Está en la página 1de 47

Maternidad en soledad[editar]

La maternidad en soledad ha sido una constante a lo largo de la historia de la humanidad

dado que siempre dependió del varón el reconocimiento o no del hijo. No hay ningún

estudio que demuestre que son más sanos mentalmente los niños educados dentro de

una familia convencional.1

Los estudios realizados por la CEPAL en 2001 mostraron que los varones tienden a no

utilizar métodos anticonceptivos y a restringir su uso por parte de las mujeres, se

involucran en múltiples experiencias sexuales pero desconocen su responsabilidad en los

embarazos no deseados - los cuales quedan a cargo exclusivamente de las mujeres, en

su mayoría adolescentes - y evaden su participación durante los distintos momentos del

nacimiento y la crianza de los hijos. En muchísimas opcasiones no reconocen a los hijos

nacidos de estas relaciones.2

El reconocimiento del hijo continúa siendo un derecho discrecional del padre en muchos

países, incluso en los que la ley protege a los niños nacidos fuera del matrimonio.

En muchas sociedades actuales existe un cuerpo legal que elimina la discriminación hacia

las "madres solteras" y sus hijos, e incluso algunos gobiernos nacionales (incluso de

países del Tercer mundo) cuentan con programas de ayuda institucionalizada para

hogares donde las mujeres son las jefas, que incluyen ayuda estatal, becas de estudio

para los hijos, créditos bancarios para que las mujeres inicien pequeñas y medianas

empresas, y otros.
De la misma forma, cada día es más común que una mujer decida establecer

una familia sin la presencia de un hombre, y cada día la opinión de la sociedad en torno al

tema se vuelve más abierta y receptiva.[cita  requerida]

Desde 2001 muchos países ven aumentar el número de madres solteras de forma

exponencial. En España la media de madres solteras es del 25%, en Canarias un 55%

(INE de España 2008), en Chile 64,65% (INE de Chile 2008). Muchas de ellas acuden a la

fecundación invitro, pero también son el 10% de las adopciones en España.

Con respecto a las llamadas madres solteras por elección, en 2001 la doctora Luisa

Barón, directora de la Fundación para la Investigación Médica Psicológica (IMPSI),

presentó en la 'American Society for Reproductive Medicine' de los Estados Unidos una

investigación realizada entre 1997 y 2000 con Stella Lancuba sobre «Mujeres solteras

que recurren a bancos de esperma. Un seguimiento psicológico en pacientes y niños”».3

Todas las mujeres del estudio habían confesado que hubieran preferido la concepción con

un hombre, pero no quisieron mentirle a una pareja ocasional ni forzar a nadie a

la paternidad. Varias habían intentado adoptar pero desistieron después de años de

espera por numerosas trabas burocráticas. Todas ellas deseaban encontrar una pareja

masculina estable y algunas fantaseaban con encontrar un padre para su hijo. Los niños y

madres estudiados e involucrados en este estudio presentaron una evolución normal.

Hay mucha gente que no acaba de tener clara la definición de madres solteras, pues

bien, vamos a intentar diferenciar dos términos que suelen utilizarse como sinónimos,

pero tienen un pequeño matiz. Por un lado, la expresión madre soltera suele aludir a la
mujer que ha tenido hijos sin estar casada, y madre sola abarca a todas aquellas

mujeres —divorciadas, separadas, viudas o solteras— que crían a sus hijos solas, sin la

figura de una pareja. En ambos casos, estaríamos hablando de familias

monoparentales.

A partir de ahora, cuando utilicemos los términos de madre soltera o madre sola, lo

haremos como sinónimos, sin especificar la causa o el motivo de esa ausencia de pareja.

Madres solteras por elección

Cada vez más se están dando casos de mujeres que desean ser madres solteras por

elección, y lo consiguen gracias a la inseminación artificial  u otras técnicas de

reproducción asistida, que hoy día permiten poder tener un embarazo en solitario, sin

necesidad de tener pareja.

Consejos para madres solteras

 Luego del parto, es posible que te sientas sensible o agotada ante las nuevas

obligaciones que significa ser madre y más siendo madre soltera, por eso que es

importante que cuentes con la ayuda de familiares o amigos que te den animo

en esta etapa.

 Aprender a organizarte en los cuidados del bebé. Debes prevenir las

necesidades de tubebé antes que nazca.


 Realiza un presupuesto para las prioridades de tu bebé, especialmente si tu

sueldo no es muy alto.

 En el caso que tu situación económica no sea muy buena, intenta pedir ayuda

aorganizaciones o fundaciones que atienden ayudas económicas o

guarderías para que puedas dejar al bebé ahí y tú poder trabajar. 

 Si lo ves conveniente puedes asistir a terapia psicológica donde recibirás consejos

para hacer más ligera la carga emocional. Esto no quiere decir, ni mucho menos,

que ser madre soltera suponga tener que ir al psicólogo. 

Estos son algunos consejos por si te ves en situaciones apuradas, pero recuerda que eras

tan capaz como cualquier otra mujer, tenga pareje o no, de ser madre. El mejor consejos

que podemos darte es que disfrutes de tu embarazo y del bebé cuando llegue el

momento. Será una experiencia maravillosa.

Ser madre soltera supone, en la mayoría de los casos, enfrentarse a muchas dudas y

miedos sola. Está necesidad de información y consejos, se multiplica cuando se trata

de madres solteras adolescentes, ya que se suman las incertidumbres de un primer

embarazo, con el hecho de tener que afrontarlo sola.

Es aconsejable que no te aísles de los familiares y amigos, y que trates de consultar

todas tus dudas para tratar de resolverlas de la mejor manera posible. No tengas miedo

a contar tu situación e intenta disfrutar al máximo de la increíble experiencia que es un

embarazo.
Preguntas frecuentes de las madres solteras

Todas las madres solteras se hacen una serie de preguntas lógicas según su

situación, pero es probable que las mujeres adolescentes que llevan su embarazo en

solitario tengan estas dudas con mayor grado de preocupación, debido a su experiencia

más corta. Si este es tu caso, no te preocupes, te contamos como solucionarlas a

través de experiencias reales, contadas en primera persona:

¿Estoy segura de poder ser madre soltera?

Soy madre soltera ¿A quién se lo cuento?

¿Qué le cuento a mi hijo si soy madre soltera?

Se le llama madre soltera a la mujer que queda embarazada y decide ser padre y madre a

la vez debido a la ausencia paternal del hombre que ayudo a engendrar la semilla de la
vida.

Las circunstancias por las que una mujer se convierte en madre soltera son variables,

desde un enamoramiento fugaz, hasta el hecho de confiar plenamente en el compañero

para evitar el embarazo; pero la naturaleza es muy sabia y nosotras a veces imprudentes

o inocentes o confiadas; hay muchos casos así, donde relatan que pidieron a su pareja

que no hubiera eyaculación dentro, y confiaron.

Ese momento de confianza de un solo lado, trae consecuencias a largo plazo, un ser

humano que viene en camino y del que solo la madre se hace cargo. Luego, con el paso

del tiempo se busca el reconocimiento por parte del padre biológico.

Las madres solteras enfrentan grandes desafíos como el saber que serán ellas las

responsables de brindar educación, alimento, protección, formación a un nuevo ser

humano que inicia el camino de la vida una vez que es fecundado.

La madre soltera debe llevar a cabo la crianza de los hijos y el manejo del hogar sin la

compañía o apoyo de una pareja; por decisión propia o circunstancias de su entorno.

El rostro de una madre sola, sin ayuda de la pareja y con un hijo, es un rostro de calidad

porque antes que nada no ha optado por la puerta falsa del aborto o el abandono, sino

que ha decidido ser una mujer que enfrentará la vida por dos, el niño que viene en su

vientre le otorga las fuerzas y el coraje para salir adelante en medio de una sociedad que

estigmatiza y estereotipa, que señala y que acusa fríamente.


Las madres solteras tienen que pagar un precio muy alto, no sólo a nivel económico, sino

que también están expuestas a la discriminación, prejuicios y mitos en su vida cotidiana.

Entre otros, persiste el mito de que los niños de madres solteras se convierten en chicos y

chicas malas, de que las madres solteras no saben poner los límites, que las madres

solteras asfixian a los niños con su amor.

