Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa –CARBAP-
Sr. Matías de Velazco
Sr. Roberto Cittadini
S/D
De nuestra consideración:
Estimados, atento a la consulta relacionada al Impuesto
de Sellos en contratos de compra venta de cereales y oleaginosas, por medio de atenta nota de fecha 23 de julio del corriente año, se cumple en informar en primera instancia, que por las características fundamentales del impuesto en cuestión, a continuación se tomara en cuenta los conceptos principales vertidos en la misma, a fin de dilucidar la cuestión planteada, efectuando la aclaración previa de que el presente, se encuentra limitado en su contenido por la falta de instrumentación que diera origen a la consulta Esta agencia, se ha expedido en distintas oportunidades en relación a la documentación a registrarse, considerando lo establecido en el artículo 3° de la Resolución Normativa N°50/2010 que prevé que la misma, consistirá en los formularios, boletos, documentos, contratos oficiales o los confeccionados conforme con los modelos tipo aprobados por las entidades registradoras inscriptas o aceptados por los usos y costumbres, como así también específicamente, en relación a los formularios o comprobantes que respaldan las operaciones de granos. La exencióna la cual se hace referencia, establecida en el Código Fiscal vigente, artículo 297 inciso 10), establece que están exentas las liquidaciones o facturas suscriptas por las partes, como así también los documentos que instrumenten la factura de crédito en los términos de la Ley Nacional N° 24.760 y la factura de crédito electrónica MiPyMEs creada por la Ley Nacional N° 27.440, y todo otro acto vinculado a su transmisión. Como podemos observar, contempla dos tipos de documentos, las liquidaciones o facturas habitualmente utilizadas en transacciones comerciales, las cuales no requieren firma de las partes contratantes. Y la factura de crédito establecida por la ley 24760 que requiere de la firma de las firmas de las partes y ha sido considerada de modo expreso. Por todo lo expuesto, y dado que la consulta se funda en una exención puramente objetiva, relacionada con la instrumentación, debe señalarse que Asesoría General de Gobierno expresó en distintas oportunidades que “Si la exención es un verdadero privilegio y una verdadera excepción a la aplicación de la norma tributaria, es natural que deba ser interpretado en sentido restringido. La exención está o no está en la norma y en esta última hipótesis no puede crearse, por razones de analogía, un privilegio que, si el legislador lo hubiese considerado como tal, lo habría expresado” (Andreozzi Manuel, “Derecho Tributario Argentino” T. I. Pág. 205, TEA, Bs. As., 1951). En igual sentido se ha pronunciado nuestra Suprema Corte de Justicia, al expresar que “La exención impositiva, como derecho otorgado por la norma, no puede ir más allá de una interpretación ceñida al texto, nunca extensiva, partiendo del análisis de la semántica de los términos empleados y sin olvidar los fines que se tuvieran en cuenta al sancionarla.” (S.C.B.A. AC. B-47762, 02/5/79). Finalmente concluyendo con la presente, no se observa la procedencia de la exención establecida en el inciso 10 del artículo 297 del Código Fiscal vigente para operaciones de compraventa de granos.
Saluda atentamente.
FDO: GASTÓN CHAUMEIL , GERENTE GENERAL DE RECAUDACIÓN
Introducción al derecho internacional privado: Tomo III: Conflictos de jurisdicciones, arbitraje internacional y sujetos de las relaciones privadas internacionales