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10.15446/rcdg.v29n2.

75960 adernos de Geografía:


Revista Colombiana de Geografía

La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde


la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx * 1

Facundo Rojas ∆ 2

María del Rosario Prieto † 3

Resumen
Desde mediados del siglo xx, se ha desarrollado un conflicto a escala nacional, entre las provincias de La Pampa
y Mendoza (Argentina), cuya causa es una supuesta disminución en la cantidad de agua proveniente del río
Atuel. El objetivo principal del estudio es tratar de reconstruir las condiciones hidrológicas del río Atuel, desde
finales del siglo xviii hasta mediados del siglo xx, para analizar el reclamo pampeano sobre la disminución
del volumen hídrico, la cual se le atribuye al uso agrícola intensivo que realizó Mendoza en la cuenca media.
Para ello, se elaboró una “línea de tendencia” de los caudales del río Atuel, a partir de documentos de archivo,
relatos de viajeros, estudios de naturalistas e incursiones militares, en los que se tuvo en cuenta especialmente
el periodo preinstrumental. Después, se realizó una comparación, a partir de reconstrucciones elaboradas
para áreas vecinas, desde la dendrocronología, la glaciología y la meteorología. Los resultados comprueban
que el río Atuel presenta una disminución sostenida de su caudal —aunque con pulsos de crecidas y sequías
cíclicas— desde finales del siglo xix. En los pulsos observados aparecen importantes periodos secos durante el
siglo xix, los cuales incluso habrían impedido que la cuenca volcara sus aguas al río Colorado, como se supone
que era normal antes de 1900.

Palabras clave: climatología histórica, conflicto ambiental, río Atuel, variabilidad climática.

Ideas destacadas: artículo de revisión que propone una reconstrucción hidroclimática del río Atuel, a partir
del análisis de documentación histórica; aporta al debate sobre el conflicto interprovincial entre Mendoza y
La Pampa, y a la investigación sobre la apropiación del agua de los “oasis” vs “desiertos”.

recibido: 4 de noviembre de 2018 | evaluado: 22 de febrero de 2019. | aceptado: 2 de septiembre de 2019.

cómo citar este artículo

Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario. 2020. “La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica:
siglo xviii a mediados del xx.” Cuadernos de Geografía: Revista Colombiana de Geografía 29 (2): 326-353. https://doi.org/10.15446/
rcdg.v29n2.75960

* Este proyecto ha sido financiado por conicet, picto uncuyo 0012-2016 y el Proyecto crn3056 del Instituto Interamericano para la
Investigación en Cambio Global (iai) (Grant geo-1128040). Se agradece a Ricardo Villalba por sus valiosos comentarios y sugerencias.
∆ ianigla/conicet - Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza - Argentina. Ã frojas@ffyl.uncu.edu.ar – orcid: 0000-0003-3704-0199.
† In memoriam María del Rosario Prieto.
El Dr. Facundo Rojas dedica este trabajo a la memoria de su coautora, la investigadora María del Rosario “Charo” Prieto (1942-2020),
pionera y promotora de los estudios de Historia Ambiental y Climatología Histórica en América del Sur.

Cuadernos de Geografía: Revista Colombiana de Geografía |  vol. 29, n.º 2, jul. - dic. de 2020, pp. 326-353  |  ISSN 0121-215X (impreso) · 2256-5442 (en línea) 
La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 327

Hydrologic Variability in the Atuel River Basin: Historical


Climatology from the Eighteenth to the Mid-Twentieth Century
Abstract
Since the mid-twentieth century, a conflict has developed on a national scale between the provinces of La
Pampa and Mendoza (Argentina), producing a so-called decrease in the amount of water from the Atuel river.
The main objective of the study is to try to reconstruct the hydrological conditions of Atuel river, from the
end of the eighteenth century to the mid-twentieth century and, in this way, analyze the claim of La Pampa
about the water volume reduction, attributed to the intensive agricultural use made by Mendoza, in the
middle basin. For this, a trend line of the Atuel river flows was created, using archival documents, traveler
stories, studies of naturalists, and military incursions, in which the pre-instrumental period is especially
considered. Subsequently, a comparison was made, based on reconstructions developed from other related
disciplines such as dendrochronology, glaciology, and meteorology. The results confirm that the Atuel River
presents a sustained decrease in its flow —although with pulses of floods and cyclical droughts— since the
end of the nineteenth century. In the observed pulses, important dry periods appear during the nineteenth
century, which even would have prevented that the basin flowed into its waters to the Colorado River, which
was supposed to be the normal situation before 1900.

Keywords: historical climatology, environmental conflict, Atuel river, climatic variability.

Main Ideas: Review article that proposes a hydroclimatic reconstruction of the Atuel river based on the
analysis of historical documentation, contributing to the debate on the interprovincial conflict between
Mendoza and La Pampa, and the research about the appropriation of water from “irrigated land” vs “deserts”.

A variabilidade hídrica na bacia do rio Atuel, desde


a climatologia histórica: século xviii e meados do xx
Resumo
Desde a metade do século xx, desenvolveu-se um conflito de escala nacional, entre os estados de La Pampa e
Mendoza (Argentina), cuja causa é uma suposta diminuição da quantidade de água proveniente do rio Atuel.
O objetivo principal do estudo é tentar reconstruir as condições hidrológicas do rio Atuel, desde o final do
século xviii até a metade do século xx, para analisar a reclamação pampiana sobre a diminuição do volume
hídrico, que é atribuída ao uso agrícola intensivo que realizou Mendoza na bacia media. Para isso, criou-se
“uma linha de tendência” dos caudais do rio Atuel, a partir de documento de arquivo, relatos de viajantes,
estudos de naturalistas e incursões militares, em que o período pré-instrumental foi especialmente levado
em consideração. Foi então feita uma comparação, com base nas reconstruções realizadas nas áreas vizinhas
desde a dendrocronologia, a glaciologia e a meteorologia. Os resultados comprovam que o rio Atuel apresenta
uma diminuição prolongada de seu fluxo — ainda que com pulsos e crescidas e secas cíclicas — desde o final
do século xix. Nos pulsos observados, surgem importantes períodos secos durante o século xix que haveriam
impedido, inclusive, que a bacia desembocasse suas águas no rio Colorado como se supunha que foi a situação
normal antes de 1900.

Palavras-chave: climatologia histórica, conflito ambiental, rio Atuel, variabilidade climática.

Ideias destacadas: artigo de revisão que propõe uma reconstrução hidroclimática do rio Atuel, com base
na análise de documentação histórica; contribuindo para o debate sobre o conflito interprovincial entre
Mendoza e La Pampa, e à pesquisa sobre a apropriação da água dos “oásis” vs “desertos”.

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Introducción ambiental derivado de la diminución del caudal, con la


consiguiente afectación de ecosistemas y poblaciones, no
Desde principios del siglo xx, se han desarrollado dife- se transformó necesariamente en un conflicto ambien-
rentes instancias de un conflicto, entre las Provincias de tal, hasta que no surgieron demandas colectivas y am-
Mendoza y La Pampa, por el uso del agua del río Atuel plificación de dicho problema en ciertas arenas públicas.
(Cazenave 2012; Dillon y Comerci 2015; Rojas y Wagner Barbosa (2017) identifica el inicio del conflicto durante
2016; Langhoff, Geraldi y Rosell 2017; D’Atri 2018). Este 1918 con los primeros reclamos y manifestaciones en la
río nace en la laguna del Atuel, que es de origen glaciar. escala local4. El reclamo logró trascender la escala local y
Su red de drenaje en la cuenca alta, se extiende desde se instaló en la agenda pública nacional, en la década de
el Paso de Las Leñas al norte hasta el portezuelo de Las los cuarenta, con la carta de Garay al presidente Perón
Lágrimas al sur. Estos territorios están ubicados al sur (en momentos que se interrumpe el Arroyo La Barda,
de la Provincia de Mendoza, en la cordillera de los Andes, por la construcción de los Nihuiles) (Rojas y Wagner
muy cerca del límite con Chile. El mencionado río circula 2016; Barbosa 2017). Es entonces, a partir de mediados
hacia el este y posteriormente al sureste hasta unirse con del siglo xx, que aparecen organizaciones sociales pam-
el río Desaguadero-Salado. Ya en territorio pampeano es peanas que colocan el conflicto en la escena pública, a
cuando adquiere el nombre de Chadileuvú. Desde allí, través de acciones colectivas que visibilizan sus argu-
el Chadileuvú, atraviesa el oeste de la Provincia de La mentos a nivel nacional.
Pampa, formando hacia el suroeste provincial una serie El reclamo actual de la provincia pampeana está cen-
de lagunas (denominadas genéricamente Urre Lauquén1), trado en la cantidad de agua que debería llegar a su te-
que según parece constituía en otros tiempos un vasto rritorio, de no haber sufrido la afectación en el sector
reservorio de agua que se unía a través del río Curacó al de la cuenca mendocina, derecho que ostentan porque
río Colorado (Figura 1), especialmente en años de gran- el Atuel es un río interprovincial. Como se ha dicho, este
des caudales2. proceso ha motivado un largo conflicto interprovincial.
El problema por el agua entre las dos juridisdicciones En este sentido, La Pampa ha interpuesto a comienzos del
se puede remontar a principios del siglo xx, pues el uso 2014 una —segunda— demanda contra Mendoza, en la
que se hacía del río antes de 1900 fue poco relevante. Corte Suprema de Justicia de la Nación, por la cual solicita
Durante los primeros tiempos de la colonización del sur “amparo por daño ambiental” y “la restitución del caudal
de Mendoza (desde antes de 1879) la agricultura se soste- fluvioecológico original”. Esta reivindicación ha sido im-
nía gracias a la utilización de las aguas del río Diamante. pulsada por el gobierno de La Pampa, en conjunto con
En tiempos recientes, cuando se incrementaron las áreas ong y otros actores sociales5.
irrigadas del sur mendocino con la incorporación del río
Atuel3, comenzaron las primeras disputas. El problema
(que no son endorreicos, como el Malargüe), desaguan en la
misma cuenca que el río Atuel, el caudal que aportarían los
1 Antiguamente se denominaba a todo el conjunto de ciénagas ríos del norte del Atuel (Diamante, Tunuyán, Mendoza, etc.)
y lagunas “Urre Lauquén”, posteriormente disminuyó su su- al río Desaguadero sería menor, por eso estos no suelen ser
perficie y actualmente se identifican principalmente tres: La mencionados en el conflicto.
Dulce, La Amarga y Urre Lauquén. 4 Los pobladores del oeste —pampeano— que reclamaban y cul-
2 Este fenómeno se ha podido comprobar —como veremos— paban a los tapones de Ugalde —las represas caseras que hacía
hacia fines del siglo xviii y en diferentes periodos del siglo la familia Ugalde para desviar el agua y regar a tres kilómetros
xix, de acuerdo con la documentación consultada. del límite Mendoza-La Pampa—, como los responsables de la
3 Hay que recordar que, a diferencia del norte mendocino, la disminución del caudal del Atuel (Barbosa 2017, 68).
expansión del denominado “oasis sur” con producción vi- 5 Si bien no nos concentraremos en la situación jurídica, ni
tivinícola, olivícola y frutícola solo comienza después de la tampoco en el conflicto ambiental, hay que mencionar que
dominación permanente de la República Argentina en te- la Corte Suprema de Justicia de la Nación dictaminó el 1 de
rritorios ocupados por indígenas, situación que se produjo a diciembre del 2017, en un fallo histórico para el derecho am-
partir de 1878 y se conoce como “Campaña del Desierto”. Esa biental argentino, que las provincias en disputa deben pre-
zona irrigada abarca los departamentos mendocinos de San sentar en los siguientes 120 días un plan de obras y acuerdos
Rafael y General Alvear. Si bien todos los ríos de Mendoza para el uso del río Atuel. A su vez, rechazó la defensa de “cosa

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 329

70º0’0”W 69º0’0”W 68º0’0”W 67º0’0”W 66º0’0”W

Provincia de
32º0’0”S

32º0’0”S
San Juan

Provincia de
San Luis

30º0’S

33º0’0”S
33º0’0”S

Sistema del río


Colorado
Chile

50º0’S
34º0’0”S

34º0’0”S
60º0’W

Leyenda

Río
Ríos principales

Desa
Áreas irrigadas
guade
35º0’0”S

35º0’0”S
Límites provinciales
l ro / Salado
tu e Cuenca del río Atuel
R ío A
Provincia de Cuenca del río Desaguadero
Mendoza Otras cuencas del sistema
R ío

del río Colorado


Atu e
l

Datum: WGS 84

36º0’0”S
36º0’0”S

EPSG:4326

Provincia de
37º0’0”S

La Pampa 37º0’0”S
Río

Chad
ileu

Provincia de

Neuquén
38º0’0”S
38º0’0”S

Río Ne
uq

n

R ío
Provincia de Cu
rac
Río Negro ó
R ío Colorado
0 37 74 111
39º0’0”S
39º0’0”S

km
70º0’0”W 69º0’0”W 68º0’0”W 67º0’0”W 66º0’0”W

Figura 1. Área de estudio, las cuencas de los ríos Atuel y Desaguadero, en el sistema río Colorado.
Datos: elaborado por Facundo Rojas (2015), a partir de la base de ssrh (2011).

