Está en la página 1de 26
Friedrich Katz . Compilador Revuelta, rebelién y revolucién + La lucha rural en México ery _- del siglo. XVI al siglo XX Ulises Beltran, Raymond Th. J. Buve, John H. Coatsworth, Romana Falcén, John M. Hart, Evelyn Hu-DeHart, Friedrich Katz, William K. Meyers, Enrique Montalvo Ortega, Herbert “| «J. Nickél, Leticia Reina, William B. Taylor, Hans Werner j Tobler; John Tutino; Eric Van Young, Arturo Warman : Tomo 1 i 4 Patrocinado por el Joint Committee on Latin American Studies gs del American Council of Leamed Societies yel Social Science Research Council * ~-$ mers diel en ole 1668 i ‘Fin ola Seeley nd Reon Ral Social Cont x Meseo Princeton University Press, Sets h Court, Nueva York ‘Tradnccion: Paloma Vilegss «= Paseleasancaputee ISBN: 968-411-277 Biba completa ISBN 968-411-7785 Tomo 1 ‘efectos reser en eagu epaola E190, Rslciones Bra SA de CV. ‘iia 12, 5610 Méieo DE. Tanpreso heck ea Meo Print crt ode in Mexco Tomo 1 Prefacio J Intraducei6n:Las revueltas rurales en México Friedrich Katz ‘PRBCERA PARTE ‘MEXICO: [CENTRO EXCEPCIONAL DE REBELIONES RURALES? 2. Patrones de rebeliGa rural en América Latina: ‘Mézico en una perspectivg,comparativa Johar H. Coatsworth ‘SEGUNDA PARTE UPAX HISPANICA? 3. Las rebeliones rurales en el México precortesiano y colonial Friedrich Katz : 4. Cambio social agrari y rebelién cempesina en el México decimondtico: el caso de Chalco Jobn Totino a 5. Rebelién campesina en el noroeste: Los indios yaquis de |, Sonora, 1740-1976 Evelyn Hu-DeHart 6. Hacia la insurrecci6n: Origenes agrarios de la rebelién de Hidalgo en la regiéa de Guadalajara Eric Van Young ‘7. Bandolerismo ¢ insurrecci6m: Agitaci6n rural en el centro de Jalisco, 1790-1816 William B. Taylor ‘TERCERA PARTE. DE LAS REBELIONES DE INDIOS ALAS REVUELTAS CAMPESINAS 8. La guerra de los campesiaos del suroeste mexicano en los aos 1840: Conflicto en una sociedad transicional Jobn M. Hart 4 ~ CAMBIO SOCIAL AGRARIO Y REBELION Pertenecient i s > CAMPESINA EN EL MEXICO. DECIMONONICO: ban mate y otros productos aloe mereaden de a see) I epareona: de la ciudad de Mezco. Estas + EL CASO DE CHALCO: : fincas compartian la regién con aumei een Ges campesinas se disputaban los limitados ta regia. Sin embargo, estan vineuadsa pee ees Faget Se bk para la supervivencia de ambas partes: ls hacienda, Tes campesinos eventuales para plantar y cosschar John Tutino dPor qué se rebelan los campesinos mexicanos? {Por qué personas quede- dican sus vidas a cubrir las necesidades de su supervivencia eligen un mo- mento hist6rico determinado para arriesgarse a morir desafiando a quienes gobiernan? En dltima instancia, los campesinos rara vez vencen. Ni se con- Vierten en Ia élite dominante ni fuerzan a las élites existentes a gobernar en su beneficio. Sin embargo, aun sabiendo que la victoria es casi imposible, los ‘campesinos mexicanos se han alzado en rebeldia repetidamente. Y desde las décadas excepcionalmente violentas y revolucionarids de principios del siglo 30%, los investigadores han buscado explicaciones para las reeliones cai inas en México. . tee andlisis més recientes de Ja histozia agraria mexicana se han concen- trado en a época colonial. Los agraristas radicales de la época-revoluciona: ria consideraban, generalmente, que su tarea consistia en destruir el eruet legado del dominio colonial. Los investigadores modemnos han seguido efit jdea y han producido numerosos y excelentes estudios : . a i -ciedad agraria colonial.' Estos andlisis han revelado una sociedad ccloni a alae las élites espaiolas gobemaban a tos campesinos, mevicanos por & ape i i f rcién. b - a Sespaatdad et a lo largo de los siglos coloniales hubo eae ‘ 4s alld de estallidos bre- eseasa violencia campesina en el México central, més alla de estallidos Ore ves y localizados.* Se desprenden a ello ie coaclusiods pein =r, Ja Cone i i i incluso la ~ no be ite eS eel ea amas en México. La al ened mperioce por las élites es un ramp emai y Geploray ble oe ates. a mecicanai las rebelionst dad de la era colonial indica que la bisqueda de S tiva est 0 i a See aatricos de las moderaas rebeliones campesinas deberia’éoit (Reentrarse més en el siglo'x1x. Las décadas.que van de 1810 a 1930 aparecen. ‘olenck ; se i se las compara con la era colmadas de violencia campesina, especialmente si se Its COMPAT Te ay. colonial, CQué cambid durante el siglo XIX para product — vo de las tierras comunales. Esta estructura condiciones reinantes en los valles del altiplano dad de México. Ademis, Chalco suftié épo partir de los tltimos aos de la década de 1 __ centrales de México, El andlisis del cambio social agrario y la rebeldia cam.~ pesina en Chalco puede sugerir explicaciones ttiles para entender los desa. rrollos generates del altiplano central de México, Esta investigacion es posible gracias a la supervivencia y accesibilidad del archivo de Mariano Riva Palacio, Desde 1830 hasta 1870, era duedo de var > tias haciendas de Chalco. Era también la figura politica dominante en lal ~ regién. Desde esa base local, Riva Palacio ascendié hasta convertirse en go- bemador del estado de México en varias ocasiones. También destacé en la convenciéa que redact6 la constitucién liberal mexicana de 1857. Gracias a los intereses econdmicos a la vez que politicos que tenia Riva Palacio en Chalco, su archivo cubre casi todos los aspectos de la vida en esa reziba + durante las décadas mediancras del siglo XIX. Falta informacion cuantitativa sobre la poblacién y la produccién. Pero esas décadas de cartas de los admi- ‘nistradores de las fincas, aliados y enemigos politicos, solicitantes de favores "y ciudadanos descontentos constituyen un retrato excepcionalmente detalla- do de una sociedad que atravesaba dificiles tiempos de cambio. \ agraria era tipica de las central que rodean a la ciu- eas de inquictud campesiaa a 1840, como muchas otras regions o Los papeles de Riva Palacio también incluyen informes de funcionarios locales y de administradores de fincas preocupados por la rebeliéa campesi- na que estall6 en Chalco en 1848 Estos informes se complementan con ma- T-teriales, recientemente publicados, del Archivo de la Secretarfa de la Defen- “sa Nacional.* Gracias a ello, es posible analizar las relaciones entre el ymbio social agrario y la rebelién campesina de Chalco. Este andlisis debe wugerir nuevas perspectivas sobre cuestiones importantes y en general desa- ndidas de la historia agraria del siglo 1X. . "EL LEGADO COLONIAL i jolenck Elites y los camp sudad ugar en el te ial agrario durante ei siglo xix 1 nivel de violencia entre las élites y if desarrollo que tuvo lugar en el terreno social agra ee etudio de a regu de Chalo, stuada un ee oe ee Chal el centro de México no continGa 0 intensifica simplemente procescs ya a5 8 de Mézico, puede ayudar a encontrar las respues : w 94 iniciados durante el periodo colonial. La época inmediatamente posterior a la Independencia llev6 nuevas presiones a la vida rural, y suscit6 nuevas adapta clones en las estructuras agrarias heredadas de los tiempos coloniales. El conocimiento de esa éfoca ariterior no explica los problemas del siglo XIX- Pero tal conocimiento es un punto de partida esencial. La Conquista fue el punto de partida de las relaciones hispano-indias'en México. Un grupo de guerreros-empresarios espafioles ulilizaron una com- binaciéa de violencia, diplomacia, traicién y buena fortuna (buena para ellos, ya que las enfermedades del Viejo Mundo devastaron a los indios, faltos de inmunidad) para explotar las divisiones inberentes ala polftica mexicana y para establecerse como gobernantes coloniales. La Con- quista subordiné a los sefiores mexicanas y sus gobiernos al dominio de los espaiioles, No ofrecié a los espafioles oportunidades inmediatas de dominar ala masa de campesines mexicanos. Durante las primeras décadas posterio- res a la Conquista, los espaiioles gobernaron y medraron en México, princi- palmente, aprovechando en su beneficio un sistema de exaccién de tributos que heredaron de los aztecas y de otros gobernantes prehispénicos..Los ores natives continuaron recaudando tributos en especie y trabajo period. co de los campesinos dependientes, transfiriendo ahora a los conquistadores 3°} espafioles la mayor parte de lo que obtenfan. El derecho que obtenfan los OA espaiioles de recaudar esos tributos recibi6 el nombre de encomienda, nom- — bre espafiol de una duradera forma mexicana de dominio.’ ae ‘Asfpucs, elsistema de la encomienda de}6, al principio del dominio colonial, latierra yel control de lamayor parte de la producci6n exmanos de las familias. campesinas. Ponia el poder de mediar entre los campesinos y los espaiioles en. manos de los sediores mexicanos. Permitia a los espaiioles prosperar y gobernar'~# contuna minima alteracin de la estructura social existente. Pero para desdicha; de los conquistadores y sus berederos, esa estructura inicial de poder colonial xno podia sobrevivir. La Corona espafiola temia esta forma de dominio coloniat: basada en las encomiendas, porque éstas daban demasiado poder inde~ pendiente a los colonos espafioles. Con todo, no logr6 reducir el poder de los. ‘conquistadares sino hasta que Ja continua despoblacién causada por Ia viruela’ y otras enfermedades redujo drésticamente la poblacién mexicana. Las enco= "3 micndas dabaa a los espaiioles una porcién del producto y el trabajo de losis campesinos, vinculando la riqueza espafola directamente a la poblacién me=,3) ON xicana. A mediados del siglo XVI, esta poblacién se habia reducido a la mita €.-7 los colonos espaficles se quejaban de Ja declinacién econ6mica. Las enfer: medades que devastaron la sociedad indigena crearon una crisis econéunica para los conguistadores espatioles. = El debilitamiento de la Alite colonial dio a los representantes de la Corona. Ja oportunidad de establecer el poder estatal. A partir de la década de 1550; 23 los administradores erpezaron a regular los tributos de las encomiendas y. ®) hci, de los.campesin i forzaron structura te spesinas a parcelas contiguas, las autoridades cole, ei : ne abandono de grandes extensiones. Estas pudieron ser ‘torudaryor absace leros;.comerciantes-y funcionatios (0 sus ‘comu campesinas.se inicié-erla a ta principios del siglo xvi’ én de Jas tierras ast desocupadas a-los espafoles se aceler6 on le desea al lero paraconcentrar en pueblos com a los sepsis de pro: encomend parientes). La concentracién de fas comuni - década de 1550 y continue hasta princnio at gy continué hasta aproximadamente 1630. TUE Tos campesinos mesicanes mediante el ‘cro més o menos en esa época, los campe: co y otras zonas simplemente 5 ¢. Ast pues, hacia mediados del siglo xvtt, el Estado, sn de las concentracioucs de campesinos y de oe ipesinos y de sus das posefan conservaban parcelas generalmente-sufi Stereducida poblaci6n. Pero el Estado 20 hal damental entre las fincas y las comunida de mano de obra eventual. Ante este p ‘Yariaciones regionales y locales, el sus relaciones Taborales. Pero el Estado. couserv6.un. pap Eleiado Como mediadgr ara Ongar el-mediador a través.de swsupernis ‘aba creado una estruture socal raral ew quelasbneus pis gran parte de la tierra, mientras que las comunidadesscampe- ficientes-para:la subsistencia: de bia logrado. controlar la-relacién ides. campesinasr el abastecimien- roblema que presentaba: complejas tedo retrocedi6, y permitié que-las ha iendas y las comunidades campesinas nogoclaran a hiv te a # _— ‘elminar los servici ibdicos. Si E servicios laborales peri¢dicos. Simulténeamente, trabajaron:con c ipactos a los campesinos supervivi que vivian muy dispersos enel campo. El objetivo declarndodeeea vcubiendon ispersas. t : i iplano central que a principios ' del sgl XVI albergaban numerusas fincas. dedicadas a iueras Yendiendo im ¥ ofrs productos a la ciudad de México que tonfan constantes difcul-i frecclades en reclutar alos campesinos locales supecvivientes Pata que tealicaa ( sel abajo. Antes de 1630, el Fstado-intento exigir y repute a trabejocveanc sistema: lamado.tepartimies= sinos-de, los: pueblos de:Chal- eis © negarom a proporcionar os. trabajadores fundamental, ya que sus tribunales arbitraban ef las disputas entre las élites ._terratenientes y los campesinos. =. o VS Los dirigentes de las.comunidades campesinas, notables locales que ha- * biam heredado su estatus de las tradiciones-prehispSnicas, sobievivieron co- ~ mo mediadorés esenciales entre. sus comunidades, Jas haciendas y. cl Estad colonial, A falta de una burocracia capaz de implementar la concentraci6a Ge las comunidades campesinas, el Estado ‘habia actuado a través de‘los A\nctables sobrevivientes. So les permitié.a éstos ofganizar la concentracion ¥ se les dieron amplios derechos sobre.tiesras.y privilegios. politicos’ exclusives en las nuevas repitblicas de indios. La propiedad campesina fue: depositada’ en esas comunidades restructuradas, aunque las familias campesinas.cultiv ran parcelas individuales que transmitian-por herencia. Los notables. locales conservaron asf, bajo el dominio espafol,el poder dentro de las comunida. des campesinas. ce Utilizaron ese poder para ocupar el papel fundamental de tratantes de mano de obra, que controlaban la oferta-de-trabajadores campesinos para / Jas fincas cercanas. Los hacendados sélo podian plantar, cultivar y-cosechar con trabajadores obtenidos 4 tiavés dé: los-notables de-1as -comunidades, campesinas. Esta mediaciém consolidé atin més el poder local de los f bles. ¥ también reforz6 a la comunidad comio institucién fundamental de-la~ ‘vida campesina, Las fincas comerciales y las cominidades campésinas- guieron conviviendo entremezcladas a todo lo largo y ancho.del, México. tral, tal vez disputandose Jas tierras locales, pero. inextricablemente unidas por relaciones laborales esenciales para ambas partes y mediadas por los: notables iocales. 