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Violenc

ia
Basada
en
Género
CICLO DE LA VIOLENCIA FAMILIAR

Para representar la dinámica de la violencia familiar es necesario considerar su


carácter cíclico, este fue establecido inicialmente por la psicóloga estadounidense
Lenore Edna Walker quien define y documenta el ciclo de la violencia conyugal y el
síndrome de la mujer maltratada, el cual es aplicable a todo el fenómeno de
violencia en su conjunto.

Este fenómeno comprende 3 fases (VER GRAFICO)

1ª FASE: ACUMULACIÓN DE TENSIONES

Sucesión de pequeños episodios de conflicto que lleva a tensiones crecientes en la


relación de pareja, entre padres e hijos, con un incremento constante de los niveles
de hostilidad. Durante este período se produce un gran desgaste de la energía
psicológica, ya que sus vidas giran en los intentos para hacer del hogar un lugar
apacible y tranquilo, es posible que la víctima apresure el estallido porque prefiere
enfrentarlo lo más pronto posible en vez de seguir sufriendo la espera.

2ª FASE: EPISODIO AGUDO O EXPLOSIÓN

El agresor insulta y denigra a la víctima, la ofende criticando su cuerpo, sus acciones,


le pone sobrenombres descalificantes, la amenaza con agredirla físicamente, con
matarla o suicidarse, crea un clima de miedo constante y de terror, la acusa de tener
la culpa de todo lo malo que ocurre en la casa y en su vida, tiene una duración
diferente y puede prolongarse de minutos a horas o días, aunque es más corta que
las otras etapas, es la más brutal y de mayores consecuencias, es en esta etapa
donde se presentan las principales y más severas lesiones después de esta fase es
cuando las victimas acuden a los establecimientos de salud.

3ª FASE LUNA DE MIEL O RECONCILIACIÓN

Al descargar el abuso, el agresor reduce su tensión, reconoce que la tiene


controlada, que es manejable y suele pedir perdón por “haberse excedido” y promete
no volverlo a hacer, en esta etapa se produce el arrepentimiento; a veces es
instantáneo, sobreviniendo un pedido de disculpas, dice sentirse avergonzado y dice
que nunca más volverá a ocurrir, otras veces demora unos días en pedir perdón o
disculpas, luego durante un tiempo, él se dedicará SOLO a complacerla y se
esmerará por hacerla dichosa, le dará regalos, la invitará a salir fuera a cenar o
bailar, será permisible, le dirá que la ama y luego con el tiempo se reiniciará el ciclo
de la violencia.

En el año 2010 se realiza algunas modificaciones al ciclo de la violencia, agregándole


algunas fases con más detalles a fin de determinar con mayor precisión la fase en
que se encuentra la víctima y el peligro que corre.
ATENDIENDO LA VIOLENCIA BASADA EN GENERO

INDICADORES DE LA VIOLENCIA

De acuerdo al tipo o tipos de violencia ejercida los indicadores que podemos


observar son los siguientes:

Violencia Física:

Hematomas y contusiones inexplicables.


Cicatrices, quemaduras.
Fracturas inexplicables.
Marcas de mordeduras de adulto.
Lesiones de vulva, perineo y recto.
Laceraciones inexplicables en boca, mejilla, ojos.
Quejas crónicas sin causa física: cefalea, problemas de sueño.
Enuresis.
Uso frecuente del servicio de emergencia.
Heridas abiertas por armas de fuego, objetos contundentes o armas punzo
cortantes.
Dolor al miccionar.

Violencia Psicológica:

Extrema falta de confianza en sí mismo.


Exagerada necesidad de ganar o sobresalir.
Demandas excesivas de atención.
Mucha agresividad o pasividad.
Aislamiento, retraimiento (Falta de contacto con otras personas).
Temor a los padres o de llegar al hogar.
Intento de suicidio.
Tristeza o angustia marcada.
Llanto frecuente.
Bajo rendimiento académico.
Tartamudeo en niños.
Problemas de conducta(robo, fuga del hogar o escuela, rebeldía, desobediencia,
mentira).
Cambios bruscos en la conducta escolar.
Llegar temprano a la escuela o retirarse tarde.
Ausentismo escolar.
Uso frecuente de tranquilizantes o analgésicos u otras drogas.
Abuso Sexual:

Irritación, dolor o lesión de la zona genital.


Hemorragias vaginales.
Embarazo precoz de adolescente.
Embarazo no deseado.
Conocimiento sexual y conductas inapropiadas para su edad.
Amenaza de aborto o abortos.
ITS

Maltrato por Negligencia:

Dice que nadie se preocupa por él o ella.


No recibió vacunas o atención de salud.
Esta descuidado en higiene y aliño personal.
Está cansado, no mantiene atención, se duerme.
Roba o mendiga (pide dinero).
Usa drogas.
Ausentismo en la escuela.
Deserción escolar.
Accidentes y enfermedades muy frecuentes.
Falta de peso y pobre patrón de crecimiento.
Falta de estimulación para el desarrollo.
ENTREVISTA E HISTORIA CLÍNICA

El sistema de salud ha servido históricamente para identificar y prevenir problemas


de salud pública. Los modelos desarrollados para prevenir otros problemas
crónicos de salud, pueden ser aplicados efectivamente a la violencia doméstica. La
evaluación de rutina orientada a la detección temprana de víctimas de violencia, y
con capacidad de detectar usuario(a)s, tengan estos o no síntomas aparentes, es
un primer punto de partida para fortalecer el acercamiento de la práctica médica
hacia la violencia doméstica.

La evaluación de rutina, cuando es conducida frente a frente y realizada por


profesionales calificados, incrementa sustantivamente la identificación de la
violencia doméstica. Cuando las víctimas de violencia doméstica o aquellas
personas que se encuentran en riesgo de enfrentarla, son identificadas
tempranamente, los proveedores pueden ser capaces de intervenir para ayudar a
las personas a comprender sus opciones, vivir de forma más segura dentro de la
relación que mantiene o abandonar la relación en condiciones de mayor seguridad.