Los estudios demuestran todo lo contrario: que las madres solteras son muy capaces. Los

niños de madres solteras no salen peor ni cometen más delitos que otros niños. Se

sienten mejor como adultos que aquellos niños que han crecido en una familia nuclear

donde ha habido graves conflictos entre los padres.

Según otro tópico muy duro, las madres solteras prefieren recibir subsidios en vez de

trabajar. Sin embargo, los estudios demuestran que preferirían trabajar a tiempo completo

para ganarse la vida. A menudo aceptan una variedad de trabajos diferentes para llegar a

fin de mes. Incluso aceptan trabajos temporales y ofrecen servicios a sus parientes para

aumentar sus ingresos.

Las madres solteras en cualquiera de los casos que se den han elegido o aceptado ser la

única o la principal responsable de la enorme y comprometida tarea de brindar al hijo la

atención y el sostén afectivo y material que todo niño necesita. En la mayoría de los

casos, ello implica afrontar la “doble carga” doméstica y laboral en condiciones

desventajosas, si se las compara con las madres trabajadoras que comparten esas

responsabilidades con un marido o compañero con el que conviven.

Los hogares monoparentales a cargo de una mujer “jefa de familia” se encuentran en

constante aumento en las últimas décadas en prácticamente todos los países del mundo.
Sin embargo, constituyen una categoría social sumamente heterogénea, que incluye a

mujeres viudas, separadas o divorciadas de uniones legales o consensúales y a madres

que nunca se han casado o convivido con los padres de sus hijos.

La historia nos indica que a partir de la mitad del siglo XX, las mujeres progresivamente

empezaron a salir del hogar para trabajar, estudiar y realizarse como personas, fenómeno

conocido como la Liberación femenina, y que poco a poco ha ido llegando a diversas

sociedades, incluso, aunque con matices más suaves, al islam.

La mujer se dio cuenta de que en ocasiones, el hombre no era necesario para sacar

adelante un hogar, y ella misma podía procurarse los medios para subsistir con sus hijos.

En ciertas ocasiones se ha atribuido a este fenómeno el hecho de que haya aumentado la

tasa de divorcio durante la segunda mitad del siglo pasado.

En los tiempos que corren, bajo las leyes que atentan contra la vida humana, las nuevas y

viejas corrientes de pensamiento y aquellos ideales falsificados por el individualismo y el

egoísmo, ser madre es todo un reto que enfrenta cada una de las mujeres que deciden

ser padre a la vez.

En muchas sociedades actuales existe un cuerpo legal que elimina la discriminación hacia

las madres solteras y sus hijos, e incluso algunos gobiernos nacionales (incluso de países

del Tercer mundo) cuentan con programas de ayuda institucionalizada para hogares

donde las mujeres son madres solteras, que incluyen ayuda estatal, becas de estudio

para los hijos, créditos bancarios para que las mujeres inicien pequeñas y medianas

empresas, y otros.

De la misma forma, cada día es más común que una mujer decida establecer una familia
sin la presencia de un hombre, y cada día la opinión de la sociedad en torno al tema se

vuelve más abierta y receptiva.

Algunos de los factores que propician el nacimiento de bebés de madres solteras son: la

falta de amor a sí misma por parte de la mujer, la necesidad de compañía, el libertinaje de

la sociedad contemporánea, la libertad excesiva que los padres proporcionan a sus hijos,

una tradición machista en la que el hombre no adquiere ninguna responsabilidad de sus

actos y la vergüenza de haberlos cometido.

Una psicóloga guatemalteca opina que la incidencia en los casos de embarazos en

jóvenes, puede tener varias razones, pero generalmente, en las menores de 15 años

sobresalen las condiciones difíciles de vivienda, abandono y los padres se preocupan

generalmente por el sustento y no por la educación. La misma persona añade que el

embarazo prematuro se da por falta de información, inadecuada educación sexual, en

algunos casos por abuso sexual y por relaciones sexuales precoces. Las mismas

adolescentes agregan a estos factores el descuido, la inseguridad e inmadurez.

En latino america; se ha encontrado que las probables causas de que haya tantas

madres adolescentes solteras son:

 La actividad sexual.  Cuatro de cada diez adolescentes han


experimentado por lo menos un embarazo, dos de diez por lo menos han
tenido el nacimiento de un bebé, y más de una de cada siete por lo menos
han sufrido un aborto. Además, el promedio de las adolescentes negras
empiezan su actividad sexual a los 15 años y medio, un año antes que las
blancas.

 La influencia del medio. El medio promueve entre, y promete a, las


adolescentes una experiencia máxima con una responsabilidad mínima.
Particularmente los mensajes altamente cargados de contenido erótico y
sexual del entretenimiento contemporáneo tales como las películas, la
televisión y la música popular. Los muchachos usan  el amor para obtener
sexo, y las señoritas usan el sexo para conseguir amor.

 La pobreza. La desesperanza y la inseguridad, dos productos de la


pobreza, con frecuencia contribuyen a este ciclo vicioso. Ellas no se
relacionan con los valores tradicionales de educación, matrimonio y trabajo
duro. Su enfoque está en el aquí y en el ahora. Ellos sólo ven el instante
de la gratificación, después de todo, nada hay para ellas en el futuro.

Entre las madres solteras, algunas pertenecen a estratos sociales medios y altos, tienen

un buen nivel de educación formal y una buena inserción laboral; otras se han criado en el

seno de familias humildes, no han podido completar su escolaridad secundaria y disponen

de un reducido espectro de oportunidades laborales para obtener un ingreso que les

permita sostenerse a sí mismas y a sus hijos.

Hay quienes reciben apoyo económico del padre de sus hijos, pero un número creciente

debe hacer frente sola a las necesidades del grupo familiar, ya que muchos hombres

eluden su responsabilidad económica por los hijos que engendraron y otros no pueden

afrontarla debido al desempleo o a los ingresos exiguos. Entre las jefas de familia sin un

cónyuge varón hay una mayoría de mujeres maduras y las que tienen menos de 30 años

son una minoría.

Sin embargo, las madres solteras constituyen un caso especial, pues en general son

jóvenes y, en muchísimos casos, ni ellas ni sus pequeños conviven con el papá y

tampoco reciben su apoyo económico, sino que se encuentran frente al abandono de un

hombre que, hasta ayer, decía amarlas y ahora no desea siquiera conocer a su hijo.

Existen numerosos prejuicios sociales en los que antes de conocer las circunstancias, la

mujer es duramente criticada por tener uno o más hijos sin padre.
No nos detenemos a pensar un momento en que esa madre soltera a quien tanto se

critica, está en una situación en la que obligadamente carga  con una gran

responsabilidad sobre sus hombros.

Muchas veces se les llama a los hijos por nombres no aceptables “hijos bastardos”

usando ese nombre de una manera despectiva por el único pecado de no haber nacido

dentro del acto del matrimonio, especialmente dado por “mujeres de la alta sociedad” y

muchas veces, es tristemente dicho por mujeres cuya única diferencia es tener un esposo

o el apoyo de un compañero.

Pero detengámonos a pensar un momento en los actos heroicos que a diario vemos en

esas madres solteras, afortunadamente las madres “solteras” como muchos les llaman,

han elegido serlo y no han decidido no darle la oportunidad de vivir a esa nueva personita

que se encuentra dentro de sus vientres.

La Decisión

Aunque existen en el mundo muchos métodos anticonceptivos los cuales se encuentran al

alcance de todos, los embarazos no deseados o entre adolescentes continúan

aumentando, lo que conlleva a que existan más madres solteras.

Actualmente debido a la falta de educación sexual con la que cuenta la adolescencia esta

situación se ha incrementado en gran medida.


La adolescencia, es un período de transición, una etapa del ciclo de crecimiento que

marca el final de la niñez y anuncia la adultez, dicho término se usa generalmente para

referirse a una persona que se encuentra entre los 13 y 19 años de edad.

Para muchos jóvenes la adolescencia es un período de incertidumbre e inclusive de

desesperación; para otros, es una etapa de amistades internas, de aflojamiento de

ligaduras con los padres, y de sueños acerca del futuro.

En casa de alguno de los padres y con su novia o novio, buena parte de los chicos y

chicas se inicia sexualmente cuando está promediando los 15 años.

