cieros.

Según estudios o indicadores financieros ellos plantean que esta metodología de

ahorro en los fondos de empleados en Colombia destruye valor, ya que su rentabilidad es
inferior cuando el empleado decide retirarse, ya que no suman intereses si no por el contrario
hay descuentos por estar afiliado a los mismos. (ayudas fúnebre, calamidades laborales o
familiares)

Sin embargo, cuando un empleado requiere de créditos es beneficioso en cuanto al tiempo y

la tasa de interés en la cual se pagará el mismo préstamo, ya que estos ahorros se obtienen de
recursos provenientes del ahorro y aportes de sus asociados, por lo cual requiere que los
afiliados giren parte de su nómina mensualmente.

Se puede decir que este tipo de ahorro es un escape para el crédito formal, que en los bancos
es difícil conseguir por los requisitos exigidos que, en su mayoría, son altos para el común de
la gente. Por lo cual esta figura empresarial amplía el crédito a las personas naturales con
base en los principios económicos solidarios, lo cual trae beneficios, económicos como
sociales, en cada uno de los asociados y su núcleo familiar.

*Los fondos de empleados que más destruyen valor son aquellos que tienen un mayor nivel
de activos comprometidos en la operación, es decir, los categorizados como Nivel I.
*En menor proporción, destruyen valor los Fondos de Empleados que se cuentan en el rango
con el menor nivel de activos.

* Los fondos de empleados que están en un rango intermedio de activos son los que más
generan valor comparativamente con las demás categorías.

Esto significa que en tiempos de crisis son el grupo de entidades más propensas a sostenerse
en el tiempo, aunque no presenten un músculo financiero grande como el que tienen los
fondos de Nivel I, es decir, las de mayor volumen de activos. Se puede concluir de manera
general, que el nivel de activos, lejos de lo que muchos empresarios piensan, debe ser lo más
bajo posible, pues esto generaría menos presión a la rentabilidad y favorece en el tiempo, la
generación de valor.

Dada su naturaleza y objeto social, los fondos de empleados propender de manera implícita
por generar valor social a sus propietarios (asociados) y no para la empresa como tal, hecho
que se puede constituir en una razón de los resultados obtenidos. Si bien las razones
anteriores explican muy bien los resultados, no justifican estas cifras, pues también se
observa una mayor gestión, una mayor capacidad directiva y dado el importante crecimiento
que en los últimos años estas entidades han tenido, es hora de que sus directivos empiecen a
dirigirlas con estrategias más eficientes, que procuren no sólo el bienestar sino su
permanencia en el tiempo, y considerar dichos fondos como una forma de generar valor.

El Ministerio de Hacienda expidió un decreto que le impone mayores controles a los fondos
de empleados entre los que se encuentran topes mínimos de solidez y liquidez para los fondos
y límites para los montos de los préstamos por empleado.

Estas organizaciones realizan inversiones en títulos negociables emitidos por entidades

financieras vigiladas por la superbancaria o en títulos de deuda pública emitidos por el
estado.