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LICENCIATURA EN DERECHO

Docente: SELENE ACHO TENORIO

Alumno: GASPAR ARMANDO GARCÍA PULIDO

Grupo: DE-DEIDPU-2002-M14-004

Módulo 14: Internacionalización del Derecho en su Ámbito Público

Unidad 1: Introducción a la internacionalización del Derecho Público

Sesión 3 Los sujetos del Derecho Internacional Público

Actividad integradora. - Derechos y obligaciones de los sujetos del Derecho

Internacional
Introducción

El reconocimiento de Estados es el acto por el cual las demás naciones de la comunidad


internacional se hacen sabedoras de que ha surgido a la vida internacional un nuevo ente.
Para este reconocimiento, se han desarrollado teorías para explicar cómo se han llevado
a cabo sus procesos.

Los sujetos de derecho son los entes que pueden ser depositarios de derechos y
obligaciones. En muchas ocasiones, este término se utiliza como sinónimo de persona,
sin embargo, podemos encontrar una diferencia sustancial entre ambas, considerando
que la persona es un ser humano, cuyos derechos y obligaciones son consignados en las
normas jurídicas; mientras que con sujeto de derecho se hace alusión a la persona
actuando en una relación jurídica. Particularmente, en el Derecho Internacional Público se
habla de personas morales.

Por su parte, Becerra (1997: 32) menciona que “el requisito de sujeto de Derecho
Internacional está
sujeto a la realidad de que sean competentes en las relaciones internacionales, y
únicamente los
Estados están calificados para ejercer esta atribución”.

Los sujetos de Derecho Internacional, en esencia, son los Estados, las instituciones
internacionales, la comunidad, los grupos de liberación nacional y regional, y las masas
internacionales, que tienen
derechos y obligaciones.

Para la concepción tradicional los Estados políticos, son los sujetos naturales y originarios
plenamente identificados, sin que existan otros con iguales características. De
conformidad con la Convención Panamericana de Montevideo sobre Derechos y
Obligaciones de los Estados, de 1933, los sujetos de Derecho Internacional Público están
integrados por: Una población, un territorio determinado, un gobierno, capacidad para
tener relación con otros Estados.
Actividad 1. Los sujetos del Derecho Internacional

Identifica de dicho caso el o los entes analizados como sujetos del Derecho Internacional.

Identifica los elementos que componen a los sujetos del Derecho Internacional.

Señala si el o los entes en cuestión contienen los elementos para ser sujetos del Derecho

Internacional.

Instrumento de Ratificación del Convenio entre el Reino de España y la Republica


Socialista de Checoslovaquia sobre Asistencia Jurídica, Reconocimiento y Ejecución de
Sentencias en Asuntos Civiles, hecho en Madrid el 4 de mayo de 1987.

El territorio del Estado se define como la porción de tierra que pertenece a un


determinado Estado. Verhoeven lo conceptualiza como un “conjunto de espacios
geográficos en donde el sistema jurídico nacional de un Estado es válido” (1993: 23).

El territorio de un Estado se acota por tres tipos de fronteras: de tierra, de mar y de aire:

Frontera de tierra: Se fija de manera unilateral o por medio de tratados internacionales.

Frontera de mar: Se sujeta a la Convención Internacional del Derecho del Mar, del 10 de
diciembre de 1982. Según esta Convención, aunque es una regla general internacional,
se aplica al caso mexicano de manera particular; así, el espacio marino donde el Estado
fronterizo ejerce soberanía plena (mar territorial) es un espacio de 12 millas marinas a los
largo de las costas. De la misma forma, se halla un espacio de 200 millas marinas a lo
largo de las costas, al que se conoce como zona económica exclusiva, en donde el
Estado adyacente tiene capacidad exclusiva de explotar los recursos marítimos.

Frontera de aire: Aunque se suele mencionar una distancia de entre 80 y 100 kilómetros
de altura, no existe acuerdo.

