ee a Su si 7 800.9282 CIN ace 6561 = ion dia de la NacinTwesdanor 65el Epaminon Un cuento popular estadounidense contado por Liliana Cinetto ¢ ilustrado por Mariana Ruiz Johnson Material de distribucién gratuitaee Habia una vez un chico que tenia un nombre muy raro, Rarisimo, Se llamaba Epaminondas. i Todos las tardes, Epaminondas cruzaba ¢ pueblo para ir a visitar a su madrina que are nate un pequefio absequio. = et ih hy rail Y la tarde en que comienza esta historia, la madrina trae i, iS . i de Epaminondas le regalé un bizcocho, t veer we oy goa | team se Ut —Ovye, Epaminonda’ ira —le dijo— Te voy a regalar este bizcocho, Per ten enidad lévalo bien : : Se mad sujeto por el camino para que no s¢ te pierda. éHas J entendido, Epaminondas? a4 ;—Si, madrinita —contesté él. Y se fue, apretando bien fuerte el bizcocho, bien fuerte, tan fuerte que cuando Ilegé a su casa solo tenia, dentro de la mano, un pufiado de miguitas. Su mama estaba esperandolo, sentada en la puerta. —Pero :quétraes ahi, Epaminondas? —le pregunté al verlo. —Un bizeocho, mamita.sombrero. ¢Has entendido, E —respondY¥ al otro dia, Epaminondas yolvio a la casa de su madrina que, esta vez, le regalé un pan de manteca, fresquita, recién hecha. Epaminondas, recordando lo que le habia dicho su mama, envolvié el pan de manteca en un papelito limpio, lo guard6 dentro del sombrero y se puso el sombrero en la cabeza, Pero era verano. Hacia mucho calor. Y la manteca sé le fue derritiendo y escurriendo y churreteando por el pelo, por las orejas, por el cucllo...Cuande llegé a su casa, todo churreteado y pegajoso, su mama, que estaba esperandolo, sentada en la puerta, lo vio y gritd: —Pero :qué traes ahi, Epaminondas? —Un pan de manteca, mamita. y, hijo mio, yalgame Dios! No tienes cabeza, Es’ ésa la manera de traer un pan de manteca? La manera de traer un pan de manteca es envolverla en hojas de | parra e ir mojdndola en todos los rios y en las fuentes que hay por el camino para que se manienga fresquita y no se derrita. ¢Has entendido, Epaminondas? —Si, mamita —respondié él, oo “Y al dia siguiente, Epaminondas volvié a la casa de - st madrina que, esta vez, le regalé un perrito. rc eeMm Orr Leis ineteiccttiregmtemet item on): (2) (em dicho su mama, envolvio al perrito en hojas de parta y mene Gree ocr mmreimntce Centar rad eitrorcrtesr Gree relma me Team MMIC CRS ee tation revorcia, él dale que lo mojaba y dale que lo majaba...Quando Ileg6 a su casa, con el perrito media ahogado, charreando agua, su mama, que estaba esperandolo, sentada en la puerta, lo vio y grito: — —Pero, ¢qué traes ahi, Epaminondas? —Un perrite, mamita, —jAy, hijo mio, valgame glean anise eaber's ~ ¢Es ésa es la manera de traer un perrito? La manera de traer un perrito es atarle una cuerdita al cuello y tirar del otro extremo para que el perrito te siga. ¢Has entendido, Epaminondas? : —S$i, mamita. See‘ | jel gaat? j Cuando legé a su casa, con el pan todo roto y todo sucio, su mama, que estaba esperandolo sentada, en la puerta, lo vio y gritd; tit } Po tees eae —Pero zqué traes ahi, Waite STE El —Un pan, mamita. i ij i 1S : 3 —jAy, hijo mio, valgame Dios! fe tienes cabeza. ¢Es ésa la manera de traer un pan? No volverds a casa de tu madrina, De ahora en adelante, iré yo. fAl dia siguiente, mientras se preparaba para ira la casa de la madrina de Epaminondas, la mamé le dijo: | —Oye, hijo, mira. Acabo de sacar seis pasteles del horno y los he puesto sobre una tabla, en la entrada, * pata que se enfrien. Fijate que no se los coma el gato y si quieres salir a la calle, fijate bien como pasas por encima de ellos. {Has entendido, Epaminondas? Por encima. —Si, mamita. La mama se puso el sombrero y el chal y se fue a la casa de la madrina.Al rato, Epaminondas tenia ganas de salir a jugar. Los pasteles estaban alineados sobre la tabla, en la entrada, justo por donde él tenia que pasar. Entonces, recordando lo que habia dicho su mama fue diciendo: —Uno, dos, tres, cuatro, cinco y seis —mientras ponia los pies exactamente encima de cada uno de los pasteles, aplastandolos.ZY saben lo que pasé al otro dia? En realidad, nadie lo sabe. Aunque lo que si se sabe es que al otro dia Epaminondas,.. ;Ay!, no se podia sentar.Va Lela Blancanieves Caperucita roja recreate) Bre uniene emer me rc eGriis Bre a rem att eT erem Tete) Sir islcon fae) Pepino y el misterioso ratén Pérez El soldadito de plomo