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Pese a la gravedad del problema, los trabajos científi- determinar cuándo, cómo y por qué comenzó la dismi-
cos existentes sobre el tema son relativamente escasos, y nución del caudal de los ríos regionales.
no profundizan en la dimensión de la variabilidad hídri- Para ello hemos acudido en primer lugar a la infor-
ca histórica, antes de 1906, cuando se instaló la primera mación provista por los documentos de archivo desde la
estación hidrometeorológica. Araneo (2006) calculó para perspectiva de la climatología histórica y hemos compa-
la estación La Angostura (entre 1906 y 2004), un derra- rado los resultados obtenidos con los provistos por otras
me anual (medio) de 1110,18 hm3, con una tendencia a ciencias paleoclimáticas, como la dendrocronología, la
la disminución de su caudal de -2,47 hm3/año6. Es por glaciología y la meteorología.
ello que, como una contribución a esta controvertida Si bien el estudio es sobre la cuenca del río Atuel,
problemática, decidimos indagar acerca de la variabi- hay que mencionar otros cauces que también confluyen
lidad del caudal de los ríos que componen las cuencas en el Chadileuvú, aquellos de los ríos de la cuenca del
Desaguadero-Atuel-Chadileuvú7 antes del siglo xx, para Desaguadero. En la actualidad estos ríos presentan es-
caso o nulo caudal, aproximadamente desde el punto en
que confluyen los ríos Desaguadero y Tunuyán. Estudios
juzgada” planteada por el gobierno mendocino y sostuvo que
realizados muestran que hasta alrededor de 1700, el río
existe un “problema ambiental”, entre otras resoluciones. El
Mendoza corría hacia el este, vertiendo sus aguas en el
fallo completo se puede consultar en el Centro de Información
río Desaguadero. A partir de ese momento, este río que
Judicial (2017). Otros aspectos del conflicto se pueden consultar
aporta sus aguas a la ciudad de Mendoza, comenzó a
en Mannino (2018). El 16 de julio de 2020, la Corte Suprema
derivar hacia el norte por razones climáticas, hídricas y
de Justicia estableció que el río Atuel deberá poseer un caudal
tectónicas (Abraham y Prieto 1981; Prieto y Chiavazza
mínimo de 3,2 m3/seg, medido en el límite entre las provincias
2005). Como se ha descrito en los trabajos citados, hacia
de Mendoza y La Pampa. El máximo tribunal argentino destacó
la segunda mitad del siglo xviii, el norte de Mendoza y
que ese caudal es el recomendado por el Instituto Nacional del
sur de San Juan formaban parte de un enorme complejo
Agua (ina) para mitigar el daño ambiental que fue ocasionado
hídrico que comprendía las lagunas de Guanacache, el cual
por la disminución o ausencia de escurrimiento del río Atuel
estaba alimentado por las aguas superficiales de los ríos
en territorio pampeano. El fallo completo se puede consultar
Mendoza y San Juan (y sus respectivas ciénagas del este
en https://www.cij.gov.ar/nota-37764-La-Corte-Suprema-
de la ciudad de Mendoza —Bermejo y Plumerillo— y su
fij--un-caudal-m-nimo-permanente-para-el-r-o-Atuel.html
vertedero natural, el arroyo Tulumaya y la ciénaga del río
6 Desde 1906 se viene calculando el Caudal Medio Mensual;
San Juan, llamada, El Cochagual). El desagüe natural de
desde 1908 el caudal Medio Diario Máximo y Mínimo; y desde
este complejo hídrico lo constituía el río Desaguadero,
1931 el Caudal Medio Diario del río Atuel en la estación La
que corriendo de norte a sur recolectaba, además, las
Angostura (-35° 05’ -68° 52’). Esta estación se localiza en el in-
aguas del río Tunuyán y las del Diamante8, hasta unirse
greso del Cañón del Atuel, desde antes de que el río ingresara
con el Atuel en la provincia de La Pampa.
al Embalse El Nihuil, construido a fines de la década de los
cuarenta; sin embargo, para los fines de este trabajo solo se
consideran los años anteriores a la construcción de la presa. Desaguadero”, que forma parte del “Sistema río Colorado”,
Los datos posteriores y las estaciones hidrometeorológicas de cuyo nombre toma en Argentina una gran cuenca que nace en
“Carmensa” (-35° 11’ 06”; -67º 43’ 33,6”) que funcionan desde la región andina y desagüa —en parte— en el Atlántico. Dicha
el 15 de mayo de 1985 y “Puesto Ugalde” (-35° 59’ 57, 82”; -67° red hidrográfica tiene un sector norte ubicado en la Provincia
11’ 06,67”), que funciona desde el 30 de octubre de 2010, es- de La Rioja e incluso abarca sectores de las Provincias de Río
tán fuera del periodo analizado. Como referencia general se Negro y Buenos Aires al sur. Sin embargo, en este trabajo nos
puede decir que el promedio anual del caudal del río Atuel, concentraremos en analizar solo dos subcuencas de todo el
entre 1906 y 2004, fue 35,18 m3/segundo en la estación de sistema, las denominadas: Atuel y Desaguadero.
aforo: La Angostura (Secretaría de Infraestructura y Política 8 Desde 1809, pues antes el río Diamante confluía con el río Atuel
Hídrica 2019). en la zona denominada Las Juntas, era una zona pantanosa y
7 En este trabajo se agruparán las cuencas de los ríos Desaguadero de ciénaga, que ambientalmente iba desde muy cerca (al nor-
y Chadileuvú, de acuerdo a la denominación de la Subsecretaría te) de la localidad actual de Goudge, hacia el sureste, a través
de Recursos Hídricos de la Nación (ssrh 2011) y de aquí en del denominado arroyo Las Aguaditas, que deriva hasta el río
adelante se denominarán en este trabajo como “cuenca río Atuel, en una zona que aún hoy presenta un paisaje cenagoso

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Abordaje teórico metodológico datos existentes son insuficientes. A posteriori, se com-


paró esta línea de tendencia con la información provista
Los métodos de la climatología histórica se basan en la por otras disciplinas, tales como la dendrocronología,
utilización de fuentes documentales o archivos históri- la glaciología y la meteorología. Por último, se realizó
cos, para la reconstrucción climática e hidrológica. La una interpretación cualitativa —final— de las fuentes
climatología histórica ha sido enfocada desde diferentes documentales, pero —en este caso— considerando la
perspectivas y métodos; algunos autores de referencia reconstrucción y las comparaciones realizadas en el
(Pfister et ál. 2001; Brázdil et ál. 2005), la ubican en la paso anterior.
interfase entre la climatología y la historia ambiental. Es importante destacar que, en este caso, la caracte-
Es así que esta disciplina presenta abordajes paleoclimá- rística más sobresaliente de la documentación es su es-
ticos y, a la vez, propios de la historia, la geografía o la casez respecto a otras áreas del país y su concentración
ecología política (Prieto y García-Herrera 2009; Prieto, en tres momentos concretos.
Rojas y Castillo 2018).
Nuestro objetivo principal en este trabajo es recons- Primera etapa 1784-1809
truir las condiciones ambientales del oeste de La Pampa La información escrita sobre el sureste de Mendoza
y del sur de Mendoza, desde finales del siglo xviii hasta y norte de La Pampa, por personas que recorrieron el
mediados del siglo xx, poniendo énfasis en los recursos lugar, comienza en la década de 1780, tiempo después
hídricos. La metodología elegida en esta ocasión propone de iniciarse las primeras campañas militares contra los
realizar, en un primer momento, una selección de los do- indios pehuenches, alrededor de 1760. El primer dato lo
cumentos de archivo que contengan datos hidrológicos, ofrece el Comandante Amigorena, quien da cuenta en
para proceder a su extracción y categorización. marzo de 1784 de una inmensa crecida de todos los ríos
La validez de los datos se verifica a partir de una ri- del sur de Mendoza: “[…] conseguí destruir las tolderías
gurosa crítica documental, incorporando la técnica de […] al occidente del gran Río que forman los nombrados
análisis de contenido, que permite derivar datos climá- Diamante, Atuel, Tunuyán y Bebedero […] campo tan
ticos desde documentos históricos, además de ayudar guadaloso, lleno de pantanos y barriales que la continua-
a interpretar y cuantificar los procesos climáticos en ción de los fuertes aguaceros pusieron en un estado fatal
general. El conocimiento histórico, cultural y geográfi- […]” (Morales Guiñazú 1937, 210). No pudo cruzar el río:
co de las tensiones, intereses y contextos particulares […] por causa del insuperable caudal de aguas […] que
de cada fuente documental es imprescindible para in- causó la extraordinaria creciente de todos los ríos que lo
terpretar adecuadamente las perspectivas narrativas componen […] [los indios] arrojáronse a los grandes baña-
y los datos allí presentes (sean archivos militares, co- dos y lagunas que entre el bosque formó la creciente sin
merciales, científicos o religiosos). Una vez realizada la ejemplar, arrojéme yo tras ellos con una partida, siempre
interpretación cualitativa de los datos, esta se traslada por el gran camino de los indios que estaba inundado, pero
a niveles ordinales que van a permitir realizar análisis después de haber caminado dos leguas en parajes a nado
estadísticos y comparaciones con series paleoclimáticas y no haber podido llegar al canal principal se tuvo por in-
provenientes de otras fuentes (Moodie y Catchpole 1975; accesible […]. (Morales Guiñazú 1937, 210)
Baron 1982; Prieto y García Herrera 2009). La recons-
trucción resultante se expresa a través de una “línea Undiano y Gastelu, quien también recorrió la región
de tendencia” de la variabilidad de los caudales del río en ese mismo año —1784— refiere el mismo fenómeno
Atuel (1776-1946). Utilizando los indicadores señalados, en su proyecto presentado durante 18049.
se determinó una escala de cinco categorías: crecidas El Comandante Barros, en el diario de su expedición
extraordinarias (2), crecida (1), caudal normal (0), bajo contra los huilliches, consigna el gran caudal del río
caudal (1), y caudal extremadamente bajo (-2). En este Diamante/Atuel. Relata que el 31 de agosto de 1789, para
caso no se construye una serie, como suele hacerse en
climatología histórica con un método similar, pues los
9 “[…] que yo no pude ver el año de 1784, que anduve por allí, a
causa de las grandes crecientes de aquel año, que hicieron salir
(incluye la laguna Negro Quemado), en la misma longitud de de madre dicho río, inundando a mucha distancia los campos
Villa Atuel, pero hacia el norte del río homónimo (Figura 2). inmediatos […]” (Undiano y Gastelu [1804] 1837, 8).