La población Se entiende por población al conjunto de habitantes de un lugar


determinado. Verhoeven lo refiere como “el grupo de personas sobre los cuales el Estado
ejerce sus poderes soberanos” (1993: 26)

El poder El poder es la capacidad o facultad para hacer determinadas cosas. Benavides lo


define como “la capacidad de la organización estatal de establecer y hacer funcionar la
soberanía política interna y de actuar de manera independiente en el marco del Derecho
Internacional Público” (1994: 34).
Proceso de reconocimiento de los Estados.

Cuanto más difícil sea la valoración de un territorio como Estado y cuanto más fuertes
sean las exigencias sobre su calidad de Estado, mayor será el significado del
reconocimiento como Estado por parte de la comunidad.

El reconocimiento de un territorio como Estado, tiene efecto constitutivo, pero es también


un presupuesto necesario para la existencia de un Estado como sujeto de derecho
internacional. Sin embargo, se ha impuesto la opinión contraria del efecto declaratorio del
reconocimiento. De acuerdo con ésta, la existencia de un Estado como sujeto de derecho
internacional no depende del reconocimiento por parte de otros Estados. Desde este
punto de vista, que es el predominante, no existe ningún deber de reconocer a otros
Estados. Éstos pueden negarse al reconocimiento de otros Estados por motivos políticos.

Las disposiciones del presente Convenio no afectarán a los privilegios fiscales que
disfrutan los funcionarios diplomáticos o consulares de conformidad con las normas
generales de derecho internacional o en virtud de acuerdos especiales.

Las Autoridades competentes de los Estados contratantes intercambiarán las


informaciones necesarias para aplicar lo dispuesto en el presente Convenio y en el
derecho interno de los Estados contratantes relativas a los impuestos a que se refiere el
presente Convenio, en la medida en que la imposición exigida por aquél no sea contraria
al Convenio. Las informaciones así intercambiadas serán mantenidas secretas y no se
podrán revelar a ninguna persona o autoridad incluidos los titulares de justicia que no esté
encargada de la liquidación o recaudación de los impuestos objeto del presente Convenio.

Las Autoridades competentes de los Estados contratantes podrán comunicarse


directamente entre sí, a fin de lograr los acuerdos a que se refieren los párrafos
anteriores. Cuando se considere que este acuerdo puede facilitarse mediante contactos
personales el intercambio de puntos de vista podrá efectuarse mediante una Comisión
compuesta por representantes de las Autoridades competentes de ambos Estados
contratantes.

Derechos y obligaciones de los nuevos sujetos de derecho internacional.


Personalidad jurídica internacional

Tener personalidad es sinónimo de ser sujeto de Derecho Internacional Público, y se


traduce en tener derechos y obligaciones jurídicas internacionales.
La personalidad jurídica puede ser examinada desde dos puntos de vista; en sentido
ampliado, los sujetos del Derecho Internacional son los que tienen un vínculo de
prerrogativas y obligaciones respecto a la comunidad internacional dentro de un
ordenamiento vigente; en cambio, en sentido estricto, es la que ordena una intervención
más dinámica en la creación de nuevos sucesos de derecho, de donde aparecen nuevos
derechos y obligaciones, al menos para el mismo individuo. (Jiménez, 2005: 29).

Como menciona Jiménez (2005), algunas teorías aseguran que el Estado tiene
personalidad jurídica internacional formal y natural, tal como se indica a continuación:

 Tesis de Selle: Los individuos son los únicos sujetos de Derecho Internacional, toda vez
que el Estado, una vez eliminado, los ciudadanos son los únicos existentes. Sin embargo,
el obstáculo de esta teoría es que no demuestra la permanencia y estabilidad de los
deberes de un Estado.

 Clases sociales de Korovi: Al extinguirse el Estado, surge una nueva clase política de
ciudadanos autoritarios con diversas prerrogativas. Esta doctrina fue rechazada por la
URSS, toda vez que argumentaba que los adinerados y empresarios serían la nueva
clase dominante.