Por lo que podemos ver que el embarazo de las adolescentes es producto de una escasa

e insuficiente información y educación sexual, por lo tanto es muy importante que el

adolescente conozca todo lo relacionado al sexo.

Al tener relaciones sexuales sin la educación necesaria se llega a caer en embarazos no

deseados y en hogares disfuncionales por lo que la esencia de la familia se pierde,

dejando así las familias de madres solteras.

Cuando la adolescente se embaraza inicia un complejo proceso de toma de decisiones y,

hasta decidirse por uno, aparece siempre el aborto a veces como un supuesto más

teórico que real.

La decisión está en manos de quienes deciden ser madre soltera o abortar a su hijo y no

darle la oportunidad de vivir.


Para adentrarnos un poco más en el tema veamos que es el aborto: El aborto es la

muerte de un niño o niña en el vientre de su madre producida durante cualquier momento

de la etapa que va desde la fecundación (unión del óvulo con el espermatozoide) hasta el

momento previo al nacimiento. Se habla de aborto espontáneo cuando la muerte es

producto de alguna anomalía o disfunción no prevista ni deseada por la madre; y de

aborto provocado (que es lo que suele entenderse cuando se habla simplemente de

aborto) cuando la muerte del bebé es procurada de cualquier manera: doméstica, química

o quirúrgica.

Los defensores del aborto han procurado cubrir su naturaleza criminal mediante

terminología confusa o evasiva, ocultando el asesinato con jerga como “interrupción

voluntaria del embarazo” o bajo conceptos como “derecho a decidir” o “derecho a la salud

reproductiva”. Ninguno de estos artificios del lenguaje, sin embargo, puede ocultar el

hecho de que el aborto es un infanticidio.

Muchas mujeres prefieren someterse a un aborto ilegal que pagar el precio de ser madres

solteras. Debido a que las madres solteras históricamente han sido denigradas y

humilladas. En la actualidad esa actitud la mantienen personas ignorantes.

Un estudio demuestra que las madres solteras multiplican su fuerza de carácter, se

vuelven más maduras, inteligentes, perseverante, aprenden a valorar la vida, a defender

las cosas importantes y adquieren una mayor capacidad para amar. La madre soltera

debe ser felicitada por su valentía y su hijo debe sentirse agradecido.

Cuando una mujer decide abortar no piensa evitar sufrimiento a su hijo sino evitárselo a sí

misma. La mayoría de los abortos se realizan entre la sexta y decimosegunda semana de


gestación. Cuando el feto es extraído suele luchar por sobrevivir durante dos o tres horas,

y con frecuencia ocurre que el “médico” lo ahogue para usarlo en estudios o

experimentos.

Una de las muchas historias que se escuchan nos cuenta que cuando a sus 17 años iba a

entrar en la universidad y descubrió que estaba embarazada tuvo que elegir entre

someterse a un aborto ilegal y arriesgarse a morir, o ser madre soltera en una sociedad

donde el honor familiar llega a estar por encima de la vida de las hijas.

“Si mis padres hubieran sabido que había tenido relaciones sexuales me habrían matado”,

dice dos años después, todavía temblorosa al recordar que decidió acabar con su

embarazo en el mayor secreto sin decírselo siquiera a su novio de entonces.

Los médicos reconocen que casos como el anterior han aumentado en los últimos años,

pese a que las relaciones sexuales prematrimoniales siguen siendo inaceptables, y no

hay cifras de los abortos practicados, porque oficialmente no existe la interrupción

voluntaria del embarazo.

Aunque no existe postura oficial sobre educación sexual, en los ambientes médicos

reconocen que debería mejorar para inculcar a las jóvenes que el aborto no es un

método anticonceptivo y advertirles del riesgo que supone abortar.

Se ha comprobado que mas del 60% de las mujeres que escogen el aborto como

solucion a su “problema” queda con un autoestima baja y ademas de esto son un

fracaso en todos los sentidos en toda su vida.


Te recomendamos que pienses bien que quieres hacer antes de tomar una

decision; ya que tu decision cambiara el resto de tu vida. Te recomendamos que le

hables a tus padres ya que ellos te daran el apoyo y que mejor que ellos para

asesorarte a que decision tomar. 

Amiga… No olvides que antes de abortar tienes la opcion en dar en adopcion a tu

bebe.

Problemas

Las madres solteras se enfrentan a gran cantidad de problemas, con los cuales tienen

que lidiar de manera automática para lograr salir adelante.

Es difícil esquematizar los problemas de la madre soltera debido a los diferentes tipos de

madres solteras que existen: desde la mujer joven que por motivos personales quiere un

hijo, pero no el matrimonio, y lo cría con esa perspectiva, hasta la mujer pasiva que da a

luz hijos por el azar de sus encuentros, sin que esto modifique el curso de su vida.

En estos tiempos la formación de las familias ha ido variando, habiendo actualmente más

madres solteras que afrontan este reto, y no es nada fácil. Otras mujeres que iniciaron su

vida con un matrimonio constituido, también deben afrontar el reto solas cuando se rompe

el matrimonio.
La sobrecarga es una característica de la madre soltera, ella debe asumir funciones

domésticas, educativas, económicas, etc., funciones que no tiene con quien compartir por

lo que ocupan casi todo su tiempo libre, trayendo como consecuencia que la madre tenga

el tiempo justo y no disponga de un momento para su vida personal y social, originando

su alejamiento de sus amistades y el consiguiente sentimiento de soledad y abandono.

Algunas mujeres inclusive piensan en dedicarse a su hijo el 100% de su tiempo porque no

creen poder encontrar a una pareja que acepte a su hijo.

Para una mujer sola un hijo es una gran carga y está obligada a trabajar. Su jornada de

trabajo debe cubrir el precio de su propia manutención, la de su hijo, y además el costo de

la atención del niño durante su vida.

Muchas madres solteras tienen una posición profesional excelente; a veces una situación

bastante brillante. La mayoría de las estadísticas toman como base cierta clase de

madres solteras que recurren a los servicios sociales, los servicios de ayuda a la infancia,

las maternidades y los asilos para madres.

Debido a su situación la madre soltera desarrolla problemas en su autoestima.

Existen muchos factores que influyen negativamente sobre la autoestima de la

madre soltera, siendo los principales:

 Los cambios físicos productos del embarazo afectan a las madres que
tienen hijos en una familia constituida y más aún en madres solteras por la
carga emocional que llevan consigo, sobre todo si son muy jóvenes.

 Aislamiento de sus amistades, debido a que enfrentan solas las


responsabilidades del nuevo bebé.
 Variación de sus planes de vida, muchas madres solteras jóvenes tienen
que abandonar sus estudios e incluso buscar trabajo sin contar con la
preparación y experiencia para conseguir uno bueno.

 Imposición de la familia en sus propias decisiones, debido a que algunas


madres solteras jóvenes se ven obligadas a depender de su familia se ven
obligadas a acatar las órdenes que les impongan sus padres porque ellos
son los que mantienen tanto a la madre como al bebé.

 Sentimiento de culpabilidad por haber quedado embarazada.

 Cambio de actividades gratificantes por obligatorias, ahora tienen nuevas


responsabilidades que ocupan hasta su tiempo libre.

 Las madres solteras en muchas ocasiones perciben rechazo en su


relación con personas, instituciones, etc., no necesariamente significa que
sufran el rechazo, también ellas mismas lo pueden sentir así,
excluyéndose a sí mismas.

 Para muchas madres solteras, el deseo de rehacer su vida, principalmente


la afectiva es su nuevo objetivo, precipitándose en la búsqueda de una
pareja con la cual consigan tener una familia “normal”, recibir afecto y darle
a su hijo una figura paterna.

 Creer que al conseguir rápidamente una pareja se resolverán todos sus


problemas, suele terminar en el fracaso, puesto que es necesario que la
nueva pareja construya un vínculo afectivo tanto con la madre como con el
pequeño y para poder formar una relación fuerte y duradera.

 Embarazarse rápidamente de la nueva pareja para tener un hijo en común,


no es garantía de un vínculo duradero, y podría resultar en un nuevo
fracaso. Tampoco es beneficioso para el primer hijo, que se encuentra en
un proceso de integración a la nueva familia, pudiendo sentirse rechazado.

