
sentido de que las consideran inviables en una nación donde la población es ampliamente
inmensa y la representación, fundamentalmente, es territorial y ya no se basa en la representación de
los gremios o funciones específicas.

Por otro lado, indican que la política comunal es netamente rural, que no se puede aplicar en la
ciudad con las poblaciones con diversas ocupaciones. Sin embargo, la teoría que plateamos se
sustenta en las experiencias que se aplican y que han adaptado la gestión política comunal en
contextos urbanos como en la junta de vecinos en barrios considerados marginales donde la
población es esencialmente migrante. Además esta forma de práctica política existe en las
organizaciones gremiales más modernas, como la Central Obrera Boliviana (COB). En todas estas
organizaciones, por ejemplo, las decisiones son tomadas en forma colectiva, sólo los
mecanismos de elección no obedecen a la lógica de la rotación y obligación como forma esencial
de la política comunal. Por ello que sostengo que puede ser aplicable a cualquier tipo de sociedad
inclusive en poblaciones muy grandes.

Dos análisis específicos nos pueden dar más luces sobre esta propuesta. Primero: un gobierno
nacional tranquilamente puede ser elegido bajo la forma rotativa; por ejemplo, por departamentos en
el caso de Solivia. Al interior de cada departamento se hace la misma rotación por provincias y
dentro las provincias pueden ser por ayllus o cantones, etc. En este caso el gobierno sólo es
expresión de las decisiones de las colectividades organizadas en forma gremial-funcional y
territorial. Las representaciones en el ámbito nacional son rotativamente elegí- • das por grupos
étnicos, gremios o en algunos casos por territorios. La reunión de representantes es la reunión de
coordinación para llevar políticas que impliquen a cuestiones nacionales, es además una instancia
de interiorización de las decisiones de la sociedad mediante sus representantes, ya que éstos sólo
son los portadores de la decisión del sector que representa. Segundo: en el contexto de los
municipios, donde el gobierno municipal es elegido rotativamente por distritos o ayllus, depende de
la composición organizacional de cada municipio. De igual forma los representantes serían
elegidos rotativamente.

Esta forma de política es una tecnología social que elimina el monopolio de partidos, y el poder
concentrado en el individuo o grupo. Además bajo está lógica el encargado del gobierno
previamente ha pasado por varias jerarquías que la sociedad establece de acuerdo a las necesidades.

En este caso democracia comunal en términos generales quiere decir que los representantes
elegidos en forma rotativa, no son elegidos para su deliberación y decisión, sino para expresar la
deliberación y la decisión de la colectividad a la que representa. En este sentido, el poder comunal
no debe confundirse con la democracia directa como la participación de todos los ciudadanos en
todas las decisiones, o como aquella reunión sin representación. Sin duda este tipo de política
materialmente es imposible. La diferencia entre la democracia liberal y el poder comunal está,
entonces, en el tipo de representación. En la primera las deliberaciones y las decisiones, que
involucran a toda la colectividad, no son tomadas directamente por quienes forman parte de ella, sino
por personas elegidas para este fin. Mientras que en el segundo las decisiones son tomadas por la
colectividad y el representante tan solamente expresa y cumple lo que deliberó la colectividad.

Esto implica eliminar la contraposición entre la sociedad civil y el Estado, debido a que la
deliberación recae en la sociedad misma y no hay un ente autónomo por encima de la sociedad, o
sea el poder está en la sociedad misma y el Estado deja su forma actual y se convierte en una
instancia de coordinación de los representantes para operativizar las decisiones colectivas en fun-
ción de los intereses comunes del país en su conjunto. En este sentido, el poder legislativo y judicial es
revertido a la colectividad y los representantes como expresión o portavoces de la colectividad,
ejecutan las decisiones colectivas. Por ello que también se constituyen en entes de administración
de las políticas públicas.

La deliberación colectiva y la rotación de la representación además superarían definitivamente el


eterno problema entre lo que es el demos y el etnos, ya que en los países conquistados como
Bolivia las etnias siempre fueron excluidas de la participación y las decisiones políticas. Mientras
con la representación rotativa todos tienen la misma obligación de ejercer un cargo público
desde ámbitos territoriales o funcionales, indistintamente a la raza, cultura, lengua a la que
pertenecen. Con ello se habría también superado el problema de la colonialidad.

Sistemas comunales como sistemas no diferenciados: la relación entre la gestión económica y


gestión política

Los sistemas comunales no son sistemas diferenciados, es decir no se separan entre el campo
económico y el campo político sino que funcionan como único sistema. Esto no es sólo para
un análisis teórico, sino que existe como una realidad empírica. Eso significa que la gestión
económica está organizada en términos de las relaciones de producción en forma comunitaria,
como habíamos explicado anteriormente. Se puede decir que la organización económica es el
sustento de la esfera política. La cohesión social ejercida políticamente se debe a que para poder
mantener su posesión de recurso económico otorgado por la colectividad constituida en una
asamblea tiene que cumplir con ciertos derechos y obligaciones. Por otro lado, es muy difícil que
la economía se mantenga como comunitario sin la cohesión política. Hay una interdependencia
única. Por eso el sistema económico y político en las formas comunales son difíciles de distinguir
o separar. Por ello la democracia representativa como sistema de elección competitiva, para el
sistema comunal, no tiene sentido, no es coherente con su forma de organización económica.

La relación estrecha entre lo económico y político, se manifiesta claramente cuando todos los
miembros del sistema social, para mantener su posesión privada de los recursos, tienen que
cumplir ineludiblemente ciertos derechos y obligacio nes con la comunidad. Éstos pueden ser:
trabajos colectivos, construcción de obras, asistencia a asambleas, aportes de dinero o en especie
para determinadas obras de beneficio comunal, ejercer cargos dentro la estructura jerárquica de
poder, etc. Pues son obligaciones de las que un miembro no puede estar exento. Si el jefe de
familia está imposibilitado de asistir puede hacerlo otro de su familia.

A esta interpelación del sistema económico y político es la que denominamos sistemas comunales
no diferenciados donde el poder rotativo depende de la gestión comunitaria de recursos pero
donde ésta tampoco puede existir sin la forma de poder comunal, por lo que la reproducción de
este sistema depende de su interacción. La desestructuración sólo es posible a través de la
fragme ntación de cualquiera de las partes del sistema. Sin embargo, el sistema comunal se
interrelaciona con todo lo que se denomina sistemas simbólicos que dan coherencia al sistema,
como es el idioma, historia, vestimenta, prácticas rituales, etc. A lo que nosotros denominamos
entorno/interno. Pero también observamos que los sistemas comunales en los tiempos contem-
poráneos se relacionan con lo que es ajeno a si mismos que viene, en la mayoría de los casos
como producto, de la imposición de la sociedad dominante expresado en las formas políticas,
tecnología, racionalidad utilitaria, cánones de belleza, estilos de vida, etc., la que hemos llamado
en nuestro análisis como entorno/externo.

El sistema único o no diferenciado se puede observar más claramente en las comunidades rurales
en las que en anteriores señalaba por ejemplo: "que en esta forma de organización política nadie
ejerce ninguna autoridad por voluntad ni por prestigio, basándose en el derecho a ser 'libremente'
elegido y/o elegir. El punto de partida es distinto: un individuo se convierte en depositario de la
voluntad general en tanto deber y servicio. La jerarquía de cargos, desde el inferior hasta la autoridad
máxima, es ejercida en función de la tenencia de la tierra (originarios, agregados y pequeños
ocupantes y/o jatún runas), ya que dentro de esa jerarquía los gastos económicos se efectúan de
acuerdo al cargo que se ejerce. Por ello que esta forma de ejercicio del poder regula además, la
diferenciación social"10. Esto también podemos observar en el estudio realizado por Esteban Ticona11
y Xavier Albo cuando se refieren al thakhi comunal donde se establece la jerarquía de cargos a partir
de tenencia de tierra.

La teoría del sistema comunal, trata de revitalizar la lógica de la relación estrecha entre lo
económico y lo político, es decir, por el lado funcional gremial todos están involucrados en las
empresas comunales. Por lo que, para tener el derecho de posesión y/o tener derecho al trabajo
dentro de éstas, cada miembro está obligado a realizar trabajos colectivos, cargos públicos y
otras obligaciones determinados por la colectividad de la que él también es parte. Y en lo territorial
lo que cohesiona el ejercicio obligatorio de los cargos públicos y responsabilidades hacia la
colectividad, son los servicios básicos y sociales como el acceso al agua, alcantarillado,
electricidad, educación. Evidentemente en este tipo de sociedad la libertad radica en la obediencia
hacia la colectividad en tanto él es miembro activo de esa colectividad, por eso que no se siente
sometido, debido a que también él es parte de ella.
El entorno del sistema comunal y su relacionamiento con el sistema
Habíamos dicho que el entorno está constituido por toda la externalidad del sistema; es decir,
todo aquello que se encuentra fuera de la gestión económica y política. Empieza desde el idioma,
todos los sistemas simbólicos, culturales e ideológicos. Además éstos se dividen en propios y
ajenos a los que hemos denominado entorno interno y externo.

El entorno evidentemente es influenciado por el sistema, pero no es el condicionante de su


funcionamiento o cómo el entorno tiene influencia en el sistema, pero no necesariamente obliga
a modificarlo. Esta teoría soluciona el eterno problema ente la identidad y modernidad que han
vivido los países conquistados, ya que siempre se ha polarizado las dos visiones, es decir, los que
apuestan por la identidad suelen negar toda la modernidad, y ven como un obstáculo del
desarrollo de la identidad, y, por el contrario, los que apuestan por la modernidad negando la
identidad.

En nuestra reflexión la identidad y modernidad no son incompatibles, o sea, un sistema puede


funcionar combinando tanto los elementos del entorno interno (identidad) como los elementos
del entorno externo (modernidad). Esta combinación no afectaría al desarrollo del sistema
comunal. Sólo el sistema comunal podrá verse afectado cuando tienda a acoplar el sistema liberal,
o sea, cuando tienda a incorporar la gestión privada de recursos y la democracia representativa.

Por lo tanto, el sistema comunal puede verse incluso revitalizado con el acoplamiento del
entorno externo, por ejemplo con la incorporación de la tecnología informática y otros ele-
mentos desarrollados por la modernidad. En este caso estaríamos hablando de sistemas
comunales operacionalmente abiertos al entorno externo. Así el sistema comunal no es un siste-
ma cerrado.

Por ejemplo en Bolivia, y en otros países con presencia del sistema comunales, a lo largo de la
historia colonial y republicana, el sistema de producción capitalista no ha logrado destruir
totalmente estos sistemas, ya que los sistemas comunales han tenido la habilidad de acoplar
operacionalmente el entorno externo y adecuarlos a los funcionamientos de su propio sistema, tal
es caso de algunas tecnologías y sistemas de administración política. Ejemplos de esto tenemos
muchos, como la apropiación de la maquinaria agrícola, fertilizantes, sistemas de comunicacio-
nes, vestimenta y alimentación producidos por la modernidad. Por el lado político, las distintas
autoridades del sistema estatal han sido apropiadas y subordinadas a la lógica rotativa y de ser-
vicios. Sin embargo, esta apropiación del entorno externo puede llevar a la transformación del
sistema comunal o a la mayor dinamicidad de su sistema, esto dependerá de su capacidad
autoreferencial. Además esto depende no solo de la conciencia de las personas, sino obedece a
los factores objetivos como clima, topografía, etc. Por ejemplo en las comunidades ubicadas
en espacios no accidentados es más fácil de apropiarse el sistema de economía parcelaria y
convertirlas en suyas. En este caso se trataría de una alteración del sistema de gestión
comunitaria de recursos. Pero la experiencia está demostrando que inclusive en este tipo de
desestructuraciones siempre hay la capacidad de reavivar mediante otros recursos el sistema
comunal.

Por lo que las mayores transformaciones han ocurrido en el entorno interno, por eso se ve a la
mayoría de los indígenas hablando el idioma español, con vestimentas producidas por la
modernidad y jóvenes con celulares, en otras palabras con estilos de vida modernos. Si bien esta
forma de apropiaciones puede tener influencia sobre el sistema comunal, sin embargo, no
necesariamente implica su transformación.

En términos generales, el Estado ha ido sistemáticamente destruyendo, en diferentes fases de la


historia, el sistema comunal a través de la imposición de una forma organizativa de economía
(propiedad privada) y de política (democracia representativa). Por su parte los indígenas han ido
desarrollando una resistencia no consciente, sino más inducido por los factores objetivos que
no permitieron una destrucción total del sistema. El sistema comunal que se propone como un
proyecto societal alternativo al sistema liberal significa entonces que, en la gestión económica y
política, la colectividad es la que va ejerciendo su soberanía plena. Niega todas las
posibilidades de que los beneficios económicos, políticos y culturales se reduzcan a una élite o un
individuo como es la sociedad capitalista. Por eso que el sistema comunal es la negación a la
forma liberal. Sin embargo, ello no quiere decir que también niega todo el avance tecnológico de
ese sistema, sino más bien lo aprovechará para su mayor potenciamiento.

Su relación con el entorno externo, por lo tanto, es totalmente abierto, aunque sujeto a una
evaluación; o sea, se acopla operacionalmente en todo aquello que permite el potenciamiento del
sistema comunal y desecha todo aquello que considera perjudicial en el desenvolvimiento
normal del sistema. Hace la misma operación con su entorno interno, se apropia y desecha
conforme a su evaluación. En este caso, entonces lo que más importa es la preservación del
sistema y en el plano del entono si es más flexible.

Eso no significa que la economía y la política tengan su propia autonomía, de los elementos
culturales simbólicos, más al contrario en este tipo de sociedades funcionan como sistemas únicos.
Sin embargo, habría que también indicar que las transformaciones no vienen del entorno. Un
ejemplo de esto se tiene en los cambios de idioma, o de vestimenta, o de símbolos que no
precisamente tiende a transformar la economía y la política, sino que con niveles tan flexibles en
el nivel cultural se puede garantizar la reproducción de un sistema.

Por ello el sistema comunal admite la plena libertad individual y cultural en el nivel del entorno, es
decir uno puede elegir todo tipo de gusto como la forma de vestirse, usar símbolos, hablar
idiomas, etc. Estas pueden provenir de la memoria individual como de la colectiva. Por lo que en
el plano del entorno se acepta el pluralismo cultural ya sea grupal o individual. No solamente
eso, sino que inclusive para posibilitar la intercultu-ralidady la intercomunicación en las
sociedades diversas y abigarradas, cada cultura aprende por lo menos en los aspectos más
esenciales de cada una de ellas; o sea, en América Latina por ejemplo los castellano hablantes
que tienen una influencia europea, necesariamente debe aprender la cultura y el idioma de las
poblaciones indígenas de la región así para poder intercomunicarse en los espacios públicos. De
esta manera, también se elimina la subordinación de una cultura sobre otra. Por tanto, la vía de
superación de la colonialidad en el nivel del entorno debe ser vista de esta manera.
Eso significa pensar dos cosas: a) no mirar a las culturas como prácticas ensimismadas o válidas
sólo para sí mismas y b) no encerrarse a la influencia de otras culturas. Por lo que los cambios
culturales a partir de esta interrelación no presentan problemas para el sistema comunal, se
impulsa más bien a que se inventen constantemente nuevas filosofías, nuevas religiones, nuevas
teorías científicas, nuevos movimientos literarios y artísticos, nuevas modas, nuevos géneros
musicales, nuevos estilos arquitectónicos, nuevos bailes, nuevos diseños de automóviles, nuevas
formas de entretenimiento, nuevos productos de consumo suntuario y nuevas recetas de cocina.
Inclusive las empresas comunales serán capaces de perpetuarse en la historia mientras se adapte a
los cambios culturales de su población.

A diferencia de los sistemas liberales no se ejerce lo que Bourdieu denomina la violencia


simbólica en términos de imposición de ciertos gustos y estilos de vida, sino que esto es practicado
libremente en forma individual y colectiva, la misma que puede apropiarse tanto del entorno
interno como externo o ambos a la vez, al respecto cada actor lo hará conforme a su conveniencia
y gustos personales y colectivos.

Reflexiones finales a manera de conclusiones

El texto trata de debatir, no solucionar, dos problemas centrales que atingen al conjunto de los
países de América Latina: la colonialidad y el tipo de sociedad o "civilización".

El primero se refiere a que nuestras sociedades desde la llegada de los españoles (europeos) hasta
hoy continúan siendo organizados en diferentes campos (económico, político, académico, etc.) a
partir del elemento raza, cultura, lengua; o sea, la constitución y construcción de las clases
sociales ha sido y es determinado por estos elementos más que a factores intrínsecos a su propia
capacidad. Por eso la clase dominante es dominante no por su capacidad de acumulación, sino por
que éstos pertenecen a la casta criolla mestiza. Por lo que el esfuerzo y el sacrificio personal son
secundarizados a la pertenencia étnica. La sociedad y los Estados no han logrado democratizar las
oportunidades indistintamente para todos. De ahí que la economía, el poder y el saber siempre
fueron monopolizados por un pequeño grupo que pertenece a criollos y mestizos.

Los nuevos movimientos sociales de matriz indígena, por tanto se deben a este problema
estructural. No son movimientos solamente de demanda, sino son movimientos que apuestan por
la transformación a partir de su propia filosofía y prácticas económicas y políticas propias. En
este sentido, son movimientos que han secundarizado a los movimientos emergidos desde la
economía política (lucha de clases), debido a que los componentes de la clase trabajadora, por
la colonialidad de la estructuración social, fundamentalmente son indíge nas. Por eso que
inclusive detrás de la contradicción entre el capital y salario, clase dominante y dominada, está
la división étnica que ha adquirido un cariz de racialidad somatizada o como un hecho natural
o de facto.

Como diría Magullis, el racismo no consiste en el señalamiento de las diferencias sino en


adjudicarles (generalmente a
2.6. El thakhi entre los Aymará y los Quechua o la democracia en los Gobiernos Comunales

Esteban Ticona

El thakhi o la democracia del ayllu

«La Asamblea manda»

La asamblea comunal (en aimara y quechua Ulaka, parlakipawi, cabildo o «junta») es la


máxima instancia de autoridad y el eje de la vida comunitaria del ayllu. Su potestad se
extiende desde el dominio económico de los recursos, la administración territorial, pasando
por las regulaciones sociales y políticas hasta las celebraciones rituales-religiosas. Es el
centro del poder del ayllu y la comunidad. Es convocada y presidida por las princ ipales
autoridades comunales, nombrada periódicamente mediante el thakhi o el cargo por
rotación.

En principio tienen el derecho y obligación de participar en la asamblea todos los jefes


de familia forman parte fija del ayllu y la comunidad, es decir, todo s y sólo aquellos que
tienen casa y tierras en ella. Otros posibles advenedizos o simples ayudantes adscritos a
una familia, pero sin tierras propias (uta wawa 'hijo de la casa' en aimara o kantu runas
en quechua), no son miembros de la asamblea sino que quedan representados en ella por el
jefe de familia o, en su defecto, su sustituto.
Estas asambleas son foros de expresión amplia y un proceso colectivo de decisiones. Por
su grado de participación y por su sentido de respeto mutuo, se constituyen en el pr incipal
escenario para la práctica del thakhi o la democracia del ayllu. Generalmente los acuerdos
se toman después de largas discusiones entre los participantes y éstos sólo se retiran a sus
casas habiendo conciliado intereses. Las decisiones comunales que más afectan a las
familias suelen pasar por el tamiz de varias asambleas comunitarias debido a que, en
forma menos visible, implican consultas en de cada hogar, donde el marido, la mujer y
los hijos definen su posición antes de llevar una decisión firme en la asamblea.

La lógica prevalente es la de lograr amplio consenso. Su ideal es arribar incluso a la


unanimidad, más que conformarse con que una mayoría se imponga a la minoría. Sólo en
asuntos más delicados, como un conflicto entre dos zonas de la comunidad por el
acceso a recursos, ocurren a veces polarizaciones agudas entre comunarios, llegando en
casos extremos a la división del ayllu o la comunidad.
Las asambleas generales pueden ser ordinarias, reunidas en fecha tija (en periodo mensual,
quincenal o incluso semanal), o extraordinarias. Lo más común es que unas y otras sean de
largo aliento toda el día y a veces parte de la noche por lo que es oportunidad para una
amplia comunicación social.
En las asambleas ordinarias suelen tratarse asuntos rutinarios como el inicio o término de
un ciclo escolar, el nombramiento de nuevas autoridades comuna les, la fijación de
responsabilidades frente a alguna fiesta u otro acontecimiento local, la iniciación de
trabajos en una aynuqa o también otros asuntos más coyunturales como un pleito interno
familiar o las actitudes políticas o cívicas del ayllu o la comunidad frente a un
acontecimiento regional o nacional.
A veces la urgencia o gravedad de los asuntos a tratar requiere de una cita ción
extraordinaria. Por ejemplo, con ocasión de un conflicto grave por linde ros de tierras, por
agitaciones políticas, por desastres naturales, o por visitas importantes de alguna autoridad.

No es raro hacer coincidir el día de la asamblea con algún trabajo comunal. Por ejemplo, la
limpieza de acequias, etc., de modo que al principio de la jorna da se tenga la reunión y a
continuación todos se dediquen al trabajo previamente acordado o viceversa.
En otros lugares se reúnen el mismo día del culto (cuando una mayoría pertenece a alguna
iglesia evangélica), del deporte o de la feria local (si la hay); aunque esto último ocurre más en
asambleas inter-ayllus o ínter comunales.

La autoridad originaria como “servicio”

Uno de los puntos en los que periódicamente el ayllu debe llegar a to mín decisiones, es el
nombramiento de aquellos miembros habilitados para desempeñar el cargo de autoridades
comunales. Tierra comunal pero de usufructo familiar que rota con diferentes cultivos o es
utilizado para pastoreo comunal en los períodos de «descanso» o barbecho.

Las cabezas o autoridades máximas, responsables del ayllu o la comunidad, suelen


llamarse tata mallku y mama t’alla (en otros casos) kuraka, jilaqata y mama jilaqata. jilanqu
e inclusive cacique, o con otros nombres locales. Asumen el cargo y lo ejercen junto con
quienes desempeñan otras funciones.

La autoridad y demás cargos comunales son concebidos como un «servicio» y cubren


roles muy específicos, tanto en el ámbito d e l gobierno comunal, como en el
ceremonial- religioso. Cada cargo es visto como una «carga», porque quita tiempo y
dinero, pero hace avanzar a las parejas y a sus familias en status y prestigio social
dentro del ayllu. En la concepción aimara y quechua se supone también, que atrae
mayores bendiciones y abundancia en un futuro próximo.

La tarea principal: el gobierno del ayllu

«Una carga para todos»

Cuando una persona se casa y hereda tierras en/del ayllu o la comunidad llega a la categoría
de jaqi, runa o 'persona' y pasa automáticamente a ser comunario con todos sus derechos y
obligaciones. Como tal aparece en la lista de «afiliados» del libro de actas del ayllu. También
pueden adquirir este último status los de afuera casados con mujeres del lugar (tullqa o yerno),
aunque este último caso es más excepcional, dado que entre los aimaras y quechuas las
mujeres suelen establecerse en el lugar de! marido y no a la inversa.

En todos los casos el criterio fundamental para ser «persona» o miembro pleno del ayllu o la
comunidad es tener tierras. Pero en algunas regiones se han desarrollado además diversas
categorías de comunarios según su forma dife renciada de acceso a la tierra: originarios,
agregados, arrimantes, kantu ninas, etc. Los mismos hijos, incluso nuevas parejas, pueden
pasar por un status comunal intermedio mientras no tengan consolidada su herencia de tierra.
Todas estas categorías intermedias tienen menos obligaciones comunales pero también
menos derechos.
Sin embargo, en la medida en que persiste una organización comunitaria, la tendencia
es hacia una mayor uniformización de las categorías de comunarios más que hacia una
creciente diversificación.

Entre las obligaciones de todo los comunarios se cuentan las siguientes: prestar sus
servicios en los trabajos comunales, aportar regularmente con cuotas; asistir a las
asambleas, «pasar» los cargos públicos-políticos y religiosos que el ayllu o la comunidad
tiene establecidos, entre otros.

Sus derechos son: usufructuar una o más parcelas del área agrícola con su respectiva
dotación de agua (si la hay), tener acceso a los demás recursos co munales (pastizales,
madera, material de construcción, etc.), ser nombrado autoridad, intervenir en la toma de
decisiones de los asuntos comunales a través de la asamblea, participar en las fiestas, ser
atendido por las autoridades locales en sus demandas y emergencias, etc.

Si el jefe de familia está imposibilitado de asistir (o incluso de cumplir un determinado


«cargo»), puede hacerlo otro de su familia. En este sentido el miembro y/o el titular de los
cargos no es tanto el individuo sino la unidad familiar a la que representa el jefe de familia.

El thakhi o «camino a andar»

Thakhi o Thakhicha en aimara o en quechua Ñan o Ñana significa 'camino' y es también


la metáfora utilizada para referirse a un proceso de crecientes responsabilidades comunales en
el que se combina el crecimiento y prestigio de cada familia en el ayllu con el ejercicio
real del gobierno comunal. Comienza una vez que la pareja ha contraído matrimonio, con la
que se vuelve jaqi o runa (persona) y queda habilitado para desempeñar «servicios» al
ayllu.

Para fines de una mejor comprensión, tomamos el ejemplo de los ayllus de Jesús de Machaqa
de la provincia Ingavi del departamento de La Paz (Albo y equipo Cipca 1972; Choque y
Ticona 1996; Ticona y Albo 1997 y 1998), que con sus pequeñas variantes locales puede
generalizarse a otras regiones andinas2 por compartir todos una serie de elementos organizativos
y culturales que siguen siendo funcionales en el presente.

El machaqa jaqi o «nueva persona» (recién casados) hace su ingreso al círculo mayor
(tamankiri) del ayllu, con un pequeño aporte simbólico (regalo de alcohol) llamado t'inkha. A
partir de ahí, empieza a recorrer tres grandes 'caminos' a lo largo de su vida:

Jisk'a thakhi (camino corto), Taypi thakhi (camino medio) y Juch 'a thakhi (camino grande).
Los dos primeros permiten el ejercicio del gobierno comunal que, en resumen, sucede de la
siguiente manera:
Los primeros cargos de autoridad comunal consisten en ser machaqa p'iqi (nuevo
«cabeza»); que según Triguero (1991), tiene la función del antiguo kamana (encargado),
como yapit kamana, uywa kamana (encargado de la chacra, del ganado), etc.
- Después de un tiempo, una vez consolidada la familia, y por acuerdo con la esposa, el
machaqa jaqi, opta por ser preste de la fiesta del ayllu o la comunidad, teniendo en
cuenta los recursos económicos de que dispone. Esto le lleva a la organización de unas
tres fiestas, con variantes según el lugar. Estas actividades son el comienzo para
candidatear al cargo de jilaqata (ahora se usa más el nombre de mallku) del ayllu o la
comunidad, período durante el que se les llama thakhini awki-tayka «señores» (lit.
padre-madre) en camino o machaqa awki-tayka «nuevos señores».
El jilaqata o mallku (junto con su esposa), como autoridad principal del ayllu o la
comunidad, al inicio de su gestión hace el compromiso de ser un auténtico
representante de la misma y portador de la buena moral y las sanas costumbres. Pero sobre
todo ser el mejor «hermano-mayor» (jila-qata) y protector de los «hermanos menores». Se
le compara incluso al pastor que conduce y cuida a sus rebaños.

El ejercicio del gobierno del ayllu está muy relacionado con el quehacer religioso-
político, económico-social y territorial. A partir de la idea awki-tayka (padre-madre), se tiende
a que el ejercicio de la autoridad beneficie al quehacer cotidiano de todas las familias
integrantes del ayllu.

En resumen, en los mecanismos de nombramiento puede distinguirse un aumce creciente


por tres niveles:
1) Cargos menores pero que exigen más trabajo (por ejemplo, ser qillqiri o «secretario de
actas», alcalde escolar), etc.

2) Otros más onerosos, sean autoridades por ejemplo, mallku o jilaqata o ceremoniales
(pasante de fiesta). Por su costo en dinero y tiempo para beneficio de los demás, dan el
máximo prestigio.

3) Otros cargos, por ejemplo, «justicia», <amawta o «asesor», apoderado de los títulos del ayllu, que
suponen prestigio pero exigen poco trabajo y menor erogación económica.

Todos pasan por los primeros, la mayoría por los segundos, sólo los más respetados llegan a los
últimos. Aunque no se llegue a este último nivel, quie nes ya han sido autoridad principal y preste
de la mayor fiesta comunal tienen un rango especial y reciben el respetuoso nombre de pasaru
(«pasados^). Este proceso por el que se va avanzando de cargos menores a otros mayores y se
acaba finalmente en los de mayor prestigio y respeto, es lo característico del thakhi o ñan
(camino).

Hay además algunos roles que no son concebidos como cargos sino como especialidades. Por
ejemplo, el (o la) yatiri, el/la que (sabe) o sacerdotes del ayllu o la comunidad, cuyos poderes
especiales no provienen del nombramiento comunal, sino de su singular selección por parte de los
poderes sobrenaturales. Expresados muchas veces a través del rayo (THOA 1986 y Huanca 19901.

El esquema descrito es casi general, pero no es el único. Por ejemplo, hay lugares en que ser preste
de la fiesta principal del ayllu se considera aún más importante que ser jilaqata o mallku o jilanqu y
en el 'camino' llega, por tanto. Después de haber cumplido el cargo de autoridad comunal. En unos
lugares el esquema es más simple y en otros, más tradicionales, llega a tener mucha más
complejidad de la que aquí se señala. Esta variedad de un lugar a otro o incluso cierta flexibilidad de
un año a otro, en el mismo ayllu, es una de las características de muchas culturas basadas en la
tradición oral.

Mujeres y jóvenes en el thakhi

El concepto de chacha warmi (hombre mujer) como una unidad aunque se refiere mas específicamente a
la unidad domestica, es una aproximación simbólica a las relaciones sociales, ideales en la sociedad
andina. Al plantearse la complementariedad y unidad del chacha warmi, se provee un modelo, un especie
de declaración normativa, de cómo deben ser las relaciones conyugales entre la mujer y el hombre. Sim
embrago, no siempre es la realidad de dicha realciones.
En el caso de los jóvenes solteros de ambos sexos, para evaluar su grado de participación en la
democracia comunal, además de su condición de solteros hay que tomar en cuenta algunas variables
específicas; por ejemplo: Si son estudiantes o no y su nivel de vinculación con la organización local.

A continuación daremos algunas pistas más específicas para comprender mejor estos puntos.

Participación pública y restringida

La actividad pública en los ayllus y comunidades está íntimamente asociada con los quehaceres
formales sean estos de carácter social, político, territorial, religioso o económico.

En la esfera ceremonial se da siempre por supuesta la participación conjunta de la pareja, los


hombres en su lugar, las mujeres en el suyo, y para ciertas actividades, ambos juntos. Los y
las jóvenes tienen también su lugar, ellos como músicos y ambos como danzantes o como
ayudantes en roles secundarios.

En la esfera pública económica, que incluye los trabajos comunales, es también bastante común una
participación general: mientras los varones trabajan (el jefe o su hijo sustituto), puede ser que las
mujeres estén juntas preparando comida o tal vez tienen también asignadas algunas tareas, como
acarrear y colocar piedras.

Pero en la esfera política del ayllu expresada sobre todo en la asamblea y en los puestos de la organización
comunal, si bien el cargo recae de suyo sobre el conjunto de la unidad familiar, es más patente la
prominencia del varón jefe de familia.

Las Esposas

La elección de las autoridades es en pareja, varon y mujer; en los ayllus y comunidades


originarias; esta el Mallku o el Jilaqata junto sus esposas. La mama t’alla o la mama jilaqata
acompaña a su esposo a donde sea y debe sustituir en caso de ausencia, pero nunca puede
remplazar o decidir por el, incluso en algunos ayllus se considera que la esposa es cabeza, es la
que debe servir al ayllu, cocinando y extensivo su papel doméstico al conjunto de la comunidad,
siempre que le corresponda por algún tipo de actividad comunal. La función del servicio, es
inherente a todo el cargo comunal, es aun más patente en la esposa que el varón; el de la autoridad
en cambio, apenas se reconoce en la mujer.

Los jóvenes solteros

En cuanto a los jóvenes que aún no se han casado, en principio no son plenamente
«personas» y no tienen, por tanto pleno derecho para participar en la asamblea. No se les
impide la asistencia, pero si están presentes suelen limitarse a escuchar porque, en términos
estructurales, siguen siendo yuqallas e imillas (muchachos y muchachas sin
responsabilidades). Es aún menos frecuente ver mujeres solteras en la asamblea, a menos que
representen a sus padres ausentes, y entonces están todavía más calladas.

Esta idea de que son aún yuqalla o imilla inmaduros, todavía pesa sobre muchas de sus
iniciativas y justifica su ausencia en las deliberaciones y cargos públicos del ayllu.

Por eso no suelen ocupar cargos importantes que requieren de experiencia y responsabilidad
(como mama mallku o mama jilaqata, etc.). Pero es posible que ocupen cargos de menor
importancia (como de depones) o que requieren cierta destreza escolar (como de actas). En
esos casos, es generalmente el varón, y no la mujer, el que tiene más posibilidades de
desempeñar esos cargos menores aunque ambos tengan cierto grado de escolarización.
Tampoco es raro encontrar a jóvenes (incluidas algunas mujeres) involucrados en
algunos cargos y actividades que no están contemplados específicamente en la estructura de
la organización del ayllu. Por ejemplo, ser reportero o educador popular, o el ser «líder»
con funciones nuevas que en algunas regiones se realizan en coordinación con el kamani de
cultura de! ayllu. En ciertas deliberaciones también se puede solicitar la participación de
un estudiante avanzado, llegado quizás de la ciudad o de algún centro urbano y con alguna
formación superior, porque se supone que está más enterado de determinados temas.
Pese a estas restricciones formales, el rol de sustituto, arriba indicado, puede alcanzar
proporciones que sorprenden a! forastero. En aquellos ayllus con fuerte migración de sus
pobladores varones, los jóvenes varones son parte activa de la misma ocupando el puesto del
padre y en algunos casos, son incluso reconocidos como nuevas «personas». En este caso, el
hijo puede incluso tener más vigencia pública que su madre. Si su padre falleció cuando ya
estaba en lista para cumplir cargos comunales tan importantes como ser jilaqata- mallku le
reemplaza entonces su hijo, en compañía de la madre viuda. La razón última, ya señalada, es que
el cargo recae en realidad al conjunto de la unidad familiar de la sayaña o terreno en torno a la
vivienda- más que a un individuo específico.

Influencia indirecta

La mujer y los jóvenes es más probable que ejerzan una influencia indirecta en las decisiones
del jefe de familia. Muchas veces el voto del padre, en la asamblea comunal, tiene un
respaldo del núcleo familiar: la esposa y los hijos(as) jóvenes.

Al hablar de la asamblea comunal, ya mencionábamos la práctica generalizada de consultar


con las esposas antes de que la decisión sea definitiva. Por eso ciertas decisiones importantes o
aquellas que implican cuotas que afectan a la economía doméstica, necesitan varias asambleas,
con consultas intermedias en cada hogar. Es que la familia constituye la unidad
productiva básica y cualquier decisión a este nivel afecta a todo el conjunto.

Sin embargo, según las propias mujeres, algunos varones no toman en cuenta este nivel
de consulta. Relegan a la mujer y ésta tiene que «acatar» la voluntad del marido.

Una de las razones para llegar a esta situación es que la mujer adulta no ha tenido tantas
oportunidades de estudiar, algunas ni siquiera se han escolarizado y la mayoría ha
alcanzado un n i v e l menor de estudios. Ello hace que se sientan -y los hombres las
hagan sentir - por debajo de los varones y con incapacidad para participar activamente
en las asambleas comunales.

Perspectivas en el futuro

Las nuevas circunstancias sociales y culturales van imponiendo, como ocurre ya en otros
puntos, una refuncionalización permanente en la práctica de la democracia del ayllu: el
thakhi.
Para empezar, cada vez es más discutible que la mujer tenga menos oportunidades
educativas. Sigue habiendo una brecha, pero \a haciéndose más estrecha y la gran
cantidad de programa de promoción de la mujer y de organiza ciones específicas para
ellas v a n dejando huella tanto en las mujeres como en los varones.
Pensamos que a medida que esta generación más joven vaya formando nuevas familias,
será más probable encontrar algunas mujeres con ciertos roles comunales v. a la larga, se verá
también útil que participen más activamente en la vida política del avllu tanto en la
asamblea como, posiblemente, con cargos comunales.

Quizás el punto más difícil de analizar es el de la asignación de ¡os cargos no tanto a


individuos sino a unidades familiares. Ha}' toda una concepción simbólica de la relación
entre cargos y reciprocidad comunal, que pasa casi siempre por la unidad familiar."1

Probablemente serán más funcionales aquellas innovaciones que fomenten, por una parte, la
participación más conjunta de la pareja -chacha-warmi- en la asamblea y en las actividades de la
directiva y, por otra, la designación casi automática de mujeres (como protagonista de la pareja)
para determinados tipos de responsabilidad en que ellas puedan desempeñarse mejor (por ejemplo,
salud o educación) y, ciertamente, en la representación formal ante la asamblea de sus grupos
específicos de mujeres. Todo ello implica innovaciones, pero más en línea con toda la concepción
aimara y quechua de la pareja y su relación conjunta con el ayllu

Renovación de cargos

Uno de los puntos en los que periódicamente el ayllu debe tomar decisiones, es el
nombramiento de aquellos miembros preseleccionados para desempeñar cargos de autoridad
comunal.

El criterio general subyacente es el de la rotación e igualdad de responsabilidades (más que de


oportunidades) entre los que ya han llegado a determinado nivel en el thakli, ñan o «camino».

En el pasado las «personas» se anotaban con bastantes años de anticipación en una lista (que en
Jesús de Machaqa, se llama tila (=fila) o en los ayllus del Norte de Potosí a las personas
entrantes «al cargo» se conoce con el nombre de sursi, para llegar al cargo de nivel superior.
Sabía así con tiempo qué año le iba a tocar y se preparaba mediante aynis y otras previsiones
para poder cubrir bien todo el gasto que el cargo suponía.

Hoy esas «filas» (ahora se usa más el nombre de «entrantes») o sursis son menos abundantes
y la tendencia es a disminuir la edad de los candidatos por falta de voluntarios en lista de
espera. Pero el criterio de fondo sigue siendo el de acceder al cargo por cierta rotación: a cada
jefe de familia a cada sayaña le toca cumplir su «cargo», por reciprocidad con el ayllu que le
concedió su pedazo de tierra y le brinda protección. Por eso mismo, nadie quiere repetir un
cargo que ya ha «cumplido».

Sin embargo, siempre hay un número relativamente grande de jefes de fa milia que, por haber
cumplido ya cargos del nivel inferior, califican para el de nivel superior. Por eso actualmente,
más que «filas» o rotaciones rígidas, suele haber cierto margen de juego para nombrar a uno u
otro pero sólo dentro de este grupo que ya califica.

Casi siempre la designación se realiza a viva voz y mano alzada, lográndose muchas veces el
consenso. Pero es en este proceso de elección final donde, además de la rotación, pueden
influir otros criterios complementarios, como los que a continuación comentamos.

Escoger el más capaz

La elección del más apto, en algún cargo importante, es una preocupación, donde se toma muy en
cuenta la capacidad, la experiencia y el compromiso con el ayllu, demostrada en el quehacer
cotidiano o en el desempeño de cargos anteriores.
Este criterio funciona para cargo de mayor responsabilidad, sobre todo si el ayllu tiene entre manos algún
proyecto que a todos interesa. En tales casos es incluso posible que la permanencia en el cargo se alargue
hasta que la persona considerada más idónea para llevar a cabo el proyecto lo haya concluido.

Sin embargo, el criterio de la rotación sigue siempre presente. Por ejemplo, si el candidato prueba
que ya ha «cumplido» éste u otros cargos onerosos equivalentes, más fácilmente se le dispensa y se
busca a otro.

Exigir al flojo y criticón

Hay otros criterios complementarios, aparte de la aptitud. Uno particularmente interesante, para
comprender el thakhi o la democracia del ayllu, es el de nombrar a un jayra o qhilla «flojo» y además
de «bocón» o «criticón», precisamente «para que aprenda» o yatiñapataki.

Este criterio, adquiere sentido en la medida en que la asamblea general del ayllu, sigue siendo una
instancia superior que controla y obliga a sus pobladores para el ejercicio de la autoridad. El así
elegido puede funcionar y hasta cambiar si es estimulado por la propia comunidad.

Juegan entonces un papel particularmente útil los consejos de los «pasados» (pasaru); es decir, el
grupo de gente mayor y respetada que ya cumplió anteriormente estos cargos más ejecutivos de
autoridad y que ahora son más bien «amawtas o consejeros». Suelen ser siempre muy tenidos en
cuenta por los nuevos que entran en el cargo.

En la medida que estos mecanismos siguen funcionando dentro del thakhi o la democracia del
ayllu, son excelentes formas de pedagogía comunal; sin embargo, hemos visto también al ayllu y
comunidades descuidadas, en que por ese camino han quedado atrapados por algunos flojos,
bocones y oportunistas politiqueros adscritos a los gobiernos de turno.

En algunos caso se queda el mas vivo

Pese al thakhi o la democracia del ayllu, en el nombramiento de los cargos tampoco es extraño,
aunque es poco común que se produzcan algunas formas de manipulación politica, La vieja practica
caudillista de muchos politiqueros y sindicalistas campesinos, ha tomado cuerpo en algunos
comunidades.

En este sentido, no es raro que algunos cargos importantes sean ocupados por «el más vivo». Es
decir, por aquellas personas que intentan aprovecharse del cargo para su propio beneficio e incluso
acceder a responsabilidades mayores a nombre del (ayllu) pero sin el consentimiento de ella.

Aunque es más difícil que así ocurra en cargos menores y muy arraigados en la tradición del ayllu,
como el de jilaqata - jilanqu - mallku,. Pero puede ser, por ejemplo: que alguien se avive para
conseguir en alguna oficina pública su memorándum como corregidor o registro civil, o que en
un congreso logre manipular su nombramiento a algún cargo supra-ayllu.
Generalmente «el más vivo» (se suele decir en otros lugares «el más pendejo»), no dura mucho
tiempo en sus funciones. Tan pronto el ayllu detecta sus intenciones personalistas, es probable que
se produzca una fuerte sanción mo ral al infractor, e incluso podría llegar a producirse la expulsión o
separación de la persona, por su práctica oportunista y atentatoria a los intereses locales.
En resumen, las modalidades arriba descritas no son contradictorias y los ayllus, siempre intentan
combinar dos criterios, formulados idealmente como máxima participación y eficiencia. El primero,
se asegura más por el camino de la rotación. El segundo, por la elección del más apto. La
combinación puede darse, por ejemplo, escogiendo al más apto sólo entre los que aún no han
ocupado el cargo. Otro recurso bastante socorrido es el de nombrar reiteradamente a. los menos
aptos a una serie de cargos onerosos pero no complicados para que así cumplan también su thakhi
obligatorio, sin obligarles ya a que accedan a los cargos que exigen mayor madurez y
responsabilidad.
Las Contribuciones al gasto común
El autofinanciamiento a nivel comunal, es una práctica generalizada, generalmente se cumple por tres
vías complementarias:
1) Mediante trabajo comunal para todo tipo de servicios compartidos, (camino, puente, obras de
riego, escuelas, postas, sede social etc.)
2) Mediante ocasionales cuotas, casi siempre vinculadas a un gasto muy específico, por ejemplo:
para comprar un motor.
3) Mediante los gastos extraordinarios en que incurre rotativamente cada comunario cuando, le
toca desempeñar un cargo oneroso.
Los aportes a veces son diferenciados, según se trate de originarios o agregados, lo que significa la
posición de mayor o menor extensión de tierra. Si espera también que los residentes prósperos; además
de cumplir regularmente con los cargos y demás obligaciones que les corresponde, contribuyan
extraordinariamente con mejora para el ayllu. De no ejecutar satisfactoriamente estas exigencias, el
residente corre el riesgo de perder sus tierras con lo que se romperían definitivamente sus vínculos con
el ayllu.
Llevar adelante tramites suele ser una de las cargas mas onerosos de los dirigentes en funciones, el
servicio al Ayllu o a la comunidad, lo lleva mas allá del novel local, conectando al dirigente a otros
espacios, tales como los principales urbes, las oficinas públicas, privadas etc.
Sin embargo, no siempre llega al autofinanciamiento. En momentos de emergencia, como desastres
naturales, sequía y otros, puede ser que no se cumpla con estas obligaciones. Por otra, estos aportes
difícilmente puedan cubrir toda la dotación deseable de servicios básicos, que seguirá exigiendo
desembolsos muchos mayores del Estado. Pensemos por ejemplo, en una infraestructura de riego o
electrificación rural.
El mayor o menor aporte comunal, mucho depende de las necesidades y actividades en las que esta
envuelto el ayllu. Cuando hay alguna obra de emergencia, como un camino esencial o un proyecto que
ha suscitado el entusiasmo general, como un colegio, la contribución puede ser mucho mayor; no es
raro que en esos casos cada comunario, llegan a dedicar hasta 60 días por año a ese trabajo comunal
concreto. En cambio, si los servicios básicos ya están atendidos y la comunidad cuenta, además con el
servicio regular de alguna repartición pública, por ejemplo, un céntrica carretera asfaltada, es probable
que los aportes se reduzcan notablemente.
Proyectos como alimentos por trabajo y otros semejantes, aunque puedan cumplir funciones, muchas
veces han apagado también la iniciativa comunal para llevar adelante sus propios proyectos.
La democracia entre ayllus
Participación entre ayllus
El ayllu nunca es un ente aislado, sino que parte de un conjunto de Inter-ayllus de niveles superiores.
Como punto histórico de partida la actual organización andina, nivel de regiones, tiene orígenes en las
antiguas Markas, que a la vez formaban parte de unidades mayores llamadas Señoriós, como los
Lupazas, los Paqasis, los Killaka, los Qharanka, los Qharaqara; este punto de partida aún explica mejor
la persistencia de esta especie de lógica del ayllu, o este nivel intermedio, junto con algunas de sus
nuevas particularidades.
La rotación entre Ayllus
También a este nivel funciona el sistema rotativo, en mayor o menor grado, cada unidad menor,
comunidades, cabildos etc. Dentro el sistema tiene la oportunidad de ser la cabeza de la jurisdicción, de
acuerdo a un orden fijo y rotativo. Hasta cierto punto se podría decir que la principal expresión andina
de igualdad y democracia de Markas o regiones suele ser alguna forma de rotación cíclica.
Pero aquí es aún más evidente la complementariedad entre este principio de máxima participación y los
de mayor eficiencia, (buscar al más capaz) o de habilidad política (el más vivo). Se sabe por ejemplo:
que en tal año el cargo corresponderá a tal Ayllu, comunidad o grupo de comunidades, (antiguos ayllus
históricos), parcialidades etc. Pero el juego político para elegirla se centrará entonces entre varios
candidatos procedentes de este grupo o de comunidades, ya haya llegado a un pleno consenso sobre el
particular. Igualmente habría cierto juego para que el resto de comunidades vayan accediendo a cargos
de mayor o menor prestigio.
Cuando siendo varios candidatos idóneos, no se llega a suficiente consenso y el esquema tradicional de
votos por aclamación o a mano alzada ya no resulta tan obvio, puede pedirse que cada director haga fila
frente a su candidato para nombrar al que logre agrupar a más gente frente a sí.
Un problema típico, al aplicar estos mecanismos andinos a niveles superiores, es que se va perdiendo
el control, se supone el intenso conocimiento personal entre todos. Puede entonces imponerse, el que
habla mejor, con el esquema de cabildo abierto, todos las personas votan y por tanto se impone el del
lugar mismo del evento; por haber mas gente de allí mismo o el que hay logrado traer mas paisano y
seguidores. Hemos visto diversos mecanismos ingeniosos para resolver este problema, por ejemplo:
haciendo una segunda vuelta solo entre los mas votados o exigiendo que cada unidad inferior de
manera unánime.
Pero el criterio rotativo se mantiene sobre todo al asegurar que todas las unidades inferiores quedarán
de alguna manera representada en la directiva de este nivel superior o que de alguna manera todos
llegarán a ocupar el cargo máximo, en el mundo aimara-quechua, no se ve tanto la hegemonía de
determinadas ayllus o comunidades dentro de una Marka o región, algo que ocurre más en áreas menos
tradicionales, como Cochabamba, pero en si puede darse una fuerte competencia entre partes par ir
ganado el prestigio una posición más hegemónica.
Prestigio y Hegemonía versus conflicto o equilibrio
El prestigio en la cosmovisión aimara-quechua, no solo tiene el carácter positivo que ya vimos al hablar
del thakhi o camino. También tiene sus aristas negativas, expresadas en clichés y estereotipos, por
ejemplo: en los congresos regionales y departamentales en manifestaciones rituales, simbólicas o el
quehacer cotidiano.
El prestigio entre ayllus de una Marka por región y entre Markas o ínter regiones, casi siempre esta
sustentado en elementos históricos y de identidad local que buscan la reafirmación y el reconocimiento
a través de la hegemonía de Inter-ayllus, por ejemplo: ocupando cargos importantes, como signo de
legitimidad.
Así dentro el altiplano paceño, es interesante la fama de los oriundos de Achacachi como (lazo seguro)
en alusión simbólica a su condición de guerreros y valientes en acciones protagonizadas contra las
haciendas en los primeros años de gobierno del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR)
después de 1952 y confirmada después en la etapa de consolidación de la Confederación
Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), por sus grupos de
defensa y choque. Pero, a la vez, insinúa que so n prepotentes, también por la época del
movimientismo. Asimismo los comunarios de Jesús de Machaqa, pese al tiempo
transcurrido, aún tienen el renombre de «come curas», a partir de la sublevación de 1921 y
el supuesto canibalismo con el cura del lugar (hecho desmentido en documentos firmados
por el mismo cura tras la sublevación).
Sin embargo, este apodo negativo manifiesta, a la vez, el orgullo local por una rebeldía
que destruyó el sistema opresor pueblerino y que ha pasado a ser el símbolo de la
resiste ncia indígena, aún en nuestros días.

Esta pugna por mayor prestigio puede además estar vinculada con otras pretensiones o
conflictos, por ejemplo para imponer sus intereses a los de otros o ganar para sí algún
recurso escaso, como tierra, agua o totoral.

Todas estas formas de prestigio y de lucha, que están muy ligadas a los regionalismos
aimara y quechua, son en la vida de las grandes markas o «pueblos». Reproducen lo
positivo de la fama, muchas veces a contrapunto con su lado negativo. Pero, si además hay
algún conflicto subyacente, pueden llegar a situaciones particularmente agresivas.

Lo más peligroso es cuando del prestigio se pasa a la intolerancia con ambiciones


extremas de predominio por parte de alguno de los lugares o bandos. Puede entonces
degeneraren una fuerte resistencia de los otros lugares o regio nes afectadas y desembocar
en ch'axwas (peleas), que ponen en grave peligro la unidad Inter- ayllus de algunas
markas.

En su forma tradicional, el ayllu andino tiene una serie de mecanismos que pretenden
regular esta puja por mayor prestigio y poder. A este nivel Inter- ayllus o de ayllu mayor
nos encontramos con frecuencia, pero no siempre, con la división entredós
parcialidades o mitades, cada una de ellas conformada por un conjunto de ayilus:
arriba/abajo (araxa/manqha o alasaya - masaya en aimara, y janansaya - urinsaya en
quechua) o, en algunos casos, derecha/izquierda (kupi/ ch'iqa, en aimara).

Con esta forma de clasificación, al interior de la organización socio- política se produce


una separació n sistemática en dos partes (saya), con sus respectivos territorios, cada una
de las cuales determina a la otra, aunque puede existir cierta preeminencia de alguna,
o una lucha por la preeminencia, porque no es un sistema estático.

Este esquema socio -organizativo ayuda a dinamizar los diversos elementos y niveles
regionales del mundo andino. Así puede reaparecer también en algunas unidades menores.
Por ejemplo, hay ayllus subdivididos en arriba y abajo, o en varias zonas que se aglutinan
con cargos rotativos en todo el conjunto comunal, al tiempo que cada uno de estos
conjuntos se aglutinan en la unidad mayor, como la marka.
En otras palabras, toda unidad social está dentro de un sistema segmentario, combinado con
frecuencia con una instancia dual, ¿n la que cada una de las dos «parcialidades» -como su
mismo nombre indica y son parte de un conjunto. Esto quiere decir que hay una separación
interna (una especie de regionalización). Pero a la vez, ésta es parte de una organización
más amplia (Platt 1988. Molin a R. 1993). Por esta vía, que está en la raíz de todo el sistema
rotativo andino, el mundo andino ha buscado controlar y frenar una hegemonía total de
cualquier parte sobre el resto.
Lo dual no sólo está limitado al carácter social, sino que se extiende a la misma
cosmología andina. Por eso es tan importante el principio de que: akapachana taqi kunasa
paninipuniwa (todo es par en este mundo). Lo Ch’ulla (impar) es deficitario y hay que buscar
su par. De esta manera las oposiciones ecológicas de puna-valle, o las sexuales de
hombre/mujer y las mitades sociales de araxa/manqha son tan fundamentales en la sociedad
andina. En los pensamientos aimara y quechua, «uno es fracción de dos», puesto que no
existe la percepción de que la cualidad es la unidad, sino la alteridad.
Por eso el concepto de dualidad se halla expresado bajo la forma de complementariedad y/o
equilibrio (Sanchez-Parga 1989:81).
Este permanente flujo y reflujo entre unidad y segmentación, entre equilibrio, prestigio y
hegemonía, establece un permanente juego dialéctico entre solidaridad y fraccionalismo, muy
propio de la cultura y sociedad andina. Pero la prevalencia del conflicto y formas de predominio
excluyente, en unos casos, o de situaciones con mayor equilibrio y complementariedad; en otros,
dependerá de muchos factores ambientales y sociales específicos, que aquí no podemos examinar en
detalle. Por ejemplo, la existencia o no de recursos suficientes para cada una de las unidades, la
existencia o no de un objetivo, un plan o un enemigo común, claramente definidos, que aglutinen a
todo el conjunto, la influencia o no de divisiones llegadas desde afuera por motivos políticos,
religiosos o económicos, etc.

El rol de la Marka o Pueblo articulador

En su forma más originaria todo este conjunto de ayllus, comunidades y parcialidades suelen
aglutinarse en torno a un centro urbano-ceremonial llamado Marka, que no tiene sino dos
cabezas, una para cada mitad. Se supone que ambas deben caminar juntas y van alternando,
de un año a otro, en su mutua jerarquía. Donde no hay un sistema de mitades, puede ocurrir
algo semejante entre los varios ayllus que las componen.

Sin embargo, esta forma máxima de equilibrio en la dualidad se ha desestructurado en


muchas partes, en buena parte porque este pueblo central ha quedado en manos de gente
mestiza o amestizada, que en contra de la cosmovisión andina pretende monopolizar todo
el conjunto. En muchos de esos pueblos centrales, ha influido también la presencia de
autoridades gubernamentales (alcalde, subprefecto) que no son de origen indígena ni se
mueven en esa misma lógica de hegemonía compartida.

Si a ello se añaden como ocurre muchas veces diversas prácticas de explo tación sobre el
contorno indígena, la agresividad del centro puede incentivar, por reacción, la solidaridad
de todo este conjunto originario frente al pueblo.

La Marka o pueblo central es parte de la democracia y lógica andina, pero su monopolio sobre
el contorno rural es una violación de esta democracia.

Persiste el control comunal

En este nivel de Marka de la organización indígena sigue habiendo una buena posibilidad de control a
sus autoridades por parte de los ayllus que los nombraron. Se suele garantizar así la reproducción y
el ejercicio de la democracia comunal, ampliada ya a Inter-ayllus, pese a que a este nivel regional
ya suelen entrar en juego, de una manera más intensa, las relaciones con otros actores como los
«vecinos» y autoridades del pueblo central, las instituciones estatales. Las ONG's, los partidos
políticos, etc.

Los mecanismos de control son variados. He aquí algunos: el seguimiento y observación cotidiana
(no planificada) de las acciones de las autoridades por parte de los comunarios: las peticiones de
informes regulares y otras varias formas de cuestionamiento, aprobación o sanción en las
reuniones, ampliados y congresos: la participación o ausentismo en diversos eventos convocados
por la directiva: el aportar o no con trabajos u otras contribuciones cuando se solicitan; y,
naturalmente, la garantía de que nadie se podrá perpetuar en el cargo, sino que habrá
renovación y rotación.
Con todo ello suelen facilitarse ciertas formas de autonomía de la organización indígena a
nivel de markas, sobre intentos contrarios, alentados tal vez por algunos de los demás actores
arriba mencionados o incluso por algunos comunarios influenciados ya por lógicas
distintas.
2. 7. Reconstitución del Ayllu y Derechos de los Pueblos Indígenas:El Movimiento Indio en los
Andes de Bolivia

María Eugenia Choque


Carlos Mamani

Introducción

Este trabajo busca compartir y reflexionar sobre un proceso étnico político basado en la
reconstitución del ayllu que se desarrolla en el Qullasuyu. Este proceso fue iniciado en el año
1993, por las comunidades de la provincia Ingavi (departamento de La Paz), que el 16 de enero
decidieron volver a organizarse en ayllus y comunidades originarias, bajo el gobierno de sus
autoridades propias jilaqatas y mallkus, retomando así el camino de la autonomía y libertad
indígena. Ingavi dio comienzo a un proceso de regreso a lo propio y el abandono, casi
vertiginoso, de una forma de organización impuesta por el Estado reformista de 1952, el
sindicato campesino.

La reconstitución del ayllu está expresado en un movimiento organizativo político liderizado


por el «Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu» (CONAMAQ) y sus
organizaciones de suyu, regionales y departamentales. El proceso organizativo ayllu tiene
como objetivo principal el logro de los derechos al territorio y a la autonomía de los pueblos
indígenas aimara, qhichwa y uru.

Este proceso no podría ser comprendido a cabalidad sin considerar el marco social e
ideológico del cual resultó, así como una aproximación al modelo de organización
andino. En esa perspectiva, el texto refiere al trabajo desarro llado por el Taller de
Historia Oral Andina (THOA) en la investigación y difusión de esa parle de los
Andes; así como de la idea del ayllu que se formula con la reconstitución.

El reencuentro con el ayllu

Que duda cabe que 1952 es un año de la división histórica entre el período colonial de
exclusión de los pueblos indígenas de la idea de Estado-nación y otro período de
inclusión mediante la asimilación. Luego de las acciones de • abril que determinaron la
destrucción de las bases del antiguo régimen y el triunfo de las milicias campesina y
obreras, no quedó mas alternativa al Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) que
optar por la inclusión indíge na en su proyecto de formación del Estado nacional.

Esta inclusión, a través de la asimilación, pasaba por la prevención y el desarraigo de las


practicas del alcoholismo, el uso de la coca, las supersticiones y los prejuicios dominantes
en el agro mediante una educación científica, (Ministerio de Educación 1956). Este
desarraigo indudablemente buscaba extirpar la tradición, cultura y memoria propias bajo el
argumento de superstición, tal como había ocurrido en los inicios de la colonización con la
extirpa ción de idolatrías.

Esta política de inclusión, en perspectiva de larga duración, significaba la aceptación del


fracaso de una política de exclusión que apenas 50 años atrás había previsto.

«... el desaparecimiento lento y gradual de la raza indígena. En efecto, desde el año de 1878
esta raza está herida de muerte. En ese año, la sequía y el hambre trajeron tras sí la peste
que hizo estragos en la raza indígena. Por otra parte el alcoholismo, al que son tan
inclinados los indios diezma sus filas de una manera notable, y tanto que el número de los
nacimientos no cubre la mortalidad... De manera que en breve tiempo ateniéndonos a las
leyes progresivas de la estadística, tendremos la raza indígena, sino borrada por completo
del escenario de la vida, al menos reducida a su mínima expresión. Si esto puede ser un
bien se apreciará por el lector, considerando que si ha habido una causa retardataria en
nuestra civilización, se debe a la raza indígena, esencialmente refractaria a toda
innovación y a todo progreso» (Censo General de la República de Solivia 1900:35-36).

El Estado republicano, en su condición colonialista, estaba asentado en una ideología tan


profundamente racista que sus líderes no aceptaban la idea de compartir el mismo
espacio con los indios; consecuente desde su independencia. Bolivia planeó nada menos
que el extermin io como forma de privar al indio de su tierra. Esta política fue harto
distinta a la seguida por España que había construido su política colonial sobre la
autonomía de la comunidad indígena.

La expansión del latifundio durante el periodo republicano fue la expresión más acabada del
colonialismo boliviano que despojó al indio su tierra, su libertad y amenazó con borrar su
identidad al convertirlo en colono.
Sobre esta situación en 1952 la inclusión indígena, aparte de constituir el fracaso de una
política de aniquilación, buscaba establecer una «conciencia nacional» boliviana. Esta
conciencia que debía ser inculcada a través de la propaganda y la escuela que enseñaban, por
ejemplo, el hecho de la independencia como la autodeterminación política de un pueblo sujeto
al dominio de un usurpador extranjero cuando en realidad el que ha sido y sigue siendo sujeto al
dominio extranjero es el pueblo indio.2
La inclusión, en un primer momento pareció responder a plenitud las expectativas estatales,
los indios en masa fueron educados a través de escuelas, cuarteles de ejército y programas
especiales. 3 Una vez organizados en sindicatos, los indígenas campesinos fueron movilizados
constantemente para su utili zación en los conflictos de poder e incluso como parte del aparato
represivo, en el castigo de los siempre levantiscos mineros bolivianos. El Estado nación
pareció estar construido. Sin embargo dos decenios más tarde, surgieron las primeras voces
que rompieron con la «bolivianización» del indio. El año de 1976, Juan Condori Uruchi
escribió «Los aymaras somos todo un pueblo»4, y no solo clase: fue el comienzo de un proceso de
auto- identificación y de resistencia.
Con Condori Uruchi, muchos indígenas educados en institutos superiores y universidades
comenzaron a cuestionar la historia boliviana, que era enseñada como propia a los estudiantes
indígenas. La alfabetización, el acceso a la lectura permitieron conocer de manera episódica,
la historia de resistencia a la colo nización. Estas lecturas, a su ves dieron lugar a la
formación de centros cultu rales y políticos como el 15 de Noviembre, el Movimiento
Universitario Julián Apaza (MUJA) y el Mink'a?
Capítulo I. parágrafo 5 del Código de la Educación Boliviana de 20 de enero 1955.
«La guerra de la independencia sostenida durante 16 años, con inquebrantable de-
nuedo y espíritu de sacrificio, hasta ver coronados los esfuerzos y sacrificios de
aquellos «desterrados en el seno mismo de la patria y degradados en la condición
humana» por el usurpador extranjero. Y fue también la mas fuerte expresión de
voluntad de un pueblo de su autodeterminación política». Dirección Nacional de
Informaciones (1962).

La publicación fue dirigida por Jacobo Libermann con la colaboración de Luis


Peñaloza y Nazario Pardo Valle.
En ese período, incluso hoy, la educación es proyectada a los pueblos indígenas como
adoctrinamiento de ideas corno nación, cultura, religión, civismo, civiliza ción.
Artículo publicado en el suplemento «Semana» de Ultima Hora y reeditado en el Rolclin
Chitakolla.

La historia de resistencia indígena paradójicamente estaba escrita por no indígenas,


entonces fue patente la necesidad de conocer el pasado, de inquirir a los mayores, consultar
repositorios documentales, escribir la historia propia. En esa coyuntura se formó el Taller
de Historia Oral Andina (THOA), que combinó el aprendizaje del oficio de historiador
con preocupaciones ideológicas y políticas.6

El THOA principió su incursión en la investigación histórica bajo la idea de descolonizar la


memoria histórica india y con el objetivo de reconstruir, a la vez, la historia india,
principalmente de los 150 años de dominio republicano que bajo la ideología del
mestizaje encubría y desconocía la existencia de aimaras, qhichwas, urus. Guaraníes y
los demás pueblos indígenas. Entonces, la investigación se concentró en la centuria 1860-
1950 caracterizada por el recrudecimiento del colonialismo bajo la forma republicana del
latifundio que fue resistido y frenado por el ayllu.
La Consulta a los mayores (durante los años 1983-1986 principalmente) y la revisión
documental de los principales repositorios del país, dieron por resultado el conocimiento de
un movimiento indio encabezado por caciques, cuyo abolengo se remontaba a los lejanos
años de la invasión europea, y otros apoderados indios que los ayllus, respondiendo a las
normas liberales de representa ción, habían designado como sus mejores líderes.
El movimiento de caciques apoderados, cuya formación respondió a la defensa del ayllu
contra la usurpación latifundista, diseñó una estrategia de «revaloración» de normas e
instituciones coloniales, especialmente aquellas referidas a la República de indios. Un
elemento de fundamental importancia de esta estrategia fue el título colonial de tierras de
comunidad otorgado por la corona de España; los títulos de composición y venta cuya
conservación había sido encargada a los caciques y a todos los funcionarios indígenas que
periódicamente cumplían con el pasaje de cargos.

De la defensa del ayllu frente a la voracidad colonizadora del latifundismo, los caciques
apoderados pasaron a propuesta claramente políticas:

Amparo general y garantía a las comunidades y los ayllus por parte del Estado.
Revisita general y revisión de límites para corregir injusticias y errores en las distintas
dema rcaciones y divisiones políticas implementadas por la República, así c o m o
la revisión de límites con los países limítrofes para que revise la integridad de
patrimonio territorial.
Renovación de Bolivia a través de la fundación de la República del Qullasuyu y la
adopción de una política cultural y lingüística plural (Mamani 1991).
La receptividad que pudiera haber tenido la propuesta indígena, terminó en la
incomprensión y el olvido, pero sí sirvió para aglutinar a la colectividad indígena bajo
principios y objetivos comunes y para fortalecer la defensa del ayllu, la tierra indígena y la
vida.

Este conocimiento fue difundido por THOA a través de libros y artículos que muy poco
llegaban a la población indígena. Entonces fue optado retomar una tradición reciente de los
aimaras urbanos: la radionovela aimara. Los líderes de la resistencia, como Santos Marka
T'ula. Eduardo Nina Qhispi y José" María Victo ria, fueron conocidos por primera vez. Sus
Ayllus y markas e incluso familias fueron localizados e identificados iniciándose un diálogo
muy fructífero entre el presente de búsqueda de fortalecimiento e identidad y el pasado de
restitución y defensa del ayllu. El dialogo fue real, y los sobrevivientes de los caciques
apoderados como Leandro Condori Chura (Condori y Ticona 1992), el escribano Julián
Tángara, y Andrés Jach'a Qullu, volvieron a hablar de sus luchas y proyectos para que los
jóvenes prosigan el proceso interrumpido por el MNR.

La difusión de las novelas y su impacto condujo al grupo THOA a abandonar hasta hoy
una especialización que había dado frutos muy apreciados por la academia. La respuesta
expresada por la comunidad fue imperativa: volver a la comunidad, al ayllu. Entonces se
materializó la reconstitución; con los ayllus y markas de la provincia Ingavi, el THOA
inició un ciclo de trabajo que conduce por caminos que recorren el ancho altiplano y los
valles interandinos como activistas de un proceso descolonizador.

La opción política se expresa en este caminar por la construcción de un movimiento que


recoja los objetivos de los caciques apoderados; sin embargo esta opción afecto
negativamente, a la capacidad de producción y aporte en el estudio de la historia, cultura y
sociedad indígena hecha desde los mismos indios.

El Ayllu

El ayllu es un modelo de organización social y su vigencia abarca a casi todos los pueblos
indígenas de la región andina: Colombia, Ecuador, Perú, Bo livia y Chile. Se constituye en modelo
porque jatha, la «semilla» de donde germinó la civilización y las estructuras políticas andinas como
el Tawantinsuyu. El ayllu, que equivale también a una familia (ali), es hasta hoy la unidad con la que
se conforma nuestro tejido de organización social y político. Es la más pequeña, pero importante,
unidad, y refleja también nuestra organización estatal; no olvidemos que al organizar los españoles
el sistema colonial, lo único que hicieron fue cambiarle el nombre de «ayllu» por el de «comunidad
indígena» (o resgurado en el caso colombiano) (THOA 1995).

Este modelo de organización, conocido también como comunidad indígena desde la colonia,
comporta tres elementos esenciales en su conformación:

1. Reconoce la propiedad colectiva e inalienable de la tierra, aún así ésta se encuentre parcelada;
se entiende que en última instancia la propiedad corresponde al Ayllu.
2. Su origen enraizado en el más remoto pasado prehispánico o colonial, tratándose de la
comunidad indígena (Matos Mar 1976: 82).
3. Su sistema organizativo y político reúne, tanto la tradición prehispánica como colonial
(Matos Mar 1976:197), y el parentesco es un elemento fundamental.

Desestructuración de Pakajaqi

En esta matriz se conforman las markas, uno de los casos en el que ha trabajado el THOA es
Pakajaqi, que desde su condición, en el período precolonial ha transitado por un proceso de
desestructuración y fragmentación hasta quedar convertida en la actual provincia republicana de
Pacajes. El Pakajaqi antes de la conquista fue un Estado regional (Roberto Choque s/f), que junto a
otros pueblos como los qanchis, qanas, quilas, suras (...) conformaba el Qullasuyu. E! territorio del
estado Pakajaqi antes de la invasión española comprendió un extenso espacio dividido en
las dos regiones de Urqusuyu yUmasuyu, y estaba compuesto por las siguientes markas:

Urqusuyu Umasuyu
Q'araqullu Jayu Jayu
Sicasica Qalamarka
Qallapa Wiyacha
Tiwanaku Laja
Caquiaviri Guarina
Waqi Pucaráni
Caquingora Achacachi
Jisk'a Machaqa Chukiyawu
Jach'a Machaqa

(Capoche 1959: 135 y 137. citado en Choque s/f: 9).

Con la imposición del dominio colonial Pakajaqi fue fragmentada en tres provincias
coloniales: Sicasica, Omasuyos y Pacajes. La provincia Sicasica fue conformada por las
niarka de Qaraqullu, Sikasika, Jayu Jayu y Qalamarka. Por su lado la parte que continuó
llevando el nombre de Pakajaqi (Pacajes) fue conformado por: Qallapa, Qaqinkura, Axawiri
(Caquiaviri), Machaqa la Chica, Machaqa la Grande. Tiwanaku, Waqi y Wiyacha, ésta
última fue incorporada de la parcialidad Umasuyu; mientras que la provincia Omasuyos
conformó con las restantes markas.

Para la conformación de la provincia Pacajes la administración colonial elevó a doce el


número de pueblos (markas), Qallapa fue dividida en tres: Santia go de Qallapa. San Pedro
cíe Kurawara y San Pedro de Ulluma: Qaqinkura fue separada en dos: Sa nta Bárbara de
Qaqinkura y Qalaquta: Machaqa la Chica fue convertida en Jesús de Machaqa y
Machaqa la Grande subdividida en San Andrés de Machaqa y Santiago de Machaqa. Se
conformo así el siguiente orden de repartimientos de la provincia Pacajes:

1: Qallapa 7. Jesús de Machaqa


2. Kurawara 8. San Andrés de Machaqa
3.UIlüma 9. Santiago de Machaqa
4. Axawiri 10. Wiyacha
5. Qaqinkura 11. Waqi
6. Qalaquta 12. Tiwanaku

las cuales tenían por capital al pueblo de Axawiri.

El territorio ocupado por Pacajes en tiempos prehispánicos, durante la colo nia y aún en la
república era compartido con el pueblo Uru, que en varias partes de su jurisdicción
(repartimientos y cantones) conformaba sus propios ayllus; durante la visita general del
Virrey Toledo, en tres repartimientos (Tiwanaku, Waqi y Jesús de Machaqa}, fueron
contabilizadas 1.139 familias, frente a 9.441 familias aymaras (Roberto Choque s/f).

Luego de la independencia, la República organizada en Departamentos, mantuvo las provincias


coloniales, los repartimientos fueron convertidos en canto nes; así Pacajes continuó con sus
doce markas. En 1828 en todo el territorio del departamento de La Paz fueron creados
nuevos cantones (y parroquias ecle siásticas), siendo así que fue separado Tupuxuqhu de
Qaqinkura y Jach’iri de Santiago de Mochaqa, e!evandose así a catorce el número de
markas; por otro lado el importante centro minero de Berenguela (previamente separada de
Santiago de Machaqa), fue elevado a la categoría de Cantón, lo mismo sucedió más tarde
con Nazacara.

Durante el gobierno de José Ballivián, por decreto Supremo de 18 de noviembre de 1824,


la capital Caquiaviri (Axawiri) fue sustituida por el pueblo de Viacha y fue denominada
provincia Ingavj en homenaje a la batalla en que el caudillo peruano, Agustín Gamarra
quien fue derrotado por su par boliviano. José Ballivián en los campos de una hacienda
denominada Inkawi. Estando Isidoro Belzu en el poder, este decreto fue revocado,
trasladándose la capital a Corocoro con el nombre de Villa de Ingavi. Años más tarde en
29 de marzo de 1856 mediante decreto la provincia fue dividida en Pacajes e Ingavi.

El desarrollo de poblaciones criollo-mestizas produjo la separación definitiva entre la


primera sección de la provincia Pacajes con el centro minero de Corocoro y de la segunda
con el puerto de Guaqui, el Ferrocarril y la línea férrea a Oruro y Arica. Esta división fue
legalizada mediante Ley de 16 de diciembre de 1909. La primera se denominó Provincia
Pacajes, teniendo por capital a Corocoro y la segunda Provincia Ingavi; con su capital
Viacha. Esta última quedó compuesta por los siguientes cantones:

Jesús de Machaca
Viacha San Andrés de Machaca
Tiwanaku Taraco
Guaqui Desaguadero (Chaka marka)

La integridad de Pakajaqi volvió a sufrir menoscabo con la creación de la provincia Gualberto


Villarroel en el decenio de 1960, en territorio de la marka de Curahuara de Pacajes; y de la provincia
José Manuel Pando en 1982 a la marka de Santiago de Machaqa.

Pakajaqi, o al menos lo que resta de la antigua nación, tiene una extensión territorial de 10.584
K m 2 , c o n una población de 43.351 habitantes y se encuentra compuesta por las Markas:

Callapa Topohoco
Caquingora Comanche
Ulloma Berenguela
Calacoto Charaña
Caquiaviri Achiri

La historia de Pakajaqi, de sus markas y ayllus fue bastante azarosa, sujeta a designios coloniales,
le fueron impuestos divisiones totalmente arbitrarias respecto a su constitución social y política.
Las markas y los ayllus incluso unidades familiares, fueron digitados a capricho de intereses
particulares e individuales de gamonales enquistados en su territorio desde las reformas liberales
del siglo XIX, especialmente con la Ley de Exvinculación de octubre de 1874.

Desde las operaciones re-visitarías, practicadas luego de la derrota en la Guerra del Pacífico por el
Estado boliviano, hasta el año de 1952, la provincia Pacajes (la fracción que quedó de la nación
Pakajaqi) fue casi totalmente afectada en sus markas de Axawiri, Tupujuqhu, quedando libres de
la opresión gamonal Qallapa, Qaqinkura, Qalaquta, Ullüma. Achiri, Reniegúela y Santigo
de Machaqa. En estas markas el ayllu y sus autoridades sobrevivieron intacta.-hasta la
imposición de la forma sindicato por el Estado y por el MNR (Movimiento Nacionalista
Revolucionario), y por los subsiguientes regímenes militares.

A pesar de la presencia del sindicato campesino, el ayllu continuó expresándose mediante la


representación simbólica, unidad territorial a través de títulos ejecutoriales en pro indiviso,1 y la
estructura de organización y autoridad que subyacía bajo la forma sindical.

El sindicato-por su naturaleza subordinada a la estructura prebendal construida por el MNR en su


búsqueda de reemplazar las estructuras del poder gamonal, a través de un clicntelismo de tipo
político- no representó los intereses del pueblo pakajaqi, sus markas y ayllus. El dirigente
sindical solo oficiaba como intermediario entre una masa campesina de votantes
(potencialmente movilizable para manifestaciones políticas) y los caudillos de partido o los
coroneles golpistas. La situación llegó a extremos de una práctica de transacción sobre
cantidad de votos o gente movilizada que podía asegurar un dirigente sindical. -s

7-Los ayllus durante la historia del colonialismo tuvieron que pasar por varias titulacio nes
desde las realizadas por el Virrey Toledo, los títulos Re-visitarías del siglo XIX hasta los
últimos extendidos por la Reforma Agraria (desde 1953) con el nombre de Títulos
ejecutoriales, los mismos que fueron transmitidos en forma colectiva.

Los líderes que buscaron expresar las necesidades y proyecciones indígenas a través de una
lucha política con partidos propios (por ejemplo el Movimiento Indio Tupaj Katari que
tuvo mucho arraigo en Pacajes) empezaron una búsqueda por revertir el desastre en que se
encontraba la representación de los antiguos hombres águila (significado de pakajaqi en
aimara).

El diálogo con el pasado, a través de conversaciones con los mayores y la producción


bibliográfica de la naciente historiografía aimara, llevó a la convicción de volver al camino
propio thakhi del ayllu y la autoridad originaria. Pakajaqi volvió a reconstituirse un 21 de
junio, mará t'aqa, en Qalaquta Marka, consagrando a sus autoridades mallkus el 13 de
septiembre en la marka de Axawiri, milenaria capital y cabeza. En esta histórica capital de la
nación Pakajaqi, fue enterrada la Federación de Trabajadores Campesinos Tupaj Katari de la
Provincia Pacajes, como el símbolo de un corto pasado de subordinación manipulación de la
representación indígena.

La reconstitución del Pakujaqi ha constituido un proceso autónomo de búsqueda y ejercicio


de su autodeterminación, que al igual que los demás pueblos indígenas persigue el respeto de
su identidad de pueblo y de la garantía para ejercer sus derechos colectivos.

Al igual que en territorio pakajaqi, el avllu en todo el espacio andino, es parte fundamental
de los pueblos aimara, qhichwa y uru, y ha constituido uno de los símbolos de la identidad
étnica. En el proceso de reconstitución; es e! eje que articula la conciencia de los pueblos
indios de los Andes, y se plantea como la vía más posible de descolonización interna y
externa. La recuperación de valores y costumbres de las autoridades y la población en general
son parte del proceso de reafirmación y consolidación de la identidad como pueblo. Hacia lo
externo, el ayllu se constituye en la garantía de la defensa del territorio indíge na. Así vuelve a
constituirse en una forma muy propia de ocupación territorial, que busca la posesión de una
diversidad de suelos, climas y niveles de altitud para satisfacer sus necesidades.

El ayllu nunca renunció a la administración de sus recursos, de ello dan testimonio los
grandes enfrentamientos sostenidos con el Estado y con empresas mineras que, en base a la
violencia, explotaron las riquezas naturales no renovables. (THOA 1995: 27-28).
8- José Aramayo, líder Paceño conceptualizó al sindicato campesino corno uywa qhathu
que traducido al español significa feria o mercado de ganado, donde el voto o la
movilización campesina era negociada.
El ayllu constituye un ejemplo de la persistencia y vigencia de los pueblos indígenas a
pesar de los esfuerzos realizados por parte del Estado, primero colonial, después
republicano en desintegrarlo como una forma de agregación por vía de asimilación, a la
identidad impuesta.
El Mallku: autoridad y poder indígena

En la nación aimara el concepto de poder es simbolizado por el mallku, que a su vez es


representado por el cóndor, el ave mayor de los andes. Kuntur mallku o Mallku kunturi, que
personifica la autoridad: aquellos que tienen el gobierno de varios ayllu, varias markas. En
su serie de capitanes Guaman Poma, el cronista presenta como el catorce capitán a Malco
Castilla Pari, Colla Suyo, que junto a otros capitanes del Qullasuyu y de todo el
Tawantinsuyu fue a la conquista de Tumipampa. (Guarnan Poma 1980: 148-149). Mallku
Castilla Pari es Retratado por Poma con un escudo donde se encuentra el emblemático
Kunturi, el símbolo de poder Qulla.

Siguiendo la misma tradición, muchos siglos después, los comunarios de la provincia


Ingavi, simbolizan el poder de la autoridad de ayllu con el Mallku kuntur, poder que se
manifiesta en la distribución del alimento a las comunidades sus familias y niños (FACOPI
1993:21).

Con la imposición colonial las autoridades de los avllus tuvieron que cumplir la función de
inter- mediadores entre la sociedad local indígena ayllu-inarka y el poder colonial. Con la
independencia esta función fue deteriorándose hasta el grado de su desconocimiento por el
Estado y su corrupción a manos del poder gamonal que los convirtió en sus auxiliares e
incluso sirvientes. Este argumento fue usado corrientemente por los partidarios del
sindicato campesino, que vieron en la autoridad indígena la representación de un pasado de
servilismo y dependencia. Con la reconstitución los roles cambiaron y las relaciones
también; el Altiplano vive el retorno al ayllu, que en términos propios es entendido como el
Pachakuti, una nueva configuración del pacha (tiempo y espacio). El regreso a la
autorid ad propia constituye un acto de autodeterminación, al restituirse la comunidad su
propio gobierno.

La autoridad del ayllu se caracteriza por una doble relación del poder, una de carácter endógena y
otra de carácter exógeno. La primera concebida como servic io a la colectividad, que a su vez
implica una alta responsabilidad. La legitimidad de la autoridad es respetada y está rodeada de
valores y símbolos os propios, como es la vestimenta. Por ejemplo en la reconstitución de los
ayllus de la provincia Ingavi en la Federación de Ayllus y Comunidades de la Provincia Ingavi
(FACOPI), el rescate de la indumentaria es muy importante como señala el Artículo 28 de su
Estatuto Orgánico:

«Todas las autoridades están obligadas por orden tradicional y por la comunidad llevar puesto los
uniformes de la autoridad en iodos los acontecimientos, caso contrario entran en la falta muy grave».

U-ACOPI: Estructura Orgánica 199^: 3V).


Esta indumentaria simboliza las responsabilidades que conlleva su cargo, el carácter
sagrado de su persona (fuero) y la memoria histórica y demográfica del ayllu que guarda en
el q’ipi (.bulto).

¿Cuál es el fundamento del poder del ayllu? Como expresa Rogcr Rasnake ( 1 989) «¿será
el prestigio el principal componente del poder en el Ayllu? ¿Será el ma llku, el Jilanqu un
k'acha runa?».

Evidentemente el Mallku como cabeza del gobierno de la Marka debe preocuparse del
cumplimiento del ritual; pero éste no es su principal oficio, sino gobernar. La propiedad
colectiva de la tierra y la posesión comunal de la tierra continúan siendo los principales
sustentos del poder del ayllu. La posesión, como la propiedad como la propiedad de la
tierra, moviliza incluso a los extremos de la violencia como en el caso Qaqachaka-Laymi.

El Mallku y Jilaqata

El Mallku es la autoridad máxima, él personaliza el gobierno del con todas las


responsabilidades y tareas a cumplir. Tiene el objetivo de velar la integridad territorial del
ayllu y las comunidades, así mismo tiene la obli gación de recoger el tributo. También
administra justicia concerniente a conflictos y disputas que ocurren en el ayllu. En el
proceso que viene siguiendo CONAMAQ en reconstituir ayllus y autoridades indígenas,
se ha recuperado el gobierno propio del Cacique Gobernador, don Marcos Mamani que es
cacique de sangre de la marka kirkiyawi, cuya familia viene desempeñando el rol de gobierno
desde los tiempos del tawantinsuyu?.

El Jilaqata es la cabeza del gobierno del ayllu que vela la integridad territo rial de su
jurisdicción, soluciona conflictos Inter.- fa miliares, personales, daños de
sembrados y otros, el Jilaqata en ausencia del mallku toma las responsabilidades del
primero, como es convocar y dirigir asambleas u ulakas.

Alcalde comunal

El alcalde comunal es autoridad igualmente elegida por el sistema de turno que rige en el
ayllu y trabaja en estrecha coordinación con el jilaqata y el mallku. El alcalde es una
autoridad de origen colonial y su función está relacionada a la tradición municipal
hispánica, al cabildo indígena: sin embargo el alcalde conforma la estructura de poder de la
autoridad del ayllu y la marka.

Muyu

El Muyu «ronda» es la función de gobierno más importante de las autoridades. A través de un


recorrido del ayllu, casa por casa, las autoridades se informan de los problemas que cada
rancho o familia enfrenta. El muyu es realizado por los mallkus, jilaqata y alcaldes, por las
estancias que conforman el ayllu, son los jilaqata que cumplen con la visita domiciliaria para
interiorizarse de los problemas que cada familia o individuo enfrenta. La visita es una
inspección ocular y un interrogatorio que hace la autoridad a la familia.

«Este hombre ¿cumple con sus obligaciones de trabajo? ¿Hace chacra? ¿hay comida en la
casa?...».

«Esta mujer, ¿cumple? ¿qué trabajos hace en tejidos? ¿Cuánto de ganado ha hecho
multiplicar?...».
«Este joven (muchacha o muchacho) ¿no les hace doler la cabeza? ¿Cumple con lo que se le
manda?.

Y así empiezan a revisar los depósitos familiares, tejidos, etc. De lo contrario viene la
reprensión e incluso el castigo. El muyu tiene a su vez carácter de Tumpa, inspección
fraternal que hace la autoridad superior, en este caso el mallku a las autoridades menores,
especialmente cuando estos enfrentan problemas y requieren de auxilio.
El sindicato campesino

Si este es el proceso de reconstitución, es importante considerar la vieja organización sindical que


personaliza la manipulación de la casta colonial y del estado. De acuerdo a los estudios de
Dandler (1969), Calderón y Dandler (1984), la irrupción del sindicalismo campesino en el
escenario social y político boliviano se gestó en las postrimerías de la Guerra de! Chaco (1932-
35), en algunas localidades donde el sistema de hacienda estaba en descomposición y en regiones
donde había una fuerte pugna por la tierra y por la liberación de la servidumbre.

Fue con los cambios ocurridos después de abril de 1952, que el sindicato campesino cobró
legalidad desde la protección e impulso estatal, especialmente en zonas donde se había
concentrado la propiedad latifundiaria, caso de Achacachi, Vacas y Tumarapi, donde los
primeros indígenas sindicalizados fungieron también como milicianos. Sin embargo, fue la
región de Cochabamba, donde se había desarrollado con mucha fuerza el sindicalismo
campesino, dando paso a importantes caudillos rurales muy ligados a sus patronos del MNR y
luego a los caudillos militares.
A pesar de la fuerza con que irrumpió el sindicato campesino, no logró prender en tierra
fértil; el liderazgo carecía de legitimidad, y los ayllus continuaban en el camino de la tradición.
Sin embargo, el desprestigio hacia la organización del ayllu, fue creciendo a través de campañas
de difusión que el sindicato y ONGs realizaban. Richard Smith, que visitó la región del Norte
de Potosí, durante el año 1983 pudo percatarse que políticos y ONGs racionalizaban
uniformemente este discurso:

- que el Ayllu y sus autoridades son corruptibles y manipulables por el Estado;


- que el Ayllu y sus autoridades no saben nada de proyectos de moderniza ción y de su
Economía;
- que el Ayllu y sus autoridades no entienden la problemática política-económica de la
Bolivia contemporánea;
- que el Ayllu y sus autoridades no son democráticos;
- que el Ayllu y sus autoridades sólo se ocupan de fiestas y chicha;
- que el Ayllu y sus autoridades no son capaces de entrar en alianza con las
Federaciones mineras; y finalmente,
- que el Ayllu y sus autoridades son reliquias folklóricas de una civilización muerta.
(Smith 1992: 17-18).

La disyuntiva: ¿ayllu o sindicato?

El pueblo indígena fragmentado ofrece una penosa visión de la división interna y del
enfrentamiento fraccionalista (véase Albo 1985). Para los Andes, la fragmentación y sus
posteriores secuelas deben ser estudiadas a la luz de la teoría de dominación colonial y de las
necesidades políticas y económicas que requirieron un orden fragmentario. Steve Stern, muestra
las medidas de fragmentación étnica a nivel local a través de la creación de pueblos de
reducción y la generalización de una nueva identificación general -indio- durante la
administración del Virrey Francisco de Toledo. Así en muy pocos años, luego de puesta en
práctica las primeras reformas de matriz occidental en los Andes, «los señores Charcas y
Chichas presenciaron cómo sus privilegios y poder eran aniquilados por las leyes coloniales y
sus ayllus dislocados a la fuerza y agobiados con excesivos abonos tributarios» (Larson 1992:
99). En aquellos tiempos iniciales del colonialismo un elemento de división y debilitamiento de
los fragmentos étnicos de marka y ayllu fue la constante «fuga» de hatun runas (originarios) a
las haciendas y casas de los españoles, apareciendo entonces una otra categoría colonial de
yanaconas (colonos, arrimados, etc.).

Durante la República son harto conocidas las secuelas que conllevó el despojo de tierras por parte
del latifundismo liberal a los ayllus. Los ayllus, cuyas tierras fueron despojadas entre 1866-1871
y 1880-1920, nunca más fueron los mismos. Los caprichos del «propietario individual» no
respetaban fronteras étnicas, linderos entre ayllus, lealtades, etc. Es más, el proceso de acumulación
de tierras llevado a cabo por los pioneros mistis fue seguido por un proceso de partición de la
propiedad entre sus herederos, resultando, entonces, una cantidad de fundos (hijuelas) con nombres
arbitrarios. Por otro lado, la resistencia indígena al gamonalismo ¿acaso dio como resultado la
expulsión de originarios reducido a colonato y su reemplazo por otra población marginal, los
sucesores de antiguos yanaconas?

La Reforma Agraria de 1953, que conllevó otra ola de fraccionamiento de la comunidad


indígena a través de la sindicalización, sumó a su vez su cuota al resultado que hoy se ofrece
como segmentario y fraccionalista. Esta situación se incrementó aún más con la
sindicalización forzada a través de programas de desarrollo que consideraban al ayllu como
organización tradicional por tanto anquilosado en el pasado y en la inmovilidad (Rivera
1992).
10 Al respecto existe una amplia bibliografía, especialmente para el Altiplano
Central. Cfr: Mamará 1992; Medinaceli Tesis de licenciatura; Greshaber 1980:
Langer 1989; Rodríguez 1993; Rivera 1986.

¿Es la organización sindical de hoy la forma natural de organización de los pueblos


indígenas? Para los mismos militantes del sindicalismo fue imposible ocultar la
presencia de los ayllus y sus autoridades originarias. Pese a la presencia dominante del
latifundio, el ayllu pudo sobrevivir y con él sus autoridades: mallkus, jilaqatas y
alcaldes. La situación era parecida a lo ocurrida en Jesús de Machaqa en los años l970: una
presencia combinada e incluso complementaria entre ayllu y sindicato, donde durante
por mucho tiempo fue esgrimida la versión de que en esas zonas ya no habían ayllus y
mucho menos autoridades indígenas.

El año de 1986 Silvia Rivera, en una consultoría realizada para OXFAM América revelan
que: «...la destrucción d e l sistema de autoridades tradicionales en el Norte de Potosí es
una política deliberada de las instituciones en general y en particular de alguna de ellas
como el IPTK... La razón unánimemente invocada para justificar tal política es la
aparente subordinación del sistema de autoridades de los ayllus a las estructuras del poder
estatal, que se manifiesta en los pagos simbólicos de la contribución territorial al Tesoro
Departamental de Potosí» (Rivera 1942: 166).

Richard Smith (1992: 17-18). Di rector del Programa Sudamérica de Oxfam América, que
visitó a los ayllus de la provincia Bustillos en 1985, y se preocupó por la integridad del
ayllu que estaba siendo amenazado en su existencia por la política ofic ial, tanto del Estado
como del sindicalismo katarista refiere: «...me alegró que Oxfam América recibiera una
solicitud de una ONG bien conocida en el Norte de Potosí para financiar un programa de
desarrollo rural que según la propuesta, trabajaría con los ayllus de la provincia B ustillos.
Una vez financiado, visite al programa, pasando varios días entrevistándome con las
autoridades, dirigentes y miembros del ayllu Aymaya, ayllu Sikuya y ayllu laymi, y también
los técnicos y administradores de la ONG. Al poco tiempo me di cuenta que por un lado el
personal de la ONG sufría de una confusión e ignorancia casi total sobre la organización y
la función del ayllu, y por otro el programa estaba orientado eminentemente a formar
sindicatos campesinos a espaldas de la organización del Ayllu» (Smith 1992: 15).

Esta percepción se nos aclara mejor leyendo a Xavier Albo: «Es cierto que este enfoque
(rotación de curso aclaración de los autores) lleva con frecuencia a que la actividad
comunal sea estática y cíclica. El progreso queda sujeto al chance de que el turno recaiga
sobre alguno más capacitado e innovador. Leyendo este trabajo, simplemente preocupan las
opiniones y el sentimiento que pudo generar en contra de los ayllus, continúa sosteniendo
que la situación se presenta incluso en «lugares en los que se ha introducido la organización
sindical campesina de cuño más moderno». Según este razonamiento, las autoridades
indígenas simplemente carecían de dinamismo y noción de progreso (Albó 1985:10-11).

La sindicalizació n campesina de los pueblos indígenas fue una acción externa, forzada desde
intereses foráneos. Fueron los jóvenes que volviendo la mirada hacia sus mayores, que
empezaron a revalorar el ayllu. Entonces surgió una acción combinada con viejos luchadores y
defensores del ayllu como Andrés Jach'a Qullu, Julián Ugarte, Domingo Jiménez Aruquipa y
Rufino Phaxsi; para restituir al ayllu su verdadero rol y posesionar otras vez a sus autoridades.

La reconstitución del ayllu

La reconstitución del ayllu es el resultado de un trabajo mancomunado e interactivo de


líderes comunales e intelectuales indígenas, entre ellos el equipo THOA, que llevó adelante
una política de difusión de resultados de la investigación sobre el movimiento indio (1860-
1950) y de formación en historia, cultura e identidad indígenas. La investigación, emprendida
desde el año de 1983, permitió desentrañar la historia de un Movimiento Indio autónomo bajo
el liderazgo y autoridad de caciques y apoderados. Santos Marka T’ula, Eduardo Nina
Qhispi, Agustín Saavedra, José María Victoria, son apenas la cabeza visible de un
movimiento cuyo objetivo fue defender la sobre vivencia de su pueblo. Esta sobrevivencia
que estaba cimentada en la autonomía del ayllu, frente al latifundismo que buscó coronar la
colonización con un definitivo despojo favorecido con leyes liberales y por gobiernos al
servicio del despojo: según las previsiones oficiales con la privación de la tierra y la libertad
los indios serían conducidos pasivos a su aniquilación. La investigación, antes que expresarse
en un resultado académico, se tradujo en la autonomía de la memoria histórica, los indios
lograron probar que no solo constituían objetos pasivos de la historia escrita q’aras, sino que
también, sujetos de conocimiento podían a su vez enseñar a sus hermanos el fruto de su trabajo.

La revaloración del «ayllu» como institución básica de la vida indígena en los Andes, por un
lado y por otro la constatación de la situación colonial a que se encuentran sometidos los
pueblos indígenas co nstituyeron el fundamento de la reconstitución del ayllu que se iniciaría
en el siguiente decenio.
Los pueblos andinos, como entes colonizados, subordinados a una voluntad ajena, fueron y
continúan siendo objeto de una desestructuración permanente. Esta desestructuración ¿afecta a
la existencia tanto colectiva como individual, por cuanto constituye el factor determinante del
localismo que, expresado ne gativamente, se convierte en fraccionalismo; la fragmentación se
expresa mediante el conflicto y la viole ncia. De inicio la división fue el arma de la colonización:
enfrentamientos fratricidas entre parcialidades, entre ayllus y colonos de hacienda, etc., hoy
todavía se viven sus secuelas en conflictos como el de Qaqachaka-Laymi.
¿Cómo enfrentar éste proceso? El reporte etnográfico de la fragmentación al máximo de la
marka de Jesús de Machaqa en 72 sindicatos, por cierto, era el augurio de un final previsible,
la disolución del pueblo aimara; sin embargo, fue en esta misma marka que los ayllus
vislumbraron en la reconstitución la construcción de un futuro basado en la unidad fundada
en la identidad.

La reconstitución, definida corno regreso a lo propio, se expresó a través de la reconstitución


del modelo organizativo ayllu y la consecuente consagración de autoridades en sus diferentes
niveles jerárquicos.

Lo propio, concebido como un paso importante hacia la descolonización en un primer


momento se expresa a través de la conciencia y el fortalecimiento de la identidad; khitipxtansa,
Khitinakapxtansa (quiénes somos). La identidad se reconstituye en la memoria, y la memoria
reconstituye la unidad comunal y étnica.

Norman E. Whitten, que trabajó en Puyu (Ecuador) con los Canelo Quichua, identifica al ayllu
como un modelo de parentesco y de ocupación territorial, enlazados con la memoria de los
antepasados mediante el shamanismo (Whitten 1987: 33-192). El parentesco liga al individuo
y a la familia a antepasados míticos y reales, y con otros miembros del ayllu dispersos en un
espacio territorial. Su unidad, como su identidad, se reactiva a través del saber, o conocimiento,
encarnado por el shaman.11

Así la conciencia de la historia, que a la vez es «reconstitución, por y para los vivos, de la
vida de los muertos» (Aron 1963: 14), constituye el elemento que propulsa el volver a ser: el
entierro del sindicato como medida previa a la presencia del Mallku.

13 «Los miembros del ayllu mantienen su ideología especial de descendencia a través de la


experiencia visionaria, la mitología y viajando. Ellos pueden reactivar el concepto de
ayllu máximo de muchas generaciones...» (Whitten 1987: 41). Esta reactivación,
señala más adelante, se produce en momento de crisis y destrucción, para ello basta la
conciencia y la memoria.

En el marco de estos conocimientos e ideas desde 1990 los ayllus de la provincia Ingavi se
involucraron en un proceso de profundos cambios. Bajo el mandato de su Congreso
Provincial, se conformó una Comisión de Redacción del Estatuto Orgánico, que sería luego el
manual de funcionamiento de las autoridades indígenas. La autonomía ideológica de sus líderes
llevó a que, en la provincia, se desarrollaran reuniones, ampliados, congresos en sus diferentes
niveles (comunales, subcentrales y centrales), destinados a la redacción de un estatuto, para ser
reconocidos legalmente por el Estado. Después de dos años de trabajo permanente, la
elaboración del documento recogía objetivos específicos de defensa del territorio,
administración propia de justicia y autonomía (FACOPI y THOA 1993).

El ejemplo de reconstitución de la provincia Ingavi, fue seguido por los ayllus del norte de
La Paz, en 1995 se constituyó la Federación de Ayllus y Markas Quechua -Aymarás de la
Provincia Muñecas (FAMQAPM); en 1998 entre el 21 de junio y el 14 de septiembre los
ayllus y markas del Pakajaqi se reconstituyeron y consagraron a sus autoridades. El mismo
camino fue transitado por la Federación de Comunidades Originarias de la Provincia Loayza,
la «Central de Ayllus y Comunidades Originarias de Umala» (CAU). Este ejemplo, por demás
elocuente, es seguido de cerca por las provincias Omasuyos, Los Andes, Inquisivi, Camacho,
Manko Kapac, Bautista Saavedra y otros.
En un movimiento similar en los otros departamentos de la República fueron constituidas
organizaciones de ayllu, como entidades político territoriales que buscaban superar la camisa de
fuerza sindical. A diferencia de los ayllus de La Paz, los de Oruro y Potosí se caracterizan por
la continuidad, aunque sus autoridades acusaban una fuerte dependencia de funcionarios
locales como el subprefecto y el corregidor. Un 23 de noviembre de 1988, en Killakas, en el sur
del departamento de Oruro se constituyó la «Federación de Ayllus del Sur de Oruro» (FASOR)
aglutinando en su seno a varios ayllus de las provincias: Avaroa, Poopó, Garci Mendoza y
Sebastián Pagador. En el occidente del mismo departamento los Jilaqatas del antiguo Karanka,
decidieron constituirse en el Consejo de Autoridades de Jach'a Karanka (COAJK) El año de
1993, los ayllus de la provincia Bustillos de Potosí, cansados del control del partido MBL, se
organizaron a su vez en la «Federación de Ayllus Originarios Indígenas del Norte de Potosí»
(FAOINP).

Durante el año de 1993, la ciudad de La Paz volvía a observar casi atónita, el regreso de las
autoridades indígenas ataviados con sus vestimentas y símbolos de mando. Cada mallku, jilaqata
llevaba el encargo de apersonarse a las oficinas del gobierno para averiguar sobre la situación
de sus tierras comunales. En estas visitas fueron relacionándose y conociéndose mutuamente
autoridades de distintas regiones de la República hablando sus propios idiomas: qhiclnva y
aimara.

El apoyo de grupos como el THOA, que ya tenía una vinculación más estrecha con FACOPI,
intelectuales indígenas y amigos solidarios propició encuentros regionales y nacionales
donde era cada vez más visible la necesidad de un ente matriz que aglutine a los ayllus de la
República, para que, mediante una representación, pudieran hacer escuchar su voz.

Como culminación de este proceso fue desarrollado los días 20 al 22 de marzo de 1997 en
el pueblo de Ch'allapata el primer Tantachawi de los ayllus del Qullasuyu, que dio lugar a la
formación el «Consejo de Ayllus y Markas del Oullusuyu» (CONAMAQ), que fue
consagrada como la Autoridad Nacional de los aymaras, qhichwas y urus».

¿Qué idea impulsa a la reconstitución? Desde los avltus la idea es el regreso a lo propio, en
contraposición a lo ajeno, lo extraño. Lo propio, en la recopila ción de Bertonio (1612)
puede entenderse como vida. Jakaña.

Haca: la vida o la hacienda


Hacani haque: Rico
Hacauisa haque: hombre pobre
La vida, la vida en comunidad, es lo más importante para la educación de una persona, para que
en su estatus jaqi (gente) sirva para este fin. Jakani o jakañani significa riqueza, que en términos
andinos puede ser leído como el bien vivir y otra vez traducido al aymara suma jakaña. La
sociedad organizada en ayllu, y la organización regida por la autoridad jilaqata tiene el logro de este
primer y gran objetivo.
¿Cómo se logra el bien vivir o suma jakaña. A través de la satisfacción de la alimentación, a través
del control de la producción. El avllu regula con rigor el sistema de producción agropecuaria y de
otros recursos, y las decisiones tomadas por las autoridades luego de la consulta a su pueblo
están revestidas de celeridad. Con el logro de una buena producción se consigue a su vez uno de
los objetivos fundamentales como es suma manq'aña.

El deterioro de las condiciones sociales y productivas constituyen el principal motivo para


la reconstitución de la organizació n propia, con el postulado de organizamos a nuestra
manera para un buen vivir está ligado a una conciencia nacional que ahora se refuerza en
el contexto internacional de reconocimiento a los derechos indígenas del cual uno de
los más importantes es el derecho a la gestión propia.

La agenda de la reconstitución

Como conclusión a esta presentación de la experiencia de reconstitución del ayllu en el


Qullasuyu, es importante mostrar brevemente los puntos más relevantes de la agenda, cuyo
diseño ocupa la atenc ión de los mallkus que conforman el «Consejo Nacional de Ayllus y Markas
del Qullasuyu». Los temas de la agenda en orden de importancia son:

1. Respeto a la identidad nacional indígena.


2. Respeto a sus derechos y ejercicio de los mismos en el marco de la legalidad y la cooperación
del Estado.
3. Participación en la toma de decisiones.
4. La construcción de una sociedad basada en el pluralismo cultural, equidad y participación.

Esta agenda, que aún se encuentra en proceso de diseño y redacción, trata de manera diferenciada
temas/problemas que requieren de tratamiento y solución inmediata, y por otro lado de temas cuyo
análisis necesita de una discusión más sostenida, al proponer la discusión de las bases constitutivas de la
sociedad y el Estado. En esta perspectiva prevén los mallkus, por ejemplo la discusión de la necesidad de
una Asamblea Nacional Constituyente, para establecer una nueva relación entre los pueblos indígenas y
el grupo étnico resultante de la invasión hispánica.

La agenda está fundada en la idea de interculturalidad, muy distinta a las relaciones de


subordinación existente entre los q'ara y los nativos; entonces un objetivo que subyace en la
propuesta de los ayllus es el establecimiento de la comunicación. Sentarse en la mesa y hablar de
igual a igual, en la común preocupación de solucionar problemas de carácter general.

En la reconstitución del ayllu es fundamental la idea de establecer diálogo, constituye en esta larga
experiencia colonial, el reconocimiento de la calidad de sujeto al otro.11 Ese «otro» que constituyen
los indios para los españoles y su sucesores, y de la misma manera para los indios que no
consideran jaqi humano al español, sino q'ara, con todas las connotaciones que conlleva.

Esta propuesta es asumida en la perspectiva de descolonización, primero de las relaciones


interétnicas y luego de las bases constitutivas de la sociedad y el Estado, asentadas, qué
duda cabe, en una concepción política eminentemente colonialista.
2.8. Retrono a Uraqpacha. Chinkana Amuyu

Mario Torrez

i. introducción

El Chinkana es un túnel, una vez dentro, se torna en un laberinto de caverna salida difícil, esas
ideas profundas están en los Ayllus de las Markas andinas.

Un túnel puede tener extremos uno de entrada a y otra de salida b, o viceversa, la b ser la entrada
y la a de salida; que en su recorrido podemos demos o dirigirnos adecuadamente Ese es el caso
de la mente humana, túnel de saber profundo donde podemos perdernos, sin embargo teniendo
inteligencia podemos evitar esos errores.

Así hay hombres con sabiduría como los "yatiris" y "amautas" que conocen proceso de la
vivencia de las comunidades en sus necesidades y deseos, esta vivencia es el existir y sentir
nuestra vida en la comunidad.

En esa necesidad y deseo de las comunidades es la búsqueda inconsciente de retorno de


bienestar del espacio de las Naciones y Pueblos Originarios.

En el presente documento se trata de comprender la chinkana/tunel profundo del saber que a


través de la inteligencia nos conduzca al objetivo supremo de obedecer las leyes naturales de la
convivencia con el Uraqpacha que es el especio de la naturaleza con espiritualidad. Es decir,
intentar aproximadamente a la lógica del saber profundo de los pueblos originarios andinos.

ii. el chinkana del saber

El chinkana es el espacio del saber de los Pueblos andinos que están en las profundidades de las
cavernas donde las personas cuando ingresan, pierden físicamente, otros pierden la razón, se
vuelven locos, resultan anormales, pocos se sobreponen, y otros pocos conocen más las
experiencias de sus vivencias de nuestros antepasados y de las que aún hoy muchos los
experimentan.

¿Qué fenómenos suceden en esas profundidades? y ¿que lugares se conocen? la primera se


comprenderá más luego, mientras que de segunda se puede citar algunas:

Qupaqawana (LP..........................................................chinkana
Sürata (LP)……………………………………………...chinkana
Lima (Perú)……………………………………………...chinkana
Chhijchaqullu (Oruro)......………………………………chinkana
Ayjachi (La Paz)………………………………………...chinkana
Tiwanaku (La Paz)……………………………………...chinkana
Jesús de Machaqa (LP) ……………………………….chinkana
Samaipata (Sta.Cruz)…………………………………..chinkana
Turuturu (Potosí) ……………………………………….chinkana
Otros espacios abiertos de chinkana que se citan son los de Pango de Kurawara de Karankas y
Totora en Oruro, el que no conoce desorienta/"pawtiwa".
Sin embargo, nosotros detallaremos hasta donde modestamente las experiencias andinas al
respecto se saben sobre el chinkana del saber en el mundo del PENSAMIENTO/lup'iña
(mental/amayu y espíritu; japhalla); de las cavernas intelectuales.

2.1. El saber y la inteligencia.

Orden de los sentidos en el entendimiento y aprendizaje

Proceso del uso de sentido para entender y aprender Veces empleado de sentidos

• Recibir palabras, lev V reglas y guardar en ti. Voz ley, reglas


• Hacer estar atento tu oído a la sabiduría. Oído Sabiduría
• Inclinar tu oído a la prudencia. Oído Prudencia
• Gritar/pedir a la inteligencia y a la prudencia Voz Inteligencia
di eres tu voz si buscamos y escudriñamos Voz prudencia
como a tesoros. V. J. Vista Escudriñar

Corazón Sabiduría
• Entonces entenderás, la enseñanza de la Espíritu Inteligencia
sabiduría y hallamos el conocimiento del saber supremo.

Proceso de aprendizaje.

3° 1° 2°
Procedimiento Sentidos Aplicación
• Recibir la palabra • Voz. • Recibía palabra.
implantada. • Vista. • Atenta lectura.
• Mirar atentamente los
preceptos, reglas y normas
invariable de las cosas.

• Persevera, insistir en la • Vista y voz. • Voluntad en seguir la acción.


ejecución de ella. • Tacto y sentido. • Practicar, repetir.
• Hacedor de la obra. • Tacto y sentido • Hacer varias veces con fe a lo
• Haced obras si tienes fe. que se desea
Proceso de obtener la sabiduría.

• Alimentarse.
• Dejar la imprudencia.
• Andar por el camino de la inteligencia.
• Practicar la enseñanza de los caminos de la inteligencia.
• Juzgar y discernir lo bueno de lo malo.
• Conocer lo bueno, y apartarse el mal es la inteligencia.
Apartarse del mal es conocer lo superior de la perfección, la pureza y de la limpidez

El cuerpo y la sangre y espíritu.


Dejar la ignorancia.
Buscar y caminar por los espacios de la inteligencia apartándose del mal.
De acuerdo a los principios la moral y la ley natural, y espiritual.
Podemos orientarnos por el sukullu/ presunción de algo malo del ser supremo (sabiduría).
Conocer lo bueno y apartarse del mal es la indiligencia.

Se debe tener en cuenta que la sabiduría en el sentido común es el, conocimiento profundo en
ciencias, letras o artes; pero en otras palabras ¿donde esta?:

La sabiduría habita en la cordura

Donde cordura es prudencia, juicio, de tal manera que:

Prudencia, es virtud consistente en discernir lo bueno de lo malo.


Juicio, es el acto de comparar dos ideas para conocer su relación.

Esta comparación de lo bueno y lo malo se profundiza por el sukullu/ proceso de


transformación, esto es en un auto análisis de la sabiduría.

Después de obtener la sabiduría se llega a la inteligencia, que mas luego veremos. Por ahora se
tratará de comprender el lugar de la inteligencia.

2.2 El lugar de la inteligencia.

En este acápite analizamos la estructura del saber y la inteligencia en un lenguaje común, de


modo que puntualizamos en lo que significa la inteligencia, de modo de ver el camino hacia ella,
mostrado en la siguiente sinopsis:

* 1er. grado de sabiduría * 1er.grado de Inteligencia

Discernir lo bueno Apartarse del mal,


de lo malo en la separarse y alejarse,
acción del comportamiento no cometer errores
* 2do. grado de sabiduría * 2do. grado de inteligencia

Oposición al, no gustar Personas, con virtud adquirida


ni procurar errar de perfección, pureza y claridad
en el proceso intelectual

iii. chinkana de la mente según la lógica aymara - qhichwa

Veamos a qué se refiere este concepto, pero simultáneamente tomamos en cuenta otros términos
que nos coadyuvan a comprender el chinkana; para ello tenemos que entrar al subjetismo de los
conceptos:

Suqhu, en qhishwa dice ser un túnel, posiblemente sea un túnel profundo, que puede causar
temor de algo que puede estar o encontrarse en esas profundidades y precisamente suqhullu en
aymara significa cosa que infunde temor.

Suqhu / Túnel:
Surhullu/cosa que infunde temor; a este túnel profundo se dice chinkana.

Por lo que un chinkana puede tener suqhullu, donde están los fenómenos profundos del
saber, y fenómenos profundos de la naturaleza.

3.1. El chinkana y la anomalía de los conocimientos.

Ese saber que discierne el bien (wali) del mal (jan wali), es el temor que infunde al entender
estas dos cualidades, que por nuestros actos podemos confundimos, engañarnos, destruirnos en
las profundidades del chinkana, por la locura. Quien sabe, nosotros mismos buscamos la
destrucción, y en esos caminos vamos las personas, la sociedad, al perder nuestro entendimiento
de la cordura.

Ese chinkay (en qhiswa perderse repentinamente) viene a ser el laberinto total en que se pierden
los conocimientos, desaparece la razón. Aquí esta la anomalía de los conocimientos, pues no
tienen justificación aparente de sucesos, lo que dicen los fenómenos paranormales, ese suceso
puede ser el chika (intermedio) del espacio del sukullu (proceso de transformación), de este
chika es urgente salir para no perderse, pues en el chika el bien el mal no se distinguen en un
principio.

Sin embargo cuando tenemos la convicción de la sabiduría en la cultura de los pueblos primarios
(indígena), en este caso del espacio andino como la distinción del bien y el mal en una instancia
es un chinkana comprensible, diferenciable, controlable por nuestra lógica, en el sukullu.

3.2 transformación del bien y del mal.


Por el sukullu/proceso de transformación, se puede comprender la ínter.-relación del bien y del
mal por el tupu/medir convenido:
En un sentido profundo y amplio, se comprende que:

El mal tiene su espacio conocido, Y es el bien su espacio Desconocido.


de partida origen.

El bien tiene su espacio conocido Y el espacio desconocido


de partida u origen.

Para el mal el espacio del bien es su chinkana Y el espacio Conocido


Para el bien el espacio del mal es su chinkana.

• Dirección del bien al mal.

Bien Poco bien Nada Poco mal Mal


0 1 2 3 4

En (0) el bien está en su halo de pureza y de máxima intensidad.


En (1) el bien pierde hasta su mediana intensidad.
En (2) el bien desaparece y está sin intensidad.
En (3) el mal crece hasta su mediana intensidad.
En (3) el mal "aparece" y tiene rastros de mínima intensidad.
En (4) el mal llegó a su máxima intensidad.

De acuerdo a la dirección del bien al mal en las cercanías del otro lado de la nada está el
chinkana; pues en el espacio conocido esta el bien, y luego en el otro espacio del mal está el
chinkana.

• Dirección del mal al bien.

Bien Poco bien Nada Poco Mal


4 3 2 1 0

En (0) el mal está en su halo "puro "y de máxima intensidad.


En (1) el mal pierde hasta su mediana intensidad.
En (2) el mal desaparece y esta sin intensidad.
En (2) el bien "aparece" y tiene rastros de mínima intensidad.
En (3) el bien crece hasta su mediana intensidad.
En (4) el bien llegó a su máxima intensidad.

De acuerdo a la dirección del mal al bien, igualmente en las cercanías del otro lado de la nada,
está el chinkana, esto es en espacio conocido esta el ma! y luego en el otros espacio del bien el
chinkana.
• La transformación.

En resumen, en el lugar de la nada hay algo desconocido, esto es el lugar donde hay algo que se
transforma.

Bien Poco bien Nada Poco mal Mal


* * * * *
0 1 2 3 4
4 3 2 1 0

Este lugar de la transformación la NADA es en cierto modo el tutawasaya.

Raíces Tuta wasa ya


Orden

1 Oscuridad
2 Nada
3 cosa/algo

Es un lugar donde se tiene un nada oscuro -"wasa tuta" - que tiene algo, este algo es la fuerza
espiritual, un vació con energía, que se traduce en un pensamiento abstracto, un pensamiento
cultural, un concepto de idea, un comportamiento social, un suceso,

El anterior tuta - wasa - ya tiene como tres grados de interpretación, esto es en la transformación
/ sukullu.

Tutawasaya Suceso de transformación


Makiptiri •Transformación •Es totalmente otra cosa.

Jaqukipa •Volverse otro •Con distinta forma de presentación.


•Diferenciado preponderantemente
Mayjtaya • No ser el mismo en algún carácter.

3.3 Procesos operacionales del chinkana.

Estos aspectos de los procesos de conocimientos que se manejan por ciertas autoridades del
saber, las actividades que ejecutan, procesan, y lo viven son desconocidos o difícil de aplicarse.
Las personas que traten sobre estas actividades del saber son: (cuadro: autoridades del saber y
conocimiento)
1) Espacios y días con chinkana.

Chinkana I Chaqa chhijiqamasani (espacio de temor/axsara)

• Phuch'uma • Pozo de agua con niebla blanca.


•Khaxchan punta 0111122 • Espacio donde cayó el rayo hace enfermar.

• Amay uraqi • Espacio de entierro de muertos tiene kalli/fuego


fatuo.
• Llumpaqmama • Tierra virgen no tocada hace enfermar.

• Mik'aya • Profundidad de agua verde oscura, peligroso.

• Jach'ani • Lugar espiritual de temor.


• Qala Qurnpa • Piedra que llama abundancia fuerzas invisibles
A su vez consideran días con fuerzas ocultas
Martes - saxrüru, viernes - nanqhüru, y a sus espacios anchanchuni

Pero los espacios y periodos sin chinkana es "nuestra existencia" cotidiana, en la qamaña, en el
hogar, que va en menor grado y extensión acompañada de chinkanas imperceptibles y/o
perceptibles. De donde, si nos preguntamos sobre LA VIDA EXTINGUIDA EXISTEN?,
parece no existía, pues la forma sí, de lo que el espacio del mundo espiritual sin recuerdo es otra
chinkana que existe.

2) Sucesos de fenómenos físicos y pensamiento

Ejemplos de chinkana Ejemplos de sukullu


Sucesos de anomalías de la Sucesos de lógica de la Comprensión.
incomprensión.
• Chiñira : papas unidas que se ponen en un • Pachakuti - evolución - involución
altar para misa (Ascenso descenso)
• Chiñi : cura la cabeza su sangre • Chiñi : ojo real - ojo virtual
(Ciego – sonido)
• Ch'iar wanqu: radiografía en cuerpo • Chili (llama – alpaka),
(híbrido)
• Cerenar : charango, hacer que • Chinqini Kullakani : hermana - hermana
este mas melodioso (Mayor - menor)
• Kutu-kutu: niebla blanca causa • Tarapaka : dos cabezas águila
hidropesía (Un izquierdo - un derecho)

• Qillampu/munacha: reproducción y • Sukullu- ceremonia de presentación,


atracción. consagración:
(niña – niño).
3) Conocimientos oscuros aclarados.

* Cítricos enmohecidos Penicilina Inflamaciones


* Cataplasma de tierra Terramicina Inflamaciones
* Coca masticada con saliva Anestesia y antibiótico Calma dolor
* Extracto corteza de sauce Ácido salicílico Resfríos y dolor
* Orina humana Interferón Defensa
* Laqatu …….? Pulmonía
* Llantén Principio activo Cáncer
* Payqu Principio activo Dolor estomago

Este saber de conocimientos de los antepasados, conocidos por sus efectos, hoy se explica por la
medicina galénica, y la bioquímica, que posiblemente mayor efecto sea por el principio activo,
peligroso cuando puro en muchos casos, pero en la mezcla natural, se encuentra otros productos
complementarios, que mitigan la peligrosidad, pero coadyuvan a la curación, en la que
intervienen muchos otros factores, como el medio, aire, aroma, el sentido de la naturaleza.

Después de estas puntualidades vistas:


1) Espacios y días con chinkana,
2) Sucesos de fenómenos físicos y pensamiento,
3) conocimientos oscuros aclarados.
Pasemos del chinkana en las personas a la sociedad como pueblos, su comportamiento por una
tierra de virtudes y libre sin males.

Hoy están viviendo en un espacio donde el mal domina, hace sufrir y los pueblos buscan un
chinkana del bien. En este sentido, veamos el proceso de vivencia de la tierra con mal y la tierra
sin mal.

El saber profundo que practican son sobre:


1) Espacios y días con chinkana,
2) sucesos de fenómenos físicos y pensamiento,
3) conocimientos oscuros aclarados.

4) Autoridades del saber y conocimiento

Autoridades políticas, amawtas mujeres.


• Mallku: Conoce y dirigen, el ayllu o marka
• Jilakata: Conoce y dirige la comunidad en Umasuyu
• Tamani: Conoce y dirige la comunidad en Urqusuyu
• Amauta: Pensador, sabio, filósofo.
Autoridades de la medicina.
• Qulliri: Persona que cura
• Kallawaya: Persona itinerante que cura
• Jamuri: Persona que adivina.
Autoridades espirituales.
• Yatiri*: Persona señalado por el rayo que sabe por la coca
• Laica Ch'iri: Persona que hace hechicería
• Umu: Hechicero mayor o grande
• Ch'amakani: Persona con autoridad mayor que invoca a los espíritus y dioses para
aclarar lo desconocido.

Muchas veces en la región de Urqusuyu, donde hay mas camélidos se denomina


Paqu a un Yatiri, que alguna vez dicen, el Yatiri mayor o maestro.

Ahora veamos un proceso "wali jan walita uñxaña", a través de la deidalización de la


tierra).

iv. la tierra con mal y la tierra sin mal

En los albores de la cultura de los pueblos originarios no conocían ni distinguían lo bueno de lo


malo. Posiblemente todo era comprendido como lícito para todos los seres en la satisfacción de
sus necesidades según su naturaleza.

Actualmente el proceso de comprensión de la situación de nuestra vivencia es bajo el concepto


Jan walt'awi uñt'aña que consiste en la prudencia emprendido como:

La relación jerarquizada de las autoridades, nos muestra espacios y ámbitos en la que interactúan
el saber y conocimiento profundo del Pueblo Aymara-Qhiswa, lastimosamente existe poco
estudio en su integridad.

En el sistema no Occidental está la cultura del Abva-yala que de acuerdo a nuestro proceso
vivencial de pueblos podemos diferenciar lo siguiente:

Lo importante parece para nosotros entender que en el mundo andino las energía/fuerzas
malignas y benignas se manejan simultáneamente Jbuscando la annonía_antes que_un raero-
equilihrjo/ los conocimientos y la sabiduría acompañan y alimentar ese proceso.

Discernir lo bueno de lo malo


(walita jan walita uñt'aña)

que compatibiliza con el sukullu


B(bueno) M(malo)
Sistema occidental TIERRA Sistema Abya-yala TIERRA SIN MAL
CON MAL Produce muchos Sufre muchos males
males
1. * Males sociales 1. * Desestructuración de las
costumbres y hábitos comunidades
insanos 2. * Males 2. * Oprimido, endeudado,
económicos poderes de lucro pobreza, enajenación de recursos
3. * Males naturales naturales 3. * Tierra enferma,
Destrucción de la tierra medio ambiente envenenado y
degradado i

* Leyes naturales y * Leyes positivas impuestas y


positivas no obedecidas obligada

En este esquema podemos reconocer los procesos sociales de espacios o mundos, donde suceden
con cierta preponderancia los males; a esto comparativamente decimos los sistemas sociales
(reglas sociales), que hoy nominan a estos fenómenos del Sistema occidental y Sistema no
occidental.

En el sistema occidental está la cultura de Abya-yala, que de acuerdo a nuestro proceso vivencial
del ´pueblop podemos diferenciar lo siguiente:

Sistema occidental Sistema de Abya-yala


TIERRA CON MAL TIERRA SIN MAL
Produce muchos males Sufre muchos males
1. * Males sociales, costumbres y 1.* Deestructuración de la comunidades.
hábitos insanos. 2.* Oprimido, endeudado, pobreza,
2. * Males económicos, poderes de enajenación de recurso naturales.
lucro. 3.* Tierra enferma, medio ambiente
3. * Males naturales, destrucción de la envenenado y degradado.
tierra.
* Leyes naturales y positivas no *Leyes positivos y obligadas
obedecidas

En el mundo Occidental viven sus propios males, mientras que en la cultura propia del Abya-
yala, venimos hoy sufriendo las consecuencias, los resultados de lo que hace la sociedad
occidental y republicana en nuestra área de aynacha abya -yala (sud América) y se sabe
igualmente del Arax abya-yala (Norte América), Taypi abya-yala (centro América).
Esto se comprende con los movimientos místicos de los pueblos antes de las colonias,
movimientos que buscaban el bienestar de las vivencias por los sucesos naturales (lluvias, rayos,
estaciones, contratiempos de alimentos y migraciones de animales) hacia las serranías / montes
de plata, de felicidad y alegría, en este proceso están los guaraníes y posteriormente los tupi
guaraní migraban por los años 1526.

Sin embargo, hoy por hoy se observa el sistema del Abya – yala contaminada, deslegitimada por
el sistema occidental y en una permanente dinámica de reafirmación de su ser.

Mas tarde el movimiento místico es promovido por las injusticias, opresiones, sufrimientos, por
los colonizadores que en 1825 instauran la Répública, y que en 1887 el moxeño, Andrés
Guachoco; acaudilla para pulsar a los invasores del territorio de los pueblos indígenas. Y
alrededor 1920 surge el mismo movimiento ni místico por la provincia Moxos con origen en San
Lorenzo y San Francisco; también los Guarayos de habla guarani llevan el movimiento en San
Ignacio de Moxos, trasladándose desde la provincia Ñuflo Chavez en 1960, otra grande
migración fue en 62 igualmente en San Ignacio de Moxos hasta el rió Apere para fundar Pueblo
nuevo, que son del movimiento "tierra sin maldad". Así los tacaré, chimane, mosetene y colonos
indígenas del Alto Beni estuvieron en marcha por un futuro de esperanza.

En este contexto entre 1971-1972 los moxeños del rió Beni, rió Maniquí, Securé, Apere, San
Borja y más SE PROPONEN ENCONTRAR "LA LOMA / SERRANÍA SANTA" y dicen:

Llamarán a todos los hambrientos y oprimidos de los llanos, altiplano, colonias


Indígenas que conviven, para que no sufran el dominio de los Karaiyanas (blancos) para
que gocen de las riquezas de la LOMA SANTA.

De entre ellos aproximadamente 500 moxeños en Covendo, pueblo junto río Altamachi, han
atravesado algunos más de 1500 km. Creyendo haber devisado La Loma Santa a los cerros de
Cochabamba.

Hasta que las movilizaciones indígenas se organizan y el 15 de agosto de 1990 reunidos en


Trinidad, inician su marcha por el territorio y la Dignidad. Que en 34 días recorrió 600 km. Que
concluye en La Paz con el:

Encuentro de las Naciones originarias de las Tierras Altas y los pueblos Originarios de la
Tierras Bajas en la Cumbre.

Que la Complementación de ecosistemas humanas, para forjar una sociedad del bien, la tierra
sin mal y de abundancia

En otras palabras, la expresión de la complementariedad de las Naciones y Pueblos Originarios


es:

En este sentido que nos movemos hoy en día buscando la tierra sin mal una forma de sociedad
libre, justa alegre y de abundancia, esto es:
MB B
C b
Tierra con mal Tierra sin mal
Tierras con bien

4.2. El chinkana de nuestro pueblo.

El proceso de la búsqueda y retomo a el pueblo de la "tierra sin mal" depende de la gente que
componen los Jathas-avllus de las tierras altas y tenta-tekoas de las tierras bajas que es el paititi,
donde está el espacio de un pueblo comprendido por varias familias de las comunidades que
comprenden los caminos de la inteligencia que conforman el uraqpacha, guiado por la
cosmovisión del alaxpacha de nuestros antepasados achachila en un proceso hierático, como se
muestra en el alaxpacha achachila, cuya inferencia chinkana del pawnaqi nos muestra.

Jaqipacha Mäkipti Japhalapacha


Jakawi Jiwaki Wakiyä
a b c
b b a

Esta composición nos lleva a nuestro pueblo, si vale decir reconstruible, que todos los pueblos
originarios buscan. Cuyo proceso aproximadamente es mostrado a continuación entre jaqi y
pacha (mas allá jan-jaqi y jan-pacha poco se puede decir, por tanto no inferimos); se analiza
someradamente el por qué la razón de nuestros pueblos:

PACHA
Nayrapacha achachila

Tata inti Mama phaxsi


Pacha achachila Pacha awicha
Japhalla-ya Chullpa achachila Chullpa awicha
Inka achachila Inka awicha
La´qa achachila Laq’a awicha

Thaya achachila Thaya awicha


Achachila Awicha
Auki Tayka
Wayna Tawaqu
Yuqalla Imilla
Jaqi-ya Wawa
Chacha Warmi
Jaqi jan jaqi

Conformación del Nayrasuyu

Suni: Pachakuti Retorno *Sociedad

Päytiti
Ch’umi: Kandiri Búsqueda *Tierra sin mal y con abundancia

Lucha en las tierras altas Lucha en las tierras bajas


Tomás, Dámaso, Nicolás Katari, Andrés Guachoco 1887
Tupa Katari 1780-81 Lucha Guarani, 28 de enero ,1892; realizado
Pablo Zárate Villca 1899 por Apeguaiqui Tumpa.
Eduardo Nina Quispe 1930-1933 Lucha por los pueblos orientales, contra la
Santos Marka T’ula 1939 oligarquía Cruceñista, post, 1952.

Puna: gato montes Tigrecillo: Jaguar

P A Y T I T I

4.1. Inteligencia/ suma lup’i amtani

Auque se puede decir Ch’ikhi/inteligente, pero no es así, pues inteligente puede ser en lo malo y
en lo bueno, antes del choque con la sociedad occidental; hoy ya cabe distinguir, aquí nos
referimos al acto de suma lup’i amtani.

El proceso de distinguir y estar con la inteligencia es:

Sabiduría Inteligencia
Distinguir lo bueno Practicar lo bueno
De lo malo

El siguiente esquema nos ilustra el proceso de la transformación según el sukullu:

a c b
M MB M
* * *
Malo alejarse acercarse bueno
estar en M de M a B estar en B

La vivienda humana hoy hace que estamos en el (c) con lo deseable de C.


Donde según el sukulli:

a) Esta vivencia “inicial” del jaqi (el ser de la población) de los ayllus el jaqi en su
proceso evolutivo, tiene cierto espirito que encuentra un punto central de epígono (que sigue las
huellas de otros). Esta es la:

MÄRKA: Un pueblo con un camino que sigue.


b) Punto central de transición de lo frío (thaya, alala) a tierra/polvo (laq’a) nos lleva al espacio
inmediato de los pueblos Inka y Chullpa, cuyo transito sigue un epígono.

c) Epílogo final de un espacio y tiempo (PACHA) que marca al ser de los pueblos.

Este proceso nos orienta, el por que la raíz de los pueblos, hoy representado por los pueblos
originarios, denominados pueblos Indígenas que tienen una manera o lógica de pensar en su
destino.

4.2.1 Pueblos buscados y de retorno

En la cosmovisión concreta, el chullpa e Inka son pueblos secuenciales encaminados al Pacha.

1 2 3 4
Chullpa Inka Nayrapacha Pacha
Pueblo sin sol Pueblo con sol Pueblo buscado Pueblo con razón
y de retorno de ser

Esta chinkana del bien, buscan nuestros pueblos.


Un retorno a un pueblo con espirito de bienestar.
3. La Asamblea Constituyente

3.1 La Asamblea Constituyente, UCAC

Antecedentes

Bolivia vive una crisis de Estado y de desagregación social que genera amenazas sobre su
unidad nacional, debido a la existencia de fuertes problemas regionales, étnicos, políticos,
económicos y sociales. Los levantamientos sociales de febrero de 2003 y la crisis de
octubre así lo demuestran.

El gobierno de Bolivia, recogiendo las aspiraciones de diversas organizaciones de la


sociedad civil y política, ha definido una agenda, que entre sus puntos fundamentales, sino
el más importante, se encuentra la necesidad de realizar un Asamblea Constituyente que
redefina un nuevo pacto Estado y sociedad, que haga posible diseñar una forma de Estado
multicultural y pluriétnico que posibilite una mayor participación ciudadana y evite todo
tipo de exclusiones y discriminaciones, como una forma de construir en paz.

Para la concepción y culminación de la Asamblea Constituyente, el gobierno de Bolivia ha


definido los siguientes pasos:

a. Aprobación de la Ley de Reforma Constitucional, incorporando la posibilidad de la


realización de la A samblea Constituyente.
b. Elaboración y aprobación de la Ley Especial de Convocatoria de la Asamblea
Constituyente.
c. Elecciones de los Asambleistas.
d. Deliberación de de la Asamblea Constituyente.
e. Sanción de la nueva Constitución Política del Estado.

Las Asamb leas Constituyentes son el espacio desde el cual se ejerce el Poder Originario y
en ese sentido, desde un punto de vista ortodoxo y cerrado, sólo podrían producirse una
vez, dado su carácter constituyente. Este Poder Originario normalmente recala en pactos
jurídicos escritos a los que denominamos genéricamente Constituciones Políticas. En estos
cuerpos de magna legalidad se establece el diseño del entramado institucional que va a
soportar las relaciones sociales.

Las democracias modernas, casi todas, han asumido para esta fase de construcción del
Poder Derivado la clásica división de los tres poderes del Estado del Barón de
Montesquieu: Poder Legislativo, Poder Ejecutivo y Poder Judicial.

Desde una visión más flexible, se puede aceptar que las sociedades, en momentos de
profundas crisis políticas que implican la necesidad de refundar el “contrato social”, hagan
uso de la prerrogativa de la convocatoria a una “Asamblea Constituyente”, no tanto para
dar origen a una nueva estatalidad, como para remozar de manera radical y profunda la
situación jurídico – política existente. En ese sentido, la Asamblea Constituyente, además
de representar para el imaginario social un “nuevo inicio”, es en última instancia un
mecanismo de Reforma Constitucional, al que sólo se deba echar mano en muy contadas y
meditadas situaciones límite.

El proceso

La etapa inicial consistió en lograr la institucionalización de la Unidad de Coordinación


para el Poder Ejecutivo, entidad creada el 20 de noviembre mediante resolución ministerial
del Ministerio de la Presidencia con el propósito de coordinar, en el marco de la
independencia de poderes, todas las acciones encaminadas a llevar adelante el proceso de la
Asamblea Constituyente. La pregunta inicial era, Porqué crear una instancia en el Poder
Ejecutivo responsable de la Asamblea Constituyente cuando ésta pareciera ser de
competencia del Poder Legislativo? corresponde a la responsabilidad del Poder Legislativo
la generación de la normativa que permita su existencia como figura legal de reforma o
modificación de la Constitución Política del Estado así como respecto la sanción de la Ley
Especial de Convocatoria a la Asamblea Constituyente, no obstante el cuestionamiento a la
efectividad y eficacia de este poder del Estado ha sido por demás puesta en tela de juicio
desde los sectores más representativos de la sociedad civil, dibujando un escenario en el
cual la coyuntura plantea una respuesta a esta interrogante de aparente intromisión.

La respuesta entonces viene por el lado de la coyuntura que vive el país y el descrédito de
sus instituciones pero fundamentalmente del lado de la demanda social por una
participación activa en el proceso a través de sus organizaciones así como en forma
individual. Esta demanda encuentra limitaciones naturales en un parlamento amenazado de
cierre en forma constante de parte de los movimientos sociales en respuesta a la percibida
ineficiencia de sus actuaciones y al hecho de haberse convertido en cómplice de una
democracia pactada que ha desvirtuado cons uetudinariamente el ejercicio electivo
democrático.

El ejecutivo asumió así la tarea de abrir y apoyar los espacios de deliberación y consulta
ciudadana sobre los temas referidos a la Asamblea Constituyente. Este trabajo por demás
necesario ante el escenario de desconfianza que enfrenta la agenda política del país con
procesos en ciernes y otros ya en desarrollo como son el Diálogo Nacional, el Referéndum,
las elecciones municipales y la Constituyente.

Planificando la Constituyente

La planificación del proceso se inició con lectura de la coyuntura actual y las respuestas
que la sociedad civil y las fuerzas impulsoras de los cambios suscitado el mes de octubre de
2003 agendaron en el escenario sobretodo político. De esta lectura se desprendió la
máxima de llevar adelante un proceso sobretodo técnico que insuma los procesos de
deliberación y debate público de manera que permita la generación de una masa crítica
asertiva y propositiva que permita las condiciones de calidad necesarias para el proceso.

La planificación identificó la necesaria división en fases del proceso de la Asamblea


considerando como hito fundamental la creación de la figura legal que la haga viable hasta
el proceso deliberatorio de los asambleistas. Estas fases fueron concebidas como
secuenciales respecto sus productos pero en muchos casos como se verá luego, posibles de
desarrollar en forma paralela respecto los procesos.

Estas cinco fases y los resultados esperados de cada una de ellas son:

HASTA HASTA HASTA HASTA HASTA


MARZO ENERO ABRIL MAYO AGOSTO
2004 2005 2005 2006 2006

FASE 1 FASE 22 FASE 33 FASE 4 FASE 55

••Constituciona-
Constituciona- •Consulta
• Consultayy •Elección ••Deliberación
Deliberación ••Aprobación
Aprobación de
•Elección de
lización
lizaciónde
delala movilización
movilización de la la
de los la nueva
nueva
Constituyente
Constituyente social
social Asamblea Constitución
Constitución
Asambleistas
Asambleistas
Constituyente Política
Política del
del
•Ley
• LeyEspecial
Especial Estado
Estado
deConvoca-
de Convoca-
toriaaalala
toria
Asamblea
Asamblea
Constituyente
Constituyente

Fase I: Constitucionalización de la Asamblea Constituyente.

Acciones estratégicas:

(i) aprobación de la Ley de Reforma Constitucional presentada en la gestión


gubernamental 1997 – 2002, incorporando la posibilidad de realización
de la Asamblea Constituyente, la desmonopolización de la
representación política, iniciativa legislativa ciudadana y el referéndum.
(ii) iniciar actividades para el diseño concertado de la Asamblea
Constituyente.

Fase II: Consulta y movilización social, aprobación de la Ley Especial de Convocatoria


a la Asamblea Constituyente y elaboración de insumos normativos y técnicos y
conformación de las mesas ciudadanas nacional y departamentales.

Acciones estratégicas:

(iii) definir la modalidad de preparación y realización de la Asamblea


Constituyente
(iv) elaborar insumos técnicos y normativos necesarios para la preparación y
realización de la Asamblea Constituyente.
(v) informar, comunicar y promover el debate de los objetivos y contenidos
de la Asamblea Constituyente en las instancias de decisión de la
sociedad civil y en los estamentos políticos de decisión.
(vi) conformar las mesas ciudadanas nacional y departamentales.

Fase III: Elección de los Asambleistas

(vii) Convocatoria a la Asamblea Constituyente


(viii) Campaña y elección de los representantes a la Asamblea Constituyente
(ix) Instalación de la Asamblea Constituyente

Fase IV: Deliberación de la Asamblea Constituyente

(x) Elaboración de la propuesta de la nueva Constitución Política del Estado.

Fase V: Aprobación de la Nueva Constitución Política del Estado

(xi) Sanción y promulgación de la nueva Constitución política del Estado.

El proceso de la Asamblea Constituyente se inscribe en una agenda política que ha sido


parte de las promesas gubernamentales actuales y que pueden sistematizarse en la siguiente
matriz:
May-04

May-05
May-06
Nov-04
Ago-04

Ago-06
Mar-04

Mar-05
Ene-05
Sep-04
Feb-04

Feb-05
Jun-04

Jun-06
Abr-04

Abr-05
Oct-04

Dic-04
Jul-04

Jul-06

HITOS

Aprobación Ley de Reforma de la


Constitución Política del Estado 20
Aprobación de la Ley de Referendúm
Realización del Referéndum
Diálogo Nacional
Aprobación de leyes modificatorias: 30
Ley de Municipalidades
Partidos Políticos
Agrup. ciudadanas y pueblos indígenas
Código electoral
Otras
Consulta y movilización social para la
Asamblea Constituyente
Aprobación d e la Ley Especial de
Convocatoria a la Asamblea Constituyente
Elecciones municipales 5
Convocatoria y elección de los
representantes a la Asamblea
Constituyente 24
Deliberación de la Asamblea Constituyente 25 25
Sansión y promulgación de la nueva
Constitución Política del Estado (1)
Las fases de la Asamblea Constituyente

Fase I: Constitucionalizar la constituyente

• Gestionar las condiciones necesarias para la realizaci ón de la


Asamblea Constituyente en la Ley de Reforma Constitucional

• Coordinar con el Poder Legislativo

• Coordinar con Corte


Fase I
Nacional Electoral
Fase V

Planificación
Asamblea Constituyente

Fase IV
Fase II
Prioridad
2 Fase III

La primera fase se denominó constitucionalización de la constituyente referida a la


necesidad de introducir en el texto de la Ley de Reforma a la Constitución Política del
Estado cuatro aspectos entendidos como fundamentales para llevar adelante la
Constituyente y los demás procesos de la agenda política tangenciales de una u otra forma a
este proceso mayor. Primero y como es obvio supo ner la misma figura legal de la Asamblea
Constituyente, luego el Referéndum, la Iniciativa Legislativa Ciudadana y la
Desmonopolización de la Representación Política.

Allanar esta etapa era sustancial respecto la importancia de contar con un marco legal que
haga posible la realización de la Asamblea Constituyente, para lo cual se realizó un trabajo
de cabildeo político y social encaminado a lograr la aprobación de la Ley de Reforma 2140,
sancionada por el Honorable Congreso Nacional y posteriormente promulgada por el
presidente de la República en fecha 20 de febrero del presente año mediante Ley de la
República No. 2631.

Para lograr la concreción de este importante hito se concertó con el Honorable Congreso
Nacional un cronograma detallado de las actividades necesarias para la sanción en cuyo
marco trabajaron el Poder Ejecutivo y el Legislativo, cuya presentación conjunta de parte
de los máximos representantes de ambos poderes se realizó en abril de 2004 en el Auditorio
del Banco Central de Bolivia.

Fase II: Consulta y movilización social Ley de Convocatoria


Fase I
Fase V
Prioridad
1
Planificac ón
i
Asamblea Constituyente

Fase IV

Fase Fase III

II

• Definir la modalidad de preparación y realización de la


Asamblea Constituyente.
• Consulta y análisis acerca de los objetivos y alcances de
la Asamblea Constituyen te.
• Comunicación e informaci ón acerca de los objetivos y
alcances Asamblea Constituyente.
• Elaborar insumos té cnicos y normativos necesarios para
la preparaci ón y realización de la Asamblea Constituyente.
• Conformación de la Mesa Ciudadana.

Segunda Fase: Consulta y movilización social; Aprobación de la Ley Especial de


Convocatoria a la Asamblea Constituyente y Elaboración de Insumos técnicos y
normativos.

Consulta y Movilización Social

Una vez generado el fundamento legal de la Constituyente, tocó preocuparse por la


legitimación del proceso, considerada en la segunda fase, tal vez la de mayor importancia,
previa el proceso mismo de deliberaciones.

Dimensionada como la fase en la cual se generará el marco normativo referido al


funcionamiento de la Asamblea Constituyente, esto es la Ley Especial de Convocatoria a la
Asamblea Constituyente cuyo atributo fundamental de calidad que ade más permita su
viabilidad operativa futura es el necesario proceso de concertación previo sobre sus
contenidos más importantes, particularmente los referidos a la modalidad y formas de
elección de los Asambleistas.

Al presente, esta temática es centro de muchos debates y existen variadas propuestas sobre
la misma, limitadas por lo establecido en la Constitución Política del Estado vigente que
habla del necesario proceso electivo a través del voto para la elección de este tipo de
representantes.

Así, la Ley Especial de Convocatoria a la Asamblea Constituyente pareciera constituir un


eventual elemento de vulnerabilidad al proceso en su conjunto de no llevarse adelante de la
manera más participativa posible sin implicar esto una anomia propositiva estatal que debe
alimentar el debate con información sobre las posibilidades reales de llevar adelante uno u
otro planteamiento formulado por los distintos grupos de la sociedad.

El Poder Legislativo ha iniciado ya un trabajo encaminado a desarrollar procesos de


consulta departamental que para agosto del presente año permitan la presentación de una
anteproyecto de la Ley Especial de Convocatoria a la Asamblea Constituyente así como un
informe de la comisión mixta de constitución, dejando en manos de la próxima legislatura
la aprobación o modificación de este informe y consecuentemente del contenido del
anteproyecto de Ley.

En esta materia, el Poder Ejecutivo ha profundizado el trabajo coordinado con el Poder


Legislativo, de la primera fase, con el propósito de desarrollar procesos de deliberación y
consulta ciudadana que permitan acuerdos mínimos sobre los contenidos de este marco
normativo, procesos cuya característica fundamental será la difusión de información y
capacitación de la población en esta temática de ma nera que pueda lograrse un adecuado
dimensionamiento de las expectativas y percepciones sobre la Asamblea Constituyente, de
manera que permitan una asertiva y propositiva participación de la población, pero
sobretodo un diálogo entre actores de manera que permita la generación de acuerdos
mínimos sobre contenidos sustanciales a ser tratados en la Constituyente.

Este trabajo será enfocado bajo las siguientes premisas:

1. La UCAC asistirá técnicamente a las organizaciones, instituciones, agrupaciones


ciudadanas y otros actores que requieran de su apoyo para conocer el proceso y sus
alcances, dimensionar sus propuestas de participación encaminadas a lograr
propuestas y acuerdos mínimos sobre contenidos y otros aspectos relevantes al
proceso.

2. La UCAC no asumirá posición técnica ni política alguna, entendiendo que su rol es


generar las condiciones necesarias para que la ciudadanía en general pueda
participar de este importante proceso con propuestas técnicamente trabajadas y que
permitan una reflexión más allá de lo particular o local, privilegiando una mirada
nacional y ciudadana.

