Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Crl EP (R)
INTRODUCCION
Todos los principios del derecho de los conflictos armados de los que hemos
tratado son pertinentes durante la conducción de las operaciones. No obstante,
hay dos principios de importancia primordial. Es indispensable que ustedes los
entiendan y apliquen en la planificación y conducción de cualquier operación
militar
a. PRINCIPIO DE DISTINCION
Se debe distinguir en todo momento y claramente, entre combatientes y
personas civiles o la población civil como tal. Por supuesto, se puede atacar
a los combatientes, a menos que estén fuera de combate. Las personas
civiles están protegidas contra los ataques, pero pierden esta protección si
participan directamente en las hostilidades, y mientras dure tal participación.
La protección de las personas civiles se aplica tanto a las personas civiles
enemigas como a las personas civiles del propio lado.
Página 2 de 32
• Los que emplean métodos o medios de combate cuyos efectos no sea
posible limitar conforme a lo exigido en el derecho de los conflictos
armados.
b. PRINCIPIO DE PROPORCIONALIDAD
Cuando se atacan objetivos militares, las personas y los bienes de carácter
civil deben estar protegidos de daños incidentales o colaterales en la mayor
medida posible. Los daños causados incidentalmente no deben ser
excesivos en relación con la ventaja militar concreta y directa que prevean
ustedes en sus operaciones. Semejante uso excesivo de fuerza
contraviene evidentemente el derecho de los conflictos armados y cons-
tituye un crimen de guerra.
Página 3 de 32
II. RELACIÓN DE LOS PRINCIPIOS CON LA CONDUCCIÓN DE
LAS HOSTILIDADES
Página 4 de 32
Quienes ordenen o ejecuten el ataque deben disponer de datos suficientes
de los servicios de inteligencia para tener en cuenta esta condición.
En caso de duda de si un bien, normalmente empleado con fines civiles, se
utiliza para contribuir de manera eficaz a una acción militar, supongan que
no se utiliza con tal fin.
¿Qué quiere decir todo esto? significa que pueden atacar objetos que el
enemigo usa eficazmente desde el punto de vista militar, si poniendo fin a
dicho uso consiguen ustedes claramente una ventaja en el momento del
ataque.
Ciertos bienes son objetivos militares obvios, mientras que otros son
objetos contra los que se prohíbe cualquier ataque; pero, ¿qué ocurre con
un bien que por lo general goza de protección, como por ejemplo una
escuela o lugar de culto, pero que se utiliza con fines militares?
Si, sobre la base de los hechos, no cabe duda de que algo es un objetivo
militar, pero hay personas civiles presentes o cerca del mismo, ¿importa o
no este factor?
Página 5 de 32
ataques directos. Sin embargo, los objetivos militares no dejan de ser
objetivos militares sólo porque haya personas civiles presentes; estas
personas comparten el peligro por estar allí presentes. No obstante,
como es sabido, se han de tomar precauciones para limitar al mínimo
los daños civiles colaterales.
¿Qué sucede con las personas civiles que viven en las inmediaciones, pero
que, de hecho, no trabajan en la fábrica de municiones??
Página 6 de 32
objetivo se está utilizando con fines militares, mientras cumple también
con su función habitual. Pueden atacar la iglesia o la mezquita, pero
traten de no hacerlo durante el culto. Ustedes pueden atacar el
helicóptero en el patio del colegio; pero, procuren hacerlo fuera de las
horas de clase. Con armas modernas y sentido común, se puede
resolver fácilmente el asunto de estos objetivos, sin causar otras
destrucciones. Con la tecnología y las comunicaciones modernas es
totalmente factible avisar acerca de un ataque inminente, cuando haya
personas civiles presentes o, simplemente, sólo atacar el objetivo,
cuando sea de prever el menor número de víctimas entre la población
civil.
Éstos son objetivos que suelen emplearse tanto para fines militares como
civiles, y de los que los militares obtienen considerables ventajas militares.