5 Esta estructura rural en que Jas haciendas sancionadas por el Estadi coatroladas por las élites espafiolas compartfan el campo:con las com des campesinas, a su versancionadas pot ¢f Estado y encabezadas por nét bles locales, result6 suficientemente adaptable para'sobrevivit a Ja triphi _.t.cién de la poblacién campesina durante el timo siglo de dominia-colonialt S8La estructura agraria colonial se habia consolidado durante una época: 2 baja poblacién, favoreciendo los intereses de los campesinos. Pero cor empezé a crecer el némero de éstos, a partir'de 1650,,las comunidadts:p0: dian obtener muy pocas tierras nuevas. Los campesinos inevitablemento‘etit pezaron a sufrir de escasez de tierra-en relacién con.el crecimiento demi grafico, Las Herras comunales resultaban cada vez. més insuficientes proporcionar sustento a los campesinos, Entre tanto las.haciendas cercati podian cultivar las tierras excedentes para producir més alimentos.’ campesinos sin tierra apenas tenfan més opcién que Ja de trabajar més; €h las fineas, para producir esos alimentos excedentes y luego utilizar su salari para comprarlos, 5 x Dentro de esa estructura.rural, el crecimiento de;la poblaci6n camp 98 val coriiercializacién Ue Ia vida campesin campesinos podfan seguir residiendo notables tradicionales, a, sin cainbiod:socialex abruptos, Gracias a que.amortigué -de esta manera el eambio, -crecientes, revel6.una notabls éstabilidad, ‘campesinos que trabajaran s6lo eventu: tiesras. ominidad debian sstencr a su tacres de tahoe ee ni fu bajo, si ni acienda, durante el resto del afio- Cuando, a pot dh sideracio- 7085, estallaban-disputas periédi icindas y_ comiiinicy Flos notables locales rpidaments cad a a ps em fe sbisajecEl frecuente, recurso de log notables a = 2ave cousideraban a los tribunales colonialed como. ef i los interesesdesiguales de las hacendas'y sus conunididen Desde 1a Conquista, los funcionarios coloniales:habtan: temido et poder independiente. de las, élites coloniales. Y un-medio:eficaz. para limitar: poder consistia en proteger el de las comunidades: campesinas dotadas-de eras Pues servian de contrapeso. Los tribunales coloniales generalmente fendian el-derecho de las comunidades campesinas, por,lé: menos,» culti- oa) i €8 sus:comuidades, sometidos:a dos ‘mercado Ios pars cnioms dependin cada vex més dela econbmia en. jue s da. : ‘ i evivi hasta el siglo xIx. A pesar de las desgusldades obvacy evidenciada por.Ja.es- ‘cudtan a los tribunalés.coloniales enbuscay cy Estado, sspatick-sugiere gy, { a var parcelas de subsistencia y a una minima autonom{a local. La estructura agraria resultante incorporaba a las haciendas y las comunidades quey simul- timeamente, se-cnfrentaban y complemeniaban, y el, Estado mediador man- tenia cl equilibrio, Ni las élites terratenientes, ni los notables.de:las communi dades ni Jos funcionarios del Estado teafan ganas de romnper:ese equilibrio. hhasta el final de la época colonial =.“ 4 5 . El punto de vista de la mayorfa.campesina es menos evident : que rara vez intentaron la rebelién abierta. UIndicaba tsto una.minima satis; faccién con Ja situacién colonial?“tSé habfan resignado simplemente ‘los campesinos a la-imposibilidad de una situaci6n mejor?-éO: se-indignaban. con frecuencia, pero estaban convencidos de que-la protesta yy:especiaimen- \o te, la rebelién s6lo podia. conducir a la represién y a: condiciones de. vida tin poorest La escasex de estudios sobre la estructoré interna de las: comur nidades campesinas mexicanas impide cualquier respuesta fundamentada, y sigue siendo el hueco principal en nuestro conocimiento“de'la historia social agraria de México. Una conclusién parece razonable: la estructura agraria colonial obviamente favorecia a las élites espafolas frente a-los-campesinos. mexicans, Pero esa misma estructura y ese.Estado se preocupaban.también & claramente. por la supervivencia misima de las comunidades-campesina’: Oe ay tadas de-tierras. El Estado colonial mediador subsanaba. los, conflictos entre, lites y campesinos, mantenicndo el poder de-las.élites. para luccar-y-la cap: wadceidad de los campesinos para subsistir. El éxito del Estado ‘se revela,-tal vez. das durante més de des siglos. El tltimo medio siglo de dor Ja poblaci6n, la comercializacién y 1a dependencia de los campesinos:tes#= 7 toma i incluso-allf dondesestalli ‘és frecuentes en el altiplano central. Pero incluso-allf dondesestall violencia, la mediacién de los tribunales prevaleci6.en Gitima-instanciaoLa WA estructura de explotaci6n simbi : porber a p caén de conflictos, evitendo que se desarrollara ninguna. impugnacion pecto del trabajo en les haciendas, y las tensiones se acrecentaron. Tanto los’ de la estructura agraria colonial.” Incluso cuando:el paidte: Miguel Hidalanrji73 miles de rebeldes entraron en el altiplano central, en 1810, pidiendo inde pendencia y reformas sociales, la estructura se mantuvo, La thayoriacdeto§ campesinos se quedacon en sus casas, mientras-los.notables, publicabaminc ; a : ; " an munidades af régimea colonial." Las disputas en tramite eatre hacie: Comunidades permanecieron en log tribunales,Fodavia en 1810, 1a rebelis violenta tenfa escaso atractivo para las comunidades campesinas del altipls no central de México. 5 re 100 Jtos-ante los tribunales como los levantamientos locales’se-bicieron.calfas3) ca result6 capaz de absorber Ia prolifera’ = tas en la prensa de la ciudad de México proclamandorla lealtad de sus'co- £5 aA colonial ex el México ceatral se hen Pendentig en 1821. Quien fixalm ‘Sitos en la lucha -contra émico te atractivo lites mexicanas- sul ieredinblemente contador, fem i Gis mesa, tado colonial era fusdamentil.en ia estructura 3 2 t a cial. col goals ein ergs Sn al as acién stado colonial mn i a oe cope dees ao Ro condujo a la creaciéa de. un Es, efectos similares. Desde la perspectiva i dracon, y les. inte sentar los intereses de la élite que mediar entre tenateieten samecee Hes campesinas, Log conflictos politicos y-las. guetras de. las. décadas osteriores 4 Ja Independencia constitulan principalmente disputas. sobse les élites controlarfan el nuevo Estado. Un Estado auevo, débil, disputa. do y concebido por las élites como un representante de sf mismas;-no-podia ‘asumir el poder mediador del Estado colonial ae +. Entre tanto, las élites mexicanas sufefan una. crisis: mds grave.. Durante los. siglos coloniales, aceptado la.mediaciég del Estado en ius sampesinas ¢a parte porque el funcionemiento de las Gineas era eat ‘eatable. Después de la Independencia, las ganancias se volvcros ae a bancarrotas y subastas cada vez mis. frecuentes. ‘Al mismo. ‘Hempo-que-el Estado no lograba mediar eficazmente; las élites,terratenieates, mexicanas atravesaban dificultades econdmicas.que las ilevaban a buscar nuevas formas = luce. A Patt dela derada de 1820, las, lites, mexicanas. trataron. de 3 clones sociales y econémicas agrarias, no porque inti -fuertes, sino por debilidad.” , - 7 mene ” ere Para entender el origen de tales agcones —tan visibles en las.tensiones gque sultié Chalco después de la Independencia— resultard reveladora uca pI evisién. de la economia de fa élite antes y despuésde:Ja lnde- idencia. Desde fines del siglo xv1 hasta el XVII, las élites mexicanas se eficiaron de una continua mezcla de actividades agricolas-y gomerciaies. Cocoa ELI CUES indiprrdciuior - Agno — Coneruo . econémica, cada vez las dltesteratenientes,habian relaciones. con. las conmunidgdes 301 5, sino : ade ficial del ejrcito conocide por see eae ne Astin de Tturbide, on Sd & Co oe “La riqueza acumulada en el comercio y Ja minerfa solfa inverfirse en‘fincas agricolas. El comercio y la mineria.eran ms lucrativas, pero también nota- blemente:riesgosos. Los cofnerciantes }'mineros'dé éxito; conscientes ‘de. fos "eagos buscaban fn agclastomerciles par preseras se GUE Y as{ proteger‘la posicicn de su familia dentro-de ta élite volonial,.La-adminis- fa de bot s 5 _ ‘tadon de las-Laciencas no ereaba ¥ probableniente no podlia-erear rqueza SP ec eebas de, vapor ¥-ct- capital necesatio pata tracrlaa ‘para las élites‘coloniales. En cambio, las haciendas eran inversiones que fe- zbian por objeto“obtener unos beneficios modestos y' constantes, para sost ner‘a una familia de la élite. “*: Fe ee anal me Esa constante inversién de’ capital ex! el sector agricola : “nde fue crucial para el buen foncionamiento de ls fincas, Las haciendas niekica~ 1) nas generaimente no obtenfan beneficios ‘abasteciendo- regularmente' Tos, >> mercados urbanos, sino almacenando las‘cosechas de'Jas--afios buenos hasta (que las heladas 0 sequ{as periddicas creabatt escaséz'y hacian-subir-los pre- cigs. Entonces’se obtenfan amplios beneficios si el duefio de la finca tenfa. capital suficiente para mantener’ él funcionamiénto de Ia. hacienda. mientras, « esperaba’el aumeiito de los precios. Los hacendadds cdloniales que'tuvieron. “ahi Gxito lucraron porque financiaban sus operaciones cOnreupital faimilian V2: mantuvicros el capital familiar mediante generaciones de matrimonios con. ()_Uasherederas de a siqueza comercial La contin fusion colonial del eapital coimercial:y terratenieate-daba seguridad, y por taito’éstatus‘dentro- de la lite a los especuladores de nueva tiqueza)"j“ptoporcionabaelccapital permitfa a las familias terratenientes'establecidas mantener en opericiém Giendas lucrativas. ee ees Este proceso social de’ reforzamiento de la élite se quebré durante las: luchas de Independenaa, Los comerciantes mas déstécados y exitosos: ‘faaler-de Ta Colonia eran inmigrantes espafoles. Ante las jnsureccio proclamadas contra Espafia y los espafioles natives; muchos’-comerciantes. dejaron México y se Ukvaron consigo su capital, Poeos espamoles vient = México a partir-de 1810 com inferici6n de eariquecerse ‘en.el: comercio:" E45 fuente-tradicional-de capital para la élite se-redujo asf, drésticamentey ¢6nla: Independencia mexicana. Pero los disturbios de Ja’ Independénicia-abmmehita roa simultdricamente la nccesidad de capital de las élite terratenicsites? Las guerras de Independentia dafaron'gravemente e] comercio' I nerfa durante una década, La prodiiéti6a de plata, qué Habiatencabezado: floreciente economia mexicana duraiite tt final dé} siglo-xvun précticariente: se bundi6. Y muchas fincas suftieron la rapifia dé’ la guerra civil; ‘niiestr otras se deterioraban como resultado del desorden en la producci6x: ye comercio."A partir-de 1821, los hacendados necesitaron.-més capital de Estado, pero escasas riquezas. Tales recienvens ilza , c . Tales recienvenidos intent: liza fincas para srear riqueza, més que para sostener ls tines mos to contradecia el papel. econémtica, ya establecida deinen - Gendas ¢ incrementaba la demanda de capital entre la élitesertate > da élite, reforzados por las ivi racion ila 6 Por las guerras civil i i ‘dgjaron a’ las familias. de élite calkenides ws gave declc ccondaice j= durante las primeras décadas de la nuevavida dela nada reconstnuir la economfa de ias haciendas“comerciales. Per el capi cada yez més escaso. aati ise Eas comerclaites ini i campesinas: locales: para,obtenen a que vinierom a: México. después de-la-Independett os, Las lites. mexicduan intent DUEKOS. sae as. intentaronconsi 103. truir un Estado nacional que sirviera directamente a sus intereses. Pero"tu ‘vieron un éxito muy limitado, en gran parte debido a:la-debilidad.de.la eco: nomia comercial y la consecuente,Yeduecion de la recaudaci6n:fiscal."Y.a pesar de su debilidad financiera o tal vez debido.a ella; las Blites terratenlet: tes también empezaron, después.de-la Independencia, a desafiar a:las comus snidades campesinas para procuraisé tierfas, agua y.tiabajadores:més-trata— bles. De nuevo su éxito fue minimo. ¥ .de. nuevo. fracasaron;em;buena medida, debido a sus propios problemas financieros. Pero.coa_ambos:inte tos — controlar el Estado nacional-y atacar a las comunidades campesinas =, las lites terratenientes acrecentaron, las tensiones existentes en lar sociedad ==} mexicana y Jlevaron al pafs por el.camino de una violencia creciente. see 2 ©, Porque. no trabajaban si Fe eh ag enc . Su, haciends padecta.eecasee vig ee = = pad catopesinos disponibles wabuaten en ones Si ae gan eee Te mana je Zettas6 en esa misma hacienda debido.a la persistente maces La Independencia también produjo cambios en la estricture de las-comuni dades campesinas, tercer protagonista de la estructura.de poder agratio'de Ja Colonia, Desafortunadamente, se ha estudiado poco la-organizaciOminter- na de las comunidedes campesinas en los aiios anteriores o inmediatament posteriores a Ja Independencia, Sabemos que después de'la Independeaci las distinciones legales basads.en-categor‘as.taciales.y.