Dado que muchas veces el maltrato permanece escondido o se da de manera


encubierta , no permite un reconocimiento cabal, es necesario entonces reconocer
ciertos indicadores básicos y conductas que hacen explícita la violencia.

Por otro lado, es pertinente reconocer que dar juicios de valor sobre la violencia o
la víctima, suele ser parte del sistema de salud y que, como tal, podemos ejercer
influencia o ser influenciados por el tipo de interacciones que se desarrollan con los
usuarios. Lo importante es actuar en todo momento con absoluta imparcialidad,
sin valorar o condenar la conducta de maltrato, y actuar como puente para una
eficaz ayuda.

¿CÓMO EVALUAR A LAS VÍCTIMAS DE VIOLENCIA FAMILIAR?

LA ENTREVISTA

Cómo mínimo la evaluación sobre VBG debe:


1. Ser un encuentro cara a cara con el proveedor de servicio.
2. Ser directo y libre de prejuicios
3. Tener lugar en privado, sin que amigos o parientes de las(os) usuarias(os) se
encuentren presentes y en lo posible que los niños (hijos) tampoco. Si esto último
no fuera posible, limitar la presencia de ellos a dos.
4. Ofrecer confidencialidad; las(os) usuarias(os) deben saber que lo que hablan
tiene carácter confidencial, asimismo, conocer los límites de esta confidencialidad,
incluyendo lo que se registra en la historia clínica.
5. Si fuera necesario, usar intérpretes neutrales, no familiares ni amigos.
6. Si la víctima es menor de edad, debe estar acompañada por otro profesional de
salud, pero sin presencia de familiares u otro tipo de acompañantes.

Una consulta puede ofrecer a las personas la única oportunidad para detener el
ciclo de violencia, antes de que ocurran lesiones más graves, y esta intervención
se inicia al solicitar información.

Ofrecerle a la mujer una experiencia diferente, donde ella es respetada y sus


opiniones son tomadas en cuenta, que le permite saber que no merece ser
maltratada, que le ofrece la posibilidad de contar con apoyo y seguridad y que la
alienta a que tome sus propias decisiones y opciones, es en sí mismo un hecho
terapéutico y constituye un paso importante.

Cuando la víctima esté más calmada, se procederá a llenar los formatos de


evaluación y/o la historia clínica. Los aspectos que deben incluirse son:

Identificación.
Estado general
Estado de salud emocional
Historia de violencia.

Historia Clínica

1. IDENTIFICACIÓN

De la Víctima: Apellidos y nombres, dirección, fecha y lugar de


nacimiento, instrucción, ocupación, estado civil, tiempo de unión, (como
conviviente, casada, en situación de enamorada o novia), número de
hijos, adicciones.

Del Agresor o del presunto agresor: Nombres y apellidos, edad, lugar de


nacimiento, instrucción, ocupación, adicciones, parentesco (esposo,
conviviente, situación de enamorado o novio).
ESTADO GENERAL

Efectuar un diagnóstico no siempre es sencillo. En particular en el caso de violencia


familiar y maltrato infantil que como ya hemos dicho suele ser encubierto. Es
importante realizar una adecuada anamnesis acompañado de un prolijo examen
físico y la profesional observación del comportamiento de la persona y sus
acompañantes (si hubiesen).

Efectuar una completa anamnesis ayudará a entender los cambios físicos y/o
psicológicos sobre todo cuando el padecimiento data de largo tiempo atrás.

ESTADO FÍSICO

ESTADO DE SALUD FÍSICA DEL (LA) AGREDIDO(A)

Considerar talla, peso, apariencia física y señas particulares. En caso de niño/a, se


debe considerar estado de nutrición e hidratación.

El personal que hace la evaluación debe estar alerta a las siguientes lesiones que
podría presentar una víctima de violencia:

Hematomas, laceraciones, equimosis. fracturas, heridas,


esguinces, quemaduras, traumatismo encefalocraneano,
lesiones musculares, luxaciones, trauma ocular, raspaduras.

En mujeres embarazadas: lesiones en pechos, abdomen y área


genital

Otros problemas de salud recurrentes: infecciones vaginales y


del tracto urinario, dolores pélvicos, dispareunia.

Problemas relacionados con la salud mental: depresión,


ataques de pánico, síntomas de ansiedad (palpitaciones,
temblor, sudoración), reacciones típicas de estrés post-
traumático (pesadillas, revivir el episodio de violencia), abuso
de alcohol y de drogas (psicofármacos).

Explicación de las lesiones: observar si las heridas coinciden


con su relato, por ejemplo: si menciona que se golpeó con la
puerta, razón por la cual tiene el ojo con equimosis (morado),
y sin embargo se observan moretones en brazo y/o cuello, lo
que no justificaría el relato.

Graficar lesiones y describir detalles: todos los datos deben ser


exactos y estar detallados lo más claro posible, para evitar
malas interpretaciones. También es importante poder
graficarlos en el mapa corporal.

Otros indicadores que los proveedores deben tomar en cuenta, sobre todo cuando
se sospecha de abuso sexual:

Irritación, dolor o lesión de la zona genital


Hemorragias vaginales
Embarazo adolescente
Conocimiento sexual y conductas inapropiadas para la edad de la persona
Amenaza de aborto o historia de abortos
Infecciones de transmisión sexual

El proveedor debe observar que en las víctimas de VBG existe un patrón de


lesiones. Hay un “mapa corporal” diferenciado de lesiones en cabeza, cara, tórax,
mamas y abdomen. (Ver gráfico de “mapa corporal”) / Anexo Guía de lesiones
2014

ESTADO EMOCIONAL
Aspecto general: considerar presentación (higiene y arreglo personal) y postura
corporal.
Observar la conducta de la persona cuando relata la causa de sus lesiones. Si se
muestra indecisa, evasiva, tiene dificultad para mirar a los ojos, parece incómoda,
avergonzada, asustada, desorientada, deprimida, ansiosa, etc.
Por lo general la víctima tiene baja autoestima, Presenta una exagerada
responsabilidad personal por la relación, lo que incluye la autoculpabilidad por la
violencia que ejerce la pareja. También piensa que su responsabilidad es
mantener la unidad familiar aunque tenga que tolerar todo tipo de maltrato. La
razón manifiesta por la cual se mantiene al lado del agresor es “por los hijos” o, en
el caso de los menores, porque temen que sus padres se separen, detectar el
SIMAM.