 Las razas de Manzini: Esta teoría está basada en un proceso de agrupación y


reestructuración del pueblo italiano, pues confirma que los auténticos sujetos de Derecho
Internacional pertenecen a las nacionalidades, en virtud de su origen, cultura, raza, lengua
y costumbres. La realidad internacional critica la existencia de naciones que no
corresponden a una individualidad, sino a una pluralidad de naciones.

En la doctrina del derecho internacional no se ha logrado aún una definición fija de


organizaciones internacionales. No obstante los diferentes criterios, existe unanimidad
sobre dos elementos constitutivos:

- La organización internacional se basa en un tratado (constitutivo) de derecho


internacional entre, por lo menos, dos Estados (u otros sujetos del derecho internacional).

- Una organización internacional, puede decidir sobre la estructura interna de sus


propios órganos y trasladarlos al exterior. (Herdegen, 2005)

Artículo 3 DEFINICIONES GENERALES 1. En el presente Convenio, a menos que de su


contexto se infiera una interpretación diferente: a) El término “España” significa el Estado
español, incluida cualquier zona fuera del mar territorial de España que, de conformidad
con el derecho internacional haya sido designado o pueda serlo en lo sucesivo, en
aplicación de la legislación española relativa a la plataforma continental, como zona en la
que pueden ejercerse los derechos de España en lo concerniente al fondo marino, el
subsuelo marino y sus recursos naturales; b) El término “Checoslovaquia” significa la
República Socialista Checoslovaca; c) Las expresiones “un Estado contratante” y “el otro
Estado contratante” significan España y Checoslovaquia, según el contexto; d) El término
“persona” comprende las personas físicas, las sociedades y cualquier otra agrupación de
personas; e) El término “sociedad” significa cualquier persona jurídica o cualquier entidad
que se considere persona jurídica a efectos impositivos; f) Las expresiones “empresa de
un Estado contratante” y “empresa del otro Estado contratante” significan,
respectivamente, una empresa explotada por un residente de un Estado contratante y una
empresa explotada por un residente del otro Estado contratante; g) El término “nacional“
significa: i) Toda persona física que posea la nacionalidad de un Estado contratante; ii)
Toda persona jurídica, sociedad de personas y asociación constituida de conformidad con
la legislación en vigor en un Estado contratante. h) La expresión “tráfico internacional”
significa todo transporte efectuado por un buque o una aeronave explotados por una
empresa de un Estado contratante en el que esté situada la sede de dirección efectiva de
la empresa, salvo cuando el buque o aeronave operen exclusivamente entre puntos
situados en el otro Estado contratante; i) La expresión “Autoridad competente” significa: i)
En España, el Ministro de Hacienda o cualquier otra autoridad en quien delegue el
Ministro; ii) En Checoslovaquia, el Ministro de Hacienda de la República Socialista
Checoslovaca o su representante autorizado. 2. Para la aplicación del presente Convenio
por un Estado contratante, cualquier expresión que no esté definida de otro modo tendrá,
a menos que de su contexto se infiera una interpretación diferente, el significado que se le
atribuya por la legislación de dicho Estado contratante relativa a los impuestos que son
objeto del presente Convenio.

Elementos que componen a los entes tratados como sujetos del Derecho Internacional.

ONU Organización de las Naciones Unidas: Promueve el estado de derecho en los planos
nacional e internacional es uno de los aspectos esenciales de la misión de las Naciones
Unidas. Establecer el respeto del estado de derecho es fundamental para lograr una paz
duradera después de un conflicto, para proteger eficazmente los derechos humanos y
para lograr un progreso y un desarrollo económicos sostenidos.
El principio de que todos desde el individuo hasta el propio Estado deben ajustarse a
leyes que se promulgan públicamente, se hacen cumplir por igual y se aplican con
independencia es un concepto fundamental que impulsa gran parte de la labor de las
Naciones Unidas.

La contribución más valiosa que podían realizar las Naciones Unidas en ese momento
consistía en una operación de mantenimiento de la paz a fin de crear las condiciones
necesarias para el logro de negociaciones políticas destinadas a un acuerdo pacífico.