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poder cruzar ese río, también llamado Potrot “[…] lo […] desde allí, por el camino de postas siguió hasta la capital
executamos en balsas de cuero por lo acaudalado que es del Virreinato. Por el contrario, al año siguiente (1805),
[…]”. (Archivo General de la Nación - agn 1789, 9/1-3-5). no tuvo inconvenientes en cruzarlo para regresar a su
El prestigioso naturalista Félix de Azara también se tierra desde Buenos Aires (Molina 1805; Della Mattia y
ocupó en 1790 de expresar su asombro ante el caudal que Mollo 2002).
llevaba el río Diamante/Atuel el cual “[…] lleva suficiente Por otra parte, era propio de esta etapa —un pe-
agua para ser navegable, a lo menos con chalupas, desde riodo en que la navegación fluvial era una de las ca-
que se le incorpora el Atuel hasta encontrar el Río Negro racterísticas más importante del transporte comercial
(sic), y este, desde allí a la mar en la costa patagónica […]” en Europa— que los viajeros sintiesen la tentación de
(de Azara 1969, 221). arriesgar hipótesis sobre el tipo de embarcación que
Unos años después, durante 1798, el río Tunuyán podría transitar con comodidad por los ríos del área.
formó otro cauce hacia el sur (Archivo General de la El aporte de estos datos, por parte de los observado-
Provincia de Mendoza - agpm 1798), contribuyendo res, nos permitió establecer —de acuerdo con las di-
a aumentar el caudal del río Desaguadero. Es en 1809 mensiones y calado referidas por cada viajero sobre las
cuando el río Diamante, que funcionaba como afluente embarcaciones aludidas— una aproximación al caudal
directo del río Atuel, se alejó de este último, abriendo de los ríos, en diferentes años (Tabla 1).
un nuevo cauce hacia el este y aportando directamente Una fuente reiteradamente citada es la obra de Luis
al Desaguadero-Salado. Si bien el encargado del Fuerte de la Cruz, funcionario del Reino de Chile que se ofreció a
de San Rafael, Miguel Telles y Meneses, se atribuyó el buscar un nuevo camino que uniera el Fuerte de Ballenar
desvío del río, concordamos con De Moussy, quien, al (actual Región del Bío-Bío) en Chile con Buenos Aires en
referirse al hecho, afirma que la causa del evento fue una 1806. Este funcionario de la Corona fue quien primero des-
gran crecida en la temporada estival, relacionada con pe- cribió la inmensa laguna de Urre Lauquen. Es importante
riodos de colmatación del cauce con arena y material de destacar que el funcionario no la vio personalmente, sino
arrastre (fenómenos de agradación) seguidos de súbitas que basó sus descripciones en los relatos provistos por los
crecidas del río que provocaron su cambio de curso. Como indígenas. Justamente esas descripciones se realizaron en
pasó “[...] con el Diamante que, cesando su reunión con fechas cercanas a la ocurrencia de uno de los más fuertes
el Atuel, fue, a fines del siglo pasado a verter sus aguas fenómenos El Niño que se conoce: el de 1803-1804, el cual
en el Desaguadero, abajo del paso de las Piedritas [...]”. seguramente también experimentó de Molina Basconcelos.
(De Moussy [1860] 2005) (Figura 2). Respecto a este tema, debemos señalar que, cuando los
Si relacionamos esta afirmación, con el hecho de que documentos históricos consignan grandes caudales de los
entre 1720 y 1790 se produjo un periodo de veranos cáli- ríos de la región, es probable que los registros correspon-
dos en cordillera (Villalba 1990) —que habría implicado dan a años en que se había producido un evento El Niño,
un mayor deshielo— podemos afirmar que estos eventos el cual, provoca en esta región intensas precipitaciones
habrían coincidido con desbordes de ríos, mayores cau- nivales en cordillera y, consecuentemente, un aumento
dales y cambios en los cursos de algunos ríos. de la escorrentía en el verano posterior.
A estas fuentes se agregan un poco más tarde el relato Dice Luis de la Cruz:
de los viajes realizados por funcionarios de la Corona es- Este río [el Atuel] es de bastante agua [...] su ribera es
pañola (Cerro y Zamudio [1802] 1837; Sourrière de Souillac de enea o batru (totora) y carrizo; por ambas partes forma
[1805] 1837) hacia esa región entonces desconocida por preciosas islas [...] [cruzan el río con una balsa] La anchura
ellos, con el objeto de explorar nuevas rutas comerciales del río es de noventa y ocho varas y su profundidad de dos,
entre Buenos Aires y Chile que evitaran las nieves de la corre muy lentamente y su plan es trumagoso y pastoso,
estación invernal en el Paso de la Cumbre (actual Paso pues por la claridad de las aguas se ve muy bien [...]. (de la
Internacional Los Libertadores que une las ciudades de Cruz 1806, legajo 179, 25)
Mendoza y Los Andes) (Acevedo 2007).
En 1804 con el mismo objetivo, Justo de Molina Este río que antes se llamaba Ocupal […] nace de la cor-
Basconcelos partió de Chillán y traspuso la cordillera por el dillera de Malalque, corría antes de mayor cuerpo de aguas
Paso de Alico (actual Paso de Laguna de Epulafquen). Sin por el cajón de Potrol y a causa de un derrumbe siguió este
embargo, vio frustrado su intento de cruzar el Chadileuvú curso […] dicen que a cinco leguas de distancia se junta di-
ante la enorme crecida, por lo que se dirigió a Mendoza y cho Potrol con este río por donde este mismo se junta con

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 333

70º0’0”W 69º0’0”W 68º0’0”W 67º0’0”W 66º0’0”W

Sistema de referencia
Datum: WGS 84
EPSG:4326

Leyenda
Ciudad de Mendoza Ganado ovino criado por indígenas
desde 1781

33º0’0”S
33º0’0”S

Ganado asilvestrado desde 1670


Río Mendoza Territorio indígena en el siglo XVII
Río Tun u Frontera de los establecimientos
yán
ganaderos hispano-criollos
Chile Límites provinciales argentinos
actuales
Dirección del movimiento en las
fronteras

34º0’0”S
34º0’0”S

Ciénagas donde se unía


el río Diamante al Atuel

35º0’0”S
35º0’0”S

36º0’0”S
36º0’0”S

37º0’0”S
37º0’0”S

70º0’0”W 69º0’0”W 68º0’0”W 67º0’0”W 66º0’0”W


Figura 2. Cambios en la frontera y asentamientos indígenas en Mendoza, entre 1670-1878.
Datos: elaborado por Facundo Rojas a partir de la versión preliminar realizada por Liceaga (2017), y de las fuentes de los mapas confec-
cionados en Prieto y Abraham (1998).

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Tabla 1. Dimensiones probables del cauce y caudal río Atuel y Chadileuvú
Año de la
Expedicionarios referencia Referencia bibliográfica Ancho del cauce y caudal Profundidad Periodo
a los ríos
Atuel: no pudo cruzar el río “por causa del insuperable caudal de
Amigorena 1784 aguas [...] que causó la extraordinaria creciente de todos los ríos que No se aclara Más de metro y medio
lo componen” (Morales Guiñazú 1937, 210).
Lo “executamos en balsas de cuero por lo acaudalado que es” (agn
Barros 1789 No se aclara Más de metro y medio
1789, 9/1-3-5).
Félix De Azara 1790 “[…] para ser navegable a lo menos con chalupas” (Azara 1969, 221). No se aclara Más de metro y medio
Primero
Justo de Molina Chadileuvú: ve frustrado su intento de cruzar el Chadileuvú ante la
1804 No se aclara Más de metro y medio
Basconcelos enorme crecida (Molina 1805, 5).
“La anchura del río es de noventa y ocho varas y su profundidad de Noventa y ocho varas: 82 metros 2 varas: 1,67 metros
Luis de la Cruz 1806
dos” (de la Cruz 1806, 25). aprox. según vara de Burgos. aproximadamente.
“[…] en lo más explayado de él tiene 100 varas de ancho: y fuera de 100 varas máximo-12 mínimo: “no dio más que a la
Hernández 1806 este placer tendrá su caja en lo más estrecho de doce a catorce varas” entre 83,5 y 10 metros cincha”: No más de un
(Hernández [1806] 1837, 11-12). aproximadamente. metro.
Atuel: “[…] es bastante caudaloso, que puede navegar un bergantín” 2 metros
“un paso vadeable a caballo y no llega el agua más que al encuentro” Navegable aproximadamente.
Velazco 1833 (Morales Guiñazú 1937, 125). No más de un metro.
Chadileufú: “es sin duda navegable aún con fragata” (Morales 5 metros
50 varas: 41,25 metros
Guiñazú 1937, 125). aproximadamente
Aldao, Segundo
Chadileufú: “en verano es navegable sin dificultad con bergantines”. 2 metros
Benavídez, 1833 Navegable
(Parish, 1853, 251-252 y 263). aproximadamente
Parish
Chadileufú: Por referencia de Luis de la Cruz y El Coronel Velazco 2 metros
de Moussy 1854-1860 Navegable
sería navegable (de Moussy 2005, 163-164). aproximadamente
Day 1850 Recorrió los dos ríos en canoa (Marcó del Pont [1928] 1994, 181-182). Navegable Más de metro y medio
“Ambos ríos, Chadileofú y el Diamante, son caudalosísimos”
Hudson 1852-1854 Son extremadamente caudalosos No se aclara
(Hudson [1898] 2008, 487).
Dupont 1879 Salado (Chadi-Leuvú) (Racedo 1940, 124-125). 21 metros 1,60 metros
Sin determinar (más
“[…] pues las lanzas que introducía en el agua, en la orilla mismo no
Alzogaray 1879 No se aclara de 6 varas, más de 5
tocaban el fondo” (Racedo 1940, 190).
metros).
Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

Sin determinar (más


Una cuadra (100 metros
Arigós 1879 Detallado en página 26 (Racedo 1940, 195-196). de 6 varas, más de 5
aproximadamente)
metros).
Entre 18 y 5 pies.
R. Roca 1881 Detallado en página 26 (Racedo 1940, 116). Entre 40 y 65 metros
Entre 5,5 y 1,5 metros. Tercero

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“Solamente en años muy lluviosos el Colorado recibiría -según
Wichmann 1881 las declaraciones de los indios- masas de agua de la Laguna Urre No se aclara No se aclara
Lauquen” (Wichmann 1881, 424-425).
“Reconócese generalmente que, en 1908, el río estuvo
Kennedy 1908 No se aclara No se aclara
excepcionalmente bajo [...]” (Kennedy 1909, 13).
1906- 07 los caudales llegaron a
Büchi 1906-1907 Detallado en página 29 (Büchi 1945, 27). No se aclara
120 m3/s en enero
Caudal muy insignificante durante
Olascoaga 1909 Detallado en página 27 (Latzina y Martínez 1910, 97). No se aclara
1909
334
La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 335

el siguiente que según reconozco es el Desaguadero […] dio un poso que hacer por tener el rio algún fango en
Puelmanc —su informante— […] asegura que el río del medio […] y previniendo que en ellos no podíamos pajar,
Diamante, que sale del lugar de Cusa, corriendo hacia el determiné se hiciesen balsas de los cueros que á preven-
Oriente, se le emboca a este río [el Atuel] que nos resta y ción traía […]” (Hernández [1806] 1837, 11-12). En 1809,
con él toma al sur, formando en todos estos bajos inmen- la mencionada separación de los ríos Diamante y Atuel
sas lagunas, hasta juntarse con este Chadileubú […] desde marcó el fin de este periodo.
donde todos juntos corren hasta resumirse en un gran lago
[Urre lauquen]. (de la Cruz 1806, legajo 179, 25) Segunda etapa 1830-1877
Durante el proceso independentista y las guerras
El mapa de Juan de la Cruz Cano y Olmedilla (1775) civiles posteriores, se produjo un periodo —de apro-
es el primero que se conoce sobre el área de estudio. ximadamente treinta años— caracterizado por una
En este primer mapa, si bien está presente una to- notoria ausencia de información ambiental. Solo hasta
ponimia que corresponde a nuestra zona de estudio, alrededor de 1830 comenzó una nueva etapa, en la que
la configuración de los ríos y lagunas a las que alude predominan las fuentes de carácter militar, a partir
muestran grandes diferencias con la toponimia que de las expediciones punitivas contra los pehuenches y
podría haber existido en los últimos siglos. Por lo cual, otros grupos indígenas. Este periodo se inicia con Juan
probablemente se realizó el mapa de estos territorios Manuel de Rosas en la década de 1830 y se extiende
basándose en diferentes relatos, sin haber recorrido hasta 1878 con la denominada “Campaña del Desierto”.
los respectivos lugares10. En estas incursiones, las tropas ingresaban más hacia
En abril de 1806, Hernández —otro militar—, partió el sur de la frontera. En este periodo, varios militares
del Fuerte de San Rafael para explorar el río Chadileuvú. inclusive llegaron hasta donde confluían los ríos Atuel
Según este militar: y Desaguadero (Chadileuvú) para formar más adelan-
[…] este río corre de n a s y es bastante abundante de te la gran laguna de Urre Lauquen. Posiblemente fue
agua […] en lo más explayado de él tiene 100 varas de an- en esta etapa cuando la gran laguna fue avistada por
cho: y fuera de este placer tendrá su caja en lo más estre- primera vez por funcionarios y militares. El evento El
cho de doce a catorce varas y toda a nado […]. (Hernández Niño - Oscilación del Sur (enso), 1832-1834, corres-
[1806] 1837, 11-12) ponde a estos momentos, cuando es probable que la
zona lacustre estuviera colmada como consecuencia de
El 23 de abril cruzaron el Chadileuvú: “[…] A la una la abundante nieve caída en la cordillera.
de la tarde hice echar la caballada en lo más esplayado Durante este periodo, también se manifiesta el in-
del río, haciendo pasar gente á pié, y vadearlo por todas terés topográfico por estudiar la Laguna Urre Lauquen
partes, que no dio más que hasta la cincha; la caballada y su eventual unión a través del arroyo Curacó con el
río Colorado, situado hacia el sur. El General Aldao
(según Parish) la examinó en persona con motivo de
10 Valga el ejemplo de que si bien existe un río “del Diamante”
una expedición contra los indígenas, a cuyo mando
que se une con el “Longen” (se supone que era el nombre que
marchó en 1833, recorriendo a caballo toda su circun-
se le dio al Atuel) y también con el denominado: “Miaulú,
ferencia, pero no encontró la salida que buscaba hacia
Leuvu o Sanguel”, no son esos sino el “Pichipicpicunta”, el
el Colorado (Parish 1853, 251-252).
que termina en las “Lagunas del Desaguadero” las cuales
Benavídez ese mismo año también habría reconocido
suponemos se podrían ser la laguna Urre Lauquen (aunque
la gran laguna. Pudo distinguir el curso del Colorado a una
también la “Laguna de Tehuel” podría ser la Urre Lauquen).
distancia de cuatro leguas. Afirmaba que la laguna se po-
También es interesante observar cómo de un lugar al este de
dría unir con este río mediante la construcción de un canal,
la ciudad de Mendoza, en donde podrían ubicarse las Lagunas
lo que significa que tampoco localizó una unión perma-
de Guanacache, se desprende otro río (denominado “Moya-
nente entre la laguna y el río Colorado (Parish 1853, 263).
lec Leuvu”, “Desaguadero de Mendoza” o “Colorado”) que
Por su parte, el Coronel Velazco con sus tropas re-
termina en el océano Atlántico, pero transita hacia al sureste
conoció el Atuel y el Chadileuvú en 1833 (Velazco [1833]
de lo descrito más arriba sin aparente conexión con el río del
1937). Sobre el primero afirmaba que:
Diamante o la Laguna del Desaguadero.