Son ejemplo de ello puentes por los que cruzan ríos tanto miembros de las
fuerzas armadas como personas civiles, así como plantas generadoras de
electricidad, para usos militares y civiles, incluidos los hospitales.
Es sabido de todos que, por muy claras que sean las normas, en situaciones
de conflicto, no se puede evitar que haya muertos o heridos entre la población
civil. Cuando esto suceda ¿significa que ustedes, como atacantes, han
infringido el derecho automáticamente? No, por supuesto que no. Aunque las
personas civiles y los bienes de carácter civil están claramente protegidos,
siguen expuestos a los peligros generales del conflicto, en el sentido de que
los ataques contra objetivos militares pueden causar daños incidentales, por
muy buena que sea la planificación, pese a tener los mejores jefes o sistemas
de armas. Es posible que no se pueda limitar precisamente la zona de peligro
Página 7 de 32
de un bombardeo de artillería o de un ataque aéreo; puede suceder que un
arma no funcione como es debido; incluso se conocen casos en que
complejas bombas dirigidas por láser y mísiles de crucero se han salido de su
curso o han sido desviados por medidas de defensa; se pueden cometer
errores en el fragor o en la confusión del combate; es posible que la
información suministrada por los servicios de inteligencia no sea siempre
perfecta y esto puede incidir en la selección de objetivos.
Está claro que, como miembros de las fuerzas armadas no son ustedes
responsables de tales daños incidentales, siempre que hayan planificado y
realizado sus operaciones de buena fe y en la total observancia del derecho
de los conflictos armados, en particular por lo que respecta al principio de
proporcionalidad, y que los errores sean verdaderos errores y no se empleen
para encubrir una intención.
Recuerden que el derecho no pretende, en forma alguna, evitar todas las
acciones militares. Ningún Estado del mundo ratificaría un tratado que así lo
hiciese. Sin embargo, casi todos los Estados están de acuerdo con la noción
de que, en beneficio propio y en el de sus fuerzas armadas, hay que poner
límites al uso de la violencia.
Página 8 de 32
III. PERSONAS Y BIENES ESPECÍFICAMENTE PROTEGIDOS
EN TODAS LAS OPERACIONES
Página 9 de 32
habida cuenta de la índole de la unidad. Es posible que un puesto de
primeros auxilios o una ambulancia de campaña tenga que situarse en
posición bastante avanzada y, por lo general, suele camuflarse como
cualquier unidad táctica; un hospital de campaña o un hospital militar
permanente situados en la retaguardia se señalan por lo general con la cruz
roja o la media luna roja (o el león y sol rojos) y gozan de toda la protección
que confiere el derecho.
b) MUJERES Y NIÑOS
¿Por qué en una lección acerca de la conducción de las operaciones tiene
que haber secciones, por separado, relativas a mujeres y a niños? ¿No se
trata de ellos en la sección relativa a las personas civiles? Por supuesto que
las mujeres y los niños reciben protección como personas civiles. Sin embargo,
deben considerarse aparte por dos razones: en primer lugar, porque el
derecho confiere protección especial adicional a ambas categorías y, en
segundo lugar, porque ambas categorías desempeñan un papel importante
en el combate. Las mujeres legalmente y los niños ilegalmente.
1) MUJERES
Personas civiles:
Las mujeres deben ser tratadas con especial respeto. Queda prohibido
cualquier ataque a la integridad física o psicológica de las mujeres, en
particular la violación, la prostitución forzosa o cualquier forma de
atentado al pudor. (La violación y los atentados al pudor contra hombres
están, claro está, prohibidos también, pero tales ataques son más
frecuentes contra mujeres). En caso de que sean detenidas, las familias
deben mantenerse juntas. En otros casos, se debe mantener separadas
a las mujeres de los hombres. Si una mujer encinta o una madre con un
hijo menor es detenida bajo sospecha de haber cometido un delito, su
caso se tratará con prioridad. En caso de un delito relacionado con el
conflicto armado, las mujeres encintas y las madres con hijos menores
pueden ser sentenciadas a muerte, pero la sentencia no se debe
ejecutar.