3. La UCAC promoverá un diálogo intercultural, entendiendo como tal el propiciar


espacios que permitan el análisis y deliberación de y entre las propuestas de los
distintos grupos y sectores del país.

Bajo estas premisas el plan estratégico de la movilización social puede describirse de la


siguiente manera:
1. Es fundamental iniciar en el corto plazo un proceso de socialización de información
sobre la Asamblea Constituyente de manera que permita a la población conocer los
alcances y objetivos de tan importante proceso para la vida del país. Esta
información sin embargo requiere de un trabajo previo de elaboración de manera
que pemitirá una diferenciación de los públicos receptores lo cual conlleva la
necesidad de elaboración de materiales de enseñanza y aprendizaje para los
procesos de capacitación complementarios en muchos casos, en el propósito de
permitir una decodificación comprensible de los mensajes.

La información es fundamental de cara a permitir un proceso ampliamente


propositivo que permita sobretodo un dimensionamiento adecuado de las
expectativas y percepciones sobre la Constituyente y sus resultados, siendo en este
sentido, a la vez, una forma de evitar los potenciales conflictos atribuibles a
desconocimiento o sobre expectativa del proceso y sus resultados.

Para el diseño de una adecuada campaña de comunicación, particularmente respecto


los contenidos y mensajes a transmitir, se llevará a cabo una encuesta sobre las
percepciones y expectativas de la población sobre la Asamblea Constituyente que se
constituirá en la línea base a la cual se hará seguimiento con investigaciones
posteriores que permitan una evaluación de la estrategia de comunicación pero a la
vez una valoración del entendimiento del proceso, las expectativas de la población
al respecto y los mensajes que deben ser clarificados.

Este trabajo combinará dos fuentes básicas de información cuales son las encuestas
así como los registros administrativos resultantes de los talleres y demás espacios de
discusión promovidos o no por la UCAC, es decir, monitoreo de estos espacios y
sus resultados, para ello es fundamental contar con representantes departamentales
que a la vez permitan la elaboración de un mapa de actores que identifique sus
posiciones respecto temáticas definidas como estratégicas en el constructo de una
Constitución Política del Estado en el marco de los temas de agenda nacional en
actual discusión, esto es tierra y territorio, interculturalidad, profundización de la
descentralización y otras temáticas que hacen en forma sustancial al cuerpo
constitucional.

En perspectiva, es evidente que una Constitución Política del Estado (CPE) esta
compuesta por una esqueleto mínimo que hace a su estructura al interior de cada
cuerpo se tienen temáticas específicas que la constituyen y que en el escenario
boliviano convergen con intereses sectoriales y ciudadanos, esto implica que a partir
de la identificación de estos componentes mínimos que conforman la estructura de
la CPE deben identificarse los actores estratégicos respecto cada temática, definir el
estado actual de estas temáticas y la posición de los actores de manera que permita
sistematizar ésta y modelarla o promover en el sector la elaboración de una
propuesta que pueda ser debatida con otros sectores que tengan una posición al
respecto o que al no tenerla representen los intereses del colectivo.
2. La UCAC asistirá técnicamente el proceso de elaboración de propuestas de los
actores que no hubieran realizado este trabajo de manera que permita un mínimo de
equidad en la posibilidad de participación en estos espacios de deliberación y
consulta de manera que se logre la concreción de los siguientes objetivos:

a) Objetivo general

Promover un proceso informado de deliberación abarcante y plural


intrasectorial para la discusión de las visiones y reivindicaciones ciudadanas
y sectoriales espectadas a resolverse en la Asamblea Constituyente.

b) Objetivos específicos

I. Lograr una base mínima de conocimiento en la población sobre los


aspectos más relevantes relacionados con el proceso de la Asamblea
Constituyente.

II. Promover una participación asertiva y proactiva de la ciudadanía en los


espacios de deliberación sobre la Asamblea Constituyente.

III. Promover la elaboración de propuestas constitucionales intersectoriales.

IV. Generar experiencias de deliberación inclusivas y abarcantes en lideres


ciudadanos y sectoriales, replicables al interior de sus organizaciones.

3. Estos objetivos condicionan la necesaria elaboración de una estrategia de


comunicación y consulta y movilización ciudadana que considere al menos las
siguientes actividades:

Línea Base sobre percepciones y expectativas de los alcances y contenidos de la Asamblea


Constituyente

Estudio de opinión ciudadana sobre percepciones y expectativas de la población de todas


las regiones del país sobre el proceso de la Asamblea Constituyente que capture las
percepciones y expectativas que sobre la constituyente tiene la población, operación
estadística que además permitirá un mejor diseño de los instrumentos y materiales de
comunicación e información que permitan no sólo la apropiación del proceso sino
sobretodo su comprensión.

La justificación de realización de esta encuesta gira en torno la evidente confusión que


existe en la población respecto (i) los contenidos de los procesos de la agenda política;
Diálogo Nacional, Referéndum, Elecciones Municipales y Asamblea Constituyente; (2) la
información con la cual cuenta la población al presente está caracterizada por altos niveles
de asimetría que hacen permisible un manejo discrecional de parte de líderes sociales y
políticos orientados en agendas particulares y hasta desestabilizadoras; (3) la calidad del
proceso de elección de los asambleistas descansará con seguridad en la capacidad de la
población de demandar propuestas a los candidatos enmarcadas en un espacio mínimo de
factibilidad lo cual requiere de un proceso amplio de información y capacitación; (4) la
diferencias sustanciales entre la población de conocimiento de los alcances y contenidos de
la asamblea constituyente han decantado en una expectativa sobre dimensionada del
proceso.

Estos elementos dibujan un escenario que requiere de pronta respuesta, habiéndose


dimensionado como un paso estratégico la posibilidad de conocer la brechas de
conocimiento y las áreas de mayor incidencia de éste respecto la Asamblea Constituyente,
constituyendo un hito fundamental en el diseño de instrumentos que permitan remontar este
escenario la realización de un estudio de opinión ciudadana sobre percepciones y
expectativas de la población de todas las regiones del país sobre el proceso de la Asamblea
Constituyente que capture las percepciones y expectativas que sobre la constituyente tiene
la población, operación estadística que además permitirá un mejor diseño de los
instrumentos y materiales de comunicación e información que permitan no sólo la
apropiación del proceso sino sobretodo su comprensión.

Lograr una base mínima de conocimiento en la población sobre los aspectos más
relevantes relacionados con el proceso de la Asamblea Constituyente.

? Elaboración de guía metodológica para los espacios/talleres de deliberación y


debate intersectorial
? Distribución de las guías metodológicas a los 327 municipios
? Capacitación a facilitadores locales en la aplicación de las guías para la deliberación
y debate intersectorial
? Elaboración de materiales impresos de difusión e información sobre los alcances,
contenidos, duración y otros elementos relevantes relacionados con la Asamblea
Constituyente.
? Elaboración de materiales educativos (enseñanza y aprendizaje) para capacitación
de facilitadores y replicadores sobre el funcionamiento del Estado así como los
relacionados con conceptos claves sobre el proceso de reforma constitucional a
través de la Asamblea y respecto las temáticas a trabajar en la constituyente.
? Producción de cuñas radiales.
? Difusión de cuñas radiales
? Producción de spots televisivos.
? Difusión de spots televisivos (tráfico de medios).
? Pagina Web para la información y deliberación interactiva.

Promover una participación asertiva y proactiva de la ciudadanía en los espacios de


deliberación sobre la Asamblea Constituyente.

? Elaboración de mapa de actores identificando actores estratégicos (sectores y


organizaciones) para el marco de reforma constitucional definido.
? Contacto y discusión con actores estratégicos.

Promover la elaboración de propuestas constitucionales intersectoriales.


? Organización y desarrollo de espacios/talleres de deliberación y debate sobre los
contenidos, alcances, duración y otros aspectos relevantes de la Asamblea
Constituyente
? Organización y desarrollo de espacios/talleres de discusión y debate sobre
propuestas sectoriales, organizacionales, de agrupaciones ciudadanas y otros de los
contenidos propuestos a modificar o ratificar de la Constitución Política del Estado
? Sistematización de los acuerdos y disensos logrados sobre propuestas sectoriales,
organizacionales, de agrupaciones ciudadanas y otros de los contenidos propuestos
a modificar o ratificar de la Constitución Política del Estado
? Publicación de los resultados de los espacios sobre propuestas sectoriales,
organizacionales, de agrupaciones ciudadanas y otros de los contenidos propuestos
a modificar o ratificar de la Constitución Política del Estado

El financimiamiento requerido es desarrollado en el Anexo I

Insumos técnicos

Los resultados de este proceso deberán insumir tanto la elaboración de la Ley Especial de
Convocatoria a la Asamblea Constituyente como generar los insumos necesarios para
identificar las respuestas constitucionales posibles a los diferentes temas que conforman la
agenda actual del debate constitucional y sobre los cuales los sectores, agrupaciones de la
sociedad civil y otros actores tienen posiciones, propuestas o interés y a los cuales la
Unidad de Coordinación para la Asamblea Constituyente responderá a través de la
conformación de equipos técnico – temáticos cuyo trabajos estará orientado en el siguiente
esquema:
ACTIVIDAD RESULTADO IMPACTO

A) Elaboración y aplicación de instrumentos Documento metodológico y de validación La Unidad de Coordinación para la


(talleres, seminarios especializados, de instrumentos. Documento de Asamblea Constituyente cuenta con los
capacitación, web, publicaciones y otros) de sistematización de la demanda temática resultados del proceso participativo de
captura, sistematización y análisis de las social y sectorial. identificación de demandas sociales sobre
demandas de la sociedad civil, sectores, los contenidos de la Asamblea
organizaciones y estamentos políticos sobre Constituyente
los temas estrategicos y sustanciales a la
estructura temática constitucional.

B) Elaboración de proyecciones inerciales Documento de proyecciones de La UCAC y los Asambleistas cuentan con
del actual funcionamiento de los temas escenarios inerciales en las 4 temas un diagnóstico sobre los problemas
estrategicos y sustanciales a la estructura estrategicos y sustanciales a la potenciales a solucionar con la
temática constitucional para la identificación estructura temática constitucional Constituyente
de escenarios de cambios potenciales
posibles.
C) Identificación de respuestas Documento de escenarios alternativos a La UCAC, los actores sociales y los
constitucionales posibles a los cambios los problemas posibles de solucionar con Asambleistas cuentan con propuestas
potenciales identificados en cada uno de los la Constituyente alternativas y estructurales de solución a
temas estrategicos y sustanciales a la los problemas posibles de solucionar con
estructura temática constitucional como la Constituyente
resultado de las proyecciones inerciales.
D) Valoración costo – beneficio de las Documento de valoraciones costo - La UCAC y los Asambleistas cuenta con
respuestas constitucionales identificadas e beneficio según escenario. Documento una valoración de factibilidad de los
identificación de escenarios de vulnerabilidad de risk assessment según escenario. escenarios propuestos.
(risk assessment) de los modelos.

E) Análisis y sistematización de experiencias Documento de sistematización de las La UCAC, los actores sociales y los
internacionales en las temáticas analizadas y experiencias nacionales e Asamblesitas han incorporado en su
su comparación con los modelos propuestos internacionales en las key áreas y de los debate sobre los escenarios alternativos
por la UCAC. resultados de la valoración comparativa las lecciones aprendidas del análisis
con las propuestas de escenarios de la comparado internacional
UCAC.
F) Socialización de los resultados logrados Memoria de los talleres de debate sobre Los actores sociales conocen los
en los puntos b), c), d) y e). (talleres, los escenarios alternativos propuestos diagnósticos, las propuestas alternativas
seminarios especializados, publicaciones y por la UCAC. de escenarios y los análisis costos
otros). beneficio de propuestas de solución de la
Asamblea Constituyente.
G) Registro especifico de la atención de las Base de datos de la atención de Los actores sociales han aclarado sus
demandas de la sociedad civil, sectores, demandas de las sociedad civil, interrogantes respecto los alcances
organizaciones y estamentos políticos sobre sectores, organizaciones y estamentos temáticosde la Asamblea Constituyente.
los temas claves. políticos atendidas por la UCAC.

H) Consolidar y compatibilizar los escenarios Documento de compatibilización de los Los Asambleistas cuentan con visiones
en las 5 temáticas. escenarios elegidos en los temas técnicas globales según temas
estrategicos y sustanciales a la estrategicos y sustanciales a la estructura
estructura temática constitucional temática constitucional para la reforma
Constitucional.

Estos equipos técnicos estarán liderados por expertos en cada una de las temá ticas que
deberán conformar posteriormente el equipo de acompañamiento del Poder Ejecutivo,
asentado en el Ministerio de la Presidencia, de asistencia técnica a la Asamblea
Constituyente de manera que permitan dar continuidad a los desarrollos temáticos
realizados en la Fase II a ser utilizados por los asambleístas en la Fase IV, esto es, apoyar la
comprensión de los estudios desarrollados de parte de las comisiones que se prevé se
conformarán al interior de la Asamblea, a quienes se brindará asistencia técnica a través de
estos equipos así como respecto el trabajo técnico post constituyente que será necesario
desarrollar de cara a la implementación de los cambios constitucionales, referidos a la
necesaria nueva normativa a genérese así como con relación al diseño organizativo –
institucional que se requiera, acciones a trabajarse bajo el liderazgo de las instituciones del
Estado que correspondan.
El monto definido de requerimiento financiero para la conformación de los equipos en las
áreas definidas como prioritarias asciende a us$ 614.000.- al menos para la conformación
de 4 equipos en las áreas de descentralización y reformas a la administración pública,
régimen económico y social, régimen agrario campesino, derechos civiles y reformas
políticas. Siendo una constante a ser dimensionada en términos presupuestarios el
tratamiento de las temática indígena y la interculturalidad.

El financimiamiento requerido es desarrollado en el Anexo I

Insumos normativos

La UCAC necesita contar con un conjunto de estudios legales que permitan sustentar
técnicamente las reformas secundarias que necesariamente deben practicarse para
poner en marcha la Asamblea Constituyente, esto es los instrumentos jurídicos
infraconstitucionales, que en el caso particular a la constituyente requiere efectuar un
estudio para regular la incorporación de las agrupaciones ciudadanas en los procesos
electivos tal cual establece la Ley 2631 de Reforma Constitucional que considera la
desmonopolización de la representación política entre otros artículos. Esta acción
estratégica deberá permitir:

? La elaboración del anteproyecto de Ley de Agrupaciones Ciudadanas y Pueblos


indígenas en coordinación con las instituciones y actores del Estado relevantes.

? La elaboración de un informe jurídico que identifique con precisión los artículos


que deberán reformarse, así como de los artículos que deberán incluirse, en la
Ley de Partidos Políticos, Ley Electoral y Ley de Municipalidades que permitan
operar el anteproyecto de Ley elaborado por el Consultor sobre Agrupaciones
Ciudadanas y Pueblos Indígenas en el marco de los establecido en la Ley 2631.

De manera que se cuente con un anteproyecto de ley para las agrupaciones ciudadanas
sustentado por un informe jurídico que identifique con precisión los artículos que
deberán reformarse, así como de los artículos que deberán incluirse en las leyes de
municipalidades, partidos políticos y en el Código Electoral.

El financimiamiento requerido es desarrollado en el Anexo I

Presencia regional de la UCAC

Para la operativización de este trabajo se ha considerado la necesidad de contar con


presencia institucional de la UCAC en los nueve departamentos de manera que puedan
capacitar a representantes de la sociedad civil organizada para moderación de espacios de
discusión local sobre los objetivos y contenidos de la Asamblea Constituyente y promover
un espacio de discusión departamental para la información sobre los objetivos y contenidos
de la Asamblea Constituyente así como para el debate y priorización de las temáticas
regionales que aporte a los contenidos del trabajo de los Asambleístas. Esto es:

a) Talleres de discusión sobre los objetivos y alcances de la Asamblea


Constituyente.

? Mapeo de actores sociales e institucionales estratégicos para el proceso.


? Identificar sus intereses y expectativas individuales sobre los objetivos y contenidos
de la Asamblea Constituyente.
? Organizar y moderar talleres departamentales de discusión de los objetivos y
alcances de la Asamblea Constituyente.
? Sistematizar los resultados de los ta lleres departamentales sobre los objetivos y
alcances de la Asamblea Constituyente.
? Sistematizar las expectativas y percepciones de la sociedad civil organizada y de los
actores institucionales respecto los objetivos y alcances de la Asamblea
Constituyente.

b) Talleres de capacitación para la discusión local de los objetivos y contenidos


de la Asamblea Constituyente.

? Capacitar a técnicos locales en técnicas de moderación y facilitación de talleres de


discusión sobre los objetivos y contenidos de la Asamblea Constituyente así como
para la priorización de las temáticas locales a ser propuestas como parte de los
contenidos del trabajo futuro de los Asambleístas.

La metodología a ser aplicada una vez ajustada a los requerimientos (características)


regionales por estos representantes departamentales considera la elaboración de un
documento de propuesta metodológica e instrumental para el diseño y realización de
talleres participativos relacionados con la constituyente que detalle:

? El marco conceptual de la facilitación de procesos grupales sinérgicos.


? El modelo de facilitación a emplearse.
? Los estándares de calidad para los talleres participativos.
? La estructura (reglas, espacios, procesos) para la resolución de conflictos.
? Herramientas y técnicas de facilitación (diseño, sistematización de resultados y otros).
? Informe de evaluación de los resultados de la aplicación de las metodologías e
instrumentos aplicados por los consultores facilitadores y articuladores de la demanda
regional capacitados en al menos tres de los eventos desarrollados por estos, al menos
uno de capacitación a representantes locales y al menos uno sobre la discusión de los
objetivos y contenidos de la Asamblea Constituyente en el nivel departamental así como
de la discusión sobre las temáticas regionales que puedan ser considerados como parte
de los contenidos del trabajo de los Asambleístas.
? Documento de propuesta metodológica e instrumental para el desarrollo de debates y
procesos de deliberación respecto los contenidos de la Ley Especial de Convocatoria de
la Asamblea Constituyente y de la Asamblea Constituyente.
? Documento de propuesta metodológica e instrumental para la sistematización y análisis
de los resultados de los debates y procesos de deliberación respecto los contenidos de la
Ley Especial de Convocatoria de la Asamblea Constituyente y de la Asamblea
Constituyente coordinados o asistidos técnicamente por la Unidad de Coordinación para
la Asamblea Constituyente.

El financimiamiento requerido es desarrollado en el Anexo I

Conformación de la Mesa Ciudadana

La mesa ciudadana es una instancia consultiva de apoyo a la operativización de las iniciativas de


comunicación, capacitación y difusión de los alcances y contenidos de la Asamblea
Constituyente trabajados por la Unidad de Coordinación que constituye la Secretaría Técnica de
esta instancia que será presidida por un representante elegido por los mismos miembros de la
mesa quienes en la primera reunión de la misma aprobarán sus estatutos, a ser propuestos por la
Secretaría Técnica procediendo inmediatamente a la elección de su presidente.

• Conformación de las Mesas Ciudadanas Nacional y


Departamentales
Compuesta por representantes de todos los sectores ciudadanos, interesados
en la realización de la Asamblea Constituyente y de las mesas
departamentales.

Miembros Mesa Ciudadana Nacional:


? COB, CSUTCB, CIDOB, CEPB, FAM, AMB, Confederación de Gremiales de
Bolivia, CONALJUVE, CONAMAQ, Delegado Comités Cívicos, Defensor del
Pueblo, Confederación de Profesionales de Bolivia.

Miembros Mesas Ciudadanas Departamentales:


? COD, CSUTCB, CEP Deptales., Asociaciones Departamentales de Municipios,
Comité Cívico, FEJUVE, Representantes del Defensor del Pueblo y otros.

Esta mesa ciudadana será conformada a nivel nacional así como departamental respetando la
representatividad propia de cada región a cuyo interior se replicará lo descrito en el párrafo
anterior.

A partir de la culminación de estas actividades se prevé poder dar inicio a las siguientes tres
fases de la Asamblea Constituyente para cuyo dimensionamiento financiero sobretodo se precisa
la contratación de un estudio especializado que permita realizar esta valoración en torno la
conformación de escenarios que pueden ser enfrentados a partir de los acuerdos que se logre
respecto la forma en la cual serán elegido los asambleístas, el lugar de sus sesiones, la logística
necesaria para ésta, el apoyo técnicos que requerirán y otros elementos sustanciales que deberán
también considerar escenarios temporales del procesos de deliberación así como los costos de
enfrentar un referéndum constitucional para la aprobación de la Constitución Política del Estado.

En todo caso las fases III, IV y IV, persiguen respecto sus objetivos:
Fase III: Convocatoria y elección de los representantes a la Asamblea Constituyente
Fase IV: Deliberación de la Asamblea Constituyente
Fase V: Aprobación de la nueva Constitución Política del Estado
3.2 REFORMA CONSTITUCIONAL Y ASAMBLEA CONSTITUYENTE
Lic. Ricardo Paz Ballivian

Me ha tocado hablar hoy día del proceso de la Reforma Constitucional y su


desemboque en la Asamblea Constituyente, como es que los bolivianos y las
bolivianas hemos escogido incorporar la Asamblea Constituyente como un
mecanismo alternativo de Reforma Constitucional en este caso estructural, total, global, al
interior de la Constitución Política del Estado, y las razones de por qué lo hemos hecho así
y por qué estamos yendo a una Asamblea Constituyente.
Para ello yo debo empezar necesariamente haciéndoles referencia, una muy
brevísima referencia histórica de lo que ha sido el proceso de Reforma Constitucional en
Bolivia. La penúltima Reforma Constitucional que tuvimos fue en los años 1993 y 1994,
como la mayoría de ustedes sabe en nuestra Constitución está establecido un mecanismo de
Reforma Constitucional parcial, que ordena que se debe cuando se quiere hacer una
reforma parcial a la Constitución, se debe elaborar una Ley de necesidades de Reforma
Constitucional de crear la necesidad de los Artículos que se quiere reformar y después
elección por medio con un nuevo Congreso, hacer una Ley de Reforma Constitucional que
vaya a validar, rechazar o modificar lo que la Ley de Necesidad de Reforma Constitucional
ha establecido.
La penúltima vez que hicimos eso fue en 1993-1994, la Ley de Necesidad de abril de 1994,
la Ley de Reforma Constitucional de agosto de 1994, para hacerles recuerdo en aquella
oportunidad se instituyeron profundas transformaciones en nuestra Constitución como la
creación del Tribunal Constitucional, del Defensor del Pueblo, del Consejo de la Judicatura,
los Diputados Uninominales, el carácter multiétnico y pluricultural de nuestro Estado, los
derechos de los pueblos indígenas en el Artículo 171° y otras modificaciones en menores.
Ya entonces sin embargo, los bolivianos y las bolivianas sabíamos que habían
quedado muchas asignaturas pendientes, que no habíamos reformado en la Constitución
todo lo que había que reformarse, que necesitábamos remozar de una manera más profunda,
de una manera más radical el contrato social, el pacto social que nos suelda, que hace que
convivamos todos en paz y en democracia.
Porque eso es la Constitución Política del Estado, la Constitución no es otra cosa que la
expresión jurídica del contrato social, que es la expresión jurídica del pacto social que nos
suelda como comunidad. Sin embargo no fue sino hasta que el año 2000, cuando se
produce la guerra del agua en abril en Cochabamba y la insurrección aymara en las riveras
del Lago en septiembre y octubre de ese mismo año, que nuevamente se pone en el tapete
para decirlo de una manera más académica, en la cúspide de la agenda política de la
discusión nacional, el tema de la Reforma Constitucional planteado como una demanda de
Asamblea Constituyente.
Los pueblos indígenas del oriente también expresan durante los primeros meses del año
2001, la necesidad de ir a una Reformulación de nuestra Carta Magna por la vía de un
cambio global, total al que denominamos Asamblea Constituyente. En ese entonces el
sistema político, el sistema de partidos que no estaba tan venido a menos como ahora, que
no estaba en la crisis política de representatividad que está viviendo ahora todavía, aunque
ya se veían los primeros síntomas, sin embargo pudo responder con cierta agilidad, con
cierta prestancia y generó un proceso de consulta ciudadana reducido, no lo suficientemente
amplio probablemente, pero produjo un proceso de consulta
ciudadana y nombró un consejo ciudadano para la Reforma Constitucional
constituido por personalidades ligadas a la materia precisamente por el Dr. Luis Ossio
Sanjinéz quien nos acompaña hoy día, donde es taban Don Waldo Albarracín, el actual
Defensor del Pueblo, estaba el Rector de la Universidad Católica Don Carlos Guerque,
estaba Don Pablo Dermisaki el Primer Presidente del Tribunal Constitucional de Bolivia,
Doña María Antonieta Piza que era Presidente del Colegio de Abogados, estaba Don Carlos
Mesa, entonces líder de opinión reconocido en el país, hoy Presidente Constitucional de la
República.
Este Consejo Ciudadano tuvo el encargo de elaborar un Anteproyecto de Ley de
Necesidad de Reforma Constitucional, que recoja toda esta consulta, todo este sentir
ciudadano y lo pueda de alguna manera trasuntar en un texto específico, así fue; en
noviembre del año 2001 el Consejo Ciudadano presentó ante el país su Anteproyecto de
Ley de Necesidad de Reforma Constitucional que planteaba la modificación de 145
Artículos de la Constitución.
Luego de un proceso de debate político, de discusión y de concertación a nivel de los jefes
partidarios y a nivel de las fuerzas parlamentarias de entonces, se logró finalmente
concertar la aprobación de 45 de esos 145 Artículos que había planteado el Consejo
Ciudadano, en lo que fue la Ley Declaratoria de Necesidad de la Reforma Constitucional
2410 del 1° de agosto del año 2002. Allí se plantearon ya lo que finalmente vino a ser el
corazón de la Reforma actual; esa Ley 2410 aprobada a filo de las sesiones del 2002, tenía
que ser tratada en este Parlamento, así sucedió, en las primeras sesiones de la Legislatura
2004, perdón del 2002, en septiembre la Cámara de Diputados leyó la Ley 2410 y la pasó a
su Comisión de Constitución, donde la radicó, pero inició el tratamiento como manda la
Constitución Política del Estado en su Artículo 231°.
Allí estuvo por razones que todos conocemos, prácticamente paralizada la Ley de Reforma
Constitucional durante todo el año 2003, y qué pasó el año 2003, el año 2003 tuvimos los
terribles y luctuosos eventos 1° de febrero de ese año, y luego de octubre del 2003, donde
se juntan dos hondas, una honda corta y una honda larga de problemas estructurales de
nuestro país, la honda larga que viene de cientos de años, de problemas estructurales, de las
asignaturas pendientes que tiene nuestra democracia, la desigualdad, la injusticia, la
exclusión social, el racismo que son los grandes males que los bolivianos no podemos
superar hasta ahora.
Pero se juntaron con una honda corta con problemas más coyunturales, ya les decía el
agotamiento de la democracia pactada, la crisis de representación de los partidos políticos,
la corrupción generalizada, la amenaza del narcotráfico, la inseguridad ciudadana cada vez
más creciente, todos esos problemas de coyuntura con los problemas estructurales
provocaron en octubre una tormenta perfecta y la eclosión social que todos hemos visto, y
definitivamente la necesidad de reconstituir, de recomponer nuestro pacto social, nuestro
contrato social, demasiadas tensiones regionales, demasiadas tensiones sociales,
demasiadas tensiones políticas y económicas han sacudido a nuestro país en esos días, en
esos acontecimientos.
Ahora bien, ¿las cosas de octubre aquí cambiaron?, es decir ¿esos problemas
han sido resueltos? -de ninguna manera. Esos problemas están ahí, están latentes, están
presentes y no podemos hacer la del avestruz, meter la cabeza bajo la tierra y negar esos
problemas, tene mos el deber de enfrentarlos, pero cómo enfrentarlos, cómo encontrar la
solución o el inicio de la solución de estos problemas, la vía que hemos escogido las
bolivianas y los bolivianos es una vía pacífica y democrática, un espacio de deliberación
donde vayamos a enfrentar y empezar a resolver los múltiples y diversos problemas que
tenemos entre bolivianos, ese espacio de confluencia, de deliberación se llama Asamblea
Constituyente.
La Asamblea Constituyente no es otra cosa que el espacio institucional,
constitucionalizado, legal para reformar el contrato social en paz y de manera democrática,
cuál es la alternativa a la Asamblea Constituyente, porque los problemas están, mucha
gente en seminarios, en debates me dicen: bueno, pero por qué estamos haciendo una
Asamblea Constituyente donde de repente el país se divide en 20, tenemos una diáspora
social, política, vamos a tener muchos problemas, porque los problemas están ahí
independientemente de la Asamblea Constituyente, más bien estamos tratando de que la
Asamblea Constituyente sea la opción alternativa probablemente la última alternativa que
los bolivianos tenemos de resolver nuestros problemas en paz y en democracia.
La otra opción, la otra alternativa, la otra vía es la del enfrentamiento, la de la violencia, la
del derramamiento de sangre, la otra opción la digo sin tapujos, sin ningún tipo de
mediaciones es probablemente la guerra civil, que ha sido anunciada, que ha sido coreada,
ha sido promovida y todavía sigue siendo promovida por minorías eficaces de uno y otro
extremo que piensan que ese es su caldo de cultivo, que ahí es donde ellos pueden vencer y
pueden imponer sus posiciones de sectas, sus posiciones de grupo, porque cómo es que se
expresa la mayoría, la mayoría se expresa en elecciones, la mayoría se expresa en voto, la
mayoría se expresa en Asamblea Constituyente, las minorías de expresan a través de la
violencia, del enfrentamiento fratricida, se expresan a través de ese tipo de mecanismos.
Por eso es que se ha constitucionalizado la Constituyente, por eso es que hemos
incorporado la Constituyente rematando todo ese proceso al que les hacía referencia con la
aprobación de esta Ley, la Ley 2631 del 20 de febrero del 2004. Qué dice esta Ley de
Reforma Constitucional, y por qué es tan importante hoy día para el país, esta Ley que
Reforma 15 Artículos de la Constitución Política del Estado, básicamente nos ha instituido
las siguientes normas, primero ha incorporado la Asamblea Constituyente como un
mecanismo de Reforma total de la Constitución; segundo, ha instituido el Referéndum
como un mecanismo de consulta ciudadana para temas de interés nacional; tercero, ha
restringido la inmunidad parlamentaria que en los últimos tiempos más parece impunidad
que inmunidad y la ha restringido a su propuesta original que era la inmunidad en materia
penal, la inmunidad tenía que servir siempre y ahora va a servir para eso, para que no lo
metan preso al Diputado opositor cuando tiene que ir a una Interpelación, cuando tiene que
ir a una votación importante, pero no una inmunidad en todas las materias civil, comercial,
familiar, etc., que no viene al caso.
Se ha hecho además de aquello, se ha incorporado el Habeas Data, se han resuelto
problemas de nacionalidad, ahora los bolivianos, los más de dos millones de compatriotas
que viven en el extranjero tienen la posibilidad de adoptar una nacionalidad extranjera sin
perder la nacionalidad boliviana, y lo más importante de la Reforma, lo crucial de la
Reforma, el diamante de la Reforma Constitucional es la desmonopolización de la
representación política, que significa que ahora las bolivianas y los bolivianos no necesitan
de estar intermediados obligatoriamente por un partido político para presentar candidaturas
a las dignidades de Presidente, Vicepresidente, Senadores, Diputados, Alcaldes,
Concejales, etc.
Entonces, esta Reforma Constitucional nos está habilitando a una Asamblea
Constituyente verdaderamente con participación ciudadana eficaz e irrestricta, esta
Asamblea Constituyente va a estar compuesta no sólo por representantes de partidos
políticos sino por agrupaciones ciudadanas y por pueblos indígenas, es decir una
Constituyente absolutamente representativa y participativa.
La Ley 2631 de Reforma Constitucional como no puede ser de otra manera se
plantea como una reforma de transición hacia la Asamblea Constituyente, mucha gente dijo
pero para qué estamos haciendo esta Reforma Constitucional si tenemos Asamblea
Constituyente a las puertas, la tenemos que llevar adelante en el peor de los casos el 2005,
dado que el 2004 ya tenemos Referéndum, tenemos Diálogo Nacional, tenemos Elecciones
Municipales.
Por qué el esfuerzo de constitucionalizar la Constituyente en la Constitución, porque
precisamente lo que queremos, lo que estamos buscando es un espacio dentro de la
institucionalidad, dentro del régimen democrático, dentro de las formas jurídicas que están
establecidas.
Hay dos formas de hacer constituyentes, unas constituyentes que ejercen el poder
originario, son aquellas que son fruto de una revolución, de un derrumbe de
la estatalidad que empiezan de cero, empiezan de ninguna juridicidad, de ninguna
institucionalidad ni forma, eso hemos tenido nosotros en 1826, hemos tenido en esa ocasión
la oportunidad de fundar un Estado nacional, hoy día no vamos, no hemos echado por tierra
la institucionalidad a pesar de la crisis y a pesar de los problemas, a pesar de la violencia
hemos sido los bolivianos capaces de respetar nuestra Constitución, en la crisis de octubre
con la magnitud que tuvo hemos provocado una sucesión constitucional impecable, ejemplo
para el mundo, ejemplo de convicción democrática, y por eso mismo vamos a llevar
adelante la Asamblea Constituyente en los marcos de la institucionalidad y la democracia, y
por eso era imprescindible esta Reforma Constituciona l, era imprescindible que esté la
Constituyente dentro de la Constitución, porque la Constitución Política del Estado va a
estar en vigencia absoluta sin ningún tipo de cortapisas hasta el día en que haya una nueva
Constitución, el día que la Constituyente sancione una nueva Constitución, ese día dejará
de estar en vigencia esta Constitución Política del Estado, mientras tanto el país no se echa
llave, el país tiene que seguir administrando justicia, tiene que seguir gobernando, tiene que
seguir haciendo Le yes, tiene que seguir fiscalizando, tiene que seguir produciendo y
desarrollando.
Y ese es el enorme desafío y con esto quiero terminar, con este llamado y con esta
invocación, ese es el gran desafío de la Asamblea Constituyente, la Asamblea
Constituyente ya no es un espacio, ya no es el gobierno, no es el papá ni la mamá de nadie,
no es un lugar donde uno va con su demanda de su sector a pedirle a la Asamblea
Constituyente que haga tal o tal cosa, la Asamblea Constituyente es la expresión de la
soberanía del pueblo, la Asamblea Constituyente somos todos y todas, por lo tanto yo les
invoco y les convoco a apoderarse y empoderarse de la Asamblea Constituyente; la
Asamblea Constituyente debe ser propiedad inalienable del conjunto del pueblo, debe
ser la expresión de esa soberanía, y para eso la participación debe ser absolutamente
irrestricta de todas y todos los bolivianos, que nosotros vamos a hacer todos los esfuerzos
desde el gobierno que nos competen, que el Poder Legislativo va a ser los suyos para
provocar una gran movilización ciudadana, información, capacitación, campañas,
encuestas, sondeos, seminarios, debates como éste a lo largo y ancho del país ni duda cabe,
pero nada de eso va a ser suficiente sin la convicción de apoderamiento y empoderamiento
de la ciudadanía respecto de la Asamblea Constituyente, y todos tenemos que ir a generar
un nuevo Proyecto Nacional, hemos tenido el Proyecto nacional independentista que surgió
en 1826, ese Proyecto nacional se agotó y tuvimos el Proyecto Nacional liberal fruto de una
terrible guerra civil también 1899-1900, luego tuvimos el gran Proyecto Nacional de la
Revolución del ’52,producto también de una guerra civil de un levantamiento y una
insurrección.
Esta es la primera vez que tenemos la oportunidad de generar un Proyecto Nacional ante el
agotamiento del Proyecto de la Revolución Nacional en paz y en democracia, con
convicción y con capacidad de transformación profunda pero en paz y democracia, dentro
de los márgenes de nuestra institucionalidad de nuestra juricidad, pero para ello como les
digo es necesario la participación y es necesario que vayamos llevando adelante una
propuesta de Proyecto Nacional.
Aquí está el Presidente del Comité Cívico de Tarija, yo estuve hace un par de meses allá
con el Comité Cívico conversando, quiero repetirles algo que les dije en aquella
oportunidad a la gente del Comité Cívico; por ejemplo el planteamiento del Comité Cívico
de Tarija de las autonomías regionales va a tener éxito en la Asamblea Constituyente no en
la medida en que el Comité Cívico de Tarija o cualquier otro venga y nos diga las
autonomías regionales son buenas para Tarija, va a tener éxito en la medida en que nos
convenzan y nos enamoren de que ese Proyecto de Autonomías Regionales es bueno para
los paceños, es bueno para los orureños, es bueno para los potosinos, tenemos que venir a
hacer grandes planteamientos de Proyecto Nacional, no planteamientos de sector, ya la
Asamblea no es un lugar donde va y le pide cositas, no es el gobierno donde uno va con su
pliego petitorio, es el lugar donde asumimos todos y todas, la responsabilidad de
transformar el país. Muchísimas gracias.

PREGUNTAS DEL AUDITORIO


Lic. Ricardo Paz Ballivián:
LIC. RICARDO PAZ.- Si, de manera muy breve, las más de 25 preguntas que han llegado
las he resumido en 4 respuestas. La pregunta más recurrente es: ¿Cómo van a estar
constituidos, como va a estar constituida la Asamblea Constituyente, quien va a elegir a los
asambleístas, cómo los va a elegir, cuántos van a ser los asambleístas, dónde van a sesionar
y por cuánto tiempo van a sesionar?, eso es un bloque. Todo esto precisamente es lo que
tiene que ser deliberado durante todos estos meses, si bien es el Congreso Nacional el que
tiene la atribución y el deber constitucional de elaborar una Ley de convocatoria y una Ley
especial de convocatoria a la Asamblea Constituyente, donde establezca las modalidades de
elección de los asambleístas, necesariamente esa Ley debe ser el fruto de una gigantesca
consulta ciudadana, donde todas y todos nosotros tengamos algo que decir sobre este tema
y el consenso sea el que se resuelva aquí hay muchos planteamientos hay muchos, Alvaro
García acaba de hacer uno de ellos, una combinación de un mecanismo de votación
universal representativa con un mecanismo de designación comunitaria.
Hay otros planteamientos, hay quienes dicen que deberían ser 68 uninominales en las 68
circunscripciones que existen, hay otros que dicen que sean 136, que sean 2 en cada
circunscripción, pero obligatoriamente que sean el hombre más
votado y la mujer más votada, para que la Asamblea refleje lo que es la sociedad
equitativamente, hay otros que dicen está bien, que hayan diputados, asambleístas
uninominales, pero también tiene que haber una visión nacional, no puede ser que vayan
asambleístas solamente pensando en las necesidades de su circunscripción.
Entonces combinemos, que hayan una cantidad de uninominales y otra cantidad de
plurinominales de una lista nacional y así sucesivamente, hay muchos planteamientos hoy
día, todos son muy válidos, todos son importantes, tenemos que reflexionar entre todos,
tenemos que deliberar y finalmente dotarle al Congreso Nacional de los insumos necesarios
para que allá puedan elaborar una Ley de Convocatoria que realmente permita una elección
de asambleístas hacia una Asamblea Constituyente participativa y representativa de lo que
es el país.
Segundo grupo de preguntas, hablan sobre la legitimidad de la Asamblea
Constituyente, dicen la mayoría de ellas cómo es posible, cómo podíamos confiar en una
Asamblea Constituyente que la están dirigiendo los partidos políticos tradicionales, que la
está llevando adelante el Statu Quo, el sistema, cómo es que esa Asamblea no va a ser un
engaño para el pueblo.
Y ahí simplemente reiterarles de manera concisa y breve, decirles que la garantía, la única
garantía que existe con la Asamblea Constituyente de que esta sea verdaderamente
participativa, representativa y cumpla el objetivo de remozar y refundar el contrato social y
el pacto social entre nosotros y empiece la solución de los problemas del país, es que
participemos todos y todas de la manera más irrestricta posible por todos los medios que
estén a nuestro alcance.
Finalmente, está el tema de los riesgos y amenazas de la Asamblea Constituyente, si esto va
a provocar la fragmentación del país, si esto va a provocar que en lugar de que se resuelvan
los problemas, la tensiones se hagan más fuertes, se hagan más evidentes y que vayamos a
la diáspora.
Yo en ese sentido simplemente quiero decirles que si octubre no ha sido lo
suficientemente claro para mostrarnos a todos nosotros, que esos problemas de onda larga
estructurales y los problemas de onda corta coyunturales, son evidentes, claros, y requieren
de nuestra atención, entonces realmente no se que más tendría que suceder en el país para
que nosotros tengamos que ir hacia este espacio de liberación pacífico y democrático que es
la Asamblea Constituyente.

(Añadir diapositivas en anexo)


3.3 NACIONALIDADES INDÍGENAS
Y
ASAMBLEA CONSTITUYENTE EN BOLIVIA

REFLEXIONES HISTÓRICAS
Y
PROPUESTAS CONSTITUCIONALES
DESDE LA MEMORIA POLÍTICA DE LOS
ANTIGUOS HABITANTES DE ESTAS TIERRAS

Abg. Idón Moisés Chivi Vargas


Arxatiri

Uru – Uru
2004

Introducción.
En estos tiempos críticos, pero de incesante reflexión, tiempos de masacre, pero a la vez de
nacimientos anunciados, los indígenas tenemos que parir nuestra propia historia estamos
enfrentando la primera posibilidad de contraer un Contrato Social para la refundación del país,
estamos en las puertas de hacer una Asamblea Constituyente.
Los muertos de febrero y octubre del 2003, son aymaras y quechuas, son la
mayoría pobre que tiene dos cobros pendientes: La Asamblea Constituyente
como estrategia general para construir un nuevo País, y la recuperación de
la propiedad sobre los recursos hidrocarburiferos como táctica nacional de
soberanía.
Lo principal, lo central, lo que no podemos dejar de lado es el asunto de la Asamblea
Constituyente, esto no es un capricho mas de los indios, ni tema de doctorcitos, ni competencia de
abogados para hacer más y mejores leyes, se trata de la primera vez en la historia de Bolivia donde
nosotros -los indios- podemos hacer explotar el colonialismo jurídico de este país, es decir,
podemos hacer explotar el fondo mismo de su matriz como Estado y como Nación: la Constitución
Política del Estado y su herencia colonial...
Las líneas que siguen a continuación sintetizan los siguientes procesos de análisis, primero
realizamos un balance político sobre el modelo de Asamblea Constituyente propuesto por Carlos
Mesa Gisbert y que se aprobó en el parlamento a fines de febrero de este año.
En un segundo momento planteamos la reflexión teórica de lo que es una Constitución Política
desde una perspectiva histórico critica indígena, y revisamos su sentido real dentro de la acción
política.
Tercero, realizamos una breve reflexión sobre la Constitución Política en nuestro País y su
imposición liberal en 1825 mostrando el carácter anti-indio del Estado Boliviano, su fondo
cultural, su espíritu colonial y neocolonial.
En el cuarto punto hacemos una breve revisión de la presencia Indígena en el debate constitucional
de los Bolivianos partiendo de Pablo Zarate Willca hasta el presente
El quinto y sexto puntos nos muestran el resultado preliminar de reflexiones y diálogos con las
Autoridades Originarias, pero especialmente el “Primer Encuentro para la Refundación del País,
por los senderos de Paulo Zarate Willca” realizado en Oruro el mes de diciembre, y donde se trata
de modo específico la Asamblea Constituyente y una eventual Agenda Temática inicial de reformas
urgentes emergentes de las movilizaciones sociales efectuadas a lo largo de los años 2000, 2001,
2002 y principalmente el 2003.
Finalizamos el trabajo señalando con toda claridad la necesidad de contar con un Estatuto
Autonómico de las Nacionalidades Indígenas , como resultado ineludible, inevitable para la
Refundación del País.

Uru - Uru Marka


Jallu Pacha
2004
1. Balance Político de Coyuntura: 2003-2004
Es cierto que después de la asunción de Carlos Mesa en reemplazo de Gonzalo Sánchez de Lozada,
se tenía la impresión de que la estrategia Estatal cambiaría en un rumbo popular, eso ya es idea del
pasado, lo que vemos en el presente concreto es que la crisis tomo un nuevo rumbo pero como crisis
sigue siendo problema real, es decir como hecho material que divide la vida política del país en dos
bandos, los que creen todavía en esta democracia o aquellos que quieren un nuevo modelo
democrático, nosotros -los indios- no estamos en ninguno de los dos bandos, estamos con la
necesidad de contraer un primer Pacto Social con este pedazo de planeta denominado
incorrectamente “Bolivia”, ex- república DE Bolívar.
En el presente año encontramos dos momentos clave del nuevo gobierno, el primero fue a
principios de enero y el segundo al inicio de febrero, en ambos momentos los mensajes
presidenciales dieron elementos bases para comprender la propuesta política (Asamblea
Constituyente y Referéndum) y la propuesta económica (Impuestos, Salarios y precio de los
hidroc arburos) de esta gestión.
El mensaje presidencial de enero nos convence que una Asamblea Constituyente es una etapa de
debate democrático y que debe estar inmersa en la Constitución Política del Estado, esto es una
verdad a medias, pues una verdadera Asamblea Constituyente es el resultado de la lucha entre
diversas fuerzas sociales, con diversas posiciones políticas y obviamente con formas diferentes de
ver el programa de país.
Dicho de otro modo, el modelo de Asamblea Constituyente en la mente de Carlos Mesa es contar
con una sociedad sin conflictos, sin control social y con la menor posibilidad de que los indios
pongamos el sable en la espalda de los “asambleístas”, este modelo es ideal, es democrático, pero
para cualquier constitucionalista la Asamblea Constituyente es el resultado de profundos conflictos
entre fuerzas sociales expresadas en la movilización, es la expresión de un Poder Constituyente que
nace de las contradicciones de un modelo de Estado, de una forma de dominio
Es la expresión final de un modelo de gobierno, muestra su propio agotamiento y que su sistema
político ya no representa las aspiraciones de la sociedad civil, por ello el “modelo Mesa” de
Asamblea Constituyente es un anzuelo que trata de convencernos ideológicamente para pacificar el
país, con ese proceso de pacificación la Oligarquía esta preparando su retorno triunfal al poder, no
en vano Mesa convive con los que legalizaban lo ilegal (MNR-MIR-UCS-ADN-MBL), con
aquellos que guardaron silencio en Febrero y Octubre, convive con aque llos que dictaron la famosa
Ley del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana donde se penaliza la protesta social, la toma y
“control de territorios”, por eso el Gobierno de Mesa es trágico, además de hipócrita, porque es un
prisionero de su propia casta social, de la seudointelectualidad burguesa y proemenerrista, es
prisionero de los asesinos que él cobijó en su lenguaje periodístico durante las gestiones de Goni,
“dime con quien andas y te diré quien eres” dice el refrán, que en esta oportunidad es mas
pertinente que nunca.
A nuestros legisladores indios les tomaron, y les siguen tomando el pelo, ¿será pura casualidad?...
Ese parlamento con el cual convive Mesa y que guarda una aparente independencia frente al Poder
Ejecutivo, es el lugar donde se encuentra el verdadero enemigo político, el cómplice real del actual
modelo de Estado. No en vano la gente en el Alto de La Paz ha dicho su sentencia: “Cierre del
Parlamento”.
Los tres Poderes del Estado han mostrado con frecuencia increíble, con ausencia de propuestas para
la crisis, con indudable ceguera ante la realidad, con persistente colonialismo interno, su alianza con
un modelo de Dominio que hoy por hoy esta extremadamente agotado
La vía correcta para la realización de una Asamblea Constituyente profundamente indígena y
democráticamente popular es controlarla por todos los lados, es con un poder social movilizado, con
nosotros los indios en las carreteras, con los obreros en la fábrica, con todos en las calles...
Este es el escenario donde nosotros los originarios nos movemos, es el escenario político que no
podemos evadir, porque estamos inmersos dentro de él, estamos en su vientre y somos su parto, su
nacimiento que se viene encima, aunque en el camino estamos comenzando a sentir el amarre
traidor de algunos hermanos con el gobierno Mesa, CONAMAQ es la muestra mas elocuente para
estudiar estos tiempos.
Pero para hacer esa famosa Asamblea tenemos que saber de antemano varias cositas, así que
vámonos a la primera sesión de historia política... o sea historia de lo que hace el poder cuando tiene
la sartén por el mango..., tenemos que saber como nace y que quiere su principal instrumento
jurídico: La Constitución Política del Estado.
Porqué pues todos los gobiernos, y especialmente don Carlos Mesa, nos dicen a cada rato, a cada
ratito: “respeten La Constitución”, “estamos con la Constitución en la mano”, “debemos obedecer
las Leyes”.
Será casualidad o es un programa que ellos -los de arriba- tienen de memoria y lo repiten, para no
sorprenderse como en Febrero o como les ocurrió en Octubre... los indios de este tiempo tienen un
potencial subversivo enorme, eso los saben los Q’aras, criollo o mestizos desclazados, pero también
lo sabemos nosotros...
2. Qué es una Constitución Política del Estado?.
Mucho se habla sobre ese tema, pero ¿de qué se habla?, todos dicen que la Constitución Política es
la máxima ley, Jach’a Ley, pero será así, ¿quién ha ordenado que la Constitución es la Ley de los
indios?, ¿será que los indios no tenemos leyes? ¿quién y cómo nos han hecho creer en la cabeza que
la Constitución Política es la norma suprema del Estado Boliviano?, ¿y este Estado Boliviano lo
hemos fundado nosotros? ¿quién es el culpable que haya Bolivia?, ¿será verdad esa famosa
pirámide de Kelsen? O, será un truco más del poder para domesticar a los indios ignorantes?
Si todas las naciones tienen un Constitución ¿Qué es la Constitución Política del Estado?
? ¿Carta Magna?
? ¿Ley de Leyes?
? ¿Norma Suprema?
Todos creemos saber lo que es la Constitución Política del Estado, pero ¿estamos seguros de lo que
sabemos?
Si tenemos que hacer una Asamblea Constituyente, nosotros los indios tenemos que saber con
exactitud lo que es una Constitución Política del Estado, de lo contrario corremos el riesgo de
cometer errores de grueso calibre en su discusión, como se dice en otro trabajo, “la Asamblea
Constituyente no es cuestión de cambiar solamente Leyes eso puede ser competencia de Abogados”
No podemos entrar al debate sin tener clarito como agua, lo que es la Constitución Política del
Estado.
Antes de la invasión de los españoles, los Originarios en tiempos del Inca teníamos toda una
estructura de Estado es decir existía Economía, Política y Sociedad, los trabajos de diversos
“cronistas” (historiadores que acompañaban a los conquistadores) muestran la existencia de
numerosas normas jurídicas en “quipus legislativos”, esto significa que los antiguos habitantes de
estas tierras tenían Estado y por lo tanto un sistema de gobierno, de control y distribución de los
recursos naturales.
Con la invasión de los Españoles las Leyes dominantes eran las Leyes de Indias que se escribían en
España pero que eran destinadas a los indios de los Imperios Azteca, Maya, Inca y el Qullasuyu, en
la Audiencia de Charcas Francisco de Toledo redacta las Ordenanzas para los indios, estas leyes no
podían apartarse de las Leyes de Indias, esas eran las leyes de la Corona de España escrito para los
indios mitayos... era la desestructuración jurídica del imperio del Tahuantisuyu.
Con la Guerra de la Independencia, los criollos -hijos de españoles- que no querían pagar impuestos
a la Corona por la explotación de la Plata y el Oro, se copian la Constitución española de 1812 mas
conocida como constitución de Cádiz que era de un corte liberal adecuado al ideario de los
indepe ndentistas criollos.
¡Ah!, entonces las Constituciones no existieron siempre, sino que son un producto político de dos
revoluciones claramente burguesas, la Constitución Norteamericana (1776) legaliza la
independencia de norteamericana en relación a los Ingleses, en Francia (1789) la Constitución
legaliza el poder de la burguesía y quita a los “soberanos” Reyes y Príncipes todo el Poder que
tenían en sus manos, en otros términos el Estado burgués recorta el largo poder del brazo feudal.
La noción de Soberano = Rey viene de esa experiencia histórica, pero unos intelectuales pagados
por la burguesía cuestionan esa forma de manejar el Poder, y plantean que la “Soberanía” debe
pasar al pueblo (campesinos, artesanos, gremios y burguesía ) y que el poder debe dividirse en tres:
Legislativo (para hacer leyes), Ejecutivo (para ejecutar las leyes que hace el legislativo) y Judicial
(Administración especializada de la Justicia e impedir que el Ejecutivo y el Legislativo hagan uso
arbitrario de su poder de ejecutar y hacer leyes).
Eso es lo que J.J. Rousseau denomino Contrato Social, una especie de alianza entre campesinos
libres, siervos de la gleba, artesanos, gremios y burguesía, para expulsar al Rey y sustituirlo por los
tres poderes del Estado, y -aquí la trampa- una clase dirigente que maneja todo: La Burguesía y sus
empleados intelectuales.
Entonces, ¿qué es la Constitución Política del Estado?
a) Un producto histórico de las Revoluciones burguesas en los siglos XVIII y XIX
b) Son normas jurídicas que legalizan tres poderes: Legislativo, Ejecutivo y Judicial
c) Son normas diseñadas para que los burgueses -como clase social- administren esos tres
poderes..
d) Son normas que excluyen a los campesinos, artesanos, mujeres, y otras fracciones
empobrecidas de la sociedad capitalista.
e) La Constitución legaliza la propiedad privada, el modelo capitalista de economía y la
explotación de una clase social sobre las otras, hablamos de la burguesía
f) Finalmente la Constitución Política es un librito divinizado, es como Dios en la Tierra de
los hombres, sin Constitución Política es imposible pensar un País, una Nación, todos y
todas pensamos lo mismo, ¿cómo se ha logrado eso? mediante procesos de
ideologización, es como la religión, en estos procesos de ideologización estamos
metidos todos, desde niños se nos enseña que la Constitución aquí, que la Constitución
allá... que la Constitución manda y nosotros creemos eso, eso se llama colonialismo
jurídico... Al iniciarse la conquista en estas tierras del Tahuantinsuyu, Atawallpa arroja
la Biblia del cura Valverde porque para el Inca ese librito no tenía ningún valor, en la
actualidad la Biblia y las religiones tienen presencia enorme en estas tierras de la
Pachamama.
El tiempo pasa, y la Constitución Política se ha convertido en la forma jurídica dominante en todo el
planeta tierra, con el correr de los años se ha ido introduciendo una serie de principios que son
producto de conflictos sociales y conflictos políticos, de conflictos económicos y conflictos
culturales, que se dieron y que se dan en todos los países.
En las modernas Constituciones se tienen principios de Derechos Humanos, Derechos Laborales
con rango Constitucional, Derechos de la Familia, Derechos de los Pueblos Indígenas, etc., o sea se
tienen Constituciones con mas, con menos, pero con derechos, no siempre fue así, en la primera
Constitución boliviana de 1826 se hace mención a la “Ciudadanía”, donde los indígenas fuimos
excluidos constitucionalmente.
¿Los indios qué éramos?... ¿y qué somos hoy?
Otro tema que no podemos dejar de lado es el de la Soberanía, este concepto significa que los
recursos naturales son propiedad del Soberano (el Rey), pero con la Revolución Francesa y su
Constitución Política pasa a manos del Estado o sea de los Burgueses...
Eso también ocurrió en estas tierras, por eso preguntamos de cómo el Estado Boliviano es dueño,
así nomás y sin que nadie lo sepa, de los Recursos Naturales que nos pertenecen por derecho
histórico a los primeros habitantes de estas tierras
De cómo el Oro, la Plata, el Estaño y ahora el Gas son del Estado Boliviano ¿quién les ha dado ese
derecho?, ¿cómo ha ocurrido eso?, la respuesta la encontramos en ese Pacto Social fundacional
entre criollos, entre ellos se han dado ese derecho, ¡se han repartido la riqueza del país!, por eso
hasta el presente se resisten a dejar el Palacio de Gobierno, ministerios, embajadas,
superintendencias, o sea no quieren irse de la casa donde se enriquecen a costa de nuestra miseria,
¿será que el MAS está en ese mismo camino?.
Como señalamos líneas arriba, en la guerra de la independencia los criollos -hijos de españoles- se
copian el modelito de Constitución, Simón Bolívar que se había educado en Europa tenía en su
mente que las Constituciones servían para reemplazar el dominio del Rey de España en estas tierras,
pero los criollos altoperuano le fallaron incluso al “Libertador”, Olañeta y sus secuaces hicieron una
burda transmisión de mando, una burda imitación de Estado-Nación en ese momento radica el
origen de los fracasos de los Bolivianos y su elite en el poder.
Lo demás, lo que nos enseñan en la escuela y el colegio, es cuento chino... o cuento del tío
Todos los pueblos indígenas tuvieron que ser parte de naciones que no nos convocaron a su
fundación, ¿acaso nuestros abuelos votaron para que Bolivia exista?, ¿acaso votaron para que los
recursos naturales sean del Estado o sea de los criollos?, ¿cuando, en que momento los indios
hemos entregado soberanía al Estado y los criollos gobernantes?
Veamos la próxima sesión de historia...
3. La Primera Constitución Política de Bolivia: Una mirada indígena.
¿Quiénes hicieron la primera Constitución Política del Estado? es una pregunta obligatoria para
entender cuál es nuestro lugar en este debate, y cuál es nuestro lugar en la Asamblea Constituyente
de este tiempo
Pero antes veremos un pedazo del Acta de la Independencia, ese papel firmado el 6 de Agosto de
1825, y por el cual nace este país:
DECLARACIÓN:
“La representación soberana de las provincias del Alto Perú, declara solemnemente á
nombre y absoluto poder de sus dignos representados. Que ha llegado el venturoso día
(de romper con la Corona) ... no asociarse a ninguna de las repúblicas vecinas, se erige
en un estado soberano e independiente (...) los departamentos del Alto Perú (...)
protestan a la faz de la tierra entera que su voluntad irrevocable es gobernarse por si
mismos y ser regidos por la CONSTITUCIÓN, leyes y autoridades que ellos propios se
diesen y creyesen mas conducentes á su futura felicidad en clase de nación y el sostén
inalterable de su santa religión Católica y de los sacrosantos derechos de honor, vida,
libertad, igualdad, propiedad y seguridad”
Si leemos nuevamente, con calma y viendo solo los pedazos mas importantes el documento de
arriba, podemos hallar los siguientes datos:
“La representación soberana de las provincias del Alto Perú”, dice en el papel, esto significa
que le han quitado el poder de representación al Rey de España .
“se erige en un Estado soberano e independiente” esto significa que el Rey ha cedido su
soberanía al ESTADO... primera vez que se habla de eso: el Estado...
“su voluntad irrevocable es gobernarse por si mismos y regidos por la Constitución leyes y
autoridades que ellos propios se diesen y creyesen mas conducentes á su futura felicidad en
clase de nación” esto significa que las Leyes de Indias dejan de tener validez y que ya pueden darse
una Constitución Política puesto que se convierten en “Nación” y ya no son “Colonia Española”,
primera vez que se habla de Constitución Política del Estado...
“los sacrosantos derechos de honor, vida, libertad, igualdad, propiedad y seguridad” esto
significa que ser “propietario” -tener propiedad privada - es ser “libre”, y las leyes dan “seguridad” a
los propietarios, y solo ellos tienen “honor” y derecho a la “vida”, y por tanto son “iguales”.
Los indios no tienen propiedad “privada” entonces no son iguales, los ayllus son propiedades
colectivas, cuando Simón Bolívar busca de inicio la parcelación de la tierra de ayllus en
propiedades individuales, y desconoce de entrada a las Autoridades Originarias, se choca contra la
realidad y se choca de cabeza...
Los demás los que no son “propietarios” están fuera del acta de la “independencia”.
Bueno la historia no se detiene ahí, tenemos que ir mas lejos todavía...
Constitución Política Bolivariana de 1826:
Art. 11.- 1º Son Bolivianos todos los nacidos en el territorio de la República.
Art. 14.- Para ser CIUDADANO es necesario: 1º Ser Boliviano. 2º Ser casado o mayor
de veintiún años. 3º Saber leer y escribir, bien que esta calidad solo se exigirá desde el
año de mil ochocientos treinta y seis. 4º Tener algún empleo o industria, o profesar
alguna ciencia o arte, sin sujeción a otro en calidad de sirviente doméstico
Aquí podemos realizar el mismo ejercicio que en el anterior texto, y encontramos lo siguiente:
“Ser Boliviano”, por tanto los “indios” son “indios” y no Bolivianos
“Saber leer y escribir”, este hecho nos muestra con claridad lo que ocurría en ese tiempo, lo que
nuestros abuelos tuvieron que sufrir, en esos tiempos no había escuelas en el ayllu, la s escuelas eran
para la gente que tenía riqueza, entonces nuestros abuelos ya no eran ciudadanos, eran solo “indios”
“Tener algún empleo o industria, o profesar alguna ciencia o arte, sin sujeción a otro en
calidad de sirviente doméstico” si revisamos con calma encontramos que nuestros mayores no
tenían empleo, no eran profesores ni artistas, pero lo peor -si hubieran sido profesores o artistas-, es
que no tenían que ser sirvientes de otro es decir no tenían que ser “pongos”.
Por eso se dice que cuando este país nace, se hace contra los indios, contra los descendientes
rebeldes de Tupac Amaru y Tupac Katari, contra los indios que sitiaron la ciudad de Oruro en 1871
e hicieron mascar coca y vestir ropa de bayeta incluso a los propios curas y españoles.
Ese odio congénito de los blancos, criollos e incluso mestizos contra los indios tiene su propia
historia, que nace con los grandes levantamientos en 1871 desde ese momento los españoles y sus
hijos criollos establecen una separación racial entre ellos y nosotros ese momentos fundacional
muestra a los blancos y criollos, que los indios no están dispuestos a continuar sometidos a un
vasallaje social, económico y político, y que, por el contrario queremos recuperar nuestra dignidad.
La Constitución Política de 1826 nos hace una pregunta que no podemos dejar de lado: ¿si en
Europa fueron los burgueses los que conquistaron el poder para expulsar al Rey, en el Alto Perú
había burgueses igual que en Europa? ¡claro que no!, hasta este momento no tenemos burguesía
nacional, lo mas que encontramos es una “oligarquía birlocha” con mentalidad señorial racista, por
eso el problema de la tierra sigue siendo la tragedia de todo gobierno, por eso los empresarios en
Bolivia, mendigan del Estado, piden prestamos para no pagar...
¿Podían ser verdaderamente liberales colonos españoles en tierra de indios, mucho mas cuando
estos no eran burgueses sino latifundistas?, esta es la pregunta de fondo, es la pregunta que
incomoda a todo el criollaje de esos tiempos y de este tiempo
Ese es el origen colonial, colonizado y colonizante de la Constitución Política del Estado.
Los arquitectos criollos de la independencia, quedan como oligarquía birlocha, hicieron una
Constitución sin nosotros y contra nosotros y eso sucedió en toda América Latina, en Perú,
Ecuador, Chile Argentina, etc., ¿tendremos que seguir soportando la carga de la historia colonial?
4. Revisión histórica de la presencia indígena en el debate constitucional de los bolivianos.
Estamos viviendo el siglo XXI, si hemos visto que en el año de 1825 se redacta el Acta de la
Independencia donde y borra al indio de un plumazo y, la Constitución Política de 1826 legaliza ese
borrón histórico, ¿todo habrá quedado así...? ¿nuestros mayores no habrán hecho nada?, bueno
entremos en la tercera sesión de historia política, o sea historia del poder que tenemos nosotros, los
antiguos habitantes de estas tierras...
Desde 1825 la historia de Bolivia esta llena de juicios contra el Estado, en el
primer momento los indígenas confundían la palabra de “ciudadano” con la
de “cristiano”, cuando Simón Bolívar elabora un decreto eliminando a las
Autoridades Originarias, la propiedad de Ayllus y las costumbres en la
sucesión de bienes, se enfrenta con sendos juicios, donde los originarios
hacen conocer su reclamo por el respeto a sus costumbres, su propiedad y su
forma de gobierno, es decir Simón Bolívar se había chocado de cabeza contra
la realidad indígena, contra la comunidad... Con la república, la constitución
simplemente los excluye, los criollos emp renden un nuevo ciclo colonial,
sólo así se entiende el exterminio de la población indígena y el despojo
generalizados de tierras.
La historia oficial no cuenta la historia de la presencia indígena, estudios recientes demuestran que
las redes de autoridades originarias tenían vinculación con el Gobierno de Isidoro Belzu, el Tata
Belzu y que los sucesivos gobiernos mantenían alianzas menos visibles pero alianzas al fin, con las
Autoridades Originarias, especialmente en La Paz, Oruro y Potosí.
Pero algo que impresiona a los historiadores, es la acción política de Paulo Zarate Willca, el líder
indígena nacido en Qellqata de Oruro (actualmente provincia T. Barrón), este Tata Hilakata que ya
aparece en los registros de la Prefectura de La Paz en 1880, tuvo en sus manos la rebelión mas
importante hecha por los indígenas, uno de sus mejores aliados, el Tata Mallku Juan Lero llego
incluso a establecer el primer gobierno indígena en Peñas de Oruro, entre el 9 y 11 de abril de 1899,
fines del siglo XIX
En la Proclama de Caracollo redactado en 1899, Paulo Zarate Willca establece seis mandatos que
son a la vez las demandas que nos hacen ver lo que ahora -nosotros los indígenas-, estamos
planteando para la Asamblea Constituyente, veamos:
Peticiones de Paulo Zarate Willca”:
1. La restitución de las tierras de origen y convertir las fincas en comunidades
2. El sometimiento de las castas dominantes a las nacionalidades de origen
3. La constitución de un gobierno de indígenas.
4. El desconocimiento del mando de Pando y los jefes revolucionarios
5. Acatamiento y vasallaje a Zarate Willca.
6. La imposición universal del traje de bayeta.
Cada punto tiene un sentido propio dentro del conjunto estratégico, el primero hace
referencia al territorio y su reconocimiento. Frente a la agresión de la hacienda y la
parcelación de los Ayllus era urgente su reconstitución, lo que hoy conocemos como
Reconstitución y Restitución de Ayllus, Markas y Suyus (el Territorio Indígena)
El segundo punto establece el sometimiento de todas las demás castas, se encuentran en un
momento de guerra y no pueden existir concesiones, las castas dominantes debían someterse al
Gobierno de Zarate Willca.
El tercer punto establece con claridad el tema de la constitución de un gobierno de indígenas y el
debate de las nacionalidades, o sea Naciones de Origen.
El cuarto punto es el final de una alianza entre Paulo Zarate Willca y el liberal José Manuel Pando,
pues este criollo desde marzo de ese año traicionó el Pacto firmado con el Hilakata Zarate Willca en
sentido de restituir las tierras de Ayllu fracturadas por la hacienda.
El quinto punto demuestra que Zarate Willca estaba convencido de la victoria y que la red de
Autoridades Originarias recuperaría su territorio y constituiría su propio gobierno del Qullasuyu,
solo la traición de Pando pudo evitar ese desenlace, son cosas de la historia... y de la astucia criolla
y mestiza (eso es lo que tenemos que impedir con la Asamblea Constituyente).
El sexto punto era solo el comienzo de una nueva era, aunque esa actitud ya se presenta con los
indígenas que tomaron Oruro, en el año de 1781 bajo el mando de Jacinto Rodríguez, en plena
rebelión liderizada por Tupac Amaru, eso se denominaba en ese tiempo como “mutación de
dominio” (A eso se llama Nuevo Programa de País, o sea Nueva Constitución Política del Estado
mediante Asamblea Constituyente es la mutación de una forma de dominio constitucional hacia una
forma de convivencia constitucional entre unos y otros).
La repercusión mas directa del levantamiento indígena se sintetiza en una frase dicha por el
diputado P. Zainz en ocasión de celebrarse la Convención Nacional de 1899 que discutía en Oruro,
el asunto de federalizar o no el país, estito decía el caballero... haciendo referencia a la rebelión de
Paulo Zarate Willca.
Sesión matinal del día 12 de Diciembre de 1899
Sr. Pastor Sainz
Desgraciadas de las razas el día que los indígenas lleguen a comprender su fuerza, este es
otro problema como puso en peligro la vida nacional como ha habido un momento en que
el jefe de las fuerzas revolucionarias trato de unirse con las de Alonzo, y les decía
dominemos esa raza, el día que llegue á armarse ha de ser terrible (...) Es preciso pues
prepararla educarla por consiguiente en esa raza no hay para que consultar mayorías ni
minorías (p. 659)
El temor a los indios impidió que la federalización se plasmara, escuchemos lo que dice otro
“honorable” de la Convención:
Sesión matinal del 14 de diciembre de 1899
Sr. Urcullo.
Bolivia aunque es triste decirlo, no tiene todavía la instrucción indispensable , ni las virtudes
cívicas precisas para el gobierno del pueblo, por si mismo; pues la inmensa mayoría de su
población es absolutamente ignorante, y por lo mismo comprendo que no es tiempo de
implantar la federación, así como considero que no hay necesidad ni urgencia para que
precisamente esta Convención la sancione.
No provoquemos perturbaciones intestinas ni demos margen a desmenbraciones
territoriales, con reformas imprudentes. (p. 730)
Podemos establecer con claridad lo siguiente, Bolivia sigue siendo UNITARIA por temor a que los
indios les arrebaten el poder, ese fue el impacto en los criollos lilberales de 1899, no se animaron a
federalizar Bolivia, por que los indios son mayoría y sería terrible para ellos que eran y que son
minoría social.
Otro dato es que la rebelión indígena de 1899 sintetiza con extremado cuidado las bases de Agenda
Temática que hoy podemos discutir en una Asamblea Constituyente a la vez que nos alerta de los
peligros que entraña confiar en los que siempre quieren manejar el poder como un derecho de
herencia, genealogías familiares en el poder...
Si eso ocurrió a fines del siglo XIX,0 veamos ahora algunos datos del siglo XX.
En la década de los años veinte. Leandro Nina Quispe funda la Sociedad
República del Qullasuyu, los Caciques Apoderados emprenden una nueva
forma de lucha, entonces aparece Santos Marka T’ula como líder que
continua un largo proceso de recuperación de los títulos coloniales de tierras
compradas a la corona de España y con esos títulos reconstituir el Ayllu es
decir el Territorio Indígena (una referencia interesante es que en México,
Emiliano Zapata recorría los caminos de su insurgencia con los Títulos
Coloniales con los cuales hacía valer el derecho de los indios a la tierra, tierra
que había sido comprada con Oro y Plata a los Españoles y que el Estado
Méxicano -los criollos mexicanos- desconocían intencionalmente para
apropiarse de las tierras indígenas).
Estos documentos –“Nayra Titulos”- es lo que ahora se conocen como
instrumentos de derecho internacional y que son reconocidos como
“tratados” entre el poder colonial y el poder nacional de los pueblos
indígenas.
German Busch y Gualberto Villarroel introducen en sus respectivas reformas constitucionales la
cuestión indígena y agraria, debido a las fuertes movilizaciones indígenas en contra del sistema de
hacienda, Gualberto Villarroel realiza el Primer Congreso Indigenal para paliar los ánimos y tratar
de salvar su gobierno y con él a los emenerristas, los emenerristas imponen el nombre de campesino
a los indígenas, y sustituyen a las Autoridades Originarias por Sindicatos Agrarios.
Víctor Paz define un Capitulo de Régimen Agrario en la Constitución Política de 1961 dando
reconocimiento legal solo a los sindicatos agrarios, es decir a los sindicatos del MNR, se establece
el voto campesino, el pongo político, Barrientos en 1967 perfecciona algunas figuras y elabora el
pacto militar campesino. Es la expresión de la política indigenista y la antropología de la
aculturación.
En 1991 se ratifica la Convención sobre Derechos de los Pueblos Indígenas y
Tribales en países independientes de la Organización Internacional del
Trabajo, ley Nº 1257 con rango de Ley de la República, producto de la
incesantes movilizaciones de indígenas del Oriente. Aquí otra vez el cambio,
no va más la política de asimilación indigenista, sino del reconocimiento de
la diferencia, la autonomía,… pero siempre bajo los límites de los Estados
Nacionales.
En 1994 se introduce palabras bonitas: Pluricultural y Multiétnico y se reconoce la justicia
comunitaria, su jurisdicción y competencias aunque en un lenguaje ambiguo y lleno de
interrogantes.
En esta misma década renacen esperanzas, el sindicato llega a su agotamiento, las antiguas
autoridades levantan su voz, con paciencia que los siglos enseñan, pero con la fuerza que este
tiempo exige...
En el 2002 las Autoridades Originarias del Occidente en alianza con indígenas del Oriente imponen
en la Agenda Política del Estado: la Asamblea Constituyente, este primer paso marca el debate
Nacional, ¿cuanto habremos avanzado los indígenas de la Consigna a la Propuesta Concreta?
Todos hablan de Asamblea Constituyente, pero nadie se acuerda de la marcha de los Originarios en
mayo y junio de 2002, cuando casi se frustra una Elección Nacional y los partidos tuvieron que
firmar un documento y luego borrar con el codo, en un típica actitud criolla, recordandonos su
herencia colonial...
Este movimiento establece como principio de Asamblea Constituyente la
Reconstitución del Qullsuyu, ese es el fondo, el programa político central de
los Originarios
5. La esperanza esta en el Ayllu: Propuestas de transformación Política en Bolivia hacia la
reconstitución del Qullasuyu.
En este ultimo punto rescatamos ideas escritas y defendidas en el marco del “Primer Encuentro
para la Refundación del País: por los senderos de Paulo Zarate Willca” realizado en Diciembre
de 2003, donde participaron Autoridades Originarias de Potosí, Oruro, La Paz, intelectuales
indígenas y wawaqallus de diversas comunidades.
Como parte ineludible de la propuesta partimos de nuestra memoria política, que es -en el fondo- la
memoria testimonial expresada en la Proclama de Caracollo, abril de 1899, el punto mas alto de
rebelión indígena en las tierras del Qullasuyu y que fue liderizado por Paulo Zarate Willca y llevada
a su extremo por Juan Lero en Peñas con la constitución del Primer Gobierno Indígena,
¿Cuando enseñarán en la escuela, el colegios y la universidad la verdadera historia indígena?
Estamos seguros, que en nuestras manos está la posibilidad de construir colectivamente una Agenda
Temática para una Asamblea Constituyente, es decir que entre todos podemos elaborar una
Propuesta Política para la Asamblea Constituyente.
Se trata, como dijimos, de refundar el país, de descolonizarlo de quitarle su existencia colonial,
colonizado y colonizante, eso significa dar vuelta la torta, pero esto no puede el resultado de una
mente iluminada, de consultores bien pagados, sino la expresión de la propia comunidad, de su
historia y urgencia política.
Refundar el país no es buscar venganzas justicieras, refundar el país significa establecer el tipo de
Pacto Social Primario, rescatar el mensaje de los mayores y de los hijos en este presente...
El tipo de Contrato Social que nosotros los indios planteamos al resto de la sociedad, no son la
búsqueda de más participación política, de más “derechos”, ni que el régimen Agrario y Campesino
sea mas extenso, sino de establecer un verdadero Pacto de Convivencia Nacional, un pacto de
todos...
Una verdadera sociedad democrática se basa en el respeto mutuo entre nosotros que somos y
estamos aquí como descendientes de los primeros habitantes de estas tierras, y aquellos que
descienden de padres venidos de otras tierras, pero que hoy por hoy estamos ocupando el mismo
espacio, aunque en diferentes lugares de la diversidad social.
Una verdadera sociedad democrática se basa en el reconocimiento por parte de unos y de otros que
la historia pasada necesita despojarse del colonialismo interno y aprender otras formas de
convivencia política, social, económica y cultural, que ya fueron expresadas por los antiguos
habitantes de estas tierras en más de un momento de la historia colonial y republicana y que hoy se
expresan con mayor nitidez que nunca, no podemos ser sordos y ciegos ante los reclamos de antes y
los de hoy...
Una verdadera sociedad democrática necesita recuperar formas gubernativas clandestinas, que
funcionan contra toda adversidad y que son reconocidas como legítimas en el territorio donde se
desenvuelven.
Una Bolivia profundamente democrática necesita establecer un Nuevo Pacto Fundacional donde los
antiguos habitantes de estas tierras encuentren reconocimiento a su Territorio, su Gobierno, y la
construcción de su Soberanía, solo de este modo podemos ingresar a una nueva etapa en la historia
de Bolivia.
6. Agenda Temática de cambios en la Constitución Política del Estado:
Este acapite es la síntesis jurídica de los resultados que tenemos en los papelografos y las ideas
individuales del evento mencionado y donde encontramos ideas políticas que se remontan a edades
de rebelión, pero que expresan las necesidades políticas primordiales de este nuevo tiempo, tiempo
de viejas mañas y viejos discursos, pero que en el fondo ya no pueden detener la historia, el camino
emprendido...
Por nuestra parte rescatamos la experiencia constitucional latinoamericana, donde encontramos
lugares esenciales en nuestra herencia común y nuestra preparación política de futuros posibles...
La Constitución Política de los “Bolivianos” no tiene un “preámbulo”, en toda Constitución Política
el Preámbulo es el sustento filosófico de un Estado. Cuba tiene su preámbulo, donde se expresa
los orígenes revolucionarios de su nacimiento como Republica verdaderamente independiente y su
proyección como país socialista, veamos -a modo de ejemplo- el preámbulo de las Constituciones
Colombiana de 1991 y la del Ecuador que son el resultado de Asambleas Nacionales Constituyentes
en la década de los noventa en el siglo XX:
Preámbulo
El pueblo de Colombia
En ejercicio de su poder soberano, representado por delegatarios a la Asamblea Nacional
Constituyente, invocando la protección de Dios, y con el fin de fortalecer la unidad de la
Nación, y asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la justicia, la igualdad,
el conocimiento, la libertad y la paz, dentro de un marco jurídico, democrático y participativo
que garantice un ordén público, económico y social justo, y comprometido a impulsar la
integración latinoamericana, decreta, sanciona y promulga la siguiente Constitución Política
de Colombia

LA ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE EXPIDE LA PRESENTE


CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DEL ECUADOR.
EL PUEBLO DEL ECUADOR
inspirado en su historia milenaria, en el recuerdo de sus héroes y el trabajo de hombres y mujeres
que con su sacrificio, forjaron la patria, fiel a los ideales de libertad, igualdad, justicia, progreso,
solidaridad, equidad y paz que han guiado sus pasos desde la albores de la vida republicana,
proclama su voluntad de consolidar la unidad de la nación ecuatoriana en el reconocimiento de la
diversidad de sus regiones, pueblos, etnias y culturas, invoca la protección de Dios, y en ejercicio
de su Soberanía establece en esta Constitución las normas fundamentales que amparan los derechos
y libertades, organizan el Estado y las instituciones democráticas e impulsan el desarrollo
económico y social

La Constitución Boliviana requiere contar con un Preámbulo para establecer las bases de su
Soberanía, su historia propia, su memoria indígena y la orientación política hacia la construcción de
un nuevo país, en ese sentido la propuesta sería la siguiente:
Preámbulo:
El pueblo de Bolivia
Constituida en el territorio de los primeros habitantes de estas tierras, emerge nte de un largo
proceso insurreccional contra el colonialismo impuesto por la Corona de España, bajo la
inspiración de la libertad, igualdad, justicia, equidad, progreso y solidaridad de sus
ciudadanos.
Declara al mundo su voluntad de consolidar la unidad de la Nación Boliviana en el
reconocimiento de la diversidad de nacionalidades indígenas, declara también su compromiso
para impulsar la integración latinoamericana para el progreso y desarrollo nacional
Decreta, Sanciona y Promulga la siguiente Constitución Política de Bolivia
Pasamos el primer punto, ahora viene el resultado que establecemos como agenda temática, con
esos elementos realizaremos algunas reflexiones de orden constitucional que atraviesan la
enseñanza oficial del Derecho Constitucional...
Como planteamos los indígenas una Constitución Política? eso puede merecer varias respuestas, por
un lado están quienes quieren hacer todo de nuevo, como si eso fuera cuestión de buenas voluntades
y deseos propios, por el otro están quienes tratan de incorporar mas y mas derechos, ninguna de las
dos vías es correcta.
Nosotros vemos que los resultados del Encuentro nos dan un mandato, los diversos Congresos de
Autoridades Originarias nos dan un mandato, y los diversos momentos políticos de las
movilizaciones indígenas nos dan un mandato, al cual no podemos evadir, y ese mandato se traduce
en el reconocimiento de la Reconstitución de las Nacionalidades Indígenas, este hecho es central, es
el primer mandato principal del cual derivan todas las demás propuestas, sin esta comprensión,
estaríamos entrampados en una suerte de caja oscura, todo punto de Luz sería un derecho más, no se
trata de eso, para hacer eso podemos hacer una competencia de abogados y nos darían lindos
sueños.
Pero aquí, en este momento, es urgente e importante que el Pacto Fundacional parta del
reconocimiento de la diversidad no solo como “culturas diferentes” sino como nacionalidades de
origen, cuyas memorias tienen territorio y gobierno, en eso se funda el mandato de las
movilizaciones indígenas.
Que eso no es posible?, que significaría destrozar Bolivia?, que estaríamos desmembrando el país?,
son argumentos de fantasmas que caen por su propio peso, pues Bolivia ya ha enfrentado ese debate
en 1899, y en la actualidad se esta discutiendo el tema de las Autonomías, entonces tenemos que ser
serios, discutir autonomías es también discutir Nacionalidades Indígenas y No Indígenas, en el
fondo estamos discutiendo la posibilidad de profundizar la descentralización administrativa y
política del País.
La fórmula Constitucional sería la siguiente:
Art. 1.- (Modificatorio)
Bolivia constituida en Estado Social y democrático de Derecho, libre, independiente. y
soberana, fundada en la solidaridad, la unión y el reconocimiento de la autonomía a las
nacionalidades indígenas, adopta para su gobierno la democracia representativa,
participativa, descentralizada e indígena.
Esta es una fórmula que recoge los mandatos de las movilizaciones indígenas, pero tenemos que
caminar mas trayecto todavía, si la idea es desconolonizar la Constitución Política del Estado,
debemos partir por el reconocimiento Constitucional de las Nacionalidades de Origen.
Bolivia como Ecuador y Perú tienen “Naciones” es decir cuenta con demarcaciones territoriales y
formas de Estado anteriores al régimen del dominio Español, en ese “territorio” mantienen sistemas
de gobierno más legítimos que la representación del Estado y que viene también desde antes del
periodo colonial (Mallkus, Kurakas, Hilakatas, etc., etc.), lo unico que falta es el reconocimiento del
Estado del carácter que tenemos como Naciones, ese hecho nos puede permitir transitar propuestas
de mayor profundidad.
Veamos lo que se dice en la Constitución Política de España:
Constitución Política de España:
Articulo 2.
La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común
e indivisible de todos los españoles. y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las
nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas.

Otra idea que sale de los aportes realizados por los participantes del Encuentro es la necesidad de
incorporar los tres principios básicos en la Ley del Ayllu: Ama Sua, Ama Llulla y ama Q’ella, en la
búsqueda nos enteramos que la Constitución Política del Ecuador incorpora estos mandatos como
deberes del ciudadano, entonces que significa ese hecho?.
Hemos señalado que la Constitución Política del Estado tiene una herencia colonial, pero esa
herencia no es solo el racismo, sino también la corrupción, de entradita nuestra Constitución
legaliza la corrupción: “se acata pero no se cumple” dice el refrán criollo.
Este hecho colonial ha sido detectado por los Asambleístas de la Constituyente Ecuatoriana por ello
tienen en su Constitución lo siguiente:
Art. 97. todos los ciudadanos tendrán los siguientes deberes y responsabilidades, sin perjuicio
de otros previstos en esta Constitución y la Ley.
Inc. 20. Ama quilla, Ama llulla, Ama shua. No ser ocioso, no mentir, no robar
En Bolivia podemos incorporar estos principios, no como copia de los Ecuatorianos, sino como
experiencia histórica de los indígenas en los Andes, no debemos olvidar que Ecuador era parte del
Tahuantinsuyo, uno de los cuatro Suyus del Imperio Inca y que por lo tanto compartimos una
historia común, si hacemos ingresar esta noción uno puede preguntarse ¿esto es para todos?, claro
es para todos, incluidos los que manejan el Estado, ellos son ciudadanos en calidad de servidores
públicos, nada mas que eso, no porque estén manejando el estado, pueden hacer lo que les da la
gana, son ciudadanos tan iguales como nosotros, pero que se encuentran temporalmente como
servidores públicos.
Dicho eso, nuestra fórmula Constitucional se estructura del siguiente modo:
Art. 8. (inclusivo)
Toda persona tiene los siguientes deberes fundamentales:
i) De cumplir en todo momento los principios de: Ama Sua, Ama Llulla, Ama Q’ella. No seas
ladrón, no seas mentiroso, no seas ocioso.

Como puede verse no estamos inventando nada nuevo, lo que estamos haciendo es recuperar las
propuestas del presente pero que vienen desde el tiempo de nuestros mayores.
Si hasta aquí tenemos dos ideas esenciales, pasemos a recoger la cuestión de los Derechos de las
nacionalidades indígenas, es decir Derechos que todos sentimos como una necesidad en nuestras
comunidades pero que de alguna manera se encuentran en los convenios internacionales y la
legislación comparada, así que hagamos una lista de “Derechos” que pueden ser incluidos como un
Capitulo especial, debemos tomar en cuenta que una Constitución deben conocerla todas las
nacionalidades, los indígenas, las mujeres, etc., para ello tiene que tener un lenguaje claro y
comprensible.

DERECHOS DE LAS NACIONALIDADES INDÍGENAS


1. Mantener, Desarrollar y fortalecer la identidad política, económica social y cultural de las
Nacionalidades Indígenas.
2. Participar en el uso y usufructo, administración y conservación de los recursos naturales
renovables y no renovables que se encuentran en sus territorios.
3. A ser consultados en la exploración, prospección y explotación de re cursos renovables y no
renovables que se hallen en sus territorios
4. Recibir indemnizaciones por los perjuicios ambientales que puedan causar las empresas
que se encuentren en territorios indígenas
5. Conservar y mantener prácticas ecoambientales en la protección de la biodiversidad.
6. Ejercer formas tradicionales de Autoridad, Gobierno y Justicia en los territorios de su
jurisdicción
7. A la propiedad intelectual colectiva sobre los conocimientos ancestrales.
8. Administrar, mantener y desarrollar su patrimonio histórico y cultural
9. A practicar su propia medicina y farmacopea tradicional
10. A proteger los lugares sagrados para los ciudadanos de los territorios indígenas
11. A usar símbolos de mando que los identifiquen como Autoridades Originarias
12. A formular planes de desarrollo de los Territorios Indígenas y un adecuado financiamiento
del Estado
13. A participar en la Gestión y Administración de los recursos económicos asignados a los
territorios indígenas por el Estado.
14. A practicar formas económicas tradicionales colectivas e individuales.
15. A establecer su propia representación parlamentaria en el Congreso Nacional
16. A contar con un Ministerio Indígena que represente los intereses de las Nacionalidades de
Origen
Qué más puede entrar en la Constitución para que consolidemos el Nuevo Pacto Fundacional?,
veamos, en nuestras fronteras tenemos familiares que son chilenos, peruanos, o brasileños, pero
estamos divididos por líneas que no las hemos puesto nosotros los indios, pero tenemos que vivir
con eso.
En el caso de Ecuador y Perú, los indios fueron convertidos en carne de cañón para ambos bandos
en una guerra por territorios, en la guerra del Chaco los guaranís de Bolivia y Paraguay se mataban
entre hermanos, por ello se ha desarrollado en la legislación comparada la “doble nacionalidad”,
esto significa que a través de un convenio entre nuestros países podemos pertenecer a dos países,
por que convivimos en fronteras y somos hermanos descendientes de las raíces anteriores al proceso
de colonización.
La formula constitucional sería la siguie nte:
Art. 37 (Inclusivo)
Son Bolivianos por naturalización
Los habitantes de territorio extranjero en las zonas de frontera que acrediten pertenencia
étnica colindante y hermana de las nacionalidades indígenas en Bolivia y que se expresen
voluntariamente s u naturalización.
Ingresemos ahora al tema espinoso y que se convierte en el asunto principal que debemos discutir
en la Nueva Constitución y su Pacto Fundacional, el tema de la división del Territorio.
Diversos constitucionalistas han afirmado que nuestra división del Espacio no responde a la
realidad, se choca con la realidad, pero esta sentencia es visible apenas tocamos los espacios reales
en los que viven las Nacionalidades Indígenas y los que fueron impuestos en el periodo colonial y
republicano, veamos:
El articulo 108 de la actual Constitución Política señala que la División Política y Administrativa de
Bolivia es en Departamentos, Provincias y Cantones, recientemente se quiere introducir a las
Secciones de Provincia por ese asunto de la Participació n Popular, la Ley de Municipalidades y la
Ley de Descentralización Administrativa.
Nosotros necesitamos que nuestro territorio indígena tenga pleno reconocimiento, que nuestra
forma de manejar y administrar el espacio tenga reconocimiento Constitucional este es un punto
neurálgico, es un problema principal que no podemos dejar de lado.
La formula Constitucional sería la siguiente:
Artículo 108 (modificatorio)
El territorio de la republica se divide políticamente en Departamentos, Provincias, Secciones de
Provincia, Cantones y los Territorios Indígenas
Esta formulación Constitucional acompaña todas las demás jurídicas, hemos llegado pues a entablar
un Pacto Fundacional.
Todos podemos advertir que estamos ante un nuevo panorama Constitucional que rebasa con creces
la actual visión restringida que se tiene de las Nacionalidades Indígenas.
Ahora bien, si hasta aquí tenemos una serie de propuestas que parecen un reformismo indígena en
materia Constitucional, veamos lo que se puede hacer como programa de transforma ción política
estructural.
Con el establecimiento del territorio indígena estamos en la posibilidad de exigir la reformulación
espacial de Bolivia;
La reformulación espacial nos obliga a implementar un sistema de Autoridades Político
Administrativas en base al sistema Tradicional y no en base al modelo colonial (voto).
Si existe una nueva forma de elección de nuestros representantes en los niveles territoriales
indígenas es posible establecer aquello que todos discuten el Parlamento de Indios o Representación
Indígena Parlamentaria, esta representación es la máxima expresión de los modelos anticoloniales
de democracia y es el tema fundamental del reconocimiento a las nacionalidades indígenas en
Bolivia, ¿como puede ser su expresión constitucional?, veamos:
Art. 46. El Poder Legislativo reside en el Congreso Nacional, compuesta por dos Cámaras, una de
diputados y otra de senadores, en ambas cámaras se establece la representación indígena que
resulta del sistema electoral propio de cada nacionalidad.
¿Porqué los indígenas tenemos que ir al voto, si sabemos que con esta
formula se reproduce el colonialismo interno?, ¿qué le impide al Estado
reconocer nuestra propia democracia?, es necesario repensar esos hechos y
plantear que en el régimen electoral de nuestra constitución se reconozca
nuestra propia democracia y nuestra propia forma de elección para
representantes de las nacionalidades indígenas, la formula constitucional
puede ser la siguiente:
Articulo 219. El sufragio constituye la base del sistema democrátic o representativo y se funda en el
voto universal, directo e igual, individual y secreto, libre y obligatorio, en el escrutinio público y en
el sistema de representación proporcional. Las nacionalidades indígenas tienen como base de su
sistema democrático la elección mediante su Derecho Consuetudinario propio.
Si logramos esto es perfectamente posible implementar este modelo en el nivel de las elecciones
municipales, porqué en las Markas tenemos que votar por un Partido para tener Alcalde Municipal,
si podemos elegir mediante la costumbre de los abuelos, todos sabemos que los partidos son
corruptos, que la mayoría de los Alcaldes tienen procesos aquí y allá, es decir todos los día vemos
con asco, cómo los Alcaldes hacen lo que les da la gana con la plata que pertenece al pueblo.
Para evitar eso, tenemos que recoger las experiencias pasadas, es decir establecer que el régimen de
elección sea en base a la costumbre, veamos:
Art. 200.
IV. Los Concejales son elegidos en votación directa y secreta por un periodo de cinco años,
siguiendo el sistema de representación proporcional determinado por Ley. En los territorios de las
Nacionalidades Indígenas el Concejo Municipal se conforma por las Autoridades
Tradicionales en base a sus usos y costumbres, la elección del Alc alde es atribución de ese
mismo sistema.
7. Conclusión que no es el fin del debate, sino la apertura del mismo...
Los diversos momentos más críticos de la historia escrita por los pueblos originarios se marca por
un reclamo histórico: El reconocimiento a las Nacionalidades Indígenas, su territorio y su gobierno,
hechos cuyas máximas expresiones son los procesos insurreccionales de 1870-1871, 1898-1899,
1920-1940, 2000-2003 en todos estos momentos encontramos el mismo horizonte: Autonomía
Política de las Nacionalidades Indígenas.
Las movilizaciones del 2000 al 2003 exigen ser convertidas -de una vez por todas- en formalización
Constitucional, de hecho Bolivia vive en una situación de debate político permanente, es una
oportunidad imperdible, es la urgencia de contar con un Nuevo Contrato Social pero que sea
esencialmente Fundacional, existe un poder constituido en las calles y que no es el resultado de las
elecciones, ese poder constituido es -en cierta medida-, la expresión mas cabal del horizonte político
nacional, indígena y popular
Si repasamos con la debida atención cada propuesta de modificación constitucional podemos
deducir que la propuesta peca de reformista, pero si llegamos al fondo del asunto estamos en
presencia de una necesidad histórica: La elaboración de un Estatuto Autonómico de las
Nacionalidades Indígenas .
Ese es el fondo histórico, la Constitución Política del Estado Boliviano es una cosa, otra es que las
Nacionalidades Indígenas tengamos nuestra propia “Constitución”
Si solo se tratara de mas “derechos” para los indios, hacemos competencia de abogados y listo, si
solo se tratara de un librito más, podemos dejar que este proceso se pase y ahí se quede como creen
algunos en el parlamento.
Pero se trata de romper con viejos moldes, aquí y ahora, con nosotros los indígenas
Antes de terminar es preciso entrar en una ultima reflexión, ¿nos habrán preguntado a los
originarios que la religión católica es oficial para los indios y, que nuestros impuestos tienen que
aportar para que la Iglesia Católica reciba plata del Estado?, ¿por qué la Pachamama no es la
patrona oficial del Estado?, este asunto es y será aún mas espinoso en una Asamblea Constituyente,
y debemos estar preparados..
Las nacionalidades indígenas convocamos al debate a los sectores y movimientos sociales, la
Constitución no es tema exclusivo de indios, ni aperitivo de la Nación Camba o Chapaca,
discutiremos eso de Nación y Nacionalidad, discutiremos eso del Congreso Nacional y su
Composición, eso de los Municipios y como se elige al Alc alde y los concejales, discutiremos los
derechos que tenemos las nacionalidades indígenas, las obligaciones que todos tenemos, las
garantías que nos protegen, el tema de los recursos naturales, el asunto de la Policía o el ejercito,
etc., pondremos en mesa de debate todo lo que sea necesario, todo aquello que nos lleve a un
proceso de descolonización política y la redacción de un Nuevo Programa de Nación y Estado.
Que sea en buena hora...
3.4 Propuesta multicultural a la Constituyente,
Jorge Miranda,Félix Lopéz
PROPUESTA MULTICULTURAL A LA CONSTITUYENTE

Dr. Jorge Miranda Luizaga


Félix López Mamani

INTRODUCCION

Nuestro país como Estado, nació en medio de una crisis profunda, dejando de
lado aspectos sociales y culturales de una gran mayoría de la población
conformada por los pueblos indígenas y originarios y está situación no ha
cambiado hasta el día de hoy. Esta deplorable situación nos preocupa de sobre
manera a toda persona conciente que sentimos y escuchamos el clamor de
nuestro pueblo. Un pueblo que a lo largo del tiempo y espacio soporta todas las
arbitrariedades de quienes gobernaron y fueron los responsables en la
administración y conducción de este país.

Entonces, es hora de asumir responsabilidades y ser los protagonistas en el


accionar político, que nos permita encontrar y restablecer el camino que dejaron
nuestros antepasados; es decir, construir una nueva sociedad de abundancia y
armonía comunitaria. Para lograr este propósito, es fundamental hacer una
convergencia de una unidad en el pensamiento Ideológico y filosófico de la
PACHA; es hora de asumir responsabilidad y hacer realidad las esperanzas y la
proyección comunitaria de la utopía andina; es el momento que debemos definir el
destino de las grandes mayorías nacionales discriminadas y marginadas de
nuestro pueblo.

Considerando que los habitantes del pueblo habían soportado todo el peso de la
crisis socioeconómica, originado desde la colonia española y profundizado por la
oligarquía criolla de la República, por eso es importante entablar el diálogo y
discutir entre hermanos sobre esta situación que afecta a todas las personas,
hombres y mujeres, quienes habitamos este territorio.

Por lo tanto, ahora que están dadas las condiciones para poder
participar directamente de la Asamblea Constituyente y presentar una
propuesta de una nueva Constitución Política, en busca de un nuevo
ESTADO,

Por otra parte existen varias opiniones que pueden respaldar a la


propuesta de cambio; pero también existe desconfianza en algunos
sectores sociales, especialmente sobre la participación en la
Asamblea Constituyente; algunos piensan que solamente cambiando
algunas “leyes” todo estaría resuelto; pero no se trata de esto; sino de
poder definir primero, la visión y el modelo que se propone implantar ,
es decir cual es el paradigma que va guiar en la visión de estado y
encaminar las políticas respecto a los graves problemas sociales,
culturales, económicos y políticos; entonces, la idea es cambiar el
Sistema de la Estructura Política, que tenga un carácter diferente
frente al modelo colonial caduco del liberalismo que rige actualmente
en nuestro país.

Estamos conscientes, que en los últimos tiempos muchos expresaron


el sentir de nuestro pueblo y la necesidad de generar un cambio
estructural en la situación social, económica, política y cultural de
nuestro país. Por eso todos debemos apoyar a la realización de la
Asamblea Nacional Constituyente, la cual permitirá ingresar al
PACHAKUTI en los Andes e implementar una estructura política
propia y un modelo de sociedad diseñado por sus propios actores
sociales.

Entonces, es importante adoptar un esquema y un modelo propio con


características culturales que reflejen las características de las
culturas andinas chaqueñas, amazónicas y de todos los pueblos que
habitan este territorio. Es decir, establecer principios y fundamentos
culturales comunes a todas las culturas, como base y sustentación
filosófica e Ideológica de los pueblos Originarios.

Para efectivizar este propósito es fundamental socializar las


propuestas, en reunión de líderes, seminarios, conferencias y otros
eventos de carácter político. Considerando que los pueblos del
planeta fueron constituidos como Estado a través de la concertación
mayoritaria de sus representantes, conforme a los derechos
socioculturales, económicos y político estableciendo las normas
jurídicas a través de una Constitución Política del Estado.

ANTECEDENTES:

Nuestro pueblo desde miles de años fue establecido como Estado en un espacio
territorial, denominado actualmente los ANDES; pero, desde 1531, el Estado del
Tawantinsuyu y el Qullanasuyu fue invadido por los colonizadores; quienes
usurparon el Poder y se repartieron el territorio denominando a la región del Norte,
Nueva Castilla y al Sur, Nueva Toledo; conocido históricamente como el Virreinato
del Perú y luego Virreinato de la Plata. Después de más de 300 años del periodo
colonial, algunos españoles, particularmente los criollos que no tuvieron
oportunidad de gobernar la colonia se revelaron contra sus reyes y Autoridades
Coloniales.
Después de varios años de lucha fratricida entre españoles y criollos,
Instauran un nuevo Estado de estructura feudal Republicana; lo cual
fue la replica del modelo económico del sistema Feudal y luego
Liberal ambos traídos de Europa; pero es importante enfatizar que los
españoles y criollos, nunca tomaron en cuenta la existencia y la
presencia de los legítimos dueños de este territorio, denominado
Qullanasuyu, menos a sus lideres y representantes de los pueblos
originarios, para la creación y fundación del Estado, denominado
República de Bolivia,.

Cerca de 500 años de resistencia cultural permanente, frente al


sometimiento, a la explotación, a la discriminación social y racial de
parte de los colonizadores, nuestro pueblo; por reivindicar los
derechos sociales, económicos, políticos, culturales de sus habitantes
y por la recuperación de la sociedad de Unidad y Hermandad
Comunitaria, el intento de restaurar el sistema político SUMA
QAMAÑA, a lo largo del tiempo y espacio ha derramado mucha
sangre de origen (aymara-quechua).

Hay tenemos, los levantamientos de 1781 contra la usurpación y


dominación colonial, donde nuestros mártires, Tumasu Katari y
Kurusa Llawi; el apu mallku y apu t’alla, Tupa Katari, Wartulina Sisa y
muchos otros anónimos, quienes ofrendaron sus vidas por reivindicar
sus legítimos derechos socio económicos y político cultural de nuestro
pueblo, posteriormente la insurrección armada de otra generación de
Aymara del Qullanasuyu frente al Estado de la oligarquía criolla;
donde participan, a la cabeza del héroe y mártir Pawlu S. Willka en la
contienda bélica denominada (guerra Federal), enfrentados por
grupos de Intereses Económicos de la oligarquía. Posteriormente en
1915 a 1921, nuestros padres otra vez reivindican el Derecho a la
libre determinación como República del Qullanasuyu, entonces la
propuesta de la Constitución y la Reconstitución del Qullanasuyu no
es casual en nuestro país.

Desde la óptica de los derechos jurídicos constitucionales, las reformas siempre


fueron parciales o parches, Por ejemplo: las reformas realizadas en Bolivia, en los
años 1831, 1938, 1967 y 1994 han sido formales en papeles y nunca fueron
aplicadas; porque, no han sido puesta en vigencia para la estabilidad institucional
del país, menos para el funcionamiento del Estado. Con la Revolución de 1952, el
pueblo había desmantelado al Estado Oligarca de los criollos y entregó el poder
político en bandejas al gobierno del MNR; lamentablemente los intereses
económicos de la oligarquía criolla, de fo rma sistemática penetra al Estado y como
consecuencia, el pueblo sufre golpe tras golpe de Estado, manipulado
precisamente, por intereses de la oligarquía criolla, apoyado por el pentágono y el
imperialismo Norte americano.

La Restauración de la Democracia en el país se establece, por voluntad propia del


pueblo y se instaura el gobierno democrático desde 1982. Después de varios años
de vigencia, el sistema Democrático es manipulado desde el gobierno a gusto y
sabor de los intereses de la oligarquía criolla; Es decir, con el pretexto de
compartir la administración de las empresas Estatales con los transnacionales, los
intereses económicos del pueblo se fueron esfumándose del país.

Es más, con el pretexto de la capitalización, los recursos naturales


renovables y no renovables existentes en el territorio fueron
entregados de nuevo, a los intereses de los monopolios extranjeros y
se establece el modelo de libre mercado y la supuesta eficiencia
administrativa. Sin embargo hay tenemos el resultado del Modelo
económico de libre Mercado, manipulado por Neoliberales y todo fue
fracaso tras fracaso, sin ninguna perspectiva de lograr el desarrollo
socio económico de la sociedad.

Es decir, el sistema Político Económico de libre mercado, actualmente


esta en un periodo agonizante no solo en nuestro país, sino en otros
Estados del continente; porque se agotó todas las recetas y
recomendaciones ideológicas y doctrinales de sus patrones; las
propuestas económicas implementadas por encargo de sus amos del
Imperio del Norte Neoliberal ya no tienen más recetas ni fórmulas
mágicas.

Por todos estos antecedentes que han ocurrido en el país, es fundamental entrar
al diálogo para la reconstitución de un nuevo Estado soberano representado por
las mayorías nacionales, que permita lograr una nueva configuración del territorio;
sin embargo ya existen propuestas con nuevos planteamientos sobre la necesidad
de cambiar la Constitución y la apertura de un largo debate nacional en los
diferentes niveles de instancias, fundamentalmente en la forma de presentar
propuestas de cambio. Para esto es importante y vital la participación en la
Asamblea Constituyente; donde se pueda definir y llegar a la aprobación del
cambio de una nueva Constitución Política para un nuevo Estado.

DIAGNOSTICO:

La actual Constitución, en sus formas estructurales y la Administración tiene


deficiencias en la forma organizativa y funcionamiento del Estado; la falta de
normas fundamentales transparentes de los derechos personales y sociales que
establecen en el País. Otro aspecto fundamental, se considera que el Estado es
único responsable de asumir y regular las normas y otras disposiciones
expresadas en la Constitución, para las acciones u omisiones de las autoridades y
funcionarios, quienes de forma permanente infri ngen a las disposiciones legales
establecidas en el país.

De acuerdo a la actual Constitución Política del Estado, las instituciones ya no


responden a la realidad del contexto sociocultural vigente en el país. Es decir, las
normas de la Constitución no están adecuadas a la realidad de nuestro pueblo.
Porque el Estado criollo desde su fundación no ha tenido la capacidad de resolver
los problemas existentes y hay cuestionamientos muy serios a la administración
del país, de parte de los sectores sociales organizados en el territorio.

Se debe enfatizar que el Estado Boliviano, con una administración


Centralista dio lugar a un desarrollo regional deficiente y
desequilibrado; como consecuencia de este fenómeno surgió los
Movimientos Sociales y Populares, quienes plantearon una nueva
reforma constitucional; asimismo, en los últimos tiempos el Estado
pierde la soberanía por la ineficiencia administrativa, como efecto de
la imposición y la presión del FMI, BM y los dictados del Imperio del
Norte. Quienes, en los últimos tiempos con el pretexto de salvar la
situación de la Crisis Económica, implementaron el denominado
(nuevo orden económico de libre mercado) y la globalización;
supuestamente para modernizar al Estado y a la sociedad, los
resultados fueron todo un engaño para la mayoría del país; asimismo
quienes administran el Estado Boliviano fueron catalogados como los
Subcampeones de la Corrupción y la economía del país hoy se
encuentra en una quiebra total.
Otro de los aspectos fundamentales; para la División Política del Estado Boliviano
no se tomaron en cuenta la realidad sociocultural del pueblo; es decir, dividieron el
territorio en departamentos, provincias, secciones y cantones de forma arbitraria,
desconociendo la conformación de los núcleos socio-territoriales, como son los
asentamientos milenarios de las comunidades originarias que corresponde a los
pueblos (indígenas) y no han estado incluidos ni fueron parte de la estructura
jurídico-política del Estado Republicano criollo; para constancia, los pueblos
originarios nunca administraron siquiera un municipio hasta antes del 92, ni fueron
parte del gobierno de turno.

En los programas, proyectos y en la planificación centralizada, nunca tuvieron una


lectura adecuada de la realidad de la población nacional, por consiguiente este ha
generado el uso irracional de los recursos económico-financieros y humanos; por
otra, con la explotación irracional de los recursos naturales, cuyo resultado es una
injusticia y una anarquía de quienes manejan las instituciones del Estado para el
desarrollo de las regiones. Clasificando en departamentos de primera, como Santa
Cruz y La Paz; de segunda, como Cochabamba y Beni; quedando el resto
marginado, como Pando, Tarija, Chuquisaca, Oruro y Potosí; estos dos últimos,
por mucho tiempo fueron el sostén para el desarrollo económico de Bolivia,
actualmente se encuentran en el olvido y marginamiento, con un elevado índice de
extrema pobreza e de indigencia de sus habitantes.

Otro de los resultados de este fenómeno, es la clasificación social de primera, de


quienes habitan en los centros urbanos y la segunda que habitan en los barrios
periféricos y la tercera los que habitan marginado en el área rural; considerando
que el centralismo democrático no funciona y es meramente formal, otorgado
como legal. Pero no la legitimidad de sus representantes, este ha motivado en los
sectores sociales que no se sienten expresados por el Estado Boliviano, ni son
representados en el sistema administrativo del gobierno central.

Haciendo un análisis del significado “pueblo”, es la expresión legítima de las


mayorías nacionales que nunca ha sido tomado en cuenta por los gobernantes de
turno; porque es un tema, que en Bolivia nunca fue considerada en su verdadera
magnitud. Por otra, con la representación en el parlamento o con la asignación de
algún cargo público, solamente fueron utilizados por las instancias orgánicas del
sistema gubernamental, para luego ordenar y hacer imposiciones o decisiones;
desconociendo los criterios, la opinión y el derecho jurídico de las mayorías
nacionales.

El pueblo se convierte como el principal protagonista y es un sujeto pasivo del


sistema democrático; es decir, se convierte simplemente en un elector, que al final
coloca su voto, pero no elige ni otorga el mandato. Sin embargo, los elegidos han
asumido puestos y tareas para mejorar la situación socio económico de las
regiones; considerando que la soberanía esta en el pueblo, pero: “el pueblo no
delibera ni gobierna, sino por medio de sus representantes y de las autoridades
creadas y asignadas en los cargos por ley”, Art. 4 de la Constitución vigente.
Entonces, de hecho se elimina la participación efectiva y real del pueblo, porque
no tiene ninguna posibilidad de ejercer el Poder y es anulado o no se toma en
cuenta sus propuestas, para la fiscalización, el control y el seguimiento de los
representantes elegidos en el ámbito regional y nacional.

Con la reforma Constitucional de 1994, se modificó el sistema electoral de los


diputados, para que el 50% de los candidatos puedan ser elegidos mediante las
circunscripciones uninominales; entonces, la representación de los electores no se
puede garantizar, porque las coaliciones partidarias en la Cámara Legislativa sólo
han buscado asegurar la “gobernabilidad” a través del denominado, “rodillo
parlamentario”; entonces, los resultados del voto mayoritario no se considera
nunca más y la oposición es marginada; por lo que, no es posible lograr una
concertación política de consenso en el Parlamento.

La forma del gobierno democrático-representativo del Estado Boliviano, es una de


las características que no podrá definir y superar las deficiencias administrativas,
porque la estructura socio política y la Constitución establece así; sin embargo, en
el país habita una diversidad de pueblos originarios, lo cual no se refleja en la
constitución del Estado boliviano; con la forma de gobierno unitario implica un
mecanismo de uniforme para la elección de autoridades políticas, cuando en la
práctica existen diferentes formas procedimentales de elegir, especialmente en los
pueblos y culturas que habitan en el territorio. Para comprender mejor, en el caso
particular de la elección de autoridades originarias del área andina; hasta ahora
son considerados como “gobiernos locales”, los cuales tienen la semejanza con la
democracia directa y participativa de sus habitantes.

Los programas de desarrollo propuestos por las instancias oficiales no expresa a


la diversidad lingüística y cultural del nuestro país, en 179 años de vida
Republicana ni siquiera han podido comprender las expresiones del pueblo y la
situación pluricultural del país, permite reconocer la coexistencia entre las diversas
cosmovisiones de los pueblos y las distintas migraciones que habitan en el
territorio; es decir, el encuentro entre unos y otros. Este debería ser la propuesta
de una nueva Constitución que exprese formalmente esa realidad del país.

Sin embargo, existen contradicciones con la realidad política vigente en el país,


que nunca se inspiraron en el espíritu comunitario de hermandad, las mismas que
han sido extremadamente vulnerados por el sistema occidental imperante. Por eso
se enfatiza, que actualmente el Estado Boliviano esta en pleno proceso de
descentralización político - administrativa, a través de normas legales, como la Ley
de Participación Popular, la Reforma Educativa, Ley UPA’s, la Descentralización
Administrativa y otros; pero en el texto constitucional sigue definiendo la forma de
Estado Unitario que ha perdido toda perspectiva de eficiencia administrativa.

Porque el planteamiento, es una reforma superficial que refleja otro parche más,
sin embargo el pueblo exige hacer un cambio estructural en todas las instancias
orgánicas del Estado; es decir, el planteamiento es realizar un Pachakuti en el
ámbito geográfico, considerando que el país no es homogéneo y hay condiciones
espirituales y materiales colectivas como en la época del Tawantinsuyu; lo cual
está vigente hasta ahora, en la denominada era de la modernidad; además están
vivo las expresiones socioculturales en los diferentes pisos ecológicos y pueblos
que habitan el territorio nacional.

En los últimos tiempos con la propuesta del «Plan Bolivia», para muchos ha
terminado en una esperanza de un posible cambio institucional, a través de la
Constituyente; quienes sostienen él «Plan Bolivia», dicen: Que la constitución sólo
tiene posibilidades de hacer una reforma y en el marco de ella el Referéndum y no
la Constituyente; sin embargo, como un Estado independiente, soberano, libre y
con la voluntad soberana de sus habitantes, podemos definir y determinar,
conforme a los intereses de la población mayoritaria de nuestro país.

La “Independencia nacional” ni la Revolución Nacional, fueron los motores de


cambio social en el sentido amplio, más bien, han sistematizado y profundizado la
herencia colonial con la discriminación y la exclusión social. Ese el modelo Estatal
Constituido en (1825) y es de carácter ineficiente para un nuevo orden social del
país; por eso considero, el cumplimiento de su ciclo vital histórico y es inevitable el
camino de un nuevo paradigma, el desarrollo y la integración de los pueblos, los
cuales permitan promover el proceso de cambio para una nueva estructura política
administrativa y social; esto implica situar en una nueva realidad del orden jurídico
legal, en la perspectiva de buscar y lograr una mayor eficiencia Institucional y
administrativo del Estado nacional.

Para hacer más eficiente a la sociedad es imprescindible cambiar sus principales


normas, como es la (C. P. E.) lo cual permitirá la participación del 80 % de la
población de origen aymara -quechua y otros pueblos hermanos que habitan en el
territorio; sin embargo, estamos fuera del marco jurídico, político y económico, lo
que genera la inestabilidad en el bienestar social del país.

Desde la óptica de los valores del ser humano, la propuesta de la Constituyente


deberá hacer un análisis teórico del Derecho, conforme al avance tecnológico y
científico, por eso es importante mencionar sobre el planteamiento de la propuesta
de cambio, lo fue se enmarcado hacia un referéndum popular; lo cual es
considerada, como un deber ineludible de las instituciones del Estado, para
generar el proceso de cambio sustancial en el país; de la misma forma, con la
realización de la consulta popular, los Poderes Legislativo y Ejecutivo deberán
acatar el mandato del pueblo para su inmediato promulgación.

“ Por lo que es importante describir que la Constituyente tiene origen en el


Derecho Continental Europeo (Civil Law, Derecho francés) tiene como fundamento
el derecho de la praxis político y el Referéndum tiene origen en el Derecho inglés
(Common Law), es un mecanismo positivazo de consulta sobre temas de interés
general; estas normas no tiene ninguna compatibilidad en nuestro pueblo, sin
embargo la actual Constitución boliviana para su reforma está fundamentada en el
órgano denominado, (congreso legislativo) establecido en el (Art. 230). Por tanto,
la estructura tiene una concepción ideológica kelseniana, con fundamentos que
resulta una norma hipotética, que sólo tiene una justificación política y no jurídica.
La posición, que el propio Kelsen ha reconocido y rectifica en su obra, Teoría del
Derecho y del Estado (1947)” (F. Wanka, 2002). Para constancia y de acuerdo a
los analistas políticos, estos ejemplos muy poco o nada sirven para establecer un
nuevo ordenamiento jurídico y político para nuestro país.

JUSTIFICACION:

Nuestro pueblo, desde miles de años antes de la llegada de los españoles, fue establecido como
Estado en (Tiwanaku) de los Qullanas y el Tawantinsuyu en la región denominada los andes;
luego de mas de 300 años del poder Colonial, la situación de nuestro pueblo pasó a otras
instancias de poder. Este se llama el periodo Republicano, donde los criollos y españoles a
título de libre y soberano han continuado con la opresión y sometimiento cruel a nuestro
pueblo.

Es decir, nuestros antepasados desde el principio de la colonización pasaron de la


derrota a la resistencia cultural permanente. Durante la republica se intensificó la
resistencia con mayor fuerza, pero siempre fuimos derrotados por la oligarquía
criolla en función de Gobierno. Por eso es importante analizar y discutir sobre la
situación socioeconómica y político cultural, para definir la suerte y el destino de
nuestro país; considerando que nuestro pueblo siempre fue objeto de mentiras y
engaños; la calumnia y el crimen; por otra parte, estos bandidos continuaron
con el saqueo de las riquezas existentes en nuestro territorio; como el oro, la plata,
el estaño, la madera, piedras preciosas, el petróleo, el litio y ahora el gas.

El resultado de la administración de los Q’aras ha sido, fracaso tras fracaso en


todo el periodo republicano, hoy el país se encuentra en una situación desastrosa
y el pueblo mayoritario de los aymara-quechua y otros hermanos del oriente, viven
en condiciones de extrema pobreza; es decir, actualmente el país vive pidiendo
limosna y es una vergüenza para nuestro pueblo frente a otros países.

Por eso debemos preguntarnos, como es posible teniendo tantas riquezas en el


territorio, podemos vivir pidiendo limosna; este parece absurdo y muy ridículo; sin
embargo, muchas personas todavía creen y continúan confiando a los mentirosos
y ladrones de siempre; es hora de reflexionar y tomar decisiones políticas, asumir
responsabilidades históricas, para enfrentar a las tantas problemas ocasionados
por la oligarquía criolla y originado los daños económicos y sociales por el sistema
neoliberal y sus sirvientes del imperialismo.

Por todas estas consideraciones, el problema del país no se reduce a un simple


cuestionamiento de la legalidad institucional administrativa; sino, penetra en el
pensamiento ideológico expresada en una posición filosófica; asimismo se plantea
una participación efectiva en el diseño de las instancias del pueblo, de quienes
habitan en el país. Por otra, existe otro factor, el contrato social de 1825 que no
tiene un consenso efectivo de los actores sociales del país, (p. e.) Es decir, no
recoge las legítimas aspiraciones de los Pueblos Originarios (indígenas) y su
participación en la distribución de las riquezas del territorio y el poder, este es el
factor principal del problema, por eso existe los enfrentamientos de los sectores
sociales y los actores del poder político están sujetos a una Constitución de la
naturaleza existente que no tiene plena eficacia.

Para comprender, la Constitución de 1825 no es de consenso general, por eso la


regla institucional ha generado excesivos beneficios para unos pocos y para las
mayorías casi nada; sólo en esa dimensión es comprensible la lucha por los
derechos de las mayorías aymara-quechuas, guaraníes y otros (...), cuya acción
ha reflejado en la última elección que no es nada casual. Entonces, está
comprobado que el manejo del sistema político durante 179 años de vida
republicana, ha sido un fracaso total; porque, los instrumentos jurídicos fueron de
carácter excluyente y de dominación vertical; por eso se propone, la realización de
la Asamblea Constituyente, considerando que el país está conformado por
diferentes pueblos y somos un Estado pluricultural y plurilingüe; asimismo, existen
otras razones de orden interno e externo que permite argumentar el cambio de
una nueva Constitución Política para un nuevo Estado, a través de una Asamblea
Nacional Constituyente.
Otro de los aspectos fundamentales que atinge a nuestro país, es que la decisión
del poder que tiene el pueblo, queda como una última instancia; el Referéndum, es
un sujeto pasivo de la soberanía popular y el ejercicio del poder es un mero
discurso; en consecuencia, el pueblo apenas puede delegar sus representantes a
través de las elecciones para el ejercicio y la soberanía plena en los órganos de
poder, lo cual es condicionado por los partidos políticos tradicionales, quienes
están en el ejercicio del poder.

Por otra parte, la hegemonía de la religión cristiana y sus ramificaciones sectarias


han sido legitimadas, como religión oficial; con el propósito de mantener la
hegemonía y el dominio total a los habitantes de nuestro pueblo; sin embargo,
existen propuestas concretas de parte de los pueblos originarios, para dinamizar el
desarrollo sociocultural en torno a la unidad y hermandad comunitaria, de quienes
habitan en la diversidad geográfica y ecológica del territorio. Por todo lo expuesto,
queda abierto el tema para sostener debates y generar nuevas propuestas con
nuevas iniciativas para el cambio y que permitan concertar el tema en cuestión.

Asimismo, se enfatiza que actualmente se desconocen a los pueblos originarios


(indígenas) quienes están respaldados jurídicamente como es, la declaración del
Convenio 169 de la OIT, donde define claramente sobre la forma de los usos y
costumbres, ESPIRITUALES y también en los derechos fundamentales de la
persona, la sociedad y otros aspectos que están relacionados con los Derechos
Humanos.

Se dice que estamos en la era de una nueva civilización; donde surgen nuevos
cambios en el planeta; como la globalización, internacionalización de los Derechos
Humanos, la exigencia de una administración económica y social con mayor
eficiencia, la adscripción y sujeción de los Estados a organismos internacionales
(ONU, OEA, OIT, FMI y otros) en los distintos niveles y contextos, donde se
plantean cambios para alcanzar niveles de exigencia y lograr eficiencia.
Por toda estas consideraciones, ratificamos que los Aymara -quechuas y otros
pueblos hermanos quienes habitan en el territorio, constituyen como la primera
fuerza social del país, esta es la razón fundamental para reivindicar nuestros
legítimos derechos sociales, económicos, políticos y culturales, enmarcado en el
convenio 169 de la OIT y ratificado en Bolivia, por el Honorable Congreso Nacional
al rango de Ley de República N° 1257, el Art. 171 de la Constitución Política del
Estado, donde menciona el derecho y el ejercicio pleno de las autoridades
originarias; por consiguiente, los pueblos originarios tenemos la posibilidad de
reconstituir las instancias orgánicas del poder, lo cual nos permitirá construir un
nuevo orden jurídico y un modelo de sociedad con una estructura de poder a la
imagen y semejanza de los pueblos originarios.

En consecuencia los aymara-quechua y otros pueblos originarios, hasta la


actualidad no se sienten representados en el contenido de la Constitución Política
del Estado vigente. Por otra, los gobernantes del Estado Oligarca boliviano ha
quebrado su poder por su carácter obsoleto y no existe remedio alguno;
actualmente, se encuentra en una situación de moribundo; la Economía capitalista
de libre mercado no tiene capacidad de competir en nuestro país y esta muy débil,
el presupuesto del capital financiero extranjero ha generado en el país, más
pobreza y hay hambre, miseria por doquier; otro de los factores que afecta a
nuestro país, es consecuencia de la deuda externa, casi imposible de pagar, que
alcanza el 13.6 % del presupuesto anual del Estado.

Todo estos elementos tienen relevancia para la actual Constitución Política del
Estado y que justifican plenamente para la propuesta de una CPE y un nuevo
Estado; la misma deberá ser considerado, fundamentalmente en el aspecto
sociocultural, en lo que concierne especialmente para una organización adecuada
del territorio, el ecosistema, la biodiversidad, los derechos comunitarios y otros
aspectos latentes que han surgido para la propuesta de cambio y que permita el
avance de la ciencia, la tecnología y el desarrollo socio económico del país.

QUE ES LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE:

La Asamblea Constituyente es una instancia suprema, donde los representantes


deliberan y deciden, tiene la facultad de definir los destinos de la sociedad; es
decir, tienen el Poder soberano para determinar la forma y modo de la estructura
política, organización jurídica y el modelo del sistema económico de la sociedad.
Es la instancia que determina el mecanismo, para dar garantía a una convivencia
pacifica entre los habitantes que moran el territorio; lo cual deberá ser expresado
en una nueva Constitución Política del Estado. Entonces, para la conformación de
la Asamblea Constituyente, las regiones organizadas de la sociedad, elegirán a
sus representantes. Estos ciudadanos se reunirán en la Asamblea, por un periodo
aproximado de uno a dos años; durante ese periodo deberán cumplir sus
funciones asignados, conforme determina la última Constitución Político del
Estado Boliviano.
Sin embargo, debo considerar que la propuesta para la Asamblea
Constituyente se ha logrado a duras penas, después de un largo
periodo de lucha constante del pueblo, contra el régimen imperante y
la partidocracia disfrazada por Democracia, donde los grupos que
representan a la oligarquía criolla del poder económico y político,
manejaron al país de forma arbitraria; por consiguiente y gracias a la
demanda generalizada en el país.

Entonces, con la reformulación del Art. 4 de la Constitución Política


del Estado, fue consolidado el 20 febrero pasado, para que en el país
se conforme y se realice la Asamblea, pero es importante considerar
que no es gratuito, ni es producto de la reflexión de los políticos de
turno, mas al contrario, es el resultado y fruto de las permanentes
luchas de nuestro pueblo, articulados en las organizaciones sociales,
donde nuestros hermanos de sangre a lo largo del tiempo y espacio,
por reivindicar los legítimos derechos, quienes ofrendaron sus vidas
para la toma de decisiones políticas y el destino de nuestro país.

De todas maneras se dio el primer paso, ahora los pueblos originarios


tenemos una oportunidad de participar en la Asamblea Constituyente;
este instrumento legal nos permitirá redefinir el destino de nuestro
país, conforme a los intereses de las mayorías nacionales que
habitan en el territorio.

En la Asamblea Constituyente, estamos obligados a debatir todos


sobre nuestros intereses político administrativo y no dejar que solo los
intelectuales y políticos de la oligarquía sean los encargados en la
definición de lineamientos programáticos y el funcionamiento de esa
instancia suprema. Es decir, quienes participarán en la Asamblea
Constituyente, como serán elegidos y a quienes representarán.

Asimismo en el proceso y el desarrollo de la Asamblea Constituyente,


los miembros tendrán la tarea suprema de elaborar, proponer,
discutir, concertar y aprobar la nueva Constitución Política, para un
nuevo Estado soberano y libre, que responda a las necesidades
reales del país, que determine la forma de la organización y la
estructura de un nuevo MODELO, que permita resolver los problemas
socio económicos, políticos y culturales del pueblo; los mecanismos y
la forma de gobernar, que sea el instrumento jurídico eficientes, que
pueda promover el desarrollo sostenible en el territorio; asimismo,
para sancionar a los infractores y delincuentes que tanto daño hace a
los habitantes de nuestro país.

PARA QUE ES LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE:

Es fundamental analizar y considerar de donde y como se han originado los


problemas sociales, económicos, culturales y políticos; como debemos resolver y
satisfacer a las necesidades de las mayorías del pueblo; entonces es hora de
presentar propuestas, frente a los problemas o esperar que otros intereses
piensen y jueguen con el destino de nuestro país; es decir, hay tenemos un
desafío frente a una infinidad de problemas; como la migración, por causa de la
desertificación y la sequía en los andes, la falta de trabajo y sus ingresos
económicos, la carencia de apoyo efectivo de parte de las instancias del gobierno
en las comunidades y barrios, la ausencia total de programas de desarrollo
estratégicos en las regiones y otros factores que determinan a la insatisfacción y la
falta de sustento económico familiar y social de nuestro país.

En consecuencia, todos los habitantes deberán reflexionar y comprender que hay


la necesidad de generar el cambio estructural de nuestro país; asimismo, algunas
instituciones y personalidades están elaborando propuestas, las mismas puedan
ser socializadas y que nos permitan viabilizar el proceso de cambio. Para esto, las
entidades orgánicas legalmente establecidas deberán representar a través de sus
líderes, quienes puedan desarrollar programas de acciones para iniciar el proceso
de cambio cualitativo y cuantitativo; gene rar en el pueblo una sola propuesta, con
una sola opción política de todas las organizaciones e instituciones de todo el
país, que nos permita definir el destino de nuestro pueblo.

Se entiende como representantes de las entidades orgánicas legales constituidos,


como las Markas y sus ayllus, los barrios populares, los municipios rurales; estas
deberán estar apoyado por intelectuales aymara-quechua; todos ellos organizados
deberán asumir el papel de actores sociales, que tengan un solo discurso de
propuesta para el cambio del sistema político de nuestro país; en lo posible buscar
mecanismos para la participación mayoritaria aymara-quechua y otros pueblos
originarios, que tengan criterios políticos de formación y que sean definidos en su
posesión Ideológica y Filosófica, que tenga una visión clara sobre su Identidad
socio cultural, solamente ellos podrán entrar en las acciones de debate político, la
forma de organización y la metodología de trabajo a desarrollar.

La participación de los habitantes de origen deberá ser efectiva, con esfuerzo y la


voluntad mayoritaria del pueblo, será viabilizado el proceso de concientización y
concertación con la oposición. Entonces, los actores sociales emprenderán tareas
más complicadas, donde deberán proponer estrategias de soluciones definitivas
frente a la situación decadente del sistema político administrativo tradicional
vigente y caduco.

Por las funestas consecuencias que ha dejado el sistema liberal y como herencia
colonial, el actual modelo Neoliberal ya no tiene mas cabida en nuestro país; que
solamente, generó y multiplicó conflictos socio económicos y territoriales, esto
significa que ha fenecido el ciclo de vida del sistema individualista y egoísta del
occidente; por consiguiente, todos las personas que sentimos la paciencia y el
sufrimiento del pueblo debemos hacer aporte para sepultar el esquema occidental.

Por todas estas consideraciones, en nuestro país existe la necesidad de una convocatoria y
realizar la Asamblea Constituyente, donde los sujetos deberán representar con su
participación en la mencionada instancia orgánica y deliberante; quienes deberán realizar
actividades con propuestas concretas por un determinado periodo, que viabilicen la definición
de nuestro país y el destino de nuestras culturas; es más, los miembros y representantes de la
Asamblea Constituyente, deberán recoger y considerar las propuestas presentada por las
entidades orgánicas.

Deberá ser priorizado el contenido de los documentos, siempre que exprese los sentimientos
éticos morales y la forma de la estructura política de los pueblos originarios; asimismo,
deberán elaborar y establecer normas orgánicas para regular la estructura del sistema
jurídico -política del nuevo Estado, determinando el carácter y la forma de Gobierno, los
Órganos de Poderes, así como las atribuciones y funciones de dichos Órganos de Poderes para
los diferentes niveles institucionales del nuevo Estado.

POSTULANTES: Las autoridades actuales del Estado, deberían establecer como


requisito principal para los postulantes a la Asamblea Constituyente, saber leer,
escribir y hablar correctamente uno de las lenguas originarias de la región al que
corresponde y el castellano; entonces, este se entiende que la persona esta
identificado con su lengua y su cultura. Quien será la representación genuina y
legitima de su pueblo, por sus DERECHOS ; es decir, estaría cumpliendo los
preceptos estipulados en el Convenio 169 de la OIT y en el Art. 171 de la C. P. E.
vigente y otras normas jurídicas de nivel Nacional e Internacional.

Por consiguiente es importante preservar los DERECHOS de pueblos Originarios


(indígenas) los cuales están enmarcados en los instrumentos jurídicos nacionales
e internacionales, solamente, así podremos reivindicar nuestros legítimos
derechos para definir el desti no de nuestro país, que tanto tiempo, nuestros
antepasados habían soñado recuperar el PODER y el TERRITORIO. Usurpado
por otros intereses sociales ajenos a los pueblos originarios; durante, cerca de 500
años afectados con el dogma cristiana y la aculturación occidental; en
consecuencia los aymara -quechua, guarani y otros hermanos del oriente,
debemos participar activamente en la Asamblea Constituyente.

Exigimos que nos comprendan, porque nuestro el propósito es compartir la vida en


un ambiente de armonía comunitaria; construir una nueva sociedad más humana,
donde los hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades y sus derechos
sean tan iguales; entonces para esto proponemos instaurar normas de la doctrina
cósmica, (pacha) como es la expresión de los principios de RECIPROCIDAD,
COMPLEMENTARIEDAD, EQUILIBRIO Y ROTACION, donde todos lo seres
humanos tengan el mismo trato humano de Unidad y Hermandad comunitaria,
conforme a los avances tecnológicos y científicos de nuestro planeta (akapacha).

PARTICIPANTES: Considerando que la población de nuestro país, actualmente


se encuentra confundido ante los problemas surgidos en los últimos tiempos y el
anuncio de la Asamblea Constituyente por los medios de comunicación, sin
embargo muchos se preguntan como será la representación de los participantes
en la Asamblea Constituyente, particularmente las mayorías nacionales, como las
minorías del país. Sin embargo es una preocupación, para quienes sienten sobre
la situación y el sufrimiento de nuestros hermanos que habitan en el territorio.

La Asamblea Nacional Constituyente será el órgano deliberante y determinante,


donde los representantes definirán y determinarán el derecho para el desarrollo
social, económico, político y cultural de los pueblos que habitan en el territorio
nacional.

Algunas instituciones del Estado y personalidades entendidas en materia Política


ya tienen criterios definidos sobre la participación de los ciudadanos en la
Asamblea Constituyente. Sin embargo la propuesta de la Asamblea Constituyente
se viene discutiendo en el Poder Legislativo; especialmente, sobre la forma y el
número de participantes; mientras la representación de la oligarquía criolla, cada
vez más está aferrando en su conducta participativa para la mencionada instancia
deliberante.

Hasta ahora existen varias propuestas y posiciones sobre la


participación en la Asamblea Constituyente; entre ellos, la
representación de la Oligarquía propone que la Participación debe ser
representada por Departamentos; otros dicen, que la representación
debería ser por Circunscripciones Uninominales, otras entidades
proponen que la representación sea por Sectores Sociales.

La propuesta uno, dos y tres tienen una apariencia prudente y


aceptable, sin embargo para quienes tienen criterios más coherentes
y velando los DERECHOS e intereses socioculturales, hay un peligro
eminente la de perder todos los derechos sociales, económicos,
políticos y culturales de los pueblos originarios de nuestro país.

Primero: la representación por Departamentos solamente tendrán mayor opción


los citadinos que habitan en las ciudades, ya sea en forma orgánica o por
recomendación partidaria o institucional, considerando que estos tienen más
ventajas en el apoyo, especialmente aquellos que tienen afinidad o compromiso
con los partidos de representación oligarca que pueden condicionar bajo criterios
de intereses económicos de grupo.

Segundo: la representación por Circunscripciones Uninominales, será digitada por


encargo de algunos partidos y fácil manipulación, ajeno a los intereses de los
pueblos originarios y regionales; este puede representar por recomendación de
alguna organización sectaria y condicionado; por otra, si la representación es de
origen aymara-quechua, estaría quebrantando los Derechos legítimos de los
pueblos originarios.

Tercero: la representación por Sectores Sociales, para quienes sostienen esta


propuesta, parece que estuviera bien; porque, supuestamente representarán los
sectores sociales, como los Campesinos, Gremiales, Artesanos, Mineros,
Agricultores, Ganaderos, Militares, Profesionales, Curas, Pastores evangélicos, las
ONGs, Empleados, Comerciantes, Estudiantes, Amas de casa, Magisterio Urbano
y Rural, Juntas vecinales, Comités Cívicos etc. Sin embargo esta representación
implicaría a generar un caos institucional, donde las propuestas y consideraciones
no tendrían éxito en las deliberaciones, menos en las decisiones y definiciones
políticas del país.

Cuarto: la representación sería, la UNIDAD de los cuatro AREAS LINGÜÍSTICA


TERRITORIAL ORGANIZADO por Circunscripciones. Es decir, la distribución
de los representantes deberá ser conforme a las cifras estadísticas del último
censo realizado por el INE y deberá reflejar por área territorial de un determinado
idioma (lengua) originaria predominante regional, como ser: El aymara-bilingüe, el
quechua-bilingüe, el guarani-chiquitano bilingüe y el moxeño-amazónico bilingüe.
Para garantizar la Asamblea Constituyente y para la participación de los pueblos
Originarios, se propone realizar un evento Nacional de carácter UNITARIO de
todas las Organizaciones sociales y populares del país, antes de la emisión de la
CONVOCATORIA. Es decir, la propuesta es participar en forma orgánica de los
representantes al denominado: PRIMER CONGRESO NACIONAL DE PUEBLOS
ORIGINARIOS del país; en este evento Nacional sería discutido y aprobado el
documento único, lo cual permitirá llevar a nuestros representantes una sola
Propuesta política y tener un solo Discurso como la representación del sector
mayoritario, en la Asamblea Constituyente.

Para la conformación de la Asamblea Constituyente, es necesario determinar el


número de los miembros, conforme a los datos Estadísticos del Censo de
Población y Vivienda, realizado en el año 2001, por el Instituto Nacional de
Estadística (INE), considerando que la cifra oficial alcanza a 8’274.325 habitantes
del país; por lo que es importante considerar realmente cuantos miembros sería la
conformación de la Asamblea Constituyente.

De acuerdo a las cifras de la población que determina el Instituto Nacional de


Estadística INE, los pueblos originarios se han reducido al 62 % y la población
inmigrante creció al 38 %; de los cuales deberán ser distribuidos conforme a las
características de Identidad étnico cultural de las regiones y la población de las
circunscripciones. Considerando que la conformación del Congreso Legislativo del
País es de 130 personas entre Diputados y Senadores; entonces, para la
conformación de la Asamblea Constituyente debería constituirse el mismo número,
con la representación de 130 personas.

La población inmigrante (área urbana) debería representar con 38 personas y los


pueblos originarios del país deberá representar con 92 personas; quienes serían
distribuidos de la siguiente manera: los qhishwa -aymara en un número de 56
personas, los guaranies 2 personas, los chiquitanos otras 2 personas; los
moxeños con 1 persona y otros pueblos menores con 30 personas; totales para la
Asamblea Constituyente se hacen los 130 personas.

Finalmente, conforme a las normas establecidas en el país, la Corte Nacional


Electoral, CNE; será la instancia del Estado, quien deberá CONVOCAR a la
conformación de la Asamblea Constituyente.
CONFORMACION DE EL ASAMBLEA CONSTIRUYENTE
Pobl ación tot al de Boliv ia e s de 8’2 74. 325 hb t.

N° PUEBLOS QUE HABITAN EL MAYORÍA MINORÍA


PAIS
1 Qhishwas 31 % 31 representantes
2 Aymara 25 % 25 representantes
3 Guarani 02 % 2 representantes
4 Chiquitano 02 % 2 representantes
5 Mojeño 01 % 1 representante
30 Pueblos INDÍGENAS menores 30 representantes
Total De Pueblos originarios el 62 % 92 representantes
Por minoría no originaria 16 representantes
Total De Población no originaria 38 % 38 representantes
TOTAL DE MIEMBROS 146 representantes

BASE DE DATOS
(Según el Censo de Población y Vivienda del 2001 realizado por INE)
Quechua
31% Población no
originaria 38%

Otros Pueblos Originarios


1Mojeño 1% 1%
Guaraní
Aymará %
Chiquitano
2%
25% 2%
3.5 COMO OPTIMIZAR LA CONSTITUYENTE. UN ENFOQUE DESDE EL ANALISIS
ECONÓMICO
Félix Huanca Ayaviri 2

1. INTRODUCCIÓN

Entiendo que es posible analizar el papel de la futura Constituyente desde


distintas perspectivas analíticas, esto es, positivismo jurídico, ciencia política,
sociología, antropología y otros. La perspectiva que se presenta aquí puede ser
calificada de economicista; pero, por razones de tiempo intentaré ana lizar desde el
análisis económico del Derecho, para la que asumo todas las debilidades que
pueda tener esta propuesta.

Analizar la Constitución desde el enfoque económico es entrar en un mundo


escasamente explorado, aun siendo optimista, sólo encontraremos alguna
literatura sobre la llamada Análisis Económico Constitucional y su expansión
actual en las políticas públicas. A menudo las investigaciones desde el enfoque
jurídico han tenido como norte el análisis de la Constitución desde la perspectiva
del formalismo-legal o Ciencia jurídica tradicional, definida en dogmas de difícil
explicación, que terminan en la supremacía constitucional.

Parte del trasfondo de este análisis viene dada por las escasas exploraciones
existentes sobre la Constitución, que no se reduzca únicamente en el análisis de
la supremacía constitucional, sino sea capaz de brindar una explicación de las
influencias que producen en los agentes una determinada estructura y contenido
constitucional. De ahí que, por limitaciones de tiempo y espacio ? que
inevitablemente complotan? el objetivo de este análisis se reduce al análisis de la
formación de la Constituyente, pero cuya teoría analítica puede extrapolarse al
análisis del conjunto de la futura Constitución.

De inicio conviene precisar que el término Economía Constitucional (Economía


Política Constitucional), fue introducido en los años sesenta y posteriores para
definir y clasificar una peculiar rama de investigación y de razonamiento político
(BUCHANAN, 1987. p. 11). El tema no es nuevo y se podría argumentar que está
estrechamente relacionada con los trabajos de Adam SMITH y de los economistas
clásicos3. El análisis económico constitucional «intenta explicar las características
2
Félix Huanta Ayaviri, es profesor de Sociología General y Sociología del Derecho de la
Universidad Mayor de San Andrés de La Paz (Bolivia).
3
El análisis económico ortodoxo, al contrario del análisis de la Economía constitucional, «... intenta
explicar las elecciones adoptadas por los agentes económicos, sus interrelaciones de unos con
otros, y los resultados de esas interacciones, dentro de la estructura constitucional (legal-
institucional) del estado existente. Las consideraciones normativas se introducen a través de los
criterios de eficiencia de la economía de bienestar, y las opciones políticas en términos de esos
criterios. El analista de la política, fundado en el análisis (económico), presenta sus resultados, ya
sea explícita o implícitamente, a los responsables de adoptar las decisiones políticas quienes
entonces adoptan algún tipo de elección entre el conjunto de alternativas disponibles»
BUCHANAN, James; Economía política constitucional. Conferencia en la Universidad de Valladolid,
1987.
del funcionamiento de conjuntos alternativos de reglas legales institucionales -
constitucionales que constriñen las elecciones y actividades de los agentes
económicos y políticos, las reglas que definen el marco en el que se realizan las
elecciones ordinarias de los agentes económicos y políticos» 4. Se puede decir,
que la economía constitucional cubre un nivel de investigación más elevado que la
economía ortodoxa, las consideraciones normativas introducen de forma más
compleja que a través de los sencillos criterios de eficiencia. Como afirma el
profesor BUCHANAN los conjuntos alternativos de reglas deben ser valorados en
cierto sentido de forma análoga a la ordenación de las opciones políticas dentro de
una estructura institucional específica, pero el contenido epistemológico de los
criterios de «eficiencia» queda más al descubierto.

Uno de los objetivos obvios de los clásicos de la economía política era el ofrecer
una explicación y un entendimiento de cómo funcionan los mercados sin una
especificada dirección política. La economía neoclásica continúa verdaderamente
la tradición clásica. El análisis básico de los clásicos en torno al funcionamiento de
los mercados sólo constituía un paso necesario hacia el más amplio fin de todo el
ejercicio intelectual, que no era otro que el de demostrar que, precisamente
porque los mercados funcionan con una permisible eficiencia autónomamente de
cualquier dirigismo político, existe un poderoso argumento normativo a favor de
una estructura constitucional.

Se puede decir que en su sentido original, la economía constitucio nal examina la


elección de limitaciones como opuesto a la elección dentro de las limitaciones. El
objetivo último del análisis es la elección entre las instituciones dentro de las que
actúan los agentes políticos. La predicción del comportamiento de estos agentes
queda incorporada al análisis de los conjuntos de limitaciones alternativas. Entre
algunas proposiciones analíticas la llamada economía constitucional explora la
elección de las limitaciones y las acciones de los agentes que actúan dentro de
esas restricciones institucionales. Así desde esta perspectiva se instituye «que las
reformas deben dirigirse hacia los cambios de las normas que rigen la toma de
decisiones en vez de dirigirse hacia la modificación de los previsibles resultados
derivados del comportamiento de los actores» (BUCHANAN, 1987).

El supuesto del que debemos partir es que, existe al menos una fuerte hipótesis
en entender que los individuos no sufren una transformación de su carácter
cuando cambian del papel de compradores o de vendedores en el mercado, al
papel de votantes, contribuyentes, beneficiarios, políticos o burócratas en el
proceso político. En otras palabras los individuos o agentes políticos dentro del
gobierno actuarán como en el mercado, es decir, frente a estímulos o no estímulos
actuarán de una determinada manera. De ahí que clásicos como David HUME
como J. S. MILL instituyeran que: «A la hora de constreñir cualquier sistema de
gobierno, y de fijar los diferentes frenos y controles en la constitución, debería

4
Ibidem, p. 12.
suponerse que cada hombre es un bribón y que no tiene otro objetivo en todas sus
actuaciones que el interés particular» 5.

«El genuino principio de un gobierno constitucional exige que se presuma que se


va a abusar del poder político en aras de los fines particulares de quien lo
sostenta; no porque siempre sea así, sino porque tal es la tendencia natural de las
cosas y el guardarse contra ello es la función especial de las instituciones libres» 6.
Posición occidental que no entronca con la filosofía y cosmovisión andina que se
centra en el carácter comunitario.

La finalidad última de analizar conjuntos alternativos de normas (reglas) es la de


informar la elección entre estos conjuntos. Pues se deben examinar las
propiedades predictibles del funcionamiento de cada alternativa y estas
propiedades reflejarán los modelos implícitos del comportamiento individual
dentro de las limitaciones definidas. Así por ejemplo si consideramos que aumenta
el poder discrecional de un agente político para distribuir rentas, los individuos que
esperen hacerse con tales rentas invertirán más recursos en un intento por influir
en las decisiones de ese agente. Los individuos eligen y, al hacerlo, uno de los
bienes que valoran positivamente, tanto si actúan en el mercado como si lo hacen
en política, es el interés económico identificable. Sabemos que los mercados son
instituciones de intercambio; la gente va a los mercados a cambiar una cosa por
otra. No entra en ellos para favorecer determinado resultado supraindividualista u
otra. En definitiva los mercados no tienen móviles funcionales. La extensión de
esta visión del intercambio a la política se opone al clásico prejuicio de que las
personas participan en política para buscar de algún modo, comúnmente, lo
bueno, lo verdadero y lo bello, ideas estos que se definen con total independencia
de los valores personales de quienes participan en el proceso político, que pueden
manifestar o no con su comportamiento.