¢tnicas fueron abi das. Las reptiblicas de indios y los notables locales qué las gobernaban pet dieron pues sus privilegios legales exclusivos. También sabemos.que.cl.< da de México, inchuido- Chalco y otras regiones del aliplana central, daban la categoria de municipios a.laspoblaciones de. znés de cuatro-mil-ssif babitantes. Muchas comunidades campesinas. perdicron asfl derétho aie: ner ayantamientos locales independientes y empezarou.a depender do. poblaciones cercanas mas grandes.” Desconocemos qué efectos tuvierdn estos cambios legales. éProcediads: ‘como siempre los notables locales, igncrando los cambios legislados pot-yessa gimenes débiles.c inestables? 4© tal vez.el fin.del estatus.privilegiado:dé1é mi notables abrié las comunidades a una competencia:més.politica, conduciéai 4 resiones sobre los eecursos de las commesidacea’ (rons ea educa én que : des, ¥. disminuirfa porta ene rai apa se eine retpaeesd® le Independencia, las enfermedades continuaron ticaando £ae nuevo en 1850, ay mesicana, I e6lera leg6 a, Calescen 1833 y For de ls Asuncion eh, Pobasin campesina. En 1850; eP adm Exrla comunidad veéinade Zulazenia trabajadores, ‘cineventa-cayetom enfer- n:. Hay xegistro ‘dosrlectos similares.en Chalco y de otros. lugares deb Altiplano, 1 podfan:reclutar sufi- con certeza es que las comunidades. campesinas no se vierom decisivamer debilitadas como. consecuencia inmediata de la Independencia. Hasta la, cada de 1860, las de Chaleo y de otros‘Ingares-demostraron.tepetid: su eapacidad para actuar, dirigidas por sus Iideres locales, a finde imp las acciones de las dites.terratentientes y los, funcionarios del Estado, Parecen que las comunidades campesinas sobrevivieron a las difidultddes "de Ia-Thde eae pendencia mejor que las élites terratenientes y que el Estado, 2 Ses Con el Estado dividido-y debilitado y los terratenientes acosados ia ificultades financieras, mientras las comunidades campesinas se mantenla= relativamente fuertes, el conflicto eripez6 @ desarsollarse. Despuésyde. lal dependencia, los hicendados de Chalco consideraban que‘los campesi Iocales. obstacalizaban perversainente le rentabilidad.de las, haciendase ome transigencia de los carapesines locales. No eran suficientemente diligentes, déclles.y barates, Los:campesinos de Chalco tio eran la'tausa de los probles max econémicos de los baceadados, pero yracias”a'que'conservaron mq sélida organizaciéa communal, mientras las-élites se debiliteban’ financieras ‘mente, los campesinos constituian wna esping-slavada ence! costado:de- log.” terratenientes. Y como las élites no podfan resolver'los problemas que ¢ saban sus dificultades, se volvian-contra los campesinos. . Conjunto, estos experimentos com la selecciéa de semillas, los fertilizantes.y fl uso de nuevos implementos revelaba la voluntad de innovar de las élites de Chalco, en vista de la crisis econémieas - n..0 fisnee weal ‘Ademés, desde finales de la década de, 1840, por lo menos seis hitiendas dde Chaleo empezaron.a dedicarse a la produccion de leche. Compraron.re- batios de vacas-y sembraron pastos de alfalfa, que a susvez. requerian tiegoY bono intensive.” El atractivo de la-produccisarde-leche residfacen ic. ser: ‘via para superar répidamente la escasez de capital. disponible. ‘La leche 3 ‘yendfa diariamente y, por tanto, generaba.ingresos regulates. que.podian re+ ducir la necesidad.de.créditos escasos.y caros.*= a. ‘Las ganancias esperadas no siempre sehacfan realidad, Para 1857:tantas hhaciendas de Chalca estaban.produciendo leche que: hablan. saturado: ¢| mercado, Gran parte de la produccién local de. leche no se:podia vender-: {. Tal vez atin més preocupante para los innovadores era, el-becho de-que.la produccién de leche aumentaba su necesidad de mano de.cbra. La plantar Eon y el abono de grandes pastizales de alfalfa aumientaban-el-nimero: de trabajadores necesarios en-un momento.en que, seguia sienda dificil reclutar campesinos en Chalco.”* . fF Cee ees “Nas innovaciOnts en ix agricaltura de lashaciendas de Chaleo tuviegon ua " gesultado adicional: los hacendades emprendieron actiones pare acrecentar A control sobre el abastecimiento de guards la region: Cusndo la hacienda © Ge ia Asuacién-empext a producir leché.en 1849, también construy6: tna nueva presa y diques de siego. Bala hacienda de Buenavista se realizaron ‘LA OFENSIVA DE LAS HACIENDAS, 1849-1856 += = = La derrota de México en la guerra contra Estados Unidos forz6 a las élites mexicanas a encarar la debilidad de sw economia y la cuasl impotencia desi. Estado nacional. Después del desastre bélico, quienes pretendian gobern ‘México escribieron numerosos tratados-buscando las causas-de Ja.debilidac nacional.” Los dates-relativos a Chaleo revelan que durante ¢se mismo: pe Hiodo de 1849 a 1856 Jas élites intentaron realizar importantes innovacion en la agricultura de-las baciendas. Asf experimentaron con micvos-productcs: nuevas téenicas.de produccién, tratando de-beriefitiarse de:Jos tiempos crisis. : He : = Los experimentos se-redlizaban sobre dos frentes, Uno buscabar medias mis baratos de producir el: maiz, el trigo y otros ciltives'tradicionalesiés; Chaloo: El otro intentaba. producir leche con pastos devafalfa de aueva: ict: gaci6n: Ambas estrategias buscaban mejorar los rendimientos y generar AUe% vos ingtesos. Ambas condujeron a'un empeoramiento de-los contlictos:ec ‘obras semejantes.” En Ia hacienda llamada, Zoquiapén; la‘introduccion, de las comunidades campesinas de Chaleo. * fas vacas hizo-necesaria la construcciém de un. muevs y:complicado sistema La experimentacion con variedades de semillas:pocas veocs habia tentid®s= 47 do riego, Un ingenicro eavanjero ‘amado mister Alan dises6'y dinigié Ja a los agrénomos de las haciendas coloniales. Cady afio:sembrab: construccioa de tna serie de cisternas dc. captacion en los.terros'que domir Ens ie cosecha anterior. Pero, desde:fines ‘dp la-década.det} naban Ja hacienda, junto, con canales. para llevar [as agus ‘eaptadas:a-fos 11840, las baciendas de Chalco empezaron-a intentar-senibrar trigo; malt] ‘campos dela hacienda.” - ae wet Et bie 6 verduras con semillas o plantones trafdos de otras regiones queproductas ‘Las haciendas, de la Astincién y Gonzélez.inclso. experimentaron:¢on.Ja altos rendimicntos.”: La fertilizacién com abono tampoca | tUVO- “mportanclgy; perforaciénde pozos aftesianos.' tro extranjezo llamado Bener fuecontratado pargla agricultura'de las haciendas durante los. ‘afios:coloniales.Un-visitant _ Para buscar aguas subterrducas. Pero no conocia la disteibucién local det agua Eiglés informabe, poco después de-la Independencis, quo los-agronom: Y Riva Palacio y otros hacendados, de-Chalco:ignoraban el alta costo 3s sas ‘ericanos parectan, curiosamenté indiferentes al. abono. ‘Sin émbargo: Jnnovaciones técnicas. El resultado fue un prolongado, toccontractual principios de la década de 1850, el abono:se convitiG-enaind:obsesion tet Gaito solamente parcial en la’btsqueda de:nuevos.caudales de-agna Si: Paice wnistadores de las haciendas'de Chaleo.-Acrecentaron:los.rebafeyaiarf” . Debido asus iontianos ;problemas: nancievbsva pari. de: laInde- te ovejas para obtener mis esircol y experimentaron diversas mezcls pendent, a fines de lx década de 1840 los terrateniates de Chalcocenpe- astrojo de met para acrecentar el volumen de fertilzantes.-Simulténeai; 25.» Teron a BOR Tt Tnscer inaovaciones para obtener mayotcs-rendimiss oe jneate, las baciendas de Chalco empezaron a experimentar com nuevos: Pero esas innovaciones aumentaron su necesidad de mano, de obrs Coe plementos. Se hicieron frecuentes los arados impottados que’ rembviamli/ 2)“ que recrudecieron uno de sus problemas. ¥ la may demanda de:agua ins- Eosra mésyprofinda 9. alginas-haciendas invitieron en inevas'aveatudias para sepaiar el grano-de la pajat(rreductr lesmano-de obra. Ap proyectos de-constraceién que"susitaron mucvs conlictos:con as <= ‘munidades campesinas. 7 va NE 106 1 cvitar menoscabar el! control de la comunidad: sobre los recursos. FSS comunidades, a su vez, reaccionaban con deniandas judiciales y com una Zostruceién fisiea que en ocasiones conduja a confrontaciones violentas. En Chalco, la decision de los terratenientes de iniciar una nueva ofensiva contra Jos recersos de las comunidades, en un momento de dificltades economicas A fines de 1869, la comunidad contrat i Mésio llamado Las Mena Agus peat lasepecoammeesi Jes El abogado visit Acusutla-a-prnipiog de octubre: Seatramente para = Froteersepoficament de as. consecuenens. que-poda ace pede, {E-= presenlar a ona comunidad campesina de Chalo, Avslasseort ote eS Adeate debilidad del Estado, provocé confictos-cada,yez-mayoresixi.. == visita a Riva Palacio, Si i 5 ¥ eeaisado Riva Palacig construyé la nueva presa para mejorar] rego déJ8 sig, Se cre 0s dies cha soba. sn deeb “Asanitn’en 1389, Herras campesinas de las jrisdiccons tanto de, haleo ‘Aguilar se hortorizaba de la reespcin que le habiah hecho-cosch ony aarncde Temamatia resultaron jnundadas, Los campesinos amienszaron pi: doade fue salodado con misica'y acters Ba ca eeeto es Al puebL ERmtmseate con deer la presa yn funcionaro local eseribié-a Riva Ral autodenigracin que €l schacaba. theta afne sa oo ee tnd Ev tussiendo que negoctara, porque era imposible controlar a los-campesic fer eae que fl achacaba-a a larg aflenda dos acetate ‘come “bestias‘te-carga”, rotlema eat ene ‘eliminacibn de Ia a los: indios.’ Aguil it as tees ls seres humans ins es no, compat ls eaadee ies =f Th poe tno. plan dices pees epatoles, que les anand eye ie, comats ¥en os cenes pra el redtaiat dela oe campesinos de Acuautla les habria:gustado:tabe z BRS i (utamiento militar les habrfa parecido més molesto. Micon segunéed Pd he Flan soreido ante sa presuncién de que.ta defeeate recepesa que fe eS sotederen revelaba sctodenigracica, ‘Cuando: el.abogade: fracas4. calle: seb ‘cay = de nanan de Acuautla demostrron que, tenfan:abundantes ‘hos. Cuando el proyecto quedé terminado, se hizo.evidente que las aguas. ast retenidas serfan muy dtiles. para regar las tierras.de los’ campesinos de Cui Eingo. La hacieada reclamé esas tiertes y los campesinos se amotinaron: Riva Palacio intent6 aplacar ese descontento wtilizando sv influencia politics’ "25: para persuadir a la poblacién de Temamatla de que proporcionara tlerras & {os campesinos que él habia despast(do, Persistié un-descontento.suficiente. ‘como para que ln grupo de-campesinos, construyera un. dique impravisado que bloqueé el rfo.mas arriba del nuevo sistema. de riego"dk ‘Riva-Ralac Zor su parte, los fencionarios locales'se mostraban reacios.a xjerutar.la or den jadielal que dictaba Ja destrucci6y del dique de, los, campesinos, porgué temian un estallido de-violencia. De nuevo, los detalles de la'resoliaci6n final fe desconocen, pero tn junio de 1860 Ja hacienda de'la Asunci6m, yrcestaba Gultvando los ekmpos de riego de CH cd confor ‘ Otras disputas similares estallaron en otros lugares af S mA principios A = a las haces que buseaban mis agva para regar més tesras obstacuizaban qucte faces GF 1850 l.tribunal fall em favor dea hacienda tL acceso de los campesinos a ese escaso y esencal recurso. El caltive dios pastos itigados de alfalfa en Tomacoco, hacia-mediades de. la décadads: 7 4850, lev6 a la hacienda a usurper aguas. de tiego que antes compartfa! com Aguilar pensaba. que la solucion al So arnado con Gneuenta rifles enviados por el Ministerio de Defensa, 7.8 | Sonvocé una nueva “junta de propietarios” para reunir fondos para'un cuér: po de policia més numeroso.” Entre tanto, se creé una reserva de policté jctos crecieron. Al no haber mediac y los campesinos, los con- cién que la tSpresién-ariaada-de iador, los gobernantes no vefan: mis sue > saul de poder vleate determina spedinos El mess. sa-larc ms ls rlasonessocia- Giouties fmancieras que atravesaba-esta titima mantuvieron a las nuevas. fuerzas policiacas por debajo de