Otras pautas que pueden indicar la existencia de abuso en menores pueden ser:

demanda excesiva de atención


exagerada necesidad de ganar o sobresalir
temor a los padres o de llegar al hogar
bajo rendimiento académico, ausentismo y/o deserción escolar
tartamudeo
problemas de conducta (robo, fuga del hogar, rebeldía, etc.)
intento de suicidio.

OBSERVACIÓN DEL
COMPORTAMIENTO
Debe observarse la conducta, autoestima, retraimiento y temor, especialmente en
casos de niños y adolescentes. Así como la limitación en la capacidad de tomar
decisiones e indague por signos y síntomas de:

Temor al padre, madre, pareja, hermanos u otros familiares.


Angustia, desesperación.
Tristeza, llanto frecuente.
Agresividad, rebeldía y desobediencia.
Pérdida de interés en sus quehaceres.
Sentimientos de desesperanza e impotencia.
Irritabilidad.
Pobre autoestima: sentimientos de inutilidad, sentimientos de culpa.
Desconfianza, suspicacia.
Excesiva quietud, falta de actividad exploratoria o conducta motora lenta.
Hiperactividad.
Problemas de apetito, problemas del sueño,
Enuresis, encopresis
Problemas de lenguaje (tartamudeo, regresión)
Gestos o intentos suicidas: pasados, actuales.
Uso o abuso de drogas (analgésicos, tranquilizantes) y alcohol.
Juego patológico.
Fugas.
Cambios en la conducta escolar o laboral: bajo rendimiento, ausentismo.

SITUACIÓN SOCIAL Y ANTECEDENTES VBG


HISTORIA DE VIOLENCIA

Es importante que la víctima pueda ofrecer información en la descripción de


aspectos como tipo de maltrato; motivos, frecuencia, estado del agresor,
reacciones de la víctima, si sabe dónde acudir y si hay testigos de la agresión.

ANTECEDENTES: Considerar si la persona fue testigo de violencia familiar y si fue


maltratada de niño/a, así como qué tipo de maltrato sufrió.

DISPOSICIÓN: De acuerdo a lo anterior, algunas veces será necesario derivar al


o la usuario(a) a otras especialidades o instituciones de la Red, también se debe
de incluir el plan de tratamiento.

SI SE ESTA ATENDIENDO A NIÑAS MALTRATADAS

a) Entrevista

Los hallazgos físicos y la sospecha clínica, usualmente no son necesariamente


concluyentes de la existencia de maltrato. Es importante una interrogación
cuidadosa orientada a:

Detectar si hay entorno de violencia familiar. Indagar si existen alguna(s) de las


siguientes situaciones

Problemas económicos
Maltrato a madre o hermanos
Alcoholismo de alguno o de ambos padres
Procreación no deseada
Actos delictivos previos
Pérdida de empleo de alguno o de ambos progenitores
Aislamiento social

Determinar cuáles son los sentimientos de los padres hacia el/la niño/a:
¿Qué problemas tiene con él o ella?
¿Cómo resuelve los problemas con el/la niño/a?
¿Cómo es la disciplina?
¿Se cuida la salud del niño/a?
¿Tiene el niño algún defecto: labio leporino, etc.?

Indagar sobre las circunstancias en que se produjeron las lesiones o descuido


del/la niño/a

Ver si el relato se correlaciona con el daño observado en el niño


Si han ocurrido “accidentes” similares anteriormente
En qué lugar se atendió anteriormente

b) Examen Clínico

Se deben registrar detalladamente todos los hallazgos de la exploración física. Es


importante anotar el tamaño, localización y morfología de las lesiones.

Registrar el estado nutricional, higiene y estado de hidratación del niño, estado de


conciencia y comportamiento.

CONCLUSIÓN DIAGNOSTICA

Terminada la valoración el profesional formulará su diagnóstico utilizando los


códigos referentes al síndrome del maltrato especificados por la 10ma Clasificación
Internacional de Enfermedades y Problemas relacionados con la Salud - CIE 10

T74.0, Negligencia y abandono


T74.1, Abuso Físicos
T74.2, Abuso Sexual
T74.3, Abuso Psicológico
T74.8, Formas Mixtas y
T74.9, Síndrome de maltrato no especificado.
Posteriormente se especificará los problemas y riesgos asociados al diagnóstico.
También se específicará cualquier otro diagnostico concomitante.

Todo ello debe quedar registrado en la Ficha de Atención a la Violencia Familiar y el


Maltrato Infantil. Bajo ninguna circunstancia esta ficha dejará de formar parte de la
historia clínica. El proceso concluye con el llenado de la ficha epidemiológica.

Anexos Ficha de registro de casos de VF y VS - CEM / Ficha epidemiológica

EVALUACIÓN DE RIESGO Y PLAN DE SEGURIDAD


Los profesionales de la salud se encuentran en una posición única que les permite
que sus usuario(a)s lleguen a confiar en ellos(as) y, por consiguiente, les confiere el
poder para ayudarlas de manera significativa o victimizarlas aún más. Tienen el
poder para hacer sentir peor a la víctima, encasillándola como responsable del abuso
o restándole importancia y minimizando la violencia. También pueden ponerla en
mayor riesgo y violar la confianza depositada en ellos(as). Es decir, en vez de
ayudarla, destruirla aún más. No obstante, también tienen la gran posibilidad de
creer en sus usuario(a)s, de reconocer lo doloroso de su situación, de respetar su
autonomía, de ayudarlas a planear su futuro sin correr riesgos y de proporcionarles
suficiente información de lugares donde la pueden ayudar.