Combatientes:
Las mujeres tienen el pleno estatuto de combatientes en muchas de las
fuerzas armadas en todo el mundo, tanto en puestos del frente como de
estado mayor o de logística. Como combatientes deben respetar las
mismas normas y están protegidas por las mismas normas que sus
colegas de sexo masculino. Si son capturadas, se les debe tratar con
respeto sin someterlas a ninguna forma de violencia, incluida la
violencia sexual o los atentados contra el pudor. Si son trasladadas a
un campamento de prisioneros de guerra, deben estar detenidas en
locales separados de los hombres.
Página 10 de 32
Quedan prohibidos la violación sexual y cualquier atentado contra el
pudor y, en la mayoría de los casos, son una forma de tortura La vio-
lación, que se considera tortura o trato «inhumano», es una grave
infracción del derecho, punible en los tribunales de cualquier Estado.
Semejante abuso ocurre con demasiada frecuencia en situaciones de
conflicto. De hecho, en conflictos recientes, como por ejemplo en ex
Yugoslavia, las violaciones sistemáticas y organizadas se habían
convertido en un instrumento de la política militar. Semejante
comportamiento envilece la profesión de las armas y, como la tortura,
ha de merecer el desprecio de todos los soldados. Cuando se perpetran,
es señal inequívoca de una carencia total de disciplina y de la falta
absoluta de control de los subordinados por parte de los jefes.
2) NINOS
Personas civiles:
Cuando hablamos de niños, nos referimos, por lo general, a las personas
menores de 18 años. Sin embargo, en el derecho de los conflictos armados,
hay disposiciones distintas para los menores de 15 años y los de edades
entre los 15 y los 18 años. Cuando aquí decimos «niños» se entiende los
menores de 15 años. Los niños tienen derecho a respeto especial y deben
ser protegidos de cualquier atentado contra el pudor. Se debe hacer todo
lo posible por prestarles la atención y los cuidados especiales que
requieren.
Combatientes:
Un aspecto particularmente trágico de los conflictos modernos es la
participación activa de niños en las hostilidades, tanto niños como niñas.
Esto parece tener poco que ver con las tradiciones culturales y mucho que
ver con el oportunismo y la escasez de soldados. A menudo sólo es una
excusa o un abuso de quienes están en el poder; dicho de otra manera, es
meramente hacer que los niños cumplan con el trabajo de los mayores.
Estos niños soldados operan con poco o ningún entrenamiento y, a
menudo, se alimentan sólo con alcohol y drogas. Por supuesto que pueden
ser enemigos formidables y tenaces a quienes enfrentar. No queda más
remedio que hacerlo, pero, con el debido respeto y un mínimo de
compasión por su difícil situación.
Página 11 de 32
trato y condiciones de cautiverio acordes con su edad, sean o no pri-
sioneros de guerra. En ninguna circunstancia, podrán recibir trato menos
favorable al debido a los prisioneros de guerra. En particular, estos niños
soldados deben estar detenidos en lugares separados de los adultos,
excepto si están en unidades familiares.
c) AYUDA HUMANITARIA
Las partes en conflicto autorizarán el libre paso de todo envío de ayuda
humanitaria que se destine únicamente para la supervivencia de la
población civil, aunque se destine a la población civil del adversario.