su plena fuerza. ‘Mas tarde, en diciemibre=7y} see Poa ota rennin de propietaios se intgpt Teunr fondos para con ‘Sruir una fuerza policiaca completa en Chalco." - F "Br junio de 1855, tues disturbs locales Uevaron al subprefecko 3 teatar una vez més fortalecer el cuerpo de policia. ‘Bi consideraba que- patrulla moatada serta més efectiva, pero Sus fondos ao bastaban para mé fener usa fuerza de ese tipo, De manera qe recarit dg mio 2s hao Ba tener una 78 endoles,que- conribuyeren con caballos 0 con el dines con derechos de ci del gobie para comprasis. Les agaie ia propuesta, pero muchos alegaron escasee dei Propiedad conjuntos, Par om ammpievon con-rus cxotas. A principios de 1856, la patcullé jmontada estaba s6lo parcialmente dotada de recursos y hombres, y elsif) ‘de las famosas reformas liberal ‘4 ‘prefecto amenazaba con multar a los que 20 contribuyeran. jieueebst Miguel Lerdo de ‘Fejada. Las dis ~formalada por sl ministre: de Hacicads, Dasde finales de la década de 1840, el estado de México peept®. ce fGf = tation dela ley, as coma As sions olan sieongiapon tudes de los hacendados para policia oral para proteget Jas haciendas de'geb et centrado en suaplicacién.a las ropiedades ee -de los estudiosos, se: han Ibe ataques de campesinos. Sin embargo, debido a as perssesee> Se caer Pusan als propidades de aes SG ameners cana des econémicas de los hacendados, escaseaba ¢l dinero ‘necesario pata: l&ioposicion de los liberales a la-riqueza aoe uftado-involimtario.de tener esos cuerpos {dvidualsmo econ6mico, Peto un examen cu a Teeside st ree ak asta amual de 4 800 pesos necesar _ efetsaniento iberal.y de los conlctos sociales desig go desarrelo del aoe La ironia es clara, Las élites.ce:Chalco, n.un Estado al 22 diaque ala propiedad comunal eraintenciona yclaram: fo ik tad e fon una policia rural eficaz, para protegerlos contre campesinos cada‘ ‘los terratenientes mexicanos de la resistencia camy ente destinado aliberat Suds dispuestos a impugnar su adquisicion de tierras 7 ‘ La ieclogia dal Ibeomo moseane procelia ps a aan aectabiidad de las haciendas, ex parte creados y perpetiade Pe la-encabezada por hombres como Pedro Rodriguez de ‘Campomane ‘espafio- oposicién de los campesinos, impedian la creacion de una policta eficazs Melchor de_Jovellanos; que propoafan-la abolicin « npOMANES 3 Gas: problema hacfa imposible su. propia soluciom zivsaria de las comanidades campesinas, La-constituci6n liberak capaola de = Apenas cabe duida de que la destrucc tiwie ‘Gdmpesinas era un objetivo principal de eat ere omnis 14 - 1812 dictaba la division de las tlerras comunales. Ei asunto se debati6 en las convenciones constituyentes de la nueva nacién mexicana y de varios ‘estados ‘en la década de 1820. 5¥. aunque las primeras constituciones nacionales evi- taron atacar la propicdad comunal, esa precauci6n reflejaba més el temor a los disturbios sociales que los intereses liberales.” ‘Sin embargo, a fines de la década de, 1820, doce éstados mexicanos:he bfan aprobado leyes que ponfan fin a la propiedad agraria de las comunida. des, incluidos los estados del altiplano central de México, Puebla y Michoa cén.™ Sin embargo, gobiernos estatales nuevos, débiles y ‘politicamente ~3,/ divididos n0 podfan implementar tan radicales cambios en la propiedad campesina de la tierra. A fines de la década de 1840, cuando aumentarou las protestas de los campesinos y, durante un tierapo, parecieron amenazar el dominio de la élite, numerosos estados legislaron de nuevo la abolicién dé Ja Ley del 25 de Junio timo, it fas beeen timo, y de quitar por la fuerza les bacicadas’” A principios de eeplembre, el aduaciein eee de la Asuncién escribi losiguiente a Riva Palacios no Bacon Anoche que estuve en Temantla me dij 0 cosa = ae aij == —Saulente: que. D, Erancsco-de Sales exalgunns sos fests Bios esta Feeuedos ex sus casas yno:bay nadie que puede sonres Greg Pepys me 5 eats de Chale, Zl, Cootiln Son regorio, 2 sotteyes pocseemcmonems sobre las de razén de les pusblos yas hacengaas ot © 82 desarrollo de Jas protestas campesinas y la aprobacion de leyes contra l propiedad agraria de las comunidades subyace en la intencién de esa legisé laciéa.” Pero, de nuevo, a fines de la década de 1840 el poder estatalver: insuficiente pata poner en préctica cambios tat radicales. Sin una-burocra cia eficaz y-con fuerzas policiacas minimas, los funcionarios del Estado’ tenfan més opcién que pedir a los dirigentes comunitarios que les informa’) ‘rani cudles eram'sus tierras para poder dividirlas. Los dirigentes locales poi} 21 dian simplemente negarse:a colaborar, con lo que la Iegislaci6n inejecutable solamente declaré la oposici6n liberal contra los derechos de propiedadd las comunidades campesinas.* Otra legislacion similar, también incumplic#; que propuso el titimo régimen conservador de Santa Anna sugiere avg: 2 Protests campernas en “ tele te haba consenso ene opoicén als propiedad comonteri 25S auc a, ce Wola sca legaron a cunilse e'Gilen' Seco La Ley Lerdo del 25 de junio era por tanto la culminaci6n, & ic ren que la amenaza . nivePnacional de tendencias que se habian desarrollado desde hacia micis.:tsp s;= °?™Pesinos. Aun cuando unas pocas propiedades que se habia alquilad tiempo en la vida politica de México. La ley de lo liberals decretaba gli lo todas las “propiedades rurales y urbanas” que estaviesen en manos de ¢0/ poraciones civiles y eclesiésticas se “adjudicaban en propiedad a sus-arréx_ he sip 8 Gatarios", La ley daba a los arrendatarios u otros ocupantes tres meses. patipihs y50 sus Parcelas en reclamar las-propiedades. A partir de eso plazo, estarfan a disposicién -seannctr la piblic. El gobierno recbirfa el 5 por cento como impuesto sobre ehticig) gs Moses Chale cara ez se transacci6n.” A partir de Ja proclamacién de la ley, numerosas decisiGntl: eit OP estado de México durante los dltimos seis meses.de 1856. judiciales dejaron bien claro que los liberales tenfan toda Ta inteiic Resicioa campesina y las amenazas de-violencia no'se Jimilaban a ‘acabar con Ja: propiedad comunal de las tierras campesinas.” =.“ Por su parte, los campesinos percibieron répidamente esa intenciéa." ES Chalco, el descontento inspiré la formacién de una organizaci6a secreta’ patie ra iniciar las protestas. El 19 de agosto de 1856, el subprefecto inforuist# aque tanto ei Amecasieca como en San Gregofo, “hay reuniones re con ¢] fin de oponerse al cum sr nas de: Yodigenas, segin parece fin de opone limite ee icién regional. Asi, Procuraron armarse ic i Sys elec grt oe nee Bs reat Pay cay ‘Claramente la escala y la iotensidad de = . Pero también reconocta que la mayorla de los campesinos ropoctan pagar los costos de desline, las excrituras y el impuesto debido sebiero, Por tanto, public una normativa de implementaciOn revisada, ticamente a sus ocupantes las tierras yaluadas em menos 16 “ importancia para los dirigentes politicos. Sugi i je iproanet zr ents Sor ml en a je politico, Pocos dirigentes politicos estaban- dispuestos « hablar en defensa de la-propiedad comma) campesina:-La-ideologse liberal det inditidualismo econémico se complementaba. perfectamente con la nevesidad.de-las: lites. tertatenientes de Mérico.de. debilitar-las. comunidades: campésisas-Leena: jenacion de las tierras comunales era una poltica liberal esencial, destinada a foralocer el poder del Exado y a alivar os problemas econéicas dels 'es terratenientés-al socavar;! sf 7 lites terateinl sor ate mater cea fra dens comm ‘Los anteriores esfuerzos de los distintos estados:mexicanoé por eliminar Ja propiedad eomumal, alo lango del siglo XIX, hablan fracasado, Las sefor- madores liberales de 1856 y 1857 se proponfan lograr que esas medidas fue- * ran mis efectivas imponiéndolas a nivel nacional. Hasta entonces, también, los. estados habfan intentado imponer Ios intereses de la élite treande Uae policta rural, pero con escaso éxito. Los reformadores liberales de los aiios 1850 también consideraban que la policia rial era esencial para imponer el poder del Estado en el campo, y emprendieron fa creacién de‘una fuerza ‘rural nacional.” Los liberales convirtieron en polfiica nacional la oposici6n a la propiedad comunal y el uso de la fuerza armada para contener las inevita- ‘bles protestas campesinas Pero también los gobernantes liberales que dirigieron el pafs a partir de sin deslinde y sin escrituras, Declaré que el bienestar de las clases mis-desti- ‘ollo de las normas dictadas paral de. doscientos pesos, sin impuestos, ‘su objetivo era servir a “la paz piblica, tuidas y a la implementacién y el desarr movilizacién de ia propiedad”.” 5 ‘La nueva normativa eliminaba la necesidad de una implementacién-activa de la Ley Levdo en lo que se referfa-a la- propiedad-campesina de:tietras == Comunales. Los liberales podian simplemente amunciar que la reforma se habfa llevado a cabo. Y las comunidades campesinas podian contiouar local. =! mente como hasta eatonces, ignorando en realidad: la nueva ley.de prope dad. Tenfan que surgir problemas en el futuro, Lts campesinos segtir teniendo sus parcelas. Pero el Estado las considerarfa propiedad: privada ge negarfa a reconocer los titulos comunitarios. Y los campesinos no ten: drian escrituras de las parcelas individuales. aoe 7 La normativa promulgada por Lerdo en octubre és tambigo, tal very ta! més clara declaracién de Ja intenci6n liberal de acabiir con‘la’ ‘propiedad = comunal. No querian despojar a los campesinos de sus tierras. Pero querfatt forzar la “movilizacion de la propiedad”. Para unr liberal-esx inovilizacié favorecerfa la expansion ecoudmica. Pero para los campesinos, la:propieda faméul habia servido durante mucho tiempo para proteger-una base mliiihia= de subsistencia que amortiguaba su oreciente participacién en la-econom Comercial. La movilizacion de Ja propiedad y la acelerada ‘comercializaciérr de la'vida rural apresuraran Ja entineén dé la cltura camipesina, y dela, capacidad de los campesinos para fesistir 4 la potericia’expansionistast 856 tuvieron grandes dificultad P ir Eralo aaclooal y de las elites terratenientes, Las campetinos de Chaleoij 2) crear uaa alia ehens La open de Ie tits consoundorasy ee aia sate Paionac es equivocaban en su oposicin a la Ley Leo, 1./8/{V0" dos eclesifstcos a a parte anticlerical de las reformas condujo a Tuna deca. Lo gue ls lies lerratenicates esperaban de la ley se revela on la Caitaifahitda de guerra cv. Y esto ofreci6 a los campesinos del centeo de Mésic nak enviada a Riva Palacio por otro hacendado-de Chalco en abril de: 1857, Srespiro en la: aplicacién de las leyes de quejaba de que las tierras comunales de alli no se habian dividido ¥ ‘lo leyes de Reforma, a la vez que nuevas; Prue Z bas de la debilidad del Estado nacional dividi sonaba para que interviniera pronto. Afirmaba-que’s6lo el fim. de' fos mae, chos de propiedad comunal podia eliminar los futuros'conflictos enti munidades y terratenientes. El hacendado pod{a escribir-privadamenteslont Pee ? ¢ Sai fe conservadores y clericales opuestos.a las reformas liberales rao fan necesitando-traball gees produ ana sangrienta guera civ que se Eide en 1657 y eng con en las haciendas, pero ya n0 podrfan mantener la cohesi6a de la comunid Stictoria liberal en 1859:-a principios de la década de’ 1860, los’ conservado- {que habla representado tantos problemas para Jos terratenientes.. - ° * , ante el riesgo de quedar eliminados de la vida politica mexicana, hicie- La Ley Lerdo se incorpor6 a fa Constituci6a Liberal de:1857, ‘que Ma fen-un Gltimo intento desesperado por conservar el poder aliéndase’con las no Riva Palacio y su hijo Vicente colaboraron a redactar, com escaso: pas francesas y Ia monarquia titere de Maxiniliano de Habsbuxgo."Ast y uma aplastente mayoria de 76 23° La oposition que suscit6 ese m ‘desde 1857 hasta la calda del régimen de Maximiliano, en 1867, volvié a estatoto se referfa principalmente a las medidas que minaban el poder ZEEE falter en México un Estado tnico y eficaz. Los campesinos tuvieron pruebas némico de fa Iglesia. Apenas si bubo discusiém politica en tomo. alae {cello con la reanudaci6a de la guerra civil y ef surgimiento de un bandole- eee a penitics de los campesinos, La escasez de-debate'adeutlue iismo endémico que ninguna fuerza politica podia controlar ni coatenes. La Jobe cin embargo entenderse como indilo de que tales medidas carectaragagaginplementacion de la Ley Lerdo en Jas comunidades campesinas se hizo- CONVULSIONES POLITICAS Y NUEVA CRISIS DE LA ELITE, 1857-1867. 