CS Consejo de Seguridad: Tiene la responsabilidad primordial de mantener la paz y la


seguridad internacionales, es el único órgano de la ONU cuyas decisiones los Estados
Miembros, conforme a la Carta, están obligados a cumplir, la primera medida del Consejo
es recomendar a las partes que lleguen a un acuerdo por medios pacíficos, también
puede imponer embargos o sanciones económicas, o autorizar el uso de la fuerza para
hacer cumplir los mandatos.

OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte): Sus objetivos básicos está contribuir
a la prevención de los conflictos, es criticada por realizar operaciones ofensivas, incluidas
las que infringen la Carta de las Naciones Unidas.

Actividad 2. Teorías del reconocimiento

Investiga en fuentes académicamente confiables sobre las teorías de reconocimiento de


Estados presentados en el texto de apoyo.

Analiza el caso proporcionado por tu docente en línea a partir de las siguientes preguntas.

¿Qué implica el reconocimiento de un nuevo Estado?

¿Qué implica que sea rechazado el reconocimiento de un nuevo Estado?

¿Cómo se llevó a cabo el reconocimiento particular del o los entes en el caso dado?

¿Qué teoría o teorías son pertinentes para comprender el reconocimiento de un Estado?

El problema del reconocimiento de Estados siempre fue permeado por la controversia


entre las doctrinas rivales de los caracteres constitutivo y declarativo del reconocimiento.
La contraposición de esas dos doctrinas domina la discusión sobre el tema.
1. La teoría constitutiva del reconocimiento de Estados

Con base en la teoría constitutiva, el acto de reconocimiento es visto como precondición


necesaria para que subsistan las capacidades de un Estado. Su efecto práctico consiste
en no atribuir personalidad jurídica internacional al “Estado” no reconocido por la
comunidad internacional. De esa forma, se afirma que el reconocimiento “constituye” al
Estado. El principal punto de fuerza de la teoría es la indicación de que los Estados no
son obligados a entrar en relaciones bilaterales con ninguna otra entidad.

La tesis se resume a dos aserciones: en primer lugar, previamente al reconocimiento, la


comunidad no posee los derechos o las obligaciones que el derecho internacional
relaciona con un estado de estatalidad plena. Además, el reconocimiento es una materia
de absoluta discreción política, diferente de un deber legal que se le debe a la referida
comunidad.

La doctrina constitutivista del reconocimiento en el derecho internacional es manifestada


por diversos autores. Se puede aludir, como ejemplo, a los escritos del jurista alemán
Georg Jellinek, que explica que “las relaciones en la forma de derechos y deberes entre
dos entidades que no se sujetan a ningún orden legal superior solo pueden resultar del
mutuo reconocimiento de sus personalidades jurídicas”.

Otro exponente de la doctrina constitutiva del reconocimiento, Dionisio Anzilotti, defendía


la tesis de que las normas de derecho internacional son creadas por consenso de los
Estados preexistentes. Así, “un sujeto de derecho internacional comienza a serlo
concomitantemente a la primera manifestación por el tratado de reconocimiento, o por el
instrumento equivalente”. Ese reconocimiento es recíproco entre las partes, y constitutivo
de la personalidad internacional de la nueva entidad. El jurista italiano concluye que, “así
como cualquier otro tratado, él es vinculante en virtud del principio fundamental del pacta
sunt servanda”, esto es, que los pactos deben ser cumplidos entre los contratantes.

El voluntarismo, corriente teórica prominente en la primera mitad del siglo XX,


consideraba que el nacimiento del Estado estaba subordinado a la voluntad de los
Estados ya existentes de aceptar su existencia, a través del instituto del reconocimiento,
haciendo que la nueva entidad adquiriese personalidad jurídica internacional plena.

La tesis constitutiva del reconocimiento levanta críticas por parte de la doctrina. Es difícil
entender, por ejemplo, cómo una entidad que todavía no tiene el carácter fundamental de
la existencia jurídica podría concluir un tratado que presupone su personalidad. En caso
que una comunidad sea reconocida como Estado por los Estados preexistentes, ¿cuál
sería el fundamento jurídico que justificaría su suscripción a un tratado internacional, que
es el acto de reconocimiento en sí?