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336 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

[…] es bastante caudaloso, que puede navegar un sus ríos. Este último se refiere a la Laguna Urre Lauquen
bergantín.11 Al ne de nuestro campo tiene un paso va- como el sitio más austral adonde habían llegado las fuer-
deable a caballo y no llega el agua más que al encuentro. zas militares (37 °s): “[…] la laguna de Choiquimahuida,
Se reúne al Salado–Chadileuvú como 5 leguas más abajo que tendrá como 50 leguas de circunferencia, es la que
[…] En el centro de la isla (en medio del río) se encontra- se designa en el mapa que se acompaña con el nombre
ba el cerro de Limay Mahuida […] (como 100 leguas cir- de Urre-Lauquén, o Laguna Amarga […]” (Parish 1853,
cunferencia) […] (la isla de Limenmahuida) […] formada 262). Agrega que el Atuel:
por dos brazos del Chadileifú […] tiene hasta la junta de […] que corre en aquella dirección por una distancia
los ríos Atuel y Salado como 15 leguas de sur a norte y considerable, hasta que los ríos Diamante y Cadileufú se
una de poniente a levante; hay algunos zanjones que sin le juntan, y acumuladas forman otro grande receptácu-
duda han formado las inundaciones del Salado; este, es lo de aguas sin salida llamado el Urrelauquen o Laguna
magnífico, en la cantidad inmensa de agua que lleva, no Amarga, por ser sus aguas en extremo salobres […].
se percibe su fondo pero el ancho no es más que como 50 (Parish 1853, 251)
varas castellanas: es sin duda navegable aún con fragata
[…]. (Morales Guiñazú 1937, 125) También debemos aclarar que ninguno de ellos visitó
el área en cuestión, sino que rescataron lo que había sido
La recurrente (pero no permanente) unión de la la- escrito por militares, aventureros y naturalistas sobre
guna Urre Lauquen con el río Colorado, en diferentes la región, con una mirada más cientificista y explicativa
épocas, nos aporta un indicador más acerca del caudal de los fenómenos descriptos. También repite que, en
del Chadileuvú, teniendo en cuenta que mientras mayor verano, el Atuel podría ser navegable con bergantines.
era el caudal arrastrado por el río, más importante era el Agrega De Moussy que:
volumen de agua de la laguna y más posibilidades tenía Este curso de agua El Atuel-Salado continua direc-
de esta derramar sus aguas al río Curacó para unirse al tamente corriendo hacia el sur a través de terrenos per-
río Colorado. fectamente horizontales y por consecuencia sembrados
Para esta época ya se cuenta con escritos de natu- de lagunas y bañados, hasta un gran lago salado llamado
ralistas como Parish y De Moussy, quienes confeccio- Curra-Lauquen que, en tiempos ordinarios no tiene una
naron varios mapas y planos donde incluso se puede canal de descarga conocido. Pero, al decir de los indios, en
ver la inmensa laguna de Urre Lauquen. En algunos se los años de grandes aguas, los bañados del sur de estas la-
observa el arroyo Curacó desprendiéndose de dicha la- gunas comunicarían con el río Colorado y vertería allí sus
guna y desembocando en el río Colorado. Hay que decir sobrantes […]. Esto es lo que se sabe y ha sido confirmado
que varios de los mapas existentes presentan errores y primero por la expedición de 1833 y luego la de 1854 […]
omisiones. Muchos de ellos provienen de autores que que todas esas planicies son bajas, sin ondulaciones […] y
—suponemos— no recorrieron la región, y completaron que en los años lluviosos se forman muy vastos bañados.
la cartografía de las zonas no visitadas a partir de mapas Parece que el Chadi-Leuvú y el Salado llevan mucha agua.
anteriores. Esa metodología, no siempre reconocida, era Cruz, en 1806, y el Coronel Velazco 1833, estaban de acuer-
usual en el trazado de mapas que realizaban viajeros y do sobre ese punto y convencidos de su navegabilidad. (De
exploradores, en regiones más débilmente exploradas, Moussy [1860] 2005, 163-164)
por lo menos hasta fines del siglo xix (Figura 3).
Tanto Parish como De Moussy también describieron Edmundo Day, médico y terrateniente de la región,
la situación de los ríos y lagunas durante años antes de la en 1850 hizo construir una pequeña embarcación y re-
publicación de sus obras. Los trabajos de ambos son si- conoció el río Atuel por más de 15-20 leguas (Morales
milares y se basan fundamentalmente en los datos de los Guiñazú 1937, 146-153). Marcó del Pont ([1928] 1994) nos
primeros militares que visitaron la zona. De Moussy no ofrece su itinerario, afirmando que partió con una gran
aporta mucha más información que Parish sobre la zona y canoa desde la laguna Urre Lauquen desplazándose en
ella hasta la junta del Atuel con el Chadileufú —aguas
arriba— y luego hasta el río Diamante recorriendo en
11 Un bergantín tenía 2 m de calado (además de dos palos y 65-70
total mil trescientos kilómetros. Agrega que “Con este
m eslora). Una fragata contaba con 5 metros de calado, 100 m
viaje se demostró que estos ríos eran navegables en aquel
de eslora y tres palos.

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 337

Louis Stanislas d'Arcy Delarochette John Pinkerton (1812)


Juan de la Cruz Cano y Olmedilla y William Faden (1811)
y William Faden (1775)

Aaron Arrowsmith y Samuel Lewis (1812)

Carl Wood (1825)


Geographisches Institut Adrien Hubert Brue (1839)
(Weimer, Germany) (1837)

L. Dussieux (1845)

Society for the Diffusion of Useful Knowledge (1840) Jeremiah Geenleaf (1840)
Adrien H. Brue y Benedetto
Marzolla (1842)

John Arrowsmith (1844) Adolf Stieler (1850) Parish (1858)

Victor Martin de Moussy (1865) Adolf Stieler (1867) Adolf Stieler y A. Petermnn (1895)

Figura 3. Composición con fragmentos de los primeros mapas de la zona de estudio.


Datos: elaborado por Facundo Rojas a partir de las colecciones de mapas históricos disponibles en Biblioteca Nacional Mariano Moreno (sf.),
David Rumsey Map Collection (sf.), Archivo General de la Nación República Argentina (1789), Memoria chilena (1806), Etnohistoria de La Pampa (2012).

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338 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

tiempo por pequeñas embarcaciones” (Marcó del Pont retención de las aguas del río Mendoza en el oasis norte.
[1928] 1994, 181-182). Es probable que el caudal del Desaguadero-Salado también
Intelectuales como Hudson (referenciado a los años haya comenzado a disminuir por esta misma causa. El
1852-1854) también se interesaron por el río Atuel del importante crecimiento del oasis de San Rafael y Colonia
cual afirma que no está: Alvear es más tardío, pues se produce hacia fines del siglo
[…] aún perfectamente averiguado si forma poco des- xix y principios del xx, aunque el antecedente más leja-
pués el Cobu-leubú […] llamado más abajo río Colorado […] no de San Rafael es el Fuerte San Rafael del Diamante
ni tampoco parece completamente averiguada la circuns- construido en 1805. Por ejemplo, en la zona de la cuenca
tancia de no tener la gran laguna de Limenmahuida o Urre- más cercana al territorio pampeano, se fundó durante
lauquen desaguadero alguno […]. Ambos ríos, Chadileofú y 1901 Colonia Alvear (hoy la capital del departamento)
el Diamante, son caudalosísimos, y nada de extraño tendría y durante 1912 San Pedro del Atuel, hoy conocido como
que algún brazo de dicha laguna viniese a juntarse más al Carmensa. Además, hay que decir que las hectáreas de
sud con el Colorado […]. (Cruz, en la relación de su viaje riego asignadas en concesión podían demorar años o dé-
desde Antuco dice al respecto: “Es de notar que también hay cadas en efectivizarse en esta zona del sur provincial. El
algunos indios que aseguran, y especialmente el pehuenche dato importante sería cuántas hectáreas efectivamente
Tripainan, que este río de Chadileofú, más al sud, pasan- se utilizaban y no cuántas estaban asignadas a proyec-
do una travesía de médanos, va a brotar en unos menucos tos colonizadores.
u ojos de agua que ya vuelven a formar un considerable Según Prieto y Abraham (1998), en el sur de Mendoza
cuerpo que corre hasta el mar”). (Hudson [1898] 2008, 487) con la Campaña al Desierto se produjo la apropiación de-
finitiva del territorio por parte del Estado y particulares,
Respecto a este punto, el Coronel Pueyrredón, al des- aunque existían ya grandes latifundios dedicados a la ga-
cribir el río Colorado en 1861, afirma que: nadería en las áreas más cercanas a la cordillera. Según
[…] generalmente se cree que este río se corta o desapa- Marcó del Pont ([1928] 1994) desde 1818 los indígenas
rece […] que su origen es el Chacileu /Chadileuvú/ […] o el habían comenzado a vender sus tierras, que se transfor-
Tunuyán, que pasando por Mendoza […] se une más abajo maron en estancias y más tarde gobernantes como Pedro
para perderse en unas grandes lagunas, como en efecto se P. Segura, en 1845, procedieron al reparto de tierras para
pierde; y que después de correr subterráneamente muchas el fomento de la agricultura. Sin embargo, es a partir de
leguas, vuelve a salir y forma el Colorado. Esto no es exacto. 1878 que se produjo la usurpación y colonización definiti-
Estos dos ríos se pierden para no salir más y el Colorado va de nuevas tierras. La producción agrícola, centrada en
[…] no se corta nunca. (Pueyrredón 1980, 50) la alfalfa y la vid, comenzó a ocupar un lugar importante
en la economía del antiguo fuerte de San Rafael. Según
el censo de 1864 del río Diamante, en ese año ya existían
Tercera etapa 1878-1946 13 canales de irrigación que abastecían a una población
Desde 1879 comienza una tercera etapa, con la de- importante (agpm 1864).
nominada Campaña al Desierto, con reportes militares En 1871 ya habían comenzado a llegar inmigrantes
más concretos y minuciosos. A estos se agregan poste- franceses (Ballofet, Iselín) y de otras nacionalidades a
riormente informes de naturalistas y geógrafos, primero la región. A través de la apertura de canales de riego y
acompañando a los expedicionarios y luego, finalizada la nivelación de campos se promovió la actividad gana-
campaña contra los indígenas, contribuyeron al conoci- dera y la agrícola. En octubre de 1903, se trasladó la
miento de la región. En este periodo se cuenta, además, antigua Villa a la Colonia Francesa, situada a 15 km al
con información periodística. Se observa que las descrip- este-sudeste, también a orillas del río Diamante (Marcó
ciones hacia fines del siglo consignan una lenta dismi- del Pont [1928] 1994). Durante varios años solo el río
nución del caudal del río, aunque seguramente el gran Diamante fue utilizado para la irrigación, a tal punto
evento de El Niño 1877-1878 provocó un gran aumento que si bien, en 1891, las concesiones de aguas del río
durante esos dos años. Atuel alcanzaban 49.034 h, las labranzas eran de poca
A partir de esta década creció la población de Mendoza consideración (agpm 1891). Es probable que gran parte
(sector norte) por la afluencia inmigratoria; se comen- de las aguas también se utilizara para sembrar alfalfa.
zó a utilizar más agua para el regadío y las Lagunas de Desde 1879 contamos con varias descripciones de mi-
Guanacache, fueron disminuyendo su volumen por la litares que rastrillaron la región del Desaguadero-Salado,