18 imposible. La mayorfa de los campesinos de Chaleo permanccieron-en paz, contenténdose aparentemente con contemplar cémo‘peleaban entre sf, com. mortiferos resultados, los ejércitos.rivales y los bandidos.. ep ‘Al principio de la guerrd civil de 185%, las élites de Chalco considerarom ~/21 que el conflicto seria itil para el control social local. Eit-una reuniém de-los “2: vecinos més honrados y mejor. acomodados” se"redact6 “una lista = si peniioos” dela region com el finde cecutaros pare ltr Ube“ egies ceses exigfan de las ha. ral” Pero pronto la guerra civil result6 incontrolable. Conforme el to 80 | siendas impuestos, contribuciones i tat mua acereaba a Chaleo, los terratenientes, fincionarios-y administadores de as, 2] |. 1860, por ejemplo, los liberales cageree Se doe pence: Dutante haciendas, ast como los comerciantes urbanos, huyerom derla-regién- pata} + que podian costar a un hacendado casi mil pesos. Muckes aa forzosos oe odian.o:ng tamente a manos.de los acreedores.®. distrutaran con. eam pesinas de Acuautla sin duda los. ejércitos.en sl campo de_hat enes, Jos liberales, los conservadores y los fr intentar.constituir-nueyes refugiarse ea la ciudad de México. Los campesinos se quedaron solos, uerian pagar, segtia que los de B ‘ Cuando fos Uberles asumieron de nuevo el gobierno nacional, a princi Il). cox Por lo menos una fines de Cholen ie ean ees © alas pole pios de 1859, el bandolerismo segufa asolando Chalco y gran parte del cen="#s{2=~ liberal por el impago de quinientos pesos de impacto en ae tro de México, La principal respuesta del gobierno, eucabezado entonces i Dos ejemplos de Ja crisis familiar de la élite puede: nae por Benito Judrez, consistié en constituir una fuerza policiaca rural naci “oo mas generales de esa década turbulenta:‘Tres,j nal, Simulténeamente, los terratenientes de Chalco procuraron resiablecer 95 ls hacen Garrido habian heredado en 1855 Ja hacienda de At ropiedad fue algulada, peso cuando el contato termine en 85); eheves, Se coeeeeanan ee ea arguyendo fala de rentabiidad. Rive Palacio ‘A princpios de 1862, los francesesivadieron México, con lo que seine = io. Al no encontarlo, alge la hacienda eae pose ec ena 6 ob0 azo de guetra civil y el campo qued6 de.nuevo a meroed de-losiizjf'=!" para lcvar los problemas Enancieros a i fesse hp eae So MIS bandides. Cuando los franceses obtuvieron la victoria militar en 1863, consi Ss deraron, ellos tambiga, que la policia era la nica folucién a la inguictiv™ rural. Incuso siguizron el precedente liberal mexicanor organizar fuereat-tz policiacas locales convocando a los principales terratenientes para pedirles Se nuevo que pagaran el equipo y los salarios de la policia,” Tal vez el nite tema ex que habia consenso entre todos los partidos durante los conflict politicos de 1857 2 1867 era-la.idea de que la represion policiaca eta’ {nica respuesta ala inquictud rural endémica. La violencia babfa aleanza tm papel central en las relaciones sociales mexicanas. No sélo el contial social del Estado se disputaba en el campo de batalla sino que el control ¢#c4] Guestioa de accén policiaca. El poder mediador del Estado colonial, Estado que gobernaba sin policfa y con escasos-enfrentamientos-abiertos3 no era en 1860 més que un distante y vago recuerdo. tag Sibien las lites recurrfan cada veo més a la violencia como medio prin pal de lograr costrol social, sus problemas econémicos erin cadi"Yez"a graves. En octubre de 1857, las deudas del propictasio de la haciends Fomacoco llegaron al punto de forzarlo a vender la finca. Pero como-er2f 3 tiempos dflcles no apareci6 ningiin comprador, por lo que tuvo que off=4 cerles alos propictaros de las baciendss vecinas que compraran partes fs tcrras”” Ea junib de 1858, el clan Vilaurruia se vio forzado'por ISesin acreedores a alquilar la hacienda de Zoquiapan, cuyo alquiler pasabe-direex Wvenes-hermanas apellidadas hs sre Date ena i » habfa servida como Notario Mayor del J ‘de Capellanfas, el banco hipotecario de la Catedral de ‘nald de Meice :Chalco, y haba ayudado a financiar otras fincas de la regions» AE EA fines dela década de 1830, vendo el Morale imino ahaa de ‘Buenavista, cerca de Apan, al noreste de la ciudad de México. En. la espe- quctanza de mejorar la hacienda, gast6 cerca de diez mil pesos en reformas durante los afios 1850. Pero habia obtenide el capital mediante préstamos que le result6 imposible pagar debido a los disturbios ccondmicos y politicas ate Ie época. Intent6 vender la finca, valorada en 125 mil pesos, pero na 120 nL recibié ninguna oferta superior a los 115 mil pesos. Aguant6, esperando que Ia intervencion francesa le procuraria estabilidad y beneficios. Pero los dis turbios coniiavaron y perdia siete mil pésos anuales. Tuvo que vender gana- doy herramientas para pagar los gastos de funcionamiento. Finalmente ven- did Ja hacienda en 1856, a un Martinez de la’ Torre, por 103 mil pesos. ‘Sanchez consideraba que esa venta habfa.sido, un robo forzado‘por lavdifir caltad de los tiempos. EI banquero y hacendado antaiio eminente tuvo que coaformarse con vivir de los pagos de 320 pesos mensuales que recibfa del nuevo propictario: Entre tanto, Sanchez debfa 180 pesos mensuales de anteriores deudas. lamentaba de verse reducido a vivir con 150 pesos al mes.” No era un caso * de miseria. La mayorfa de los mexicanos del campo no ganaban ni la mitad de esos 150 pesos al ako. Pero Sénchez habla perdido su-puesto en la élite terratenieate. 2 Mientras algunos terratenientes de Chalco y de regiones similares del ceatro de México perdieron sus haciendas entre 1857 y 1867, todos los de-:, ms tenfan tambiéa graves problemas financieros. La persistente disputa etf 7.39 tormo a la composicion y el control del Estado mexicano impedia que sei. levaran a cabo las reformas econémicas y dejaba toda la carga financier a Jos hacendados. La crisis de la élite mexicana continué, y tal vex se hizo-més.~ profunda, durante esa década de turbulencias. s clenda perdfa poco, ya que la 7 “e ii ei cet gue . Pero las difcultades financk -oaigerables benefice fo: eg ae ls aes ra poco Gouees lara eee “Y de otros lugares estabian pues dispuestas a compartir partede lovbenchine potenciales a cambio de traspasar los riesgo Jerid yes Fedlutamieato de mano de, obra al dello) Ws Pid yla carga det ‘campesinos de. Chal66 aceptaron la’ ay diferentes : 1a mayoriateguan dependieads de lot elce os eee para complementar su producciém de subsistencia. Sitina hacienda dejube do ofrecer trabajo eventual y, en cambio, blo ofrecia aparcerias; muchos came sinos no tenfan mis opeién que acéptar. Adems ls aperestoe adders _derto control sobre Ja produccién y recibfan a cambio de sus.esfuerzos pro ductos de primera necesidad: El paso a la aparcerfa reflejaba claramente Ja debilidad econémica de los hacendados de: ‘Chalco,y tal vez fuera.considerada como usa modesta nana pores campesinos oan. elt in inventario de la hacienda de la-Asuncin realizado: indica a cuarta parte del maiz de la hacienda estaba sendo eultrado'per sears ros. Estos arrendatarios habfan plantado anterioriente gas la muted ae log cultivos de la hacienda, pero como se les babfan asignadp-lastierras menos eg fells y no icrigadas,habfan sulrido graves pétdidas con la sequia. Eatre SHE, fato, los aparceros cultivaban todo el Inoly el alverjon de la hacenda, Us , : Lipp Sindicio de la duradera cohesign de. las commaidades de Chaleoes qué lor ‘Alo largo de la década de 1860, los beneficios de las haciendas de Chaleo(: ee -sontratos de aparcerta de la Asunciém no se-hactan con-catapesiaos tadive siguieros siendo escasos. Las élites terratenientes siguicron lamenténdose de: i3)2- duales, sino con las comunidades y sus dirigentes.” - oe deere seaed de conseguir trabujadores basatos cuando ls necestaban. Sug Apenas contamos con informacion més dealada scbe'la ajarcerisen ‘a impostidad de o cada vermis ala aparceria,Los aparoeros pod 2a alco. Pero el material relativo a las haciendas de Jalpa, situadas al norte Siar aigenos de los problemas més acudantes de los hacendados. Pesos la ciudad de México en una regién similar a la de Chalco, nos propordo- aenea Sodten acreoctar los conflicts entre la lites y los campesinos. 7218) na Giles dats. En 1864, 58% del mate de Jala er cliado por pares il ra ea mexicano en lak che 7/f'0s, En 1866, el-porcentaje habia aumentato-a un 72%, El adwinisteador eee 2 or ON ea cones pesteriors 4 In Independencia =explicaba esta adopciéin del sistema de aparcerfa.cefialands qua debido #Tos guia tcc colori yn prin Fer ae coal Tumultuosos tiempos, escascaban tanto los. trabajadores como elvdinero para administrador de Ja Asuncion sefala que parte del maiz de la hacienda’ ¥ : todos los frijoles y alverj6n, cultivos de trabajo ‘intensivo, eran producids, por aparceros. Ea 1858, el administrador de la hacienda Buenavista: pide: Pater que sus contrincantes poltcos lo captararpn haciéndose pasar pot ui aparcero. . “ i Esté claro por qué las haciendas recurrieron a la aparcerfa. Con ella podta. eviarsela eseaserde liquido que ¢ificltaba el reclutamiento de mano de obra Los arrendatarios se hacian responsables de realizar el trabajo. Si la cosecha:¥:a fallaba, como ocurrfa periédicamente en el clima: del México central, what al LA ADAFTACION AGRARIA A LA CRISIS: LA APARCERLA, En Jalpa, los contratos de aparcerfa se hacfan, con individuos-y -no-con- =eSmunidades. También conacemos los detalles de los contratos: la hacienda :Proporcionabs la tierra, las semillas, una yunta y el agua de-riego (si la ha- :bia), y el aparcero era responsable tnicamente del trabajo, La hacienda y.el “arrendatario se dividfan la cosecha a partes igvales, la haciends tomaba de. parte que le correspondia'la semilla para la siguiente’siembra. En el caso suide los pocos aparceros que podian emplear su propia yunta, ia hacienda [yep bhgmba a ita de oso de la casecha." Tales acaecos era telatvameate 1m me favorables para los aparcetos ¢ indican de nuevo los problemas econémicos ‘que atravesaban los hacendados del centro.de Mézico, : _ Laaparcerfa fueuna adaptacién de lagrelaciones sociales agrarias, resultado del declinante poder econémico de las haciendas, Los campesinos tal vez se 72 beneficiaban al aumentar su control directo sobre los cultivos. Sin embargo, Ja aparceria también elev6 el potencial conflictivo entre campesinos y hacen- dados, Desde el siglo v1, cuando los campesinos del centro de México culti- vabas. productos de subsistencia, fo habfan hecho principalmente en las tierras que les correspondfan como miembros de las comunidades. Su.dependencia econdmica respecto de las haciendas se limitaba generalmente al trabajo eventual. En esa divisién tradicional del trabajo campesing, las cosechas que fracasaban periédicamente solfan coasiderarse como actos de una naturaleza incontrolable. Y los campesinos a menudo recibian salarios por su trabajo en las haciendas, aunque més tarde se perdiera la cosecha, El desarrollo de Ta. aparceria a mediados del siglo xix produjo cambios que acrecentarfan ef i resentimiento de los campesinos contra las haciendas en. épocas.de crisis==2 climarol6gicas, Por primera voz, los campesinos cultivaban las tierras de la 22) hacienda por cuenta propia. Si la cosecha era buena, la hacienda podrt aparecer como benefactor. Pero cuando es = 5 ootomp y fe a faciones se iniciaron en Acuautla ‘por lo mengs una vez cada diez afios en el centro de México,-la hambrina "2%." antes de febrero de 1868.1 i liscusi Fesllante ya no pareca un ato dela uatoralea sino una imposicin d los} SO Viner amnyn el dssene he es ee ee asa terratenientes, que les dabana los campesinos sblo ls tierras margnalesSit=22 mere del admiitiador de Zoquapan dice anes cies Pe anni lego, icntras los campos de rego de la hacienda florectan allfcerca. Y, desde. 