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Sistemas y Aparatos Orgánicos

También llamado organismo, es un conjunto de células que forman


una estructura muy organizada y compleja, en la que intervienen
sistemas de comunicación molecular, que se relaciona con el
ambiente con un intercambio de materia y energía de una forma
ordenada y que tiene la capacidad de desempeñar las funciones
básicas de la vida que son la nutrición, el crecimiento, la relación y a
ser posible la reproducción, de tal manera que los seres vivos
actúan y funcionan por sí mismos sin perder su nivel estructural
hasta su muerte.

Las células que componen cualquier organismo no se hayan


dispersas al azar, sino que suelen encontrarse agrupadas en tejidos
de células diferenciadas de la misma naturaleza y con un
comportamiento fisiológico común, los cuales se distribuyen en
órganos y estos a su vez en sistemas.

Los sistemas orgánicos comparten cierta coherencia morfo-


funcional, tanto en sus órganos y tejidos, como en sus estructuras y
origen embriológico. Será precisamente la unión organizada de
todos estos sistemas (o conjuntos de sistemas, denominados
aparatos) la que dé lugar al organismo completo. Los órganos son
estructuras corporales de tamaño y forma característicos, que están
constituidos por masas celulares llamadas tejidos y que llevan a
cabo funciones vitales específicas. Ejemplos: el estómago,  hígado, 
cerebro, etc.

El conjunto de órganos que realizan una función común y


representan un nivel de organización importante del cuerpo humano
reciben la denominación de sistemas orgánicos. Sin embargo,
existen diversas opiniones entre los autores acerca de este tema,
que crean algunas confusiones, como las relacionadas con los
conceptos de sistema y aparato, la cantidad de sistemas
establecidos y los órganos que lo componen.

En las ciencias biológicas se utilizan las denominaciones de sistema


y aparato para designar al conjunto de órganos que contribuyen a
realizar una función general común, aunque existen diferencias en la
acepción de estos 2 términos.
Un Sistema está compuesto por órganos homogéneos o
semejantes por su estructura y origen, pues en su estructura
predomina un mismo tipo de tejido originado de una determinada
hoja germinativa, los Sistemas son: a) Óseo, b) Muscular y c)
Nervioso). Mientras que un Aparato está constituido por órganos
heterogéneos o diferentes, los Aparatos orgánicos son: a)
Locomotor, b) Digestivo, c) Respiratorio, d) Urinario, e) Genital, f)
Endocrino y g) Circulatorio).

Sin embargo, algunos autores consideran la semejanza de


estructura basada en un plan estructural común, por lo que también
incluyen como sistema otras agrupaciones de órganos (sistemas
digestivo, respiratorio, urinario, genital y cardiovascular).

Otros autores estiman que todos los sistemas que concurren en la


misma función forman un aparato (aparatos de la vida de relación,
de nutrición y de generación). También se subdividen los sistemas
en otros más limitados, por lo que aumenta su número. Además, hay
diferentes criterios al precisar los componentes de determinados
grupos de órganos (endocrino, hemopoyético y circulatorio).

Por las razones antes expuestas, los términos sistema y aparato se


usan indistintamente, aunque la tendencia predominante es emplear
la palabra sistema.

Contribución del grupo carbohidratos en la producción


de energía
Los carbohidratos, también llamados glúcidos o hidratos de carbono,
se pueden encontrar casi de manera exclusiva en alimentos de
origen vegetal. Constituyen uno de los tres principales grupos
químicos que forman la materia orgánica junto con las grasas y
las proteínas. Los carbohidratos son los compuestos orgánicos más
abundantes de la biosfera y a su vez los más diversos. Normalmente
se los encuentra en las partes estructurales de los vegetales y
también en los tejidos animales, como glucosa o glucógeno. Estos
sirven como fuente de energía para todas las actividades celulares
vitales.
Aportan 4 kcal/gramo al igual que las proteínas y son considerados
macro nutrientes energéticos al igual que las grasas. Los podemos
encontrar en una innumerable cantidad y variedad de alimentos y
cumplen un rol muy importante en el metabolismo. Por eso deben
tener una muy importante presencia de nuestra alimentación diaria.