Ejemplos de dicha ayuda son material médico y hospitalario, víveres
indispensables, ropa de vestir y de cama, material para construir refugios,
determinados artículos alimentarios y medicamentos indicados para niños,
mujeres encintas, madres lactantes y parturientas.
d) ZONAS PROTEGIDAS
En el derecho se acepta el establecimiento de zonas protegidas. Estas
zonas brindan una amplia gama de posibilidades, tanto fuera como dentro
de la zona de combate, a fin de ofrecer seguridad y protección a heridos y
combatientes enfermos, así como a las demás personas civiles que no par-
ticipen directamente en las hostilidades. No deben ser objeto de ataques ni
se deben utilizar, en absoluto, con fines militares.
e) BIENES CULTURALES
Los bienes culturales como monumentos históricos, obras de arte, lugares de
culto, bibliotecas, etc., no deben utilizarse con fines militares y que están
Página 12 de 32
protegidos contra actos hostiles. Esta obligación de protección es aplicable a
ambas partes. Como ustedes saben, se puede usar un signo protector para
ayudar a distinguir un edificio que goza de protección general. Si dicho bien
se utiliza con fines militares, perderá la protección contra los ataques, pero
incluso en estos casos, deben limitarse al mínimo los daños. La pérdida de
inmunidad de los bienes que se acogen a la protección general sólo deberían
ordenarla los jefes de batallón.
Puede haber casos raros en que sea indispensable el uso de tales bienes
con fines militares, por ejemplo, un puente histórico que es el único paso para
cruzar un río. En tales casos, no hay otra opción militar factible
Página 13 de 32
IV. MÉTODOS DE GUERRA PROHIBIDOS EN TODAS LAS
OPERACIONES
b) ESCUDOS HUMANOS
Las personas civiles no pueden ser utilizadas como escudo de objetivos
militares o para proteger con su presencia, potenciar u obstaculizar
operaciones militares. Esto reviste dos aspectos. En primer lugar. no se
deben situar objetivos militares en zonas civiles para protegerlos. En segundo
lugar, no se deben dirigir movimientos de la población civil para proteger
objetivos u operaciones militares. Dicho de otra forma, la prohibición de
utilizar a personas civiles como escudos humanos se aplica a ambas partes.
Los siguientes ejemplos ilustran lo que no debe hacerse en ambos casos:
Página 14 de 32
El hecho de que, a pesar del derecho, su oponente use escudos humanos no
los releva a ustedes como atacantes de su obligación legal de tomar todas
las medidas de precaución posibles para proteger a la población civil y los
bienes civiles y, en particular, de cerciorarse de que tal ataque no ocasiona
resultados excesivos en relación con la ventaja militar concreta y directa
esperada, es decir el principio de proporcionalidad.
c) PILLAJE
Antiguo vocablo que significa simplemente robar, saquear o entrar a saco.
Aunque en tiempos remotos el pillaje se consideraba una legítima
recompensa a los esfuerzos del servicio de soldado, ahora está prohibido
universalmente. Es éste el sello característico de los soldados indisciplinados
con pésimos jefes que se aprovechan del caos de la batalla y abusan de su
poder ante combatientes indefensos o personas civiles, con fines de lucro. El
robo es un delito en la ley nacional y continúa siendo un delito en las
operaciones. Hagamos una distinción clara entre tomar bienes no militares
como joyas, relojes, enseres del hogar, etc., que está prohibido, y tomar
equipo militar como radios, vehículos, armas, etc. Esto último se denomina
botín de guerra y, por supuesto, se puede recoger, declarar y usar en las
propias filas. Aunque se puede tomar el equipo útil para fines militares (como,
por ejemplo, radios o vehículos) que pertenezca a personas civiles, habrá de
ser devuelto y pagarse compensación al final de las hostilidades.
d) PERFIDIA
El término «perfidia» se refiere fundamentalmente a un atentado contra la
buena fe o a una franca traición. Implica una intención deliberada de hacer
creer al adversario que no puede atacar, porque están protegidos, y
aprovecharse de la vulnerabilidad resultante del enemigo. Está prohibido
cometer un acto hostil, so pretexto de tener protección jurídica, apelando a la
buena fe del adversario con intención de traicionarla. Está prohibido matar,
herir o capturar a un adversario valiéndose de medios pérfidos; si lo hacen,
destruyen ustedes la confianza que han de tener los combatientes en las
normas de los conflictos armados, demuestran la falta del mínimo respeto,
que incluso los adversarios han de tener entre sí, y menoscaban la dignidad
de quienes portan las armas.