2215-25 con las anteriores protestas esté clara, ero un elemente muro eu ig6e ng Tuego, el trabajo de los campesinos en las cosechas compartidas que so perdian’ /31-°.." in presencia de Julio Lépe, antiguo empleado de una hacienda dé losvalre- nunca era remunerado, Asf, la aparcerfa podia hacer que el hambre Geico, Lod Ste estes de Texcoco, antigua soldado de ls eérios liberals y antiguo-ie més como un problema social que.como un problema dlimatologico: = 288 sea,-Cpulo del activista radical Plotino Rhodakanaty.” Lopez proporcion6 el campesinos podian sensibilizarse a las soluciones sociales. derazgo organizativo ¢ ideolégico para unir aclos campesinos de diferentes i ‘Somunidades.en una sola rebelién: . - [EI 2 de febrerode 1868, Lépez lanzé su primera proclama. S¢ detlaraba heals eee frdadero Teer y trots, subrayaba sus recent esfurzs exfavorde Eu junio de 1867, los ejércitos liberales ocuparon de - la causa liberal. No denuncizba agravio algurio del régimen liberal y llsmaba Mateo, seguidos muy pronto por el presidente Benito Juérez. ‘Terminale ‘Scvula rcbcliGm s6lo contra-los propietarios-de las hacieadas de Chalco! Sia asf una década de guerra civil. Durante Jo que quedaba del siglo, los coulis: 5975/54 "‘duda, Lépez esperaba suavizar la reacci6n del Estaco ante st rebelion pero, tos politicos se darfan en el seno de los liberales y, en general, zo. dimulténeamente, ofrecfa a-los liberales la bjfoftunidad de’adoptar un papel ‘menos des6rdenes. Pero, para Juarez y los liberales, ocupar el gobiemo:mt: "tuediador. El Estado podia mediar entre tetratenientes ¥ cainpesinos, en vez Gional no equivalia a gobcrnar México. El establecimicnto de un Estado na2 72 -de'simplemente respaldar las aspiraciones de las éltes. Ua informe dirigdo ‘onal efectivo que ejerciera cl poder en las zonas urbanas y rurales todavit 77": “et.4 de febrero a Riva Palacio‘habla de un grupo de “tezroristas™ encabeza- serfa un proceso largo y diffcil . IAEA dos por Lépez y constituido por seseata 0 setenta aombres. En él se decta Entre 1867 y 1870, el régimen de, Jusrez soport un bandolerismo endé jue cl icvantamiento tenta el apoyo de los campesinos de los pueblos, desde: ico, numerosos levantamientos campesinos dispersos y méltip bias atepec hasta Huexoculco, en fos montes situados al este de la ura de regionales, En el aliplano central que rodea a la capital, estallaron a finals S755 Crrlco. El siécleo principal de rebeldes venfa de Acuaulla, EL informe'con- de 1869 varios levantamientos campesinos simulténeos que duraron. haste #2 Sula sedalando'la sorprendente auseacia depillajey violencia.” * «2 1870. Una de las primeras rebelione’ cont , tuvo lugar en Chalco en 1868.2 ont =, Cuanido los liberales tec rz0s0y de nuevo tuve queafrontas estaba firmementeasentado en el poder, pero falto de hase, ne oe >, Ea ese contexto, se desarzoll6 la rebelién campesita de-Chalcoein 1868, £1, Los lberales propugnaban la répida implementacin dela ley para-enajenar -las tierras-comanales en wii moments de continaas difcaltades en Is ersoe, sina de las haciendas. Tal vez el paso a Ja aparcesfa también babla seevido Se para acrecentar las tensiones. Las conspir: LA REBELIGN CAMPESINA DE CHALCO, 1868. ms 14 Para el 18 de febrero, el régimen liberal habia decidido no mediar, sino enviar cincuenta soldados a perscguir a los rebeldes.” El 22 de febrero, el ‘administrador de la hacienda de la Compaaia informaba que, como rebeldes actives, s6lo quedaba una pequefia banda de cabecillas y unos cuantos bandic dos. La “gente de a pie” —los campesinos comunes que iban a pie— no se habia incorporado en ntimero importante. Esto limitaba elmtimero derebeldes; pero permitia una movilidad que resultaba frustrante para los soldados, E1Z3 de febrero, Légez procuré reclutar més rebeldes lanzando una nue- % ; 1 7 ya proclama. Llamaba a la unidad entre las comunidades campesinas para ‘ecesaria s6lo’ porque los, jueces recuperar las tierras usurpadas por las élites. Argumentaba que la ¢ostum- bre de apelar a los tribunales en casos de abuso solo les servia a los campe: sinos para obtener promesas incumplidas y para perder tiempo y dinero.” El mismo dia, Lépez envi6 un mensaje a las tropas, ordendndoles abando; 2 nar la regi6n o atenerse a terribles consecuencias, También hizo circular en. 2 i ie Rafael Cuéllar. se encom los pueblos y haciendas de Chalco panfletos en los que ofrecfa tietras “a Spex pidic P z deponfanilas.armas:ck& quienes se unieran a su alzamiento o le procurasen sustento y amenazaba de . a la hora sefala- muerte a quienes sc le opusieran. El administrador de la Compaiifa informat- pn ides arniados.Las ‘ba que los peones.de la hacienda se fingian enfermos o simplemente se mar, wuyeron. en retirada, disparand: oT eae Oe de los campesinos chaban. No vefa més salida, para defenderse, que traer més tropas.™ smn” Lek ea dspwande al ant metry so doperstan Fora (E apoyar a los ebeldes de ache ee satabam_aparentemente.dispuestos a Con los soldados patrullando Chalco, Lopez encontré muchos simpati' 85)" es dear zantes, pero pocos dispuestos a tomar las armas. Su banda se redujo a mev oo TeSSEa ures formas pero.no esta nos de veinte hombres durante la titima semana de febrero. Confiando. et que el levantamiento se estaba desvaneciendo, las tropas abandonaron Ci 0. Esto hizo que los primeros dfas de marzo fuesen muy intranquilos par: Jos administradores de las haciendas y otras personas vinculadas a las élite: terratenientes de Chalco. Habla rumores de que el general Miguel Negret irigfa a los rebeldes, pero no habia pruebas reales. Una vez que los sol dos se fueron, ef némero de rebeldes aument6 de nuevo en respuesta’ ofrecimiento de tierras arrebatadas a las haciendas. Y los sublevados conti auaron comportndose como rebeldes modelo, sin cometer ningim acto: de vandalismo ni de violencia incontrolada. Esto preocupaba a los administra dores de las haciendas, porque significaba que los rebeldes recibfan su st tento de las comunidades campesinas.” =F A principios de marzo, el gobierno yolvié-a enviar tropas al mando"! general Rafael-Cuéllar. El dia 6, los dirigentes de Acuautla lanzaron proclama en Ja que enumeraban sus agravios y proponian. soluciones:: Cit: bban su larga lucha con Zoquiapan: una 'y otra. vez habian presentado-siscsig, Uitulos de propiedad ante los tribunales, ‘péro “a justicia sienfpre le ha cho al poderoso”, Hacla poco, en 1862, durante el breve gobierno lib cuatro dirigentes de los pueblos que levaban reclamaciones a los tribun; fueron sumariamente arrestados y reclutados para el ejército liberal. Est ban seguros de que si el presidente Juérez conociera tales hechos los d (c icin, los dirigentes de varia. comun es de Chalen enviaton al gobiem el 23 do maser oe RE Sit del nguctad local. Acusaban a Lépezy a st ncleo de rbeldes de iciado los problemas, pero creta ito en. i ipoyo se debfa a la “miseria y las: desgrasie’ ensue roe ao es sugerfan que, durante demasiado tiempo, “la tolecancia de nuestros padres y abuelos”, que se agotaban luchando. "A continuacién, Fe crilta de ilustracién bad 7 a través de los canales legales, controlados por los terratenientes, baba faci- Titadorel camino a la codicia de éstos, Los dirigentes de las comunidades insistfan en que se oponfan a la rebe- Jién, pero argifan que el nico medio de evitar-la violencia era que el go- Dierno levara a cabo un examen imparcial de {os titulos de propiedad y Tuego un deslinde de las propiedades de Chaleo. De nuevo, ef Estado me- diador era la solucién a los ojos de los dirigentes comunitarios.* ‘Chalco permanecié én calma durante abril y mayo. Los funcionarios loca- Jes y los administradores de las haciendas pensaban que Jas tropas habfan asustado definitivamente a los campesinos. Un funcionario visit6 las eomuni-- dades rebeldes para reprenderlos. Algunos comerciantes locales.incluso.em- } pezaron a denunciar tierras comunales segin lo fijado en la Ley Lerdo.” Lo 2 que terratenientes, funcionarios y comerciantes n6 percibieron fue que los * =>} ‘campesinos habfan aprovechado la oferta de rendicién del gobierno para sembrar sus campos. Entre los campesinos, la subsistencia es lo primero. : ‘Cuando terminé la siembra, se reanudé la rebelién. Lopez se al26 de ‘ nuevo el 29 de mayo. El gobierno de la ciudad-de México se-vio muy pronto inundado con las stplicas de los hacendados, administradores y fumcionarios “3 locales de Chalco, que pedian tropas."” Buscaido nuevos apoyos para este segundo alzamiento, Lépez volvi6 su atenci6n a las comunidades de la-llanu-.;3 ta de Chalco. Sus habitantes vivfan rodeados por las haciendas y dependian. de ellas en grado sumo. No se habian sublevado hasta entonces. Esta los campesinos de Zula, cerca de la Asunci6n, y de San Gregorio Cuautzi go, cerca de la Compaaia, se unieron a los rebeldes. ¥ los administradores de esas haciendas recibieron mensajes de L6pez en que declaraba que los ppastos y los bosques eran propiedad comunal, por la que los campesinos nd. pagarfan alquiler.™ - = ‘Hacia el 4 de junio de 1868, res estaban seguros de que Jos rebeldes recibfan apoyo fa comunidades campesines de Ia regién Muchos hacendados y. administrado-, res ce cintieron tan amenazados que empacaron sus objetos de valor y abati-; donaron Ia regién. EL7 de junio, ls gobiernos estatal y nacional empez ron de nuevo a enviar tropas a Chalco. Esta vez no corrieron riesgos. Para tl fa 13, habla cuatrocientos soldados en Chalco y otros 150 en camino. Desi} de el 9 hasta el 18, las fuerzas del gobierno persiguieron a los rebeldes, que=2 se movian con facilidad por las abruptas montaiias volednicas que separah st Chalco de la depresién de Puebla, situada al este. Al principio, el aumento de la fuerza gubernamental acrecent6 apareat meate el nimero de rebeldes que peleaban con Lépez. El 12 de junio i decfa que lo seguian cien hombres. Pero finalmente los rebeldes queda rodeados-en los moates.porwun mimeo muy superior de soldados entrea: Ja fuerza rebelde sumaba de nuevo cerca dé 25 setenta hombres, cuarenta de ellos a caballo. Funclnarce 7 admin on os, En las anteriores escaramu: ic 12a, los rebeld a ‘un0$ cuantos Y escapar a ll ceres Pero al Hehe insurgentes fueron capturados de nuevo, pero la fuerza dejar atrés.a Pero el 17 de.j a ea: las cercanias de Acuautia- Lgper soon Principal de los Febeldes fue aplastada El gobierno ignoré el alegato. Las campesin auidores de los rebeldes fueron incorporades .'dirigentes locales fueron condenades al deste Bo” EL 7 de julio fue capturado Julio Lopez. + ministro de Defensa, Ignacio Mejfa, al ejército. Los. que parectan fro en Yucatin. Teas cépidas consuleas.con el ‘Lopez fue [Bi Defense, Tenacio Mela, Lopes fue sumargeate. easy. = , 10 castigo el segundo en el mand ta nde Aa se 2 gata ool Sa Zritencias de incorporaciOn al ojército y de destierro a Yucatén, incluidn con spina uae mujer rebelde, pero la mayorfa fueron Ginalwente aprobadas por presidente Judrez.:A principios de octubre de 1868, “Yucatén partieron de Vernerua™ ©” SPT 4 aera 2) Una superioridad militar aplastante acabo ‘ESiebelién campesina ea Chalco en el verano spodian oponerse a tal fuerza, Simulténeament ane eee Los inventarios de las Tags s conceatradas en las tierras correspond 4 Siow La proxinidad de la escasez seguramente torcest af donee, fampesino. Pero la pérdida de la ‘cosecha también mivaba la capacidadl de Jes Campesinos para sostener una rebeliba. La combiaaciéa de tropas y se. fa hizo que la mayorfa de los campesinos de Chalco se dedicaran 4 laa Preocupaciones més inmediatas de la supervivencia familiar," - Para no correr ris i fat dal a SEO cl gobierno dejé las tropas en Chalco hasta el con el segundo estallido de de 1868. Los carapesinos. no fe, en el verano de 1868 bubo haciendas’ de: Chalco revelan Chalco permaneci6 en calma cuando, en.cl otoio nes campesinas en: varias regiones vecinas del alti- nO ctatral. Ea los valles de Morelos, al sur, Puebla, al este, y el Mezqui- 5) tal, al notte, los campesinos se sublevaron a partir de septiembre de 1869 y atacaton las haciendas més préximas. En estos levantamientos también sur- sgeron dicigentes ideolbgicos como Francisco Islas, que proclamé su “Plan de Comusismo” en el Mezqnital.™” Se produjeron numerosag escaramuzas, pero las tropas del gobierno triunfaron de nuevo en enero de 1870. ‘Los levantamientos de 1869 se extendieroma una zona més amplia que os ~ de Chalco el aio: anterior, lo que sugiere’que recogfan um descontento més ‘generalizado, Pero sus objetivos eran similares a los de los rebeldes de Chalco, La diferencia principal parece residir‘en el ritmo de ciclo agricola, tan impor- 47 tante en a‘ vida campesina, Hemos visto como la sequia de 1868: ayudé-a~i 7} suprimir la sublevacién de Chaleo. Los campesinos de Morelos, Puebla-y el ‘Mezquital esperaron en cambio hasta el otofo de 1869. Entonces estaba madurando la primera buena cosecha después deun afio de escasez. Los méses 24 chambre sin duda habian llevado a su culminacin el descontento campesino; Ia abundancia de alimento hizo posible sostencr tna rebeli6n."” =~ Sélo podemos especilar sobre los resultados que habria tenido la rebes ign silos campesinos de Chalco se hubieran unido a sus vecinos en 1869: EF régimen lberal se habrfa.visto en aprietos ms graves. UHabria respondido.==27} aceptando el poder de mediacién que los rebeldes campesinos le seguta ofreciendo? 