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 339

persiguiendo a los indígenas. Sobre un recorrido realiza- Por el contrario, Rudecindo Roca afirmaba en 1881 que:
do entre el 23 y el 27 de mayo de 1879, el Doctor Dupont En la época en que el coronel Velazco (1833) vió el Salado,
le decía a Rudecindo Roca12: “Este arroyo, cuyo nombre debía estar en el apogeo de sus más grandes crecientes. En
ignoran indios y baqueanos, parece ser un afluente no- la actualidad no tiene más ancho en este paso que 60 me-
table del río Salado y tiene un cauce de 30 a 31 metros tros por 5 pies de profundidad, en el Puente de Tierra 40
de ancho, con una profundidad de 1 ½ metros, donde metros de ancho por 18 pies de profundidad, en el Meuco
lo pasamos” (Dupont, citado en Racedo 1940, 124-125). 65 metros de ancho por 15 pies de profundidad, y en el paso
El río Salado (Chadi-Leuvú), a orillas del cual acampa- sin nombre 50 metros de ancho por 15 pies de profundidad.
mos el 23 de mayo […]. El cauce que vimos tenía entonces (Racedo 1940, 116)
21 metros de ancho, con una profundidad de un metro y
sesenta centímetros […] baqueanos que habían pasado en Hemos comprobado que lo mismo expresaban en 1879
otros tiempos el río Salado, a esta altura, aseguran haberlo los militares que acabamos de citar. Es posible entonces
visto seco: dicen también que el agua es muy salada cuan- que El Niño de 1878-1879 haya incidido en el extraordi-
do llueve poco. (Dupont, citado en Racedo 1940, 124-125) nario aumento de caudal que describen para ese año los
Los terrenos comprendidos entre la margen derecha militares ya citados.
del río Salado y los inmensos pantanos formados por las Una fuente interesante son los censos nacionales. A
inundaciones del Atuel, son surcados por arroyos de una partir de 1895, las descripciones que estos presentaban
agua clara y potable: en partes fértiles y en partes estériles sobre la geografía e hidrología de Mendoza estaban escri-
y salitrosas. Los pantanos formados por varios brazos del tas por geógrafos y naturalistas de renombre en la época y
Atuel y por el Salado, ocupan un área considerable de te- aportan otra visión de la situación hídrica regional. En el
rreno, que está en la mayor parte del año, debajo del agua. Censo de 1895 (tomo i, 50) se afirma que el Desaguadero
Estos pantanos, muy fangosos, tienen en su porción más se encuentra “[…] sin agua la mayor parte del año […]
angosta que atravesamos, una anchura de 17 kilómetros. Un brazo […] corre hacia el sur hasta la Laguna de Curre
Empleamos los días 25 y 26 de mayo para pasarlo, tirando Lauquen”. Esto implica que el Desaguadero, como ya lo
caballos y mulas de las riendas con los pies en el barro y el habíamos indicado anteriormente, llevaba poca agua
agua en partes hasta las rodillas, en partes hasta la raíz de desde fines del siglo xix.
los muslos. (Dupont, en Racedo 1940, 124-125) La introducción a los ríos mendocinos del Censo de
Mendoza de 1909 la escribe Manuel Olascoaga, quien
Otro militar, Hilario Alzogaray, afirmaba en el mis- afirma algo similar a lo expresado anteriormente respecto
mo diario de operaciones que “pues el Chadi-Leuvú nos a la escasez de caudal de los ríos regionales. El río Atuel:
impedía el transito […] lo sondeé en varias partes y me enriquece vastas extensiones de tierras de cultivo y
convencí que solo a nado podía vadearse, pues las lanzas en muchos puntos facilita el riego por sus dos riberas
que introducía en el agua, en la orilla mismo no tocaban —gira al n buscando incorporación al Diamante (in-
el fondo” (Racedo 1940, 190).13 terrumpida) abriéndose cauce al se y s en cuya última
orientación marcha hasta desaparecer en los pantanales
extremos del Chadileufú […]. Ha sido navegado después
12 Apuntes topográficos sucintos, concernientes a la expedición
del Salto del Nihuil, hasta su término sobre los pantanos de
hecha a los ríos Salado y Atuel y a los terrenos comprendidos
Urrelafquen, en una canoa. (Latzina y Martínez 1910, 97)
entre este y el río Colorado, por la vanguardia de la 3ª División.
13 A continuación, Alzogaray agrega que añade un plano, donde
Reafirmando lo expresado por otros autores, opina que:
se consigna dicho lugar con el nombre de “Paso de Noque”,
[…] aunque algunos textos geográficos hablan de sus
pero que se denominaba Trecul-cué. Arigós completa los datos:
aguas que llenan las lagunas de Urrelafquen y sus rebalses
“El río Chalileo es muy correntoso, […] a inmediaciones del
corren hasta el Colorado, el Chadileufú en la última parte
paso del Noque tiene término medio 44 varas de ancho; a 12
de su curso, cuando ha recibido los cuatro ríos […], trans-
cuadras de dicho paso, costeando el río en dirección contraria
porta un caudal muy insignificante que no corresponde ni
a su corriente, tiene una cuadra de ancho y parece propio para
paso, pues se notaba que se había pasado hacienda por ahí.
La profundidad no ha podido determinarse, porque hasta en fondo con las lanzas más largas (de 6 varas) de que disponía-
el mismo paso, que se efectúa a nado, no se ha podido tocar mos” (Máximo Arigós, citado en Racedo 1940, 195-196).

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340 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

a la centésima parte del que recibe y es casi nulo el desagüe el verano, debido a su alto contenido de sales […] en el
que hace en el río Colorado por el arroyo riscoso llamado invierno se transforma en un río potente y rápido que
Curacó. El resto de las aguas están encenegando e invadien- no solamente recibe las aguas del río Atuel sino también
do grandes extensiones de buenas tierras provinciales y las aguas del río Diamante que corre más al norte y de la
nacionales y el río Colorado que hasta 1807 (sic) recibía del laguna Bebedero y de muchos arroyos de la Pampa […].
Chadileufú el caudal íntegro de nuestros ríos, era navega- (Wichmann 1881, 426-427)
ble como era navegable el Chadileufú según la exploración
personal de aquella fecha por el general español José M. En la primera década del siglo xx se sucedieron sequías
de la Cruz. (Latzina y Martínez 1910, 97) en las fuentes de los ríos Atuel y Diamante, consignadas
tanto en los periódicos de la época —por ejemplo, en El
El capítulo hidrográfico del Censo Nacional de 1914 Eco de San Rafael—, como en los reportes de científicos
fue escrito por el geógrafo Latzina, quien luego de dar que recorrían el área. El mencionado periódico consigna
un panorama general de la cuenca y de los ríos que la el 20 de enero de 1904 la escasez de nevadas en las na-
componen, concluye que el río Salado nace en los terre- cientes del Atuel durante el invierno de 1903.
nos anegadizos Kennedy escribía en 1909 “Reconócese generalmente
[…] formados por el Desaguadero […]. Desde su na- que, en 1908, el río estuvo excepcionalmente bajo […]” a
cimiento hasta su entrada en el territorio nacional de La lo que agregaba que “Fuera del pequeño regadío […]
Pampa donde toma el nombre de Chadileuvú es límite en- mencionado, que no pasa de 6 a 7.000 hectáreas no
tre las provincias de San Luis y Mendoza […]. El Salado o se usa el agua del río Atuel, el cual […] desciende al
Chadileuvú termina en la laguna Urrelauquen (Pampa) de Desaguadero y se pierde en los pantanos salitrosos”
la cual es aún dudoso si comunica con el río Colorado por (Kennedy 1909, 13).
medio del arroyo Curacó. (Latzina 1916, 113) Büchi (1945) confirmaba para un año más tarde
(1909) este ciclo de sequías con datos del servicio hidro-
Lo más interesante de estos textos es la incertidum- gráfico del Departamento General de Irrigación (dgi),
bre acerca de la existencia o no de una conexión entre institución que disponía de la serie ininterrumpida de
la laguna Urre-Lauquen y el río Colorado hacia fines del observaciones limnimétricas del río Atuel desde 1907.
siglo xix, cuestión que en textos posteriores se presenta “En 1906-07 los caudales llegaron a 120 m3/s en enero. En
como una constante histórica que solo habría cambiado 1907-1908 en el mismo mes apenas llegó a los 68 m3/s y
hasta el siglo xx, a partir del uso de la cuenca alta. en 1908-09 en ese mes apenas llegaron a 60 m3/s” (Büchi
Otra fuente importante para nuestro trabajo tiene que 1945, 27). Estos datos confirman lo expresado por va-
ver con la información dejada por geógrafos, hidrólogos rios autores del mismo periodo acerca de la escasez
y geólogos que recorrieron las tierras del sur de Mendoza de agua en los ríos de la región a fines del siglo xix y
luego de 1879. Es el caso de Wichmann (1881) quien, refi- principios del xx.
riéndose al río Colorado afirma que “Solamente en años Stappenbeck (1913) afirmaba en febrero de 1912 que:
muy lluviosos el Colorado recibiría —según las declara- El Diamante […] corre después derecho hacia el este,
ciones de los indios— masas de agua de la Laguna Urre donde desembocaba hasta hace poco —antes de aprove-
Lauquen que las recibe de los ríos salados de la estepa: el charse todo su caudal para la irrigación— por varios brazos
río Atuel y río Salado” (Wichmann 1881, 424-425). en el río Salado. El Atuel corre entre Nihuil, donde forma
Con respecto a las lagunas de la región afirma que: cataratas grandiosas, y su entrada en La Pampa, en un ca-
[…] Dispersadas por toda la pampa existen numero- ñón hondo encajonado e impenetrable, hacia el noreste,
sas lagunas de agua dulce y salada que […] en su mayoría haciendo después una curva fuerte al sud, forma en el límite
desaparecen en la estación seca […] Entre estas lagunas la de Mendoza y Pampa Central bañados en islas y se reúne al
más grande es la Urre Lauquen, la zona de la desemboca- fin en la Pampa Central con el río Salado, que lleva desde
dura de las aguas llevadas por los ríos Atuel y Chadileuvú allí el nombre de Chadi-leufú […] El río Salado, que antes
(río Salado) desde las laderas cordilleranas. En la estación inundaba sus orillas por leguas, es en la actualidad nada
de las lluvias allí se forma un lago inmenso, mientras se más que una aguada poco honda, a menudo interrumpida
reduce en el verano a un pantano salino cuyas orillas y sumamente salada; se ha agotado el agua de sus afluentes
son intransitables. Las aguas del Chadileuvú en su cur- para el riego de los campos y su caudal disminuye rápida-
so inferior no son potables, ni para los caballos, durante mente. (Stappenbeck 1913, 8)

Universidad Nacional de Colombia


La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 341

Es en esta etapa cuando se fundan las primeras co- Es muy grande el caudal de aguas que llevan los ríos
lonias agrícolas en el oeste del territorio que más tarde departamentales. […] el Atuel y el Diamante no amenazan
sería la actual provincia de La Pampa. La Colonia Santa seriamente gracias a las obras defensivas. El Atuel, no obs-
Isabel (1904) y la Colonia Butaló (1909-1930), muy cer- tante, así como el Grande, más al sur, y algunos de los cauces
ca de lo que sería actualmente el límite con Mendoza. que de ellos se desprenden, se desbordaron en ciertos pun-
Hay que mencionar también que según diversos auto- tos, anegando zonas despobladas pero afectando los cami-
res es durante la década de los veinte que desaparece el nos cercanos a sus márgenes. (Diario El Comercio 1941, 11)
primer brazo del río en territorio pampeano el arroyo
Atuel Viejo. Unos años después durante la década de los En el Anexo 1 (crecidas extraordinarias, inundacio-
treinta, desaparece el segundo brazo del río, el arroyo nes, crecientes y desbordes en los ríos del sur mendoci-
Butaló. Y a partir de la construcción de los diques hi- no entre 1878 y 1942) se puede observar que las crecidas
droeléctricos de Los Nihuiles en Mendoza, durante la extraordinarias no responden por lo general a una sola
década de los cuarenta, el tercer brazo existente del río causa, fusión de la nieve o lluvias torrenciales, sino que
Atuel al sur de Mendoza, denominado “Arroyo de La en varias ocasiones han tenido su origen en periodos de
Barda”, deja de transportar agua superficial. Después, fuerte deshielo combinado con intensas lluvias estivales.
durante la década de los setenta, reaparece el arroyo También se observa episodios de crecidas excepcionales en
de La Barda, en forma intermitente hasta el día de hoy mayo —como en 1951 y 1972 en el río Malargue y Chacaicó
(Barbosa 2017)14. Barbosa, a lo largo de su trabajo, en- respectivamente—, que responden a una combinación
foca con especial detalle lo sucedido durante el siglo xx, de fuertes nevadas y grandes lluvias. Lógicamente, los
lo cual tiene especial interés para nuestro trabajo, pues ríos Diamante y Atuel son los que han concitado la mayor
él recopiló fuentes y entrevistas no tan citadas desde la atención de los periódicos porque han sido siempre los
Provincia de Mendoza. proveedores de agua para riego y atraviesan las zonas de
Otra fuente consultada han sido los periódicos15, se mayor población. Lamentablemente no sucede lo mismo
elaboraron dos tablas con dicho material (Anexos 1 y 2) con el resto, pues solamente cuando ocurre una catás-
y a su vez se han sistematizados crecidas y sequías en los trofe figura en las noticias. Mientras en el Anexo 2 (años
resultados del próximo apartado. Un ejemplo de ello son con caudal muy escaso del sur mendocino: 1904-1948),
las inundaciones y desbordes de los ríos Atuel, Diamante se señala cuáles fueron los años excepcionalmente secos.
y Grande, eventos relatados por el diario El Comercio el A partir de las fuentes documentales es difícil determi-
30 de diciembre de 1941: nar los años normales, por lo que se ha establecido que
cuando en un año no hay acontecimientos climáticos o
hidrológicos extraordinarios, ni sequías ni altos cauda-
14 “La primera intervención fue a fines de la década de los cua-
les, puede ser considerado normal dentro de un amplio
renta con la Resolución 50/49, resultado de un reclamo local
rango. Se observa que la cantidad de años con caudal muy
que llega al presidente de la nación de ese entonces, Juan
escaso es significativamente menor que la cantidad total
Domingo Perón. La segunda intervención fue en 1987 a par-
de años excepcionalmente ricos en agua; sin embargo,
tir del fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación —en
los años secos son cada vez más frecuentes.
adelante, csjn— en dónde el gobierno de La Pampa reclamó a
Mendoza el cumplimiento de las sueltas de agua del río Atuel
establecidas en la Resolución 50/49, además de la petición de
Síntesis de los resultados y comparaciones
hacer uso de sus aguas. La tercera intervención fue en 1992 con
con otras fuentes
la firma del Convenio Nacional La Pampa-Mendoza. Por últi-
La síntesis de los principales resultados de este estudio
mo, la cuarta fue en el 2008 con la firma del Convenio Marco
se expresa a través de la reconstrucción de una línea de
de Cooperación”. (Barbosa 2017, 29). Hay que agregar que en
tendencia sobre la variabilidad de caudales del río Atuel
1987, la csjn, declara la “interprovincialidad” del río, junto a
(1776-2019) (Figura 4).
la obligatoriedad de cumplir con la resolución mencionada.
En dicha reconstrucción se puede observar un periodo
15 Otros periódicos, además del Eco de San Rafael, de los que se
de grandes crecidas del río Atuel, desde 1776 a 1806, con
han extraído son: La Verdad (General Alvear), La Acción (General
dos momentos de sequías moderadas —que coinciden
Alvear), El Comercio (San Rafael), El Constitucional (Mendoza),
con la serie realizada por Cobos y Boninsegna (1983) con
Los Andes (Mendoza) y Mendoza (Mendoza).
un periodo de bajos caudales entre 1780-1794—.

