INSTITUCION EDUCATIVA PRUDENCIA DAZA

TALLER N°2 DE RELIGION

ALUMNO
WILSON RAMIRO SUANCHA BOCANEGRA

DOCENTE
ENRIQUE ICEDA

GRADO
11-03JM

VALLEDUPAR/CESAR
2020
 ACTIVIDAD
1. Lee el siguiente texto sobre la importancia de la oración en el ministerio
de Jesús y contesta las preguntas.
A. Muchas personas se consideran maestros sin recurrir a la oración. ¿crees que
el ministerio de Jesús se hubiera podido desarrollar sin la oración?
R/
Definitivamente pienso que no, esto sería imposible ya que la oración es el camino
o la cuerda por donde nos comunicamos con Dios, y aparte de poder
comunicarnos con Dios, es la que nos brinda un camino prospero, nos llena del
Espíritu santo y nos guía hacía el camino de la salvación y la felicidad.
B. ¿Por qué crees que la oración sigue siendo importante “como preparación
necesaria al cumplimiento de las propias obligaciones en la vida”?
R/
Todas las personas a diario nos encontramos envueltos en diversos problemas,
complicaciones y adversidades que se hacen visible al transcurrir la vida, y
muchas de las veces no sabemos como, donde ni a quien recurrir para ayudarnos
a salir de eso, pero es ahí el punto donde la oración se vuelve una rutina y una
esencia importante en nuestras vidas. Dios nos nutre de su sabiduría para que
podamos ir saliendo de todas esas adversidades que a diario nos entorpecen la
mente e ir escogiendo la major decision.
2. Lee el texto de Pio XI. Divini illius Magistri. N.1. 1929 y contesta a las
preguntas.
A. ¿consideras que la actividad de Jesús como maestro tiene relación con la
educación cristiana que realiza la iglesia? Explica.
R/
Indiscutiblemente si, ya que es Jesús quien por medio de sus seguidores o
maestros nos enseña y nos guía por el camino correcto y es Jesús quien
sabiamente nos llena de su Espiritu y de su sabia conciencia para ser personas
que sepan escoger el camino del bien y de la salvación.
B. El texto presentado es de 1929. ¿crees que la falta de principios que señala el
papa pio XI sigue vigente?
R/
No era falta de principios, era vision a una realidad poco aceptada, ya que aparte
de su amor por la Iglesia y por la creencia de un padre todo poderoso, también
reflejaba un amor hacía los niños motive que lo hacía digno y merecedor de todo
lo que había conseguido y de su gran valor al llamarse maestro o seguidor de
Cristo.