NO SEAS UN SUPERHÉROE, SÉ UN SIMPLE BARRILETE

(Recuerdos de mi infancia - Néstor Cazón)

Como casi todos los días, hoy has venido a mí a contarme que deseas ser un

superhéroe, a preguntarme su podrías algún día volar como Superman, o a ser tan rápido como
Ray Rider y su caballo. Porque no juegas a ser ellos, sino que anhelas ser como ellos.

Has venido a contarme de tus sueños y de tus hazañas, todas de hombres mayores,
y aún eres un niño, inquieto, dócil, sencillo. Con tus bolsillos remendados de tu delantal de tantos
“desfondos” y tu jardinero inconfundible. Seguramente casi pegado a tu piel.

Con mucha ternura te escribo esta cartita, para que al leerla puedas recordar el
momento en el que comenzaste a soñar apenas cortando unos papeles y doblando no sé cuántas
cañitas para hacer tu barrilete. Primero con tanta torpeza acabándose o transformándose tras
muchos intentos en delicadeza de niño, de ángel.

Mira. Mira cómo hiciste de todo un barrilete, así debes hacer tu vida, y tus sueños
tejerlos como a cada cosita que fuiste cortando, pegando... con mucha facilidad, con alguna
dificultad...

Ata bien tus cañitas, y refuérzalas con un hilo. Ellos mantienen la forma, y reciben
el esfuerzo al volar. Igual debe ser tu vida, bien atada a tus sueños, bien resistente a tus saberes,
lo que aprendiste, lo que sabes y lo que quieres...

Un papel liviano, sencillo, tan sencillo como el papel de un diario viejo, permite
volar a tu barrilete, alto, y así debe ser tu sencillez, tu humildad, tu entrega, liviana… y volarás
muy alto

Cualquier barrilete vuela con una brisa calma, pero el mejor soportará vientos y
fuertes ráfagas y subirá por los aires aun sin brisa, y sin prisa, alto, bien alto.

Y siempre debes saber que no vuelas solo, porque un barrilete tiene un hilo, largo,
bien largo, pero resistente. Deberás saber a qué atarte, seguramente tu vuelo será bien controlado
y velado por tu papá y tu mamá. El hilo será más largo cuando más confianza te tengan, y la
merezcas. ¡Merécete que el carretel no se te acabe nunca!

Y vuela, siempre, vuela mucho, como ese barrilete de colores que hiciste con tus
manitas, vuela alto. Hazte un mundo de colores que merezca ser visto por tus ojitos de niño que
piensa y sueña en ser enorme.

No quiero que seas un supehéroe, mejor se liviano y vuela atado a la vida. Mejor sé
un lindo barrilete.
Una maestra
La que escucha tus sueños,
y te mira admirada
cada momento de niño