La fibra debe estar siempre presente, en una cantidad de 30 gr.


diarios, para así prevenir enfermedades y trastornos de peso
como la obesidad. 
En todas las dietas hipocalóricas las frutas y verduras son de gran
ayuda, ya que aportan abundante cantidad de nutrientes sin
demasiadas calorías. Las funciones que los glúcidos cumplen en el
organismo son, energéticas, de ahorro de proteínas, regulan el
metabolismo de las grasas y estructural.

 Energéticamente, los carbohidratos aportan 4 Kcal (kilocalorías) por


gramo de peso seco. Esto es, sin considerar el contenido de agua
que pueda tener el alimento en el cual se encuentra el carbohidrato.
Cubiertas las necesidades energéticas, una pequeña parte se
almacena en el hígado y músculos como glucógeno (normalmente
no más de 0,5% del peso del individuo), el resto se transforma en
grasas y se acumula en el organismo como tejido adiposo. 
Se suele recomendar que mínimamente se efectúe una ingesta
diaria de 100 gramos de hidratos de carbono para mantener los
procesos metabólicos. Ahorro de proteínas: Si el aporte de
carbohidratos es insuficiente, se     utilizarán proteínas para fines
energéticos, relegando su función plástica.

Regulación del metabolismo de las grasas: En caso de ingestión


deficiente de carbohidratos, las grasas se metabolizan
anormalmente acumulándose en el organismo cuerpos cetónicos,
que son productos intermedios de este metabolismo provocando así
problemas (cetosis).

Estructuralmente, los carbohidratos constituyen una porción


pequeña del peso y estructura del organismo, pero de cualquier
manera, no debe excluirse esta función de la lista, por mínimo que
sea su indispensable aporte.

Carbohidratos simples:
Son los monosacáridos, entre los cuales se encuentran la glucosa y
la fructosa, que son los responsables del sabor dulce de muchos
frutos. Con estos azúcares se debe tener cuidado ya que tienen
agradable sabor y el organismo los absorbe rápidamente. Su
absorción hace que nuestro organismo secrete la hormona insulina
que estimula el apetito y favorece los depósitos de grasa.

El azúcar, la miel, mermeladas, golosinas, etc. Son Carbohidratos


Simples de fácil absorción.
Otros alimentos como la leche, frutas y hortalizas los contienen
aunque distribuidos en una mayor cantidad de agua.

Este tipo de Carbohidratos que son elaborados a base de azúcar


refinadas tienen un alto aporte calórico y bajo valor nutritivo, por lo
que se debe consumir de una manera moderada

Carbohidratos complejos:

Los Carbohidratos complejos son los Polisacáridos. Entre ellos se


encuentran la fibra integral, avena, arroz, harinas, papas y el
almidón presente en los tubérculos.

El organismo utiliza la energía proveniente de los carbohidratos


complejos de a poco, por eso son de lenta absorción. Se los
encuentra en los panes, pastas, cereales, arroz, legumbres, maíz,
cebada, avena, etc. Estos se descomponen en glucosa más
lentamente que los carbohidratos simples y por lo tanto proporcionar
una corriente progresiva constante de energía durante todo el día.

Siempre es más recomendable consumir este tipo de carbohidratos


que los simples. 

Enfermedades de transmisión sexual


Son causadas por más de 30 distintas bacterias, virus y
parásitos; la mayoría pueden conducir a enfermedades
crónicas, esterilidad y eventualmente la muerte.
Sin embargo, a pesar de su alta incidencia, muchos jóvenes y
adultos las desconocen. Y no se hacen suficientes esfuerzos para
prevenirlas y controlarlas.

Son las enfermedades de transmisión sexual (ETS), que a nivel


mundial afectan a uno de cada 10 jóvenes de entre 15 y 24 años y a
cada vez más adultos mayores de 45 años.

En América Latina, la falta de datos y estadísticas dificulta hacerse


una idea general del panorama. Y los estudios disponibles
demuestran que la incidencia de estas enfermedades varía
drásticamente de país a país e incluso de un área geográfica a otra
dentro de cada nación.