El efecto de la doctrina positivista, en materia de formación de Estados, colocó todo el


énfasis en la cuestión del reconocimiento. En la esfera internacional, la íntima ligación
establecida por la doctrina del siglo XIX entre el reconocimiento y la estatalidad, fue de
gran prejuicio para el entendimiento de este tema. En especial, lo que causó más
divergencia fue la premisa de que los líderes de gobierno son, o deberían ser, libres para
reconocer o no reconocer con base en una elección desvinculada de consideraciones
jurídicas, ligado sólo a los intereses particulares de su Estado.

Además, otros dos argumentos pueden ser utilizados para el rechazo de la teoría
constitutiva del reconocimiento de Estados. En primer lugar, si el reconocimiento de
Estados es determinante para dar el status jurídico de Estado a una entidad, sería difícil
de verificar un reconocimiento ilegal e imposible de concebir un reconocimiento inválido.
En segundo lugar, conforme sostiene Kelsen, la existencia jurídica de un Estado “posee
carácter relativo. Un Estado existe jurídicamente apenas en sus relaciones con otros
Estados. No existe una existencia absoluta”. Crawford, en contrapartida, entiende esa
consecuencia de la doctrina constitutiva como “una ofensa al buen juicio”; en el mismo
sentido, de acuerdo con Lauterpacht, la relativización de la subjetividad jurídica del Estado
“es una anomalía aberrante, un espectáculo grotesco que lanza un reflejo sombrío sobre
el derecho internacional”.

A pesar de que la doctrina constitutivista asuma diversas formas, su núcleo no es


aceptable con base en el derecho internacional. Los Estados no pueden determinar, y
frecuentemente rechazan, el contenido de sus deberes legales en relación con otros
Estados a través de la negativa a su reconocimiento. Todavía así, es necesario reconocer
cierta verosimilitud de la tesis constitutiva en relación con situaciones de hecho que son
sujetas al análisis legal. En diversas situaciones, tales hechos envuelven un litigio
(judicializado o no), y la corte o el órgano ejecutivo deben apreciar la cuestión de la
estatalidad (o efectividad de gobierno) de una forma arbitraria. El reconocimiento de
Estados envolvería una elección o, como mínimo, una certificación.

Uno de sus mayores defensores, Hans Kelsen, explica que el acto jurídico del
reconocimiento es el “establecimiento de un hecho, no la expresión de una voluntad”.
Solamente por el acto del reconocimiento la comunidad emerge jurídicamente en relación
con el Estado reconocedor. Solamente su existencia jurídica (o sea, su existencia como
un Estado, un sujeto) es de importancia para el derecho internacional; su existencia posee
un carácter relativo en este sentido. Un Estado existe legalmente apenas en relación con
otros Estados. Para Kelsen, no existe una “existencia absoluta”. A través del acto jurídico
del reconocimiento, la comunidad reconocida “es traída a la existencia jurídica” en
relación con el Estado reconocedor. Por consiguiente, las normas de la comunidad
internacional se tornan aplicables a las relaciones entre esos Estados, de esta forma, el
reconocimiento posee un carácter esencialmente constitutivo. El nuevo Estado inicia su
existencia jurídica, por lo tanto, con la declaración de posición de Estado, pero existe sólo
para sí mismo, no en relación con otros Estados.

Hersch Lauterpacht, en términos amplios, conceptualizaba al Estado como un status


previsto por normas generales de derecho internacional, caracterizado por la ocurrencia
de aspectos de hecho, como un gobierno soberano, un territorio delimitado y una
población, los cuales, pasados por la verificación de los sujetos internacionales (a través
del reconocimiento por parte de otros Estados), constituyen el Estado.