40 simplemente Judrez.y sus aliados habrian Iuchado durante: mis tiempo, para suprimir finalmente esa rebelién ms amplia? Tal coma curr hist6ricamente, los levantamientos campesinos del centro de México: gue se produjeron a fines de la década de 1860 quedaron regionalment aislados unos de otros..Al romper en dos olas separadas, sin duda, los bemantes liberales pudieron aplastar més facilmente le rebeliGa. Y la supre sién violeata de la protesta campesina fue un paso importante en la consol daci6n de un Estado nacional por los liberales; lo que es tal vez su principal contribucién a la historia de Mésico. ay do que habia luchado para spiraciones abargabs hacien- das. Por su parte, el Estado enceatiopoeee compradores depuesionnn Loe Repeoee -a principios de los sion 1 ee mpesino abia prok fundizado le crisis. que suftia la élite terrateniente desde. lalndepentog aoe LOS RESULTADOS DE LA REBELION DE CHALCO ‘Considerada como contlicto militar, la rebelion de 1868 en Chalco acab6 cofi. la derrota de los campesinos. Pero si se toman en consideracién las const: cuencias sociales ms amplias del levantamiento, sus resultados pareceréini ambiguos, El poder militar de un Estado decidido a sostener a la élite teri teniente no permitié que los campesinos de Chaleo obtuvieran mis tieriasiBhs Estado no contemplaba el dejar de representar Jos.intereses de.Ja élite. Pett Jos campesinos rebeldes sf lograron infligir graves pérdidas econémicas Propietarios y los administradores de las haciendas de Chalco. Y la posibilidat ‘de que los campesinos recurrierana la violencia aminor6 en general los-ataques = 1890 revela d ctor i contra las tierras comunales por parte de las élites y del Estado liberal. 3 fs ei Fonts Sumpesinas, Primero, as haciendas desin- La victoria m4s clara obtenida por los campesinos de Chalco fue el recnrissta| Jimitaban on Grae que Bpaien del sige XIX. x segundo, : como pertenccientes a las co” BL tmunidades campesinas. Desde: luego, la legislaciéa liberal afin estaba en vi- + Bor y tales tierras eran posesién, legalmente, de familias individuales. Pero Jos deslindadotes reconocian que'la réalidad predominante era la continuie dad de la propiedad comunal. yy. : Los campesinos de Chalco no pudieron derrotar al Estado mexicano ni “2 climinar a las élites terratenientes.'La victoria de-los campesinas-no-consis-=53 {H6 en genar, sino en demoraz su propia Werrota. Los campesinos mexicanos. ‘i han revelado repetidamente que prefieren seguir siendo campesinos: vivir en. comunidades campesinas, producir'en ly medida deslo posible sus propios, 2:4 productos de subsistencia, y entra slo mfnimamente en let economfa-co=~ i= mercial.™ El triunfo de los campesinos de Chalco y de otras regiones del: Altiplano central consisté en frenar, aunque no detener, los intentos de'te- Tratenientes y liberales por menoscabar la base material de la vida de Ji comunidad campesina, Estos triunfos dilatorios eran el méximo a que los campesinos podian aspirar, en-el México del siglo xx. ‘En el tltimo cuarto de siglo, bajo el gobierno de Porfirio Diaz, el Estado. mexicano se volverfa més fuerte y los tet¥atenientes’més ricos, mientras tai poblaciénicampesina crecfa.y la comercializacién general de la: economia’. Amenazaba de nuevo Ia vida campesina. Incliso alli donde los campesinos coaservaban sus tierras, cada vez eran més los que dependian de los salarios: para sostener a sus familias."* Los procesos demogréficos, econdmicos y p Iiticos del final del siglo XIX ejercian presién sobre la vide campesina Tevarla a la extinci6n, La victoria de los rebeldes de Chalco en 1868 consi ti6 en demorar esa extincién por lo menos una generacion més. Para quits: nes se proponen goberar, esa Victoria parece pequesa; para los campesie S511: 0 nos, cuyo objetivo era simplemente seguir siéndol, lo significaba casi todo: 7=scefsee Contra las tierras comunales de los campesinos, Gracias a hrallar soluciones en la innovaci ban el ancestalconiel de es campy ie is slicenes emenara tea ti ipesinos de-Chaico sobre-los.recursos. Los CONCLUSION: LA VIOLENCIA CAMPESINA Y LA POLITICA NACIONAL La frecuente afirmacién de que la Independencia mexicana produjo escasci 7 sie Tatton Sociales no concuerdn con fo datos eabre Chaleo ls vecnas 127,416) giones del Altiplano-ceatral. Los gobernantes de la naciente nacion mexicd=xe hes epunea fueron reformadores decididos beneficiar a los'campesinos messi canos. Pero los cambios estructurales que suscit@ le Independencia nacisils7 dispararon una cadena de procesos que cambiaron le-sociedad agraria mei cana de una manera sustancal. Las relaciones sociales rurales pasdrow te Sse, * explotacién esteble y simbiética-al enfrentamiento violento. El poder media °¢5- dor del Btado colosialqued6 eiminado, mientras lis éhtesterratenient’S a : enfrentaban la ruina financiera. El resultado fue un Estado nacional d6bilif les en su origen y perspectivas. Sin embargo, conforme el Estado nacional a menudo dividido, que intentaba'servir como representante de las empe Bi s(oilberal se unfa a las dlites terratenientes con el fin de atacar a las-comunidades trocidas Altes terratenientes, Incapaces de resolver los problemas poliooscgifestimpesins, or campesinos empezaron 2 cousderar sus dificultades deatro y econémicos de la naciéa, a finales de 1840 las élites de Chalco creyetors ic un contexto social y politico més amplio, Los drigentes como Julio Lopez tos eran impugnados por los campesinos, a Entre tanto, los campesinos de Chalco y de otros lugares se yolvian cada jiez més receptivos a los dirigeates de orientacita politica y compromiso ideol6gico, Exlosprimeros aos de la década de 1850, las protestas y rebeliones “fampesinas en el Altiplano ceatral de México sigtieron siendo claramente: 12 we 133. 1 apenas estaban aprendiendo « organizar la inquictud campesina con fines politicos nacionales, a finales de la década de 1860. Coa todo,-e! paso hacia a orientacién ideolbgica y la organizacién politica esta claro. ‘Los levantamientos campesinos de fines de la década de 1860 fueron més amplios y sostenidos que Jos que los precedieron en el Altiplano central de ‘México, Sin embargo, em comparaciOn con Ias Juchas que se iniciaron-en- 1910, las del siglo 20x fueron breves y regionalmente aisladas. Con todo, los motivos del descontento campesino cambiaron muy poco. Las protestas se guian centrindose en las limitaciones que las élites terratenientes, respaldaw. Sas por los estados, imponfan a la autonomfa de la comunidad, Tal vera expaneiéa de las actividades comerciales agudiz cada vex mas ese descon: feato conforme progresaba cl siglo xTK. Pero la expansién de Ja violencia campesina también se relacionaba directamente con sus camibiantes relacioz nes con la vida politica nacional. Con los alzamientos de fines de la déca ‘de 1860, los campesinos del centro de México mostraron que tenfan coi Ciencia de los acontecimientos politicos nacional al planteat una y otra vez ‘sus reivindicaciones en los momentos en que las lites nacionales estabaii- es - Yidblemente debilitadas 0 divididas, Pero ni los campesinos de Chalco ni los aaa, Ce Existen barsos de exiliados yaquis fuera del vale, de otros lugares participaron en los conflictos politicos nacionales. ‘Perciblan i ora y Arizona. Debido a que su identidad. como claramente las guerras civiles de 1857 y 1867 ‘Sin embargo, por baber esperado que se sesolvieran esos “ dates de rebelarse, se encontraron con un Estado unificado, Tal vez la print Gipal leceion que aprendieron los campesinos en. sus derrotados lovanta Srentos de 1868 y 1869 fue que no podian luchar mucho tiempo contra los cjércitos de un Estado unificado, aunque ese Estado y'sus aliados de la ite, atravesaran graves dificultades econ6micas. ; Seber: Para 1910, los campesinos del centro de México estaban listos para poses) sus objetivos de reforma agraria y su capacidad para mantener una rebeliGi Violenta en el-ceatro de Jos contlictos de la élite politica. Y Jas élites, pro! 7 Gamente divididas, estaban dispuestas a cortejar el apoyo campesino; a parcial por la otra es el origen de la fuerza de los yaquis y.la clave d ‘ supervivencia. Pueblo. agricola e i Ya laverde Re Geincouata Wolenia. Una yer més, los eampesinos no pudierGies gy tnciaaislada, totalmente aurea ened mero, colonial y Iuego mexicana; esto los distingue.de la mayor ‘aelas unt indigenas de México, Pero tuvicron que. pagar un alto:precio [bor su supervivencia cultural: una postura de rebel perman emediados de sigiorvarewadelmntes | Te “as Permanente dex ‘Este ensayo examina las revueltas y la resistencia yaquis alo largo: devcasi 5 REBELION CAMPESINA EN EL NOROESTE: LOS INDIOS YAQUIS DE SONORA, 1740-1976 Evelyn Hu-DeHart Lamnacién yaqui, en: el-estado, noroccidental © goa medeaoa por su polongia y cies tedaraca eteos asimilacin n le sociedad mexicana. Desde que los europecs “seuberon? alos yaquis en 1533, éstos han defendid su identidad tribal por encima lo, y han emprendido mumerosas guerras para no perder sus comoaitndcs, sus, tierras y su modo de vida propio’en el, fértil valle del 15 Fag ra “ede su disputada patria; de hecho, muchos inti salaria ‘ ‘ - s i s porales.ca las hacienda, las minasy los ferrocariles de Sonoray Roose hol ferencia de algunas-otras comunidades indias cate ‘Gipacién de los yaquis ia i Gracin dels Yaqui en una economia més ampli, eh P no vo por resultados acniactn permanente, Lalo Fitario resultante s{tuvo que mediar-entre las élits terratenientss ¥ loses ppesinos para fortalecer su propio poder. La participacién campentit Fuchs de principios del sigho 2x infligi6.ana grave derrota a las éites! tenientes y les devolvié a muchos campesinos la posed de, sehr a ata dle Ba tenis hoos durante na generacén més, En ua mundo de Estadit 73] ¥ slab desde la Independencia hasta principos y s fuertes y economfas comercializadas, ésta cra Ia méxima victoria posible-pa ett Yee final del Porfiriato a la Revolucion Mexicana “ser is 1880), alos campesinos. La destruccién de la vida campesica en el centro de Mi iy [es icevolucionara (1920-1960), Cada petiodo se caractarza por uaa omnis Zico quedé pospuesta hasta mediados del siglo xX 2 sehveltas importantes y se distingue por una forma diferente devresistencia. Ba 40; Herbert S. Klein, “Peasant Communities in Revolt: The ‘Tzeltal Republic of 1712”, Pacific Historical Review, 1965, pp. 247-68, Ver también Heari Favre, Chan- ‘gemant et Continuité chez les Mayas du Mevique, Baris, 1971, p. 43; Robert Wassers- trom, Class and Society in Cental Chiapas, Berkeley, 1983, cap. IV, pp. 69-106; Ant. *. nlo Garcia de Leon, Resistencia y utopia, Era, México, 1985, ol. 1, pp 78-87; Victoria R. Beicker, The Indian Christ, The Indian King: Austin, 1981, pp. 55-69. eae fi: Ver Moisés Gonzélez Navarro, Raza y tera: La guerra de casas y el hene- ques, México, 1970, pp, 34.37; Nancy M. Fariss, Moya Society Under Colonial Rule. ‘The Collective Enterprise of Survival, Princeton, 1984, pp. 66-72. 42 Bricker, The Indian Christ ot, p. 74. 43, Ibid, pp. 74-76, 44. Wasserstrom, Class and Society, cit, cap. 1V. 45. Nancy Farriss, Maya Seciey, ct, pp, 366-75. Farris, que ba avalizado estas “tendencias a largo plazo, no afrima que bubiese niagtin vigculo entre ells el leva. tamiento de Canek. Capitulo 4 “ saqgmcssiciotee 1, Vet, por elemplo, Sivio Zavala, La encomienda indian Centto a8 EtG EE Histécicos, Madrid, 1935; Lesley Byrd Simpson, The Encomienda in New Spain, edicida,.” revisada, University of California Press, Berkeley, 1966; Frangois Chevalier, La formas’? idm de los grandes latifundis en México, Fonda de Cultura Beondmica, México, 197 Charles Gibson, The Aztecs Under Spanish Rule, Stanford University Press, Stanford. 4- 1964 (ed. en espatct: Los aztecas bajo él dominio espaol, 1519-1810, Sigloxx1, México E 1967); William Taylor, Landlord and Peasant in Colonial Oaaca, Stanford Universif = Press, Stanford, 1972; Bric Van Young, Hacienda and Market in Eighteenth-Cetiur. = Meaico, University of California Press, Berkeley, 1981; y Cheryl Martin, Rural Society ‘in Colonial Morelos, University of New Mexico Press, Albuquerque, 1985. ssh 2, Wiliam Taye, Drinking Homicide and Rebellion in Colonial Mexican Villages 3." Stanford University Press, Stanford, 1979 (ed. en espatiot: Embriaguer, homicidiy rebelidn en las poblaciones colcniales mexicanas, FCE, México, 1984), y Jobn ‘Tuting; {Creole Mexico: Spanish ites, Haciendas, and Indian Towns, 1750-1810” (tests doey=<= (oral inédita, University of Texas, Austin, 1976). ogee 3. Los papeles de Riva Patesio se encueatran oa lo Benson Latin American lection Library de la Universidad de Texas, en Austin. Estdn, acompatiados, de: umask excelente indice, Jack Autrey Dabbs, The Mariano Riva Palacio Archives, 3 vol Bditorial Jus, México 1967-1972, = ° 4. Leticia Reina, Las rebeliones campesinas en Mézico, 1819-1906, Siglo’ 100, 1980, pp. 64-82. aa 3. Esta interpretacin de la estructura agraria colonial re(leja mi andlsis en procesd:: para ona obra ticuloda 1500-1800". it Simpson, The Encomienda ct; Gibson, The Aztecs, ct; Pegay K. Liss, Mexico’ Uni Spain, 1521-1556 University of Coicago Press, Chicago, 1975; Pedro Carrasto, “Eat 2 sonoma preispénia de Mésxio”,y Jobanna Brodd, “Las comunidades indigent: Mexicana, 24, 1975, pp. 516-11. Mora (1821-1853), Siglo 100, 1968); Moisés Gonzdiez 4asformas de extraccin del excedente: 6p0ca pretispcica colonial”, Florescano, comp, Entayos sobre el desarrollo econdmico de Mésice y Améiica Latina, 1500-1975, Fondo'de Cuttura Ecantmica, México, 1979, pp. 15.33) $4.92 6. Peter Gerbard, *Congregaciones de indios en la Nueva Espata aates de 1570*, Historia Mexicana, 26, 1971, pp. 347-9. es 7. Ver Richard Boyer, "Mexico in the Severteenth Ceatury: Tiassa of Golo Bal Society", Hispanic American Historical Revew, 573, 1971, pp. 455-18. 