A continuación la lista de las 10 enfermedades de transmisión sexual


(ETS) más frecuentes en el mundo entero:

CLAMIDIA

Es la enfermedad bacteriológica más común. Se transmite a través


del sexo vaginal, anal y oral. También al compartir juguetes sexuales
o de la madre al hijo durante el embarazo o el parto.

Se cura con un antibiótico y la mejor prevención es el preservativo.


Se la conoce como “la infección silenciosa” pues en la mayoría de
los casos no manifiesta síntomas. Puede infectar las células del
cuello del útero, la uretra, el recto y, a veces, la garganta y los ojos.

Si no se detecta a tiempo puede provocar la enfermedad inflamatoria


pélvica (EIP), cuyas consecuencias son el dolor pélvico crónico y
esterilidad.

En las mujeres, los síntomas son flujo abundante, sangrado anormal


entre los períodos menstruales o durante el acto sexual, dolor al
tener relaciones o al orinar y en la parte baja del abdomen.

En los hombres se manifiesta con un líquido blancuzco que sale de


la uretra y dolor al orinar o en los testículos.

GONORREA O BLENORRAGIA
La gonorrea es una infección bacteriológica de transmisión sexual
que puede infectar la uretra, el cuello del útero, el recto, el ano y la
garganta, si se ha practicado sexo oral. Los síntomas normalmente
aparecen entre 1 y 14 días después de la relación sexual.

Es posible no tener síntomas, y los hombres suelen notarlos más


que las mujeres. Los síntomas pueden ser ardor al orinar, líquido
blanco o amarillo del pene, flujo vaginal amarillento e irritación o flujo
del ano.

Una infección de gonorrea durante un embarazo puede causar


problemas graves al bebé. Si una madre está infectada puede
pasarle la gonorrea a su bebé durante el parto.

Se cura fácilmente con antibióticos. Pero si no se trata, en la mujer


la gonorrea –así como la clamidia- se puede convertir en
enfermedad inflamatoria de la pelvis que puede impedirle tener hijos.

Si no se trata en los hombres, también puede dejarlos estériles.

SÍFILIS

Aunque se cura fácilmente con antibióticos o penicilina, causa miles


de muertes en todo el mundo. Se contagia por sexo oral, vaginal o
anal, por contacto con la piel de un infectado o al compartir juguetes
sexuales. También se puede transmitir en una transfusión de
sangre. Se lo puede contagiar la embarazada a su bebé, lo que se
conoce como sífilis congénita.

Los síntomas coinciden en hombres y mujeres pero pueden ser


difíciles de identificar –parecidos a los de la fiebre y la gripe- e
incluso imperceptibles.

En una primera etapa, dos o tres semanas después de que la


bacteria haya entrado en el cuerpo, aparecen unos chancros
(lastimaduras), generalmente indoloros. Si no se trata durante
mucho tiempo, la sífilis puede provocar graves daños al corazón, el
cerebro, los ojos y otros órganos internos y provocar la muerte.

HERPES GENITAL
El herpes genital es un virus similar al del herpes que aparece en la
boca y se transmite por vía sexual. También puede trasladarse a la
boca durante el sexo oral.

A veces los síntomas aparecen mucho tiempo después de al


infección, incluso años.

El virus produce unas dolorosas úlceras alrededor de la vagina y en


el pene. Al igual que el herpes labial, una vez que el virus entra al
cuerpo permanece ahí durante toda la vida, así que las úlceras
pueden reaparecer.

VIH/SIDA

El Virus de la Immunodeficiencia Humana (VIH) infecta a las células


del sistema inmunológico y las destruye, reduciendo la capacidad
del cuerpo para protegerse de otras infecciones y del cáncer.

No hay cura: la persona queda infectada de por vida. Si empieza a


desarrollar infecciones o cáncer se considera que tiene Síndrome de
Inmunodeficiencia Adquirido, sida.

El VIH se transmite sólo a través del ingreso de sangre, semen,


fluidos vaginales o leche materna al cuerpo. Las dos maneras más
frecuentes de contagiarse es por sexo vaginal o anal sin condón o
por compartir jeringas o agujas infectadas. El virus puede pasar de
madre a bebé antes o durante el parto y al darle de mamar.

