Cuidado del personal de la salud en la pandemia de COVID-19

Dr. Gabriel Oscar Fernandez

Presidente
Sociedad Argentina de Medicina del Trabajo y Salud

Ocupacional de la Asociación Médica Argentina.

Especialista en Salud Pública.

¿Estamos para afrontar el cuidado del equipo de salud en una crisis de esta magnitud? El médico y
todo el Equipo de Salud como lo define en el Código de Ética de la Asociación Médica Argentina, es
el recurso humano valioso, imprescindible y a la vez escaso, sin reserva ni posibilidad de reemplazo.
El COVID-19 hizo tambalear e incluso caer a los sistemas sanitarios más ricos del planeta. La
MEDICINA DEL TRABAJO es una rama de las ciencias médicas que se ocupa del cuidado de la
salud de la persona que trabaja. Posee tres características. La primera característica es ser
“Preventiva”. La segunda es que actúa en una comunidad cerrada (los que trabajan en una
determinada labor). La tercera característica es que es multidisciplinaria interrelacionándose con las
otras especialidades médicas y con profesionales no médicos como ser: abogados, ingenieros en
diferentes especialidades, jefes de recursos humanos y gerentes de capital humano entre otros. En
cada establecimiento hospitalario privado o público debe haber un médico del trabajo para controlar
la salud de cada trabajador/a, y un departamento de higiene y seguridad. que tomarán acciones
concretas para prevenir accidentes de trabajo y enfermedades profesionales por el hecho y en
ocasión de dicha labor. Dado que toda enfermedad profesional y accidente de trabajo se pueden
prevenir y más aún en este periodo de pandemia COVID-19 es correcto decir enfermedad del trabajo
traumática y enfermedad del trabajo no traumática. Así lo define la American College of Critical Care
Medicine y la Academia Nacional de Medicina junto a otras muchas entidades científicas en todo el
mundo. Además desde la MEDICINA DEL TRABAJO se debe controlar las enfermedades
inculpables (aquellas que no se relacionan con el trabajo en sí) que pueden influir en la vida del
empleado o profesional. Todo el equipo de salud en su conjunto se encuentra enmarcado en la Ley
19587, su decreto reglamentario 351/79, sus modificatorias, la ley 24557de Riesgos del Trabajo, y
la resolución 905/15 de la SRT. En estas normativas se especifica el cuidado que se debe brindar a
todo trabajador: a los médicos y todo el equipo de salud. En dichas reglamentaciones se especifica
que en las diferentes actividades profesionales se debe trabajar con un especialista en higiene y
seguridad en el trabajo. La OIT recomienda en forma imperiosa a los Estados cubrir la seguridad de
todo el personal de la salud. En tal sentido transcribimos lo que la SUPERINTENDENCIA DE
RIESGO DE TRABAJO debe hacer cumplir a todas las ASEGURADORAS DE RIESGO DE
TRABAJO como así también a los empleadores. Tantos trabajadores del estado como privados,
prepagos, gremios bajo relación de dependencia, monotributistas o autónomos incluyendo a los
profesionales de los consultorios médicos del trabajo en las empresas, la seguridad social para
atender a los discapacitados y a los jubilados (PAMI), debemos trabajar con salud y dignidad.
 EN SALUD PÚBLICA EL PRIMER ESLABÓN FRÁGIL Y VULNERABLE EN

UNA PANDEMIA ES LA PERSONA QUE TRABAJA EN EL EQUIPO DE SALUD.

Esto se debe a que los más humildes y la clase trabajadora requieren una atención médica
personalizada con criterios epidemiológicos, sociales, culturales económicos y espirituales. Nuestra
incansable tarea como médicos del trabajo, y especialistas en Higiene y Seguridad laboral es cuidar
la salud de los médicos en sus consultorios salas de internación, tanto en un hospital polivalente o
monovalente. Nos encontramos con el recurso humano suficiente para hacerle frente en términos
cuantitativos y cualitativos que tiene que ser cuidado. Desde los más altos niveles del Gobierno, se
anunció el inminente incremento de las camas de terapia intensiva, como así también la compra de
respiradores e insumos para hacer frente a un virus altamente contagioso que, día a día, incrementa
exponencialmente la cantidad de casos y la mortalidad. Sin embargo, poco se analiza las difíciles
condiciones y medio ambiente de trabajo (CyMAT) en las que, a diario, los médicos y el equipo de
salud desarrollamos nuestro trabajo. Esto dentro de un sistema de salud con gran demanda,
desfinanciado y atravesado por una crisis estructural crónica de muy bajos salarios o remuneración,
que les coloca en una situación de altísima vulnerabilidad que, junto a la escasez de infraestructura,
insumos y equipamiento, contribuye a su vez, a generar el caldo de cultivo de ámbitos laborales cada
vez más violentos. Nuestra vocación de amor al prójimo nos impulsa a continuar trabajando en
defensa de la Salud Pública, CUIDANDO al equipo de salud. En este momento en que los casos del
nuevo Coronavirus crecen día a día y los pacientes febriles ingresan de a decenas a nuestros lugares
de trabajo, la mayor parte de los profesionales de la salud deberían contar con los elementos de
protección indispensables para ejercer su trabajo en esta pandemia. El profesional tiene obligaciones
pero se deben respetar sus derechos como trabajadores de la salud y como seres humanos. Como
lo establece la ley de contrato de trabajo 20744 en su art. 217 la medicina, en este contexto, es una
tarea penosa, mortificante, riesgosa, determinante de vejez o agotamiento prematuro. La
disponibilidad de materiales de bioseguridad EPP debe cumplir con las normas sanitarias ISO IRAM
que deben ser adecuadas para el Equipo de Salud cumpliendo con las ordenanzas de higiene y
seguridad en el trabajo y el análisis de cada puesto de trabajo. Por eso desde la Medicina del Trabajo
se aconseja valorar: la disponibilidad de EPP, el uso adecuado de los mismos y la disipación final
como residuos patológicos. La capacitación de todo el equipo de salud en el uso correcto es de
extrema importancia en Salud Ocupacional. Para cuidar a equipo de salud conforme a la resolución
905/15 de la SRT y sus recomendaciones actuales se debe dar capacitación, y proveer todos los
elementos de protección personal (EPP) adecuados en calidad y cantidad a todo el sistema de salud
tanto estatal como privado realizando los exámenes médicos indicados por las normativas vigentes.

CONCLUSIÓN: El uso de EPP es obligatorio, debiéndose realizar los exámenes médicos

pertinentes para cada persona que trabaja en el Sistema de Salud ya sea estatal o privado,
siendo imprescindible realizar los test diagnósticos de COVID-19 en MEDICINA DEL TRABAJO.

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