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El autor argumenta que el diseño se ha vuelto aburrido debido a su obsesión con la perfección. En su lugar, propone celebrar la "monstruosidad" y lo "grotesco" como estados permanentes del presente. Según el autor, estamos subvirtiendo la lógica de la perfección al producir lo monstruoso y grotesco a través de la perfección matemática, similar a la evolución.
El autor argumenta que el diseño se ha vuelto aburrido debido a su obsesión con la perfección. En su lugar, propone celebrar la "monstruosidad" y lo "grotesco" como estados permanentes del presente. Según el autor, estamos subvirtiendo la lógica de la perfección al producir lo monstruoso y grotesco a través de la perfección matemática, similar a la evolución.
El autor argumenta que el diseño se ha vuelto aburrido debido a su obsesión con la perfección. En su lugar, propone celebrar la "monstruosidad" y lo "grotesco" como estados permanentes del presente. Según el autor, estamos subvirtiendo la lógica de la perfección al producir lo monstruoso y grotesco a través de la perfección matemática, similar a la evolución.
Manifiesto # 19 Notas sobre la mutación y la búsqueda del terror (y a veces lo grotesco)
¿Qué tan aburrida se ha vuelto la perfección? La prueba de esto radica en el hecho
de que nuestras obsesiones por el diseño se basan en una apreciación de la perversidad de la forma mutante, un gusto aprendido de las películas y puesto a trabajar en la arquitectura.
Se produce en el acto de diseñar, en la sensación concentrada de señalar y hacer
clic. Aquí esa sensación se parece más a la pintura que a la ingeniería. Las formas de imagen son el producto de acelerar y desacelerar, cortar y mezclar, fusionar y separar: repeticiones de ritmos escénicos aprendidos durante toda una vida de asombro por el afecto cinematográfico.
Micro-técnicas para peinar los umbrales de lo horrible que se vuelve hermoso y lo
hermoso que se vuelve horrible (grotesco) se han impreso como señales visual- temporales en mi propia retina de diseño. La monstruosidad es el nuevo sexo. La lujuria todavía gobierna el imperio del deseo, solo que ahora los deseos son más elaborados: múltiples, complejos, inteligentes, emotivos. La importancia de la multiplicidad finalmente ha abierto la puerta a la mutación como estado permanente del presente.
Nos estamos convirtiendo en monstruos, una especie suscitada por imágenes no
perfectas provenientes de metodologías perfectas. Aquí es donde está ocurriendo la verdadera transformación. Estamos subvirtiendo la lógica de la perfección: lo que solía ser dominar el resultado de un proceso no perfecto ahora se trata de la producción de monstruosidad y lo grotesco a través de la perfección matemática de un mecanismo evolutivo. Entonces, ¿por qué no ser optimista? Al final, así es la vida, así es el amor ...