Otras vías de contagio son las transfusiones de sangre, el sexo oral


y en menor medida en el dentista o a través de besos, si ambas
personas tienen heridas en la boca.

Los síntomas no son inmediatos. La única forma de detectar el virus


es por medio de un examen de sangre.

TRICONOMIASIS

Causada por el protozoo Trichomonas vaginales, es una ETS muy


común. Casi siempre se transmite por contacto sexual. En las
mujeres, infecta las células de la vagina y la uretra (el orificio para
orinar), en los hombres las de la uretra.

Se transmite por sexo vaginal, compartir juguetes sexuales o de la


embarazada al hijo.

Casi la mitad de las mujeres no presentan síntomas. Las molestias


pueden aparecer desde 3 a 21 días después de contraer el parásito.
En las mujeres, los síntomas son flujo blanco o de mal olor, picazón
o ardor en la vagina, dolor al orinar y/o al tener relaciones sexuales y
molestias abdominales.

CONDILOMAS (HPV)

Los condilomas o verrugas genitales son sumamente comunes y


contagiosas, causadas por el virus del papiloma humano, VPH o
HPV, por sus siglas en inglés. Se transmite al mantener relaciones
sexuales por vía oral, genital o anal con un infectado aunque
también puede contraerse con simple contacto de piel a piel.

Se manifiesta en forma de verrugas localizadas en los genitales o el


ano. Sin atención médica, las verrugas crecen y toman una forma
similar a una coliflor.

En los hombres, las verrugas genitales se pueden observar


generalmente en la cabeza del pene. En las mujeres, algunos tipos
de HPV -hay más de 100- pueden llegar a producir cáncer del cuello
del útero. Los síntomas incluyen, además de las verrugas, malestar
permanente en la zona genital. Si una mujer embarazada tiene
condilomas, su hijo puede infectarse durante el parto.

CANDIDIASIS

Es causada por un hongo llamado Cándida albicans que vive en la


piel, la boca y las áreas genitales. Generalmente se mantiene bajo
control, pero a veces crece y produce esta enfermedad.

El uso de ropa ajustada, como jeans o ropa interior de materiales


sintéticos que no favorecen la ventilación, el embarazo, la
quimioterapia, diabetes, VIH u otras enfermedades que afectan el
sistema inmunológico o el uso de productos que irriten la vagina,
como jabones o champúes aumentan el riesgo de Candidiasis.

El hongo puede contagiarse a través del sexo vaginal, anal u oral,


por los dedos o por compartir juguetes sexuales.

LADILLAS

Las ladillas o piojos púbicos son unos molestos y pequeños


parásitos que se clavan en la piel para alimentarse de sangre. Viven
en el vello corporal, especialmente en el vello púbico, aunque
también pueden encontrarse en el vello de las axilas, la cara o el
pecho. Los piojos son de color amarillo-gris y usan sus pinzas para
agarrarse a las hebras de cabello.

Las ladillas se pasan fácilmente durante el sexo, pero también se


pueden pasar compartiendo ropa, toallas o ropa de cama con
alguien que las tiene. Las ladillas no pueden trasmitirse por medio
de asientos de inodoro o en piscinas.

Los síntomas son picazón e inflamación en la piel. A veces se


pueden ver los piojos y los huevos, y también puntos de sangre ya
que los bichos se alimentan de los vasos sanguíneos de la piel.

SARNA

Es una infección de la piel causada por un minúsculo parasito que


anida en la piel y deposita huevos. Se transmite fácilmente a través
de contacto físico cercano o sexual. Los niños también pueden
contagiarse si están cerca de alguien con sarna.

Los parásitos se alojan en la zona genital, las manos, entre los


dedos, en muñecas y codos, axilas, el abdomen, el pecho, alrededor
de los pezones en las mujeres, en los pies, los tobillos y las nalgas.

Los bichos sobreviven 72 horas lejos de la piel, por lo tanto pueden


estar presentes en la ropa, la cama y las toallas. Algunas personas
no perciben los síntomas, que pueden estar ausentes incluso hasta
seis semanas después de contraer el parásito.
Los síntomas son gran picazón – que a veces ocurre sólo de noche-
irritación y lastimaduras por rascarse.

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