En el mercado, los individuos intercambian manzanas por naranjas; en la política,


los individuos intercambian unas cuotas acordadas como participación al sufragio
de los costes de lo que colectivamente se considera como deseable, desde los
servicios locales de salud hasta los de la justicia. Estamos hablando de los dos
ámbitos de estudio de la economía: del sector privado y del sector público. El
profesor Ronald COASE ha propuesto que frente a los fallos del mercado se
pensaba que estaba justificada la intervención del gobierno para corregir esos
fallos. La actividad económica del sector pri vado se rige básicamente por el
principio del mercado, es decir por el libre juego de las fuerzas económicas de
oferta y demanda, a través de la información que suministra el sistema de precios.
Por su parte, la actividad económica del sector público se rige, básicamente por el
principio de autoridad, es decir, se concreta en una serie de decisiones
económicas adoptadas por la Autoridad. La actividad del sector público está

5
HUME, David; «On the Interdependency of Parliament», Essays, Moral, Political and Literary
(London, 1963) pp. 117-118 (en cita de BUCHANAN).
6
MILL; J. S.; Considerations on Representative government, in Essays on Political and Society,
Collected Works, Vol. 19, (Toronto, 1977), p. 505 (en cita de BUCHANAN).
orientada en última instancia, a determinar una estructura colectiva de
preferencias en función de las diversas preferencias individuales 7. El proceso de
elección pública constituye, por tanto, un campo esencial dentro de la actividad
pública, que es una nueva parte de la Constitución de la política económica o
Economía constitucional, cuya proyección hacia la política ha merecido el nombre
de Teoría de la elección pública (public choice)8.

Aplicado al análisis particular, lo que interesa es ver cómo determinadas reglas


institucionales inducen en los agentes a determinados comportamientos, con el
objetivo de maximizar sus ganancias; sólo en la medida en que conozcamos este
fenómeno, estaremos en condiciones de afirmar que, lo que efectivamente, se
debe ser claro es la constitución de la regla, dado que es de ella, de donde
emergerán determinados comportamientos de los agentes políticos, deseables o
no socialmente.

Bajo ese panorama este análisis se centra en el estudio de la Constituyente, esto


es, explicar el comportamiento que tendrán los agentes en este proceso y cómo
optimizar la misma. Desde la economía se ha establecido que los bienes son
escasos y su redistribución una elección. La Constituyente es un acto político que
va a regular el futuro acceso o distribución de la riqueza (bienes), del territorio y
poder, entiéndase por bienes, no sólo la riqueza o aquello que tiene que ver con
valores monetarios, sino aquellos como la libertad, la igualdad, la seguridad etc.
Una vez vigente una determinada regla (Ley de aprobación) para formar la
Constituyente los agentes políticos desplegarán sus decisiones en el marco de las
restricciones de esas reglas institucionales. Esas reglas institucionales facilitarán o
inducirán a comportamientos eficientes o ineficientes de los agentes políticos, que
una vez aprobado la nueva Constitución terminarán provocando resultados
eficientes o ineficientes, es decir, generaran costes políticos, económicos y
sociales en beneficios de unos y en desmedro de otros.

Por tanto, el análisis reflexiona sobre cómo instrumentar mecanismos que puedan
racionalizar9, esto es, maximizar la Constituyente de modo que las intenciones

7
PABLOS ESCOBAR de, Laura; Teoría de la elección pública: últimas líneas de investigación. /en/
Hacienda Pública Española, n° 115-2, 1990, pp. 43-67.
8
Sobre la teoría de la elección pública véase: ARROW, Kenneth; (1951); Social Choice and
Individual Values, Nueva York (V. C. de la ed. /en/ Instituto de Estudios Fiscales, Madrid, 1974).
BUCHANAN, James, (1967) Public Finance in democratic process, University of North Carolina
Press. – Freedom in Constitutional Contract, College Station, Texas A. y M., University Press, –
BUCHANAN, J.M. y TOLLISON, R. D., Eds. (1972): Theory of Public Choice, The University
Michigan Press. FERBER, Daniel, y FRICKLEY Philip; Law and Public Choice: A Critical
Introduction, Chicago: The University of Chicago Press, 1991; MUELLER, Dennis; Public Choice.
Cambridge University Press, 1979. en castellano: CORONA, Ramón; una introducción a la teoría
de la decisión pública. Madrid: INAP; 1987. GONZALEZ PARAMO, J. M., reforma tributaria y déficit
público en James Buchanan. /en/ Papeles de Economía Española, n° 30-31, pp. 534 y ss.
ROEMER, Andrés; Introducción al análisis económico del derecho. México D. F.: F.C.E., 1994, p.
55 y s.
9
Entiende por racionalización GAUTHIER como el concepto de racionalidad ligado con el de
maximización. «...una persona actúa racionalmente si y sólo si busca su mayor beneficio o interés»
negativas de los agentes se reduzcan al mínimo. Por otra parte, que los costes
económicos y sociales sean mínimos. Intenta explicar los costes sociales que tales
acciones (elección de determinados Constituyentes produzcan10 ineficiencia) o
comportamientos que generan efectivos negativos en la sociedad, y propone
alternativas que constriñan (reduzcan) las actividades arbitrarias de los agentes
constituyentes. En definitiva maximicen el bienestar colectivo, minimizando los
costes sociales.

En un medio como el nuestro, donde es casi inexistente investigaciones que


reflexionen sobre los efectos negativos del actual contrato social, o estudios que
tengan como norte la reducción de los costes sociales que produzcan las acciones
de los Constituyentes, un trabajo de esta naturaleza puede abrir un marco de
reflexión, importante en momentos preparativos para la vigencia de la futura
Constituyente.

Finalmente en el momento de la institucionalización de la Constituyente no


debemos olvidar la importancia de los fenómenos como globalización, crecimiento
económico, corrupción, violación de derechos fundamentales (p.e. a través del
racismos institucionalizado) multietnicidad y pluriculturalidad, y otros que deben
marcar el norte del debate de la futura constituyente.

2. UNA APROXIMACIÓN A LA TEORÍA ANALÍTICA PROPUESTA.

A lo largo de las dos últimas décadas los economistas han utilizado su arsenal
conceptual para estudiar temas que tradicionalmente eran feudo de filósofos y
juristas. Desde la economía se ha tratado de justificar o criticar la actividad
interventora estatal; desde la filosofía se ha propuesto nuevos ideales de justicia y
redistribución de la riqueza como el velo de ignorancia de John Rawls (RAWLS,
1971) pasando por la intervención del juez Hércules de Ronald Dworkin
(DWORKIN, 1977), hasta la mirada hacia la multiculturalidad en el contexto de la
democracia de Will Kymlika (KYMLIKA, 2002).

Para otros es el propio campo de lo jurídico quién ha demandado cierto tipo de


consideración económica y de otras disciplinas en la interpretación y estudio de su
núcleo de conocimientos y así, aunque ello no impide que existan sus detractores,

p. 6. «La racionalidad práctica en su sentido más general se identifica con la maximización de los
beneficios» p. 22. En Morals by Agreement, Oxford University Press, 1986. El concepto de
racionalidad resulta ambiguo y se emplea a multiplicidad de entidades, como por ejemplo
preferencias, elecciones, acciones, decisiones, etc., aquí lo emplearemos en el sentido de
racionalidad económica. Sobre los diversos conceptos de racionalidad véase J. ELSTER, Uvas
amargas. Barcelona: 1988, Cap. 1.
10
Para el presente análisis se emplea dos conceptos del término «gobierno»: en cuanto referido a
grupo de personas (gobierno) y como conjunto de instituciones (Gobierno). Por tanto, en este
trabajo se distingue el gobierno del Gobierno. Con el término gobierno designaremos a las
personas que ocupan un cargo público (gabinete de ministros y los miembros de su partido en el
parlamento) que gobiernan el país. Con la palabra Gobierno entenderemos el conjunto de
instituciones políticas que dichos cargos emplean para gobernar el país y que controlan mientras
se mantengan en el poder.
p.e. el Análisis económico aplicado al Derecho ha sido recibido —en los últimos
años— en las condiciones de quién viene a completar lagunas y a contribuir desde
la interdisciplinariedad (pluralismo metodológico) a un mejor desarrollo del
horizonte epistemológico de la Ciencia jurídica 11.

La propuesta metodológica de esta nueva disciplina, consiste en la aplicación de


instrumentos y técnicas comúnmente empleados en el análisis económico, pero
que en éste caso su aplicación corresponde a los problemas del Derecho. Entre
otros emplea el criterio del comportamiento racional de los sujetos (maximización
del bienestar dentro de ciertas restricciones) eficiencia y equidad, coste -beneficio,
coste -efectividad, que contribuyen a ampliar el universo del discurso y evitar el
reduccionismo 12 o sesgo analítico.

El método del análisis económico permite observar y predecir los problemas desde
una distinta perspectiva de aquel que ofrece el positivismo jurídico, esto es,
permite ver lo que verdaderamente hacen las normas o reglas aplicados para
ciertos procesos o los efectos que producen éstas y no sólo se reduce a lo que
dice la norma. Su dimensión no es única. Así la economía normativa no se ocupa
sólo de describir la realidad como lo hace la economía positiva. O en otras cuándo
ella (economía positiva) recurre a la construcción de modelos hipotéticos o de
modelos ideales —este— no sirve tanto para describir la realidad —pues en la
realidad social no se da nunca el modelo— sino sirve para preguntarse desde el
modelo porqué la realidad es como es y para proponer desde el modelo medidas
de modificación o corrección con miras a su cambio o transformación.

La teoría del Derecho Contemporáneo (Positivismo jurídico) insiste en su


dimensión descriptiva. Cualquier dimensión normativa de la ciencia jurídica es
indicio de contaminación ideológica como afirmó KELSEN. Para los juristas
positivistas, emplear el método de la Dogmática jurídica da razón y fundamento de
la investigación jurídica centrado en el monopolio y omnipotencia de la ley, salvo
los nuevos horizontes analíticos propuestos desde la argumentación jurídica como
la propuesta por Robert ALEXY y del llamado nuevo iusnaturalismo de DWORKIN.

El Análisis económico del Derecho emplea el análisis empírico, instrumento básico


que permite una mejor aproximación y predicción de los fenómenos jurídicos y los
efectos que provocan las leyes y las instituciones jurídicas en la sociedad, porque
se sustenta en la investigación de campo y con datos obtenidos de los hechos; su
aplicación es valiosa y ha tenido resultados positivos en estudios del ámbito de la
política pública como la política legislativa, jurídica y judicial.

Por otra parte, la transformación del Estado contemporáneo ha producido una


crisis de legitimación y representatividad. Los criterios tradicionales de
justificación de las decisiones públicas en el ámbito administrativo son hoy
insuficientes, así como es evidente la pérdida de capacidad expansiva del

11
TORRES LÓPEZ, Juan; Análisis económico del derecho. Madrid: Tecnos, 1987.
12
HUANCA AYAVIRI, Félix; Introducción al Análisis económico del derecho. Estudio del Derecho y
Economía, La Paz: 2003.
derecho estatal frente a otro tipo de sistemas normativos, tales como las
extrajudiciales y del mercado (justicia comunitaria). Por esta razón, p.e. el
problema de la justicia, la equidad, ha pasado a ser uno de los principales de
la reflexión actual para economistas, abogados y tantos otros. A la
legitimación por la legalidad se añade hoy la exigencia de la legitimación por
eficiencia, i mportando más una administración que ofrezca máximo bienestar
con el mínimo coste, que una administración ineficiente.

3. SUPUESTOS BÁSICOS

En el desarrollo de esta investigación emplearemos algunos supuestos básicos,


entendidos estos en su sentido más amplio como: la constituyente en un sentido
derivado que se realiza en la vigencia de un sistema político (Estado de derecho)
en la que todos los ciudadanos deben ser considerados iguales y el criterio de
eficiencia. Por criterio de eficiencia13 entendemos toda situación en la cuál lo que
puede mejorar alguien es más de lo que han de empeorar otras personas para
ello; o, de otra manera cuando los beneficios totales (sociales) netos son
máximos, o cuando sería posible «comprar» la aquiescencia de los perdedores
por lo que obtienen los ganadores [Criterio de KALDOR y HICKS].

Por otra parte, por coste social entenderemos el tiempo y dinero dedicados a esta
actividad de carácter público, es decir; desarrollo de la constituyente, que
consistirá en gastos del diseño para una política de la constituyente, de su
vigencia y gestión, tanto personales como materiales: personal (en cuanto el
empleo de burócratas, funcionarios y otros), edificios, servicios, etc. Por
constituyente eficiente, entenderemos la realización efectiva de los objetivos de los
programas de acción propuestas por el interés legítimo del conjunto de la
ciudadanía y la acción propia de la constituyente 14, bajo los métodos e
instrumentos de las reglas previamente aceptadas y sea con el menor coste
posible 15.

4. ANÁLISIS DEL CONTRATO SOCIAL DE 1825: SUS IMPLICACIONES.

En Bolivia, el contrato social de 1825 (primer constituyente) 16 no ha incorporado en


calidad de ciudadanos a los indígenas y las mujeres que fueron excluidos de aquel

13
Para PASTOR «... una situación es eficiente u óptima cuando no es posible encontrar otra
situación en que alguien pueda ver mejorada su posición, sin que para ello al menos ot ra persona
vea empeorada la suya» Véase en PASTOR, Santos; Una introducción al análisis económico del
derecho; /en/ Hacienda Pública Española, 89, 1984, p. 158.
14
Las políticas públicas, se inician desde el diseño de un proyecto o programa que a menudo son
encargados por el Gobierno a personas particulares (Consultores), por una cantidad de dinero.
Para que una política estatal sea ejecutada es necesario contratar otros consultores, personal,
edificios, sueldos etc., resultando la política pública costosa.
15
MENY, Ives; CLAUDE THOENIG, Jean; Las políticas públicas, Madrid: Ariel, 1992.
16
El Poder Constituyente consiste en la suprema capacidad y dominio del pueblo sobre sí mismo
dotándose de una organización política y un Ordenamiento jurídico, por ello es, creador, originario
y pre-existente con relación a los poderes constituidos. En la doctrina normalmente suele referirse
a la Constituyente originaria y la derivada. La originaria cuando su acto de creación es fundacional
y suponga la nueva organización del Estado sobre bases nuevas y diferentes de las anteriores. Es
contrato social. Las mujeres no indígenas adquieren tal calidad en los años
cuarenta y los indígenas son incluidos como ciudadanos luego de la revolución de
1952, que marcará un hito importante en la historia de Bolivia.

En ese contexto el contrato social de 1825 que fue objeto de nuevas


constituyentes (1938, 1967), en si no lograron cambiar el aspecto material de la
Constitución de 1825 en lo que se refiere al sistema republicano unitario, católico y
otros. Si bien en la literalidad constitucional se puso en igualdad de condiciones al
conjunto de los ciudadanos, eso fue una simple igualdad formal y no material; por
cuanto los indígenas, continuaron excluidos sistemáticamente de los beneficios de
las políticas públicas del Estado. Sólo a partir del retorno a la democracia y la
reforma constitucional de 1994, ? aunque no debemos olvidar la importante
contribución que ha tenido el contexto internacional luego de la segunda guerra
mundial en este tema? , se ha posibilitado el debate de la discriminación racial de
que fueron objeto los indígenas y ha permitido un cambio importante al introducir
el carácter multicultural y pluriétnico de la sociedad boliviana, y cuyo mayor reflejo
de conciencia indígena se ha reflejado en las elecciones del 2002.

Al margen de aquello, lo que importa es determinar las implicaciones sociales y


económicas del contrato social de 1825. Si analizamos desde el punto de vista de
los costes, veremos que ella ha generado más costes negativos que positivos. No
se ha podido lograr un mercado interno sólido, no se ha consolidado la
democracia, somos el país de mayor corrupción en la región. La exclusión de más
de la mitad de la población del beneficio de las políticas públicas como educación,
salud y otros, ha incidido en forma negativa en el crecimiento del mercado interno,
de la producción y en la ineficiente administración de los recursos humanos, lo que
implica en el conjunto de la sociedad boliviana una perdida neta.

¿Cuáles son los efectos de estos costes? Pueden existir muchos, pero
mencionemos básicamente tres a modo enunciativo: políticos, económicos y
sociales. Los costes políticos se reflejan en la ilegitimidad del propio contrato
social, descrédito del Estado que parece representar únicamente a sectores
sociales, y la ineficacia del sistema democrático que requiere para su
funcionamiento ciudadanos en igualdad de condiciones y derechos. Los costes
económicos constituyen los gastos monetarios y no monetarios dedicados a la
actividad de las políticas públicas que únicamente han beneficiado a grupos y
sectores sociales, y ha permitido un escaso control social con las consecuencias
del derroche, malversación, apropiación y otros. Los costes sociales se reflejarán
en el escaso desarrollo social y humano de los indígenas que es parte del capital
humano del conjunto del Estado, por lo tanto implica un coste en recursos
humanos para el conjunto del Estado.

5. LA CONSTRUCCIÓN DE LA CONSTITUYENTE POR LA VIA DEL CONSENSO.

deriva cuando su ejercicio no es fundación sino es derivada de otra anterior. En la práctica jurídica
boliviana a primado la segunda forma, es decir, la Constituyente derivada.
Bolivia hoy es un Estado multicultural y pluriétnico, pero ello no basta para salir
adelante. Por otro, seguimos siendo un Estado republicano, unitario, católico y
liberal democrático. Aquí enfrentamos un problema, esto es, si es compatible el
multiculturalismo con la democracia liberal y por otra si son compatibles los
derechos colectivos con los derechos liberales (civiles y políticos). Respondiendo
podemos afirmar que el multiculturalismo es compatible con la democracia liberal,
así como los derechos liberales con los derechos colectivos que corresponden a
distintas generaciones, lo que falta son mayores y mejores reglas institucional-
constitucionales para los ciudadanos que permitan la igualdad de participación en
los bienes públicos, entre ellas, en la participación del actual proceso
Constituyente.

Sólo en la medida de una participación genuina y de consenso en la Constituyente


puede permitir la óptima materialización de la Constituyente, que permita un
contrato social duradero y legítimo. En nuestro contexto la optimización de la
Constituyente pasa por un proceso de dialogo intercultural, es decir, el
reconocimiento del Otro, y tratamiento en igualdad de condiciones. Si la futura
Constitución es el producto de una acción que responda a intereses de los
partidos políticos, sectores y grupos sociales, estaremos frente a más de lo
mismo, es decir, una Constitución que no permitirá avanzar sino retroceder o
quedarnos donde estamos, para lo que no es necesario dedicar una inversión de
tiempo y dinero en el proceso de la Constituyente, dado que no rentabilizará el
bienestar del conjunto de los bolivianos.

En países como Bolivia la escasez de recursos no permite el derroche ni el


despilfarro, necesitamos una Constituyente transparente en el que esté
representado el conjunto de la sociedad boliviana y fundamentalmente de quiénes
hasta ahora estaban excluidos. Sólo una Constitución producto de un consenso
social ? en otras palabras de las dos bolivias? puede permitir, armonizar el
desarrollo económico, la democracia y la solidez de las instituciones, así como el
cultivo de valores como la libertad, igualdad, seguridad jurídica y solidaridad que
bien pueden contribuir a la eficiencia del Estado, haciendo más accesible el
bienestar del conjunto de los bolivianos.

La función primordial de las Instituciones estatales, es la de garantizar el


desarrollo económico, jurídico y social de sus ciudadanos, en igualdad de
oportunidades; en Bolivia, en el marco del multiculturalismo 17 y la plurietnicidad.

17
Entendemos por multiculturalismo a la convivencia en un mismo país o regiones de tradiciones
culturales distintas. Estos indican la mezcla de culturas y por tanto de visiones sobre la vida buena
y los valores diferentes y opuestos entre sí (KYMLIKA). En si, es una interpretación de la realidad
de un tiempo y territorio donde se plasman o construyen diferentes visiones o concepciones del
mundo (diversidad), de la realidad, y sobre la cual los hombres construyen una determinada forma
de vida (diversidad cultural), que se ha llegado a denominar «cultura» como una cosmovisión
propia y una existencia regulada por ciertos valores normativos, vitales para su existencia. Como
afirma De Lucas multiculturalismo «es la presencia en una misma sociedad de grupos con
diferentes códigos culturales, como consecuencia de diferencias étnicas, religiosas o
No creemos posible construir el Estado socialmente justo, ni sociedad democrática
que ofrezca más bienestar, al margen de la tolerancia, de una administración
eficiente y del cultivo de valores superiores de carácter multicultural. La
intolerancia nace donde la sociedad es injusta y una sociedad injusta es una
sociedad sin futuro, basta citar ejemplos recientes de Bosnia y Kosovo. No creo
que los intelectuales y los potenciales constituyentes sean defensores de una
futura generación social que sostenga resabios racistas, pues si fuera así es mejor
no participar de ella.

La Paz, invierno de 2004.

1
Entendemos por multiculturalismo a la convivencia en un mismo país o regiones de tradiciones
culturales distintas. Estos indican la mezcla de culturas y por tanto de visiones sobre la vida buena
y los valores diferentes y opuestos entre sí (KYMLIKA). En si, es una interpretación de la realidad
de un tiempo y territorio donde se plasman o construyen diferentes visiones o concepciones del
mundo (diversidad), de la realidad, y sobre la cual los hombres construyen una determinada forma
de vida (diversidad cultural), que se ha llegado a denominar «cultura» como una cosmovisión
propia y una existencia regulada por ciertos valores normativos, vitales para su existencia. Como
afirma De Lucas multiculturalismo «es la presencia en una misma sociedad de grupos con
diferentes códigos culturales, como consecuencia de diferencias étnicas, religiosas o nacionales
…». LUCAS DE, Javier; ¿Elogio de Babel? Sobre las dificultades del derecho frente al proyecto
intercultural. /en/ Anales de la Cátedra Francisco Suárez, n° 31, 1994, pp. 15-39.

nacionales…». LUCAS DE, Javier; ¿Elogio de Babel? Sobre las dificultades del derecho frente al
proyecto intercultural. /en/ Anales de la Cátedra Francisco Suárez, n° 31, 1994, pp. 15-39.
4. La Constitución
4.1 DIAGNOSTICO CRITICO DE LA CONSTITUCION
BOLIVIANA VIGENTE
Dr. Jorge Miranda Luizaga

I. INTRODUCCION

En el marco de los ordenamientos jurídicos modernos, el Derecho Constitucional ha logrado


concentrar y monopolizar el debate teórico sobre el análisis de la Constitución, la organización
estatal, los poderes públicos, tipo del Estado y otros. Las constituciones modernas como parte de su
ética pública adoptan en la parte preliminar los principios fundamentales del conjunto del
ordenamiento jurídico estatal18 , que constituye medida de referencia para las demás disposiciones.

En el contexto del ámbito constitucional boliviano es escasamente explorada por los académicos,
profesores universitarios y otros intelectuales, menos existen estudios o investigaciones críticas y
propuestas serias para el cambio a la Constitución; los existentes son, textos descriptivos destinados
generalmente a una pobre audiencia académica de estudiantes y algunos aficionados al Derecho.

Por consiguiente existe desde esa perspectiva una justificación académica, sociológica y política19
para el debate de la Constitución, propuestas de reforma hasta una posición radical con
planteamientos de una nueva Constitución para un nuevo Estado20 .

La Constitución boliviana está expuesta a una serie de críticas, cuya vulnerabilidad consiste
precisamente en un escaso sistema estructural. Para otros críticos, es una Constitución “iqiqu”; es
decir, es sobrecargada y demasiado reglamentaria; desde el punto de vista histórico su contenido ya
no refleja la realidad del pueblo con perspectivas al avance tecnológico y científico del tercer
milenio 21 .

El ordenamiento jurídico constitucional es de carácter elitista, paternalista y verticalista y


discriminatorio, ajeno a la soberanía del pueblo y sus representantes, es una cultura política sectario,
como dice Kafka y otros de “democracia de feria”; por tanto la práctica política ha perdido de vista
el interés de la comunidad22 .

Estos y otros temas han puesto en el tapete del debate sobre el tipo del sistema político y su
representatividad. El reto del sistema que todavía se define en el presupuesto de la

1. Es ilustrativo por ejemplo la Constitución Federal alemana de 1949, la Constitución española de 1978 o la
Portuguesa de 199 .
2. Desde la óptica política de los Pueblos Indígenas y originarios, frente a la ineficacia de los Derechos incluso
garantizados en la Constitución vigente, el análisis de la Constitución y una propuesta de Constitución, es
parte de una opción política en su lucha por la libre-determinación como Pueblos.
3. Desde esta óptica es importante destacar el estudio de la Asociación de analistas de políticas públicas y
asuntos de gobierno. Véase p. 13 y ss. KAFKA, Jorge; et al, Segunda República, 2da. Ed. La Paz: Imagen
publicitaria, 2001.
4. Una de las debilidades es que la Constitución vigente no adopta una conjunto de valores sociales en las
que se asienta el tipo de Estado; aspecto que es esencial para una certeza en las decisiones judiciales.
5. KAFKA, Jorge; et al, Segunda República, p. 26.
“Gobernabilidad”, ya no es sostenible; es decir, ya no tiene más perspectivas de poder avanzar al
futuro.

En el ejercicio de la democracia, los intereses de la sociedad pasa por el consenso del conjunto del
pueblo, incluso la propia construcción democrática. En el caso de la actual Bolivia, la democracia
vigente no es incluyente sino excluyente, por eso ha seguido y solventa un perfil del Estado
excluyente y un (Estado patrilinial); es incapaz de incluir la participación equitativa de los Pueblos
Originarios (Indígenas) en condiciones de igual ciudadana.

II. METODOLOGÍA.

Para lograr el cambio es fundamental hacer una interpretación critica de la Constitución, lo cual fue
motivo de análisis del contenido con enfoques visionarios; plantear sobre una base del tenor literal
que no dificulte en la aplicación de las normas, que no sea un texto incomprensible o contradictorio
lo cual puede originar problemas administrativos; de modo que la norma constitucional puede ser
aplicada de forma eficiente.

Por otro lado, determinar puntualmente los temas para una futura reforma constitucional, referidos a
la estructura y el contenido de la Constitución vigente, se ha puesto especial énfasis en la redacción
del “Diagnóstico Crítico” que sea comprensible solo para los abogados o de quienes son lectores
entendidos en temas constitucionales; pues nuestro principal objetivo, es hacer conocer la propuesta
de la Constitución a cada ciudadano.

Los argumentos que utilizamos en el diagnóstico critico a la C. P. E. han sido recogidos de la


demanda de la población boliviana, que no se ve reflejado su representatividad en la Democracia,
Es decir, la representación no expresa a la población, pues excluye a la masa de la población
originaria con la discriminación y la desigualdad entre los habitantes; por lo tanto, cualquier critica
o propuesta de cambio debe asegurar una mejor participación de la sociedad civil.

III. ANTECEDENTES

Desde el punto de vista del Derecho Constitucional, las reformas siempre son parciales, pero
pueden ser en sentido formal y material.

Las reformas realizadas en Bolivia, por ejemplo: en los años 1831, 1938, 1967 y 1994 han sido
formales y no materiales; porque no han trascendido en la estabilidad institucional ni han servido de
base para el funcionamiento real del Estado.

La instauración del gobierno democrático de 1982, dio lugar a que se presenten planteamientos
sobre la necesidad de reformar la Constitución y se abra un largo debate nacional centrado
fundamentalmente en el mecanismo de reforma, más que en el contenido; es decir, como reformar
la CPE y no la conceptualización sobre que se va a reformar.

Por otra parte, en el contexto económico, social y político ajustado tanto el debate como la reforma
constitucional, esta centrado por la crisis del modelo de acumulación establecido por la Revolución
del 52 que alcanzó su mayor gravedad con la hiperinflación y que dio fin con el Estado del 52 y que
sustenta la economía de mercado.

En el plano político, la crisis se ha originado por la falta de credibilidad en las instituciones


Estatales y la carencia de una representatividad legitima del pueblo. Esta realidad dio lugar a los
acuerdos políticos de febrero de 1990 y junio de 1992 para la consolidación de la democracia y la
institucionalidad, que desde entonces se sostiene en el soporte de la gobernabilidad. 23

IV. VISION GLOBAL DE LA CONSTITUCION

La CPE por su contenido es catalogada como desarrollada, porque contiene normas orgánicas que
establecen y regulan la estructura jurídico-política del Estado, determinando su forma, la forma de
Gobierno, los Órganos de Poder, así como la organización y atribuciones de dichos Órganos de
Poder, que contiene también normas dogmáticas, las que establecen las declaraciones, principios,
derechos y garantías constitucionales.

Empero, globalmente el texto constitucional presenta deficiencias de forma, vacíos, impresiones y


contradicciones no sólo de forma, sino estructurales. Además, hay dispersión de los derechos
individuales y sociales, presentándolos en algunos casos en forma mezclada.

Por otra, la Constitución carece de normas referidas a los aspectos fundamentales y centrales que
tiene que ver con la estructura, la organización y funcionamiento del Estado. Se constata la ausencia
de una norma declaratoria de los valores y principios fundamentales sobre la estructura del Estado
boliviano, la misma que debería estar incluida en el Título preliminar de la Constitución y ser el
principio rector de la organización interna y del relacionamiento interno de los poderes públicos y la
relación externa del Estado.

Otro aspecto fundamental, el Estado es responsable de prever toda norma constitucional para con
los gobernados o sea, la responsabilidad que debe asumir el Estado por las acciones u omisiones de
sus autoridades o funcionarios que infrinjan la Constitución y los símbolos patrios.

En el capítulo de los Derechos Fundamentales, la Constitución no establece la declaración y


consagración de algunos derechos individuales. Respecto a los Derechos Sociales, apenas consagra
algunos de ellos. En lo que respecta a los Derechos Colectivos de los habitantes del Pueblo que
constituyen los Derechos Fundamentales, simplemente los omite y no consagra ninguno.

Las instituciones conformadas en la Constitución ya no responden a la realidad social, económica,


política y cultural vigente en el país. Es decir, la Constitución formal no está adecuada a la realidad
socio cultural del pueblo. De ahí que existen cuestionamientos serios de parte de los sectores y
actores sociales organizados, porque el Estado centralista ha dado lugar a un desarrollo regional
desigual e desquilibrado; no es casual que el Movimiento Cívico Nacional había planteado una
nueva reforma constitucional, cuando aún no había terminado de implementar las reforma a la
Constitución.

Por otra parte el concepto de soberanía, en los últimos tiempos ha sufrido al menos dos impactos
concretos; uno, la presión de los procesos económicos y políticos enmarcados en la llamada
globalización, donde el mercado financiero puede tener una capacidad de transformar a la sociedad,
mayor que una política estatal; y el otro, la incorporación de Bolivia a acuerdos comunitarios que,
por definición exige la sesión de parte de las decisiones soberanas a la legislación adoptada por el
conjunto de los países miembros.

6.Este diagnóstico se realizó sobre la base del Comentario Crítico de la Constitución


Política del Estado publicada por la “Fundación Konrad Adenauer, La Paz. 1998,
de autores varios: Stefan Jost coordinador.
Las propuestas de cambios en la constitución se enmarcan hacia un referéndum. Mediante el
Referéndum se consultó al pueblo boliviano nueve modificaciones a la CPE; una de ellas fue la
Descentralización Político Administrativa, a través del voto censatario, la mayoría de los
consultados se pronunció por la aprobación de las nueve reformas planteadas.

Por una parte, la junta militar, mediante Decreto Ley de 23 de Febrero de 1931, sólo incorporó ocho
de las nueve reformas consultadas y aprobadas por el voto popular. Es decir, decidió no incorporar
en la Constitución la Descentralización Político-Administrativa, bajo el argumento de que, con
carácter previo, debió aprobarse una Ley que regule esta descentralización.
Más que positivos, los efectos de la centralización han sido negativos, pues el centralismo ha
originado un crecimiento y desarrollo desigual de las regionales ha sido la característica principal de
este ciclo.

La División Política del Estado no ha recogido la realidad económica, política, social y cultural. En
ese orden, ha establecido una división en departamentos, provincias, secciones y cantones, obviando
el proceso de conformación de los núcleos sociales y territoriales de base, como son las
comunidades campesinas, los villorrios y pueblos Originarios (indígenas). Estos últimos no han
estado insertos en la estructura jurídico-política del Estado, pues no tenían autoridades municipales
ni del gobierno central.

La planificación centralizada, al no haber interpretado la realidad nacional generó un uso


inadecuado o irracional de los recursos económico-financieros y humanos, con una irracional
explotación de recursos naturales, cuyo resultado es la desigualdad e la injusticia en el desarrollo
regional.

Este hecho ha generado la clasificación regional; de hecho en departamentos de primera, como son
Santa Cruz, y La Paz, de segunda como son Cochabamba y Beni; en Departamentos de tercera
como Pando, Tarija, Chuquisaca, Oruro y Potosí. Estos dos últimos, que otrora fueron el pulmón
económico de Bolivia, hoy se debaten casi en una marginidad, con elevados índices de extrema
pobreza e de indigencia (Jost y otros, p. 4).

Otro resultado de este orden de cosas, es la actual clasificación social entre ciudadanos de primera,
que habitan la urbe citadina, y ciudadanos de segunda que habitan los barrios peri-urbanos y el área
rural.

El exagerado centralismo, sumado a la democracia meramente formal que otorga legalidad, pero no
necesariamente legitimidad a las autoridades, ha motivado que grandes sectores sociales no se
sientan expresados por el Estado y su forma de gobierno. De ahí que un corregidor tenga legalidad
pero no-legitimidad, a diferencia de un Jilaqata en el ayllu aymara - quechua, o un capitán general
de un pueblo guaraní, quienes tienen su legitimidad, aunque no-legalidad plena (Jost y otros, p. 5).

Haciendo un análisis de lo que significa “pueblo”, este sign ifica la “mayor parte, expresada por el
principio de la mayoría absoluta”; mayoría que, tomando en cuenta los altos índices de ausentismo
y abstención electoral, se convierte en relativa “gobernabilidad”. Este es un tema que en Bolivia no
se ha asimilado aún en su verdadera magnitud. De ahí es que sobre la base del argumento de la
gobernabilidad, se constituyan mayorías parlamentarias, para que sean utilizadas por el Órgano
Ejecutivo para imponer decisiones, desconociendo la opinión y el derecho de las minorías.

A partir de esa imprecisión, el pueblo se convierte en un sujeto pasivo de la democracia; un mero


“elector” que al final vota pero no elige ni otorga un mandato, toda vez que el mandato es nacional
no fraccionario. Sin embargo, habrá que señalar que se han asumido acciones orientadas a mejorar
esta situación. Mediante la reforma constitucional se ha modificado el sistema electoral de los
diputados, estableciendo que un 50% sea elegido mediante circunscripciones uninominales. Esto
permite que, en el caso de los primeros se produzca un vínculo directo del elector con su
representante.

Empero en los hechos, la soberanía reside en la nación: “el pueblo no delibera ni gobierna, sino por
medio de sus representantes y de las autoridades creadas por ley”, Art. 4 de la Constitución vigente.
De esa forma se elimina toda posibilidad de una participación real y efectiva del pueblo en el
ejercicio del poder; se anula la posibilidad de realizar una fiscalización real y efectiva en el control
y seguimiento de los electores hacia los representantes nacionales.

La representación de la Población por la vía representativa no asegura que sean representados los
intereses de la población, porque las coaliciones en el legislativo sólo buscan asegurar la
“gobernabilidad” a través de lo que denominan el “rodillo parlamentario”, que la votación
mayoritaria no permite a la oposición un debate para lograr el consenso. Por esta razón, la
legislación representativa imposibilita una efectiva fiscalización en la toma de decisión en le
legislativo y por ende en la promulgación de leyes favorables a los sectores populares.

Se debe mencionar que continua irresuelta la definición de la forma de gobierno democrático-


representativo y es una de las contradicciones que conlleva la forma de gobierno y que tiene
definida por la Constitución, con la estructura social reconocida por la misma. Es decir, tras
reconocer la diversidad étnica y cultural que constituye el Estado boliviano; con la multiplicidad de
instituciones y valores, plantea una forma de gobierno única, que implica un mecanismo de
uniforme para la elección de autoridades políticas, cuando en la práctica existen diferencias; es más,
procedimientos propios, particulares y diferenciados entre los grupos étnicos y culturales del país.

A manera de ilustración, cabe examinar el caso de la elección de Jilaqatas en el occidente y centro


del país, de los cabildos en algunos grupos étnicos del oriente que en el pasado, tuvieron influencia
jesuita. Esta suerte de “gobiernos locales” tiene mayor semejanza con la democracia directa y
provienen de formaciones étnico-culturales no hegemónicas.

Así, la articulación de estas formas democráticas con la democracia representativa es uno de los
desafíos sustantivos que debe enfrentar la sociedad boliviana en su cotidianidad y en su expresión y
formalización constitucional. La fórmula oficial planteada para el cambio es una reforma
superficial, porque la fórmula de principios no expresa lo multiétnico y pluricultural y no ha
penetrado siquiera en las expresiones más generales de la Constitución.

Un tercer sistema, llamado semipresidencialistas, se puede resumir de la siguiente manera: la


separación de las funciones entre Jefe de Estado y Jefe de Gobierno; la elección directa o indirecta
del Presidente por los ciudadanos; el mandato presidencial no prorrogable en forma indefinida; la
elección del Jefe de Gobierno por el Parlamento al que debe rendirse cuentas, aún cuando es
nombrada por el Presidente la existencia de una “autoridad dual” de Presidente y Jefe de Gobierno,
ya que el Presidente no se limita a cumplir sólo funciones representativas.

La condición de “multiétnica” es más completa y compleja que la de multirracial, pues no se limita


a la constatación de diversos tipos humanos, sino que llega a recuperar la noción de que Bolivia es
el producto del encuentro de múltiples raíces o matrices sociales, esto supone la coexistencia de
diversas constituciones sociales tanto en lo que refiere a sus condiciones materiales, como a sus
instituciones, valores y creencias.
La condición “pluricultural” permite reconocer la coexistencia y retroalimentación que existe entre
diversas cosmovisiones de las diversas matrices étnicas, sino también de las distintas migraciones y
del encuentro entre unos y otros. En otras palabras, la propuesta es busca incorporar a la
Constitución formal la condición real que Bolivia no es homogénea y que en el país conviven
condiciones materiales e imaginarios colectivos que corresponden a etapas precoloniales aún
vigentes, en la llamada era de la modernidad; además están vivas las expresiones culturales de los
diferentes pueblos que habitan en el territorio.

Sin embargo, esta lectura tropieza con la realidad política del país que en ningún caso se inspiraron
en el espíritu comunitario y la solidaridad, las mismas que han sido extremadamente vulnerados por
el propio Estado.

En efecto, el Estado está en pleno proceso de descentralización política, económica y


administrativa, con leyes como la Participación Popular, la Reforma Educativa, la Descentralización
Administrativa y otros; en el texto constitucional sigue definiendo la forma de Estado Unitario.

Primero, los artículos doctrinarios deberían definir la forma de ejercicio de la soberanía o el poder
del pueblo; segundo, las bases de organización y funcionamiento de los órganos de poder, y el
tercero, que determine la no concentración del ejercicio del poder en un solo órgano. El Art.3 de la
CPE es por lo demás contradictorio porque define por una parte una religión estatal, la católica y
por la otra, la libertad de cultos.

Se puede entender que el argumento central y la motivación de los legisladores para establecer una
religión oficial y prohibir otros cultos fue la búsqueda de homogeneidad confesional, en el marco
del espíritu de un Estado Unitario, sin embargo no está demostrado la imposición de una religión
oficial pueda lograr forzosamente la unidad, siendo así que existen otros factores, culturales
políticos, económicos y hasta antropológicos, que por la falta de propuestas concretas impedirán
mantener una unidad nacional y la “Libertad de culto” irrestricto es la propuesta para un país como
el nuestro, pluricultural.

Por todo lo expuesto, queda pendiente este tema para el debate, sobre la necesidad de reubicar este
artículo, toda vez que no es pertinente incluirlo en el Título I de Disposiciones Generales, siendo así
que contiene una declaración sobre un derecho fundamental de la persona y la sociedad, como es la
libertad de culto y los demás principios como por ejemplo:

? Principio de la libertad, la justicia y respeto a la dignidad humana


? El principio del pluralismo político como base del ejercicio del Poder.
? El principio de la solución pacífica de los problemas con otros Estados.
? El principio de la integración regional, reciproca, amistad y solidaridad de los Estados, como
base de sus relaciones internacionales.

Un aspecto importante es la limitación fijada para que el pueblo no pueda intervenir directamente en
la toma de decisiones políticas, mediante el plebiscito o en las decisiones legislativas, mediante el
referéndum. Es por esa razón, que el pueblo queda como última instancia en un sujeto pasivo del
ejercicio del poder, y del ejercicio de la soberanía es un mero elector a través de las elecciones que
delega el ejercicio de la soberanía a los órganos de poder.

Estos son los aspectos más relevantes de la actual Constitución Política del Estado que justifican
plenamente una propuesta de Constitución nueva y renovadora, la misma que considere aspectos
culturales en lo que concierne al manejo de la biodiversidad, territorio, derechos comunitarios y
otros que han nacido con el cambio social y el desarrollo de la tecnología.
5.4 LA DESCENTRALIZACIÓN QUE SE VIENE
.

Entre lo federal y lo unitario1


Franz Xavier Barrios Súbelas
I. Antecedentes
Bolivia está cerrando un valioso segundo ciclo contemporáneo de diseños territoriales.
Efectivamente, es plausible sostener que en 1972, año de promulgación de la "Ley de
Organización Administrativa del Poder Ejecutivo", se desató un primer ciclo de ordenamiento
t e r r i t o r i a l imbuido de formas no participativas, desarrollistas y de tendencia ciertamente "a-
municipal". Cuando se recuperó la democracia en 1982, la intensificación del debate
descentralizador de tinte "pro-departamental" -con los llamados comités cívicos
departamentales como claros impulsores-, buscó el consenso na cional durante años hasta lograr,
a principios de 1993, introducir un proyecto de ley acorde a su enfoque en la Cámara Alta del
Congreso bolivia no. Este proyecto, por lo demás insuficiente en su coherencia técnica, nunca
lograría su promulgación y acabaría más bien sepultado por la vorágine de los inesperados
acontecimientos pro municipalistas de 1994.

En efecto el segundo ciclo se desenfunda recién a mediados de los años 90, cuando en la recién
arrancada gestión de gobierno del periodo 1993-1997, se decide descentralizar Bolivia por vía
fundamentalmente municipal. Sin todos los preámbulos y contramarchas que caracterizaran el
debate descentralizador boliviano de la década de los ochenta, los operadores públicos del
gobierno del entonces presidente Sánchez de Lozada transforman, de manera inesperada y
pragmática, el régimen territorial boliviano, como sólo se lo había hecho en dos oportunidades
anteriores -siempre cada 200 años- con el quiebre territorial toledano de mitades del siglo XVI, y
la reforma borbónica "intendencialista" en las décadas finales del siglo XVIII.

Ahora bien, ni siquiera los indudables logros aparejados a este segundo ciclo municipalista de
descentralización introducido en 1994 podrán ser suficientes para impedir una constatación
paradójica: este modelo merodea su agotamiento aunque no haya pasado ni su adolescencia. El
movimiento excesivamente pendular de una tradición, cierto, departamentalista en el primer ciclo
contemporáneo que arrancara en 1972, hacia una de un municipalismo secante desde 1994, ha
generado, casi diez años después, una serie de incertidumbres, cuestionamientos,
desproporciones y alarmas que conviene rastrear y sistematizar. Está claro que la antítesis
municipalista de 1994 no puede ser ignorada en la síntesis que reequilibre las relaciones ínter
territoriales en Bolivia, síntesis cuyo núcleo encierra un reposicionamiento estructural del nivel
meso en Bolivia. Como quiera que fuera, enante este estado de crisis de equilibrio del
ordenamiento territorial boliviano, que se pone a consideración una de las formas posibles de
síntesis al dilema presentado. Este desemboque es el Estado triterritorial.

II. Las opciones generales para el meso

Sin embargo, antes de-aborcUtr la opción, triterritorial vale la pena recapitular un poco la
sistemática más general de modelos de organización territorial que ños permitirá entender que
hay aún otros caminos que estando igualmente concentrados en el meso (pues la querella en
torno al meso es la cuestión en juego en cualquier síntesis territorial anhelada), contienen una
gama de beneficios sociales sin que para ello se lleve necesariamente el meso a un régimen
descentralizado.

El presente texto es una adaptación al documento de trabajo que el autor preparara en ocasión del seminario del
ILDIS para debatir la edición de £/ Estado Triterritorial: Una nueva descentralización para Bolivia (Plural/ ILDIS, La
Paz, 2003). Economista, Coordinador del programa nacional de reforma y análisis de la descentralización (PRAD) en el
ministerio de Participación Popular.

Esquematizaron del menú básica de opciones de modos de Estado

i no federal federal

I "unitario"
5
.
1
"1 1
« sistema compuesto de Meso
a£ agencias territorial
1 sectoriales Meso descentralizado en
fu descentralizado sistema federal
Meso como corporación en sistema
territorial
territorial

'"^

Unitario federal

Para comenzar, todo modo de Estado está centralmente definido por dos consideraciones
básicas: la articulación específica entre el status constitucional de los niveles territoriales, por un
lado, y la forma de división vertical del poder en el Estado, por el otro. En este marco se
hablará de cuatro escenarios gruesos para Bolivia si de reformar su meso se trata. De ellos sólo
dos implican "descentralización" en sentido estricto para el meso: el caso federal y el caso
triterritorial. Los otros dos se mueven dentro de los modelos de desconcentración.

La alternativa de un meso descentralizado en Bolivia ha sido crecientemente desprestigiada


pues se le atribuye el riesgo de llevar a Bolivia hacia la "federalización" y la "desmembración
nacional"; mientras que desde el campo municipalista, se la denigra por contener premisas que
se aplicarían en desmedro de los logros alcanzados desde 1994 con la LPP. Como se verá, se
trata de temores infundados.
2.1. La alternativa de un meso desconcentrado vía agencias sectoriales subnacionales
Lo que sucede en este primer escenario es que el nivel nacional instala sendas agencias de
inversión especializada en el nivel subnacional. Ciertamente, las agencias desconcentradas
desarrollan metodologías de gasto con elevados grados de adaptación técnica al medio pero,
eso sí, se encuentran vinculadas a las carteras nacionales sectoriales por líneas de mando
relativamente lineales y directas.
A fin de coordinar las accio nes de las agencias, el nivel nacional puede mantener en este modelo
una suerte de delegado técnico de coordina ción o conferir esta tarea a un prefecto por lo demás
reducido a tareas de representación protocolar del nivel nacional, la garantía del orden interno
en el departamento y la centralización de información regional pero sin nin gún grado de tuición
sobre las agencias sectoriales que no sean las de simple coordinación. Si bien este delegado
nacional puede ser designado por el presidente sin mayores exigencias de idoneidad técnica, las
cabezas de las agencias sólo debieran ser reclutadas por mecanismos estrictos de idoneidad. Cada
agencia podría conformar consejos consultivos de actores sociales específicamente afectados por
los proyectos de inversión respectivos. Los recursos financieros serían fundamentalmente
condicionados además de un margen para cubrir costos generales de administración en cada agen-
cia. A diferencia de los otros escenarios, la exigencia de que el nivel municipal, o aún más,
mancomunidades municipales, con todas las ineficiencias que eso implica, sean las que deban
capturar problemas de desarrollo territorial supra municipal, se hace evidente aquí ante la extrema
debilidad que en este escenario, muestra la gestión territorializada en el meso.

En resumen, en este modelo, bien vistas las cosas, se sincera con mu cho criterio práctico y bajos
costos de aplicación, el evidente perfil competencial actual del meso boliviano que viene a ser,
en realidad, una suerte de gran agencia subnacional de inversión en infraestructura. Dado ese perfil
se trata pues de consagrar una eficiente y efectiva red departamental de agencias altamente
tecnificadas de inversión regional. Si bien este camino es sin duda el más expedito en términos
de trámite legal, está claro que irritaría con encono las a veces subestimadas identidades
regionales bolivianas que cargan orígenes incluso prerepublicanos.

• 2.2. La alternativa de un meso desconcentrado vía un cuerpo territorial

Existe un molde distinto al anterior que es parte aún del campo de desconcentración del Estado,
por tanto, de un meso aún no descentraliza do. Pero las virtudes de la desconcentración son
explotadas al máximo al extraerse en este contexto el mayor beneficio al poder reglamentario,
la reingeniería gerencial, una visión territorial de intervención pública, e in cluso, pudiendo darse
aquí la elección democrática de la autoridad principal. La desconcentración llega aquí a su
frontera "extrema" pues el nivel nacional pasa competencias a un cuerpo territorial.

Desconcentración y descentralización del Estado

Campo del poder ejecutivo Campo de gobierno


nacional a nivel subnacional
subnacional

Desconcentración : Descentralización

Ente Ente Ente "persona” Ente “gubernativo"


"sucursal" desdobl jurídica
:

"

De todas las maneras de desconcentración, ésta es la más pretenciosa. En este modelo, el meso
no tiene por qué tener un cuerpo legislativo, de biendo eso sí, explotar al máximo el poder
reglamentario. La explotación de normas de tipo reglamentario si bien no introduce
"legislaciones" dis tintas a las definidas por el nivel nacional, puede acercar efectivamente la
administración al territorio subnacional por los efectos benéficos de ada ptación de la gestión
pública a peculiaridades regionales o locales. Esta vía de una desconcentración por medio de
una corporación territorial que implica además envolver una masa crítica de entidades
regionales bajo una sola entidad, tiene un perfil competencial multipropósito y como lo indica
su nombre, no es funcional sino territorial. Bajo tales condiciones, el nivel nacional debiera
verse impedido de establecer relaciones que perforen la entidad regional mediante, por ejemplo,
un relacionamiento directo con unidades de gestión sectorial ubicadas dentro de ella.

La menor condicionalidad en los recursos fiscales transferidos o cedidos al cuerpo territorial, se


justifica aquí desde el momento en que este modelo supone una capacidad de planificación de
mediano plazo realmente orientadora del gasto de la entidad. Con el modelo pueden coexistir
tanto las alternativas de elección directa del ejecutivo regional como aquellas donde éste es designado
por el presidente de la república aunque bajo efectivos criterios de idoneidad. Incluso la
conformación de órganos deliberativos y de fiscalización complejos puede ser adoptado aunque
estos dispositivos se hallen permanentemente en tensión con la naturaleza no gubernativa que el
meso aquí asume. Por ello es que tampoco se descarta aquí que al ejecutivo regional, elegido o no, se
acople un directorio consultivo social.

Es un modelo con costos de aplicación regulares porque perfecciona el poder reglamentario,


sin mencionar además, que no requeriría grandes cambios constitucionales y su evidente
modestia de diseño, no alimenta los temores mencionados de "federalización" o
"desmembración".

2.3. La alternativa de un meso con calidad de gobierno

Esta alternativa nace cuando se rompe el monopolio legislativo del nivel nacional pero dicha
ruptura se produce en beneficio de una apertura legislativa para el meso. En otras palabras la
ruptura se produce no -o no sólo- cuando se tiene elección directa de ejecutivo máximo del
territorio. En el caso boliviano esto supondría añadir a los dos vigentes niveles con calidad de
gobierno (nacional/municipal), uno tercero. Pero adviértase que la ruptura del monopolio
legislativo en beneficio del meso no lleva necesariamente a una forma federal de Estado como
se suele suponer. Ahora bien, se puede afirmar, por supuesto, que al tener el nivel meso una
asamblea regional legislativa, se implicará preferentemente una conformación democrática de
dicho cuerpo.

No sólo se cree, erróneamente, que optar por un meso con cuerpo legislativo puede l evar a la
"federalización" del país. Peor aún, se cree que bajo estas condiciones no se puede ya garantizar el
orden público subnacional y la unidad nacional. Al contrarié), debiera estar claro que optar por un
meso descentralizado, no implica mayor riesgo en este sentido. En Bolivia por ejemplo, de tenerse
un meso como gobierno, las labores de cohesión pública y seguridad interna podrían incluso
dejarse en manos de un prefecto que, paralelo a los órganos de poder regional directamente
elegidos, quedaría con la tarea de representación protocolar del nivel nacional y en tanto
dependencia de la cartera del Interior, podría coordinar operaciones de orden público.

Pero incluso se podría, con mayores efectos de ahorro, implicar la ga rantía del orden público, a
través de los mecanismos de presencia geográfica desconcentrada de los órganos de coerción
clásicos como la policía. Por supuesto que no se debe descartar además que tales labores
pudieran finalmente ser asumidas por el máximo ejecutivo regional, que no por ser
democráticamente elegido, está libre de tener que ejecutar tareas por desconcentración, y mucho
menos, autorizado para no acatar el ordenamiento jurídico estatal supremo.
Sea como fuere, este escenario abre las opciones para que la región ejerza políticas
diferenciadas en su territorio, pero introduciendo un claro sistema de contrafrenos horizontales
de poder entre ejecutivo y legislativo. Esto último implica elección democrática de órganos,
claras atribuciones para fiscalizar y reales márgenes de legislación regional. Un sistema de este
tipo requiere, por supuesto, una estructura de recursos financieros claramente libre de
excesivos condicionamientos para parte importante de recursos obtenidos desde el nivel
nacional. Pero implica, en especial, impuestos territoriales propios y suficiente
impermeabilización de penetraciones tanto sectorialitas como del sistema hacendístico
nacional sobre las operaciones de gestión del meso.

Es importante subrayar entonces que en semejantes condiciones, se altera la matriz de distribución


competencial. La región no puede ser ya un sim ple ejecutor de gastos de inversión en
infraestructura según visiones más centrales que descentralizadas. El catálogo competencial debe
abrirse hacia la legislación subnacional en temas como la educación, en competencias
proactivas de fomento económico regional, política agraria, medio ambiente y cultura. Un meso
descentralizado (en un esquema triterritorial, "autonómico" o el que fuera) implicaría en Bolivia
enmiendas constitucionales amén de conllevar rupturas de monopolio legislativo y apertura de
dominios tributa rios para el nivel intermedio territorial. Si bien esta alternativa representa un
camino complejo y costoso, es recomendable para resolver temas de exclusión étnica de "alta escala
espacial". La nueva división vertical de poder que todo esto contiene, incrementa pues las
opciones de absorber externalidades y empatar mejor la espacialidad de productos estatales con el
grupo de ciudadanos que para consumirlos los paguen con sus tributos y se involucren en su definición
político-social. Como se ve, este camino afectaría además el paradigma pro-municipalista de
descentralización que hoy rige en Bolivia, por mucho que un meso fuerte no es necesariamente, como
se verá, un proceso a expensas del nivel local. Finalmente, sería un pretexto para que la gestión pública
boliviana repiense uno de los elementos sustanciales que no ha sido resuelto por la LPP: la fuerza de la
ortodoxia de mercado impidiendo que los niveles subnacionales ensayen política económica territorial
innovativa.
Esquematizaron de rasgos fuertes de las opciones
Meso como gobierno Meso como corporación Meso como red de agencias
territorial
Competencias -Política económica regional -proyectos de desarrollo regional- -Agencia regional de caminos -Agencia
diferenciada inversiones en caminos regionales regional de infraestructura productiva
-Polític as agrarias y medio am - -inversiones en infraestructura -Agencia regional de electrificación
bientales diferenciadas productiva regional -Agencia regional de agricultura
-Educación superior y técnica -electrificación regional -Agencia regional de educación salud,
diferenciada -redes de protección social asistencia social y servicios básicos
-Asuntos culturales y de pueblos -supervisión en salud. educación,
originarios diferenciadamente asistencia social y servicios básic os
resueltos dentro del departamento
-Supervisión en salud, educación,
asistencia social y servicios básicos
Aspectos políticos -Ejecutiv o regional elegido -Ejecutivo regional designado o -Gerentes de Agencia designado; por
-Asamblea legislativa regional elegido idoneidad
elegida por electorado regional -Asamblea elegida o de represen- -Grupos de consulta focal por beneficiarios
tación corporativa

Participación -Elecciones regionales -Vía Planificación departamental -directorios sociales por sector
-Vía Planificación departamental

Atribuciones de au- Sin prefecto; pero la cabeza asume Prefecto paralelo al ejecutivo elegido; Prefecto es delegado del nivel nacional y sólo
toridad paralelamente tareas de seguridad o éste fusiona ambas cosas coordina a las agencias
interna
Recursos fiscales -impuestos propios territoriales -coparticipaciones no condicionadas -sólo transferencias de propósito específico
-coparticipaciones no condicionadas -regalías
-regalías -transferencias -transferencias
III. La salida triterritorial como alternativa de un nuevo meso descentralizado

El tercer ciclo o síntesis territorial que se aviz ora en Bolivia tiene, qué duda cabe, más de un
derrotero imaginable. Se propone aquí una de las posibles salidas al régimen que usualmente se
conoce como "unitario" pero sin por ello necesariamente llegar a aquel otro conocido como
federal. La crisis territorial tiene una dimensión estructural y ésta se puede encarar desde un
régimen triterritorial. El Estado triterritorial es un modo de Estado donde se conforma un sistema
de tres niveles territoriales, el nacional (o superior), el departamental (o meso) y el municipal (o
inferior), los cua les se traban en términos de estricta coordinación o de lo que puede lla marse, un
modelo de equipolencia constitucional entre niveles territoriales. Estos tres niveles cargan
entonces un valor constitucional equivalente, lo cual implica, entre otras cosas, descubrir lo
nacional como estrato territorial con comparables derechos pero también deberes institucionales
que los otros dos. A partir del precepto triterritorial el modelo de descentralización alcanza con
igual ímpetu, al nivel nacional como parte verídicamente afectable por las alteraciones de poder
territorial. Significa, adicionalmente, un nivel meso con calidad de gobierno y una cualificación
constitucional del nivel municipal, pues el hecho de que éste hoy goce de calidad gubernativa,
no agota aún las opciones de un mayor empoderamiento municipal.

Formación político-espacial

Confederación Estado
(forma unitaria) (forma unitaria)
Modo federal

Modo Modo Modo


federal triterritorial |unitario

Implica finalmente, la aparición plena del Estado en su conjunto pero como algo disociado del
nivel nacional territorial de gobierno. El Estado en su conjunto es pues el ente que envuelve a los
tres niveles y, finalmente, los subordina por igual en tanto orden supremo.
Estado en su conjunto

Meso
Nivel municipal
Nivel nacional

Los tres niveles anclan así, constitucionalmente, cristalinos catálogos de competencias, y el


modelo genera por diseño una apertura de espacios de decisión regional reales, pues implica la
ruptura del monopolio legislativo del nivel nacional en favor del meso. Y es que la sociedad regional,
bajo determinadas condiciones, puede no contentarse ya con "simples" potestades de "planificar"
cuando éstas además -como sucede en Solivia - se esterilizan por la fuerza que de facto despliega
el nivel nacional en el día a día de la gestión estatal subnacional. La experiencia boliviana
permite, por tanto, descubrir que serán leyes del o desde el meso -y mejor si forjadas por órganos
elegidos democ ráticamente los medios definitivamente más efectivos para materializar
aspiraciones de distinta vida pública desde la sociedad regional. Más efectivos en todo caso que
las potestades reducidas a la pequeña alegría de "fiscalizar" el menudeo de adquisicio nes de
bienes y servicios, que es a lo que se ha reducido actualmente la fuerza de los "consejos
departamentales" como órganos formales de control en las prefecturas bolivianas. De hecho,
éstas son hoy amiotróficos intentos de lo que arriba se ha llamado un modelo de
desconcentración por corporación territorial que, dada su naturaleza justamente desconcentrada,
por lo de más, sólo debe implementar decisiones del nivel nacional.
Es a partir de un meso con calidad de gobierno que recién se inaugura una descentralización para
el nivel departamental, pero si, además, dicho proceso se produce en condiciones triterritoriales,
se acopla a aquélla que en 1994 introdujera en Bolivia un rusificado nivel local el cual, por efecto
de la triterritorialidad, elevaría también su peso institucional.

Un meso descentralizado para comenzar significa para la sociedad dotarse de válvulas


sostenibles para capturar ciertas externalidades que desbordarán el nivel municipal. Pero más
interesante aún, ofrece sobre todo un recipiente para dar cabida política a identidades socio-
espaciales más complejas cuyo afán es poder codefinir en asuntos propios. En el esquema
triterritorial no se opta, en consecuencia, por un diseño enrevesa do, por ejemplo, de vetos
territoriales de los compone ntes del meso a nivel nacional a través de un senado o una cámara
legislativa alta donde, además de oficiar de cámara revisora en general, se sientan las unidades
del meso para co-legislar en temas que les atañen.

¿Estamos con lo triterritorial hablando de un desenlace federal? No, pues el Estado


triterritorial se aparta justamente de virtudes y defectos que definen rigurosamente lo federal:
cámara territorial con efectivos vetos globales; encapsulamiento constitucional del nivel
municipal dentro del meso; o fragilidad endémica por difundir la innovación fermentada en la
competencia entre territorios en materia legislativa y de gestión.
Graficación del Estado federal
(caso general)

Estado en su conjunto Meso


Nivel municipal

¿Se trata acaso sólo de una agudización de los grados de descentralización del llamado Estado
"unitario"? Tampoco, pues se eleva lo municipal a un rango equiparable a los otros dos, -el
nacional y meso- "deflactándose" de paso la preponderancia del nivel nacional por efecto de la
misma equiparación constitucional de los territorios. Se fundan, además, las bases para eliminar
-y eso diferencia por ejemplo lo triterritorial de la salida autonómica española, esa red de
autoridades dependientes del nivel nacional (en Bolivia se hablará en este caso de corregimientos
cantonales, subprefecturas provinciales, agentes cantonales), arborescente hasta el último
escalón de un Estado subutilizado, así, en sus cualidades coercitivas radicadas de por sí en la
"infraestructura" del Estado subnacional. Se afecta la típica compulsión de uniformización
normativa del llamado Estado "unitario" y se le desmantelan los artefactos que un Estado tal ins-
tala por principio para creerse en "unidad y paz", y que uno triterritorial, al revés, advierte como
simple y llanamente superfluos.

Graficación del Estado "unitario"

(caso Bolivia)

Meso
Nivel municipal

Estado en su conjunto
3.1. El rédito que contiene lo triterritorial para el nivel municipal

La opción de un meso con calidad de gobierno podría ser interpreta da como una amenaza a los
logros alcanzados por el nivel municipal en Bolivia. Sin embargo, el meso fortalecido está aquí,
en realidad, pensado en un esquema de un peculiar equilibrio territorial trifronte. Como se puede
deducir de la evolución del sistema territorial boliviano, el beneficio que significó la
introducción del nivel municipal en 1994, no cortó, por ejemplo, algunos lazos de autorización en
temas sensibles a los municipios como la determinación de tasas y patentes locales desde el nivel
nacional.

Tampoco implicó jerarquizar su status territorial en el texto constitucional. Significó más bien,
ratificar el trato de lo local como un "régimen especial", arrinconado al final de la carta magna
boliviana, junto a la cuestión agraria, cultural o familiar. Un diseño pues conflictivo ya sea
porque bajo el caparazón de una autonomía malentendida el nivel municipal cree poder zafarse
de la normativa estatal más general (léase, por ejemplo, su peculiar relación con el régimen de
la carrera administrativa); ya sea por que así se consolida un limbo "autonómico", más parecido
a un trato de generosidad constitucional que de incorporación orgánica de lo local al engranaje
estatal (léase la ya mencionada duplicación de autoridades estatales a nivel local).

3.2 La equívoca alternativa de la mancomunización municipal como meso

La corriente municipalista no ha quedado quieta ante la peligrosa tendencia, por ella misma
desatada, de concebir al municipio como el arma zón ideal para enfrentar, si no todos, por lo
menos gran parte de los problemas del desarrollo. Como era de esperarse, su salida no ha sido
repensar seriamente el meso, sino proclamar frenéticamente la figura de las mancomunidades
municipales como un eslabón que más que concebido para la regulación a probables desbordes
competenciales, se lo excita como refundación aparatosa de instancias territoriales con
planificación "inte gral", financiamiento nacional preceptivo, vinculación al "desarrollo económico
local", el "control social", una nueva esfera de participación civil a este nivel y todos los demás
aderezos de un diseño emotivo y desproporcionado. Las mancomunidades municipales, empero,
son titiles en casos específicos de desborde competencial, o sea de tareas que, dicho sea de paso,
de todos modos quedarán como asuntos del régimen municipal (ámbito donde la figura
mancomunitaria no deja de pertenecer) sólo que "agregadamente" resueltos por acuerdo puntual
de partes. Pero ¿y quien asume las otras externalidades étnicas o económicas que no se capturan ni
con la mancomunidad?

La opción mancomunitaria tiene el riesgo pues de convertirse en una nueva ola de diseño
espasmódico de gestión pública cuando se trata en realidad de una figura de asociaciones
contractuales entre municipios, justificadas para la específica solución de problemas de provisión
de bienes y servicios concretos.

Ya la vigente ley de municipalidades de 1999 distorsionó este sentido originalmente previsto por
la Constitución, al formular ideas de apoyo "prioritario" desde los sistemas nacionales de
planificación y financiamiento a quienes se mancomunaran. Por otro lado, propuso la figura
mancomunitaria como mecanismo para dar cuenta del delicado problema de los territorios
étnicos originarios que, a todas luces, en más de un caso, revientan los bordes institucionales
que ofrece la misma mancomunidad. Pero es en especial una norma específica para
mancomunidades de mediados de 2001, donde se ha hecho más notorio el dimensionamiento
engorroso de la figura mancomuritaria, a pesar de haber estipulado razona blemente en dicha
norma un ágil camino de su disolución. La idea de "asociaciones municipales", flexibles y de
propósito específico -a eso debería reducirse la figura de la mancomunidad municipal- se la
disgrega aquí de la categoría "mancomunidad". A ésta se le reserva erradamente más bien la
absorción de hechos territoriales que, de realmente existir con la notoria fuerza socioespacial que
se les atribuye, debieran buscar más bien su solución en la conformación de unidades
municipales de pleno derecho (léase la fusión municipal).

En consecuencia, una aplicación flexible y no ampulosa de la asocia ción de municipios es útil


pero puede resultar contraproducente si pretende capturar valores públicos de escala meso o
resolver asuntos de identidad territorial étnica en cánones de derecho privado. Por lo tanto, la
cuestión mancomunitaria resumidamente, puede adquirir sentido y ser sostenible si se
consideran las siguientes pautas generales:

i) Toda mancomunidad debiera crearse sólo para resolver temas específicos cuya resolución
desde municipios individualmente tomados es ineficiente u operativamente costosa. En
este sentido no habrían, por un lado, mancomunidades "funcionales" (precisamente
aquellas para resolver temas puntua les), y por el otro, mancomunidades "te rritoriales" dado
que lo ultimo colinda en realidad o con el sustancial tema de la fusión municipal o, al
extremo, con la reposición del nivel provincial boliviano.

ii) Las mancomunidades serían de dos tipos: o voluntarias o preceptivas.

Las mancomunidades de calidad preceptiva se crean obligadamente por "utilidad pública"


y justamente ofrecen bienes y servicios en tres grandes grupos:

Mancomunidades para la provisión de bienes meritorios:

• Servicios en salud, educación y saneamiento básico cuando dicha provisión, ni puede ser
atendida por los municipios; ni la escala en cuestión es lo suficientemente grande para
caer en la competencia directamente prefectural.

Mancomunidades para la provisión de bienes públicos:

• Externalidades ambientales derivadas del manejo de cuencas; áreas protegidas:

Mancomunidades para bienes "estatales":

• Cuando se hace necesario el apoyo a la consolidación contable municipal y a la preinversión


y ciclo de proyectos para unidades municipales demasiado pequeñas para tales fines.

Las mancomunidades serán voluntarias cuando los municipios esta blecen convenios que no
implican la provisión de bienes "meritorios", "públicos" o "estatales" ya listados. Las
mancomunidades de tipo voluntario serían de dos clases:

• "Mancomunidades hacia la fusión futura en un municipio";


• Mancomunidades para acciones puntuales no relativas a temas asumidos por las de tipo
preceptivo.
iii) En caso de las mancomunidades preceptivas, los recursos provendrán de los municipios
(independientemente que éstos los reciban, en realidad, del centro como transferencia
condicionada); no pudiendo ir las mismas directamente del Estado central a las
mancomunidades. Esto no excluye por cierto el establecimiento del "débito automático" para
garantizar la operación mancomunitaria como tal. En el caso de las voluntarias, sólo aquellos
municipios que se adscriban a una futura fusión recibirían recursos prefecturales como incentivo
a su fusión gradual; las otras voluntarias tendrán recursos de los municipios que han decidido
asociarse o de donación siempre y cuando la misma entre "contablemente" al municipio socio y
éste derive a su turno el recurso a la mancomunidad.

iv)No se tendrán en las mancomunidades (salvo en aquellas "hacia la fusión municipal


futura") formatos pesados y equívocamente pretenciosos de planificación "integral"
exigiéndose sólo planes de gestión específica de proyectos;

v) Toda mancomunidad tendrá un directorio formado por los alcaldes y un gerente para la parte
operativa. Los concejales municipales fiscalizarían al alcalde en lo que hace a lo
mancomunitario, pero como parte de la agenda corriente de fiscalización al poder municipal.

vi) Las mancomunidades son personas de derecho privado contractual-mente establecidas y


disolubles una vez materializado el propósito de su creación. La figura privada se justifica
por el carácter contractual específico de la mancomunidad y por las ventajas comparativas
desde la perspectiva de la utilidad prevista para las mancomunidades, a saber, resolver temas
específicos de externalidades.

3.3. ¿Por qué una estructura territorial "bigubernativa" como la que actualmente rige en
Bolivia no sería preferible a una triterritorial?

El patrón de organización territorial vigente en Bolivia está caracterizado por la concatenación de


los siguientes rasgos: primero, se calificará el mismo corno "territorialmente b/gubernativo" dado
que se han consolidado en el país dos niveles territoriales como entidades con calidad de
gobierno. Se dirá luego que es "bipolar" pues no es el meso, sino sólo los "extremos" nacional y
local los que adquieren semejante dimensión gubernativa. En tercer lugar -y aunque parezca
paradójico- el rango gubernativo del nivel municipal no ha significado elevarlo a un status
constitucional equiparable al nacional. Según las normas bolivianas, el municipio es beneficiario
de un régimen especial de "autonomía", calidad que ambiguamente le es asignada también al
sistema universitario. La tradición ha hecho que esta autonomía sea tendencialmente asimilada
a un ámbito "a-estatal" de gestión, interpretándose en cierta forma el status municipal como
una suerte de acuerdo "entre el Estado" y "asociaciones civiles" locales a fin de que las mismas,
no sean interferidas en sus actos administrativos mínimos desde el Estado. El cuarto rasgo del
patrón boliviano de organización territorial se refiere al concepto "indígeno-distritalista"
aplicado a fin de dar cuenta de las territorialidades étnicas. En efecto, éstas serán admitidas, en
el mejor de los casos, en el molde de unidades desconcentradas dentro del municipio
correspondiente descartándose por tanto la opción de otorgarles calidad de entidad territorial
gubernativa.

Está claro que este patrón boliviano de orga nización territorial no se sale del modo de Estado
generalmente conocido como "unitario". Ahora bien, el modo de Estado llamado triterritorial
altera por lógica el patrón descrito. Como se planteó arriba, no sólo se compone de tres niveles
territoriales con calidad gubernativa al investir al meso con calidad de gobierno territorial, sino
que, como ya se dijo, "sube" al nivel municipal y "baja" al nacional, estableciendo así un
equilibrio territorial gracias a la equipotencia constitucional que le es característica. "Sube" al
municipio, pues no se trata ya de un régimen especial cuasi civil, sino de un eslabón territorial
del Estado y tan impermeabilizado de eventuales intromisiones administrativas superiores,
como lo serían los otros dos. "Baja" al nivel nacional pues éste deja de estar amalgamado con el
Estado en su conjunto y debe ser sometido a las mismas exigencias de rendimiento institucional
que el meso o el municipio.

Alteración de la correlación de fuerzas constitucionales de lo territorial como


efe cto de lo triterritorial
"Baja lo nacional" al desprenderse el "Estado en su
conjunto" del nivel territorial nacional.

Se abre un nivel meso como nivel de gobierno.

Se "sube lo local" al sacar el nivel municipal


de su actual trato de régimen de administración
"respetada".

Llegados a este punto interesa resumir no tanto los réditos de un sistema de niveles territoriales
modularmente articulados, como el hecho específico de un meso convertido en eslabón
territorial con calidad de gobierno. El meso, hemos visto, permite abrir un campo de decisión
para visiones rnacrosociales de una escala que es demasiado grande como para ser canalizada
desde un municipio o, incluso, desde una asociación de municipios. Pero a la vez demasiado
"propias" como para ser tratadas desde el nivel nacional. En este contexto es pertinente
recordar una vez más que, en el caso de Bolivia, la escala entre lo local y lo nacional provie ne de
antes de su independencia como República en 1825 con la creación de las intendencias,
pudiendo rastreársela incluso más atrás en la figura de las gobernaciones y la jurisdicción de la
audiencia de Charcas. Y nótese que el grado con el que cuajaron las intendencias, como lo
hicieron en el Alto Perú colonial, no fue igual de exitoso en todo el sistema virreinal español en
América.

En un modo de Estado triterritorial, se abre la posibilidad de procesar socioestatalmente lo étnico


territorial dentro del meso, cuando se trate de constelaciones más grandes que un municipio
(pues más de una de ellas puede tranquilamente ser "atendida" confiriéndole rango de
gobierno municipal). Se puede en este sentido articular lo étnico-territorial políticamente a los
órganos de poder regionales en la forma, por ejemplo, de un bicameralismo dentro de los
departamentos que así lo requirieran. Sea como fuere, lo importante es permitir la consagración
de la sociedad regional.

Otro justificativo adicional, anticipado líneas arriba, viene de la necesidad de capturar externalidades
en la provisión de bienes estatales que desbordan incluso los mecanismos de mancomunización
municipal, incluso de aquellos bien concebidos. Desde una perspectiva más global, la no creación de
un meso fuerte podría generar problemas de lo que podría llamarse "baja compresión competencial".
En efecto, un meso, en tanto gobierno, funge como una suerte de malla de contención a potenciales y a
veces excesivos traspasos del ámbito nacional al local. Su inexistencia puede llevar, por otro lado, a
procesos a veces festejados pero siempre riesgosos de "hiperdescentralización" de corte localista. Un
meso escuálido puede finalmente presionar para que el nivel nacional asuma tareas que, de existir la
opción de un meso fuerte, aquel no las hubiera encarado con mano propia. Así pues, a fuerza de la
inexistencia de un meso fuerte, productos estatales de escala regional son inevitable mente
"fabricados" por la "usinas" nacionales y locales, con los correspondientes sobre costos
potencialmente implícitos.

Se debe mencionar un último aspecto altamente estratégico. La exis tencia de un catálogo


competencial con posibilidad de ser ofertado desde el meso funda la oportunidad de explotar los
beneficios de una competencia en una suerte de mercado de innovaciones legislativas
interterritoriales que ya se apuntara arriba. El meso aparece, en efecto, como un ámbito más
adecuado para ensayar políticas educativas diferenciadas frente a la opción de hacerlo a través
de la miríada de municipios que suelen generalmente componer un país. Así, en Bolivia, es
más sensato imaginar un sistema de competencia educativa entre las nueve piezas del meso
hoy existentes que entre sus más de trescientos municipios.

Rasgos seleccionados de los modos de Estado analizados

Federal Tri-territorial "unitario": caso


Bolivia
¿Senado? Si No SI
¿Senado como resguardo territorial efectivo? Sí No NO

¿Colegislación meso en asuntos nacionales? Sí No No


¿Meso con facultad de legislación? Sí Sí No
¿Municipio como nivel del gobierno territorial? Sí Sí SÍ
¿Municipio como segmento territorial de! Estado? No SÍ NO
¿Administración nacional paralela en el ámbito subnacional? Sí NO SÍ
¿Majestad tributaria propia del meso? Si Sí NO

¿Sistema efectivo de competencia legislativa interterritorial No Sí No


meso? Ha Sí No
¿Sujeción del nivel nacional a equiparables cánones de
rendimiento aplicables al meso y al municipio?
¿Resguardo jerárquico del orden territorial? Sí Sí No
¿Probable incremento absoluto de costos administrativos por Sí Sí No
funcionamiento de nivel territorial?
¿Flexibilidad para capturar costos de externalidades técnicas y Sí Sí No
étnicas regionales?

IV. Epilogo metodológico: el dilema entre "teoría / práctica" y aquél entre "ideología y
técnica"

Hablar de "tecnología territorial en la civilización humana", "modelo territorial", "efectos de diseño"


o "experiencias comparativas", genera en el país una llamativa reacción de los especialistas que sienten
como afrenta un enfoque de este tipo "indiferente a los analistas nacionales", "teórico", "importado",
"no aterrizado", etc. Al contrario, se puede sostener que uno de los obstáculos que se antepusieron al
diseño congruente del orden territorial en Bolivia (como se desprende de un primer vistazo a la arqueo-
logía del municipalismo boliviano pero también del peculiar departamentalismo previo) fue
justamente la limitada pulcritud e insuficiente demarcación teórica para conceptualizar procesos
territoriales. Es por eso que la delimitación teórica del Estado triterritorial, vale decir, la explicitación
de sus coordenadas conceptuales fundamentales y de las temáticas que irrumpen gracias a su
consideración, se constituyen en una obligación metodológica. Debe uno ponerse a reflexionar
sobre los efectos de diseño que pretende traer lo triterritorial y ese debate se produce también en el
campo de las precisiones conceptuales. Mejor aún, el diseño de nuevas alternativas territoriales pasa
por componer el menú técnicamente congruente de opciones de distribución territorial del poder y
que se hallan desde siempre a disposición de la civilización humana; y confrontarlas con las
aspiraciones vitales de la gente en la realidad concreta. La pregunta será entonces cuál es el mejor
instrumento para capturar el embrollo socioespacial peculiar del país.

La modelación del Estado triterritorial se enraíza por cierto en una revisión exploratoria de
procesos territoriales que funcionan en varios países del mundo y recoge de aquí su primer
respaldo empírico aunque este procedimiento heurístico genere resentimiento en quienes creen po-
der entender la tecnología de lo territorial desde una sudorosa autocognición nacionalmente
ombligocéntrica.

Con todo, la propuesta triterritorial surge además de sopesar los pormenores de la actual práctica
territorial boliviana pero, en especial, de compadecerse del hecho de que el país tiene una evidente
dimensión regional, por mucho que en el futuro la norma nunca lo admitiera, fomentara o
absorbiera. Más de una guerra civil en Bolivia tuvo una explicación interna de índole regional. No
atender este dilema desde una perspectiva sosegada sería llevar leña al fogón de propuestas de un
delirio etnoterritorial que pretende fragmentar el Estado bajo una lógica, además, de "cuoteo" racial
cié la misma administración pública.

¿Cuan viable es la puesta en marcha de un ordenamiento triterritorial? Las implicaciones de semejante


orden conducirían, es cierto, a una enmienda constitucional importante. Pero esto no pasaría de ser un
impedimento de fácil resolución procedimental. Un impedimento mayor radica, en realidad, en superar
los más disímiles prejuicios que lo triterritorial amenaza y devela. A diferencia de la reforma
municipal de 1994, que fue imple mentada sin necesidad de arduos procesos de consenso social
(poniendo saludablemente en duda aquello de que sólo procesos de "abajo hacia arriba" son
beneficiosos para la sociedad), la multitud de sensibilidades "unitaristas" y prejuicios municipalistas
que afectaría un orden triterritorial, hacen que una reforma del meso de tal magnitud requiera de deli-
cados consensos. Es por ello, una vez más, que un requisito es justamente separar el encaramiento
ideológico del asunto del enfoque técnico a fin de que el eventual fracaso de un meso fuerte se explique
por resistencias políticas y no por confusiones de orden técnico.
5. Estado Unitario Descentralizado

5.1 Las autonomías Departamentales, Juan Carlos Urenda

AUTONOMÍAS DEPARTAMENTALES
Por: Juan Carlos URENDA

7
LA ALTERNATIVA:
LAS AUTONOMÍAS DEPARTAMENTALES

El Estado debe potenciar sus elementos integrantes reales, a los que genéricamente se llama
regiones, para que en base a un auténtico desarrollo regional se consiga un efectivo
desarrollo nacional.
John Kenneth Galbraith1

ANÁLISIS DE LO INSUFICIENTE QUE RESULTAN PARA LA REALIDAD


BOLIVIANA LA CONFEDERACIÓN DE ESTADOS, EL ESTADO FEDERAL, EL
ESTADO UNITARIO EN SUS VARIABLES DE DESCONCENTRACIÓN Y DESCEN-
TRALIZACIÓN ADMINISTRATIVA Y EL ESTADO LIBRE ASOCIADO.

¿Porqué las autonomías departamentales constituyen el modelo que mejor se adecua a la


realidad boliviana? Para responder a esta pregunta, haremos un análisis por descarte de las
siguientes formas de Estado que se presentan a menudo como alternativas a la crisis
boliviana: a) La confederación de estados (y el Estado libre asociado).
b) El Estado Federal
c) El Estado Unitario en sus variables de desconcentración y descentralización
administrativa.
Sin embargo, previamente debemos salvar algunos escollos conceptuales. El primero
consiste en considerar que no existen formas de Estado puras, ni variables administrativas
puras. De ahí que todas las alternativas existentes son, en realidad, modelos que contemplan
variables de otros modelos, lo que por supuesto no altera la condición predominante de un
determinado mo delo y su catalogación como tal.
Segundo escollo: la doctrina del Derecho Público no ha unificado criterios respecto al
significado del concepto "formas de Estado". Cada tratadista ha adecuado el concepto a su
propia temática. Nosotros tomamos el hilo de la corriente que le da el significado de "distri-
bución espacial" de la actividad estatal (espacio físico), diferenciándolo con el de "forma de
gobierno" que es relativo a la actividad "no espacial" del Estado." Al hablar de
"distribución espacial" de la actividad estatal, nos referimos además a lo que Hans Kelsen
denomina "ámbito de validez de la norma". Así tenemos que cuando un Estado está dividido
en diferentes espacios con un ámbito de validez de normas en cada uno de esos espacios,
estamos ante un Estado Federal, o Confederación de Estados si es absoluta la espacialidad
de la vigencia de la norma; en cambio, cuando la actividad de un Estado está en un solo
espacio y por consiguiente, la vigencia de la norma abarca ese "único" espacio, estamos
frente a un Estado Unitario. Ahora, este Estado Unitario puede tener variables de
desconcentración y descentralización administrativa territorial, en las que existe un solo
espacio de validez normativa que se diferencia del modelo de Autonomías regionales o
departamentales, en el que convive un solo "gran espacio", junto a reducidos, "espacios
suegéneris" de validez normativa.
Luego de analizar las opciones arriba señaladas, veremos la alternativa de las autonomías.

La confederación de estados (y el Estado Asociado).


La confederación de estados implica la "Unión permanente de Estados independientes
basada en un pacto, con el fin de protección exteriormente y de paz interiormente", o la
"unión internacional de varios Estados que conservan su total independencia interior y
exterior, con el objeto de aunar sus esfuerzos en asuntos de interés para ellos".'1 Esta, a
nuestro juicio, no constituye una alternativa válida para Bolivia, por cuanto su asociación
con otro país no solucionaría nuestra errónea estructura interna, así como tampoco sería
posible (o razonable) convertir a todos los departamentos de Bolivia en Estados
independientes.
Uno de los fundadores del Movimiento Nación Camba, en un libro recientemente
publicado, formula una propuesta de Confederación de Estados para Bolivia en los
siguientes términos1 :
"....en lugar de luchar por descentralismos conciliadores con el Estado Unitario con
resultados inciertos, o ceder espacios para la implantación de falsas autonomías o
federalismos que obligatoriamente será n impuestos desde arriba y en función de las
pretensiones hegemó nicas del centralismo colonial de Estado y de los intereses espurios en
él representados, el camino correcto es que se busquen los caminos democráticos más
adecuados, para que, Santa Cruz, Beni v Acre (Pando)0 se logran en el marco democrático, el
Estatus del ESTADO ASOCIADO de Bolivia, incluyendo, si posible, a los
departamentos del Sur: Tarija y Chuquisaca, (la denominada media luna geográfica en la
versión tarijeña), para que en forma conj unta o separada, se constituyan en una sola
unidad para conformar orgánicamente y j u n t o al Estado andino-Qolla, una
CONFEDERACIÓN DE ESTADOS, denominado también "federalismo asimétrico y
plural...."
Dentro de este esquema, el mismo autor pule su propuesta: plantea "constituir no más de
dos o tres Estados libremente asociados, federales o autónomos, (sic) cuya composición
interna sería definida por ellos mismos (podría ser por ejemplo, una confederación de Esta-
dos asociados constituidos internamente por Regiones o provincias Autónomas)..."7

Esta es una propuesta que no está clara desde el punto de vista conceptual por cuanto
plantea que los departamentos bolivianos que pretendan convertirse en "estados libres
asociados" deben, primero, optar por la "secesión"3 , es decir, separación, o independencia
absoluta, para luego "asociarse", voluntariamente, al Estado boliviano. Ocurre que en todas
las confederaciones de Estados que se formaron en el mundo, los Estados que las
conformaron, en uso de su soberanía plena, al nacer como confederación, voluntariamente
optaron por esa forma de Estado, como fueron los casos de la Unión de Repúblicas Socialis-
tas Soviéticas o la Confederación Helvética, ambas desaparecidas (Hoy el caso más cercano a
la Confederación de Estados es la Unión Europea). En Bolivia, no obstante que los
departamentos ya llevan casi 180 años de vida en común, tendrían que independizarse
primero (vaya tarea) para luego asociarse al Estado del que se acaban de independizar.

El Estado Federal
Consiste, básicamente, en un Estado compuesto por varios Estados. Sus características
principales son:
a) La soberanía externa es una en algunas materias expresamente autorizadas.
b) Cada Estado miembro tiene ios tres poderes del Estado, Ejecutivo, Legislativo y
Judicial, independientes de los otros Estados y del Estado Federal, y además
c) existen estos tres poderes clásicos a nivel Federal que funcionan como instancias
supremas, representando al conglomerado de Estados.9
Si bien muchos de los proyectos que han pretendido transformar las estructuras bolivianas
sugirieron este sistema o forma de Estado como la alternativa viable, nosotros creemos que
por el momento no lo es, debido a las siguientes razones fundamentales:
a) El Estado Federal implicaría la constitución de un poder Judicial completamente
independiente en cada Departamento. Es decir que cada Departamento tendría su
Corte Suprema Departamental, lo que por el momento en Bolivia sería inoficioso.
b) El Poder Legislativo de cada Estado, para ser tal, se vería en la obligación de
legislar la totalidad de las materias de normatividad positiva. En nuestro país, si
bien los departamentos necesitan una cierta legislación propia, es inoportuno en
las circunstancias actuales otorgarles la creación de la totalid ad de las normas
positivas. Por ejemplo, no sería razonable que cada departamento se dote su propia
codificación (Códigos Civil, Penal, Laboral, etc.) y Constitución Política. Además,
de ser así, se necesitaría dotar a cada departamento de un Poder Legislativo
independiente en cada departamento. En los departamentos des poblados de Bolivia
tal medida sería excesiva en las circunstancias actuales.

9
E¡ tratadista francés Hauriou resume el concepto diciendo que "es una Asociación de
Estados que tienen entre sí relaciones de Derecho Interno (Constitucional) y mediante ¡a
cuai un súper Estado se sobrepone a los Estados Asociados". 'Es -define Esmein- un
compuesto de varios Estados particulares, cada uno de los cuales conserva en principio su
soberanía interior, sus propias leyes y su gobierno. Pero la nación entera, que comprende la
población unida de los Estados particulares, haciendo abstracción de éstos, forma un Estado
Federal, que posee también un Gobierno completo y es siempre el fundamento mismo de!
Estado". En SILVA BASCUÑAN, Alejandro: Tratado de Derecho Constitucional,
Santiago, jurídica de Chile, 1963, pp. 192-204.

c) Los centros de poder hegemónicos que ha tenido este país a lo largo de su vida
republicana, a los que nos hemos referido en páginas anteriores, han mentalizado al
pueblo boliviano -especialmente al andino- en el sentido de que el unitarismo clásico
(cerrado y centralizado) es sinónimo de "patriotismo" y "unidad", ya que les convenía a
sus intereses económicos y hegemónicos. Pues b ien, esta mentalización ha dejado una
herencia tan perniciosa como absurda con relación al concepto del modelo federal, lo
que dificultaría enormemente la transformación del Estado Unitario boliviano a uno
Federal. Conside ramos que intentar la variable autonómica que permite el Estado
Unitario es una labor más asequible para la mentalidad del pueblo boliviano.
d) Si va a haber una transformación de estructuras, ésta tiene que ser gradual y progresiva;
convertir a Bolivia en Estado Federal implicaría un cambio realmente brusco, además de
peligroso por el descontrol total del Estado que ello podría acarrear.
e) El cambio presentaría tremendas dificultades técnico-jurídicas en la aplicación del
modelo, lo que hace imprescindible - una vez que se han descentralizado
administrativamente importantes competencias de educación y salud a favor de los
municipios-avanzar hacia las Autonomías Departamentales. Sólo si estas últimas
resultasen insuficientes a los requerimientos regionales, se tendría que pensar en
federalizar el país.
f) El fracaso del sistema federal en los países latinoamericanos, donde se evidencian
algunas tendencias regresivas y serias imperfecciones en su aplicación, constituye una
experiencia que ciertamente no inspira intentos imitatorios.
g) La aplicación de este sistema, implicaría que todos los departamentos bolivianos, sin
excepción, se conviertan en Estados, lo que sería una tarea utópica.
h) El desarrollo equilibrado de los departamentos, en base a una equitativa distribución de
los recursos, se vería entrabado por el estatus jurídico de Estado que tendrían cada uno de
los departamentos. Sería casi imposible, por ejemplo que un "Estado" permita que se
utilicen sus excedentes en "otro" Estado.

i) Por último, el hecho de que Bolivia esté estructurada a partir de un modelo de


organización política clásicamente unitaria y centralizada, con casi ciento ochenta años de
historia común, hace que las soluciones inmediatas se enmarquen dentro de una profunda
"apertura" del Estado Unitario centralizado, y no en un "traslado" al modelo federal. Así se
conseguirían todas las ventajas de las fórmulas federales y ninguno de sus inconvenientes.
Sobre estos procesos de cambio, el administrativista, Luis Cosculluela afirma: ''Desde un
plano estrictamente teórico, el federa lismo ha ¡do decreciendo en importancia como
modelo de orga nización del Estado, en aquellos países que cuentan con una d ilatada
experiencia histórica como unidad estatal, y, por el contrario, el regionalismo goza cada día
de mayor predicamento".10

El Estado unitario desconcentrado

Antes de ingresar al análisis del Estado unitario desconcentrado, es necesario mencionar


que el sistema centralizado de administración pública no es intrínsecamente malo (en
teoría). Lo que ocurre es que no se ha adecuado a las particularidades históricas geográficas
y culturales de Bolivia, hecho que ha provocado procesos de concentración económica,
aculturación y colonización en la periferia, además de impedir la participación popular en los
asuntos regionales. Ya hemos vis to, en el Capítulo Cuarto, que el Estado boliviano
centralizado (la actividad estatal emanada de un centro único) participa de tres sistemas de
organización administrativa: la descentralización municipal funda mentalmente de las
competencias de educación y salud, con las limitaciones que hemos anotado; la
desconcentración de las prefecturas donde existe una mera delegación de funciones hacia los
prefectos, y la concentración de no pocas actividades del aparato estatal, ya que prima
inclusive la ausencia de delegación funcionaria, como en los casos de Migración, o el
servicio de Correos, o la policía, que tienen que remitir los dineros recaudados a la Ciudad
de La Paz para que de allí les envíen los dineros que las oficinas centralizadas estimen
convenientes.

La desconcentración, como hemos visto, implica delegación de funciones y poderes de


decisión en agentes del poder central, lo que no soluciona el problema de la necesidad de
que los departamentos participen democráticamente del manejo de sus propios intereses. Por
ello, creemos que no vale la pena alargarnos en un análisis más extenso sobre la
desconcentración de funciones administrativas. Su fracaso en este país está de sobra
demostrado.

El Estado unitario descentralizado administrativamente

Ahora, analicemos si la descentralización administrativa territo rial se presenta como una


alternativa definitiva: ésta consiste en "delegar poderes de decisión en órganos distintos
(personas jurídicas colectivas) de los simples agentes del poder central, no sometidos al deber
de obediencia jerárquica y que frecuentemente son elegidos por los ciudadanos interesados". 11
o dicho de otro modo, "la descentralización administrativa confía a órganos electivos la
administración de los intereses regionales o locales, reconociéndoles la facultad de tomar
resoluciones, elegir funcionarios, crear recursos y aplicarlos, con independencia del Poder
Central".12 No existe descentralización administrativa si no hay transferencia de
competencias del gobierno central hacia las regiones, lo que hace que las principales
cualidades de la descentralización administrativa territorial sean la elegibilidad de los
titulares de la persona jurídica colectiva (en nuestro caso serían los departamentos) y la
transferencia de competencias del gobierno central hacia las entidades territoriales.

La descentralización administrativa territorial se diferencia de la desconcentración por la


elegibilidad del órgano y la transferencia de competencias. "La elección dice: Georges
Vedel, es la técnica por excelencia que asegura la autonomía de los órganos encargados de
gestión de los intereses en cuestión", y agrega: "en realidad, no podemos hablar de una
verdadera descentralización mientras el órgano de la persona jurídica descentralizada no
sea elegido por los interesados o, por lo menos, éstos participen en su nombramiento..." 13
De ahí que la desconcentración sea sólo una técnica de mando sin ningún valor demo -
crático en sí misma, puesto que deja toda la administración en manos de los agentes del
poder central, mientras la descentralización tiene este valor: faculta a los propios
interesados, ya sea por ellos mismos o por medio de sus representantes, a decidir sobre sus
propios asuntos.
La desconcentración está sometida jerárquicamente al órgano central que tiene un
poder "incondicionado" sobre el ente desconcentrado. En cambio, la descentralización
administrativa sólo se somete a un poder de tutela por parte del Estado que es
"condicionado" por la ley, es decir, que no relaciona a un superior con sus subordinados a
los cuales les da las órdenes que quiera, sino que se limita a ejercer un control enmarcado
y limitado por la ley. Esto implica además, que el poder jerárquico se despliega en el seno
de una misma persona jurídico, mientras que el poder de tutela interviene en las relaciones
entre el Es tado y otras personas jurídicas de Derecho Público. 1
17
Por ejemplo, sobre la necesidad de frenar el colonialismo, cultural y educacional en el
Oriente boliviano, el Informe de la subcomisión N° 8 del Comité Pro-Santa Cruz
(policopiado) es un trabajo digno de tomarse en cuenta. También sobre este mismo punto,
nos remitimos a la importante y cálida obra de Herman FERNANDEZ AÑEZ, titulada
Nosotros y otros ensayos sobre la identidad cruceña. Santa Cruz, UAGRM, 1984, pp. 39 -
45 y 78 - 86.
La descentralización puede ser territorial o por servicios (funcio nal). Es territorial cuando la
gestión administrativa se circunscribe a un territorio (en este caso, departamentos), y es
funcional cuando tan sólo se limita a una función determinada, 1 ' como era el caso de las
corporaciones de desarrollo de nuestro país.

De promulgarse una ley de descentralización administrativa territorial que verazmente


descentralice (no como la actual Ley de Descentralización Administrativa No. 1670 que no
descentraliza prácticamente nada, como está analizado) y que responda a lo que
universalmente y en forma unánime indica la teoría y doctrina sobre esta mate ria, se
lograría algo que ya es de suma importancia: la elección popular de los consejeros
departamentales y el control de la administración pública regional. Pero eso no basta. Este
sistema de administración no puede ser un fin en sí mismo. Tendría que cumplir tan sólo la
función de preparación del escenario para la posterior autonomización departamental.
Pongamos atención a los motivos que nos llevan a esta afirmación:

a) La descentralización administrativa territorial solamente implica la administración


departamental de sus recursos, no pasa de ahí. Geo rges Vedel lo aclara: "Si bien la
descentralización administrativa da origen a personas públicas distintas del Estado, éstas
.tienen un carácter puramente administrativo y no detentan en lo más mínimo poder
legislativo y judicial". 16

b) No otorga la facultad de disponer del excedente económico que generen los departamentos,
pudiendo ser éstos centralizados.

c) No comprende ningún grado de normatividad propia en los de partamentos, lo que


mantiene inalterado el actual centralismo político (legislativo) inoperante que ya
analizamos en el Cuarto Capítulo y que, al mismo tiempo, no permite que los departa-
mentos respalden sus decisiones administrativas mediante normas, imposibilitando con ello
un real manejo económico y financiero de los recursos que los departamentos puedan
generar. Ni el Prefecto, ni sus secretarios, por muy elegidos que sean por el pueblo, tienen
bajo este sistema ninguna facultad de dictar normas. Y lo mismo ocurre con las Asambleas
Departamentales, las cuales tampoco pueden crear normas, simplemente porque se lo impide
su estatus jurídico.

d) Asimismo, el sistema descentralizado administrativamente no asegura un control


eficiente sobre la administración departamental, por cuanto queda sometido exclusivamente
a los mecanismos de control de la Contraloría que, como sabemos, es in operante.

e) Tampoco es capaz de anular el colonialismo interna de que son víctimas los


departamentos periféricos, especialmente en materia cultural y educacional1 ''. Para anular
esto, se requiere el apoyo de cierta normatividad local que legisle sobre la preservación de la
cultura y pueda dictar políticas departamentales de educación, que hemos visto que la
descentralización administrativa no lo permite.
f) No soluciona de ninguna manera las irresponsables migraciones internas dirigidas, que
causan perjuicios enormes a los campesinos ya asentados, y a los que migran, además de
crear cinturones de miseria pavorosa en las áreas urbanas e impiden planificar el
financiamiento para satisfacer las necesidades básicas de la población emergente y flotante.
13
En la primera edición de este libro impresa en el año 1987 (8 años antes de que se
crearan las asambleas departamentales a través de la LDA) ya predecía lo que ocurriría en
caso de que se crearan asambleas departamentales sin facultades normativas. No me he
librado de la tentación de transcribir lo que en ése entonces afirmaba: "...

g) No garantiza una auténtica participación popular en la administración departamental.

h) Son rarísimos los casos de modelos de descentralizaciones administrativas territoriales a


secas que se registran en el mundo. Casi todos los fenómenos descentralizadores han
terminado en auto nomías regionales porque acaba siendo, al parecer, un modelo insuficiente
para satisfacer los anhelos regionales autogestionarios tan en boga hoy en día.

i) Independientemente de todo lo anotado, el sistema de descentralización administrativa


territorial no recuperará aquellos dere chos autonómicos históricamente adquiridos por
nuestras regiones y que se expresaron normativamente en la ordenanza de Intendentes de 28
de enero 1782. Aquellos derechos "ius naturalistas" anteriores a la existencia del Estado
Boliviano y su legislador, no pueden ser devueltos parcialmente por este último me diante la
sola descentralización administrativa.

j) Conseguida la descentralización administrativa municipal en materias de educación y salud a


través de la Ley de Participación Popular, está claro que aquello es insuficiente por cuanto
es necesario avanzar hasta lo grar la descentralización política (normativa) territorial (lo que
ya prácticamente equivale a autonomía departamental) a efecto de que las asambleas
departamentales puedan dictar normas relativas a políticas departamentales por lo menos en
las materias transferidas a los municipios ya que, los municipios no podrían dictar dichas
políticas por cuanto tendríamos tantas políticas en educación y salud, como municipios
existen en el país'5.

k) Por último, no modifica las estructuras estatales enmarcadas en un solo y absoluto


"espacio" de validez normativa. Y lo que se quiere es un cambio gradual, que vulnere ese
único "espacio" y saque a este país del desorden, la anarquía y la miseria en que se ha
debatido desde su fundación.
Excluidas las cuatro variables analizadas, adentrémonos en la alternativa propuesta:

ESBOZO GENERAL DE LOS MECANISMOS DE IMPLANTACIÓN DE LAS


AUTONOMÍAS DEPARTAMENTALES EN BO-LIVIA
ASPECTOS GENERALES Y CONCEPTUALES

E! precedente más valioso: el referéndum de 1931.

El 11 de enero de 1931 se produjo un antecedente de vital im portancia: la aprobación


mediante Referéndum popular de una amplia descentralización administrativa, como una
muestra más de que el centralismo administrativo y el debilitamiento de las atribuciones
de los prefectos no han sido nunca de la aquiescencia del pueblo.

El texto aprobado19 por voto popular, que por su importancia transcribimos la parte referida
a la descentralización política administrativa en anexo, buscaba volver a la primera
Constitución boliviana en lo referente a la elección del Prefecto. En aquella, como en el
proyecto, éste es un órgano elegido por la Asamblea Departamental, que eleva una lista
para que el Presidente de la República lo designe. La ley de 1888 había pisoteado este de
por sí menguado derecho, al facultar al Presidente de la República para que,
discrecionalmente, nombre a la máxima autoridad departamental.
Departamentales (instituidas en el régimen de descentralización administrativa) requerirán
poder crear normas (leyes) en algunas áreas de interés departamental, si es que se quiere
que los Gobiernos Departamentales realmente gobiernen los destinos de su jurisdicción".

Asimismo, constituye el principal antecedente jurídico (lo llamamos así porque tuvo
aprobación popular y congresal) que intentó llegar a las autonomías departamentales
limitadas, al delegar la admi nistración departamental a su Asamblea, dándole a ésta la
facultad ge neral de "reglar" (es decir, normar, dictar normas), los asuntos propios del
Departamento, y sobre las siguientes competencias específicas:
a) establecer impuestos
b) organizar su recaudación
c) elaborar el presupuesto departamental
d) contratar empréstitos para todo tipo de obras
e) organizar la policía de seguridad
f) encargarse de la instrucción (educación)
g) hacer los caminos.
Además, como prueba ineludible de la intención de autonomizar los departamentos, agrega
que el Poder Ejecutivo Nacional podrá intervenir en los asuntos propios y exclusivos de un
Departamento solamente para hacer cumplir las sentencias de los tribunales de Justicia
que fueren resistidas. Según el proyecto, podrán existir normas emana das de los poderes
nacionales siempre y cuando "no se hallen opuestas" a las atribuciones mencionadas.
A fines del año 1931, esta descentralización político-administrativa fue ampliamente
discutida en el Congreso y aprobada con ligeras modificaciones que no dañaron el fondo.

No llegó, sin embargo, a convertirse en Ley de la República, por haberse opuesto el veto del
entonces Presidente de la Repúb lica doctor Daniel Salamanca. Antes de este tristemente
célebre veto, estábamos ante una virtual autonomización departamental. (Estas normas apro-
badas y apoyadas por voto popular, sobrepasan con mucho, en materia de liberación
departamental, a todos los proyectos de descentralización administrativa presentados ante el
Congreso boliviano entre los años 1983-2003).

De dónde partir. Elementos básicos a tomar en cuenta.


a. Considerar que el logro de las autonomías departamentales se debe hacer mediante un
proceso gradual pero firme y sin engaños. Aquellas propuestas de cambios radicales
inmediatos (tipo "lo único que falta es...") normalmente desembocan en fracasos.
Ninguna norma, ninguna reforma institucional o estructural debiera ser considerada un
fin en sí misma.
b. Reconocer un proceso descentralizador profundo v veraz que desemboque en la
creación de gobiernos departamentales autó nomos es de naturaleza fundamentalmente
política. Esto indica que, si bien está en manos de los partidos políticos la definición
final de las transformaciones que requiere el cambio (reformas a la Constitución y
promulgación de leyes), el hecho que éstos desoigan el pedido popular de autonomías
pudiera acarrear una profunda crisis institucional y política en el país. También nos
induce a repensar el rol de los partidos políticos y a considerar la necesidad de los
partidos políticos departamentales.
c. Consolidar y perfeccionar las competencias municipales logradas por la Ley de
Participación Popular.
d. Rescatar la estructura básica de los consejos departamentales (creados por la LDA)
como base para la estructuración de las Asambleas Departamentales que
proponemos en la reforma constitucional.
e. Para la creación de los gobiernos departamentales, es imperioso rescatar los
precedentes de las Constituciones de 1938, 1945 y 1967 (analizados en el capitulo
cuatro) que mandaron la crea ción de gobiernos departamentales (aunque no fueron
instrumentalizados por una evidente falta de voluntad política).
f. Aprehender el concepto de autonomías que consiste, básica mente, en tres tipos
distintos de descentralizaciones territoriales (departamentales): administrativa,
política o normativa (en forma relativa o limitada), y económica, es decir fiscal que
analizamos a continuación.

g. Por lo anterior, es importante tener en claro que el diseño de autonomías departamentales


técnicamente consiste en descentralizar territorialmente los departamentos en lo
administrativo (poder ejecutivo) de manera que esto acarree la descentralización econó mica.
Asimismo, busca una descentralización política (poder legislativo) en forma limitada o
restringida de manera que las Asambleas departamentales tengan facultad normativa dentro
del marco de la Constitución.

La descentralización fiscal y económica


Se puede afirmar que la descentralización económica territorial es una consecuencia
prácticamente automática de la descentralización administrativa y política, p o r cuanto
las competencias normativo-administrativas propuestas como competencias de los gobierno s
departamentales y su asamblea, son fundamentalmente de índole económico- fiscal:
impuestos, regulación de las principales actividades productivas y desarrollo económico en
general.
Asimismo, la Ley de Gobiernos Departamentales cuya elaboración se sugie re más adelante,
debe establecer con precisión la clasifica ción de las rentas del Estado, de los Departamentos
Autónomos, los Departamentos que no accedieran a su autonomía y los Municipios.

Una descentralización efectiva y no solo formal implica -además de una reforma


constitucional profundas reformas fiscales y algún grado de autonomía de los nuevos
gobiernos territoriales, tanto en la definición de políticas limitadas al exclusivo interés
departamental, como en la vertiente de los ingresos y en la de los gastos20 .
Está claro, a la luz del derecho comparado en el capítulo anterior, que no pudieran existir
autonomías sin que éstas se doten de sus propios recursos económicos y los controlen.
Existe en el derecho comparado la tendencia a tratar el problema de los recursos de las
regiones estableciendo porcentajes de recaudación que se quedan en las regiones (y que se
recaudan a través de los tesoros regionales o departamentales). El establecimiento de dichos
porcentajes es un arte que debe considerar el valor del costo y la inversión que implican las
competencias transferidas.
En la propuesta constitucional que se presenta más abajo, se ha considerado que ése
porcentaje de re caudación no debiera ser inferior al 50% de lo efectivamente recauda do en
el departamento.
La base de los recursos de los departamentos pudieran estar compuestos por:
a) Los ingresos procedentes de su patrimonio y demás derechos privados, legados
donaciones y subvenciones.
b) Las regalías departamentales creadas por Ley.
c) Los recursos del Fondo de Compensación Departamental.
d) El 50% de la recaudación efectiva del. Impuesto Especial de Hidrocarburos (IEH)
y sus derivados. (Para aquellos departamentos que exportan hidrocarburos).
e) El 50% de los impuestos recaudados por el departamento, de los que se destinarán el
20% a los municipios y el 5% a la Universidad Pública.
f) Las asignaciones que consigne anualmente el Presupuesto Gene ral de la Nación.
g) Las transferencias extraordinarias del Tesoro General (TGN) en los casos establecidos
en el artículo 148 de la Constitución Política del Estado.
h) Sus propios impuestos, tasas y contribuciones especiales, de acuerdo con lo que
establezca la Ley.
i) Los rendimientos de los impuestos cedidos por el Estado
j) Los recargos sobre los impuestos estatales.
k) Las asignaciones y subvenciones a cargo del Presupuesto General del Estado.
1) La emisión de deuda y el recurso al crédito.
m) El producto de las multas y sanciones en el ámbito de su competencia.
n) Cualquier otro tipo de ingresos que establezca la ley.

Los principios de la autonomización de los departamentos

a. Autonomización pactada. Este procedimiento autonómico corresponde a la característica


de una autonomización "pactada" entre el Estado (representado en el Parlame nto) y el
departamento proponente. No es una concesión del Parlamento a los departamentos, ya que,
como está demostrado en el capítulo segundo, éstos son anteriores al Estado Boliviano
(Excepto Oruro, Beni y Pando) y tienen derechos "ius naturalistas" anteriores al Estado y
legislador boliviano, que fueron establecidos por la Ordenanza de Intendentes de 28 de enero
de 1782, antes de la creación de la República de Bolivia.
b. Voluntariedad. El procedimiento tiene otra característica que es importante remarcar: la
voluntariedad de la autonomización. Así, se autonomiza aquel departamento cuya voluntad
mayoritaria así lo determine y los demás departamentos continúan con las normas que rigen
al resto del Estado.

c. Subsidiariedad: Las actividades de gobie rno en sus distintos niveles alcanzan mayor
eficiencia, efectividad y control de la población si se efectúan descentralizadamente. La
subsidiariedad supone y exige que la asignación de competencias y funciones a cada nivel
de gobierno, sea equilibrada y adecuada a la mejor prestación de los servicios del Estado a
la comunidad. Lo que no pueda hacer el municipio, lo debe hacer el gobierno departa mental
y lo que a éste no le corresponda, por razones de espacio normativo y aplicación nacional,
deberá estar a cargo del gobier no nacional.

d. Solidaridad interregional. El potenciamiento económico de los departamentos que se


autonomicen tendría que estar enmarcado dentro del principio de solidaridad Ínter-regional,
de manera que se consiga, mediante la creació n de diversos mecanismos -como un Fondo
de Compensaciones- disminuir, en lo posible, las desigualdades departamentales.

e. Es permanente: Constituye una política permanente de Estado, de carácter obligatorio,


cuyo efecto vinculante alcanza a todos los Poderes del Estado, Organismos Constitucionales
Autónomos y al gobierno en su conjunto.
f. Es dinámica: Es un proceso constante y continuo, se ejecuta en forma gradual por
etapas, previendo la adecuada asignación de competencias y la transferencia de recursos
del nivel central hacia los gobiernos regionales y los gobiernos locales; promueve la in-
tegración regional y la constitución de macro regiones. Exige una constante
sistematización, seguimiento y evaluación de los fines y objetivos, así como de los
medios e instrumentos para su consolidación.

g. Es irreversible: El proceso debe garantizar, en el largo plazo, un país espacialmente


mejor organizado, poblacionalmente mejor distribuido, económica y socialmente más
justo y equitativo, ambientalmente sostenible, así como políticamente institucionalizado.
h. Es democrática: Es una forma de organización democrática del Estado que se desarrolla
en los planos político, social, económico, cultural, administrativo y financiero. Promueve
la igualdad de oportunidades para el acceso a mayores niveles de desarrollo humano en
cada ámbito, y la relación Estado y Sociedad, basada en la participación y concertación en
la gestión de gobierno.
i. Es integral: Abarca e interrelaciona a todo el conjunto del Estado en el espacio nacional,
así como las actividades privadas en sus diversas modalidades, mediante el
establecimiento de reglas jurídicas claras que garanticen el desarrollo integral del país.
j. Es gradual: El proceso de descentralización se realiza por etapas en forma progresiva y
ordenada, conforme a criterios que permitan una adecuada y clara asignación de
competencias y transferencias de recursos del gobierno nacional hacia los gobiernos
regionales y locales, evitando la duplicidad.
k. Es controlada: Todos los niveles de gobierno deben estar sujetos al "accountability"
moderno: control estatal y responsabilidad funcionaría.
Principios específicos de la descentralización fiscal

Los principios específicos de la descentralización fiscal son los siguientes:


a) Competencias claramente definidas. Se debe tener una distribución clara y precisa
de funciones entre los niveles de gobierno nacional, regional y local, con el fin de
determinar la responsabilidad administrativa y funcional en la provisión de servicios de
cada uno de ellos, así como propiciar e incentivar la rendición de cuentas/de los
gobernantes.
b) Transparencia y predictibilidad. Se debe contar con mecanis mos transparentes y
predecibles que provean la base de recursos fiscales a los gobiernos subnacionales.
c) Neutralidad en la transferencia de los recursos. Se debe establecer un programa
ordenado de transferencia de servicios y competencias del gobierno nacional a los
gobiernos con efectos fis cales neutros, es decir, evitar la transferencia de recursos sin
contraparte de transferencia de responsabilidades de gasto.
d) Endeudamiento público externo. Es competencia exclusiva del gobierno nacional y
debe concordar con el límite del endeudamiento del sector público y las reglas de
transparencia y prudencia fiscal que señala la ley. Los gobiernos regionales y locales sólo
pueden asumir endeudamiento público externo, emitir bonos y titulizar cuentas, con el
aval o garantía del Estado.
e) Responsabilidad fiscal. Se debe establecer reglas fiscales que incluyan reglas de
endeudamiento y de límites de aumento anual de gasto para los gobiernos
subnacionales, compatibles con las reglas de transparencia y prudencia fiscal para el
gobierno nacio nal, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad fiscal de la
descentralización. El gobierno nacional no podrá reconocer deudas contraídas por los
gobiernos subnacionales.

Los objetivos de las autonomías


A nivel político:
a. Unidad y eficiencia del Estado, mediante la distribución ordenada de las competencias
públicas, y la adecuada relación entre los distintos niveles de gobierno y la administración
estatal.
b. Representación política y de intermediación hacia los órganos de gobierno nacional,
regional y local, constituidos por elección democrática.
c. Particip ación y fiscalización de los ciudadanos en la gestión de los asuntos públicos de
cada región y localidad.
d. Institucionalización de sólidos gobiernos regionales y locales.

A nivel económico:
a. Desarrollo económico auto sostenido y competitividad de las diferentes regiones y
localidades del país, en base a su vocación y especialización productiva.
b. Cobertura y abastecimiento de servicios sociales básicos en todo el territorio nacional.
c. Disposición de la infraestructura económica y social necesaria para promover la
Inversión en las diferentes circunscripciones del país.
d. Redistribución equitativa de los recursos del Estado.
e. Potenciación del financiamiento regional y local.
A nivel social:
a. Educación y capacitación orientadas a forjar un capital humano, la competitividad
nacional e internacional.
b. Participación ciudadana en todas sus formas de organización y control social.
c. Incorporación de las comunidades campesinas y nativas, recono ciendo la
interculturalidad, y superando toda clase de exclusión y discriminación.

d. Promoción del desarrollo humano y mejora progresiva y sostenida de las condiciones de


vida de la población para la superación de la pobreza.

A nivel ambiental:
a. Ordenamiento territorial y del entorno ambiental, desde los enfoques de la sostenibilidad
del desarrollo.
b. Gestión sostenible de los recursos naturales y mejoramiento de la calidad ambiental.
c. Coordinación y concertación interinstitucional y participación ciudadana en todos los
niveles del Sistema Nacional de Gestión Ambiental.

A nivel administrativo:
a. Modernización y eficiencia de los procesos y sistemas de administración que aseguren
la adecuada provisión de los servicios públicos.
b. Simplificación de trámites en las dependencias públicas nacio nales, regionales y locales.
c. Asignación de competencias que evite la duplicidad de funciones y recursos, y la elusión
de responsabilidades en la prestación de los servicios.

Dimensiones de las autonomías


Concepto general de autonomía: Es el derecho y la capacidad efectiva del gobierno en sus
tres niveles, de normar, regular y administrar los asuntos públicos de su competencia. Se
sustenta en afianzar en las poblaciones e instituciones la responsabilidad y el derecho de pro-
mover y gestionar el desarrollo de sus circunscripciones, en el marco de la unidad del Estado.
La autonomía se sujeta a la Constitución y a las leyes de desarrollo constitucional respectivas.
Autonomía política: Es la facultad de adoptar y concordar las políticas, planes y normas
en los asuntos de su competencia, aprobar y expedir sus normas, decidir a través de sus
órganos de gobierno y des arrollar las funciones que le son inherentes.
Autonomía administrativa: Es la facultad de organizarse inter namente, determinar y
reglamentar los servicios públicos de su responsabilidad.
Autonomía económica: es la facultad de crear, recaudar y administrar sus rentas e ingresos
propios y aprobar sus presupuestos institucionales conforme a ley. Su ejercicio supone
reconocer el derecho a percibir los recursos que les asigne el Estado para el cumplimiento
de sus funciones y competencias.
Los beneficios de las autonomías

Para terminar, diremos que con la implantación de las autono mías departamentales se
lograrían los siguientes beneficios:
a. Constituye la única vía posible y no peligrosa de otorgar a los habitantes de los
departamentos del país la posibilidad de auto-gobernarse sin imposiciones absurdas,
sin colonialismos internos ridículos ni postergaciones regionales irritantes.
b. Devuelve a los Departamentos del país (a los que se autonomicen) los derechos
cercenados en la creación de la República -que hemos visto fueron inclusive
legislados por la corona Española sin violentar traumáticamente la forma unitaria del
Estado boliviano que lleva más de siglo y medio de recorrido.
c- No divide el país en varios espacios de validez normativa sino que permite crear
pequeños espacios dentro del "único" espacio normativo que existe en Bolivia.
d. Le es inherente el control fiscal autonomizado departamentalmente, disminuyendo así
la corrupción.
e. Acaba con el presidencialismo.
f. Elimina la burocracia central.
g. Aumenta la eficiencia administrativa.
h. Beneficia a las provincias, al estar éstas plenamente representadas en la Asamblea
Departamental, la cual tiene la facultad de dictar leyes en las materias de interés
regional.
i. Hace posible que haya más celo para diseñar -a nivel de autonomías- un plan de
educación tendiente a formar ciudadanos con profundos conocimientos de su pasado y
presente regional preservando así las identidades regionales.
j. Se precautela a los Departamentos Autónomos de posibles intromisiones y
colonialismos externos de diversa índole, que pudiera alentar el Gobierno Central.
k. Es inherente al regionalismo que existe en el país y al comportamiento cuasi-
autónomo de los departamentos.
1. Al reducir las atribuciones del Parlamento nacional, lo hace un órgano efectivo.
m. Aumenta la participación popular y provincial en el manejo de la "cosa pública"
departamental.
n. Deja la planificación y ejecución de proyectos en manos del Gobierno Departamental,
que percibe gran porcentaje de los tributos y rentas departamentales para su tesoro.
o. Moderniza al Estado boliviano de acuerdo a modernas corrientes administrativas,
convirtiéndolo en un ente positivo para los in tereses de los departamentos autónomos
y, por ende, del país to do.
p. Otorga a los Departamentos Autónomos la facultad de normarse en los asuntos que son
de su exclusivo interés.
q. Ofrece la posibilidad de que, en el futuro, todos los departamentos se desenvuelvan
mediante el régimen de autonomías, crea el ambiente propicio parí la formación de
partidos políticos departamentales que realmente luchen por los intereses regionales.
r. El beneficio integral y general que acarrearían las Autonomías Departamentales al país,
hace que no constituyan un fenómeno privativo de una corriente ideológica determinada
(aunque hay que reconocer que han sido las corrientes de izquierda moderada las que han
implantado este sistema en la mayoría de los países que lo han adoptado), pues es un
modelo de organización estatal en el que puede desarrollar su programa -a plenitud -
cualquier corriente política, de esencia democrática, por supuesto.

Sobre la pretendida "desintegración" de Bolivia


Es importante recalcar que las Autonomías Departamentales en ningún caso constituirían
un peligro de "desarticulación" del Estado boliviano, o de "separatismo" de algún
Departamento. Esas opiniones se han formado a fuerza de escuchar centenaria mente
discursos que, so pretexto de la "preservación de la unidad nacional", han trastocado
conceptos, desinformando a la población e invertido valores, hasta conseguir que muchos
bolivianos -sin percatarse de ello en la mayoría de los casos- sean unos irracionales e
ignorantes defensores de un centralismo que, al final de cuentas, no beneficia a nadie.
¿Es que no nos damos cuenta que una de las principales causas que está a punto de
desintegrar el país es este centralismo que, desde siempre, ha centralizado lo que por su
naturaleza debió mantener equidistante, que ha cercenado derechos que son inmanentes
para los pueblos y que ha postergado miopemente a las regiones periféricas en detrimento
de todo el país?

Las Autonomías Regionales (o Departamentales) no han sido concebidas en el mundo para


desintegrar a ningún Estado. Por el contrario, éstas han sido el instrumento para profundizar
y perfeccionar la democracia, liberar a los pueblos de intromisiones absurdas y lograr en
ellos un acelerado crecimiento económico.
Contra toda falsa creencia, la autonomización beneficiará a los Departamentos pobres que
la adopten, porque se ha demostrado que, cuando un pueblo es el artífice de su propio
porvenir, construye y no destruye, como ciertamente ocurre en el Estado actual donde son
"otros" los que marcan el derrotero de los Departamentos. Además, no se concibe un
Estado con Autonomías Regionales entre las cuales no prime el principio de solidaridad
interregional, y el de una indisoluble unidad como Estado, el cual, con seguridad, se
engrandecerá con el potenciamiento y mejoramiento regional.

El argumento de la gobernabilidad
La descentralización político administrativa tiene en el argumento de la gobernabilidad su
más frecuente adversario.
El principal argumento consiste en que un gobierno departamental (prefecto y consejo)
elegidos democráticamente, pudieran tor nar la democracia inmanejable o ingobernable, por
cuanto la fuente de su poder no provendría del gobierno central sino del pueblo, lo que le
daría a dichos gobiernos una autoridad moral o legitimación de tal magnitud, que pudiera
seguramente inducir a sus representantes a no coordinar obedientemente con el gobierno
central y, por lo tanto, se generaría ingobernabilidad.
Aquella es una premisa falsa. En el capítulo anterior, la legisla ción comparada nos muestra
como en Italia, Bélgica, España, Uruguay, Paraguay y Colombia los gobiernos territoriales o
sus similares, son invariablemente elegidos por voto popular en cada una de sus
circunscripciones territoriales, y no por ello esos países se han vuelto ingobernables o han
dejado de ser unitarios.
Además, el derecho comparado nos muestra que existen algunos mecanismos mediante los
cuales el gobierno central controla sus competencias dentro de los territorios autónomos,
como es el caso del "Delegado de Gobierno" en las Comunidades Autónomas españolas
(Art. 154 CPE España) y en los departamentos franceses (Art. 72 CPE Francia), o del
"Comisario de Gobierno" en Italia (Art. 124 CPE Italia), de manera que las competencias
de las autonomías ejercidas por las autoridades elegidas en la región, y las del gobierno
central, administradas por estos representantes designados, están coordinadas.
Otro argumento es el relativo a que la elección directa del prefecto o de los consejeros nos
convertiría en un Estado Federal (Este argumento ha sido llevado con tal mala intención
que resulta que en Bolivia pareciera que el federalismo es una mala palabra). Ese argu-
mento, para ser válido tendría que presumir que los Estados Federales son ingobernables
per se, lo cual resulta también errado. Si los estados federales fueran tan ingobernables, no
existirían. Con excepción de la URSS, ningún Estado federal del mundo se ha escindido o
balcanizado por haber hecho uso de su condición de estado asociado. Los estados que se
han balcanizado son aquellos —a menudo unitarios centraliza dos- que no reconocen a. los
territorios que lo componen, los derechos que les corresponden.
Asimismo, ninguno de los países antes nombrados se ha convertido en federal por el hecho
de haberse descentralizado en lo político y administrativo. El derecho comparado descrito en
el capítulo anterior, nos indica que la descentralización político administrativa (o autono -
mías), es decir, la descentralización del poder legislativo -que aplicada a los departamentos
significaría dotar a las consejos departamentales de la facultad de dictar normas
reglamentarias de leyes nacionales con relación a aquellos aspectos de exclusivo interés del
departamento- a favor de los entes territoriales, dista muchísimo de convertir a cada
territorio en un estado asociado a la manera de un Estado Federal, por cuanto, en los
estados federales, cada estado tiene todas las facultades de uno independiente, esto es, los
tres poderes con atrib uciones plenas cada uno de ellos, además de su propia constitución.
Por ejemplo, cada uno de los estados asociados tiene un poder judicial independiente del
resto de los estados, un poder legislativo —a menudo compuesto por dos cámaras- que
tiene facultades para dictarse prácticamente todo tipo de leyes incluida su propia
constitución, y un gobierno que tiene, na turalmente, un gobernador electo.
El presupuesto básico de todos los argumentos relativos a descalificar a la descentralización
político administrativa en aras de la gobernabilidad, radica en la presunción equivocada de
que ésta funciona mejor en la medida en que las decisiones administrativas y regulatorias
estén confiadas al gobierno central. Así, en un ejemplo extremo, la gobernabilidad perfecta
sería una férrea dictadura donde la ley la elabora y la hace cumplir la misma persona y su
entorno, sin ninguna posibilidad de reclamo o reacción por parte de los interesados por la
vía legal.
El instrumento para evitar que la legitimidad y la autoridad moral que otorgaría el voto a
un gobierno departamental o regional elegido popularmente desemboque en
ingobernabilidad, radica en la clasifi cación constitucional, clara y detallada, de las
competencias que debieran corresponderle a cada uno de los tres niveles de gobierno:
nacio nal, departamental y municipal, y en la aplicación, en consecuencia, del principio de
legalidad.
Diseño y accoiintability

Las autonomías departamentales no podrían ser, naturalmente, la solución automática a los


problemas fundamentales de la República. Es más, si tomamos como referencia a los
municipios y universidades públicas que son autónomos, parecería más bien, a simple vista,
la solución por el desastre. Coincidimos entonces en que las soluciones no pasan
exclusivamente por un problema de diseño institucional.

El razonamiento anterior pudiera, sin embargo, aplicarse a todo el universo de reformas


institucionales posibles sin resultados positivos, porque, en definitiva, si los actores no
sirven, de nada sirve la organización o estructura de la película. Por ello, si aplicáramos
dicho razona miento en forma radical, caeríamos en la peor de las gestiones: no hacer nada
en un país en el que la mayoría de las cosas andan mal.
Uno de los cuestionamientos centrales al analizar las autonomías departamentales es quién
representa a los departamentos bajo el sistema actual de prefecturas y quiénes son
responsables ante los departamentos (accountability) por el manejo de los recursos
departamentales, teniendo en cuenta la designación a "dedo" del prefecto, la ausencia de
representatividad de los "consejeros" departamentales y su falta de facultades normativas,
reglamentarias y de control.
Con el sistema actual de representación parlamentaria, los diputados y senadores tienen
una representación "nacional" y dependen de los dictados de sus partidos fuertemente
centralizados, radicalmente prebéndales y también de estructura "nacional", por lo que
sería mucho pedirles responsabilidades partidarias departamentales.
Por ejemplo, en el caso cruceño (en otros departamentos hay ejemplos similares) que
Migración reciba solo el 3% de los recursos que envía a La Paz; que el poder judicial reciba
el 9% de lo que envía a Sucre; que a la oficina de correos le envíen el 4% de lo que envía a
La Paz, o que la policía tenga que mandar las fotocopiadoras a La Paz para que las arreglen,
o que la fiscalía departamental se vea obligada a "to mar" bienes inicialmente por la fuerza,
eso es culpa directa de los representantes por Santa Cruz, que está claro que, una vez
elegidos, son representantes "nacionales" y no departamentales por lo que no hay
responsables directos por ello.
En las autonomías departamentales, donde se elegirían directamente a los consejeros
departamentales y al Prefecto 21, si bien es cierto que no se garantizaría la eficiencia per se de los
gobiernos departamentales, lo que está claro es que su diseño, por su naturaleza, permitiría
establecer la individualización de responsabilidades de los representantes departamentales, por la
relación directa entre los electores y los ele gidos, ya que la legitimidad que otorga el voto directo
genera una responsabilidad también directa del elegido con sus electores. Esa responsabilidad,
cuyo concepto es conocido en el mundo como "accountabüity" (palabra usada a pesar mío para
evitar confusiones conceptuales), es inexistente hoy en Solivia a nivel departamental.
El hecho que en los municipios y en las universidades públicas no exista la posibilidad clara de
establecer responsabilidades no es un problema de su institucionalidad autónoma, sino de las leyes
que debieran establecer reglas expeditas de establecimiento de responsabilidades y sanciones (a
menudo penales) en dichas autonomías, por cuanto esas leyes parecieran diseñadas para preservar
la impunidad funcionaría. Me refiero a la Ley de municipalidades y a la Ley SAFCO en el caso de
los municipios y a la normativa que rige a las universidades públicas, en el otro caso. Esas
autonomías son un claro ejemplo de que no habrá dise ño institucional que valga si no hay
voluntad de todos los actores para acabar con la corrupción y la ineficiencia en el país.
Las Autonomías Departamentales no traerán la solución milagrosa e inmediata a esta
desdichada Bolivia, pero sí constituirían una eficaz herramienta de salvación y mejoramiento
integral del país, por cuanto el modelo condice -como lo hemos demostrado- con la historia,
predisposición psicológica, voluntad, idiosincrasia, derechos inmanentes de los departamentos
bolivianos, así como responde a una perentoria necesidad de dotar a los departamentos de
eficiencia, legitimidad en su representación, manejo y control de sus propios recursos.
21
Como ejemplo de la viabilidad de esta propuesta, tenemos que una encuesta efectuada en
el Departamento de Santa Cruz auspiciada por el Programa Nacional Para la Reforma de la
Constitución (PRONAGOB) dio como resultado que el 78% de la población opinó a favor
de la elección directa del prefecto.

LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES Y NORMATIVAS NECESARIAS PARA


LA CREACIÓN DE LOS GOBIERNOS DEPARTAMENTALES Y LA
AUTONOMIZACIÓN DE LOS DEPARTAMENTOS

Las modificaciones constitucionales necesarias

Se sugiere, sin pretender una propuesta definitiva y a título meramente indicativo, las
siguientes reformas a la Constitución de 1994 aclarándose que, de aplicarse las modificaciones
sugeridas, varios otros artículos tendrían que reformarse para concordar con el espíritu de la
reforma.

(Sobre el texto constitucional vigente de 1994, se resalta en ne gritas lo agregado como


propuesta).

Art. 1. Bolivia, libre, independiente, soberana multiétnica y plu ricultural, adopta para su
gobierno la forma democrática representativa, fundada en la unión y solidaridad de todos los
bolivianos y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de los departamentos que la
integran.

Art. 2. La soberanía reside en el pueblo; es inalienable e imprescriptible; su ejercicio está


delegado a los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial. La independencia y coordinación de
estos Poderes es la base del Gobierno. Las funciones del Poder Público: legislativa, ejecutiva y
judicial, no pueden ser reunidas en el mismo órgano.

Son mecanismos de participación del pueblo en ejercicio de su soberanía: el voto, el


plebiscito, el referéndum, la consulta popular, la iniciativa legislativa y la revocatoria del
mandato, los que pueden ge nerarse a nivel municipal, departamental, regional o nacional. La
Ley los reglamentará.

RÉGIMEN DEPARTAMENTAL

Art. 108. El territorio de la República se divide políticamente en Departamentos, Provincias,


Secciones de Provincia y Cantones. Dos o más departamentos podrán constituirse en regiones
administrativas y de planificación, con personería jurídica y autonomía de gestión, previo
mandato de un referéndum.
Art. 109. Los departamentos constituyen entidades autónomas, en base a descentralizaciones
administrativas, políticas y económicas de vigencia territorial, dentro de los límites que
establece esta Constitución.

Los Estatutos de Autonomía serán la norma institucional básica de cada Departamento y el


Estado los reconocerá y amparará como parte integrante de su ordenamiento jurídico.
Los Estatutos de Autonomía deberán contener la organización de las instituciones
autonómicas y los procedimientos para el desa rrollo de las competencias asumidas dentro del
marco establecido en la Constitución.

Art. 110. En cada Departamento habrá un Gobierno Departamental y una Asamblea


Departamental cuyas atribuciones están establecidas en la Constitución.

La Asamblea Departamental está compuesta por un mínimo de diez y un máximos de veinte


consejeros elegidos por voto popular por un período de cinco años.

El Gobierno Departamental está presidido por el Prefecto que es elegido por voto popular por
un período de cinco años.

Art. Adicional. Los departamentos podrán asumir competencias en las siguientes materias:

a) Organización de sus instituciones de autogobierno a través de sus estatutos de autonomía.


b) Ordenación del territorio.
c) Las obras públicas de interés del Departamento en su propio territorio.
d) Políticas de Educación y Salud en concurrencia con los municipios.
e) La agricultura y la ganadería, de acuerdo con la ordenación general de la economía.
f) Los montes y aprovechamientos forestales.
g) El fomento del desarrollo económico del Departamento dentro de los objetivos marcados por
la política económica nacional.
h) La planificación, el desarrollo económico social y el apoyo financiero y crediticio a los
municipios.
i) Artesanía, museos y bibliotecas,
j) Impuestos departamentales,
k) Policía.
l) Ferrocarriles y carreteras que estén dentro del Departamento y que comprendan más de un
municipio.
m) Minería.
n) Cultura.
o) Política de tierras
p) Caza y pesca
q) Cooperativas que tuvieran su ámbito de acción en la jurisdic ción del departamento.
r) Asociaciones, fundaciones y organizaciones no gubernamentales.
s) Asistencia social.
t) Fomento a las lenguas nativas.
u) Riego
v) Partidos políticos regionales
w) Procedimiento para la designación de los jueces y su respectiva fiscalizació n con
jurisdicción departamental.

Art. Adicional. Los departamentos que opten por no acceder al régimen de autonomías
proclamado por esta Constitución, mantendrán la estructura administrativa establecida en el
Régimen Interior de la Constitución de 1994.
Art. Adicional. Corresponde a las Asambleas Departamentales por medio de Normas
Departamentales:

a) Aprobar el Estatuto de Autonomía departamental de conformidad a ésta Constitución.


b) Reglamentar el ejercicio de las funciones y la prestación de los servicios que
corresponden al Departamento en virtud a la Constitución.
c) Expedir las disposiciones relacionadas con las competencias asignadas a los
departamentos en ésta Constitución.
d) Adoptar de acuerdo a ley los planes y programas de desarrollo económico y social y los de
obras públicas.
e) Establecer una adecuada distribución de recursos para las provincias del departamento.
f) Establecer, conforme a ley, los tributos y contribuciones necesarias para el cumplimiento de
las atribuciones de competencia departamental.
g) Expedir las normas orgánicas del Presupuesto Departamental y el presupuesto anual de
rentas y gastos.
h) Con sujeción a los requisitos que señale la ley, crear y suprimir municipios, segregar y
agregar territorios municipales, y orga nizar provincias.
i) Determinar la estructura de la administración departamental.
j) Dictar normas de policía en todo aquello que no sea materia de disposición legal.
k) Autorizar al Prefecto para que celebre contratos, negocie empréstitos enajene bienes, y
ejerza, excepcionalmente, delegación de funciones específicas que correspondan a las
Asambleas Departamentales.
1) Regular, en concurrencia con los municipios, la educación, la salud y el deporte.
m) Cumplir las demás funciones que le asigne la ley.

Art. Adicional. La ley señalará los casos en los cuales las asambleas departamentales podrán
delegar en los consejos municipales las funciones que ella misma determine.

Art. Adicional. La ley podrá establecer para uno o varios departamentos diversas capacidades
y competencias de gestión administrativa y fiscal distintas a las señaladas para ellos en la
Constitución, en atención a la necesidad de mejorar la administración o la prestación de los
servicios públicos de acuerdo con su población, recursos económicos y naturales y
circunstancias sociales, culturales y ecológicas.

No se podrá descentralizar competencias sin la previa asignación de los recursos fiscales


suficientes para atenderlas.

Art. Adicional. Un delegado nombrado por el Presidente de la República dirigirá las


competencias del Estado en cada uno de los departamentos autónomos y la coordinará,
cuando proceda, con la administración propia del Departamento. La Ley reglamentará sus
funciones.
Art. Adicional. Son atribuciones de los Prefectos:
a) Cumplir y hacer cumplir la Constitución, las leyes, los decretos del Gobierno Nacional y las
Normas Departamentales promulgadas por las Asambleas Departamentales.
b) Dirigir y coordinar la acción administrativa del Departamento y actuar en su nombre como
gestor y promotor del desarrollo integral de su territorio, de conformidad con la
Constitución y las leyes.
c) Ejercer las funciones administrativas que le delegue el Presidente de la República.
d) Presentar a la Asamblea Departamental los proyectos de Norma Departamental.
e) Velar por la exacta recaudación de las rentas departamentales, de las entidades
descentralizadas y las que sean objeto de transferencias por el Estado.
f) Las demás que le señale la Constitución, las leyes y las normas departamentales.

BIENES NACIONALES

Art. 136. Son de dominio originario del Departamento o la región, todos los recursos naturales
que contenga el suelo y el subsuelo.

Toda concesión de los mismos deberá requerir previa aprobación de la Asamblea


Departamental.

RENTAS Y PRESUPUESTO

Art. 136. Las rentas del Estado se dividen en nacionales, departamentales y municipales, y se
Invertirán independientemente por sus tesoros conforme a sus respectivos presupuestos, y en
relación al
plan general de desarrollo económico y social del país.

La ley clasificará los ingresos nacionales, departamentales y municipales. Los ingresos


departamentales no
podrán ser inferiores al 50% de los impuestos, tasas y cualquier otra recaudación generada en el
Departamento.

Los recursos departamentales, municipales, judiciales y universitarios, recaudados por oficinas


dependientes del
Tesoro Nacional, no serán centralizados en dicho Tesoro.

El Poder Ejecutivo determinará las normas destinadas a la elaboración y presentación de los


proyectos de
presupuestos de todo el sector público.

RÉGIMEN AGRARIO Y CAMPESINO

Art. 172. El Estado fomentará planes migratorios para el logro de una racional distribución
geográfica y
mejor explotación de la tierra y los recursos naturales del país, contemplando
prioritariamente las áreas
fronterizas. La Asamblea departamental de cada departamento evaluará previamente los
planes migratorios
que el Gobierno Central debe presentarle para su aprobación.

RÉGIMEN MUNICIPAL

Art. 200. El gobierno y la administración de los municipios están a cargo de Gobiernos


Municipales Autónomos y de igual jerarquía. En los cantones habrá Agentes Municipales
bajo supervisión y control del Gobierno Municipal de su jurisdicción.

La autonomía municipal consiste en la potestad ejecutiva, admi nistrativa, y técnica en el ámbito


de su
jurisdicción y competencia territoriales.

El Gobierno Municipal está a cargo de un Consejo y un Alcalde.

Los concejales son elegidos en votación universal, directa y secreta, por un período de cinco
años, siguiendo el
sistema de representación proporcional determinado por ley.

Los Concejales y los Agentes Municipales serán elegidos nominalmente de listas que presenten
los partidos
políticos, organizacio nes de la sociedad civil, o por iniciativa personal, de conformidad a
Norma
Departamental promulgada por la Asamblea Departamental de cada Departamento para los
municipios de su
ámbito territorial.

Los Alcaldes son elegidos en lista separada de la de los concejales en votación universal,
directa y secreta.
Será elegido alcalde el que obtenga la mayoría simple del voto ciudadano.

Las Asambleas Departamentales determinarán el número de miembros de los Consejos


Municipales.

LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Art. 222. Los ciudadanos tienen el derecho de organizarse en partidos políticos con arreglo
a la presente Constitución y la Ley Electoral.

Los partidos políticos pueden ser nacionales, departamentales o municipales.


Art. 223. Se deroga.

Art. 224. Los partidos políticos nacionales se registrarán y harán reconocer su personería por
la Corte Nacional Electoral; los departamentales y municipales se registrarán y harán
conocer su personería ante las Cortes Departamentales Electorales.
La Corte Nacional Electoral y las Cortes Departamentales habilitarán a candidatos sin
partido, previo cumplimiento de los requisitos establecidos por ley.

Otras reformas a considerar.

Listar las competencias de los gobiernos municipales, correspondiendo para ello adaptar las
que establece la Ley Orgánica de Municipalidades vigente y la Ley de Participación
Popular, más una revisión de aquellas competencias que fueran necesarias para el pleno
ejercicio de la autonomía municipal.

Establecer que el resto de las competencias que no estén expresamente listadas,


corresponden al Gobierno central. Alternativamente se pudiera también asumir la siguiente
estrategia de asignación de competencias que experimentó con éxito España: introducir en
la Constitución dos listas de competencias legislativas administrativas: una estatal22 y otra
departamental, (además de la municipal) que, consignando las áreas de competencias de
ambos gobiernos, operen con una doble cláusula residual de signo opuesto. Es decir, que
todas las materias que no estén en ninguna de las dos listas, los departamentos autónomos
las pueden ejercer mediante sus estatutos, y al mismo tiempo, todas las restantes
competencias que no estando en ninguna de las dos listas tampoco sean asumidas los
departamentos autónomos mediante sus estatutos, pasan a ser competencia del Estado.

Los caminos de la reforma constitucional

De conformidad a los artículos 230 al 233 de la Constitución vigente, la reforma parcial2 3


de ésta se efectúa previa declaración de la necesidad de la reforma mediante una ley. Esta
ley se cons idera "en las primeras sesiones de la legislatura de un nuevo período
constitucional" por las cámaras del Congreso, a las que les corresponde deliberar y vo tar la
reforma propuesta "ajustándola" a las disposiciones que determine la ley declaratoria de
aquélla.

Como sabemos, al presente tenemos la Ley Declaratoria de Necesidad de Reforma del 1 de


agosto del año 2001 que, lamentablemente, no modifica ningún aspecto relativo al régimen
interior, vale decir, deja intacto el sistema centralizado boliviano24 . Asimismo, no introduce
la figura del referéndum ni la consulta popular. La mencio nada Ley tiene que ser
considerada, entonces, "en las primeras sesiones" del período constitucional que se inició
en el 2002, aspecto que se ha demorado enormemente.
22
Las competencias del Estado en su conjunto, es decir, del Parlamento y Gobierno central,
queda rían, básicamente, reducidas a las siguientes: toda la codificación de normas
fundamentales de vigencia general (legislación sustantiva y adjetiva civil, penal, laboral,
comercial etc.); propiedad intelectual; régimen aduanero, monetario, financiero y
arancelario; seguridad social; contratos y concesiones administrativas; construcción de
ferrocarriles y carreteras estatales; correos; tránsito aéreo; obras públicas de interés general
o cuya ejecución afecte a más de un departamento; Presupuesto General de la Nación:
diplomacia; defensa y fuerzas armadas; tutela administrativa sobre la ejecución de
proyectos regionales, y todas las áreas de interés estatal.
23
Como no está definido en la Constitución el concepto de "parcial", se entiende, por
antonomasia, que parcial es lo que no es total, en consecuencia, se pudieran reformar todos
menos uno de los artículos de la Constitución.
24
No obstante que e! CONSEJO CUIDADANO PARA LA REFORMA
CONSTITUCIONAL (Designado mediante resolución de la Presidencia del Congreso
Nacional No. 008/2000-2001) en Anteproyecto de Ley de Necesidad de Reforma Constitucional,
www.reformas-constitucionales.gov.bo. 2001, había sugerido cambios al Parlamento en
materia de reformas al régimen interior que no fueron tomadas en cuenta. En lo que
respecta a la descentralización administrativa dicho Consejo no modificó sustancialmente
e! modelo de administración pública que establece la Constitución de 1995. pero introdujo,
si, cuatro modificaciones importantes: a) el consejo departamental eleva ternas, de entre sus
miembros, al presidente de la república, para que éste designe al prefecto, b) Se otorga a los
consejos departamentales facultades directas de fiscalización y reglamentación, c) Los
consejeros departamentales son elegidos por los concejos municipales del departamento, de
entre los concejales municipales, y d) El prefecto no forma parte de! consejo departamental.
Al respecto, es oportuno transcribir el texto del voto disidente de los consejeras Pablo
Dermizaki, Jorge Asbún y Juan Carlos Urenda: Si no se crean los gobiernos
departamentales: es decir, personas jurídicas distintas a las del gobierno central, no habría
una descentralización territorial efectiva. Las competencias de los consejos
departamentales debieran estar detalladas en la Constitución y no dejarlas a que una ley las
determine (la experiencia en esta materia indica que dejar a que una ley norme estos
aspectos equivale a postergarlos indefinidamente). Estas competencias, además de las de
fiscalización, debieran ser reglamentarias en materia de educación, salud y agricultura de
vigencia departamental. Por otra parte, limitar la elección de los consejeros
departamentales a los miembros de concejos municipales parece un retroceso. La
argumentación de que el concejal municipal convertido en consejero departamental
articularía mejor la estructura prefectural con los municipios, no parece sólida, al margen
de la dualidad de funciones que tendría el concejal/consejero. La articulación entre el nivel
prefectural y municipal para que sea posible debe normársela. Es fundamental que
radicalicemos la democracia y elijamos a los consejeros departamentales por voto popular y
directo

¿Qué hacer entonces? La alternativa estrictamente constitucional consistiría en que en el


período constitucional (2002-2007) se dicte una ley de necesidad de reforma que introduzca
reformas tendientes a la creación de gobiernos departamentales y a la autonomización de
los departamentos y ésa Ley sea discutida "en las primeras sesiones" del período
constitucional que comprende el periodo 2007-2012.