Existen ciertos pasos que no pueden ser ignorados después de haber hecho un
diagnóstico de violencia basada en género, y antes que la usuario(a) salga de la
consulta. Hablar de ellos representará unos minutos del tiempo del (la) profesional
pero son necesarios si se quiere que la intervención cumpla su propósito.

EVALUACIÓN DEL RIESGO

El profesional deberá explicar a la usuario(a) , de la manera más sencilla posible, que


existe una relación entre la violencia y el riesgo de muerte (para cualquiera de las
dos partes). Esto debe hacerse con cuidado, evitando ser alarmistas, pero
proporcionando información real sobre los riesgos. Debe expresarle que aunque no
puede predecir si ese será su caso, es necesario valorar el riesgo que corre. De esta
manera ella podrá tomar una decisión más adecuada respecto a su seguridad.

Indague acerca del comportamiento de la persona agresora y ayude a evaluar a la


víctima si éstos representan una amenaza inmediata o mediata para su seguridad.

Pregunte sobre:

Medios que utiliza durante hechos violentos


Presencia de armas o sustancias dañinas en el hogar
Historia de ataque con arma potencialmente mortal
Aumento sistemático de la gravedad de los ataques
Historia de agresión durante embarazo
Antecedentes de historia criminal
Antecedentes psiquiátricos
Amenazas y agresión a familiares, amigos o vecinos.
Del mismo modo, el profesional como precaución básica deberá evaluar los
siguientes puntos:

¿qué tan segura estará si regresa al hogar?


¿qué tan seguros está los hijos e hijas u otras personas que se encuentran a su
cargo?
¿desea o no regresar con el agresor?
¿tiene o no amigos o familiares en donde se pueda quedar temporalmente?
¿necesita o no un refugio de manera inmediata?
¿necesita asesoría legal?
¿necesita apoyo emocional / psicológico?

PLAN DE SEGURIDAD O DE EMERGENCIA

La persona deberá sentir en todo momento que el/la profesional de la salud se


preocupa por su seguridad. Este(a) tiene la responsabilidad mostrar las diferentes
alternativas y preguntarle qué es lo que ella quisiera hacer o quisiera que sucediera,
siempre recordando que la acción a tomar dependerá de la persona. Si ella quiere
regresar a su casa o siente que es seguro hacerlo, de todas maneras se le debe
advertir que es conveniente que tenga un plan de emergencia por si se ve en peligro.

Este consistirá, además de ubicar adónde puede ir con sus hijos, si los tiene, en
tratar de hacer y/o tener lo siguiente:

Tener un juego extra de las llaves de la casa (y del auto, si lo tuviera)


Fijar una clave de comunicación con familiares o amistades de confianza
Tener a mano documentos como: las actas de nacimiento de los hijos, pasaportes,
contratos de alquiler, escrituras de bienes inmuebles, licencia de conducir, etc.
Dinero para algunas emergencias, que puede ser escondido en algún lugar seguro de
la casa (o en casa de algún familiar o amigo(a))hasta que la mujer decida
abandonarla.
Una bolsa o maletín con algo de ropa para los hijos y para ella misma, que pueda
guardar en casa de alguien que sea de su confianza
Documentos de identificación y tarjetas de crédito
CENTROS DE APOYO A VÍCTIMAS Y ALBERGUES, OTROS SISTEMAS DE
AYUDA

Una vez que la víctima reconoce el maltrato, existen varias formas de intervenirlo.
Aunque la mujer no esté lista para abandonar la relación o actuar de alguna manera,
el reconocimiento y la valoración de su situación por parte del proveedor de salud es
algo importante. El silencio, la negligencia y el desinterés implica una aprobación
tácita y/o aceptación de la VBG.

Antes que acabe la consulta, el/la profesional debe asegurarse de que el(la)
usuario(a) se encuentre bien e instarlo(a) a que tome las acciones necesarias para
no correr riesgos y, posteriormente, acabar con la relación de violencia, Se le debe
proporcionar información sobre los centros de apoyo y los diferentes sistemas de
ayuda a los cuales puede tener acceso.

Es deber del profesional estar bien informado sobre los recursos existentes para
brindar apoyo a la víctimas de VBG. Asimismo, se debe advertir a las víctimas que el
proceso de atención puede ser lento, exhortándolas a no desesperarse ya que la
meta final es importante.
Tratamiento de prevención en VBG

TRATAMIENTO FÍSICO

Dependerá del tipo de lesión física que, como resultado de la violencia familiar,
presente la persona. En tal sentido se hará la coordinación o derivación al
consultorio, servicio o establecimiento de mayor complejidad que pueda brindar la
atención requerida.

TRATAMIENTO PSICOLÓGICO

Esencialmente consiste en proporcionar a la persona un espacio psicológico de


escucha y atención que le alivie la angustia y le devuelva la estabilidad emocional
necesaria para continuar con todo el proceso. Los diferentes componentes de este
tratamiento son: Orientación, intervención en crisis, consejería, psicoterapia
(individual y grupal) y participación en un grupo de ayuda mutua.
SEGUIMIENTO

El seguimiento se hará a través de:

Sesiones de orientación y apoyo. Para ello debe ponerse de acuerdo con la


persona y establecer citas. Se recomienda que éstas no deben exceder de seis
sesiones, luego de las cuales refiera el caso a un terapeuta de mayor
especialización si la persona lo requiere.

Visitas domiciliarias, si es autorizada por la víctima, se programará en caso de


que:

La persona no asista; para hacer más segura la cita; para motivarla a continuar.
Se requiera establecer contacto con algún miembro de la familia (o amistad) que
pueda brindar soporte.
Siempre que se haga una visita evaluar los riesgos ya que muchas veces el agresor
controla a la víctima.