 Encontrar una pareja es una opción de vida, pero no necesariamente es la


única ni la mejor, sólo será buena si se consigue desarrollar vínculos
afectivos fuertes entre la pareja, la madre y el hijo, y esto no se consigue
de un día para otro, sino es el resultado de un compartir a lo largo del
tiempo.

 Las madres solteras suelen cometer errores en la crianza del hijo, debido
principalmente a que ellas cargan solas toda la responsabilidad. Por un
lado, pueden tornarse perfeccionistas y autosuficientes, en un afán de
demostrar al mundo que ellas pueden solas con este reto, el querer
solucionar solas su problema crea una obsesión que las lleva a un estado
de constante estrés emocional. También suelen ser sobre protectoras,
debido a que por temor a rechazar a su bebé vuelcan toda su atención en
él, esta situación es más notoria en madres solteras jóvenes que tienen
una relación de amor/odio con su hijo, porque si bien aman a su hijo, éste
también es el responsable de la variación de sus de vidas.

 Generalmente los papás tienden a desvincularse de los hijos siendo


necesario que los niños tengan modelos masculinos, pero lo más
importante es que la madre tenga la capacidad de afrontar el estrés y
hacerse cargo de la educación de su hijo y conseguir que sean adultos con
un buen desarrollo intelectual, social y emotivo.

 Es muy importante que la madre tenga bien claro que no debe hablar mal
del padre, los niños al llegar a edad adulta sacarán sus propias
conclusiones. En lo posible se debe hablar positivamente del padre.

 Todos estos factores influyen en las madres solteras, haciéndolas


depender de otras personas en los ámbitos económico, afectivo y social; lo
cual puede traer como consecuencia exponerse a situaciones de maltrato,
abuso y explotación.

 La madre soltera debe asumir y desempeñar sus responsabilidades


siendo consciente de sus limitaciones y evitar sobrecargarse.

 La madre soltera debe buscar apoyo en personas que la quieran, pidiendo


ayuda en ocasiones, delegando responsabilidades de ser necesario,
buscar ayuda en organizaciones que brinden soporte ocupacional para
poder conseguir un empleo, etc.

  Debe contar con un círculo social de apoyo alternativo a su familia, los


amigos pueden ser de gran ayuda, conocer a otras madres solteras y
siempre tratando de conocer y compartir con personas, de esta forma se
evita la soledad y comparte sus problemas con otros.

 Deben participar en programas que ayuden a la mejora de su autoestima,


habilidades sociales y poder conseguir la independencia que tanto ansían.

 Dedicar un momento para sí misma que le dé ánimos, un momento en el


cual pueda salir a divertirse, hacer lo que quiera, leer un libro, ver
televisión, etc., pero hacerlo exclusivamente pensando en ella. El arreglo
personal también es importante, siempre debe verse bien para sentirse
bien.

 En la actualidad, es más frecuente que existan madres solteras. Es muy


común que las mujeres independientes decidan tener hijos sin la
participación de un hombre o de sus parejas.

 Es importante mencionar que esta situación, afecta igualmente a los hijos,


quienes se enfrentan también a muchas dificultades por la falta de la
presencia de un padre que ayude en la separación con su madre.

Sexualidad

Existen varios mitos en torno de las madres solteras, y uno de ellos es pensar que están

“urgidas” de tener sexo. Muchos hombres piensan que esto es una realidad y hacen su

intento por lograr su objetivo, pero una mujer sola, madre o no, puede satisfacer personal

y a plenitud su sexualidad con ella misma.

Claro, que dar y recibir afecto, escuchar palabras amorosas (reales) y compartirte con una

persona a la que le interesas es algo insustituible, pero no es un requisito para el ejercicio

de tu placer. La otra parte del mito, es el que construyen las mismas mujeres creyendo

“que todos los que se le acercan las buscan solamente para abusar de ellas”.

Pienso que no es necesario alejarte de ellos y no volverlos a ver, lo importante es

ponerles límites, saber decir no, no quiero o no me interesas. Pero hay otro punto a

considerar, y si alguno te gusta y te atrae ¿por qué no tener una relación con él?
Cada varón que aparece en la vida de una mujer no tiene que ser necesariamente “el

hombre de su vida”, nada dice que tiene que ser “el rescatador” de ella y su bebé, ya que

puede ser un compañero sexual y ya.

Para su ejercicio sexual, para la expresión de su erotismo, muchas mujeres tienen que

ponerle a sus relaciones la etiquetita de “es por amor”, “estoy enamorada”, confunden a la

hormona con “amor” y se involucran en relaciones con poco futuro o que las destruyen.

La madre soltera debe descubrir que ella es su mejor compañía, que vale casada o no,

que con un hombre a lado o sin él, ella constituye una familia junto a su bebé y que

merece respeto y valor ante sus propios ojos. Si ella misma no se reconoce y se quiere

como es y está, nadie podrá hacerlo.

Los tiempos han cambiado y ahora las madres solteras ya no se limitan a buscar

solamente quién las mantenga, ahora requieren de buen trato, de una relación con

respeto. Los tiempos de los “dueños”, los “patrones”, los que “daban los permisos”, cada

día están más lejanos.

Es cierto que las relaciones con madres solteras y sus hijos, pueden hacer una familia

reconstruida, unida y homogénea. Pero desgraciadamente sigue pesando la cuestión

social y las costumbres familiares de antaño.

Otro aspecto que aparece con algunas madres solteras, es el regresar a la familia con

una actitud de “pagar por su pecado”, de “expiar su culpa”.


Cuando una madre soltera decide pedir ayuda a su familia de origen en muchas

ocasiones la familia la acepta con una condición, que renuncie a su vida privada, es decir,

que les garantice que no saldrá, que no tenga amigos ni mucho menos novio.  Debido a

las necesidades que las madres solteras pasan muchas veces aceptan este tipo de

condiciones.

Con la familia se puede hacer una amalgama dañina y destructora. Hay madres o padres

que establecen fuertes lazos de dependencia con los (as) hijos (as) y les llenan de tanto

miedo e inseguridad que son incapaces de vivir su propia vida.

Para muchas madres solteras no asumidas, no responsables plenas de su decisión, la

familia es el sustituto ideal de la pareja, actúan como si necesitaran de algún tipo de

legitimización.

Cuando se es madre soltera, el intentar tener una vida amorosa puede ser… muy

complicado, ya que toda la atención es sólo para los hijos, dejando a un lado la

oportunidad de conocer a una nueva pareja. Sin embargo, no es imposible, ya que no es

una razón para que tú o cualquier madre soltera se quede sola en casa.

Así que para ayudarte a regresar al juego del amor y porque no, del sexo también,

hablamos con varias mujeres que realmente han estado en esa situación y lo han logrado,

así como expertos en relaciones de pareja, y les pedimos su consejo en cuanto a las

situaciones más difíciles que puedes encontrar.


Si eres mamá soltera, reincorporarte a las filas del noviazgo puede hacerte sentir como si

te hubieran dado un papel estelar en tu propia telenovela. A la vez que entras al reto de

balancear las necesidades de tus hijos con las de tu nuevo compañero.

Si eres madre soltera y quieres establecer una nueva relación con otra persona, a la hora

de tener una cita, conviene si tus hijos son adolescentes, que les plantees con franqueza

tu decisión. Los chicos de esta edad no sólo entienden lo que significa una cita, sino que

es más probable que te descubran si no estás siendo honesta con ellos. Si tus hijos son

más pequeños, diles únicamente que vas a salir con un amigo o amistades y ponte de

acuerdo con tu pareja para que el encuentro sea en cualquier sitio que no sea tu casa.

Recuerda que la reacción de tus hijos ante un nuevo hombre se verá influenciada casi

seguramente por la relación con su padre y qué tan cerca esté él de ellos ahora. Si tienen

una buena relación con el padre de tus hijos, es menos probable que se sientan

amenazados por la posibilidad de una nueva figura masculina en sus vidas. Pero si hay

tensión, tus hijos pueden ponerse furiosos y exigirte que no salgas con nadie. Si esto

ocurre, siéntate con ellos y explícales que tú y su padre continúan siendo amigos, pero

que no volverán a unirse.

