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UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA

CENTRO UNIVERSITARIO DE JUTIAPA

-JUSAC-

Carrera: Licenciatura en Ciencias Jurídicas y Sociales, Abogado y Notario

Curso: Derecho Romano

Catedrático: Lic. Pedro Luis Espina Aguilar

SEGUNDO SEMESTRE 2020, SECCIÒN “A”

SISTEMAS DE PROCEDIMIENTO DEL DERECHO ROMANO

Por: Ferdy Gamaliel García Medrano Carnet: 202042519


ACCIONES DE LEY O LEGIS ACTIONES

Procedimiento de la legis actiones


Este procedimiento es el más antiguo de los procedimientos romanos.
Presenta los siguientes caracteres:

 Pertenece al ordenamiento de los juicios privados ordo iudiciorum


privatorum, y en consecuencia: destaca la actividad del magistrado
ordenadora del proceso.
 El proceso está dividido en dos fases: una, in iure, ante el magistrado, y
otra, apud iudicem, ante el juez.
 De la exposición gayana de las legis actiones, se deduce los marcados
caracteres de: solemnidad verbal, utilización exclusiva del procedimiento
por ciudadanos romanos.
 Las legis actiones solamente sirven para ejercitar acciones del antiguo ius
civile.
 Rigor y formalismo en el procedimiento.

Acción de apuesta sacramental (legis actio sacramento)


Esta actio sacramento es una de las más antiguas de la ley, y era la general, de
manera que cuando la ley no disponía que se reclamase de otra forma, se acudía a
esta acción.
La legis sacramento tenía dos modalidades:

1. Actio legis sacramento in rem, que servía para reivindicar una cosa propia.
2. Legis actio sacramento in personara, utilizada para afirmar un derecho de
obligación.

Acción de la ley por petición de juez o árbitro (legis actio per iudicis arbitrive
pastulationem)
Representa un proceso en relación con el proceso romano. Aparece en las XII
Tablas para reclamar deudas nacidas de una sponsio y estipulación, y para pedir la
división de la herencia.

Acción de ley por condición (legis actio per conditionen)


Es la más antigua de las legis actionen. Fue establecida:

 Por una lex Silia, para reclamar deudas ciertas de dinero.


 Por la lex Calpurnia, para reclamar cualquier otra cosa cierta.

Fase ante el magistrado (in iure)


A) Citación (in iure)
Las tres legis actiones descritas exigían la presencia de los litigantes ante el
magistrado que, en definitiva, ordenaba el proceso y ante el cual los litigantes tenían
que emitir sus declaraciones solemnes, este procedimiento requería otras
actuaciones.
La in ius vocatio es la situación del demandado para que acuda ante el pretor.
Debe hacerla el demandante, y las reglas sobre esta citación arcaica se encuentran
en las Tablas.
El demandante puede eludir la manus iniectio extrajudicial en dos casos:

 Si hubiera hecho una transacción al ir a juicio.


 Si presenta un vindex.

El vindex: es un fiador que garantiza la comparecencia del demandado.


El magistrado podía conceder o denegar la acción.

B) "Litis contestatio" y designación del juez o jueces


A continuación de la comparecencia celebrada por las partes ante el magistrado,
si el proceso continuaba por no haberse producido la confessio o in iure cessio los
litigantes actuaban ante el magistrado de conformidad con las declaraciones
solemnes que correspondiesen según la legis actio ejercida.
Se procedía a la designación del juez o árbitro, de común acuerdo por las partes
o mediante sortitio, y esta designación era refrendada por el magistrado.

Fase ante el juez (apud iudicem): la prueba


En el procedimiento de las legis actiones regían, en materia de prueba, las
siguientes reglas:

a. Los hechos deben ser probados.


b. Los litigantes tienen el deber de aportar las pruebas necesarias de los
hechos que alegan; el juez no tiene obligación de suministrar los medios de
prueba, ni de realizar una investigación acerca de los mismos.
c. Los medios de prueba en las legis actianes son: las declaraciones de las
partes bajo juramento; los testigos, a los que siempre se les exige prestar
juramento.
d. El juez debe someter en ciertos casos a reglas determinadas, con objeto de
apreciar y valorar los medios de prueba aportados por las partes.