CONSEJERÍA

Es un contacto directo y privado con la usuaria, que permite entender en forma


más profunda sus necesidades. Ayuda a clarificar dudas, disminuir temores,
despejar mitos, tabúes y rumores sobre violencia basada en género.

PRINCIPIOS QUE DEBEN REGIR EN LA CONSEJERIA:

PRIVACIDAD / CONFIDENCIALIDAD: El problema debe tratarse respetando el


derecho a la intimidad y a la individualidad Por ello se requiere un ambiente que
garantice este indicador; un espacio iluminado, limpio, ventilado, con decoración
favorable que motive la interrelación. No se recomienda una mesa y/o escritorio
que separe y evidencie verticalidad en la relación del proveedor de servicios con la
persona. El ambiente debe reflejar calidez, asi como las actitudes del consejero
deben transmitir una relación equitativa y horizontal.

SABER ESCUCHAR ACTIVAMENTE: Prestar atención a las personas, víctimas de


violencia, mantener contacto visual apropiado. No interrumpir a la persona
salvo cuando la situación lo requiera
CONSEJERIA SOBRE VIOLENCIA FAMILIAR Y/O ABUSO SEXUAL /
VIOLACIÓN

En todas las usuarias se debe explorar la posibilidad de existencia de los


problemas en mención. En caso de ser detectados, se procederá a realizar la
valoración de riesgo, crear el plan de seguridad, anotar información en la historia
clínica o en el documento designado para este tipo de eventos.

ÁREAS PARA TRABAJAR EN LA CONSEJERÍA

Las áreas para trabajar en la consejería se determinan de acuerdo a las


necesidades o problemas identificados en la entrevista.

FORTALECIMIENTO DE LA AUTOESTIMA

Felicitar su decisión de denunciar la violencia de la cual es víctima.


Decir que puede afrontar la situación, si ella considera que está haciendo respetar
sus derechos.
Mencionar que lo más importante en su decisión por empezar a buscar un cambio
en su vida.
Fomentar su autovaloración.
Motivar (si es el caso) a mejorar su aseo y arreglo personal.
Enseñar a que se diga a si misma cosas agradables por cada logro que tenga, “que
oiga de sí misma lo que quisiera que otros le digan”.
Felicitar por cada vez que afronta adecuadamente una situación difícil en relación a
la que está viviendo.

LOS DERECHOS PERSONALES

Dar a conocer a todas las personas que tienen derecho a:

Actuar de manera que promueva su dignidad y respeto de sí mismo, siempre que


no sean violados los derechos de los demás.
Ser tratado con respeto.
Decir “no” sin sentirse culpable.
Experimentar y expresar sus sentimientos.
Tomarse tiempo para, pensar, reflexionar y decidir.
Cambiar de opinión.
Pedir lo que quiera o desee.
No hacer más de lo que humanamente es capaz de hacer.
Solicitar información.
Equivocarse.
Sentirse bien consigo mismo.
DSRR

El Derecho a la Vida
El Derecho a la libertad y la seguridad de la persona
El Derecho de igualdad, y de estar libres de toda forma de discriminación.
El Derecho a la Privacidad
El Derecho a la Libertad de Pensamiento
El Derecho a información y Educación
El Derecho a optar entre contraer matrimonio o no, y a planear una familia
El Derecho a decidir tener hijos o no tenerlos, o cuándo tenerlos
El Derecho a la atención de la Salud y la protección de la Salud
El Derecho a los beneficios del Progreso Científico
El Derecho a la libertad de reunión y a la participación política
El Derecho a no ser sometido a torturas y maltratos.

AUTOVALORACIÓN

A muchas mujeres les cuesta valorarse como persona por ciertas condiciones:

Por pertenecer y estar insertada en una cultura en la que el modelo a seguir, es


impuesto por el varón.
Por ser miradas y evaluadas con el modelo masculino.
Por que las diferencias con dicho modelo en que las mujeres tienden a verse con
fallas, faltas o carencias en relación con los hombres.
Por que la primera y más significativa figura de identificación de la mujer, es otra
mujer, que por lo general también presenta un elemento clave en la buena o
inadecuada autovaloración que ésta tenga.
Por que gran parte de las actividades de las mujeres son vistas como naturales y
no como un trabajo o un aporte especial.
Por que hay mandatos culturales por ser mujer: las mujeres son humildes,
discretas, pasan desapercibidas, son débiles, delicadas, cariñosas, maternales.

Desde este punto de vista, la pertenencia a un género desvalorizado


culturalmente, va generando la baja autoestima de las mujeres, lo que hace que
se exageren los defectos y fracasos, sin integrarlos con los logros. Esta falta de
valoración hacia sí mismas, tiene efectos directos sobre sus vidas: poco cuidado
del cuerpo, dificultad de expresar deseos, dificultad para evitar y/o enfrentar
situaciones de maltrato, perpetuación de vínculos insatisfactorios por la certeza de
“no ser capaces” de lograr o de tener algo mejor.
VALORIZACIÓN

Valorizarse:
Es quererse y querer a los demás. Es cuidar de su salud física, mental,
emocional y espiritual, así como de la salud de los demás.
Es saber cuáles son sus derechos y deberes, usarlos y defenderlos. Varones
y mujeres tenemos iguales derechos y deberes.
Es descubrir sus cualidades y capacidades, mejorarlas para ser más
eficientes.
Es darse tiempo, expresar sus sentimientos, decir lo que quiere, necesita y
siente.
Es cuidar su cuerpo y decidir sobre él.

TOMA DE DECISIONES

La toma de decisiones es un método racional que permite elecciones responsables


y acertadas; implica considerar las posibles alternativas, ventajas y desventajas,
así como las consecuencias de una elección.