Uno de los errores más comunes que cometen las madres solteras, advierten los 

terapeutas familiares, es intimar con un hombre en la propia casa, Invitar a un hombre a

pasar la noche en casa, jamás deberás hacerlo, “hasta que él sea tu pareja estable”. Al

establecer este límite no sólo evitas tener que explicar el delicado asunto a tus hijos, sino

que también los proteges contra el riesgo de encariñarse con tu novio en caso de que el

romance sea un enamoramiento pasajero.


Si he estado saliendo con alguien por un tiempo, ¿debo permitirle conocer a mis hijos? 

Aunque siempre debes informar a tu pareja desde el principio que tienes hijos, aguarda al

menos tres a cuatro meses antes de hacer presentaciones. Para entonces sabrás si es un

hombre con el que puedes involucrarte seriamente, y así evitarás que tus hijos se

encariñen con alguien que quizá ya no esté presente en sus vidas dentro de dos

semanas. Además, posponer el encuentro también te ayudará a evitar clavarte en una

relación.

Finalmente, existen dos cosas que toda mujer -sea madre soltera o no- deben tener en

cuenta cuando les presentan a un desconocido. Piensa: aunque sea amigo de un amigo,

si jamás te habías encontrado con él, es una persona desconocida.

 Asegúrate de que tus primeras citas sean en algún lugar público y de


no terminar en el apartamento de él. 

 Siempre mantén tu celular cargado por si hubiera una emergencia, y


asegúrate de que al menos una persona sepa dónde y con quién
estás. Aunque este consejo también es válido para chicas solteras.

La educación de los hijos de madres solteras

Las madres solteras se preocupan mucho por la educación de sus hijos, tienden a tener

dudas, miedos, pero sobre todo padecen de falta de confianza tanto en su capacidad para

criar hijos normales y felices como en ellas mismas. Gracias a esa falta de confianza

muchas veces las madres solteras cometen muchos errores en relación a la educación

de sus hijos.
La educación de los hijos depende de la madre soltera, la educación de los hijos no la

pueden dejar en manos de alguna persona extraña que ni conoce ni le interesa el

bienestar del niño, se tiene que aprovechar sus primeros años para estar con el,

acompañarlo y ayudarlo en esa etapa de su vida, la cual es una de las mas difíciles para

ellos porque aprenden nuevas cosas las cuales deben tener presentes para afrontar el

mundo en el que vivan.

Entre los errores más frecuentes que cometen las madres solteras en la educación de

sus hijos podemos mencionar:

La sobreprotección: Debido al tesoro que representan los hijos para las madres

solteras estas se vuelcan tanto en ellos que lleva a las madres a tomar actitudes de

sobreprotección que en ocasiones funcionan como mecanismo para compensar el

rechazo hacia el niño.

Si una madre soltera es joven en muchas ocasiones mantienen una relación de amor-

odio con el niño, al que por un lado quieren, pero que es el responsable de la pérdida de

su adolescencia o juventud como etapa vital en la que todavía no están muy definidas las

responsabilidades, por lo quelas madres solteras jóvenes deben trabajar en este

aspecto ya que de lo contrario será muy perjudicial para los dos.

Omnipotencia o impotencia: Generalmente existen dos estilos de pensamiento y

comportamiento en relación con la asunción de las responsabilidades parentales que

las madres solteras pueden llegar a presentar.


Uno de los estilos de pensamiento que adoptan algunas madres solteras, es el de

hacerse cargo de todo, poder con todo: decisiones, tareas, trabajo, normas, dificultades,

etc., esto genera un gran estrés que sobrepasa las capacidades y facultades de

las madres solteras.

El otro estilo de pensamiento que adoptan algunas madres solteras es el de dejar que

los abuelos asuman la educación de su hijo, manteniéndose al margen de las decisiones,

pues al fin y al cabo son los que los están manteniendo a ambos. Se sienten impotentes

de poder sacar adelante la responsabilidad que conlleva la educación de sus hijos.

Perfeccionismo: Algunas madres solteras adoptan la actitud de perfeccionistas esta

actitud funciona en ocasiones como un mecanismo de compensación del error cometido:

tratar de ser la mejor madre del mundo para así demostrar al mundo entero y a sí mismas

que a pesar de ser madres solteras, son capaces de hacerse cargo de la situación sin

depender de nadie o sin pedir ayuda a terceras personas.

Para una madre soltera asumir responsabilidades y desempeñar las funciones

parentales con éxito implica ser consciente de las propias limitaciones y de los derechos

personales.

Se recomienda que la madre soltera pida ayuda en ocasiones, que aprenda a delegar

responsabilidades cuando sea necesario y que busque apoyos para no sobrecargarse.

Uno de los consejos más importantes para madres solteras es que traten de formarse,

estudiar o aprender un oficio para que la ayude tanto a nivel personal como en la
educación de sus hijos ya que serán el único apoyo al cual recurrirán en caso les surja

alguna duda con los estudios.

Si una madre soltera no pudiera estudiar o capacitarse por algún motivo debe tratar de

pedir ayuda a familiares o amigos que estén mejor instruidos para poder prestar la ayuda

necesaria a su hijo en su educación.

La Crianza

Debido a los cambios sociales producidos en los últimos años, cada día es más común

ver familias uniparentales, donde la madre es el único soporte de los hijos. La crianza de

los niños es una tarea ardua y llena de responsabilidades y dificultades. Ser madre soltera

implica un desafío adicional.

Las madres que no cuentan con el apoyo del padre para la crianza de sus hijos deben

estar preparadas para brindarle los valores del hombre en el momento en que el hijo los

necesite. Pero esta tarea no debe emprenderla por sí misma, sino que requiere de la

ayuda de un profesional, que la guiará para elaborar la situación sin el padre.

Hay muchos factores que llevan a que una mujer enfrente el embarazo y alumbramiento

sin una pareja. El primer paso para salvar esta situación es aceptarla, luego encontrar a

las personas que pueden brindar apoyo y que la madre desearía que la acompañen.

Puede elegir un familiar o un amigo que la haga sentir segura, esto apoyará a la madre

para desempeñar su tarea.


En la gestación, la madre debe estar en buenas condiciones psicológicas, algunas

recomendaciones para poder llevar una buena gestación son las siguientes:

 La familia debe apoyarla; de lo contrario, se van a presentar problemas


más grandes para todos en el momento en que haya alguna complicación.

 Aunque la madre esté sola, nunca debe dejar de lado los controles
prenatales.

 Nunca rechazar al bebé ni ocultar el embarazo con una faja, esto trae
problemas físicos y psicológicos en el bebé.

 Debe buscar ayuda psicológica, con el fin de prevenir la ansiedad y la


depresión en las embarazadas.

Al momento de que el bebe ha nacido muchas madres solteras creen que el cuidar sola al

bebé  deben hacerlo en soledad pero no significa eso, una mamá podría llevar adelante

una crianza feliz. En todo caso, el resultado dependerá de cómo viva personalmente esta

situación.

Las madres solteras tienen una gran responsabilidad de educar hijos emocionalmente

estables pese a que su familia es disfuncional por la carencia de la figura paterna. Deben

ante todo mostrar amor a sus hijos y procurar dedicar tiempo de calidad con ellos.

En general, una madre soltera que cría solo a un niño puede hacerlo bastante bien, pero

también hay que reconocer que esta tarea se le puede hacer muy dura por momentos y

evidentemente, la responsabilidad es más llevadera cuando puede ser compartida, y en


ese sentido es un mérito innegable sacar adelante una familia de uno o más hijos si se

está sola.

Cuando los niños son criados por una madre soltera, estas madres corren el riesgo de

volcar todo su potencial amoroso sin medida en el hijo, por falta de un marido, y esto

puede dificultar al hijo en su busca de independencia e identidad.

También puede ser que la madre sea sobreprotectora que no le permite al niño vivir

tranquilamente. Esto se da porque su hijo es el único ‘tesoro’ mientras que todo mundo le

dio la espalda.

Bajo esta óptica, se dice que el hijo encuentra dificultad en los momentos en que debe

separarse de su madre. Podemos ver plasmado esto cuando le toca ir a la escuela. Ellos

se sienten inseguros y muestran su descontento y angustia al tener que separarse de sus

madres por un determinado tiempo. Al respecto, se dice que la madre debe brindarle la

confianza del caso y acompañarlo hasta donde más se puede sin que esto suponga

interferir con su normal desarrollo y desenvolvimiento. Es aquí que surge la figura del

maestro o tutor, quien en las instancias iniciales debe hacer las veces de sustituto y ver la

manera de ganarse rápidamente la confianza del niño.

