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INSTITUTO TECNOLÓGICO SUPERIOR DE CENTLA

Materia: taller de destrezas directivas

Catedrático: Manuel Antonio Mayo Corzo

Alumna: Ana Viviana García valencia

Semestre: 8 Grupo: A

Trabajo: investigación
Modalidad: Sabatino

Fecha: 09/05/2020
Desde su primera utilización por Frankl, el término Proactiva se ha ido
enriqueciendo con nuevos matices. En general, todos los autores que han hablado
de ella coinciden en afirmar que la pro actividad no es un derecho del ser humano
sino una obligación que ha de adquirirse.
Víctor Frankl 
El psicólogo de los campos de concentración solía comenzar sus consultas con la
misma frase: “¿Y usted, por qué no se suicida?” La respuesta obligaba a la
persona a plantearse tres conceptos fundamentales: el sentido de su vida, la
actitud coherente con éste y su libertad, la única posible: “Si no está en tus manos
cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con
la que afrontes ese sufrimiento”, y añade Frankl: “Los que estuvimos en campos
de concentración recordamos a los hombres que iban de barracón en barracón
consolando a los demás, dándoles el último trozo de pan que les quedaba. Puede
que fueran pocos en número, pero ofrecían pruebas suficientes de que al hombre
se le puede arrebatar todo salvo una cosa: la última de las libertades humanas —
la elección de la actitud personal ante un conjunto de circunstancias— para decidir
su propio camino.”
Stephen R. Covey 
Como en Frankl, Covey considera que el concepto pro actividad no se limita a
saber qué voy a hacer (iniciativa) sino a qué voy a hacer teniendo en cuenta a los
demás, dentro de mi círculo de influencia (responsabilidad). En otras palabras, la
pro actividad no consiste en hacer lo que se quiere sino en hacer lo que se debe.
Por lo tanto, las personas proactivas actúan de acuerdo con sus valores y
principios. En el extremo opuesto, la gente reactiva actúa movida sólo por sus
sentimientos y las circunstancias de su entorno. Por la manera que hablan los
reconocerás…

Martha Alles, por su parte, la define como “la actitud permanente de adelantarse
a los demás en su accionar. Es la predisposición a actuar de forma proactiva y no
sólo pensar en lo que hay que hacer en el futuro. Implica marcar el rumbo por
medio de acciones concretas, no sólo de palabras.”
Para Bateman y Crant la pro actividad supone crear cambio, no sólo anticiparlo.
Según estos autores ser proactivo no consiste únicamente en tener flexibilidad y
adaptabilidad hacia un futuro incierto sino que es preciso tomar la iniciativa para
mejorar un negocio.
Bateman y Crant han llevado a cabo distintos estudios en los que analizan el
comportamiento proactivo y lo relacionan con distintas medidas de logro,
liderazgo, rendimiento y resultados de carrera. Estos investigadores, tras
entrevistar a distintos colectivos -banqueros, vendedores, estudiantes de MBA,
emprendedores, presidentes de compañías, etc. - afirman que el comportamiento
proactivo tiene consecuencias positivas demostrables tanto para los empleados
como para las organizaciones.
Ralf Schwarzer sostiene que el comportamiento proactivo es la creencia de las
personas en su potencial para mejorarse a sí mismas, su situación y a su entorno.
Las personas que se rigen por este comportamiento anticipan o detectan
estresores potenciales y actúan para prevenirlos. Según esta definición, la pro
actividad está estrechamente relacionada con la sensación de control y de
autoeficacia. Las personas que se consideran eficaces, que piensan que pueden
controlar la situación y solucionar sus problemas, tienen más facilidad para
emprender la acción.

Referencias
Víctor Frankl. El hombre en busca de sentido, Ed. Herder Barcelona, 1979
S. Covey. Los siete hábitos de la gente altamente efectiva. Paidós Plural.
Barcelona, 19890
Alles, M. (2004). Diccionario de comportamientos. Gestión por competencias.
Rojas Ayala Loyramar Lourdes. (2013, Febrero 22). La pro actividad como camino
al éxito

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