La sentencia
El juez jura que fallará el juicio y lo decidirá con arreglo a derecho.
El contenido de una sentencia debe referirse a los propios términos de la
reclamación, según la legis actio utilizada. Así:

 En la legis actio sacramento la sentencia decide cuál de los litigantes ha


ganado la apuesta sacramental.
 La sentencia puede ser condenatoria o absolutoria para el demandado en el
proceso.
 En las acciones divisorias: de la herencia, de la cosa común y en la acción
de deslinde, la sentencia constituye derechos a favor de cada interesado, al
haber procedido a la división de cosas que eran o constituyen nuevos
derechos.

La ejecución de la sentencia: acción por aprehensión corporal (legis actio


per manus iniectionen)
La manus iniectio, o legis actio per manus es una de las más antiguas. Sólo podía
ser ejercida pasados treinta días, a partir del pronunciamiento de la sentencia.
El demandante tenía que solicitar del magistrado in iure la entrega del deudor para
llevárselo a su casa preso, si es que no presentaba un fiador o vindex.
La lex Poetelia del 326 a.C., abolió la prisión por deudas, incluso en el caso de
ejecución de sentencia.

Acción por toma de prenda (legis actio per pignoris capionem)


La legis actio per pignoris fue establecida para ciertos casos por las costumbres y
para otros por la ley. Consiste en el apoderamiento de algunos bienes del deudor,
sin necesidad de una previa condena, y constituye un procedimiento ejecutivo.
Los casos en que puede ser utilizada esta legis actio especial tiene un marcado
origen sacral y público, que se remonta a las XII Tablas:

 Contra el que no paga el alquiler de una caballería, siempre que tal alquiler
se hubiese destinado a un sacrificio a los dioses.
 Contra el que habiendo comprado una res para sacrificarla a los dioses no
pagó el precio.

Por las costumbres dice Gayo, se estableció la toma de prenda para los casos
militares:

 El soldado que no recibía sus haberes podía tomar en prenda un objeto del
que tenía que pagarle; el dinero de los haberes se llamaba "metal militar".
 El soldado podía tomar en prenda un objeto del que pagarle para comprar
el caballo, dinero que se llamaba "metal equestre".
 Cuando al soldado no se le pagaba el dinero para comprar el forraje del
caballo, que se llamaba "metal de forraje".
PROCEDIMIENTO FORMULARIO

El procedimiento formulario, per formulam que surgió en el siglo II a.C. por la


lex Aebutia y coexistió con el procedimiento de las legis actionis.

El procedimiento formulario se regula en dos leyes:


 Una Ley Ebucia, aproximadamente del año 130 a.C, introdujo el procedimiento
formulario, aunque circunscrito exclusivamente a las reclamaciones que podían
tramitarse por condictio. Para las restantes del ius civile entre ciudadanos romanos,
seguía vigente el procedimiento de las legis actionis al menos, en la forma de ficción
de que había tenido lugar una legis actio.
 Dos leyes Julias de juicios públicos y privados, promulgadas por Augusto en el año
17 a.C. La Ley Julia de juicios privados (lex lulia iudiciorum privatorum) reconoció la
legalidad del procedimiento formulario para toda clase de reclamaciones, y las legis
actiones quedaron abolidas. También confiere al juicio formulario el carácter de
iudicium legitimum.

Las características del procedimiento formulario son:

 Una mayor actividad del magistrado.