Otro aspecto que debe cuidarse es la posibilidad que tengan los niños que encontrar

modelos de actuación variados, en lugar de agotar la realidad en las acciones que ve

siempre en el adulto con el que vive.

Además es importante que el niño reciba explicación sobre su situación, apenas tenga la

capacidad para entenderlas. El niño merece respuestas sin mentiras, las que deben llegar
en el momento y la forma apropiadas, expresadas en un lenguaje sencillo que pueda

entender. Deben evitarse los rencores hacia el padre ausente, sin desmerecer su figura ni

idealizarla.

Es frecuente que la madre soltera, en algún momento, sobre todo cuando el niño tiene

pocos años, experimente algún tipo de culpa frente a su hijo, por la ausencia del padre,  e

intente sobreprotegerlo, o sea demasiado permisiva, o no ponga límites, o lo sobre

estime, y lo haga sentirse un ser superdotado incapaz de equivocarse, y también lo

constituya en su confidente, lo trate como a un amigo le cuente todos sus problemas, no

dándose cuenta de la carga que deposita en el niño. Pero también se observan

situaciones contrarias a la señalada, como el rechazo, el hacerlo sentir culpable de todos

sus problemas, el abandono afectivo, etc. Ninguna de las 2 situaciones es la ideal, pero

también es difícil encontrar un punto de equilibrio cuando la madre es muy joven, aún no

tiene resueltos sus propios conflictos y tiene entre manos un hijo para criar, educar y

trasmitir modelos de vida y valores. Quizás lo más importante en esta primera etapa es no

preocuparse extremadamente por el futuro, y brindar mucho amor, ternura, cuidados y

quiza permitir el apoyo de algún familiar.

Reconoce tus limitaciones. No puedes ser mamá y papá a la vez. Sólo trata de ser la

mejor mamá dadas las circunstancias. Cuando haya temas que te sobrepasan, trata de

averiguar lo más posible por otros medios, como libros o conversaciones con otros

hombres.

Otra de las desventajas de las madres solteras, sobre todo en las que no tienen

posibilidades económicas, es que deben ocupar su mayoría de tiempo en el trabajo, con

el fin de conseguir el dinero para responder por su hijo. Esto implica que la madre no pase
el suficiente tiempo con el pequeño, lo que indica que no se dé, en la mayoría de los

casos, una crianza acertada.

Debido a lo difícil de la situación económica, la madre deberá aceptar toda la ayuda

disponible, para que pueda cubrir los gastos importantes como medicinas, doctores, etc.

No tienes que hacer todo sola. Y si tu familia no te apoya o vive lejos tuyo, busca apoyo

entre amigos, vecinos, u otros padres cuyos hijos van a la misma guardería o escuela que

tu hijo.

Organízate mucho, incluso contemplando “imprevistos”. A medida que el bebé  crece y se

hace niño, todo requiere cuidadosa organización: el alimento, la ropa, la lanchera cuando

vaya al colegio, los cumpleaños, las idas y venidas. Siempre que puedas ten pensado un

“plan B”, para evitar sorpresas desagradables frente a las distintas situaciones.

Dedica  calidad de tiempo y si puedes cantidad mucho mejor. Tu hijo necesita todo lo

anterior, pero más que nada te necesita a ti, considerando especialmente que existe

ausencia de uno de los progenitores. Una buena organización permitirá precisamente que

puedas dedicarle tiempo de calidad: juegos, confidencias, lecturas, diversión etc.

El ser “madre soltera” nunca debe ser un obstáculo para dar una buena crianza y

educación a los hijos además de buscar superarse, por el contrario debe ser la motivación

para seguir adelante en la vida y alcanzar las metas que se propongan. No debe ser

tampoco motivo de vergüenza sino que se debe seguir caminando por la vida con la frente

muy en alto por el gran compromiso que representa y la responsabilidad que implica.
Cuando hay un rechazo de la sociedad hacia las madres solteras y sus hijos, los niños se

sienten discriminados, saben que no hay equidad con el resto de menores y pueden crear

cuadros depresivos.

Parte del proceso está en desarrollar un buen entorno social y familiar. Los niños que no

tienen la presencia del padre necesitan tener una confianza en sí mismos. Es

indispensable mejorar la autoestima y que entiendan que pueden ser felices.

A las mujeres les toca, por obligación, ser buenas madres, buenas mujeres, buenas

profesionales. Buenas en todo. Además, deben ser madre y padre a la vez, porque él no

está.

Guiadas por su sensibilidad, la buena intención y el amor, una madre soltera podrá lograr

una buena educación para su hijo. En definitiva, ningún núcleo humano está exento de

cometer sus errores; pero, afortunadamente, está siempre preparado para volver a

intentar y mejorar.

Durante todo el proceso de crecimiento de tu hijo apóyalo y busca la manera de

desarrollar en el los valores y la fuerza necesaria para que pueda sobrevivir en el mundo

que lo rodea.

Si tú eres madre soltera deja de sentirte culpable por todo. Tu hijo quiere verte feliz. Si te

ve culposa, vas a transmitirle inseguridad. Y no olvides apóyate en tu familia para poder

sobre llevar tu situación y de esa manera poder mostrarle a tu hijo y la sociedad la

grandeza de tu persona.
Es beneficioso, que las madres tengan grupos de amigas y amigos, que realicen alguna

otra actividad aparte de su trabajo y que siempre estén rodeadas de otras madres, para

así comparar el desarrollo de su hijo con respecto al resto. De esta manera pueden

prevenir transformarse -producto de la presión y la soledad- en madres sobreprotectoras,

omnipotentes y asfixiantes, y alcanzar, tanto ellas como sus hijos, la mutua felicidad.

La ardua tarea de ser madres solteras

El ser madre es una ardua tarea, cuanto mas se puede decir de ser madre soltera que

implica doble trabajo; la responsabilidad de llevar sustento a la casa, de pagar cuentas, de

ver las necesidades del hogar, de revisar tareas, de estudiar, de criar hijos, etc.

Las madres solteras deben prepararse fundamentalmente para asumir un mayor número

de responsabilidades y hacerse cargo de su hijo sin contar con una ayuda diaria paterna,

ni en la crianza ni en lo económico.

Una madre soltera se podría llenar de un sin número de temores y dudas que le podrían

llevar hasta una enfermedad (a la madre soltera) del solo hecho de pensar ¿Estaré

criando a mis hijos de la manera correcta? ¿Podré pagar las cuentas? ¿Qué voy a hacer

con mi hijo? ¿Quién cuidará a mi hijo? Etc.

El hecho que una madre soltera no cuente con la ayuda de una pareja no significa que no

cuenten con otro tipo de ayuda ya sea familiar o de amistades cercanas.


Querer ser auto-suficientes es un deseo demasiado ambicioso que deberían dejarlo de

lado. Un grupo de otras madres solas, un grupo de amigas, una hermana, un amigo o un

familiar pueden suplir las necesidades de apoyo emocional, social y de cuidado del niño.

El camino hacia la madurez y la felicidad de la nueva familia dependen de asumir la

realidad y seguir adelante en el camino de la vida, indudablemente, es difícil. Pero lo

primero que deben hacer las madres solteras es pensar en las oportunidades que tiene

para poder seguir adelante en su camino.

El hecho de ser madre soltera nunca fue fácil, en la actualidad tampoco lo es, las

obligaciones de la vida moderna hacen que vivamos “corriendo” y cuando una mamá se

tiene que ocupar ella sola de sus hijos esta tarea puede volverse una odisea.

Para lograr que la ardua tarea de ser madre soltera no sea tan difícil es fundamental

mantener un cronograma en lo que a horarios se refiere, de esta forma se podrá facilitar

las tareas, pero también se debe buscar un tiempo para la diversión, ya sea un paseo por

la naturaleza o un viaje a un museo, zoológico, parque, etc.,  de esta forma no solo se

divertirán tanto la madre soltera como los hijos sino que también podrán relajar sus

mentes de todas las obligaciones.