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En las décadas siguientes hay poca disponibilidad es confirmar la gran variabilidad interanual que tuvo
de información. Solo se destacan las grandes crecidas de el caudal del río Atuel, desde antes del comienzo de las
1833 y 1858. Entre los problemas de las fuentes utili- mediciones instrumentales (1906).
zadas, hay que remarcar la duplicación de los textos (o En otro trabajo, los mismos autores mencionan la
cartografía), que más de una vez sugieren copias casi tendencia de valores predominantemente positivos des-
textuales. Por ejemplo, hacia fines del siglo xix la la- de 1906 a 1925, y negativos desde mitad del siglo pasado
guna de Urre Lauquen se empieza a ver reducida y di- hasta años próximos a la actualidad (1954 a 2008) para la
vidida en lagunas, en algunos mapas (Olascoaga 1880; serie instrumental del río Atuel (Araneo, Rivera y Villalba
Peip y Schmitt 1881). Aunque existen contradicciones 2015)18. Ello coincide con la serie de la región cordillera-
y variadas inconsistencias entre las fuentes, se pueden na central de Chile, realizada con anillos de árboles (Le
reconocer tendencias. Quesne et ál. 2006; Le Quesne et ál. 2009)19.
2,5
La comparación de la línea de tendencia con los datos
instrumentales es útil para realizar una calibración y ve-
2
rificación de los resultados. Vemos entonces que los años
1,5 de crecidas y déficits de este estudio coinciden con los da-
1
tos instrumentales, ello nos da confiabilidad para pensar
los datos hacía momentos preinstrumentales. Además,
0,5
Nivel de caudal

es importante señalar que, durante las primeras décadas


0 del siglo xx, es cuando comienza el aprovechamiento in-
-0,5 tensivo del río, en la cuenca media del Atuel, por el uso
agrícola de la zona irrigada del Sur mendocino (San Rafael
-1
y Colonia Alvear). Eso significa que un promedio de los
-1,5 primeros 25 años del siglo xx marca mayor abundancia de
-2 agua, que no habría llegado al tramo inferior o que llegó
progresivamente en menor cantidad.
-2,5
Sintetizando los resultados, hay que destacar que
1784
1792
1800
1808
1816
1824
1832
1840
1848
1856
1864
1872
1880
1888
1896
1904
1912
1920
1928
1936
1944

mientras durante la segunda mitad del siglo xviii y parte


Figura 4. Línea de tendencia con crecidas y caudales del río Atuel,
entre 1776 y 1944.
Datos: elaborado a partir de las fuentes documentales presentadas 18 Estos datos son coincidentes con investigaciones que muestran
en las referencias bibliográficas. una tendencia negativa de las precipitaciones provenientes del
Pacífico para la región central de Chile y la cordillera mendo-
Desde 1870, los datos comienzan a ser más abun-
cina, en especial desde la década de los setenta y con énfasis
dantes y la línea de tendencia marca mayor frecuencia,
al sur de los 35° de latitud (Garreaud et ál. 2017; Lauro, Vich
tanto de déficits del caudal16, como de años con mayores
y Moreiras 2019; Le Quesne et ál. 2009; Quintana y Aceituno
caudales17. Aunque si realizamos un promedio de esas
2012). Sumado a ello es conocida la recesión de los glaciares,
décadas, se puede observar una mayor disponibilidad
que ha reducido la masa de hielo y, con ello, su contribución
de agua (tendencia que se revertiría desde 1938 en ade-
a regular los ríos andinos de la región (Bown y Acuña 2008;
lante). La asociación entre el exceso/déficit de caudales
Masiokas et ál. 2009; Masiokas et ál. 2016). También se ha
del Atuel y la amplia variabilidad interanual de precipita-
evidenciado el aumento de la frecuencia e intensidad de las
ciones níveas de inverno, fueron explicados por Araneo
sequías en los Andes centrales argentino-chilenos, desde me-
y Villalba (2015), analizando las series del siglo xx. Uno
diados del siglo xx (González-Reyes et ál. 2017).
de los principales aportes de esta línea de tendencia,
19 Como afirman Villalba et ál. (2000) —y trabajos posteriores
del Laboratorio de Dendrocronología e Historia Ambiental del
16 Años de déficits: 1870; 1881, 1903, 1904, 1908,1909, 1912, 1924, ianigla— existen amplias dificultades para el fechado de la
1925 y 1946. madera de Prosopis y especies existentes en la Provincia de
17 Años con caudal sobre el normal: 1878, 1879, 1888, 1891, 1892, Mendoza, por ello se utilizaron estudios del lado chileno in-
1900, 1902, 1905, 1906, 1911, 1914, 1915, 1916, 1918, 1919, 1920, fluidos por las precipitaciones del Pacífico que alimentan las
1926, 1928, 1934, 1936, 1941 y 1942. cabeceras de cuenca del Atuel.

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 343

del xix los observadores destacaban la cantidad extraor- siglo xx, que progresivamente irían mostrando menor
dinaria de agua que llevaban los ríos y especulaban acerca frecuencia a lo largo del siglo pasado.
de su navegabilidad, a medida que avanzaba el siglo xix Desde el comienzo del periodo analizado (siglo xviii)
se comenzó a relativizar el volumen del caudal y la mis- ya se advirtieron contrastados momentos de escasez y
ma presencia permanente del arroyo Curacó. abundancia, en los cuales se observaban importantes pe-
Por otra parte, de acuerdo con Compagnucci y Vargas riodos de sequía durante el siglo xix que habrían impedido
(1998) la región cordillerana entre 30 y 40°s corresponde que la cuenca volcara sus aguas —al menos superficial-
a una zona homogénea en relación con la variabilidad hi- mente— al río Colorado y se transformará en endorreica
droclimática interanual. Se ha comprobado que el caudal de forma ininterrumpida. Este proceso se adjudica —en
de estos ríos está altamente correlacionado entre sí (di- algunos trabajos— solamente al uso que se realizó en la
cha área corresponde a las cuencas de los ríos Jáchal, San cuenca media, especialmente en Mendoza, a partir de los
Juan, Mendoza, Tunuyán, Diamante, Atuel y Colorado). primeros años del siglo xx, cuando empezó a crecer el
Ante la escasez de datos instrumentales para los siglos Oasis Sur mendocino (San Rafael, Colonia Alvear), con
xviii y xix, la información histórica sobre la variabilidad unos treinta años de retraso en relación con el aumento
interanual del río Mendoza y su relación con eventos de la superficie cultivada en el Oasis Norte (1870).
El Niño podría ser extendida a todos los ríos de Cuyo, De acuerdo con los datos históricos, dendrocronoló-
incluido el río Atuel. Es por ello que en este estudio se gicos, glaciológicos e instrumentales se ha producido una
comparó la reconstrucción histórica de los caudales del disminución del caudal de todos los ríos de la región, in-
río Mendoza (Prieto, Herrera y Dussel 1999; Prieto y cluyendo el Atuel, principalmente en las últimas décadas
Rojas 2012) (Figura 5) con la elaborada para el río Atuel y —en especial— hacia el sur mendocino.
(Figura 4). Se encontraron significativas coincidencias Una parte significativa de observaciones hechas du-
entre ambas, como las crecidas extraordinarias de: 1776, rante el siglo xix ponen en duda la unión de la laguna
1784, 1792, 1803, 1804, 1826, 1854, 1873, 1877, 1878, 1900, Urre Lauquen con el río Colorado, además señalan que
1911, 1914, 1920, 1931, 1941, 1942. También fueron coin- los ríos del sistema aumentan considerablemente el cau-
cidentes los caudales bajos de los años: 1786, 1800, 1813, dal cuando se producen grandes nevadas en cordillera, y
1866, 1870, 1908, 1909, 1924, 1925. destacan su importante fluctuación. Es muy probable que
2,5
el intenso uso del agua, en el tramo medio del Atuel, sig-
2 nifique la principal causa de disminución de los caudales
1,5 en el tramo inferior, durante el siglo xx. Sin embargo, esa
1 tendencia general no parece ser una tendencia carente de
Nivel de caudal

0,5 pulsos y sin un fuerte componente climático.


0
Como se dijo al comienzo, la información histórica
-0,5
ambiental encontrada tiene falencias, ciertas impreci-
-1
-1,5
siones y no presenta una cobertura temporal o espacial
-2 exahustiva. Por lo que se recomienda continuar comple-
-2,5 tando y mejorando los estudios existentes, vinculando los
resultados con los que se obtengan desde otros campos
1600
1614
1628
1642
1656
1670
1684
1698
1712
1726
1740
1754
1768
1782
1796
1810
1824
1838
1852
1866
1880
1894
1908
1922
1936
1950

Figura 5. Reconstrucción histórica de los caudales del río Mendoza,


de estudio y de reflexión social.
siglos xvi al xx. Una comprensión más ajustada del sistema socioam-
Fuente: Prieto y Rojas (2012, 956). biental nos permitirá planificar y ejecutar soluciones, a
mediano y largo plazo, acordes tanto con la justicia am-
Conclusiones biental como con la disponibilidad de agua y las limitan-
tes ecológicas de cada momento.
A partir de documentación histórica, se observó en este
trabajo que son recurrentes las grandes sequías y que Agradecimientos
estas aumentaron a partir de la segunda mitad del siglo
xix (probablemente, también, por la mayor densidad Este proyecto ha sido financiado por conicet, picto
de datos disponibles). A su vez, existieron algunos mo- uncuyo 0012-2016 y Proyecto crn3056 del Instituto
mentos de abundantes caudales durante principios de Interamericano para la Investigación en Cambio Global

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344 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

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348 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