La perfidia consiste, por ejemplo, en fingir, con intención de aprovecharse del
respeto que observa el adversario por las normas de protección, que:
Página 15 de 32
• Tienen un estatuto de protección mediante el uso de banderas, emblemas
o uniformes de las Naciones Unidas;
• Tienen un estatuto de protección, mediante uso indebido de los emblemas
de la cruz roja o de la media luna roja, o de cualquier otro uso indebido de
emblemas protectores reconocidos en los Convenios de Ginebra o en el
Protocolo adicional I.
f) CUARTEL
Está prohibido ordenar que no haya supervivientes, como por ejemplo decir
a sus soldados: «tomaremos el objetivo enemigo y no quiero que haya
sobrevivientes». No den jamás esta orden ni piensen usarla como amenaza
o basar la conducción de las hostilidades en ella.
Página 16 de 32
Por el contrario, las tropas aerotransportadas representan una amenaza
concreta y pueden ser objeto de ataque mientras saltan en paracaídas a la
zona de lanzamiento.
h) TORTURA
Están absolutamente prohibidos la tortura, los tratos y penas inhumanos o
degradantes. La violación y el acoso sexuales son formas de tortura.
i) REHENES
Se prohíbe la toma de rehenes. El término «rehenes» se refiere a las personas
que se usan como medio de regateo para obligar a que el adversario actúe o
se abstenga de actuar de cierta manera, como, por ejemplo, forzándolo a
poner en libertad a prisioneros o a cancelar una operación militar. En
situaciones de violencia de menos intensidad, se toman rehenes, a veces,
Página 17 de 32
para pedir rescate, por ejemplo, en pago por su liberación. La toma de rehenes
es una infracción grave del derecho. La prohibición abarca todos los conflictos
armados, tanto internacionales como no internacionales.
j) REPRESALIAS
Una represalia es una infracción del derecho cometida por una parte en
respuesta a una infracción perpetrada por el adversario, cuya única finalidad
es poner fin a la violación del derecho y evitar que se repita. No está
permitido el uso de represalias para castigar a la parte responsable de haber
infringido el derecho.
Están prohibidas las represalias, en todas las circunstancias, contra:
• Prisioneros de Guerra;
• Heridos, Enfermos Y Náufragos;
• Personal Sanitario Y Religioso;
• Personas Civiles;
• Bienes de carácter civil;
• Edificios Protegidos, Equipo y Naves;
• Bienes Culturales;
• Bienes indispensables para la supervivencia de la Población;
• Obras que contienen Fuerzas Peligrosas;
• El Medio Ambiente Natural.
Sólo pueden ordenar las represalias las más altas autoridades políticas y
militares; no son de la competencia de un jefe de pelotón.
Página 18 de 32
V. ACCIONES PERMITIDAS EN LAS OPERACIONES
ESTRATAGEMAS
Página 19 de 32
VI. CONTACTO CON EL ENEMIGO
b) RECURSO A INTERMEDIARIOS
Ustedes pueden entablar relaciones con el enemigo empleando los buenos
oficios de intermediarios. En el derecho se disponen dos opciones principales.
La primera es el recurso a una Potencia protectora. Se trata de un Estado
neutral designado por una parte en el conflicto y aceptado por su contrincante.
La Potencia protectora oficia como un honrado intermediario entre ambas
partes. Por ejemplo, podría visitar campamentos de PG o de internamiento,
a fin de cerciorarse de que se observa el derecho. De hecho, contados son
los Estados que han recurrido a esta modalidad, aunque, por ejemplo, el
Reino Unido pidió a Suiza que actuase como su Potencia protectora durante
el conflicto de Falklands/ Malvinas y Argentina solicitó lo mismo de Brasil. La
segunda opción es recurrir a los servicios de intermediario de una
organización humanitaria imparcial como sustituto de la Potencia protectora.