Tomar una decisión puede resultar un proceso difícil si la persona no está


acostumbrada a hacerlo, más aún si desde niña/o aprende a obedecer órdenes y a
callar sus opiniones, es muy probable que se convierta en una mujer insegura, e
internalice sentimientos de timidez. Una vez casada, el esposo rápidamente adquirirá
autoridad sobre ella y tomará las decisiones por ella.
PERFIL QUE DEBE TENER LA PERSONA QUE ATIENDE SITUACIONES DE
VIOLENCIA

EMPATIA: Es entender cómo debe sentirse la otra persona en una circunstancia


especifica.

ACTITUD POSITIVA: Es permitir la libertad de exposición en los términos que la


usuaria tenga.

RESPONSABILIDAD: Comprometerse con las personas, las tareas y con los


pasos a seguir para alcanzar los objetivos acordados.

CONVICCIÓN: Es creer en los principios institucionales y personales, sentir que


se trabaja por la prevención de la violencia basada en género, que se tiene un rol
preventivo y de atención inmediata.

COMPETENCIA TÉCNICA: Es poseer los conocimientos adecuados sobre


violencia basada en género (VBG) y sobre el manejo eficaz del caso que tenga que
tratar.

CALIDEZ: Es responder cálidamente a las necesidades de las personas que han


pasado por situaciones difíciles en el entorno de la violencia.

EFICIENCIA: Es trabajar utilizando el tiempo apropiadamente, ayudando a


resolver problemas de manera realista y logrando que todas las personas utilicen
de manera eficaz sus habilidades y competencias en la solución de sus problemas.

HONESTIDAD: Tener una actitud de respeto hacia la persona y sus derechos.

Otras cualidades del proveedor de servicios que atiende la VBG

Conocer sus propias emociones, creencias y actitudes. Si ha vivido situaciones de


violencia familiar, estar seguro de poder utilizar su experiencia de manera objetiva y
positivamente, de lo contrario, buscar la participación de otro profesional.

Estar informado sobre las instituciones que prestan ayuda a las personas en situación
de violencia familiar.

Ser respetuoso(a) de la persona y sus derechos, considerar los aspectos éticos.

Ser sensible y cálido(a), aceptar a la persona que ayuda sin criticarla o juzgarla y
dejando de lado todo tipo de prejuicios.
Actuar sobre hechos objetivos, evitar en lo posible hacerlo sobre supuestos.

Conocer sus limitaciones y, de ser necesario, solicitar oportunamente el concurso de


otros profesionales o instancias.

Mostrarse siempre dispuesto en el momento convenido, con una presentación


adecuada y una actitud calmada y relajada.

BARRERAS QUE PUEDE PRESENTAR EL PROVEEDOR DE SERVICIOS

Algunas barreras que se presentan en el proveedor y que le impiden una adecuada


intervención en situaciones de violencia familiar son:

Incomodidad por identificación: cuando el(la) proveedor(a) percibe a la mujer


como “igual”, es más fácil que se identifiquen con ellas y, por lo tanto, nieguen la
posibilidad de violencia. Para una persona que viene de una familia sin violencia, es
difícil ver a otra del mismo nivel socioeconómico como víctima de violencia.
También, el diagnóstico de abuso puede estar sesgado porque los proveedores
tengan alguna historia personal de abuso o violencia.

Miedo a ofender: se relaciona con la incomodidad del proveedor por trabajar áreas
que culturalmente se consideran privadas, y se expresa como miedo a ofender a la
mujer. Aunque es cierto que para muchas mujeres es difícil exponer su condición, la
realidad es que en la mayoría de los casos las mujeres quisieran que algún
profesional de la salud las ayudara a solucionarlo.

Incredulidad: aún en el caso de que las mujeres respondan positivamente a las


preguntas en relación con la violencia, los proveedores se resisten a diagnosticar el
caso, expresando que necesitan conseguir información “no sesgada” de otras
personas que no sean la supuesta víctima. Expresan la creencia de que no se puede
acusar a alguien de ser agresor “así nada más” y que es posible que el(la) usuario(a)
esté mintiendo.

Sentimiento de impotencia: los proveedores de salud tienden a declarar que el


problema es demasiado complejo y que no tienen “herramientas para lidiar con él”,
lo cual los frustra y los hace sentir incapaces. En realidad la mayoría de mujeres
maltratadas afirma haber querido que algún(a) profesional de la salud le hubiera
preguntado si era víctima de abuso. Las mujeres necesitan información para tomar
decisiones informadas, y si se pone atención a sus necesidades, se exploran sus
opciones, se les brinda atención médica y se les da alternativas de referencia, se les
ayuda a romper el ciclo de la violencia.

Pérdida de control: hay frustración ante la dificultad de dar seguimiento a una


mujer que se refiere por violencia, y ante la realidad de que los resultados dependen
en gran parte de la misma. A esto se suma la falta de apoyo que vive la mujer tanto
dentro el sistema de salud en general, como en el sistema judicial. Por otro lado,
para muchos(as) proveedores es difícil aceptar que no controlan la conducta de sus
usuario(a)s. Esta necesidad de tener el control y de solucionar los problemas de
manera rápida es uno de los mayores obstáculos para que los proveedores acepten
intervenir en casos de violencia doméstica.

La esclavitud del horario: esta es una de las razones más fundamentadas por los
proveedores de salud, ya que el exceso de trabajo y la falta de tiempo son una
realidad.

Medicalización del problema: la tendencia a interpretar los problemas, ya sean


médicos o no, en un contexto estrictamente médico. Así, la mujer es diagnosticada
como depresiva y el agresor es disculpado porque sufre locura temporal.

Actitudes prejuiciosas: también existe la actitud generalizada que culpa a la


víctima de su situación: “¿por qué las mujeres maltratadas se quedan con sus
agresores?”, o la afirmación: “¡las golpean porque se dejan!”, ejemplifican la creencia
tradicional de que es la responsabilidad de la víctima hacer algo para detener el
abuso. Tales actitudes tienen un impacto determinante en la dinámica de la relación
con la mujer victima de violencia. Un(a) profesional de la salud que normalmente se
comunica de manera adecuada con sus usuario(a)s, puede, a través de una actitud
prejuiciosa, olvidarse de la importancia de la comunicación y de cómo hacerlo
adecuadamente con una víctima de violencia.