Sin embargo, dada la perentoriedad de la necesidad de cambios que requiere el Estado


boliviano, la "salida" al problema de orden constitucional sería la siguiente: tomando en
cuenta que la Ley de Necesidad de Reforma Constitucional del 1ro de agosto de 2001
introduce el instituto del Referéndum2 ' para ser aplicado a la reforma constitucional, es
posible que la legislatura del periodo constitucional 2002-2007 "ajuste" (en virtud a los
Arts. 232 y 234) dicha sugerencia ampliando la aplicación de ése referéndum de manera
que se convierta en un mecanismo no solo para la reforma constitucional, sino para las re-
formas al Estado en general. En ese marco, se pudiera lanzar un refe réndum relativo a la
creación de gobiernos departamentales y la autonomización de los departamentos y otros
temas que fueran considerados por el poder legislativo.
Otro camino que menciona cierta opinió n pública es la Asamblea Constituyente, que es
una forma extraordinaria de reformar la Constitución y surge ante el agotamiento o mal
uso de los procedimientos formales de reforma constitucional, como el que establecen los
artículos 230 al 233 de la Constitución Política del Estado Boliviano. Es un procedimiento
ilegal pero pudiera considerárselo legítimo de acuerdo a circunstancias extremas.

En el caso boliviano, el agotamiento de la reforma de la Constitución por la vía formal se


traduce en el pésimo uso que se ha dado a dicho procedimiento: la Ley de Necesidad de
Reforma Constitucional
del 1ro de agosto del 2001, constituye una propuesta mediocre que no incluyó temas
largamente reclamados por la población boliviana relativos a una mayor democracia
participativa como el referéndum y una mayor descentralización administrativa reclamada
especialmente por los departamentos de Tarija y Santa Cruz.

Ante ese escenario, la figura de la Asamblea Constituyente emerge como una alternativa
atractiva para ciertos sectores de la población, no obstante las objeciones de orden
constitucional que esta medida trae consigo- para llevar adelante las reformas esperadas por
el país. Sin embargo, es necesario advertir el peligro de una Asamblea Constituyente en
tiempos de plena convulsión social.

Una posible (pero forzada) salida constitucional para la constituyente es que en el período
legislativo 2002-2007 el Congreso dicte una Ley interpretativa de la Ley de Necesidad de
Reforma de conformidad al artículo 234 de la Constitución e introduzca los cambios que
vea pertinentes.

La Asamblea Constituyente plantea, fundamentalmente, dos problemas centrales que


debieran debatirse y definirse previamente: el primero es definir el procedimiento de
elección de los asambleístas, así como establecer quienes podrán optar a las candidaturas
(¿serán institucionales, político partidarias o personales?), y el segundo es que tipo de
Estado queremos crear.

La reglamentación necesaria: Ley de Gobiernos Departamentales.


Se debe dictar una ley regulatoria de los preceptos constitucio nales descritos, que
establezca fundamentalmente los siguientes aspectos:
25
El referéndum, que significa el derecho de la ciudadanía para aprobar o rechazar
determinados proyectos de ley, puede ser obligatorio cuando la Constitución lo prevé como
requisito para el cumplimiento de alguna norma. Ver: ASBÚN, Jorge: Derecho
Constitucional General, Santa Cruz, URSA, 2001, 2da. Ed.
26
La Ley de Bases de la Descentralización y la Ley Orgánica de los Gobiernos Regionales
del Perú (transcritas en anexos al presente libro) son excelentes ejemplos para tomar en
cuenta.

a. Objetivos de la descentralización
b. Finalidad
c. Principios
d. Objetivos
e. Definición de cada uno de los tres niveles de gobierno.
f. Clasificación de las compet encias de cada uno de los tres niveles de gobierno
(nacional, departamental y municipal).
g. Procedimientos normativos para la transferencia de las competencias.
h. Participación de las provincias.
i. Distribución de recursos a las provincias.
j. Procedimiento normativo para que el Estado asuma las competencias que los
departamentos decidan no atender.
k. Procedimientos de elaboración de normas de las asambleas de partamentales.
l. Tipos de competencias, criterios de asignación y solución de conflictos.
m. Planificación departamental.
n. Coordinación de las prefecturas con los municipios.
o. Planes de desarrollo y presupuestos.
p. Fiscalización y control.
q. Conducción del proceso de descentralización.
r. Bienes y rentas nacionales, departamentales y municipales.
s. Funciones del delegado nacional.
t. Disposiciones finales (Transferencia y recepción de las competencias sectoriales,
entre otras).

Los estatutos de los gobiernos departamentales autónomos

Los gobiernos departamentales autónomos requieren, de acuerdo al diseño normativo que


implica la presente propuesta, elaborar sus propios estatutos que normen el funcionamiento
de las competencias asignadas por la Constitución Política del Estado y la sugerida Ley de
Gobiernos Departamentales. Deben versar, básicamente, sobre aspectos procedimentales
relacionados con el funcionamiento de las competencias departamentales y con los aspectos
operativos del gobierno y la asamblea departamental.

Estos estatutos no pueden alterar ni agregar las competencias asignadas a los departamentos.

Tendrían que ser aprobados por la asamblea departamental de cada departamento que opte
por el camino de la autonomización, por lo que pudiera haber tantos estatutos como
gobiernos departamentales existan.
Siguiendo las modificaciones constitucionales arriba propuestas, se adjunta en anexo un
borrador de proyecto de Estatuto de Gobier no Departamental. Hemos tomado el caso del
Departamento de Santa Cruz por cuanto el autor conoce con más detalle la realidad de ése
departamento, sin embargo, salvo el preámbulo y algunos aspectos relativos a la hacienda
departamental que versan sobre aspectos específicos, pudiera ser ajustado para cualquier
departamento de Bolivia.

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5.2 El Estado Triterritorial, Juan Carlos Suvelza

5.4 LA DESCENTRALIZACIÓN QUE SE VIENE


.

Entre lo federal y lo unitario1


Franz Xavier Barrios Suvelza
I. Antecedentes
Bolivia está cerrando un valioso segundo ciclo contemporáneo de diseños territoriales.
Efectivamente, es plausible sostener que en 1972, año de promulgación de la "Ley de
Organización Administrativa del Poder Ejecutivo", se desató un primer ciclo de ordenamiento
t e r r i t o r i a l imbuido de formas no participativas, desarrollistas y de tendencia ciertamente "a-
municipal". Cuando se recuperó la democracia en 1982, la intensificación del debate
descentralizador de tinte "pro-departamental" -con los llamados comités cívicos
departamentales como claros impulsores-, buscó el consenso na cional durante años hasta lograr,
a principios de 1993, introducir un proyecto de ley acorde a su enfoque en la Cámara Alta del
Congreso bolivia no. Este proyecto, por lo demás insuficiente en su coherencia técnica, nunca
lograría su promulgación y acabaría más bien sepultado por la vorágine de los inesperados
acontecimientos pro municipalistas de 1994.

En efecto el segundo ciclo se desenfunda recién a mediados de los años 90, cuando en la recién
arrancada gestión de gobierno del periodo 1993-1997, se decide descentralizar Bolivia por vía
fundamentalmente municipal. Sin todos los preámbulos y contramarchas que caracterizaran el
debate descentralizador boliviano de la década de los ochenta, los operadores públicos del
gobierno del entonces presidente Sánchez de Lozada transforman, de manera inesperada y
pragmática, el régimen territorial boliviano, como sólo se lo había hecho en dos oportunidades
anteriores -siempre cada 200 años- con el quiebre territorial toledano de mitades del siglo XVI, y
la reforma borbónica "intendencialista" en las décadas finales del siglo XVIII.

Ahora bien, ni siquiera los indudables logros aparejados a este segundo ciclo municipalista de
descentralización introducido en 1994 podrán ser suficientes para impedir una constatación
paradójica: este modelo merodea su agotamiento aunque no haya pasado ni su adolescencia. El
movimiento excesivamente pendular de una tradición, cierto, departamentalista en el primer ciclo
contemporáneo que arrancara en 1972, hacia una de un municipalismo secante desde 1994, ha
generado, casi diez años después, una serie de incertidumbres, cuestionamientos,
desproporciones y alarmas que conviene rastrear y sistematizar. Está claro que la antítesis
municipalista de 1994 no puede ser ignorada en la síntesis que reequilibre las relaciones ínter
territoriales en Bolivia, síntesis cuyo núcleo encierra un reposicionamiento estructural del nivel
meso en Bolivia. Como quiera que fuera, enante este estado de crisis de equilibrio del
ordenamiento territorial boliviano, que se pone a consideración una de las formas posibles de
síntesis al dilema presentado. Este desemboque es el Estado triterritorial.

II. Las opciones generales para el meso

Sin embargo, antes de-aborcUtr la opción, triterritorial vale la pena recapitular un poco la
sistemática más general de modelos de organización territorial que ños permitirá entender que
hay aún otros caminos que estando igualmente concentrados en el meso (pues la querella en
torno al meso es la cuestión en juego en cualquier síntesis territorial anhelada), contienen una
gama de beneficios sociales sin que para ello se lleve necesariamente el meso a un régimen
descentralizado.

El presente texto es una adaptación al documento de trabajo que el autor preparara en ocasión del seminario del
ILDIS para debatir la edición de £/ Estado Triterritorial: Una nueva descentralización para Bolivia (Plural/ ILDIS, La
Paz, 2003). Economista, Coordinador del programa nacional de reforma y análisis de la descentralización (PRAD) en el
ministerio de Participación Popular.

Esquematizaron del menú básica de opciones de modos de Estado

i no federal federal

I "unitario"
5
.
1
"1 1
« sistema compuesto de Meso
a£ agencias territorial
1 sectoriales Meso descentralizado en
fu descentralizado sistema federal
Meso como corporación en sistema
territorial territorial

'"^

Unitario federal

Para comenzar, todo modo de Estado está centralmente definido por dos consideraciones
básicas: la articulación específica entre el status constitucional de los niveles territoriales, por un
lado, y la forma de división vertical del poder en el Estado, por el otro. En este marco se
hablará de cuatro escenarios gruesos para Bolivia si de reformar su meso se trata. De ellos sólo
dos implican "descentralización" en sentido estricto para el meso: el caso federal y el caso
triterritorial. Los otros dos se mueven dentro de los modelos de desconcentración.

La alternativa de un meso descentralizado en Bolivia ha sido crecientemente desprestigiada


pues se le atribuye el riesgo de llevar a Bolivia hacia la "federalización" y la "desmembración
nacional"; mientras que desde el campo municipalista, se la denigra por contener premisas que
se aplicarían en desmedro de los logros alcanzados desde 1994 con la LPP. Como se verá, se
trata de temores infundados.
2.1. La alternativa de un meso desconcentrado vía agencias sectoriales subnacionales
Lo que sucede en este primer escenario es que el nivel nacional instala sendas agencias de
inversión especializada en el nivel subnacional. Ciertamente, las agencias desconcentradas
desarrollan metodologías de gasto con elevados grados de adaptación técnica al medio pero,
eso sí, se e ncuentran vinculadas a las carteras nacionales sectoriales por líneas de mando
relativamente lineales y directas.
A fin de coordinar las acciones de las agencias, el nivel nacional puede mantener en este modelo
una suerte de delegado técnico de coordina ción o conferir esta tarea a un prefecto por lo demás
reducido a tareas de representación protocolar del nivel nacional, la garantía del orden interno
en el departamento y la centralización de información regional pero sin nin gún grado de tuición
sobre las agencias sectoriales que no sean las de simple coordinación. Si bien este delegado
nacional puede ser designado por el presidente sin mayores exigencias de idoneidad técnica, las
cabezas de las agencias sólo debieran ser reclutadas por mecanismos estrictos de idoneidad. Cada
agencia podría conformar consejos consultivos de actores sociales específicamente afectados por
los proyectos de inversión respectivos. Los recursos financieros serían fundamentalmente
condicionados además de un margen para cubrir costos generales de administración en cada agen-
cia. A diferencia de los otros escenarios, la exigencia de que el nivel municipal, o aún más,
mancomunidades municipales, con todas las ineficiencias que eso implica, sean las que deban
capturar problemas de desarrollo territorial supra municipal, se hace evidente aquí ante la extrema
debilidad que en este escenario, muestra la gestión territorializada en el meso.

En resumen, en este modelo, bien vistas las cosas, se sincera con mu cho criterio práctico y bajos
costos de aplicación, el evidente perfil competencial actual del meso boliviano que viene a ser,
en realidad, una suerte de gran agencia subnacional de inversión en infraestructura. Dado ese perfil
se trata pues de consagrar una eficiente y efectiva red departamental de agencias altamente
tecnificadas de inversión regional. Si bien este camino es sin duda el más expedito en términos
de trámite legal, está claro que irritaría con encono las a veces subestimadas identidades
regionales bolivianas que cargan orígenes incluso prerepublicanos.

• 2.2. La alternativa de un meso desconcentrado vía un cuerpo territorial

Existe un molde distinto al anterior que es parte aún del campo de desconcentración del Estado,
por tanto, de un meso aún no descentraliza do. Pero las virtudes de la desconcentración son
explotadas al máximo al extraerse en este contexto el mayor beneficio al poder reglamentario,
la reingeniería gerencial, una visión territorial de intervención pública, e in cluso, pudiendo darse
aquí la elección democrática de la autoridad principal. La desconcentración llega aquí a su
frontera "extrema" pues el nivel nacional pasa competencias a un cuerpo territorial.

Desconcentración y descentralización del Estado

Campo del poder ejecutivo Campo de gobierno


nacional a nivel subnacional
subnacional

Desconcentración : Descentralización

Ente Ente Ente "persona” Ente “gubernativo"


"sucursal" desdobl jurídica
:

"

De todas las maneras de desconcentración, ésta es la más pretenciosa. En este modelo, el meso
no tiene por qué tener un cuerpo legislativo, de biendo eso sí, explotar al máximo el poder
reglamentario. La explotación de normas de tipo reglamentario si bien no introduce
"legislaciones" dis tintas a las definidas por el nivel nacional, puede acercar efectivamente la
administración al territorio subnacional por los efectos benéficos de adaptación de la gestión
pública a peculiaridades regionales o locales. Esta vía de una desconcentración por medio de
una corporación territorial que implica además envolver una masa crítica de entidades
regionales bajo una sola entidad, tiene un perfil competencial multipropósito y como lo indica
su nombre, no es funcional sino territorial. Bajo tales condiciones, e l nivel nacional debiera
verse impedido de establecer relaciones que perforen la entidad regional mediante, por ejemplo,
un relacionamiento directo con unidades de gestión sectorial ubicadas dentro de ella.

La menor condicionalidad en los recursos fiscales transferidos o cedidos al cuerpo territorial, se


justifica aquí desde el momento en que este modelo supone una capacidad de planificación de
mediano plazo realmente orientadora del gasto de la entidad. Con el modelo pueden coexistir
tanto las alternativas de elección directa del ejecutivo regional como aquellas donde éste es designado
por el presidente de la república aunque bajo efectivos criterios de idoneidad. Incluso la
conformación de órganos deliberativos y de fiscalización complejos puede ser adoptado aunque
estos dispositivos se hallen permanentemente en tensión con la naturaleza no gubernativa que el
meso aquí asume. Por ello es que tampoco se descarta aquí que al ejecutivo regional, elegido o no, se
acople un directorio consultivo social.

Es un modelo con costos de aplicación regulares porque perfecciona el poder reglamentario,


sin mencionar además, que no requeriría grandes cambios constitucionales y su evidente
modestia de diseño, no alimenta los temores mencionados de "federalización" o
"desmembración".

2.3. La alternativa de un meso con calidad de gobierno

Esta alternativa nace cuando se rompe el monopolio legislativo del nivel nacional pero dicha
ruptura se produce en beneficio de una apertura legislativa para el meso. En otras palabras la
ruptura se produce no -o no sólo- cuando se tiene elección directa de ejecutivo máximo del
territorio. En el caso boliviano esto supondría añadir a los dos vigentes niveles con calidad de
gobierno (nacional/municipal), uno tercero. Pero adviértase que la ruptura del monopolio
legislativo en beneficio del meso no lleva necesariamente a una forma federal de Estado como
se suele suponer. Ahora bien, se puede afirmar, por supuesto, que al tener el nivel meso una
asamblea regional legislativa, se implicará preferentemente una conformación democrática de
dicho cuerpo.

No sólo se cree, erróneamente, que optar por un meso con cuerpo legislativo puede llevar a la
"federalización" del país. Peor aún, se cree que bajo estas condiciones no se puede ya garantizar el
orden público subnacional y la unidad nacional. Al contrarié), debiera estar claro que optar por un
meso descentralizado, no implica mayor riesgo en este sentido. En Bolivia por ejemplo, de tenerse
un meso como gobierno, las labores de cohesión pública y seguridad interna podrían incluso
dejarse en manos de un prefecto que, paralelo a los órganos de poder regional directamente
elegidos, quedaría con la tarea de representación protocolar del nivel nacional y en tanto
dependencia de la cartera del Interior, podría coordinar operaciones de orden público.

Pero incluso se podría, con mayores efectos de ahorro, implicar la ga rantía del orden público, a
través de los mecanismos de presencia geográfica desconcentrada de los órganos de coerción
clásicos como la policía. Por supuesto que no se debe descartar además que tales labores
pudieran finalmente ser asumidas por el máximo ejecutivo regional, que no por ser
democráticamente elegido, está libre de tener que ejecutar tareas por desconcentración, y mucho
menos, autorizado para no acatar el ordenamiento jurídico estatal supremo.
Sea como fuere, este escenario abre las opciones para que la región ejerza políticas
diferenciadas en su territorio, pero introduciendo un claro sistema de contrafrenos horizontales
de poder entre ejecutivo y legislativo. Esto último implica elección democrática de órganos,
claras atribuciones para fiscalizar y reales márgenes de legislación regional. Un sistema de este
tipo requiere, por supuesto, una estructura de recursos financieros claramente libre de
excesivos condicionamientos para parte importante de recursos obtenidos desde el nivel
nacional. Pero implica, en especial, impuestos territoriales propios y suficiente
impermeabilización de penetraciones tanto sectorialitas como del sistema hacendístico
nacional sobre las operaciones de gestión del meso.

Es importante subrayar entonces que en semejantes condiciones, se altera la matriz de distribución


competencial. La región no puede ser ya un sim ple ejecutor de gastos de inversión en
infraestructura según visiones más centrales que descentralizadas. El catálogo competencial debe
abrirse hacia la legislación subnacional en temas como la educación, en competencias
proactivas de fomento económico regional, política agraria, medio ambiente y cultura. Un meso
descentralizado (en un esquema triterritorial, "autonómico" o el que fuera) implicaría en Bolivia
enmiendas constitucionales amén de conllevar rupturas de monopolio legislativo y apertura de
dominios tributa rios para el nivel intermedio territorial. Si bien esta alternativa representa un
camino complejo y costoso, es recomendable para resolver temas de exclusión étnica de "alta escala
espacial". La nueva división vertical de poder que todo esto contiene, incrementa pues las
opcio nes de absorber externalidades y empatar mejor la espacialidad de productos estatales con el
grupo de ciudadanos que para consumirlos los paguen con sus tributos y se involucren en su definición
político-social. Como se ve, este camino afectaría además el paradigma pro-municipalista de
descentralización que hoy rige en Bolivia, por mucho que un meso fuerte no es necesariamente, como
se verá, un proceso a expensas del nivel local. Finalmente, sería un pretexto para que la gestión pública
boliviana repiense uno de los elementos sustanciales que no ha sido resuelto por la LPP: la fuerza de la
ortodoxia de mercado impidiendo que los niveles subnacionales ensayen política económica territorial
innovativa.
Esquematizaron de rasgos fuertes de las opciones
Meso como gobierno Meso como corporación Meso como red de agencias
territorial
Competencias -Política económica regional -proyectos de desarrollo regional- -Agencia regional de caminos -Agencia
diferenciada inversiones en caminos regionales regional de infraestructura productiva
-Políticas agrarias y medio am - -inversiones en infraestructura -Agencia regional de electrificación
bientales diferenciadas productiva regional -Agencia regional de agricultura
-Educación superior y técnica -electrificación regional -Agencia regional de educación salud,
diferenciada -redes de protección social asistencia social y servicios básicos
-Asuntos culturales y de pueblos -supervisión en salud. educación,
originarios diferenciadamente asistencia social y servicios básic os
resueltos dentro del departamento
-Supervisión en salud, educación,
asistencia social y servicios básicos
Aspectos políticos -Ejecutivo regional elegido -Ejecutivo regional designado o -Gerentes de Agencia designado; por
-Asamblea legislativa regional elegido idoneidad
elegida por electorado regional -Asamblea elegida o de represen- -Grupos de consulta focal por beneficiarios
tación corporativa

Participación -Elecciones regionales -Vía Planificación departamental -directorios sociales por sector
-Vía Planificación departamental

Atribuciones de au- Sin prefecto; pero la cabeza asume Prefecto paralelo al ejecutivo elegido; Prefecto es delegado del nivel nacional y sólo
toridad paralelamente tareas de seguridad o éste fusiona ambas cosas coordina a las agencias
interna
Recursos fiscales -impuestos propios territoriales -coparticipaciones no condicionadas -sólo transferencias de propósito específico
-coparticipaciones no condicionadas -regalías
-regalías -transferencias -transferencias

III. La salida triterritorial como alternativa de un nuevo meso descentralizado

El tercer ciclo o síntesis territorial que se avizora en Bolivia tiene, qué duda cabe, más de un
derrotero imaginable. Se propone aquí una de las posibles salidas al régimen que usualmente se
conoce como "unitario" pero sin por ello necesariamente llegar a aquel otro conocido como
federal. La crisis territorial tiene una dimensión estructural y ésta se puede encarar desde un
régimen triterritorial. El Estado triterritorial es un modo de Estado donde se conforma un sistema
de tres niveles territoriales, el nacional (o superior), el departamental (o meso) y el municipal (o
inferior), los cua les se traban en términos de estricta coordinación o de lo que puede lla marse, un
modelo de equipolencia constitucional entre niveles territoriales. Estos tres niveles cargan
entonces un valor constitucional equivalente, lo cual implica, entre otras cosas, descubrir lo
nacional como estrato territorial con comparables derechos pero también deberes institucionales
que los otros dos. A partir del precepto triterritorial el modelo de descentralización alcanza con
igual ímpetu, al nivel nacional como parte verídicamente afectable por las alteraciones de poder
territorial. Significa, adicionalmente, un nivel meso con calidad de gobierno y una cualificación
constitucional del nivel municipal, pues el hecho de que éste hoy goce de calidad gubernativa,
no agota aún las opciones de un mayor empoderamiento municipal.

Formación político-espacial

Confederación Estado
(forma unitaria) (forma unitaria)
Modo federal

Modo Modo Modo


federal triterritorial |unitario

Implica finalmente, la aparición plena del Estado en su conjunto pero como algo disociado del
nivel nacional territorial de gobierno. El Estado en su conjunto es pues el ente que envuelve a los
tres niveles y, finalmente, los subordina por igual en tanto orden supremo.
Estado en su conjunto

Meso
Nivel municipal
Nivel nacional

Los tres niveles anclan así, constitucionalmente, cristalinos catálogos de competencias, y el


modelo genera por diseño una apertura de espacios de decisión regional reales, pues implica la
ruptura del monopolio legislativo del nivel nacional en favor del meso. Y es que la sociedad regional,
bajo determinadas condiciones, puede no contentarse ya con "simples" potestades de "planificar"
cuando éstas además -como sucede en Solivia - se esterilizan por la fuerza que de facto despliega
el nivel nacional en el día a día de la gestión estatal subnacio nal. La experiencia boliviana
permite, por tanto, descubrir que serán leyes del o desde el meso -y mejor si forjadas por órganos
elegidos democráticamente los medios definitivamente más efectivos para materializar
aspiraciones de distinta vida pública desde la sociedad regional. Más efectivos en todo caso que
las potestades reducidas a la pequeña alegría de "fiscalizar" el menudeo de adquisiciones de
bienes y servicios, que es a lo que se ha reducido actualmente la fuerza de los "consejos
departamentales " como órganos formales de control en las prefecturas bolivianas. De hecho,
éstas son hoy amiotróficos intentos de lo que arriba se ha llamado un modelo de
desconcentración por corporación territorial que, dada su naturaleza justamente desconcentrada,
por lo de más, sólo debe implementar decisiones del nivel nacional.
Es a partir de un meso con calidad de gobierno que recién se inaugura una descentralización para
el nivel departamental, pero si, además, dicho proceso se produce en condiciones triterritoria les,
se acopla a aquélla que en 1994 introdujera en Bolivia un rusificado nivel local el cual, por efecto
de la triterritorialidad, elevaría también su peso institucional.

Un meso descentralizado para comenzar significa para la sociedad dotarse de válvula s


sostenibles para capturar ciertas externalidades que desbordarán el nivel municipal. Pero más
interesante aún, ofrece sobre todo un recipiente para dar cabida política a identidades socio-
espaciales más complejas cuyo afán es poder codefinir en asuntos propios. En el esquema
triterritorial no se opta, en consecuencia, por un diseño enrevesa do, por ejemplo, de vetos
territoriales de los componentes del meso a nivel nacional a través de un senado o una cámara
legislativa alta donde, además de oficiar de cámara revisora en general, se sientan las unidades
del meso para co-legislar en temas que les atañen.

¿Estamos con lo triterritorial hablando de un desenlace federal? No, pues el Estado


triterritorial se aparta justamente de virtudes y defectos que definen rigurosamente lo federal:
cámara territorial con efectivos vetos globales; encapsulamiento constitucional del nivel
municipal dentro del meso; o fragilidad endémica por difundir la innovación fermentada en la
competencia entre territorios en materia legislativa y de gestión.
Graficación del Estado federal
(caso general)

Estado en su conjunto Meso


Nivel municipal

¿Se trata acaso sólo de una agudización de los grados de descentralización del llamado Estado
"unitario"? Tampoco, pues se eleva lo municipal a un rango equiparable a los otros dos, -el
nacional y meso- "deflactándose" de paso la preponderancia del nivel nacional por efecto de la
misma equiparación constitucional de los territorios. Se fundan, además, las bases para eliminar
-y eso diferencia por ejemplo lo triterritorial de la salida autonómica española, esa red de
autoridades dependientes del nivel nacional (en Bolivia se hablará en este caso de corregimientos
cantonales, subprefecturas provinciales, agentes cantonales), arborescente hasta el último
escalón de un Estado subutilizado, así, en sus cualidades coercitivas radicadas de por sí en la
"infraestructura" del Estado subnacional. Se afecta la típica compulsión de uniformización
normativa del llamado Estado "unitario" y se le desmantelan los artefactos que un Estado tal ins-
tala por principio para creerse en "unidad y paz", y que uno triterritorial, al revés, advierte como
simple y llanamente superfluos.

Graficación del Estado "unitario"

(caso Bolivia)
Meso
Nivel municipal

Estado en su conjunto

3.1. El rédito que contiene lo triterritorial para el nivel municipal

La opción de un meso con calidad de gobierno podría ser interpreta da como una amenaza a los
logros alcanzados por el nivel municipal en Bolivia. Sin embargo, el meso fortalecido está aquí,
en realidad, pensado en un esquema de un peculiar equilibrio territorial trifronte. Como se puede
deducir de la evolución del sistema territorial boliviano, el beneficio que significó la
introducción del nivel municipal en 1994, no cortó, por ejemplo, algunos lazos de autorización en
temas sensibles a los municipios como la determinación de tasas y patentes locales desde el nivel
nacional.

Tampoco implicó jerarquizar su status territorial en el texto constitucional. Significó más bie n,
ratificar el trato de lo local como un "régimen especial", arrinconado al final de la carta magna
boliviana, junto a la cuestión agraria, cultural o familiar. Un diseño pues conflictivo ya sea
porque bajo el caparazón de una autonomía malentendida el nivel municipal cree poder zafarse
de la normativa estatal más general (léase, por ejemplo, su peculiar relación con el régimen de
la carrera administrativa); ya sea por que así se consolida un limbo "autonómico", más parecido
a un trato de generosidad constitucional que de incorporación orgánica de lo local al engranaje
estatal (léase la ya mencionada duplicación de autoridades estatales a nivel local).

3.2 La equívoca alternativa de la mancomunización municipal como meso

La corriente municipalista no ha quedado quieta ante la peligrosa tendencia, por ella misma
desatada, de concebir al municipio como el arma zón ideal para enfrentar, si no todos, por lo
menos gran parte de los problemas del desarrollo. Como era de esperarse, su salida no ha sido
repensar seriamente el meso, sino proclamar frenéticamente la figura de las mancomunidades
municipales como un eslabón que más que concebido para la regulación a probables desbordes
competenciales, se lo excita como refundación aparatosa de instancias territoriales con
planificación "inte gral", financiamiento nacional preceptivo, vinculación al "desarrollo económico
local", el "control social", una nueva esfera de participación civil a este nivel y todos los demás
aderezos de un diseño emotivo y desproporcionado. Las mancomunidades municipales, empero,
son titiles en casos específicos de desborde competencial, o sea de tareas que, dicho sea de paso,
de todos modos quedarán como asuntos del régimen municipal (ámbito donde la figura
mancomunitaria no deja de pertenecer) sólo que "agregadamente" resueltos por acuerdo puntual
de partes. Pero ¿y quien asume las otras externalidades étnicas o económicas que no se capturan ni
con la mancomunidad?

La opción mancomunitaria tiene el riesgo pues de convertirse en una nueva ola de diseño
espasmódico de gestión pública cuando se trata en realidad de una figura de asociaciones
contractuales entre municipios, justificadas para la específica solución de problemas de provisión
de bienes y servicios concretos.

Ya la vigente ley de municipalidades de 1999 distorsionó este sentido originalmente previsto por
la Constitución, al formular ideas de apoyo "prioritario" desde los sistemas nacionales de
planificación y financiamiento a quienes se mancomunaran. Por otro lado, propuso la figura
mancomunitaria como mecanismo para dar cuenta del delicado problema de los territorios
étnicos originarios que, a todas luces, en más de un caso, revientan los bordes institucionales
que ofrece la misma mancomunidad. Pero es en especial una norma específica para
mancomunidades de mediados de 2001, donde se ha hecho más notorio el dimensionamiento
engorroso de la figura mancomuritaria, a pesar de haber estipulado razona blemente en dicha
norma un ágil camino de su disolución. La idea de "asociaciones municipales", flexibles y de
propósito específico -a eso debería reducirse la figura de la mancomunidad municipal- se la
disgrega aquí de la categoría "mancomunidad". A ésta se le reserva erradamente más bien la
absorción de hechos territoriales que, de realmente existir con la notoria fuerza socioespacial que
se les atribuye, debieran buscar más bien su solución en la conformación de unidades
municipales de pleno derecho (léase la fusión municipal).

En consecuencia, una aplicación flexible y no ampulosa de la asocia ción de municipios es útil


pero puede resultar contraproducente si pretende capturar valores públicos de escala meso o
resolver asuntos de identidad territorial étnica en cánones de derecho privado. Por lo tanto, la
cuestión mancomunitaria resumidamente, puede adquirir sentido y ser sostenible si se
consideran las siguientes pautas generales:

i) Toda mancomunidad debiera crearse sólo para resolver temas específicos cuya resolución
desde municipios individualmente tomados es ineficiente u operativamente costosa. En
este sentido no habrían, por un lado, mancomunidades "funcionales" (precisamente
aquellas para resolver temas puntuales), y por el otro, mancomunidades "te rritoriales" dado
que lo ultimo colinda en realidad o con el sustancial tema de la fusión municipal o, al
extremo, con la reposición del nivel provincial boliviano.

ii) Las mancomunidades serían de dos tipos: o voluntarias o preceptivas.

Las mancomunidades de calidad preceptiva se crean obligadamente por "utilidad pública"


y justamente ofrecen bienes y servicios en tres grandes grupos:

Mancomunidades para la provisión de bienes meritorios:

• Servicios en salud, educación y saneamiento básico cuando dicha provisión, ni puede ser
atendida por los municipios; ni la escala en cuestión es lo suficientemente grande para
caer en la competencia directamente prefectural.

Mancomunidades para la provisión de bienes públicos:

• Externalidades ambientales derivadas del manejo de cuencas; áreas protegidas:

Mancomunidades para bienes "estatales":

• Cuando se hace necesario el apoyo a la consolidación contable municipal y a la preinversión


y ciclo de proyectos para unidades municipales demasiado pequeñas para tales fines.

Las mancomunidades serán voluntarias cuando los municipios esta blecen convenios que no
implican la provisión de bienes "meritorios", "públicos" o "estatales" ya listados. Las
mancomunidades de tipo voluntario serían de dos clases:
• "Mancomunidades hacia la fusión futura en un municipio";
• Mancomunidades para acciones puntuales no relativas a temas asumidos por las de tipo
preceptivo.

iii) En caso de las mancomunidades preceptivas, los recursos provendrán de los municipios
(independientemente que éstos los reciban, en realidad, del centro como transferencia
condicionada); no pudiendo ir las mismas directamente del Estado central a las
mancomunidades. Esto no excluye por cierto el establecimiento del "débito automático" para
garantizar la operación mancomunitaria como tal. En el caso de las voluntarias, sólo aquellos
municipios que se adscriban a una futura fusión recibirían recursos prefecturales como incentivo
a su fusión gradual; las otras voluntarias tendrán recursos de los municipios que han decidido
asociarse o de donación siempre y cuando la misma entre "contablemente" al municipio socio y
éste derive a su turno el recurso a la mancomunidad.

iv)No se tendrán en las mancomunidades (salvo en aquellas "hacia la fusión municipal


futura") formatos pesados y equívocamente pretenciosos de planificación "integral"
exigiéndose sólo planes de gestión específica de proyectos;

v) Toda mancomunidad tendrá un directorio formado por los alcaldes y un gerente para la parte
operativa. Los concejales municipales fiscalizarían al alcalde en lo que hace a lo
mancomunitario, pero como parte de la agenda corriente de fiscalización al poder municipal.

vi) Las mancomunidades son personas de derecho privado contractual-mente establecidas y


disolubles una vez materializado el propósito de su creación. La figura privada se justifica
por el carácter contractual específico de la mancomunidad y por las ventajas comparativas
desde la perspectiva de la utilidad prevista para las mancomunidades, a saber, resolver temas
específicos de externalidades.

3.3. ¿Por qué una estructura territorial "bigubernativa" como la que actualmente rige en
Bolivia no sería preferible a una triterritorial?

El patrón de organización territorial vigente en Bolivia está caracterizado por la concatenación de


los siguientes rasgos: primero, se calificará el mismo corno "territorialmente b/gubernativo" dado
que se han consolidado en el país dos niveles territoriales como entidades con calidad de
gobierno. Se dirá luego que es "bipolar" pues no es el meso, sino sólo los "extremos" nacional y
local los que adquieren semejante dimensión gubernativa. En tercer lugar -y aunque parezca
paradójico- el rango gubernativo del nivel municipal no ha significado elevarlo a un status
constitucional equiparable al nacional. Según las normas bolivianas, el municipio es beneficiario
de un régimen especial de "autonomía", calidad que ambiguamente le es asignada también al
sistema universitario. La tradición ha hecho que esta autonomía sea tendencialmente asimilada
a un ámbito "a-estatal" de gestión, interpretándose en cierta forma el status municipal como
una suerte de acuerdo "entre el Estado" y "asociaciones civiles" locales a fin de que las mismas,
no sean interferidas en sus actos administrativos mínimos desde el Estado. El cuarto rasgo del
patrón boliviano de organizació n territorial se refiere al concepto "indígeno-distritalista"
aplicado a fin de dar cuenta de las territorialidades étnicas. En efecto, éstas serán admitidas, en
el mejor de los casos, en el molde de unidades desconcentradas dentro del municipio
correspondiente descartándose por tanto la opción de otorgarles calidad de entidad territorial
gubernativa.
Está claro que este patrón boliviano de organización territorial no se sale del modo de Estado
generalmente conocido como "unitario". Ahora bien, el modo de Estado llamado triterritorial
altera por lógica el patrón descrito. Como se planteó arriba, no sólo se compone de tres niveles
territoriales con calidad gubernativa al investir al meso con calidad de gobierno territorial, sino
que, como ya se dijo, "sube" al nivel municipal y "baja" al nacional, estableciendo así un
equilibrio territorial gracias a la equipotencia constitucional que le es característica. "Sube" al
municipio, pues no se trata ya de un régimen especial cuasi civil, sino de un eslabón territorial
del Estado y tan impermeabilizado de eventuales intromisiones administrativas superiores,
como lo serían los otros dos. "Baja" al nivel nacional pues éste deja de estar amalgamado con el
Estado en su conjunto y debe ser sometido a las mismas exigencias de rendimiento institucional
que el meso o el municipio.

Alteración de la correlación de fuerzas constitucionales de lo territorial como


efecto de lo triterritorial
"Baja lo nacional" al desprenderse el "Estado en su
conjunto" del nivel territorial nacional.

Se abre un nivel meso como nivel de gobierno.

Se "sube lo local" al sacar el nivel municipal


de su actual trato de régimen de administración
"respetada".

Llegados a este punto interesa resumir no tanto los réditos de un sistema de niveles territoriales
modularmente articulados, como el hecho específico de un meso convertido en eslabón
territorial con calidad de gobierno. El meso, hemos visto, permite abrir un campo de decisión
para visiones rnacrosociales de una escala que es demasiado grande como para ser canalizada
desde un municipio o, incluso, desde una asociación de municipios. Pero a la vez demasiado
"propias" como para ser tratadas desde el nivel nacional. En este contexto es pertinente
recordar una vez más que, en el caso de Bolivia, la escala entre lo local y lo nacional provie ne de
antes de su independencia como República en 1825 con la creación de las intendencias,
pudiendo rastreársela incluso más atrás en la figura de las gobernaciones y la jurisdicción de la
audiencia de Charcas. Y nótese que el grado con el que cuajaron las intendencias, como lo
hicieron en el Alto Perú colonial, no fue igual de exitoso en todo el sistema virreinal español en
América.

En un modo de Estado triterritorial, se abre la posibilidad de procesar socioestatalmente lo étnico


territorial dentro del meso, cuando se trate de constelaciones más grandes que un municipio
(pues más de una de ellas puede tranquilamente ser "atendida" confiriéndole rango de
gobierno municipal). Se puede en este sentido articular lo étnico-territorial políticamente a los
órganos de poder regionales en la forma, por ejemplo, de un bicameralismo dentro de los
departamentos que así lo requirieran. Sea como fuere, lo importante es permitir la consagración
de la sociedad regional.

Otro justificativo adicional, anticipado líneas arriba, viene de la necesidad de capturar externalidades
en la provisión de bienes estatales que desbordan incluso los mecanismos de mancomunización
municipal, incluso de aquellos bien concebidos. Desde una perspectiva más global, la no creación de
un meso fuerte podría generar problemas de lo que podría llamarse "baja compresión competencial".
En efecto, un meso, en tanto gobierno, funge como una suerte de malla de contención a potenciales y a
veces excesivos traspasos del ámbito nacional al local. Su inexistencia puede llevar, por otro lado, a
procesos a veces festejados pero siempre riesgosos de "hiperdescentralización" de corte localista. Un
meso escuálido puede finalmente presionar para que el nivel nacional asuma tareas que, de existir la
opción de un meso fuerte, aquel no las hubiera encarado con mano propia. Así pues, a fuerza de la
inexistencia de un meso fuerte, productos estatales de escala regional son inevitable mente
"fabricados" por la "usinas" nacionales y locales, con los correspondientes sobre costos
potencialmente implícitos.

Se debe mencionar un último aspecto altamente estratégico. La existencia de un catálogo


competencial con posibilidad de ser ofertado desde el meso funda la oportunidad de explotar los
beneficios de una competencia en una suerte de mercado de innovaciones legislativas
interterritoriales que ya se apuntara arriba. El meso aparece, en efecto, como un ámbito más
adecuado para ensayar políticas educativas diferenciadas frente a la opción de hacerlo a través
de la miríada de municipios que suelen generalmente componer un país. Así, en Bolivia, es
más sensato imaginar un sistema de competencia educativa entre las nueve piezas del meso
hoy existentes que entre sus más de trescie ntos municipios.

Rasgos seleccionados de los modos de Estado analizados

Federal Tri-territorial "unitario": caso


Bolivia
¿Senado? Si No SI

¿Senado como resguardo territorial efectivo? Sí No NO


¿Colegislación meso en asuntos nacionales? Sí No No
¿Meso con facultad de legislación? Sí Sí No
¿Municipio como nivel del gobierno territorial? Sí Sí SÍ
¿Municipio como segmento territorial de! Estado? No SÍ NO
¿Administración nacional paralela en el ámbito subnacional? Sí NO SÍ
¿Majestad tributaria propia del meso? Si Sí NO
¿Sistema efectivo de competencia legislativa interterritorial No Sí No
meso?
¿Sujeción del nivel nacional a equiparables cánones de Ha Sí No
rendimiento aplicables al meso y al municipio?
¿Resguardo jerárquico del orden territorial? Sí Sí No
¿Probable incremento absoluto de costos administrativos por Sí Sí No
funcionamiento de nivel territorial?
¿Flexibilidad para capturar costos de externalidades técnicas y Sí Sí No
étnicas regionales?

IV. Epilogo metodológico: el dilema entre "teoría / práctica" y aquél entre "ideología y
técnica"

Hablar de "tecnología territorial en la civilización humana", "modelo territorial", "efectos de diseño"


o "experiencias comparativas", genera en el país una llamativa reacción de los especialistas que sienten
como afrenta un enfoque de este tipo "indiferente a los analistas nacionales", "teórico", "importado",
"no aterrizado", etc. Al contrario, se puede sostener que uno de los obstáculos que se antepusieron al
diseño congruente del orden territorial en Bolivia (como se desprende de un primer vistazo a la arqueo-
logía del municipalismo boliviano pero también del peculiar departamentalismo previo) fue
justamente la limitada pulcritud e insuficiente demarcación teórica para conceptualizar procesos
territoriales. Es por eso que la delimitación teórica del Estado triterritorial, vale decir, la explicitación
de sus coordenadas conceptuales fundamentales y de las temáticas que irrumpen gracias a su
consideración, se constituyen en una obligación metodológica. Debe uno ponerse a reflexionar
sobre los efectos de diseño que pretende traer lo triterritorial y ese debate se produce también en el
campo de las precisiones conceptuales. Mejor aún, el diseño de nuevas alternativas territoriales pasa
por componer el menú técnicamente congruente de opciones de distribución territorial del poder y
que se hallan desde siempre a disposición de la civilización humana; y confrontarlas con las
aspiraciones vitales de la gente en la realidad concreta. La pregunta será entonces cuál es el mejor
instrumento para capturar el embrollo socioespacial peculiar del país.

La modelación del Estado triterritorial se enraíza por cierto en una revisión exploratoria de
procesos territoriales que funcionan en varios países del mundo y recoge de aquí su primer
respaldo empírico aunque este procedimiento heurístico genere resentimiento en quienes creen po-
der entender la tecnología de lo territorial desde una sudorosa autocognición nacionalmente
ombligocéntrica.

Con todo, la propuesta triterritorial surge además de sopesar los pormenores de la actual práctica
territorial boliviana pero, en especial, de compadecerse del hecho de que el país tiene una evidente
dimensión regional, por mucho que en el futuro la norma nunca lo admitiera, fomentara o
absorbiera. Más de una guerra civil en Bolivia tuvo una explicación interna de índole regional. No
atender este dilema desde una perspectiva sosegada sería llevar leña al fogón de propuestas de un
delirio etnoterritorial que pretende fragmentar el Estado bajo una lógica, además, de "cuoteo" racial
cié la misma administración pública.

¿Cuan viable es la puesta en marcha de un ordenamiento triterritorial? Las implicaciones de semejante


orden conducirían, es cierto, a una enmienda constitucional importante. Pero esto no pasaría de ser un
impedimento de fácil resolución procedimental. Un impedimento mayor radica, en realidad, en superar
los más disímiles prejuicios que lo triterritorial amenaza y devela. A diferencia de la reforma
municipal de 1994, que fue imple mentada sin necesidad de arduos procesos de consenso social
(poniendo saludablemente en duda aquello de que sólo procesos de "abajo hacia arriba" son
beneficiosos para la sociedad), la multitud de sensibilidades "unitaristas" y prejuicios municipalistas
que afectaría un orden triterritorial, hacen que una reforma del meso de tal magnitud requiera de deli-
cados consensos. Es por ello, una vez más, que un requisito es justamente separar el encaramiento
ideológico del asunto del enfoque técnico a fin de que el eventual fracaso de un meso fuerte se explique
por resistencias políticas y no por confusiones de orden técnico.
5.3 REFORMAS A LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO

PROPUESTA MUNICIPAL
FAM - BOLIVIA

ANTECEDENTES

La Federación de Asociaciones Municipales de Bolivia FAM - BOLIVIA, frente al


próximo inicio del debate nacional sobre las reformas a la Constitución Política del Estado,
llevó adelante un proceso de consulta a las autoridades municipales del país con el
propósito de agendar e identificar aquellos temas que desde la visión de los Gobiernos
Municipales deben ser insertados en el debate político y parlamentario sobre la mencionada
reforma.

Para la elaboración de dicha prop uesta se llevaron a cabo tres Talleres Regionales de
consulta que contaron con una participación de más de 100 autoridades municipales; el
primero en la ciudad de Sucre, que involucró a los representantes municipales de las
asociaciones departamentales de Chuquisaca, Tarija y Potosí; el segundo en Santa Cruz,
con representación de los departamentos de Beni, Pando y Santa Cruz; y el tercero en la
ciudad de Oruro, con autoridades municipales de La Paz, Oruro y Cochabamba.

A los fines de darle coherencia a lo s resultados, cerrar dicha consulta, integrar los
resultados regionales y concertar una agenda de consensos, se llevó a cabo la Consulta
Nacional Municipal en la ciudad de La Paz en fecha 17 de octubre del 2001, la cual contó
con la participación de 140 autoridades municipales de los nueve departamentos del país.

AGENDA PARA LA REFORMA CONSTITUCIONAL.

Concluida la Consulta Nacional Municipal se identificó un conjunto de temas relevantes


que fueron integrados en una “Agenda Municipal para la Reforma Constitucional”, la cual
orientará la intervención de la FAM y sus 10 Asociaciones afiliadas en la reflexión sobre la
reforma a la C.P.E. Temas y Agenda que se pondrán en conocimiento del Consejo
Ciudadano, del Congreso Nacional y de las instancias respectivas del Estado, a los fines de
lograr su consideración a la hora del debate y aprobación de la reforma constitucional.

OBJETIVO DE LA PROPUESTA; ALCANCES Y CONTENIDO.

Las propuestas se plantean con el objetivo central de:

? Consolidar en los contenidos de Ley de Necesidad de la Reforma y Ley de Reforma


Constitucional propiamente dicha, todos los avances logrados en el país en cuanto a la
descentralización municipal iniciada en 1994 con la Ley de Participación Popular.
? Profundizar el proceso de descentralización, con la inserción de nuevas figuras jurídicas
y reformas a la CPE.
Desde esta perspectiva, las autoridades municipales no renunciaron a su derecho de
proponer su visión de la Organización Política del Estado, desde la unidad básica del
Estado, es decir el municipio.

Las propuestas tienen su alcance en cuatro ámbitos:

? Temas Generales.
? Temas municipales.
? Temas relativos al nivel departamental de la administración pública.
? Temas nacionales.

En cuanto a su contenido, la propuesta de la FAM plantea una Agenda de los TEMAS que
los Gobiernos Municipales proponen sean insertados en el debate nacional y legislativo
para la reforma constitucional. En esta etapa, a la FAM le interesa que esas propuestas
municipales sean efectivamente consideradas en el debate político, social, gremial y a nivel
del Congreso de la República.

Para esta Federación, este es el inicio de un proceso deliberativo, de reflexión y


concertación sobre el contenido y forma que debe revestir la Reforma Constitucional, el
cual debe continuar en todos los niveles y espacios, tanto interno municipal, como a nivel
público externo. Esto explica que después de haberse definido los temas de la Agenda, la
FAM no haya cerrado una posición final sobre las opciones de regulación constitucional
que cada uno de ellos expresa, las que al momento de su definición deben guardar
coherencia con un modelo de Estado descentralizado sobre cuya vigencia el municipalismo
boliviano si tiene una posición consensuada.

Hacia el futuro y durante el debate mismo de la reforma constitucional, la FAM


desarrollará otras iniciativas complementarias para enriquecer y definir su posición
institucional sobre el alcance específico de cada uno de aquellos temas.

I. ASPECTOS GENERALES :

1. Forma de Estado:
Consagrar constitucionalmente a Bolivia como un Estado Unitario Descentralizado.
Esta definición debe insertarse en al artículo primero de la Carta Magna.

2. Sistema de organización política:


Sistema trinario – territorial de Gobierno: nación, departamento, municipio.

3. Definición de competencias y atribuciones de los niveles territoriales de gobierno:


Deben definirse o redefinirse con total claridad las competencias y atribuciones

exclusivas y concurrentes de cada uno de los niveles territoriales de organización

político administrativa del Estado.

4. El Régimen Municipal ya no debe considerarse como un Régimen Especial en la


estructura de la CPE; debe incluirse al Régimen Ordinario autónomo en la estructura
del Poder Ejecutivo reconocida en la carta magna.

5. La Participación Popular debe ser incorporada como un principio básico y rector de


la gestión municipal.

6. Debe existir coherencia entre la expresión del régimen de Gobierno a nivel,


departamental y municipal. No pueden coexistir un régimen presidencialista a nivel del
Gobierno Central y un régimen parlamentarista en el Gobierno Municipal.

II. TEMAS MUNICIPALES

1. ELECCION DE ALCALDE

La propuesta es establecer una regulación constitucional dirigida a preservar la


voluntad mayoritaria de la población expresada en el voto popular y evitar así la
distorsión de la expresión ciudadana en el seno del concejo municipal.

Alternativas
? Elección directa de Alcalde; es decir, que debe asumir ese cargo el candidato más
votado en su municipio. Sea por mayoría simple o con el establecimiento de una
mayoría especial.
? Establecer la segunda vuelta electoral con los dos candidatos más votados en la
primera.
? Mantener el actual esquema

2. ELECCION DE CONCEJALES

Se plantea una forma de elección que posibilite incrementar la representatividad,


responsabilidad territorial y legitimidad de estas autoridades, fortaleciendo su vínculo
con su base electoral.
Alternativas
? Elección de concejales en distritos uninominales territoriales.
? Elección de concejales en listas separadas, bajo el sistema proporcional
? Elección de concejales plurinominales
? Un porcentaje de concejales electos por fórmula y otro por distritos uninominales.

3. VOTO CONSTRUCTIVO DE CENSURA

El diseño actual de esta figura jurídica dio lugar a su utilización como instrumento de
censura con intencionalidad preponderantemente político-partidista, desnaturalizando el
sentido de su concepción original, hecho que generó inestabilidad institucional y un
daño a la democracia local. Además, esta figura es propia de sistemas de gobiernos
parlamentarios, presente además en un entorno y contexto de falta de madurez de los
representantes políticos en los Gobiernos Municipales.

Alternativas:
? Eliminación del voto constructivo de censura.
? Mantener el sentido original, pero con modificaciones en su diseño jurídico:
practicable cada dos años y medio (a la mitad del mandato), bajo regulaciones
específicas y transparentes que eviten el abuso y las maniobras políticas.
? Mantenerlo.

4. REVOCATORIA DE MANDATO

Se propone insertar esta figura en el nuevo texto de la Constitución política del Estado.
En esencia debe implicar la devolución a favor del ciudadano de la facultad de revocar
el mandato de la autoridad municipal electa, alcaldes y concejales, cuando se pierde la
confianza en ellas y bajo regulaciones determinadas. Se trata de una figura distinta al
proceso de destitución por malos manejos.

5. REFERENDUM MUNICIPAL

Se propone la incorporación de esta figura a la Constitución Política del Estado, en la

búsqueda de ofrecer al ciudadano la oportunidad de participar en decisiones

trascendentales para la vida de su municipio. Sus alcances y forma de implementación se

analizarán a la hora del debate mismo de la reforma constitucional.

6. CONSULTA MUNICIPAL
Constituye otro mecanismo orientado a vincular de manera permanente a los
ciudadanos con la gestión local y tiene que ver con consultas directas a los mismos,
sobre la base de regulaciones específicas que serán analizadas al momento de debatir
las reformas. Los alcances de esta figura deben analizarse junto con el Referéndum
Municipal y la Revocatoria del Mandato.

7. SISTEMA DE REPRESENTACION POLITICA

Es necesario introducir al debate nacional el análisis sobre la conveniencia de ofrecer a

los ciudadanos y actores de la sociedad civil la oportunidad de presentar candidaturas

para la constitución del poder local; mas concretamente para la elección de alcaldes,

concejales, e incluso diputados uninominales.

Estas candidaturas de ninguna manera excluirían las candidaturas partidarias; se trata de


un esquema mixto de candidaturas independientes y partidarias, bajo regulaciones
específicas y solamente para el nivel municipal y representación uninominal, no así
para la elección de otros representantes nacionales.

Alternativa:
? Mantener esquema actual.

8. SUBALCALDES Y AGENTES MUNICIPALES CANTONALES

Se propone debatir la conveniencia de elegir a los subalcaldes por voto popular y

directo, junto con la elección de los alcaldes, con el propósito de vincular de manera más

estrecha toda la representatividad de las autoridades municipales.

También debe debatirse la conveniencia o no de mantener la figura de los Agentes

Municipales Cantonales.

Alternativas:
? Elección de subalcaldes en las listas de los candidatos a alcalde.
? Elección directa.
? Designación por el Concejo Municipal o el Alcald e.
? Desconcentración de la gestión municipal vía subalcaldes.
? Eliminar a los subalcaldes y fortalecer los agentes municipales cantonales.
? Unificar las funciones.
? Eliminar Agentes Cantonales. El Cantón no tiene atribuciones municipales.

9. CONTROL SOCIAL

Institucionalizar un sistema nacional de control social que abarque a todos los niveles

estatales. En el ámbito local el control social no debe sobreponer competencias de los

órganos constituidos de manera democrática como los Concejos Municipales; tampoco a

los Comités de Vigilancia. Debe establecerse una legislación especial para el Control

Social.

10. DIVERSIDAD ÉTNICA-CULTURAL

Es preciso compatibilizar y armonizar la división político administrativa del Estado con


la realidad sociocultural del país.

11. CANTON – AGENTES CANTONALES

Debe evaluarse la posibilidad y/o conveniencia de eliminar el cantón y del agente


cantonal como un componente de la división político administrativa del país, en el
nuevo contexto de la descentralización municipal.

Alternativas:
? Que el cantón se convierta en un distrito municipal
? Que el agente cantonal sea el subalcalde.

12. PRINCIPIOS DE GESTION PUBLICA DESCENTRALIZADA.

La nueva Constitución política del Estado debe consagrar un conjunto de principios que
reafirmen el proceso de descentralización:

? Principio de conexitud fiscal: toda transferencia de competencias debe estar


acompañada de la transferencia de recursos suficientes y sostenibles para atenderla.
? La coparticipación tributaria debe estar consagrada como principio constitucional.
? Autonomía municipal.
? Subsidiaridad.
? Solidaridad.
? Coordinación.
? Concurrencia.
? Equidad.
13. MUNICIPALIZAR LA LEGISLACIÓN

Se propone que la Constitución Política del Estado defina la existencia de una


normatividad flexible y diseñada para la gestión autónoma municipal. Por ejemplo:
municipalizar la ley SAFCO, la legislación de contratación municipal, etc.

14. CASO DE CORTE

Se plantea debatir la conveniencia de restituir el Caso de Corte para autoridades


municipales, pero no para delitos comunes.

15. TUICIONES

a) Delimitación del área urbana.

La delimitación del área urbana debe constituir una facultad del Gobierno Municipal y
no así del poder ejecutivo nacional.

b) Tasas y patentes.

Debe eliminarse la aprobación de tasas y patentes por parte del Senado de la Repúb lica.
Estas deben establecerse por decisión del Concejo Municipal o alternativamente de una
instancia departamental.

c) Expropiaciones y compensaciones.

Las expropiaciones y compensaciones deben constituir facultades privativas del


Concejo Municipal.

16. RECONOCIMIENTO CONSTITUCIONAL DEL SISTEMA ASOCIATIVO Y


MANCOMUNITARIO MUNICIPAL.

Se propone debatir la inclusión del sistema mancomunitario y asociativo municipal


boliviano en la norma constitucional, con el propósito de consagrar constitucionalmente
a instrumentos diseñados para coadyuvar al proceso de descentralización boliviano, que
debe ser entendido como una política de Estado.

Se propone que con el mismo espíritu establecido en el artículo 185 de la Constitución


Política del Estado a favor de las autonomías universitarias, se evalúe la conveniencia
de afianzar un ente de representación de las autonomías municipales.

III. NIVEL DEPARTAMENTAL


1. ROLES Y COMPETENCIAS DE LAS PREFECTURAS.

Deben definirse con claridad los roles y competencias del nivel intermedio de la
estructura del Poder Ejecutivo; ello evitará la actual invasión y sobre posición de
competencias. La función del nivel departamental en el sistema de organización política
del Estado debe estar claramente definida en la C.P.E.

Cada uno de los tres niveles de esa estructura debe tener un rol específico y definido en
la gestión del desarrollo, pero con visión integral.

Las prefecturas deben ser instrumentos coadyuvantes al proceso de descentralización


municipal y no entes competidores de los Gobiernos locales como ocurre en la
actualidad.

Debe debatirse si serán entidades de desarrollo o de representación política; o si asumirá


ambas condiciones.

2. ATRIBUCIONES DEL PREFECTO.

Las atribuciones del Prefecto deben enmarcarse en la lógica del punto anterior.
En el debate deben considerarse alternativas.

Alternativas:
? Hacer del Prefecto sólo un representante político del Presidente de la República.
? Poner énfasis en funciones de promoción del desarrollo regional..
? Mantener sus actuales funciones; o introducir ajustes, ampliando o reduciendo las
mismas.

3. ELECCION – DESIGNACION PREFECTO


Se propone debatir la forma de elección de los Prefectos; para ello deben considerarse
diversos aspectos:

- La necesidad de fortalecer su legitimidad y facilitar con ello su labor de articulación


de lo municipal con visión departamental.
- El mantenimiento del sistema unitario del Estado Boliviano, pero asentado en un
modelo claramente descentralizado de contenido municipal.
- Equilibrio entre legitimidad, representatividad y gobernabilidad.
- Su rol en las tareas de promoción del desarrollo regional.

Alternativas:
? Elección directa por voto popular.
? Designación por el Presidente de la República, de entre los miembros de un Consejo
Departamental previamente elegido por voto popular.
? Mantener el sistema actual.
4. CONSEJOS DEPARTAMENTALES

Sus actuales atribuciones son insuficientes para cumplir los propósitos que dieron lugar
a su creación. Deben ampliarse sus atribuciones, precisarse mejor las actuales y darle
mayores facultades sobre la gestión prefectural.

5. ELECCION DE CONSEJEROS DEPARTAMENTALES.

El Consejo Departamental ha fracasado en su función de ser el órgano articulador del


nivel municipal con el departamental; uno de los aspectos relevantes que tuvo que ver
con ello es su carencia de representatividad y legitimidad. Su actual forma de
designación fue utilizada con un marcado sentido partidario que desnaturalizó su
condición de representantes de los municipios.

Alternativas:
? Elección directa por voto popular.
? Que se constituya con los alcaldes de cada departamento.
? Consejo constituido por una representación de concejales, elegidos al interior de
cada Concejo Municipal.
? Constituido por parlamentarios: uninominales; o, senadores y diputados suplentes.
Esta es la opción que mereció el menor respaldo.

6. LAS PROVINCIAS Y LOS CANTONES.

Se plantea debatir la pertinencia de mantener en la división político – administrativa del


Estado tanto las Provincias como los Cantones, en un contexto en el cual la
descentralización municipal cobró vigor y la Sección Municipal se convirtió en el
espacio territorial básico en el proceso, la célula básica del Estado boliviano y de su
ordenamiento territorial.
En el debate deben considerarse aspectos históricos, culturales, las tradiciones, etc.

7. COMPETENCIAS DEPARTAMENTALES EN RECURSOS FINANCIEROS.

Debatir la administración y asignación de recursos financieros que deben administrar


las Prefecturas, en el marco del modelo de descentralización municipal imperante en el
país.

8. DELIMITACION TERRITORIAL.

Establecer otro órgano competente para definir las delimitaciones territoriales.


III. TEMAS NACIONALES

1. ELECCION DE PRESIDENTE DE LA REPUBLICA.

Se propone la elección directa del Presidente de la República para evitar la distorsión de


la voluntad popular a nivel del Congreso Nacional.

Alternativa:
? Implementar una “Mayoría Especial”.
? Establecer la Segunda Vuelta entre los dos candidatos más votados.

2. REELECCION PRESIDENCIAL

Se propone la re-elección inmediata por un período adicional.

3. VICEPRESIDENCIA DE LA REPUBLICA.

Debe debatirse la conveniencia o no de mantener la Vicepresidencia de la República


con sus actuales roles; o la necesidad de definir nuevos roles e incluso considerar su
eliminación.

4. ESTRUCTURA DEL PARLAMENTO.

Se propone debatir la conveniencia de modificar la estructura del Parlamento Nacional.


Debe analizarse la alternativa de constituir una parlamento Unicameral, como también
sus ventajas y desventajas frente al actual sistema Bicameral.

5. NUMERO DE PARLAMENTARIOS.

Analizar la alternativa de reducir la cantidad de parlamentarios; y en ese marco, de introducir mecanismos de compensación para
Departamentos afectados por la reducción de su población.

6. FORMA DE ELECCION DE PARLAMENTARIOS


Incrementar la representatividad de los parlamentarios y fortalecer su vínculo con la
ciudadanía y su base electoral.
Aumentar el porcentaje de uninominales.

7. PÉRDIDA DE MANDATO POR ACUMULACIÓN DE CARGOS.

Debatir la necesidad de establecer la pérdida del mandato de aquellas autoridades


elegidas por voto popular que asuman otro tipo de funciones en el Estado, distintas para
las que fueron elegidas.

8. EQUIDAD DE GENERO.
Instituir que las políticas públicas deben considerar el principio de la equidad de género.

La Paz, octubre del 2001


6. Estados Autónomos o Federales

6.1 Hacia la construcción de la Segunda Repúbica

LIC. JORGE KAFKA ZUÑIGA


LAS NUEVAS GUERRAS DE IDENTIDADES

EN BOLIVIA

Jorge A. Kafka Zúniga.

Después del desmoronamiento del orden mundial de posguerra y a pesar del pretendido
unipolarismo mundial, tras la caída del muro de Berlín, se está manifestando en el planeta
la multiplicación / fragmentación de diversos centros de poder, los que dan pie a pensar en
el renacimiento de nacionalismos, regionalismos y etnicismos, que parecían haberse
difuminado en el tiempo.

La expansión del integrismo fundamentalista, el recrudecimiento de la xenofobia y el


racismo invaden las relaciones sociales y políticas, con lo que aparecen viejas y nuevas
ideas, actitudes y co mportamientos, expresados en planteamientos, códigos, emblemas y
símbolos públicos que agrupan y reagrupan a diversos grupos sociales al margen de las
clásicas disputas ideológicas del siglo XX.

Nociones como las de país, patria, provincia, región e inclusive de Estado van mutando
precipitadamente en busca de encontrar nuevas coherencias territoriales, lingüísticas,
culturales o jurisdiccionales, derrumbando las antiguas formas de identificación social,
histórica y cultural y configurando nuevos mapas políticos virtuales en el seno del Estado,
a través de él o incluso mas allá de sus propias delimitaciones territoriales.

El agotamiento de los modelos de desarrollo y participación social centralizadores y


excluyentes fueron las condicionantes para que la diversidad cultural y religiosa buscará
sus propias formas de expresión política, convirtiendo a los nuevos nacionalismos en
proyectos políticos autonómicos que agrietan y rompen la estructura de los Estados
nacionales.

Bolivia no escapó a esas tendencias globales, aunque, su emparentamiento con las


temáticas étnicas y raciales son de larga data. El Estado republicano conformado
jurídicamente a partir de 1826, fue un Estado que se constituyó contra la población
indígena. La democracia censataria sólo reconocía la ciudadanía a aquellos que gozaban de
ciertos recursos económicos y educación, con lo que se estableció una jerarquización
imaginaria entre la sociedad señorial de ciudadanos y la población indígena de sirvientes.
Se trató, en suma, de una forma de gobierno democrático representativa, de una minoría de
blancos y mestizos, que proscribía del poder y de su condición ciudadana a la mayoría
indígena.
Esta forma de organizar la sociedad y Estado tuvo su momento crítico en la Guerra Federal
de 1899. Enfre ntamiento en el que en medio de la disputa entre constitucionalistas y
liberales, en el núcleo del agrietamiento del Estado oligárquico, emergió una Guerra
Cultural, la cual trata de ser ignorada por la historia oficial. Guerra en la que se enfrentaron
los valores de la cultura occidental con los del mundo aymara y cuyo desenlace derivó en
la derrota militar de los ejércitos aymaras y la consolidación del Estado oligárquico.

La situación indígena no se modificó sustancialmente con la revolución del 52 en el siglo


XX, pues la discriminación desapareció de los marcos jurídicos para trasladarse al
inconsciente colectivo de una sociedad organizada a partir de falsas jerarquías, signadas
por el fenotipo y el poder económico, construyendo una imagen de Estado na cional
yuxtapuesto y con sobreposiciones que nunca terminaron de fundirse en una comunidad
nacional.

Por el contrario, lo que se consolidó fue un Estado sin nación étnicamente neutro, ya que al
negar a la mayoría indígena su concreción política en el Estado, se amputó el potencial
nacionalitario de lo boliviano: el corazón de este país. En esa medida, Bolivia no terminó
de constituirse y de reconocerse a sí misma, lo que dio paso al cultivo de identidades
culturales, regionales y locales más fuertes que la propia identidad estatal nacional.
.
Las nuevas guerras de identidades en Bolivia

Hoy en día, la lucha por el poder en Bolivia ha pasado de los enfrentamientos ideológicos
tradicionales de los siglos XIX y XX, como fueron la disputa entre socialismo y
capitalismo (izquierda y derecha), a una guerra de identidades. Esta nueva guerra es
producto del enfrentamiento entre el proceso de globalización y las reacciones internas
contra sus efectos.

Esta nueva forma de lucha por el poder, es el reflejo del ensanchamiento de las brechas
sociales y económicas, en las que se enfrentan una nueva clase internacional, que habla
inglés, utiliza dólares y tarjetas de crédito y hace uso de todos los medios tecnológicos a su
alcance; y una clase marginal, compuesta de pobres y desamparados, excluida y restringida
por los controles de los estilos de vida mundiales (visas, dinero, garantías). Se trata, en lo
menudo de nuestro país, de una lucha entre quienes se han integrado al proceso de
globalización, de manera individual o colectiva (basados en valores incluyentes,
universalistas y multiculturales) y quienes se resisten a su arremetida, aferrados a sus
localismos y particularismos.

Entre quienes pertenecen a la nueva clase mundial se encuentran miembros de redes


transnacionales, de la cooperación internacional y de los sectores privilegiados y de la clase
media y media alta de Bolivia. En el reverso de la medalla, la clase marginal, a escalas
locales y regionales, se encuentra compuesta por la población rural, campesina e indígena y
por los desamparados de las ciudades, a los que se suman paulatinamente una nueva clase
media empobrecida.
La guerra de identidades en Bolivia, sin embargo, no emerge exclusivamente por las
distancias económicas, sino en medio de la desintegración del Estado boliviano creado a
partir del periodo republicano. Aparece como producto de los hechos ocurridos en febrero y
octubre del 2003 en las ciudades de La Paz y El Alto, como manifestación de proyectos
nacionalistas de oposición al Estado existente.

Esta guerra ya no se halla vinculada a la noción de interés del Estado o de la construcción


del Estado nacional o algún proyecto modernizador. Por el contrario, se halla cimentada en
la búsqueda de la destrucción del Estado aún vigente y en el reconocimiento de etiquetas
(regionales, culturales, locales), las cuales se asientan en representaciones nostálgicas e
idealizadas del pasado o en proyectos inciertos de futuros promisorios . Esta nueva guerra,
tiende a la fragmentación y se alimenta de impulsos provenientes de la historia y el pasado
y de un futuro anhelado aún no construido..

Como se mostró en octubre, en la sede de gobierno, esta nueva guerra, es a la vez local y
mundial, nacional y transnacional. No fue por tanto casual que en torno al tema del gas, en
octubre rojo, se entremezclaran las pasiones nacionales más recónditas de lo boliviano,
amarradas al trauma de la pérdida del Litoral, con el cálculo racional de las transnacionales
de la energía mundial, confrontando la fuerza irreprimible de la multitud contra el diagrama
de poder de la embajada norteamericana y poderosos intereses económicos
extraterritoriales.

Lo paradójico es que en medio de ese conato entre lo global y lo local y ante el


agrietamiento del Estado, emerge como hace más de un siglo durante la guerra federal de
1899, una “guerra cultural” solapada. Insurge en medio de las cenizas del Estado
republicano el proyecto aymara de reconstitución del Kollasuyo, utilizando para ello
técnicas y formas de organización autoritarias, que garantizan el bloqueo, las marchas y las
movilizaciones multitudinarias que ponen en jaque a los diferentes gobiernos de turno.

Asimismo, en medio de este marasmo confuso, se visibiliza nuevas formas de hacer la


guerra que dejan de lado las premisas militares de Clawsewitz, Mao Tse Tung y el Che
Guevara. En esta nueva guerra la captura del territorio por medios militares o por el control
político pasan a un segundo plano. La guerra de identidades toma prestadas de la
contrarrevolución ciertas técnicas de desestabilización dirigidas a sembrar “el miedo y el
odio” en la población civil.

El objetivo, por tanto, en ciertas regiones del altiplano paceno, será el de controlar a la
población deshaciéndose de cualquiera que tenga una identidad distinta (e incluso una
opinión distinta). De ahí que paulatinamente, pero de forma sostenida, principalmente en el
altiplano norte, se expulse a los k’haras del territorio, combinando técnicas políticas y
psicológicas de intimidación. Así se logra que se vayan del lugar ONG’s, cooperación
internacional, asesores pedagógicos, universidades privadas, policía nacional y
empresarios.

En el reverso de la medalla, otro proyecto nacionalista de oposición al Estado se asienta en


el oriente del país. La estrategia que utiliza oriente se asienta, consciente o
inconscientemente, en el proyecto de la “media luna”, conformada por la pretendida
unificación de los departamentos de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca, dejando
de lado el occidente de Bolivia.

Si entende mos que la segregación es el aislamiento dentro de una comunidad de un grupo


étnico, el proyecto de la media luna, pretende aislar el occidente del país, no sólo
geográficamente, trazando una nueva frontera en su alrededor, impidiendo o bloqueando
las relaciones comunicativas con los otros departamentos, particularmente Tarija por el
tema del gas y Chuquisaca por el tema de la sede de gobierno, sino también sobre la
población kolla, a la cual se estigmatiza con el signo del conflicto, la violencia, la miseria y
el desapego al trabajo.

De esa manera, no sólo se aisla el territorio, sino también la pobreza y la conflictividad


social. El colofón de esta expresión política encubierta, es que las superioridad cultural que
se esgrime desde ciertos sectores del oriente se encubre con el sino de una moral superior:
“la Bolivia productiva”. Con ello no solo se busca excluir del poder a los Kollas, sino
también construir una nueva realidad estatal resultante de una distribución desigual del
poder.

Este racismo cultural considera inviable la convivencia en un mismo territorio de una


diversidad de culturas, de ahí que abiertamente se propugne la separación de las dos
Bolivias, acentuando de esa manera la “diferenciación” que identifica a los rasgos
distintivos del proyecto de refundación del Estado, sobre una base de discriminación en la
que se distinguen los buenos de los malos. Los otros, los de occidente, no pueden y no
deben incorporarse a la cultura considerada del futuro (la oriental), porque la cultura
calificada de propia y auténtica no resultaría inmune al embate de los efectos negativos de
esos elementos culturales del occidente.

Viendo en perspectiva estos dos proyectos, se puede afirmar que el racismo en nuestro
medio, está sirviendo como un factor ideológico a partir del cual se están estructurando
movimientos políticos, tanto en occidente como en el oriente del país. En el primer caso,
para legitimar políticamente una estructura social de base cultural y, en el segundo, con el
objetivo de desmantelar el monopolio del poder político de occidente. En ambos casos la
xenofobia y la superioridad moral, como expresión de un racismo cultural, se están
convirtiendo en el centro cohesionador de cierto orden social.

Nación política y cultural: el desafío del potencia l nacionalitario

Si bien tradicionalmente se ha reconocido que Bolivia es un país multinacional, debido a la


gran variedad de grupos étnicos que lo componen, son contados los casos que permiten
identificar a éstos como proyectos de carácter nacionalitario , es decir, que quieran ser
nación, a partir de su población, idioma, costumbres, tradiciones y su territorio.

En todo esto, los aymaras se constituyen en un paradigma del potencial nacionalitario de


un pueblo. Estos tienen conciencia de su identidad cultural y se mantienen asentados
principalmente, pero no de manera exclusiva, en la parte altiplánica de Bolivia,
compartiendo, idioma, religión y costumbres. En esta medida, por sus atributos particulares
se puede afirmar constituyen una nación cultural.
Esta identidad, sin embargo, no se inscribe dentro de los códigos de la modernidad de
manera fluida, por el contrario, se convierte en una “identidad de resistencia” frente al
proceso de globalización, asumiendo una actitud encerrada, estática y particularista. Si
además, como se ha visto, este pueblo, o una parte de el, quiere poseer capacidad efectiva
de decisión sobre sus asuntos económicos, políticos y culturales, estamos ante una
potencial nación política, la cual al menos en la situación actual, no se halla estructurada en
forma de Estado y carece de autogobierno.

Lo “camba”, por otra parte, se ha convertido en un principio de identidad fomentado desde


arriba, desde los sectores oligárquicos crucenos. Esta noción, si bien no se constituye en
una identidad cultural en sentido estricto, por carecer de rasgos como religión, lengua e
historia diferenciales, se constituye en una “identidad proyecto” a partir del esquema
nacionalista de la “media luna”.

Así, a pesar de no constituir una nación cultural y no tener un sustento propio y tangible, la
oligarquía regional busca constituirse en nación política y tomar las decisiones económicas
como políticas de la región, en un nuevo marco estatal al margen del escenario político
vigente. Este proyecto, sin embargo, no tiene visión nacional, pues no incorpora al
occidente en su propuesta, razón por la cual reproduce el esquema de las propuestas
particularistas y desintegradoras.

Frente a estas identidades que han comenzado a pugnar por ser nacionales, lo que tene mos
es una nación jurídica formal, en la que el conjunto de personas están vinculadas por ley
como ciudadanos de un Estado. El derecho es, al menos teóricamente, lo que da y garantiza
la ciudadanía, la pertenencia a un Estado, y lo que hace que los ciudadanos estén sujetos a
derechos y deberes.

Tal postulado, no obstante, se enfrenta con la dura realidad de la vida social y política, la
cual nos ha mostrado cuan formal e inefectiva puede ser la mejor Constitución o entramado
normativo, si se carece de virtudes morales y cívicas, así como de un sentido de identidad
compartido y acatado.

Nacionalismo y nacionalismos de oposición

El estado boliviano se ha caracterizado por su neutralidad étnica y así ha funcionado desde


la república. Sin embargo, hoy en día se evidencia la emergencia e irrupción de
nacionalismos internos de oposición que cuestionan al Estado, desde la afirmación de la
propia identidad nacional.

De este modo, desde posiciones contrarias e incompatibles, se crea una situación


excluyente entre nacionalismos que pugnan por el mismo objetivo: el Estado. Así, mientras
el nacionalismo de Estado no realice plenamente el estado nación, venciendo, asimilando o
integrando a los nacionalismos de oposición por medio de la negociación, estos persiguen
justamente lo contrario, la destrucción del Estado..
Estamos entonces frente al problema nacional. La cuestión de las nacionalidades surge
cuando en el Estado boliviano se evidencia que existe más de una conciencia nacional. No
se produce conflicto nacional por el mero hecho de que un estado exista mas de una cultura
nacional que otra, sino porque en el estado sólo se admite un nacionalismo, el que se
corresponde con el estado nacional. Los nacionalismos son incompatibles y excluyentes
entre ellos.

Los nacionalismos de oposición mantienen con el Estado una relación de conflicto, que
puede mantenerse dentro de los límites del “uso de la voz”, mientras haya canales y
posibilidades de negociación. Cuando éstas son rebasadas no queda otra opción que la de
“salida”, el enfrentamiento. En esta medida, cuando el enfrentamiento tenga pocas o
ninguna posibilidad de solución interna, mediante la reforma de la organización territorial
del estado hacia formas mas autonomistas, o bien federalistas, la salida, es decir, las
opciones independentistas, irán en aumento. En este caso, nos encontraríamos en una
situación extrema en la cual el Estado boliviano corre el peligro de desintegrarse, para dar
lugar al nacimiento de diversos estados nacionales o incluso plurinacionales.

Secesión o federalismo multinacional

Si se analiza fríamente las cosas, la secesión puede ser de hecho una de las respuestas a la
crisis del Estado. Desde este punto de vista, el deseo manifiesto del proyecto político de la
“nación camba” de diferenciarse de Bolivia puede ser interpretado como un intento
separatista, lo cual puede ser moralmente legítimo y sería injusto forzar a una parte de la
población a permanecer contra su voluntad dentro de un Estado.

La secesión conduce a menudo a la guerra civil y puede poner en marcha una reacción en
cadena según la cual, las minorías contenidas en el interior de la unidad independizada
tratarían de independizarse a su vez, tal cual vemos en las manifestaciones del Chaco
tarijeño o de los pobladores de Tupiza. Además en el caso de que nunca llegara a
producirse una verdadera secesión, el sólo riesgo de secesión es desestabilizador, ya que
permite que los grupos regionales inicien una política de amenazas y chantajes. Así,
mientras las minorías nacionales sientan que sus intereses no pueden recibir acomodo en el
interior del Estado boliviano, la posibilidad de la secesión será permanente.

Frente a este panorama se puede pensar que el federalismo puede constituirse en una
alternativa a la secesión, ya que posee la capacidad de acomodar las aspiraciones
regionales y culturales dentro del Estado. El federalismo respeta el deseo mostrado por
diferentes grupos de permanecer autónomos y también respeta su deseo de conservar su
particularidad cultural, con lo que puede albergar diferentes tipos, niveles y formas de
autogobierno.

El federalismo, sin embargo, puede transcurrir por dos derroteros: el territorial y el


multinacional. En el primer caso, el federalismo territorial lejos de servir para dar acomodo
a las minorías nacionales, se ha constatado que empeora las cosas. En algunos países el
federalismo no se ha adoptado porque acomode el deseo de autogobierno de las minorías
nacionales, sino mas bien porque proporciona un medio por el que una única comunidad
nacional puede dividirse y repartir su poder.
En el segundo caso, el federalismo multinacional se fundamenta en el hecho que las
decisiones sobre los límites y los poderes reflejen conscientemente las necesidades y las
aspiraciones de los grupos minoritarios. Así, algunas unidades encarnan el deseo de ciertos
grupos nacionales de seguir siendo sociedades culturalmente distintas y políticamente
autogobernadas, como los aymaras (unidades basadas en nacionalidad), mientras que, por
el contrario, otras reflejan la decisión de una misma comunidad nacional, de ahí que toman
el sentido de distribuir sus poderes según un esquema regional como puede ser el proyecto
de la “nación camba” (unidades basadas en la región).

De este modo, un sistema federal que comprenda tanto a las unidades basadas en la región
como a aquellas basadas en la nacionalidad, puede estructurarse bajo un esquema de
federalismo “asimétrico”, en el que algunas de las unidades federales tengan mayores
poderes de autogobierno que otras. Esta combinación es posible, siempre y cuando desde la
perspectiva de los tomadores de decisión, se asuma el desafío y el riesgo de realizar los
mayores esfuerzos para ajustar la sustancia social de lo boliviano a una forma adecuada de
estructura política estatal inclusiva, que articule las pulsiones individuales y colectivas de
manera coherente y orgánica.
6.2 Autonomías Indígenas
LIC. ALVARO GARCÍA LINERA
DE FEBRERO NEGRO A LA INSURRECCIÓN DE OCTUBRE
Lic. Alvaro García Linera

Quiero agradecer la invitación que me ha hecho el Colegio de Politólogos y a la


Universidad Católica Boliviana, para participar en este Seminario, en este debate en torno a
la Asamblea Constituyente. Van a haber personas y expositores que trabajen más
detenidamente el tema de la Constituyente, lo que yo voy a intentar hacer es un poco ubicar
el contexto político en el que se está desenvolviendo el tema y el debate sobre Asamblea
Constituyente en Bolivia.
Bolivia está viviendo, está atravesando un momento extraordinario en la vida política, la
guerra del agua del año 2000, la sublevación indígena, aymara en septiembre y octubre del
año 2000, el cuartel indígena de Kalachaca en Omasuyos el año 2001, el bloqueo de
caminos el 2002 en El Chapare y en Sacaba, las propias elecciones nacionales del 2002,
febrero, el levantamiento, la sublevación, la revuelta de febrero, sus muertos y en particular
la sublevación de octubre del año 2003, marcan o caracterizan a un período de intensa
conflictividad, de sublevaciones, de muertes y de crisis general en la sociedad boliviana.
La primera hipótesis de trabajo que quiero manejar en este debate, es de que Bolivia está
atravesando una crisis de Estado, y me adelanto a lo que voy a intentar demostrar en estos
20 minutos breves, se trata de una crisis de Estado en dos temporalidades: una crisis del
Estado neoliberal, patrimonial tal como fue calificado por el PNUD, las características de
la estructura política de los últimos 18 años, pero también y fundamentalmente una crisis de
Estado de larga duración, recupero este concepto de honda corta y honda larga del
historiador Brodel, en la medida en que me permite ver las dos dimensiones en las que se
está moviendo en la actualidad la crisis.
Crisis del Estado patrimonial neoliberal de los últimos 18 años, pero también crisis de larga
duración de la propia estructura republicana construida en los últimos 178 años en Bolivia;
en primer lugar, crisis de la monoculturalidad del Estado boliviano en una sociedad
profundamente multicultural, crisis de la lógica unitaria de la política basada en el mito
liberal en una sociedad portadora de muchas culturas políticas, y crisis de la unidad
territorial del poder estatal. Voy a explicar por qué esas dos dimensiones y esos cuatro
componentes de la crisis de Estado cuyos momentos paradigmáticos de afloramiento son
sin duda la revuelta de febrero y la insurrección indígena popular de octubre del 2003.
En términos sintéticos se puede definir a un Estado, sabemos con Weber y con Elías que
todo Estado es el monopolio legítimo de la violenc ia o es una maquinaria que monopoliza
de manera legítima la coerción de una sociedad. Elías nos proponía que no solamente un
Estado monopoliza legítimamente la coerción, sino que también monopoliza los ámbitos de
la tributación y de la legislación en una unidad geográfica. Todo Estado tiene esas
capacidades de monopolio.
En términos sintéticos este funcionamiento del monopolio y de la construcción de la
legitimidad tiene tres grandes componentes, un sistema de correlación de fuerzas, todo
estado es una relación social, una manera jerarquizada de la administración, el control del
capital burocrático, es decir de la capacidad de toma decisiones del Estado; segundo
componente estructural de todo Estado en todas partes del mundo, todo Estado es una
maquinaria de creencias, en el fondo el Estado es una maquinaria que produce creencias
dominantes que permiten la adhesión moral de gobernados hacia los gobernantes; y en
tercer lugar, todo Estado es un sistema de instituciones, la correlación de fuerzas y las
creenc ias que anudan a gobernantes y gobernados en una complicidad moral, se ejecuta y
se regula a través de instituciones, todo Estado entonces es un sistema de correlación de
fuerzas, un sistema de creencias y un sistema de instituciones.
Qué es lo que está pasando con las instituciones, las creencias y las correlaciones de fuerzas
en los últimos años en Bolivia; una correlación de fuerzas que expulsó al corporatismo
sindical obrero de la lógica estatal y que impuso un tipo de decisión o el control de las
decisiones del Estado en manos de ciertas fracciones empresariales, el capital extranjero,
organismos multilaterales y partidos políticos coaligados, esa correlación de fuerzas que
caracterizó al Estado Boliviano en los últimos 18 años, en el ciclo estatal neoliberal desde
el año 2000 ha comenzado a resquebrajarse, desde el año 2000 otras fuerzas, viejas y
nuevas fuerzas sociales reclaman su derecho a la participación en la toma de decisiones, y
reclaman su derecho con mucho éxito, de un tiempo para acá lo estamos viendo hasta en el
último debate sobre impuestos en Bolivia, las grandes decisiones ya no quedan
concentradas en las anteriores fuerzas que monopolizaban las decisiones, hay una
pluralización o una fragmentación de fuerzas que reclaman su derecho a tomar decisiones,
los bloqueos, las movilizaciones son síntomas de esta modificación de la correlación de
fuerzas sociales, hay nuevos grupos que se querellan frente al Estado para participar para
bien o para mal en la toma de decisiones.
Primer síntoma entonces de la crisis del Estado, la estructura que le daba estabilidad, la
estructura de fuerzas que le daba estabilidad al Estado Boliviano en los últimos 18 años, ha
comenzado a resquebrajarse por la emergencia de viejas o nuevos grupos sociales que
reclaman su capacidad de decisión, a esos grupos se les llama movimientos
sociales. Segundo componente de todo Estado, el sistema de instituciones, en los últimos
18 años Bolivia ha avanzado de una manera sistemática y sin duda destacable en la
institucionalización de ciertas funciones públicas, la división de Poderes Ejecutivo,
Legislativo, Judicial, la lamentable pero comprensible subordinación del Legislativo al
Ejecutivo, la lógica de partidos y el sistema de partidos como únicos intermediarios entre
sociedad y Estado, la llamada democracia pactada, es decir las coaliciones partidarias
parlamentarias que daban mayoría parlamentaria, estabilidad al Ejecutivo y que permitían
canalizar los Proyectos del Ejecutivo en el Legislativo, esa estructura institucional má s la
Descentralización, más la Participación Popular, más el Defensor del Pueblo, etc., etc.,
daban la idea o construyeron una lógica institucional que funcionó, que le dio estabilidad al
Estado boliviano en los últimos 18 años.
Esta estructura institucional está en crisis, por varios motivos; el primer motivo es que los
partidos no han cumplido ni están cumpliendo su papel de intermediarios, entre sociedad
civil y Estado, los partidos han tendido a convertirse en roscas fuertemente cerradas,
familiares que se han loteado si ustedes quieren la administración del poder público
olvidando y perdiendo su capacidad de mediación, primer síntoma de la crisis.
Segundo síntoma de la crisis, la sociedad ha comenzado a construir otros mecanismos de
mediación política, otros vehículos de canalización de sus expectativas y demandas,
sindicatos, gremios, juntas de vecinos, asociaciones productivas se han convertido en los
mecanismos extrainstitucionales de la canalización de expectativas sociales, esto ha
generado un proceso de dualización institucional. El Estado Boliviano en la actualidad está
atravesando un proceso de dualidad institucional, hoy en día desde el año 2000 se hace
política en el Parlamento, se hace política en los partidos políticos, pero también se hace
política en los sindicatos, se hace política en los gremios, se hace política en las
comunidades.
Y estas otras estructuras institucionales tienen tanta fuerza como para modificar leyes, Ley
2029 del año 2000, para abrogar o para impedir el debate sobre leyes, la Ley de Aguas
octubre del 2000, para modificar Decretos estatales, el Decreto del cierre del mercado de la
hoja de coca en Sacaba, o para cambiar Presidentes, Sánchez de Lozada se ha ido del país
por la fuerza de esta estructura no institucional de los movimientos sociales, puede ser que
a algunos no les guste eso, así es la realidad, no les estamos preguntando si les gusta o no
les gusta, estamos intentando describir cómo está funcionando hoy en día la lógica política
y las formas de hacer política.
Tercer síntoma de la crisis de Estado, el sistema de creencias, todo estado se sostiene ante
todo sobre creencias, sobre ideas fuerza que permiten anudar, que permiten canalizar
expectativas, las creencias fundamentales en torno a las cuales se movió el país en los
últimos 18 años fueron la creencia de la modernización vía la inversión extranjera, la
apertura de mercados, la democracia liberal y los pactos parlamentarios. Una buena parte
de las clases altas, una buena parte de las clases medias y una buena parte de las clases
populares, le apostaron a ese Proyecto.
Pero esas ideas fuerza no han generado lo que prometieron, no han generado
modernidad, no han generado progreso, no han generado mayor productividad, no han
generado mejores condiciones de vida para la gente, el ingreso promedio del boliviano hoy
en día es 15% menos que hace 20 años, pese a la inversión extranjera, pese a la apertura de
mercados, pese a la renovación tecnológica y pese a la cierta modernización y ciertos
servicios, como el celular, el internet y los walkman y esas cosas.
Las ideas fuerza que habían articulado y habían canalizado expectativas comienzan a
resquebrajarse y a derrumbarse frente a otras ideas fuerza, han
surgido otras ideas fuerza que canalizan las expectativas de la población: recuperación de
los recursos públicos, autogobierno indígena, descentralización, autonomías, son nuevas
ideas fuerza que comienzan a ocupar el imaginario colectivo desplazando el viejo
imaginario del Estado. Tres componentes del Estado, tres componentes en crisis, por lo
tanto, crisis del Estado, de la estructura institucional, discursiva y de fuerzas del Estado
liberal, patrimonial tal como lo definía el PNUD.
Ahora bien, cuál es la característica sin embargo de fondo de esta crisis, qué es lo que
distingue a esta crisis de Estado que en Bolivia se da con una regularidad de 15 a 20 años,
desde el Siglo XIX, ¿qué es lo que le distingue de otras crisis de Estado? -tres componentes
sustanciales que nos permiten ver la gravedad y la complejidad estructural de esta crisis
estatal, primer componente sustancial, el sujeto activo de la crítica estatal son los indios, es
decir, son las mayorías indígenas, modernas y pre modernas las que se querellan frente al
Estado. ¿y que tiene que ver esto? -que al querellarse la mayoría indígena de este país
frente al Estado, lo que hacen es poner en duda la cualidad republicana monocultural y
hasta cierto punto racista que tenía el Estado boliviano frente a las mayorías indígenas. En
un país donde el 60% de la poblac ión son indios, son indígenas, la cultura del 38% de la
población es la única cultura legítima mediante la cual se accede a servicios públicos, se
accede al ascenso social, se accede al reconocimiento, se accede a la adquisición de
capitales culturales universitarios, públicos, mediáticos, etc.
Discriminación, colonialismo interno, racismo, etnificación, capitalización de la etnicidad
como un bien legítimo que permite ascensos y descensos sociales. El hecho de que sean los
indígenas la fuerza fundamental de la querella frente al Estado y de la movilización social,
marca un punto fundamental para entender la gravedad de la crisis del Estado, no solamente
estamos ante una crítica al Estado neoliberal, sino se está ante una crítica y ante propuestas
de transformación del Estado republicano tal como lo hemos conocido en los últimos 178
años, primer componente estructural o geológico de la crisis estatal.
Segundo gran componente geológico, la lógica organizativa. Desde 1825 las elites
bolivianas hasta el día de hoy han jurado y han apostado al mito de la lógica liberal en la
política, un individuo un voto, partidos políticos, instituciones modernas y liberales. ¿Cuál
es el problema con este mito? -que Bolivia entera no es liberal, ni Bolivia entera tiene las
condiciones socioestructurales de la lógica liberal. La lógica liberal se sostiene sobre la
modernidad industrial, sobre la individuación definida por Weber como es la extinción de
las lógicas comunitarias, y la constitución de individuos desarraigados aptos para el
ejercicio de derechos liberales. Bolivia en parte es eso y en parte no es eso, pese a algunas
personas, hay un buen pedazo de Bolivia que se mueve bajo lógicas comunitarias,
asociativas, en el mundo rural y en el mundo urbano, el deliberalismo, el asambleismo, el
comunitarismo, el sindicalismo tan poderoso en Bolivia, hoy pero tan poderoso a lo largo
de toda su historia.
Tan poderoso en Bolivia hoy, pero tan poderoso a lo largo de toda su
historia, nos habla de una coexistencia jerarquizada de dos lógicas políticas, una lógica
liberal y una lógica comunitaria, sin embargo lamentablemente el Estado nunca supo
reconocer la existencia y la presencia de esta otra lógica comunitaria en la vida pública.
Los levantamientos, abril del 2000, octubre del 2003, febrero del 2003 son una
manifestación patética y violenta de este desencuentro entre lógicas comunitarias de la
sociedad y lógicas liberales de la institucionalidad estatal.
Tercer gran síntoma de la crisis estructural del Estado. Bolivia está atravesando un período
no solamente de fragmentación del poder, hoy en día hay muchos poderes, hay muchos
segmentos que tienen poder de decisión y de imposición frente al Estado, sino que
simultáneamente estamos asistiendo a un quiebre de la unidad económica y socio política
de los factores de poder, me dejo explicar, de un tiempo y hasta hace unos años hasta ahora,
el poder económico, anteriormente concentrado territorializado en la zona de occidente, ha
comenzado a desplazarse de manera exitosa hacia oriente, pero el factor de poder
sociopolítico se ha revitalizado en occidente, entonces se ha abierto una tijera de la unidad
geográfica de los factores de poder, poder económico desplazándose a oriente, poder
sociopolítico anclado y atornillado en occidente, una cosa parecida sucedió el siglo XIX en
la guerra federal, cuando la capital, no la capital, la sede de gobierno se desplaza de Sucre a
La Paz, pero en esa época hubo una correspondencia entre poderío económico de la
minería, del estaño, del comercio y del transporte que se iba hacia el norte, con el poder
sociopolítico de los indios aymaras y de los artesanos de Oruro y de La Paz, hubo una
correspondencia que permitió un tránsito exitoso y relativamente rápido de la certidumbre
geográfica del Poder del Estado, cosa que hoy en día no sucede y no va a suceder, el poder
económico de la modernidad vinculada a la globalización y al capital extranjero, se ha
desplazado a oriente, oriente es la economía más pujante del país y donde la inversión
extranjera es más eficiente, está más anclada y donde las expectativas de ascenso y de
crecimiento económico son más favorables.
Sin embargo occidente especialmente el mundo indígena occidental es el que
mantiene un fuerte poder político social, y entonces, ahora hay este desencuentro que
pudiera llegar a ser catastrófico en caso de no encontrar vías de resolución.
Tres síntomas estructurales de la crisis de Estado que se han manifestado de manera
paradójica, contundente y violenta en octubre. Si ustedes quieren octubre es el momento de
la visibilización extrema de estos desgarramientos geológicos y estructurales del Estado
boliviano, Estado mono cultural frente a sociedad multicultural, Estado mono organizativo
liberal frente a una sociedad multiorganizativa y plural en lógicas asociativas, separación
entre el poder económico y el poder político y social, octubre es quizás el momento patético
del develamiento de estas fallas, de estas grietas estructurales que hoy en día están
desgarrando a la sociedad boliviana.
No estamos entonces ante una crisis estatal cualquiera, estamos ante una crisis compleja de
envergadura, más compleja que la que se dio en el período 47-52, más compleja que la que
se dio incluso en el período 1880-1890- 1900.24
¿Cómo resolver estos tres desgarramientos?, ¿cómo avanzar en la posibilidad de
articular estos desgarramientos geográficos del poder, culturales del orden estatal y
organizativos de la lógica de participación política?, es una gran tarea para los politólogos
en particular, algunas ideas sueltas, hay que transformar el Estado, lo que está claro es de
que el Estado tal como lo hemos conocido en los últimos años y en las últimas décadas, no
puede mantenerse ni habrá de construir legitimidad ni estabilidad.
Ahora bien, hay tres formas de transformar el Estado, de reformarlo, de cambiarlo
sustancialmente, una forma autoritaria, una forma insurreccional y una forma pactista o
reformista. Son calificativos teóricos, no estoy valorando si son positivos o negativos,
teóricamente es posible encontrar solució n a estos desgarramientos geológicos del Estado a
partir de formas autoritarias, y créanme que hay gente que cree que es posible y viable una
resolución autoritaria de esta conflictividad.
No estoy seguro si podría tener éxito, no estoy seguro si una salida autoritaria de tipo
golpista o represiva pudiera tener éxito a largo plazo, es posible que logre cierto éxito
temporal bajo ciertas circunstancias, pero el mar de fondo, los problemas de fondo
solucionados por vía autoritaria volverán a salir tarde o temprano de aquí a cuatro, a cinco o

24
Transcripción textual de la intervención de Alvaro García Linera. Sin revisión del autor.
a diez años nuevamente con mayor radicalidad, la vía autoritaria en caso de que
teóricamente se diera daría al Estado una nueva fisonomía, pasaríamos del Estado
neoliberal democrático a un tipo de estado neoliberal autoritario tal como fue el ciclo
nacionalista de Estado, el nacionalismo tuvo dos fases el nacionalismo democrático del ‘52
al ‘64 y el nacionalismo autoritario del ‘64 al ‘80 al ’79, algo teóricamente previsible, algo
así en esta salida autoritaria que diera paso a un tipo de estado neoliberal autoritario, que
pudiera dar un respiro de unos cinco a diez años nuevamente especialmente a los grupos de
poder.
Una segunda salida teórica a esta crisis estatal, ya manifiesta en la rebelión de octubre
especialmente en los momentos más radicales y finales, previos a la renuncia de Sánchez de
Lozada es una salida insurreccional hay gente que cree que es posible un nuevo
levantamiento de octubre, un nuevo levantamiento de octubre que permita a las
organizaciones y movimientos sociales hacerse cargo del poder del Estado.
Militarmente cual pudiera ser su éxito es una cosa dudosa, en que medida esta
salida pudiera articular a segmentos del oriente, económicamente poderosos
pero con otra lógica del poder es algo también muy dudoso y hasta que punto
tendría la suficiente legitimidad internacional o interna a nivel urbano, es algo también
dudoso, sin embargo hay sectores sociales radicales que apuestan a una salida
insurreccional que sería un octubre exitoso, es decir un octubre que no culminaría
simplemente cercando la Plaza Murillo sino que acabaría con la propia toma de la Plaza
Murillo.
Una tercera opción, es la que he denominado la opción pactista o en términos más estrictos
una opción reformista, la Asamblea Constituyente es una apuesta a enfrentar la crisis de
Estado, sus problemas a partir de una salida pactista y reformista, es una opción en la que
se buscaría reconstruir el pacto fundante que une gobernantes y gobernados, oriente y
occidente, sur y norte, indios y mestizos, empresarios y trabajadores en torno a una nueva
normatividad que sea una síntesis más expresiva de la nueva correlación de fuerzas, esta es
una opción que pudiera ahuyentar los riesgos o de golpe de Estado o de insurrección
popular, mediante un nuevo acuerdo negociado de una nueva institucionalidad y de nuevas
reglas, es una posibilidad, no necesariamente a ser cumplida, todo va a depender, con esto
quiero cerrar, todo va a depender de la capacidad de que esa Asamblea Constituyente se
ejecute con rela tiva rapidez, tomando en cuenta los tiempos políticos, las crisis de Estado
no esperan muchos años, porque la gente no aguanta incertidumbres permanentes, va a
depender de cierta rapidez en la aplicación de esta Asamblea Constituyente, pero ante todo
de su capacidad representativa y deliberativa.
Si la Asamblea Constituyente se convierte en un momento de reciclamiento de
las viejas fuerzas políticas, se habrá perdido una excelente oportunidad pacífica para
resolver conflictos y se habrá justificado a las posiciones radicales de nuevos tipos de
levantamientos para encontrar solución, la clave de que una Asamblea Constituyente pueda
convertirse en el lugar de un pacto duradero entre sociedad, entre las fuerzas sociales pasa
por una amplia presencia de las nue vas y de las viejas fuerzas emergentes en la sociedad,
movimientos sociales, movimientos regionales, movimientos empresariales que permitan
diseñar la nueva institucionalidad.
Por último, considero de que no solamente es importante la representatividad sino que
también va a ser fundamental la capacidad de la Asamblea Constituyente, de ayudar a
resolver estos tres grandes dilemas del Estado boliviano en el Siglo XXI, su
multiculturalidad a nivel de Estado, la amplitud o la diversidad de lógicas políticas en la
toma de decisiones y la capacidad de encontrar una nueva síntesis y articulación entre los
factores de poder regionales económicos, regionales políticos, que hoy en día se están
distanciando y que están generando más problemas y más conflictos en el p aís. Muchísimas
gracias.

PREGUNTAS DEL AUDITORIO


Lic. Alvaro García Linera:

Hay varias preguntas, voy a intentar responder las que más pueda en el breve tiempo. Hay
una que se puede resumir en: ¿cómo sería ese estado que resuelva la fractura cultural, de
discriminación cultural y que resuelva la fractura del desconocimiento de otras lógicas y
culturas políticas que haya en Bolivia?
En toda mi exposición, se habrán dado cuenta, he intentado como que no proponer nada,
sino al contrario describir qué es lo que está pasando en el país, qué es lo que sucede,
fuerzas en pugna y potencialidades, entonces esta pregunta un poco me lleva a cuál es como
mi propuesta.
Intento resumir muy brevemente porque requeriría eso una larga exposición,
tres grandes fracturas del Estado había mencionado yo, un país multicultural, es decir varias
culturas existentes, varios idiomas, pero un estado monocultural, que significa eso?, que las
instituciones y los mecanismos de ascenso social son monoculturales, y eso genera racismo,
exclusión, discriminación de la mayoría de este país que son básicamente indígenas.
Este tema de la resolución, de la diversidad cultural ha sido trabajado por el
multiculturalismo desde el Siglo XIX en sus vertientes más marxista, más liberal, más
repub licana, etc., en breve ¡qué significa eso? -significa el reconocimiento de la igualdad de
las culturas, de los idiomas en el ejercicio de derechos públicos y en el ejercicio del ascenso
social, les explicamos la orientación que me parece acertada y en términos organizativos
del estado en qué podía traducirse ello, que en aquellos lugares donde las culturas son
mayoritarias, hay formas de autogobierno subnacional o formas de autogobierno intermedio
o meso, en esos lugares donde las culturas son mayoría, que es la forma como se resuelve el
multiculturalismo en cualquier parte del mundo, llámese España, llámese Suecia, llámese
Suiza, llámese Bélgica, Canadá, Sud África, la India, el multiculturalismo no es un tema
específicamente boliviano, todos los países son de alguna manera
multiculturales y donde hay fuertes culturas, hay formas de construcción de estados bajo la
forma de federalismo con base territorial o autonomías con
base cultural o una mezcla de autonomías con base cultural y autonomías con
base territorial, que es un poco yo creo el caso de Bolivia y parecido al de
España, hay que trabajar formas de autonomía, con base cultural y autonomías
con base territorial que permitan a las culturas tener formas de autogobierno subnacional o
meso intermedio allí donde estos grupos étnicos son mayorías en la región.
Pero el tema más complicado y que ya la teoría política no trabaja mucho esto porque son
rarezas excepcionales, en el mundo, es el tema de las lógicas organizativas cómo hacer
coincidir lógicas de representación liberal, un individuo un voto, igualdad, etc. con una
lógica comunitaria que existe y va a existir en Bolivia hasta que no haya industrialismo.
El comunitarismo existe en Bolivia no porque la gente tiene mucha fidelidad a la
asociación, existe porque no hay industria, porque no hay modernidad industrial y eso había
en todas partes del mundo hasta el Siglo XVIII y XIX, y en Bolivia existe y lo grave que
existe mayoritariamente.
La lógica comunitaria está ahí y va a estar en Bolivia los siguientes 50 años, y la pregunta
es cómo convivimos con la lógica comunitaria, en vez de que aparezca o emerja en cada
bloqueo o en cada insurrección. Cómo se legitima y se reglamenta una lógica y cultura
comunitaria en una institucionalidad, eso es ya un tema mucho más complicado, no hay
modelos, quizás algunos ejemplos se puede encontrar en la India donde existen varias
formas de autogobiernos por cultura, por religión y por territorio, hay más de 300 idiomas,
hay varias religiones, hay modernidad tienen bomba atómica, tienen industria y tienen
arcaísmo productivo, quizás la India sea un lugar donde pudiéramos o pueden los
politólogos y los sociólogos ir a encontrar pistas para un orden estatal de tipo que combine
forma o lógica comunitaria con lógica liberal, lo que si no puede funcionar es seguir
jugando al mito, al ideario fallido de que somos liberales, Bolivia no es liberal plenamente
ni va a ser los siguientes 50 años, y aquí había una pregunta, en parte culpa de esto lo tienen
las propias elites que no fueron capaz de industrializar este país.
De cada 100 empleos en Bolivia, 68 lo genera la informalidad, y de cada 100
empleos en el campo 98 lo generan sistemas comunitarios tradicionales, esa es Bolivia y
mientras eso se mantenga va a haber lógica comunitaria.
Un par de puntos que podría aclarar una forma de combinación y articulación de lógica
comunitaria con lógica liberal en las instituciones, por ejemplo que un porcentaje de los
diputados o un porcentaje de los constituyentes sea elegido comunitariamente, rompe la
lógica liberal la rompe, por supuesto que la rompe, pero por Dios Bolivia no es liberal,
Bolivia no es plenamente liberal ni lo va a ser y si quieren sincerar al Estado con la
sociedad recojan pues las dos lógicas, la lógica comunitaria que está ahí y la lógica liberal.
Otra manera de reconocer o de institucionalizar este comunitarismo, es que por ejemplo
cierto tipo de decisiones macro del Estado, por ejemplo venta recursos públicos o por
ejemplo reformas constitucionales, niveles macro de grandes decisiones obligatoriamente
tengan que pasar por un consenso parlamentario y por un consenso con estructura
comunitarias de movimientos sociales, eso nos ahorraría a todos los bolivianos las
insurrecciones y los bloqueos que en el fondo lo que hacen es pedir reconocimiento. ¿Para
que son las insurrecciones y bloqueos? -por búsqueda de reconocimiento, lo que se trata es
de llevar este hecho de facto, de facto somos sociedades multiorganizativas, convertirlo en
un hecho de jure, en un hecho instituc ional, varias formas organizativas para varias formas
de toma de Estado, luego puedo continuar con otras preguntas.
Bien, pregunta una persona: ¿un modelo económico que vaya paralelo a las reformas
políticas? -Eso es tema de otro debate, sería muy interesante debatir, con un mismo público
temas de reforma en la economía, entonces lo dejo pendiente.
Pregunta otra persona: ¿qué criterio le merece el criterio de que hay una Bolivia productiva
y una Bolivia conflictiva?- Bueno, ¿es curioso no?, como una frase de un indio, un
intelectual indio muy famoso, Fausto Reynaga que fue el que introdujo en el debate hace 30
años las dos Bolivias, viene de Fausto Reynaga, un insigne intelectual indígena, haya sido
retomada de una manera bastante sesgada yo diría por ciertas elites. El problema no es de
que hay una Bolivia que produce y otra que no produce, toda Bolivia produce ¡hombre!, si
uno se va a cualquier barrio, a cualquier villa va a encontrar que la gente trabaja desde las 5
de la mañana hasta las 11 de la noche, trabaja el padre, la madre, el niño y trabajan en
occidente, trabajan en oriente, trabajan en el sur y trabajan en el norte, cuál es el problema,
el problema es de que es más trabajo el productivo en oriente por qué?, porque hay mayor
modernidad, hay mayor inversión tecnológica y entonces si uno utiliza maquinaria y
contrata 5 trabajadores va a tener una mayor productividad y rendimiento, que una persona
que utiliza un arado egipcio y hay diez mil personas y esto está pasando en el occidente, el
empresariado de occidente ha fracasado, se ha aplazado como empresariado y como elite
empresarial, y quien sostiene ahora occidente son miles, millones de microempresarios, de
artesanos y de productores agrícolas que tienen como herramientas, instrumentos del Siglo
XIII después de Cristo o del Siglo XIX o del Siglo XX, no es productivo eso y por supuesto
que frente a un despegue económico en oriente especialmente no hay comparación, oriente
ahora es mucho más productivo pero no es porque la gente trabaja más, sino porque ahí ha
habido o está habiendo renovación tecnológica que ha permitido que esa economía sea
mucho más ascendente.
Entonces es falsa esta discusión entre unos que producen y otros que no producen. Una
Bolivia conflictiva y otra no conflictiva; acaso no vemos a los empresarios del oriente tirar
pollos en las caras de los cruceños cada vez que le piden que se les cambie una Ley, ¿acaso
no hemos visto con tractores bloquear los caminos para que se les modifique una Ley?,
ahora mismo, es decir, lo que sucede es que los conflictivos en oriente son los empresarios
que reclaman con justo derecho hegemonía y liderazgo político, y quizás lo vayan a tener
de aquí a unas décadas, es probable y quienes son los que reclaman en occidente son los
indios y la plebe, ambos reclaman, no es que en occidente o en oriente todo está feliz y en
occidente es conflicto, en oriente también hay conflicto, pero es un conflicto que la dirigen
las elites, administran las élites y entonces no pasa como conflicto, es leído en los medios
de comunicación como si fuera un simple reclamo pacífico.
Hay conflictividad en todo el país, en oriente, en occidente, en el sur y en el norte, lo
interesante es que esta conflictividad tiene distinta connotación étnica, distinta connotación
clasista y distinta connotación económica, lo que estamos asistiendo ahora a Bolivia es una
confrontación de dos tipos de polaridades sociales que tiene etnia, tiene lectura económica
y tiene condición social y clasista.
El polo oriental empresarial exitoso, que recla ma su liderazgo en la economía y en el país y
en el occidente no están los empresarios, el polo que se ha constituido en occidente son
básicamente la plebe y los indígenas como fuerza política y como fuerza de movilización
con proyecto propio de país, uno más vinculado a los mercados externos, otro más
vinculado a la dimensión interna del mercado interno.
Cuál de estos dos polos irá a sobreponerse frente a otro en la siguiente década? o como
lograrán encontrar puntos de acuerdo y de consenso?, eso es lo que habrá que resolverse
seguramente en los siguiente años, pero ahora Bolivia vive una polaridad extrema, porque
se están enfrentando clases sociales, grupos culturales étnicos, regiones y modelos de
desarrollo económico y eso es lo que está ahora desgarrando al país.
Quien convence a uno, quien convence al otro, quien aplasta a uno, quien aplasta al otro se
resuelve mediante guerras civiles y levantamientos o ¿cómo se logra una especie de tinku,
de baile, de articulación entre esas fuerzas?, es sin duda el gran tema pendiente y el gran
reto de la Asamblea Constituyente.
Si la Asamblea Constituyente no logra articular etnicidades, no logra articular proyectos
societales, no logra articular lógicas organizativas y no logra articular programas de
reforma económica, sin duda que la Asamblea Constituyente habrá sido quizás como se
dijo la última oportunidad de haber encontrado por medios pacíficos la posibilidad de
rearticular a un país, que hoy en día está despedazado en regiones, en grupos y en clases
sociales.
6.3 Autonomía y Autodeterminación de la Nación Camba

6.3 LA AUTONOMÍA Y LA AUTODETERMINACIÓN DE LA


"NACIÓN CAMBA"
Carlos Dabdoub Arrien*
I. INFLUJOS Y PROYECCIÓN DEL MOVIMIENTO "NACIÓN CAMBA"

Doctor en Medicina en la Universidad Nacional de La Plata (Argentina) con especialidad en Neurocirugía. Diplomados en Altos
Estudios Nacionales, E d u c a c i ó n Superior y G e r e n c i a en Salud. Fue Secretario General y Vicepresidente del Colegio
Médico de Santa Cruz (1981-1984). Vicepresidente y Presidente del Comité pro Santa Cruz (1985 -1988). Diputado Nacional por
S a n t a Cruz (1989-1993). Presidente de la Comisión de Desarrollo Regional y Descentralización de la H. Cámara de Diputados
(1989-1991). Ministro de Salud (1992-1993). Presiden te de la Organización Iberoamericana de Seguridad Social (1992-1993).
Director por Concurso de Mérito del Hospital U n i v e r s i t a r i o Japonés (1996-2003). Profesor Titular en Clínica Neurológica y
Neurocirugía de la Universidad Católica Boliviana (1998 a la fecha). Presidente de la Sociedad B o l i v i a n a de Neurocirujanos (2002-
2004).Vicepresidente del Capítulo de Neurocirugía Pediátrica Latinoamericana (2002-2004). Oficial Mayor de Desarrollo
Humano del Gobierno Municipal de Santa Cruz de la Sierra (2002-2003). Presidente del Directorio Local de Salud (DILOS) de
S a n t a Cruz de la Sierra (2002 a la fecha). Miembro fundador del Movimiento A u t o n o m i s t a "Nación Camba".

Memorándum P l a n t e a 6 objetivos estratégicos: 1) Democracia; 2) Autodeterminación; 3) Identidad; 4) Recursos Naturales,


territor io y poder; 5) Integración y 6) Un n u e v o Pacto con el Estado boliviano. Concluye diciendo: "Profundizar la democracia,
acceder a la autodeterminación nacional, ratificar nuestra identidad, defender y proteger nuestros recursos naturales, la
integración continental y formular un nuevo pacto con el Estado boliviano, deben ser los paradigmas sobre los cuales
descansa el nuevo nacionalismo cruceño".

Cuando el 14 de febrero de 2001 apareció el primer documento del Movimiento Autonomista Nación
1
Camba (MANC) , no fueron muchos los que intuyeron el valor de su aporte sustancial al debate
regional y del país. En efecto, no sólo hubo un giro en la información local y en la prensa boliviana,
sino también en la propia tertulia de la gente, ya sea en la oficina o la fábrica, en la ciudad o en el
campo, en los actos sociales, reuniones políticas o foros en las universidades. De pronto, alguien dijo
"después de la Nación Camba, en Santa Cruz ya no se habla simplemente de pasarelas o negocios". Es
que en los albores del siglo XXI, las publicaciones, documentos o declaraciones del MANC vienen
coadyuvando a la construcción de un nuevo pensamiento político que se irradia desde Santa Cruz hacia
la Amazonia y el Chaco bolivianos, tratando de pergeñar algo así como una ideología renovadora, de
autoestima, para ver las cosas de un modo diferente, investigando más y reinterpretando la historia
de esta parte de la geografía americana. Su difusión ha germinado un movimiento social fortalecido,
llenando tal vez un vacío de un proyecto político y social contemporáneo, sino apagado, al menos
adormecido durante mucho tiempo. El sello de un reconocimiento popular al MANC se expresó
contundentemente cuando miles de militantes y simpatizantes de este movimiento marcharon en el
desfile cívico del 24 de septiembre de 2002, recordando el grito libertario de 1810. Y mientras el
presidente de la República mostraba sus espaldas en una actitud de desaire -como queriendo escapar
de una realidad-, se dejaba oír un aplauso ensordecedor de la gente que observaba el acto en la
plaza principal de la ciudad. Fue algo emocionante y casi indescriptible. Ese día, el MANC
adquirió el derecho de ciudadanía plena.
El surgimiento del MANC también terminó en muchos habitantes y dirigentes, particularmente de
Santa Cruz, aquellos atisbos de un falso complejo o temor impuesto ancestralmente por la propaganda
andino-centrista, que no permitía proclamar públicamente los ideales cruceñistas o de autonomía,
ante el temor de ser censurado de regionalista, separatista o antiboliviano. Hoy, la gente, sin ningún
temor expresa o publica sus más diversos sentimientos, verificados en innumerables artículos de
opinión. Más aún, los crúcenos no tienen ningún resquemor cuando ya se tiene comprobada una
actitud ambivalente de muchos periodistas, dirigentes políticos o autoridades del occidente boliviano, que
frente a los recientes actos de movimientos regionales de esa región como la quema de la bandera
tricolor, la negación de la república o a los próceres de la independencia, entre otros- sólo hablan de
"reivindicaciones sociales", pero cuando en estas llanuras, alguien alza la voz reclamando por alguna
injusticia del centralismo político de la metrópoli, léase La Paz, hay una descarga de diatribas o
insultos, cuestionando siempre elsentimiento boliviano de los crúcenos, benianos o pandinos.

Es que en todo este tiempo, la actitud del pueblo "camba" en defensa de sus intereses produjo
reacciones del poder central que lo estigmatizó de patriotero, anexionista, etc. Ese constante tintinear
hizo que entre muchos se creara una especie de resquemor cada vez que se reclamaba algo, es decir,
germinó un cierto complejo de culpa por el simple hecho de exigir lo que bien entendía Santa Cruz. La
política desnacionalizadora "ejercida desde las altas esferas gubernamentales, ha dejado adormecida
y latente la conciencia primitiva de su individualidad"2 , con el ánimo que el "colonizado en
todo momento se presuma culpado". Por otro lado, hasta hace pocos años, para definirse como
"camba", término peyorativo en el pasado, y hoy utilizado con orgullo como elemento distintivo frente
a los demás, había que acompañarlo con algunas frases que hicieran referencia al sentido de "unidad
nacional", o bien, se debían mencionar registros históricos que recordaban a ilustres crúcenos o
acontecimientos épicos, como ejemplos locales que comprueben su aporte a la construcción de la
bolivianidad.

José A. Obieta Chalbaud. El Derecho Humano de la Autodeterminación de los pueblos. Editorial Tecnos. Madrid. 1985.

A dos años de su fundación, en torno a la Nación Camba se han publicado en Bolivia y en el extranjero
más de un millar de artículos de opinión, lo que de por sí ha justificado la existencia del MANC. Antes
de su primer pronunciamiento casi nadie hablaba de autonomías regionales, federalismo, el derecho a la
autodeterminación de los pueblos, ni de reformar a la policía o exigir una Academia Regional para
gente del lugar. Menos aún. los residentes en Santa Cruz, Beni o Pando habían pensado que también
ellos tenían derecho a poseer tierras en su propio territorio para hacerlas producir, hasta que supieron
sobre una campaña a favor de los llamados "Cambas sin Tierra", inscribiéndose en poco más de un
mes casi trece mil ciudadanos nacidos en esta región y en diferentes lugares del país, y conformar los
Sindicatos Agrarios para exigir sus plenos derechos al Instituto Nacional de Reforma Agraria, t a l
como reza la ley. Hoy, hasta los mayores detractores de estas ideas reconocen la existencia de una
nación cultural "camba", moldeada durante siglos, y su derecho a autogobernarse, al igual que los
pueblos desparramados en toda la Amazonia y el Chaco3 expresan su simpatía por este movimiento.
II. CICLOS HISTÓRICOS DEL PENSAMIENTO CRUCEÑO AUTONOMISTA

Para comenzar, bien vale la siguiente advertencia: "No se puede interpretar cualquier pronunciamiento
regional sin conocer de manera adecuada los antecedentes históricos, económicos, sociológicos o
culturales que ha tenido Santa Cruz". 4

Si bien hoy se sabe de la existencia en las planicies mojeñas de una civilización muy avanzada que 800
años a.C. desarrolló técnicas avanzadas de producción agrícola, como la fertilización de campos
elevados o la formación de extensas lagunas para desarrollar piscicultura, además de crear una
cultura de la cerámica, una nueva historia se construyó a partir de la fundación de Santa Cruz por Ñuño
de Chaves en 1561.

Con el riesgo de pecar por ser muy simple nuestra observación, se podría intentar establecer de manera
muy escueta, al menos cuatro ciclos en el pensamiento cruceño de clara tendencia autonomista:

1) Movimiento Aislacionista o de "sociedad de frontera" (1561-1903).


2) Movimiento localista o de "campanario" (1903-1966).
3) Movimiento Regional o Centrípeto (1966-2001).
4) Movimiento del nacionalismo "camba" (2001-).
Raúl Otero Reiche. "Santa Cruz de la Sierra. Ciudad que dio más hijos a la selva que otros dieron a los mares y que fue madre
de pueblos distribuidos en el espacio como las estrellas".
Carlos Dabdoub Arrien. La "Nación Camba". En La sociedad civil y el Estado Boliviano: crisis y posibles soluciones. Editor
AIPE. Diciembre. 2001.
1) Movimiento Aislacionista5 (1561-1900)

Es probable que desde la misma fundación de Santa Cruz empezó a gestarse un pensamiento local,
autonomista, marcado por la ausencia primigenia de las soñadas riquezas creadas por la exótica
leyenda de El Dorado o Paitití en las inmensas llanuras amazónicas de Moxos y Chiquitos,
generando por consiguiente, el desinterés de la corona por estas tierras. La marginalidad de los poderes
centrales, sumada al aislamiento geográfico, determinaron un papel poco significativo de la
región en lo político y en la economía y al no encontrar las soñadas riquezas, el objetivo central de las
expediciones dirigidas por Ñuflo de Chávez terminó siendo "poblar y desencantar la tierra",
contrastando con las ideas ambiciosas generadas por los tesoros conseguidos por Francisco Pizarra o
Diego de Almagro en el Collasuyo. Con el pasar del tiempo, dicho enclaustramiento crearía la "altivez y
espíritu de independencia que caracterizó a los crúcenos, y que se había manifestado anteriormente
por ejemplo durante el alzamiento de Diego de Mendoza contra el gobernador Juan Pérez de Zurita"6 , a
comienzos de los años 70 en el siglo XVI.

José María García R e c i o . A n á l i s i s de una sociedad de frontera. Santa Cruz de la Sierra en los s i g l o s XVI y XVII. Sevilla,
1988.

El criterio de considerar a Santa Cruz como una sociedad de frontera, sólo para evitar el ingreso de los
"bandeirantes" lusitanos o detener el embate de la nación chiriguana, relegó a nuestra región durante
los siglos que duró la época colonial. "Es posible que el mismo aislamiento político administrativo de Santa
Cruz de la Sierra (generado por la distancia) y la libertad de decis ión que gozaba su Cabildo,
propiciaron su supervivencia, una vez fracasado el proyecto integracionista con el que fue
fundada, en medio de la selva". El fundador del nacionalismo cruceño pudo ser Ñuflo de Chávez,
quien pereció a manos de los indígenas Itatines, por el mes de octubre de 1568, o sino Diego de
Mendoza, cuñado del primero, y nacido en Asunción del Paraguay, que fuera nombrado gobernador de
Santa Cruz por el cabildo convocado para tal efecto, "que se asumía autónomo y soberano para darse
leyes y elegir a sus autoridades, inclusive con relación a la corona española". 7 Gobernó durante tres
años hasta que el virrey Toledo lo destituyó, nombrando a Juan Pérez de Zurita 8 , lo que provocó la
insurrección de Mendoza y una guerra civil entre los nuevos crúcenos y el centralismo español. Con
engaños el caudillo insurrecto fue convencido de ir a Potosí, donde fue vilmente asesinado. Así, Diego
de Mendoza sería la primera víctima que entregó su vida por la autonomía de lo que sería la gobernación
de Mojos y Chiquitos.
Sin embargo, el sentido regional o autonomista de Santa Cruz no sólo proviene del aislamiento a que
su territorio fue sometido, primero por los españoles y luego, durante la época de la república, por el
poder central. En todo caso, engendrando un fenómeno de cascada, han existido una serie de
movimientos sociales, que en vez de ser meramente coyunturales, han creado un proceso de acumulación
histórica.

D a n i e l a Gaya Ábrego. Santa Cruz de la Sierra: entre el aislamiento y la autonomía. Fondo Editorial Municipal. Santa Cruz,
2000.
Guillermo Pinckert Justiniano. Historia colonial de Santa Cruz 1561-1810. Editorial Universitaria. Santa Cruz, 1999.

Siguiendo ese espíritu autonomista, el 15 de agosto de 1809 emerge un movimiento independentista


conoc ido como el levantamiento de los pardos. Después vendría el gobierno de la llamada "Republiqueta"
de Santa Cruz a cargo de Ignacio Warnes, que se inicia en 1814 y concluye con su muerte en la batalla
del Pari, el 21 de noviembre de 1816, quien ejerció sus poderes plenos como un estado independiente.
También, se recuerda el llamado grito emancipador del 14 de febrero de 1825, "fecha en que se
proclamó la independencia de las provincias de Santa Cruz de la Sierra cuando era gobernador el
cruceño Juan Manuel Arias".9 Poco después, el territorio de Moxos y Chiquitos sería anexado a la nueva
república, bajo la influencia del pensamiento oligárquico centralista de los ricos mineros. Una vez más
Santa Cruz quedaría en el olvido.

Mientras tanto, los europeos y los originarios de estas tierras iban conformando un mestizaje
acelerado, simbiosis muy diferentes a la que se dio en el altiplano, construyendo una cultura sui
géneris con fuertes resabios hispánicos: la cultura "camba", que como todo proceso histórico fue
complejo, con luces y sombras. Pero en todo caso, con José Luis Roca podemos afirmar que "la historia de
la ocupación territorial del Oriente Boliviano es la historia de Santa Cruz de la. Sierra".
A pocos años de la creación de Bolivia vendría la insurrección de Francisco María del Valle (1831),
fusilado después por tropas del gobierno central, acontecimiento referido por Alcides D'Orbigny.
Luego, surgiría un personaje que se alzó contra la desigualdad social y proclamó los principios del
federalismo en Santa Cruz. Su nombre era Andrés Ibáñez (1844-1877), fundador del Partido Igualitario,
que junto a otros seguidores fue victimado el 1° de mayo de 1877 en la localidad de San Diego de la
provincia Velasco por tropas del gobierno central a cargo del Gral. Carlos de Villegas, entonces
Ministro de Estado del Presidente Hilarión Daza por ser "separatista" e "incorporar doctrinas foráneas y
comunistas".10 Posteriormente, en enero de 1891, los coroneles Domingo Ardaya y José Domingo Avila
promueven una revolución federal, bajo el grito de "Federación o muerte", que para Valverde Barbery
tuvo el carácter de "independista llegando a crear moneda propia".11
Carlos Valverde Barbery. La Nación de la llanura. Santa Cruz, 1996.

Por aquella época, aparece un segundo movimiento de carácter indigenista encabezado por el chiriguano
Tumpa Apiaguaiqui, generado por el despojo de sus tierras a cargo de terratenientes y latifundistas
locales, apoyados por fuerzas del poder central y que terminó con el fusilamiento de su líder el 21 de
marzo de 1892. En general, varios de estos acontecimientos se pueden considerar como divergentes
al centralismo. 12 El fin de siglo terminaría con el cruceño Rafael Peña como Vicepresidente de la
República, acompañando a Severo Fernández Alonso, derrotados por las fuerzas bajo el mando del
general José Manuel Pando y del jefe aymara Pablo Zarate, el Wilka, trasladándose la sede de gobierno a
La Paz. Así, el siglo XX se iniciaba con una vuelta a la hegemonía paceña.

10 Carlos Hugo M o l i n a . En La revolución igualitaria de Andrés Ibáñez de Emilio Duran R. y Guillermo Pincken J. E d i t o r i a l
Universitaria.. S a n t a Cruz, 1988.
11 Carlos Valverde Barbery. La Nación de la llanura. S a n t a Cruz, 1996.
12 María Angélica Suárez de Rodríguez. Partidos y Movimientos políticos de Santa Cruz durante los primeros cincuenta años
del siglo XX (1900-1 9 5 0 ) . En Libro Homenaje de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos en su Centenario. 12
de julio de 1903 - 12 de julio de 2003. S a n t a Cruz, 2003.
El tiempo que marcó este exilio en la reciente república gestó un idealismo cruceño y por
consiguiente un movimiento social, que al igual que en otras regiones, ha sido definido por algunos
sociólogos como "la acción colectiva de larga duración dirigida a transformar los aspectos centrales de
un orden social". 13
2. Movimiento localista o "de campanario"14 (1903-1966)

La preocupación por el aislamiento tricentenario, la pobreza lacerante y la continua incertidumbre


con que vivió el hombre de los llanos orientales, motivó que el 12 de julio de 1903, un puñado de
talentosos conciudadanos crúcenos formara la hoy centenaria Sociedad de Estudios Geográficos e
Históricos de Santa Cruz. Su afán "era hacerse sentir en el ámbito nacional, no como un pueblo
desterrado, sin cultura, sin economía, sino como un conglomerado humano sediento de patria, de
gloria, de civilización y de engrandecimiento". 15
Posteriormente, en septiembre de 1904 esta egregia institución hizo conocer el llamado
Memorándum al Congreso de la República y al Poder Ejecutivo. Dicho manifiesto denuncia la
discriminación de Santa Cruz y por tanto, exigían construir un ferrocarril que uniera al país de
oriente a occidente, "que arranque del rió Paraguay o del Pilcomayo, pase por Santa Cruz y remate
en Cochabamba o Sucre, [...]. "Esto equivale a decir unir el oriente con el occidente, salir al
Atlántico para contrarrestar la influencia del Pacífico, hoy en manos de Chile". Además, pedían
abrir el mercado andino a los productos agropecuarios de las tierras bajas que competían
desventajosamente con los del Perú y Chile, que por gozar de privilegios y franquicias, ingresaban
con costos más bajos, perjudicando la producción cruceña. Ante tal solicitud de integración, una vez
más el gobierno central maliciosamente mostró a la opinión pública a este movimiento como
separatista.

13 A. Touraine. Citado por Salvador Romero Pittari. 1989.


14 Salvador Romero Pittari. El Nuevo Regionalismo. Estado & Sociedad. N° 6. FLACSO, 1989.
15 La Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos en su Centenario. Libro Homenaje. U de julio de 1903-12 de
julio de 2003. Santa Cruz, 2003.

El auge de la goma (1890-1920) merece un comentario adicional. Llegó a representar el 20% del total
nacional de exportaciones y casi el 10% de las rentas aduaneras. Así fue que este producto no sólo
marcó un hecho significativo en la vida económica del Oriente boliviano, sino que desde el punto
de vista social despertó a pueblos aletargados y fundó otros poblados, fortalecidos todos ellos con
una misma cultura que en la búsqueda de nuevos horizontes por una vida mejor, se
desparramaron más de cien mil crúcenos a lo largo y ancho de la Amazonia boliviana. Fue el
grito de esperanza de una sociedad secularmente pobre y discriminada por las políticas públicas
de la Repúblic a.

Empero, ni siquiera hechos de fuerza, cabildos abiertos, la creación del Partido Orientalista en
los años 20 del siglo pasado, consiguieron dar cumplimiento a este anhelo regional. "Ferrocarril o
nada" es la consigna de la revolución de 1924 encabezada por Pablo Roca, Cástulo Chávez y
Guillermo Añez. Sólo después de la derrota en la guerra del Chaco los políticos e intelectuales de la
sede de gobierno darían la razón a este proyecto integrador de los crúcenos, sirviendo el
holocausto de miles de "cambas" para que Bolivia descubra a Santa Cruz y al Oriente de Bolivia.
Después del alzamiento armado del coronel Froilán Calleja en 1936 que demandaba al gobierno
otorgar la autonomía universitaria, iniciar el ferrocarril Santa Cruz-Cochabamba y que las
autoridades designadas sean cruceñas o la llamada guerra civil de 1949 promovida en el departamento
por el M.N.R. vendrían las luchas por el 11 % de las regalías de petróleo bajo el liderato del Comité
pro Santa Cruz, fundado el 30 de octubre de 1950. Luego, el 7 y el 31 de octubre de 1957, se
crearían la Unión Juvenil Cruceñista y la Unión Cruceñista Femenina, respectivamente.16
Este movimiento regional conducido por el doctor Melchor Pinto Parada que ejerció el cargo de
presidente de la institución cívica cruceña desde el 17 de agosto de 1957, tuvo como base jurídica la
ley del 15 de julio de 1938, promulgada por el presidente Germán Busch cuyo artículo segundo decía:
"Fíjase el once por ciento de la producción bruta de petróleo de cada Departamento, como renta a
favor de los tesoros de las circunscripciones productoras, y bajo su inmediata responsabilidad".
De 1957 a 1959 se producen enfrentamientos armados entre fuerzas del gobierno y gente del pueblo.
Gumersindo Coronado y Jorge Roca Pereyra, estudiantes ambos, son algunas de las víctimas que
cayeron en esta lucha reivindicatoria. Durante este tiempo, por instrucciones del gobierno de
turno, en dos ocasiones ingresan a Santa Cruz fuerzas punitivas conformadas por milicia de campesinos
armados provenientes de Ucureña, del departamento de Cochabamba, asesinando en una ocasión a siete
personas, siendo la mayoría de ellos universitarios.
16 Lucio Añez Ribera. Breve Historia del Comité pro Santa Cruz. En Libro Homenaje de la Sociedad de Estudios
Geográficos e Históricos en su Centenario. 12 de julio de 1903-12 de julio de 2003. Santa Cruz, 2003.

Como no podía ser de otra manera, panfletos editados en el Ministerio de Agricultura de La Paz tildan a
Santa Cruz de separatista y anexionista al Brasil. 17 Finalmente, se reconoce el pago del 11% de regalías,
comenzando a recibir Santa Cruz dichos ingresos, dando inicio a una nueva etapa en el desarrollo
regional. El sueño de "agua, pavimento y luz para Santa Cruz" comenzaba a hacerse realidad.
Posteriormente, la mayoría de los departamentos de Bolivia gozarían también de este derecho, cuya
conquista tanto había costado a estas tierras grigotanas. Así, en 1966, se coloca la primera loseta en la
plaza 24 de septiembre de la ciudad de Santa Cruz. Fue un acto que dio fe de la capitulación del estado
andino-centrista frente a las luchas cruceñas por sus justas reivindicaciones. Como testigos de ello,
estuvieron presentes algunos de los más conspicuos líderes de esa confrontación centro-periferia, los
doctores Melchor Pinto Parada y Elffy Albrecht Ibañez. Al mismo tiempo, las nuevas instituciones
creadas en Santa Cruz organizaban un nuevo ciclo del desarrollo local.

Durante esta primera mitad del siglo XX, ora por la ausencia de políticas estatales que fomenten el
desarrollo de Santa Cruz, ora por la propia falta de vías de comunicación, la ideología regional se
basó en una lucha "de campanario", reivindicatoria y temporal, acompañada de recelos y
actitudes de desconfianza hacia quienes ejercían el poder desde la "sede de gobierno". Se hizo una
valorización excesiva del hombre del lugar, de la geografía y de la cultura local, denotando un aprecio
casi exclusivo a la región.18
17 Lucio Añez Ribera. Breve Historia de! Comité pro Santa Cruz. En Libro Homenaje de la Sociedad de Estudios
Geográficos e Históricos en su Centenario. 12 de julio de 1903-12 de julio de 2003. Santa Cruz, 2003.
18 Salvador Romero Pittari. El Nuevo Regionalismo. Estado & Sociedad. N° 6. FLACSO, 1989.

3) Movimiento Regional y Centrípeto (1966-2001)

Con el pago de las regalías de petróleo junto a otros factores como: a) La institucionalidad de Santa
Cruz, organizada desde principios del siglo pasado [Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos
(1903), Cámara de Industria y Comercio (1915), Comité de Obras Públicas (1945), luego Cordecruz
(1978), Comité pro Santa Cruz (1950), Comité Cívico Femenino (1957) y Unión J u v e n i l Cruceñista
(1957), COTAS y CRE (1960), Banco de Santa Cruz de la Sierra (1965), SAGUAPAC (1979)]; b)
Conformación del Bloque Parlamentario Oriental con 32 miembros, (1938) que aprobó la ley de regalías
del 11%, creó el departamento de Pando y aprobó los Tratados ferroviarios con el Brasil y Argentina; c)
Ejecución del Plan Bohan (1942) cuyos objetivos fueron la construcción de caminos para vincular
producción con consumidores (Santa Cruz-Cochabamba), diversificación y expansión de la
producción agrícola en el Oriente boliviano y el impulso a la industria petrolera; d) Construcción de los
ferrocarriles al Brasil (1955) y a la Argentina (1957) y oleoductos al Pacífico (1966), Argentina (1970) y
Brasil (1999); e) Profesionalización y capacitación de nuevos recursos humanos y; h) La migración interna y
externa, conseguían que Santa Cruz y todo el Oriente, después de 175 años de vida republicana, se
integraban finalmente a Bolivia, como departamento pleno, con grandes condiciones para alcanzar un
19
buen desarrollo y convertirse en lo que algunos llamarían "la locomotora del país".

Esta nueva relación y el rol rector de nuestro departamento en el destino de la república permitió que
Santa Cruz promueva el mayor protagonismo de su historia ante el Estado, ejerciendo una acción colectiva
que se irradiaba a todo su territorio. La lucha ya no era sólo de reivindicación local o regional, sino que
se irradiaba hacia la metrópoli del poder central, intentando coadyuvar a la transformación de las
estructuras del país y la sociedad. Si en los años 50 del siglo XX se hablaba de la "Marcha hacia el
Oriente", a finales del milenio había comenzado la "Marcha al Occidente". Hasta entonces, Santa Cruz sólo
miró hacia el Oriente. La acción de los pensadores crúcenos estaba en esa franja territorial de América que
se extiende desde el río Pilcomayo hasta el Acre. 20 He ahí que entonces Santa Cruz propone recuperar la
democracia como un modo de convivencia pacífica, también plantea la reforma constitucional, repartir
territorialmente el poder mediante la descentralización administrativa y restablecer la autonomía
municipal y por ende, la preservación de la identidad en los pueblos, exigiendo el reconocimiento de la
pluriculturalidad de Bolivia, incluyendo la identidad de la cultura "camba".

19 Carlos Dabdoub Arrien. Presentación del Libro Economía y Sociedad del Oriente Boliviano (Siglos XVI-XX) de José Luis
Roca. Sa n t a Cruz, 2001.

En este ámbito, es por todos conocido que en esta última etapa de vida democrática, el Comité pro Santa
Cruz fue el principal impulsor de la descentralización, si bien este asunto venía siendo debatido, quizá
desde el mismo momento de la creación de Bolivia, cuando la ley del 13 de agosto de 1825 determinó
que "el Gobierno es concentrado, general y uno para toda la República", pasando por la mal llamada
revolución federal de finales del siglo XIX o el referéndum del 11 de enero de 1931, que aprobó nueve
reformas, de las cuales, la número siete "incorporaba una nueva sección al texto constitucional
intitulada "La descentralización administrativa", que sustituía la sección decimocuarta de la
Constitución. El Congreso de la República había sancionado la ley correspondiente el 17 de
noviembre de 1932, pero fue vetada el 26 de noviembre del mismo año por el doctor Daniel
Salamanca Urey, entonces presidente de Bolivia.21

20 Carlos Hugo M o l i n a . Cien años de ideología en el Oriente Boliviano. En: E. Espíritu de un Siglo. El Deber. S a n t a Cruz,
2000.

Desde aquel 19 de marzo de 1981, cuando el Directorio del Comité Cívico cruceño decide iniciar
gestiones para plantear la "necesidad de descentralizar la administración pública nacional,
trasladando funciones con autonomía a la administración regional..."22 , tendrían que haber pasado más de
diez años, hasta que se aprobó la mal llamada ley de descentralización promulgada el 28 de julio de 1995,
al cercenar la nueva Constitución de 1994 el concepto de Gobierno Departamental que había en el
texto constitucional de 1967. En consecuencia, los departamentos perdían la capacidad de adquirir
personería jurídica y por tanto, no ser sujetos de derechos ni adquirir obligaciones.23 Por ello, a esta
norma jurídica se la conoce como "ley perversa" o la descentralización "chuta". 24

4) Movimiento del nacionalismo "camba" (2001- )


Desde los años 80 del siglo pasado, posiblemente, y de manera más intensa desde principios de este nuevo
milenio, el idealismo basado en lo regional ha ido cambiando hacia un nuevo concepto: el
nacionalismo cruceño. Casi a mediados de los años 80, Sergio Antelo Gutiérrez publica Centralismo y
Estructuras de Poder. Radiografía del centralismo boliviano,25 posteriormente, en 1987, aparece el libro
de Juan Carlos Urenda Diaz26 sobre Autonomías departamentales. De igual modo, el Comité pro Santa
Cruz, se pronuncia a este respecto. Por ejemplo, el 26 de febrero de 1986, destacamos que el mandato
recibido era "para afirmar la autonomía histórica de nuestros pueblos, porque no se puede conseguir
armonía en las diferentes partes de un todo, sino se funda el orden y el derecho en cada una de ellas
[...]"….”no bastará un decreto o la sanción de una ley, para crear la libertad autonomista de un día
para otro porque toda libertad es obra del tiempo, el resto es concientización". 27 "Todos coincidimos
que la descentralización territorial es un instrumento legal que debemos exigir con acciones nacionales y
que sirva además para defender la libertad del individuo, garantizar el derecho a las nacionalidades y
el respeto a la identificación de las regiones".28

21 Carlos Dabdoub Arrien. El voto por la descentralización en el Referéndum de 1931. En: Descentralización... Ya.!!.
S a n t a Cruz, 1994.
22 Lucio Añez Ribera. Breve Historia del Comité pro Santa Cruz. En Libro Homenaje de la Sociedad de Estudios Geográficos
e Históricos en su Centenario. 12 de julio de 1903 -12 de julio de 2003. Santa Cruz, 2003.
23 J u a n Carlos Urenda. La Descentralización Deficiente. Los Amigos del Libro. 1999.
24 "Dícese del individuo a medio vestir y que le faltan, principalmente, los pantalones". En: El Habla Popular de Santa Cruz.
Hernando Sanabria Fernández. Editorial Juventud. 1982.
25 Sergio Antelo Gutiérrez. Centralismo y Estructuras de Poder. Radiografía del centralismo boliviano, s/f.
26 J u a n Carlos Urenda. Autonomías departamentales. La alternativa al centralismo boliviano. Editorial Los Amigos del Libro.
19S7.
27 Carlos Dabdoub Arrien. Santa Cruz Esperanza. Discurso pronunciado en el acto de posesión como presidente del Comité
pro S a n t a Cruz. 26 de febrero de 1986.
28 Carlos Dabdoub Arrien. La Refundación de Bolivia. Seminario: Integración y Democracia; Descentralización y Reforma
Constitucional. Santa Cruz, 27 de enero de 1988.

Durante las Jornadas Santa Cruz 2000 realizadas en septiembre de 1986, a efecto de elaborar el llamado
"proyecto cruceño", entre las conclusiones del tema Descentralización y Autonomía, se determinó
conformar una comisión bajo el patrocinio del Comité Cívico y de Cordecruz para "buscar soluciones a
cuestiones centrales, como ser: a) El proyecto de ley que declare la necesidad de reformar la
29
Constitución Política del Estado para instaurar autonomías regionales...". En otra ocasión, para vencer
el colonialismo interno ejercido por el gobierno central, el movimiento cívico cruceño expresó que era
necesario "de la fuerza y el sentimiento de todos los que viven en esta región, con el fin de alcanzar la
autonomía regional que preserve sus derechos fundamentales y canalice la capacidad creativa de sus
30
gentes".
29 "El proyecto cruceño". Septiembre de 1986. En S a n t a Cruz 2000. El Proyecto Cruceño. Gestiones 1986 a 198S. S a n t a
Cruz, 1988.
30 El colonialismo interno: producto perfeccionado del sistema centralista. Comité pro Santa Cruz. 28 de n o v i e m b r e de
1987.
3 1 Carlos Dabdoub A r r i e n . La "Nación Camba". En: La sociedad civil y el Estado boliviano: crisis y posibles soluciones.
Editor AIPE. Diciembre, 2001.