Esto es más frecuente. Por ejemplo, a menudo, las partes en un conflicto
piden al Comité Internacional de la Cruz Roja que obre como intermediario
Página 20 de 32
desplacen donde ustedes estén. No avancen ustedes –recuerden la
posibilidad de perfidia. En sus propias posiciones, ustedes pueden imponer
medidas de seguridad, como, por ejemplo, vendarles los ojos a los
miembros del grupo, para que no puedan recabar información. Sin embargo,
deben protegerlos durante el período de negociaciones. No se les puede
disparar. Tras parlamentar, se les debe permitir regresar a salvo a sus
propias líneas.
Página 21 de 32
VII. PRISIONEROS DE GUERRA – TRATO INICIAL TRAS LA
CAPTURA EN LA ZONA DE COMBATE
Es obvio que se trata de una situación difícil, pero los soldados profesionales
han de saber hacerle frente. La mejor manera es ponerse en el lugar del
prisionero. Ningún buen soldado o jefe debe aprovecharse de la suerte o
situación vulnerable del adversario. Entonces, ¿cómo hay que proceder?
Página 22 de 32
Además, se debe permitir que los prisioneros conserven sus distintivos de
graduación, cubiertos para comer, raciones y cantimploras. También debe
permitírseles conservar sus tarjetas y placas de identidad. Asimismo, pueden
conservar objetos personales, incluidos anteojos, relojes y artículos de valor
sentimental, como fotografías de familia. No se pueden retirar las cantidades
de dinero de que sean portadores los prisioneros de guerra, excepto por
orden de un oficial, y tras haberse consignado en un registro especial y
haberse entregado un recibo detallado. Las cantidades en moneda de la
Potencia detenedora, o que sean convertidas en esa moneda a pedido del
PG, deberán abonarse en la cuenta del prisionero.
Página 23 de 32
información: el PG ha de ser inmediatamente evacuado a la retaguardia,
donde interrogadores capacitados que se atienen a lo dispuesto por el
derecho pueden realizar la labor como es debido. De todas formas, en el
derecho se exige que deben ustedes evacuar a los PG para ponerlos fuera
de peligro tan pronto como sea posible.
c) EVACUACION
Recuerden que la finalidad principal de la evacuación es retirar a los pri-
sioneros de guerra del peligro inmediato en la zona de combate. Por
consiguiente, deben ser trasladados, lo antes posible, a la retaguardia y,
mientras tanto, no ser expuestos inútilmente a peligro alguno. No se les debe
obligar a realizar actividades de índole militar, como, por ejemplo, abrir el
paso a través de un campo de minas. Se les debe proteger contra actos de
violencia, intimidación, insultos o curiosidad pública. Por ejemplo, los equipos
de televisión que estén operando en la zona pueden efectuar tomas del grupo
en conjunto, pero sólo a condición de que ningún miembro del grupo de PG
pueda ser identificado por separado
En caso de que tengan alguna duda acerca del estatuto de algún cautivo,
trátenlo como PG e informen a sus superiores acerca de sus dudas, para que
se hagan más averiguaciones sobre el particular en una zona de retaguardia.
Página 24 de 32
que las mujeres pueden estar detenidas con otros combatientes y ser luego
evacuadas con los mismos tan pronto como sea posible.
Traten a los PG debidamente y con humanidad, curen todas las heridas que
tengan y evacúenlos en el más breve plazo posible a una zona de retaguardia
Página 25 de 32
VIII. CONTACTO CON LAS PERSONAS CIVILES
Página 26 de 32
IX. EL DERECHO Y LAS FASES DEL COMBATE
Página 27 de 32
Si es posible escoger entre varios objetivos militares y cada uno de ellos
representa una ventaja o resultado análogos, escojan el que probable-
mente haga correr menos peligros o cause menos daños entre la pobla-
ción civil y los bienes de carácter civil.