A su vez, Crawford defiende que el Estado consistiría en un status jurídico previsto por el
derecho internacional, adquirido a través de normas internacionales como el principio de
la efectividad y de la legalidad material de su formación (desarrollado especialmente en el
periodo posterior a la Segunda Guerra Mundial), como el no uso de la fuerza y la
observación del principio de la autodeterminación de los pueblos.

La rama internacional relativa a los procesos de formación de los Estados fue


gradualmente sometida a los principios de tutela de la paz, de los derechos humanos, del
respeto al Estado de derecho, a la democracia y al principio de la autodeterminación de
los pueblos. Por ese motivo, la creación, continuidad y extinción de la personalidad
jurídica de un Estado y su reglamentación no puede ser sometida meramente a procesos
políticos. Por tanto, el proceso de surgimiento de un Estado está sujeto también a la
aplicación de principios fundamentales del orden internacional.

La teoría constitutiva del reconocimiento no logró la mayoría de los seguidores en la


doctrina, cuya cuota contemporánea tiende a adherir a la tesis declarativa. Las tendencias
conceptuales están todavía presentes: ellas son el resultado de una praxis irregular,
incapaz de generar una opinio iurisque sea seguida de forma homogénea por los sujetos
internacionales.

2. La teoría declarativa del reconocimiento de Estados

En la teoría declarativa, la personalidad jurídica internacional de un Estado no depende de


su reconocimiento como tal por parte de los demás Estados; ella es conferida por normas
de derecho internacional y, así, a pesar de que un Estado o gobierno no sea reconocido
por lo demás, es sujeto de derechos y deberes internacionales.

Esta vertiente entiende que el no reconocimiento no implica la ausencia de personalidad


jurídica internacional de la entidad en cuestión; si ella cumple los criterios establecidos,
especialmente aquellos que conciernen a la situación de facto, esta será un Estado,
independientemente del reconocimiento. Por lo tanto, el acto del reconocimiento no es
determinante para que sea conferida la estatalidad a una determinada entidad, visto que
ese status es regido por el derecho internacional. Para existir como un hecho, el Estado
debe cumplir las condiciones de estatalidad establecidas por el derecho internacional. El
reconocimiento, así, tendría apenas la función de declarar la existencia de un hecho.

¿Cuál sería, entonces, el significado del acto de reconocimiento? El reconocimiento es un


acto político; su efecto jurídico establecería relaciones diplomáticas entre el Estado
reconocedor y el Estado reconocido. El reconocimiento implica la aceptación del nuevo
Estado como miembro de la comunidad internacional; el Estado reconocedor, por
consecuencia, se vincula por su propia declaración a partir de aquel momento.

James Brierly, uno de los defensores de la tesis declarativa del reconocimiento de


Estados, sostiene que reconocer un nuevo Estado “no genera la existencia jurídica de un
Estado que anteriormente no existía en ese sentido”. Si el Estado existe, si es un hecho,
“tiene el derecho a ser tratado por la comunidad internacional como tal”. La función
primaria del reconocimiento, por lo tanto, es la admisión, el reconocimiento de un hecho.

Como un enfoque de cuño general, la tesis declarativa es a favor de un método objetivo


del análisis de las situaciones. De cualquier forma, la idea de que un problema
envolviendo la condición de una entidad estatal comprenda la mera confirmación de
hechos es por demás simple; criterios legales deben ser aplicados. Reforzando esa
tendencia, Hedley Bull afirma que una comunidad que alega ser soberana “pero no
consigue ejercer ese derecho en la práctica no es un Estado propiamente dicho. A pesar
de que el reconocimiento no cree al Estado, éste debe ser llevado en consideración...” en
lo concerniente a la certificación de su status jurídico.

Partiendo de la doctrina italiana contemporánea, se verifica que el derecho internacional


no disciplina ni condiciona cualquier proceso de formación, consolidación y extinción de
Estados. Éstos son entendidos como organizaciones político-territoriales efectivas e
independientes, capaces de ejercitar la autoridad exclusiva de gobierno, sea en el ámbito
de su propio territorio o ante su población, así como mantener relaciones independientes
y paritarias ante otros Estados en el plano internacional. Se concluye, de esa forma, que
la efectividad del gobierno sería el principio cardenal de la existencia del Estado en el
escenario internacional. La consecuencia natural de ese argumento es la definición de la
naturaleza meramente declarativa del reconocimiento por parte de los demás Estados.