Otras razones para la construcción de este pensamiento autonomista contemporáneo fueron 3':

1) El derecho a las nacionalidades y de los pueblos originarios que ha llevado a aprobar leyes y fondos
para su desarrollo. Una expresión casi inicial de aquello fue la marcha hacia La Paz de más de 800
indígenas del Beni entre agosto y septiembre de 199Ü bajo el lema "Por el territorio y la dignidad", o
los bloqueos de septiembre del año 2000 organizados por la "nación aimara" que desconocía al estado
boliviano. Sin embargo, al contrario de este movimiento, "los grupos étnicos del valle y del oriente
han planteado más explícitamente su intención de integrarse. Quieren formar parte del país y entonces el
32
problema central del poder, del sistema político del Estado, es cómo emitirles esa integración". En
general, las principales demandas indígenas, han sido: ser reconocidos como pueblos con identidad
propia; determinar las prioridades de su propio desarrollo; aceptar la relación particular con sus tierras
33
para su existencia; consolidar su cultura; ejercer sistemas de autogobierno y administración local. 2)
La crisis del Estado-Nación por la pérdida de soberanía en el manejo de asuntos como la ecología, el
narcotráfico, los derechos humanos o acuerdos de libre comercio, que ya son definidos por la
comunidad internacional. 3) El insurgente interés de los pueblos por su identidad como respuesta al
agobiante fenómeno globalizador contemporáneo.
4) Las nuevas maneras de relaciones interregionales o transcontinentales que saltan estructuras estatales y
burocracias centralistas y se dirigen más directamente a la ciudad o a las regiones, que sumados a la
eficiencia, transparencia y eficacia que hoy exigen de la gerencia a d m i n i s t r a t i v a en el sector
público, determinan el camino a la consolidación de gobiernos autónomos con alta capacidad de
gestión.
5) Nuevas demandas del pueblo y las organizaciones de la sociedad civil al sistema democrático,
exigiendo formas de participación directa como el referéndum, el plebiscito, la consulta popular, entre
otras.
A decir de Javier Mansilla Peña "la decadencia de ese Estado-nación está dejando paso al surgimiento
de nuevas formas de identidad que sobrepasan el campo dominado por la política y la economía.
32 Jorge Lazarte. Entrevista. La Razón. Domingo 28 de enero de 2001.
33 Kitula Libermann. Armando Godínez (Coordinadores). Territorio y dignidad. E d i t o r i a l Nueva Sociedad. Caracas,
Venezuela. 1992.
La identidad nacional inventada e impuesta por este Estado-nación«s una identidad política, no otra
cosa. El nuevo espacio generado por nuevas normas de articulación entre lo local y lo global o mundial,
está dominado por la cultura, entendida como el modo de ser de un pueblo, su historia, en suma su
propia cosmovisión, capaz de vincularlo más eficazmente con el mundo exterior y a su vez
34
internalizarlo más estrechamente".
Todos estos acontecimientos motivaron para que muchos crúcenos realicen una lectura diferente de su
propia historia y su proyección al futuro. En tal sentido, viene conformándose una nueva id eología
cuyo epicentro es el concepto de "nación camba-cruceña", que conlleva a un nuevo pacto político con el
estado boliviano mediante un cambio profundo del modelo estatal v i g e n t e y su nuevo rol con la
sociedad, en la economía y con las regiones. Los partidos deben entenderlo así, si es que no quieren
seguir cavando la fosa de nuestra república. En esta construcción de un estado multinacional, también
habrá que bosquejar el ingreso de valores democráticos de las propias culturas indígenas.
Finalmente, este pensamiento renovador y democrático viene engendrando un movimiento social, que
no debe ser involucrado con apetitos electorales, tampoco segrega ni desintegra; al contrario, es
unificador y de carácter reivindicatorio, pero al igual que algunos hechos sucedidos en otras partes del
36
país, guarda "un fuerte sentimiento de dignidad étnico-cultural...". Su propósito es uno solo:
fortalecer la institucionalidad boliviana, integrar al país, profundizar la democracia, respetar la
identidad y las decisiones de los pueblos y las regiones y luchar contra la corrupción, administrando de
cerca la cosa pública.

34 Javier de J. Mansilla Peña. La historia de las décadas perdidas. Autonomía ya.


Periódico El Deber. Santa Cruz, 1 de agosto de 2001.
36 Jorge Lazarte. Entrevista. La Razón. Domingo 28 de enero de 2001.

La realidad demuestra el inconformismo de la gente por todo lo que sucede en Bolivia. La tragedia y los
desmanes de febrero de este año, son claros ejemplos de dicha realidad. Todos rechazan un modelo de
estado que ahoga las libertades de ciudadanos y regiones. Tampoco parece que el pueblo aguanta más,
pudiendo este cansancio terminar en una eclosión incontrolable, algo así como un "Chernobil Social",
pero una forma, tal vez no la única de evitarla sería convocar a una Constituyente para reconstruir el
estado boliviano con reglas adecuadas según las aspiraciones de la gente y de las regiones,
planteamiento que lo venimos sosteniendo desde hace varios años.

Constituyente es un grupo de hombres o mujeres que el pueblo como ente soberano elige expresamente
para hacer u n a nueva Constitución acorde a los intereses de los bolivianos y no precisamente de los
partidos políticos, elección que no precisa trastocar el mandato del actual presidente de la república. La
Constituyente es volver al poder constitucional originario con el fin de adecuar la Carta Magna a las
transformaciones sociales, jurídicas e incluso tecnológicas que vi ve el país y el mundo. Que esta propuesta
que viene ganando militantes será rebatida por quienes no quieren el cambio o buscan la continuidad para
exprimir el poder en beneficio propio, ya lo sabemos. Sin embargo, las observaciones en contra de esta
inquietud no harán otra cosa que reafirmar nuestra convicción. Algunos podrán opinar que es prematuro
hacerlo, más aún con una Constitución muy nueva. Sin embargo, el hecho que la misma viene siendo
transgredida es un indicio claro de sus deficiencias funcionales. Y si aún otros dijeran que los días
que vivimos no son los mejores para una reforma, me adelanto a responderles que ésta sería una prenda de
paz y garantía y una forma de ratificar un pacto de unión, alrededor de grandes principios de ética y
solidaridad.

Que no se pretenda afirmar que con esto se está cediendo a la impaciencia de forzar el mecanismo
constitucional en aras de estrategias de corto aliento o para ensayar modelos importados. Al contrario, el
pueblo cruceño en particular, viene soportando con estoicismo los errores que se cometen a cada rato,
observando como la Constitución pareciera ser apenas una tira de papel, violada por unos y otros, rota
u olvidada muchas veces por los desmanes de la politiquería, o por el capricho de los que ejercen en ese
momento el poder.
En vez de las confrontaciones intrascendentes y leguleyescas, hagamos uso de la oportunidad histórica
de encontrar los caminos de la acción mediante la Constituyente, basándonos en comunes anhelos que
hoy día están empañados por disputas mezquinas, mientras mueren por año 22.000 niños menores de 5
años, es decir unos tres cada hora.

III. ASPECTOS CONCEPTUALES

1. Conceptos de Nación
La idea de nación surge cuando el concepto de imperio universal ingresa a su ocaso al concluir la Edad Media,
pero es en el siglo XVIII que se caracteriza plenamente cuando las colonias inglesas de Norteamérica
formulan su Declaración de Independencia y poco después en Europa, cuando la Francia de las grandes
masas enfrenta y abate, apoyada en la revolución burguesa, a la monarquía absoluta. 37

37 Alipio Valencia Vega. Fundamentos de Derecho Político. 5 3 Edición. Editorial Juventud. La Paz, 1985.

De acuerdo a Manuel Ossorio, la definición de nación es diversa según los tratadistas de Derecho Político.
"Para Posada es una amplia comunidad espacial -territorial- o mantenida como tal, merced a la integrada
unidad de vida. Para Renán...se resume en el presente por un hecho tangible: el consentimiento, el deseo
claramente manifestado de continuar la vida en común". Pero, además, "no es exacto que para la
existencia de la nación se requiere unidad de gobierno, de territorio, de origen étnico, de lengua y de
38
religión, ya que n i n g u n o de esos elementos es esencial para la realidad política de aquella". Otros,
en cambio, consideran la nación como un "grupo de hombres unidos por un vínculo natural... y que, en
razón de este vínculo, constituye la base necesaria para la organización del poder político en la forma del
39
estado nacional".

El concepto de nación se puede analizaren sus dos dimensiones: sociológico y político. El primero toma
muy en cuenta la cultura y las historias propias, así como las aspiraciones colectivas que
determinan una conciencia v i v a que se desarrolla en un territorio determinado. Esa
individualidad de pueblo como algo subjetivo se llama nación. En cambio, nación en sentido
político es una acepción relativamente reciente y equivale a Estado, constituido por una sociedad
organizada, territorio y gobiernos propios. Sin embargo, el concepto de comunidad política no ha
conseguido desplazar el sentido original de nación como comunidad cultural, lo que conlleva a Obieta
Chalbaud a decir que "el término de "Estado nacional", que se puede emplear para designar al
Estado-nación, es una fórmula acuñada con el fin de ocultar la realidad sociológica de tales Estados.
Estos Estados son todos, por definición, Estados multinacionales cuya pluralidad de pueblos se ha
tratado, precisamente de borrar para obtener una aparente unificación de todos ellos con la creación del
Estado-nación. Por ello, se puede afirmar sin exageración que el Estado-nación, al menos en sus
40
orígenes, no es más que una simple ficción jurídica".

3S Manuel Ossorio. Diccionario de deudas Jurídicas, Políticas y Sociales. Editorial Heliasta. Buenos Aires, 1989.
3y Francesco RossoiúiO. En iNorbeno Bubbio v ÍSicuia Aluiieiicci. Diccionario de Política. Editores Siglo XXI. México, 1986.

Por otro lado, Agustín Saavedra Weise expresa que Samuel Huntingtun ha señalado oportunamente que
la nación Estado es un fenómeno excepcional y reciente en la historia de la humanidad que surgió en el
occidente con la invención de la imprenta y proliferaron durante siglos XVI y XVII, gracias a la
publicación de obras en lenguas vernáculas, y que si bien la nación-estado ha sido la institución
predominantemente del mundo moderno durante varios siglos, hoy está en franca decadencia.

40 José A. Obieta Chalbaud. El Derecho Humano de la Autodeterminación de los pueblos. Editorial Tecnos. Madrid, 1985.
41 Agustín Saavedra Weise. Globalización, Estado, nación y particularismo. Periódico El Deber. Santa Cruz, 23 de
septiembre de 2001
42 Juan Carlos Urenda. La nación y el movimiento autonomista. Periódico La Razón. La Paz, 22 de febrero de 2001.
En el caso boliviano, según Juan Carlos Urenda, lo que define a una nació n es "el sentimiento de
pertenencia a una determinada región, el tener un pasado, un presente e ideales comunes,
independientemente de donde hubiera nacido. El concepto de nación no se edifica en base al lugar del
nacimiento. Por lo tanto, no se trata de crear un país de puro cambas, tampoco se trata de excluir a
aquellos que no han nacido en Santa Cruz". 42 También se puede afirmar que Bolivia no está
conformada por una sola nación, "ya que no tiene una cultura común compartida por todos sus miembros
(es pluricultural según la Constitución), que asume diversos particularismos regionales o nacionales"... y
porque, finalmente "Bolivia puede ser considerada solamente un "Estado" (multinacional), sin una nación
dominante que lo identifique. Por lo tanto, el nac ionalismo boliviano no pasa de ser un nacionalismo
estatal. Es un nacionalismo de estado, pero sin nación". "A la luz de este análisis, cuando se habla del
poder del estado, éste se halla respaldado por los textos constitucionales y personalizado en la presencia
totalitaria del "presidente" de la República como centro del poder del Estado y símbolo de la nación".
"Es el Estado totalitario perfecto. Bajo esta óptica, se concluye que el Estado boliviano, al ser
configurado como "un solo poder" que contiene "una sola nación", se autoconvence de que representa a
43
todas las naciones que contiene su territorio...".
La referencia subjetiva del sentimiento por un nacionalismo, es por tanto, una entidad ilusoria. Su
referente objetivo es un estado que, sin embargo, no viene pensando como tal, lo cual permite afirmar
que la nación es una entidad ideológica, es decir, el reflejo en la mente de los hombres de una situación
de poder, que en el caso de Santa Cruz, hace al poder cruceño ejercido por su pueblo. De acuerdo a
Francesco Rossolillo, es posible que "la historia de los estados nacionales está llegando a término
y está por iniciar una fase en la cual el mundo estará organizado en grandes espacios políticos
federales", lo que a su vez implica también "la revigorizac ión de las nacionalidades espontáneas que el
44
estado nacional sofoca o reduce a instrumentos ideológicos al servicio del poder político...".
43 Sergio Antelo Gutiérrez. El Estado totalitario perfecto. El Deber. Santa Cruz, 19 de junio de 2001.

2. Evolución etimológica del término "camba"

Es difícil determinar cuando aparece la palabra "camba". Mientras que unos lo relacionan con el
guaraní (Paraguay) para significar negro (Coimbra, G. 1992), otros, como, Hernando Sanabria
45 46 47
Fernández , Allyn Maclean , Anders Berghholdt o los que habitan el Izozog, lo usan para el trato
amistoso entre ellos, significando algo similar al término de amigo, mientras que hay quienes lo
comparan con el de hombre valiente, pues provendría de la palabra cuimbaé, usado en la región de
48
Cordillera. Lo que puede ser más probable es que fue adoptado al castellano por los españoles en
tono despectivo para referirse a los pueblos originarios de la llanura que llegaban hasta el pie de la
49
cordillera. Según Gustavo Pinto Mosqueira , el texto de H. Joseph de Castillo "Relación de la
Provincia de Mojos" de 1676 usa el vocablo "camba"' para referirse a un originario (léase indígena;, que
hacía las veces de guía y ayudante en las labores de viaje que se cumplían en los llanos de Mojos. Es
probable que hasta casi fines del siglo XIX, "camba" fue un adjetivo despectivo y de indudable contenido
clasista. Todos recuerdan con Gabriel Rene Moreno aquella frase ya conocida en el siglo XVIII: "los
enemigos del alma son tres: el camba, el colla y el portugués", embebido tal vez por el mito de
superioridad del blanco caucásico. Ya en 1897, "la actitud paceñista de Pando (José Manuel) está
ejemplificada en el hecho de que una de las principales embarcaciones usadas durante el viaje, una
montería, fue bautizada con el nombre de "colla", para contrastar con crúcenos y benianos conocidos
como "cambas". Casi al final del viaje, la montería "colla" naufragó, aunque el personal pudo salvarse…

Más tarde, ese nombre fue acuñado al hombre de campo, y fue sinónimo de peón o mozo "ligado por
deudas a un gran establecimiento agrícola o finca"5', para convertirse con el tiempo, en el gentilicio para
52
referirse a todos los habitantes de las tierras bajas. Según Allyn MacLean Stearman, este término
"vino a ser un medio por el cual los habitantes de las tierras bajas podían demostrar su distancia tanto
cultural como geográfica frente a los hablantes de las tierras altas. a quien se referían como
collas..". 5
Con la fuerte migración de la Bolivia a n d i n a que llegó al Oriente hace 50 años, este término se
extendió a ú n más a todos los oriundos de las pampas y llanuras que componen el territorio nacional.

44 Francesco Rossolillo. En Norberto Bobbio y Nicola Matteucci. Diccionario cíe Política. Editores Siglo XXI. México,
1986.
45 Hernando Sanabria Fernández. El habla popular de Santa Cruz. E d i t o r i a l Juventud. La Paz, 1982.
46 Allyn Maclean Stearman. Camba y colla. Editorial Juventud. La Paz. 1937.
47 Anders Berghholdt. Cambas y collas. U n i v e r s i d a d de Aarhus. Dinamarca. 1999.
48 Eduardo Cortez. Mensuario Horizonte Cruceño. Enero de 2001.
49 Gustavo P i n t o Mosqueira. La Nación Camba. Fundamentos y Desafíos. En prensa. Santa Cruz, 2003.
50 José Luis Roca. Economía y Sociedad en el Oriente Boliviano (Sig lo XVÍ-XX). Editorial Oriente. Santa Cruz, 2002.
51 Hernando Sanabria Fernández. Ibíd.
52 Eduardo Cortez. Ibíd.
53 A l l y n MacLean Stearman. Ibíd.

Hoy, el sentido peyorativo de "camba" ha desaparecido y más bien, Dwight B.Heaht, antropólogo, con
publicaciones en Harvard y Yale, entiende por "camba" a un pueblo emergente. Según este autor, el
término no tiene un significado racial, porque sólo se requiere mirar la diversidad de gente y comprender
que las diferentes etnias han contribuido con su sangre para mezclarse con europeos, asiáticos, etc. "para
constituir una atrayente figura". Tampoco, se lo usa en el aspecto etimológico, como lo es una tribu. Por
tanto, finaliza diciendo este científico norteamericano que el camba no es una raza, porque ni es indígena
ni es andaluz o extremeño, más bien, es el resultado de un mestizaje acelerado, que aún se halla en
formación; al mismo tiempo, no es una entidad sociopolítica o una tribu. Forma parte de un pueblo que
comparte un sistema de relaciones interpersonales -que los antropólogos culturales denominan
54
estructura social-, y que componen un cuerpo más o menos uniforme de costumbres, que es su cultura.
De un modo similar, el modelo usado por Thierry Saignes (1990) para referirse a la relación entre
chiriguanos (ava) y los españoles, en ocasiones sus aliados (karai), "enfoca correctamente la historia
común que les tocó vivir a ambas etnias a lo largo de cuatro siglos lo que, a su vez, implica un
55
reconocimiento a la cultura mestiza hoy conocida como camba".

En la actualidad, cuando nos referimos a los que componen la Nación Camba, se incluye en ella, no
sólo al nacido en lo que los antiguos llamaron la provincia de Moxos y Chiquitos, que comprendía "a
todos los llanos extendidos desde el río Pilcomayo hasta el Amazonas por haber sido la primera
denominación dada al gobierno creado por el Virrey del Perú a instancias del Capitán don Ñuflo de
56
Chaves , sino también al que se identifica con la cultura y tradiciones de la región, además de participar
sin mezquindades en el esfuerzo de un mejor bienestar común, ofreciendo todo su apoyo a las
reivindicaciones del lugar. De ahí que ser camba "no es un asunto de raza", sino una forma de vida o de
actitud frente a la región.

El sentimiento "camba" representa los lazos de pertenencia no sólo a un territorio determinado, como
también a una entidad concebida como una realidad sociológica orgánica, en la cual la caracterización de
"camba" prevalece sobre cualquier corriente política, grupo social, de raíces o del mismo origen de
nacimiento (cruceño, beniano o pandino). Constituye un modo de comportamiento, de fidelidad, no sólo
de orden político o cultural, sino que abarca otros valores en los que la motivación autonómica entre
otros, no llega a ser sólo política ni estatal.

3. Región, autonomía y autodeterminación


57
Según algunos autores , uno de los términos más polémicos y del que cada uno hace una interpretación
personalizada, es el de región. Para los tratadistas decimonónicos, la región expresaba distintos matices,
según la ideología política de quien la suscribía. Así, para los defensores del centralismo, ella sólo tenía
unas vagas peculiaridades geográficas, y a lo sumo culturales, que no era conveniente destacar ni
desarrollar, pues podía peligrar la "unidad nacional". Para otros, a los que comúnmente se denomina
"regionalista", la región venía a ser igual o parecida a los Land germánicos, auténticos fragmentos de un
estado federal o multinacional, que poseían elementos de soberanía, pero carecían de un poder estatal
independiente, aunque sus derechos en buena parte quedaban a salvo mediante el reconocimiento de una
amplia autonomía política y administrativa. Algo parecido sucede en varios estados sudamericano; que
a pesar de estar bajo un sistema federal, no se trata de verdaderos estados federales, en el sentido estricto
del siglo XIX, sino más bien de regiones dotadas de autonomía política. Esta segunda concepción ha sido
minusvalorada en los estados unitarios, que la han tratado de reaccionaria.

54 Boletín de la Sociedad Geográfica N° 52. Editor Ángel Sandoval Ribera. Santa Cruz, 2000.
55 José Luis Roca. Ibíd.
56 José Chávez Suárez. Historia de Moxos 2 a Edición 1986. Editorial Don Bosco. La Paz, 1986.
57 Larumbe Biurrun. La región. Aspectos administrativos. Editorial Montecorvo. Madrid, 1973.

Entre nosotros, también lo regional ha sido un tema de debate y su importancia es tal que lo ha llevado
58
a José Luis Roca a afirmar que la historia de Bolivia es la historia de las luchas regionales. De otra
manera, si bien el término regionalismo ha sido vilipendiado y menoscabado de manera machacona por
los ideólogos del centralismo andino, hoy ha cambiado definitivamente de signo, pasando a ser una
técnica gubernamental virtualmente indiscutible. La política de desarrollo económico, que se ha
convertido en verdadero principio de legitimación de los sistemas políticos actuales, ha
demostrado de manera concluyente su ineficacia si no se articula precisamente corno política de
desarrollo regional y por tanto, no implica riesgo de ruptura, sino, más bien, una seguridad de
acendramiento y de cercanía frente a un modelo estatal concentrador, que ha ultimado su ciclo frente a
Nuevas realidades que vive el mundo. Ordenación del territorio y regionalismo son hoy dos realidades
59
indiscutibles.

La realidad geográfica, histórica y cultural de Bolivia ha definido al menos dos regiones: la andina
(altiplano y valle) y la llanura (llanos y chaco). Nadie puede discutir que desde la llegada de los
españoles, cada una de ellas vivió momentos diferentes y por tanto, su ideología y visión de país,
también fue distinta. Constituida la república, la organización territorial se configuró sobre el
modelo de los departamentos napoleónicos con una fuerte raigambre centralizadora, que al ser
manejado por un poder económico de orientación minera parásita del estado boliviano, las tierras bajas
no estuvieron en los planes de desarrollo hasta recién mediados del siglo pasado. Hoy, las cosas han
cambiado, porque Santa Cruz ya no es más el patio trasero de esta república, mientras que las
tendencias mundiales de la administración pública buscan diversos mecanismos de control sobre el uso
adecuado de los magros recursos del estado, todo ello a través de un gobierno legítimo y reconocido por
el voto soberano del pueblo. Para ejercer este sistema, el instrumento idóneo es la descentralización
política y administrativa.
58 José Luis Roca. Fisonomía del regionalismo boliviano.2' Edición. Plural Editores. La Paz, 1992.
59 Eduardo García de Enterría. "Aspectos Administrativos". La Región. Editorial Montecorvo. Madrid, 1973.

De tal modo, que lo regional ha vuelto a cobrar vigencia y si coincidimos que lo ideal es
administrar de cerca por medio de autoridades elegidas democráticamente y dotadas de facultades
normativas en campos no reñidos con las atribuciones del gobierno central, concluiremos que el
establecimiento de las autonomías regionales constituyen no sólo una bandera de reivindicación
cruceña, sino que además es una técnica administrativa adecuada para gobernar en un nuevo tipo de
estado que reconoce la pluriculturalidad y la multietnicidad de la actual Constitución. Esta propuesta
para los incautos o los de mente estrecha con raíces centralistas, podrá ser algo así como una
barrabasada, o un bando separatista. Nada más alejado de la verdad. Sólo pretende unificar más a la
república, y donde el status autonómico no puede ser impuesto por una mera decisión de nuestros
representantes. La autonomía regional, al ser un acto de libre determinación, debe surgir del
consentimiento de una comunidad departamental que la apruebe mediante un plebiscito, convocado por
el poder central, como puede tener su origen en la iniciativa popular.

De acuerdo a Manuel Ossorio, la autonomía se trata "simplemente de una descentralización


administrativa y política, que no debe confundirse con lo que en un Estado federal representan las
provincias o Estados miembros, que no son autónomos, sino independientes, salvo en las facultades
60
a que hubiesen renunciado para delegarlas en el Estado Federal.

Por otro lado, autodeterminación es la "capacidad que poblaciones suficientemente definidas


desde el punto de vista étnico o cultural tienen para disponer de sí mismas y el derecho que un pueblo
61
tiene en un estado de elegirse la forma de gobierno. El derecho de autodeterminación aparece en los
dos Pactos de Derechos Humanos aprobados en la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1966.
Estos Pactos son el de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el de Derechos Civiles y
Polític os, suscritos por la casi totalidad de los Estados del mundo. Ellos entraron en vigencia a partir de
1976. El artículo 1° de ambos Pactos es idéntico y dice así: "Todos los pueblos tienen el derecho de libre
determinación. En virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen
asimismo a su desarrollo económico, social y cultural". Al ser la autodeterminación un derecho de los
pueblos "no se puede separar ni jurídica, ni históricamente del ya conocido principio de las
nacionalidades cuyo influjo a todo lo largo del siglo XIX es notorio... Con las nuevas ideas que
predominaron en las Naciones Unidas, la autodeterminación vino a ser la consecuencia de una
62
transformación evolutiva del principio de las nacionalidades".

En este aspecto, en el informe de la Conferencia Internacional de Expertos celebrada en Barcelona en


noviembre de 1998 promovida por la UNESCO decidieron aplicar las siguientes características dadas por
Kirby para definir a un pueblo: 1) Tradición histórica; 2) Identidad racial o étnica; 3) Homogeneidad
cultural; 4)Unidad lingüística; 5) Afinidad (religiosa) o ideológica; 6) Conexión territorial y 7) Vida
económica común. En este encuentro también se afirmó que "el grupo como un todo debe tener la
voluntad de que le identifiquen como un pueblo o la conciencia de ser un pueblo". Por tanto, el análisis
histórico, sociológico, antropológico y económico del territorio que conforman actualmente los
departamentos de Pando, Beni y Santa Cruz lleva a considerarlos como un mismo pueblo y como lo
establece las Naciones Unidas, toda comunidad con estas características, tiene el derecho a la
autodeterminación.
62 José A. de Obieta Chalbaud. Ibíd.
60 Manuel Ossorio. Ibíd.
61 Carlos Baldi. En Norberto Bobbio y Nicola Metteucci. Diccionario de Política. Siglo XXI. Editores. México. 1986.

Según la propuesta de la "Nación Camba", los departamentos o las regiones (constituidas por lo menos
por dos departamentos previo mandato de un plebiscito) que se conformen, representarían "entidades
autónomas, en base a descentralizaciones administrativas, políticas y económicas de vigencia territorial".
"Los Estatutos de Autonomía serán la norma institucional básica (departamental o regional) y el
Estado los reconocerá...como parte integrante de su ordenamiento jurídico". Este cuerpo legal deberá
contener la estructura de dichas organizaciones autonómicas y "las competencias asumidas dentro del marco
establecido en la Constitución", así como las bases para el traspaso de las competencias
63
correspondientes al departamento o región, según haya sido su propia voluntad.

Cuando Bolivia y sus líderes naturales o elegidos democráticamente comprendan que este país es
multinacional por su diversidad cultural y sociológica, y permitan que cada lugareño se apropie de su
identidad y su destino, bajo la inspiración de su autonomía asentada en los principios de voluntariedad,
igualdad y solidaridad, recién se podrá contribuir a una conciencia colectiva de aliviar la desgracia
que vive la republica y el sentimiento derrotista que hoy acompaña a c a s i todos los bolivianos.

4. Colonialismo Interno y discriminación a Santa Cruz64

Según González Casanova, el colonialismo se presenta entre pueblos y naciones distintas, y guarda
relación con el dominio que ejerce un centro de poder sobre la periferia. Existen dos modelos: el clásico
o externo, que incluye las llamadas colonias típicas, dependientes del imperio y el coloniaje
interno, que se aplica a situaciones similares, pero cuyos habitantes se encuentran dentro de marcos
estatales formales. De acuerdo a este autor, las características de una colonia son: 1.Territorio sin
gobierno propio. (Las autoridades que ejercen el poder son nombradas por el Estado y muchas veces
vienen desde la misma sede de gobierno); 2. Situación de desigualdad frente a la metrópoli. (Existen
múltiples ejemplos que hacen referencia a la discriminación a los departamentos, de manera especial a
Santa Cruz. Ver cuadros 1 y 2; 3. La administración concierne al estado dominador (partido político
"nacional" dominante). (Es decir, las decisiones "estratégicas" en todas las áreas se hallan en manos de la
burocracia andino-centrista); 4. Sus habitantes no eligen a sus administradores. (Ni siquiera
los gobiernos municipales gozan de autonomía. Es una ficción de gobierno local propio); 5. Los
derechos de sus habitantes, su economía y sus privilegios sociales son regulados por el centro del poder.
(Para ello, nada mejor que analizar las normas jurídicas aprobadas que perjudican al Oriente
boliviano); 6. Esta situación no corresponde a lazos naturales, sino "artificiales", producto de una
conquista, acuerdo inconsulto, etc. (Desde la misma fundación de la República, se desconoció la
esencia autonómica que caracterizaba a las provincias o regiones que la conformaron); 7. Sus
habitantes pertenecen a una raza o cultura distinta de la dominante y tienen un lenguaje (e identidad)
propio. (Pese a ello, desde siempre se ha querido imponer recetas autoritarias para consagrar el
colonialismo interno andino-céntrico en la educación y la cultura).
63 Movimiento Autonomista "Nación Camba", "Santa Cru?. y e! nuevo pacto con el Estado boliviano". P e r i ó d i c o El Mundo.
S a n t a Cruz, 24 de j u l i o de 2001.
64 Sergio Antelo Gutiérrez. Los Crúcenos y su Derecho de Libre Determinación. En prensa. S a n t a Cruz. 2003.

Cuadro 1. APORTE DE SANTA CRUZ

1. Producto Interno Bruto : 32,0 % (LP: 27,5 %; CBB: 21,3 %)

2. Participación sectorial
Petróleo y gas : 42,1 %
Agropecuario : 41,7 %
Servicios financieros : 39,9 %

3. Actividad bancaria
Cartera : 40,0 %
Captación : 26,0 %

4. Generación de divisas : 62,0 %

5. Importaciones: 32,0 %

6. Inversión extranjera: 47,6 % (LP: 19,1 %)

7. Impuestos Internos : 32.9 % (LP: 32,7 %; CBB: 11 %)

8. Imp. Internos + IEDH: 4S.5 %

9. Consumo de cemento: 30.0 %

10. Consumo de energía: 35,0 %

11. Participación demográfica: 24,5% (LP: 28,4%)


75% nacieron en SC
Cuadro 2. DISCRIMINACIÓN A SANTA CRUZ

1. Recursos para el Sistema Universitario

LP: 33,21 % CBB: 19,90 % CH:10.73% Oruro: 8.71%


SC: 12,94 % Beni: 3.12% Pando: 0.19%
Altiplano: 46.03% Valles: 36.47% Llanos: 16.25%

2. N". de diputados para SC : 22 en lugar de 26 (Censo 1992)


: 32 (Censo 2001)

3. ítems de educación : SCZ: 22.000 (LP: 33.000)

4. ítems de salud : SCZ: 464 fondos propios (el mayor del país) (Sus 4 millones/año gasta por año
el Municipio de Santa Cruz de la Sierra)

5. N" de policías : SCZ: 2.853 (LP: 10.155)

6. Políticas financieras restrictivas a la región

7. Invasión del territorio cruceño ("colonización")

8. Por omisión ajuste ínter censal de coparticipación popular, la región perdió:


Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra : Bs. 147.145.800

Universidad Gabriel Rene Moreno : Bs. 49.286.462

IV . DOCUMENTOS
65
MEMORÁNDUM

1. Introducción

A partir del Memorándum de 1904, el pensamiento cruceño concentró las reivindicaciones regionales
en dos asuntos concretos: la integración con Bolivia mediante el ferrocarril y la apertura del mercado
andino, a los que posteriormente se sumarían las luchas por las regalías del petróleo, la restauración
de la democracia y la ley de descentralización administrativa. Décadas después, estos objetivos
serían parcialmente alcanzados. Hoy la realidad exige nuevos cambios.

A la vuelta del siglo XX, al Santa Cruz de hoy y del futuro, le deparan enormes desafíos en el campo
social, económico, político y ecológico, desafíos que la crisis endémica del Estado fundado en 1825,
no puede, ni podrá resolver.

Frente a los acelerados procesos de integración de América Latina y a las dinámicas,


globalizadoras que tienden a homogenizar el mundo, hoy más que nunca, se hace necesario
contar con un instrumento ideológico, que ratifique nuestra autoestima como colectividad
diferenciada y replantee públicamente nuestra identidad como pueblo-nación.
2. Nuestros objetivos estratégicos en el siglo 21

Por este motivo, el 21 de noviembre del año 2000 nace el Movimiento Autonomista "Nación
Camba", como una expresión democrática de nuestra sociedad, porque entiende que nuestra región-
nación debe buscar y encontrar su propio destino. Este memorándum plantea lo siguiente:
Democracia

La reinstalación de la democracia en Bolivia era una posibilidad real para que el pueblo, ejerciendo el
derecho al voto, pueda transformar el Estado. Sin embargo, la práctica ha demostrado clara y objetivamente,
que esta democracia mutilada, sólo ha servido -salvando honrosas excepciones- para consolidar el
Estado-negocio, prebenda!, centralista y ajeno.

La última reforma constitucional, no ha sido suficiente y constituye un vergonzoso retroceso que


ha reforzado la dependencia interna y externa, el burocratismo, y el colonialismo de Estado. El
modelo político, económico e institucional impuesto al país, ha agigantado los desequilibrios
regionales, la desigualdad, la corrupción y la marginalidad social.
El monopolio de la representación pública de los partidos políticos nacionales anuló las
iniciativas y los liderazgos regionales y ha generado la lógica del adulo y el centralismo, entre
otras cosas. Urge entonces radicalizar la democracia para transformar la naturaleza de un Estado
ferozmente unitario, dependiente y servil, para construir el Estado de las autonomía s departamentales y
nacionales, perfeccionar la institucionalidad estatal y democratizar el poder en sus instancias
nacionales, departamentales y municipales.

65 "Memorándum". Periódico El Deber. Santa Cruz, 14 de febrero de 2001.

Autodeterminación

Apoyados en el derecho a la libre autodeterminación nacional, basados en las características históricas


cuasi-autonómicas de los Departamentos de Bolivia, en la búsqueda de administrar los intereses
colectivos de manera ágil, moderna y fiscalizada, y en la posibilidad de realizar reformas
constitucionales conducentes a materializar estos logros, proclamamos la necesidad de convertir a Santa
Cruz, en una REGIÓN AUTÓNOMA, dotada de gobierno propio y amparada por un estatuto especial
de autonomía regional que sea la expresión del PODER CRUCEÑO, como reconocimiento formal y
legal de nuestra NACIÓN-ESTADO.

Igualmente, retomando el espíritu del artículo 1° y 171 de la Constitución Política del Estado,
reconocemos el derecho constitucional que tienen todos los pueblos y culturas de Bolivia, con énfasis en
los pueblos indígenas del Chaco, Amazonia y los Andes, de plasmar su propia identidad, definir su estilo
de desarrollo y de darse organizaciones conforme a sus usos y costumbres.

Identidad

La identidad nacional de los crúcenos y en general, la de los pueblos Chaco-Amazónicos, proviene del
lugar que ocupa nuestra geografía y nuestra cultura en el concierto de los pueblos de América Latina y
el mundo.

Nuestra identidad que es la base de nuestro desarrollo y es el resultado de nuestra historia común, del
lenguaje y del legado de nuestros héroes y ancestros, define la personalidad de esta nación cultural, que
declara su derecho a la diferencia, pero ratifica su vocación integracionista, su democracia étnica y el
pluralismo cultural como parte de su esencia nacional.

Frente a la sistemática negación de nuestra identidad cultural de parte del colonialismo de Estado,
algunos medios de comunicación, la presencia de otras culturas o del proceso globalizador, ratificamos,
que la identidad nacional camba y el nacionalismo cruceño deben ser parte de nuestra esencia, el
impulsor del desarrollo económico y social y el factor cohesionador de nuestra voluntad de ser libres.
Recursos naturales, territorio y poder

Los recursos naturales crúcenos son propiedad inalienable de la nación Camba, Este derecho natural e
histórico se remite al hecho de que nuestra provincia fue anterior a la creación del Estado-Nación
Boliviano y se refuerza por el «Uti Possidetis Juris», reconocido desde el mismo hec ho fundacional en
1561 pero desconocido por la república oligárquica creada en 1825.

Entendemos a nuestro extenso territorio como la patria común de todos los cambas-cruceños; es
indivisible y se extiende hasta donde llega nuestra cultura. Constituye la base material de nuestro
PODER NACIONAL; su explotación debe ser racional, compartida y tecnológicamente
sustentable.

Como no somos colonia de nadie, rechazamos enfáticamente cualquier política que a título de
«colonización» depredadora involucre inconsultos asentamientos humanos, sean estos de bolivianos
o extranjeros, y/o que conspiren en contra de los equilibrios geopolíticos internos y externos.

Nuestras reservas forestales y las áreas protegidas, son intocables.

Integración

En el entendido que las comun idades aisladas no son viables, el proyecto cruceño del siglo 21 se debe asentar
sobre un agresivo intento de integración continental. Hasta el presente, el mercado boliviano cumplió su rol
como receptor de una pequeña parte de nuestra producción, sin embargo, éste tiende a agotarse por sus propias
limitaciones estructurales.

El desarrollo cruceño del siglo que nace, debe basarse en los mercados ampliados que se comienzan a perfilar por
la vía de los pactos de integración sub-regional de América del Sur.

Nuestra viabilidad nacional reside obligatoriamente en nuestra integración física al espacio continental y el
mundo. Debemos lograr ventajas comparativas de nuestra envidiable ubicación geográfica, jugando un rol
fundamental como nudo geopolítico del continente sudamericano con vistas al mercado común que se
consolidará al año 2.005 como efecto de los acuerdos del ALCA y MERCOSUR suscritos por Bolivia.

Un nuevo pacto con el estado boliviano

Las condiciones objetivas que transmite nuestra realidad actual se han modificado, el Santa Cruz del tercer milenio no
es el Santa Cruz de comienzos del siglo 20. Somos propietarios de más de un tercio del país y sumamos casi
dos millones de habitantes, tenemos un producto interno bruto (PIB) que alcanza a un tercio del total
nacional y poseemos el índice de desarrollo humano (IDH) más alto de Bolivia, sin embargo, no nos
sentimos ni satisfechos, ni realizados.

Así como en 1825 nos anexaron a Bolivia por nuestra debilidad institucional, demográfica y económica,
hoy estamos en condiciones de exigir no solamente un trato igualitario, de igual a igual, con el poder
Estatal, sino de imponer un modelo de gestión política y económica que se ajuste a nuestra propia
idiosincrasia y nuestra visión de futuro. El modelo autonómico constituye la base mínima de
negociación de un nuevo Pacto con el Estado boliviano.

Profundizar la democracia, acceder a la autodeterminación nacional, ratificar nuestra identidad,


defender y proteger nuestros recursos naturales, la integración continental y formular un nuevo pacto con
el Estado boliviano, deben ser los paradigmas sobre los cuales se debe asentar el nuevo nacionalismo
cruceño.
IV. SANTA CRUZ Y EL NUEVO PACTO CON EL ESTADO BOLIVIANO66
La N a c i ó n Camba, (del Guaraní, Cambá: amigo) es, posiblemente, la única sociedad universal que
Bolivia tiene. Y esto no es casual. Un largo proceso de acumulación histórica ha hecho que nuestra
sociedad se encaje mejor a los tiempos de cambio que barren el planeta. Somos los constructores de
una identidad propia, pero también profundamente latinoamericana, y libertaria.

66 Movimiento Autonomista "Nación Camba". IbíJ.

Sin embargo, esta sociedad necesita encontrar, y marcar/un nuevo camino que le permita integrarse
en igualdad de condiciones, a nuestros congéneres de América Latina y el mundo.

Algunos podrán pensar que nos queremos divorciar de los más pobres, como si fuéramos los más ricos,
pero no podemos omitir que casi un millón de miserables acosan nuestras periferias urbanas
intentando encontrar su espacio en un mercado laboral que cada día se vuelve más exiguo no tanto
por el modelo económico que nos impusieron los imperios, sino por nuestra propia incapacidad
estatal para generar labores productivas que exilien la informalidad y el desempleo crónico.

No podemos pagar el alto precio que nos ha impuesto un Estado autoritario que, fundado en 1.825, es el
responsable directo de que millares de bolivianos emigren en masa hacia los cinturones de miseria que
estrangulan las falsas prosperidades de las ciudades del eje central, y del extranjero.

El Memorándum del 14 de Febrero emitido por el Movimiento NACIÓN CAMBA, busca claramente
proponer y consolidar un proyecto de autonomía regional que ratifique y reconozca nuestra
condición de PUEBLO-NACION, portador de una clara e irrenunciable vocación autonomista ya que
esta es un camino alternativo para profundizar la democracia y para incorporarnos, competitivamente,
en el marco de nuestra autodeterminación nacional, al mundo de hoy, pero también para responder al
colapso de un país que hasta hoy no encuentra el eje de su propio destino. En ese sentido se orientan estas
propuestas que tienden a lograr un nuevo pacto de la Nación Camba, con el Estado boliviano.

PRIMERA PROPUESTA
El Estado Multinacional Boliviano

Bolivia, debe ser constituida en república multinacional, para ser concordante con su esencia
pluricultural y multiétnica, y adoptar como su forma de administración y gobierno, el régimen de las
autonomías Municipales, Departamentales, Regionales y/o Nacionales, y cuyas competencias serán
establecidas por ley. Esta debe fundarse en la democracia, la soberanía popular y la
autodeterminación.

Siendo la autonomía un acto de libre determinación, para acceder a ella se requiere de un plebiscito que
la confirme. Este podrá ser convocado por el Estado, así como puede tener su origen en la iniciativa
popular.

SEGUNDA PROPUESTA
El pueblo y la soberanía popular

La soberanía debe residir en el pueblo, es inalienable e imprescriptible. Se la ejerce mediante la


elección de sus representantes ante los poderes del Estado, pero, además, del referéndum, el plebiscito y la
iniciativa popular que deben tener carácter de inapelable y ser de cumplimiento obligatorio por
parte del Estado y la sociedad.
La iniciativa para convocar a un referéndum o un plebiscito, puede provenir de cualquiera de los
órganos estatales establecidos por ley, o de la propia sociedad o de una parte de ella, a través de la iniciativa
popular. Esta puede tener ámbito republicano o general, Departamental o Municipal.

En el marco de la democracia, el pueblo debe tener amplias facultades deliberativas, pudiendo sus
acuerdos, resoluciones o demandas, ser elevadas, públicamente, a las instancias correspondientes.

No tienen carácter de cumplimiento obligatorio.

Los cargos elegibles que constituyen los poderes de la República en todos sus niveles, son revocables, mediante
formas y procedimientos que establezca la ley. La elección de los mismos se la hará nominalmente.

TERCERA PROPUESTA
División política y administrativa de la República

El territorio de la República se divide en: Naciones, Naciones Indígenas, Regiones, Departamentos,


Provincias y Mancomunidades, siendo que:

LAS NACIONES son una determinada comunidad humana que expresa y se reconoce a sí misma como
poseedora de rasgos peculiares y/o características etno-culturales propias que la diferencian de otras, y
que por la vía del referéndum, el plebiscito o la iniciativa popular, se autodetermina y el Estado la
reconoce como tal.

Una Nación puede coincidir con uno o más Departamentos o con parte de ellos. En el c a s o de
departamentos o regiones multinacionales, prevalecerá el concepto de la mayoría relativa para efectos
de su eventual denominación.

LAS NACIONES INDÍGENAS serán reconocidas como tales cuando dispongan de una población
mayoritariamente indígena y pidan su reconocimiento por parte del Estado. Ejercerán su jurisdicción en
los territorios de origen establecidos por ley de la república.

LAS REGIONES se constituyen cuando mas de un Departamento autónomo, y, para el logro de sus
fines comunes, deciden conformar una unidad más amplia que se denominará región autónoma.
Una región autónoma se constituye mediante referéndum, plebiscito o iniciativa popular.

El Estado promoverá la conformación de regiones autónomas, a los efectos de una mejor distribución
de las rentas departamentales y promover la unidad nacional y/o republicana.

LOS DEPARTAMENTOS corresponderán a la actual división política-administrativa de la República,


que podrá o no coincidir con una nación. Los Departamentos suri indivisibles.

LAS PROVINCIAS, SECCIONES de provincia y CANTONES, conforman la actual


división política-administrativa de los Departamentos. S o n la base t e r r i t o r i a l y
demográfica para la constitución de los poderes departamentales.

La creación o la fusión de Provincias, Secciones Municipales o Cantones, se la efectuará en consulta a


las poblaciones involucradas.

LAS MANCOMUNIDADES Municipales serán conformadas cuando una o más Provincias o secciones
Municipales, en uno o más Departamentos y por decisión de sus respectivos Concejos, deciden
conformar una sola unidad geográfica para el cumplimiento de sus programas comunes.
CUARTA PROPUESTA
Régimen interior

En cada Departamento, o la nación que le corresponda, el PODER EJECUTIVO debe ser ejercido
por un GOBERNADOR, y el PODER LEGISLATIVO por una ASAMBLEA DE DIPUTADOS
(Departamentales).

En cada provincia habrá un SUBGOBERNADOR y un CONSEJO PROVINCIAL, y en cada


Cantón un CORREGIDOR y un CONSEJO CANTONAL. Las competencias de estos poderes, serán
establecidas por ley.

La elección del poder Ejecutivo y Legislativo a nivel Departamental, Provincial y cantonal,


será democrática, nominal y directa. No podrá hacerse simultáneamente a la elección de los poderes de
la República.

El Gobierno de un Departamento autónomo, gozará de soberanía y se desenvolverá de acuerdo a un


estatuto de autonomía política-administrativa y territorial.

Las NACIONES INDÍGENAS gozarán de capacidad de autogestión compartida con los


departamentos a los que pertenecen, de conformidad a sus tradiciones, usos y costumbres,
respetando la actual división política-administrativa de la República.

Se crearán Municipios indígenas, allí donde la mayoría absoluta de la población de un territorio


determinado, reúna este requisito.

QUINTA PROPUESTA
Recursos naturales

Serán de dominio originario del Departamento, la región o la nación que le corresponda, todos los
recursos naturales que contenga el suelo y el subsuelo. Toda concesión de los mismos a empresas
nacionales o extranjeras, deberá ser aprobado, previamente, por las instancias Legislativas y
Ejecutivas a nivel Departamental o regional.

En caso de concesiones hidrocarburíferas o mineralógicas, los departamentos propietarios, recibirán,


en compensación por su explotación, el 50% de las rentas que reciba el Estado central.

En ningún caso, la participación Departamental, podrá ser inferior al porcentaje de regalías ya


reconocidas por ley.
SEXTA PROPUESTA
Política económica del Estado

El Estado, en el marco de sus responsabilidades sociales, promoverá y protegerá la producción y a


los productores.

SÉPTIMA PROPUESTA
Rentas y presupuesto

Además de los impuestos reconocidos por ley y destinados a los Departamentos y Municipios, de las
recaudaciones obtenidas en los respectivos Departamentos, el 70% debe corresponder a la fuente
recaudadora y el 30% al gobierno central. Su distribución se hará por habitantes y territorio.
OCTAVA PROPUESTA
Tierra y territorio

El Gobierno del Departamento, por la vía de su Poder Legislativo, evaluará, aprobará o rechazará,
todo los planes de colonización que por iniciativa del Gobierno central, Gobiernos extranjeros,
asociaciones o entidades públicas o privadas, nacionales o extranjeras, presenten a su consideración.

Ningún proyecto de colonización ni de distribución de tierras fiscales se hará sin el cumplimiento de


este requisito.

Los parques Nacionales, Departamentales y/o Municipales, son territorios inviolables y se destinarán al
cumplimiento de los fines para los que fueron creados.

NOVENA PROPUESTA
Régimen cultural

El Gobierno Departamental, en sus instancias Ejecutiva y Legislativa, evaluará el (o los)


contenidos de la enseñanza básica, media, intermedia y superior, conforme a las características y
demandas culturales de la Región o del Departamento, pudiendo dictar normas sobre la materia.

DECIMA PROPUESTA
Régimen Municipal

El Alcalde y los Concejales deben ser elegidos nominalmente en forma separada y por votación
directa, de listas que presenten los partidos políticos, organizaciones de la sociedad civil, o por
iniciativa propia y conforme a normas aprobadas por sus propios Concejos Municipales.

Será elegido Alcalde de una ciudad, el que obtenga la mayoría simple del voto ciudadano.

El ejercicio de la autonomía Municipal, no tendrá otra limitación que las competencias que le fije la ley.
El Gobierno Municipal goza de soberanía para definir su propia política tributaria, sin otra aprobación que
la de su Concejo respectivo.

DECIMA PRIMERA PROPUESTA


Seguridad ciudadana

La Policía Nacional o republicana, dependerá del Presidente de la República.

La seguridad ciudadana, estará a cargo de la Policía Departamental. Dependerá directamente


del Gobernador del Departamento y sus autoridades son nombradas por éste. Las competencias
de ambas policías serán fijadas por ley, en función de su ámbito de acción.

Para ser miembro de la Policía Departamental en todos sus grados y jerarquías, se requiere, como
mínimo, el haber obtenido el título de bachiller, además, el haber nacido en el Departamento donde se
ejerce el cargo, o tener como mínimo 10 años de residencia en el mismo.

Su estructura orgánica, el número de efectivos y su presupuesto, será fijado por el Gobierno


Departamental.
DECIMA SEGUNDA PROPUESTA
Los partidos políticos

Los partidos políticos, en función de la jurisdicción territorial que ejercen, se clasificarán en tres
niveles, a saber:

REPUBLICANOS, de ámbito general. Ejercerán su jurisdicción en todo el territorio de la


república.

DEPARTAMENTALES, de ámbito departamental. Ejercerán su jurisdicción en todas las


provincias de un Departamento.

MUNICIPALES, de ámbito provincial. Ejercerán su jurisdicción en una o más provincias.

Los partidos políticos de ámbito republicano se registrarán o harán conocer su personería jurídica, por
la Corte Nacional Electoral. Los partidos políticos de carácter departamental y/o municipal, lo harán por
la Corte Departamental Electoral.

La Corte Nacional y las departamentales, habilitarán a candidatos sin partido, previo


cumplimiento de los requisitos establecidos por ley.

Las 12 propuestas que se exponen, constituyen la plataforma que el MOVIMIENTO


AUTONOMISTA NACIÓN CAMBA considera más destacables para abrir el debate en torno a la
reforma del Estado, ya que estos postulados constituyen la piedra angular que servirá de base para
impulsar y construir nuestro innegociable proyecto de AUTONOMÍA REGIONAL, como la expresión
del poder cruceño.
6.4 Tarija: por qué y para qué se lucha por autonomía, Roberto Ruiz

LA MEDIA LUNA: LA EMERGENCIA DEL SUR


Dr. Roberto Ruiz

Bueno, hay buen ambiente para iniciar la exposición, en realidad no es muy feliz digamos
el nombre de la exposición a media luna y los pueblos del sur, hubiera querido aprovechar
más tiempo para hacer referencia al modelo de Estado y al diseño de autonomía
departamental que queremos, pero vamos a tratar de conciliar ambos aspectos.
Bueno, hemos estado viendo, escuchando a lo largo del día cómo los expositores intentaban
mirar el pasado, mirar la historia de nuestro país y encontrar alg ún tipo de patrón que nos
permita vislumbrar un poco lo que puede ocurrir en estas condiciones particulares en que
vive el país y de cara a esta refundación, que todo el mundo habla, hay muchas perspectivas
posibles para ello y una de ellas es la que voy a exponer ahora, no es la única ni pretende
ser digamos la explicación, sino componente de una explicación mayor.
Bolivia de alguna manera desde que nace a la vida republicana se ha desarrollado alrededor
de ejes, uno político y uno económico. Cuando se constituye la República, todavía vigente
el eje Potosí-Sucre, Potosí centro minero, Sucre capital política. En la medida en que este la
economía de la plata, digámoslo así se empieza a deteriorarse, se empieza a agotar el ciclo
de la plata y empieza a emerger una nueva actividad económica muy importante, centrada
en Oruro, alrededor del estaño y en la medida en que La Paz empieza a constituirse en un
centro importante de decisiones políticas, comienza un período de tensión y de disputa, de
eso que hablaba Álvaro esta mañana, de la geología o la territorialidad del poder, y esa
disputa a su vez termina o se define digámoslo así en la Guerra Federal en 1898-1990,
también en ese momento y es importante rescatar ese patrón, las comunidades indígenas
estaban en apronte y no va para menos porque estaban siendo víctimas de esas famosas
Leyes de ex vinculación con la cual ya desde el dictador Melgarejo, se procedía a
expropiarles abusivamente las tierras comunitarias; no es casual entonces que el Zárate
Willka respalde a los federales y son los federales los que con su ayuda derrotan al Sur,
Zárate Willka entra montado a caballo a lado de Montes, de Pando perdón, cuando se toma
Oruro, qué ocurre entonces?, una vez que se define esta con una verdadera confrontación
que ha sido muy dura en términos militares inclusive en el país, muy sangrienta.
Lo que ocurre es que los nuevos dueños del Poder, traicionan la causa federal muy
rápidamente, pero no solamente traicionan la causa federal, sino también sepultan la
demanda de autonomía del pueblo aymara, traicionan al Estado Mayor del Zárate Willka, lo
encarcelan, asesinan a sus principales miembros, desde entonces se instala el modelo
francés napoleónico de los Prefectos, un modelo que como les hemos dicho tantas veces no
requiere de un Presidente democrático sino de un Emperador. Este modelo está vigente
hasta hoy y no ha generado ninguna solución para el país.
Esta crisis de alguna manera se reproduce en el año 1952. Nuevamente ese modelo que
había intentado municipalizar ampliamente el país, que no había dado respuestas a los
principales problemas de la sociedad boliviana entra en crisis y se da la Revolución del ’52,
y también son los nietos del Zárate Willka ya no campesinos hay mineros, en ese entonces
mineros, los que contribuyen a la derrota militar de la rosca e intentan implementar un
nuevo Estado, es poco lo que cambian, eliminan todo lo que da los avances municipales, es
una estructura mucho más centralizadora, la idea es hacer un crisol que funda la
bolivianidad, la idea era construir a la nación desde el Estado.
En los países de Europa de alguna manera el desarrollo de lo nacional ha tenido un remate
estatal, no así en Bolivia, en Bolivia se ha intentado construir la nación desde el Estado,
hacer desaparecer al indio que solo existan campesinos.
50 años después, ese modelo también entró en crisis, también tenemos la situación muy
complicada hoy de emergencia inocultable de las naciones originarias, de los aymaras, los
quechuas, las demandas de autonomía más fuertes, te ngan cuidado, no vienen de Tarija,
estoy seguro que vienen de la nación aymara, vienen con mucha fuerza, hay todo una
cultura en la potencialidad de estructura nacionalitaria digamos en estas comunidades que
hay que tomar muy en cuenta y hay que respetar en el nuevo diseño estatal.
El eje Oruro-La Paz, Oruro centro minero, La Paz centro demográfico político decíamos
entra en crisis el ’52 y comienza con el Plan Bohan y con toda la estrategia que decían de
apertura hacia el oriente, comienza la estructuració n de un nuevo eje de desarrollo, el eje La
Paz, Cochabamba, Santa Cruz, más del 80% de la actividad económica del país hoy tiene
lugar en esas tres ciudades y todos los otros departamentos del sur y del norte, son los
marginados en la vida política-económica del país, en la realidad actual, eso está
empezando también a cambiar rápidamente en los últimos 10 años.
Ese eje La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, tiene un pequeño impulso digamos así por la
época de los ’80, habíamos descubierto la veta de la plata que dinamizó el primer eje; la
veta del estaño el segundo y de repente la venta blanca, ¿no es cierto?, cuyo centro
principal de producción estaba en el corazón mismo en el eje del Chapare, esa veta blanca
también ha generado enormes cantidades de recursos que después se han blanqueado, se
han blanqueado y han pasado a contribuir al desarrollo industrial, hoy ya absolutamente
normal, de los ambos polos del eje, tanto de La Paz como en Santa Cruz, eso es la cocaína y
eso sigue siendo un gran factor distorsionador de la vida del país.
Pero qué ocurre a partir de los últimos 10 ó 15 años, el occidente de Bolivia empieza a
pagar una factura histórica, la factura histórica que la paga los pueblos originarios,
básicamente la nación aymara y la nación quechua por 500 años de exclusión, y por
traiciones sistemáticas y permanentes a todas sus demandas tanto de autonomía como de
crecimiento social y de desarrollo político, y se encuentra trabado, se encuentra convulso,
sin capacidad de articular mínimos consensos que permita enfrentar obras importantes de
desarrollo, el Mallku del altiplano, el Evo Morales en el valle, pues tienen cercado a lo que
quedó de esa vieja Bolivia, esa vieja Bolivia oficial que alguna vez lúcidamente René
Zabaleta llamó como esa Bolivia que quedó intramuros, cercada por el malón de la indiada,
el malón es una realidad que los tiene a ustedes aterrorizados, no hay persona en La Paz o
en El Alto, no hay institución que no tema un nuevo octubre, un nuevo febrero y esos
eventos trágicos sangrientos, pues son un aviso y hay que tomar muy en serio.
Decíamos que esto ha empezado a cambiar. Este occidente con todos estos problemas, con
esta factura histórica no cancelada todavía, con problemas no resueltos está en declive
permanente, está perdiendo empresas, está perdiendo gente, los índices de crecimiento
demográfico inclusive son negativos en mucho de estos departamentos, mientras que el
oriente tal cual lo señalaban esta mañana está teniendo un desarrollo económico, político y
social muy importante, y el sur que no estaba acompañando de la misma proporción de
desarrollo, aunque si lo estaba haciendo al margen del gas, Tarija de manera importante
porque quiero decirles que el negocio del gas en Tarija está por venir recién, y así en esas
condiciones que tenemos la mitad de las regalías que recibe Cochabamba, tenemos el
segundo índice de desarrollo humano del país.
Hemos estado acompañando pero no con la dinámica cruceña este nuevo eje, ahora aparece
una nueva veta que es el gas que está en el sur y tenemos al oriente, en Santa Cruz, un
centro demográfico muy importante, un centro económico, el más grande del país y que
está empezando a reclamar también el liderazgo de los temas nacionales, es un nuevo eje
Beni-Pando-Santa Cruz-Chuquisaca-Tarija, incluso Potosí.
En la última nueva economía, último número de esta revista importante “Nueva
Economía”, aparece una descripción de las posibilidades, las potencialidades de la minería
y se habla de que al superar la plata los 5, 6 dólares, pues el Proyecto San Cristóbal está de
nuevo en carrera.
Si se hace el Proyecto San Cristóbal, como decía Don Doria Medina esta mañana, podemos
hablar de cientos de millones de dólares de inversión, de que un camión cargado va a salir
cada 20 minutos rumbo a Chile para exportar los minerales de Potosí, y de que se van a
exportar entre 1.300 y 2.000 toneladas diarias en productos mineros, ya no va a poder el
Occidente bloquear esa exportación de minerales como se bloqueó abusivamente la salida
del gas, no lo va a poder hacer.
El sur de Bolivia está teniendo condiciones especiales. Yo comparto con Doria Medina de
que tenemos que pensar entre todos, cuál va a ser el polo, cuál va a ser el eje dinamizador
de lo que va a unir a occidente, porque a nadie le gusta la media luna, nosotros quisiéramos
una luna llena de esperanza y desarrollo para todo el país, solamente estoy describiendo una
realidad y es un desafío para todos nosotros el construir esa luna llena.
Esta media luna de la que hablamos, tiene también un correlato demográfico, si ustedes
consultan, los resultados del último censo van a ver que cuando se le pregunta a la gente, de
qué cultura usted cree que es, a qué cultura se adscribe, que se siente ser, no se lo clasifica
abusivamente, se le pregunta, qué es lo que responde la gente en Pando, el 80%, el 82% en
Pando dice ser de la cultura mestiza castellano parlamente, ni aymara ni quechua, ni mojeña
ni guaraní, es una cultura mestiza, esa cultura mestiza es el 76% en Beni, el 72% es en
Santa Cruz y más del 80% en Tarija, hay un correlato demográfico a toda esta realidad
socio económica por supuesto que si.
Cuál es la realidad de La Paz, La Paz la mayoría es aymara, pero la siguiente minoría es la
k’ara, la mestiza y eso ocurre en La Paz y en Oruro.
En Chuquisaca, Cochabamba y Potosí es la mayoría quechua, pero estos elementos a mi me
causa realmente malestar comentarlos, porque yo no quisiera hablar en términos de
demografía, de razas, de culturas, quisiera hablar en términos de una organización del
aparato del Estado más eficiente, que permita enfrentar la complejidad de los desafíos que
tiene el desarrollo social en el nivel local, trasladando a los actores locales, competencias
que hoy no la tienen que están concentradas en La Paz y que hipertrofian al estado que
funciona hoy en esta ciudad, y ahí viene ya la propuesta autonómica de Tarija.
Muchas veces se ha dicho de manera muy mal intencionada de que la propuesta de Tarija es
separatista y que lo que quiere Tarija es irse de Bolivia, llevarse el gas, como esos chicos
que se ponen la pelota debajo del brazo, ¿no es cierto?, ya no deja jugar a nadie más el
partido, nada más alejado de la realidad.
Tarija, yo quisiera que alguno de ustedes pueda citar algún documentos que diga lo
contrario, nunca ha planteado apoderarse de la renta petrolera más allá de lo que establece
la Ley que es el 11% de las regalías, lo que hemos planteado es que ese 11% podamos
administrarlo con criterio propios ya no sujetos a la voluntad de funcionarios indolentes que
a 1.000 kilómetros de distancia ni conocen el problema ni les interesa resolverlo.
Entonces el planteamiento de autonomía implica introducir un nivel articulador entre lo
nacional y lo municipal es el nivel intermedio, es el nivel meso, ese es el nivel
departamental que además tiene una historia.
La constitución de gobiernos departamentales autonómicos, tiene ese objetivo, el proceso
de autonomía que planteamos es un proceso gradual y asimétrico, qué implica esto?, que
puede haber departamentos y eso no es un invento nuestro, eso es algo que ha ocurrido
también en España.
Existen departamentos que necesitan que sean transferidas competencias importantes
normativas y legislativas en temas que no sean privativos del Estado nacional, nosotros
demandamos varias de esas competencias para desarrollar políticas que hoy no podemos
enfrentar.
Está aquí nuestro Prefecto del departamento de Tarija, estamos hace 4 meses queriendo
implementar un proyecto de alfabetización masiva en Tarija, analfabetismo cero, ha sido la
consigna aprobada por todas las instituciones tarijeñas, Federación de Campesinos con más
de 530 comunidades, Centrales Obreras, Maestros Urbanos, Rurales, Municipios, etc.
El Consejo Departamental ha sesionado y ha aprobado que se asignen recursos para este
Proyecto en base a un convenio marco que citaremos con el Gobierno cubano, un modelo
muy exitoso de alfabetización masiva, no lo podemos ni empezar, 4 meses, porque hay un
funcionario acá que no le parece el Proyecto, tiene otras prioridades, no tiene que poner un
centavo para el Proyecto pero no transfiere esas competencias para que podamos
empezarlo, ese es un ejemplo del tipo de competencias que quisiéramos tener en la región y
que hoy no las tenemos.
Hace unos años atrás, eso por suerte ya lo hemos corregido, este extremo llegaba que
cuando ustedes querían sacar una licencia de conducir en Tarija, tenían que esperar una
delegación de La Paz que vaya a tomar el examen, y lo hacía dos veces al año, es una tutela
odiosa que trataba obviamente como retardados, no solo a los tarijeños, sino a los pandinos,
a los benianos, etc.
Estos son los absurdos que hay que corregir en un nuevo diseño estatal que sea
ampliamente democrático. La idea es cerrar esa brecha entre el desarrollo de la democracia
social en Bolivia, que demanda cada vez más participación ciudadana, más capacidad de
toma de decisiones a nivel local no es cierto?, y una forma estatal franco napoleónica que,
lo hemos dicho ya, es absolutamente anacrónica, eso es lo que hay que corregir y hay que
rehacer desde los departamentos del Estado nacional en un marco de una gran unidad, eso
es absolutamente posible, no tiene que asustar a nadie, estamos planteando un diseño
institucional que sea propio de cada departamento y con esto voy a terminar.
El diseño institucional que proponemos en Tarija es altamente democrático y tal vez no sea
aplicable en La Paz, y les voy a explicar por qué, en La Paz el 65% de la población vive
entre la ciudad de La Paz y entre la ciudad de El Alto, la siguiente provincia más grande
vean las estadísticas del INE, tiene el 4% de la población de su departamento, qué
capacidad negociadora tiene esa provincia frente a esta mancha urbana tan grande, ninguna.
El diseño institucional de la Prefectura responde a este realidad demográfica y no atiende a
las provincias, generando un gran malestar en ellas, este diseño lo hemos transferido a
Tarija de manera absolutamente irreflexiva y hemos generado un centralismo que causa el
mismo malestar en las provincias, por qué creen ustedes que hay la demanda del décimo
departamento y otras cosas, porque hay un malestar legítimo en las provincias.
Cuál es la realidad demográfica de Tarija. El 39% de la población vive en la provincia
Cercado, el 29% en la provincia Gran Chaco, el 14% en la provincia Arce, etc. Hay una
distribución espacial absolutamente distinta a la población.
Qué planteamos nosotros, un rediseño institucional. La Prefectura no sólo debe construir
institucionalidad democrática y de gestión pública en cada una de esas importantes
ciudades, sino de sesionar y en esto rescato las palabra de Don Germán Choquehuanca, el
gobierno departamental debe ser rotativo, en Tarija debemos estar dos años trabajando con
los problemas de Villamontes, mirando al departamento desde Villamontes y mirando
también al país desde Villamontes, eso nos va a ayudar a construir, decíamos no solo
institucionalidad democrática, sino infraestructura de banca e infraestructura de
telecomunicaciones, aeroportuaria, de carreteras, etc., y vamos a crecer todas las provincias
de Tarija de manera equilibrada, equitativa y entre hermanos vamos a construir un lindo
departamento, esa es la propuesta, una propuesta altamente democrática.
Cómo planteamos entonces este eje articulador del gobierno intermedio, del gobierno
departamental, como un eje articulador decíamos de lo nacional, con lo municipal. En este
momento en la última Constitución aprobada en el país, han desaparecido los gobiernos
departamentales y el Poder Ejecutivo, escuchen bien, porque la Ley de Descentralización
no es tal, la Ley de Descentralización es la Ley tramposa, es un régimen prefectural
desconcentrado que establece que el Poder Ejecutivo Departamental es el Prefecto, es la
persona del Prefecto y la Constitución que menciona al Prefecto, no menciona en ninguna
parte la Prefectura, es decir la institución no existe, existe la persona, el Prefecto que es
designado por el dedo poderoso del Presidente.
En Tarija ya hemos empezado a cambiar eso, en Tarija le hemos dicho al Presidente Carlos
Mesa suficiente de esta lista de personalidades consideradas idóneas, debe usted escoger al
Prefecto y por suerte para nosotros ha hecho una excelente elección con el Ing. Juan Carlos
Navajas, pero al Ing. Navajas también le hemos planteado que la estructura del Gobierno
Departamental debe armarla en base a consensos con las comunidades campesinas, y el está
aquí presente, les puede contar cómo se consulta a la comunidad campesina también una
lista para de ahí tener los nombres de los corregidores, los compañeros más idóneos, más
trabajadores, más honestos que pueden desempeñarse como tales.
Estamos construyendo así de abajo hacia arriba el gobierno departamental. Cuál es nuestra
posición en relación a la cuestión nacional, yo creo que cada departamento debe enfrentarla
por su cuenta, pero nosotros tenemos la posició n de cómo enfrentarla en Tarija, nosotros
nos planteamos muy claramente que debe establecerse un régimen de autonomía nacional,
cultural con base territorial, para las comunidades guaraní, wenhayek itapiete que así lo
decidan.
¿Qué significa esto?, significa la posibilidad para estas comunidades de administrar justicia
en lengua materna, de que los trámites ante la administración pública se hagan en su propia
lengua materna, que la educación se reciba en lengua materna y que el lenguaje y su cultura
sea un mecanismo válido de ascenso social y eso compartimos plenamente con lo que decía
Álvaro García al iniciar esta mañana.
En este momento, en este país que se declara monocultural y monoétnico, solamente a
través del comando del castellano tenemos posibilidad de ascenso social, eso no puede ser
más así, esto se busca lograr en estas comunidades que llamamos nosotros de autonomía
nacional, cultural, con base territorial y estamos obligados y lo hemos planteado así
claramente a asignar recursos de regalías en porcentajes fijos 5, 6, 10% no lo sabemos
todavía, para que esas comunidades construyan esa institucionalidad democrática que
promueva el desarrollo de su cultura y de su idioma y de todo lo que implica su presencia
enriquecedora en nuestro departamento.
La alternativa, porque esto decíamos que es asimétrico, podemos entrar tardíamente al
proceso autonómico algunos departamentos, otros hacerlo más rápido la vía rápida, la vía
lenta, ha sido la forma en que en España se ha desarrollado el tema de las autonomías, las
competencias que queremos que sean transferidas también deben ser graduales en función
de cuan capaces nos sintamos para enfrentarlas, por ejemplo el tema de la educación y
salud, por ahí la queremos nosotros rápidamente en nuestras manos, otros departamentos
pueden pretender o querer que esto siga todavía un tiempo más en manos del Estado
Central, y permanecer bajo su paraguas digamos del estado unitario y finalmente deseamos
de que la alternativa también para las comunidades originarias, no es necesariamente la
autonomía nacional cultural y no estamos aquí hablando de un racismo diferencialista por
favor, eso tiene que quedar muy claro, no hay aquí gates ni apartaid de ninguna clase, eso
como alternativa puede ser, el sujetarse a un régimen especial de derechos indígenas.
La idea entonces de la propuesta autonómica de Tarija es hacer un nuevo país. Moderno, un
nuevo país que respete a los departamentos, que respete a las provincias, a las
comunidades, un país mucho más democrático que le permita así enfrentar con el concurso
de todos sus hijos, los desafíos de la complejidad que implica la globalidad del Siglo
XXI. Gracias.

PREGUNTAS DEL AUDITORIO


Dr. Roberto Ruiz:

P. ¿Por qué quiere vender el gas a toda costa por Chile sin interesarle los precios,
industrialización y los riesgos geopolíticos para Bolivia?.
R. Bueno, este debate era sobre la Reforma Constitucional, pero vemos que el tema de
Chile y el gas son elementos traumatizantes, realmente ya me tiene hasta aquí.
Habíamos expuesto brevemente la realidad, por ejemplo de la minería boliviana que hace
100 años se exporta por Chile, y les vamos a decir a los potosinos que deben clausurar el
Proyecto San Cristóbal, que va sacar cada 20 minutos un camión cargado hacia Chile ya
tiene hasta el camino hec ho y obligarlo ir hasta Ilo, no hay negocio ahí, no hay negocio. La
opción chilena no la ha escogido Tarija ni la defiende Tarija por nada, la ha escogido la
geografía, los estudios de factibilidad técnico-económica.
Bolivia tiene y no Tarija. Tarija no tiene un solo negocio con Chile. Bolivia, La Paz
básicamente, Oruro tiene enormes cantidades de negocios con Chile, no solo la minería. El
Chapare exporta 9 mil barriles por día hace 45 años por Chile a través del oleoducto Sica
Sica-Arica que pasa por este altiplano, ¿donde se han desagarrado las vestiduras los
patriotas para evitar eso?, yo no entiendo desde Tarija, cómo todos estos negocios son
posibles y patrióticos menos el gas, estamos hablando de minería, de comercio, de
contrabando, estamos hablando de un ALCA perverso que se da con Chile, ¿no es cierto?,
que es el contrabando es un ALCA de libre comercio, sin reglas por eso es perverso, se
viola la soberanía todos los días con esa frontera por parte de los contrabandistas que
asesinan a los coas en los pueblitos estos, son tierra de nadie y no se ha hablado nunca nada
de la patria en esos casos, ¿por qué será?, porque el negocio se hace aquí en casa.
Tarija no ha escogido la opción chilena. Nunca hubo opción peruana, cuál es la mejor
prueba de ello, us tedes o cualquiera que haya podido leer la prensa peruana, van a ver que
la planta de licuefacción del proyecto Camisea se está estableciendo en Pampa Melchorita,
900 Kms. al norte de Ilo. Nunca fue Ilo opción para el gas peruano, que iba a recorrer 1.000
Km., adicionales para hacerse inviable?, a título de qué, si la variable de ajuste en el precio
de gas es en boca de pozo y con eso se disminuyen tremendamente los ingresos nacionales.
Entonces, la pregunta concreta, más bien que yo se los devuelvo a ustedes, ¿por qué todo lo
otro es patriótico, es posible, es viable y no la exportación del gas?, y si el gas tiene la
potencialidad de sacarnos de la miseria, el verdadero debate es el siguiente: ¿cómo
maximizar los ingresos para el estado boliviano por parte de la actividad petrolera sin
quitarle competitividad a esa industria, no es cierto?, y ¿cómo usar esos recursos para
promover un desarrollo humano sostenible en el país? Ese es el verdadero debate, que
beneficie a todos los bolivianos, no liquidar con demagogia la industria petrolera.
En términos de regalías yo quiero decirles en relación al Perú lo siguiente, en Perú ha
disminuido del 13.5% la regalía en boca de pozo al 5%, para hacer atractivo el desarrollo de
nuevas reservas y quedarse definitivamente e n el mercado americano. Hace un año y medio
les hemos advertido que Perú nos iba a ganar ese mercado, ya nos ha ganado, hemos
advertido que Indonesia y Australia iban a ganar el mercado americano, ya están ellos allí y
nosotros seguimos discutiendo esto.
P. Bueno, voy a leer una pregunta que viene a título de aclaración al señor Roberto Ruíz y
le dicen, que los pueblos del sur no son marginales en política, porque la realidad es
totalmente diferente, más del 90% de los políticos vienen a La Paz de los pueblos del sur,
ejemplo los Paz Estenssoro, los Paz Zamora, los Sánchez de Lozada, los Sánchez Berzaín y
otros tantos sureños y ahora viene la pregunta, dice: Cuál será la posición del Comité
Cívico de Tarija, si el Chaco se convierte en el décimo departamento de Bolivia? y ¿Cuál
será la posición del Comité Cívico Pro Intereses de Tarija, si el Chaco se convierte en el
décimo departamento de Bolivia?
R. Yo no sabía que Sánchez de Lozada era tarijeño, la verdad es que de donde habrán
sacado esa información o Sánchez Berzaín, creo que más bien es paisano de aquí del
Alcalde, los dos, pero bueno, cuál es tema del décimo departamento, ya les he dicho yo de
que es una muestra del malestar que existe en la provincia, legítimo malestar tanto del
Chaco Chuquisaqueño como el tarijeño, como el cruceño se han visto abandonados, a pesar
de que grandes cantidades de recursos, regalías se generan en estos territorios son
abandonados no tanto en Tarija, yo quiero decirles que en Tarija tenemos una situación
bien especial, el 45% de los ingresos por regalías petroleras quedan en la provincia
productora, es una Ley departamental que no existe en otro lugar del país, pregunte usted si
en Warnes recibe cuánto por ciento de la producción cruceña, menos del 2% pero no es
suficiente, no es suficiente porque hay un montón de trabas burocráticas en las cuales
estamos trabajando, y hacemos aquí está el señor Prefecto todos los días con la gente de las
provincias porque son reales, son existentes y dan cabida justamente con este malestar a
estas propuestas, es decir la propuesta tiene una base de sustento real por lo mal que hemos
las cosas hasta este momento, pero no es la solución.
En Bolivia cada pequeño municipio funciona como un Estado, no hay que olvidar la sangre
derramada entre Laymes y Kakachacas, por temas de límites, no hay que olvidar los
tremendos problemas de límites que hay aquí en el departamento de La Paz, no resueltos,
pregúntele si no al Señor Alcalde, en el momento que se quiera enfrentar temas de límite
para fracturar tres departamentos y crear uno nuevo, va a haber mucho, muchos problemas,
eso es absolutamente inviable o si es viable va a ser en un contexto sangre derramada
inútilmente entre hermanos.
Yo creo que lo menos se debe hacer es promover que El Alto sea un décimo departamento,
o que el Chaco o que el otro, hay que buscar en este diseño institucional que estamos
hablando, con las autonomías departamentales, introduciendo en ese nivel que tiene un
sentido histórico el departamento, ese gobierno que articule lo municipal con lo nacional en
un contexto democrático y que resuelva efectivamente las causas del malestar.
P.: ¿el planteamiento de gobiernos departamentales no va a agudizar el problema de
división en el país, cuando el problema precisamente es que hay demasiadas identidades
culturales?
R. Decíamos que uno de los esfuerzos que hizo el Estado del ’52, fue eliminar estas
diferencias culturales y construir como decíamos el Estado Nación, o sea construir la
Nación desde el Estado, ha fracasado ese propósito, no ha podido convertir a los
campesinos en simplemente campesinos, son campesinos aymaras, son campesinos
chapacos, no es posible eliminar a simple voluntad o por Decreto estas diferencias
culturales hay que enfrentar la riqueza y la complejidad que implica su existencia, el
espacio departamental es un ente articulador, con eso coincidimos perfectamente con Don
Juan del Granado, debe servir para eso, articular lo municipal con lo nacional y además
todas las identidades comunitarias, en lo que hemos llamado tanto régimen especial para
pueblos indígenas de derechos indígenas, como una determinación a lo cultural con base
territorial que vendría a ser sus TCOS.
Es este un mecanismo más bien para evitar el fraccionamiento del país, el país está
tensionado tremendamente porque no estamos pudiendo resolver localmente problemas,
cuando la toma de decisiones está centralizada, no en el nivel local sino a veces a miles de
kilómetros de distancia.
El Estado Soviético a pesar de todo el prestigio y la fuerza que ha tenido la Revolución de
octubre, se desmoronó en buena parte por eso, por el exagerado centralismo, un Brokertg
en Moscú, quería decidir cuántas bolsas de pan habían en un pequeño almacén en el
Kazastán, no se puede hacer eso ya más la complejidad demanda la participación de
muchos actores, es un tema de cómo enfrentar la complejidad en el nivel local, lo que
tenemos que ser capaces de hacer, es de ir articulando estos niveles desde lo local a lo
departamental a lo nacional, de manera exitosa para evitar cualquier tipo de división o de
fraccionamiento o de mayores tensiones en el país, ese es el camino realmente que tiene el
futuro, como decimos.
El otro, el pretender mantener una unidad falsa a través de centralizar y de borrar a la fuerza
las diferencias, no ha funcionado, no va a funcionar, lo que hay que buscar entonces es
ampliar esa democracia, hacer un diseño institucional apropiado de manera que por más
malo que sea, como decía Pooper, por más malo que sea el Ejecutivo de turno haga el
menor daño posible. Entonces ese es el desafío que lo tenemos que enfrentar en
democracia, en el marco de esta Constituyente.
P.: ¿si usted no se da cuenta que hay intereses foráneos que se están expresando mediante
los Comités Cívicos y si el Comité Cívico de Tarija se ha convertido en portavoz de los
intereses chilenos?
R. Yo creo que cuando se pierden los argumentos obviamente se busca descalificar estas
posiciones haciendo muchas veces insinuaciones de este tipo. Intereses foráneos en las
propuestas del Comité Pro Intereses de Tarija, veamos por ejemplo algunas de ellas, ya
habíamos hablado y explicado hace un momento por ejemplo el tema de los planes de
alfabetización o de enfrentar en el nivel local los problemas que hoy tienen paralizado al
magisterio nacional, o el camino Tarija-Potosí, o el camino Villamontes con la frontera con
el Paraguay, eso del 90% de nuestras actividades, donde están ahí expresados los intereses
foráneos.
Veamos el tema de hidrocarburos. Qué hemos dicho siempre en el tema hidrocarburos,
hemos dicho que se debe ser lo suficientemente inteligente como país para maximizar los
ingresos para el Estado boliviano, pero sin quitarle competitividad y sin liquidar una
industria como la petrolera de la cual puede vivir el país los próximos 50 años, ¿qué hay de
irracional con eso?, estamos planteando ser buenos negociadores, mirar de frente a las
empresas petroleras, y hacer negocios en beneficio del país, con criterio técnico, con
sustento técnico, y no simplemente al calor de una demagogia que aparte de arrancar cuatro
aplausos en una plazuela no logra nada más.
En el tema de los intereses chilenos. Por favor, Tarija no tiene ningún negocio con Chile, el
único posible, el que iba a pasar era el negocio del Pacific LNG que lo hemos liquidado,
por lo menos lo hemos postergado unos 10 años, y la pregunta que yo les hacía hace un
momento es lo mismo, vamos a perjudicar de igual manera que se perjudica a Tarija al
pueblo potosino, obligándolo a cancelar el proyecto San Cristóbal porque son cientos de
millones de dólares a ser invertidos en ese hermano departamento que tanto necesita
inversión, y toda esa producción sale por puertos chilenos, toda ya tiene hasta el camino
hecho, hasta Ollagüe, vamos a golpear a los potosinos, vamos a acusar de funcionalizarse a
los intereses chilenos, de la inteligencia militar chilena, todas esas cosas.
Ustedes no creen que los proyectos de corredores bioceánicos que van por el norte, que
vienen por Santa Cruz, pasan por Cochabamba, van Oruro-Pisiga-Toledo-Patacamaya -
Tambo Quemado más los ferrocarriles que conectan el norte de Chile con el coloso
brasilero, no creen que fortalecen a Chile mucho más que pase un caño con gas por
ahí?. Podríamos decir entonces que esos proyectos tan queridos por el pueblo orureño
están funcionalizados y financiados por intereses foráneos?, yo creo que es fácil agitar
fantasmas aquí y saltarse y salirse de la realidad. La realidad es que somos un país casi
quebrado y que en estas condiciones de quiebra técnica práctica, estamos paralizando con
una discusión bizantina a la industria más dinámica del país y la única que tiene potencial
para generar los ingresos suficientes que eviten gasolinazos, impuestazos, garrafazos y
otros males sobre el pueblo de Bolivia, el propio Presidente lo ha dicho cuantas veces, el
país tiene viabilidad sin el gas?, todas las instituciones de crédito internacional le han dicho
a Bolivia o venden el gas o no tiene acceso a recursos, lo único que le queda es consolidar
su posición de pordiosero internacional, experto en pasarle el sombrero a la comunidad
internacional, dónde está la dignidad en eso?, entonces realmente tenemos que reflexionar
profundamente como bolivianos, y no descalificar alegremente muchas veces de manera
canallesca a las instituciones como el Comité Pro Intereses o a su Presidente, cuando no se
puede argumentar seriamente y presentar alternativas, concretas a esas propuestas.
Nosotros obviamente que rechazamos todo este tipo de alusiones, y creemos que se debe
justamente a una vieja práctica que ya la conocían los griegos, la práctica ap ominem no
puedes con las ideas ataca al hombre.
7. Consociación

7.1 Por una consociación simbiótica de municipios, Ayllus y Pueblos indígnas, Javier
Medina

7.1 Por una Consociación simbiótica de


Municipios, Ayllus y Pueblos indígenas
Javier Medina

En este momento los bolivianos estamos sufriendo, probablemente, la crisis más aguda de
nuestra "identidad" como Estado Nación de tipo unitario, por el evidente fracaso de no
haber podido cumplir ninguno de sus cometidos fundamentales: crear un Estado de
Derecho para todos, formar un mercado interno, industrializar la nación, tener una
burocracia estatal, contar con un sistema de partidos políticos, basado en relaciones civiles
y no en redes de parentesco, haber homogeneizado su población, ocupado
administrativamente su territorio, garantizar los servicios básicos a todos, poder cobrar
impuestos sobre todo a los que más tienen... en fin, ni un solo indicador hemos podido
cumplir en 175 años de historia republicana. Este dolor, proveniente de esta frustración
epocal y colectiva, vivido visceralmente, nos puede, empero, conducir al desastre total: me
refiero a las demandas que empiezan a alzarse de una ¡Constituyente, ya!.

Nunca como ahora ha sido tan urgente que los bolivianos pensemos con la cabeza fría, con
un corazón cálido y generoso y demos tiempo al Tiempo. ¡Qué digo!. Tenemos, antes, que
enterrar con dignidad al Estado unitario y centralista. ¿O no se ha percatado usted de ya
sólo somos la velocidad de la luz de una estrella apagada, probablemente, hacia 1985,
cuando hicimos una apuesta decisiva sobre falsos supuestos?. Los muertos no enterrados,
como se sabe, se convierten en fantasmas y este Estado fantasmal es, justamente, la causa
de nuestras pesadillas colectivas. Después de habernos percatado colectivamente de su
muerte; después de haber enterrado al Padre difunto, hay que hacer el Duelo
correspondiente. A la lumbre de nuestras múltiples memorias, personales y sociales,
tenemos que pensar, pijchar, conversar, fumar: consensuar un camino con corazón. Este es
el tiempo que tenemos que comprarnos con una ley de Necesidad de Reforma de la
Constitución.

Sólo entonces seremos capaces de diseñarnos un traje constitucional a nuestra medida; sólo
entonces seremos capaces de renacer a una nueva vida. Una ¡Constituyente, ya!, como fruto
pavloviano del cabreo, es un aborto anunciado. Ya no tenemos más tiempo, como en la
época anterior a la Guerra del Chaco, para hacer un intento más por levantar un Estado
nacional. El tiempo histórico para la forma Estado Nación, que empezó con la Revolución
francesa, terminó con el inicio de la construcción de la Comunidad Europea.

La noxa latente del centralismo unitario, nuestra enfermedad constitucional, ha entrado en


un proceso de metástasis terminal. En efecto, el Estado centralista y unitario ha producido
la exclusión y pobreza de las mayorías, pari pasu la concentración del crédito no devuelto
en cien familias que han hecho quebrar al Banco Agrícola, al Banco Minero, al Banco
Central, en 1994 el Gobierno central transfirió 600 millones de dólares a los banqueros y,
ahora, otro tanto ha sido transferido a los "empresarios privados". Ningún país del mundo
ha pagado tanto para costearse la ilusión de que también tiene un Sector privado, a cambio
de casi nada: 1 de cada 10 empleos; 0.2 del PIB, en inversiones.

El Estado unitario ha servido, pues, a los intereses privados de una minoría que no paga
impuestos, quiebra y el Estado paga sus facturas. El Estado nacional, pues, no ha
administrado el Bien común; no ha gerentado la Hacienda de todos. Si con el Estado
unitario no tenemos futuro, ¿por qué empeñarnos en más de lo mismo?. No de otra cosa van
a pajpaquear los partidos en la campaña electoral. No nos dejemos tratar como imbéciles.

Tenemos que tener la cordura de pensar a partir de "resultados", no de dogmas o principios


políticos abstractos. Lo cierto e incuestinable, fenomenológicamente, es que este Estado
unitario es un Proyectorado subsahariano de la caridad internacional. Lo evidente es
también que, en América, por ejemplo, los Estados ricos son todos Repúblicas Federales:
Canadá, Estados Unidos, México, Brasil, Argentina. En Europa, antaño, las Ciudades-
Estado fueron emporios de riqueza y cultura; las ligas de ciudades fueron, asimismo,
emporios de liberalidad y bienestar ciudadano: como las ciudades hanseáticas, hace siglos,
o las redes de ecomunicipios, de hoy, que son los espacios con mayor calidad de vida en la
Europa actual. Si hacemos cuentas, al año 2000, el federalismo de tipo comunalista ha
producido riqueza; en cambio el centralismo unitario, solo pobreza.

La Democracia representativa, que representa estos intereses (pues la política partidaria y


no el trabajo son, en esta República unitaria, los vehículos de enriquecimiento); esta
Democracia, digo, ha perdido toda credibilidad a efectos prácticos; aunque, formal e
increiblemente, seguimos asistiendo a las liturgias electorales con un civismo digno de
mejores causas. En efecto, la sociedad negocia sus conflictos directamente con el Poder
Ejecutivo con la mediación de la Iglesia, Derechos Humanos, la Defensoría del Pueblo, etc,
al margen absoluto del Parlamento. De este ninguneo social a la Democracia representativa
son culpables los políticos en su conjunto; no la sociedad.

La economía de intercambio y acumulación, basada en un mercado de vendedores y


comparadores, no produce la riqueza suficiente para administrar el Bien común. Sin la
cooperación internacional el fantasma del Estado unitario ya hubiera colapsado hace años.
Sin embargo, nos seguimos obstinando en ignorar las economías indígenas de redes,
basadas en el don y la reciprocidad; por tanto, en un sistema de servidores y clientes,
"caseritos", como la posibilidad de nuestra articulación al postmercado del postcapitalismo
global, sólo porque su soporte es orgánico y analógico, y no digital y electrónico; la lógica,
empero, es la misma. A esto se puede llamar, en verdad, ventaja comparativa.

En las discuciones sobre Tierra y Territorio, a propósito de la ley INRA, nos seguimos
aferrando, con una seriedad que asombra, por ejemplo, al dogma que afirma que "el
subsuelo es dominio originario del Estado". ¿Ustedes creen que con semejante cojudez los
americanos hubieran desarrollado su industria petrolera y, con ella, toda su industria del
automovil?. Defendemos, cretinamente, un Estado unitario y centralista que ni come ni deja
comer. Dejemos que los guaranies hagan joint ventures con la Enron o los kakachakas,
como ayllu, con cualquier transnacional minera ¿cuál es el problema? ¿o ese es sólo un
privilegio para los que saben hablar inglés?
!Ay! Nos ha invadido la amarga lucidez de que no somos viables; de que no hemos
cumplido un solo indicador de lo que debería haber implementado desde 1825 el Estado
Nación centralista y unitario. De que hemos llegado al año dos mil en el pelotón de los
países más pobres del planeta y, al interior de ellos, dentro de los países más altamente
endeudados. De que, a efectos prácticos, el Banco Mundial y el FMI nos cuentan entre los
países del Sub Sahara; algo que, sorprendentemente, desata la gládulas salivales de los
"empresarios textileros" en vez de hacerlos sonrojar de vergüenza. La Bolivia HIPC sólo es
digna de limosna, pues sería un peligro prestarle algo: no podría devolverlo y el gil que se
metiera con ella terminaría teniendo que perdonarle la deuda. A esto hemos llegado. ¿Es
esto, por ventura, un Estado nacional?.

La fachada formal del Estado unitario encubre, de hecho, un Proyectorado subsahariano de


la Cooperación internacional. No podemos reprimir la sospecha de que somos un simulacro
estatal para beneficio de la clase política y cien familias que medran de los pobres, de los
recursos de la cooperación y, encima, no quieren pagar impuestos; o cuyos "arreglos
impositivos" "financian" el sistema de partidos políticos. Si no hemos llegado al colapso de
la República unitaria y centralista, ¿qué nos mantiene con vida? ¿qué nos hace funcionar?.
¿Tiene sentido que nos sigamos mintiendo a nosotros mismos?. En esta debacle ¿cómo
interpretar la locura de los políticos que ya se aprestan a montar el circo pre-electoral? ¿se
habrán percatado que yo sólo somos una inercia, un estado de ánimo, el conato trágico por
no abandonar la fuerza y energía del Illimani, por seguir contemplando el azul cobalto de su
cielo desde una colina yungueña, el poder seguir gozando del privilegio de convivir con
una civilización que contiene la quintaesencia de lo que serán las biocracias del siglo XXI?.

Pasados los conflictos del Agua y del Bloqueo territorial, el malestar social se está
empezando a coagular en la demanda de una Constituyente que, tal como van las cosas, las
presiones sociales podrían terminar por imponerla al Gobierno central; con lo cual la
entropía del sistema podría ser total y pondría en riesgo los nuevos órdenes que se están
configurando en medio mismo del caos actual: los muncipios, el sector comunitario, los
pueblos indigenas que renacen...

Comparto la idea de que tenemos que darnos otra Constitución. Me preocupan, empero, las
inercias mentales, la falta de información sobre nosotros mismos: un espacio biodiverso,
una población multicultural, la reserva de vida comunitaria probablemente más grande del
planeta; y escasa información sobre el mundo actual: en plena revolución científico-técnica
postcapitalista y de postmercado liberal. Nuestras políticos siguen pensando que nuestro
futuro es el siglo XIX. Analice usted, hipotético lector, críticamente sus ofertas electorales.

Entiendo la rabia acumulada y la frustración de esas naciones sin estado que sufren bajo un
simulacro estatal que las ha excluido sistemáticamente, gracias al impulso colonial: de ahí
la pobreza del país. Pero el que me sienta solidario con ellos no me quita que también diga
que la propuesta de una "República del Kollasuyo" es tan caduca como la del Estado
Nación de la elite que envidian y desprecian. Sin embargo, nadie presta oidos a la propuesta
más sensata y sabia que han hecho los aymaras, por pluma de Simón Yampara: un "Orden
Social de Armonía basado en el tinku de la parcialidad occidental y la parcialidad
amerindia". ¿Por qué el Cuarto Poder sólo amplifica lo que va contra nuestros intereses
colectivos? ( Un cínico diría: justamente, porque no somos un Estado Nación) ¿Por qué no
amplifica las propuestas sensatas y sabias? ¿Será q ue Apolo ciega a aquellos que quiere
perder?.

La República de Bolivia ha entrado en un proceso de entropía acelerado con el agotamiento


del último intento de construir un Estado, desde el énfasis puesto en el "Mercado": el
Ajuste estructural de 1985; pues el propio Decreto Supremo 21060 decretó el fracaso de la
Revolución Nacional que pretendió lo mismo desde un énfasis colocado en el "Estado".

En este momento los bolivianos estamos viviendo un momento de caos y desintegración


social, económica, política, cultural y espiritual. Desapareció el cemento que cohesionaba
la sociedad. La última cohesión, puramente sentimental y simbólica: la participación de la
selección en el mundial de fútbol de Estados Unidos, también se ha esfumado.

Ahora bien, como recome ndara Ignacio de Loyola, habría que decir que en momentos de
tribulación social, no hay que tomar decisiones. Nos equivocaríamos. Lo sensato es lo que
aconseja la Constitución actual: la aprobación de una Ley de necesidad de reforma de la
Constitución. En el ínterim: una gestión gubernamental, tenemos que aclararnos todos
acerca de qué Bolivia es posible y deseable y, en función de ello, diseñarnos nosotros
mismos el traje constitucional que necesitamos.

En la era de la información y el conocimiento, el cerebro humano es una gran metáfora que


está detrás del diseño de muchos adelantos científicos. Pienso que es la mejor metáfora para
pensar la Constitución de la Consociación simbiótica que les propongo: pensar las dos
Bolivias: la occidental y la amerindia, como opuestas pero complementarias, tal como el
lóbulo derecho y el lóbulo izquierdo del cerebro. El tinku de ambas civilizaciones, una de
tipo onda: la amerindia, y la otra tipo partícula: la occidental, son la quintaesencia de lo que
será la ecumene del siglo XXI: Oriente y Occidente se abrazarán, despues de haberse
separado los últimos cuatro mil años. La complejidad de la vida regresa a la unidad dual.

Podríamos convenir que los "Municipios" fuesen predominatemente occidentales, con


minorías indígenas; los "Ayllus" predominatemente indígenas con minorías occidentales;
los "Pueblos indígenas" predominantemente indígenas con minorías occidentales.

La Constitución de esta, por ahora, hipotética Consociación simbiótica (que se federaría


también con los redes de ecomuncipios del Norte) tendría que ser intercultural; no sólo en
su Artículo primero, sino a lo largo de toda ella. La interculturalidad, en efecto, debería ser
el corazón de la nueva Constitución.

Ahora bien ¿qué se entiende por interculturalidad?. Entiendo por Interculturalidad la


aplicación de un modelo no-dualista de tipo cuántico a las relaciones entre la Civilización
occidental y la Civilización amerindia.

Entiendo por Modelo no-dualista de tipo cuántico uno que se comporte como la Función
onda y la Función partícula respecto del Electrón; es decir, el Electrón colapsa como onda o
partícula según sea el Efecto observador
Entiendo por Civilización occidental a aquella que ante la dualidad se decide por un sistema
lógico que opera a través del Principio de identidad, el Principio no contradictorio y de
Tercero excluido. Entiendo por Civilización amerindia a aquella que ante la dualidad se
decide por un sistema lógico que opera a través del Principio de complementariedad de
opuestos y Tercero incluido.

Entiendo, pues, por Interculturalidad la interacción, en tiempo-espacios definidos, distintos


pero complementarios, del Principio occidental: patriarcal, logocéntrico, newtoniano,
cartesiano, y el Principio amerindio: matrístico, semiocéntrico, animista, holista.

Entiendo por Tiempo-espacios definidos, distintos y complementarios, lo siguiente: los


tiempo-espacios apropiados para el despliegue del Paradigma amerindio son los espacios
conviviales y cualitativos. Los tiempo-espacios apropiados para el despliegue del
Paradigma occidental son los espacios racionales y cuantitativos.

Entiendo por Espacios conviviales los espacios de la esfera vernácula en el que los actores
se conocen personalmente. Entiendo por Espacios racionales los espacios de la esfera
mercantil y estatal; por tanto, los espacios, impersonales.

A modo de ejemplo para pensar la nueva Constitución de esta sociedad intercultural


veamos el caso de la Economía.

En Economía, interculturalidad vendría a significar la complementariedad del Principio de


Intercambio y Acumulación con el Principio de Don y Reciprocidad. Es decir que en los
Municipios, más bien occidentales, primaría el Principio de Intercambio y Acumulación,
estando el Principio de Don y Reciprocidad subordinado a él. En lo s Ayllus, más bien
amerindios, primaría el Principio de Don y Reciprocidad, estando el Principio de
Intecambio y Acumulación subordinado a éste para las relaciones hacia fuera. En los
Pueblos indígenas, más bien amerindios, primaría el Principio de Don y Reciprocidad,
estando el Principio de Intercambio y Acumulación subordinado a éste para las relaciones
con el exterior.

En la Consociación simbiótica, como totalidad, deberíamos buscar el equilibrio de lo


cuantitativo y lo cualitativo; es decir de ambos Principios económicos. Con otras palabras,
debemos superar la equivalencia reduccionista de la Edad moderna: Economía igual a
Principio de Intercambio, solamente. Desde el punto de vista cuántico e intercultural,
Economía, en el espacio vernáculo, colapsa como Reciprocidad; en el espacio mercantil,
colapsa como Intercambio; pero es ambas dimensiones a la vez.

En Política la interculturalidad debería expresarse, en la nueva Constitución, como la


complementariedad del Principio representativo y el Principio participativo. Otra vez; el
reduccionismo de la Edad moderna estribó, en lo que atañe a lo Político, en equiparar
"Sistema político igual a Democracia Representativa".

Desde un punto de vista cuántico e intercultural la ecuación es la siguiente: el Sistema


político, en el espacio municipal, colapsa como Democracia Participativa; en el espacio
nacional e internacional, colapsa como Democracia Representativa. Esta es la fórmula para
salir de la manida excusa: "La Democracia es muy imperfecta, cierto; pero no tenemos una
opción mejor". Sí hay otra opción: ir hacia democracias consocianistas.

A nivel de Sociedad, la interculturalidad debería expresarse, en la futura Constituciön, en


la complementariedad del Principio individualista y el Principio comunitario. Como
sabemos, la Civilización occidental ha producido los conceptos de individuo, libertad,
subjetividad, responsabilidad personal, derechos/obligaciones individuales: ciudadanía. Así
mismo, los conceptos mayores donde éstos se pueden desplegar: el Estado de Derecho, la
Democracia Representativa: una voz un voto, etcétera. La Edad moderna ha ideologizado
este conjunto semántico bajo el concepto de Liberalismo. Siguiendo la lógica del Principio
de Identidad lo ha contrapuesto, sutilmente, al concepto de Socialismo, obligando a tomar
partido a uno contra el otro como si fuesen conceptos antagónicos. Ahora bien, a estas
alturas de la historia tampoco debemos ignorar que tanto Liberalismo como Socialismo
están indisolublemente ligados al concepto de Estado Nación. Hablar de Liberalismo social
o Socialismo liberal es seguir diciendo más de algo obsoleto y caduco.

La Civilización amerindia, globalmente, se ha contruido sobre el concepto de Red y, por


consiguiente, ha puesto el énfasis en las interrelaciones comunitarias. He aquí una primera
diferencia de civilización. Una segunda diferencia es que esta Red no sólo conecta a los
runa / jaqi: la pareja, como unidad mínima de sentido social, sino que se amplia la noción
de Comunidad a la esfera de los difuntos y ancestros que moran en el "Ayllu de las Wak´a"
y, así mismo, mantiene relaciones con la esfera genésica del "Ayllu de la Sallqa". Es decir,
desde el punto de vista cuántico con "Universos paralelos" que interactuan con la
Comunidad de Aquí y ahora.

La Interculturalidad, por consiguiente, debe ampliar el modelo amerindio de tal suerte que
para los espacios conviviales y municipales prime el Principio comunitario y en los
espacios nacionales e internacionales prime el Principio individualista, de modo tal,
empero, que cada esfera cultive, como subordinado, su polaridad opuesta: al interior de lo
comunitario respetar el derecho a la desidencia, por ejemplo; al interior de lo individual
respetar y cultivar el derecho a la solidaridad. Con otras palabras, la Interculturalidad
entiende como opuestos complementarios lo que la modernidad pensó excluyentemente: el
Pincipio individualista y el Principio comunitarista. Precisamos de los dos en tiempo-
espacios diferentes.

En lo que atañe a la religión, la futura Constitución debería dejar atrás los Concordatos
decimonónicos que ofenden a cualquier talante democrático. En esta materia opino que
cada quien debería cultivar la herencia de sus ancestros; continuar la propia tradición que es
parte de la riqueza que todos poseemo s como humanidad. A estas alturas de la historia no
tiene ya sentido comportarse dogmáticamente: ora teista, ora ateistamente, pues la religión
no tiene nada que ver con el problema de la verdad (como pensó mal la edad moderna) sino
con el de la religación con las raíces de la propia tribu. No hay religión perfecta, ni
verdadera, ni universal. Sostener lo contrario equivaldría a una grave insuficiencia de orden
cognitivo y moral y, sobre todo, de falta de información.

La interculturalidad en tecnología debría entenderse como la complementariedad de la


tecnología instrumental que desarrolló el occidente industrial, sobre todo, y la tecnología
simbólica que desarrolló el paradigma ecológico de la civilización amerindia.

La tecnología instrumental que ha desarrollado Occidente, sobre todo a partir de la Edad


Moderna mediante el proceso de la revolución industrial, se afinca en el Deus faber del
Génesis que, a su imagen y semejanza, ha creado al homo faber. Al instaurar la separación
entre Creador y criatura, entre Dios y Hombre y, así mismo, entre Hombre y Naturaleza, la
tecnología que se ha ido desarrollando a lo largo de milenios se basa, en primer lugar, en la
diástasis creada y, en segundo lugar, en que la otra polaridad: la Naturaleza, es una cosa
inanimada, por tanto manipulable.

La civilización amerindia, por el contrario, ha creado una tecnología simbólica, que le


permite, justamente, interactuar con la naturaleza entendida como un ser vivo e inteligente.
El Occidente cristiano, al partir de otro supuesto, no tuvo necesidad de desarrollar esta
tecnología que hoy precisa reinventar la Perspectiva de la Casa Común Planetaria.

¿Cómo negarlo?. Este texto te quiere invitar a sumarte a todos aquellos que apostamos por
una Bolivia municipal, una Bolivia de Ayllus y Pueblos indígenas articulados
simbióticamente entre sí y, así mismo, conectados al polo cualitativo de la globalización:
los ecomunicipios del resto del planeta, a partir de una sinápsis federativa, para así
contribuir, desde el paradigma ecológico y simbionómico amerindio, a dar a luz la Casa
Común Planetaria.

En efecto, ya no vale el lema de la modernidad: "más y más, a como dé lugar". Ahora los
hombres sabemos que el nuevo lema es "suficiencia con calidad para todos" y en esto,
precisamente, descollaron los amerindios. Las brasas de ese fuego todavía arden entre
nosotros.

Esta meta del proyecto "Casa Común Planetaria", del cual nuestra Consociación sería una
sinápsis neuronal, es algo que, en verdad, está a nuestro alcance, con sólo queramos
cambiar la visión del mundo que nos ha introyectado el colonialismo: desear la imposible
quimera de llegar a ser algún día como los Estados Nacionales del siglo XIX. Si logramos
modificar nuestra consciencia, modificaremos la realidad: no otra cosa saben, desde hace
miles de años, yatiris y chamakanis y, desde hace cien años, físicos cuánticos, sicólogos
transpersonales, biólogos cognitivos...también kabalistas y budistas.

Bolivia, como sistema, ha entrado en un proceso de entropía, es decir, de incremento de


caos; pero, ante nuestras propias narices, en medio de este caos, ya se están configurando
nuevos órdenes de relevo. Al comienzo convivirán, por la Ley de Complementariedad de
opuestos, con los despojos del viejo orden que se desmorona. Este país no ha sido viable
porque no ha podido tejer la complementariedad de las dos parcialidades que nos
constituyen: la Parcialidad occidental y la Parcialidad amerindia.

La República bolivariana se propuso deglutir y metabolizar a la otra, pero no pudo. El éxito


de esta operación hubiera significado lograr construir un Estado Nación homogeneo,
industrial, un solo mercado, una sola lengua, una sola religión. Un Estado de Derecho para
todos, etc. Ni logró consolidar la dimensión condor ni la dimensión gallina; ni tenemos
seguridad alimentaria ni somos una potencia regional.
¿Cuáles son los nuevos ordenes que se están configurando? Se han presentado en sociedad
en el Diálogo Nacional: los Gobiernos locales municipales, el Sector comunitario de los
pequeños productores, los movimientos indígenas.

¿Qué rol deberían jugar en la transición que estamos viviendo? Por complementariedad de
opuestos, deberían fortalecer los viejos órdenes en disgregación: el debil Gobierno central,
deberá ser fortalecido por los Gobiernos locales municipales; asi tendríamos un Organo
público más consistente. El débil Sector privado debería ser fortalecido por el Sector
comunitario de los pequeños productores; así tendríamos unos Agentes económicos mas
fuertes y complejos. El fragmentado Sindicalismo del 52, debería ser fortalecido por los
nuevos Movimientos indígenas; así tendríamos un Movimiento social más genuino y
propio.

¿Qué Bolivia es posible y deseable? Una Bolivia que sea el resultado de la


complementariedad de la parcialidad occ idental y la parcialidad amerindia, que sin dejar de
ser lo que son: dos civilizaciones opuestas, se puedan complementar, como la onda y la
partícula, como un sistema abierto y un sistema cerrado, como condor y gallina, en una
totalidad inclusiva, ya no como un átomo estatal, sino como una red supranacional de
gobiernos municipales integrados a la globalización.

Eso significa decir sí al Principio representativo: la dimensión condor y decir sí al Principio


participativo: la dimensión gallina. Decir sí al Principio económico del intercambio y
acumulación: la dimensión condor y decir sí al Principio económico del don y reciprocidad:
la dimensión gallina.

El desafío del siglo XXI para toda la humanidad es hacer convivir, en uno mismo, en su
pareja, en su familia, en su OTB, en su municipio, en su estado, en su continente, en el
planeta, al condor y a la gallina y a su trascendencia: al místico que todos llevamos dentro.

Yo me inscribo en una tradición que, de generación en generación, ha ido variando la


sospecha de que el Uno se manifiesta, ora como Yahvé, ora como Shejiná, en el instante
de la conjunción. Ultimamente he empezado a pensar también, cómo se manifieste el Uno
en el instante de la disjunción, mejor dicho: qué nombres le han sido dados; porque
conjunción y disjunción, sístole y diástole ... son experiencias primordiales y no hay que
cerrar los ojos ni ante la belleza ni ante el horror. “Se llama Uno a la unión del Macho y la
Hembra; y sólo cuando la Hembra está unida al Macho puede emplearse esta palabra: Uno”
(Zohar, III,7b). Hasta ahora me he esforzado por llegar a ser un hombre justo y sabio, como
cualquier judío piadoso. Ultimamente me ha empezado a fascinar/horrorizar la
Unheimlichkeit que esconde el desafio kabalista del Adam Kadmón: “ser un hombre
integral”. El bien existe y el mal también y ambos son los dos rostros inescrutables del
Uno: Bendito sea su Nombre y su No-nombre.
7.2 El Estado Federativo de Municipios y Comunidades originarias, Juan del Granado

EL ESTADO FEDERATIVO DE MUNICIPIOS Y


COMUNIDADES ORIGINARIAS

Dr. Juan Del Granado Cossio

Voy a tratar de responder a dos preguntas que seguramente resumen esta importantísima,
esta valiosa inquietud de los organizadores de este evento a quienes quiero saludar de
manera muy calurosa, muy estrecha, estoy viendo a personalidades notabilísimas, a nuestro
Presidente del Colegio, a nuestro ex Presidente del Colegio de Abogados, a nuestra ex
Defensora, bueno y a tantos amigos y amigas especialmente a los amigos y amigas de la
Universidad Católica.
Dos preguntas le decía, la primera ¿por qué y para qué Asamblea Constituyente?, y la
segunda pregunta ¿por qué y para qué Federación Boliviana de Municipios Autónomos y
Comunidades Originarias?
Vayamos con la primera pregunta y sobre todo con la primera respuesta. Estamos viviendo
con enorme claridad, con enorme dolor en octubre el agotamiento y la decadencia
definitiva, por un lado del sistema partidocrático de gobierno y por el otro el agotamiento
del modelo económico neoliberal.
Hace más de 20 años se recuperó la democracia y lamentablemente esa recuperación
democrática luego se convirtió en una progresiva, lenta, pero finalmente visible
expropiación de las libertades ciudadanas, de la autodeterminación ciudadana por parte de
los partidos políticos convirtiendo la democracia en partidocracia.
Un sistema político no solamente ineficiente, no solamente irrepresentativo sino sobre todo
prebendal y corrupto, este agotamiento ha sido absolutamente visible les decía en los
últimos 5 años, ha sido trágicamente visible en octubre, pero este agotamiento está además
acompañado de la decadencia prematura del modelo neoliberal de este modelo de libre
mercado, de este modelo de ajuste que habiendo primero estabilizado la economía del país,
debió haber reactivado el aparato productivo y debería haber mejorado sustancialmente la
calidad de vida de todos los bolivianos. Han pasado 20 años, somos más pobres, somos más
dependientes, estamos exportando la misma cantidad de dinero que hace 20 años y por
tanto estamos exportando menos, pero además se nos ha despojado de los recursos
naturales y se han desmantelado las empresas públicas del Estado.
Estamos entonces viviendo el agotamiento del sistema político y estamos viviendo el
agotamiento del modelo económico, pero hay un agotamiento aún más profundo, aún más
estructural, hay una crisis aún más profunda y es la crisis del Estado Republicano fundado
el año de 1825, no solamente estamos de frente al agotamiento de una fase estatal que se
inició en los años ’80 ya caducado, sino que con absoluta certeza se puede hablar de una
crisis, de un agotamiento del Estado Republicano fundado en 1825 y por tanto estamos
hablando de una crisis geológica, que requiere con urgencia una nueva arquitectura estatal,
una nueva arquitectura política y que requiere un nuevo modelo de desarrollo.
Hay la necesidad de la Asamblea Constituyente. O sea no estamos frente a la urgencia o al
requerimiento de reformas parciales a la Constitución Política del Estado. No es que
solamente requerimos eliminar a los suplentes de los parlamentarios que no son útiles en el
sistema político, no es un problema de que solamente elijamos por voto a los Prefectos del
departamento. No, es un problema mayor.
Es un problema de ver cómo refundamos el país, como establecemos un nuevo pacto social
entre todos los bolivianos, para definir nuevas reglas de convivencia democrática, nuevas
reglas para salir del subdesarrollo y por supuesto para construir un nuevo Estado nacional,
esa es la dimensión del desafío, es esa la dimensión que requiere la situación actual y por
esa dimensión necesitamos una Asamblea Constituyente que no es sino un momento
fundacional.
¿Cuáles son los componentes de este momento fundacional?, ¿qué tipo de problemas, qué
tipo de soluciones tenemos que buscar en la Asamblea Constituyente? No solamente quiero
hablar de la necesidad impostergable de superar el neoliberalismo, la partidocracia, la
corrupción, sino que aparece fundamental la necesidad de superar los males estructurales
del Estado Republicano de 1825.
Yo destaco 3 elementos que hacen a la falla geológica del Estado Republicano de 1825 y
que requieren por lo mismo de un nuevo pacto social.
El Estado de 1825 fue básicamente un Estado racista y excluyente, fue un Estado surgido a
partir del pacto de 10 mil personas que excluyó a la gran mayoría de los pueblos
originarios, luego de la derrota de la insurgencia indígena de los años cabalmente de 1800 o
de 1780 adelante. 1800 a 1825, los años independentistas fueron años que se construyeron
sobre la base de la derrota previa de los movimientos indígenas y por ello la Fundación de
la República, aquella fundación que la llevaron a cabo 10 mil ciudadanos, tuvo estas
características claramente racistas, excluyentes y elitarias; un segundo rasgo, el Estado de
1825 fue su rasgo centralista, fue esta visión colonial heredada donde el Estado Central se
constituía, según sus fundadores, en el mecanismo de aquella desagregación previa de 20
años en la lucha anticolonial y entonces el Estado Central, el Estado supuestamente
unitario, los departamentos, las provincias, las secciones de provincia y los cantones fueron
construcción de una visión precisamente centralista que devino en un tercer grave problema
estructural de aquel Estado, que fue su desarticulación geográfica, el abandono del territorio
y los profundos desequilibrios territoriales y poblacionales con los que nacimos hace 179
años y que no los hemos superado.
Se trata entonces de ir a una Asamblea Constituyente, ir a un nuevo pacto social; en primer
lugar para superar de manera definitiva el carácter racista y excluyente, para superar el
carácter centralista y para superar los desequilibrios geográficos territoriales y poblaciones
que no nos ha permitido salir del estancamiento y que finalmente han hecho crisis de
manera profunda en dos elementos que hacen a la Constitución de todo Estado, su relación
en primer lugar con la población, con la sociedad, que es el sistema político, que es la
gobernabilidad y la relación por otro lado del Estado con la economía que es la manera
como se producen y se distribuyen las riquezas.
Por ello mismo, el momento de la refundación, es un momento que debe ser un momento
de aporte y de encuentro y de concertación de todas las regiones de todos los sectores
sociales, y no debe ser un momento de correlaciones de fuerza sino un momento
constitutivo de un nuevo pacto social, esta es la gran característica que debería tener una
Asamblea Constituyente, y estos deberían hacer las grandes tareas y que debería encarar esa
Asamblea Constituyente. Pero una Asamblea Constituyente no solamente deberá definir las
características del sistema político les decía, sino también deberá definir las características
de un nuevo modelo de desarrollo, y ese nuevo modelo de desarrollo deberá estar asentado
en ejes esenciales como son la autogestión productiva, la redefinición de la inversión
pública, la recuperación plena de los recursos naturales, el relanzamiento de las empresas
públicas estratégicas, que sobre la base de los principios de representación étnica y
regional, sobre la base de los principios de autodeterminación ciudadana deban configurar
un nuevo esquema de país.
Ahora bien, si esta es la respuesta al por qué y el para qué de una Asamblea Constituyente,
cuál es la respuesta al ¿por qué y para qué de una Federación Boliviana de Municipios
autónomos y de comunidades originarias? Estamos claros que la Asamblea Constituyente
es la gran respuesta nacional, a un momento terminal de crisis del neoliberalismo pero
también a un momento de revelación de la profunda crisis del Estado Republicano, por qué
la respuesta, en nuestro criterio debería ser una estructura federativa en base a los
municipios y en base a las comunidades originarias, porque nos parece esencial la
revalorización del espacio local para el rediseño del conjunto del Estado, nos parece
esencial el espacio local como el mejor escenario para la autodeterminación ciudadana, nos
parece esencial el espacio local como el mejor espacio para la identificación y para la
revalorización de las etnias, de las nacionalidades, y de las distintas identidades que
tenemos, nos parece el espacio local como el mejor espacio para la identificación de las
autonomías regionales, nos parece el espacio local como el espacio óptimo para el
despliegue de las capacidades y de las potencialidades autogestionarias, autoproductivas de
la comunidad.
Pero una Federación de Municipios autónomos y de comunidades originarias, pasa por una
redefinición, por una reconfiguración de la estructura municipal nacional, no podemos
partir para hacer la Federación de los 320 municipios que tenemos hoy en día, está claro de
que siendo un elemento de avance la descentralización municipal del año 1994, la
metodología fue absolutamente improvisada, se tomó como punto de referencia a las
secciones de provincia porque eran más pequeñas que las provincias y eran más grandes
que los cantones, este fue el criterio y lo que tuvimos como consecuencia de ello fueron
314 municipios que ahora son 320 absolutamente desequilibrados respecto a sus
dimensiones territoriales, respecto a sus capacidades geográficas, respecto a sus
potencialidades poblacionales pero sobre todo de espaldas a las identidades étnico
culturales.
Entonces, un primer paso, en esta tarea de la respuesta a través de una estructura federativa
del país sobre la base de la estructura municipal, es la reconfiguración y la redefinición de
esa estructura municipal y deberían ser al menos tres criterios los que nos vayan ayudando
a trabajar en esa reconfiguración.
El primer crite rio es el de precisamente las identidades étnico culturales. Tenemos que
identificar la ubicación de las identidades étnico culturales para que definamos y
reconozcamos territorial, institucional y políticamente el autogobierno de los pueblos
indígenas y de las comunidades originarias, estamos hablando por supuesto de nuevos
municipios indígenas, en una nueva reconfiguración territorial; tenemos en segundo lugar
que tomar como punto de ordenamiento las potencialidades geográficas, la continuidad
territorial para el reagrupamiento de las estructuras municipales.
Una buena base pueden ser las 70 mancomunidades que ya se han conformado en
el país, no estoy hablando de que automáticamente las mancomunidades se conviertan en
municipios autónomos, estoy hablando de que las mancomunidades donde han funcionado
pueden ser un buen ejemplo de la manera cómo tenemos que reagrupar a pequeños o
medianos municipios sin posibilidades, sin potencialidades porque no tienen territorio,
porque no tienen población, porque no tienen recursos para que tengan capacidades de
autogobierno y de autodesarrollo; y el tercer criterio es el de la creación de las áreas
metropolitanas en todos y cada uno de los departamentos, de facto existen áreas
metropolitanas en La Paz, en Cochabamba, en Santa Cruz pero no funcionan como tales, no
son un factor de optimización en la utilización de los recursos, no son un factor de
desarrollo departamental y de desarrollo nacional, no son un factor de integración, de
competencias y creemos nosotros que un tercer elemento de reconfiguración de la geografía
municipal boliviana en la perspectiva del municipalismo autónomo en el marco de la
Federación, es la creación de áreas metropolitanas en los 9 departamentos.
¿Qué debería cumplirse, qué debería hacerse respecto a la estructura departamental?, en un
primer gran momento histórico, en nuestro criterio no debería alterarse esa estructura
departamental, no estamos hablando para tranquilidad de Roberto, para crear el
departamento del Chaco, no estamos hablando de crear una nueva geografía departamental,
pero si estamos en el criterio de que, la estructura departamental debe ser una estructura de
coordinación y de articulación y no de gobierno, conversábamos con nuestros amigos de
Santa Cruz, ahora lo estamos haciendo aquí con nuestro amigo de Tarija, de que cuando
nos hablan de gobiernos departamentales en contra del centralismo, se están olvidando del
centralismo de las ciudades capitales de departamento, de ese centralismo secante de los
cruceños de Santa Cruz de la Sierra, respecto al departamento de Santa Cruz; de los
tarijeños, del cercado respecto al conjunto del departamento de Tarija y de ahí la reacción
de los chaqueños, de los paceños, de La Paz, respecto a nuestras 20 provincias y nuestros
75 municipios, y entonces la estructura departamental de ninguna manera debe ser una
estructura de gobierno autónoma o autárquica, sino una estructura de coordinación y de
articulación cabalmente de los municipios reconfigurados, autónomos como verdaderos
poderes locales.
En la práctica estamos hablando de varias decenas de municipios, y miren aquí no estamos
ni trayendo ninguna experiencia del exterior, ni estamos trayendo ninguna invención. El
año de 1857, al Presidente Linares eliminó la estructura departamental y creó 32 jefaturas
distritales en el país que las denominó al año siguiente estructuras municipales, ahí empezó
el municipalismo boliviano en 1857, 32 municipios que conformaban el Estado
boliviano. Y por ello, de lo que se trata entonces es de una Reforma profunda que tiene que
estar acompañada de otros dos componentes de reforma, aquí termino.
El primer componente de la reforma que proponemos, es el de las reformas constitutivas,
tenemos un mundo de reformas que están planteadas por diversos interlocutores,
quisiéramos nosotros una propuesta también de ordenamiento de esas reformas, el
Movimiento Sin Miedo plantea 3 paquetes de reforma que deben hacer a la estructura del
nuevo Estado.
En primer lugar las reformas constitutivas que son a las que me he referido, las reformas
que hacen al sistema político, a la arquitectura política del Estado, que hacen a la
Federación del país, a la Federalización del país a partir de los poderes locales y por
supuesto a la modificación del modelo económico de desarrollo.
Pero en segundo lugar, pensamos que hay un paquete fundamental también de
reformas estructurantes, unas son las constitutivas que hacen a los pilares del nuevo Estado;
las reformas estructurantes son aquellas que tienen que ver con la manera como van a
funcionar los nuevos poderes públicos, cómo va a funcionar una sola Asamblea Nacional,
que en nuestro criterio es la mejor, el mejor mecanismo de un Poder Legislativo de un
Estado Federativo pero unido, una única Asamblea Nacional, cuya representación tiene que
venir de los estados locales municipales, como van a funcionar, ya no solamente los
Concejos Municipales sino los Consejos Legislativos locales indígenas o urbanos, de qué
manera vamos a organizar la justicia y las labores de administración en los estados locales,
de qué manera vamos a compatibilizar las competencias nacionales de la Federación que
son competencias en defensa, en macroeconomía, en medio ambiente, con las competencias
locales que tienen que ser ampliadas porque ya no estamos hablando de falsas autonomías
municipales sino de estados locales verdaderamente autónomos.
Es ahí donde tenemos que ver el tema fundamental de la devolución de la soberanía
ciudadana a la comunidad, los mecanismos de democracia directa, el Referéndum, la
revocatoria, el plebiscito, y en tercer lugar hay un otro paquete de reformas que tiene que
ver con las reformas orgánicas, que hacen a las formas, a los procedimientos y a los
métodos institucionales que permiten el funcionamiento de las instituciones que se crean.
Vamos a tener un sistema de primera y segunda vuelta en las elecciones, vamos a tener un
sistema de mayoría simple, de mayoría absoluta, vamos a tener un sistema mas bien
presidencial o parlamentario, vamos a ampliar el periodo constitucional de las autoridades
elegidas, vamos a incorporar las formas comunitarias de elección de esas autoridades o de
sus representantes, vamos a tener una municipalización de la policía y finalmente tenemos
que tener un mecanismo muy flexible de Reforma de la Constitución, porque si vamos a
tener una Asamblea Constituyente que va a crear una nueva Constitución, un nuevo modelo
de Estado, una estructura federativa en nuestro criterio en base a los municipios autónomos
y a los municipios indígenas, es obvio que tenemos que vivir un período histórico de
prolongado ajuste estructural, y no podemos entonces tener un esquema de Constitución
rígida que requiere como hoy día dos períodos constitucionales, una Ley de Necesidad y
una Ley que apruebe, necesitamos una Constitución flexible por lo menos para un primer
gran momento histórico en el que consolidemos el nuevo Estado boliviano.
Obviamente, esta es una propuesta, yo no creo que acá ni los movimientos regionales, ni los
partidos políticos, ni las corrientes ciudadanas, ni los pueblos orig inarios, nadie podría
llegar a la Asamblea Constituyente con su proyectito de Constitución terminado, todos
tenemos que llegar con propuestas, pero con un criterio muy amplio para la concertación y
la construcción colectiva, no es que la Asamblea Constituyente va a decidir por mayoría
que el proyecto “X”, o el proyecto “Z” presentado por la Bancada “X” o la Bancada “Z” de
los constituyentes es el que se aprueba.
Estamos en un momento fundacional y entonces todos los proyectos, todos los aportes
tienen que venir a hacer parte de una gran concertación, de un gran pacto nacional que
además, en su implementación pueda construir un nuevo bloque popular, multiétnico que
debería ser finalmente el bloque que después gobierne el país y nos entregue a todos un
mejor futuro. Muchas gracias.
PREGUNTAS DEL AUDITORIO
Dr. Juan del Granado:

P. Los municipios, está bien que tengan la autogestión, el autogobierno, la autoproducción


y todos los autos que quieran. Pero no puede seguir el autocontrol en el manejo
administrativo, financiero, que les dio la Ley SAFCO, ¿está usted de acuerdo con este
autocontrol administrativo y financiero?
R. Estamos hablando de estados locales municipales dentro de una Federación Nacional, el
hecho de que hayan gobiernos autónomos no significa que no haya niveles de fiscalización
del propio gobierno autónomo y de la propia Federación, pero yo creo más en los niveles de
control de la comunidad, tenemos 10 años o más, no 14 años de la Ley SAFCO, y tenemos
14 años en los que se ha profundizado la corrupción y el asalto de parte de los partidos
tradicionales a la función pública, con Ley SAFCO incluida, el problema no es un tema de
Contraloría solamente, por supuesto que los estados locales tienen que tener niveles de
control, de autocontrol, tienen que tener niveles de coordinación y por supuesto la
Federación tiene que ser un nivel macro de control y de gestión, pero es fundamental sobre
todo la participación ciudadana en los mecanismos de control y en los mecanismos de
participación.
P. Una consulta para el Dr. Juan del Granado, en su planteamiento de gobiernos
municipales, ¿cómo se resuelven las confrontaciones étnicas, entre aymaras, mestizos,
criollos?
R. Les decía que una falla estructural, una falla geológica profunda del Estado Republicano
que heredamos de 1825, fue precisamente la exclusión étnico cultural de los pueblos
originarios, les explicaba que hay incluso razones históricas para que ello ocurriese, 1780,
1790 fueron los años en los que los peninsulares y los criollos derrotaron armadamente a
las sublevaciones indígenas, especialmente a las aymaras, y entonces la formación del
Estado boliviano que empieza con el movimiento independentista en los años 1800, 1809 a
1825, son años en los que se gesta el Estado independiente de la península a partir de la
derrota previa de los pueblos originarios, y es por ello que este Estado nace marcado por su
carácter racista y excluyente.
No estamos desconociendo que junto con la gran nación aymara, con las nacionalidades
quechuas, con las etnias, especialmente en la amazonía, hayan otro tipo de componentes de
carácter cultural o de carácter étnico, el mestizaje es un fenómeno extendido, lo que
estamos planteando es de que el componente étnico cultural no puede estar ausente de la
conformación del nuevo Estado, no podemos repetir el suicidio de la conformación estatal
de 1825, el componente étnico cultural en sus distintas formas, en sus diversas densidades,
en sus variadas magnitudes tiene que estar presente, y cuál es el mejor molde
territorialmente hablando, institucionalmente hablando para que mejor puedan adecuarse
esas diversas corrientes y composiciones étnica-culturales, cabalmente en espacio local,
porque cuando hablamos de gobiernos departamentales, no escuché la exposición de
nuestro amigo Ruíz, le pido disculpas por la demora, el Alcalde es medio ocupadito aquí en
La Paz, pero cuando hablamos de gobiernos departamentales, estamos hablando muchas
veces de los gobiernos de las oligarquías departamentales, estamos hablando de estos
pequeños grupos que se han apropiado del poder local de las ciudades capitales, y que no
representan absolutamente a nadie, que no sean a intereses oligárquicos que luego
reproducen en el espacio departamental el centralismo, y la exclusión y el racismo.
Por ello, es que el espacio local municipal parece ser el espacio más adecuado pero no el
actual, cuidado, no estamos hablando de esta desordenada creación de 314 al inicio y ahora
320 municipios basados en las secciones de provincia, que las hemos recibido también de la
colonia, porque otro elemento esencial de esta inviabilidad del Estado que tenemos, de esta
crisis profunda fue la tremenda discrecionalidad, la tremenda arbitrariedad y la tremenda
improvisación, en la organización político territorial del Estado boliviano.
Miren ustedes lo que hizo el bueno de Melgarejo el año de 1866, segregó dos secciones o
dos provincias más bien del departamento de Cochabamba y creó el departamento de
Tarata , claro como capital estaba la ciudad Melgarejo, eso ocurrió en 1866, pero miren lo
que hizo el señor Jaime Paz Zamora el año de 1984, se le ocurrió crear la provincia
Sebastián Pagador en Oruro y al hacerlo partió en dos la provincia Avaroa del mismo
departamento, la provincia Avaroa está dividido en dos, al medio está la provincia
Sebastián Pagador creada por Jaime Paz Zamora. O sea, de siglo en siglo, de tumbo en
tumbo hemos tenido oligarquías que jamás han tenido la más mínima seriedad en la
organización territorial de la República, y por ello creo que un elemento ordenador
fundamental es el municipio, es el espacio local, pero a partir de la reconfiguración
municipal.
8 Diarquía

8.1 Quqi – Jaqi, Género y Diarquía, Simón Yampara y Mario Torrez


8.2 Derecho basado en el Individuo y Derecho Basado en la Comunidad, Javier
Medina

Derecho basado en el individuo y Derecho basado en la comunidad

Para entender los sucesos de Ayo Ayo y prepararnos a la Asamblea Constituyente

Javier Medina

Introducción

Es preciso ubicar el Derecho en un marco cosmológico para que pueda ser inteligido y
comprendido como parte de un sistema mayor. La cosmología actual, como se sabe, ha sido
fuertemente impregnada por la física cuántica. A diferencia del modelo newtoniano, basado
en la metáfora del reloj, por tanto de índole mecánica, el paradigma cosmológico actual es
de naturaleza orgánica: empieza con el Big Bang: expansión y culmina con el Big Crunsh,
implosión; sístole y diástole: ritmo cósmico. La explosión da lugar a lo que algunos
cosmólogos llaman el Vacío cuántico u, otros, Sopa primordial, es decir, un estado donde
todo, absolutamente todo: materia y antimateria, se encuentran en un estado de latencia y
virtualidad totales. Este Vacío cuántico genera las dos energías primordiales que
constituyen la realidad: las fuerzas de expansión, fragmentación, individuación, llamadas
Fermión, y las fuerzas de condensación, relacionalidad, socialización, llamadas Bosón. Este
esquema vale no sólo para el universo subatómico sino también para el mundo de los seres
vivos y, a fortiori, para las sociedades humanas y sus instituciones. Desde el punto de vista
del Derecho, las energías fermiónicas se expresan en el Derecho positivo, basado en el
individuo y la escritura, y las energías bosónicas se expresan en el Derecho
consuetudinario , basado en la comunidad y la oralidad. Como se ve son dos formas
antagónicas pero que deben ser entendidas complementariamente. La humanidad
occidental, a partir de Aristóteles, fijó su software en base al principio de identidad y no
contradicción que le lleva a afirmar un solo polo de la realidad y a reprimir, cuando no
puede extirpar, la otra polaridad. Por ello, el occidente moderno del Estado Nación, se
construyó únicamente sobre el Derecho positivo basado en el individuo y la escritura.
Cuando el Estado Nación se implanta en sociedades mayoritariamente no occidentales,
como es nuestro caso, estas dos energías primordiales entran en conflicto, pues la fuerza
fermiónica, expresada políticamente, en el individualismo liberal, es resistida por la energía
bosónica, expresada políticamente, en el comunitarismo indígena. Ahora bien, nuestros
conflictos y problemas se suscitan cuando, como fruto del desconocimiento de la alteridad
jurídica, expresada en el derecho consuetudinario, se trata de forzar la realidad a una sola
polaridad que se entiende como civilizada frente a la otra que es interpretada como salvaje
o bárbara.

Bien, este es un primer paneo general y muy esquemático de la cuestión que nos ocupa.
Detengámonos, ahora, en la esfera del Derecho, propiamente dicha.
Civilización, cultura e identidad cultural

Siguiendo el modelo cosmológico ya esbozado, a nivel de humanidad, las energías


primordiales colapsan ora como Fermión ora como Bosón, vale decir, ora como una
polaridad en la que las energías fermiónicas de fragmentación e individuación son
hegemónicas (quedando como subalternas las energías de relacionalidad y socialización)
ora como una polaridad en la que las energías bosónicas de relacionalidad y socialización
son hegemónicas (quedando como subalternas las energías de fragmentación e
individuación). A la primera corresponde Occidente, a la segunda corresponde Oriente, de
la cual, la Indianidad es un subsistema. Así, pues, desde un punto de vista cosmológico
existen dos civilizaciones que contienen a su contrario de un modo subalterno y
subdesarrollado. He aquí, empero, que este hecho de humanidad, constituye sin embargo la
peculiaridad boliviana: está conformada por dos civilizaciones antagónicas de semejante
potencia. La no lucidez sobre este hecho, que se expresa en la hegemonía formal de una
sola civilización, ha llevado a la parálisis y bloqueo mutuo de un sistema político: el Estado
Nación boliviano, que ahora ha entrado en un proceso acelerado de entropía, debido –
internamente- al agotamiento del modelo occidental y a la pujanza del modelo amerindio y
–externamente- debido al final de la forma Estado Nación como fruto de un nuevo
paradigma científico técnico. A ello hay que añadir el hecho singular que los pueblos
andinos han entrado, el año 2000, a un nuevo ciclo de rebeliones; el primer ciclo está ligado
al nombre de Tupaj Amaru, siglo XVIII, el segundo a Tupak Katari y Zárate Willka, siglo
XIX, y este tercer ciclo signado por la guerra del agua, febrero negro, Octubre rojo, la
guerra del gas...

Al interior de ambas civilizaciones co-existen las culturas que son variaciones del principio
individualista, Occidente, o del principio comunitarista, Oriente. En nuestro caso, culturas
de ambas Parcialidades de lo humano, también hacen su juego entre nosotros: las culturas
occidentales se han asentado en las zonas urbanas, preferentemente en Tierras bajas, y las
culturas indígenas han sido empujadas hacia las zonas rurales, actualmente copan las
periferias de las ciudades, y preferentemente ubicadas en Tierras altas.

Ahora bien, las ciencias sociales, siguiendo el paradigma newtoniano -cartesiano e incluso
kantiano, consideran la Cultura como una dimensión más de la realidad humana. Así se
habla de la política, de lo jurídico, de lo social, de la educación, de la religión, de la ciencia,
. .. y de la cultura: como un compartimento más. En el mejor de los casos, la cultura es
sinónimo de identidad cultural, comprendida como el conjunto de recuerdos, símbolos,
sueños, creencias, valores, pasiones, comportamientos, sensibilidades que constituyen la
esencia de un pueblo. Pero aún en este caso, se pretende que ésta identidad cultural, de
hecho, no influye sustancialmente en lo político, económico, social, educativo, jurídico,
científico, ...dimensiones que estarían guiadas por una pretendida identidad universal.

De hecho, empero, investigaciones más empíricas muestran que no existe acto político,
económico, jurídico, educativo, científico, tecnológico, artístico que no sea cultural, es
decir, inscrito en una matriz o contexto englobante de una cultura particular y concreta. Por
este motivo no es posible hablar de economía, política, religión, justicia, ecología, ciencia,
tecnología, de una forma neutra, sino que es más conveniente hablar de cultura económica,
cultura política, cultura jurídica, cultura educativa, cultura tecnológica, cultura artística, etc.

En última instancia, la cultura es el conjunto de creencias, instituciones y prácticas por las


que un pueblo afirma su presencia en el mundo en un momento dado del espacio y del
tiempo. Con otras palabras, toda cultura reposa en un mito arquetípico, comprendido
como aquello en lo cual se cree, sin ser conscientes que se cree en ello, pero que impregna
toda la cultura, constituyendo su alma profunda.

Este re-centramiento cultural de las ciencias sociales, nos permite afirmar que toda
sociedad ha desarrollado una cultura jurídica particular, de acuerdo con el mito profundo
que le es propio y en interacción directa con las otras dimensiones de su realidad particular,
que no puede ser comprendida, ni juzgada, a partir del mito de otra cultura. Esto último es
muy importante tener en cuenta y constituye, por cierto, el déficit occidental por
antonomasia: creer que su particularismo es universal.

Superar el etnocentrismo jurídico occidental moderno

El primer texto que conozco sobre el Derecho consuetudinario en Bolivia es también la


primera publicación que hizo el CEJIS allá a mediados de los años setenta, debido a Susana
Chiarotti. Veinte años más tarde, el Ministerio de Justicia ha iniciado un tímido
acercamiento a la “Justicia comunitaria”, con incipientes ensayos de aproximación,
importantes sobre todo por provenir nada menos que del Ministerio de Justicia. Marcelo
Fernández, con La Ley del Ayllu, ya nos hace una contribución más seria a esta
problemática. Otro tanto viene ocurriendo en el resto del hemisferio. Mi introducción al
tema se debe a la lectura del debate aparecido en el boletín del Centro Monchanin, de
Montréal, que, luego, se llamaría Interculture, dirigido por Robert Vachon, bajo la fuerte
influencia intelectual de Raimon Panikkar. Desde esa escuela de pensamiento está
pergueñada esta notita.

La literatura que he leído sobre el tema, sugiere, en general, que el interés por las culturas
jurídicas autóctonas, persigue en realidad la finalidad de integrarlas mejor en la cultura
jurídica occidental del Estado Nación moderno, considerado nomás como la única e
inexorable Vía para toda la humanidad. La intención de respetar los usos y costumbres, no
conlleva también la voluntad de sustraerlas a la acción de los mitos del Occidente moderno:
el progreso, el desarrollo, la lucha contra la pobreza, las metas y desafíos del milenio, en
fin, la civilización, bajo el control del Estado Nación. Se puede percibir cierta preocupación
por transformarlas hacia los patrones del Derecho positivo y, en cualquier caso,
controlarlas. Piénsese en la asignatura de Justicia Comunitaria en la Facultad de Derecho de
la UMSA.

Se sostiene que no existe el Derecho sin un reconocimiento legal del Estado, puesto que
sólo hay Derecho, si éste es definido como tal por el que representa el interés general y el
bien común. A lo más, se habla de aceptar ciertos acomodamientos en los códigos y leyes
modernas, pero se rechaza totalmente la posib ilidad de relativizar los fundamentos, la
naturaleza y los presupuestos de la cultura jurídica civilizada, estatal, antropocéntrica,
occidental y moderna. Mientras esta finalidad integracionista esté presente, no habremos
superado la etapa del monoculturalismo y del totalitarismo jurídico, aunque se presente
bajo la apariencia de un pluralismo multicultural.

Pero he aquí que este monoculturalismo jurídico no se sitúa tan solo a nivel de la finalidad,
sino también, a nivel de la naturaleza y de la metodología mismas de la ciencia jurídica.
Ambas se encuentran prisioneras de los mitos de la cultura jurídica moderna occidental:
civilizacionalismo, evolucionismo, antropocentrismo, autonomismo, estatismo,
soberanismo, etc. Nos vamos a limitar, empero, a sus dos mitos primordiales: el monismo
unitarista y el totalitarismo de la razón. Si no comprendemos la relatividad del Derecho
positivo, la Asamblea constituyente puede terminar en un bloqueo entre las dos lógicas
jurídicas antagónicas que nos constituyen fácticamente.

Diálogo civilizatorio y enfoque diatópico

Para sustraer el estudio del pluralismo jurídico de los límites impuestos por el marco
occidental unitarista, Panikkar sugiere tomar conciencia, en un primer momento, de la
situación diatópica en la que se encuentra actualmente la humanidad. Para ello es preciso,
antes, exponer qué entiende por homeo-morfía.

Culturas jurídicas homeomórficas

A lo largo del mundo existen, no sólo múltiples variantes, modelos y aplicaciones de lo que
la cultura occidental mo derna denomina “Derecho”, sino también múltiples culturas
jurídicas cuyas diferencias no son tan sólo de procedimiento, sino que entrañan diferencias
sustanciales, es decir, diferencias en sus respectivos softwares de civilización. Las
diferencias son tan radicales, que podemos sostener que no existe ninguna analogía posible
entre ellas. Lo más que se puede decir es que se trata de culturas jurídicas homeomórficas,
es decir, que sólo se pueden constatar equivalencias funcionales entre ellas, puesto que,
epistemológicamente, son sustancialmente diferentes en lo que se refiere a su naturaleza
más profunda: Bosón y Fermión.

Es necesario tomar consciencia, como sugiere Panikkar, que las nociones mismas de
Derecho y Juridicidad son típicamente occidentales; brotan, en efecto, de su mito fundante
basado en la escisión, la separación. Y, por tanto, a pesar de su pretensión de universalidad,
no dejan de ser una ventana entre otras sobre el mundo, un lenguaje especializado entre
otros. Tengamos en cuenta que la palabra "Derecho" no existe como tal en las culturas,
tanto amerindias como asiáticas, de la civilización oriental. Es más, en su concepción del
mundo, en sus mitos fundantes, basados en el continuo, estas culturas no se plantean
siquiera la posibilidad que el ser humano pueda tener derechos, puesto que, como sostiene
Robert Vachon, lo que prima en ellas es un sentimiento y una responsabilidad de
agradecimiento y de solidaridad cósmica. Así, pues, no existen equivalentes sustanciales
de la palabra "Derecho" en todas las culturas, sino tan solo equivalentes homeomórficos.
Panikkar muestra cómo en la cultura hindú, el equivalente de Derecho sería la noción de
swadharma y en la cultura autóctona norteamericana de los Iroqueses, Vachon nos informa
que el equivale nte del concepto de Ley se denomina Paz Cósmica; entre los guaraníes,
probablemente, lo sea el concepto de Ñande Reko. En estos casos, como en muchos otros,
los "títulos" y "derechos" son definidos teo-cosmo-céntricamente y les parece inconcebible
que puedan ser definidos desde una óptica antropocéntrica y, menos aún, que lo sean por
un Estado Nación soberano, es decir, compuesto de individuos soberanos. Esto nos muestra
que nuestros modos respectivos de inteligibilidad son radicalmente distintos.

En este sentido, una de las características centrales de la civilización occidental es que su


software procede por la primacía del principio de no contradicción: una cosa es lo que es,
en la medida que ella no es otra cosa. El proceso de conocimiento se desarrolla, de entrada,
afirmando la diferencia. Toda la noción occidental del Derecho, según Vachon, se
fundamenta sobre este principio, que el ser humano es distinto del resto de la creación y de
lo increado. Pero he aquí que esta forma de inteligibilidad no es única, pues se puede
proceder, como demuestra la física cuántica, por el principio de relacionalidad y no -
dualidad o unidad dual: una cosa es lo que es en la medida que ella es el todo del Ser; en la
medida que ella es relación y se encuentra ligada a los otros y a la realidad entera; en la
medida en que ella no se encuentra separada sino en armonía y en estado de no dualidad
con todas las otras dimensiones de la realidad. No se insiste sobre el "otro", puesto que es
considerado como una dimensión constitutiva de sí mismo, al modo como se relacionan la
materia y la antimateria, la onda y la partícula. Todas las culturas jurídicas indígenas y
tradicionales se fundan, de acuerdo a Panikkar, sobre este principio de no dualidad o unidad
dual; de acuerdo a Vachon, según el principio de la primacía del Todo sobre el individuo;
desde mi punto de vista, siguiendo los principios de la física cuántica, según el principio de
relacionalidad, complementariedad de opuestos y tercero incluido. Todas estas
perspectivas, empero, mentan hacia lo mismo.

Es, pues, muy importante descubrir la existencia y la naturaleza de los homeomorfismos


entre las diversas culturas jurídicas del mundo, y esto en los distintos niveles de cada
cultura jurídica, lo que prepara el terreno a una fecundación mutua en un diálogo que
Panikkar llama diatópico.

La interpretación diatópica

Panikkar sostiene que el estudio del pluralismo jurídico precisa de una nueva hermenéutica,
que no sea simplemente morfológica o diacrónica. La razón fundamental del Quid pro quo
entre las culturas jurídicas de la civilización occidental moderna y las culturas jurídicas
autóctonas y no modernas de la civilización amerindia, en este caso, es la de haber olvidado
que la distancia que hay entre ellas, no es tan solo factual (interpretación morfológica) o
temporal (interpretación diacrónica), sino que se trata, sobretodo, de una distancia espacial,
es decir, que nos encontramos frente a distintos topoi o visiones cuyos postulados mismos
son radicalmente diferentes, puesto que no han desarrollado sus modos respectivos de
inteligibilidad a partir de una tradición histórica común. La occidental proviene de una
religión de proclamación y las amerindias de una “religión” de manifestación.
La distancia que hay que superar no es tan solo de tipo factual en contexto homogéneo,
pues no se trata de examinar un texto por analogía, explicitación, explicación, comparación,
yendo del pasado al presente, como si se tratara de revelar la riqueza de una tradición a
alguien que no la conoce (intepretación morfológica). No se trata tampoco tan solo de ir del
presente al pasado, intentando superar los anacronismos y la brecha temporal que nos
separa, tomando conciencia de la heterogeneidad del contexto e intentando integrar este
último para comprender mejor las diferencias (interpretación diacrónica).

Coincido con Panikkar y Vachon que sostienen que hace falta dar un paso más, en el
sentido de asumir que nuestras respectivas formas de pensar, nuestros criterios, nuestros
postulados fundamentales y aún las preguntas formuladas, no son las mismas, debido a que
una se basa sobre la energía fermiónica y la otra sobre la energía bosónica. Dicho de otro
modo, cuando se intenta comprender el sentido de un texto, de hechos que hemos reunido o
simplemente de una experiencia humana, estando todo ello situado fuera de nuestra propia
cultura, no se puede pretender, a priori, que las reglas que gobiernan la interpretación de
este texto, de estos hechos o de esta experiencia, sean los mismos que los de nuestra propia
cultura. Hace falta, pues, examinar a fondo nuestros postulados, nuestras estructuras
mentales y nuestros mitos profundos, para ver si son o no los mismos. Para comprender las
otras culturas jurídicas no occidentales y no modernas, no basta tomar conciencia de la
originalidad de sus procesos y lógicas socio-jurídicas (sistemas y estructuras propias), sino
también de sus visiones y horizontes, es decir, de los mitos de sus topois propios
(interpretación diatópica).

La interpretación diatópica, pues, es aquella que intenta descubrir estas distintas culturas
jurídicas radicalmente diferentes, reuniéndolas (no yuxtaponiéndolas) en un diálogo que
permita la emergencia de un mito con el que se pueda entrar en comunión y que permita
comprendernos bajo un mismo horizonte de inteligibilidad, sin que este horizonte sea
exclusivamente el de una sola cultura jurídica (dia-tópico: que atraviesa los topoi para
alcanzar el mito del cual éstos son la expresión). La interpretación diatópica es la que
intenta comprender la textura del contexto, para superar la distancia, no del presente
respecto al pasado o del pasado respecto al presente, sino del presente respecto al presente.