Antes de iniciar un ataque concreto que pueda afectar a la población civil,
avisen con antelación, a fin de dar tiempo a la población para evacuar o,
por lo menos, ponerse a salvo. El aviso debe ser, por supuesto, auténtico
y eficaz. Debe llegar a las personas civiles interesadas. Debe darles
tiempo suficiente para reaccionar. Los avisos se pueden transmitir por
radio o televisión, lanzando volantes o por Internet. El atacante puede
prescindir del aviso cuando las circunstancias no lo permitan, principal-
mente cuando las circunstancias particulares de la operación militar pla-
neada no permitan que se informe al defensor, porque la finalidad de la
operación no podría entonces lograrse, por ejemplo, si el elemento de
sorpresa es fundamental para el éxito de toda la operación
Página 28 de 32
trasladar a las personas civiles a lugares que conozcan y que no presenten
peligro para ellas. Puede que sea necesario realizar una labor conjunta entre
la población civil y los militares, a fin de proporcionar alimentos, transporte,
incluso para instalar refugios para estas personas civiles. Siempre que sea
posible, se debe evacuar a los niños con sus familiares.
Cuando se pueda elegir entre varias posiciones de defensa para obtener una
ventaja militar equivalente, se optará por la posición de la que quepa prever
el menor peligro para las personas civiles y los bienes civiles.
PROTECCIÓN CIVIL
Ahora, hablemos de las organizaciones de protección civil que trabajan en
estrecha colaboración con los militares. Pueden asumir directamente la
responsabilidad de acciones humanitarias, como proporcionar refugios, dar
aviso de ataques, combatir incendios, tomar medidas de oscurecimiento,
encargarse de evacuaciones sanitarias, del mantenimiento del orden, etc.
Recuerden que el personal de organizaciones de protección civil está
protegido por la ley en el desempeño de su labor y normalmente tanto éste
como su equipo ostentan el signo protector distintivo del triángulo equilátero
azul sobre fondo cuadrado naranja. Es posible que estos miembros del
personal lleven armas ligeras para defensa propia y para mantener el orden
público, pero no deben participar directamente en las hostilidades.
Página 29 de 32
Los miembros de las fuerzas de protección civil, así como su equipo e
instalaciones, están protegidos siempre que no cometan actos que no
correspondan a sus obligaciones habituales y que sean perjudiciales para el
enemigo. Incluso en estos casos, no cesará la protección, hasta que se haya
dado un aviso y un plazo razonable para que los miembros de la organización
de protección civil dejen de cometer dichos actos.
Página 30 de 32
anteriormente mencionadas. Por todas estas razones, la solución lógica
sería pues un alto el fuego que permita la evacuación. Por supuesto, los
infractores del derecho podrían considerar que les conviene retener a la
población civil o a parte de la misma para hacerlos escudos humanos o
como medio para granjearse simpatías, a nivel internacional, por la difícil
situación en que se encuentra la población desde el punto de vista
humanitario y para desacreditar al adversario. El atacante puede fácilmente
conjurar esta actitud, con sólo avenirse a las normas del derecho, haciendo
advertencias, concediendo tiempo para la evacuación en forma de alto el
fuego y cerciorándose de que se concede a las personas civiles el paso
seguro a una zona o localidad protegida.
No deben ser objeto de ataque alguno las personas civiles ni los bienes de
carácter civil que gocen de protección especial, como los bienes culturales.
4) ATAQUES INDISCRIMINADOS
Se prohíbe someter las zonas sitiadas a ataques indiscriminados como los
anteriormente descritos
Página 31 de 32
el lugar. Esto proscribe totalmente las estrategias tradicionales de sitio, en
las que se hacía padecer hambre a la población en ciudades enemigas
BIBLIOGRAFIA
Página 32 de 32