PASOS A SEGUIR POR LOS PROVEEDORES DE SERVICIOS EN LA ATENCION DE


LA VBG

Lograr la confianza de la persona, mostrar una actitud de profundo respeto hacia


ella y su familia. Evitar comentarios valorativos(por ejemplo irresponsable).

Ofrecerle la oportunidad de hablar sobre ella y sus problemas, ESCUCHÁNDOLA


ACTIVAMENTE, con interés, tranquilidad, estableciendo contacto visual con ella,
realizando seguimientos verbales a su conversación, y evitando interrumpirla
innecesariamente o haciendo otras cosas mientras ella habla.
Brindarle privacidad en lo posible y hacerle conocer el trato confidencial de su
problema.

Ayudarla a definir con objetividad su o sus problemas.

Propiciar la valoración de su situación presente, sin juzgar, criticar ni


compadecerla, y sin generalizar, ya sea sobre la víctima, el victimario o sobre los
hechos.

Aclarar y verificar cuando algo esté confuso o no se haya sido expresado, de lo


contrario se actuará sobre suposiciones, restando objetividad a las intervenciones.

Permitirle que exprese sus sentimientos hacia sí misma, hacia el resto de los
miembros de su familia y sus percepciones sobre la situación que vive. La víctima
puede sentirse impotente y pensar que no hay solución o alternativas a su
problema, ese es el momento para hacerle un señalamiento de realidad.

Evitar solicitar información innecesaria o tan solo por curiosidad; preguntar sólo lo
necesario para la valoración de su estado de salud.

Valorar integralmente el estado de salud física, psíquica y socio-cultural, así como


la situación de violencia que experimenta en su familia, considerando su severidad,
riesgos y otras personas implicadas o también en riesgo.

Ayudarla a explorar sus alternativas para solucionar su problema.

Ofrecer información y educación sobre posibilidades de ayuda en las Instituciones


de la Red Multisectorial para la Prevención y Asistencia a personas en situación de
violencia familiar.

Explicar cuáles son las funciones de un Grupo de Ayuda Mutua, la intervención de


la DEMUNA (Defensoría de la Mujer el Niño y el Adolescente) a nivel de Perú. La
intervención policial, los consultorios de Salud Mental, la Casa Refugio, los
Consultorios Jurídicos y de otras instituciones que pueden apoyar. Esto ayudará a
la persona, víctima de violencia, a mejorar sus alternativas o a construirlas, si no
las tiene.

Si la persona no puede tomar decisiones necesarias para su seguridad, por su


estado de crisis, se debe actuar y hacer lo necesario para protegerla a ella y a
otros miembros de su familia. ESTO SE DEBE HACER SOLO SI SE DAN ESTAS
CIRCUNSTANCIAS.

Educar sobre Derechos Humanos y Derechos Sexuales y Reproductivos según la


necesidad que se identifique en la entrevista.
Evitar hacer promesas falsas de que TODO SALDRÁ BIEN, esto se puede convertir
en un obstáculo insalvable si es que se presentaran dificultades en el proceso de
cambio, pues perdería la confianza en el proveedor(a).

Explicar que el Proceso de Cambio se va a dar de acuerdo a las condiciones y


formas de su compromiso, que pueden surgir problemas, los cuales se irán
solucionando en la forma más conveniente posible. También decirle que requiere
de tiempo, voluntad y compromiso

Recordarle que el Proceso de Referencia es un componente vital para el soporte


que necesita, pues requiere de intervenciones multisectoriales

Hacer un pequeño resumen de lo que se ha hablado.

Mencionar las cosas positivas que la persona ha hecho para superar sus
problemas.

Estrechar su mano y acompañarla hasta la salida.

Antes de DESPEDIRLA, mostrar interés por volverla a ver o saber de ella, y


acuerde una próxima cita o programe una visita domiciliaria, si es posible. Esto le
servirá para conocer si asistió al lugar donde fue referida.

NO TERMINAR LA VISITA SI LA PERSONA ESTA DESCONSOLADA Y


LLORANDO, ESPERE HASTA QUE SE SIENTA UN POCO MEJOR

REFERENCIA Y SEGUIMIENTO

Para la referencia y seguimiento, se considerarán los criterios de acceso,


oportunidad y capacidad resolutiva de la Institución, de los establecimientos de
salud y de otras instituciones involucradas.

El proceso de referencia y seguimiento se realizará en relación con las necesidades


o demandas de la persona y la severidad del mal estado de salud o del riesgo de
su integridad.

Las instituciones deberán disponer de formatos de referencia y seguimiento.

El profesional responsable de la atención a las personas en situación de violencia


familiar y maltrato infantil dispondrá del directorio de VBG (Listado de instituciones
y organizaciones que atienden el problema de violencia de manera integral) para
poder referir a quienes lo necesiten.
Las instituciones, representadas por el profesional responsable de la atención a
personas afectadas por la violencia familiar deben integrarse a la Red de Atención
Multisectorial Local que atienden el problema, con cuyos integrantes establecerán
los mecanismos de referencia y seguimiento.

De no existir en la localidad una red de atención multisectorial a la violencia


familiar, el profesional responsable de salud mental deberá impulsar su
conformación.

El profesional que observe comportamientos amenazantes en los acompañantes de la


persona atendida en los establecimientos de salud, deberá notificar a la Policía sobre
estos hechos.

QUE ES LA INTERVENCIÓN EN PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA BASADA EN


GÉNERO.
Son intervenciones, mediante las cuales el profesional de salud intenta ayudar y
acompañar a la víctima en sus esfuerzos para enfrentar y resolver su situación de
violencia familiar.