Enfoque dialogal

A un segundo nivel, es necesario que el estudio de las culturas jurídicas supere también los
límites de la forma moderna de comprensión de la realidad, basada esencialmente en la
conceptualización, pues un concepto sólo es válido allí donde ha sido concebido.
Precisamos de un enfoque dialogal (dia -logos), es decir, que atraviese el logos para
alcanzar un terreno común que el logos en solitario no podrá jamás expresar y que aquí
denominamos mito.

Hemos de sacar el estudio del pluralismo jurídico del cuadro dialéctico en el que se
encuentra prisionero, liberándolo del totalitarismo del logos, lo cual sólo puede llevarse a
cabo por una aproximación dialogal. Se trata de alcanzar desde el interior y en una
comunión mítica personal, los mitos profundos que sostienen y nutren los sistemas
jurídicos de las distintas culturas, dejándose interpelar personalmente por ellos y por
aquello que trasciende, impregna, distingue y pone en relación estas culturas jurídicas
respectivas.

Postulado de base

El diálogo dialogal, por así decir, se fundamenta en el postulado básico de que nadie en
solitario (ya se trate de un individuo o de una cultura o de una civilización) posee la
capacidad de acceder al horizonte universal de la experiencia humana y que sólo si no se
postulan desde un solo lado las reglas del diálogo, el Hombre puede alcanzar una
inteligencia más profunda y más universal de él mismo, para cumplir así su propia
realización.

Más allá de la dialéctica

Ya hemos mencionado que no es posible comprender una cultura jurídica, distinta a la


nuestra, tan sólo con el instrumental conceptual propio a la cultura jurídica occidental. Nos
hace falta conocerla a partir de su propio sistema, su estructura, su modelo, su lógica, su
propio modo de inteligibilidad.

Podemos considerar a las otras culturas jurídicas como simples objetos de conocimiento,
como hechos históricos, cuantificables, objetivables, analizables, conceptualizables y aún
inteligibles, pero ellas son mucho más que todo esto. Se trata de realidades existenciales,
personales, sagradas, míticas: algo de infinito para aquellos que las viven. No se sitúan tan
solo en el campo del logos sino también del mito, es decir, en el campo de las diferencias
últimas y fundamentales.

Es más, no podremos comprender el sistema jurídico del otro a menos que nos dejemos
conquistar por su corazón mítico. En el interior de los sistemas jurídicos existe una
intencionalidad última, que es su corazón y su alma, que asegura la perennidad profunda, a
pesar y frente a las presiones provenientes del exterior. Esta intencionalidad se encuentra
enraizada a nivel de l mito, incluso en el sistema jurídico moderno del Estado Nación, el
cual se funda en el mito de la supremacía de la razón y de la ciencia newtoniana.

Toda cultura jurídica es más que un sistema, una estructura, una lógica, un Logos, puesto
que es un todo, un universo, una visión del mundo; en otras palabras, toda cultura jurídica
posee o, mejor dicho, está poseída, por una dimensión mítica. En efecto, ésta no es tan solo
aquello de lo cual yo tengo conciencia y lo que yo pienso objetivamente de ella o de
manera verificable, sino también y esencialmente lo que hace posible que yo pueda tomar
conciencia de ella.

Esto significa que el tratamiento dialéctico de los juristas, sociólogos, etnógrafos,


antropólogos,... aunque necesario, es insuficiente para captar las culturas jurídicas en lo que
éstas son existencialmente, pues éstas escapan a un análisis únicamente objetivo, lógico,
teórico, el cual puede llegar a ser una profanación, si se pretende autosuficiente y no se
acompaña de una comunión mítica. El descubrimiento de los distintos universos jurídicos
no debe pasar forzosamente por los antropólogos, etnólogos, sociólogos con sus teorías y
metodologías, las cuales pueden ser útiles, pero también un obstáculo al conocimiento y al
estudio del pluralismo jurídico. Hay que ser conscientes de este peligro.

Descubrir y conocer al otro desde el interior: la comunión mítica

Sólo podemos alcanzar al otro descubriéndolo, no tan sólo como objeto de inteligibilidad,
aliud, sino como alguien en sí, alius. Debemos captar lo que el otro piensa y cree de sí
mismo y no tan sólo lo que yo pienso de él.

En este mismo sentido, sólo podremos comprender una cultura jurídica en la medida que la
comprendemos tal y como ésta es para aquellos que viven en ella. Para éstos, ella no es tan
solo un simple objeto de conocimiento, sino: a) Una realidad personal y de fe, una creencia,
en el sentido orteguiano; b) Una vida en sí. Esto es particularmente verdadero para las
culturas jurídicas indígenas y tradicionales, las cuales siempre se encuentran
constitutivamente relacionadas a lo sagrado, al cosmos y a la Vida, globalmente entendida.

Sólo se puede conocer bien a una cultura jurídica, en un diálogo dialogal, es decir, en un
diálogo entendido no como simple fuente de información, sino co mo un camino para llegar,
desde el interior, a una comprensión y realización más profunda del otro y de uno mismo y,
en ello, crecer y transformarse: auto-trascenderse. Es un diálogo en el que permitimos al
otro y a su verdad de interpelarnos desde nuestra propia vida y en nuestros propios valores.
Sólo podemos conocer a fondo aquello y aquel en quien uno cree personalmente, con una fe
personal, viviendo personalmente con él en comunión mítica. Es precisamente esta
experiencia personal vivida y de comunión mítica lo que falta en una gran parte de la
investigación y enseñanza antropológicas sobre el pluralismo jurídico del multiculturalismo
liberal contemporáneo. De ahí la importancia de completar el tratamiento dialéctico con el
tratamiento dialogal.

Una disciplina integral

Vemos entonces que una metodo-logia no basta: hace falta una disciplina, en el sentido
integral del término, que implique todo el ser y no tan sólo la razón o la inteligencia del que
lleva a cabo la investigación. Se trata más de un método que no de una metodología, lo cual
exige más que un conocimiento de captación de datos y que un conocimiento de
frecuentación intelectual. Esto exige, en un primer momento, un conocimiento de
integración al universo jurídico del otro, así como a su universo propio, sin motivación
ulterior o interesada y, en un segundo momento, una integración recíproca a este horizonte
común que, sobrepasándonos, nos impregna, nos distingue y nos conecta. En el fondo, se
trata de una sabiduría jurídica, cuya naturaleza constitutiva estriba en buscarse a sí misma.

El desafío del pluralismo jurídico a la antropología jurídica


El estudio del pluralismo jurídico, siguiendo a Panikkar y Vachon, no debe limitarse al
simple estudio de la pluralidad jurídica, puesto que la pluralidad se sitúa a nivel del logos,
mientras que el pluralismo se sitúa a nivel del mito.

No se trata tampoco de derecho comparado, puesto que ¿cómo comparar culturas jurídicas
homeomórficas, cuando precisamente no hay ni puede haber un modelo o paradigma al que
compararlas, puesto que sus presupuestos son radical y sustancialmente distintos? No se
trata tampoco de una suerte de multi- perspectivismo, es decir, de distintos puntos de vista
culturales sobre una misma cuestión. Se trata, más bien, de un diálogo entre culturas que
precisamente difieren, no sólo en la manera de formular la cuestión, sino sobre la naturaleza
misma de la cuestión, la cual no es nunca una sola y única cuestión.

Se trata, por tanto, del estudio de este horizonte común: el mito, que algunos simbolizan
bajo el vocablo Derecho, Ius y otros bajo Dharma, Ñande Reko, Sumaq Qamaña, Gran Paz
y que Vachon llama "pluralismo jurídico" o "pluralismo legal", pero que también
habríamos podido denominar, ¡qué se yo!, pluralismo qamáñico o pluralismo dhármico, si
estuviéramos en la India.

El desafío del pluralismo jurídico de Ayo Ayo

El contexto

El linchamiento de Ayo Ayo pone de manifiesto verdades que no todos los bolivianos están
dispuestos a aceptar. Hace evidente, otra vez más, que en Bolivia el Estado es sólo la
velocidad de la luz de una estrella ya apagada. El Comité de Vigilancia, desde hace varios
años, para resolver los problemas de corrupción edil, ha seguido todos los pasos y trámites
que señala la norma y que involucran a todos los Poderes del Estado y, finalmente, no pasó
nada. Nadie hace nada. A efectos prácticos, para la gente, no hay Estado de Derecho. La
Justicia republicana, el Derecho basado en el individuo, no funciona.

En segundo lugar, el año 2000 ha estallado el tercer ciclo de Rebeliones indígenas, bajo el
élan mesiánico del Pachakuti. A diferencia de los ciclos anteriores, éste encuentra, ad intra,
al Estado occidental en su momento de máxima debilidad y vulnerabilidad y, ad extra, en el
momento en que, debido al cambio de paradigma científico-técnico, la forma Estado
Nación ha llegado a su fin. Todo indica que estamos viviendo los últimos días de la
República.

Los hechos

La ley de 1551, de Participación popular, si bien reconoce los “Usos y costumbres” de las
Organizaciones Territoriales de Base, de hecho, empero, se basa en la Vía individualista,
calzada en el sistema de partidos políticos, y no en la Vía comunitaria, basada en el sistema
de cargos indígena, como sería lógico, si se acepta de verdad el Derecho consuetudinario.
(Los anteproyectos de ley sobre asociaciones ciudadanas y pueblos indígenas, no son
capaces de pensar la representación políticas desde el paradigma comunitario; siguen
pensando desde el modelo partidario) En economía, la municipalización se basa en el
principio de intercambio, viabilizada a través del dinero; no reconoce el principio de
Reciprocidad, el Ayni, como la otra energía, no cosificada, para mover la dinámica
económica local, como sería lógico si lo de Usos y costumbres, fuera más allá de esas tres
palabras. Por tanto, se da una pugna de los partidos políticos por replicar, en el gobierno
municipal, el modelo cleptocrático del gobierno central, basado en la apropiación privada
de los recursos públicos que genera el pago de los impuestos. Fruto de la inoperancia
absoluta del Estado de Derecho y la impunidad de la corrupción aceitada por el sistema de
partidos políticos, la gente del pueblo se toma la justicia por sus manos, como, por cierto,
está sucediendo en casi todo el país y, sobre todo, en las periferias de Cochabamba y Santa
Cruz. Lo que los bolivianos nos resistimos a aceptar es que ello: tomarse la justicia por
propia mano, es el indicador más fuerte de la extinción fáctica del Estado. El que la
víctima no sea un ladronzuelo o violador, sino una autoridad estatal, no hace sino revelar la
magnitud de la crisis estatal boliviana.

Pluralismo jurídico en Ayo Ayo

En primer lugar el Derecho aymara, basado en la comunidad; un subsistema suyo es la así


llamada Justicia comunitaria, para la resolu ción de conflictos locales. Luego, el Derecho
republicano basado en el individuo. Después, una interfase jurídica entre ambos sistemas.

En cuanto a lo primero. La opinión pública confunde Justicia comunitaria con Derecho


aymara, en el sentido de que todo el Derecho aymara fuese la Justicia comunitaria. La
Justicia comunitaria es un subsistema del Derecho aymara basado en la comunidad. De
acuerdo al Mallku de los ayllus de esa marka, no hubo Justicia comunitaria, en el caso de
Ayo Ayo, pues no se siguieron los procedimientos que la instituyen como tal: convocatoria
a una asamblea pública, deliberación, toma de decisiones consensuada, etc.

En lo que concierne al Derecho republicano, es evidente que no funciona en Ayo Ayo.


¡Hasta la Policía pide garantías para ir a Ayo Ayo!. No olvidar que los aymaras están en
rebelión contra el Estado. Ya se que preferimos cerrar los ojos al respecto.

En lo que atañe a la interfase de sistema, el Diputado Germán Choquewanka sostiene que la


así llamada “Justicia comunitaria” es un constructo jurídico que combina prácticas aymaras
y coloniales; “no es aymara al cien por ciento”. Choquewanka pone como ejemplo el
simbolismo del chicote y su uso, de origen colonial y resemantizado por los aymaras
actuales. A esta interfase hay que añadirle los ingredientes republicanos mediados por el
cine y la televisión: secuestro en La Paz, ademanes gansteriles...por ejemplo, que
complejizan aun más esta interfase jurídica. Si los aymaras pueblerinos de Ayo Ayo no
hubieran asumido colectivamente la corresponsabilidad del hecho, las cosas nos serían más
fáciles: sería un simple delito de homicidio, un magnicidio si se quiere; pero no, nos
complican las cosas, tanto para dar argumentos a los racistas: los aymaras son unos
bárbaros; como relativizando los argumentos románticos: la Justicia comunitaria no mata.
La verdad es más compleja y más inquietante. El Derecho aymara no es antropocéntrico; es
cosmocéntrico. El Derecho positivo, en cambio, es antropocéntrico. Por tanto, vida y
muerte significan diferentemente en ambos sistemas. Este es un tema que tenemos que ir
pensando de cara a la Asamblea constituyente, pues será el corazón del debate acerca de los
derechos fundamentales.

Conclusiones provisionales desde el municipalismo

Los hechos de Ayo Ayo muestran cómo el subsistema municipal no puede funcionar si el
sistema estatal en su conjunto no funciona. El paradigmático vía crucis del Comité de
Vigilancia (Véase La Prensa del 20 de junio) muestra que los tres poderes del Estado no
tienen ninguna capacidad de cumplir sus competencias. A efectos prácticos, no existe
Estado en Bolivia. Lo que hay es un peligroso simulacro. Este supuesto debe, sin embargo,
orientar las políticas de transición epocal del Ministerio de Participación Popular, si no
quiere contribuir a maximizar la entropía del sistema estatal.

El municipio de Ayo Ayo muestra, además, cómo el intento republicano de incluir a la


civilización indígena en el modelo occidental, a través de la descentralización municipal, no
ha funcionado. La tesis republicana de la “Inclusión”, en Bolivia, ha vuelto a fallar. La tesis
del Municipio indígena, como una herramienta para empezar a tejer la complementariedad
de sistemas, no consiguió la masa crítica suficiente para ser implementada; se hizo lo que se
pudo; esta tesis ha quedado rebasada por la perspectiva de la Asamblea constituyente.

Los municipios mayoritariamente indígenas, 230 del total, son una muestra de que el
encuentro de las dos civilizaciones, en un espacio administrativo local, es perverso para
ambas civilizaciones: ninguna de las dos pone en escena lo mejor de sí mismas;
implementan lo peor de ambos sistemas, con el consiguiente bloqueo mutuo. El
municipalismo republicano, como sostiene Moisés Mercado, ha muerto en Ayo Ayo; el
municipalismo comunalista debe trascenderse en el rediseño de una nueva estatalidad,
siguiendo el modelo del Ayllu: la parcialidad de las tierras bajas, más occidental: fermión, y
la parcialidad de las tierras altas, más indígena, bosón, se complementan en un taypi estatal
de unidad dual, de acuerdo al modelo cosmológico, amerindio y cuántico, de la dualidad
onda/partícula.

El monoculturalismo del Estado boliviano, que no expresa a sus mayorías indígenas, es la


causa principal de su actual declinación y caída. La Asamblea constituyente es la
posibilidad histórica que tenemos de poder dar un salto cuántico hacia un modelo jurídico
basado en la Unidad dual de dos sistemas: uno, el Derecho basado en el individuo y, el otro,
el Derecho basado en la comunidad. Un Estado: dos sistemas.
Algunas implicaciones prácticas generales

Un enfoque diatópico y dialogal del pluralismo jurídico conlleva forzosamente cambios de


perspectiva en el tratamiento y enfoque de distintos aspectos de lo jurídico, los cuales no
son tan sólo adaptativos o circunstanciales, sino fundamentales. A continuación sugerimos
algunos de estos cambios, para tener en cuenta en el debate constitucional, que nos
aparecen como más importantes, dado su carácter central.

Los usos y costumbres, como base del orden social

El Estado y su sistema jurídico no pueden ser considerados por más tiempo como el único,
ni el mejor garante del orden social, contrariamente a una opinión largamente difundida en
los medios jurídicos. La costumbre, como base y fundamento del orden social, precede en
mucho al Estado de Derecho moderno y persiste, como tal, allí donde éste no ha
conseguido eliminarla.

Las culturas jurídicas de base comunitaria, se articulan entorno a la costumbre, que puede
ser renovada y ampliada, pero siempre preservando las costumbres anteriores, lo que
permite garantizar las conquistas, que le aseguran la independencia en relación a poderes
exteriores. Esta costumbre, cuando no se la ha eliminado, se la ha considerado como
subsidiaria del derecho del Estado. Este proceso de supeditación se produjo primero en
Europa, entre los siglos XVI y XIX, exportándose progresivamente a todos los países
colonizados y prosiguiéndose en los Estados postcoloniales. Los efectos negativos de esta
supeditación de la costumbre al derecho unificador del Estado han sido estudiadas
ampliamente por Badie.

La imposición del Estado nación europeo a sociedades colonizadas, ha provocado la


destructuración de la vida comunitaria en su jerarquización, la cual aseguraba, por su
diferenciación social, la cohesión y el equilibrio de la comunidad. En la mayor parte de
culturas comunitarias la diferenciación es considerada como pre-requisito necesario para
que cada cual sea indispensable al otro. En una estructura social de este tipo, cada cua l es
rico de lo que es propio a los otros, lo que impone un límite a la competición destructiva.

Esta concepción del orden social, basado en costumbres orientadas a mantener las
diferencias entre los miembros de la comunidad para asegurar su cohesión y pervivencia, a
través del principio de complementariedad de opuestos, ha sido sustituida por la forma
Estado Nación, el cual funda su unidad, como se sabe, no en la diversidad complementaria,
sino en la uniformización garantizada por la sumisión a un mismo poder, basado en los
principios de identidad, no contradicción y tercero excluido. Esta uniformización conlleva
la juridización legalista de todas las relaciones del Estado con los ciudadanos, a través de
leyes y decretos, que son impersonales y cambiantes, puesto que el Estado los puede
modificar continuamente. La persistencia de la costumbre, diversa y plural, que
proporcionaba una seguridad a cada cual, deja paso a una ley única, que por su carácter
cambiante, no ofrece ninguna seguridad, ni personal ni comunitaria.

En las culturas comunitarias, sólo pueden vivir juntos aquellos que son distintos, puesto que
la vida es un proceso en el que uno se identifica progresivamente, no con el otro, del cual
debemos ser diferentes, sino con la totalidad de la comunidad, con la vida cósmica y con la
vida divina. Se puede observar, en todas las culturas comunitarias, cómo el principio básico
de su cultura jurídica es el de la cooperación, el Ayni, pues lo importante es que la
comunidad (que comprende no tan sólo a la comunidad humana, sino también a la
comunidad de las Waka y a la comunidad de la Sallqa, para decirlo andinamente),
mantenga su cohesión y armonía. La administración de la justicia, por tanto, se basa más en
la cooperación que en la coerción, pues las sentencias no se orientan tanto hacia el castigo,
cuanto hacia la reparación del daño causado, en una voluntad de reconciliación.

Recuperar y reactualizar los Usos y costumbres, ya puestos embrionalmente en valor por la


ley 1551, expresión por excelencia de las culturas jurídicas tradicionales y autóctonas, es
una manera de demostrar que el orden social no depende exclusivamente del
establecimiento de un Estado de Derecho unificador. La ausencia de un Estado de Derecho
no implica automáticamente la anarquía social, en la medida en que la costumbre articule y
regule las relaciones sociales. Más aún, el Estado de Derecho puede ser un gran destructor
del orden social, aún cuando sus principios ideales sean los de la democracia y la justicia.
Es necesario disociar, de una vez por todas, el orden social del Estado de Derecho, pues
éste no puede pretender poseer la exclusividad del buen orden social.

Relativización de la pretensión de universalidad de los Derechos Humanos, desde la


perspectiva intercivilizatoria

Históricamente, los Derechos Humanos se han instituido para garantizar la dignidad y el


respeto de la vida de las personas, frente a los abusos del Estado Nación moderno. La
expansión de éste, como modelo universal, ha conllevado que los Derechos Humanos sean
considerados como universales. Pero un cuestionamiento, desde la perspectiva civilizatoria
que hemos esbozado al comienzo, nos revela que éstos, si bien necesarios y pertinentes,
frente al poder abusivo del Estado Nación, no pueden ser considerados como universales en
sus postulados filosóficos fundamentales, pues corresponden sólo al lado Fermión de la
totalidad del ser.

Siguiendo a Raimon Panikkar, veamos cómo algunos de estos postulados están inscritos en
el corazón mismo de la civilización occidental y, por tanto, no pueden ser considerados
como universales y menos trans-culturales.

En primer lugar, como consecuencia de la escisión Creador-creatura del mito fundante del
Génesis, tenemos la separación individuo-sociedad, que considera a la sociedad como una
agregación de individuos, como una superestructura que, fácilmente, puede devenir una
amenaza para el individuo, el cual defenderá su dignidad a través de los Derechos
Humanos. En una cultura de base comunitaria, en cambio, la persona y la comunidad se
encuentran en una relación ontológica y no en una situación de confrontación: la
comunidad es la persona y la persona es la comunidad, y es de la armonización entre ambas
dimensiones que surge el respeto y la dignidad y no tanto de la proclamación de unos
derechos abstractos, por muy ideales y perfectos que nos puedan parecer.

En esta misma lógica, se ubica la separación humanidad-cosmos. El cosmos es considerado


como una infraestructura inerte y el individuo se ubica entre éste y la sociedad. Los
Derec hos Humanos defienden, ante todo, la autonomía del individuo. En cambio, en la
civilización oriental y, por consiguiente, en las culturas autóctonas de base comunitaria,
esta pretendida autonomía respecto del cosmos, no sólo no tiene sentido, sino que es
contraria a sus cosmovisiones, pues lo humano y lo cósmico se encuentran, también en este
caso, en relación ontológica; son parte del continuum.

En tercer lugar, y como corolario de los dos anteriores, encontramos el principio del orden
democrático, que reposa en la concepción de la sociedad, no como un orden jerárquico
fundado en una ley cósmica, sino como la suma de individuos libres que se asocian para la
realización de un fin que no se podría alcanzar de otra manera. Aún en este caso, esta
concepción del orden social, basada en la razón democrática que establece el principio del
gobierno de la mayoría, no es ni universal ni transcultural. En la civilización oriental y sus
diversas culturas, el orden social no responde tan sólo, ni en primer lugar, a lo s derechos
humanos, pues entran en juego también el orden cósmico y el divino. Lo que no significa,
por tanto, que sean automáticamente sociedades dictatoriales u opresoras: sostener que la
disyuntiva socio -política se encuentra en la elección entre democracia o dictadura, puede
ser una forma muy sutil de totalitarismo.

Veamos el ejemplo de la India que trae Panikkar. En ella la palabra dharma ocupa un lugar
central, parecido al Ius latino, sin por ello significar ni mucho menos lo mismo. Su
significado es múltiple e irreducible a una sola palabra en las lenguas latinas o germánicas:
significa, a la vez, lo que mantiene la cohesión, lo que da energía a todo lo que es y, por
ende, a los tres mundos de la cosmología hindú: triloka.

En este contexto, el equivalente homeomórfico de los Derechos Humanos podría ser el


svadharma, que es el dharma inherente a cada ser concreto. Por tanto, el punto de partida
no es el individuo, sino la totalidad resultante del encadenamiento complejo de la realidad
entera. La respo nsabilidad de cada cual, estriba en encontrar su lugar en la red de relaciones
de la sociedad, del cosmos y de la esfera trascendente de sentido.

Siguiendo en este punto de vista, las sociedades indivisas y comunitarias tienen los
siguientes puntos de vista:

• Lo que mentan los Derechos Humanos no son tan sólo los derechos individuales, puesto
que lo humano no se encarna tan solo en el individuo. El individuo es un constructo cultural
y, por tanto, no puede pretender ser el sujeto último de los derechos
• Los Derechos Humanos no son tan sólo los "Derechos del hombre", puesto que
conciernen igualmente a la totalidad del desplegamiento cósmico del universo, del cual, por
así decir, los mismos dioses forman parte. Los animales, todos los seres dotados de
sensibilidad y las criaturas supuestamente inanimadas, también están implicadas en la
interacción concerniente a los derechos "del hombre", al punto que podemos preguntarnos
si existen derechos humanos específicos y si esta especificidad no es, una vez más, una
simple abstracción cultural que va contra sí misma desde el momento en que olvida su
carácter práctico.

• Los Derechos Humanos no son tan sólo derechos, son también deberes y los dos aspectos
son interdependientes. El género humano posee el "derecho" de sobrevivir, tan sólo si
cumple con el deber de mantener el mundo puesto que nuestro derecho a la vida no es otra
cosa que una participación en el conjunto de la función metabólica del universo entero.

• Los Derechos Humanos no son algo absoluto en sí, sino algo intrínsicamente relativo, en
virtud de ser un conjunto relacional entre distintas entidades, las cuales se encuentran
determinadas por estas mismas relaciones.

El enfoque diatópico y dialogal de los Derechos Humanos debería llevarnos a la evidenc ia


que éstos son una ventana sobre el mundo, pero no la única. No se puede pretender que
constituyan el punto de referencia universal en todo lo que concierne a la dignidad humana,
puesto que la noción de derecho no es ni universal ni transcultural. Una pe rspectiva liberal
acepta el "derecho" a no querer tener derechos, sin por ello pensar que se caería
automáticamente en una situación de opresión o dictadura. Es más, la imposición de los
Derechos Humanos, como único referente de la dignidad humana, es una forma de
dictadura de la razón, logos.

El Derecho Internacional es un Derecho de los Estados y no de las naciones originarias,


pueblos indígenas y comunidades.

Ya hemos mencionado que el Estado Nación no puede ser considerado como el único
marco que garantiza el orden social interno de un pueblo. En el mismo sentido, tampoco
puede ser considerado como la única instancia por la que se articula el llamado Derecho
Internacional, pues éste no reconoce a la mayoría de naciones y pueblos a través del mundo
(más de 5000), limitándose a unos 10 Estados soberanos y a unos 150 Estado débiles y
unos 50 simulacros estatales mantenidos artificialmente por la cooperación internacional.
El llamado Derecho Internacional no permite actualmente un verdadero encuentro entre las
naciones y pueblos del mundo, pues se basa exclusivamente en la cultura jurídico-política
de la modernidad occidental, el Estado-Nación soberano que, además, ha entrado en crisis
terminal en todo el mundo. Este modelo, generado en Europa entre 1648 y 1945, reduce la
comunidad de naciones y pueblos a la colectividad de Estados, limitando las negociaciones
entre naciones, a las negociaciones entre Estados; pero, he aquí que esto último, el internet
lo está perforando dramáticamente.
En el marco del Derecho Internacional, ningún Estado Nación reconoce plenamente
ninguna otra cultura jurídico-política que la estatal, negando validez a aquellos sistemas
jurídicos propios de las naciones autóctonas e indígenas. Este Derecho Internacional ha
sido elaborado por occidentales, sobre bases de la cultura occidental exclusivamente y de la
cultura política moderna del Estado Nación. Debemos reconocer que el llamado Derecho
Internacional ha sido creado por algunos estados occidentales para asentar la pretensión
universalista de su sistema. Es obvio que se trata de un marco exclusivamente
monocultural.

En un enfoque diatópico y dialogal, lo primero que hay que considerar es la noción misma
de soberanía, intrínseca al Estado Nación, pero ausente de la cultura jurídico-política de la
mayor parte de pueblos indígenas y autóctonos. En ellos, la única ley soberana que
gobierna toda la vida sobre la tierra, es la Ley de la Realidad, a la que hay que armonizarse
si se quiere sobrevivir como pueblo.

Vachon pone el ejemplo de la Confederación Iroquesa, con una larga tradición diplomática
internacional en relación a las naciones europeas que colonizaron América del Norte. Esta
no se basa, ni en el principio de soberanía, ni en el principio de poder, sino en el principio
ontológico de la Gran Paz. Es por ella y en virtud de ella que los distintos tratados fueron
establecidos, basados siempre en el respeto de las naciones europeas, respeto que no fue
recíproco, pues en todos los casos éstas transgredieron dichos tratados. Actualmente, se
niega validez a dichos tratados en virtud del Derecho Internacional y de la soberanía de los
Estados.

Como corolario se podría afirmar que el Derecho Internacional será un derecho injusto, en
relación al conjunto de los pueblos y naciones autóctonas del planeta, en la medida que no
acepte una modificación radical de sus presupuestos que podemos resumir en los siguientes
puntos:

? • Aceptar la existencia de culturas jurídico-políticas y de concepciones de


nación y pueblo distintas y tan válidas como las vehiculadas por el Estado Nación,
sobre todo ahora que éste ha entrado en un proceso de entropía.

• Aceptar que las relaciones internacionales importantes no tienen por que ser
siempre interestatales, es decir, basadas en el Estado Nación.

• Aceptar que estas relaciones no precisan necesariamente de la existencia de un


principio formal y aún menos soberano al que deban supeditarse.

• Aceptar que estas relaciones deben tomar su autoridad, primero y ante todo, de la
Realidad en su conjunto y no tan solo de lo humano, lo divino o lo cósmico.

La superación del monismo jurídico del Estado Nación moderno es una condición sine qua
non para lograr una paz real y duradera entre las naciones y pueblos de la tierra.
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8.3 Estructura del Sistema Político Administrativo Andino, Félix López Madani

MODELO DEL SISTEMA POLÍTICO ANDINO

Por: Felix López M.


Sullka Amawta

INTRODUCCIÓN:

Nuestro pueblo, desde milenios de años antes de la llegada de los españoles, se


estableció en la actual región denominada los andes, ubicado en el continente de
Awyayala; después de mas de 300 años de colonización, la situación de nuestros
abuelos pasaron a otras manos; este es el periodo Republicano, donde los
españoles y criollos a titulo de libre, independiente y soberano continuaron con la
opresión y sometimiento mas crudo a los abuelos de nuestro pueblo.

Nuestros antepasados desde el principio de la colonización española, pasaron de


la derrota a la resistencia cultural permanente; lo cual fue intensificado con mayor
fuerza durante la republica, pero siempre fuimos derrotados por el Estado criollo,
por eso es importante analizar sobre la situación política de nuestro pueblo.

Es decir, en todo el periodo Republicano el país ha sido manejado y administrado


por los criollos, denominados Q’ARAs y nuestro pueblo fue objeto de muchas
mentiras y engaños; por otra parte, estos bandidos continuaron con el saqueo de
las riquezas existentes en nuestro territorio; por ejemplo: el oro, la plata, el estaño,
la madera, piedras preciosas, el petróleo, ahora el gas y otros recursos.

Pero hay tenemos el resultado del manejo administrativo del País; los
responsables son los denominados Q’aras y sabemos que en todo el periodo
republicano ha sido, fracaso tras fracaso, hoy el país se encuentra en una
situación de desastre, el pueblo aymara-quechua vive peor que en la colonia; es
decir, actualmente el país vive pidiendo limosna y es una vergüenza para los
aymara -quechuas.

Debemos preguntamos, como es que teniendo tantas riquezas en el territorio,


podemos vivir pidiendo limosna, parece absurdo y ridículo, sin embargo muchas
personas siguen confiand o a los mentirosos de siempre; de quienes, han
manejado el sistema administrativo del país. Sin embargo creemos que es hora de
reflexionar y tomar decisiones para luego asumir responsabilidades históricas,
para poder enfrentar a las tantas problemas que ha sido ocasionando por el
sistema neoliberal y sus sirvientes del imperialismo.

PRINCIPIOS DOCTRINARIOS DEL PUEBLO QULLANA-AYMARA


PAREJA (paya = pänaka) chacha Warmi = payacha o pacha; La representación
de la pareja (dual) es fundamental en el ejercicio del poder político administrativo
del pueblo; porque, la unión de dos personas es considerado jaqi (ser humano) en
la sociedad del Qullana suyu.

UNIDAD (mayamaki taqini); La sociedad están organizados en unidades socio


económicos, denominados (Ayl lu). Es el pensamiento y sentimiento, lo cual está
expresado en la fuerza motriz para realizar actividades socioculturales que
posibilitan el desarrollo intelectual y material de la sociedad andina.

HERMANDAD (jila-sullka = kullaka sik’a); Expresa, vivir en armonía entre los


seres humanos de la sociedad, considerando que en la sociedad andina es
fundamental mantener las relaciones de hermandad sociocultural entre los
habitantes del pueblo.

RECIPROCIDAD (purapt’awi); Es la actividad socio económica de cooperación


mutua, del uno con el otro grupo o persona, establecido para superar las
diferencias antagónicas en la búsqueda de lograr un vinculo de hermandad y
equilibrio entre las personas, grupos sociales de la sociedad andina.

COMPLEMENTARIEDAD (jaqthaptawi); Nada se realiza o funciona aislado,


porque todo existencia se complementan con su opuesto; por eso manifiesta en
las actividades una profunda comprensión generando la armonía plena de vida.

EQUILIBRIO (chikachawi); Por norma, toda las personas o grupos opuestos


deben realizar actividades socio económicas y político administrativo del país, en
equilibrio; especialmente las relaciones sociales entre el genero masculino y
femenino que permite superar el defecto de superioridad e inferioridad.

CONSENSO (iyawsawi); Es el fundamento de una elevada conciencia para entrar


en un acuerdo entre dos o mas personas o grupos de la sociedad, para evitar la
división de grupos antagónicos que obstaculiza el proceso del avance de
actividades del ser humano en la sociedad.

ROTACION (irasiwi) Para construir y perfeccionar una sociedad, con esa visión
futurista y de acuerdo a las características del pensamiento andino; donde el ser
humano (Jhaqi) deberá desarrollar actividades socioeconómico, orgánico y el
manejo territorial en forma rotativo, principalmente en el ejercicio de los cargos
político administrativo del país.

INTERCAMBIO (chhala); Es la acción que genera la satisfacción de necesidades


socio económicas, del uno con el otro grupo o persona, que permite un desarrollo
equilibrado entre los pueblos, tanto en el contexto nacional e internacional.

INTEGRALIDAD (taqpachani); Son partes o sectores activos que conforman la


totalidad del grupo o la sociedad entera, quienes impulsarán en el accionar social,
económico, orgánico, cultural y político del estado.
TRABAJO (thaylli); Es uno de los principios fundamentales de la sociedad, donde
el Estado promueve y desarrolla el esfuerzo intelectual y físico del ser humano;
para la producción y generar riquezas para el bienestar de todos los habitantes del
país.

ABUNDANCIA (inampi); Es el resultado de una Administración eficiente de las


actividades realizadas, es el fruto del esfuerzo humano de la comunidad y de toda
la sociedad que permite una seguridad de vida y la satisfacción entera del sistema
SUMA QAMAÑA de los habitantes del territorio.

ARMONIA (askina, allina, k’achankaña) suma qamaña; Es el resultado, cuando


el ser humano ha logrado alcanzar una satisfacción completa de la vida, donde
existe un ambiente de tranquilidad y felicidad de las familias del Sapsi, Ayllu, Laya,
Wamani y en el Suyu.

CONCEPCION FILOSOFICA EN EL MUNDO ANDINO


Probablemente desde el periodo de TITI-WANAKU “tiwanaku” nuestros
antepasados comprendieron en su conciencia, sobre los efectos de fenómenos
naturales y la génesis del ser humano en el planeta tierra, akapacha; donde el ser
humano (jaqi) había concebido una FILOSOFIA propio, acorde a la imagen y
pensamiento de los Qullana -aymara.

Para los AYMARAs, la concepción de ver el mundo, tiene una interpretación muy
particular y distinto a la del occidente, porque los constructores y moradores de
Tiwanaku habían logrado comprender el movimiento y la estructura de los
cuerpos del espacio celestial, alaxa pacha, como del aka pacha planeta tierra.

Es decir nuestros antepasados a través de sus conocimientos y la sabiduría,


habían logrado comprender la existencia de las energías vitales cósmicas e
interpretaron el origen de la naturaleza, la composición, la dinámica y los efectos,
los cuales permiten y facilitan VER, OIR, SENTIR y PALPAR a los seres
humanos en el planeta.

Además, la visión Qullana-aymara expresa y define todo un proceso de desarrollo


dialéctico de la materia y energía, en el tiempo y espacio; esto significa que en el
pensamiento andino no existen entes absolutos y sueltos, como define la teoría
creacionista sustentada por la civilización occidental. Asimismo la cosmo-vision
ANDINA interpreta toda una sabiduría y los conocimientos milenarios; por
ejemplo: la lectura e interpretación del comportamiento de las estrellas y su
relación con el planeta tierra; la composición de materias físicas y sus
transformaciones de las substancias químicas existentes en el planeta tierra.
La existencia de una lógica natural de las relaciones, con un sentido de contacto
directo y causal de la complementariedad entre (materia - energía), es la
dinámica de los elementos vitales del orden cósmico que da origen y es el
generador de los seres sobre la superficie terrestre, entonces, hay esta la
concepción FILOSOFICA del Qullana-aymara, de quienes hemos habitado desde
miles de años antes en la región denominado los Andes; por lo que es importante
describir sobre esta concepción del mundo, donde existe el sentimiento común y
natural de las relaciones interpersonales del hombre-mujer, predominando así los
valores éticos, ecológicos, morales y religiosos.
CULTURA QULLANA-AYMARA:

Los Qullana -aymara como estado fue organizado y establecido desde miles de
años antes de la colonia en un espacio territorial, basado en los principios de la
doctrina del Pachakama y Pachamama, quienes desde los primeros albores de la
civilización humana comprendieron y asumieron sus responsabilidades, para
desarrollar el sistema político Qullana aymara; definido en el marco de un
pensamiento ideológico y con una visión política de Unidad y Hermandad entre los
seres humanos.

Esta comprobado que los Qullana-aymara era una sociedad organizada por tanto
nuestros antepasados se consideraban ser: hijos del sol y la luna; esta es la
expresión y símbolo de la civilización andina que conforma la pareja divina del
(chacha warmi), enmarcados en los principios Filosóficos del cosmos o PACHA, lo
cual está sustentada en el ejercicio del poder local de la Marka y sus Ayllus.

La estructura política del CHACHA-WARMI refleja y expresa el principio de Unidad


y Hermandad comunitaria de los habitantes de la sociedad, porque tenían
establecido un régimen de Reciprocidad y Equilibrio. Asimismo, estaba normado el
sistema de Rotación; entonces los aymara-quechuas conformaban en una
sociedad de trabajo y abundancia, considerando que las actividades de
producción anual eran garantizado y asegurado; esta es la razón para propugnar
la construcción del sistema político SUMA QAMAÑA; (vivir bien con riqueza); es
decir construir una sociedad de abundancia para lograr una armonía de vida
comunitaria.

CONCEPCION DUAL O BINARIO (PAYACHA = PÄCHA):

Chacha Warmi Hombre Mujer


Inti Tata Phaxsi Mama Padre Sol Madre Luna
Pacha kama Pacha mama Orden cósmico Madre cósmico
Alaxpacha Akapacha Mundo de arriba Mundo de aquí
Alaxasaya Maxasaya Posesión de arriba Posesión de abajo
Aransaya Urinsaya Posesión de arriba Posesión de abajo
Awti pacha Juyphi pacha Epoca de seco Epoca de frió
Lapaka pacha Jallu pacha Epoca de calor Epoca de lluvia
TERRITORIO:

Con respecto a la ocupación territorial, las características de la población, tanto en


el aspecto físico como en las expresiones sociales, son consideradas como
“huellas tangibles e intangibles” donde se puede apreciar una lectura semántica
del espacio geográfico, donde actualmente habitan los aymara-quechua desde
miles de años de antigüedad en un ámbito definido y establecido en un
ordenamiento territorial.

Entonces los límites de la territorialidad comprenden en una identidad cultural


milenaria, donde existen relaciones interétnicas; actualmente estas son objetos de
transferencia a los diferentes estratos sociales y la división del territorio como en:
parques de reserva, departamentos, provincias, municipios, cantones o
distritos, con lo que fueron desestructurados las organizaciones originarias del
territorio, como el sapsi, ayllu, laya, wamani, suyu y el Tawantinsuyu.

Las categorías del uso y manejo de extensos superficies territoriales comunitarias


son denominadas: manta, aynuqa, para la producción agrícola comunitaria en
parcelas, la milja y el waki porciones de tierras agrícolas de roturación y la
siembra familiar, ayjarira, para el pastoreo y la sayaña para el establo y su
vivienda, donde los habitantes originarios por siempre trabajaron la tierra en
reciprocidad, como es el ayni, la mink’a, el chuqu, la phayna y otras formas de
trabajo colectivo, los cuales deberán establecer en lo jurídico, civil y política.

Entonces en nuestra lógica se comprende Uraqi (tierra), akapacha-uraqi


(territorio), lo cual fue legado por nuestros antepasados, dotado con todos los
recursos naturales, renovables y no renovables, como la Fauna (wasa-uywa) Flora
(wasa ali) y los minerales (qhuyala) hidro carburo (qhuyala uma)

REFERENCIA PARA LA ORGANIZACIÓN Y ESTRUCTURA POLITICA ANDINO:

Para organizar el sistema Socio Económico, Político Administrativo del territorio


nuestros antepasados, primero se orientaron mirando la ubicación y movimiento
de las estrellas del Laqampu (firmamento), como a las constelaciones de
Chaqana, Qutu, Chakasilt’u, Qarwa, Q’urawa, Kunturi tapa, Ururi Apachi, Arumiri
Achachi, Suni qäna, Qhirwa qäna, K’atachilla, Q’urawa y otros del espacio sideral,
asimismo los Qullana aymara consideraban al Sol, como Padre y la Luna, como
Madre, por eso los habitantes de la región andina, hasta ahora veneran a las
estrellas del firmamento, considerado como símbolos de la civilización Qullana
aymara.

Entonces había un respeto del ser humano hacia las estrellas del araxpacha;
mundo de arriba, como también a los animales, plantas y otros del akapacha;
mundo de aquí, este es la esencia cultural de la civilización Qullana-Aymara, en
la actualidad todavía practican en muchas regiones del país, considerando que
este es la base de sustentación ideológica y filosófica del pueblo, expresado en la
estructura socio económico, político administrativo del país.
Entonces nuestros antepasados organizaron el territorio y construyeron la
estructura socio política administrativo de acuerdo a la imagen y semejanza de la
ubicación, el movimiento de rotación y traslación de las constelaciones de los
sistemas estelares del firmamento denominado cosmos (pacha) donde el ser
humano en el planeta tierra, (akapacha) estableció la practica de un régimen de
justicia social implementado el sistema de rotación y los principios fundamentales
de Unidad y Hermandad comunitario en un régimen de Equilibrio y Reciprocidad
de los ayllus de aransaya y urinsaya de cada Marka.

MODELO DE ESTRUCTURA POLÍTICO ANDINO:

Antiguamente la organización y estructura socio política andina fue constituida en


las denominadas PANAKAs, (primeras parejas); considerado hasta hoy como el
tronco genealógico de las TAMAs o grupos sociales, cada cual con sus Jatha
(semilla) conformado en familias; quienes constituían en Sapsi; es decir fueron las
células de la organización social de las Markas del Qullana-suyu, probablemente
también en Qhunti suyu, Chinchaya suyu y Qhanti suyu, los cuales conformaban
el gran Pusinsuyu o el Tawantinsuyu; (ver: L. Bertonio).

Para comprender mejor; la unidad de varias Panakas o familias formaban un


sapsi; varios sapsis, conformaban un ayllu, varios ayllus (pares) de aransaya y
urinsaya, conformaban una laya con su marka al centro; (taypi), varios layas
(pares) con sus markas, conforman un wamani; varios wamanis (pares) con sus
markas conformaron un suyu; varios suyus (pares) conformaban el gran
Pusinsuyu o el Tawantinsuyu.

El modelo de estructura político andino esta constituido con la representación de la


pareja basado en un pensamiento ideológico comunitario de Unidad y
Hermandad, para que el sistema de administración del poder político haga cumplir
el principio del equilibrio entre el género masculino y femenino en todas las
instancias y en todo ámbito; por eso hasta el día de hoy en las markas y sus ayllus
las autoridades originarias tienen la representación del (chacha warmi); hombre
mujer.

En las decisiones políticas se define por consenso, en las actividades socio


económico se practica la reciprocidad; es más, el gobierno de la marka programa
y ejecuta diferentes acciones de complementariedad entre los ayllus de alaxsaya
y maxasaya. Este es el modelo de estructura política, de una sociedad organizada
en Unidades de Producción, implementado el sistema de rotación, donde todos
los habitantes de la marka y sus ayllus deben mantener un ambiente de
tranquilidad y armonía. Asimismo en el gobierno local de la Marka, la presencia
física de las parejas representa a los territorios del alaxsaya y maxasaya. Es el
órgano regulador del poder político administrativo del sistema suma qamaña (vivir
bien con riqueza); quienes constituyen en el consejo de autoridades (Jiliri Ulaka),
como instancia superior; quien decide y conduce el destino de los habitantes o
kumuna-wawa de una Marka.
En el Tawantinsuyu, existieron grupos de intelectuales; quienes conformaban en
instituciones del Estado para brindar apoyo técnico y científico, asesoramiento en
el manejo del sistema político administrativo del gobierno comunitario, establecido
y normado bajo principios Ideológicos, Filosóficos, Políticos y Morales. Eran los
Amawtas, Wilumas, Willkas, Yumanas, quienes dotados de conocimientos y la
sabiduría; era importante el apoyo para el desarrollo socio económico, político y
organizativo de la sociedad andina, sin estos elementos los Inkas o los Mallkus
nunca habrían logrado el avance tecnológico y científico significativo para la
sociedad.

LA MARKA Y EL GOBIERNO LOCAL:

La Marka es una categoría jurídica andina considerado como centro urbano; por
su característica y el rol que cumple las Markas del tawantinsuyu, es el centro
político, administrativo y ceremonial, tiene semejanza a un Municipio moderno y
siempre debe estar situado al medio (taypi) del espacio Geográfico territorial,
compartido entre el área de Alaxsaya y el área de Maxasaya.
El territorio de Alaxsaya y Maxasaya, esta comprendido como la expresión
representativa de la pareja humana; (Chacha – Warmi); de acuerdo a la lógica
andina se considera como elementos imprescindibles para la complementariedad
del hombre-mujer (jila ch’ama – pisi ch’ama) fuerza positivo y fuerza negativo;
los cuales expresan físicamente una vida equilibrada en la sociedad, considerando
que no se reconocen la superioridad ni inferioridad entre el hombre y la mujer; por
lo que, deben cumplir el rol especifico determinado por Pachakama y Pachamama,
en el akapacha (planeta tierra).

Las autoridades determinan actividades administrativas de complementariedad


entre los Ayllus de alaxsaya y maxasaya; asimismo el ser humano cualquiera que
sea su condición y por una lógica natural asume estas propiedades entre
masculino y femenino, constituyendo de esta manera en la fuerza motriz, en la
producción y el desarrollo humano de las Markas y sus ayllus de la sociedad.

En la etapa de la administración Inka - Quya, de los Mallku - T’alla; del Pusinsuyu


o Tawantinsuyu, la Marka era la Capital o sede del Gobierno; por eso esta
catalogado como el Centro Político Administrativo y Ceremonial de las (Unidades
Socio Político Territoriales) conformado y compartido en números de Ayllus
(pares) constituidos por alaxsaya y maxasaya, de Ayllus, Layas, Wamanis, Suyus,
y el Pusinsuyu o el Tawantinsuyu.

La Marka por su condición de Capital y sede del gobierno local, constituye una
categoría superior, donde el Consejo mayor de representantes (Jiliri tanta
Ulaka) conformado por las principales autoridades parejas; (chacha–warmi)
representan al Alaxasaya y Maxasaya, denominado los Marka Mallku y Marka
T’alla, estos toman la categoría del Marka Kamani o el Llaxta Kamayuq.
Asimismo tienen constituido en las Markas, a las autoridades técnicos
administrativos, denominados (Kamani o Kamayuqs); quienes promueven y
planifican actividades de desarrollo social, económico dentro el sistema SUMA
QAMAÑA de la sociedad.

CARGOS EN EL GOBIERNO DEL QULLANASUYU Y PUSINSUYU:

HOMBRES MUJERES Cargos actuales


UPAs territorio

Irani Arkani Mit’ani Sapsi


Yanapa Sapsi
Tayña Comisario
KamachI Ayllu
Phichura Alcalde de campo
Jilaqata Ayllu
Jilarata Mantiene como tal
Mallku Laya
T’alla Curaca
Apu mallku Wamani
Apu t’alla Jatun Curaca
Qhaphaqa apu Mallku Qullana suyu
Qhaphaqa apu T’alla Desapareció
Qhaphaqa apu Inka Tawantinsuyu
Qhaphaqa apu Quya Desapareció
Tawantinsuyu
Amawta apu ulaka = Consejo Supr. de Amawta Desapareció
Marka
Marka mallku y su Marka t’alla Alcalde municipal

ESTRUCTURA POLÍTICA ADMINISTRATIVA DEL ARANSAYA Y URINSAYA:

GESTION
de CATEGORÍA DE LOS TERRITORIOS ORGANIZADOS
Gobierno SAPSI AYLLU LAYA WAMANI QULLANSUYU PUSINSUYU
9no. Cargo:
indefinido. Amawta Ulaka
Consejo de Amawtas
8vo. Cargo: Qhaphaqa apu Inka
8 años ¿? Qhaphaqa apu Quya
Amawta Ulaka
Consejo de Amawtas
7mo. cargo: Qhaphaqa apu mallku
8 años. Qhapaqa apu t’alla
6to. Cargo: Apu Mallku
4 años. Apu T’alla
5to. Cargo: Mallku
2 años. T’alla
4to. Cargo: Jilaqata
1 año. Jilarata
3er. Cargo: Kamachi
1 año. Phichura
2do cargo: Yanapa
1 año. Tayña
1er cargo: Irani
6 meses. Arkani

MODELO DEL SISTEMA POLITICO:

El propósito es interpretar y comprender sobre las bondades y valores culturales


de la sociedad andina, tomando en cuenta que la participación activa del pueblo
genera eficiencia en las instancias orgánicas del sistema administrativo; por otra
parte, el sistema de rotación establecido como norma, regula el ejercicio de los
cargos públicos del sistema administrativo estatal.

En el ámbito geográfico de las regiones todos los hombres y mujeres asumen sus
responsabilidades con los mismos derechos; esta es la imagen del sistema socio
político del SUMA QAMAÑA; por consiguiente los gobiernos locales de las
Markas andinas tienen compatibilidad con los actuales municipios, por lo que
estarían dadas las condiciones para la homologación de municipios rurales a la
categoría de Marka o gobierno local andino; donde existen la preservación de las
Unidades Socio Culturales homogéneas que cuentan con mayoría de población
Aymara-quechua.

Instaurar gobiernos locales en el ámbito geográfico del país es recuperar los


valores culturales en el marco de la estructura andina, implementando el sistema
político administrativo de la Marka precolonial, como modelo de estructura andino
para restaurar e implementar el sistema político del Suma Qamaña.

FUNCIONES DEL GOBIERNO:

Para que la administración sea eficiente, las autoridades de la Marka y sus ayllus,
cumplen los roles y funciones de acuerdo a los principios doctrinarios y normas
establecidas en el Pusinsuyu o Tawantinsuyu; velando los intereses socio
económico, político culturales de los habitantes; estas autoridades guardan una
conducta MORAL intachable, por eso se denomina de Marka Awki y Marka
Tayka (padre del pueblo y madre del pueblo) lo cual esta considerado como la
EDUCACIÓN de ética y moraleja de la sociedad andina. Una de las tareas
consagradas del gobierno, es asumir responsabilidades del estado para garantizar
una estabilidad armónica de los habitantes de la Marka y del país; por otra parte,
como elemento principal del gobierno es preservar el capital humano de la
sociedad considerado como el capital más preciado de los Ayllus y las Markas.
En el Tawantinsuyu como en Qullansuyu, ningún ser humano debe estar
desnutrido, ni debe pasar hambre, ni enfermedad, ni siquiera algún accidente; por
consiguiente, para vivir todos los habitantes deben tener lo suficiente; entonces el
rol y función del gobierno, sobre todas las cosas es aplicar los principios morales
dentro la sociedad comunitaria; para que las personas, tengan conciencia y el
valor humano, por eso los Aymara -quechuas por mucho tiempo preservaron la
esencia de unidad y hermandad, comunitario de equilibrio y reciprocidad, de
consenso y complementariedad.

Por consiguiente hasta el día de hoy el ser humano andino, los aymara-quechua
preservan y guardan con mucho respeto estos principios morales que fueron
legados por los antepasados, los responsables de quienes ocupaban cargos
públicos eran los encargados de hacer cumplir estrictamente el orden ético del:
Jani Jayramti, Jani K’arimti, Jani Lunthatamti, Jani Jiwayirimti, Jani Amtamayumti y
Jani Jiwayirimti.

Asimismo en los saludos protocolares y como advertencia entre las autoridades en


función de gobierno y de forma consecuente expresaban estos principios morales
establecido en el Qullanasuyu y en el Tawantinsuyu; por consiguiente, las
autoridades de esta manera cumplían el ejercicio pleno del poder político de la
Marka.

De acuerdo al sistema político comunitario en los diferentes niveles jerárquicos del


estado, los funcionarios asumen sus responsabilidades para regir los destinos de
la nación, constituidos en el apu amawta ulaka (consejo supremo de amawtas) y
el jiliri marka ulaka, (consejo de autoridades del pueblo) considerado como el
instrumento del poder político de la nación, quienes coordinan con otras instancias
de niveles subalternas para diferentes acciones y en forma permanente, lo que
deberá facilitar una administración sea eficiente.

Entre las autoridades, había encargados de supervisión y fiscalización,


denominados kamanis; era la (instancia del poder en la administración técnico y
jurídico) de las Markas, establecido en todo el territorio; quienes durante su
gestión de gobierno cumplen sus roles y funciones, relacionados con la
organización, la producción, la economía, la educación, el arte, la investigación
científica y tecnológico para el desarrollo socio cultural de la sociedad andina.

Los pacha kamani, tienen la misión especifica de regular el calendario y la lectura


permanente de los indicadores naturales del cosmos terrenal y celestial, eran los
encargados de prever la crisis de producción y otros fenómenos naturales de cada
periodo, lo cual permitía evitar el hambre, los fenómenos naturales y las
desgracias del ser humano en el territorio del Tawantinsuyu.
Asimismo entre las autoridades del gobierno tenían la misión de velar que todos
los niños reciban un trato justo y humano; que no falte nada y pueda recibir una
educación moral y prudente de parte del padre y madre o de los tutores,
especialmente la atención de la alimentación, la salud preventiva, la vestimenta y
la formación educativo (teórico y practica) para que en la vida y frente a la
sociedad sean responsables y honestos con su pueblo. Por otra parte, con el
propósito de adiestrar a los jóvenes de temprana edad; donde las autoridades
designadas, en cada periodo tenían la misión de organizar eventos de
competencia para diferentes especialidades que eran útiles en la vida; para el
desarrollo físico y intelectual de los niños, adolescentes y jóvenes, como en el
arte, la danza y música (festivales), los encuentros deportivos, la demostración
practica de los conocimientos científico y tecnológico, estos acontecimientos eran
organizados para determinadas edades y de ambos sexos; los participantes eran
seleccionados por edad y voluntario, tomando en cue nta la capacidad física e
intelectual de los participantes.

Otra de las funciones del gobierno era promover la atención y asistencia periódica
y permanente para los ancianos, inválidos, huérfanos, viudas del pueblo, con la
cooperación solidaria en el trabajo de cada comunidad, organizando actividades
de producción económica, a través del sistema de la phayna, el chuqu y otros de
cooperación y apoyo humanitario. El gobierno debe organizar actividades de
emergencia, asimismo el diseño para el sistema de los defensivos contra la
helada, el granizo, la sequía, las inundaciones y otros fenómenos naturales y
artificiales, garantizar en forma eficiente que la producción sea abundante en la
gestión que le toco desempeñar como gobierno de la Marka y los Ayllus del
Tawantinsuyu.

Convocar a los habitantes del pueblo a las reuniones, asambleas y cabildos


anuales, trimestrales o de emergencia, donde las autoridades darán su informe de
actividades de la gestión, los cuales serán analizados por los participantes para
luego transferir a los niveles de los consejos locales, regionales, nacional y supra
nacional para someter a una evaluación y balance de la gestión de mando de las
Markas y el Suyu.

Cumplir y hacer cumplir a las instancias subalternas, los planes y programas de


actividades anuales de trabajo, en el sapsi, ayllu, markas, laya, wamani y en el
suyu, organizando la Mit’a por cada periodo como servicio al pueblo, con la
participación activa de todos los habitantes hábiles arriba de 20 años, hombres y
mujeres de acuerdo a la capacidad física e intelectual de las personas de cada
región.

Registrar y llevar estadística anual de los habitantes del ayllu, la marka, si fuera
necesario realizar el censo, las autoridades en función de gobierno deben saber
exactamente cuantos varones y mujeres han nacido en el año, cuantos
matrimonios fueron realizados en el presente periodo, cuantos enfermos varones y
mujeres, cuantos fallecidos por causas de accidente o natural. Este permite
facilitar la elaboración del plan anual operativo, para que el próximo periodo la
gestión de gobierno de las Markas y sus Ayllus del Suyu puedan mejorar con
mayor eficiencia en la atención de la demanda social de sostenimiento y la
población, la alimentación, la educación, la salud y otros aspectos de vital
importancia para la vida.
En el Tawantinsuyu o el Pusinsuyu era imprescindible preservar el dinamismo y la
vitalidad de las personas para mantener una salud llena de vigor tanto en las
mujeres como en el hombre, para que permita un crecimiento demográfico
considerable de la población, tomando en cuenta que el ser humano desde su
nacimiento era considerado como el CAPITAL MAS PRECIADO de la nación. Por
eso todas las personas nacidos recibían un trato especial donde todos vivían
seguros de la cooperación reciproca y en equilibrio, entonces el ser humano era
considerado como elemento fundamental para el Desarrollo Sostenible y es la
fuerza motriz en la producción, generadora de riquezas en el país, reflejando así
una armonía de vida comunitaria.

Las autoridades encargados realizaban la distribución anual y equitativa de tierras


agrícolas, denominados (mantas) en aynuqas a cada panaka o pareja y miljas
para los huérfanos y delegaciones o visitantes, estas tierras eran destinados para
el cultivo y producción de las especies, que era el sustento familiar de cada
periodo, asimismo las tierras de pastoreo denominado Ayjarira eran destinados
para la alimentación y manutención de los ganados camélidos.

Los habitantes del Sapsis o (comunidades) cada periodo recibían asistencia


técnica y científica para lograr el desarrollo y la sobre producción agrícola de las
especies y sus variedades, asimismo en épocas de crisis productiva había
asistencia en la prevención de enfermedades de la población, asimismo había la
distribución equitativa de productos agrícolas, herramientas y otros insumos
importantes en cada comunidad y en los ayllus de cada marka.

Las autoridades también tenían la misión de convocar a los habitantes y organizar


delegaciones para que puedan participar en los eventos socio productivo, socio
culturales y encuentros políticos de carácter local, regional y nacional; para
resolver problemas coyunturales regionales a la que pertenece en situaciones de
emergencia.

Las autoridades encargadas coordinaban entre los ayllus de cada marka, para la
celebración de fechas memorables, como la fiesta del sol, la conmemoración de la
patria ancestral del Pusisuyu o Tawantinsuyu, la fiesta de la luna; la celebración
otras fiestas cósmicas importantes donde los participantes realizaban el encuentro
de confraternidad y hermandad de los pueblos andinos.

Asimismo la integración familiar de los ayllus de cada marka, conmemorando


fechas con ceremonias de agradecimiento a la producción y el trabajo en el
planeta tierra y a las estrellas del firmamento, el respeto a Pachakama y
Pachamama; como también a las Wak’as para la procreación y vida activa del ser
humano, a las Illas, para la reproducción de los ganados, el Qillampu, para la
reproducción especies agrícolas y otros actos socioculturales de los ayllus de cada
marka y el Tawantinsuyu.

Durante la gestión administrativa, las autoridades, deberán supervisar inclusive la


situación de cada familia del ayllu, por eso a estos autoridades los denominan de
(kumuna wawa awatiri awki, kumuna wawa awatiri tayka) y durante la gestión de
gobierno, a los kumuna wawas o ciudadanos, no debe faltar casi nada en el
hogar. De acuerdo a las normas establecidos en el Ayllu, todas las personas
deben asumir sus responsabilidades del trabajo, la familia, incluyendo a los niños
mayores de 4 años arriba, quienes por Derecho asumen responsabilidades, por lo
que en todas las comunidades = sapsis del ayllu de cada marka y el país, basado
en los principios de unidad y hermandad comunitario aplican el sistema del ayni,
la phayna, la mink’a, el chuqu, la jayma, el umaraqa, el chari, la mit’a, el waki, el
achuqalla y otros formas de trabajo colectivo de equilibrio y en reciprocidad.

Las autoridades comunitarias en función de gobierno, con todo el rigor de la Ley


llama la atención y recomiendan a las personas mugrientos y andrajosos, quienes
deben asumir sus responsabilidades de trabajo y recuperar el prestigio, la moral y
su dignidad personal, entonces las autoridades por su parte deben implementar
mecanismos de control para la recuperación de las personas y someter a un
tratamiento especial. En consecuencia se hace referencia a la experiencia vivida
en el ayllu y la Marka, de todo lo que se ha percibido durante la existencia en
carne propia, asimismo se menciona de manera transparente de las
investigaciones realizadas, de los datos históricos y la vigencia actual de las
autoridades de las Marka y sus ayllus, nos respaldan ampliamente.

Estos nos comprueban que la organización política y las funciones de autori dades
originarias de la sociedad andina es el ejemplo para las futuras generaciones,
considerando como un modelo de estructura política administrativa de alternativa
para el futuro de la humanidad.

PRINCIPIOS DEL ORDEN ETICO:

En el Qullana-suyu y el Tawantinsuyu profesaban las autoridades a diario y en


todos los acontecimientos socioculturales del país, entonces los principios de
orden ETICO y moral fueron consagrados en el sistema político del Suma
Qamaña, es decir que las autoridades eran los encargados de inducir a los niños
para evitar la corrupción.

AYMARA QUECHUA ESPAÑOL


Jani jayramti ama qhilla kaychu No seas flojo
Jani k’arimti ama llulla kaychu No seas mentiroso
Jani lunthatamti ama suwa kaychu No seas ladrón
Jani amtamayumti ama yuyaysapa kaychu No seas libertino

Jani jiwayirimti ama wañuchi kaychu No seas asesino

Es importante mencionar que las autoridades del gobierno en el Tawantinsuyu, por


tradición conformaban en pareja, (chacha warmi) considerando que la
participación de la mujer como del hombre era imprescindible para las decisiones
del Estado Comunitario; donde la representación del gobierno de la cuatriposisión
territorial, eran equilibrado en las markas del (pusinsuyu).
EJERCER CARGOS DEL ESTADO:

En la lógica andina ejercer un cargo del sapsi (comunidad) y del ayllu siempre fue
un prestigio familiar, para quien ejerce autoridad del gobierno es hacer mérito en la
marka, es el prestigio que consagra en la sociedad comunitaria de cada marka ,
por consiguiente todos los kumuna wawa (comunarios) de cada Marka tienen la
opción de cumplir esta obligación y ser promocionado desde el cargo inferior hasta
llegar al cargo superior; es decir, con la participación en el sistema administrativo
del gobierno, es adquirir experiencia y capacidad en el manejo político
administrativo para que este sea eficiente y satisfactorio ante el pueblo.

REQUISITOS PARA OCUPAR UN CARGO:

Los ciudadanos tienen opción de ser candidato y ser elegido para un determinado
cargo es, una sola vez en su vida; ya sea en el Sapsi, Ayllu, Marka, Laya,
Wamani, Suyu y Pusinsuyu, hasta lograr la representación máxima en el consejo
de amawta, por consiguiente todas las (parejas) de una determinada jurisdicción
territorial a quienes corresponden ejercer el cargo tienen la oportunidad de ocupar
un cargo político y durante su gestión los elegidos deben demostrar sus
cualidades y responsabilidades, asimismo deben procurar que su gestión tenga
éxito con perspectivas a ser promocionados al cargo inmediato superior en el
gobierno.

El gobierno esta constituida en pareja; (chacha warmi), con la representación de


las áreas del alaxsaya y maxasaya, para cada cargo público del estado existe un
periodo determinado de gestión administrativa, los cuales esta normado en escalar
desde el nivel inferior hasta el nivel superior; desde el sapsi hasta el suyu, las
personas quienes ocupan estos cargos son: irana chhijllata “elegido por
consenso”; es decir, todos los habitantes mayores de 20 años y en pareja
participan en estos eventos. Considerando que en todas las comunidades existen
cargos para solteros, donde las personas hacen su primera experiencia en asumir
responsabilidades, para luego ocupar un cargo formal y al servicio de la
comunidad, al ayllu y a la marka.

En cada periodo los ciudadanos, son promocionados a través del instrumento


jurídico denominado, “irana jiliri chijllawi” (elección de autoridades) mediante el
sistema de rotación por cada Sapsi, Ayllu, Marka, Laya, Wamani y el Suyu. En
consecuencia los responsables en función de gobierno convocan a todos los
habitantes conformados en parejas mayores de 20 años; las parejas elegidas, con
tiempo, faltando 2 y 4 años para la asunción de su mandato deben prepararse
para asumir sus responsabilidades del cargo y funcion del gobierno, esta
modalidad nos demuestra que en el sistema comunitario andino se practica una
democracia más amplia y transparente.

Para elegir al cargo inmediato superior, previamente el pueblo o los kumuna


wawas hará una análisis y evaluación correspondiente de la gestión anterior, si
este tenía éxito o fue un fracaso durante el ejercicio y la administración del
gobierno comunal, local, regional y nacional; tanto en la capacidad,
responsabilidad, eficacia y sus compromisos con los habitantes del cada marka de
ayllus, layas, wamanis y del suyu.

Si el resultado de su gestión es deficiente y negativo, estas personas nunca mas


tendrá opción de ocupar un cargo publico dentro el sistema administrativo del
gobierno comunitario. Asimismo, para que los ciudadanos sean elegidos al primer
cargo del sapsi (comunidad) de cualquier ayllu de una determinada Marka, primero
deberá cumplir con los siguientes requisitos que a continuación se detallan:

? Haber nacido en la jurisdicción al que representa.


? Tener mérito y prestigio en la comunidad y el ayllu.
? Ser pareja, (hombre – mujer) constituido en matrimonio.
? Conocer la doctrina de Pachakama y Pachamama.
? Conocer los problemas sociales, económicos, políticos, culturales.
? Conocer los sitios ceremoniales del entorno territorial y límites del territorio.
? Conocer los principios unidad y hermandad y la moral de los Qullana aymara.
? Conocer los principios político, ideológico, filosófico, Etico moral y orgánico.

Solamente así los ciudadanos pueden elegir a sus representantes o autoridades


de la marka de ayllus, de layas, de wamanis y del suyu, quienes durante su
gestión administrativa deberán transmitir toda sus experiencias, demostrando el
(ejemplo de autoridad) que servirán para los futuros gobernantes del país

AUTORIDADES TECNICO ADMINISTRATIVO EN LOS ANDES:

AYMARA QUECHUA ESPAÑOL


Apu kamani Apu kamayuq Presidente del consejo
Marka kamani Llaxta kamayuq Alcalde municipal
Pacha kamani Pacha kamayuq Ministro de Planific.
Chinu kamani Kipu kamayuq Minist. de Recaud. y estadist.
Qulla kamani Jampi kamayuq Ministro de salud
Mallki Kamani Mallki Kamayuq Ministro de Forestación
Yapu kamani Chaqra kamayuq Ministro de agricultura
Uywa kamani Uywa kamayuq Ministro de ganadería
Yaticha kamani Yachaq kamayuq Ministro de educación
Iwira kamani Willaq kamayuq Ministro de información
Uma kamani Yaku kamayuq Ministro de recursos agua
Thakhi kamani Ñankaq kamayuq Ministro de caminos
Pillqa kamani Pillku kamayuq Ministro de vivienda y Urb.
Taripa kamani Taripaq kamayuq Ministro de jus ticia
Thaylli kamani Ruraq kamayuq Ministro de trabajo
Injiri kamani Rikhuq kamayuq Ministro de gobierno
Qullqi kamani Qullqi kamayuq Ministro de hacienda
Aruskipa kamani Willaq kamayuq Ministro de relac. exter.
Wiluma Willaq uma Arzobispo

CARACTER DE LAS AUTORIDADES:

El comportamiento de las autoridades debe estar sujeto a los principios morales


del sistema de los Qullana-aymara, porque las autoridades tradicionales en todo el
proceso histórico se han caracterizado, por tener un trato afectuoso en las
relaciones humanas de equilibrio y reciprocidad, un respeto mutuo de unidad y
hermandad desde cualquier cargo público, porque deben demostrar el ejemplo
del ser humano (jaqi) de la sociedad, considerando que estos son responsables en
la preservación moral establecido en las normas del Tawantinsuyu.

Por otra parte las autoridades tradicionales andinas, durante su gestión siempre
demuestran sus dotes y cualidades del ser humano en todas las actividades
diarias y acontecimientos socioculturales del sistema suma qamaña,
considerando que la gestión de gobierno en lo posible deberá darse una imagen
especial y atractivo, una muestra de sus cualidades y alta sensibilidad humana
hacia los habitantes del pueblo, demostrando a la sociedad las siguientes
características del ser humano:

Humildes Censillos Amables Honrados


Honestos Amplios Comprensivos Creativos
Evolutivos Decisivos Imparciales Optimistas
Joviales Puntuales Fuertes Decididos
Responsables Capaces Valientes Sensibles

Las autoridades originarias andinas hasta el día de hoy conservan estos valores
del ser humano para con su pueblo, por eso las kumunas o ciudadanos en
cualquier circunstancia o lugar, los nominan con ese afecto cariñoso a las
autoridades de: kumuna awatiri awki, kumuna awatiri tayka; como también de
tamani awki, tamani tayka; de awatiri awki, awatiri tayka; de marka awki, marka
tayka, por su parte las autoridades con mucho afecto y cariño responden a los
kumunas expresando de: kumuna wawa o wawa qallu, estas manifestaciones
reflejan la existencia de alto valor humano, donde hay un respeto es de igual a
igual entre el gobierno y gobernados de la sociedad.

Es importante mencionar cuando las autoridades en función de gobierno expresan


en el saludo protocolar diciendo: aski urukipana jila-sullka, entre los hombres; y
aski urukipana kullaka-sik’a, entre las mujeres; estas manifestaciones son
expresadas a diario en toda las actividades socioculturales, político económicas,
administrativas y en todo los acontecimientos de la marka y el país. Entonces de
esta manera las autoridades cumplen el rol de la preservación moral del ser
humano civilizado en los andes; como es el respeto reciproco practicado entre las
autoridades que dan una imagen de alto nivel y valor humano de la sociedad
comunitaria andina; esto es el sistema socio político denominado SUMA
QAMAÑA (vivir bien con riqueza).
El ejercicio de estas autoridades tiene compatibilidad con los funcionarios actuales
del gobierno municipal o el poder ejecutivo denominado ministros, quienes
integraban alternado entre hombres y mujeres, tomando en cuenta que en cada
periodo presentaban propuestas del (mara lurawi amtanaka) los planes de
actividades anuales que estaba relacionado en los aspectos, socio económico y
político administrativo de cada región.

Estos fueron los denominados kamani o los kamayuq del Tawantinsuyu; en


consecuencia estas autoridades hasta el día de hoy continúan vigentes en las
comunidades andinas, quienes tienen a su cargo la atención a las demandas
sociales del pueblo, garantizar la producción agrícola - ganadera de cada periodo,
el control de las plagas en los cultivos, las enfermedades y parásitos en animales,
la distribución de productos y el intercambio, los trabajos públicos de
infraestructura, la lectura permanente del cosmos y aplicación de nuevas
tecnologías en la producción regional.

SISTEMA SOCIO ECONOMICO ANDINO:

La base de la economía andina estaba sustentada sobre el trabajo organizado,


tanto para la producción agrícola, ganadera, artesanal y recolección, establecido
en el sistema colectivo del Ayni, Mink’a, Phayna, Chuqu, Umaraqa, Jayma, Cari,
Waki, Achuqalla, Mit’a y otras formas de trabajo establecido y normado en cada
unidad geográfica de cada Marka de Ayllu Marka de Laya, Marka de Wamani,
Marka de Suyu y Marka del Pusinsuyu o Tawantinsuyu.

Las autoridades de las Markas, cada periodo planificaba la forma de la distribución


de tierras agrícolas; denominadas, Manta en Aynuqa, según la necesidad y
capacidad de cada familia que conforman las Panakas de los Sapsis del Ayllu, las
denominadas Milja y el Waki destinado a familias huérfanos y para las
delegaciones, las tierras denominado Ayjarira destinados exclusivamente para el
pastoreo de ganados perteneciente a los habitantes del Sapsi y el Ayllu.

Asimismo, fueron desarrolladas las actividades culturales-productivas del Arte, en


la fabricación de herramientas, instrumentos, objetos útiles para el trabajo, la
protección, la diversión, la infraestructura; todos destinados al ser humano, como
también para los animales, durante la administración del gobierno en la época del
Tawantinsuyu.

Entonces se puede considerar que el sistema de administración socio económico


estaba sustentada sobre la base de la producción local y regional, cuya
característica fue la autosuficiencia económica y productiva de cada Marka, es
decir la producción local y regional estaba en los depósitos de las reservas
denominadas; Pirwa y Qullqa, controlado y regulado por el gobierno local de las
Markas y sus Ayllus a través de los mecanismos de poder administrativo. Los
denominados Tampu eran las reservas de alimentos, suministros y hospedaje
destinado para las misiones y los destacamentos que recorrían de las diferentes
regiones, los cuales eran controlados por autoridades específicas en todo el
ámbito geográfico del territorio.

Para que la producción anual de las regiones tengan éxito, las autoridades se
encargaban realizar ceremonias de ofrenda especial a pachakama y
pachamama, tomando en cuenta que la vida del ser humano y la producción
depende del comportamiento de los fenómenos naturales, los cuales están regido
por los efectos de las fuerzas cósmicas de la Pacha. Entonces la organización
socioeconómico andino, como el territorio ancestral no se puede comparar con
ninguna otra civilización del planeta, como es Caldea, Egipto, Grecia, Roma y
otros, los cuales en su estructura política administrativa tienen esencia del
individualismo y el egoísmo, basado en la acumulación de riquezas de un
individuo o grupo elitista, donde hay poderosos y débiles, donde hay la explotación
del hombre por el hombre; es decir, donde existe el caos y anarquía en el mercado
y un desequilibrio en la sociedad.

En cambio la civilización andina en su esencia tiene la característica de hacer una


justicia social, con una administración transparente, donde los hombres actúan en
función basada en los principios de Unidad y Hermandad comunitaria, reflejando
así, el sistema social, económico, político y territorial, donde la reciprocidad y
equilibrio es imperante en la sociedad aymara -quechua.

Entonces, dentro la estructura política administrativa del Pusinsuyu o el


Tawantinsuyu existió normas y reglas establecidos, los cuales estaban regulados
precisamente para mantener una estabilidad política en un ambiente de equilibrio
y una verdadera paz social, expresado en una armonía de la sociedad comunitaria
en todo el ámbito geográfico Andino.

MODELO DEL SISTEMA POLITICO (SUMA QAMAÑA)


DE LA CUATRIPOSISIÓN
A y ll u
A y ll u
A
l
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a Mujer Hombre
a
x
x
a Marka
s a
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a
y
y
a Hombre Mujer a
A y ll u A y ll u
SISTEMA POLÍTICO

SUMA QAMAÑA

DEL

QULLANASUYU
Y

TAWANTINSUYU

Por: FELIX LOPEZ MAMANI


AMAWTA

QULLANA-SUYU
2000
8.4 Principios y Valores Fundamentales para la Elaboración de una Constitución
Multicultural, Jorge Miranda

1. Paqari. Este es uno de los principios fundamentales y elementales del ser


andino. En el mito de orígen del inka, los hermanos ayar nacen de una
“fuente” t’uxu, que luego fue bautizado como la “pacarina”. Paqari, es un
tiempo y todo el tiempo a la vez, el nacimiento, alumbramiento de los inkas
fue realizado en un tiempo, y en todo el tiempo. Paqari, es el tiempo, todo el
tiempo y también el tiempo del orígen (qalla), del alumbramiento. Paqariña
entre dos hombre y mujer, es el acto amatorio sin medida de tiempo, que
tiene resultado luego en la reproducción de la especie una wawa, jaqi
wawa . En el propósito de constituir el poder andino qulla, es necesario
tomar en cuenta el acto de hacer en un tiempo que no tiene límites, pero
que es necesario para el alumbramiento. Este alumbramiento tratándose de
la sociedad, es también pachacuti, cambio, revolución, etc. Para Bertonio
Pacaritha es sinónimo tambien de yurita (nacer).

2. Qalla. Señala el principio del hacer humano, el comienzo, el inicio de un


proceso, puede traducirse como génesis. Señala el acto de la presencia
humana, del quehacer social y político de las personas. Qalla, queda
testimoniada en la toponimia, como se da en caso de Caquiaviri, donde
existe un ayllu qalla, o cuando naciones como Pacajes, cuentan con una
marka que señala, comienzo, orígen, más concretamente “su orígen”
Qallapa. Este pueblo tiene en Pakajaqi el rango de Pueblo Padre Awki
marka, del cual descienden otros como Kurawara de Pacajes y Ulluma

3. Qhip nayra. Código de ética y conducta que norma la vida personal y


colectiva, que en el occidente llamarían filosofía de la historia. Es tambien
visión de la historia, por cuanto establece una relación pasado futuro para la
toma de deciciones o la planificación. Para comprende tal vez sea
necesario estudiar qhiphawiri … Por otro lado no se opta ninguna decisión
sin una necesaria evaluación, y una necesaria contrastación entre el peso
del pasado y el compromiso a futuro. Es la búsqueda del equilibrio entre el
legado histórico y el desafío a futuro.

4. Thakhi. Camino que conduce a la sociedad, persona e individuo hacia el


cumplimiento de normas. El camino es norma, cuyo desarrollo se especifica
de manera particular para cada momento de la vida del individuo y la
persona. Así hay camino grande y camino chico, así como cada generación
tienen sus propios caminos. El camino es genérico señala un método, una
matriz…

5. Pacha. Tiempo espacio… Pachacuti, según Bertonio es “tiempo de guerra”,


que en aymara es Pacha thijra. Pacha es el principio, la condición de
existencia. Es espacio y tiempo. Es espacio cuando es qamaña, es tabien
totalidad, taqpacha/nayapacha. Es tiempo por que señala, el espacio en un
tiempo. El mundo del pasado, del ayer, del presente, etc.

6. Pusi Las cuatro esquinas, establecen un cuerpo sociopolítico y territorial,


basada en las mitades de arriba y abajo, e izquierda y derecha. Es como se
establece la kancha y su centralidad como el ombligo del mundo. Pusi está
relacionado con la diestra…

7. Mallku. Simbolizado en el cóndor, es el concepto de poder y autoridad


andino. Kuntur mallku, es un ave sagrado, su vuelo marca el territorio del
qullasuyu, asi es posible hablar de la visión del condor, como un pri ncipio
político de configuración del territorio, así se expresa en el yarawi Cóndor
Pasa. La autoridad es representada y sacralizada bajo la figura totémica de
esta ave.

8. Tapa. Refiere, nido, en el lenguaje simbólico está relacionado con el


concepto de hogar, hogar que para el caso andino está asentado en la
antipampa. Tapa, es a nivel familiar casa, en lo colectivo es siempre el
territorio, en la metáfora indica hogar del cóndor y las otras aves sagradas y
totémicas de los andes.

De la sociedad y familia

9. Jaqi/runa. Para los andes es fundamental el concepto de persona jaqi/runa


como:
? Unidad demográfica y de tributación
? Ciudadanía
? Concepto de humanidad
Sin embargo es importante dejar claro que los niños, conceptuados
como wawa constituyen la semilla, de jaqi y de la comunidad ayllu.

10. Pacoma (sullcoma): captiuo, esclauo tomado en guerra. Y tambien uno


que no tiene libertad para salir cuando quiere ni vivir como quiere, por
alguna demasiada ocupación (Bertonio 242). Si desde le idioma aymara se
puede conceptualizar pérdida de libertad colectiva es éste. Aunque,
seguramente distinto al colonial, por cuanto Pacoma es sinónimo de
sullcoma, o sullca. Asimismo el mismo bertonio nos dice que Paco hombre
y Pacoma mujer son nacidos cuando sus padres se encuentra trabajando.
11. Uta. Se traduce casa, en un contexto social y político se entiende como una
unidad demográfica, familia, es el espacio de la persona y su familia. La
casa es sagrada, así se denomina kuntur mamani, se le confiere el síbolo
más sagrado.
12. Ayllu. Es la expresión territorial de un conjunto de familias que conforman
un ayllu. El concepto que en aymara da cuenta del significado del ayllu en
un contexto estatal es jatha, semilla. Es el ayllu, semilla, modelo social de la
sociedad y el Estado andino. Es entonces la jurisdicción territorial local.
Organización de primer grado.
13. Chinu. Unidad contable de hebras de par en par, que norma la
representación del sujeto en la administración estatal. Chinu da cuenta de
la ciudadanía.

Símbolos.

En el Qullasuyu la cultura y el ordenamiento social y jurídico están representados


a través de símbolos…
1. Mallku Kunturi
El cóndor, ave mayor de los andes, constituye el símbolo de poder y autoridad
en los andes.
2. Mamani. Halcón que sigue en importancia la cóndor.

3. Titi. Felino andino, cuyo valor simbólico radica en la relación con los
elementos marinos, se le invoca titi/mullu.

4. Mullu
Es el símbolo marino que representa al agua, viene del norte, y es un punto
referencial en la estructuración del territorio andino.

5. Uturunkhu
Tigre de las tierras bajas.

6. Cruz del Sur. Es la fiesta de la cruz, que se celebra el 3 de mayo, la más


importante en la tradición ritual andina, por cuanto aquí un personaje andino, el
kusillo, haciendo de yawliku, es el guardián de la cruz, que impide inclus o que
sea siquiera hollado en la fiesta.

Personería.

En esta parte tratemos de desarrollar el concepto de persona y las


otras identidades sociales.

6. Persona Jaqi/runa. Persona en los andes alude a la pareja de esposos.....


7. Tama
8. Pura pura

Responsabilidad
1. Amta
2. Yati
3. Amuyu
Reconocimientos homenajes.
1. Paylla. “La paga o galardón”
2.
Territorio y ecología

1. Pacha. Es el concepto tiempo espacio.


2. Uraqi. Es la tierra, entendida como suelo de cultivo y pastizales, que es
propenso a la apropiación humana como propiedad y posesión. La sayaña,
como las aynuqas y todas las categorías son uraqi.
3. Pachamama. Si bien es un concepto sacralizado del espacio territorial tiene
más una connotación.. Así Bertonio señala: “Suyrumama: la tierra de pan
lleuar, y a cerca de los antiguos era nombre de reuerencia, por ver que la
tierra les daua de comer; y asi dezia, Pachamama huahuamatua. O tierra
yo sere tu hijo, o tomame por hijo. Hablaua como el Demonio les enseñaua”
4. Uywa. Es la fauna existente, se traduce ganado, sin embargo se reconoce
que el conjunto de los animales sin domesticar pertenecen a los mallkus.
5. Laq’u. Es el nombre que reciben el conjunto de animales silvestres,
especialmente los felinos que cuasan daños a la ganaderia
6. Yanaka. Es el conjunto de bienes patrimoniales de la persona, familia y
comunidad.

Escribiendo la constitución

Este es un segundo momento del ejercicio de escribir la Constitución Qulla.

Artículo Primero. Está referido al cumplimiento del thakhi, camino como norma
genérica, expresada en la leyes específicas (ver G. Poma 138).El thakhi
comprende normas de garantía personal, los llamados derechos fundamentales de
las personas, la relación con la ecología…

Artículo segundo. Siguiendo a Guaman Poma la Qamaña, debía ser preservada


y defendida de manera expresa por lo que estaba prohibido la tala de árboles,
quema de pajonales, así como los animales silvestres estaban también
protegidos.(pp140).

Artículo Tercero. Establece a través de la carta de los Siqi, la configuración


territorial del país basado, en el principio de las cuatro direcciones, cuatro
esquinas del Quricancha. Este principio no es sólo expresión política y simbólica
del Tawantinsuyu, sino genérico a todo los andes. La carta de los Siqi permite
establecer una estructura política territorial
Artículo Cuarto.Da cuenta de la forma de gobierno, las autoridades para cada
uno de los suyus, markas y ayllus.

De la familia.
En el derecho andino la familia es central así existen las siguientes normas.

1. Una persona con un hijo debe ser honrada con dos, merece el apoyo de la
sociedad y el Estado y cuando la familia es extensa, debe ser premiada.
2. Las jefes de familia viuda asimismo requieren de apoyo en la crianza de los
hijos, para lo cual debe ser dotada de lo necesario.
PAREJA (paya = pänaka) chacha Warmi = payacha o pacha; La representación
de la pareja (dual) es fundamental en el ejercicio del poder político administrativo
del pueblo, porque la unión de dos personas es considerado jaqi (ser humano) en
la sociedad del Qullana suyu,

UNIDAD (mayamaki taqini); La sociedad están organizados en unidades socio


económicas, denominados (Ayllu). Es el pensamiento y sentimiento que expresa la
fuerza motriz para las actividades socio culturales y posibilitan el desarrollo
intelectual y material de la sociedad.

HERMANDAD (jila-sullka = kullaka sik’a); Vivir en armonía entre los seres


humanos de la sociedad considerando que es fundamental mantener relaciones
de hermandad socio cultural entre los habitantes del pueblo.

RECIPROCIDAD (purapt’awi); Es la actividad socio económica de cooperación


mutua, del uno con el otro grupo o persona, establecido para superar las
diferencias antagónicas, en la búsqueda de lograr un vinculo de hermandad y
equilibrio entre las personas, grupos del pueblos.

PRINCIPIO DE RECIPROCIDAD: busca el equilibrio contradictorio entre identidad


y diferencia, es decir entre las fuerzas antagónicas de homogeneización y
heterogeneización, de inclusión y exclusión, en la búsqueda de un real vínculo
interhumano.

COMPLEMENTARIEDAD (jaqthaptawi

PRINCIPIO DE COMPLEMENTARIEDAD: considera que ningún proceso existe o


se realiza aislado, al contrario todo co-existe con su opuesto complementario y
conforman la plenitud de sucesos u acciones; por esa razón en cualquier actividad
se manifiesta una profunda comprensión generando la armonía plena de vida.

EQUILIBRIO (chikachawi); Toda las personas o grupos opuestos, deben realizar


actividades socio económicas y político administrativo del país, en equilibrio;
especialmente las relaciones sociales entre el genero masculino y femenino,
superar el defecto de superioridad e inferioridad.

CONSENSO (iyawsawi); Es el fundamento de una elevada conciencia para entrar


en un acuerdo entre dos o mas personas o grupos de la sociedad, para evitar la
división de grupos antagónicos que obstaculiza el proceso del avance de
actividades del ser humano en la sociedad.

ROTATIVO (irasiwi) Para construir y perfeccionar una sociedad, con esa visión
futurista, de acuerdo a las características del ser humano (Jhaqi); las activi dades
socioeconómico, orgánico y territorial, será rotativo, principalmente el ejercicio de
los cargos político administrativo del país.
INTERCAMBIO (chhala); Es la acción que genera la satisfacción de necesidades
socio económicas, del uno con el otro grupo o persona, que permite un desarrollo
equilibrado entre los pueblos, tanto en el contexto nacional e internacional.

INTEGRALIDAD (taqpachani); Son partes o sectores activos que conforman la


totalidad del grupo o la sociedad entera, quienes impulsarán en el accionar social,
económico, orgánico, cultural y político del estado.

PRINCIPIO DE INTEGRALIDAD: considera todas las partes o sectores que


conforman un todo dentro del accionar social y político del Estado.

TRABAJO (thaylla); Es uno de los principios fundamentales del estado que


promueve y desarrolla el esfuerzo intelectual y físico del ser humano, para la
producción y generar riquezas para el bienestar y la supervivencia de nuestro
pueblo.

ABUNDANCIA (inampi); Es el resultado de la eficiencia en las actividades y fruto


del esfuerzo humano de la sociedad que permite una seguridad de vida y la
satisfacción entera del sistema SUMA QAMAÑA de los habitantes en el territorio.
ARMONIA (askina, allina, k’achankaña) suma qamaña; Es cuando el ser
humano ha logrado alcanzar una satisfacción completa de su vida, donde existe
un ambiente de tranquilidad y felicidad de las familias del Sapsi, Ayllu, Laya,
Wamani y en el Suyu.

PRINCIPIO DEL TERCERO INCLUIDO: considera la contraposición de dos


situaciones incluidas e integradas en un todo a pesar de ser partes contradictorias.

PRINCIPIO DE SUBSUMCION; considera a los casos particulares o de minorías


en el accionar total del sistema político administrativo que integran una sociedad.

PRINCIPIO DE SUBSIDIARIDAD: considera el apoyo o la prestación de servicios


para mejorar la calidad de vida de sectores afectados cultural y socio-
económicamente.

PRINCIPIO DE CONCURRENCIA: considera la inclusión de todos los sectores


poblacionales en el quehacer del Estado.

PRINC IPIO DE INTERCAMBIO considera los procesos de satisfacción de


necesidades de cada una de las partes.

a) PRINCIPIO DE COMPLEMENTARIEDAD: considera que ningún


proceso existe o se realiza aislado, al contrario todo co-existe
con su opuesto complementario y conforman la plenitud de
sucesos u acciones.
b) PRINCIPIO DEL TERCERO INCLUIDO: considera la
contraposición de dos situaciones incluidas e integradas en un
todo a pesar de ser partes contradictorias.
c) PRINCIPIO DE SUBSUMCIÓN: considera los casos particulares
o de minorías dentro del accionar total del Estado.
d) PRINCIPIO DE SUBSIDIARIDAD: considera el apoyo o la
prestación de servicios para mejorar la calidad de vida de
sectores afectados cultural y socio-económicamente.
e) PRINCIPIO DE INTEGRALIDAD: considera todas las partes o
sectores que conforman un todo dentro del accionar social y
político del Estado.
f) PRINCIPIO DE CONCURRENCIA: considera la inclusión de
todos los sectores poblacionales en el quehacer del Estado.
g) PRINCIPIO DE RECIPROCIDAD: busca el equilibrio
contradictorio entre identidad y diferencia, es decir entre las
fuerzas antagónicas de homogeneización y heterogeneización,
de inclusión y exclusión, en la búsqueda de un real vínculo
interhumano.
h) PRINCIPIO DE INTERCAMBIO considera los procesos de
satisfacción de necesidades de cada una de las partes.
8.5 El Proyecto de Reconstrucción del Kollasuyo

EL PROYECTO DE RECONSTRUCCIÓN DEL


KOLLASUYO
Germán Choquehuanca

Un “Jallalla” a todos ustedes. Es muy importante conocer acerca de nuestro país pero, ante
todo, tenemos que señalar los antecedentes anteriores. Nosotros los indios hemos sido
siempre de aquí y hemos vivido aquí y hemos ido por todo el mundo.
La vida se desarrolla acá con nuestras propias particularidades. Vivimos con la caza, la
pesca. Vino la cultura Chiripa, Tiahuanacu y nos convertimos en el Tahuantinsuyo. El
Tahuantinsuyo fue el corolario, la nación de las naciones, que se estableció en este
continente, mal llamado América. Y vino el recorte. Los bandidos invadieron en 1492 y se
dividieron en 1493, con el Tratado de Tordesillas, las indias orientales para los portugueses
y las indias occidentales para los españoles.
Pizarro y Almagro llegan en 1532. Cuzco el epicentro, la capital de la nación de las
naciones del Tahuantinsuyo, es repartida. El norte del Cuzco, Nueva Castilla, y el Sur del
Cuzco en Nueva Toledo. A nueva Toledo lo llamaron Perú, Charcas, el Alto Perú y, luego,
con el Uti Posidetis Juris de 1812 se repartieron nuestras tierras indias. Simón Bolívar, con
el Decreto de Trujillo del 8 de abril de 1824, se repartió las tierras y dio a su gente, a los
colombianos, y entregó a los estados, al estado del Perú las tierras de los indios, porque
denotaban dice pobreza y a partir de eso se tuvo que sacar los impuestos, y luego con el
Decreto de Cuzco del 4 de julio de 1825, destituyó a todas las autoridades indígenas. Ha
destruido y ha desconocido a los caciques, los mallkus, los jilakatas, los tubichas,
etc.¿Quién lo hizo?, Simón Bolívar el 4 de julio de 1825, con ese Decreto famoso del
Cuzco, pero anteriormente, en 1812, estaba dado el Uti Posidetis Juris que desconocían
nuestro territorio y se hicieron las repartijas y crearon las Repúblicas de Perú, Bolivia y
Chile.
Entonces, nosotros posteriormente luchamos nuevamente. Se
reconstituye la República del Tahuantinsuyo con Subimaque en 1915; en 1930 el indígena
de Taraco Eduardo Leandro Nina Quispe, reconstituye el Kollasuyo en Chuquiago. Es la
primera reconstitución del Kollasuyo; se hizo la República del Kollasuyo. Pasan los
tiempos, en 1992 nuevamente se reconstituye el Kollasuyo. Los dos Incas constituyen el
Ulaca y desde ese momento empezamos a luchar. Pero, ahora, estamos en otro tiempo. Se
cree que los indios con nuestro Tahuantinsuyo hemos desaparecido. No. Ahora surge el
planteamiento frente a ese gran movimiento del 12 y 13 de Octubre, donde se reconstituyen
los ayllus en los barrios, las asambleas, esas ulacas y ahí ya no existe Bolivia. El concepto
de Bolivia desaparece porque ahí está el nuevo Kollasuyo, el nuevo Tahuantinsuyo;
solamente cuando hablan del mar, nuevamente hacen renacer el concepto de Bolivia.
Bolivia, para nosotros, no ha significado nada, no nos une, no significa la unión, la unidad
de todos. Para nosotros ha significado la Constitución Política del Estado la destrucción, la
explotación, el robo de nuestros minerales y ahora de nuestro gas. Eso es la Constitución
Política del Estado. Pero frente a eso, hay que dar propuestas. Entonces la propuesta de
ahora es hacer el segundo Tahuantinsuyo. Entonces ¿cómo hay que hacer esta? en base a
nuestras comunidades que, en el fondo, son los ayllus. Cada ayllu ahora debe reconstituirse
y se lo ha hecho desde 1992. En el ayllu están las autoridades: el Jilakata, el Jilanco o las
Tamanis. Hay dos autoridades, los Jilakatas mayores y los Jilakatas menores. Entonces hay
un Gobierno cuatriárquico; eso ya se está viendo ahora.
En El Alto, cuando hubo el 12, 13 de octubre, cada barrio era un ayllu, como antes en
Cuzco y en Tiwanaku, como ciudades metropolitanas, se constituían también los barrios en
ayllus. Se ha reconstituido; ahí no había autoridad boliviana, no había el gobierno, incluso
se expulsó a Sánchez de Lozada. Pero a partir de eso también el Omasuyos, como Laya,
como Jach’a, se reconstituye. Los Pacajes tienen su jach’a, porque jach’a es lo mismo que
laya, lo mismo que guamani; entonces estos se reconstituyen; pero al interior de los jach’as
están las marcas, las llajtas, también se reconstituyen y hemos visto que las marcas se han
reorganizado y se han establecid o dentro de las organizaciones indígenas y también dentro
de las organizaciones vecinales y sindicales.
Entonces, ya están. Está el Jach’a Omasuyo, está el Jach’a Pacajes, está el Jach’a Carangas,
está el Jach’a Chayanta, Jach’a Yampara, los Jatum Ripis, Jatum Cintis, están, entonces.
¿Qué es lo que falta acá? establecer las curacas. Y los curacas ya se están rearticulando en
cada laya, ahora, o en cada gobierno similar a un departamento, en cada laya ya están 2
curacas y 2 payas, la paya en la autoridad.
Entonces aquí hay otro gobierno cuatriárquico. Ya se está denotando. Ahora ¿qué urge?
reorganizar el Tahuantinsuyo en este país, dentro de los un millón, cien mil kilómetros
cuadrados. ¿Cómo? hay que hacer la repartija ahora en 4 partes; uno es el Mojosuyo, en
torno a lo que es Pando, Beni una parte de Santa Cruz y una parte de La Paz; el otro es el
Warasuyo, que es la Chiquitania o la parte de los guaraníes, Chaco todo eso, lo que
llamaban antes la wara es el Warasuyo; el otro es Charcasuyo, sud de Potosí, Chuquisaca
algo de Oruro, tomando en cuenta los Charcas anteriores; luego es el Kotasuyo, lo que es
La Paz, el altiplano, algo de valles, una parte de Oruro, porque estamos entorno al Lago
Titicaca.
Esos son los 4 Suyos. Para reorganizar este país no nos podemos basar pues en los
cantones, provincias, departamentos, hechura de los romanos y conformada por los hijos de
los españoles de este país. Vamos a reterritorializar las provincias, los departamentos. Tiene
que haber otra demarcación territorial y, para eso, están los 4 suyos.
Entonces estos 4 suyos, tienen que tener sus propias capitales, pero la capital del Segundo
Tahuantinsuyo tiene que ser El Alto. Ahí tienen que estar los poderes, la Ulaca Central, ahí
tiene que establecerse el gobierno del Nuevo Tahuantinsuyo. Ahora ¿quién va a gobernar
el Segundo Tahuantinsuyo? dos Presidentes o dos Incas y sus mujeres, dos mujeres.
Entonces serían el gobierno cuatriárquico. No ese modelo de Presidente y Ministros; esos
son modelos europeos. No. Tenemos que crea r otro gobierno, otro tipo de gobierno.
Francisco de Miranda decía de que aquí tenía que hacerse un gobierno de dos Incas, Capital
Panamá, en Panamá. Simón Bolívar no lo quiso. Es que él quería hacer al modelo francés,
como se había formado allá y había estudiado en España.
Entonces acá, para salvar este país, tenemos que hacer otro país y al cual yo le llamo el
segundo Tahuantinsuyo. Este país, de alguna manera, tiene que ser gobernado por sus
camanis, sus camayus, sus camachis, sus camanas, todas estas autoridades. No hay
Alcaldías acá; esa es otra creación de los romanos con sus ayuntamientos y traídos por los
españoles; los franceses creo que tienen sus intendencias, pero aquí seguimos romanizados.
Cada Alcaldía se va a convertir en Marka o en Llajta, dirigido por su propio Mallku y su
Mama t’ajlla, o sea, dos Mallkus y dos Mama t’ajllas.
Entonces tenemos que reestructurar de esta manera. Nuestra policía, nuestros ejércitos
tienen que ser uno, unas Fuerzas integradas, donde, por rotación, uno tiene que trabajar por
año, en tránsito, policía o ejército etc. Nuestra religiosidad tiene que estar en parte en
reconocimiento de la religión ayra, que es la religiosidad de nuestros antepasados, al Sol, a
la Pachamama, a nuestros Achachilas; claro, que van a ver otros grupos, los criollos, los
mestizos que viven, que tienen su propia religión, la cristiana. Claro, que vivan con su
cristianismo ellos, nosotros los respetamos con su cristianismo y esperamos que respeten
nuestra religiosidad.
En la cuestión de la educación, tiene que ser integrativa. Tiene que haber un tipo de
educación, bicultural pero con preponderancia indígena, porque tampoco no queremos ir al
equilibrio. ¿Qué sentido tiene el equilibrio en este país, si somos nosotros mayoría? ¡Una
minoría, poquitito pues, quiere equilibrio! Nosotros los de mayoría tenemos que hacer
conocer lo que pensamos y cómo podemos vivir acá. La minoría tiene que atenerse a lo que
es la mayoría. Entonces ese tipo de sociedad se lo quiere así constituir y así se reconstituye
lo que es el Pachacuti.
Nosotros no necesitamos de Asamblea Constituyente. Nosotros tenemos el Ulak’a, el j’acha
Ulak’a, el grande Ulak’a que es de todo el Segundo Tahuantinsuyo. Ahí se van a establecer
los representantes de los 4 Suyos, y los representantes de todas las Layas, los Guamanis
hasta de los Ayllus. No necesitamos que sea bicamaral. Va a ser una no más y va a ser
rotativa. Todos están obligados a ser autoridades rotativamente, los que pueden y los que no
pueden; aquí no hay partidos políticos. Cuando, por ejemplo, en un ayllu está lo que se
llama la reunión, el Chijnok’a, ahí en un ayllu el que manda es la Asamblea llamada
Chijnok’a. Ellos mandan. No son necesarios los partidos políticos. No son necesarios los
candidatos. Ahí cada familia, rotativamente, tiene que ser Jilakata, tiene que ser autoridad,
mujer y hombre paralelamente y, así, la otra Asamblea podría ser en la Marka, lo que son
los Auth’apis; luego, en las Layas, los Math’apis; luego, en cada suyo, el Mojosuyo tiene
que tener su Ulak’amayu y su Incamayu, es decir, los 4 suyos tienen que tener sus propias
asambleas y así la Asamblea grande va a ser nuestra Ulak’a.
Ahora hay que reconstituir el Ulak’a. ¿Quién hace esta Asamblea Constituyente? Viene eso
desde Francia, desde la Revolución Francesa y todavía ¿qué tipo de Asamblea
Constituyente nos van a plantear? Nosotros habíamos planteado una Asamblea de Suyos,
en castellano se llama de Pueblos indígenas. Otros quieren hacer una Asamblea
Corporativa, otros, Sindical. Otros quieren hacer Asamblea Constituyente a partir de los
representantes de las provincias no más. Otros quieren hacer por departamentos. Otros
quieren hacer una Asamblea Constituyente Popular. Otros quieren hacer una Asamblea
Constituyente Revolucionaria. Otros quieren hacer una Asamblea Constituyente Congresal,
es decir, la actual, las Cámaras de Senadores y Diputados se constituyen en un momento
como Asamblea Constituyente; ésto es lo que está buscando la elite.
Entonces en este nuevo Tahuantinsuyo, la nación de las naciones, todos vamos a vivir ahí,
los indios, los mestizos, los criollos. Los criollos tienen derecho a vivir acá, pero quiero
diferenciar. Los que ahora manejan este país son los k’aras, la elite, pero ¿quien es el k’ara?
los que manejan la economía, los que domin an este país. No me estoy yendo a la cuestión
racial, porque aquella persona que es rubio, que es de cabellos claros, ojos azules, si él
come chuño, si él come yuca, majado, si vive con el indio, aspira el aire de esta
Pachamama, es el choco, no es k’ara; entonces el choco es nuestro amigo; el choco tiene
derecho a vivir aquí como pueblo. Una cosa es el k’ara, otra cosa es el choco.
Entonces, en este nuevo Tahuantinsuyo tenemos que constituir lo que es el Jardín de las
flores distintas. Tiene que haber un jardín hermoso de lindas flores. Es como decir un
pueblo, un nuevo estado. ¿A partir de qué? de distintos pueblos que somos nosotros, tan
abigarrados, tan distintos que somos. No tiene sentido que exista un jardín de un solo color,
porque al estar de un solo color, ni siquiera paseamos ni recorremos todo el jardín, porque
comprendemos que todos son de un solo color, pero cuando son de diferentes colores nos
da ganas de vivir, es la vida.
Este nuevo Estado quiere la felicidad de todos, el bienestar; quiere la justicia para todos.
Entonces esa es la propuesta del segundo Tahuantinsuyo. Porque se ha visto que febrero, se
ha visto que octubre es un ejemplo. Aquí el que va a mover y el que va a hacer
transformación es el pueblo indígena; es el capaz de revertir al neoliberalismo y al
capitalismo; es el único ¿por qué? Porque ha fracasado el marxismo leninismo, ha
fracasado la democracia liberal, ha fracasado la derecha, el capitalismo. Entonces nosotros
queremos universalizar este pensamiento de la reconstitución del Tahuantinsuyo como
segundo Estado.
Por ello, quiero señalar de que debemos universalizar nuestro pensamiento, hacer de que la
ideología del Tahuantinsuyo sea estatista, hacer de que aquí, primero, nos establezcamos
como un nuevo Estado, pero sin buscar la Autonomía. Yo estoy en contra de lo que dice
Linera, esa Autonomía copiada de las autonomías de las comunidades autónomas de
España. No. Yo no estoy de acuerdo con eso, porque la Autonomía propende a rivalizarnos,
a antagonizarnos peor, a portarnos convertidos en apartheid. No queremos eso. Tampoco
queremos el Federalismo que es otro modelo, ni el Republicanismo. Aquí hay que buscar
nuestros propios valores, nuestros propios esquemas y para eso está la reconstitución. No es
la regresión ¡ojo!. Regresión es otra cosa. Es el volver, el retornar a los modelos, a los
esquemas, a los sistemas propios que tenemos nosotros. Esto es el Pachacuti.
PREGUNTAS DEL AUDITORIO
Diputado Germán Choquehuanca:

P. ¿Por qué dice que Bolivia es multiétnico y pluricultural?, ¿no será que en Bolivia
también estamos la gente del valle, de Cochabamba, Chuquisaca, Tarija?, entonces ¿de qué
igualdad hablamos si ustedes los aymaras piensan que son Bolivia? -por favor aclare.
R. Bien, yo no hable de Bolivia, yo hablé de otro país que puede llamarse propongo
Tahuantinsuyo, otro puede proponer Paitití, otro puede poner otro nombre, por qué, es que
tengo mis razones, no nos ha unido la palabra Bolivia, entonces qué queremos seguir,
queremos estar así desunidos?, tenemos que buscar la unidad, tenemos que vivir todos
juntos pero no da, no funciona la palabra Bolivia, han habido proyectos para construir una
nación boliviana, no hay, la misma Constitución Política del Estado en el primer artículo
aprobado en 1995 dice que es pluric ultural y multiétnico, ese es un revés, un sopapo al
proyecto de la Nación boliviana, porque ahí reconoce a pueblos, entonces yo no hablé de
Bolivia, yo hablé del nuevo Estado, donde podemos estar todos, he hablado de un
Mojosuyo, donde están los cambas, he hablado de un warasuyo, donde están los otros
cambas que están en la parte platense, el Mojosuyo en la parte de lo que es la Amazonas,
todos tenemos derecho a vivir.
Los japoneses que hagan su llajta, los menonitas que hagan su otra llajta, tienen derecho, si
viven tantos años como nosotros tenemos derecho a vivir acá, el compañero Jerjes
(Justiniano) tiene derecho a vivir allá, nosotros acá tenemos derecho.
Lo que he planteado que la capital de ese nuevo Estado sea primeramente El Alto, 7 años,
que sea itinerante, luego de 7 años que sea pues una parte de Charcasuyo, puede ser
Chuquisaca o puede ser Tarija, pasan 7 años, puede ser Santa Cruz capital de ese nuevo
Estado, pasan 7 años tiene que ser Trinidad, la capital de ese nuevo Estado, por qué siempre
une en un solo lugar, estático, yo lo que planteo que tiene que ser itinerante la capital, por
esa razón como primero a El Alto y además yo he propuesto no se si lo he dicho o no lo he
dicho, de que los gobiernos tienen que durar 7 años, no 4, 5 años, por qué, no proponemos
al igual que los colores de la wiphala, del arco iris, 7 años, 7 colores y así podemos llevar
adelante el desarrollo de nuestro país, cuando un Presidente esté en El Alto, 1 año, el otro
Presidente, el otro Inca esté pues un año en todas partes del sur y vuelve este Presidente a
El Alto, el otro nuevamente se va por Santa Cruz otro año, así rotativamente durante 7
años, por que no podemos hacerlo eso, ese es un modelo propio de nosotros, eso todavía
existe en la parte Guaraní, en la parte chiquitania, ahí están los tubichas, los mumburichas,
ahí están los mumburichawasú, gran hombre, el tumpa similar al Inca, yo trato de tomar en
cuenta a todos, no estoy excluyendo, no trato de excluir porque en realidad tenemos que
reconstituir lo nuestro, nuestro Estado.
Tiene razón en señalar Jerjes a esta, yo los llamo los k’aras incapaces, no pueden manejar
hasta ahora, solamente tratan de exportar como en Potosí, la plata materia bruta por lo bruto
que son ellos, quieren exportar igual el gas, tiene razón Jerjes en decirles incapaces, yo lo
que he diferenciado, otros son los k’aras como lo llaman elite o burgueses yo los llamo
k’aras, pero no estoy diciendo racialmente, estoy diciendo que los otros hermanos,
compañeros que son de ojos verdes o de cabellos rubios, yo lo llamo chocos, cuando ellos
están con nosotros, cuando ellos sufren la misma realidad económica en que vivimos en
esta etapa neoliberal, también son nuestros compañeros, son nuestros hermanos, entonces
yo lo que trato es de proponer un jardín de flores para todos. Gracias.
Otra pregunta para Don Germán Choquehuanca, le preguntan si usted cree que la propuesta
de un Estado como propone, ¿dará solución a los problemas actuales que tiene en el país, en
el orden económico, social, político, etc. y en cuánto tiempo?

R. El pueblo dice ahora o nunca y el pueblo de alguna manera lo ha demostrado en octubre,


hubo un vacío político, no estuvieron los partidos políticos tradicionales y no tradicionales
para poder responder y proponer sus propuestas, pero ahí se rearticuló ese poder y lo
podemos hacer, nunca hemos tenido oportunidad de tener el poder, Carlos Mesa que nos
devuelva el poder, él es descendiente de un conquistador español, que nos devuelva, que
nos devuelva el poder, nosotros manejaremos, somos capaces, hemos construido la ciudad,
hemos construido Santa Cruz, la ciudad y todas las ciudades, somos los carpinteros, somos
los albañiles, hemos hecho las calles, hacemos los muebles, confeccionamos ropa y somos
creo que los mejores, que a través de nuestros impuestos mantenemos este país, pero en
este momento, no tenemos pues en nuestras manos el poder, si ese poder estaría en nuestras
manos, de los indios, también de los mestizos, también de los chocos criollos, por que no
podemos llevar adelante este país, seríamos un poderoso como antes fue Tahuantinsuyo, el
objetivo es de acá que lo podemos hacer, cuando tengamos nuestros propios padres
verdaderos, si lo podemos hacer, ahora solamente son padrastros, ellos no
conocen nuestra realidad, no saben, se equivocan quieren regalar nuestros recursos
naturales como el gas a través de regalías que nada menos eso debería ser contribución a los
pueblos, contribución a los habitantes.
¿En cuánto tiempo? -por que no hacemos la prueba, yo hice la prueba lanzando la
Constitución para ver si reaccionarían, pero poco a poco el pueblo está respondiendo, si no
se define en esta Asamblea Constituyente que va a haber, entonces el pueblo se va a
levantar, si hay una Asamblea Constituyente que quiere proponerse usémoslos,
simularemos como ser bolivianos, nos meteremos y a partir de ahí desestructuraremos este
neoliberalismo, este sistema, lo destruiremos para poder reconstruir nuestro propio
Tahuantinsuyo, lo haremos en esa Asamblea Constituyente que lo llaman pero no van a ser
manejada por nosotros si no va a ser manejada por los de arriba, pero aprovecharemos esa
Asamblea Constituyente para orientarlos, para la reconstitución del Tahuantinsuyo, donde
realmente con ella tendremos nuestra independencia y nuestra soberanía. Gracias.

P. ¿Cuál es el rol de la Policía y de las Fuerzas Armadas en el tipo de Estado que usted está
planteando?

R. Yo habría propuesto a Felipe Quispe el 2000 para hacer un ejército indio, yo compré
uniforme cuando formamos a los de seguridad indígena en Achacachi, yo compré y el no
compró las armas, nada, por eso no le creo, lo que se quería hacer acá es unas fuerzas
integradas, habíamos propuesto de que los Sub Oficiales se conviertan en oficiales de la
Policía y del Ejército, hacer que desaparezca la Policía, el Ejército, pero en base a eso
constituir lo que se llama las fuerzas integradas, fuerzas integradas, por qué, podría haber
policía, otro ejército, otra gendarmería, para qué policías aduaneros, si no se debería hacer
una sola, esa es nuestra propuesta.
Los witucu es una fuerza donde realmente puede vigilar, cuidar, defender de las fronteras,
supervigilar, no solamente la seguridad también a los gobiernos locales, al gobierno central,
es decir, tiene un papel muy importante el ejército pero no con eso como hoy es policía y
ejército, sino de otra manera, donde nosotros podríamos ser Generales, Coronel
Choquehuanca, General Quispe, General Kantuta, no hay eso, no hay nada, y es por eso que
yo había propuesto de que se haga una fuerza integrada distinta a las Fuerzas Armadas del
día de hoy.
8.6 Un Estado: dos sistemas

Javier Medina

“Las palabras fundamentales del lenguaje


no son vocablos aislados,
sino pares de vocablos.
Una de estas palabras primordiales es el par: Yo - Tú.
Las palabras primordiales no significan cosas,
sino que indican relaciones”
Martin Buber

La arquitectura intercultural de la nueva Constitución

Todas las Constituciones de la edad moderna, de cuño occidental, son monoculturales


(dicen Yo). La CPE boliviana es también monocultural (excluye el Tú amerindio). La Ley
de necesidad de reforma de la Constitución, también es monocultural, pues sigue
excluyendo al 62% indígena de la población. Sin embargo, en la CPE de 1995, en el
“Artículo primero” se define a Bolivia como un “Estado multicultural” y el acuerdo, en
1995, fue que en la próxima revisión de la Constitución se desarrollaría la semilla
intercultural del Artículo primero; cosa que no cumplió la Ley de necesidad de reforma, ni
la Constitución recientemente aprobada, que siguen ofreciendo más parches
monoculturales.

Por tanto, es decisivo, para “refundar Bolivia”, que tengamos un mapa mental, un diagrama
cognitivo... de tipo intercultural para pensar la nueva Constitución. El pensamiento necesita
de mapas mentales y diagramas para ordenar y ubicar las ideas. Es cierto que el mapa no es
el territorio, pero sin mapa uno corre el peligro de perderse en el territorio; sin modelos-
hipótesis, no hay ciencia. Y este peligro nos está amenazado ahora: poner las nuevas
energías: ese Ajayu que la nación aymara ha vuelto a meter en el cuerpo de esa colectividad
que llamamos Bolivia, en el odre viejo de siempre que sólo soporta el mundo simbólico del
occidente patriarcal y racionalista (que ya ha fenecido, epocalmente) y que es incapaz, por
diseño, de enriquecerse con el mundo simbólico de la indianidad, sistémico y ecológico,
que es nuestro cable al siglo XXI.

Todas las tradiciones místicas de la tierra saben que la unidad sale de la dualidad. Los
chinos hablan de yin y yang, los amerindios de chacha y warmi, la Kabaláh de jojmáh y
bináh, los físicos de materia y energía. El nuevo paradigma científico del siglo XX, a partir
de las teorías de Einstein y Max Planck, sobre la naturaleza dual de la luz, ha generalizado,
a través de Louis de Broglie, esta estructura a toda la naturaleza; Niels Bohr y Marcel
Mauus la han extendido a la estructura de todas las sociedades y, a fortiori, digo yo, del
Estado; las neurociencias la han descubierto en la constitución del cerebro (lóbulo derecho
y lóbulo izquierdo) y, antes, la psicología, C.G. Jung: animus y anima, en la estructura del
psiquismo humano... hasta las computadoras operan sobre una base binaria; no hay luz sin
polo positivo y polo negativo... y los ejemplos se podrían estirar hasta el infinito, porque
todo (arriba y abajo, adentro y afuera: en lo macro y en lo micro) está compuesto por dos
fuerzas básicas: la de conjunción, bosón, y la de disjunción, fermión.
En una mirada de larga duración, la edad moderna (donde se inscribe la fallida República
de Bolivia) aparece como una era oscurantista y simplista que redujo la unidad dual y la
complejdad a la unidad de un solo modelo: el paradigma newtoniano que se caracteriza por
el reduccionismo y la atomización. La humanidad precisa rematar, políticamente, ese
paradigma caduco. Así como Bolivia ha sido pionera en dar el tiro de gracia al
neoliberalismo, así también, para enterrar ese cadáver, debe constituirse y renacer con un
traje cuántico e intercultural, donde los dos sistemas: el occidental y el amerindio, opuestos
como son, se encuentren complementariamente en un Taypi a través de un Tinku intelectual
en el debate de la Constituyente para consensuar un nuevo Contrato social y natural.

Ahora sólo puedo fijar una idea-fuerza. Por tanto voy a mostrar unos cuantos diagramas
bifásicos de flujos, útiles para pensar interculturalmente no sólo la nueva Constitución sino
que estos diagramas también pueden servir para pensar la representación a la Constituyente
con sensatez, equidad y sin prejuicios.

Un primer diagrama puede ser el modelo cosmológico de Santa Cruz Pachakuti Yamki que
viene en su “Relación de antiguedades deste reyno del Piru”. Al lado ofrezco un par de
diagramas explicativos, propuestos por Jorge Miranda (La Puerta del Sol. Cosmología y
simbolismo andino), con el fin de mostrar las tres columnas: las dos polaridades extremas
que se reconcilian en la columna del centro.

(grupo de figuras 1)

Un segundo diagrama es el Arbol de la Vida, de la Kabalah, conocido tambiém como Arbol


sefirótico que consiste de tres columnas: el de la derecha representa la columna femenina
(bosónica, de las fuerzas de conjunción y atracción) el de la izquierda la columna masculina
(fermiónica, de las fuerzas de fragmentación y expansión) y la columna del centro el taypi
entre ambos extremos (la justicia, tikun). Dice el Gran Rabino de Ginebra, Alejandro
Safran, que Einstein le había confiado que se inspiró en este diagrama para desarrollar su
famosa ecuación donde pone el signo igual entre lo que la fisica moderna había pensado
separadamente: la energía y la materia; según los kabalistas sefardíes este diagrama es
cruzado por el “rayo”, kav, que baja en zigzag todo el diagrama, y que Einstein tradujo, en
su ecuación, como “velocidad de la luz”, or.

(figura 2)

Un tercer diagrama puede ser la doble hélice del ADN. La molécula de ADN es una larga
cadena única constituida por dos cintas entrelazadas y religadas tetralécticamente en su
medio por las cuatro bases (Adenina, Guanina, Citosina, Timina). Estas no pueden
acoplarse más que por pares específícos (A con T, G con C). Esto implica que el mensaje
genético es doble. El ADN es la molécula informativa de la vida y su esencia misma
consiste en ser, a la vez, una y doble.

(figura 3)

Recapitularé lo dicho en base a dos diagramas del Arbol de la vida.


En el primer diagrama coloco, en la columna de la derecha, a la Bolivia amerindia; en la
columna de la izquierda a la Bolivia occidental y, en la columna del centro, el encuentro
complementario de ambas polaridades, señaladas, por comodidad, con + y -.

(figuras 4)

En el mismo diagrama, quiero complejizar la idea con dos insumos provenientes, uno, de la
tradición hermética: el concepto de “microcosmos” y, el otro, de la física cuántica: el
concepto de “colapso” de Schrodinger en el “experimento de los dos cortes”: colapsar ora
como onda ora como partícula. Dicho simplistamente: todos tenemos la capacidad de + y -,
pero si colapsamos como + (entonces, - se subordina) si colapsamos como – (en ese caso, +
se subordina). Otro ejemplo: la bisexualidad de todo lo viviente. Todos los seres humanos
tenemos la potencialidad macho- hembra, fisiológica y psíquicamente: androginia, pero
colapsamos ora como macho (y, en ese caso, lo hembra queda latente) ora colapsamos
como hembra (y, en ese caso, lo masculino queda latente). De cara a lo nuestro. Todas las
personas y las civilizaciones están constituidas por la polaridad: individuo-comunidad;
ahora bien, el occidente moderno, políticamente, ha colapsado como individuo (y, por
tanto, tiene latente y subdesarrollado lo comunitario) y la indianidad ha colapsado
comunitariamente (y, por tanto, tiene latente y subdesarrollado lo individual). La rebelión
indígena de octubre lo ha vuelto a demostrar: lo comunitario es más importante y decisivo
que los liderazgos individuales. Lo kinético-energético amerindio versus lo pasivo- verbal
de los piquetes de huelga de hambre de la hoyada: sus sendos manifiestos a la nación de
inocultable protagonismo individual.

Por tanto, podemos sugerir pensar lo siguiente: llamaremos VIA COMUNITARIA a lo


emblemático del sistema amerindio y VIA INDIVIDUALISTA a la quintaesencia del
sistema occidental moderno. La Vía comunitaria se expresa en los Sistemas de cargos
indígenas y originarios; la Vía individualista se expresa en el sistema de partidos políticos.
Estos dos sistemas antagónicos se encuentran en un taypi que vamos a entender constituido
por 3 niveles gubernativos: el municipal, abajo, el regional, en el meso, y el nacional,
arriba. Estos tres niveles gubernativos se conforman en base al sistema de cargos y al
sistema de partidos; por tanto, unos: vía eleccione s, los otros: vía designación según usos y
costumbres.

(figura 5)

Bien, este diagrama bifásico de flujos permite pensar como un sistema interconectado, o
como un organismo vivo, la vía occidental y la vía amerindia como complementarios, sin
que ninguno de los dos tenga que desaparecer o uno de ellos incluirse en el otro,
desapareciendo de este modo, como sucede en las constituciones monoculturales.

Finalmente, la composición de la representación para la Asamblea Constituyente podría


seguir la misma lógica: 62% a través del sistema de cargos (al interior del cual valen los
porcentajes respectivos del censo para aymaras, quechuas, guaranies, mojeños... de acuerdo
al sistema chachawarmi: 50% varones y 50% mujeres) y el 38% restante de la
representación a través del sistema de partidos, de acuerdo al 30 / 70 de la ley de cuotas.
De este modo, de cara a la representación a la Asamblea constituyente, nos libramos de la
tentación corporativa: gremios, sindicatos, logias, corporaciones... de tufo inequívocamente
fascista. Por cierto, en la opinión pública se ha empezado a confundir “corporativo” con
“comunitario”, como una sutil manera de sacar del juego al sistema indígena. Son dos
cosas absolutamente distintas.

Acerca de la composición intercultural de la Asamblea Constituyente

Los pieles rojas ponen los muertos, ponen en jaque al neoliberalismo, expulsan a su
representante colonial y son los caras pálidas los que colocan al presidente, los ministros y
los prefectos. Esta evidente incongruencia es peligrosa e inconveniente para todos y, en este
momento, como me comentaba Roberto Choque, tiene inquietantemente incómodos a los
aymaras. Y con razón, pienso yo. Su fuerza, en efecto, no acaba de traducirse en poder y, si
todos queremos vivir democráticamente, todos tenemos que ver cómo esa fuerza se torna en
poder político. Nos conviene a todos.

Ahora bien, esta incongruente y peligrosa desproporcionalidad seguirá sucediendo mientras


las reglas de juego constitucionales sigan siendo monoculturales; es decir, que excluyan de
facto el sistema indígena que representa al 62% de la población boliviana.

Tal como están las reglas de juego: el sistema liberal de representación individual, vía
partidos, que representa al 38% de la población, se volverá a imponer en la elección de los
constituyentes, con –seguramente- una cantidad apreciable de indígenas que servirá para
mostrar el “pluralismo” de la “sociedad abierta” que somos y, en ello, encubrir el apartheid
que, de iure y de facto, somos y que no parece avergonzarnos .

Pero no nos engañemos: la presencia parlamentaria indígena, hasta ahora, ha sido ineficaz,
no porque sean ineficientes sino porque juegan en cancha ajena y con reglas que no sólo no
comprenden (y cuando las entienden, como Pazos Kanki que defendió la vía comunitaria
frente a la vía individualista de los Olañeta, no son tomadas en cuenta) sino que, además,
Reglamentos mediante, están diseñadas para excluirlos de facto cuando son percibidos
como una amenaza; por ejemplo, la más burda de todas ellas: el “Rodillo parlamentario”
que empuja a los indígenas a la calle (para acusarlos, luego, de terroristas y autoritarios) y
cuyo resultado más reciente ha sido la expulsión, desde las calles, del que dió la orden de
usar el Rodillo parlamentario. Seamos inteligentes, por favor.

Como la conformación, cualitativa y cuantitativa, de la representación constituyente es,


ahora, el tema más importante y urgente, para los que buscamos equidad y
complementariedad democrática en la representación, sugiero pensar con el corazón las
siguientes propuestas que están en mesa, en este momento, y a las que me permito añadir
otra.

Una opción sostiene que el actual Parlamento se convierta en Constituyente; a los posibles
reparos, se suele adelantar el argumento de que la presencia indígena actual es
representativa. En una Constituyente, empero, lo más importante es el temario: las visiones
de país. Los representantes deben presentar los grandes lineamientos consensuados por sus
electores y, en el espíritu de los mismos, negociar con las otras visiones de país un buen
Contrato intercultural de convivencia. Para ello no ha sido elegida la actual representación
parlamentaria. No tiene ese mandato democrático.

Otra opción sostiene que los representantes sean elegidos, vía partidos, por las actuales
circunscripciones electorales. Eventualmente, siguiendo la lógica de los uninominales, esta
opción puede abrirse a candidatos “independientes”, adscritos a las listas partidarias. Ya
conocemos, empero, los resultados: entran independientes y a la hora de la votación: de las
decisiones, no se nota en nada su independencia política.

Otra opción es la vía corporativa: la COB pone sus representantes, la CSUTCB otro tanto,
la CEPB, las Fuerzas Armadas, los peque ños productores, los gremialistas, las logias
travestidas de cooperativas y/o Comités cívicos... A esta lógica es imposible ponerle coto,
si se dispara, en un contexto político y social de disgregación y entropía estatal, como la
que estamos viviendo.

Los que confunden comunitarismo y corporativismo están sugiriendo la idea de que


también los Pueblos indígenas (entendidos como abstracciones étnicas) presenten sus
representantes por esta vía, como una suerte de complementariedad de lo territorial y lo
funcional. Craso error, no sólo conceptual sino sobre todo político. Propiciaría el tiro de
gracia al sistema de cargos indígena que 500 años de dominación colonial y republicana no
pudieron extirpar. Dominique Temple llama a esta forma de etnocidio, “politicidio”:
descabezamiento de sus sistemas de autoridades políticas. El comunitarismo amerindio no
tiene nada que ver con los relictos corporativos del Estado del 52. El corporativismo tiene
un inocultable tufo fascista, con el que parecen ser condescendientes nuestros cientistas
políticos.

Como acabo de inciar, yo sugiero una estructura constitucional basada en dos pilares
antagónicos (Occidente y la Indianidad) pero complemetarios (en un Taypi trigubernativo:
nacional, regional, municipal) que conozco de la Kabalah sefardí y que se expresa en dos
vías: la comunitaria, basada en los sistemas de cargos indígenas, y la individualista, basada
en el sistema liberal de partidos políticos, como lo fundamental de un sistema político veraz
y genuinamente boliviano. En esto consistiría lo nuevo de la reforma del sistema político
que sugiero pensar.

Esta arquitectura intercultural es, además, coherente con el nuevo paradigma científico
técnico y con la cosmología amerindia. Y, al final de la edad moderna, sería la primer
propuesta política que se inscribe en el continuo “kosmológico” (Ken Wilber) y kabalista
(derivado de la física cuántica, la biología, las ciencias de la tierra...la visión
“cosmoteándrica” de Panikkar..) y no en la separación y autonomía de lo político que
instituyó Bodino, en el marco del ahora caduco paradigma newtoniano, al comienzo de la
edad moderna. Retomo, pues, desde una perspectiva cuántica, la visión organísmica del
padre del federalismo en Occidente: Johannes Althusius, que los marranos escépticos y
racionalistas Bodino, Montaigne y Spinoza cerraron para abrir un espacio público a los
salidos de las aljamas y baptisterios o expulsados de las sinagogas que precisaban, como el
aire, pasar inadvertidos como ciudadanos abstractos en un abstracto Estado de Derecho. La
abstracción fue la estrategia marrana de sobrevivencia, después de la expulsión de 1492.
Quinientos años después, los mismos marranos debemos relativizarla y complejizar, desde
nuestra joya más preciosa: la Kabalah.

Así, pues, este modelo sirve también para constituir una representación a la Asamblea
Constituyente, propia a un Estado multicultural postmoderno.

El Censo de población y vivienda ha puesto fin a las estimaciones sobre cuantos bolivianos
son occidentales y cuantos son indígenas. Albó, por ejemplo, decía que “4 de cada 5
bolivanos es indígena”. El Censo indica que el 62% de la población se ha autoidentificado
como indígena y el 38% como no indígena, digamos, pues, occidental. Pues bien, sobre esta
información tenemos que cons truir la proporcionalidad de la representación a la Asamblea
Constituyente, si somos demócratas.

Primera conclusión: el 62% de los constituyentes debe ser indígena y el 38% “no indígena”,
como se autodefinieron en la boleta censal.

Segunda conclusión: el 62% se compone a partir del Sistema de cargos comunitario ; por
tanto, es designado a través de sus sistemas de democracia directa, tipo consejo: por
designación asamblearia. El 38% sale del sistema de partidos, a través de la postulación y
elección por circunscripciones electorales. Es decir, no se inventa nada; se reconoce lo que
existe de facto en ambos sistemas, como ya se hizo en la ley de Participación popular que
reconoce las OTB´s: las Organizaciones territoriales de base, es decir, los ayllus, las tentas,
los cabildos indigenales...: las células de la nación aymara, y de los pueblos quechua,
guaraní, mojeño, chiquitano...

Tercera conclusión: según el Censo, el 62% indígena se reparte de la siguiente manera:


quechua: 30.71%; aymara: 25.23%; guaraní: 1.55%; chiquitano: 2.22%; mojeño: 0.85%;
otros nativos: 1.49%. Estos serían los porcentajes de la representación indígena a la
Asamblea Constituyente.

Cuarta conclusión: el Sistema de cargos indígena funciona en base al Principio


Chachawarmi. Por tanto, la representación indígena está compuesta por 50% de mujeres y
50% de varones que equivalen, sin embargo, a un solo voto: el primer consenso
democrático. La representación occidental está compuesta en base a la relación 30 / 70 de la
Ley de cuotas: 30% de mujeres y 70% de varones y cada cual equivale a un voto, según el
Principio individualista: una voz un voto.

Así, pues, la incongruente y peligrosa desproporcionalidad, a la que nos referimos al


comienzo, empieza a deconstruirse cuando nosotros mismos empezamos a ponernos, con
inteligencia y generosidad, reglas de juego constitucionales interculturales, en el que
ambos sistemas se complementan mutuamente, sin que ninguno tenga que incluirse en el
otro.

Por cierto, cuando la Casa común empieza a arder, la Declaración de la Cumbre


Iberoamericana de Santa Cruz introduce el concepto de “Inclusión”. Con inmensa buena
voluntad sobreentiende que Inclusión significa la inclusión de lo indígena en lo occidental,
siguiendo el Principio de identidad: A es igual a A. No se le ocurre ni siquiera pensar que
ese concepto: Inclusión, también se puede leer al revés: inclusión de lo occidental en lo
indígena. Cuando lo lean así, los progresistas occidentales se darán cuenta que la Inclusión
no es posible, salvo etnocidio, y recién entonces podrán oir y escuchar a los indígenas que
reclaman “complementariedad” y no “inclusión”. El etnocentrismo subyacente al concepto
de Inclusión lleva, en tiempos de paz, a Ministerios de asuntos indígenas y a Ministerios de
asuntos blancos (Felipe Quispe). No se trata de eso.

Para nacer constitucionalmente al siglo XXI tenemos que relativizar el Principio


aristotélico de Identidad y pensar con el Principio cuántico de Complementariedad de
opuestos, formulado por Bohr, a partir del Principio de Incertidumbre de Heisenberg: el
electrón (digamos, Bolivia) colapsa ora como onda (digamos, la indianidad) ora como
corpúsculo (digamos, occidente) de acuerdo al efecto Observador (digamos, en este caso,
los representantes a la Asamblea Constituyente). La onda no se incluye en la partícula ni la
partícula en la onda: ambas (antagónicas como son) constituyen, por complementariedad,
el electrón. Como en lo micro, en lo macro.

Un Estado: dos sistemas

El software occidental ha sido marcado a fuego por el principio de identidad, desde


Aristóteles a la fisica cuántica, al punto que el concepto de Verdad ha sido definido por él:
la verdad es el lugar de lo no contradictorio. Tomás de Aquino posiciona esta manera de
ver, para los ocho siglos siguientes : verdad es la adecuación de la cosa al intelecto. Este
software es hegemónico, pero no único. En Occidente la mística cristiana ha vivido a partir
de otra intuición: la verdad es el lugar de lo contradictorio, que ha llamado misterio, y la
experiencia de esta “noche luminosa” la ha compartido con todas las escuelas místicas que
ha conocido la humanidad. La gran novedad del siglo XX es que la ciencia dura y pura: las
matemáticas, la física...se han sumado a esta perspectiva. El que ha formulado,
lógicamente, este principio epistemológico: el Principio contradictorio, es Stéphane
Lupasco.

Con la “Unidad dual” sucede lo mismo que con el tornasolado cuello de una paloma:
dependiendo del movimiento, de la vista y/o del cuello, aparece ora verduzco ora violáceo.
Aceptando la contradicción, unos pondrán el énfasis en “unidad”, otros en “dual”. Parece
que Rafael Archondo enfatiza la unidad y yo, según él, la dualidad. Yo, por razones de
civilización: el monoteismo, me acerco a la “Unidad dual” desde la perspectiva de la
Unidad (¡Shema Israel! Adonai Eloheinu, Adonai Echad: ¡Escucha, Israel: Adonai, nuestro
Dio, es Uno”). Dominique Temple, mi maestro, como buen descendiente de cátaros y
albigenses, se acerca desde la dualidad. Ese no es el punto, sin embargo. El problema
deviene del hecho de que nos estamos comunicando por escrito y la escritura mucho más
aun que la palabra, es el lugar por antonomasia de lo no contradictorio; de otro modo no
funcionaría el sistema fonológico indoeuropeo coagulado en un alfabeto (a es a, b es be...)
Ahora bien, en este sistema, el sentido: el significado, acaece en la esfera de lo
contradictorio. No estamos educados, en estados habituales de conciencia, a sostener en el
mismo hálito dos sistemas contradictorios. Pero, percatarse de ello, es el comienzo de la
lucidez y del humor.
Nuevamente agradezco al amigo Rafo Archondo por la oportunidad de explicitar una
manera irritante de ver este país (lo se) pero que, en tiempos de polarización, es la única vía
que puede llevarnos a la cordura y a un diálogo de civilizaciones enriquecedor para todos,
justamente porque todos llevamos dentro, contradictoriamente, un ser comunitario y un
ente individualista: bosón y fermión, pautados (enfatizados o reprimidos)
civilizatoriamente.

Políticamente, mi propuesta se podría expresar también con una fórmula “oriental” que los
chinos hicieron popular cuando Hong Kong les fuera devuelta: “Un Estado: dos sistemas
económicos”. No es un cuento chino: funciona; es el camino que nos puede hacer viables
como una com- unidad dual políticamente organizada en el siglo XXI. Los andinos piensan
lo mismo: el Ayllu es la Unidad dual de aransaya y urinsaya, de la parcialidad de arriba y
la parcialidad de abajo. El imperio inca fue diseñado e implementado en base a la misma
lógica. Los señoríos lo mismo. Simón Yampara, cuando hace algunos años conversabamos
sobre la futura Constitución de Boliva, ya hablaba de la Unidad dual de la “parcialidad
occidental y la parcialidad indígena”, como de un “nuevo Orden social de Armonía”. Yo,
desde mi parcialidad, hago eco a esa generosa y sabia propuesta de convivencia civilizada
que nos ofrecen algunos intelectuales aymaras.

Entiendo que la Unidad es el Estado y que este Estado está conformado por dos Bolivias:
por dos sistemas antagónicos pero complementarios. Un Estado compuesto por dos
sistemas económicos: intercambio y reciprocidad. Un Estado compuesto por dos sistemas
políticos: sistema comunitario de cargos y sistema político liberal de partidos. Un Estado
compuesto por dos sistemas jurídicos: derecho consuetudinario y derecho positivo, etcétera.
La unidad no puede ser Bolivia, pues no incluye al Otro; es la expresión, con visos de
absolutez, de una sola parcialidad. La prueba que no funciona son los últimos 178 años que
ahora agonizan ante nuestra perpleja mirada.

En realidad, en este modelo, el Estado no es una entidad propiamente dicha, sino el


resultado contradictorio de la complementariedad de los sistemas que le constituyen. Es el
efecto de las interrelaciones de los sistemas. Este enfoque ha sido formulado por los
teóricos de la subsidiaridad: “Tanto Estado como sea necesario...” que yo reformulo así:
Tanto Estado como estén dispuestos a financiar las regiones y los municipios: todo el poder
a la Red y sus nodos. Pero, esta es otra discusión.

El tema que enerva, sin embargo, a mi amigo Rafo Archondo es el étnico. Personalmente,
yo no pongo el énfasis en él; miro el problema desde la teoría de sistemas y la mecánica
cuántica. Pero es obvio, para mí, que los indígenas tienen un sistema político propio que
perdura hasta hoy y que ha sido reconocido por la ley de Participación Popular : las OTB´s.
Ahora bien, también se que hasta ahora no nos hemos puesto a desenrrollar las
implicaciones de la letra O: organización, que entraña su sistema organizacional, su
comprensión del poder como servicio rotatorio: su sistema de cargos y de autoridad
política. Lo único que sostengo es que, también para el nivel nacional, siguiendo la lógica
y el espíritu de la ley 1551, reconozcamos de iure lo que existe de facto. Con este
reconocimiento salimos ganado todos y nos podemos ahorrar, por ceguera y tozudez, el que
se introduzca, a la fuerza, la lógica de los estamentos corporativos en el sistema político; lo
cual considero sumamente peligroso para un sistema democrático. Tampoco puedo dejar de
observar, con preocupación, que preferimos tolerar una de las semillas del fascismo: lo
corporativo, “de modo excepcional sólo para la Asamblea Constituyente” (Luis Verdesoto)
a aceptar el sistema de cargo s comunitario. El principio comunitario es la esencia de la
democracia, también en Occidente como lo recordara hace poco Roberto Barbery, a
propósito de La democracia en América, ligando el nombre de Tocqueville al de Apaza.

En cuanto al 62% de indígenas y 38% de no indígenas (tener que hablar así es culpa del
Censo) se aplica el principio de mayorías y minorías que rige en todos los Parlamentos del
mundo. Si somos minoría es democrático aceptarlo y no es sano hacer tanto aspaviento
ideologizado. A contrapelo de lo que sostiene Hugo Fernandez, este sistema es el más
simple y sencillo de todos para conformar una Asamblea Constituyente Intercultural desde
el inicio: los dos sistemas ya existen (es decir, están normados; uno, por el derecho
positivo, el otro, por el derecho consuetudinario) y la proporción viene dada por el último
Censo que es un instrumento para facilitar, justamente, decisiones de política pública. En
un “Estado” de apartheid fáctico, es de justicia y de gran política buscar los equilibrios,
también étnicamente. Cuando se toma conciencia de que se es minoría, lo étnico no puede
ni debe convertirse en tabú. Cerrar los ojos a este dato, es peor que un error; es pretender
tapar el sol con un dedo.

Archondo acepta al Otro pero en su sistema: si quieren hacer política que la hagan, pero
bajo la forma partido; si quieren tener Estado, sólo existe éste, aunque no
funcione...Obviamente, en virtud al principio lógico del Tercero incluido, los indígenas no
se cerrarán a la “forma partido”, ni a la “forma Estado”, ni a la “forma Dios”... que se les
ofrezca; al contrario de nosotros que, en virtud del principio de Tercero excluido, tenemos
más dificultades para aceptar al Otro, como otro; siempre se nos sale el misionero que
llevamos dentro, como parte de nuestra identidad monoteista: tenemos una necesidad óntica
de convertir al Otro a “nuestra imagen y semejanza”, produciendo remedos, plagios,
caricaturas ... que sólo pueden despertar sarcasmo o compasión, pero no respeto.

Ahora bien, como fruto de este celo misionero, no puedo cerrar los ojos a que,
políticamente, somos una república bananera, un estado de bolero de caballería, un
proyectorado de la cooperación internacional, una behetría a punto de convertirse en un
reino de taifas, porque, justamente, ni los indios ni los no indios, pueden entender y aplicar
la lógica racional, abstracta, instrumetal, de separación de poderes que modula al Estado
moderno. (La última transgresión: la figura del Delegado presidencial que no sólo manda al
dientre la Separación de poderes, formulada por Montesquieu, sino que duplica funciones y
presupuestos, amen de coadyuvar a corroer el poco Estado de Derecho que tenemos). Los
ejemplos son interminables y penosos y, como no soy masoquista, no quiero volver a
ennumerarlos. Nuestro Grotesco político dimana, justamente, de la no vigencia, ni
comprensión de la racionalidad occidental moderna. Ante la vergüenza que siento de
nuestros comportamientos colectivos, que los ponemos en escena con una convicción que
no deja de asombrarme, me parece más sensato que nos organicemos de acuerdo a las
lógicas y sistemas que son más nuestros, que comprendemos y, por ello, justamente, nos
podríamos desenvolver en ellos con eficacia, elegancia y naturalidad. Necesitamos un
Estado a nuestra medida.
Quiero decir, que una Asamblea Constituyente Intercultural es una oportunidad única para
diseñar colectivamente un nuevo Estado (la Unidad) con lo mejor que tenemos de ambos
sistemas (lo dual). Como es obvio, no soy nada amigo de los mestizajes, sincretismos y
síntesis a la hegeliana: A y B desaparecen en C. C es lo grotesco, la monstruosidad, lo que
no funciona: lo que ahora somos. Mi propuesta la podría resumir de la siguiente manera: A
y B son diferentes, son contradictorios pero se complementan en un Tercero incluido que
existe gracias a la polaridad contradictoria de A y B que no desaparece; a ello le podremos
llamar Estado; unitario descentralizado, federal, autonómico, una Consociación de regiones
multiétnicas y municipios o un Estado diárquico que sería lo correcto.

¿Cuoteo étnico o complementariedad de sistemas?

Los bolivianos hemos utilizado dos metáforas para expresar nuestra relación con el Otro.
La primera es la metáfora de clase: burguesía-proletariado, que dió lugar al Frente de clase
antagonista, de origen marxista- leninista. Otra metáfora, más reciente, que promueve la
sociología americana, contra Durkheim, es la metáfora étnica: los Otros (las minorías no
integradas cabalmente al Estado Nación de los peregrinos blancos y protestantes) son
calificados de étnicos. La colonia, al comienzo, se manejó con la metáfora eclesiática
fieles-infieles. Característica común a estos modelos, basados en los principios lógicos de
identidad, no-contradicción y tercero excluido, es su beligerancia: el otro debe ser
combatido, marginado, bautizado; pues sólo hay una verdad: mi polaridad, por tanto, no
cabe el respeto al Otro como un complementario mío: entendido como la otra posibilidad
de lo humano que me haría cabal (en el sentido kabalista del Quijote: caballero andante:
Adam Kadmon: Hombre integral).

Yo me permito añadir otra metáfora que proviene del nuevo paradigma científico y es la de
entender a Occidente y a la Indianidad como civilizaciones, es decir, como sistemas y, a
saber, como dos sistemas antagónicos pero complementarios. La Indiandad es la manera
como el Oriente acaece en las Américas.

Como hombre de mi época, me inspiro en el nuevo paradigma científico técnico que, si


bien escéptico del mito de progreso de mi civilización, entiendo que supera y mejora al
anterior paradigma, el newtoniano, en el sentido que Thomas Kuhn dió a lo que llamó
“revoluciones científicas”.

El modelo cuántico, que Louis de Broglie generalizó al universo, Rupert Sheldrake a la


biología, Niels Bohr y Marcel Mauss a las sociedades y yo a las civilizaciones, puede
ayudar a entender mi propuesta, no sólo de conformación de la Asamblea Constituyente,
sino de composición de un sistema político genuinamente boliviano.

Con la simplificación que exige un artículo diría: así como un electrón (digamos Bolivia)
contiene contradictoriamente la función onda (digamos la indianidad) y la función partícula
(digamos occidente), este modelo es extendible a todo lo que es y respira. Es más, al
interior de cada una de estas fuerzas contradictorias, que la física ha empaquetado bajo los
nombres de Bosón (en honor a Bose y Einstein) y Fermión (en honor a Fermi), se encuentra
la fuerza opuesta, sólo que subordinada. Por ejemplo, todo ser humano, ex ovo, tiene la
potencialidad macho-hembra, pero unos colapsan como varones, otras como mujeres; pero
eso no significa que los varones no contengan en sí mismos lo hembra; lo tienen, pero
subordinado. C.G.Jung llamó a esta dimensión anima y animus, en el caso de la mujer. El
cerebro funciona de la misma manera. Todo ente está compuesto de (+ -) y (- +). La unidad
es dual. Aristoteles mismo, en el alba de occidente, entendió la Materia conteniendo la
contradicción vida-muerte, generación-degeneración, macho-hembra... El monoteismo
rabínico, en general, decidió por la afirmación de una sola polaridad y la represión de la
otra polaridad; eso, con el tiempo, llevó a lo que Freud llamaría “el malestar en la cultura”;
malestar producido por la represión patriarcal de la otra polaridad que Freud focalizó en la
sexualidad (la expresión de lo bosónico sin más en los seres vivos: la conjunción, por
antonomasia). Lo opuesto complementario del monoteismo rabínico es el animismo
kabalista que siempre fue y será elitista, aristocrático, minoritario: esotérico. El pueblo va a
la sinagoga. La Mishna misma, por ejemplo, está atrevesada por la complementariedad de
la Escuela de rabi Hilel (lo bosónico) y la Escuela de rabi Samai (lo fermiónico).