8, Hsta interpretacion de la estructura de: poder colonial resume el andlisis mds detallado que se encuentra en Tutino, “Create Miexica”, ct. 9. La nocién de expotacisn simbidticaesté desarrollada por primera ver en Tut Ibid. Uns perspectiva similar aparece en Angel Palerm, “Sobre a formacicn del dutern, colonia: spuntes para una discusiéa”, en Florescano, comp., Ensayos, cit, pp. 93-126. 30. Ver Taylor, Drinking, ct. - UL. Lucas Alaméo, Historia de Méico, 255.56, 12, Ver Michae! Costeloe, La primera repiblica federal de Mésico, 1824-1835, Fondo de Cultura Econdmica, Mérico, 1975, 7 Carlos San Juan Victoria y Sabadot Veldaquez Ramtrez, “La formacién del Estaio y las poiticas econdmicas, 1821. 1880", en Ciro Cardoso, comp, México en el sigio xm 1821-1910, Nueva imsgeo, “México, 1980, pp. 66-76. 13. El resto de esta secciGn sintetiza y reinterpreta mi anterior ensayo, “Hacienda Social Relations in Mexico: The Chaleo Region in the Era of Independence”, Hispa- nic American Historical Review, 553, 1975, pp.496-528. 14, Asuncién Lavrin, “Problems and Policies in the Administration of Nunneries in Mexico, 1800-1835", The Americas, 28:1, 1971, pp. 55-77; Michael Casteice, ‘Chiarch Wealth in Mexico, Cambridge University Press, Cambridge, 1967. 15. Peter Gerhard, “La evolucion del puebio rural mexicano, 1519-1975", Historia ambos de Earique vo. 1, Editorial Jus, México, 1972, pp. 46, Mariano Riva Palacio, papeles (citado 2 partir de aqut como MRP), 1171, 11 de cotubre de 1841; 1180, 24 de octubre de 1341; 1447, 30 de mayo de 1844; 2447, 12 de noviembre de 1849; 3507, 28 de noviembre de 1849. 17. Gloria Pedrero Nieto, “Un estudio regionel: Chaloo”, en Enrique Semo, . = Comp, Siete ensayos sobre la hacienda mexicena, 1780-1880, Instituto Nacional de Antropologia¢ Historia, 1977, pp. 99-150. 18. MRP, 3875, 24 de febrero de 1850; 4281, 9 de junio de 1850; 4284, 10 de junio de 1850; 4332, 19 de junio de 1850; 4394, 3 de julio de 1850; 4398, 3 de julio de 1850. 19. Charies Hale, Mexican Liberalism in the Age of Mora, 1821-1853, Yate Univet- sity Press, New Haven, 1968 (ed. en espatiot: £1 liberalismo mexicana.en la época de Navarro, Anatomia del poder en México, 1848-1853, El Colegio de México, México, 1977. 20. MRP, 5915 ¢, 4 de junio de 1856; 7079, 12 de octubre de 1857. 21. W. Bullock, Sie Monihs’ Residence an Travels in Mexico, 1824, reimpresién en Kennicat Press, Port Washiagton, N.Y. 1971, p. 227 (ed. en espatiok: Seis meses de residencia y viajes en México, Banco de Mézico, Mézico, 1983); MRP, 5871, 10 de marzo de 1856; 5915h, 13 de julio de 1856, 5915k, 19 de agosto de 1856; 5915a, 9 de eat 22 MRF, 5915i, 5 de agosto de 1856; Jorge Basave Kunhardk, ‘ela técnica agricola en las haciendas”, en Semo, comp, Siete Soytembre ce 1848; 3507, 28 de noviembre de 1849; 3540, 4 de diciembre de 1845, Joh 20 de sero de 1850, 3912, § de marzo de 1856; 4254, § de junio e 1850, 4285, 10 de junio de 1850; 7445, febrero-marzo de 1862. 25: MRP, 59151, 26 de agosto de 1857, MRP, 3091, 20 de agosto de 18495 5915b, 20 de mayo de 1856; 5915c, 4 ae Junio de 1856; 5915g, 6 de julio de 1856. 27. MRP, 3080, 31 de julio de 1849; 44t Giciembre de’ 284s abril de 1857, 28. MRP, 5015, 6 de febrero de 1851; 5177, 13 de mayo de 1851, 29. MRP, 5653, 15 de marzo de 1855; 5685, 27 de marzo de 1855; 6556, 12 e777 mayo de 1856, 6627, 4 de junio de 1857. 30, Ver Nelson Reed, La guerra de casias de Yucatdn, Ba. Era, México, 1985¢77 Moisés Gonzalez Navacro, Raza y tierra, Hl Colegio de México, Mésieo, 1976; Toth Ttigo, “Redesign indigena en Tebuantepec", Cuadernos Polttices, 4, 1980, pp. 3%- 101,y Reina, Rebeliones, cit, pp. 233-34, 240-42, 291.302. 31, Femanto Diez Diaz, Caudillos y caciques, E} Colegio de- México; 19729 171-15; Reina, Rebeliones, ct, pp. 85-120, 169 32, Gonzdlec Navarro, Anatomia, cit, pp. 165-66. 7 33, MRP, 3986, 18 de marzo de 1850; 4091, 29 de abril de 1850; Reina, Rebel: nes, ct, pp. 61,63, 123, . 34, Toid,, pp. 157-70. . 35. Gonzdlez Navarro, Anatornta, cit. pp. 162-65; Francisco Pimentel, Media: sobre las causas que han originado ta situacién actual de la raza indigena de Mec ‘medios de remediarla, Imprenta de Andrade y Escalante, 1864, pp. 203-04. 36. MRP, 5484, 16 de octubre de 1851; 5683, 15 de marzo de 1855, 37. MRP, 3046, 5 de marzo de 1849; 3080, 31 de jalio de 184 721, 13 de je 1849; 3723, 14 ce enero de 1850; 3912, 5 de marzo de 1850; 4254, 5 de junic: de-1850:"+* 38 MRP, 7113, 27 de octubre de 1857. 39. MRP, 3270, 11 de octubre de 1857. 4, MIRE, 3804, 31d enero de 1850 41 MRP, 3902, 4 de marzo de 3 ‘2. MRE, 4955, 10 ae enero de T8St, MRE, SOI, 6 de febrero e 1851, 43. 5023, 8 de febrero de 1851; 5172, 10 de mayo de 1851; 5178, 13 dé nays 1851, 44. MRP, 5177, 13 de mayo de 1851; 5178, 13 de mayo-de 1851750233 mayo de 1851; 5207, 2 de junio de 1851. . : 45. MRP, 5189, 23 de mayo de 1851. Rela cee 46, Gonadlee Navarro, Anatomia, cit, pp. 123-24: . 47. MRP, 3575, 10 de diciembre de 1849. : 48. MRF, 3902, 4 de marzo de 1850; 4852, 13 de julio de 1850; 4718, cctubre de 1850; 4815, 29 de ccrabre de 1850. $ So. MRE, S207, 2 de junto de 1851; 543,27 de dceca 2 de junk 5543, re de 1851, Sey ree ae pode i Gf naz oe 1856; 72558, 19 de eneto de 1859. nortan ee een it, p. 22531; Donald I: Fase a fica ce Sore orienta en las comunidades “adigeas, 1182" eee et PO i poltica et, pp 3a: Sonzslez Navarro, ii, . 163; Fase, bi, pp. 625-26, & Una comunidad agraria en ef 1857, México, 1857, pp. 3-6. 37; ids Po. 48, 25, 70-71, 324-89; Fase, “Le poltica, et, pp. 63234; 7.6. Powell, El iberalismo y el ‘en el centro de México, 18 cretar 4 Eaucacn Pica, Mesico 1974p 140 mee 58. Ver Powell, ibid, pp. 83-84, 59. MRP, 5915k, 19'de agcrco de 1856, 60. MRE, 5915u,2 de septiemore de 1856. ia To REE teratoma, ct, p. 15; Pedrero, *Chaleo" cp 110, Lexeo, Memo. 1a, 1957, pp. 324.89. (62. Lerdo, opvtit, pp. 113-16; 156-61. 63. Ibid, pp. 58-59. G4. MRB, 6821, 13 de abit de 1857, 5. Powell, Ei libration, p. 82. $66 Teid, pp. 81-89; Fraser, “La poltica”, ct, p. 627, MRP, 6350, 28 de marzo de 1857; 6435, 18 de abril de 1857; 6458, 24 de abr de 157, $7. Sobre el desarrollo de 1a poltica rural naciooa, ver Paul Vancerwood, Dison $ra7d Progress: Bandits Police and Mexican Devdopmens, University of Neteenca reste itcln, 1981 (ed. en espatot Desorden y pogrso. Banos, potas y dow Illa mexicano, Siglo xxi, Mezco, 1986), ‘68. MRP, 6473, 27 de abril de 1857. 69. MRP, 6718, 4 de jotio de 1857; 7007, 24 de septiembre de 1857; 7079, 12 de Seabre de 1e57; 7098, 19 de octobre de 1857; 710%, 21 de ccrubre de 1857; 1108, 24 Ge octubre de 1857; 7113, 27 de oetubre de 1857; 7175, 4 de enero de 1858, 728, 2 de septiembre de 1858; 7232, 3 de noviembre de 1858; 7237, 12 de noviem, bre de 1858; 7241, 2 de diciembre de 1858; 7242, 3 de diciembre de 1856, 7245, 6 do Siclembce de 1858; 7246, 18 de diciembre de 1858; 7248, 31 de diciembre de 1855, 7252, 8 de enero de 1859, 7253, 8 de enero de 1859; 7254, 9 de enero de 1859; 7255, 7256, 10 de enero de 1859, 10. MRP, 7255a, 10 de enero de 1959; 7256, 10 de enero de 1859; 7260, 16 de ‘enero de 1859; 7262, 21 de enero de 1859; 7268, 22 de enero de 1859: 7288, 16 de mayo de 1859; 7306, 22 de diciembre de 1859; 7307, diciembre de 1859, 7402, 25 de ‘mayo de 1951; 7419, 12 de agosto de 1861; 7422, 3 de septiembre de 1861; 7441, 22 3B tors Mexicana, 21:4 * | de enero de 1862; 7457, 21 de abril de 1862; ver también Vanderwood, Disorder and Progress, cit. ° : ‘1, MRP, 7526, 5 de febrero de 1863; 7527, 7 de febrero de 1863; 7538, 10 de febrecpisie. 1863; 7531,-25 de febrero de 1863. 7533, 11 de marzo de 1863; 7543, 25, 4a, SF sisted Be 1863; 7555, 13 de mayo de. 1863; 7558, 2¢ de mayo de 1863: 7559, 25 Pra "yde mayo de 1863; 7597, 16 de agosto de 1864; 7605, 2 de diciembre de 1864; 7613, ‘27 de enero de 1865; 7679, 6 de julio de 1866. ao ‘72. MRP, 7113, 27 de octubre de 1857. 7B. MRP, 7212, 8 de junio de 1858; 7217, 19 de julio de 1858. 74, MRP, 7331, 22 de junio de 1860; 7336, 11 de julio de 1860; 7352, 30-de noviembre dé 1860. 15: MRE, 7440, 21 de enero de 1862 7712, 4 de enero de 1867; TAIZ, § dé > enero de 1867; 77128, 6 de enero de 1867, 7 76. MRP, 7313, 1°. de marzo de 1860; B019A, sf. 77. MRP, 7682, 20 de julio de 1866. 78. Ver Tutino, “Creole Mexico”, cit, y “Hacienda Social Relations”, cit, 79. MRP, 5915, $ de mayo de’ 1856; 5915e, 4 de junio de 1856; '5915d, 10 de junio de 1856; 7175, 5 de enero de 1858, ‘80. MRP, 7290, 1868. oe 81. MRP, 7595, 23 de mayo a 18 de Junio de 1864; 7595e, 2i de junio de 1864; 7612, 8 de enero de 1865; 7615, 9 de febrero de 1865; 7670, 28-de-mayo-de 1866.qan “"Yoventario de los enseres y mucbles de la Hacienda de Jalpa... agosto de 1866", Papeles de los Condes de Regla, Washington State University Archives, Pullmag,~ =f Washington. . 82."Yoventario", cit, p.47, + 83, Powel, El lberalimo, cit, pp. 131-32; Fraser, “La poltica”, 84, MRP, 7721, 28 de marzo de 1867, 7723, 15 de abril de 1867. E 85. Reina, Rebeliones, cit, pp. 81-82. as 86. John Hart, Anarchism and the Mexican Working Class, 1860-1931, The Uni: versity of Texas Press, Austin, 1978, pp. 19-20, 32 (ed. en espaol El anarguinmo ya clase obrera mexicana, 1860-1931, Siglo xxt, México, 1978). she 87. Reina, Rebeliones, cit, p. 71- 83. MRP, 7824, 4 de febrero de 1868. 89. Reina, Rebeliones, cit, p. 66. 90. Ibid, p. 72. 91. MRP, 7836, 24 de febrero de 1868. 92. MRP, 7840, 1 de marzo de 186; Hart, Anarchism, ct, pe 34 93, Reine, Rebeliones, cit, pp. 72-74. 94, Ibid, pp. 74-75. A 95. MRP, 7852, 13 de marzo de 1868. : 96. Ibid. 97. Reina, Rebeliones, cit, pp. 66-67. . 98. Ibid, pp. 75-76. “ «SB MRR 7865, 17 6e marzo de 1868; 7859, 19 de marzo de 1868; 7872, 24:4 abril de 1868; 7873, 25 de abril de 1868. 100. Reina, Rebeliones, cit, p. 67; MRP, 7886, 2 de junio de 1868, 101. MRP, 7887, 2 de junio de 1868; 7888, 3 de jasio de 1868, 102. MRE, 7889 4 junio de 1868. oe 103, MRP, 7892, 7 de junio de 1868; 7893, 9 de junio de-1868; 7896, 9 de junio a 1868 785 2 uno de a Td, 13 de joe aa ar eee 1868; 7901, 14 de junio de 1868; 7904, 19 de junio de 1868; Reins, Rebeliones ot, Pp. 104. MRP, 7904, 19 de junio de 1868; Reina, Rebeliones, cit, pp. 77-78.—- 105. Reina Ibid, pp. 69-70, 80-81, 106. Borique Florescano, comp., Andlisishistérico de las sion del Pian Nacional Hiréulico, Méxica, 1980, pp. 106-07, 107. MRP, 7290, 1868, - : 108. MRE, 7911, 7 de jotio de 1868; 7916, 27 de jalio de 1868; 7921, 4 de agosto Ge 1868; 7935, 10 de septiembre de 1868; 7973, 3 de enero de 1869; 7990, de febrero de 1869; 7994, 16 de febrero de 1869, 7996, 22 ds febrero de 1869. 109. MRP, 8048, 5 de septiembre de 1869; 8065, 26 de septiembre de 1869; 8109, 12 de octubre de 1865; 8111, 12 de oewbre de 1869, 8154, 18 de octubre de 1869; 8181, 24 de octubre de 1869; 8247, 24 de diciembre de 1869; 8331, 21 de diciembre de 1869; Reina, Rebeliones, cit, pp. 132-35. 110. Se observa un desarrolo temporal semejante en'los origenes de la revueha ‘de Hidalgo en 1810. 111. MRF, 8150, 17 de octubre de 1869; 8844, 19 de septiembre de 1870; 8979, 33 de diciembre de 1870; 9115, 14 de febrero de 1871; 9195, 1 de meyo de 1871; 9540, 3 de octubre de 1871; 9754, 1 de diciembre de 1871. 112. MRP, 9007, 2 de enero de 1871; 9990, 19 de febrero de 1873, 113. Pedrero, “Cualeo", ct, pp. 127, 128, 132, 135. 114. Ibid, pp. 106, 111, 127-50. 11S. Ver especialmente Arturo Warman, .. ¥ venimos a contradecir, Rdiciones-de a Casa Chata, México, 1976. 116. Menegus Bornemana, “Ocayoacac", cit, pp. 92-112, sequtas en México, Comi- Capitulo § 1. El planteamiento de esta seccion se basa en ni monogratia: Missions, Mines ‘and Indians; History of Spanish Contact with the Yaqui Nation of Northwestern New ‘Spain, 1533-1820, University of Arizona Press, Tucson, 1981. Cuando sea necesario o e particular interés, citaré los documentos o fuentes expectices. 2. Durante todo el periodo jesuita, mientras fos yaquis permabecieran bajo el sistema de las misiones, no estuvieron sujetos a tributo para ol Estado secular. A ~ partir de 1767, les Borbones intentaron recaudar tributos de los yaquis, pero nunca Jo lograron, y fnaimente abendonaron el iteato. ~ 3. La Pastels Collection de Roma, que se encuentran ea microfilm en la Kaights cof Columbus Vatican Fit Library de ta Universidad de St. Louis (St. Lous, Missou- 1), ba reunida la mayoria de fos documentos relatives ala rebelida yaqui de 1740. EL ocumento ms importante de la colecci6a es en realidad una recopilacidn de copias de todos fos documentos importantes def caso. En junio de 1744, et virrey Conde de 305 8150, 17 de octubre de 1869;

También podría gustarte