OBJETIVOS

Disminuir la angustia y reemplazar el miedo con la confianza, así como procurar


modificar su ambiente, propiciando un cambio en sus interacciones sociales y en sus
estilos de vida. Para ello se conduce a la interesada a:
Realizar una definición objetiva de su realidad. aún cuando ésta sea muy difícil.
Identificar como su responsabilidad las áreas saludables para potenciarlas,y aquellas
en las que presenta dificultades, para ayudar a superarlas.

Lograr la expresión de sentimientos.

Ayudar a que la mujer haga uso de su red de soporte social e institucional.

Evaluar los logros de las metas que la víctima se haya trazado, a partir de los
resultados obtenidos.

El apoyo emocional que se brinda no intenta lograr niveles de introspección, aunque


durante la intervención la persona reconozca sentimientos, pensamientos y
conductas, y se muestre dispuesta a cooperar.

ABORDAJE

La evaluación de las víctimas de violencia familiar es un proceso mediante el cual


se determina la situación de violencia de la víctima, y se realiza a través de un
protocolo.
Dada la alta prevalencia existente de VBG, deberían ser sujetos de una evaluación
de rutina sobre violencia doméstica todas las mujeres que se acerquen a solicitar
servicios, por lo menos en los programas de salud reproductiva.

QUIENES HACEN LA DETECCIÓN

La detección debe realizarse A TODOS LOS USUARIOS que acuden a los


Establecimientos de Salud; sin embargo, por razones de tiempo, debemos
interesarnos especialmente en los grupos más expuestos: niños/as, adolescentes y
mujeres.
En estos grupos, es altamente recomendable efectuar la detección como parte de
la historia clínica de la usuario(a), de cualquier evaluación de salud, cada vez que
se atienda a una usuario(a) nueva, o; cada vez que la usuario(a) le informe que
tiene una pareja nueva, en cada visita pre y post natal y en cada visita a los
servicios de ITS y VIH.

DETECCIÓN

La detección es la práctica de preguntar con el objetivo de identificar víctimsa de


violencia. Habitualmente, debe hacerse a todos las personas que se acerquen al
establecimiento de salud que hayan sido objeto de maltrato físico, psicológico o
sexual.

PREGUNTAS BASICAS PARA LA DETECCIÓN EN VBG

Muchas mujeres no se reconocen como víctimas de violencia, por lo que debe


hacerse preguntas relativas al abuso doméstico de manera rutinaria. Aunque las
mujeres no aborden el problema por iniciativa propia, muchas se sentirán capaces
de hacerlo si se les pregunta de forma sencilla y directa, sin juicios y en un
ambiente de confidencialidad y seguridad, que incluye la ausencia de la pareja o
de cualquier otra persona.

Aún si en la primera vez la persona no respondiera al mensaje del proveedor de


salud, ya está enterada de la preocupación de éste y que la violencia es una
posibilidad real. Esta preocupación validará sus propios sentimientos y reforzará
su capacidad de pedir ayuda cuando pueda o esté lista para hacerlo.

La detección a realizar por los trabajadores de salud debe ser cuidadosa. No sólo
se debe investigar frente a signos evidentes, también hay aquellos que
permanecen ocultos.

Cuando inicie la aproximación al tema, sin que la persona haya manifestado ser
víctima de algún abuso, puede comenzar utilizando algunas de las siguientes
sugerencias:
“Debido a que la violencia es muy común en la vida de las personas,
especialmente en las mujeres, he empezado a preguntar a mis
usuario(a)s acerca de este problema”.
“Estoy preocupado (a), porque sus síntomas podrían haber sido
causados por alguna persona que le está haciendo daño (pegando,
abusando)”.
“Yo no se si este es un problema para usted, pero muchas de las
mujeres que veo como usuario(a)s son maltratadas por sus parejas.
Algunas de ellas se encuentran demasiado asustadas o incómodas
para poder decir algo de lo que les está pasando, por eso, he
empezado a preguntar sobre el tema a todas mis usuario(a)s ¿está
usted viviendo algún problema de violencia?.”

Si debe hacer preguntas directas porque la situación lo requiere, puede usar las
siguientes:

¿Tiene usted problemas con su pareja (esposo)?, ¿Discute o pelea mucho con su
pareja (esposo)?, ¿Su pareja (esposo) la amenaza a usted de alguna forma?
¿Alguna persona le ha causado estas lesiones?, ¿Ha sido su pareja (esposo)?
¿Alguna vez, su pareja (o su ex pareja, alguien cercano), le ha pegado o usted ha
sentido que le ha hecho daño psicológico?
¿Se siente controlada o aislada por su pareja?, ¿Alguna vez ha sentido miedo de su
pareja?.
¿Siente que usted está en peligro en su propio hogar?, ¿Piensa que es seguro para
usted ir a casa (volver a casa)?
¿Alguna vez su pareja (esposo) la ha forzado ha tener sexo cuando usted no lo
quería?, ¿Alguna vez su pareja ha rechazado el uso de condón que usted le pedía?
(sexo seguro).
Cuando su compañero bebe alcohol, ¿se ha tornado alguna vez violento con usted
o con sus hijos?. ¿Ese moretón (como ejemplo que veo en su brazo), desde
cuándo lo tiene?, ¿quién se lo ocasionó?

RECOMENDACIONES

No tenga miedo de preguntar, la mayoría de las víctimas esperan


silenciosamente que alguien les pregunte.
Permita contar o narrar los hechos, sin emitir juicios de valor; escuche
con atención, aliente el relato.
No emita enjuiciamientos o haga silencios desmedidos que puedan
interpretarse como conductas críticas.
Remita al sistema de la RED correspondiente, para el seguimiento o
evaluación especializada.

Tarea: usando la guía de lesiones y mapa corporal elabore una HC completa


incluyendo HC psicológica, ficha de casos de VF y VS y ficha epidemiologica
fecha de entrega de trabajo hasta el 13 de marzo del 2019, mandar archivos a
angie.matos@gmail.com

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