Mutatis mutandi, es insensato postular –contra toda evidencia- que hay una sola Bolivia; es
mala ideología; hasta la ideología tiene que ser verosimil, para seducir. Hagamos caso a
nuestra experiencia cotidiana: conversen con sus empleadas domésticas; hagan el esfuerzo,
a modo de ejercicio teórico, de “integrarse” en su cosmovisión; pronto comprobarán que no
se puede desaparecer en el otro; es imposible. No lo exijamos, por tanto, a los amerindios.
Quinientos años de intentos fracasados deberían ser suficientes.

Ventana de oportunidad

Así, pues, el nuevo paradigma científico nos abre una ventana de oportunidad para entender
a los dos Bolivias como dos sistemas opuestos, antagónicos, pero complementarios.

La Bolivia occidental moderna se inscribe en un paradigma fermiónico: privilegia la fuerza


de expansión que fragmenta y atomiza la materia-energía: de ahí proviene el enfoque
mecanicista, individualista, abstracto; sus valores son, por ello, la libertad, la igualdad, el
desarrollo, el progreso, el utilitarismo, la cantidad: el Intercambio: el lucro, la ganancia, la
acumulación; reificado el mundo, todo puede ser comprado y vendido.

La Bolivia amerindia se inscribe en un paradigma cuántico: busca la complementariedad


bosón- fermión; por eso, sin renunciar a lo bosónico, en el que colapsa, se abre al
cristianismo, al mercado, a la “forma partido”, al rock y a todo lo que le pueda
complementar, pero en su matriz civilizatoria: la red; una red que se extiende a universos
paralelos que el paradigma newtoniano excluyó de su episteme: el ayllu de la sallqa y el
ayllu de las waka que se encuentran en el ayllu de los jaqi o runa : aquí y ahora, y del que sí
puede dar cuenta el paradigma cuántico.

Políticamente ambas civilizaciones colapsan, una, en el individualismo liberal,


representativo, vía elecciones, de la forma partido. La otra civilización, colapsa en un
sistema de cargos, rotatorio, inscrita sobre una matriz comunitaria, basada en la red; que
persiste, a pesar del politicidio perpetrado por las iglesias y las ONG: utilizando la
intermediación del don: el prestigio de donadores, intentan reemplazar a las autoridades
originarias que no pueden sobrepujar el don de la cooperación internacional que ellas
intermedian.

Así, pues, propongo un sistema político basado en la complementariedad de dos sistemas


antagónicos: el individualismo liberal, expresado en la forma partido, y el comunitarismo
amerindio, expresado en su sistema de cargos.

Esto nada tiene que ver con un cuoteo étnico; cuoteo, en Bolivia, connota reparto de pegas
y cargos, dentro de un sistema político monocultural, que, sin cuestionar, su monismo
civilizatorio, hace partícipe del festín prebendal a los indios remisos. Yo planteo la
complementariedad de dos sistemas civilizatorios antagónicos: los que tenemos; no cierro
los ojos a nada de lo que hay; con ello propongo una autopoiesis política en la
Constituyente.

Por la misma razón, lo cuantitativo y lo cualitativo deben buscar su complementariedad. No


hay que reprimir ninguna de las dos. Yo sugiero algo banal, de sentido común y habitual en
el modelo democrático representativo que funciona en base a mayorías / minorías. Si el
62% de los bolivianos es amerindio ese debe ser el porcentaje de representación política a
la Asamblea Constituyente. Ahora bien, aplicar este criterio político a lo técnico, para
cuotear los ministerios, sería una imbecilidad.

Mas allá de la lógica de la evangelización, el darwinismo social y el leninismo, en el que


hemos sido socializados, planteo una complementariedad de sistemas, es decir, de software,
de PNL porque, para usar el argumento más cínico, en la era de los derechos humanos y los
tribunales internacionales de justicia, ya es tarde para matar indios: tenemos que con-vivir
civilizadamente (no convertirlos a nuestro sistema: continuar el etnocidio) y, mejor, si
vamos hacia unas bodas entre occidente y la indianidad, a un matrimonio del monoteismo y
el animismo; así corresponderíamos al don de mujeres que nos hicieron el siglo XVI
cuando, de acuerdo al principio de reciprocidad, nos quisieron como cuñados y no como
enemigos. Estamos en territorio indígena.

Elección y designación

El día de ayer, en un pequeño taller organizado por COSUDE, sobre “Indígena y


Campesino”, los participantes me regalaron con los siguientes insumos para seguir
pensando este país y, en concreto, la querella acerca del modo de composición de los
representantes a la Asamblea Constituyente. Por la información, bastante fresca, la
situación parece ser la siguiente.

En los espacios en que interactúan los representantes de la Bolivia occidental, pareciera


(probablemente, en virtud del “Efecto Observador”) que hubiera una inclinación hacia la
designación vía voto (vía individualista); eso sí, decidida por las nuevas agrupaciones
ciudadanas, comunitarias o corporativas (vía “comunitaria” en un contexto colonial). Es
absolutamente verosimil este cuadro, dados nuestros antecedentes. En efecto, se puede
notar la clásica acomodación del principio comunitario (suscitar un espacio para buscar la
complementariedad con el otro), en un contexto de subalternidad colonial producida por la
hegemonía del principio individualista.
Desde un punto de vista cuántico, estos dos principios, que corresponden a las fuerzas
bosónicas (lo comunitario) y fermiónicas (lo individualista) nunca desaparecen. En
civilizaciones animistas buscan una complementariedad tipo chachawarmi; en
civilizaciones monoteístas, la polaridad patriarcal busca la minimización de la otra
polaridad, en virtud del principio de identidad y no contradicción. Si no pueden llegar a un
equilibrio, tipo chachawarmi, porque la sociedad no se ha descolonizado intelectual y
afectivamente, crean un espacio para buscar un sucedaneo de tipo complementario:
elección vía voto por circunscripciones electorales, pero el candidato es elegido por
designación, para hacer justicia al principio comunitario (que se malentiende como
corporativo). Esta es, pues, una de las configuraciones en juego.

La otra configuración que también percibo, en el seno no sólo de las elites de la Bolivia
indígena, es la de la conciencia de la fragmentació n que ha producido en su interior el
contacto desigual con la Bolivia republicana: no sólo la bifurcación producida por la
reforma agraria: sindicato versus ayllu, que, sin embargo, ha empezado a cerrase: reflejo de
ese proceso es la CIDOB y CONAMAQ, sino también la confusión que se introduce desde
fuera interpelándolos corporativamente: COB, COR El Alto, CSUTCB, Bartolina Sisa,
gremiales, colonizadores, cocaleros…Ante esta atomización, se está levantando la consigna
de convocar al Segundo Congreso Indigenal (el primero, como se recordará, tuvo lugar en
1945), justamente, para recuperar su unidad, de cara a designar su representación
comunitaria a la Asamblea constituyente.

Estas dos fuerzas están, pues, nuevamente en juego. ¿Cuál la masa crítica de ambas? lo
ignoro. ¿Cuál la posición políticamente más sensata? Sobre ello, sólo puedo aventurar la
siguiente conjetura para la reflexión colectiva.

Me parece que cada vez es más inocultable (incluso para las más altas esferas del
gobierno) el hecho de que Bolivia es un simulacro estatal en pleno proceso de entropía e
implosión: todo lo sólido (las instituciones) se disipa. Claro, todavía hay ciegos influyentes
que, ante el caos, gritan “mano dura” (su supuesto: tenemos y existe un Estado de derecho y
“hay que gobernar”. Ese fue el supuesto del filósofo de Chicago y todos sabemos cómo la
cagó en Octubre. Hay que gobernar –lo que implica instituciones- cuando se puede, cuando
no, hay que catalizar el caos hacia un caos creativo). Si esta tesis del simulacro estatal es
consistente, entonces se impone pensar un renacimiento sobre bases sólidas. Lo sólido es lo
que hay, lo que somos, sin encubrimientos ideológicos. Lo que hay son dos civilizaciones
antagónicas, a cuyo interior existen diversas culturas. El desafío constitucional es buscar su
complementariedad. Este desafío nos plantea un problema lógico. ¿Cómo se piensa la
dualidad? La modernidad ofreció el modelo hegeliano de la tesis/antítesis/síntesis: A y B,
contradictorios como son, desaparecen en C, la síntesis. Este modelo lógico es el que ha
dado lugar a los conceptos de mestizaje, sincretismo y religiosidad popular que conforman
el sentido común de los habitantes occidentales de este país. Este modelo mental es sordo a
lo que dicen los indígenas: “somos aymaras, quechuas, moxeños…” (“No saben lo que
dicen”, piensa el bienpensante. “Viva el mestizaje”: Fernando Cajías)

Desde el punto de vista del desarrollo de la ciencia occidental, este modelo es relevado por
el modelo de la física cuántica: el modelo onda/p artícula: A y B son contradictorios, pero
no desaparecen en C, sino que como dos polaridades antagónicas (digamos, varón y mujer)
al encontrarse y complementarse, producen un “Tercero incluido”, Lupasco, que es más
que la suma de ambas partes (digamos, la Pareja que es el vínculo de la interrelación varón
y mujer). Este modelo lógico da lugar a entender nuestro país como el escenario donde dos
civilizaciones antagónicas buscan su complementariedad constitutiva, como un
Condensado Bose-Einstein.

Lo sano e inteligente es vivir de acuerdo al paradigma científico de la época en que se vive.


Así, pues, lo políticamente sensato es, para poder renacer como una comunidad política
viable en el siglo XXI, descolonizarnos intelectual y afectivamente todos: los bolivianos
occidentales y los bolivianos amerindios, a través de la oportunidad que nos brinda el
nuevo paradigma científico técnico. Desde ese punto de vista, hay que aspirar hacia una
complementariedad tipo Chachawarmi. Eso significa que ambas polaridades, en este caso,
la vía individual y la vía comunitaria: el voto y la designación: partícula y onda, constituyen
nuestro sistema institucional, empezando por la composición de la asamblea constituyente.
Hay que nacer bien. No podemos darnos el lujo de dar a luz otro simulacro estatal, basado
en las subjetividades e inercias coloniales, tanto del colonizador como de los colonizados.

Humildemente: sugiero pensar la complementariedad del voto individualista (que yo


ejerceré) por circunscripciones electorales como separado y diferente de la designación
comunitaria de sus sistemas de cargos, que expresaría, políticamente, nuestro respeto por el
sistema del Otro. No hay convivencia civilizada sin respeto mutuo. Si tratamos de imponer,
unilateralmente, la vía individ ualista con la designación comunitaria por circunscripción
electoral, ciertamente habremos dado un paso de mayor complejidad; pero todavía en el
campo político de la minoría occidental. Si tenemos suerte nacerá un sietemesino; lo más
probable, dado el Pachakuti, es que aborte.

Lo que desearía sugerir pensar a mis correligionarios es lo siguiente: que, en realidad, el


Otro: el amerindio: la vía comunitaria …: el animismo, no son el Otro, newtonianamente
entendido. El Otro, cuánticamente entendido, es nuestra otra mitad esencial: la dimensión
onda, reprimida por el patriarcado monoteísta de cuño abrahámico. Decir sí a la vía
comunitaria, al amerindio… es afirmar las potencialidades del ser que hemos aprendido a
reprimir durante los últimos cuatro mil años. No quiero decir, fácilmente, por mor de las
simetrías, que esto vale también para la indianidad: ellos se abrieron a nosotros desde el
primer momento del encuentro, relatado por Colon en su Diario. Esa aceptación nuestra: de
nuestra economía, de nuestra religión, sistema social, político, en fin, de nuestras locuras,
sin reciprocidad, los ha hecho vulnerables y a ese espejismo: ver en ellos lo nuestro, ha
suscitado ese Quid pro quo que llamamos mestizaje, sincretismo…y que, políticamente, se
ha expresado en la formación colonial y la forma república. Debemos voltear página. En
ello consiste la Constituyente. Nos exige una metanoia : un cambio de actitud y talante del
ser; la posibilidad de madurar y crecer como personas y como sociedad.

Las búsquedas solitarias de la plenitud humana, también tienen que expresarse


políticamente y esta Asamblea constituyente es una magnífica oportunidad para ello. El
tiempo lineal como que empieza a densificarse en un kayros, un espacio-tiempo que podría
posibilitar un salto cuántico evolutivo de la conciencia humana, sin más, teniéndonos a
nosotros como su punta de lanza política. Ya no tenemos que ser el país de las
oportunidades perdidas. Si queremos, podemos abrir, políticamente, el siglo XXI. Mas,
para ello, tenemos que pensar con el corazón nuestra otra mitad esencial.

Acerca de un rediseño intercultural del Estado.

No propugno una “reforma étnica del Estado”, como sostienen algunos amigos míos. No
me la podría imaginar. Lo que yo sugiero es un rediseño intercultural del Estado, como
unidad dual, en el que quepan las dos civilizaciones antagónicas que nos constituyen como
colectividad. Ello es técnicamente posible desde el nuevo paradigma científico actual,
basado en el Principio contradictorio. No es posible siquiera pensarlo desde los Principios
lógicos de identidad, no contradicción y tercero excluido. No ignoro que la elite intelectual
boliviana piensa todavía desde el paradigma newtoniano y cartesiano. Se, asimismo, que
toda sociedad colapsa según la “masa crítica” dominante (aquí entra el debate sobre
determinismo, indeterminación, efecto observador, incertidumbre, probabilidad...). Yo
abogo para que Bolivia tenga una masa crítica acorde al siglo XXI. Se, por supuesto, que la
Bolivia occidental es un país atrasado y subdesarrollado y, a saber, integralmente (la
Bolivia indígena, por razones cosmovisivas, no cree en los mitos de progreso y desarrollo;
el concepto homeomórfico indígena es, como se sabe, homoestasis, pues su comprensión de
la sociedad y el cosmos es de índole orgánica, es decir, sistémica). Pero también se que, por
lo menos, el 62% de la población, que se autoidentifica como indígena, piensa en quechua,
aymara, guaraní... desde el principio contradictorio (la lógica del tercero incluido; sobre lo
que ya hace bastante tiempo escribió Ivan Guzmán de Rojas y la convirtió en un programa
informático; el Atamiri); ahora bien, cuando los indígenas hablan en castellano,
obviamente, procuran hacerlo desde los principios aristotélicos, si quieren hacerse entender
y que es lo que perciben los occidentales y, con bastamente ingenuidad epistemológica, se
lo creen a pie juntilla. Con otras palabras, sospecho que si no excluimos a los indígenas, en
Bolivia existe la “masa crítica” suficiente para dar un salto cuántico hacia el siglo XXI y
plasmarlo en nuestra futura Constitución. Al modo del pari pascaliano, esa es mi apuesta
político-epistemológica.

Me hubiera gustado conocer las fuentes de Fernando Molina sobre los griegos, sobre todo
la referencia al “estado tribal, dirigido totalitariamente por una raza cuidadosamente
seleccionada”. Me ha intrigado, asimismo, la siguiente interpretación: “los artesanos debían
dar su trabajo, los guerreros su sangre y los gobernantes su sabiduría y su pureza..”. Hasta
donde estoy informado, el debate académico actual sobre el tema tiene que ver con una
relectura filológica y contextual de las traducciones modernas, sobre todo, de la Etica y la
Politica de Aristoteles que traducían los conceptos económicos y políticos aristotélicos
desde el paradigma moderno del intercambio y el liberalismo (que el, obviamente, no pudo
conocer) y no desde el paradigma griego de la reciprocidad (que es el que vigió en su
época). El debate muestra cómo esas traducciones alimentaron prejuicios moderno s
impidiendo comprender la alteridad incluso al interior de una misma civilización; no se
puede leer la Atenas de Pericles con los ojos de Popper o de los neoclásicos, para justificar
ideológicamente, por ejemplo, que la economía se basa sólo en el intercambio, la
chrematistike, y no también en la antipeponthos kat´analogian, la reciprocidad
proporcional; que si no hay democracia representativa liberal, hay totalitarismo. Después de
la segunda guerra mundial, Louis Dumont, con su Homo Hierarchicus. El sistema de castas
y sus implicaciones, justamente relativizó la visión eurocéntrica del individualismo,
mostrando el provincianismo occidental al respecto.

Por cierto, en coincidencia con Fernando Molina, el debate aristotélico se da en el contexto


de la discución sobre la justicia; primero entendida como correctiva, to en tois
sunallagmasi, luego, como distributiva, to dianemetikon dikaion; después como
proporcional, antipeponthos kat´analogian, que es la más precisa y usada como
terminología económica por Aristóteles y que Temple traduce por “reciprocidad”; otros
conceptos usuales para la reciprocidad fueron eleutheriothes, liberalidad o generosidad y
megaloprepeia, magnificencia.

Es decir, en la Atenas meditarranea, dionisiaca, que se pensó a partir de la fysis, la


democracia emergió como una democracia participativa que tomaba decisiones directas en
el ágora; la democracia participativa, ejercida por los polites iba pari pasu con la economía
de reciprocidad ; de ello tratan sobre todo las dos Eticas aristotélicas, en especial el famoso
libro V de la Etica a Nicómaco, como están mostrando los nuevos estudios grecos. En la
Atenas indoeuropea, patridominante y apolinea que se pensó a partir del eidos, y que puso
las bases conceptuales para la conformación del imperio marítimo ateniense, la democracia
se desdobla y aparece la democracia representativa que precisó de los sofistas como la
primer burocracia municipal en occidente: había que escribir las decisiones para ayudar la
fiscalización; en economía sucede otro tanto; ésta se desdobla y aparece la economía de
intercambio para facilitar, justamente, los intercambios lejanos y, allí, dinero y mercado se
hacen imprescindibles; hasta entonces sólo los metecos, kapelos y algunos esclavos se
ensuciaban con la economía de intercambio; un polites, que se respetase, funcionaba dentro
de la lógica del don y la reciprocidad. Pues bien, sostengo que ambos principios
económicos deben estar presentes en nuestra futura Constitución intercultural.

Otro tanto está sucediendo desde la antropología. Hace tiempo que no se usan los conceptos
de “tribu”, “gens”...de las ciencias sociales del siglo XIX. Tampoco los de “raza” (no puedo
evitar remitir al clásico libro de Levi Strauss, Raza e historia, que las Naciones Unidas le
encargaran para argumentar por qué se debe desterrar ese lenguaje de las políticas públicas
globales). Por eso yo defino las civilizaciones, occidente y la indianidad, y, a su interior las
culturas, a partir de los principios lógicos que las hacen operar; cultur a y civilización tienen
que ver con software, no con tipos de sangre. Me da un poco de alipori leer argumentar a
nuestros intelectuales desde una comprensión tan sanguínea de la cultura, sobre todo
después que los medios de comunicación han informado tan profusamente sobre el código
génetico, ADN, ARN...¿no leen acaso los artículos de los suplementos que dirigen?. Sobre
civilización y cultura como software he escrito en Diálogo de sordos. Occidente y la
indianidad, CEBIAE, La Paz, 2000. Cuando yo hablo de la indianidad, de interculturalidad,
mento software, PNL, no tipos sanguíneos.

El liberalismo es una parte importante de la experiencia humana; pero no es la única y


mucho menos puede ser entendida como absoluta, sin que individuo y sociedad incurran en
graves patologías psíquicas y políticas (remito a Bowling alone, para no incurrir en el lugar
común de citar el clásico El malestar en la cultura de Freud). El comunalismo es otra parte
importante de la experiencia humana; pero tampoco es la única y mucho menos debe ser
entendida como absoluta. La trampa en que solemos caer los occidentales, por la
programación neurolinguística, basada en los principios aristotélicos antedichos, es apostar
todo por el liberalismo y negar, repimir, la experiencia comunalista; o apostar por el
comunalismo y negar o reprimir la experiencia individual. No es infrecuente que gente que
con la misma pasión y unilateralidad con que apostó por una, reniegue de ella y se pase a
afirmar el otro polo con la misma unilateralidad; están presos del principio de identidad que
les impide racionalizar su propia experiencia: haber nacido en el seno de una familia, crecer
gracias a la red familiar, social...: al principio comunitario. Técnicamente, el individualismo
es una ficción; fenomenológicamente es inhallable; sin embargo, es una nueva frontera que
conquista el genio judío al introducir la escisión como criterio hermenéutico; los valores
éticos producidos: autonomía, dignidad, intimidad, subjetividad, igualdad jurídica,
libertad...son irrenunciables como los valores morales producidos por la reciprocidad y el
don: la amistad, la alianza, la confianza...Como habrá notado el agudo lector, los primeros
se inscriben en la esfera fermiónica: la tendencia a la fragmentación y disjunción de la
materia/energía y los segundos se inscriben en la esfera bosónica: la tendencia a la
aglutinación y la conjunción. La Vida, desde lo infinitamente pequeño hasta lo
infinitamente grande, es el resultado de la complementariedad de esta polaridad
contradictoria. Precisamos las dos dimensiones. A estas alturas de la historia es anacrónico
jugar el individualismo contra el comunitarismo y viceversa. En la futura Constitución
estos dos principios deberán conformar la novedad de nuestro sistema político: la vía
comunitaria, expresada en los sistemas de cargos indígenas, y la vía individualista,
expresada en el sistema liberal de partidos; no debemos renunciar a ninguno de esta dos
dimensiones que nos constituyen como bolivianos.

No puedo entrar a tocar más temas aludidos por Fernando Molina, como por ejemplo,
racionalidad, objetividad, igualdad, todos ellos usados desde el modelo reduccionista de la
ciencia galileana que ya no se estila entre gente bien informada; entre intelectuales que
viven en la era de la globalización. Ahora, se trata de pensar desde la complejidad, la
relatividad, la incertidumbre, la probabilidad, las interrelaciones... Mi participación en el
debate constitucional busca que los bolivianos nos demos una Constitución que haga
justicia a la indianidad y a occidente, pero a un occidente del siglo XXI, no del siglo XX. A
eso llamo una Constitución intercultural.

Si este año lo dedicamos colectivamente a aclarar conceptos, desmontar prejuicios,


actualizarnos, oir a los indígenas, invitarlos a los foros de la elite occidental, polemizar con
ellos; mejor aún: conversar con ellos, estará bien empleado.
8.7 De la Bolivia colonial a la asamblea constituyente
La Paz, febrero 2004

Documento del Grupo de Discusión "Mesa Indígena Pablo Zarate Willca"

Francisca ALVARADO:
"En septiembre de 1994, he sido invitada a Dinamarca donde se realizaba un Encuentro
Continental de Líderes Indígenas de América Latina.

Para salir de Bolivia se necesita pasaporte y para el pasaporte se necesita carnet y yo no


tenia; para tener carnet se necesita otros documentos y yo no tenia.......en la comunidad no
se necesita papeles.

En la calle la Plata hay fila de oficinas de abogados y he contratado uno para que me lo
hagan mis documentos. El abogado me dice: "y para que quieres pasaporte?" yo le digo:"voy
a viajar a Dinamarca" me mira de pies a cabeza y de la cabeza a los pies y me dice: "y así vas
a ir?" y más luego: "Tienes que cortarte tus trenzas, tienes que sacarte esa pollera y ponerte
vestido, nos vas ha hacer quedar mal! " (y el abogado es indio igual que yo) entonces le digo:
" Doctor, si yo me corto mis trenzas, si yo me saco mi pollera...... no soy nada. Mis trenzas y
mi pollera son mi identidad, me habrá entendido el doctor?

Ya pienso que una persona que no tiene identidad, no existe; que los pueblos que no tienen
identidad no existen; si un pueblo no conoce su verdadera historia, si un pueblo no tiene
pasado no puede tener futuro.

Cuando hablamos de Asamblea Constituyente y una nueva Constitución Política del Estado,
todos piensan que solo es cuestión de crear leyes y por tanto, competencia de abogados.
Algunos diputa dos nos dicen: ¿que ley no les gusta? Con que otra ley creen que podemos
cambiarla?

No se trata solamente de leyes, de sustituir una Ley por otra, eso es complementario. De lo
que se trata es de definir primero que visión de país tenemos, cual es nuestra lógica del país,
concepción de sociedad, concepción de país, Definido esto, la cuestión de escribir las Leyes es
una cuestión técnica.

50O AÑOS DE DES ESTRUCTURACIÓN

Hemos vivido 500 años de desestructuración. Desestructuración mental, desestructuración


territorial; en la colonia desestructuraron territorios con los virreynatos, en la República
vuelven a desestructurar territorios con los departame ntos, provincias, cantones.

La forma territorial define la forma del poder político y así consolidaron autoridades coloniales,
como son los prefectos, los subprefectos, corregidores. Para consolidar esta desestructuración
viene la desestructuración educativa y desestructuración religiosa.
El pecado original de los estados naciona les como Bolivia es su forma de nacimiento, la visión
con la que ha sido concebido. Bolivia fue fundada sin nosotros, es más. Bolivia fue fundada
contra nosotros las naciones originarias. Entonces Bolivia es un Estado sin nación y nosotros
somos naciones sin Estado.

Y así ... Bolivia hoy es un país colonial, colonizante y colonizado.

LA CUESTIÓN DE LA IDENTIDAD

Cómo funcionó y funciona la desestructuración mental que remata en la pérdida de identidad?

Cualquier proyecto de vida, sea personal, grupal, comunal; no tendrá probabilidades de éxito,
si primero no definimos el tema de la identidad.

Quien soy yo? Quien eres tu? Quienes somos nosotros? solo sabiendo quienes somos,
podemos saber a donde tenemos que ir y con quienes, contra quienes, al lado de quienes.

Por que por no saber, quienes somos (y por Izquierdistas que seamos) podemos llegar a
matarnos entre nosotros mismos.

CUESTIÓN DE IDENTIDAD

Desde la colonia y mucho mas aún en la República, ellos han utilizado dos armas
fundamentales para hacer lo que ahora somos.

La educación y la religión cumplen hasta hoy, un trabajo de bloqueamiento, neutralización y


liquidación del cerebro indio.

Pero también la educación y la religión pueden servir para la liberación, depende de cómo
se lo utiliza.

EDUCACIÓN

El niño, desde que nace, nace en un mundo propio, desde niño está junto al papá, la ma má,
los animales, las flores; vive en un mundo aymara hasta los seis años pero después como hay
que educarse, entra la escuela.

La escuela es un camino a otro mundo, hay le enseñarán, obligarán, que no debe hablar aymara,
debe hablar castellano, Este niño no puede hablar su aymara y habla mal el castellano,
entonces se bloquea, se neutraliza, pierde confianza y se deja estar, por miedo a equivocarse
prefiere callar, hasta hoy.
Luego viene el segundo curso, tercero, cuarto......y poco a poco habrá aprendido nuevos
valores, nuevas lógicas, gracias a la escuela podrá diferenciar que ponerse poncho es atraso,
ponerse terno, corbata es progreso, ponerse pollera es atraso, ponerse vestido es progreso.
Hablar aymara es atraso hablar castellano es progreso y listo.

Luego le enseñarán que Simón Bolívar es libertador de 5 naciones y que gracias a él hoy
somos libres, independientes, soberanos. Cuando lo único que ha hecho es traspasarnos de
patrón. Del patrón español nos cambió al patrón yanqui; cual independencia, cual
soberanía.

También le dirán que Eduardo Avaroa murió defendiendo la patria; "rendirme yo? que se
rinda su abuela carajo!" entonces, himno a Avaroa, desfiles, horas cívicas. Jamás le dirán la
verdadera historia, que Avaroa era un gran terrateniente y que antes de defender la patria,
estaba defendiendo sus tierras.

Y en la escuela hay que marchar, marchar para entrar al curso, marchar para el retiro,
marchar para todo; en otros países esto ya no se usa. El marchar tiene un objetivo, se trata de
domesticar al salvaje, educación militar. Junto a todo esto viene el componente ideológico,
los himnos, nacional, departamentales, tienen un profundo mensaje colonial, colonizante y lo
cantamos todos los día.

En el himno a Oruro una parte dice: Cual Colón otro mundo nos da...." glorificación a Colón,
bienvenida la conquista.

En el himno a Santa Cruz: "la España grandiosa con hado benigno, aquí plantó el signo de
la redención " gracias España.

Y los símbolos? Tenemos una bandera Boliviana, pero en nuestra historia clandestina
tenemos una Wiphala, que mensajes nos dan? La bandera boliviana y todas las banderas de los
estados nacionales son rectangula res, tiene un lado corto y un lado largo; quie re decir que en
ese tipo de país hay gente que tiene poco y gente que tiene mucho. Y los colores? Que
significan? La sangre, la rique za... nada más. Es tela y colores, nada más.

La Wiphala tiene 4 lados iguales, tiene 7 colores, dentro de la Wiphala está toda la filosofía,
la cosmovisión andina.

Los siete colores representan al sol y el sol para nosotros es la vida, los lados iguales
simbolizan el carácter de la comunidad.

Entonces en resumen, la Wiphala simboliza la vida de la comunidad que vive en igualdad,


en reciprocidad, en solidaridad.

Hay una línea blanca que divide la Wiphala, a un lado está el aransaya, al otro lado está el
urinsaya y el blanco es el taypi.

La comunidad de allí y la comunidad de allá y el centro. La comunidad de allá está en un


tinku permanente con la comunidad de aquí, pero no es un tinku de sangre como ahora se lo
pretende hacer ver, por la influencia de las costumbres españolas; el tinku es un encuentro
periódico de medir capacidades, saberes. Las mujeres de ambas comunidades confrontarán que
conocimientos nuevos han adquirido, los jóvenes sus habilidades, las autoridades, etc. etc. Son
contrarios pero son complementarios para mantener el equilibrio y avanzar. Se pelean para
medirse por que se necesitan. |

En la lógica occidental hay que liquidar al contrario para avanzar o hacia el capitalismo o hacia
el socialismo. La lógica del tinku no se enseña en la escuela, es peligroso.

Y así transcurre la vida educativa... al final veremos los resultados de la educación; jóvenes
que deambulan por las calles, como zombíes, no saben quienes son y por lo t a nto no saben a
donde tienen que ir. Jóvenes que se miran en el espejo y se odian por ser morenitos, bajitos,
abominan de lo que son; abominan de sus padres, odian a su propia comunidad; no aceptan
ser lo que son y desean ser lo que jamás llegarán a ser.

¡La educación ha cumplido su objetivo!

RELIGIÓN

Junto a la educación trabaja también la religión para consolidar el objetivo colonial. La


santísima trinidad: en el nombre del padre, el hijo y el espirito santo. Padre, macho; hijo,
macho; espíritu santo, macho; tres machos. Es desde la religión que viene el machismo, la biblia
tiene un profundo contenido machista.

En la religión andina no existe, para nosotros todo es par, todo es macho y hembra. Hay cerros
sagrados machos y tie nen su pareja un cerro sagrado hembra, los animales son macho y
hembra, las flores son macho y hembra y hasta las piedras son ma cho y hembra; todo es pareja
y es a partir de esta visión de la dualidad que se estructura la vida de la comunidad, las
autoridades originarias, todo.

Nos enseñan Diez mandamientos, el primer mandamiento dice: "Amar a Dios por sobre
todas las cosas", ellos habrán amado a Dios para hacer todo lo que han hecho? Otro
mandamiento dice: "No robarás" pero desde que ellos han llegado se han robado todo
nuestro oro, plata, todas nuestras riquezas. No Matarás" cuantos millones y millones de
indios han matado en nombre de su Dios?.

Han desestructurado nuestra religión, hicieron iglesias .sobre nuestras Wak’as sagradas, pero al
ver nuestra fuerte religiosidad nos cambiaron los códigos. Una verdadera, una verdadera
Wilancha se hace con llama, pero no los cambiaron por oveja, tal vez para hacer coincidir, eso
de “Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo" por que no se puede decir: "lla ma de
Dios que quita el pecado del mundo", no encaja, no rima a sus objetivos.
Ahora nos bautizan con un cura y es obligatorio, mentira que hay libertad de religión. Y antes
de que llegaran los curas como era nuestro bautizo?, era la Ruthucha, cortar el cabello, cada
porción de cabello implica obtener un bien en animales u objetos, concebido como el primer
patrimonio del niño. Hoy se practican ambos bautizos, el colonial y el originario.
El matrimonio católico es mas moralista que otra cosa, cuando surge una pareja, los papás
echan un grito cielo: que dirán los vecinos? Las amistades? Están en pecado con Dios;
hay que casarse para limpiar ese pecado!. A la religión católica no le interesa, si ese
matrimonio tendrá futuro o se romperá en tres meses, lo que importa es quedar bien con
Dios, puro moralismo.

En el matrimonio aymara primero tienen que convivir un año mínimo, luego los padres, 1a
pareja, los parientes; analizarán si hubo problemas, cuales, coincidencias, ctc, y solo
recién se establecerá si corresponde el matrimonio o no. Los aymaras velan por el futuro de
esa pareja.

Hoy funcionamos con un año nuevo occidental que no tiene ninguna explicación científica
de su razón de ser; el verdadero año nuevo es el 20 y 21 de julio, el día del Sol, el Inti
Watana; (amarre del sol), por eso hay fiestas en las comunidades que ahora lo confunden
con San Juan.

¿Por que los mineros miran la suerte en San Juan? Desde su subconsciente funciona lo
originario, quieren saber como les irá este año a partir de San Juan. En muchos ayllus del sur
las Autoridades Originarias realizan su transmisión de mando en este verdadero año nuevo.

Hay mucho más al respecto. Educación v Religión armas fundamentales para extirpar el cerebro
indio y en su lugar poner un cerebro colonial, occidental.

COMPLEJOS DE SUPERIORIDAD Y COMPLEJOS DE INFERIORIDAD

En todo proceso desestructurador, hemos adquirido un complejo de inferioridad y ellos se crearon un


complejo de superioridad.

Nos dicen que lo Blanco es superior y que lo moreno, lo negro es inferior; y lo hemos
asumido. Ellos dicen que tienen el verdadero Arte y lo que nosotros hacemos, vasijas, ollitas de
barro, eso es artesanía.
Ellos tienen la verdadera música y lo que nosotros tocamos charango, flauta dicen: eso es
folclore, nos dicen: nosotros tenemos la verdadera medicina y lo que ustedes manejan hierbitas
como t’ula, taratara, etc. Eso es brujería.

Dicen: nosotros tenemos la verdadera Cultura y lo que ustedes manejan son costumbres,
nosotros tenemos la verdadera religión y lo que ustedes hacen humear en los cerros es
superstición, nosotros tenemos el verdadero idioma y lo que ustedes hablan son dialectos.

Y las mentes colonizadas asumieron todo esto.

BLANCO negro
ARTE artesanía
MUSICA folclore
MEDICINA brujería
CULTURA costumbres
RELIGION superstición
IDIOMA dialecto

ANTES Y AHORA

Antes vivíamos con nuestro propio Dios Pachamama. Pero como hay que modernizarse
hoy vivimos con otro Dios: Cristo.

Con Pachamama vivíamos bien, con Cristo vivimos mal.., Con Pachamama no había
hambre, pobreza (en aymara no existe la palabra pobre, porque como no existían pobres no
era necesario inventar esa palabra). Hoy con Cristo hay hambre, pobreza, deuda externa.....

Antes comíamos quinua, tarwi, ctc y nuestros abuelos fácilmente los 100 años, muchos con la
dentadura completa, pero como hay que modernizarse, hoy comemos fideos, enlatados, ahora
vemos jóvenes casi sin dentadura, esta generación llegará a cobrar el bonosol?

Cuando te duele la cabeza inmediatamente mandas a comprar un alka-seltzer. El alka-


seltzer puede curarte el dolor de cabeza pero te hace doler el estomago. La medicina
occidental compone una cosa pero descompone dos.

MUNDO OCCIDENTAL Y MUNDO ANDINO

En el mundo occidental la unidad es uno, todo vale por uno, todo es uno, por eso es
individualista; en el mundo andino la unidad no es uno, la unidad es dos, todo vale por
dos, por pareja; todo es chacha warmi, por eso es colectivista es solidaria.

¿QUIÉNES SOMOS?

El hombre solo no vale, la mujer sola tampoco, valen como pareja; para ser autoridad,
requisito fundamental es ser pareja, ambos son autoridad.

En el mundo occidental el hombre está sobre la tierra, por eso puede vender la tierra,
alquilarla, enajenarla, explotarla.

En el mundo andino el hombre no está sobre la tierra, el hombre es parte de la tierra, por
eso tiene que respetarla, cuidarla, tomar de ella solo lo necesario.

En el mundo occidental el poder puede ejercerlo una sola persona cuantas veces sea
posible, en el mundo andino una sola vez se tiene la oportunidad de ejercer el poder. Este
poder se tiene que tocar a todos los miembros de la comunidad, pero no retorna a la misma
persona; el poder no esta reservado solo para el que sabe leer y escribir o el académico,
todos tienen que aprender a ejercer el poder.
La democracia occidental está basada en las mayorías y minorías, por ello los que pierden y
son minoría siempre inviabilizarán a los que ganan. En la democracia comunal no hay
mayoría ni minorías; aquí funciona el consenso.

La democracia occidental es un vicio, la democracia andina es un servicio.

¿Quienes somos?

Entonces, ¿quien soy? Quienes somos?

ESTO SOMOS: nacimos y vivimos en un territorio aymara, tenemos una cultura aymara,
practicamos una religión aymara, ha blamos un idioma aymara, entonces soy un aymara.
!Ni indio ni campesino! Aymara en primer lugar y en segundo lugar boliviano, por esta
cuestión de los documentos.

Los quechuas son en primer lugar por las mismas razones.

Ahora, ¿hay identidad boliviana? Que implica ser boliviano?.

Cuando nos escuchan, muchos creen que estamos planteando vo lver al pasado.

¡No! No se trata de retorno romántico al pasado, sino de una recuperación científica de ese
pasado.

No se trata del color de la piel, ni mucho del idioma, sino es una cuestión de estructura
mental, cuestión lógica de comportamiento.

LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE

Los tiempos que vivimos no son un tiempo cualquiera, muerte y parto es el signo de estos
tiempos, estamos en el amanecer del Pachakuti. Todo tiene que cambiar, hay formas estilos de
ser y hacer organización, de ser y hacer liderazgo que van muriendo. Y hay formas, estilos
nuevos que tienen que nacer.

En este proceso de parto, periódicamente confrontamos dolores, pero son dolores, vendrán más hasta que
llegue el parto.

Tendremos que asumir que en el escenario, donde se plantea la realización de una Asamblea
Constituyente, es un escenario de una Bolivia, con 36 naciones originarias.

Bolivia: Una confederación de identidades y hay una nación mestiza en construcción.

¿QUIENES DEBEN IR A LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE?

Por cierto que no los partidos por su fracaso histórico. Van hombres y mujeres jóvenes ...... la
sociedad civil.
¿Como?
Mediante elecciones directas. ¿Cuántos?

Es imposible hacer la representación por organización sindical, gremio, asociación, etc. Por
mucho saneamiento que se haga. Existe una desconfianza a todo lo que sea organización, en
este sentido sea político o sindical.
Lo único racional que existe en este mo mento son las circunscripciones. En la circunscripción usted
encontrará aymara-quechuas, obreros, fabriles, maestros, intelectuales etc etc.

En Oruro, en la Circunscripción 35 está habitado por aymaras, la circunscripción 36 por


aymara-quechuas, en la ciudad: la 32 son emigrantes aymaras-quechuas del norte y en la 34 mi-
grantes aymaras-quechuas del sur. La circunscripción 33 que es el centro de la ciudad, esta
habitado por gente de la clase media mayoritariamente.

Y en el país existe esta lógica.

Elegiremos tres por circunscripción. El 1, el 2 y el 3 que es lo más expresivo en la


representatividad.

En aymara seria el urinsaya, el aransaya y el taypi.


En política sería la izquierda, la derecha y el centro.
Constituyentes elegidos con carácter revocatoria

LA NUEVA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO

Partimos de cero, desde el convencimiento de que la actual CPE correspondió a otro tiempo y
terminó su ciclo, desde el convencimiento además de que la CPE, en espirito y en contenido es
Colonial.

No deberíamos caer en el error del consumismo occidental, de quererlo todo preparado,


empaquetado, listo para comer.

En lo que nos corresponde, proponemos que dos leyes son muy esenciales.

Un punto muy importante que la nueva CPE debe tener: ama suwa, ama llulla, ama qhilla, con
carácter no solo moral, sino moral-coercitivo

Si el tema de ética, moral, integridad, etc, es la falencia central de esta sociedad, es esta
falencia la que hace luego que la corrupción sea institucionalizada, como característica propia
de la sociedad colonial.

Por ejemplo: "No seas flojo" con carácter coercitivo implica que es prohibido que haya
desempleados en este país, que el Estado como parte del nuevo contrato social, esta en la
obligación de dar trabajo a todos.
OTRO PUNTO: LA RETERRITORIALIZACIÓN
De la reterritorialización dependerá la recuperación de la religiosidad, la liquidación de
autoridades y estructuras coloniales para devolverla la majestad a las verdaderas autoridades;
de la reterritorialización dependerá muchos otros componentes.

En lo fundamental se trata de interpretar todas las sublevaciones como la de Tupa Amaru,


Tupa Katari y otros, que tienen un punto alto en la sublevación de Pawlu Zarate Willka.

En la "Proclama de CaracolJo" que es el programa político del Zarate Willka de 1890, están las
demandas de autonomía, identidad, territorio, poder, autogobierno; demandas que hoy por hoy
son más actuales que nunca.

Veamos:

a) Restitución de las tierras de origen y convertir a las fincas en comunidades.


b) El sometimiento de la casta dominante a las nacionalidades de origen.
c) La constitución de un gobierno de indígena.
d) El desconocimiento del mando de Pando y los jefes revolucionarios liberales.
c) La imposición universal del traje de bayeta.
Las luchas indígenas y más claramente los levantamientos de Pawlu Zarate Willka
proporcionan a los indígenas de hoy propuestas que serán planteadas en la Asamblea
Constituyente.

MEDIDAS TRANSITORIAS URGENTES

Asumiendo que esta Asamblea Constituyente tendrá un proceso considerable, hay medidas
transitorias urgentes que tienen que ver con el rechazo al cueteo, la imposición, la ilegitimidad,
ctc:

Elecciones directas para:


Prefectos
Subprefectos
Corregidores
Consejeros
Defensor del Pueblo (nacional y departa mentales)
Corte Suprema de Justicia (también departamentales)
En un país que vive en la extrema pobreza, es inconcebible que existan sueldos fabulosos,
(sueldos europeos para gobernar hambrientos bolivianos) en los tres poderes del Estado é
instituciones públicas, (es aquí donde no se diferencian ni izquierdas ni derechas).

Es imperativo disponer la reducción 50 % de estos salarios.


No soluciona la crisis económica pero hace justicia con los que ganan poco.

QUE TIPO DE SOCIEDAD BUSCAMOS

Buscamos construir una sociedad de iguales; pero, para que dentro de esa igualdad tengamos
derecho a ejercer nuestra diferencia.
Buscamos construir una Bolivia socialmente justa, ecológicamente equilibrada, políticamente
pluralista y democrática, multicultural, pluriétnica, plurilingüe, autogesíionaria y
autodeterminada.

Una forma de cultura política que tenga su representación en liderazgo naturales; en servir
y no servirse, representar y no suplantar, construir y no destruir, obedecer y no mandar,
proponer y no imponer, convencer y no vencer... estas son evidencias de una forma de
práctica política no tanto partidaria, sino parida por comunidades na cida desde nuestras
raíces, de nuestra identidad.

¡ESTA ES UNA UTOPÍA... PERO POSIBLE!

FÉLIX CÁRDENAS AGUILAR


Oruro. 2004 email: abcoruro@coteor.net.bo
8.8 Propuesta de Constitución Política del Estado Multicultural, Jorge Miranda

INDICE

Páginas

DIAGNOSTICO CRÍTICO DE LA CONSTITUCION BOLIVIANA VIGENTE…………….

UNA JUSTIFICACIÓN SOCIO-JURÍDICA DE LA CONSTITUYENTE……………………

PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE ESTA CONSTITUCIÓN……………………………

PROPUESTA
CONSTITUCION POLITICA
PARA UN NUEVO ESTADO
PRINCIPIOS QUE RIGE ESTA CONSTITUCIÓN…………………………………………..

ASPECTOS QUE DEFINEN EL PRINCIPIO SUMA QAMAÑA (calidad de vida) …….

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO


MARKÄPNAQA JILIRI KAMACHI UTT’AYAWI

TITULO DOCTRINARIO
KAMACHI P’IQINCHT’A………………….……………………………………………………

DISPOSICIONES GENERALES

TAQPACHA WAKIYATA……………………………………………………………………….

PRIMERA PARTE
CAPITULO I
LA BIODIVERSIDAD DEL TERRITORIO
AKAPACHA URAQINA TAQIMANA JAKASIRI
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA............................................................................................... .....

CAPITULO II
GARANTIAS CONSTITUCIONALES DE LA BIODIVERSIDAD Y EL
TERRITORIO
AKAPACHA URAQINA TAQINAMA JAKASIRINAKATA PHUQHASIÑAPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA...................................................................................................
CAPUTULO III
DERECHOS CONSTITUCIONALES DE LA BIODIVERSIDAD
KAMACHI-UTT’AWINAKXARUMA TAQIMANA JAKASIRINA JIYINAKAPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA... .................................................................................................

CAPITULO IV
EL TERRITORIO
AKAPACHA URAQI
DISPOSICONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA........................................................................... .........................

CAPITULO V
GARANTIAS CONSTITUCIONALES DEL TERRITORIO
AKAPACHA URRAQUITA, KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA PHUQHASIÑAPA
DISPOSIOCIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA........................................................................... .........................
CAPITULO VI
DERECHOS CONSTITUCIONALES DEL TERRITORIO
KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA, AKAPACHA URAQITA JIYINAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

SEGUNDA PARTE
CAPITULO I
LA COMUNIDAD
AYLLU
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA...................................................................................................

CAPITULO II
GARANTIAS CONSTITUCIONALES DE LA COMUNIDAD
KAMACHI UTT’AWINAKARJAMA AYLLUNA
PHUQHASIÑAPA.....................................

CAPITULO III
DERECHOS Y DEBERES CONSTITUCIONALES DE LA COMUNIDAD
AYLLUNA KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA JIYINAKA PHUQHASIÑAPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO IV
LA PERSONA Y LA SOCIEDAD COMO MIEMBROS DEL ESTADO
JAQI, TAMA, KAMACHI-UTT’ATANKIRINAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO V
GARANTIAS CONSTITUCIONALES DE LA PERSONA Y DE LA SOCIEDAD
JAQINA, TAMANA, KAMCHI-UTT’AWINAKARJAMA PHUQHASIÑAPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO VII
DERECHOS Y DEBERES CONSTITUCIONALES DE LA PERSONA Y LA
SOCIEDAD
JAQINA, TAMANA, JIYINAKAPAXA KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA
PHUQHASIÑAPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA.....................................................................................................

CAPITULO VIII
CIUDADANIA Y SERVIDORES PÚBLICOS
MARKANI MARKARU PUKUQT’IRINAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA...................................................................................................

TERCERA PARTE
CAPITULO I
LA ECONOMIA
QULLQI APNAQA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO II
POLÍTICA ECONOMICA DEL ESTADO
QULLQI ASKI KAMACHI UTT’AWINAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA...................................................................................................

CAPITULO III
REGIMEN ECONOMICO FINANCIERO
QULLQI APNAQ ASKI CHIQANCHT’A
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIAYATA................................................................................................

CAPITULO IV
BIENES NACIONALES
SUYUNA UTJIRI YÄNAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO V
RENTAS Y PRESUPUESTO
QHAWQHASA QULLQI TANTATA, QHAWQHASA QULLQI WAKT’AYATA
DISDPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA.................................................................................................

CAPITULO VI
CONTRALORÍA NACIONAL Y REGIONAL
SUYUNA, WAMANINA QULLQI APNAQA IÑJIRI
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA.................................................................................................

CUARTA PARTE
CAPITULO I
DIVISIÓN POLÍTICO TERRITORIAL
AKAPACHA MARKÄPNAQA URAQI JALJANUQA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

QUINTA PARTE
CAPITULO I
ESTRUCTURA POLÍTICA DEL ESTADO
QHAPHAQA UTT’AYA MARKÄPNAQA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................
CAPUTULO II
CONGRESO DEL PODER LEGISLATIVO
QHAPHAQA KAMACHI LURA ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO II I
CONSEJO SUPREMO DEL ESTADO
QHAPHAQA APU ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO IV
CONSEJO REGIONAL
WAMANI ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO V
REGIMEN MUNICIPAL
MARKA KAMACHI
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO VI
CONSEJO DISTRITAL
LAYA ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO VII
CONSEJO COMUNAL
KUMUNA ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

SEXTA PARTE
CAPITULO I
CONSEJO DEL PODER EJECUTIVO
QHAPHAQA PHUQHAYA
ULAKA...................................................................................

CAPITULO II
PRESIDENTE Y PRESIDENTA
QHAPHAQA APU MALLKU, QHAPHAQA APU T’ALLA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO III
CONSEJO DE MINISTROS
KAMANI ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA.................................................................................................

CAPITULO IV
PRIMER Y PREMERA MINISTROS DE LA REGIÓN
WAMANI APU MALLKU, APU T’ALLA
DISPOSICIONES GENERSLES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

SEPTIMA PARTE
CAPITULO I
PODER JUDICIAL
QHAPHAQA TARIPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA..................................................................................................

CAPITULO II
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA
TARIPA APU ULAKA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA...................................................................................................

CAPITULO III
CONSEJO DE LA JUDICATURA
JILIRI TARIPA
ULAKA.......................................................................................................
CAPITULO IV
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO V
DEFENSA DE LA SOCIEDAD Y DEL ESTADO
TAMATA, JILIRITA TUWAQIRI
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA.....................................................................................................

CAPITULO VI
DEFENSOR Y DEFENSORA SEL PUEBLO
MARKATA ARXATIRI, TUWAQIRI
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO VII
PROCURADORIA DEL ESTADO
COMUNITARIO.........................................................

CAPITULO VIII
REPRESENTACIÓN POPULAR
MARKACHIRINA
SAYT’AWIPA.........................................................................................

OCTAVA PARTE
CAPITULO I
REGIMEN ELECTORAL
CHHIJLLAWI CHIQANCHT’A
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA
WAKIYATA....................................................................................................

CAPITULO UNICO
ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE
QULLANA -SUYU TANTACHA
JIKTHAPTAWI..................................................................

DISPOSICIONES DEROGATORIA UNICA


MAYAKI TAQPACHA
CHHAQHAXAÑA........ ....................................................................
DIAGNOSTICO CRITICO DE LA
CONSTITUCION BOLIVIANA VIGENTE
Dr. Jorge Miranda Luizaga

I. INTRODUCCION

En el marco de los ordenamientos jurídicos modernos, el Derecho Constitucional ha logrado


concentrar y monopolizar el debate teórico sobre el análisis de la Constitución, la organización
estatal, los poderes públicos, tipo del Estado y otros. Las constituciones modernas como parte de su
ética pública adoptan en la parte preliminar los principios fundamentales del conjunto del
ordenamiento jurídico estatal25 , que constituye medida de referencia para las demás disposiciones.

En el contexto del ámbito constitucional boliviano es escasamente explorada por los académicos,
profesores universitarios y otros intelectuales, menos existen estudios o investigaciones críticas y
propuestas serias para el cambio a la Constitución; los existentes son, textos descriptivos destinados
generalmente a una pobre audiencia académica de estudiantes y algunos aficionados al Derecho.

Por consiguiente existe desde esa perspectiva una justificación académica, sociológica y política26
para el debate de la Constitución, propuestas de reforma hasta una posición radical con
planteamientos de una nueva Constituc ión para un nuevo Estado27 .

La Constitución boliviana está expuesta a una serie de críticas, cuya vulnerabilidad consiste
precisamente en un escaso sistema estructural. Para otros críticos, es una Constitución “iqiqu”; es
decir, es sobrecargada y demasiado reglamentaria; desde el punto de vista histórico su contenido ya
no refleja la realidad del pueblo con perspectivas al avance tecnológico y científico del tercer
milenio 28 .

El ordenamiento jurídico constitucional es de carácter elitista, paternalista y verticalista y


discriminatorio, ajeno a la soberanía del pueblo y sus representantes, es una cultura política sectario,

1. Es ilustrativo por ejemplo la Constitución Federal alemana de 1949, la Constitución española de 1978 o la
Portuguesa de 199 .
2. Desde la óptica política de los Pueblos Indígenas y originarios, frente a la ineficacia de los Derechos incluso
garantizados en la Constitución vigente, el análisis de la Constitución y una propuesta de Constitución, es
parte de una opción política en su lucha por la libre-determinación como Pueblos.
3. Desde esta óptica es importante destacar el estudio de la Asociación de analistas de políticas públicas y
asuntos de gobierno. Véase p. 13 y ss. KAFKA, Jorge; et al, Segunda República, 2da. Ed. La Paz: Imagen
publicitaria, 2001.
4. Una de las debilidades es que la Constitución vigente no adopta una conjunto de valores sociales en las
que se asienta el tipo de Estado; aspecto que es esencial para una certeza en las decisiones judiciales.
como dice Kafka y otros de “democracia de feria”; por tanto la práctica política ha perdido de vista
el interés de la comunidad29 .

Estos y otros temas han puesto en el tapete del debate sobre el tipo del sistema político y su
representatividad. El reto del sistema que todavía se define en el presupuesto de la
“Gobernabilidad”, ya no es sostenible; es decir, ya no tiene más perspectivas de poder avanzar al
futuro.

En el ejercicio de la democracia, los intereses de la sociedad pasa por el consenso del conjunto del
pueblo, incluso la propia construcción democrática. En el caso de la actual Bolivia, la democracia
vigente no es incluyente sino excluyente, por eso ha seguido y solventa un perfil del Estado
excluyente y un (Estado patrilinial); es incapaz de incluir la participación equitativa de los Pueblos
Originarios (Indígenas) en condiciones de igual ciudadana.

II. METODOLOGÍA.

Para lograr el cambio es fundamental hacer una interpretación critica de la Constitución, lo cual fue
motivo de análisis del contenido con enfoques visionarios; plantear sobre una base del tenor literal
que no dificulte en la aplicación de las normas, que no sea un texto incomprensible o contradictorio
lo cual puede originar problemas administrativos; de modo que la norma constitucional puede ser
aplicada de forma eficiente.

Por otro lado, determinar puntualmente los temas para una futura reforma constitucional, referidos a
la estructura y el contenido de la Constitución vigente, se ha puesto especial énfasis en la redacción
del “Diagnóstico Crítico” que sea comprensible solo para los abogados o de quienes son lectores
entendidos en temas constitucionales; pues nuestro principal objetivo, es hacer conocer la propuesta
de la Constitución a cada ciudadano.

Los argumentos que utilizamos en el diagnóstico critico a la C. P. E. han sido recogidos de la


demanda de la población boliviana, que no se ve reflejado su representatividad en la Democracia,
Es decir, la representación no expresa a la población, pues excluye a la masa de la población
originaria con la discriminación y la desigualdad entre los habitantes; por lo tanto, cualquier critica
o propuesta de cambio debe asegurar una mejor participación de la sociedad civil.

III. ANTECEDENTES

Desde el punto de vista del Derecho Constitucional, las reformas siempre son parciales, pero
pueden ser en sentido formal y material.

Las reformas realizadas en Bolivia, por ejemplo: en los años 1831, 1938, 1967 y 1994 han sido
formales y no materiales; porque no han trascendido en la estabilidad institucional ni han servido de
base para el funcionamiento real del Estado.

La instauración del gobierno democrático de 1982, dio lugar a que se presenten planteamientos
sobre la necesidad de reformar la Constitución y se abra un largo debate nacional centrado
fundamentalmente en el mecanismo de reforma, más que en el contenido; es decir, como reformar
la CPE y no la conceptualización sobre que se va a reformar.

5. KAFKA, Jorge; et al, Segunda República, p. 26.


Por otra parte, en el contexto económico, social y político ajustado tanto el debate como la reforma
constitucional, esta centrado por la crisis del modelo de acumulación establecido por la Revolución
del 52 que alcanzó su mayor gravedad con la hiperinflación y que dio fin con el Estado del 52 y que
sustenta la economía de mercado.

En el plano político, la crisis se ha originado por la falta de credibilidad en las instituciones


Estatales y la carencia de una representatividad le gitima del pueblo. Esta realidad dio lugar a los
acuerdos políticos de febrero de 1990 y junio de 1992 para la consolidación de la democracia y la
institucionalidad, que desde entonces se sostiene en el soporte de la gobernabilidad. 30

IV. VISION GLOBAL DE LA CONSTITUCION

La CPE por su contenido es catalogada como desarrollada, porque contiene normas orgánicas que
establecen y regulan la estructura jurídico-política del Estado, determinando su forma, la forma de
Gobierno, los Órganos de Poder, así como la organización y atribuciones de dichos Órganos de
Poder, que contiene también normas dogmáticas, las que establecen las declaraciones, principios,
derechos y garantías constitucionales.

Empero, globalmente el texto constitucional presenta deficiencias de forma, vacíos, impresiones y


contradicciones no sólo de forma, sino estructurales. Además, hay dispersión de los derechos
individuales y sociales, presentándolos en algunos casos en forma mezclada.

Por otra, la Constitución carece de normas referidas a los aspectos fundamentales y centrales que
tiene que ver con la estructura, la organización y funcionamiento del Estado. Se constata la ausencia
de una norma declaratoria de los valores y principios fundamentales sobre la estructura del Estado
boliviano, la misma que debería estar incluida en el Título preliminar de la Constitución y ser el
principio rector de la organización interna y del relacionamiento interno de los poderes públicos y la
relación externa del Estado.

Otro aspecto fundamental, el Estado es responsable de prever toda norma constitucional para con
los gobernados o sea, la responsabilidad que debe asumir el Estado por las acciones u omisiones de
sus autoridades o funcionarios que infrinjan la Constitución y los símbolos patrios.

En el capítulo de los Derechos Fundamentales, la Constitución no establece la declaración y


consagración de algunos derechos individuales. Respecto a los Derechos Sociales, apenas consagra
algunos de ellos. En lo que respecta a los Derechos Colectivos de los habitantes del Pueblo que
constituyen los Derechos Fundamentales, simplemente los omite y no consagra ninguno.

Las instituciones conformadas en la Constitución ya no responden a la realidad social, económica,


política y cultural vigente en el país. Es decir, la Cons titución formal no está adecuada a la realidad
socio cultural del pueblo. De ahí que existen cuestionamientos serios de parte de los sectores y
actores sociales organizados, porque el Estado centralista ha dado lugar a un desarrollo regional
desigual e desquilibrado; no es casual que el Movimiento Cívico Nacional había planteado una
nueva reforma constitucional, cuando aún no había terminado de implementar las reforma a la
Constitución.

6.Este diagnóstico se realizó sobre la base del Comentario Crítico de la Constitución


Política del Estado publicada por la “Fundaci ón Konrad Adenauer, La Paz. 1998,
de autores varios: Stefan Jost coordinador.
Por otra parte el concepto de soberanía, en los últimos tiempos ha sufrido al menos dos impactos
concretos; uno, la presión de los procesos económicos y políticos enmarcados en la llamada
globalización, donde el mercado financiero puede tener una capacidad de transformar a la sociedad,
mayor que una política estatal; y el otro, la incorporación de Bolivia a acuerdos comunitarios que,
por definición exige la sesión de parte de las decisiones soberanas a la legislación adoptada por el
conjunto de los países miembros.

Las propuestas de cambios en la constitución se enmarcan hacia un referéndum. Mediante el


Referéndum se consultó al pueblo boliviano nueve modificaciones a la CPE; una de ellas fue la
Descentralización Político Administrativa, a través del voto censatario, la mayoría de los
consultados se pronunció por la aprobación de las nueve reformas planteadas.

Por una parte, la junta militar, mediante Decreto Ley de 23 de Febrero de 1931, sólo incorporó ocho
de las nueve reformas consultadas y aprobadas por el voto popular. Es decir, decidió no incorporar
en la Constitución la Descentralización Político-Administrativa, bajo el argumento de que, con
carácter previo, debió aprobarse una Ley que regule esta descentralización.
Más que positivos, los efectos de la centralización han sido negativos, pues el centralismo ha
originado un crecimiento y desarrollo desigual de las regionales ha sido la característica principal de
este ciclo.

La División Política del Estado no ha recogido la realidad económica, política, social y cultural. En
ese orden, ha establecido una división en departamentos, provincias, secciones y cantones, obviando
el proceso de conformación de los núcleos sociales y territoriales de base, como son las
comunidades campesinas, los villorrios y pueblos Originarios (indígenas). Estos últimos no han
estado insertos en la estructura jurídico-política del Estado, pues no tenían autoridades municipales
ni del gobierno central.

La planificación centralizada, al no haber interpretado la realidad nacional generó un uso


inadecuado o irracional de los recursos económico-financieros y humanos, con una irracional
explotación de recursos naturales, cuyo resultado es la desigualdad e la injusticia en el desarrollo
regional.

Este hecho ha generado la clasificación regional; de hecho en departamentos de primera, como son
Santa Cruz, y La Paz, de segunda como son Cochabamba y Beni; en Departamentos de tercera
como Pando, Tarija, Chuquisaca, Oruro y Potosí. Estos dos últimos, que otrora fueron el pulmón
económico de Bolivia, hoy se debaten casi en una marginidad, con elevados índices de extrema
pobreza e de indigencia (Jost y otros, p. 4).

Otro resultado de este orden de cosas, es la actual clasificación social entre ciudadanos de primera,
que habitan la urbe citadina, y ciudadanos de segunda que habitan los barrios peri-urbanos y el área
rural.

El exagerado centralismo, sumado a la democracia meramente formal que otorga legalidad, pero no
necesariamente legitimidad a las autoridades, ha motivado que grandes sectores sociales no se
sientan expresados por el Estado y su forma de gobierno. De ahí que un corregidor tenga legalidad
pero no-legitimidad, a diferencia de un Jilaqata en el ayllu aymara - quechua, o un capitán general
de un pueblo guaraní, quienes tienen su legitimidad, aunque no-legalidad plena (Jost y otros, p. 5).

Haciendo un análisis de lo que significa “pueblo”, este significa la “mayor parte, expresada por el
principio de la mayoría absoluta”; mayoría que, tomando en cuenta los altos índices de ausentismo
y abstención electoral, se convierte en relativa “gobernabilidad”. Este es un tema que en Bolivia no
se ha asimilado aún en su verdadera magnitud. De ahí es que sobre la base del argumento de la
gobernabilidad, se constituyan mayorías parlamentarias, para que sean utilizadas por el Órgano
Ejecutivo para imponer decisiones, desconociendo la opinión y el derecho de las minorías.

A partir de esa imprecisión, el pueblo se convierte en un sujeto pasivo de la democracia; un mero


“elector” que al final vota pero no elige ni otorga un mandato, toda vez que el mandato es naciona l
no fraccionario. Sin embargo, habrá que señalar que se han asumido acciones orientadas a mejorar
esta situación. Mediante la reforma constitucional se ha modificado el sistema electoral de los
diputados, estableciendo que un 50% sea elegido mediante circunscripciones uninominales. Esto
permite que, en el caso de los primeros se produzca un vínculo directo del elector con su
representante.

Empero en los hechos, la soberanía reside en la nación: “el pueblo no delibera ni gobierna, sino por
medio de sus representantes y de las autoridades creadas por ley”, Art. 4 de la Constitución vigente.
De esa forma se elimina toda posibilidad de una participación real y efectiva del pueblo en el
ejercicio del poder; se anula la posibilidad de realizar una fiscalización real y efectiva en el control
y seguimiento de los electores hacia los representantes nacionales.

La representación de la Población por la vía representativa no asegura que sean representados los
intereses de la población, porque las coaliciones en el legislativo sólo buscan asegurar la
“gobernabilidad” a través de lo que denominan el “rodillo parlamentario”, que la votación
mayoritaria no permite a la oposición un debate para lograr el consenso. Por esta razón, la
legislación representativa imposibilita una efectiva fiscalización en la toma de decisión en le
legislativo y por ende en la promulgación de leyes favorables a los sectores populares.

Se debe mencionar que continua irresuelta la definición de la forma de gobierno democrático-


representativo y es una de las contradicciones que conlleva la forma de gobierno y que tiene
definida por la Constitución, con la estructura social reconocida por la misma. Es decir, tras
reconocer la diversidad étnica y cultural que constituye el Estado boliviano; con la multiplicidad de
instituciones y valores, plantea una forma de gobierno única, que implica un mecanismo de
uniforme para la elección de autoridades políticas, cuando en la práctica existen diferencias; es más,
procedimientos propios, particulares y diferenciados entre los grupos étnicos y culturales del país.

A manera de ilustración, cabe examinar el caso de la elección de Jilaqatas en el occidente y centro


del país, de los cabildos en algunos grupos étnicos del oriente que en el pasado, tuvieron influencia
jesuita. Esta suerte de “gobiernos locales” tiene mayor semejanza con la democracia directa y
provienen de formaciones étnico-culturales no hegemónicas.

Así, la articulación de estas formas democráticas con la democracia representativa es uno de los
desafíos sustantivos que debe enfrentar la sociedad boliviana en su cotidianidad y en su expresión y
formalización constitucional. La fórmula oficial planteada para el cambio es una reforma
superficial, porque la fórmula de principios no expresa lo multiétnico y pluricultural y no ha
penetrado siquiera en las expresiones más generales de la Constitución.

Un tercer sistema, llamado semipresidencialistas, se puede resumir de la siguiente manera: la


separación de las funciones entre Jefe de Estado y Jefe de Gobie rno; la elección directa o indirecta
del Presidente por los ciudadanos; el mandato presidencial no prorrogable en forma indefinida; la
elección del Jefe de Gobierno por el Parlamento al que debe rendirse cuentas, aún cuando es
nombrada por el Presidente la existencia de una “autoridad dual” de Presidente y Jefe de Gobierno,
ya que el Presidente no se limita a cumplir sólo funciones representativas.
La condición de “multiétnica” es más completa y compleja que la de multirracial, pues no se limita
a la constatación de diversos tipos humanos, sino que llega a recuperar la noción de que Bolivia es
el producto del encuentro de múltiples raíces o matrices sociales, esto supone la coexistencia de
diversas constituciones sociales tanto en lo que refiere a sus condiciones materiales, como a sus
instituciones, valores y creencias.

La condición “pluricultural” permite reconocer la coexistencia y retroalimentación que existe entre


diversas cosmovisiones de las diversas matrices étnicas, sino también de las distintas migraciones y
del encuentro entre unos y otros. En otras palabras, la propuesta es busca incorporar a la
Constitución formal la condición real que Bolivia no es homogénea y que en el país conviven
condiciones materiales e imaginarios colectivos que corresponden a etapas precoloniales aún
vigentes, en la llamada era de la modernidad; además están vivas las expresiones culturales de los
diferentes pueblos que habitan en el territorio.

Sin embargo, esta lectura tropieza con la realidad política del país que en ningún caso se inspiraron
en el espíritu comunitario y la solidaridad, las mismas que han sido extremadamente vulnerados por
el propio Estado.

En efecto, el Estado está en pleno proceso de descentralización política, económica y


administrativa, con leyes como la Participación Popular, la Reforma Educativa, la Descentralización
Administrativa y otros; en el texto constitucional sigue definiendo la forma de Estado Unitario.

Primero, los artículos doctrinarios deberían definir la forma de ejercicio de la soberanía o el poder
del pueblo; segundo, las bases de organización y funcionamiento de los órganos de poder, y el
tercero, que determine la no concentración del ejercicio del poder en un solo órgano. El Art.3 de la
CPE es por lo demás contradictorio porque define por una parte una religión estatal, la católica y
por la otra, la libertad de cultos.

Se puede entender que el argumento central y la motivación de los legisladores para establecer una
religión oficial y prohibir otros cultos fue la búsqueda de homogeneidad confesional, en el marco
del espíritu de un Estado Unitario, sin embargo no está demostrado la imposición de una religión
oficial pueda lograr forzosamente la unidad, siendo así que existen otros factores, culturales
políticos, económicos y hasta antropológicos, que por la falta de propuestas concretas impedirán
mantener una unidad nacional y la “Libertad de culto” irrestricto es la propuesta para un país como
el nuestro, pluricultural.

Por todo lo expuesto, queda pendiente este tema para el debate, sobre la necesidad de reubicar este
artículo, toda vez que no es pertinente incluirlo en el Título I de Disposiciones Generales, siendo así
que contiene una declaración sobre un derecho fundamental de la persona y la sociedad, como es la
libertad de culto y los demás principios como por ejemplo:

? Principio de la libertad, la justicia y respeto a la dignidad humana


? El principio del pluralismo político como base del ejercicio del Poder.
? El principio de la solución pacífica de los problemas con otros Estados.
? El principio de la integración regional, reciproca, amistad y solidaridad de los Estados, como
base de sus relaciones internacionales.

Un aspecto importante es la limitación fijada para que el pueblo no pueda intervenir directamente en
la toma de decisiones políticas, mediante el plebiscito o en las decisiones legislativas, mediante el
referéndum. Es por esa razón, que el pueblo queda como última instancia en un sujeto pasivo del
ejercicio del poder, y del ejercicio de la soberanía es un mero elector a través de las elecciones que
delega el ejercicio de la soberanía a los órganos de poder.

Estos son los aspectos más relevantes de la actual Constitución Política del Estado que justifican
plenamente una propuesta de Constitución nueva y renovadora, la misma que considere aspectos
culturales en lo que concierne al manejo de la biodiversidad, territorio, derechos comunitarios y
otros que han nacido con el cambio social y el desarrollo de la tecnología.

UNA JUSTIFICACIÓN SOCIO-JURÍDICA DE LA CONSTITUYENTE

Félix Huanca Ayaviri*

Formalizado el «Plan Bolivia», para muchos ha terminado la esperanza del cambio institucional en
Bolivia a través de la Constituyente. Más que una esperanza debe entenderse como una necesidad
nacional. Para el análisis partiré de la revisión de la propia Constitución respecto de la reforma y
argumentaré con criterios sociológicos y jurídicos la Constituyente.

Según la teoría Constitucional nacional dominante, nuestra Constitución está clasificada como
rígida, esto establece que sólo puede ser reformada parcialmente; esto son aspectos formales y no
materiales. El procedimiento de la reforma está regulado en el Art. 230 y ss, a través de la Ley de
Declaratoria de Necesidad de Reforma, que debe ser aprobado en un periodo legislativo y la Ley
Aprobatoria de Reforma que debe ser aprobada en el siguiente.

Quienes sostienen el «Plan Bolivia», han concluido que sólo tiene cabida el mecanismo de la
reforma y en ella el Referéndum y no la Constituyente. La Constituyente tiene origen en el Derecho
Continental Europeo (Civil Law, Derecho francés) su fundamento es esencialmente político; el
Referéndum tiene origen en el Derecho inglés (Common Law), es un mecanismo positivado de
consulta sobre temas de interés general.

En términos actuales es instrumentada por los poderes públicos, como el Gobierno, la Corte
Electoral etc. Eh ahí una primera pregunta, ¿Qué grado de credibilidad tienen estas instituciones en
Bolivia y cuán transparente puede ser esa administración?

El problema no se reduce a un cuestionamiento de la legalidad institucional que ya la tienen, sino


pasa por una revisión de su filosofía y participación en el diseño del espacio público boliviano, del
ordenamiento jurídico y de la propia democracia. Si se analiza en ésa dimensión, veremos que

*
Félix Huanca Ayaviri, es Profesor titular de Sociología General y Sociología del Derecho en la Universidad
Mayor de San Andrés.
existe un devaluado desempeño de esas instituciones en el plano público y por tanto, qué esperar,
son creíbles?

El Referéndum, parece funcionar mejor (eficaz), en democracias tradicionales y no en aquellas en


tránsito de consolidación como las latinoamericanas y la boliviana. Por otra, existe otro factor; el
contrato social de 1825 no tiene un efectivo consenso de todos los actores sociales de Bolivia, (p. e.
no recoge las legítimas aspiraciones de los Pueblos Originarios (indígenas) y su participación en la
distribución del territorio, riqueza y poder, cual es el fondo de la lucha actual, por tanto, una
Constitución de esa naturaleza no tiene plena eficacia).

Razonando, si el Contrato social de 1825 no es de consenso general, esa regla institucional-


constitucional, genera excesivos beneficios para unos pocos y negativas para otros, sólo en esa
dimensión es comprensible la lucha de los aymara-quechuas, guaraníes y otros (...) por sus
derechos y otros, cuyo reflejo fue importante en la última elección que no es nada casual. Si el
contrato social no es de consenso general y además establece reglas-institucionales que no pueden
ser cambiadas por la reformada (formal y no material), resulta muy difícil un cambio trascendental
vía referéndum o por el propio mecanismo de reforma actual.

El referéndum al ser institucionalizado, resulta un mecanismo controlado por quienes detentan los
poderes públicos y en las democracias latinoamericanas ya crea interrogantes, éstos actuarán
siempre en función de proteger sus intereses tradicionales o corporativos que inducen desde el
poder. No es extraño, que las políticas públicas en los 179 años fueron instrumentos de exclusión y
dominación (desde luego existen salvadas excepciones actuales como la Ley de Participación
Popular) no sólo político sino hasta cultural y más.

Por lo visto, no es posibles cambios trascendentales a través del mecanismo actual de reforma ni por
el Referéndum, que involucre el sistema político administrativo, el sistema de gobierno y otros,
como la separación entre Estado y la Iglesia. De ahí, es que, la opción más razonable y eficiente, en
términos de réditos a largo plazo es la Constituyente, más aun cuando proclamamos que somos un
Estado multilingüe y pluricultural. Por otra parte, existen otras razones de orden interno e externo
que permitirá argumentar el cambio de la Constitución.

En el externo los cambios en el mundo como globalización, internacionalización de los Derechos


Humanos, exigencia de mayor eficiencia económica y social, adscripción y sujeción de los Estados
a organismos internacionales (ONU, OEA, OIT, FMI, otros) en distintos niveles y contextos,
inducen a plantear cambios para alcanzar altos niveles de exigencia y para lograr la eficiencia; en el
interno, la Revolución Nacional ni la “Independencia nacional”, fueron motores de cambio social
del sentido amplio, más bien, han sistematizado y profundizado la herencia discriminadora e
excluyente de la Colonia.

Ese “contrato social” (1825) es incapaz de dar un nue vo orden a los habitantes de Bolivia; es más,
podemos decir que ha cumplido su ciclo histórico, por ello, es inevitable que el camino del
desarrollo e integración de Bolivia, pasa por el cambio de la estructura política administrativa y
social, esto implic a, adecuar las normas a la nueva realidad social, en la perspectiva de buscar una
mayor eficiencia Institucional y social.

Para hacer más eficiente a la sociedad boliviana es imprescindible cambiar la norma principal, dado
que la vigente genera excesivos costos sociales lo que incide en su desarrollo, p. e. más del 80 % de
la población boliviana es de origen aymara-quechua y otros indígenas y no está inserto en el
mercado político y económico que genera ineficiencia en sentido paretiano, lo que incide en el
bienestar general. Desde la óptica jurídica, para argumentar la propuesta de la Constituyente se
deberá hacer análisis de la Teoría del Derecho moderno, sustentada en dos corrientes: el positivismo
jurídico o análisis formalista del Derecho y el análisis antiformalista.

El primero consiste en: «…una labor interpretativa sobre los elementos o el conjunto mismo del
sistema jurídico, en el análisis de la norma conceptúa y fija su alcance y significado con arreglo al
tenor literal, espíritu, concordancia, analogías, voluntad del legislador, posición en la estructura y
jerarquía de fuentes, relación de los precedentes judiciales o legislativos, encaje de los principios
generales del Derecho y análisis de la propia estructura de la norma» (Pastor, 1989), en lo esencial
se funda en la defensa a tabula rasa de la ley es la ley, radicalizado en la expresión de la reductio
hitlerum de cuyas consecuencias ya conocemos; y el soporte analítico de la segunda proviene de la
economía, sociología y otras disciplinas no jurídicas, que en lo esencial tratan de ver no el sentido
legalista sino el fondo mismo de la que nacen las normas sociales.

Para los positivistas jurídicos sólo existe el Derecho del Estado. Este derecho conforma un
Ordenamiento o sistema. Para su validez el sistema u ordenamiento jurídico exige normas de
identificación que tenga fundamentos en tres supuestos: Unidad, Coherencia y Plenitud, y del
cuestionado presupuesto del legislador racional. El fundamento de Unidad del sistema jurídico
alude a que la validez de una norma se encuentra en la Norma Fundamental (Regla de
Reconocimiento para el profesor Herber Hart).

La Norma Fundante Básica representa la razón de validez de todas las normas que pertenece a un
mismo Ordenamiento. Significa que el fundamento de validez de una norma inferior se encuentra en
la norma superior (Constitución), esto exige el cumplimiento de dos presupuestos: que sea emitida
por el órgano competente y según el procedimiento establecido por la norma superior. El criterio de
coherencia alude a la ausencia de contradicciones o antinomias y el criterio de plenitud alude a la
ausencia de lagunas. Por tanto el Ordenamiento constituye una Unidad, es coherente y carente de
lagunas.

La Constitución boliviana para su reforma está fundamentada bajo este perfil teórico, esto es,
órgano competente (congreso) y procedimiento establecido (Art. 230) por tanto, es construido bajo
la concepción kelseniana de la Norma Fundamental que resulta una norma hipotética, que sólo tiene
una justificación política y no jurídica. Posición que el propio Kelsen ha reconocido y rectificado en
su obra Teoría del Derecho y del Estado (1947).

Los positivistas ortodoxos fundamentan su posición en la primera obra de Kelsen Teoría Pura del
Derecho (1937), según la cual cualquier cambio de la Constitución sólo puede ser efectuado bajo el
procedimiento señalado, sin violentar el Ordenamiento.

Si analizamos el fundamento de validez de la norma superior como está en la anterior Constitución,


así sucesivamente hasta llegar a la Constituyente primaria, y cuando intentamos justificar,
internamente la validez y fundamento de la Constituyente, donde no sustenta en las dos
presupuestos (autoridad competente y procedimiento autorizado), pues ése orden ya no está en
ninguna norma previa ni superior; por lo tanto, el fundamento de validez de la Constituyente se
encontrará desde una justificación externa del Ordenamiento; esto es, una justificación política y no
jurídica, dado que aquellos que se reúnen para fundar un Estado, lo hacen con el objetivo de
proteger ciertos intereses (sentido débil) y para estructurar un pacto social sobre ciertos valores
superiores (sentido fuerte); por tanto, el fundamento de la Constituyente es político y no jurídico.

La Constituyente resulta en un instrumento político y en el contexto nuestro debe servir para


rectificar o mejorar el contrato social aludido, que no pasa por una simple corrección jurídica
(reforma).
Para los positivistas jurídicos lo que interesa, es no quebrar el Ordenamiento. Veamos, si la reforma
o el cambio de la Constitución es posible sin violentar dicho Ordenamiento. A nuestro criterio, esto
es posible a través de los mecanismos de Reforma y la Asamblea Constituyente. Sin embargo, antes
conviene precisar la soberanía que es el fundamento de la acción política. La soberanía es un
concepto de la modernidad y sustenta el poder que tiene el pueblo que determina sus propias leyes,
de organizarse políticamente y gobernarse por sí mismo» (Rousseau). Las constituciones modernas
atribu yen la soberanía al pueblo. La nuestra Constitución en el Art. 2 prescribe que el único
soberano es el pueblo y que ha delegado tal ejercicio de soberanía a los tres órganos.

La soberanía es imprescriptible e inalienable, que debe entenderse en un sentido potencial, que el


pueblo es soberano; para ejercer la soberanía y delegar es un mandato del soberano que puede dar
fin cuando así justifique y considere el pueblo.

El mecanismo de la Constituyente no está prohibido en la actual Constitución, dado que no existe


una regulación tácita en ese sentido, el 230 dice “I. Esta Constitución puede ser parcialmente
reformada,...”. No hay una negación explícita de otra vía y creo que ésta posición está plenamente
refrendada por el Art. 35 de la misma Constitución. A mayor fundamento, la citada frase establece
la reforma parcial por ese procedimiento, significa que no exista otra vía, ni existe prohibición para
tomar otra vía como la Constituyente, para el cambio total; esto siempre debe entenderse en un
sentido amplio. Por otra, debe quedar claro, que el fundamento de la Constituyente es una acción
política del soberano para la que no existe un límite de la acción soberana y no viole los derechos
positivados en el Derecho interno como del internacional.

Una Constituyente, no priva ni viola derechos de nadie, dado que el límite de una acción pública o
privada en el Derecho moderno son los derechos individuales que emergen fundamentalmente en la
Declaración Universal de Derechos. Entonces el referéndum es un mecanismo esencialmente
jurídico cuando está positivado y los cambios trascendentales sólo son posibles a través de opciones
políticas; es decir, la Constituyente. Tampoco existe un límite del ejercicio de la soberanía.

PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE ESTA CONSTITUCIÓN:

PAREJA (payanaka = pänaka) chacha warmi: Es fundamental la representación


de la pareja en el ejercicio del poder político administrativo del pueblo; porque, la
unión de dos personas del sexo opuesto es considerada, jaqi (ser humano);
quienes deberán desempeñar cargos públicos más importantes de la sociedad
Qullana suyu.

UNIDAD (mayamaki, taqini): La sociedad está organizado en “unidades socio


económicos”, en un espacio territorial, denominados (Ayllu). Es la expresión de las
actividades socios económicos y culturales, es la fuerza motriz que genera
riquezas en el territorio, que posibilita el desarrollo intelectual y material en la
sociedad comunitaria.

HERMANDAD (jila-sullka = kullaka sik’a); Es el principio ético moral de la vida,


que permite vivir en armonía entre los seres humanos de la sociedad comunitaria;
es el fundamento de las relaciones humanas de hermandad social y cultural entre
todos los habitantes del pueblo.
RECIPROCIDAD (purapt’awi); Es el principio de una actitud de cooperación
mutua del ser humano, en toda las actividades socioeconómicas; el uno con el
otro grupo o persona, establecido para superar diferencias antagónicas en la
búsqueda de lograr un vinculo social de hermandad equilibrada en la sociedad
comunitaria.

COMPLEMENTARIEDAD (jaqthaptawi); Nada se realiza o funciona en forma


aislado y toda existencia se complementa con su opuesto; por eso, el ser humano
por naturaleza en sus actividades sociales y culturales expresa, una relación de
satisfacción comprensible de los op uestos; lo cual genera una armonía plena de
vida terrenal.

EQUILIBRIO (chikachawi); Toda las personas o grupos opuestos, realizan


actividades socio económicas y político administrativo del país, en condiciones de
equilibrio; asimismo, las relaciones sociales entre él genero masculino y femenino
deberá estar equilibrada para superar los defectos de superioridad o inferioridad
entre los seres humanos.

CONSENSO (iyawsawi); Es el fundamento de una elevada comprensión y


conciencia moral que permite entrar en un acuerdo, entre dos o más personas o
grupos de la sociedad y no es posible la división de grupos antagónicos, que
obstaculiza el proceso del avance en las diferentes actividades socio culturales de
la sociedad.

ROTATIVO (irasiwi) Es fundamental para el proceso del avance y la perfección de


nuestra sociedad comunitaria; lo cual permite evitar cualquier desfase en el
sistema administrativo sociopolítico de la nación. Para el ser humano (Jhaqi), es
imprescindible la Rotación en todas las actividades socios económicos, orgánicos
y territoriales, principalmente el ejercicio de los cargos del poder político
administrativo del país.

INTEGRALIDAD (taqpachani); Son partes o sectores activos que conforman la


totalidad de los grupos de la sociedad entera; quienes impulsarán el accionar
social, económico, orgánico, cultural y político del estado, para lograr la calidad de
vida (SUMA QAÑAÑA).
TRABAJO (thaylli); Es uno de los fundamentos más importantes de la sociedad
Comunitaria. Con el esfuerzo intelectual y físico del ser humano (jhaqi), el Estado
Comunitario promoverá toda actividad que genere la producción y las riquezas, el
bienestar y el desarrollo socio económico, político y cultural de todos los
habitantes de nuestro país.

ABUNDANCIA (inampi); Es el resul tado de la eficiencia administrativa del Estado


Comunitario, es el fruto del esfuerzo físico y intelectual del ser humano de la
sociedad comunitaria, que permite asegurar y prolongar la vida y la satisfacción
entera de todos los habitantes del país, en el sistema económico político SUMA
QAMAÑA.
ARMONIA (askina, allina, k’achankaña) suma qamaña; Es cuando el ser
humano ha logrado alcanzar una satisfacción completa de su vida en el planeta
tierra (akapacha), donde las actividades se desarrollan en un ambiente de armonía
y felicidad, donde se rige el amor y la hermandad familiar en el Sapsi, Ayllu, Laya,
Wamani y en el Suyu “Territorio”.

PROPUESTA
CONSTITUCION POLITICA

PARA UN NUEVO ESTADO

PRINCIPIOS QUE RIGE ESTA CONSTITUCIÓN


PACHA/URAQI: el universo, el territorio y la biodiversidad: Garantiza y norma
la conservación total de la vida; el uso y manejo sostenible de los recursos
renovables y no renovables, de la litosfera, la biosfera y atmósfera; los valores
éticos, espirituales y materiales del universo cultural de los pueblos que habitan en
el territorio, juntamente con la biodiversidad, la riqueza genética, los ecosistemas,
los microclimas y recursos hídricos de la naturaleza.

JAQI/AYLLU/TAMA: La sociedad, la comunidad, y la persona: Es la base para


el desarrollo social, económico, político y cultural que garantizan plena vigencia de
la constitución y la libre determinación conforme a las condiciones que vive la
sociedad, las comunidades y las personas; garantizan el bienestar espiritual,
cultural y socio económico, una participación plena en el ejercicio de los órganos
del Estado Comunitario y las regiones Autónomas conforme a los usos,
costumbres y formas de elección que permita asumir responsabilidades y el
servicio al Estado Comunitario.

SUMA K’ACHANKAÑA: La ética constitucional: Es la armonía entre la


sociedad, la comunidad, las personas y la naturaleza; donde se garantiza la
satisfacción de las necesidades del ser humano (jhaqi), expresada en la calidad de
vida de todos los habitantes del territorio; que se manifieste una conciencia y libre
expresión de información, como también oportunidades para acceder a otros
conocimientos que permita la superación de las personas.

ASPECTOS QUE DEFINEN EL PRINCIPIO SUMA QAMAÑA (calidad de vida)


LO ESPIRITUAL: A toda sociedad y sin distinción alguna, el Estado Comunitario
asegura los conocimientos culturales de la ética moral y una elevada conciencia
social; una relación y un respeto a la naturaleza, la coexistencia con los elementos
vitales del cosmos en un ambiente de armonía en el akapacha (planeta tierra).

LO CULTURAL: Toda actividad cultural es de vital importancia para el desarrollo


espiritual y físico de las personas; por consiguiente, el Estado Comunitario
promoverá e impulsará, especialmente la recuperación y desarrollo cultural de los
pueblos originarios existentes, que permita implementar el modelo de estructura
política sobre la base de la identidad nacional del Qullanasuyu.
LO SOCIAL: La familia es el fundamento de la sociedad y por ética social están
organizados en Unidades Productivas denominados, Sapsi y Ayllu, donde todos
los integrantes reciben una atención eficiente para la protección, la salud, la
educación y otros servicios elementales. Asegurar la calidad de vida de todos los
habitantes de la sociedad.

LO POLÍTICO: Para participar en la vida política, toda persona (hombre - mujer),


tiene la misma capacidad intelectual y goza de las mismas oportunidades en poder
ocupar cualquier cargo público y el desempeño institucional; considerando que en
la pareja los derechos son iguales para asumir responsabilidades y para la
conducción del Estatal Comunitario.

LO ECONOMICO: Todos, sin discriminación alguna deberán desarrollar trabajo


productivo y organizado, para que en el país se pueda generar una economía y un
desarrollo equilibrado. Es de prioridad nacional, apoyar a las organizaciones de
producción que permitan potenciar la economía del pueblo y establecer una
sociedad de abundancia y armonía de vida comunitaria.

LO JURÍDICO: Todas las disposiciones legales serán debidamente normadas de


acuerdo a los principios y fundamentos de los derechos sociales, económicos,
político y cultural de los pueblos originarios, considerando que es vital importancia
y necesario recuperar los códigos establecidos por nuestros antepasados.

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CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO
MARKÄPNAQA JILIRI KAMACHI UTT’AYAWI

TITULO DOCTRINARIO
PACHAKAMACHI P’IQINCHT’A

En cumplimiento de los ideales de héroes y mártires del QULLANA-SUYU (Bolivia), restablecer la


soberanía, la justicia, el desarrollo y la libre determinación de nuestro pueblo, basado en los
principios filosóficos del (tiempo - espacio y materia - energía) “pacha” cosmos; que expresa la
representación Binaria de la pareja humana y establece las normas de reciprocidad y
complementariedad, el equilibrio y rotación, donde se genere la abundancia y una armonía de vida
de los habitantes del País.
Por la voluntad soberana del pueblo, proclama un nuevo paradigma técnico y científico, para
consolidar los principios de Unidad y Hermandad Comunitaria del Estado, establecido en el antiguo
territorio del Qullana-suyu hoy (Bolivia), que constituye la diversidad geográfica de (oriente a
occidente), constituido por todo los pueblos y culturas originarias existentes en el territorio del país.

Qullana-suyu, constituido en un Estado Comunitario, desde miles de años de antigüedad; hoy los
descendientes de esta gran civilización, inspirados en la cultura milenaria y en la memoria de los
mártires y héroes, de hombres y mujeres aymara-quechuas y otros pueblos hermanos de origen;
quienes con su sacrificio, derramaron su sangre para recuperar el sistema del poder político
administrativo y territorio del Qullana-suyu

La Constitución del Qullana-suyu (Bolivia) establece normas de protección a


los derechos y libertades de las personas de toda la sociedad, de quienes
habitan en el territorio; determina organizar la estructura del Estado y las
instituciones, para promover e impulsar el desarrollo social y económico, que
permita construir una nueva sociedad y lograr el sistema del SUMA
QAMAÑA en el territorio nacional.

DISPOSICIONES GENERALES

TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 1.

CARACTER DEL ESTADO: Qullana-suyu (Bolivia) esta constituido sobre las


tierras de culturas ancestrales, es un Estado Comunitario, plurilingüe, pluricultural,
libre y soberano. Establece los derechos inalienables de todas las personas que
habitan en el territorio y regula la simbiosis de los valores socioculturales, políticos
y económicos de los pueblos originarios (indígenas) y otros sectores que
adoptaron la cultura occidental.

Artículo 2.

I.- La soberanía total, reside únicamente en el pueblo y por voluntad


soberana es irreducible y inalienable, es inembargable e imprescriptible, la
misma que delega la representación a través de los órganos de poderes a
nivel del Estado y Gobierno Central establecidos y previsto en esta
constitución.

II.-El ejercicio de la democracia participativa y representativa del Estado


comunitario se determina a niveles espaciales del territorio, constituyendo
en una federación de Regiones autónomas y demás unidades político
administrativas menores conforme a sus usos y costumbres.

III.- Adopta la forma de gobierno de carácter COMUNITARIO, democrático y


participativo, con la representación de la Pareja (chacha –warmi) y por
área lingüística territorial de alaxasaya y maxasaya. La gestión y
funcionamiento de las autoridades del gobierno es de rotación en todo el
ámbito geográfico, basado en la complementariedad y consenso,
establecido en los principios y valores socioculturales milenarios.

IV.- La estructura del Qullana -suyu (Bolivia) tiene carácter de un Estado


Comunitario de la cuatriposisión geográfica, compartido por dos macro
regiones, Norte y Sur, estos a su ves comparte el territorio entre occidente
oriente, (alaxasaya y maxasaya). Reconoce y protege toda expresión de la
diversidad étnica cultural. Establece un ordenamiento jurídico de unidad y
hermandad entre los seres humanos.

V.- El Estado Comunitario está fundada en el respeto de la dignidad


humana, asegurando la forma de vida colectiva y personal, establece los
valores culturales de la Reciprocidad, la Complementariedad, el Equilibrio,
la Rotación y la Igualdad de DERECHO de todos los habitantes de la
sociedad SUMA QAMAÑA.

Artículo 3.

I.- División política del Estado: La geografía del Estado


Comunitario es constituida por dos macro regiones, Norte y Sur, a su
vez se organiza y comparte por áreas lingüísticas o territorio
cultural, comprendido en alaxsaya y maxasaya “abajo y arriba”, lo
cual permite y facilita hacer una competencia equilibrada en el
desarrollo socio económico de las regiones establecido por cuatro
regiones autónomas de nuestro país.

La región del área lingüística Aymara Bilingüe.


La región del área lingüística Quechua Bilingüe.
La región del área lingüística Amazonica Plurilingüe.
La región del área lingüística Chiquitano-Guaraní Plurilingüe.

II.- Las área de las metrópolis "ciudades” con más de 100 mil y 200 mil,
habitantes tienen un régimen autónomo especial con gobiernos locales
“Municipios” los mismos tienen constituidos por distritos o ayllus urbanos de
alaxsaya y maxasaya, (aransaya – urinsaya).
Artículo 4.

I.- El Estado Comunitario y las regiones autónomas reconocen como


idiomas de uso oficial a las lenguas “Aymara, Quechua y Español” por ser
de uso mayoritario en el territorio Qullana-suyu (Bolivia).

II.- El estado comunitario respeta y promueve el desarrollo de las lenguas


originarias de pueblos minoritarios; el Estado y las regiones autónomas
protegerán y son declarados Patrimonios Culturales de la Nación.

III.- El Estado Comunitario y las regiones Autónomas promulgarán leyes


que regulen, la conservación, la enseñanza y la difusión de las lenguas
minoritarias y de aquellas que estén en proceso de extinción.
IV. - Se establece la Educación Intercultural Bilingüe para toda la población del país, especialmente en los
ciclos de enseñanza primaria y secundaria. El Estado Comunitario y las regiones autónomas promueven
políticas de enseñanza bilingüe para toda la población boliviana y sin discriminación alguna. Primera
lengua de enseñanza será la materna y segunda lengua será aquella de uso mayoritario dentro del territorio
que se habite.

Artículo 5.

I.- El Estado Comunitario de la cuatriposisión y las regiones autónomas son


laicos y
Aconfesionales; sin embargo reconocen y respetan las prácticas
espirituales de los pueblos originarias, asimismo se reconoce la libertad de
conciencia.

II.- En caso de intereses prioritarios de la nación, el pueblo interviene


directamente para la toma de decisiones políticas a través del Plebiscito y
en decisiones legislativas a través del Referéndum.
PRIMERA PARTE
CAPITULO l

LA BIODIVERSIDAD DEL TERRITORIO

AKAPACHA URAQINA TAQIMANA JAKASIRI

DISPOSICIONES GENERALES

TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 6.

Se comprende Biodiversidad, a todo los seres vivientes que existen en la


naturaleza, tanto la flora, la fauna, hasta el micro organismos, habitado por
millones de años en la superficie terrestre, en el subsuelo, en el agua y aire,
lo que constituye el ecosistema del territorio nacional, considerado como el
patrimonio biótico y cultural del pueblo. El Estado Comunitario y la regiones
autónomas promoverán la preservación y control ecológico del territorio,
desarrollar una conciencia de reciprocidad de las relaciones entre el ser
humano y la naturaleza.

Artículo 7.

El Estado Comunitario y las regiones autónomas determinarán normas de


protección y conservación del Medio Ambiente, de los Recursos Naturales y
toda la riqueza intangible de las culturas que habitan este territorio,
regulando las acciones de la comunidad y la sociedad; quienes estarán
relacionados con la naturaleza para que permita promover la “Calidad de
vida” (Suma Qamaña) de toda la población del país.

CAPITULO lI

GARANTIAS CONSTITUCIONALES DE LA BIODIVERSIDAD Y EL


TERRITORIO
AKAPACHA-URAQINA, TAQIMANA-JAKASIRINAKATA PHUQHASIÑAPA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 8.

El Territorio (akapacha uraqi) es el espacio geográfico que define una


extensión de la superficie terrestre, con límites del perímetro demarcados,
donde la vida de la fauna y flora se desarrollan en su hábitat; donde el ser
humano estable y norma jurídicamente la existencia, el uso y el manejo de
todo los recursos naturales del suelo y subsuelo de acuerdo a sus usos y
costumbres.

Artículo 9.

Para la planificación y el acceso ecológico del territorio, el Estado


Comunitario y las Regiones Autónomas reglamentarán, fiscalizarán y
aplicarán medidas apropiadas para garantizar la utilización y el
aprovechamiento de los recursos de la fauna terrestre y fluvial, así el uso de
la flora y los bosques de manera racional para evitar la depredación y
asegurar la preservación y el repoblamiento permanente de las especies.

Artículo 10.

Para el aprovechamiento de los recursos naturales no renovables el Estado


Comunitario de la cuatriposisión y las regiones Autónomas reglamentarán
adecuadamente la explotación de los recursos naturales, para evitar la
contaminación ambiental, los perjuicios sociales y económicos, asimismo
será implementado al sistema educativo, lo cual permitirá la preservación y
conservación de la ecología y el medio ambiente.

Artículo 11.

I.- El Estado Comunitario y todos los habitantes del territorio nacional deben
promover y propiciar un desarrollo social económico sin contaminación del
medio ambiente; de mantener y preservar un equilibrio del ecosistema,
evitar la depredación y destrucción de los ecosistemas en el territorio.
II.- Será regulado a través de la ley, el control de calidad de bienes y
servicios ofrecidos y prestados a la sociedad, asimismo debe ser
suministrado la información al público para su comercialización.

III.- Serán responsables, quienes en la producción y en la comercialización


de bienes y servicios, atenten contra la salud, la seguridad y el adecuado
aprovisionamiento a consumidores y usuarios, los infractores serán pasibles
a sanciones de acuerdo a ley y al grado de culpabilidad.

IV.- Para el manejo y aprovechamiento adecuado de los recursos naturales


el Estado Comunitario y las regiones Autónomas garantizan el desarrollo
sostenible, asimismo previene los factores de deterioro ambiental, imponer
sanciones legales y exigir la reparación de los daños causados.

V.- Queda terminantemente prohibido la fabricación, importación y uso de


armas químicas, biológicas y nucleares, así como la introducción de
residuos nucleares y desechos tóxicos al territorio nacional que atentan a la
vida de los seres humanos.
VI.- El Estado Comunitario y las regiones Autónomas regularán el ingreso y
salida del país de los recursos genéticos y su utilización estará ligada
exclusivamente a los intereses del pueblo.

Artículo 12.

Se establece, que en el territorio Qullana-suyu “Bolivia”, el Estado Comunitario y las cuatro


regiones Autónomas del país, reconocen los siguientes tipos de propiedades de tierra:

? Propiedad Comunitaria Ancestral (PCA).


? Propiedad Social Colectiva (PSC).
? Propiedad Personal o Familiar (PPF).
? Formas Mixtas de Propiedad (FMP)

I.- Las culturas originarias que se establecieron y ocuparon este territorio


desde miles de antes de la Colonia y la República, el Estado Comunitario y
las regiones Autónomas respetan y protegen de manera legítima el derecho
de propiedad a las Tierras de Origen Comunitaria Ancestral TOCAs,
considerando que históricamente cumplen una función social y son
denominados PROPIEDAD COMUNITARIA ANCESTRAL (PCA).

II.- El Estado Comunitario y las regiones Autónomas garantizan el derecho


de Propiedad Social Colectiva sobre la tierra, a quienes ocupan de forma
asociada para el uso adecuado de la tierra en la producción agropecuaria.
PROPIEDAD SOCIAL COLECTIVA (PSC)

III.- Las tierras consideradas como el solar o pequeña Propiedad Personal o


Familiar; son declarados indivisibles, inembargables y garantiza la
protección y apoyo del Estado Comunitario y las regione s Autónomas:
PROPIEDAD PERSONAL o FAMILIAR ( PP o PF)

IV. - Las tierras comunales y familiares garantizan la protección y apoyo del Estado Comunitario y las
regiones Autónomas para su desarrollo y estarán sujetas a planes y programas de desarrollo. Y se
denominan FORMAS MIXTAS de PROPIEDAD (FMP).

Artículo 13.

El desarrollo de las Tierras Ancestrales de Origen TAOs, será de prioridad


para el Estado Comunitario y las regiones Autónomas, garantizando el uso
adecuado y aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y la
conservación del ecosistema y el medio ambiente.

Artículo 14.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas no reconocen ninguna


forma de latifundio y no permitirá la existencia de áreas improductivas y
ociosas, El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas regularán las
relaciones del trabajo agrícola, fomentando una máxima productividad y una
justa distribución de los beneficios socio económico que corresponde a las
regiones autónomas.

Artículo 15.

El trabajo agrícola es fuente fundamental y digna para la o las personas,


quienes generan la producción y conserva la tierra como parte de su
identidad territorial y el Estado establecerá el derecho a la dotación,
consolidación y la enajenación de la tierra.

Artículo 16.

Para mejor uso de los recursos naturales del país y manejo eficiente de la
tierra; asimismo, para una distribución racional. El Estado Comunitario y las
Regiones Autónomas, planificarán nuevos asentamientos humanos,
considerando siempre el crecimiento demográfico de la población y
contemplando prioritariamente las áreas fronterizas para su desarrollo.

Artículo 17.

El Servicio Nacional Agrario tiene jurisdicción en todo el territorio del Estado


Comunitario y las Regiones Autónomas, asimismo se garantizan la tenencia
de TAOs establecidos con pleno derecho de propiedad comunitaria,
colectiva, personal y mixta que contribuyan al desarrollo económico.
Artículo 18.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas respetan y protegen a


través de los representantes naturales, la conservación de los sitios
arqueológicos y ceremoniales por ser considerados como patrimonio
natural, Tangible e Intangible de nuestras culturas.

Artículo 19.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas regularán la explotación y uso adecuado de los recursos
naturales del suelo y subsuelo, considerados como no renovables, previniendo en las regiones que no
afecte a la salud humana, al ecosistema y al medio ambiente y se evite la contaminación del suelo, las
aguas, el aire.

I.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas regularán la


explotación y manejo de los recursos naturales renovables, precautelando
la conservación del ecosistema y el medio ambiente, asimismo apoyarán a
desarrollar planes de acción para el incremento de las especies.

II.- La mediana propiedad y la empresa agropecuaria reconocidas por ley,


gozan del respaldo Estatal, en tanto cumplan una función económica social,
respetando la conservación del ecosistema y el medio ambiente de acuerdo
a los planes de desarrollo y en benéfico del país.

III.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas protegerán de la


contaminación atmosférica, considerando que muchas especies naturales
dependen de un espacio con aire puro.

IV.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan la


conservación de las especies de la fauna y flora, evitar la contaminación del
suelo, a fin de mantenerlo la tierra en condiciones productivas, conservar
que el líquido elemento de los ríos y el aire de la atmósfera de
contaminación.

V.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas protegen los derechos


vitales de la fauna y flora, el desarrollo cultural practicado por los pueblos
originarios que habitan en el territorio, conservar las especies nativas
considerado como riqueza natural.

CAPITULO III

DERECHOS CONSTITUCIONALES DE LA BIOVIVERSIDAD


KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA TAQIMANA JAKASIRINA JIYINAKAPA
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 20.
El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas reconocen los siguientes
derechos fundamentales de la Biodiversidad:

I.- La existencia de todos los seres en el planeta es una necesidad


fundamental, porque equilibran el ecosistema y el medio ambiente de la
naturaleza.

II.- El derecho a la protección y la existencia de los animales en su hábitat original.


III.- El derecho a prestar atención preferente por los guarda faunas, en la regiones donde habitan las
especies en peligro de extinción y también la preservación y protección de la flora.

IV.- El derecho a la utilización racional de especies de flora y fauna en


beneficio de la salud y alimentación.

V.- El derecho a la domesticación de algunas especies de la fauna y flora,


que permita su desarrollo vital de las mismas en beneficio social.

VI.- El derecho a patentar todas las especies de flora y fauna originaria del
territorio.

VII.- El derecho a gozar de aire sano, ecológicamente equilibrado y


asegurar una calidad de vida para las futuras generaciones del país.

CAPITULO IV

EL TERRITORIO
AKAPACHA-URAQI

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 21.

El territorio es el espacio geográfico que comprende el suelo y subsuelo de la


plataforma continental, la zona exclusiva donde están los recursos naturales
renovables y no renovables, el espacio aéreo, el segmento de la órbita
geoestacionaria, el espectro electromagnético del cosmos, conforme a las normas
establecido en el Derecho Internacional de los pueblos indígenas (originarios).

I.- Comprende una extensión de la superficie terrestre, con definición de límites demarcados a través de un
perímetro, donde se desarrolla la vida de la fauna y flora; la existencia de la riqueza del suelo y subsuelo,
donde el ser humano tiene establecido sus propiedades y organizado jurídicamente en una Nación.

II.- Todos los bienes públicos tangibles e intangibles establecidos en el


territorio son parte del dominio y pertenecen al Estado comunitario.
CAPITULO V

GARANTIAS CONSTITUCIONALES DEL TERRITORIO


AKAPACHA-URAQITA KAMACH-UTT’AWINAKARJAMA, PHUQHASIÑAPA

Artículo 22.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan el ejercicio pleno de


la soberanía del espacio geográfico terrestre, lacustre, fluvial, área, históricas y
vitales de la fauna y flora, incluidos los recursos genéticos de las especies
migratorias, sus productos derivados y los componentes intangibles que por
causas naturales existen y habitan en el territorio.

I.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas con la participación del


pueblo ejercen soberanía en su jurisdicción de acuerdo a los términos y
condiciones jurídicas que determinen el derecho internacional.

II.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan que el


territorio no será cedido, ni traspasado, ni arrendado, hipotecado, ni
enajenado, temporal o parcialmente por intereses ajenos o de Estados
extranjeros, a sí sean sujetos al derecho internacional.

III.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan que el


espacio geográfico del aire, tierra, las aguas lacustres y pluviales es una
zona de paz, no se podrá establecer bases o instalaciones militares con
intereses extranjeros.

IV.- Se garantiza que los Estados extranjeros u otros sujetos de derecho


internacional sólo podrán acceder a inmuebles para sus representaciones
diplomáticas o consulares dentro de un área determinada, mediante
garantías de reciprocidad y con ciertas limitaciones establecidos por la ley
del estado y bajo soberanía nacional.

V.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan que las


tierras fiscales existentes en el territorio nacional no podrán ser enajenadas;
solamente serán concedidos exclusivamente a las personas nacidas en el
territorio y la propiedad sólo será para uso y manejo comunitario de la tierra,
que cumpla una función social.

VI.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan una


política para espacios fronterizos, preservando la integridad de la soberanía
nacional, la seguridad, la defensa, la identidad cultural, la biodiversidad y el
medio ambiente, para promover el desarrollo económico, socio cultural y la
integración nacional, atendiendo la naturaleza propia de cada región
fronteriza a través de apoyo financiero especial.
VII.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan el
cumplimiento de los requisitos y formalidades legales. En el caso que
determine realizar un examen periódico de los límites del perímetro
territorial, se determinará la impresión y publicación de un mapa oficial
UNICO del País.

CAPITULO VI

DERECHOS CONSTITUCIONALES DEL TERRITORIO


KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA, AKAPACHA-URAQITA JIYINAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 23.

Son de derecho exclusivo del Estado Comunitario y las Regiones Autónomas los
espacios declarados como patrimonio propio de los habitantes, en términos de
extensión territorial y en condiciones que determinen los acuerdos internacionales
y la legislación nacional.

I.- Los parajes de yacimientos mineros, petrolíferos, gasíferos, acuíferos y


otros recursos naturales no renovables, asimismo la fauna y flora cualquiera
que sea su naturaleza existente en el territorio nacional. Por derecho, son
bienes del dominio público y de propiedad exclusiva del Estado Comunitario
y las Regiones Autónomas, por tanto son: inalienables e imprescriptibles.

II.- Se establecerá régimen jurídico especial de Derecho, para aquellos


territorios que por libre determinación de sus habitantes y con la aprobación
del Consejo Supremo del Estado se reincorporen al Estado Comunitario y a
las Regiones Autónomas
III.- A cincuenta kilómetros de frontera del perímetro territorial, el Estado Comunitario y las Regiones
Autónomas garantizan que extranjeros no podrá adquirir título de propiedad, ni poseer el suelo, el
subsuelo, directa o indirectamente, individual o colectivo bajo ninguna circunstancia y con pena de
pérdida total y en beneficio del Estado Comunitario y las Regiones Autónomas.

SEGUNDA PARTE

CAPITULO I

LA COMUNIDAD

AYLLU
DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 24.

Históricamente denominados Ayllu es la conformación de varias unidades de


Sapsis (comunidades), considerado como la organización socio - económico y
político-territorial que sustentan hasta el día de hoy, particularmente en las
regiones del área andina. El Ayllu, durante la administración de los Inkas fue la
base de la economía planificada en el Tawantinsuyu, considerado como el puntal
para el desarrollo de la civilización andina, por esta razón los cronistas
denominaron como una Sociedad de Abundancia. Para constancia del pueblo, los
Ayllus históricamente fueron constituidos en Unidades de Producción o las
“Empresas Comunitarias”, por consiguiente el Estado Comunitario promoverá
en el ámbito geográfico la reconstitución de los Ayllus o Empresas Comunitarias
de Producción para el desarrollo de la economía sostenible y sustentable del país.

CAPITULO II

GARANTIAS CONSTITUCIONALES DE LA COMUNIDAD


KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA AYLLUNA PHUQHASIÑAPA

Artículo 25.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan la vigencia del


ayllu o la comunidad, como ente de seguridad social y unidad productiva. A
través de estas asociaciones se tiene la potestad de formular peticiones
ante las autoridades para el desarrollo social.

Artículo 26.

En la comunidad, todo miembro de ella que presume ser inocente tiene


derecho a su defensa con asistencia de una autoridad originaria escogida
por él o de oficio durante la investigación y el juzgamiento. El proceso será
público, previo presentación de pruebas y sin dilación alguna o injustificada.

CAPITULO III

DERECHOS Y DEBERES CONSTITUCIONALES DE LA COMUNIDAD


AYLLUNA, KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA JIYINAKAPA PHUQHASIÑAPA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 27.

En el territorio de la comunidad o ayllu, toda persona nace con iguales


condiciones, con los mismos derechos y deberes “obligaciones”, el mismo
que recibirá una protección y un trato igual de parte de las autoridades de la
comunidad; asimismo, para todos los miembros hábiles, es un deber
cumplir obligaciones y ejercer el cargo de una Autoridad Comunitaria en
todo el ámbito de la geografía Nacional.

Artículo 28.

Todo miembro de una comunidad tiene derecho a presentar peticiones a las


autoridades comunales, por motivos de interés personal, colectivo o público, los
mismos que serán solucionados en el término de 30 días.

I.- La comunidad originaria, el ayllu o la tenta tienen derecho a obtener su


personalidad jurídica.

II.- En las comunidades originarias, el trabajo es un derecho y obligación


social en todas sus modalidades: ayni, mink´a, etc.

III.- En la comunidad originaria, todo miembro natural es responsable de


resguardar, proteger y conservar el Patrimonio Natural y Cultural tangible e
intangible de su cultura.

Artículo 29.

La cancelación o la suspensión de la personería jurídica de la comunidad sólo se


procederán por vía judicial y en casos justificados.
CAPITULO IV

LA PERSONA Y LA SOCIEDAD COMO MIEMBROS DEL ESTADO


JAQI, TAMA, KAMACHI-UTT’ATANKIRINAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 30

Todas las personas naturales (hombres y mujeres) quienes conforman las


diferentes comunidades del país; constituyen la sociedad del Qullana-suyu,
(República de Bolivia). Hombres y mujeres, sin discriminación ni distinción
alguna del color, sexo, edad, condición social, económica, espiritualidad,
lengua, pensamiento ideológico, origen y afiliación política, son
considerados con derechos iguales ante la Constitución Política del Estado
y son miembros natos e integrantes del Estado Comunitario y las Regiones
Autónomas correspondientes. Se establece la inviolabilidad de los derechos
inalienables del ser humano, enmarcados en tratados y convenios
internacionales y nacionales, los cuales rigen los derechos de pueblos
indígenas u “originarios” que habitan en el territorio.

CAPITULO V

GARANTIAS CONSTITUCIONALES DE LA PERSONA Y DE LA SOCIEDAD


JAQINA, TAMANA, KAMACHI-UTT’AWINAKARJAMA, PHUQHASIÑAPA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 31.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan a las personas,


“hombre y mujer” y a la sociedad, la seguridad social y la educación, tener el
mismo trato en el trabajo, opción a ocupar cargos públicos, acceso a la producción
y alimentación, vigencia de las organizaciones y poder formular peticiones. El
procedimiento estará sujeto a los instrumentos legales establecidos en el país, los
cuales serán aplicados conforme determina la presente Constitución. Además el
Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan su plena vigencia.
I.- Conforme a los preceptos de la presente Constitución, todo ser humano nacido en el territorio,
esta considerado como él Capital más Preciado de la Sociedad Qullana-suyu, (Bolivia); Porque el
ser humano esta considerado como la fuerza motriz y generadora de las riquezas para el pueblo,
por consiguiente es un deber ineludible del Estado Comunitario proteger su integridad física e
intelectual de todas las personas que habitan en el territorio.

II.- La inviolabilidad de los derechos fundamentales de la persona, los


mismos que se enuncian en tratados y convenios internacionales o
nacionales ratificados por el país o que rigen consuetudinariamente los
derechos de los pueblos originarios (indígenas) quienes habitan en el
territorio nacional.

IlI.- La persona, hombre o mujer, ante el Estado Comunitario y las Regiones


Autónomas y sus leyes son iguales y gozan de los mismos derechos
políticos, sociales, económicos y culturales, sin distinción de raza, sexo,
idioma, espiritualidad, opción política o de otra índole, condición económica,
social u otra cualquiera.

IV. - A toda persona de la sociedad no puede ser sometida a su desaparición forzada, torturas, tratos o
penas crueles, inhumanas o degradantes.
V.- Se prohíbe terminantemente cualquier tipo de servidumbre y nadie
podrá ser obligado sin su pleno consentimiento y en contra de su voluntad y
una justa retribución de actividades; quienes infringen este derecho, el
Estado Comunitario y las Regiones Autónomas aplican sanciones conforme
a las disposiciones legales establecidos.

VI.- Que ninguna autoridad pública, ni persona u organismo alguno podrá interceptar, interferir las
conversaciones y las comunicaciones privadas, mediante instalaciones de control centralizada. Sólo
pueden ser interceptadas o registradas mediante orden judicial, en casos especiales conforme a las
formalidades establecidas por ley.

VII.- Para las personas naturales de origen aymara-quechua o de otros


pueblos originarios, el Estado Comunitario establecerá de acuerdo a los
términos y condiciones jurídicas que determinen el derecho internacional
para la libre circulación en el territorio comprendido como el antiguo
Qullana -suyu. Pueden entrar y salir o permanecer libremente, asimismo
pueda fijar su residencia conforme a los derechos jurídicos. Asimismo se
garantiza la salida y entrada a otros países, previo autorización legal.

VIII.- La protección de la sociedad, especialmente a las personas que por


su condición económica, física o mental, en circunstancias de debilidad son
víctimas de abusos y maltratos; los infractores serán sancionados de
acuerdo a ley expresa.

IX.- Toda persona es libre de escoger una profesión u oficio, el Estado


Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan la formación académica,
los conocimientos del arte y oficio a través del aprendizaje y adiestramiento
de los recursos humanos.

X.- El Estado Comunitario y las regiones Autónomas garantizan la


estabilidad laboral, en todas las actividades productivas y de servicio. Toda
persona, hombre y mujer de la sociedad debe ocuparse en actividades que
beneficien a la familia y al pueblo.

XI.- El Estado Comunitario y las Regiones Autó nomas garantizan una


renumeración de sueldos y otras formas de pago, en cuatro escalas; por el
servicio o trabajos que realicen, en las instituciones privadas, estatales y
sociales existentes en todo el país; primero para, obreros; segundo, para
mano de obra calificada; tercero, para técnicos; y cuarto, para
profesionales.

XII.- En toda transacción se garantiza los dos tipos de retribución vigentes


dentro de las dos culturas mayoritarias, la andina y la occidental:
Retribución monetaria y retribución reciprocitaria

XIII.- Específicamente la dignidad y la libertad de las personas de toda la


sociedad, son inviolable.
XIV.- Todo ser humano goza de personalidad y su capacidad jurídica está
definida por ley.

Artículo 32.

Una persona se presume inocente mientras no se la haya declarado


judicialmente culpable. Quien sea sindicado tiene derecho a la defensa y
asistencia de un abogado escogido por él o de oficio durante la
investigación y el juzgamiento; el proceso será público y sin dilación alguna
y previ o presentación de pruebas.

Artículo 33.

Quien estuviere privado de su libertad o creyere estarlo ilegalmente, el


Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan que pueda
invocar ante cualquier autoridad judicial y en cualquier momento para
demostrar su inocencia por sí o por interposición personal de Habeas
Corpus, el cual debe resolverse en el término de cuarenta y ocho horas.

Artículo 34.

Cuando el delincuente es sorprendido “in fraganti" podrá ser aprehendido y


llevado ante el juez por cualquier persona. Si los agentes de la autoridad lo
persiguieren y se refugiare en su propio domicilio o en otro, el Estado
Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan penetrar en él, para el
acto de la aprehensión y su inmediato juzgamiento.

Artículo 35.

Nadie será obligado a declarar contra sí mismo o contra su cónyuge,


compañero permanente o pariente dentro del cuarto grado de
consanguinidad, segundo de afinidad o primero civil.

Artículo 36.

La extradición se podrá solicitar, conceder u ofrecer de acuerdo con los tratados


públicos o en su defecto aplicar en lo que determina la ley, específicamente. La
extradición se concederá por delitos cometidos en el interior y exterior del país, los
cuales estarán estipulados en las leyes del Estado Comunita rio y las Regiones
Autónomas y estas:

Reglamentarán solamente la materia.


No procederán por delitos políticos.
No procederán cuando se trate de hechos cometidos con
anterioridad a la promulgación de la presente norma.

Artículo 37.

En casos de asesinatos, violaciones o traición a la patria será aplicada la sentencia pública de cadena

perpetua y sin derecho a indulto.

CAPITULO VI

DERECHOS Y DEBERES CONSTITUCIONALES DE LA PERSONA


Y LA SOCIEDAD
JAQINA, TAMANA, JIYINAKAPAXA, KAMACHI -
UTT’AWINAKARJAMA PHUQHASIÑAPA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 38.

Para asegurar la vigencia de los derechos sociales, económicos, políticos, culturales y


los deberes fundamentales de los habitantes de la sociedad Qullana-suyu “Bolivia”.
Asimismo, la forma de los procedimientos serán aplicados, conforme a los principios de los
derechos fundamentales del ser humano establecido en esta Constitución, respaldado en
los convenios de derecho jurídico internacional para todas las personas “hombres y
mujeres” de la sociedad comunitaria y por voluntad soberana del pueblo se asegura su
vigencia en todo el país.

Artículo 39.

I.- Derecho a la vida, la salud, la seguridad a la integridad física y la ética,


para el desarrollo libre de su personalidad.

II.- Derecho a la seguridad social y una atención eficiente en la salud


pública.

III.- Derecho a tener nombre completo, intimidad personal y familiar, acorde


a su imagen, honra y reputación personal.

IV.- Todas las personas, hombres y mujeres deben recibir una educación
primaria y secundaria gratuita; que posibilite estudios superiores para contar
con recursos humanos eficientemente capacitados.

V.- Derecho a la reproducción humana, compatible y programada, que contribuya a


concebir y generar nuevas vidas humanas para el país.
VI.- Derecho a tener una vivienda digna de un ser humano, que permita
establecer el desarrollo de una familia integra de la sociedad Suma
Qamaña.

VII.- El derecho de libre asociación con fines de lograr el desarrollo social,


en las diferentes actividades, siempre y cuando tenga una orientación que
beneficie a la familia y/o a la sociedad.

VIII.- Desarrollar actividades conforme a su capacidad física e intelectual de


las personas es un derecho, por tanto el Estado Comunitario y las Regiones
Autónomas promoverán en el ámbito nacional, centros de adiestramiento y
capacitación; en las diferentes ramas que sean útiles para su familia y la
sociedad.

IX.- Derecho a la libertad de discrepancia de cualquier índole, siempre y


cuando no dañe ni afecte a los intereses fundamentales de la comunidad.

X.- Derecho a elegir y ser elegido libremente y sin presión de ninguna


naturaleza, para ocupar cargos públicos y privados de la sociedad.

XI.- Derecho a la libertad de expresión y libre pensamiento, siempre que no


afecte ni dañe a la ética moral del ser humano y a la comunidad.

XII.- Derecho a elegir cualquier actividad laboral lícita, como comercio,


industria, profesión u oficio, así como a la libertad de empresa social,
siempre que no afecte a los intereses de la sociedad y del Estado
Comunitario.

Artículo 40.

I.- Derecho a una remuneración digno y justo por el esfuerzo del trabajo
realizado, que sea en beneficio de la persona misma y a su familia.

II.- Derecho a la propiedad personal, siempre y cuando no afecte a los


intereses de la propiedad comunitaria regional y nacional.

III.- Derecho a desarrollar trabajos conforme a su capacidad y posibilidades


que sean útiles en la familia y la sociedad.

IV.- Derecho a economizar sus remuneraciones y realizar convenios de


intercambio de bienes personales que posibiliten el beneficio de las partes
interesados de la comunidad.

Articulo 41.
I.- Derecho a la libertad de conciencia, pensamiento y espiritualidad, a la
practica cultural, asimismo a emitir y recibir cualquier tipo de información y
por cualquier medio de difusión.

II.- Todo persona tiene derecho a participar en la conformación, el ejercicio y control del poder político, la
participación activa en la vida política, social, cívica, deporte, vecinal y comunitaria, conforme a los
intereses del pueblo.

III.- Es un derecho reunirse y manifestarse pública y pacíficamente. Solo en casos especiales, la ley podrá
establecer de manera expresa y limitar el ejercicio de este derecho.

IV.- Derecho a ingresar, permanecer en otros países; habitar, transitar y


salir libremente del territorio nacional cuando lo desee.

V.- Derecho a recibir una protección de cualquier autoridad política, administrativa o judicial del Estado.

VI.- Derecho a formular peticiones ante cualquier autoridad o servidor público y obtener respuesta
favorable.

VII.- Se reconoce el derecho de asilo en los términos previstos por la ley.

Artículo 42.

I.- Derecho a la Identidad Cultural, asimismo difundir sus valores ético


moral, vivir dentro de los cánones de una cultura a la que pertenece.

II.- Derecho a recibir una instrucción gratuita y eficiente, por lo menos hasta
el ciclo secundario y que pueda desenvolverse en la sociedad.

III.- Derecho a gozar de un Medio Ambiente ecológicamente sano y que


permita un desarrollo, que permita asegurar la calidad de vida y de sus
generaciones venideras.

IV.- Respeto al uso y manejo correcto de los símbolos y valores nacionales


y culturales del pueblo.

Artículo 43.

Para quienes usurpen funciones en su jurisdicción y no les competen realizar acciones, son nulos;
mientras la Ley no determine las especificas funciones y atribuciones.

Artículo 44.
Es fundamental preservar en la sociedad, los principios de orden ético moral,
considerando que el ser humano por naturaleza tiene defectos en su actitud y
conducta. Par esto el Estado comunitario promoverá la difusión ético moral, lo cual
será normada e implementada en el sistema educativo de la sociedad del sistema,
Suma Qamaña.

I.- Todo padre y madre o tutor esta en él deber de proteger, educar,


alimentar, vestir a sus hijos menores de edad, por su parte los hijos deben
socorrer cuando se encuentren en situaciones de peligro, enfermedad,
abandono, desamparo.

II.- Proteger los bienes e intereses públicos, es un deber ineludible de todas


las personas y las agrupaciones sociales que habitan en el territorio, por
ser considerados útiles y necesarios, es patrimonio de la sociedad
comunitaria.

III.- Todas las personas hábiles de la sociedad deberán cooperar con los
órganos del Estado Comunitario, las Regiones Autónomas y sus
instituciones, asegurando garantía de toda la sociedad.

IV.- Todas las personas y agrupaciones sociales deben contribuir al uso


sustentable de los recursos naturales, preservando el ecosistema y el
medio ambiente como un derecho inalienable para las generaciones
venideras.

V.- Los impuestos de carácter público es una obligación de las personas


hábiles y jurídicas, debiendo determinar una relación de los contribuyentes
que será en forma proporcional y progresiva según los casos.

VI.- Los impuestos municipales son obligaciones ineludibles, por lo que


todos los contribuyentes realizarán sus pagos por cada periodo.

VII- Las empresas y los súbditos de origen extranjero serán sometidos a las
disposiciones legales establecidas y vigentes en el país, sin que pueda
invocar su situación particular, ni puedan apelar reclamaciones
diplomáticas.

VIII.- Colaborar con los órganos del Estado Comunitario y las Regiones
Autónomas y la sociedad, en la preservación y seguridad social, económica
de la sociedad comunitaria.

IX.- Resguardar y proteger responsablemente, los bienes e intereses de la


comunidad y de toda la sociedad.

X.- Acatar y asumir responsablemente, para el cumplimiento de la


constitución y las leyes establecidas en el Estado Comunitario y las
Regiones Autónomas del Qullana-suyu “Bolivia”.
XI.- La declaración de los derechos y deberes fundamentales que proclama
esta Constitución será respetada por decisión soberana del pueblo y las
Autoridades del Estado Comunitario.

Artículo 45.

Las personas que hayan cometido delito grave, por sentencia judicial serán
condenadas a prisión perpetua y se declarará extinguido su dominio sobre los
bienes adquiridos mediante el enriquecimiento ilícito y por estar considerado como
deterioro moral de la persona.

I.- Se establece en el país, que la estructura interna y el funcionamiento de


las organizaciones sociales y gremiales de la sociedad estarán sujetos a la
orden legal y a los principios democráticos que dispone la ley.

II.- Prestar servicio social especial a la Nación, para la defensa y la


conservación de los recursos naturales y que el Estado disponga su uso
para el desarrollo sostenible.

III.- Los representantes de organizaciones laborales de la sociedad, por


derecho jurídico tienen todas las garantías para el desarrollo y el
cumplimiento de sus funciones conforme estipula la ley y constituir
organizaciones sin intervención. Para su reconocimiento es suficiente la
simple inscripción de un acta de constitución y su personalidad jurídica.

IV.- Para efectos tributarios o judiciales y para los casos de inspección,


vigilancia e intervención del Estado Comunitario y Regiones Autónomas,
podrá exigir la presentación de libros de contabilidad y demás documentos
en los términos que señale la ley.

CAPITULO VII

CIUDADANÍA Y SERVIDORES PUBLICOS

MARKANI, MARKARU PUNKUQT`IRINAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA
Artículo 46.

De la Nacionalidad: Son Qullanas de origen, aquellos nacidos en el territorio del


Estado Comunitario y aquellos nacidos en el extranjero de padre y madre Qullanas
(Boliviana) o viceversa.

I.- Son Qullanas “Bolivianos” por naturalización todos aquellos extranjeros


que residen y habiendo cumplido una función laboral por más de diez años
continuos y por voluntad propia declaran acceder y tomar su nacionalidad y
su residencia permanente en el Estado Comunitario, como Qullana o
“Boliviano”.

II.- Los Qullanas, hombres y mujeres casados con extranjeros no pierden la


nacionalidad. Los extranjeros hombres y mujeres casadas con
(Bolivianos/as), adquieren la nacionalidad Qullana, siempre y cuando tenga
su residencia en el país y que manifiesten su plena conformidad con todas
las normas establecidas en el país.

III.- Toda persona, hombre y mujer Qullana (boliviana) no pierden la nacionalidad, por adquirir otra
nacionalidad.

Artículo 47.

I.- De la ciudadanía: En concurrir a elector o elegible, a la formación o al


ejercicio de los poderes públicos y sociales.

II.- En el derecho a ejercer funciones públicas, salvo por excepciones


establecidas por ley.

III.- En el derecho a participar en la gestión de asuntos públicos en los


términos establecidos por ley.

Artículo 48.

I.- Los derechos de ciudadanía se suspenden: Por tomar armas o prestar


servicios en el ejército enemigo y por traición a la patria.

II.- Por defraudación de caudal público o quiebra fraudulenta declarada,


previa sentencia ejecutoria y condenatoria a pena corporal.

III.- Por aceptar funciones a gobiernos extranjeros, contrarios a los intereses


del Estado, sin el permiso del Consejo Supremo del Estrado, excepto a
cargos y misiones de los organizamos internacionales, universitarias,
culturales y otros de interés general de la nación.

Artículo 49.

De los funcionarios públicos: La administración pública de la Nación


debe servir con objetividad, imparcialidad y con transparencia a los
intereses de la sociedad, de acuerdo a los principios éticos de las personas
y de los instrumentos legales establecidos en el país.
I.- Todo servidor público tiene derecho al acceso a la función del Estado
Comunitario y las Regiones Autónomas en condiciones de igualdad, sin otro
requisito que la experiencia e idoneidad, así como a la estabilidad en la
carrera administrativa basado en la evaluación de su desempeño y
permanente capacitación. La ley deberá establecer los derechos y
obligaciones de los servidores y empleados de la administración pública.

II.- Ningún servidor público podrá ganar una remuneración mensual que sea
superior a la que percibe los Presidentes del Estado Comunitario.

III.- Todo servidor público, como también los particulares que administran
recursos públicos, sin excepción alguna, son responsables de dar cuenta
del uso de los recursos que les fueron confiados, asimismo de los
resultados de la gestión administrativa, del ejercicio de sus funciones y sus
consecuencias, en los términos y condiciones que establece la ley.

IV.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas son los únicos


responsables por los actos, omisiones y errores cometidos por las
autoridades y los servicios públicos que afecten a los bienes e intereses del
Estado y de las Regiones, salvo los casos de fuerza mayor.

TERCERA PARTE
CAPITULO I

LA ECONOMIA
QULLQI APNAQA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Articulo 50.

Para la transformación de la sociedad del Qullana-suyu “Bolivia” y el Estado Comunitario, la


economía es de vital importancia; considerando que actualmente la sociedad vive en un mundo
global de competencias en la producción y mercados donde las relaciones y condiciones sociales, son
reguladas precisamente por el Estado y que facilitará el desarrollo y la transformación social de todo
los sectores de la sociedad.

Artículo 51.

El desarrollo económico de las empresas públicas y privadas, la banca y


otros tipo de entidades financieras, será normada por el Estado
Comunitario, todo los recursos, bienes, utilidades, riqueza y otros aspectos
relacionado con la economía, estará sustentada sobre base de la
producción desarrollada por las organizaciones sociales afines del país, lo
que permitirá satisfacer las necesidades materiales mas vitales del ser
humano de la sociedad.

Artículo 52.

El Estado como un ente regulador asume la administración económica a


través del Banco Central y la instancia de recaudación financiera, asimismo
en el comercio con entidades, personas naturales y jurídicas, mediante los
aranceles aduaneras de importación y exportación de bienes de servicio y
utilidades, propiciando disposiciones que favorezcan a todo los sectores
sociales del país.

Artículo 53.

De acuerdo a las tradiciones culturales y socio económicos, en la región


andina la tierra, los animales, las plantas y todo los elementos naturales que
están en convivencia del ser humano, gozan de un respeto profundo y se
reverencia realizando ritos y ceremonias especiales, los mismos que esta
constitución reconoce como una economía ecológica:

I.- Las autoridades originarias son los encargados a garantizar el éxito de la


producción anual, quienes realizarán ceremonias y ofrendas especiales
para la producción, conmemorando al cosmos o Pacha.

II.- La base social de la economía andina estará sustentada sobre sistemas


de trabajo comunitario como es el Ayni, la Mink’a, la Phayna, el Chuqu,
Umaraqa, Jayma, Kayari, Waki, Achuqalla, Mit’a y otras formas sociales. En
cada Unidad de Producción regional y en sus respectivas Markas, las
entidades deberán garantizar la producción agrícola, ganadera, artesanal y
de recolección.

III.- En cada Unidad de Producción regional, los responsables de la


producción agrícola planificarán la distribución de tierras de Manta, en
porciones iguales, como en Aynuqa, Milja, Waki; entre otras formas de
distribución reciprocitaria, según la necesidad y capacidad de cada familia
que conforman las Panakas (familias) del Ayllu. Las tierras de Ayjarira
serán destinadas exclusivamente para el pastoreo de los ganados. A los
huérfanos y viudas se les confiere un trato especial en la atención del
gobierno comunitario.

IV.- Las Unidades de Producción distrital y regional, deberá asegurar la


autosuficiencia económica de cada familia, asimismo se almacenará los
excedentes en Pirwas y Qullqas, la misma que será controlada y regulada
por las autoridades administrativas locales de las Markas y sus Ayllus,
especialmente en periodos de crisis y de siniestros climáticos prolongados.

CAPITULO II
POLÍTICAS ECONOMICAS DEL ESTADO
QULLQI ASKI -APNAQA KAMACH-UTT’AWINAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 54.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas regularán mediante ley, el


ejercicio del comercio, la industria, cuando así lo requieran y con carácter
prioritario la seguridad o necesidad pública. En casos especiales asumirá la
dirección superior de la economía nacional, esta intervención ejercerá en forma de
control y de estímulo o de gestión directa.

I.- El Poder Ejecutivo podrá establecer monopolio fiscal para determinados


exportaciones con la aprobación legislativa del Consejo Supremo del
Estado, siempre que las necesidades del país así lo requieran.

II.- El Estado Comunitario determinará y regulará la política monetaria,


creará bancos oficiales de crédito como entidades autónomas, que
determinará subsidiarias departamentales y una ley reglamentará un
régimen bancario apropiado para garantizar su funcionamiento, con objeto
de mejorar las condiciones de la economía nacional.

III.- La programación del desarrollo económico se realizará en el ejercicio y


para la consolidación de la soberanía nacional. El Estado Comunitario
formulará periódicamente el plan general de desarrollo económico y social
de la nación cuya ejecución será obligatoria, el plan contempla el sector
estatal, social, mixto y privado de la economía nacional.

IV. - El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas impulsarán el procesamiento de la

manufactura nacional y la industrialización de materias primas provenientes de los recursos naturales

renovables y no renovables, con el fin de asimilar perfeccionar, crear e innovar tecnologías, generar

empleos y facilitar el crecimiento económico; de esta manera generar riqueza para el bienestar de la

sociedad.

V.- Por razones de soberanía política-económica y de estrategia nacional, la


totalidad de los recursos del Gas, Petróleo y sus acciones existentes en el
territorio, pertenecen al Estado Comunitario del Qullanasuyu (Bolivia).

VI.-Todas las empresas establecidas en el país se considerarán nacionales


y estarán sometidas a las leyes y autoridades del Estado Comunitario y las
Regiones Autónomas del Qullanasuyu (Bolivia). Asimismo se promoverá
acciones en el marco de la economía nacional e internacional, que
contribuyan a fomentar actividades para el desarrollo sostenible del país.

VII.- El Ministerio responsable de finanzas y el Banco Central y sus


subsidiarias regionales definirán la política fiscal monetaria, facilitando el
logro de los objetivos macroeconómicos. El Banco Central y sus
subsidiarias regionales, en el ejercicio de sus funciones estarán
subordinados a las disposiciones legales emanadas por el Poder Legislativo
y el Poder Ejecutivo para convalidar o financiar los planes y programas de
desarrollos sociales.

VIII.- El Poder Ejecutivo y el Banco Central y sus subsidiarias regionales


acordarán anualmente los objetivos finales del crecimiento económico y sus
connotaciones sociales, el balance externo y los efectos inflacionarios a la
política fiscal cambiaria y monetaria. Dicho acuerdo será firmado por el
Presidente del Banco Central, los Presidentes de las Subsidiarias
Regionales y el titular del Ministerio responsable de las Finanzas, en el
momento de la aprobación del Presupuesto por el Congreso Nacional. Es o
son de responsabilidad de los firmantes del acuerdo; para que las acciones
de política monetaria sean consistentes con s us objetivos.

IX.- El Estado Comunitaria y las Regiones Autónomas promoverán la


reconstitución de Unidades de Producción (ayllu) y protegerá la pequeña y
mediana industria, de cooperativas, las empresas familiares, microempresa
y cualquier otra forma de asociación comunitaria de trabajo y producción
sobre la propiedad colectiva.

X.- La artesanía e industrias manufacturas típicas de la Nación, gozarán de


protección especial de parte del Estado Comunitario y las Regiones
Autónomas, con el fin de preservar su autenticidad y obtendrán facilidades
crediticias, para promover su producción y comercialización.
XI.- El turismo es una actividad económica de interés nacional y prioritario
para el país; por lo que se planificará una estrategia de diversificación y
desarrollo sostenible por los Primer Ministros Regionales y sus autoridades
responsables. Dentro los fundamentos del régimen socioeconómico previsto
en esta Constitución, el Estado Comunitario y las Regiones Autónomas
dictarán medidas que garanticen su desarrollo y fortalecimiento de la
industria turística nacional.

XII.- La iniciativa privada recibirá el estímulo y cooperación del Estado


Comunitario y las Regiones Autónomas, siempre y cuando contribuya al
mejoramiento y desarrollo de la economía nacional.

XIII.- El latifundio es contrario a los intereses sociales del Estado


Comunitario y las Regiones Autónomas del país; por consiguiente, la ley
dispondrá normas para gravámenes tributarias especialmente de tierras
ociosas y establecerá medidas necesarias para su transformación en
unidades económicas productivas.

XIV.- No esta permitido la acumulación privada de poder económico en


grado tal que ponga en peligro la independencia económica del Estado
Comunitario y las Regiones Autónomas. No se reconoce ninguna forma de
monopolio privado en el país.

XV.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas deben promover y


defender la estabilidad económica, evitar la vulnerabilidad de la economía
popular y velar por la estabilidad monetaria para asegurar el bienestar
social de los habitantes de la nación.

XVI.- Será promulgada una ley para crear un fondo de estabilización


macroeconómica destinado a garantizar la estabilidad de los gastos del
Estado Comunitario y las Regiones Autónomas en los niveles nacional,
regional, municipal y local, frente a las fluctuaciones de los ingresos
ordinarios. Las reglas de funcionamiento del fondo tendrán como principios
básicos la eficiencia y equilibrio, sin discriminación alguna entre entidades
que aporten recursos.

CAPITULO III

REGIMEN ECONOMICO Y FINANCIERO


QULLQI-APNAQA ASKI CHIQANCHT’A

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 55.

La Economía del Estado Comunitario y las Regiones Autónomas está basada en


los principios democráticos de justicia social, que permita asegurar una producción
eficiente para lograr un desarrollo socio económico integral, equilibrado y
recíproco, establecido en el modelo de una Economía de Reciprocidad y
Economía de Intercambio que garantiza la seguridad económica del país.

I.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas, juntamente con la


iniciativa de las Entidades Organizadas de producción, promoverán el
desarrollo armónico de la economía nacional con el propósito de generar
fuentes de trabajo, con alto valor agregado nacional, que permita elevar el
nivel de vida de la población y fortalecer la soberanía económica del país;
garantizando un desarrollo sostenible y sólido.

II.- A través de la ley específica se promoverá una economía dinámica, estableciendo en el territorio
entidades socio productivas empresariales, funcionalmente descentralizadas, asegurando un desarrollo
económico sustentable, que permita generar el crecimiento cuantitativo de recursos, para una justa
distribución de utilidades.
III.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas se reservan el
derecho de promulgar una ley de políticas comerciales sostenible para
generar actividades económicas de empresas nacionales públicas,
comunitarias, sociales y mixtas. Las inversiones extranjeras estarán sujetas
a las mismas condiciones que la inversión nacional.

IV.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas promoverán


organizaciones productivas de las diferentes formas de economías vigentes
como la agrícola y pecuaria sostenible, como base de estrategia para el
desarrollo rural; mediante la dotación de tierras, obras de infraestructuras,
insumos, créditos, servicios de capacitación y asistencia técnica
permanente.

V.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas garantizan la


producción alimentaría, para este propósito se promulgará medidas de
orden financiero, comercial, transferencia de tecnologías, tenencia de tierra,
infraestructura, capacitación, asistencia técnica y otras que sean en
beneficio y necesarias para alcanzar niveles estratégicos de abastecimiento
y autosuficiencia productiva.

Artículo 56.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas regularán el comercio nacional


e internacional de productos procesados, ecológicos y naturales, previo realización
de convenios con empresas afines al comercio y consumo de los países que
desarrollan la economía continental y mundial.

I.- Los encargados y responsables para este efecto, desarrollarán todo el


proceso y una administración eficiente transparente en el comercio nacional
e internacional, los mismos que deberán coordinar con las instituciones y
organizaciones de producción, estableciendo un comercio alternativo de
Reciprocidad y Equilibrado entre los interese nacionales e internacional.

II.- El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas a través de las instituciones afines a la producción y
comercialización, desarrollarán una política económica diferente, lo cual permitirá regular una estabilidad
política en el ámbito geográfico y una verdadera paz social, expresada en una armonía de la sociedad
comunitaria.

Artículo 57.

El Estado Comunitario y las Regiones Autónomas regularán las economías


resultantes del encuentro de las dos formas originales de economía: la de
reciprocidad y la de intercambio, esta se define como una economía de interfase,
donde el proceso económico es la resultante del libre mercado y el prestigio de
reciprocidad. Esta forma y práctica intercultural de economía será regulada por
una ley expresa que considere los mercados no formales de la sociedad Nacional.

CAPITULO IV

BIENES NACIONALES

SUYUNA UTJIRI YÄNAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 58.

Son de dominio originario y de responsabilidad de las Regiones Autónomas y del


Estado Comunitario, el suelo y el subsuelo, con todas sus riquezas naturales
existentes, las aguas lacustre, fluviales, manantiales y medicinales, los salares, así
como los bosques, el espacio aéreo, los elementos y fuerzas físicas susceptibles
de aprovechamiento productivo y además los bienes que la ley les otorga esa
calidad de la (pachamama = pachamama).

Artículo 59.

Los bienes considerados patrimonio de las Regiones Autónomas, constituyen


propiedad pública inviolable, siendo un deber de todos los habitantes del territorio
nacional, respetarla y protegerla en toda circunstancia. En los casos en que los
bienes son de propiedad privada y se conviertan por disposición legal en bienes
de uso público, el dueño será indemnizado de acuerdo a ley.
I.- Pertenecen al Patrimonio de las Regiones Autónomas, los grupos
mineros nacionalizados como una de las bases para el desarrollo y la
diversificación de la economía de las regiones; por tanto, no podrán ser
transferidos o adjudicados a empresas privadas extranjeras, por ningún
título. La dirección y administración de la industria minera Regional estará a
cargo de una entidad autárquica con atribuciones determinada y establecida
por normas legales.

II.- Los yacimientos petrolíferos, gasíferos y otros no renovables son del


dominio directo, inalienable e imprescriptible del Estado Comunitario y no
podrán ser conferidos ni transferidos bajo ninguna concesión ó contrato a
las empresas privadas, especialmente extranjeras; porque, afectan y
atentan a los intereses de la nación.

III.- La exploración, la explotación, sus derivados, la comercialización y el


transporte del gas y el petróleo corresponden al Estado Comunitario. Este
derecho lo ejercerá mediante las entidades autárquicas o a través de
concesiones y contratos por tiempo limitados a instituciones que beneficien
utilidades en favor de los habitantes del país en por centaje, conforme
dictamine la ley.
IV.- La promoción y desarrollo de la energía nuclear es atribución exclusiva
del Estado Comunitario.
CAPITULO V

RENTAS Y PRESUPUESTO
QAWQHASA QULLQI TANTATA, QAWQHASA QULLQI WAKT’AYASI

DISPOSICIONES GE NERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 60.

Corresponde al Poder Ejecutivo, la elaboración del Proyecto de Presupuesto


General de la Nación y al Poder legislativo su análisis, modificación, rechazo o
aprobación.

I.- El Presupuesto General del Estado Comunitario y las Regiones


Autónomas, tendrá carácter anual y contendrá la totalidad de las inversiones
de ingresos y egresos del sector público, deberán estar incluidas las
entidades autónomas y empresas estatales y privadas.

II.- El Poder Ejecutivo debe realizar consultas presupuestarias con las


diferentes dependencias y entidades del Estado Comunitario en
coordinación con las Regiones Autónomas. La Comisión económica del
Poder Legislativo participará en dichas consultas.

III.- En el presupuesto elaborado por el Poder Ejecutivo se presentará para


su consideración al Poder Legislativo; dos meses antes de la expiración
presupuestaria del año fiscal.