Anexo 1. Crecidas extraordinarias, inundaciones y desbordes


en los ríos del sur mendocino entre 1878 y 1942

Río o cauces
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referidos
agpm
Cuenca alta El encargado del Resguardo del Planchón en febrero de 1878 recién puede cruzar los
28/12/1878 (1878, C.
río Grande ríos “que estaban tan crecidos que no daban paso” para ir a la mina La Choica.
391/80, 5)
Bodenbender
12/1891 Ríos sur Grandes crecidas e inundaciones entre el río Diamante y el Limay.
(1892, 6)
Bodenbender
01/1892 Ríos sur Entre el río Diamante y el Limay: grandes crecientes de los ríos, inundaciones.
(1892, 6)
Se colocó (en 1903) un puente sobre el río Grande en el mismo lugar que el antiguo
Diario Eco de
puente. “[...] En 1898 crecientes soberbias en el río Grande llegaron las aguas del río
1898 San Rafael Grande
en 3 metros y ½ del nivel del puente, llevándose 3 puntales de madera que estaban
(1903, 3)
colocados en la margen derecha del río [...]”.
Crecientes del Diamante: Anegamiento de campos y cultivos. En febrero de 1900, según
el libro del centenario del Diario Los Andes (1982, 36) se recibieron noticias alarmantes
sobre los desbordes del Río Diamante (en diciembre de 1899 había crecido el Mendoza
y en enero hubo crecidas del Tunuyán). “Hace varios días/informa un despacho del día
6/ que el río Diamante ha empezado a desbordarse, tomando en parte por el cauce viejo,
Diamante es decir por la actual Cañada Seca. Los desbordes inundaron gran parte de la población.
Diario Los
y todos Las calles están convertidas todas en verdaderos ríos haciéndose casi imposible el
1899-1900 Andes
los ríos tráfico por ellas [...]. Varias casas se han derrumbado [...] Hasta hoy la única que queda
(1982, 36)
provinciales en pie, de las que existen a la orilla del río, es la del sr. Cornú. [...] se trata de desviar
la corriente e impedir que las aguas sigan invadiendo la población. Algunos vecinos y
comerciantes se han refugiado en el Distrito de Monte Comán, pues sus viviendas han
sido destruidas por las aguas. La mayor parte de las sementeras y viñedos situados a
la orilla del río, están perdidos. Más de 4.500 hectáreas de terreno sembrado de trigo,
maíz y plantado de viñas y árboles frutales se encuentran inundados [...]”.
Solicitud de los vecinos de San Rafael al M. de hacienda.
Solicitan auxilio “en los trabajos de defensa contra las creces del río Diamante Estas
agpm (1900, creces que están produciendo desmoronamientos que ponen en serios peligros nuestras
05/01/1900 Diamante
2). propiedades [...]”. Por decreto del Poder Ejecutivo (2/01/1900) se les otorga un subsidio
a los vecinos “amenazados por las crecientes extraordinarias de los ríos” para que se
realicen trabajos de defensa contra los desbordamientos del río Diamante.
Río Diamante desbordado. “El río Diamante viene actualmente sumamente crecido,
habiéndose desbordado en estos últimos días e inundado a la villa de san Rafael que
está situada sobre la margen izquierda. Las aguas han anegado los terrenos ubicados
en las inmediaciones de la ribera y destruido varias casas, sembrados de trigo, maíz y
Diario Los algunas plantaciones de viñas”.
07/02/1900 Andes Diamante Telegrama: “San Rafael, enero 6 hacen varios días que el río Diamante ha empezado a
(1900, 4) desbordarse tomando en parte por el cauce viejo, es decir por la Cañada seca. Las calles
están convertidas en verdaderos ríos [...] varias casas se han derrumbado [...] hasta hoy
la única casa que queda en pie de las que existen a orillas del río es la del sr. Cornu [...]
algunos vecinos y comerciantes se han refugiado en Monte Coman [...]. Más de 4.500 ha
de terreno sembradas de trigo, maíz y plantadas de viñas se encuentran inundados [...]”.
“Los ríos siguen creciendo con fuerza los ríos el Atuel, el Grande, el Malargüe, todos.
Atuel Nos concentramos en el Diamante para ser el que cruza por parte más poblada [...].
Diario Eco de
Grande Mañana o pasado recrudecerá la canícula y sus aguas volverán a correr en masa
31/12/1902 San Rafael
Malargue tormentosa (todavía no hay desgracias). En la Villa de San Rafael se ha colocado un
(1902, 3)
Diamante cable que reemplazara a un puente. Cañada seca se colocó una balsa para cruzarlo y en
Colonia Francesa por el ancho del río es más vadeable”.
Diario Los
Diamante Río Diamante ha empezado a desbordarse en Rama caída, también el del Atuel. Caudal
28/01/1906 Andes
Atuel más alto que en los años anteriores.
(1906, 7)

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 349

Río o cauces
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referidos
Diario La “Se nos informa que el río Atuel cambió en El Sosneado de curso debido al aumento
17/01/1915 Verdad Atuel considerable de agua. Por los avisos del Observatorio que la Oficina Hidrológica
(1915a, 5) Nacional tiene en El Sosneado se teme llegue aquí una gran creciente”.
“Este año los ríos de la cordillera han tenido crecientes fuera de lo ordinario [...].
Diario La
La avenida del río Atuel excepcionalmente grande el verano pasado causó serios
07/11/1915 Verdad Atuel
desperfectos en la toma del canal de nuestra colonia...causó serios desperfectos en la
(1915b, 4)
toma [...] el Sr. Wauters ha proyectado la construcción de una toma [...]”.
“[...] informa que el aumento registrado (en el río Atuel) desde los días 30 de abril, 1, 2,
Diario La
y 3 del actual es debido a fuertes temporales de lluvia en la cordillera [...] el día 30 ha
05/05/1918 Verdad Atuel
llegado a Rincón del Indio, según cálculos hechos en el puente un caudal de 7 m. 300 y el
(1918, 3)
día 3, 7 m 400 [...]”.
“En el sur de la provincia, San Rafael y General Alvear, la lluvia ha sido torrencial
al decir de los telegramas llegados, las crecientes bajadas por los ríos Diamante y
Atuel revistieron proporciones que no se constataban desde hace muchos años [...].
El movimiento de trenes a aquel departamento y al de San Rafael sufrirá algunos
Diario Los
Diamante inconvenientes, a consecuencia de serios desperfectos en los terraplenes de las vías.
26/01/1919 Andes
Atuel A los daños ocasionados por los aluviones no hay que agregar felizmente perjuicios
(1919, 4)
de gran magnitud. En la cabecera del octavo distrito, se ha recibido ayer el siguiente
despacho: El correo nocturno no llegó ni salió hoy para Bs As ni saldrá esta noche para
esa, debido a la caída de lluvias torrenciales, por cuya causa se interrumpirán las líneas
férreas de Guadales y Cuadro Nacional”.
“En números anteriores anunciamos haber sido informados de que el dique El Rincón del
Atuel, que sostiene la toma del canal matriz Nuevo Alvear había desaparecido arrastrado
Diario La
por las aguas del río [...]. Hemos visitado [...] las obras de toma del canal [...]. Las aguas
04/12/1921 Verdad Atuel
han barrido por completo el dique que existía [...] lo que se hace en el día desaparece por
(1921, 7)
la noche arrastrado por las aguas [...]. Cuando amengüe la creciente y las aguas del río
bajen a su nivel normal [...] se apreciará [...] la catástrofe [...]”.
Los desbordes del río Salado. Mal estado de los caminos. “[...] se procedió a
efectuar reparaciones en los caminos que unen San Rafael los que se hallan a la
fecha intransitables como consecuencia de los desbordes del río Salado. Expone la
Diario Los
superintendencia que habiéndose resuelto efectuar las obras para encauzar de nuevo el
03/02/1921 Andes Salado
río Salado, defendiendo sus márgenes, será preciso conducir materiales desde Malargüe
(1921, 2)
[...]”. “Según ya informamos, la población de Malargüe se halla casi totalmente
incomunicada del resto de la provincia por el mal estado de los caminos, debiendo
proveerse de Chile los artículos más imprescindibles”.
“El aumento que ha experimentado el caudal del río Diamante desde que se acentuaron los
calores, como consecuencia de los deshielos de la cordillera, ha puesto en serio peligro la
estabilidad del canal matriz, que provee agua a una extensa zona de cultivos. La corriente
ha carcomido las barrancas del río en un trayecto de varios kilómetros antes del punto
donde Arranca el mencionado cauce y amenaza prolongar el desmoronamiento hasta el
mismo sitio hasta donde este nace, lo que no sería difícil que ocurriera de un momento a
otro, porque el hecho que el trecho que queda sin derrumbar para que ocurra tal cosa es de
solo algunos metros. De acuerdo a esto, el canal matriz no podría alzando agua hasta tanto
se construya una nueva toma y las propiedades que se riegan con él, permanecerían en seco
por una larga temporada, ya que esos trabajos además de ser costosos exigirán un tiempo
Diario Los más o menos largo. La inspección del canal a cargo hoy del Sr. Otto Suter, hace grandes
05/01/1926 Andes Diamante esfuerzos desde hace varios días para detener la obra destructiva de la corriente y que a ese
(1926, 4) fin esta construir algunos “pies de gallos” con el objeto de desviar el agua hacia el centro del
río e impedir que se derrumben los palos. De barrancas que aún quedan sin ser alcanzadas.
La tarea acometida por la inspección es ardua en vistas de la considerable distancia que
media entre la población y la boca toma del canal, lo que dificulta el rápido transporte de
los materiales que deben utilizarse. A estos inconvenientes hay que agregar el de escasez
de personal para los trabajos, pues se hace difícil conseguir los brazos que se necesitan.
Teniendo en cuenta los serios trastornos y perjuicios que acarrearía la actual boca toma
del canal puesto que no solo se privaría de riego a extensos cultivos, sino que quedaran sin
agua hasta para la bebida muchos habitantes del departamento, el señor Suter ha solicitado
la colaboración de los soldados del regimiento séptimo de caballería y de los propietarios
que cuentan con algún personal a fin de tratar de confinar el peligro a la mayor brevedad”.

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350 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

Río o cauces
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referidos
La zona entre Malargüe y San Rafael se halla en peligro por las inundaciones del río
Salado. El punto denominado de “Las Juntas” quedó aislado, apartando los efectos de las
crecientes. Las autoridades de la provincia ordenaron el envió desde San Rafael de
todas las fuerzas de socorro disponibles. En las primeras horas de la mañana del día de
ayer la jefatura de la policía de esta capital recibió del comisario general de Malargüe,
el siguiente telegrama en el que comunica el desborde producido en el río Salado y
los efectos causados en parte de aquella zona: “Comunico a usted, que a causa de los
deshielos, el río Salado desbordase en el paraje denominado Las Juntas, derramando la
Diario Los
mitad de las aguas al campo, inundándolo y produciendo grandes perjuicios y aislando
17/11/1926 Andes Salado
esta villa de San Rafael. Como adelante, las crecientes serán más pronunciadas y el
(1926, 6)
río Atuel también se desborda en ese punto en la margen izquierda, llevo esto a su
conocimiento para que se tomen las providencias del caso, habiendo esta policía tomado
medidas precautorias, con la ayuda de algunos vecinos para encauzar nuevamente
el río”. El jefe de la policía, en presencia de dicho telegrama, lo envió al ministro de
gobierno, quien dio aviso oportuno al ministro de industria y obras públicas a fin de que
se tomen las medidas urgentes que el caso requiere. Por orden de la jefatura central, la
jefatura política de San Rafael prestará todas las fuerzas de socorro disponibles a los
puntos afectados por las inundaciones del río Salado.
“[...] el Diamante por un lado y el Atuel por el otro, están destruyendo los caminos
cercanos a sus márgenes. El Diamante, el día de la creciente amenazó con un caudaloso
brazo por el puente del sur, y las aguas llegaron hasta el camino que va a Cuadro Benegas,
destruyéndolo en una extensión de más de 600 m.
El Atuel amenazó cortar el camino a Las Malvinas. El Atuel se ha desviado de forma tal,
Diario Los
Diamante que más arriba del puente del camino a las Malvinas, ha destruido gran parte del camino,
18/01/1931 Andes
Atuel estando en inminente peligro de destruirlo totalmente en una buena extensión.
(1931, 3)
Varios ahogados en las últimas crecientes “En las costas del Diamante se encontró
un cadáver mutilado por las aguas [...]. Las aguas inundan un gran trecho en Las
Juntas Cañada Seca. De Las juntas llega la noticia que las aguas se han extendido
considerablemente, llegando al puesto del señor Cerdá (?) destruyendo la casa. Sus
moradores se pusieron a salvo.”
“Una tormenta de agua azotó San Rafael Tras la fuerte y dolorosa impresión publica que
ha causado en el país y sobre todo en nuestra provincia la catástrofe de Cacheuta [...] un
nuevo desastre el que acabó de sufrir la población de San Rafael [...] se había desbordado
el río Diamante en distintos sitios inundando su cauce, y las aguas [...] por momentos
lo inundaban todo. Más tarde se añadió la noticia de que el río Atuel también hostigado
por una coposa lluvia había aumentado su volumen en más de 2 metros de agua,
desbordándose así mismo. Los daños naturales son considerables, casas destruidas,
caminos deshechos, líneas férreas cortadas, puentes y sifones arrasados, tomas y
diques menores... por la fuerza de la correntada [...]. Han sido destruidas las tomas en
casi todos los canales debido a la corriente A consecuencia del avance del río hasta esta
villa (25 de Mayo) se formó una barranca de casi 3 m. Inundando la zona colindante a
Diario Los la villa [...] el río trae la mayor cantidad de agua conocida desde hace muchos años [...].
Diamante
13/01/1934 Andes La estación Resolana, inmediata a la colonia antes nombrada, se encuentra inundada
Atuel
(1934, 3) totalmente y la línea está intransitable por haber desaparecido el terraplén en más de
15 metros. En los pueblos de Usillal y Soto, los moradores abandonaron sus hogares
temerosos de un desastre como el del río Mendoza [...]. Fue de proporciones la creciente
en Rama caída, proveniente del Cerro bola. Llovió 95 mm en San Rafael Cuantiosos
los daños en 25 de mayo [...] entre otros el hotel de dicho punto. La avalancha de agua
que desbordó el río Diamante destruyó casi 3 km de caminos de Villa Atuel a Malvinas.
Las aguas que bajaron por los ríos secos cortaron la línea férrea en varios puntos,
cerca de Arístides Villanueva, motivo por el cual no pudo salir el tren ordinario que
va a Mendoza. La línea de ferrocarril ha quedado interrumpida por haber las aguas
destruido numerosos terraplenes impidiendo la llegada del tren de Bs. As., que tuvo
que detenerse en la estación Montoya. En la margen del río Diamante han quedado
destruidos las tomas de los canales Grande, Serú, Civit, Sauce y Llamas (¿)”.