Dada la peculiaridad del sistema jurídico internacional, desprovisto de un mecanismo


institucional robusto, capaz de actuar y garantizar de manera imparcial las obligaciones
previstas por las normas, este sistema confía poderes de decisión, en gran parte, a la
voluntad y capacidad de los Estados, los principales sujetos del ordenamiento
internacional. En la ausencia de un mecanismo jerarquizado, capaz de establecer de
manera definitiva si la organización gubernamental de un Estado responde de hecho a la
voluntad popular, deben los Estados atenerse a una presunción de legitimidad de un
gobierno que consiga obtener la aceptación de la propia población.

El reconocimiento ejecuta un papel fundamental con relación a la afirmación de la


subjetividad internacional del Estado. En una sociedad internacional contemporánea,
caracterizada por una interdependencia entre sus actores en constante crecimiento, la
capacidad efectiva para tomar parte en relaciones internacionales es cada vez más un
indicador de la efectividad plena del Estado, haciendo que la soberanía interna,
clásicamente entendida como poder de controlar su propia población dentro de su propio
territorio, no sea el único criterio para definir a una entidad estatal.

Por esa razón, se considera Estado a toda la organización político-territorial que obtenga
un largo reconocimiento por la comunidad internacional y, en consecuencia, participe
como miembro de organizaciones internacionales, concluya tratados, reciba y envíe
representantes diplomáticos, o sea, una entidad plenamente comprometida en la vida
internacional. En cuanto se discute sobre la naturaleza jurídica de las entidades que
obtienen reconocimiento apenas parcial de la comunidad internacional, automáticamente
se recuerda los casos de Palestina y Kosovo, no se puede negar que el reconocimiento
desempeña un papel crucial para modelar el consenso entre los actores del ordenamiento
internacional.

En síntesis, ni las tesis realistas (que se ligan más a la teoría declarativa) ni las tesis anti-
realistas (plano de fondo de la teoría constitutiva) pudieron establecer el argumento
último, capaz de hacer prevalecer una sobre la otra. Milano, por fin, esclarece que un
abordaje anti-realista se revela más en sintonía con la realidad del derecho internacional
contemporáneo y es más útil para comprender la función del derecho internacional en los
procesos de formación del Estado.

¿Qué implica que sea rechazado el reconocimiento de un nuevo Estado?

A la falta de legitimidad para el establecimiento de un régimen territorial (especialmente


cuando surge de la intervención militar en otro Estado) reacciona la comunidad de
Estados, en algunas ocasiones, con el rechazo de reconocimiento. Esto es válido
especialmente cuando la independencia del poder de quien ejerce la autoridad se
encuentra cuestionada por otro Estado.

¿Cómo se llevó a cabo el reconocimiento particular del o los entes en el caso dado?

El reconocimiento es un prerrequisito al, o a una consecuencia del establecimiento de


relaciones diplomáticas plenas y normales con un nuevo Estado. Charles Fenwick define
que “ el procedimiento por el cual se ingresa a la comunidad internacional es
reconocimiento y es la aceptación formal hecha por uno o varios miembros existentes de
la comunidad internacional, de que un Estado o grupo político, que hasta ese momento no
había detentado el título de miembro de la comunidad, estaba ya capacitado para ello, y
que, en consecuencia podía disfrutar de todos sus derechos y privilegios de los miembros
de la comunidad”. Cabe mencionar que para el Reconocimiento de un Estado no hay un
órgano centralizado al cual se le considera autoridad para determinar se cumplen o no los
requisitos de la condición legal de Estado.

¿Qué teoría o teorías son pertinentes para comprender el reconocimiento de un


Estado?