IV.- El Poder Legislativo podrá eliminar o reducir las partidas de los egresos
previstos en el proyecto de Presupuesto General del Estado Comunitario y
las Regiones Autónomas, salvo las destinadas al servicio de la deuda
pública, al cumplimiento de las demás obligaciones contraídas por el Estado
Comunitario y las Regiones Autónomas y financiamiento de las inversiones
públicas, previamente autorizadas por Ley.

V.- El Poder Legislativo no podrá aumentar a ninguna de las erogaciones previstas en el proyecto del

Presupuesto o incluir una nueva erogación de gastos sin la aprobación del Consejo de Ministros, ni

aumentar el cálculo de los ingresos, sin el consentimiento favorable del Contralor General del Estado

Comunitario de Bolivia.
VI.- Si no existe conformidad y se eleva el cálculo de los ingresos o se
elimina, o disminuye alguna de las partidas de los egresos; el Poder
Legislativo podrá aplicar cantidades disponibles a otros gastos o
inversiones, siempre con la aprobación del Consejo de Ministros.

VII.- Si el Poder Legislativo rechaza el proyecto de Presupuesto General del


Estado Comunitario y las Regiones Autónomas, se considera
automáticamente prorrogado hasta que se apruebe el nuevo presupuesto y
también automáticamente serán aprobadas las partidas previstas en el
proyecto del Presupuesto rechazado respecto al servicio de la deuda pública
y cumplimiento de las demás obligaciones contraídas por el Estado
Comunitario, las Regiones Autónomas y el financiamiento de las inversiones
públicas previamente autorizadas por ley.

Artículo 61.

Cualquier crédito suplementario o extraordinario referente al Presupuesto


vigente, será solicitado por el Poder Ejecutivo y aprobado por el Poder
Legislativo en la forma que señale y determine la Ley.

Artículo 62.

El Poder Legislativo no podrá expedir leyes que deroguen o modifiquen los


ingresos comprendidos en el Presupuesto, sin que al mismo tiempo
establezca nuevas rentas sustitutivas o aumente las existentes, previo
informe de la Contraloría General del Estado Comunitario y las Regiones
Autónomas, sobre la efectividad fiscal de las mismas.

I.- No podrá hacerse ningún gasto público que no haya sido autorizado, de
acuerdo con la Constitución o la Ley. Asimismo, no se podrá transferir
ningún crédito a un objeto no previsto en el respectivo Presupuesto General
del Estado Comunitario y las Regiones Autónomas.

II.- Todas los Ingresos y Egresos del Tesoro Público deben estar incluidos y
autorizados en el presupuesto respectivo. No se percibirán entradas por
impuestos que la Ley no haya establecido ni se pagarán gastos no
previstos en el Presupuesto.

III.- El Presupuesto General del Estado Comunitario se constituye en el ámbito nacional de


los aportes de acuerdo a ley de las Regiones Autónomas. En el ámbito regional y municipal
será distribuido de acuerdo a sus ingresos propios; los cuales serán invertidos
independientemente y conforme a los Planes Operativos Anuales, destinados al desarrollo
económico y social del país.

IV.- Los recursos generados en las Regiones y sus respectivas instituciones que se
recaudan fondos, como las policías, los judiciales, las universidades, los retenes camineras
y otros, serán centralizadas en el Tesoro General Regional (TGR).
V.- Las entidades autónomas y autárquicas del país, deberán presentar anualmente al
Poder Legislativo la cuenta de sus ingresos y egresos, acompañado de un informe oficial
de la Contraloría General del Estado Comunitario, si estas son en el ámbito nacional o a
las Contralorías Regionales, si estas corresponden al nivel regional y municipal.

CAPITULO VI

CONTRALORÍA NACIONAL Y REGIONALES


SUYUNA, WAMANINA, QULLQI-APNAQATA IÑJIRI

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 63.

I.- La Contraloría General del Estado Comunitario (CGEC) y las


Contralorías Generales Regionales (CGR) son órganos rectores e
impulsores del sistema económico financiero del Estado Comunitario y las
Regiones Autónomas por cada gestión anual, vela por el cumplimiento,
eficaz y transparente de las operaciones del sector público y privado.
Norman los contratos, concesiones y cargos del Estado y beneficios
públicos que otorga el Estado Comunitario y de la s Regiones Autónomas
respectivamente.

II.- La ley determina las atribuciones y responsabilidades del Contralor


General del Estado Comunitario y de los Contralores Generales Regionales
y los servidores públicos de estas dependencias. Ningún funcionario de la
Contraloría General del Estado Comunitario y de las Contralorías Generales
Regionales, participarán en las direcciones de entidades centralizadas o
descentralizadas, públicas o privadas, ni percibirá emolumentos de dichos
entidades.

III.- Para ocupar el cargo de Contralor General del Estado Comunitario o de


Contralores Generales Regionales se requieren profesionales en ciencias
económicas, con más de cinco años de desempeño en funciones de
responsabilidad económica o afines, ser mayor de cuarenta años, nacido y
con residencia en el territorio nacional o en la jurisdicción territorial del
Estado Comunitario y las Regiones Autónomas, no haber sido condenado
judicialmente, por razones de delito cometido en entidades privadas, mixtas
o en la administración p ública.

IV.- El Contralor General del Estado Comunitario depende directamente de


los Presidentes del estado Comunitario y los Contralores Generales
Regionales dependerán de los Primer Ministros Regionales. Estas
autoridades serán nombradas por terna presentada por los consejos
regionales al Consejo Supremo del Estado Comunitario. Su nombramiento
será por dos tercios del total de sus miembros y desempeñará sus
funciones por un periodo de cinco años.

V.- El Contralor del Estado Comunitario informará a los Presidentes del


Estado y al Poder Legislativo, en cambio los Contralores Regionales
informarán a los Primer Ministros Regionales y al pleno del Consejo
Comunitario Regional.

VI.- La Contraloría General del Estado Comunitario y las Regionales


deberán coordinar sus actividades, conforme señala la Ley y cumplirán las
siguientes funciones:

a) Verificar la eficacia de las normas institucionales, la ejecución de planes


y programas operativos financieros, obtener información exacta sobre los
resultados y logros alcanzados durante la gestión administrativa.

b) Fiscalizar, regular, controlar y evaluar todo el manejo de fondos y otros


bienes públicos de la gestión que la persona tiene a su cargo, a fin de que
realicen con responsabilidad, conforme establece la Ley.

c) La Contraloría General del estado Comunitario y las Contralorías


Regionales determinarán casos en que ejerza tanto el control previo, como
el posterior, sobre los actos del manejo económico y cuando se concluya
funciones referentes al manejo económico del Estado Comunitario.

d) Examinar, intervenir y fenecer las cuentas de los funcionarios públicos,


entidades o personas que administren, manejen o custodien fondos u otros
bienes públicos. En casos que sean descubiertas las infracciones a la
normativa económica; las penalidades corresponden a las normas jurídicas
de tribunales penales ordinarios establecidas.

e) Realizar inspecciones e investigaciones para determinar la corrección o


incorrección de las operaciones que afecten a los patrimonios públicos; y en
caso de infracción, presentar las denuncias a las autoridades
correspondientes para su correspondiente sanción.

f) Recabar informe de los funcionarios públicos, sobre la gestión fiscal de


las dependencias públicas, nacionales, regionales y municipales, de las
empresas estatales. Y de las entidades privadas a solicitud de partes.

g) Establecer y promover la adopción de las medidas necesarias, para que


se hagan efectivo los créditos a favor de las entidades públicas del país.
h) Demandar la declaratoria de inconstitucionalidad o de ilegalidad, según
las leyes vigentes a actos que violen a esta Constitución Política del Estado
o a hechos que afecten al patrimonio estatal.

i) Establecer los métodos de contabilidad de las dependencias públicas y


privadas, conforme señala en la norma de la contraloría.

j) Informar al Poder Legislativo y al Poder Ejecutivo, sobre el estado


financiero de la Administración Pública, tanto nacional como regional y
emitir opinión sobre la vialidad y conveniencia de la expedición de créditos
suplementarios o extraordinarios.

k) Presentar, el informe anual de actividades realizadas al Poder Ejecutivo y


al Poder Legislativo, en el caso de la Contralor General del Estado
Comunitario CGEC y en caso de las Contralor General Regional CGR a la
máxima autoridad Regional y al Consejo Comunitario Regional, para su
consideración y ajustes necesarios.

Artículo 64.

El Poder Legislativo, mediante sus comisiones tendrá amplia facultad de


realizar la fiscalización de la Contraloría General del Estado Comunitario y
las Contralorías Generales Regionales.

CUARTA PARTE
CAPITULO I

DIVISIÓN POLÍTICA TERRITORIAL


AKAPACHA MARKA-APNAQA URAQI, JALJANUQAWI

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 65.

La División Político Administrativa del Territorio estará regulada por la Ley


Orgánica que garantice la descentralización del sistema administrativo de cada
Unidad Política Administrativa de las regiones autónomas. Dicha ley dispondrá un
régimen especial de subdivisión territorial en Alaxsaya y Maxasaya, especialmente
en áreas territoriales andinas, cuya vigencia queda supeditada a la realización de
un referendo aprobatorio en las regiones donde sea necesario dicha organización.

I.- El Territorio Nacional esta organizado en Unidades Político


Administrativo UPAs, constituido por dos macro regiones, Norte y Sur; cada
uno comparte el territorio entre Occidente y Oriente. Los cuales están
definidos por territorios culturales de la Composición Política Administrativa
Nacional, que esta conformado por cuatro regiones autónomas.

II.- Las regiones autónomas comparten el territorio en áreas espaciales de


alaxsaya y maxasaya “abajo y arriba”, lo cual permite y facilitará hacer una
competencia equilibrada en el desarrollo socio económico de las regiones
que comprende de la siguiente forma.

III.- La División Política Administrativa del territorio está determinada en las


siguientes categorías; a nivel Nacional, Qullana-suyu “Bolivia” con su Marka
o Capital; a nivel Regional, Wamani con su Marka; a nivel Distrital, Laya con
su Marka; a nivel Comunal, Ayllu con su Marka y las Metrópolis (área
urbana), Marka “ciudad”; asignándoles la totalidad o parte de la superficie
territorial que corresponde históricamente a cada región.

Región autónoma del área lingüística Aymara Bilingüe.


Región autónoma del área lingüística Quechua Bilingüe.
Región autónoma del área lingüística Amazonica Plurilingüe.
Región autónoma del área lingüística Chiquitano -Guaraní Plurilingüe.

IV.- Las área de las metrópolis "ciudades” con más de (100.000) Habitantes
tienen un régimen autónomo especial, con gobiernos de “Municipios” los
cuales tienen constituidos por distritos o ayllus urbanos de alaxsaya y
maxasaya, respectivamente.

V.- Las Unidades Político Administrativo (UPAs) menores, mantienen la cohesión social, cultural y
económica territorial como Ayllus o comunidades particularmente en el área andina.

VI.- La Ciudad de La Paz (Chuqi-apu marka) es la capital del Estado Comunitario y es el asiento de los
órganos del Poder Político Administrativo del País. Lo dispuesto en este artículo no impide el ejercicio del
Poder Nacional en otros lugares del País, por declaraciones de excepción y por interés de la nación
comunitaria.

VII.- Las entidades territoriales establecidas por ley, gozan de autonomía para la gestión de sus intereses
socioeconómicos en el marco de la Constitución. En tal virtud tendrán los siguientes derechos:

1. Gobernado por autoridades propias.


2. Ejercer competencias que les correspondan.
3. Administrar los recursos y establecer tributos necesarios para el
ejercicio de sus funciones.
4. Participar de los recursos del T.G.N. según el número de
habitantes censados en las regiones.
5. Ejercer una coordinación política administrativa con
representación horizontal de la población.
VIII.- La ley Orgánica de Unidades Políticas Administrativas y Ordenamiento
Territorial establecerá la distribución de competencias entre el Estado
Comunitario y las Autonomías Territoriales. Las competencias atribuidas a los
distintos niveles territoriales serán ejercidas conforme a los principios de
coordinación como establece en la ley.

IX.- Los municipios ubicados en zonas fronterizas podrán firmar convenios de


reciprocidad con entidades territoriales de un país vecino, de igual categoría,
programas de cooperación e integración, dirigidos a fomentar el desarrollo
comunitario, la prestación de servicios públicos y la preservación del medio
ambiente.

QUINTA PARTE
CAPITULO I

ESTRUCTURA POLÍTICO DEL ESTADO

QHAPHAQA UTT’AYA MARKÄPNAQA

DISPOSICIONES GENERALES

TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 66.

La estructura del Sistema Político Administrativo del Estado Comunitario,


constituyen los Poderes Legislativo, Ejecutivo, Judicial y Control Estatal, a
nivel Nacional y Regional. A nivel Municipal se constituyen los Gobiernos
Municipales, Distrital y Comunal sus respectivos Consejos Comunitarios.

I.- Esta Constitución (jach’a kamachi - utt’a) definirá las atribuciones de estas
instancias orgánicas del Estado y las correspondientes leyes (kamachi -naka)
definirán para el ejercicio pleno de los dichos Poderes.

CAPITULO II

CONGRESO DEL PODER LEGISLATIVO


QHAPHAQA KAMACHI-LURA ULAKA

DISPOSICIONES GENERALES

TAQPACHA WAKIYATA
Artículo 67.

El Poder Legislativo reside en el Congreso Nacional, constituido por el Consejo Supremo del Estado

Comunitario y los representantes de los Cuatro Consejos Regionales Autónomas; quienes conforman en

una instancia jurídica UNICAMARAL.

El Consejo Supremo del Estado y los representantes de las cuatro regiones autónomas conforman 130

miembros elegidos por la representación de las Entidades Orgánicas de acuerdo a los resultados de la

elección. La representación de sus miembros será, por área lingüística territorial organizado por

circunscripción del Estado Comunitario, como determina la constitución y la ley electoral.

I.- El Consejo Supremo del Estado esta conformado por 25 miembros, más
105 representantes de las Cuatro Consejos Regionales Autónomas del
Poder Legislativo, total de representantes en el Poder Legislativo
constituyen 130 miembros, quienes representan a las Entidades orgánicas
del territorio de las cuatro regiones autónomas.

II.- Los miembros del Poder Legislativo se reunirán en el Congreso Nacional por norma y sin previa
convocatoria en la Sede del Gobierno, en sesiones durante 10 meses al año, dividido en dos legislaturas
ordinarias de 5 meses. Asimismo se podrá reunir en Congreso Ordinario y Extraordinario o cuando sea
convocada por el Consejo del Poder Ejecutivo, donde serán considerados asuntos de interés Público del
Estado Comunitario.

III.- El Congreso Nacional del Poder Legislativo tiene como Sede oficial, la
ciudad de Chuqi-apu Marka (La Paz) y el periodo legislativo es de 6 años
calendarios.

IV.- Los legisladores gozarán de inmunidad parlamentaria durante el


período Legislativo y cinco días antes de ejercer ese cargo. No podrán ser
perseguidos ni detenidos por causas penales o policías, sin previa
autorización del Congreso Nacional.

Artículo 68.

El Poder Legislativo tiene la facultad de exigir “informes orales o escritos” a


Ministros de Estado, Viceministros, Directores Generales o Gerentes de las
entidades autónomas, organismos descentralizados, empresas industriales o
comerciales del Estado, así como a los de empresas mixtas para tener conocimiento
del estado de sus funciones y actos de su administración.

Artículo 69.
Convocar a Referéndum Popular, para realizar consultas sobre asuntos de interés
nacional, a solicitud de las organizaciones cívicas y populares, previo acuerdo de la
mayoría del Consejo Supremo del Estado. El resultado del Referéndum Popular
tendrá carácter determinante y su cumplimiento es obligatorio.

Artículo 70.

Son atribuciones financieras del Poder Legislativo, donde el Consejo Supremo del
Estado es la instancia de decisión final que emana recomendaciones para la toma
de decisiones Políticas del Estado Comunitario.

I.- Aprobar el Presupuesto General del Estado y de las regiones


Autónomas, para cada gestión administrativa, previa presentación del
proyectos financieros por el Poder Ejecutivo del Estado y de los Poderes
Ejecutivos de las regiones Autónomas, como establece la presente
Constitución.

II.- Autorizar la aprobación de créditos nacionales e internacionales, la


prestación de garantías que comprometan ingresos públicos o el patrimonio
del Estado Comunitario de las Regiones Autónomas, los Municipios y
Universidades Públicas del Estado.

III.- Evaluar y aprobar el manejo y la cuenta del Tesoro General del Estado Comunitario presentado

por el Poder Ejecutivo, en presencia del Contralor General del Estado Comunitario.

IV.-Aprobar o rechazar la enajenación de bienes nacionales, regionales, municipales


y universitarios y todo lo que sea de domino del Estado Comunitario, siempre que
sea favorable a los habitantes del país.

V.- Normar la regulación de los decretos normativos relativos a la


celebración de contratos en los cuales sea parte o tenga interés el Estado o
algunas de sus entidades o empresas; aprobar o rechazar los contratos de
los cuales sea parte el Estado o alguna de sus entidades o empresas
estatales, mixtas o privadas.

Artículo 71.

Son atribuciones administrativas del Poder Legislativo, donde el Consejo Supremo del
Estado es la instancia de decisión final que emana recomendaciones para la toma de
decisión:

I.- Desempeñar actividades parlamentarias durante el ejercicio de sus funciones


establecidos en esta Constitución, con la presencia de mayoría absoluta de sus
miembros lo cual facilitará una gestión eficiente.
II.- Aceptar o rechazar la renuncia de los miembros del Consejo Supremo
del Estado y de los Presidentes de la República.

III.- Emitir votos de censura contra los Ministros de Estado cuando éstos, a
juicio del Consejo Supremo del Estado, sean responsables de actos
atentatorios, ilegales o errores gra ves que hayan causado daños a los
intereses del Estado.

IV.- El mismo será aprobado por el 50 más 1 % de los miembros del


Consejo Supremo del Estado. Para que el voto de censura sea público, este
deberá ser por escrito y publicado en los seis días después de ser aprobado
el voto de censura.

V.- Podrán ser elegidos entre los miembros del Consejo Supremo del
Estado para la Presidencia de la República y no pueden ser designados
para ocupar cargos de Ministros de Estado o Diplomáticos.

VI.- Para desempeñar cargos Diplomáticos y Ministros de Estado, las


Entidades Orgánicas de las cuatro regiones autónomas del territorio,
avalado por el Consejo Regional correspondiente, enviaran una terna al
Consejo Supremo del Estado, conforme determina el sistema de rotación
territorial para que sea admitido en dichos cargos

VII.- Aprobar o rechazar por dos tercios de votos del Consejo Supremo del
Estado, conforme a las disposiciones de esta Constitución, el nombramiento
de los Ministros de la Corte Suprema de Justicia, de los Magistrados del
Tribunal Constitucional, el Fiscal General del Estado Comunitario y sus
miembros, Auditor General del Estado Comunitario, Vocales de la Corte
Electoral del Estado Comunitario, la Defensoría del Pueblo y el Procurador
General del Esta do Comunitario de la Nación.

VIII.- Conceder permiso al Presidente de la Nación, para cumplir misiones


especiales del Estado Comunitario, cuando solicite ausentarse del territorio
nacional, conforme a lo que dispone esta Constitución.

IX.- Elegir las Comisiones para el Congreso del Poder Legislativo de forma
interna y mediante un sistema que garantice la representación proporcional
de la minoría.

X.- Legislar normas generales y específicas para el funcionamiento y control


del Consejo del Poder Ejecutivo, las entidades autónomas, las empresas
estatales y mixtas, para que el Estado tenga su control administrativo
financiero o accionario, con el asesoramiento para que los responsables
obtengan los siguientes efectos: negociar o contratar empréstitos, organizar
el crédito público, reconocer la deuda nacional y arreglar su servicio; fijar y
modificar aranceles, tasas y demás disposiciones que conciernen al
régimen de las aduanas.
XI. - Aceptar o rechazar los asensos jerárquicos de los miembros del Servicio de Seguridad (SS)
Estatal y Regionales (Policía) propuestos por el Poder Ejecutivo y los Primer Ministros de la
Regiones Autónomas.

XII.- Propiciar la revisión, la derogación, abrogación, modificación de


Decretos y Leyes para el beneficio de la Nación.

XIII.- Nombrar al Contralor General del Estado Comunitario, a los Miembros


de la Corte Electoral del Estado Comunitario y los subalternos.

XIV.- Determinar el número de efectivos que contará el Servicio de


Seguridad Nacional y Regional (Policía).

XV.- Definir estrategias para un Ordenamiento Territorial adecuado y las


Unidades Político Administrativas “UPAs”.
XVI.- Expedir la Ley General de Sueldos y Salarios en cuatro escalas,
previa concertación con las instancias de producción y entidades públicas
del estado.

XVII.- Revisar, aprobar o rechazar los tratados y convenios internacionales celebrados en el presente

y de anteriores gestiones del Consejo del Poder Ejecutivo.

XVIII.- Determinar el procesamiento, según sea la pena del individuo o de


grupo, para considerar y decretar amnistía por sedición, alzamiento y delitos
políticos contrarios a los intereses del pueblo.

XIX.- Establecer impuestos, contribuciones nacionales y regionales; regular


normas para las rentas y utilidades que permita potenciar la economía del
país.

XX.- Determinar una ley expresa, para acuñar monedas y billetes, asignado
el valor, forma, tipo y denominación del uso de la moneda nacional.
XXI.- Definir programas y planes para el desarrollo que el Consejo del Poder
Ejecutivo presenta al Congreso del Poder Legislativo.

Artículo 72.

Son atribuciones jurídicas del Poder Legislativo, donde el Consejo Supremo del
Estado es la instancia de decisión final que emana recomendaciones para la toma
de decisión:

I.- Autorizar el enjuiciamiento de los Presidentes de la República,


Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, Procurador General del
Estado Comunitario y a los Ministros del Estado por delitos considerados
dolosos para el Estado Nacional y las Regiones Autónomas según se
establece en esta Constitución:

II.- Las acusaciones o denuncias que se presenten contra los Presidentes del Estado Comunitario, los

Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, Procurador General del Estado Comunitario y

Ministros de Estado por los actos ejecutados en el ejercicio de sus funciones en el perjuicio del

correcto funcionamiento del poder público o violación a la Constitución o las Leyes vigentes una vez

comprobado indicios de veracidad, serán juzgados ante tribunal competente.

III.- Por otra parte, acusaciones o denuncias que se presenten contra los
miembros del Consejo Supremo del Poder Estado y si hay lugar para la
formación de causa, se autorizará el enjuiciamiento, por el delito que
específicamente se le impute ante tribunal competente.

Artículo 73.

Son restricciones de ambas instancias del Poder Legislativo, las siguientes:

I.- Autorizar los gastos del Tesoro General del Estado Comunitario para las
indemnizaciones, becas, pensiones, jubilaciones o cualquier erogación que
no hayan sido pre viamente respaldadas y en conformidad a Leyes vigentes.

II.- Expedir Leyes que puedan contradecir la letra o el espíritu de esta


Constitución.

III.- Inmiscuirse por intermedio de resoluciones en asuntos que son


competencias de otros Poderes del Estado.

IV.- Decretar actos de proscripción o persecución contra personas o


corporaciones.

V.- Incitar a funcionarios públicos para que adopten medidas que vayan en
contra de la seguridad del Estado.

VI.- Hacer nombramientos del personal del sector público que no estén
considerados en las atribuciones de esta Constitución.

VII.- Exigir al Consejo del Poder Ejecutivo comunicación de las


instrucciones dadas a los Agentes Diplomáticos o informes sobre
negociaciones que tengan carácter reservado.
VIII.- Autorizar partidas y programas no previstas en el Presupuesto
General del Estado Comunitario, salvo en casos de suma emergencia, el
Consejo Supremo del Estado tendrá dicha atribución por una sola vez.

IX.- Demandas de inhabilidad de elegidos y nulidad de elecciones sólo podrán ser interpuestas ante la
Corte Electoral del Estado Comunitario, cuyo fallo es irrevisable por el Congreso Nacional del Poder
Legislativo.

X.- No podrán hacer contratos con organismos, instituciones o empresas


vinculados al Estado Nacional, Regional, Distrital y Comunal “Municipio”.
La contraposición a esta prohibición, significa la pérdida inmediata del
mandato popular mediante una resolución de la Corte Suprema de Justicia
y a requerimiento del juez competente conforme a ley.

XI.- No podrán ser elegidos los funcionarios y empleados públicos; los


miembros del Servicio de Seguridad Nacional y Regional activo, los
contratistas de obras y servicios públicos, los administradores, gerentes y
directores de empresas nacionales, mixtas o privadas sin antes dejar el
cargo público.

CAPITULO III

CONSEJO SUPREMO DEL ESTADO


QULLANA-SUYU APU ULAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 74.

El Consejo Supremo del Estado Comunitario (Qhaphaqa apu ulaka) es la instancia de mayor jerarquía del

Poder Legislativo o del Congreso Nacional. Es la instancia superior del Estado Qullana-suyu, lo cual

representa y expresa la voluntad soberana de toda la Nación Comunitaria.

Artículo 75.

La gestión del Consejo Supremo del Estado Comunitario será de 6 años,


sin posibilidad a ser reelegidos por otra gestión continua.

Artículo 76.
El Consejo Supremo del Estado Comunitario, (Qhaphaqa apu ulaka); son
elegidos por voto nominal directo de los miembros que conforman los
Consejos Comunitarios Regionales; el Consejo Supremo del Estado estará
conformado por 25 representantes de acuerdo al número de habitantes del
área lingüística territorial; su funcionamiento es de carácter orgánico y
colectivo, conforme a las atribuciones conferidas por esta constitución.

Artículo 77.

Los Representantes del Consejo Supremo del Estado Comunitario estarán


constituidos, conforme al número de habitantes de cada área lingüística territorial;
es decir, por cada Región Autónoma y será de la siguiente manera:

Región No. I: Área Lingüística territorial Aymara Bilingüe y centros urbanos


(Ciudades –Estado):

Aymara Norte (La Paz) 3 representantes


Aymara Centro (Oruro) 1 representante
Aymara Sur (Potosí y Cochabamba) 1 representante
Centro Urbanos (La Paz, Alto, Oruro) 3 representantes

Región No. II: Área lingüística territorial Quechua Bilingüe y centros urbanos (Ciudades-Estado):

Quechua (Cochabamba) 2 representantes


Quechua (Chuquisaca) 1 representantes
Quechua (Potosí, Tarija) 1 representantes
Centros Urbanos (Coch.; Pot.; Chuq y Tarija) 4 representantes

Región No. III: Área lingüística territorial Chiquitano-Guaraní Plurilingüe y centros


urbanos (Ciudades-Estado):

Santa Cruz (plurilingüe) 1 representante


Guarani Chiquitano 1 representante
Región rural Sta. Cruz 1 representante
Centros urbanos (Sta. Cruz) 2 representantes

Región No. IV: Área lingüística territorial Amazónica Plurilingüe y centros urbanos
(Ciudades-Estado):

Región Plurilingüe Amazónica 1 representante


Centros Urbanos (Trind.; Cobija y Riberl.) 3 representantes

Artículo 78.
Las atribuciones administrativas del “Consejo Supremo del Estado Comunitario”
son:

I.- Designar a los Ministros de Estado del Consejo del Poder Ejecutivo.

II.- Representar al Estado y al Gobierno, conducir de manera coordinada el


sistema político administrativo del Estado en beneficio de todo el País.

III.- Aprobar el régimen interno para normar las funciones del Consejo
Supremo del Estado Comunitario.

IV. - Organizar y establecer las instancias y dependencias de los Poderes en el territorio nacional del
Qullanasuyu.

V.- Organizar y preparar sesiones Extraordinarias del Congreso del Poder


Legislativo.

VI.- Impartir instrucciones de carácter general a los Tribunales a través del


Consejo de la Corte Suprema de Justicia y sus dependencias.

VII.- Conceder indultos e impartir instrucciones precisas al Fiscal General


del Estado Comunitario.

VIII.- Ratificar o modificar tratados internacionales y la propuesta para la


designación de los representantes diplomáticos por el Presidente del
Estado Comunitario.
IX.- Revocar las disposiciones de los Presidentes del Estado Comunitario
de Qullana-suyu “Bolivia” y del Consejo de Ministros, siempre y cuando no
se ajusten a la Constitución y a las leyes vigentes en el país

X.- Determinar la estructura de la administración estatal, mediante la


creación de Entidades Estatales, Autónomas, Mixtas, Empresas del Estado
y demás establecimientos públicos para distribuir entre ellos, las funciones
con la finalidad de asegurar la eficacia administrativa del país.

XI.- Organizar los servicios públicos conforme dictamine la Constitución;


expedir o autorizar los estatutos de las sociedades de economía mixta y las
Leyes orgánicas de las empresas industriales o comerciales del Estado, así
como dictar normas correspondientes para su funcionamiento.

XII.- Definir el número de efectivos para el Servicio de Seguridad Nacional y


Regionales (SS) “Policía” conforme establece en esta Constitución.

XIII.- Las decisiones del Consejo Supremo del Estado Comunitario serán de
prioridad por consenso o por lo menos con dos tercios de votación total.
Artículo 79.

Las Leyes tienen su origen en el Congreso del Poder Legislativo a


proposición de uno o más miembros, como también del Consejo del Poder
Ejecutivo. Los proyectos de ley serán objeto de análisis y debidamente
sustentadas en los debates por el Ministro del ramo. Los proyectos de ley
serán aprobados por voto mayoritario de los miembros del Consejo
Supremo del Estado.

Artículo 80.

Sus atribuciones legislativas son:

I.- Promulgar los Decretos Leyes, en sesiones periódicas del Poder


Legislativo.

I.- Todo Decreto-Ley que expida el Consejo del Poder Ejecutivo en el


ejercicio de las facultades conferidas, deberán ser sometidas al Congreso
del Poder Legislativo para su consideración, aprobación y promulgación.

II.- Ningún proyecto de Ley es válido, si no ha sido aprobado por el


Congreso del Poder Legislativo en dos debates, en días distintos y
sancionado por el Consejo del Poder Ejecutivo en la forma que dispone
esta Constitución.

III.- Todo proyecto de Ley que no hubiere sido presentado por una de las
comisiones del legislativo, pasará a la Presidencia del Consejo Supremo del
Estado para su análisis y estudio.

IV.- Un proyecto de Ley aprobado, pasará al Consejo del Poder Ejecutivo


para su promulgación, si hubiera alguna observación, este será devuelto al
Poder Legislativo.

V.- Proyecto de Ley objetado total o parcialmente por el Consejo del Poder
Ejecutivo, volverá al Congreso del Poder Legislativo, para un último debate.

VI.- El Consejo del Poder Ejecutivo dispondrá de un término máximo de


treinta días hábiles para devolver al Legislativo las objeciones de cualquier
proyecto ley, una vez transcurrido este término y sí el mismo no fue
devuelto, no podrá ser sancionado ni promulgado.

VII.- Si las enmiendas del proyecto son aceptadas por el Consejo del Poder
Legislativo y aprobadas por dos tercios de los miembros del Consejo
Supremo del Estado, el Consejo del Poder Ejecutivo estará facultado para
sancionar y promulgar dicha ley. Si no obtuviese aprobación con número
requerido de Legisladores el proyecto es rechazado.
VIII.- Si el Consejo del Poder Ejecutivo no ha sancionado y promulgado las
Leyes aprobadas por el legislativo, en términos y condiciones que este
Título establece, el Presidente del Consejo Supremo del Estado tiene la
potestad de sancionar y promulgar las mismas.

IX.- Cuando el Consejo del Poder Ejecutivo objeta un pro yecto por cualquier
razón y el Poder Legislativo insiste su promulgación por mayoría, este
pasará a la Corte Suprema de Justicia para que decida sobre su
constitucionalidad o inconstitucionalidad. La Corte declara el fallo
constitucional del proyecto y obliga al Consejo del Poder Ejecutivo a
sancionar y promulgar dicha ley.

X.- Las leyes serán promulgadas dentro de seis días hábiles y el plazo
comenzará a regir desde su promulgación, salvo que se establezca de
mutuo acuerdo una fecha posterior. La promulg ación extemporánea de una
Ley no determina su inconstitucionalidad.

XI.- Los proyectos de Ley que queden pendientes en un período de


sesiones, serán considerados como proyectos nuevos en la próxima gestión
administrativa.

Artículo 81.

Las atribuciones del “Presidente” del Consejo Supremo del Estado son las
siguientes:

I.- Convocar y presidir las sesiones del Consejo Supremo del Estado
Comunitario, como también planificar, organizar y dirigir actividades y tareas
asignadas por el pueblo.

II.- El Pre sidente del Consejo Supremo del Estado Comunitario es presidente
nato del Congreso del Poder Legislativo y preside las sesiones del mismo.

III.- Hacer seguimiento a las actividades de los ministerios y otras entidades


orgánicas del sistema administrativo del Estado Comunitario.

IV.- Aceptar la renuncia y la sustitución de algún miembro del Consejo de


Ministros, según procedimiento.
V.- Recibir las cartas de acreditación de los jefes de misiones diplomáticas.
Esta actividad podrá delegar a cualquiera de los Miembros del Consejo
Supremo del Estado Comunitario.

VI.- Firmar Decretos Leyes y acuerdos del Consejo Supremo del Estado
Comunitario y otras disposiciones legales adoptadas por el Consejo de
Ministros y ordenar la publicación en la Gaceta Oficial de la República.
VII.- Disponer la realización de referéndum, conforme a la consideración y
aprobación del Congreso Nacional del Poder Legislativo.

Artículo 82.

Son atribuciones Específicas del Consejo Supremo del Estado:

1. Calificar credenciales otorgadas por la Corte Nacional Electoral.


2 Organizar la mesa directiva para todo el periodo Constitucional.
3. Dictar Reglamento de debate y corregir sus infracciones.
4. Inaugurar y Clausurar las sesiones del Congreso del Poder Legislativo.
5. Verificar el escrutinio de actas de las elecciones Generales y Municipales.
6. Presidir el juramento de los dignatarios del Consejo del Poder Ejecutivo.
7. Recibir Juramento de los altos dignatarios del Estado Comunitario.
8. Designar y conformar Comisiones para su función constitucional.
9. Aprobar Presupuesto anual para el funcionamiento de la Legislatura.
10. Fijar sueldos de los Legisladores para todo el periodo constitucional.
11. Revisar y nominar el personal administrativo y su renumeración.
12. Aplicar adecuadamente el régimen interior establecido.
13. Aplicar sanciones a miembros del Congreso conforme a esta constitución.
14. Admitir o rechazar la renuncia de los miembros del Congreso del Poder
Legislativo.
15. La calificación de Credenciales emitidas por la Corte Nacional Electoral y el Consejo supremo del

Estado encuentra motivos de nulidad, el caso será remitido por resolución de dos tercios de voto a

conocimiento y decisión de dicho tribunal. Los fallos se dictarán en el plazo de 15 días.

CAPITULO IV

CONSEJO REGIONAL
WAMANI ULAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 83.

El Consejo Regional (wamani tantacha ulaka), es la instancia orgánica superior de cada Región;
sus funciones son de carácter colegiado, representativo, deliberante, fiscalizador y técnico en el
ámbito de su jurisdicción. Se constituye con la participación y la representación legitima de los
elegidos; las funciones y atribuciones se determinarán conforme establece esta constitución.
I.- El Consejo Regional (wamani tantacha ulaka) estará conformado, por
representantes conforme al número de habitantes que tiene el área
lingüística territorial y es de la siguiente manera:

Región autónoma No. I: Área Lingüística territorial Aymara y centros urbanos:

Aymara Rural La Paz 10 representantes


Centro Urbano La Paz 4 representantes
Centro Urbano El Alto 6 representantes
Aymara Rural Oruro 6 representantes
Centro Urbano Oruro 4 representantes
Aymara Rural Cochabamba 2 representantes
Aymara Rural Potosí 3 representantes

Región autónoma No. II: Área lingüística territorial Quechua y centros urbanos:

Quechua Rural Cochabamba 8 representantes


Centro Urbano Cochabamba 4 representantes
Quechua Rural Potosí 4 representantes
Centro Urbano Potosí 4 representantes
Quechua Rural Chuquisaca 4 representantes
Centro Urbano Chuquisaca 5 representantes
Plurilingüe Rural Tarija 3 representantes
Centro Urbano Tarija 3 representantes

Región autónoma No. III: Área lingüística territorial Pluri lingüe, Chiquitana -
Guaraní y centros urbanos:

Santa Cruz Rural Plurilingüe 8 representantes


Centro Urbano Sta. Cruz 8 representantes
Región Guarani 2 representantes
Región Chiquitana 2 representantes

Región autónoma No. IV: Área lingüística territorial Plurilingüe -Amazónica y


centros urbanos:

Beni Rural Plurilingüe 4 representantes


Centro Urbano Trinidad 3 representantes
Centro Urbano Riberalta y otros. 2 representantes
Pando Rural Plurilingüe 2 representantes
Centro Urbano Cobija 2 representantes
Región Plurilingüe Amazónica 2 representantes

II.- Para optar al Consejo Regional (wamani ulaka), los postulantes


presentarán currículo para una preselección y serán elegidos por voto
nominal directo y de consenso.
III.- El funcionamiento y la gestión administrativa de los Consejos
Regionales (wamani ulaka), es de seis años sin posibilidad a ser reelegidos
por otra gestión continua.

IV. - El órgano directivo del Consejo Regional, estará conformado por un Presidente (p’iqicht’a),

Vicepresidente (arkta), Asesor (amayt’a), Secretario (yanapt’a), Tesorero (qullqiwutija y los demás,

Vocales (chintas).

V.- El Consejo gozará de la autonomía administrativa, con presupuesto anual propio, asignado por el

Tesoro General Regional.

VI.- Para garantizar el funcionamiento orgánico y pleno del Consejo


Regional (wamani ulaka) serán remunerados por la realización de cada
sesión y asamblea; estarán amparados por un régimen especial y seguridad
social, en los términos que determine esta constitución y la Ley.

VI.- El pleno del Consejo Regional (wamani ulaka) por su carácter


representativo y deliberante, deberá cumplir sus funciones en las
asambleas de carácter consultivas, propositiva, resolutiva y evaluativo;
quienes coordinarán con las autoridades y los consejos distritales y los
Consejos locales “Municipio”, previo acuerdo de consenso con los órganos
del Consejo del Poder Ejecutivo Regional y mediante convocatorias.

Artículo 84.

Las atribuciones del Consejo Regional o (wamani ulaka) so n:

I.- Aprobar y expedir normas orgánicas del Presupuesto Anual Regional en coordinación con los Primeros
Ministros Regionales que conforman entre hombre y mujer, (apu mallku y apu t’alla).

II.- Apoyar en la planificación de programas para el desarrollo económico y


social de la región en coordinación con los municipios, para la gestión
financiera y crediticia. En las unidades de producción, el turismo, transporte,
ecología, medio ambiente, obras públicas, vías de comunicación,
electrificación y otros.

III.- Compatibilizar planes y programas de desarrollo económico y social,


aprobar y determinar inversiones que se consideren necesarias para
impulsar la ejecución y asegurar su cumplimiento.
IV.- Aprobar y determinar el sistema administrativo Regional, las funciones
de sus dependencias, las escalas de remuneración salarial correspondiente
a las distintas categorías de empleo. Crear los establecimientos públicos y
empresas industriales o comerciales autorizar la formación de sociedades
de economía mixta.

V.- Participar en la elección de la autoridad diárquica, Primer Ministro y Primer Ministra (Apu Mallku y
Apu T’alla) de la Región “wamani”, para que pueda ejercer sus funciones. Participar en la celebración de
contratos, en negociar empréstitos, en adquirir bienes y administración correspondiente en la región.

VI.- Coordinar y supervisar actividades que conciernen el sistema


administrativo del municipio, apoyar a la educación, la salud, a la
preservación y desarrollo de la cultura conforme determina la Ley.

VII.- Solicitar informes sobre el ejercicio de sus funciones a los Primer


Ministros de la Región, Contralor Regional, a los Secretarios del Poder
Ejecutivo Regional, Responsables Administrativos Regionales y Directores
de los Institutos descentralizados y otros de la Región.

CAPITULO V

REGIMEN MUNICIPAL
MARKA KAMACHI

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 85.

El Municipio es la Unidad Política Administrativa organizada jurídicamente en un


espacio territorial definido por límites promulgados por Ley donde se publican las
coordenadas geográficas, descripción literal de límites del polígono que define el
territorio. El Territorio esta determinado con dos áreas: Alaxasaya, “Aransaya”,
(arriba) y “Maxasaya” Urinsaya, (abajo), con un Centro Político Administrativo
“Marka”, que se constituye por varios distritos urbanos y rurales (ayllus), con una
población definida y es un gobierno Municipal Autónomo Diárquico (Marka Mallku
y Marka T’alla)

I.- Existen dos tipos de Gobiernos Municipales: Uno es de régimen


autónomo tradicional republicano y el otro es de régimen autónomo especial
originario (indígena). El primero deberá acogerse a las normas que se
establece para los nuevos municipios.

II.- Son entidades autónomas de derecho público con personalidad jurídica


y patrimonio propio, institucionalmente es representada por un Gobierno
Municipal Diárquico.
III.- El Gobierno Municipal es la instancia representativa, deliberante, normativa, ejecutiva y
administrativo en el ámbito de su jurisdicción. Constituido el Consejo local del Municipio y
el Alcalde “mallku” y la Alcaldesa “t’alla” (diárquicos) y sus funciones se establecen
conforme a la normas establecidos y sus Reglamentos.

III.- Se establecen circunscripciones electorales en los municipios con población mayor a


5.000 habitantes, donde se puede conformar Entidad Orgánica por alaxsaya - maxasaya y
realizar su inscripción a la Corte Electoral, conforme determina la Ley Electoral.

Artículo 86.

Los postulantes a la candidatura a Concejales será en la modalidad


diárquica; los candidatos únicamente pueden participar a través de la
Entidad Orgánica de ciudadanos, estos deberán registrarse con nombre,
color y sigla, en la Corte Electoral del Estado Comunitario, cumpliendo los
siguientes requisitos:
I.- Presentar la firma del 0,5 % de ciudadanos inscritos en el Padrón
Electoral de la jurisdicción de la respectiva Circunscripción Electoral.

II.- Presentar un programa de gobierno y su plan de desarrollo, ajustarse a


los derechos y garantías reconocidos por esta constitución.

III.- Los miembros concejales del municipio serán elegidos por simple mayoría de votos
validos por un periodo de seis años en sus correspondientes circunscripciones.

IV.- La elección de los candidatos de los miembros Concejales del Municipio será por voto
directo previo presentación de los requisitos exigidos por Ley.

V.- El Consejo Municipal, (marka ulaka); es la máxima instancia; constituye y es el órgano


representativo, deliberante, normativo, técnico y fiscalizador de la Gestión del Municipio.

VI.- Las autoridades del Gobierno Municipal (Marka Jiliri) son diárquicas y elegidas por y de
los miembros del Consejo Municipal, de forma directa, secreta y por simple mayoría de
votos, su gestión administrativa es de seis años, a no ser que puedan ser alejados de sus
funciones por un voto de censura del Consejo al cumplir el primer año de su gestión.

VII.- La autoridades diárquicas Edil, son las máximas autoridades representativas y


ejecutivas del Gobierno Municipal, cuyas atribuc iones deberán cumplir conforme a la
Constitución y la ley de Municipalidades.

Artículo 87.

Son funciones del Gobierno Municipal:

I.- Promover el desarrollo de la jurisdicción territorial, satisfacer las


necesidades comunitarias, garantizar la integración social y facilitar la
participación de hombres y mujeres en la planificación y el desarrollo del
ser humano.
II.- Preservar y conservar el sistema ecológico y el medio ambiente de la
región, el patrimonio panorámico y los sitios arqueológicos.

III.- Planificar la explotación racional de recursos naturales existentes,


contribuyendo al desarrollo económico sustentable.

IV.- Promover los valores culturales de la región, defender y difundir las


prácticas culturales, morales y cívicas de la población, fomentar una
integración social bajo los principios Comunitarios y la igualdad de
oportunidades tanto para el hombre y la mujer en todos sus ámbitos.

V.- El Gobierno Municipal ejercerá sus competencias solamente en el área


geográfica que le corresponde.

VI.- El Gobierno Municipal, en cumplimiento de sus funciones, deberá


priorizar el desarrollo social sostenible, la infraestructura educativa y de
salud, los servicios básicos, la administración y las finanzas, la producción y
defensa de los intereses patri moniales del pueblo.

VII.- Los ciudadanos de una jurisdicción del municipio, a través de


autoridades originarias tienen el derecho de solicitar un referéndum en
asuntos atribuidos a la administración política del mismo.

VIII.- De acuerdo a la capacidad económica y recursos humanos de cada


municipio, el Gobierno Municipal deberá establecer la organización de
“Unidades de Producción”, para impulsar y contribuir al desarrollo de la
región.

IX.- Crear empresas municipales o mixtas para la explotación de lo s


recursos naturales y bienes o servicios.

X.- Contratar empréstitos previa autorización del Consejo del Poder


Ejecutivo. La Ley determinará la forma del procedimiento.

Artículo 88.

La pareja de Alcaldes (mallku y t’alla) tendrá las siguientes atribuciones:

I. Presentar planes para proyectos de desarrollo alternativo ante las


instancias correspondientes.

II. Determinar gastos para la administración local conforme a presupuesto


aprobado.

III. Nombrar a los funcionarios públicos municipales, cuya designación será


de acuerdo a licitación pública.
IV. Promover el progreso y bienestar de los habitantes del área geográfica
del municipio.

V. Exigir el cumplimiento adecuado y eficiente de sus funcionarios públicos.


VI. Lograr que los programas del Plan Operativo Anual se cumplan a
satisfacción de los habitantes.

CAPITULO VI

CONSEJO DISTRITAL

LAYA ULAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 89.

Recuperando el modelo de estructura política del prehispánica y por la


soberanía de los pueblos originarios, se establece en el espacio geográfico
la conformación de los Consejos Distritales (laya ulaka) del área Rural y
Urbano. Su representación tiene la facultad de fiscalizar actividades del
gobierno municipal que corresponde y son considerados como Entidad
Orgánica de los Municipios.

Artículo 90.

Los Consejos Distritales, (ayllu ulaka) son organizaciones del poder de los Layas o
Distritos urbanos y rurales, y tienen las siguientes atribuciones:

I.- Es la representación legitima de los Distritos urbano y rural. Sus


funciones serán de carácter colegiado, representativo, deliberante,
fiscalizador y técnicas.

II.- Para ser miembros de los Consejos Distrital, (laya ulaka) tienen que ser
elegidos por voto nominal directo, de consenso y previa presentación de
una terna por las organizaciones instituidas en las Markas y sus ayllus, la
representación será rotativa por periodo de dos años calendarios.
III.- El funcionamiento administrativo del Consejos Distrital será de dos años
de gestión. Los postulantes deberán ser elegidos a las personas (hombres y
mujeres) que ejercieron cargos inferiores en la comunidad, para dar
continuidad de sus responsabilidades.

IV.- La conformación de los Consejos Distritales contará con 5 a 9


miembros según el número de habitantes censadas en el Distrito, quienes
asumirán los siguientes cargos: Presidente (p’iqicht’a), Vicepresidente
(arkta), Asesor (amayt’a), Secretario (yanapt’a), Tesorero (qullqiwutija).
Gozarán de la autonomía administrativa.

V.- El funcionamiento orgánico de cada Consejo Distrital (laya ulaka), será


remunerado por sesión y asamblea; amparados por un régimen especial en
los términos que determine la constitución y la Ley.

VI.- Apoyar en la planificación de programas para el desarrollo económico y


social de los distritos, en la gestión financiera y crediticia, para la producción
agrícola ganadera, el turismo, el transporte, la ecología, medio ambiente,
obras públicas, vías de comunicación, electrificación y otros de interés
Distrital.

VII.- Compatibilizar los planes y programas de desarrollo económico y social


que se consideren necesarias y que permitan impulsar la ejecución y
asegurar su cumplimiento.

VIII.- Determinar las funciones de su dependencia y el sistema


administrativo de las autoridades del Distrito.

IX.- Determinar la elección de las autoridades originarias y comunales para


que puedan ejercer sus funciones.

X.- Coordinar y supervisar actividades que conciernen el sistema


administrativo local, apoyar a la educación, la salud y al desarrollo cultural
conforme determina la Constitución.

XI.- Solicitar informes oral y escrito sobre el cumplimiento de sus funciones


a las autoridades, a los Honorables Alcaldes Municipales, al Consejo Local
del Municipio y otras descentralizadas.

CAPITULO VII

CONSEJO COMUNAL

KUMUNA ULAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 91.

Recuperando el modelo de estructura política de prehispánica y por la


soberanía de los pueblos originarios, se establece la conformación de los
Consejos Comunales Rurales y Urbanos (ayllu ulaka).

Artículo 92.
Los Consejos Comunales, (ayllu ulaka) son organizaciones del poder de los Ayllus
urbanos y rurales y tienen las siguientes atribuciones:

I.- Es la representación legítima comunal urbana y rural. Sus funciones


serán de carácter colegiado, representativo, deliberante, fiscalizador y
técnicas.

II.- Para ser miembros de los Consejos Comunales, (ayllu ulaka) tienen que
ser elegidos por voto nominal directo, de consenso y previa presentación de
los requisitos y por una terna por las organizaciones de comunidades del
ayllus y su representación será rotativa.

III.- El funcionamiento administrativo del Consejos Comunal será de dos


años de gestión. Los postulantes deberán ser elegidos a las personas
(hombres y mujeres) que ejercieron cargos inferiores en la comunidad,
quienes deberán asegurar la continuidad de sus responsabilidades.

IV.- La conformación de los Consejos Comunales contará con 5 a 7


miembros según el número de habitantes censadas de los Ayllus, quienes
asumirán los siguientes cargos: Presidente (p’iqicht’a), Vicepresidente
(arkta), Asesor (amayt’a), Secretario (yanapt’a), Tesorero (qullqiwutija).
Gozarán de la autonomía administrativa.

V.- El funcionamiento orgánico de cada Consejo Comunal (ayllu ulaka), será


remunerado por sesión y asamblea; amparados por un régimen especial en
los términos que determine la constitución y la Ley.

VI.- Apoyar la planificación de programas para el desarrollo económico y


social de los distritos, en la gestión financiera y crediticia para la producción
agrícola ganadera, el turismo, el transporte, la ecología, medio ambiente,
obras públicas, vías de comunicación, electrificación y otros de interés
regional.

VII.- Compatibilizar los planes y programas de desarrollo económico y social


que se consideren necesarias e importantes que permitan impulsar la
ejecución y asegurar su cumplimiento.

VIII.- Determinar las funciones de su dependencia y el sistema


administrativo de las autoridades comunales.

IX.- Determinar la elección de las autoridades originarias, locales y otras


menores quienes deberán ejercer sus funciones.

X.- Coordinar y supervisar actividades que conciernen el sistema


administrativo comunal y apoyar a la educación, la salud, a la preservación
y desarrollo cultural conforme determina la Constitución.
XI.- Solicitar informes oral y escrito sobre el cumplimiento de sus funciones
a las autoridades, a los Honorables Alcaldes Municipales, al Consejo Local
del Municipio y otras descentralizadas.

Artículo 93.

Para ocupar el cargo de Consejero Distrital (laya ulaka) y Comunal “ayllu ulaka”
se debe cumplir con los siguientes requisitos:

I.- Haber nacido en el área rural del Ayllu o en la comunidad, en el sector


urbano en el barrio o haber adquirido en forma definitiva su permanencia.

II.- Haber cumplido 20 años de edad y ser apto para ejercer el cargo.

III.- No haber sido condenado por órgano Judicial ni tener pliego de cargos
ejecutoriados.

IV.- Para representar al pueblo o su comunidad tiene que haber contraído


matrimonio por lo menos dos años antes a optar el cargo en el Consejo
Comunitario.

SEXTA PARTE

CAPITULO I

CONSEJO DEL PODER EJECUTIVO

QHAPHAQA PHUQHAYA ULAKA

Artículo 94.

El Consejo del Poder Ejecutivo está constituido diárquicamente por el


Presidente y la Presidenta, Qhaphaqa apu mallku y Qhaphaqa apu t’alla,
(hombre-mujer) del Estado Comunitario, con la participación activa y directa
del Consejo de Ministros como establece esta Constitución.

Artículo 95.

El Consejo del Poder Ejecutivo ejerce su funciones y atribuciones en la


administración pública y dirige la política interior y exterior del país, con
sede en la ciudad de La Paz (Chuqi-yapu marka).

CAPITULO II
PRESIDENTE Y PRESIDENTA
QHAPAHAQA APU MALLKU, QHAPHAQA APU T’ALLA

DISPOSICIONES GENERALES

TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 96.

El Presidente y la Presidenta del Estado Comunitario serán elegidos por sufragio


popular directo y secreto. Serán proclamados por la mayoría de votos válidos, por
un período constitucional de cinco años; quienes se alternarán en sus funciones y
coordinarán estrechamente el uno o con la otra, conforme a la determinación de
esta Constitución.

VII.- No podrán ser candidatos a la Presidencia del Estado Comunitario, los


Ministros de Estado, Viceministros, Directores, Presidentes de entidades de
función económica o social de las que tienen participación en el Estado, que
no hubieran renunciado al cargo, cuatro meses antes de la realización de
elecciones generales.

VIII.- Los ciudadanos que hayan ejercido Presidente y Presidenta, no


podrán ser reelegidos en los siguientes comicios electorales y el ejercicio de
su mandato Presidencial será por una sola gestión, para dar oportunidad y
promover a otros ciudadanos que puedan ejercer este cargo importante
para el Estado Comunitario.

IX.- La presentación y postulación de candidaturas a Presidente y


Presidenta del Estado Comunitario, será regido en el sistema de rotación
por área lingüística territorial; es decir, que cada Región Autónoma asumirá
las responsabilidades del Estado una vez cada cuatro gestiones como
establecerá una ley del Estado.

X.- La Presidenta tiene que cumplir los mismos requisitos del Presidente del
Estado Comunitario y ser legalmente la esposa del candidato oficial a la
presidencia.

Artículo 97.

En las elecciones generales, las formulas del Presidente y la Presidenta del


Estado Comunitario que no obtuviera la mayoría absoluta de votos validos, serán
nuevamente convocados a una segunda vuelta electoral de voto popular en un
plazo de 30 días. Esta segunda vuelta de elección se realizará solamente con las
dos formulas que obtuvieron el mayor número de sufragios validos. Ninguno de los
candidatos podrán renunciar a la segunda vuelta y esta medida permitirá
garantizar una amplia participación Democrática del Pueblo.

I.- La segunda vuelta electoral, facilitará la elección de los Presidente y


Presidenta, por simple mayoría de votos válidos del sufragio total.

II.- Los candidatos elegidos tomarán su posesión del cargo de Presidente o


Presidenta del Estado Comunitario a los treinta días después de los
comicios electorales, prestarán juramento ante el Congreso del Poder
Legislativo de acuerdo a su confesión.

III.- Si por cualquier motivo los Presidentes del Estado Comunitario no


pudieran tomar posesión ante el Congreso del Poder Legislativo, lo harán
ante la Corte Suprema de Justicia y si no fuere posible ante el Notario
Público y para su efecto en presencia de dos testigos hábiles por derecho
civil.

Artículo 98.

En ausencia temporal del Presidente de la República, este será remplazado y


asumirá las responsabilidades la Presidenta del Estado Comunitario. A falta de
esta asumirá las responsabilidades el Presidente del Consejo Supremo del Estado
Comunitario o el Presidente de la Corte Suprema de Justicia, sucesivamente.

I.- En algún caso de impedimento en el ejercicio de sus funciones del


Presidente, la Presidenta asumirá la Presidencia del Estado Comunitario
hasta la proclamación de la nueva pareja Presidencial Electa.
II.- En el caso de acefalía del cargo de la Presidenta temporalmente ocupará el cargo la esposa del
Presidente del Consejo Supremo del Estado o la esposa del presidente de la Corte Suprema de Justicia
sucesivamente. En caso, de no haber transcurrido tres años de gestión presidencial, se procederá a una
nueva elección del Presidente y Presidenta, solo para completar el período administrativo.

III.- El Presidente y la Presidenta del Estado Comunitario podrán separarse


de sus cargos, ausentarse del territorio nacional, mediante un permiso que
no exceda de treinta días y les será concedida por el Consejo Supremo del
Estado. Por ausencia de más de treinta días, será necesario solicitar
licencia especial y por una sola vez al Consejo Supremo del Estado
Comunitario.

Artículo 99.

Cualquier emolumento que la Ley asigne al Presidente y la Presidenta del


Estado Comunitario podrá ser modificado, pero su vigencia tendrá validez
en el próximo período presidencial.
Artículo 100.

Son restricciones de la pareja Presidencial las siguientes:

I.- Las decisiones de los Presidentes del Estado Comunitario no tendrán


valor si no son refrendados por los respectivos Ministros de Estado, salvo
aquellos que puedan asumir por sí solos de acuerdo ala normativa del
Poder Ejecutivo.

II.- Si los Presidentes del Estado Comunitario cometen algún delito contra la
sociedad y el orden jurídico durante su período constitucional,
inmediatamente serán alejados de sus funciones y se convocará a una
nueva elección dentro de los treinta días siguientes. Mientras se elige y
toman posesión los nuevos Pre sidentes, asume la Presidencia
interinamente la Pareja Presidencial del Consejo Supremo de Estado.

III.- Se aplicarán sanciones por extralimitación de sus funciones


constitucionales y por delitos contra la personalidad internacional del Estado
o contra la administración pública. En estos casos, la pena será de
destitución y de inhabilitación para ejercer cualquier cargo público por el
término que fije la Ley.

Artículo 101.

Por actos de violencia o coacción durante el proceso electoral, por impedir una reunión del Congreso del
Poder Legislativo o por obstruir el ejercicio de las funciones de entidades o autoridades en función pública, a
los infractores se les aplicará las penalidades contempladas en el derecho común.

Artículo 102.

Las Funciones del presidente y presidenta (Qhaphaqa apu Mallku y Qhapaqa apu
t’alla) del Estado Comunitario serán las siguientes:

I.- Ser responsables de sus actos y del cumplimiento de las obligaciones


contraídas con el pueblo. Deberán garantizar los derechos y libertades de
todos los habitantes del país, conservar la independencia, la integridad y la
soberanía económica, cultural política y territorial del país.

II.- Ejecutar, reglamentar y hacer cumplir las leyes, expidiendo los decretos
y resoluciones convenientes, sin alterar lo definido por ley ni contrariar sus
disposiciones y guardando las restricciones consignadas en esta
Constitución.

III.- Presentar dentro de los diez primeros días a la instalación del Congreso
del Poder Legislativo, en sesiones ordinarias de cada año, un mensaje en
que dará cuenta de los aspectos políticos, económicos, sociales y
administrativos de su gestión del año anterior.

IV.- Dirigir las relaciones exteriores; Intercambiar, celebrar tratados y


convenios públicos con naciones extranjeras. Acreditar y recibir funcionarios
diplomáticos y consulares, los cuales serán sometidos a consideración del
Consejo Supremo del Estado.

V.- Presentar al Consejo Supremo del Estado, hasta el 31 de octubre de


cada año, el proyecto del Presupuesto General del Estado Comunitario para
la siguiente gestión financiera y proponer las modificaciones que se estimen
necesarias. La cuenta de los gastos públicos será conforme al presupuesto
presentado anualmente.

VI.- Presentar al Congreso del Poder Legislativo los planes y proyectos de


desarrollo que sobrepasen los presupuestos ordinarios en materia o en
tiempo de gestión y dirigir su ejecución previa aprobación del Consejo
Supremo del Estado.

VII.- Administrar las finanzas y rentas, los ingresos públicos estatales,


expedir decretos para su inversión por intermedio de los respectivos
ministerios, de acuerdo a las leyes y bajo estricto sujeción al presupuesto
asignado.

VIII.- Nombrar o remover a los Jefes y Oficiales del Servicio de Seguridad


Nacional “SS” (Policía ).

IX.- Nombrar Viceministros, Gerentes y Directores de las entidades públicas


autónomas, descentralizadas y de las empresas estatales, según lo
dispongan las Leyes respectivas.
X.- Visitar los distintos centros del país, por lo menos una vez al año,
durante el período de su mandato, para conocer sus necesidades.

XI.- Ejercer la autoridad máxima para la Dotación de Tierras de


Asentamientos Poblacionales, otorgar Certificados de Dotación de Tierras,
en virtud de la distribución, conforme a las disposiciones de esta
constitución y la Ley.

XII.- Realizar y contratar empréstitos; organizar el crédito público;


Reconocer la deuda nacional y arreglar sus servicios; Fijar y modificar los
aranceles, tasas y demás disposiciones concernientes al régimen de
aduanas, con sujeción a las normas previstas en las Leyes. Mientras que el
Consejo Supremo del Estado no haya dictado las Leyes que contengan las
normas generales correspondientes, el Consejo del Poder Ejecutivo podrá
ejercer estas atribuciones por el tiempo que dure esta falencia y enviará al
Consejo Supremo del Estado una copia de todos los Decretos que dicte en
ejercicio de esta facultad.
Artículo 103.

Atribuciones específicas del Presidente del Estado Comunitario son:

I.- Cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes vigentes.

II.- Asistir a la inauguración y clausura del Poder Legislativo.

III.- Convocar al Congreso del Poder Legislativo a sesiones extraordinarias.

IV.- Coordinar actividades de la administración y las instituciones públicas.

V.- Precautelar la conservación del orden público y tranquilidad de la


sociedad.

VI.- Controlar la recaudación y la administración de las rentas nacionales.

VII.- Reglamentar las leyes, sin alterar su espíritu, propósito y razón.

VIII.- Promover y firmar contratos de interés nacional conforme a esta


Constitución y la ley.

IX.- Designar los representantes del Congreso del Poder Ejecutivo ante las
Cortes Electorales.

X.- Objetar proyectos de Leyes por considerar inconvenientes o


inadecuados.

XI.- Sancionar y promulgar las Leyes y velar por su exacto cumplimiento.

XII.- Decretar indultos por delitos políticos, reducir penas y conceder libertad
condicional. Conservar y defender la seguridad exterior del Estado
Comunitario, conforme a la Constitución.

Artículo 104.

Las atribuciones específicas de la Presidenta del Estado Comunitario son:

I.- La directa colaboración al Presidente del Estado Comunitario en su


condición de esposa y en la primera magistratura del Estado asume las
mismas responsabilidades en la conducción del Gobierno.

II.- Asistir con voz y voto en las sesiones del Consejo de Ministros.
III.- Asesorar al Presidente del Estado Comunitario en las materias que éste determine.

IV.- Representar al Presidente del Estado Comunitario en actos públicos y


congresos nacionales o internacionales o misiones especiales que el
Presidente le encomiende.

V.- Coordinar la Administración Pública Estado de conformidad a los


acuerdos llegados con el Presidente del Estado Comunitario.

VI.- Presidir las sesiones del Consejo de Ministros y otros eventos de


importancia, en coordinación con el Presidente del Estado Comunitario.

VII.- Coordinar estrechamente las relaciones del Consejo del Poder


Ejecutivo, el Congreso del Poder Legislativo y el Consejo del Poder Judicial.

VIII.- Ejercer atribuciones que le delegue el Presidente del Estado


Comunitario.

CAPITULO III

CONSEJO DE MINISTROS
KAMANI ULAKA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 105.

El Consejo de Ministros está constituido por el Presidente y la Presidenta del


Estado Comunitario y los Ministros de Estado, presidido por el Presidente o la
Presidenta.

I.- El Consejo de Ministros constituye la dirección del gobierno y es la


instancia orgánica del Poder Ejecutivo y Administrativo de la Nación.

Artículo 106.

No podrán ser nombrados Ministros de Estado, parientes de la pareja


Presidencial de la República, hasta cuarto grado de consanguinidad o
segundo de afinidad, ni pueden ser miembros del mismo Gabinete
personas con grado parentesco directo.

Artículo 107.
De acuerdo a la determinación del Consejo del Poder Ejecutivo, los miembros del
Consejo de Ministros tienen las siguientes atribuciones:

I.- El Consejo de Ministros es responsable de la administración de sus


respectivos ramos.

II.- Reglamentar las Leyes para su mejor cumplimiento, sin apartarse en


ningún caso del espíritu de la misma.

III.- Actuar como órgano consultivo de los asuntos político administrativos, y


por mandato de esta Constitución serán escuchados y sus
recomendaciones serán sometidas a consideración del Presidente y la
Presidenta del Estado Comunitario.

IV.- Dictar el reglamento de régimen interno y ejercer las funciones que le


señale la Constitución o la Ley.

V.- Concurrir y participar a la elaboración de códigos y leyes a través de


comisiones especiales.

VI.- Interponer el recurso de inconstitucionalidad para formular consultas


ante el Tribunal Constitucional previstas en esta Constitución.

VII.- Realizar empréstitos nacionales y decretar créditos adiciona les al


Presupuesto, previa aprobación y autorización del Consejo Supremo del
Estado.

VIII.- Conceder a los ciudadanos bolivianos que lo soliciten permiso para


aceptar cargos de gobiernos extranjeros, en los casos que sea necesario de
acuerdo a la determinación de la Ley.

IX.- Nombrar a personas que deben desempeñar cualquier cargo nacional


cuya provisión no corresponda a otro funcionario o corporación.

X.- Celebrar contratos administrativos para la prestación de servicios y


ejecución de obras públicas, conforme dispone la Constitución y la Ley.

XI.- Citar y recibir informes de los funcionarios públicos, de las entidades


estatales y empresas mixtas que estime necesario o conveniente para
considerar los asuntos y pedir a los representantes informes orales.

Artículo 108.

Son funciones del Consejo de Ministros las siguientes:

I.- La definición del número y organización de los ministerios, sus funciones


específicas y otras entidades de la Administración Pública Nacional, así
como también la organización y el funcionamiento del Consejo de Ministros,
dentro de los principios y lineamientos señalados por la Constitución.

II.- Cada Ministerio del ramo tendrá una función especial. Las decisiones del
Consejo de Ministros serán por consenso con la participación directa de los
Presidentes de la República.

III.- Presentar ante el Congreso del Poder Legislativo anualmente y en la primera sesión ordinaria, el

mensaje escrito sobre el curso y el estado de los negocios de la administración de la gestión pasada,

acompañado con las memorias ministeriales.

IV.- De acuerdo con el Presidente de la República se procederá a los


nombramientos de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia y al
Procurador General del Estado Comunitario con sujeción a la aprobación
del Consejo Supremo del Estado.

V.- Para la elaboración del Proyecto del Presupuesto General del Estado
Comunitario deberán participar todos los miembros del Consejo de Ministro
como determina la ley.

VI.- Los Ministros de Estado son responsables de sus atribuciones en sus


respectivos ramos y participan con los Presidentes de la República en el
ejercicio de sus funciones, conforme establece esta Constitución y la Ley.

VII.- De acuerdo con los Presidentes de la República se procederá a los


nombramientos de los Ministros de la Corte Suprema de Justicia, a los
Magistrados del Tribunal Constitucional, al Procurador General del Estado
Comunitario, Fiscal General del Estado Confederado, Auditor General del
Estado Comunitario a los Vocales de la Corte Electoral del Estado
Comunitario, la Defensoría del Pueblo; con sujeción a la aprobación del
Consejo Supremo del Estado.
VIII.- El nombramiento del Contralor General del Estado Comunitario y del
Superintendente de Bancos, a los Presidentes de las Entidades de función
económica social del Estado, se realizará de las ternas presentadas por el
Consejo Supremo del Estado Comunitario (Qullana-suyu apu ulaka).

IX.- Los Decretos Supremos y las disposiciones emanadas por los


Presidentes del Estado Comunitario deberán ser firmados por los Ministros
correspondientes, caso contrario sin el cumplimiento de este requisito
formal, no tendrán validez legal.

X.- Los Ministros de Estado entregarán personalmente al Consejo Supremo


del Estado un informe o memoria anual sobre el estado de la administración
de su Ministerio y sobre las reformas que juzguen oportuno introducir.
XI.- El Ministro de Finanzas deberá presentar ante el Consejo Supremo del
Estado, la cuenta de inversión de las rentas, previo aprobación de los
demás ministros del gabinete.

CAPITULO IV

PRIMER Y PRIMERA MINISTROS DE LA REGION


WAMANI APU MALLKU Y APU T’ALLA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIAYATA

Artículo 109.

En las cuatro regiones (wamani) del país regirán Gobiernos diárquicos; quienes
tienen la representación legal en la administración en cada Región Autónoma; es
el ente de coordinación con el Gobierno Central del Estado Comunitario, que
permita equilibrar el orden público y la ejecución de políticas socio-económicas del
país.

I.- Los Primer Ministros (Apu Mallku y Apu T’alla) serán nominados y
elegidos previo una terna presentada por las Entidades Orgánicas de los
miembros del Consejo Regional, (wamani ulaka) en forma directa y por
consenso. La representación será rotativa en cada gestión y son elegidos
por los miembros del Consejo Regional de cada área lingüística territorial.
El periodo gubernamental será de 6 años de gestión; no podrán ser
reelegidos para el periodo siguiente bajo ninguna circunstancia.

Artículo 110.

Son atribuciones del Primer Ministro y la Primer Ministra:

I.- Cumplir y hacer cumplir la Constitución, las leyes, los decretos del
Gobierno y las Resoluciones del Consejo Regional.

II.- Dirigir y coordinar la acción administrativa de la región y actuar en su


nombre como gestor y promotor del desarrollo integral de su territorio, de
conformidad con la Constitución y las leyes.

III.- Dirigir y coordinar las dependencias regionales bajo las condiciones que
le confiere los Presidentes dl Estado Comunitario.

IV.- Presentar oportunamente al Consejo Regional los planes y programas


de desarrollo económico y social, obras públicas y el presupuesto anual de
inversión y gastos públicos.
V.- Nombrar a los gerentes, directores, funcionarios y otros dependientes del Ministerio Regional,
entidades públicas y de las empresas industriales o comerciales de la región.

VI.- Promover de acuerdo con los planes y programas generales, la


creación de empresas, industrias y otras actividades para el desarrollo
socioeconómico regional.

VII.- Objetar a los proyectos que adolecen de inconstitucionalidad, de


ilegalidad o inconveniencia.

VIII.- Velar por la recaudación de las rentas regionales, las entidades


descentralizadas y las que sean objeto de transferencias del Estado a la
Región.

IX.- Convocar al Consejo Comunitario Regional (wamani tantacha ulaka) a


sesiones extraordinarias, para tratar temas y materias de interés e
importancia para la región.

X.- Definir ternas para la elección de gerentes o directores de las entidades


públicas que operen en la región.

XI.- Ejercer las funciones administrativas que les fueron conferidas por el o
los Presidentes del Estado Comunitario.

Artículo 111.

Todo el sistema de organización gubernamental y funcionamiento de la Región


Autónoma será definido por una ley expresa de administración regional.

SEPTIMA PARTE
CAPITULO I

PODER JUDICIAL

QHAPHAQA TARIPA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 112.

El sistema del Poder Judicial está constituido por la Corte Suprema de


Justicia del Estado Comunitario, el Tribunal Constitucional, las Cortes
Superiores Regionales, los Tribunales y Jueces de Instancia y demás
tribunales y juzgados que establece la ley. Determina la organización y
atribuciones de los tribunales y juzgados del Estado Confederado. No se
podrán establecer tribunales o juzgados de excepción, ni reconocer fuero
alguno.

Artículo 113.

Los Magistrados y Jueces son independientes en la administración de


justicia y no están sometidos a ninguna influencia estatal, sino solamente a
la Constitución y a las leyes vigentes. No podrán ser destituidos de sus
funciones, sin previa sentencia penal condenatoria ejecutoriada. Los jueces
serán juzgados por la Cortes Superiores Regionales, por los delitos que
podían cometer en el ejercicio de sus funciones, conforme la determinación
de la ley.

Artículo 114.

Es una condición “sine cuanum” que la administración de justicia sea pública y


gratuita, próvida y rápida en los procesos judiciales y garantizará lo siguiente:

I.- Deberá proveer mecanismos de defensa legal y gratuita a los indigentes,


así como de servicios en la traducción a las personas que su lengua
materna no sea el castellano.

II.- Una ley y sus reglamentos establecerán el sistema de la carrera judicial,


los derechos y obligaciones para los ministros, magistrados y jueces.

III.- El Poder Judicial tiene autonomía administrativa y presupuestaría. El


Presupuesto General del Estado Comunitario le asignará una partida anual,
centralizada en el Tesoro Judicial, que administra el Consejo de la
Judicatura y en conformidad a la ley del Presupuesto General del Estado.

IV.- El Poder Judicial no esta facultado para establecer derechos judiciales.


El ejercicio de la Judicatura es incompatible con otras actividades públicas y
privadas renumeradas, a excepción de la cátedra universitaria.

V.- Se reconocen la conciliación y el arbitraje, con medios alternativos de


resolución de controversias.

CAPITULO II

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA


TARIPA APU ULAKA

DISPOSICIONES GENRALES
TAQPACHA WAKIYATA
Artículo 115.

La Corte Suprema es el instrumento jurídico y el máximo tribunal de justicia


ordinaria, contencioso - administrativa del Estado. Tiene su sede en la Capital del
Estado. Y está compuesta por un Presidente y el número de ministros
establecidos por ley.

Artículo 116.

Para ser Ministro de la Corte Suprema se requiere:

I.- Ser boliviano (Qullana-suyu) de nacimiento en el territorio del Estado


federado (jus terram).

II.- Ser Bilingüe y tener conocimientos de los idiomas originarios: Aymara,


Quechua.

III.- Haber cumplido treinta y cinco años y no sobrepasar los 65 de edad.

IV.- Hallarse en pleno goce de sus derechos civiles y políticos.

V.- Ser graduado en Derecho y tener título académico en Provisión


Nacional.

VI.- Haber ejercido la profesión de abogado por un período de diez años.

VII.- Haber sido profesor de Derecho en un establecimiento de enseñanza universitaria.

VIII.- La persona que haya sido condenada por delito doloso, mediante
sentencia ejecutoriada proferida por un Tribunal de Justicia, no podrá
desempeñar cargo alguno en el Órgano Judicial.

IX.- Se reconoce la validez de las credenciales para ser Ministro de la Corte


Suprema de Justicia, solamente las refrendadas por disposiciones
constitucionales.

Artículo 117.

El Presidente y los Ministros de la Corte Suprema de Justicia son elegidos


por el Consejo Supremo del Estado y por dos tercios de votos del total de
sus miembros; desempeñan sus funciones por un periodo improrrogable de
diez años, desde el día de su posesión y no podrán ser reelegidos.

Artículo 118.
Son atribuciones de la Corte Suprema de Justicia:

I.- La facultad de juzgar en la vía ordinaria, contencioso – administrativo y la


de ejecutar lo juzgado corresponde al Poder Judicial, a los Tribunales y
Jueces que se establecen en la Ley.

II.- Representar ante el Poder Judicial.

III.- Designar nóminas para los vocales de las Cortes Superiores de Departamentales, propuestos por

el Consejo de la Judicatura; por dos tercios de votos de los miembros de la Sala Plena.

IV.- Resolver los recursos de nulidad y casación en la jurisdicción ordinaria


y especializada.

V.- Resolver los recursos directos de nulidad interpuesto con otros actos o
resoluciones de autoridades y servidores públicos no judiciales.

VI.- Dirimir los conflictos de competencia que susciten entre las Cortes
Suprema de Departamentales.

VII.- Fallar en única instancia en los juicios de responsabilidad, contra el


Presidente y al Presidenta de la República y Ministros de Estados, por
delitos cometido durante el ejercicio de sus funciones, a requerimiento del
Fiscal General del Estado Comunitario y previo autorización del Consejo
Supremo del Estado, fundada jurídicamente y concedida por dos tercios de
votos del total de sus miembros.

VIII.- Fallar en única instancia en las causas de responsabilidad penal


seguida, a requerimiento del Fiscal General del Estado Comunitario y
vocales de las Cortes Superiores, previa acusación de la sala penal, contra
el Procurador General de la República, Vocales de la Cortes Superiores,
Defensor del Pueblo, Vocales de la Corte Electoral del Estado Comunitario
y Superintendentes establecidos por ley, por delitos cometido durante el
ejercicio de sus funciones.

IX.- Resolver las causas contencioso-administrativas conforme a ley.

X.- Resolver las controversias de límites que se suscitaren, entre las


regiones o municipios.

XI.- Resolver por mayoría absoluta de votos del total de sus miembros, el
desafuero de los diputados que cometieren delitos en el ejercicio de sus
funciones, a requerimiento de la autoridad competente, así como la pérdida
de su mandato por contravención a las prohibiciones establecidos en esta
Constitución.

XII.- Suspender por mayoría absoluta de votos del total de sus miembros, a
los vocales y jueces, contra los que hubiere abierto proceso penal por
delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones.

XIII.- Organizar el funcionamiento de la Corte Suprema de Justicia como


establece la ley.

XIV.- La Corte Suprema de Justicia podrá presentar propuestas de


proyectos leyes en materia judicial y la reforma de los códigos, mediante
mensajes dirigidos al Poder Legislativo.

CAPITULO III

CONSEJO DE LA JUDICATURA
JILIRI TARIPIRI ULAKA

Artículo 119.

El Consejo de la Judicatura es el órgano Administrativo del Poder Judicial y tiene


su sede en la Capital del Estado Comunitario.

I.- Es presidido por el Presidente de la Corte Suprema de Justicia y está


integrado por cuatro miembros, denominados Consejo de la Judicatura,
todos ellos de reconocida idoneidad, con título profesional en Provisión
Nacional y con diez años de ejercicio idóneo de la profesión o cátedra
universitaria.

II.- Dos Consejeros son designados por el Consejo Supremo del Estado y
dos Consejeros por Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia, en ambos
casos con el voto de dos tercios de sus miembros. Desempeñan sus
funciones por un periodo de cinco años, no pudiendo ser reelegidos. Por
ningún motivo.

Artículo 120.

Son atribuciones del Consejo Judicatura:

I.- Proponer a la Corte Suprema de Justicia la nomina para designación de


Vocales de la Cortes Superiores Regionales.

II.- Proponer nombres a las Cortes Superiores Regionales para la


designación de jueces, notarios y registradores de derechos reales.
III.- Administrar la Carrera Judicial y asegurar el buen funcionamiento de
servicios conforme a ley.

IV.- Elaborar el proyecto de Presupuesto Anual del Poder Judicial y remitir,


previa aprobación de la Corte Suprema de Justicia al Poder Ejecutivo y
Legislativo para su incorporación al Presupuesto General del Estado
Comunitario.

V.- Ejecutar el Presupuesto del Poder Judicial conforme a ley y bajo control
fiscal y rendir la cuenta de gastos e inversiones al Consejo Supremo del
Estado.

VI.- Ampliar las nominas que se refieren a las atribuciones e instancias del
órgano elector correspondiente.

VII.- Una ley determinará la organización y las atribuciones administrativas


del Consejo de la Judicatura.

CAPITULO IV

TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
KAMACHI-UTT’AWI, ISAPA TARIPA

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 121.

El Tribunal Constitucional es independiente y sólo está sometido a la


Constitución. Su sede está en la Capital del Estado Comunitario. Está
integrado por el Presidente y el número de magistrados establecidos por
ley, designados por el Consejo Supremo del Estado por dos tercios de
votos del total de sus miembros.

Artículo 122.

Para ser magistrado del Tribunal Constitucional, se requieren las mismas


condiciones que para ser Ministro de la Corte Suprema de Justicia y en especial
las siguientes:

I.- Desempeñar sus funciones por un periodo de diez años improrrogables y


no pueden ser reelectos para una próxima gestión.
II.- El enjuiciamiento penal de los Magistrados del Tribunal Constitucional,
por delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones, se rige por las
normas establecidas para los Ministros de la Corte Suprema de Justicia.

Artículo 123.

Son atribuciones del Tribunal Constitucional conocer y resolver:

I.- Como única instancia en asuntos de derecho sobre la


inconstitucionalidad de leyes, decretos y cualquier género de resoluciones
no judiciales. Sólo podrán interponer recurso de nulidad los Presidentes del
Estado Comunitario o cualquier miembro del Consejo Supremo del Estado,
los Diputados, el Fiscal General del Estado confederado o el Defensor del
Pueblo.

II.- Los recursos contra las resoluciones del Consejo Supremo del Estado,
cuando tales resoluciones afectan a uno o más derechos y garantías
concretas, cualquiera que sea la persona afectada.

III.- La revisión de los recursos del amparo constitucional, habeas corpus o


habeas data, cuando hubieren sido denegados por los jueces y tribunales
competentes.

IV.- Absolver la consulta del Presidente y la Presidenta del Estado


Comunitario, el Presidente del Consejo Supremo del Estado, el Presidente
de la Corte Suprema de Justicia, sobre la constitucionalidad de proyectos
de ley, decretos, reglamentos y resoluciones normativas de carácter
general. La decisión del Tribunal Constitucional es carácter obligatorio sin
apelación.

V.- Absolver las consultas previas a la aprobación Concejal Suprema del


Estado sobre la constitucionalidad de los tratados y convenios con
gobiernos extranjeros y organismos internacionales que le sean planteados
por el Presidente o Presidenta del Estado Comunitario.

Artículo 124.

Contra las sentencias del Tribunal Constitucional no cabe recurso ulterior alguno.

I.- Por lo que si una sentencia declara la inconstitucionalidad de una ley, decreto o resolución, la

norma impugnada es inaplicable y surte plenos efectos respecto a todos.


II.- Salvo que la sentencia disponga otra cosa y subsistirá la vigencia de la norma en las partes no

afectadas por la inconstitucionalidad. La sentencia que declara la inconstitucionalidad de la ley,

decreto, reglamento o resolución normativa de carácter general no afectará a sentencias anteriores

pronunciadas por la justicia ordinaria que hayan adquirido calidad de cosa juzgada.

III.- La sentencia que se refiere a un derecho subjetivo controvertido se


limitará a declarar su inaplicabilidad al caso concreto.

IV. - Una Ley reglamentará la organización y funcionamiento del Tribunal Constitucional, así como las
condiciones para la admisión de los recursos y sus procedimientos.

V.- El Tribunal Constitucional podrá presentar proyectos de leyes en materia


de jurisdicción constitucional, mediante mensaje dirigido al poder
Legislativo.

CAPITULO V

DEFENSA DE LA SOCIEDAD Y DEL ESTADO


TAMATA TUWAQIRI

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo 125.

El Ministerio Público tiene por finalidad de promover la acción penal pública


conforme a lo establecido en la Constitución y las leyes del Estado Comunitario.

I.- El Ministerio Público ejerce el Fiscal General del Estado Comunitario, los
Fiscales Regionales y demás funcionarios designados por este, conforme a
los principios de unidad de actuación y dependencia jerárquica con sujeción
a la ley.

II.- El Ministerio Público ejerce la función acusadora y la dirección de las


diligencias de policía Judicial, en sus funciones de averiguación del delito y
descubrimiento del delincuente, conforme determina la ley.

III.- Una ley establecerá la estructura, organización y funcionamiento del


Ministerio Público.

Artículo 126.

Son atribuciones del Ministerio Público:


I.- Defender los Derechos e intereses del Estado Nacional, las Regiones,
Distritales, Comunales y Locales (Municipios).

II.- Promover la ejecución y cumplimiento de las Leyes, sentencias


judiciales y disposiciones administrativas.

III.- Vigilar la conducta oficial de los funcionarios públicos y cuidar que todos
desempeñen eficientemente sus deberes.

IV.- Perseguir los delitos y contravenciones de las disposiciones


constitucionales o legales establecidos.

V.- Servir de consejeros jurídicos a los funcionarios administrativos del


Estado Comunitario.

Vi.- Ejercer eficiente e imparcialmente las funciones que determine la Ley.

Artículo 127.

El Fiscal General del Estado Comunitario es designado por el Consejo Supremo


del Estado, con dos tercios de votos de sus miembros. Tiene su sede en la
Capital del Estado.

I.- El Fiscal General del Estado Comunitario desempeña sus funciones por
el plazo improrrogable de diez años y no puede ser reelecto. No puede ser
destituido sino en virtud de sentencia condenatoria previa acusación del
Consejo Supremo del Estado. A tiempo de decretar la acusación, el
Consejo Supremo del Estado suspenderá de sus funciones al encausado.

II.- Para ser Fiscal del Estado Comunitario se requiere las mismas
condiciones que para ser Ministro de la Corte Suprema.

III.- El Fiscal General del Estado Comunitario dará cuenta de sus actos al
Consejo Supremo del Estado por lo menos una vez al año.

CAPITULO VI

DEFENSOR Y DEFENSORA DEL PUEBLO


MARKATA ARXATIRI TUWAQIRI

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA
Artículo 128.

El cargo de defensoría del Pueblo es Diárquico, y lo asume una pareja legalmente


casados. Los Defensores del Pueblo velan por la vigencia y el cumplimiento de los
derechos y garantías de las personas, de las comunidades, de los daños del
medio ambiente y sobre las actividades administrativas de todo el sector público.
Asimismo promueve la difusión de los derechos humanos individuales y
comunitarios.

I.- Los Defensores del Pueblo son autónomos y no reciben instrucciones de


los Poderes Públicos. En el Presupuesto del Congreso del Poder Legislativo
se contemplará una partida para el funcionamiento de esta institución.

Artículo 129.

Los Defensores del Pueblo son elegidos por dos tercios de votos del total de los
miembros del Consejo Supremo del Estado Comunitario podrán ser enjuiciados,
perseguidos, ni detenidos por causa del ejercicio de sus funciones, salvo la
comisión de delitos comunes, en cuyo caso se aplicará las sanciones conforme a
ley.

I.- Los Defensores del Pueblo desempeñan sus funciones por un periodo de
cinco años y no pueden ser reelectos.

II.- El cargo de Defensores del Pueblo es incompatible con el desempeño


de cualquier otra actividad del pública, o privada renumerada a excepción
de la docencia universitaria.

Artículo 130.

Los Defensores del Pueblo tienen la facultad de interponer recursos de


inconstitucionalidad directa de nulidad, amparo, habeas corpus y habeas data, sin
necesidad de mandato.

I.- Los Defensores del Pueblo, para ejercer sus funciones, tienen acceso
libre a los centros de detención, reclusión o internaciones.

II.- Las autoridades y funcionarios de administración pública, civil o del


Servicio de Seguridad Nacional “SSN” y Regional “SSR”, tienen la
obligación de proporcionar a los Defensores del Pueblo la información que
soliciten con relación al ejercicio de sus funciones. En caso de no ser
debidamente atendidos en sus solicitudes, los Defensores deberán poner el
hecho en conocimiento del Consejo Supremo del Estado Comunitario; sin
perjuicio alguno e interponer la acción legal correspondiente contra el o los
infractores.

Artículo 131.
Los Defensores del Pueblo darán cuenta de sus actos al Consejo Supremo del
Estado, por lo menos una vez al año en la forma que se determina por ley y
podrán ser convocados por cualquiera de la comisiones del Congreso del Poder
Legislativo, en relación al ejercicio de sus funciones.

I.- La organización y demás atribuciones de los Defensores del Pueblo y la


forma de la designación y responsabilidades se establece por ley.

CAPITULO VII

PROCURADURÍA GENERAL DEL ESTADO COMUNITARIO

Artículo 132.

La Procuraduría General deL Estado Comunitario es el órgano técnico de defensa


legal y representación jurídica de los intereses del Estado, tiene las siguientes
atribuciones:

I.- intervenir como sujeto procesal en las acciones legales del Estado,
incluyendo las emergentes de las funciones y dictámenes de la Auditoria
General del Estado Comunitario.

II.- Evaluar la gestión de las unidades jurídicas del sector público y la


aplicación y eficacia de las normas.

Artículo 133.

La Procuraduría General del Estado Comunitario, se ejerce por el Procurador


General Estado Comunitario.
I.- El Procurador General es designado por el Consejo Supremo del Estado,
por dos tercios de votos del total de sus miembros y tiene su sede en la
ciudad de La Paz.

II.- El Procurador General del Estado Comunitario desempeña sus


funciones por el plazo improrrogable de diez años y no puede ser reelecto.
No puede ser destituido sino en virtud de sentencia penal condenatoria, por
la Corte Suprema de Justicia a tiempo de decretar la acusación, el Consejo
Supremo del Estado suspenderá de sus funciones al encausado.

Artículo 134.

Para ser Procurador General del Estado Comunitario se requiere las mismas
condiciones que para ser Ministro de la Corte Suprema.
I.- Una Ley establecerá la estructura, organización y funcionamiento de la
Procuraduría General del Estado Comunitario.

Artículo 135.

Son funciones especiales del Procurador General del Estado Comunitario:

I.- Acusar ante la Corte Suprema de Justicia, a los funcionarios públicos


cuyo juzgamiento corresponda a esta Corporación.

II.- Velar porque los demás agentes del Ministerio Público desempeñen
fielmente su cargo, y que se les exija responsabilidad por faltas o delitos
que cometan.

CAPITULO VIII

REPRESENTACIÓN POPULAR

MARKACHIRINA SAYT’AWIPA

Artículo 136.

El Presidente y la Presidenta, los miembros del Consejo Técnico Legislativo, son


elegidos por el Sufragio Universal del pueblo, en forma directa y secreta de las
listas de candidatos presentadas por los partidos políticos inscritos en la Corte
Electoral con personería jurídica vigente. En Cambio los miembros del Consejo
Supremo del Estado Comunitario, los Consejeros, los Alcaldes y las autoridades
diárquicas, los miembros del Consejo Técnico Legislativo y todas las demás
autoridades que esta Constitución así lo determina son elegidos por el Sufragio
Universal del pueblo, en forma directa y secreta de las listas de candidatos
presentadas por las Entidades orgánicas con personería jurídica en vigencia. .

I.- El periodo de duración de sus mandatos es de cinco años, salvo


aquellas autoridades que esta Constitución le otorga otro periodo de
mandato.

Artículo 137.

Todos los hombres y mujeres tienen derecho a participar en asuntos políticos, libre
y directamente o por medio de sus representantes elegidos. Los electores y
electoras tienen derecho a que sus representantes rindan cuentas públicas y
transparentes de cada periodo conforme a un programa de cumplimiento
presentado antes de las elecciones.

Artículo 138.
Son medios de participación y protagonismo político del pueblo, en el ejercicio
libre de la soberanía, para determinar el destino del Estado: la realización de la
elección de cargos públicos, el referendo, la consulta popular, la revocatoria del
mandato, la iniciativa legislativa, constitucional y constituyente.

I.- Las asambleas de hombres y mujeres de la sociedad organizada, son


medidas cuyas decisiones tienen carácter propositivo, consultivo, ejecutivo
y evaluativo en todo lo referente a lo social, económico, político y cultural de
las Instancias correspondientes.

II.- En la atención ciudadana y comunitaria, para la autogestión, la cogestión


y en todas modalidades y formas de actividades, incluyendo las de carácter
financiero, empresarial comunitaria y las demás instituciones asociativas se
regirán por valores de reciprocidad y equilibrio.

Artículo 139.

Las materias de especial trascendencia nacional, podrán ser sometidas a


un referendo consultivo, por iniciativa del Presidente o Presidenta del
Estado Comunitario en Consejo de Ministros; por acuerdo concertado del
Consejo Supremo del Estado de la mayoría de sus integrantes o a solicitud
de un número no menor del diez por ciento de los electores y electoras
inscritos en el registro electoral.

Artículo 140.

Serán sometidas a referéndum, para ser abrogadas total o parcialmente, las


leyes cuya abrogación fuere solicitada por iniciativa de un número no menor
del diez por ciento de los electores o electoras inscritas en el registro
electoral o por el Presidente y Presidenta del Estado Comunitario en
Consejo de Ministros.

Artículo 141.

Requisitos para ejercer cargos del Estado Comunitario, se necesita cumplir


con los siguientes requisitos:

I.- Ser Boliviano (Qullana-suyu) de nacimiento con residencia permanente en el


país.

II.- Ser Bilingüe con buenos conocimientos de por lo menos un idioma originario:
Aymara, Quechua o Guaraní.

III.- Estar inscrito en el padrón electoral de su jurisdicción o circunscripción como


miembro de una Entidad orgánica o de un Partido Político.
IV.- No haber sido condenado en los órganos judiciales ni tener pliego de cargo
ejecutoriado.

PARA SER MIEMBRO DEL CONSEJO SUPREMO DEL ESTADO


COMUNITARIO ADEMÁS SE NECESITA CUMPLIR LOS SIGUIENTES
REQUISITOS ESPECÍFICOS:

- Haber ejercido cargos de consejo en su distrito, municipio y región


correspondiente.

- Haber cumplido por lo menos 35 años y no ser de más de 65 años de edad a la


fecha de la elección.

PARA SER MIEMBRO Y REPRESENTANTE DEL CONGRESO LEGISLATIVO


ADEMÁS SE NECESITA CUMPLIR LOS SIGUIENTES REQUISITOS:

- Conocer los problemas sociales, económicos, culturales y políticos del país.

- Haber cumplido por lo menos 35 años de edad a la fecha de la elección.

- Tener residencia en la Circunscripción Electoral correspondiente por lo menos 2


años.

- Tener trayectoria y respaldo de su jurisdicción y circunscripción electoral.

PARA OCUPAR CARGOS DE PRESIDENTES CONSTITUCIONALES,


PRIMEROS MINISTROS, ALCALDES MUNIPALES, PRESIDENTE DEL
CONSEJO SUPREMO DEL ESTADO COMUNITARIO ADEMÁS SE REQUIERE:

II.- Haber contraído matrimonio por lo menos dos años antes de presentarse a la
elección para asumir un gobierno Diárquico.

IV.- Estar inscrito en el padrón electoral de su jurisdicción o circunscripción


Haber cumplido por 40 años y no exceder de 55 años de edad a la fecha de la
elección.

PARA DESEMPEÑAR Y SER MIEMBRO DEL CONSEJO EJECUTIVO DE


MINISTROS ADEMÁS SE REQUIERE:

- Haber cumplido 35 años de edad exceder los 65 años a la fec ha de la elección.

- Tener especialidad afín al cargo y materia del ministerio a optar.

PARA EJERCER LAS FUNCIONES DE DEFENSORES DEL PUEBLO SE


REQUIEREN TENER ADEMÁS LAS SIGUIENTES CONDICIONES:

- Haber cumplido cuarenta años de edad y no exceder los 65 años.


- Tener respaldo de las organizaciones sociales y populares organizadas en
Entidades Orgánicas.
- Hallarse en pleno derecho civil y político y amplia trayectoria de apoyo social.

- Conocer los derechos individuales y comunitarios.


- Haber desempeñado funciones sociales afines al cargo por un período de diez
años.

PARA OCUPAR EL CARGO DE CONSEJERO COMUNITARIO DISTRITAL SE


DEBE CUMPLIR ADEMÁS CON LOS SIGUIENTES REQUISITOS:

- Haber nacido para el sector rural en el Ayllu o en la comunidad, en el sector


urbano en el barrio o haber adquirido en forma definitiva su permanencia.

- Haber cumplido 20 años de edad y ser apto para ejercer el cargo.

- Haber contraído matrimonio por lo menos dos años antes a optar el cargo en
el Consejo.

PARA SER MINISTRO DE LA CORTE SUPREMA SE REQUIERE ADEMÁS:

- Haber cumplido treinta y cinco años y no sobrepasar los 65 de edad.


- Hallarse en pleno goce de sus derechos civiles y políticos.

- Ser graduado en Derecho y tener título académico en Provisión Nacional.

- Haber ejercido la profesión de abogado por un período de diez años.

- Haber sido profesor de Derecho en un establecimiento de enseñanza


universitaria.

- Se reconoce la validez de las credenciales para ser Ministro de la Corte Suprema


de Justicia, solamente las refrendadas por disposiciones constitucionales.

OCTAVA PARTE
CAPITULO I

REGIMEN ELECTORAL

CHIJLLAWI CHIQANCHT’A

DISPOSICIONES GENERALES
TAQPACHA WAKIYATA

Artículo142.
Los ciudadanos, hombres y mujeres tienen el derecho de organizarse en
partidos políticos para postular a candidatos a la Presidencia del Estado
Comunitario (diárquica), los miembros del Poder Legislativo como establece
en esta Constitución.

Artículo 143.

Los Partido Políticos se registrarán y harán reconocer su personería jurídica a la


Corte Electoral del Estado Comunitario.

I.- Los Partidos políticos son personas colectivas de derecho público que
concurren a la formación de voluntad popular; su programa, organización,
funcionamiento y la selección de sus candidatos deben ser democráticos y
ajustarse a los principios, derechos y garantías reconocidos por esta
constitución.

II.- Deben presentar la firma de un porcentaje del 0,5 % de ciudadanos


inscritos en el Padrón Electoral de la jurisdicción y la respectiva
Circunscripción Electoral. Presentar un programa de acción que deberá ser
democrático y ajustarse a los derechos y garantías reconocidos por esta
constitución.

III.- Rendirán cuentas públicas de los recursos financieros que reciban del
Estado y estarán sujetos al control fiscal en la forma y las condiciones que
determine la Ley.

Artículo 144.

Son Entidades Orgánicas todas aquellas que están circunscritas a un territorio


definido, que representan a una cultura específica y cuentan por lo menos con el
40% de apoyo poblacional. Se consideran Entidades Orgánicas las organizaciones
originarias tradicionales, las juntas vecinales u otras que tengan similares
características que cuentan con personería jurídica vigente.

I.- De acuerdo a las disposiciones legales vigentes, las Entidades Orgánicas


tienen derecho y presentarán sus candidatos para las elecciones
Municipales. Para la elección de los Consejos Municipales, Comunales,
Distritales, Regionales y para el Consejo Supremo del Estado Nacional se
presentará en la modalidad rotativa a través de una terna y por cada área
lingüística territorial.

II.- Su vigencia y derechos serán insertos en la ley electoral.

Artículo 145.
Para postular a los Consejos Municipales, Comunales, Distritales, Regionales y el
Consejo Supremo del Estado, Alcalde y Alcaldesa, deberán ser propuestos por las
Entidades Orgánicas de ciudadanos, los mismos deberán registrar el nombre,
color y sigla, en la Corte Electoral del Estado Comunitario.

I.- Las Entidades Orgánicas deberán postular candidatos diárquicos, para


ocupar los principales cargos del “municipio” Comunales, Distritales,
Regionales y Nacional; tomando en cuenta que serán obligatorios
desempeñar la función diárquicas, establecido por esta Constitución.

Artículo 146.

Los Partidos Políticos y las Entidades Orgánicas están obligadas por ley a
rendir cuenta de los recursos financieros que reciban del Estado para los
comicios electorales.

Artículo 147.

Son Órganos Electorales:

La Corte Nacional Electoral


Las Cortes Regionales Electorales
Los Juzgados Electorales
Los Jurados de Mesas Sufragantes
Los Notarios Electorales y otros funcionarios que instituye la Ley.

Artículo 148.

Se establece en el territorio de la República las circunscripciones Electorales


establecidas de Uninominales; asimismo se da vigencia a las circunscripciones de
las Áreas Lingüísticas Territoriales y las circunscripciones de áreas urbanas.

Artículo 149.

La elección del Presidente y Presidenta del Estado Comunitario será el resultado de toda la circunscripción
nacional, única y por mayoría absoluta de votos validos computados.

I.- Sí los candidatos a Presidente y Presidenta del Estado Comunitario obtuvieran la mayoría absoluta

de votos válidos, esta elección es definitiva y válida. Sí ninguno de los candidatos a alcanzado la

mayoría absoluta de votos; el Congreso del Poder Legislativo convocará nuevamente a una segunda
vuelta electoral; en un plazo de 30 días, con las dos formulas de mayor número de votos validos y se

decidirá la elección por simple mayoría.

II.- Ninguno de los candidatos de la fórmula podrán renunciar antes de la


segunda vuelta electoral, este permitirá garantizar una amplia participación
Democrática del Pueblo.

III.- En las regiones Autónomas serán elegidos los miembros del Poder
Legislativo Titulares y Suplentes de la Circunscripción, siempre que hayan
superado el 3% del total de votos válidos a nivel nacional.

IV. - Para la elección de los miembros del Poder Legislativo “Uninominales”, la Corte Electoral del Estado
Comunitario determinará el territorio del Estado en circunscripciones electorales, que serán definidas por
ley, tomando en cuenta la base poblacional, afinidad cultural y continuidad territorial.

V.- En cada Circunscripción Uninominal se elegirán por simple mayoría de votos válidos, un

miembro del Poder Legislativo Titular y su respectivo Suplente. En caso de empate se remitirá la

Elección en el término que establezca la Corte Electoral del Estado Comunitario; solo entre los

candidatos que hubieran empatado.

VI.- La Corte Electoral del Estado Comunitario publicará 180 días antes de las elecciones, la

resolución que emita a las Circunscripciones Electorales.

Artículo 150.

La inscripción de la nomina de candidatos se realizará 70 días antes de cada


elección, los Partidos Políticos o las Entidades Orgánicas deberán proceder a la
inscripción de sus candidatos por lista completa y según la ley.

I.- Estas listas deberán ser presentados ante la Corte Electoral del Estado
Comunitario a través de la Corte Regional Electoral, en los formularios
correspondientes y serán de conocimiento a nivel estatal:

De nivel Nacional (Partidario):

a) Los Candidatos a la Presidencia del Estado Comunitario (diárquica).


b) Los Candidatos para ser miembros del Poder Legislativo, Uninominales
titulares y suplentes.

A nivel Regional Autónomo:

a) Los Candidatos a Primer Ministros (Diárquico)


b) Los Candidatos a Consejo Regional.

A nivel Distrital:

a) Los miembros del Consejo Comunitario Distrital.


b) Las Autoridades originarias o distritales.

A nivel Comunal:

a) Los Candidatos al Consejo Supremo del Estado titulares y suplentes.


b) Las Autoridades originarias Comunales.

A nivel (Municipal):

a) Los Candidatos al Consejo Municipal, titulares y suplentes Diarquico.

II.- Las nominas de los candidatos para miembros de los Consejos y el Consejo
Supremo del Estado Comunitario, serán presentados ante la Corte Regional
Electoral y Corte Electoral del Estado Comunitario, previo una elección interna,
con dos años de anticipación para su asunción al cargo, para los Gobiernos
regionales y otras autoridades subalternas serán presentados una terna,
conforme a la que dispone esta constitución.

Artículo 151

La elección de los postulantes arriba mencionadas se realizará previa


convocatoria de la Corte Regional Electoral y Corte Electoral del Estado
Nacional Comunitario, donde participarán solamente los miembros de los
Consejos de las cuatro Regionales para elección del Consejo Supremo del
Estado; y los miembros de los Consejos Distritales y del (municipio) para la
elección de los Consejos Regionales. Finalmente para los Consejos
Distritales, eligen en el área rural los comuneros mayores de 18 años, sí
están casados y tienen la condición de Jaqi (ser humano) y en el área
urbana los miembros mayores de 18 años de las juntas vecinales previo
presentación de credenciales.

OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
OOOOOOOOOOO

CAPÍTULO UNICO
ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE

QULLANA-SUYU TANTACHA JIKTHAPTAWI

Artículo 152

El pueblo Boliviano (Qullana suyu) por voluntad propia, es el depositario del


poder constituyente originario. Para establecer la vigencia del poder, es
necesario convocar a una Asamblea Nacional Constituyente, con la
participación de los pueblos con identidad lingüística y territorial; con el
objeto de transformar al Estado y establecer un nuevo ordenamiento
jurídico.

Artículo 153.

Para lograr este propósito es importante redactar, difundir, socializar,


concertar y aprobar una nueva Constitución Política, para un nuevo Estado
Comunitario y Democrático, que permita construir una nueva sociedad de
seres humanos, con principios de Unidad y Hermandad Comunitaria y que
asegure la vigencia del Sistema político SUMA QAMAÑA.

Artículo 154.

Para la Asamblea Nacional Constituyente se podrá convocar a través de los


Presidentes del Estado Comunitario, previo consideración del Gabinete
Ministerial y la aprobación del Poder Legislativo de forma única y transitoria
hasta que se conforme el Consejo Supremo del Estado a través de la
vigencia de esta Constitución Política del Estado, mediante por dos terceras
partes de sus integrantes. En la jurisdicción municipal son los Consejos
Municipales, mediante el voto de las dos terceras partes de los mismos; y
con un veinte por ciento de los electores(as) inscritos en el registro
electoral.

Artículo155.

Los Presidentes de la República y Ministros de Estado no podrán objetar a la


nueva Constitución Política del Estado. Los Poderes constituidos no podrán
impedir las decisiones de la Asamblea Nacional Constituyente.

I.- A efectos de la promulgación de la nueva Constitución, para su difusión


será publicada en la Gaceta Oficial de la República de Bolivia, a los 15 días
de su promulgación.

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DISPOSICIÓN DEROGATORIA ÚNICA.
MAYAKI TAXPACHA CHHAQHAYXAÑATAKI

Artículo único

Queda derogada automáticamente la anterior Constitución de la República


de Bolivia. El resto del Ordenamiento Jurídico, será revisado, concordado,
elaborado y promulgado para que su vigencia para que no contradiga a esta
última Constitución.
8.9 Diarquía Federal Consociacional, Javier Medina

Javier Medina

Exposición de motivos

El Gobierno nacional, en el Diálogo nacional 2000, sostuvo que si para


luchar contra la pobreza se tenía que hacer reformas constitucionales, habría
que ir hacia una reforma de la Constitución, para lo cual convocó una Mesa
Política que el mismo gobierno se encargó de frustrar.

El Consejo de Notables que redactó la Ley de Necesidad de Reforma de la Constitución fue


exclusivamente urbano, paceño y occidental. Se rehusó a incluir Notables indígenas, así
como las propuestas que hicieran los municipios y las organizaciones indígenas y de
mujeres.

El Congreso anterior, en el plazo legal, no quiso aprobar la Ley de Necesidad de Reforma


de la Constitución. Tuvo que ser la presión de una Marcha indígena la que obligara a último
momento a aprobarla.

El nuevo Congreso, en el plazo previsto constitucionalmente, no ha aprobado la Ley de


Necesidad de Reforma de la Constitución.

El Estado de Derecho se está vaciando aceleradamente de todo contenido. Las reformas de


1985 han cerrado su ciclo y el resultado es desolador.

La elite gobernante ha transferido los recursos naturales (condición de posibilidad de una


estatalidad mínima) a las transnacionales. Con un Decreto Supremo, el 24806, del 4 de
agosto de 1997, ha cambiado el sentido del precepto constitucional que define los recursos
del subsuelo como de dominio del Estado, en el sentido que lo son, efectivamente,
mienstras están en el subsuelo, pero apenas afloran a boca de pozo son de las
transnacionales, a las que las elites gobernantes se articulan, subalternamente.

Las reformas económicas, en concreto, la capitalización de las empresas públicas, que se


hicieran para incrementar los ingresos fiscales, contribuyen ahora muchísimo menos que las
otrora corruptas e ineficientes empresas estatales privatizadas

El Estado, a través de las elites gobernantes, ha echado mano de los ahorros y las pensiones
de los ciudadanos. Paga subsidios a los ancianos no con las ganancias de las AFP, como
dice la ley, sino con las pensiones de los contribuyentes actuales.

Las elites gobernantes no respetan la fe del Estado en sus compromisos con la cooperación
internacional y los municipios: los recursos HIPC que, por ley, deben ir directamente a los
municipios, para luchar contra la pobreza, en más de un sesenta por ciento han sido
recentralizados, mediante un Decreto Supremo, para pagar salarios a su militancia
convertida en funcionarios públicos.
El mismo Gobierno Nacional se encarga de erosionar el estado de Derecho al borrar las
leyes con Decretos Supremos.

Las Superintendencias no tienen capacidad, técnica ni ética, para velar por los intereses
nacionales.

Las reformas político-administrativas de descentralización y participación popular, han


ingresado a un proceso compulsivo de recentralización y descuido por parte del Gobierno
nacional.

Las Fuerzas Armadas y la Policía ya no obedecen al poder político: ingentes recursos


financieros de créditos y donaciones son desviados, en momentos de crisis, para comprar su
lealtad. Para la ciudadanía, los cuarteles son lugares de tortura y muerte de conscriptos
indígenas, así como de explotación económica en las haciendas de las elites gobernantes; la
policía es una mafia jerárquica, articulada al crimen organizado, para robar a la sociedad.

La gente ya no confía en la Judicatura y la Policía y se toma la justicia por sus manos.

A efectos prácticos, no hay Estado de Derecho, ni seguridad jurídica para nadie.

Bondades de la propuesta

Esta propuesta parte, con pragmaticidad y realismo, del hecho de la


existencia de dos Bolivias que pertenecen a dos civilizaciones antagónicas.
No se hace la ilusión de una Bolivia homogénea y unitaria.

Sin una sintaxis adecuada, las dos Bolivias se podrían bloquear mutuamente
al intentar, cada una, sobre un formato monocultural, plasmar sus visiones
antagónicas de país. La Asamblea Constituyente podría devenir en una guerra
de trincheras o una torre de babel.

La cultura jurídica boliviana es barroca; su lógica es la de la añadidura; su


estilo: mezclar la ley con su reglamentación hasta los detalles más nimios; su
pecado original: rendir culto a la Legislación comparada para ahorrarse el
esfuerzo de pensar con cabeza propia. Una buena dosis de minimalismo sobre
lo general y creatividad sobre lo formal, es lo que necesitamos ahora.

Teniendo en cuenta que las megatendencias van hacia regímenes


autonómicos, federales, descentralizados... lo sensato, en la Asamblea
Constituyente, es limitarse a consensuar un Marco General Constitucional.
Luego, cada Autonomía, diseñará sus propios Estatutos. Mi propuesta busca
reducir la variedad para que no implosione el sistema.

Para una población de ocho millones de habitantes no es razonable tener muchos niveles de
gobierno. La Diarquía propone un solo nivel de gobierno en el nivel de las Parcialidades:
una suerte de super Meso.

Teniendo en cuenta los aprendizajes del proceso de descentralización que ha vivido


Bolivia, plantea dos niveles de gerencia subnacionales: uno a nivel de Regiones
autonómicas: elección directa del Gobernador y un Consejo de fiscalización, otro, a nivel
Local: elección directa del Alcalde o designación a través del sistema de cargos de la
autoridad originaria. El enfoque en estos niveles subnacionales es estrictamente técnica,
gerencial. Hay que minimizar, en lo local, la dimensión política.

La cohesión simbólica y fiscal de la Diarquía es garantizada por un nivel superior,


presidido por la Pareja del Presidente de la Diarquía y la Pareja del Jefe de la Oposición, y
los Poderes fiscal, electoral, contralor y constitucional.

Preámbulo

Nosotros, las naciones indígenas -originarias y la nación boliviana,


reconstituidos en la Parcialidad occidental y la Parcialidad indígena,
siguiendo el Modelo del Ayllu y la Dualidad onda / partícula,

Inspirados en nuestra historia milenaria y en el nuevo paradigma científico del siglo XXI,

En ejercicio de nuestra voluntad de vivir con sentido y representados por los miembros de
la Asamblea Constituyente,

Invocando la energía de la Vida que se expresa, ora en espiritualidades de manifestación,


ora en religiones de proclamación,

Afirmando la voluntad de convivir y resolver nuestras diferencias y conflictos al amparo de


una Constitución intercultural que reconoce ambos sistemas: el occidental y el indígena,
como antagónicos pero complementarios,

Inspirados en los valores occidentales de libertad, igualdad, fraternidad, equidad,


autonomía, persona, desarrollo, progreso, así como en los valores indígenas de
relacionalidad, correspondencia, reciprocidad, similitud, comunitarismo, equilibrio, tercero
incluido y al amparo del principio de complementariedad de opuestos,

Reconociendo el Derecho Internacional, emanado del sistema de las Naciones Unidas, así
como el Derecho Consuetudinario, como fuentes primarias vinculantes de esta
Constitución,

Mediante el voto libre y en Asamblea Constituyente, decretamos el siguiente Marco


Constitucional como referencia común y general para que cada Parcialidad: una: de Tierras
Altas, hegemónicamente indígena, y la otra: de Tierras Bajas, hegemónicamente occidental,
diseñen participativamente sus propios Estatutos autonómicos e interculturales de acuerdo a
sus civilizaciones hegemónicas y a sus recursos y potencialidades específicos.
Título embrional

Bolivia se define como una Diarquía Federal Consociacional.

Diarquía, porque entiende a las naciones indígenas y a la nación boliviana (en esto consiste,
además, su carácter multinacional) como dos sistemas civilizacionales antagónicos pero
complementarios, siguiendo el modelo del ayllu: aransaya / urinsaya y la dualidad onda /
partícula de la física cuántica.

Territorial, cultural y ecológicamente, la Diarquía se expresa en dos Parcialidades: Tierras


altas y Tierras bajas, siguiendo la plantilla departamental actual. Estas dos Parcialidades se
constituyen en dos Estados. Cada Parcialidad estará compuesto por un Poder legislativo, un
Poder Ejecutivo y un Poder judicial. La Diarquía, que es el efecto que produce la
complementariedad de ambas Parcialidades, estará representada por una Presidencia de la
Federación, compuesta por una Pareja Suprema que expresará la Unidad dual de la
Diarquía, es decir, el Cerebro bifronte de la federación. Este nivel supremo del Estado se
compone de un Poder Fiscal, un Poder Contralor, un Poder Electoral y un Poder
Constitucional como Poderes separados de los Poderes estaduales.

La Diarquía expresa la esfera de la Representación política, el manejo, control y


retroalime ntación del sistema federal. No gobierna, representa y busca la homeostasis y
ecualización fiscal del sistema político. Su función es simbólica y técnica.

La Diarquía adopta para su gestión un nivel de gobierno en la esfera de las Parcialidades:


Poderes legislativo, ejecutivo y judicial y, al interior de cada Parcialidad, niveles de
Administración Autonómica Regional que cada Parcialidad decidirá y, al interior de cada
Administración Autonómica Regional, ésta decidirá Gerencias Autonómicas Locales, en
base a los ayllus, Pueblos indígenas y Municipios de entre cincuenta mil y cien mil
habitantes, con autonomía administrativa y fiscal, cuyos gerentes serán elegidos
directamente en el caso de los municipios y designados según sus sistemas de cargos en el
caso de los Ayllus y Pueblos indígenas.

La soberanía, en tiempos de globalización, sólo puede ser de tipo cuántico: reside en los
momentos en que los ciudadanos y las comunidades eligen / designan directamente a sus
representantes en los comicios generales, de parcialidad, regionales y locales; así mismo,
reside en los Referéndum que los representantes de la Diarquía, en cada uno de los niveles
de gobierno y de administración, convocarán para tomar decisiones sobre temas
trascendentes para todos. La soberanía reside, así mismo, en el cumplimiento de la Vía
comunitaria del sistema de cargos y de la Vía individualista del sistema de partidos
políticos. La decisión soberana más importante, empero, es esta Constitución.

El Estado es laico y aconfesional, para garantizar los derechos de todos. Reconoce y


respeta, sin embargo, las religiones monoteístas de proclamación y las espiritualidades
indígenas de manifestación como lo nuclear del Pacto de Reciprocidad constitucional entre
ambas civilizaciones.
En el ámbito de la Democracia representativa conformada por los Gobiernos de las
Parcialidades, los ciudadanos deliberan por medio de sus representantes democráticamente
elegidos, vía partidos, en el caso de los que siguen la Vía individualista; vía sistema de
cargos, en el caso de los que siguen la Vía comunitaria. En el ámbito de la Democracia
participativa conformado por las Administraciones locales, los individuos y las
comunidades co-gestionan a través de la planificación participativa de mediano plazo, los
presupuestos participativos anuales o plurianuales y el control social a la implementación
de dichos planes, como retroalimentación del sistema de administración local. En el nivel
regional, cada Parcialidad buscará un equilibrio entre la democracia representativa y la
democracia participativa.

La alicuota de representación política se regirá de acuerdo al último Censo Nacional


vigente. En este caso: en el nivel diárquico, las naciones originarias tendrán, por ejemplo,
el 62% y los individuos de la nación boliviana, el 38%. Los porcentajes llegan hasta el
nivel local.

Todos los bolivianos, occidentales e indígenas-originarios, podrán seguir la Vía


comunitaria y la Vía individualista, siguiendo las reglas de juego de cada sistema, como
fruto, precisamente, de la interculturalidad. Potencialmente, no son Vías excluyentes,
aunque en el momento de la decisión, en el Acto, debe decidir por una de ellas en
exclusión de la otra Vía.

La Diarquía no tendrá fuerzas armadas. Los gobiernos estaduales de las Parcialidades


organizarán la seguridad de la ciudadanía y sus instituciones por medio una Guardia civil
de elite. Las Administraciones locales organizarán Policías locales para resguardar el orden
público y hacer cumplir sus Ordenanzas.

La presente Constitución es un marco general, vinculante para toda la Diarquía. Cada


Gobierno de las dos Parcialidades estatales redactará su propio Estatuto autonómico dentro
de las definiciones, principios, valores, derechos, garantías y deberes fundamentales, así
como las Competencias y atribuciones que fija esta Ley de leyes a cada nivel de gobierno y
administración.

De la esfera simbólica

Es decisivo empezar explicitando el software o los Principios lógicos de ambas


civilizaciones para poder entender la naturaleza y el alcance de este Pacto de reciprocidad
civilizacional.

El Software occidental

El software occidental está compuesto por el Principio de identidad que enfatiza la


coincidencia de un ente consigo mismo y la diferencia con cualquier otro ente. Este
principio aplicado hac ia adentro, en las anteriores Constituciones, impidió el
reconocimiento de las Naciones indígenas y originarias.
El Principio de No contradicción entiende que una proposición no puede ser verdadera y
falsa a la vez y en el mismo sentido. Si se es boliviano entonces no se puede ser, por
ejemplo, aymara al mismo tiempo y en el mismo sentido.

El Principio de Tercero excluido afirma la exclusividad de los valores de verdad y falsedad:


una proposición es o bien verdadera o bien falsa; no existe una tercera posibilidad. Este
principio lógico establece dicotomías y contraposiciones universales y tiende, luego, a
reprimir, ignorar o subsumir una de las polaridades; en el caso de las Constituciones
anteriores, la polaridad indígena.

El software indígena

El Principio de Relacionalidad afirma que todo está relacionado, vinculado, conectado con
todo. Por tanto la entidad básica es la relación; no el ente; la red, no el individuo; en el caso
indígena la unidad política básica es la pareja, no el individuo. En el caso de la Diarquía, la
unidad dual está compuesta por la complementariedad de las naciones indígenas y la nación
boliviana.

El Principio de Reciprocidad afirma que los distintos aspectos, regiones o componentes de


la realidad, se corresponden de una manera armoniosa; relación que implica, por
consiguiente, bi-direccionalidad mutua. Por tanto, la reciprocidad brota de la búsqueda de
un equilibrio contradictorio entre las fuerzas antagónicas de homogeneización y
heterogeneización, de inclusión y exclusión, de alianza y hostilidad.

El Principio de complementariedad afirma que ningún ente, acción o acontecimiento existe


aislado, solitario, por sí mismo. Por el contrario, todo ente co-existe con su
complementario; ambos hacen la plenitud, la completud del ser, como un electrón es la
complementariedad onda / partícula o una pareja la complementariedad varón / mujer o la
Diarquía la complementariedad de “las dos Bolivias”.

El Principio de Tercero incluido afirma que es posible una tercera posibilidad que es más
que la suma de las partes que la constituyen. En este caso, sería la Diarquía federal
multinacional.

De las Finalidades

La civilización indígena se autocomprende como hija y partera, a la vez, de la Vida. Como


conciencia de la evolución cósmica, se sabe unida orgánicamente a la naturaleza, volcada
contemplativamente hacia la interioridad vibratoria de la materia-energía, con tendencia a
acoplarse y vivir en simbiosis con ella.

La civilización occidental se autocomprende como un pueblo en marcha hacia la Ciudad de


Dios, separado de la naturaleza, ubicado en la Historia, volcado activamente hacia la
exterioridad, con la tendencia a manipularla y transformarla artificialmente para
incrementar la tenencia de cosas y objetos.

Estas dos civilizaciones, sin embargo, convienen, como finalidad compartida del sentido de
su encuentro, en buscar la Calidad de Vida, entendida como la complementariedad y el
equilibrio entre cantidad y calidad, entre el estar y el tener, entre la acción y la
contemplación, como objetivo superior de sus políticas públicas.

De los valores

La Diarquía reconoce como sus valores más importantes: la libertad, la igualdad, la justicia,
el desarrollo, el progreso; así mismo: la relación, la diferencia, la reciprocidad, el prestigio
y el criar y dejarse criar por la Vida.

De los Derechos fundamentales

Las fuerzas de autonomía y las fuerzas de heteronomía deben buscar un equilibrio


contradictorio en aras del Bien común entre intereses individuales e intereses comunitarios.
En este sentido, este Marco Constitucional General ratifica todos los derechos individuales
aceptados por el Derecho internacional, basados en el principio individualista, así como los
derechos comunitarios basados en el principio comunalista, expresado en el derecho
consuetudinario.

La Diarquía reconoce los Derechos de los seres vivos: naturales y humanos. En cuanto a:

Los individuos reconoce el derecho a la vida, la integridad física y emocional, a diez años
de educación integral básica gratuita

A las personas les reconoce el derecho a la información

A las parejas, tanto heterosexuales como homosexuales, les reconoce el derecho al


matrimonio y a tener una familia,

A las familias: los medios para acceder a vivienda adecuada y a internet, incluida la
asistencia técnica compartida con la Administración local.

A los colectivos: a organizarse, reunirse, expresarse libre y autónomamente

A las empresas: a organizarse, lucrar, acumular y expandirse

A las comunidades les reconoce el derecho a tener Territorio

En cuanto a la Bio sfera: Esta Constitución entiende a la Biosfera como un ser vivo,
inteligente que se autorregula y que, por tanto, tiene derecho al equilibrio homoestático y a
vivir en simbiosis con la sociedad humana. Esta Constitución ratifica todos los derechos
humanos aceptados por el derecho internacional, basados en los principios del humanismo
y de la ilustración, así como los derechos de la biosfera, basados en los principios de las
espiritualidades indígenas y las Cumbres de la Tierra.

Los recursos naturales no renovables, tanto del subsuelo, el suelo y el vuelo, son de
dominio y propiedad de la Diarquía y serán explotados ecológicamente para proveer
recursos financieros a la Diarquía para satisfacer las necesidades, derechos y garantías
constitucionales de los bolivianos. Estos recursos y su manejo económico son la base
material mínima e inalienable de la estatalidad de la Diarquía Federal Consociacional.
Todos los recursos naturales no renovables que hubieren sido entregados a las
Transnacionales serán recuperados en su integridad por la Diarquía. Sin ellos cualquier
proyecto colectivo con densidad estatal es imposible.

Los recursos naturales renovables, tanto del subsuelo, el suelo y el vuelo, son de dominio y
propiedad de las comunidades y serán manejados ecológicamente para garantizar Calidad
de vida a todos los bolivianos.

De los deberes

Los individuos: a pagar, como impuestos, el cincuenta por ciento de sus ingresos
monetarios

Las personas: cuidar, proteger y manejar con sabiduría nuestros ecosistemas, en beneficio
de la humanidad y, en especial, nuestros recursos estratégicos: agua, hidrocarburos, gas,
biodiversidad, en beneficio nuestro, como base de una estatalidad autosostenible.

Las parejas, a participar, a través de la Vía comunitaria y/o la Vía individualista, en la co-
gestión del Bien común

Las familias: a crear una esfera emocional adecuada para incentivar la creatividad de sus
hijos y allegados

Los colectivos: a producir energía psíquica para retroalimentar el sistema noosférico de la


Diarquía

Las empresas: a crear riqueza financiera y organizacional

Las comunidades: a contribuir, a través del manejo de la energía social: ayni, minka...a las
obras públicas de su Administración local y regional

De las obligaciones
Las obligaciones civiles más importantes, que emanan del hecho de vivir en la ciudad, son
las siguientes: no contaminar el barrio en el que se vive; reciclar los deshechos; no hacer
ruido, participar de las fiestas barriales,

Las obligaciones políticas son conocer, estudiar y cumplir el Marco Constitucional General
de la Diarquía y el Estatuto autonómico de su Parcialidad. El sistema educativo y los
medios de comunicación serán responsables de cumplir esta obligación,

Las obligaciones democráticas básicas son las siguientes: participar de la Planificación


participativa de sus administraciones locales, de las consultas y referendums a las que sean
convocados. Así mismo, en tanto usuarios de los servicios públicos, participarán en el
control social de los mismos, participando de la red de monitoreo que las administraciones
locales tienen la obligación de establecer.

Las obligaciones gerenciales son las siguientes: las autoridades locales, los gobernadores de
las regiones autonómicas, los presidentes de las Parcialidades deberán rend ir cuentas
públicas anualmente, en fechas señaladas, que se constituirán en las liturgias políticas más
importantes de la Diarquía. Los medios de comunicación, con el concurso de las
universidades y/o centros educativos, tendrán la obligación de verificar la veracidad de los
informes escritos, comparándolos con los Planes de desarrollo locales, los Planes de
desarrollo regionales, los Planes de desarrollo de las Parcialidades y sus respectivas
Programaciones operativas anuales. Si la ejecución del presupuesto fuese inferior al 75%,
se descontará el 25% de los salarios de dichas autoridades, sus ministros, secretarios y
oficiales mayores, hasta que la ejecución se adecue a lo programado; esos recursos se
invertirán en hard y soft ware para las escuelas.

De las garantías constitucionales

La Diarquía garantiza:

A los individuos: identidad, nacionalidad, libertad de movimientos, protección en el


exterior

A las personas: presunción de inocencia y habeas corpus

A las empresas: seguridad jurídica en base a la lógica ganar / ganar y habeas data

A huérfanos, viudas y ancianos: insertarlos en comunidades vivas subsidiando recursos


para garantizarles un techo, alimento, vestido, terapias y oportunidades de sentirse activos
y necesarios

A las minorías étnicas: el derecho a organizar su vida de acuerdo a sus culturas

En cuanto a la biosfera: la Diarquía redactará el Código del Medio Ambiente que será el
Código Madre de todos los demás Códigos. Los Estados de las Parcialidades, en base al
Código Madre, legislarán el manejo ecológico de sus ecosistemas. Las Administraciones
regionales reglamentarán dichas legislaciones para uso operativo e implementación en las
Administraciones locales.

De la esfera imaginaria

De las ciudadanías

La Diarquía entiende la ciudadanía como la complementariedad del principio individualista


y el principio comunitario que se sustentan desde la biosfera, que entendemos como el
tercero incluido de esta relación. Así tenemos las siguientes modalidades de ciudadanía:

La ciudadanía indiv idual. Esta ciudadanía se basa en el principio individualista; supone la


propiedad privada; sus valores son igualdad y libertad; su ámbito de acción es la
democracia representativa; su contexto político el estado moderno; la fiscalización se
ejerce por delegación a través de representantes; su contexto económico son las sociedades
industriales, por tanto, la economía de intercambio dentro de un mercado lubricado por el
dinero que hace de equivalente general; la rige, pues, el principio cuantitativo. A pesar de
su eclosión moderna, es de índole patriarcal; requiere de la abstracción y de la racionalidad
instrumental.

La ciudadanía comunal. Esta ciudadanía se fundamenta en el principio comunitario; se


basa en un pacto de reciprocidad con la Diarquía sobre la base del reconocimiento de la
propiedad de la tierra y, en adelante, sobre el usufructo comunal de los recursos naturales
del territorio; sus valores son reciprocidad y equilibrio; su racionalidad: la inteligencia
emocional; su ámbito de acción es la democracia participativa municipal y comunal; su
contexto político, el modelo social del ayllu y de los pueblos indígenas; el control social es
de índole interactiva y para los temas que la gente tiene interés y necesidad; su contexto
económico está subdeterminado por las economías de don y reciprocidad; las rige el
principio cualitativo; son sociedades de índole matrístico y fraternal. La ciudadanía
comunal tiene que ver con la vida cotidiana y lo convivial; la fiesta es el momento
supremo que pauta el dominio del tiempo y de la vida.

La ciudadanía ecosimbiótica. Esta ciudadanía se basa en el principio ecológico que dice


que el ser humano es parte de la biosfera y vive en interacción con ella; se basa, así mismo,
en la propiedad colectiva de la humanidad de ciertas aynoqas como los océanos, los ríos,
grandes bosques, la atmósfera...es decir, aquellos ecosistemas que tienen que ver con el
equilibrio biosférico global. Esta ciudadanía respeta los derechos de los animales, las
plantas, los microorganismos, los ecosistemas terrestres, la “simbiosis interzonal”, como
modelo de ordenamiento y ocupación del espacio, en tanto son también seres vivos como
los seres humanos; todos forman parte de la trama de la vida. Con la ciudadanía
ecosimbiótica se encuentran el paradigma animista indígena con la perspectiva ecológica
del nuevo paradigma científico. El imperativo categórico de la ciudadanía ecosimbiótica es:
Obra de tal modo que las consecuencias de tu acción no sean destructivas para la
naturaleza, la vida y la tie rra.

De la Democracia

La Diarquía entiende la democracia como la complementariedad de dos principios


antagónicos pero complementarios: el principio representativo y el principio participativo,
que vamos a denominar democracia representativa y democracia participativa

La democracia representativa. El imaginario en el que se ubica la Democracia


representativa es el Patriarcado y una visión maquinal y de delegación a terceros de la
representación. Desde el alba de la humanidad, el comportamiento masculino se ha
revelado en la caza, la conquista o la defensa de los territorios. Los varones construyen su
dominio sobre la fuerza, la razón, el poder: la Ley. La lógica masculina de la objetividad se
opone a los sentimientos, a la emoción, a la afectividad. Los va lores masculinos tienen
prioridad en un universo técnico de competencias y de conquista de la naturaleza,
mercados, etc. Este principio da lugar y se despliega en sociedades industriales de
crecimiento, por tanto, basadas en el principio económico del intercambio. La democracia
representativa es pertinente en los espacios abstractos de lo nacional e internacional

La democracia participativa. El imaginario en el que se ubica la Democracia participativa


es el de las sociedades matrísticas y fraternales y una visión orgánica e interactiva: directa.
Desde el alba de la humanidad, en efecto, el comportamiento de la mujer ha descollado en
la transmisión de la vida, en el ordenamiento y la gestión de la casa, la transmisión de los
usos y costumbres y, por tanto, de los conocimientos. Lo suyo ha sido lo convivial y
vernacular: la escala humana. La lógica femenina apela a la intuición, la persuasión, la
influencia, la solidaridad, la búsqueda de la complementariedad, el respeto de la variedad,
el mimo de las relacio nes, la reflexión a largo plazo, por tanto, se basa en el principio
económico de reciprocidad. La democracia participativa es pertinente en los espacios
conviviales locales.

La democracia directa: Se ejercerá a través del Referéndum para definir las grandes
Políticas de Estado.

Del ordenamiento territorial

El territorio de la actual República de Bolivia, sobre el cual se constituye la Diarquía, se


divide en dos grandes Parcialidades, sobre la actual plantilla departamental: Tierras Altas y
Tierras Bajas: las llanuras mojeña, chiquitana, chaqueña -guaraní, además de la Amazonia.
Cada Parcialidad, en el diseño de sus Estatutos de Autonomía, definirán tanto sus Regiones
como sus Microregiones.

En el caso de la Parcialidad de Tierras Altas seguirán el Principio de Simbiosis interzonal o


Control vertical-transversal de un máximo de pisos ecológicos para la definición de sus
Regiones y Microregiones, de modo que el acceso a la máxima variedad ecológica permita
la generación de riqueza, tanto en la lógica de la Reciprocidad como en la del Intercambio.

En el caso de la Parcialidad de Tierras Bajas podrán seguir, eventualmente, principios


etnohistóricos de regionalización. Una referencia podría ser, por ejemplo, las antiguas
Moxitania, Chiquitania y Chiriguania

Forma estatal: diárquico, federal y consociacional

La Diarquía está compuesta por dos Estados federales: la Parcialidad de las Tierras Altas y
la Parcialidad de las Tierras Bajas, cuya asociación produce la Diarquía, justamente; es
decir, un Tercero que los vincula, políticamente.

Es multinacional porque está conformada por las naciones originarias, que pertenecen a la
civilización indígena, y la nación boliviana, que pertenece a la civilización occidental.

La Parcialidad de Tierras Altas es hegemónicamente indígena con encalves occidentales


minoritarios. La Parcialidad de Tierras Bajas es hegemónicamente occidental con enclaves
indígenas minoritarios.

Al interior de las respectivas Parcialidades, los enclaves minoritarios tienen derecho a


consociarse, tanto continua como discontinuamente, y a administrarse autónomamente.

La Diarquía, en el nivel de las Parcialidades, es federal; basada hegemónicamente en el


principio individualista, mecánica, sigue un modelo piramidal,

La Diarquía en los niveles de las Gerencias locales es consociacional; basada


hegemónicamente en el principio comunitario, orgánica, sigue el modelo de redes
neuronales

La Diarquía en los niveles de las Administraciones regionales buscará un equilibrio entre


lo federal, más mecánico, y lo consociacional, más orgánico

De la cabeza de la Diarquía

La Cabeza del Estado tendrá un carácter diárquico: no será a título individual, sino en
cuanto Pareja. El varón de la Pareja representará la energía fermiónica de la disjunción; la
mujer de la Pareja representará la energía bosónica de la conjunción.
La Pareja presidencial será elegida directamente en comicios generales, por un período de
diez años.

De las formas de organización del Poder público

En el nivel diárquico, operan la Contraloría General del Estado, la Corte Nacional


Electoral, el Tribunal Supremo Constitucional, el Gabinete de relaciones fiscales
intergubernamentales. De este nivel dependerá, así mismo, la Cancillería que ejecutará las
relaciones exteriores de la Diarquía.

En el nivel de las Parcialidades, los Estados federales son gobernados por un Primer
Ministro: Poder ejecutivo. En el caso de la Parcialidad de Tierras Altas, será designado
por el Sistema de cargos de las Autoridades originarias; en el caso de Tierras Bajas, será
elegido directamente en comicios públicos y generales. En este nivel operan además el
Poder Legislativo y el Poder Judicial. Los Cabezas de ambos Poderes, igualmente, en el
caso de Tierras Altas, serán designados por el Sistema de cargos de las Autoridades
originarias; en el caso de Tierras Bajas, serán elegidos directamente en comicios públicos y
generales.

La capital de la Parcialidad de Tierras Altas será la ciudad de La Paz; en el caso de la


Parcialidad de Tierras Bajas la capital será la ciudad de Santa Cruz.

En los niveles regionales los Poderes públicos estarán constituidos por Administraciones
Autónomas Regionales, administrados por un Gobernador. En el caso de las Regiones de
Tierras Altas, será designado por el Sistema de cargos de las Autoridades originarias; en el
caso de las Regiones de Tierras Bajas, será elegido directamente en comicios públicos y
generales

En los niveles locales los Poderes públicos estarán constituidos por Gerencias Autónomas
Locales, gerentadas por Alcaldes, en los casos en los que la población sea, de acuerdo al
Censo Nacional vigente, mayoritariamente occidental; en los casos en los que la población
sea mayoritariamente indígena, será designado por el Sistema de cargos de las Autoridades
originarias.

Los niveles técnicos de la administración pública son meritocráticos y egresarán de la


Escuela federal de administración pública que dependerá de la Diarquía.

Las Competencias

Las Competencias se derivan del Objetivo superior de cada uno de los


niveles. Salvo las competencias del nivel de la Diarquía, todas las demás
Competencias se decidirán en los Estatutos autonómicos de las estados
federales, de acuerdo a los siguientes Objetivos superiores y competencias
mínimas. Las competencias que se añadan en los Es tatutos federales no
deben entrar en contradicción con los aquí señalados.
El Objetivo superior de la Diarquía es la representación, articulación y cohesión de la
Diarquía federal consociacional.

El Objetivo superior de las Parcialidades es asegurar la viabilidad y sostenibilidad a largo


plazo del estado federal. Sus competencias específicas son las que tienen que ver con
territorio, agua, recursos naturales no renovables, importaciones y exportaciones. Así como
el cobro de impuestos y regalías a las empresas transnacionales, a las transacciones y los
hidrocarburos.

El Objetivo superior de las Regiones es posibilitar el desarrollo económico regional: lo


cuantitativo. Sus Competencias específicas son las que tienen que ver con energía,
vertebración vial, comunicaciones, infraestructura productiva, recursos naturales
renovables. Así como el cobro de impuestos a las empresas nacionales del sector privado, al
ingreso de las personas y el impuesto al valor agregado.

El Objetivo superior de las administraciones locales es asegurar la calidad de vida, es decir,


la satisfacción de las necesidades básicas, entendidas de acuerdo a las culturas locales: lo
cualitativo. Así como el cobro de impuestos a las empresas del sector comunitario y a los
bienes muebles e inmuebles.

De las Competencias de la Diarquía

De la Presidencia.
La Pareja presidencial es el símbolo de la Unidad dual del Estado y de su permanencia en el
tiempo; arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones; asume la más alta
representación del Estado en las relaciones internacionales.

Corresponde a la Pareja Presidencial:

(a) Sancionar y promulgar los Códigos legales


(b) Convocar, presidir y disolver la Dieta de los dos Parlamentos federales. La Dieta
funcionará dos veces al año. En la Dieta se aprobarán los Códigos de la Diarquía y se
decidirán los temas fiscales de ecualización del sistema federal que serán administrados por
la Diarquía y transferidos por las Parcialidades.
© Convocar a elecciones
(d) Convocar a Referéndum
(e) Nombrar y dimitir al Canciller. La Cancillería se encargará de la Relaciones exteriores
de la Diarquía, con especial énfasis en las exportaciones tanto económicas como culturales
(f) Ser informado de los asuntos de Estado
.

Del Tribunal constitucional


Es el órgano de apelación y resolución última en los asuntos de puro derecho que atañen a
la inconstitucionalidad de los códigos, leyes, decretos y reglamentos; así mismo, de los
tratados y convenios internacionales. Tiene sede en Sucre
El Presidente del Tribunal Constitucional es elegido en comicios generales por diez años.
Los Consejeros serán elegidos regionalmente, en comicios generales por diez años.
Sus fallos son inapelables. Su burocracia será meritocrática. Su presupuesto de
funcionamiento se negocia en la Dieta de la Diarquía.

De la Corte electoral

Es el órgano encargado de organizar, ejecutar y dar los resultados finales y


oficiales de los comicios, nacionales, estatales, regionales y locales. Tiene
sede en Sucre.
El Presidente de la Corte Nacional Electoral es elegido en comicios generales por diez
años. Los Vocales son elegidos regionalmente, en comicios generales por diez años.
Sus decisiones son inapelables. Su burocracia es meritocrática. Su presupuesto de
funcionamiento se negocia en la Dieta de la Diarquía.

Del Gabinete de Relaciones Fiscales Intergubernamentales

Es el órgano encargado de velar por la homeostasis económica de la Diarquía


y de la ecualización fiscal intergubernamental. Administra los fondos de
cohesión y compensación que le serán transferidos por los Estados federales.
Tiene sede en Sucre.
El Presidente del Gabinete es elegido en comicios generales por diez años. Su
burocracia es meritocrática. Su presupuesto de funcionamiento se negocia en
la Dieta de la Diarquía.

De la Controloría General del Estado

Es el órgano encargado del control fiscal sobre las operaciones de entidades


que administran recursos públicos. Tiene sede en Sucre.
El Contralor General del Estado es elegido en comicios generales por diez
años. Su burocracia es meritocrática. Su presupuesto de funcionamiento se
negocia en la Dieta de la Diarquía.

Del Consejo Supremo de la Judicatura

Es el órgano de apelación administrativo y disciplinario de los Poderes Judiciales de los


Estados federales. Tiene sede en Sucre
El Consejo es presidido por el Presidente de la Corte suprema de justicia; es
elegido en comicios generales por diez años. Los Consejeros serán elegidos
regionalmente, en comicios generales por diez años. Sus fallos son
inapelables. Su burocracia es meritocrática. Su presupuesto de
funcionamiento se negocia en la Dieta de la Diarquía.

De la Dieta

La Dieta es la reunión semestral de los dos Parlamentos federales. Es convocada, presidida


y disuelta por la Pareja presidencial. En la Dieta se aprobarán los Códigos de la Diarquía y
se decidirán los temas fiscales de ecualización del sistema federal y la estructura,
funcionamiento y financiación de la Diarquía. Los recursos para ello serán transferidos por
los Estados federales.

De la esfera energética

Matriz energética

La matriz energética de la Diarquía será el gas. Por tanto, la primera política


pública en esta materia será una reconversión de la matriz energética actual.

De la economía

La Diarquía entiende por Economía: la norma del manejo de la casa, como la


complementariedad del Principio de intercambio, basado en el dinero, el mercado, la
acumulación; y el Principio de reciprocidad, basado en la lógica del don, el mercado de
reciprocidad, la creación de los valores humanos y el prestigio.

Del Principio de reciprocidad

Este Principio inicia la dinámica económica a partir de la necesidad del otro que recibe
cuando necesita y dará, a su turno, cuando el otro así lo precise. Busca el interés
comunitario, entendido no como la suma de bienes individuales (la colectividad) sino como
el ser comunitario, ese Tercer incluido e indivisible que no es reducible a la suma de las
partes y que no puede ser propiedad de nadie. Una estructura de reciprocidad prohibe el
nacimiento de toda privatización, impide la acumulación y la explotación e implica la
tendencia hacia el equilibrio del sistema, mediante la redistribución y la creación de los
valores propiamente humanos: la amistad, la alianza, la confianza, la solidaridad, la
convivialidad. Es cualitativo y cuantitativo.
Del Principio de intercambio

Este Principio inicia la dinámica económica a partir del propio interés y, por consiguiente,
está motivado por el deseo de lucrar y acumular para poder comprar con ello los bienes y
servicios que precisa para su felicidad. Busca el interés individual e implica la propiedad
privada que conduce a la ganancia, la competencia, la acumulación, a la expropiación de
los medios de producción de los más débiles. Por diseño, la cienca galileana, excluye la
dimensión de los valores humanos. Es exclusivamente cuantitativo.

De las Interfases entre ambos Principios

La gran riqueza de la Diarquía son las interfases entre ambos sistemas económicos que han
creado las sociedades indígenas en su relación con el otro sistema, a partir del Principio del
Tercero incluido. La pujanza de esta Interfase es visible en las grandes fiestas andinas,
como el Gran Poder, Urkupiña, el Carnaval, la gran Feria alteña del 16 de Julio, etcétera.

La Diarquía promoverá la investigación científica de estas interfases (complementariedad


de investigaciones neoclásicas y etnografías económicas, basadas en la Teoría de la
Reciprocidad) con el fin de diseñar la Estrategia económica de la Diarquía que tendrá por
finalidad garantizar Calidad de Vida a todos sus habitantes.

De los Agentes económicos

La Diarquía reconoce los siguientes agentes económicos: el sector público, sector privado,
sector comunitario

De la Hacienda pública

El sistema fiscal de la Diarquía se basa en dos Principios.

El primer Principio dice así: el esfuerzo fiscal es local: de abajo hacia arriba. Las
Parcialidades, como holones de las totalidades subnacionales, financiarán el
funcionamiento del nivel diáquico que tendrá el tamaño y el espesor estatal que estén ellos
dispuestos a financiar, por los servicios que les preste. La negociación fiscal será
competencia de la Dieta en la que los dos Parlamentos decidirán el financiamiento y la
rendición de cuentas de la Diarquía.

El segundo Principio es el de Subsidiaridad fiscal: cobrará determinados impuestos el nivel


administrativo que más ventajas tenga para hacerlo eficientemente.

Cada Parcialidad, en la elaboración participativa de sus Estatutos autonómicos, decidirá su


fiscalidad de acuerdo a estos dos Principios.
De la esfera material

Del Territorio

El Territorio es entendido como un sistema biodinámico que no podrá ser separado en


litosfera, biosfera, atmosfera, vale decir, subsuelo, suelo y vuelo.

El Territorio es de dominio exclusivo de los Estados federales de las Parcialidades.

Los recursos naturales no renovables son estratégicos para garantizar la estatalidad


suficiente a la Diarquía. Por tanto no podrán, bajo ningún argumento, ser privatizados o
capitalizados. Para su explotación, podrán conformar con otros Estados que tengan
intereses comunes, Empresas multiestatales.

Los recursos naturales renovables serán legislados por las Parcialidades y reglamentados
por las Regiones.

Ordenamiento territorial

La Diarquía ordena su territorio de acuerdo a la siguiente holoarquía: Parcialidades,


Regiones, Microregiones.

Se consensuará el ordenamiento territorial respetando en lo posible la actual demarcación


departamental.

Cada Estado federal, cuando diseñe su Estatuto autonómico decidirá sus Regiones, sus
Microregiones y, eventualmente, otras unidades administrativas menores.

De la Propiedad

La Diarquía reconoce la propiedad pública, privada, colectiva, comunitaria: fija y rotatoria,


y mixta.

De acuerdo a esta taxonomía, cada Estado federal decidirá los alcances de las mismas de
acuerdo a sus valores hegemónicos de civilización.
8.10 Hagamos la Nueva Constitución Política: Con Raices de Nuestra
Identidad, Juan de la Cruz Villca

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