 La tipicidad de la fórmula escrita para cada supuesto: "tal es la fórmula, tal es el
Derecho".
 La creación de la exceptio: medio procesal que tiene el demandado para alegar un
hecho que destruye la alegación del demandante. El magistrado puede negar la
actio y también puede denegar la exceptio. Si la acepta, formará parte de la fórmula.
 La condena es pecuniaria: consiste en una suma en dinero.
LA FORMULA
En el derecho romano se entiende por fórmula una instrucción escrita, por la cual
las partes en conflicto y el magistrado nombran al juez y fijan los elementos sobre
la base de los cuales éste debe fundar su juicio, dándole a la vez el mandato, más
o menos determinado, para la eventual condenación o absolución del reo.
En la fórmula, esa guía del juez servia de base para un convenio por virtud del cual
los litigantes sometían la cuestión controvertida a la decisión del juez, hay dos
partes: la ordinaria y la extraordinaria. La parte ordinaria es precisa,
correspondiente a la acción por la que se litigue; la parte extraordinaria es la
agregada a causa de las particularidades del caso.
Partes ordinarias
· Intentio: es la parte fundamental de la fórmula. En ella se recoge el contenido de
la demanda, patentizándose la naturaleza de la reclamación y abriéndose puertas
al debate procesal. El intentio pone de manifiesto a los actores del pleito, la
controversia originaria y la solicitud del actor.
· Demonstratio: es la aclaración de la naturaleza de la reclamación. Por ejemplo,
cuando se demanda una prestación de valor indeterminado.
· Condemnatio: orden del magistrado de pagar, bien sea el equivalente monetario o
la cosa en sí, si el demandante resultaba victorioso. En caso contrario, si el
demandado era inocente, era absuelto.
· Adiudicatio: acción facultativa del juez que le permitía dividir una herencia o cosa
en común. En determinados casos, el magistrado autorizaba al juez para que
atribuyera derechos u obligaciones a las partes.
Partes extraordinarias
· Exceptio: es una defensa del demandado. Si el demandado alegaba ciertas
circunstancias, que destruían o condicionaban las pretensiones de la intentio.
Las excepciones se dividían en perentorias -aquellas que paralizan totalmente la
acción- y dilatorias -las que paralizan parcial o temporalmente la acción-.
· Praescripto: es una excepción que se presenta al inicio de la fórmula, generalmente
a favor del demandante.
En la materialización del derecho formulario, se pueden caracterizar dos aspectos
fundamentales: las generalidades del proceso -partes, jueces, magistrados, fuero y
tiempo- y el proceso como tal, sus pasos, numerales lógicos a seguir.
En la dinámica del procedimiento formulario, los magistrados son los que avalan la
causa del pleito, la formalizan; losjueces son aquellos que tienen el poder de
decisión. El fuero es el entorno del pleito, brinda las prerrogativas de los litigantes,
los magistrados. El tiempo o época en la que la actividad judicial estaba habilitada -
invierno y verano- o no -otoño y primavera-. Y, por último, las partes, actores
principales del acto jurídico -demandante y demandado, acreedor y deudor-.
El trámite lógico en el que incurría el procedimiento formulario tenía las siguientes
etapas: procedimiento in iure, la litis contestatio, el procedimiento apud iudicem, la
sentencia y, por último la ejecución de la sentencia.
· Procedimiento In Iure: era la etapa en la que, inicialmente, comparecían ante el
tribunal las partes -; si por omisión, el demandado no asistía al llamamiento, se
podía traerle a la fuerza. Presentes las partes in iure, se podía aplazar el acto,
aceptar la demanda u oponerse a las alegaciones del demandante.
· La Litis Contestatio: contrato que se lleva a cabo entre las partes. Es solemne,
pues requiere ser aprobado por el magistrado y una constancia escrita a la que debe
ceñirse al juez para dictar la sentencia.
· Procedimiento Apud Iudicem: este era el procedimiento llevado a cabo hasta que
se materializara la sentencia. Laiudicatio, tenía nueve principios fundamentales: el
principio dispositivo, donde las partes se presentan ante el juez; el principio
de igualdad -escuchar también a la otra parte-; el principio de oralidad; el de
inmediación entre las partes durante los periodos de las pruebas, los alegatos y la
sentencia; el de publicidad, el principio de la libre apreciación de las pruebas por
parte del juez; el de congruencia entre la sentencia y las pretensiones de las partes;
el principio de preclusión, consistente en replantear las etapas del proceso
previamente evacuadas; y, por último, el principio de cosa juzgada, donde finalizado
el pleito con el dictamen judicial, éste no puede replantearse.
· La sentencia: cabe aclarar, que previo a la sentencia, hay periodos dos periodos
más en el proceso, en los que respectivamente: se practican las pruebas y se
presentan los alegatos.
La sentencia resuelve el pleito en definitiva, mediante un fallo. Esta puede ser
absolutoria, condenatoria, declarativa y constitutiva.
En caso de que la sentencia fuera omitida por el vencido se recurría a medios
coactivos.
In Iure In Iudicio In Ius Vocatio Práctica de Pruebas La Edictio Actionis (explicación
de la base jurídica de la acción), Alegatos Postulatio Actionis (solicitud del actor al
Praetor, para que le conceda la fórmula y designación del iudex) Denegatio Actionis
(denegación de la fórmula) Dare Iudicium (concesión de la fórmula a la que deberá
ceñirse el iudex) Valoración Iussum Iudicandi (orden de juzgar) Sentencia Litis-
Contestatio (contestación de la litis)

