Colegio Integrado Código: GAI-03-R08

MATERIAL DE
Santa Teresita APOYO
Versión 01
Fecha: ___ ___ ___
Área: Ciencias Naturales y Educación Asignatura: Biología Docente: Neisy Marcela Calderón
Ambiental
Código: Estudiante: Curso: Octavo Ficha Nº: 1
Indicador de Desempeño: Explica la forma en que los seres vivos responden a Calificación
estímulos.
LA HOMEOSTASIS
Los deportistas de alto rendimiento llevan su cuerpo al límite, por lo tanto, deben mantener en
equilibrio constante y en óptimas condiciones su organismo, tanto en el nivel interno como con
respecto al ambiente donde llevan a cabo sus prácticas físicas. Para ello generan mecanismos de
control, sistemas de autorregulación u homeostasis.

Sin embargo, la homeostasis no es exclusiva de los deportistas, los seres vivos deben poner en
funcionamiento diversos mecanismos que les permitan mantener el equilibrio interno a partir de la
regulación del metabolismo para compensar los cambios en su entorno.

El medio interno y su equilibrio

El cuerpo de los deportistas, así como el de los seres
vivos, está conformado por células. A nivel
microscópico, las células viven en un ambiente en el
que se desarrollan y cumplen sus funciones. A este
ambiente, compuesto por diversas sustancias se le
denomina medio interno. Por ejemplo, cada célula de
los animales está rodeada de un líquido proveniente de
los vasos sanguíneos, denominado líquido intersticial
o tisular, y hace parte del medio interno. Su función es
proveer a las células con nutrientes y recibir sus
desechos. El líquido intersticial contiene agua, algunos
aminoácidos, azúcares, ácidos grasos, enzimas,
hormonas, neurotransmisores, sales minerales y
productos de desecho de las células.

La autorregulación
Los deportistas mantienen su equilibrio interno debido a un flujo permanente de información: el
deportista recibe información ya sea de su medio interno o del ambiente y, de acuerdo con ella, se
activan diferentes mecanismos mediante los cuales las distintas partes del cuerpo reaccionan con lo
que deben hacer. Este flujo de información crea lo que denominamos un sistema de autorregulación
u homeostasis.

La homeostasis se define como un conjunto de procesos mediante los cuales un organismo

mantiene su medio interno dentro de un estrecho intervalo de condiciones necesarias para el óptimo
funcionamiento de sus células.

Por medio de la homeostasis, los organismos vivos mantienen el equilibrio interno regulando su
metabolismo para compensar los cambios en su entorno. La
regulación de la temperatura y del balance entre acidez y alcalinidad
(pH) son ejemplos de procesos homeostáticos. La homeostasis hace
parte de la función vital conocida como función de relación, en la
que se obtiene información del ambiente para sobrevivir

Los mecanismos homeostáticos

Los diferentes sistemas que conforman los seres vivos se
encuentran interrelacionados; esto permite mantener en condiciones
relativamente constantes los diferentes factores que influyen en la
homeostasis del organismo. Las funciones que llevan a cabo a partir
de dichas interrelaciones son: el transporte en el líquido extracelular,
la eliminación de productos del metabolismo, el control de las funciones corporales, la respuesta
inmune y la reproducción.

Transporte del líquido extracelular

El líquido extracelular se transporta por el organismo en dos momentos. El primero, el movimiento

del plasma, un componente de la sangre formado principalmente por agua y algunas proteínas,
ocurre dentro de los vasos sanguíneos, y el segundo, comprende el movimiento del líquido entre el
plasma en los capilares sanguíneos y el líquido intersticial que rodea a las células.

Como se observa en la imagen que muestra la circulación general de la sangre, cuando el cuerpo se
encuentra en reposo, la sangre recorre dos veces el circuito en un minuto aproximadamente,
mientras que, si el cuerpo se encuentra en movimiento, por ejemplo, cuando los deportistas están en
acción, la sangre atraviesa todo el circuito hasta seis veces por minuto.

A medida que la sangre atraviesa los capilares sanguíneos ocurre un intercambio permanente de
líquido extracelular entre el plasma sanguíneo y el líquido intersticial que se encuentra en los
espacios intercelulares. En ese sentido, el líquido extracelular de cualquier zona del organismo, tanto
plasma como líquido intersticial, se está mezclando continuamente, lo que permite mantener la
homogeneidad del líquido extracelular en todo el organismo.

La obtención de los nutrientes y el líquido extracelular

Los sistemas respiratorio y digestivo, el aparato locomotor y el hígado se encargan de generar

mediante distintas rutas metabólicas los nutrientes que circulan por el líquido extracelular.

El sistema respiratorio

Cada vez que la sangre atraviesa el organismo, fluye por los pulmones y capta a través de los
alvéolos, el oxígeno que necesitan las células.