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La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 351

Río o cauces
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referidos
Serios perjuicios ha causado la impetuosa y anormal crecida del río Diamante. El caudal
Diario El aumento de 35 m3 por seg., término medio en noviembre a 130 m3. “[...] La fuerza de
01/01/1941 Comercio Diamante la corriente destrozó la toma de los canales de riego de Monte Coman y las defensas
(1941, 2) construidas por el gobierno. Nacional en cañada Seca, siendo esta ultima la causa que
provoco la destrucción del terraplén del puente nuevo”.
San Rafael. A 130 m3 a alcanzado el caudal del Diamante últimamente. Como informamos
sobre el aumento registrado en el caudal de aguas del río Diamante el día 29/12 último, lo
Diario Los
que había originado perjuicios en el puente que sobre el mismo existe en Cuadro Bombal
04/01/1941 Andes Diamante
y en diversas tomas de los canales de riego, debemos agregar hoy, que el caudal medio en
(1941a, 3)
ese día alcanzó a 130 m3/s dando una idea de ese aumento, el hecho de que durante todo el
mes de noviembre el caudal de sus aguas no alcanzó más que 30 m3/s.
Diario Los
07/01/1941 Andes Diamante Grandes desbordes en el río. Diamante (el 2/1, gran desborde del r. Mza.)
(1941b, 4)
Gran crecida registró ayer el río Diamante. Inminente peligro de inundación para las
zonas vecinas. Con motivo de la fuerte tormenta de agua registrado en las últimas horas
de antenoche, el río Diamante experimentó durante el día de ayer una considerable
creciente, alcanzando sus aguas extraordinario nivel. Es así como según se informa,
Diario Los
el caudal registrado por el río en las últimas horas de la mañana de hoy alcanzaba
15/01/1941 Andes Diamante
aproximadamente 400 m3, cifra realmente extraordinaria y que hacía mucho tiempo
(1941c, 3)
no se conocía en los aforos. Como decimos, la tormenta de agua y viento registrada en
las primeras horas de la madrugada de hoy que alcanzó inusitada proporción, ha sido
en especial el motivo determinante de la extraordinaria creciente registrada por el río
Diamante en la mañana de hoy creciente que va paulatinamente en descenso.
Causa daños en San Rafael la crecida del río Diamante. Varios canales están sufriendo
la acción de la correntada. El paulatino crecimiento del río Diamante ha originado en
el día de hoy los primeros inconvenientes. Estos no se han producido en la margen del
costado sur, que era la que se indicaba como más factible para ser teatro de perjuicios,
sino que ha sido la margen izquierda la afectada. El hecho se deriva precisamente de
Diario Los que las sólidas defensas realizadas sobre el costado derecho encausaron totalmente el
30/12/1941 Andes Diamante curso hacia la margen izquierda, la que no estaba en condiciones de soportar una acción
(1941d, 2) intensa de las aguas. Ello ha motivado la corta de agua en los canales, o por lo menos ha
disminuido su caudal.
Canales perjudicados: se han realizado así, obras de defensa por parte de la inspección
de Canal Pavés, consistentes en “pie de gallos” que tienden a variar el curso del río
hacia el centro de su cauce para evitar la acción erosiva de las aguas, que constituyeron
mayores problemas sobre las márgenes que carecen de toda defensa natural.
Es muy grande el caudal de aguas que llevan los ríos departamentales. “[...] el Atuel
Diario El Diamante y el Diamante no amenazan seriamente gracias a las obras defensivas. El Atuel,
30/12/1941 Comercio Atuel, no obstante, así como el Grande, más al sur, y algunos de los cauces que de ellos se
(1941, 3) Grande desprenden, se desbordaron en ciertos puntos, anegando zonas despobladas pero
afectando los caminos cercanos a sus márgenes”.
A 235 m3 se elevó ayer el caudal del río Diamante. La rotura de defensa en Cuadro
Benegas.
“El ascenso de la columna mercurial registrado en el día de hoy, que no hizo sino acentuar
la paulatina elevación de los días anteriores, abrió directamente en un acrecentamiento
de la masa líquida que arrastró por su lecho el río Diamante. Los aforos a su respecto
valoran en 235 m3/seg en horas de la mañana. Presumiéndose que esa cifra fue superada
en las primeras horas de la tarde. El aumento de caudal no afectó, sin embargo, las zonas
Diario Los
inmediatas a la margen del río, como ocurrió en fecha reciente. Las defensas respondieron
07/01/1942 Andes Diamante
en ese sentido eficientemente Obras de la subdelegación de aguas y vecinos colaboraron
(1942a, 6)
en la construcción de defensas para impedir un cambio en el curso del río [...]”.
“Excepcional crecida es la del río Diamante [...] Este cauce, que como se recordará,
provocó algunos desbordamientos días pasados, al llegar su nivel a 185 m3/seg., había
experimentado nuevos aumentos que alcanzaron un aforo de 230 m3/seg. Esa crecida
motivó que el río avanzara nuevamente sobre los cultivos y zonas de Cañada Seca [...].
Un aforo practicado en el río Atuel demostró que este cauce no ha alterado su promedio
anterior de 130 m3/seg”.

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352 Rojas, Facundo; Prieto, María del Rosario

Río o cauces
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referidos
Diario Los
07/01/1942 Andes Diamante Crecidas en el Mendoza. Crecidas en el Alto Tunuyán y en el Diamante (235 m3/s).
(1942a, 3)
Diario Los
08/01/1942 Andes Salado Gran crecida en el río Salado.
(1942b, 5)
Diario El “El río Atuel ha desbordado a la altura de Cañada seca, anegándose una extensión
08/01/1942 Comercio Atuel de campos bajo cultivo, que llegan hasta 200 metros aproximadamente de la margen
(1942, 3) izquierda del río”.

Anexo 2. Años con caudal muy escaso en los ríos del sur mendocino 1904-1948

Río o cauce
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referido
Diario Los
06/01/1904 Diamante Poca agua el río Diamante
Andes (1904, 4)
“Ya no hay esperanzas que crezcan, enero corría a su fin y el Diamante lo mismo que
Diario Eco de San Diamante y su compañero el Atuel no aumentan el volumen de sus aguas. Pero donde se nota la
20/01/1904
Rafael (1904, 3) Atuel anormalidad es por el paso del Molino [...] ahora es atravesado a pie [...]” /se espera
que este invierno no sea tan benigno como el de 1903.
“Reconócese generalmente que, en 1908, el río estuvo excepcionalmente bajo[...]
(entre mediados de octubre —mes en que comienza el deshielo— y mediados de
diciembre el caudal se mantuvo aproximadamente en 25 m3/s, comienza a subir con
un pico máximo a mediados de enero de 1909 de 60 m3/s, baja hasta mediados de
febrero donde llega a aprox. 38 m3/s, aumenta hasta fines de marzo con 50 m3/s y
Kennedy
1908 Atuel desciende hasta abril donde se mantiene en 24 m3/s)”.
(1913, 13)
“Naturalmente, tres años de observaciones no constituyen periodo suficientemente
largo para basar las cifras de un proyecto; pero dado el presente caso, en que el caudal
proviene enteramente de los deshielos y es relativamente uniforme y visto que unos
de los tres años es universalmente reconocido (respecto de este y de otros ríos del
país) como el peor que se tenga memoria [...]”.
El Servicio Hidrográfico de la dgi dispone de la serie ininterrumpida de
observaciones limnimétricas del río Atuel desde el año 1907 [...].
Algunas curvas de caudales cronológicos (años hidrológicos 1906-1909) se
1909 Büchi (1945, 27) Atuel reproducen en el trabajo, basadas en las observaciones del Ing. C. Wauters. En 1906-
1907 los caudales llegaron a 120 m3/s en enero. En 1907-1908 en el mismo mes
apenas llegó a los 68 m3/s y en 1908-1909 en ese mes apenas llegaron a 60 m3/s.
(1908 también fue un año muy pobre en nevadas y caudal en el río Mendoza).
Todos
Diario Los Andes
07/11/1924 los ríos Informan sobre merma en el caudal de los ríos de la provincia.
(1924, 2)
provinciales
Daños irreparables a las sementeras causan la escasez de agua de regadío en el
departamento. “[...] la sequía que viene caracterizando la época y el escaso caudal
de agua que arrastra en su cauce el río Diamante, son factores que han tornado un
panorama que desde hacía muchos años no se registraba en el área del cultivo [...]”.
El exiguo caudal entregado a los canales en sus tomas en el río ha permitido atender
Diario El parcialmente a los regantes de: colonia Elena, La Llave, Monte Comán, Goudge.
2/12/1946 Comercio Diamante Gestiones en pro de la utilización de la Laguna del diamante. “[...] La aparente
(1946b, 4) disminución de los glaciares en las altas cumbres y de no sobrevenir grandes nevadas,
obliga a pensar que esta situación se repetirá y ello se evitaría usándose la Laguna del
Diamante como agente de aporte del río del mismo nombre, mediante determinados
trabajos”.
La falta de agua pone en peligro muchos cultivos de Colonia Elena en este
departamento.

Universidad Nacional de Colombia


La variabilidad hídrica en la cuenca del río Atuel, desde la climatología histórica: siglo xviii a mediados del xx 353

Río o cauce
Fecha Fuente Cita o resumen de cita
referido
Sensible merma en las aguas del Diamante. “La merma en el caudal del río
Diamante se debe [...] a la obstrucción de la boca de la laguna donde el río tiene su
fuente originaria. Los desprendimientos de piedras, motivados por movimientos
sísmicos, han cubierto casi por completo la parte oriental de la laguna, por donde
Diario El esta echaba sus aguas al citado río. De la abertura que alcanza aproximadamente
03/12/1946 Comercio Diamante 100 m, solo resta una pequeña boca de alrededor de 5 m, por done el agua se vuelca
(1946b, 3) torrentosamente hacia el cauce que allí nace [...]. Naturalmente que este hecho ha
determinado la elevación del nivel de la laguna hasta que sus aguas sobrantes se
evaden por otras aberturas situadas al sudoeste. Puede haber influido también [...]
la escasa nieve acumulada durante el último invierno, pero esta causa también se
presentó en otras temporadas sin que ella diera lugar al fenómeno actual [...]”.
Diario Los Andes Comisión de estudio al nacimiento del río Diamante: merma de agua por ausencia de
15/12/1946 Diamante
(1946, 2) nevadas, ha habido deshielos reducidos, sequía excepcional.
Diario Los Andes
09/01/1948 Atuel Disminución caudal del Atuel causa alarma.
(1948, 4)

Facundo Rojas
Licenciado y doctor en Geografía (Universidad Nacional del Cuyo - Universidad Nacional de Cuyo, 2013).
Investigador adjunto del conicet. Profesor adjunto, en Epistemología de la Geografía y Laboratorio
de Sistemas de Información Geográfica de la Facultad de Filosofía y Letras, uncuyo (Argentina). Sus
abordajes combinan historia ambiental, ecología política y el uso de sistemas de información geográ-
fica y de sensores remotos, para el estudio de recursos naturales y bienes comunes. Actualmente, su
investigación se focaliza en estudiar la variabilidad climática e hidrológica a partir de documentación
histórica (climatología histórica).

María del Rosario Prieto


Doctora en Geografía e Historia de la Universidad de Sevilla (España). Investigadora principal con-
tratada Ad honorem (conicet). Profesora extraordinaria, categoría de consulta, de la Universidad
Nacional de Cuyo - uncuyo (Argentina) y ex directora del Museo de la Facultad de Filosofía y Letras
de la misma universidad, donde también fue profesora titular de la cátedra Ambiente y Cultura en
América Prehispánica. Sus áreas de interés eran la historia ambiental, la climatología histórica y la
etnohistoria.

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