Editio actionis extraprocesal

En los textos de Ulpiano, el demandante debía poner en conocimiento de su futuro


adversario la acción que contra él tenía pensado ejercitar antes de iniciar el litigio.
El demandado debía quedar totalmente enterado y poder preparar su defensa, o
avenirse y ceder. La editio actionis extraprocesal exigía que el demandante
mostrara todos los documentos y pruebas que iba a hacer valer en el juicio
(instrumenta). Así el demandado sabía perfectamente a qué atenerse.

Citación ante el Pretor (in ius vocatio)

El demandado debe comparecer ante el magistrado, y solamente algunas personas,


en razón del cargo o de la inoportunidad del momento, pueden no ser citados a
juicio, como son: el Cónsul, el Prefecto, el Pretor, el Procónsul y los demás
magistrados con imperio o las personas que se consideraban en circunstancias
especiales.
La in ius vocatio debía realizarse siempre fuera de los casos expresados. Sin
embargo, podía suceder que el llamado se ocultase, con objeto de eludir la citación.
En el siglo II a.C. el Pretor y la jurisprudencia arbitran medios contra esta ocultación.
Estos medios son:
· La puesta en posesión de sus bienes (missio inpossessionem).
· La posterior venta de esos bienes (venditio bonorum).

La comparecencia

Presentes ya las partes ante el Pretor, el demandante solicita del mismo la


concesión de la acción: editio y postulado actionis. El magistrado verifica la
capacidad de los litigantes y de su legitimación activa y pasiva, así como de su
propia competencia. Pero antes de la postulatio, el demandante puede interrogar al
demandado acerca de alguna circunstancia que podría modificar la petición de su
acción e incluso excluirla. Son las interragationes in iure.
Éste deberá contestar forzosamente. Por su parte, el demandado también tiene un
Derecho a deliberar, antes de oponerse formalmente al actor en el proceso.
A continuación el Pretor concede o deniega la acción y si el demandado pone una
excepción también la concede o deniega. El Pretor también puede exigir promesas
de ambas partes, con la finalidad de asegurar el proceso.
El procedimiento formulario también podía terminar en la fase in iure, por algunas
de las causas como son:
· La transacción (transactio) y el pacto entre los litigantes.
· Confessio in iure o allanamiento del demandado a la acción del demandante.
Equivale a la sentencia condenatoria, y si no se cumple conduce directamente a la
ejecución mediante:
o la entrega de la cosa en las acciones reales, por una addictio del magistrado;
o la concesión de una actio ex confessione que permite la valoración pecuniaria,
cuando la deuda no consiste en dinero;
o la concesión de una acción ejecutiva, cuando la deuda consiste en una cantidad
cierta de dinero.
 El juramento necesario (iusiurandum in iure) lo puede solicitar el demandante del
demandado en alguno casos, principalmente en los que se ejercita la condictio.
Mediante este juramento se remite la decisión del litigio al resultado del mismo, en
lugar de someterlo a la sentencia del juez.
PROCESO EXTRAORDINARIO

Origen y evolución

Este procedimiento se empezó a utilizar en la época imperial con carácter


extraordinario pero poco a poco fue ganando terreno en época clásica se convirtió
en proceso ordinario en época posclásica. Inicialmente se utilizaban para:

- Fideicomisos.
- Tutelas.
- Alimentos entre parientes.
- Las reclamaciones sobre el status de la persona.

La concentración del poder en manos del emperador determinó que l procedimiento


extra-ordinem fuera desplazando al formulario hasta que en el año 342 quedó
derogado el procedimiento formulario. En las provincias, el único procedimiento que
se conocía era el extra-ordinem.

