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Por ello no sorprende que justo cuando más fuerte

se apisonó la imagen del bruto esclavo subalterno,


se estuviera esculpiendo la estatua del preclaro
pensador libertario; así, en masculino, blanco y
europeo. Esa misma que hoy derriban, grafitean y
cancelan por todo el mundo.

En plena Ilustración se estrenó para la posteridad La Flauta El ennegrecimiento del mundo, diseñado en moldes de
Mágica, una de las óperas de mayor reconocimiento en el inferiorización en la imaginación moderna y esclavizada del
mundo, con la que Mozart llevó al escenario todo el arsenal otro, no solo provocó la invención de un sujeto subordinado,
del ennegrecimiento y la racialización puestas en un solo sufriente, miserable y vulnerable; un individuo menor y
cuerpo. Monostatos, su personaje turco, es caracterizado necesitado de tutoría permanente, sobre el que todo dominio
como un sujeto anodino, bajo, oscuro, demoníaco, ha sido ejercido a lo largo de cinco siglos de oprobio y
sospechoso, grotesco, perverso, malvado, bufón y racialización. También facilitó las condiciones de
pendenciero, que en la mayoría de puestas en escena ha sido desconfianza, evitamiento, señalamiento e incluso odio
moteado a lo blackface. Un “negro” que se canta a sí mismo alimentado entre hermanos y hermanas crecidos bajo la
como sucio y feo, recreado como un personaje que no es tutela del esclavista; siempre dispuesto a capturar la
digno de confianza, irrespetado, agredido y tan despreciable confianza y zalamería de los esclavizados más avivatos contra
que precisamente por ser incapaz de ser amado por la los oscos, cimarrones, irredentos y fugados que siempre
hermosa, casta, deseada y nívea Pamina, acaba solitario y andaban en plan desencadenado, en pos de conquistar la
castigado, sin compasión alguna. libertad negada.

El malestar que genera la pintura grotesca de este personaje Algo similar ocurre hoy en movimientos, organizaciones,
es tal que incluso se han hecho montajes que lo blanquean y procesos y plataformas en las que los llamados a la sororidad,
le ponen cabellos largos y desarreglados; lo cual no quita el la inclusión, el compañerismo, la acogida de las diferencias,
peso racista con el que el autor dibujó a su personaje y chocan con la hipocresía, el personalismo, la decidía, la
evidencia el asunto abyecto e hipócrita de lo políticamente insolidaridad y la concentración de influencia de manera
correcto: el problema no desaparece por ocultarlo, ni descarada y desproporcionada, agitando las banderas del
suavizarlo equivale a su extinción. La flauta sigue sonando. separatismo, el faccionalismo y la división con marcada
frecuencia. En contravía de la resistencia y la unidad
Si en la segunda mitad del siglo XIX, en pleno esplendor de la
emancipatoria de los diversos, el juego del todo o nada, el
lúcida y perspicaz Ilustración moderna, Montesquieu (1748)
descreimiento frente a las alternativas, el desprestigio del
Kant (1764) y Mozart (1791), pudieron componer piezas
contradictor, se imponen como estrategias inmovilizadoras
intelectuales que contienen tamaña impudicia sin recibir el
mientras los verdaderos enemigos apuntalan sus lanzas,
rechazo de su tiempo o de los amantes de tal género en la
refinan sus estrategias, reorganizan sus filas y continúan
posteridad, ha sido precisamente por el pensamiento racial
sonsacando a cuantos pueda, con lentejuelas, abalorios e
compartido que caracteriza un entorno social, económico,
insípidas dádivas que puedan asirles para que sometan a
político y filosófico en el que ser “negro” resulta inimaginable
purga a las y los propios. Monostatos, ultrajado e
como obra divina y cuyo color, de los pies a la cabeza,
imposibilitado de pulsar el melodioso sonido de la flauta
evidencia una total estupidez. Así, negro es el color de lo sin
mágica, siempre será cantado al servicio de quien lo
razón, y el ennegrecimiento es la acción racional que lo hizo
desprecia, mientras se afana por cubrirse con la desgarrada
posible. Por ello no sorprende que justo cuando más fuerte
piel de los libertarios, vencidos por las garras del dominador.
se apisonó la imagen del bruto esclavo subalterno, se __
estuviera esculpiendo la estatua del preclaro pensador Referencias: E. Kant. De lo bello y lo sublime. Ch. Montesquieau. Del espíritu de las
leyes. Emmanuel Chukwudi Eze. El color de la razón. Recomiendo ver W. Mozart. La
libertario; así, en masculino, blanco y europeo. Esa misma que
Flauta mágica, en esta versión cinematográfica
hoy derriban, grafitean y cancelan por todo el mundo. https://www.youtube.com/watch?v=XT62KLvzGZU.

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