Una de las realidades de una madre soltera es que por más que quieras hacer todo ella

misma es imposible, el día no tiene tantas horas como para poder cubrir todas las

necesidades de los niño, la casa y las propias, así que se debe tratar de pedir ayuda,

tanto a familiares, amigos o contratar a alguien para que ayude con las tareas del hogar.
Una madre soltera debe reajustar sus prioridades, y por otro lado olvidarse de la culpa, si

una madre soltera no se siente bien es imposible que logre criar a un niño seguro de sí

mismo, que pueda enfrentar el mundo por si solo.

Consejos para las madres solteras

Hay muchos factores que llevan a que una mujer enfrente el embarazo y el nacimiento de

su hijo sin una pareja, por lo que serán madres solteras,estas madres deben estar

preparadas para brindarle los valores del hombre en el momento en que el hijo los

necesite.

Las madres solteras deben desempeñar las funciones tanto del padre y madre. Esto es,

junto al amor y las caricias tiernas de una madre, y sin confundir autoridad paterna con

violencia, estas madres deben crear la disciplina y ambiente de orden y respeto que todo

niño necesita.

El primer paso para salvar esta situación es aceptarla, luego encontrar a las personas que

pueden brindar apoyo y que la madre soltera desearía que la acompañen. Puede elegir

un familiar o un amigo que la haga sentir segura, esto apoyará a la madre soltera para

desempeñar su tarea.

Una de las primeras cosas que hay que remarcar es que, apenas el niño tenga la

capacidad para entender las situaciones de la vida se le debe explicar su situación, el niño

merece respuestas sin mentiras, las que deben llegar en el momento y la forma
apropiadas, expresadas en un lenguaje sencillo que pueda entender. Deben evitarse los

rencores hacia el padre ausente, sin desmerecer su figura ni idealizarla.

Es común que la madre soltera experimente algún tipo de culpa frente a su hijo e intente

sobreprotegerlo, o sea demasiado permisiva, o no ponga límites, o lo sobre estime. O

pueden presentarse situaciones opuestas, donde la madre muestra rechazo por el niño, o

lo hace sentir culpable de sus problemas, un elemento que ayuda frente a este dilema es

no preocuparse de más por el futuro, ofrecer mucho amor y cuidado al hijo, recibir el

apoyo de algún familiar. Pero sin olvidar los límites.

Se debe relacionar a los hijos con miembros de la familia o de la comunidad que sean una

presencia masculina positiva. Los niños aprenden por imitación. Por eso, el abuelo, el tío,

el entrenador de fútbol, etc.,  puede ser una imagen buena para ayudar a los hijos,

especialmente los varones, a tener una sana identidad con su género, y a las niñas, una

buena imagen masculina.

También se debe evitar hablar mal del padre en presencia de los hijos. Ya sea que el

padre los haya abandonado o que haya habido un divorcio difícil, los problemas de pareja

son diferentes de la relación de los hijos con el padre. Y si no hay nada bueno que

comentar, por lo menos evitar las críticas.

Otra cosa muy importante es reafirmar en los hijos la idea de que ellos han sido siempre

deseados y esperados con amor, por parte de su madre, y recibidos con alegría en el

ceno de la familia de la madre, ayudará a los hijos a minimizar su sensación de ser

“indeseados” o “ilegítimos”.
En lo económico, es una situación muy difícil, por lo que la madre soltera deberá aceptar

toda la ayuda disponible, para que pueda cubrir los gastos importantes como medicinas,

doctores, etc.

Es importante que la madre soltera tenga contacto con otras personas, no se limite a vivir

para su hijo, para que el niño conozca a más personas y tenga una mejor relación con

ellos conforme va creciendo.

La madre soltera debe continuar realizando actividades que la hagan feliz, y si no las

tenía, que las busque. Puede ser cualquier actividad que le reporte buenos momentos,

como un club de lectura, manualidades, deportes. Si se siente bien consigo misma, estará

en forma para brindarle a su hijo el cariño que requiere.

Si la madre encuentra otra pareja y se casa, es necesario incluir a los hijos de relaciones

precedentes en las decisiones y ajustes a la nueva vida. Es muy importante asegurar

igualmente que el padrastro no abuse de su autoridad, ni física, ni moralmente, y mucho

menos sexualmente, como sucede con más frecuencia de la que se sospecha.


¿Dependencia o
independencia de una
madre soltera?

Una de las grandes interrogantes que llega en el momento de ser madre


soltera es si se debe ser independiente o se puede depender de alguien.

La búsqueda de la independencia es uno de los objetivos primordiales


de todas las personas en edad adulta. En el caso de las madres
solteras, se debe convertir en un objetivo de primera necesidad ya que
muchos de los problemas más graves que presenta la situación
de madre solterase deben precisamente a que su vida se desarrolla en
una situación de dependencia de otras personas ya sea económica,
personal, afectiva o social.

Una situación de dependencia muchas veces obliga a la madre soltera a


asumir situaciones de maltrato, abuso y explotación.

En el caso de las madres solteras jóvenes, y más si son adolescentes


inmaduras, es la familia la que toma las riendas de la situación y pone
las reglas. La autoridad la tienen los abuelos y en muchas ocasiones se
debe hacer lo que ellos digan. Antes que el niño nazca, no es de nadie,
después de nacer es de todos menos de su madre ya que todos tienen
autoridad sobre el niño y la madre soltera.

Actualmente, los padres de madres solteras no las echan de casa, pero


ellas aguantan el maltrato y la humillación de quien les proporciona un
lugar donde vivir ya que gracias a ellos tienen un lugar seguro donde
cuidar a sus pequeños hijos.

Otras de las grandes situaciones que se dan es que gracias a su estado


de madres solteras muchas se  convierten en las “sirvientas” de la casa,
debido a la falta de medios económicos, bien porque no tiene un trabajo
suficientemente remunerado o le falta empleo, bien porque está
estudiando o  porque se encuentra en una situación de pobreza.

Ante las situaciones anteriormente descritas u otras que se pudieran


dar, la madre soltera entrará a depender de su familia. Por lo que si
la madre soltera se queda a vivir donde los padres no podrá vivir en un
hogar independiente, aunque ella y su hijo, desde el momento de nacer
y de la inscripción de éste como propio en el Registro Civil, formen una
unidad familiar ya que ambos constituyen una familia.

Este concepto de unidad familiar lo tiene que tener muy presente


la madre soltera. Puede que en el hogar de sus padres se sienta
culpable de haber quedado embarazada, que la traten con gritos y
malos modos, que la falta de dinero cree desaliento y malhumor. No
tendría que suceder, pero el amontonamiento de personas en un hogar,
la falta de recursos y de trabajo, y la interacción de diferentes
problemáticas, contribuyen al mal ambiente y a menudo los malos
tratos y humillaciones.

Por lo que se recomienda que si se tiene la posibilidad se aparte tanto


de la familia como sea posible, que se forme un hogar propio, no es que
un hogar sea el paraíso, pero sí puede proporcionarles tranquilidad
cuando cada día cierren la puerta de la casa tras de sí. Tendrán la
oportunidad de demostrarse el cariño que se tiene el uno al otro
además de restablecer la comunicación que habían perdido si así fuera
el caso, recuerden que tanto el hijo como la madre soltera necesitan
abrazos y caricias como demostración de cariño y amor.

Es cierto que no es malo pedir ayuda a la familia o a los amigos cuando


se necesite pero se recomienda que esta situación no genere una
dependencia.

La Pregunta
Todos sabemos que los niños son curiosos, hacen preguntas, algunas
son fáciles de responder y otras son incomodas. Tienes que estar
preparada para ese momento, los niños son inteligentes, leen muy bien
el lenguaje corporal, y aunque jamás te lo dirán, ellos saben cuándo
dieron en el clavo.

Durante la crianza de los hijos las


mamás solteras se enfrentan entre el segundo y tercer año de vida de su
hijo a la pregunta ¿y mi papá? Se señala que a pesar que siempre deben
darse al niño respuestas consistentes, “cuando el menor es pequeño, no
conviene entrar en detalles porque no está preparado para entenderlos.
Lo único que quiere es tener un padre y tiene derecho a pensar que él
existe”.

Sea cual sea la formulación de la pregunta, el hecho objetivo es solo uno:


el niño o la niña sabe que no tiene papá, porque nunca lo ve o nunca lo
ha visto.

Por consiguiente, quiere un papá, aunque no pregunte quien es: cómo


se llama, dónde vive, si un día vendrá.
¿Y por qué no ve a su papá? Pues, porque su madre es su única familia.