Teorías principales al respecto: la declarativa y la constitutiva. La primera, también


conocida como teoría declarativa del reconocimiento, decreta que siempre y cuando se
configuren los componentes del Estado soberano (vid supra), el juicio de los terceros
Estados tiene resultados exclusamente declarativos. Por el contrario, para la segunda
teoría, el reconocimiento de los Estados de la comunidad internacional es básica y
fundamental, y sin ese reconocimiento no puede pronunciarse que exista un nuevo
Estado-nación.

Reconocimiento significa: existencia de una cultura política o de administraciones nuevas,


instauradas por medio de hechos, siendo su objeto de estudio el orden normativo a nivel
internacional. El reconocimiento de Estado “como el hecho por el que otros manifiestan
tratarán a esa conglomeración como a un Estado dotándolo como sujeto de Derecho
Internacional, investido de personalidad y capacidad jurídica propia”. El reconocimiento de
gobiernos ocurre cuando la forma de gobernar se transforma en un Estado. Estos
cambios pueden ser habituales, mediante de elecciones constantes, que llevan implícitos
agradecimientos hechos por los nuevos gobiernos, incluyendo también el mantenimiento
de las relaciones diplomáticas; por el contrario, los cambios violentos son ocasionados por
golpes de Estado o revoluciones, esto significa la modificación del sistema político.

• La teoría de la efectividad. Un gobierno específico debe poseer la obediencia de


los ciudadanos. De acuerdo con los derechos estadounidenses, el reconocimiento surge
en correspondencia con toda administración constituida por el interés del país
sustancialmente declarado.

• La teoría de la regularidad. Aquí, el gobierno posee un dominio in jure, con


derecho a ser reconocido. O puede ser un gobierno anormalmente constituido (por
fórmulas de fuerza); se sugiere entonces el problema de la legitimidad constitucional
interna. Las doctrinas que restringen el reconocimiento de nuevos gobiernos a la
legitimidad constitucional encuentran su origen en ideas políticas, en donde el interés por
el libre consentimiento de las administraciones está unido con una visión propia de la
solidez de las relaciones internacionales.
ACTIVIDAD INTEGRADORA.DERECHOS Y OBLIGACIONES DE
LOS SUJETOS DEL DERECHO INTERNACIONAL

En una presentación expón los siguientes puntos sobre el estudio de caso:


Elementos que componen a los entes tratados como sujetos del Derecho Internacional.
Proceso de reconocimiento del o los Estados llevado a cabo a partir de una o varias
teorías del reconocimiento.
Derechos y obligaciones del nuevo o los nuevos entes sujetos al Derecho Internacional
Público.
Organismos internacionales en los que ha o han participado el o los Estados y el objeto
de su participación.
Bibliografía y Legislación

Jiménez de Aréchaga, Eduardo (2005). Los sujetos del Derecho Internacional Público. En
Derecho

Internacional Público: Principios, normas y estructuras. Tomo I. Uruguay. Editorial


Fundación de

Cultura Universitaria.

Jiménez, E. (2005). Los sujetos del Derecho Internacional Público. En Derecho


Internacional

Público: Principios, normas y estructuras (tomo I). Uruguay: Fundación de Cultura


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Verhoeven, J. (1993). El territorio. En el reconocimiento de los Estados. XXXVIII Curso de

Derecho Internacional. Del 1º al 19 de agosto, Rio de Janeiro, Brasil. Derecho


Internacional y
Democracia.

Módulo 14. Internacionalización del Derecho en su ámbito público

Unidad 1. Introducción a la internacionalización del Derecho Público

Sesión 3. Los sujetos del Derecho Internacional Público

Texto de apoyo

División de Ciencias Sociales y Administrativas / Derecho 28

Legislación

Carta de San Francisco o Carta de la ONU

Comisión Interamericana de Derechos Humanos

Convención Internacional del Derecho del Mar

Convención Panamericana de Montevideo sobre Derechos y Obligaciones de los Estados

Convención sobre el Estatuto de los Refugiados

Convención sobre Genocidio

Convenciones de Ginebra

Reglamento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos

Tratado de Versalles

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