Características

- Todo él se realiza en una sola fase. Desaparece la in iure y la fase apud iudicem;
por ello la litis contestatio pierde su importancia.
- La citación del demandado tiene carácter semioficial. Puede ser citado de forma
privada pero también por orden judicial o por edictos.
- El procedimiento se tramita ante magistrados-jueces que actúan como delegado
del príncipe.
- El demandante tiene que presentar junto con el escrito de demanda las pruebas
de que intenta valerse y lo mismo con el escrito del demandado. Además las
partes pueden pedir la interrupción del proceso para acortar nuevas pruebas.
- La sentencia puede se objetó de recurso de apelación y eso implica presentar las
actuaciones por escrito al órgano superior por lo que se impone el principio de
escritura frente al de oralidad.
- Tiene unas costas muy elevadas y eso determina la desigualad de oportunidades
entre las partes.

Contenido del proceso

El procedimiento empieza con la citación del demandado que recibe el nombre de


litis denuntiatio y se podía hacer por escrito o de forma oral. En época de Justiniano,
la citación se realizaba por escrito mediante el llamado litis convetionis. Ése no sólo
servía para citar sino que también contenía la de manada. Una vez que se recibía
ese libellus conventionis del demandado podía hacer una confessio o allanamiento
a la pretensión del demandante y en ese caso no continuaba el proceso. Si no se
producía ese confessio, el demandado tenía que responder por medio del libellus
contradictionis y se comprometía a comparecer ante el tribunal y para ellos prestaba
una garantía con fiadores y esa garantía era la cautio indicio sisti. Si el demandado
no comparecía, el proceso continuaba en rebeldía.
La litis contestatio perdió la importancia que tenía en el procedimiento formulario y
los efectos de la litis contestatio los produjo la sentencia. Cuando las partes
comparecen ante el magistrado, se celebra el debate oral con intervención de los
abogados. Las partes reproducen sus alegaciones de los escritos de demandas y
contestación. Las excepciones perentorias pueden ser alegadas en cualquier
momento procesal.

Después del debate oral venía la fase de prueba. A diferencia de lo que ocurría en
época clásica que regía el principio de libre valoración de la prueba, ahora rige el
principio inquisitivo. El juez podía investigar y traer todo tipo de pruebas al proceso.

También se regía el principio de prueba tasada; el juez no podía valorar libremente


la prueba sino que tenía que hacerlo conforme a unos principios establecidos. En
esta época la prueba documental adquiere una importancia decisiva; los
documentos redactados por notario hacían prueba plena siempre que los
confirmaran bajo juramento.

Los documentos privados que fueran firmados por un mínimo de tres testigos tenían
el mismo valor que los públicos y en ese proceso se introduce las presunciones
como pruebas. Estos son dispensas de pruebas y eran de dos tipos:

a) Iuris tantum. Se admitían mientras que no fueran destruidas por otra prueba.
b) Iuris et de iuris. No admitían prueba en contrario.

En última parte del procedimiento extra-ordinem era la sentencia. Se dictaba por


escrito y era leída por las partes en audiencia pública. La sentencia no tenía que ser
necesariamente pecuniaria sino en una obligación de entregar algo o mostrarlo o
realizar una determinada actividad y podía ser impugnada mediante apelación.

Apelación

Se realiza ante el mismo tribunal que ha dictado la sentencia se puede realizar de


dos formas:

- Oral.
- Libellus appellatonius.

Una vez que la sentencia era apelada no podía ser ejecutada. La apelación producía
un efecto suspensivo. El juez podía examinar de nuevo el pleito y dictar una
sentencia que podía condenar al apelante en forma más grave de lo que había sido
en primera instancia. Esto no en día no existe.

Las partes comparecían ante el juez superior y tenía que reproducir de nuevo sus
aleaciones o las que consideraba oportuna. Si no comparecía, la apelación se
consideraba desistida y la sentencia primera se convertía en firme y definitiva. El
apelante que perdía podía ser condenado en las cosas procesales y se podía elevar
el gasto de esas costas en caso de peligrosidad.

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