Si el niño o niña es fruto de la relación con un hombre, es una evidencia


que no hay que ocultar.

Antiguamente el momento de decirle al niño que es hijo de una madre


soltera no tenía fecha, más bien se trataba de ocultar el hecho para
siempre por ser considerado una vergüenza y muchos de estos niños
crecían creyendo que eran hijos de sus abuelos y hermano de los
hermanos de su madre.

Actualmente se piensa que lo más conveniente es decirles la verdad


apenas el niño comience a preguntar por qué su familia no es como la
de sus amigos. Saber la verdad llevará a que el niño asuma la realidad y
la tome con naturalidad, para lo cual es necesario transmitirle seguridad
y confianza en su futuro, no se le deben dar detalles a menos que el niño
lo solicite, y lo hará conforme vaya creciendo.

Es importante que el niño reciba explicación sobre su situación, apenas


tenga la capacidad para entenderlas. El niño merece respuestas sin
mentiras, las que deben llegar en el momento y la forma apropiadas,
expresadas en un lenguaje sencillo que pueda entender. Deben evitarse
los rencores hacia el padre ausente, sin desmerecer su figura ni
idealizarla.
Para un preescolar no es necesario darle muchos detalles simplemente
que existen muchos tipos de familias y que la suya es aquella que no
convive con el padre a pesar que lo tiene.

Los escolares en cambio, requerirán un poco más de detalle, saber


quién es su padre, cómo es, dónde está, etc., siendo muy importante
decirles que él estará bien cuidado y querido, y que va a tener una vida
buena siempre.

Los adolescentes requieren mayor cuidado para las respuestas que se


les da porque tienden a catalogar a los hechos y las personas con
adjetivos. Se debe dejar bien en claro que su familia es un tipo de familia
y que no hay nada de malo en ello, no se debe hablar mal del padre, y en
la medida de lo posible referirse a él de forma positiva.

En una forma de explicarles lo que paso habrá que decirle que mamá
quedó embarazada y, después de una gestación que duró siete, u ocho,
o nueve meses, nació un precioso bebé.

Si en esta relación hubo amor, o fue un acto consentido por ambas


partes, el niño tendrá que saberlo. Pero, aunque no hubiera amor o
deseo, la palabra AMOR tiene que estar presente en ese momento tan
especial y tierno de explicar a un hijo por qué nació, por qué le fue dada
la vida.
En cualquier caso, existió el amor de su madre, que es el puntal más
fuerte que amarra a un hijo a la existencia como ser humano, el amor
que desean todas las personas sin distinción.

Sin el padre, va a existir un vacío en el corazón del hijo, es indudable. Los


hijos no quieren destacar, sentirse diferentes. Aspiran a parecerse o ser
iguales a los compañeros, al grupo mayoritario. Un buen número de
amigos suyos que tienen papá. La familia tradicional tiene papá y mamá,
aunque otras muchas familias tienen amor sin papá.

Envolver al hijo en una atmósfera irreal, en que todo es perfecto, no


contribuye a prepararle para afrontar los problemas que se van a
suceder en su vida. Si no tiene un papá que asuma su paternidad, es
necesario que lo sepa.

Frases evasivas tales como: “tu padre murió” (sin que sea cierto), “tu
papá trabaja muy lejos, pero alguna vez vendrá a verte” (se aturde al
niño, porque intuye que su madre le miente), le desconciertan y le hacen
sentir inseguro, peor que antes de preguntar por su papá.

Ahora bien, expresiones como “tu padre no te quiere y por esa razón
nos abandonó” o maldecir al padre, no favorecen el crecimiento y el
equilibrio de un hijo. Sólo tú y el padre del niño son responsables de lo
que pasó, y el niño debe saber que es una cuestión de adultos.
El niño tiene que saber a ciencia cierta que eres su mamá, la persona
que más le quiere, que nació de ti y fue un niño deseado. Que a partir de
los cuatro meses empezó a dar vueltas en tu tripita y le hablabas como
si ya le vieras en persona. El cariño y las palabras dulces curan muchas
heridas, crean lazos afectivos duraderos, son un pasaporte al optimismo
y las ideas positivas del futuro.

En los distintos casos en los que existen madres solteras se puede


destacar: cuando los padres se separan y el que se va de la casa se
desentiende de los hijos, los niños viven la situación con un dolor muy
profundo, el que comparan incluso con la sensación de que su padre
hubiera muerto y se sienten desconcertados frente a su repentina
ausencia.

En el caso de una separación matrimonial, los psicólogos recomiendan


que las madres se esfuercen al máximo para lograr que el padre siga
presente en la vida de los hijos. Asimismo, indica que hay casos en que
ellos tratan de estar cerca de los hijos pero se encuentran con el muro
de la madre. “Muchas veces los padres quieren participar, pero las
madres no los dejan o supeditan la pensión alimenticia a las visitas. Pero
¿si el padre en algún momento no puede pagar, la mamá va a exponer al
niño a la ruptura con su papá? Las dos cosas no deberían estar
relacionadas, porque se perjudica la estabilidad emocional del niño”.

Si después de la separación es el padre el que se olvida de los hijos, las


mamás deben explicarles la situación diciendo, por ejemplo: ‘tu papá
está pasando por un mal momento. Tengamos fe y esperemos, porque
él te quiere y seguramente después de un tiempo va a buscarnos. En
este escenario, la madre nunca debe presionar al padre para que vea a
sus hijos porque si no quiere hacerlo, al niño no le va a hacer bien estar
con él. No le va a transmitir amor y la madre tiene la obligación de
proteger a su hijo de eso.

Cuando la causa de la ausencia del padre es la muerte, es importante


que los niños tengan cerca una figura paterna que lo reemplace. De esta
manera sabe que además de llevar el recuerdo de su padre en su
corazón, tiene a alguien cercano a quien recurrir cuando necesite hablar
de hombre a hombre o jugar y aprender cosas que no podría hacer sólo
con la ayuda de su madre.

En este sentido, se señala que es muy importante el papel que juegan


los abuelos, ya que si el niño tiene la suerte de criarse con alguno de
ellos, el dolor de no tener a su padre junto a él va a ser mucho más
tolerable.

Recuerda que hay que hablar a los hijos con la verdad. Por dura que sea,
la verdad acaba doliendo menos que la mentira, que la ocultación de
unos hechos que les pertenecen.

Si el niño conoce la verdad desarrollará mecanismos para adaptarse a su


situación real. Si se la escondemos, se verá inseguro, despreciado. No
menospreciemos a los niños. Éstos pueden ser más fuertes que las
personas adultas.

Hay que hablarles con tacto, con palabras que ellos puedan
comprender. Si lo hacemos con cariño, seguro que sale bien. Los niños
son muy listos (bueno, más bien inteligentes), sin dobleces, y pronto
captan si nuestra exposición es sincera, si les mentimos, si les falseamos
el pasado.

Muchos niños dicen antes papá que mamá. Otros dice solo mamá y
tardan meses en pronunciar papá, con lo cual el hombre, que ya de por
sí se siente marginado de las sensaciones de la maternidad, se inquieta.
También los hay que a todo deseo le llaman “mamá”.

El nombre de “papá” duele porque la madre sola se había preparado


mentalmente, desde la infancia, para tener novio, casarse, formar una
familia y tener hijos. Eso es lo común. Cuando la mujer, adulta o
adolescente, queda embarazada y lleva la gestación hasta el final sin la
presencia del padre, porqué “emigró”, se “dio a la fuga” o se “estresó”,
siempre queda un vacío que duele. Y, claro está, duele que el niño diga
papá sin que éste exista.

Pero recuerda que otros hombres estarán a su lado para que el niño o la
niña establezcan las diferencias entre personas masculinas y femeninas.
Si fuera al revés, que el niño o la niña vivieran con el padre, necesitarían
del contacto con mujeres para que pudiera diferenciar los dos géneros.
Casi la mitad de la humanidad son hombres y más de la mitad son
mujeres. Siempre habrá personas del entorno familiar y escolar
dispuestas a abrazarlos así que no te preocupes disfruta de tu hijo y
animo no estás sola en esto recuerda siempre cuentas con tu familia
que te apoya.

También podría gustarte