El sistema digestivo

Una parte de la sangre que bombea el corazón atraviesa las paredes del sistema digestivo, donde se
absorben los distintos nutrientes a través del intestino delgado y pasan al plasma sanguíneo.

El aparato locomotor

Este aparato permite la movilidad del organismo para obtener el alimento, además de apoyar
funciones como la masticación y la circulación de la sangre.

El hígado

Este órgano es el encargado de sintetizar sustancias como la bilis que ayuda a la digestión de las
grasas y la urea, que posteriormente pasa a los riñones y se elimina con la orina.

La eliminación de los productos del metabolismo

Los pulmones, los riñones, el hígado y el sistema digestivo intervienen en la eliminación de los
productos del metabolismo.

Los pulmones. Al mismo tiempo que la sangre capta el oxígeno en los pulmones, se libera el
dióxido de carbono desde la sangre hacia los alvéolos.

Los riñones. El paso de la sangre a través de los riñones permite eliminar del plasma sustancias
que ya no se necesitan para realizar las funciones vitales y que son producto del metabolismo, como
el dióxido de carbono, la urea, el ácido úrico y el exceso de iones.

El sistema digestivo. Las sustancias que ingresan al sistema digestivo, pero que no se digieren,
además de algunos productos residuales del metabolismo, se eliminan en las heces.

El hígado. Una de las funciones del hígado consiste en la eliminación de numerosos productos

químicos que se ingieren. El hígado mezcla estos residuos con la bilis para su posterior eliminación
en las heces.

El control de las funciones corporales

Los sistemas nervioso y glandular controlan las respuestas del organismo a las diferentes
perturbaciones del equilibrio interno.

El sistema nervioso. Mediante este sistema, receptores y estructuras sensitivas, se percibe el

estado del cuerpo o de su entorno. Además, determina las reacciones que debe realizar el cuerpo
frente a las sensaciones y transmite las señales apropiadas a través de las cuales responde a los
diferentes estímulos.

El sistema glandular. Al interior del organismo se encuentran las glándulas que segregan productos
químicos u hormonas que el líquido extracelular transporta a diversas  partes del cuerpo para regular
las funciones celulares. Adicionalmente, se generan sustancias que son secretadas o liberadas en la
superficie corporal.

La respuesta inmune
El sistema inmune, formado por la médula ósea, los glóbulos blancos, el timo, el bazo, los nódulos y
los vasos linfáticos, las mucosas y la piel, protege el cuerpo de patógenos como algunas bacterias,
los virus, los parásitos y ciertos hongos. Este sistema desarrolla un mecanismo que le permite al
cuerpo
1. diferenciar sus propias células de las células y sustancias extrañas.
2. destruir al invasor o a las sustancias extrañas mediante fagocitosis o mediante la producción
de anticuerpos.

La reproducción
La reproducción es una función homeostática, ya que gracias a esta, se producen nuevas células
que ayudan a mantener el equilibrio del cuerpo y se originan nuevos seres que ocuparán el lugar de
aquellos que mueren de tal manera que la homeostasis siga ocurriendo.

Los sistemas de control del organismo

Los humanos presentan variados sistemas de control o regulación. Uno de ellos corresponde a los
sistemas de control genético que actúan en las células para mantener reguladas las funciones
intracelulares y extracelulares. Otros sistemas regulan las funciones de los órganos a través del
control de cada componente de los mismos, mientras que otros actúan a través de todo el organismo
para controlar las interrelaciones entre los órganos y sistemas. Por ejemplo, el aparato respiratorio,
que actúa bajo el control del sistema nervioso, regula la concentración de dióxido de carbono en el
líquido extracelular. Hay dos procesos importantes que realizan los deportistas, y todas las personas,
para mantener el equilibrio: la regulación de la presión arterial y de la concentración de oxígeno en el
líquido extracelular.
La regulación de la presión arterial
Diferentes sistemas regulan la presión arterial. Uno de ellos es el sistema de barorreceptores, un
mecanismo de control de acción rápida. En el cuello y en el cayado aórtico en el tórax, se encuentran
muchos receptores nerviosos denominados barorreceptores que se estimulan cuando se estira la
pared arterial. El mecanismo de acción consiste en:
1. Cuando la presión arterial es demasiado elevada los barorreceptores envían descargas de
impulsos nerviosos al bulbo raquídeo.
2. Dichos impulsos inhiben el centro vasomotor y, a su vez, disminuyen el número de impulsos
transmitidos a través del sistema nervioso simpático hacia el corazón y los vasos sanguíneos.
3. Se disminuye la actividad de bomba en el corazón y se dilatan los vasos sanguíneos
periféricos, lo que permite aumentar el flujo de sangre a través de ellos.
4. La presión arterial disminuye hasta sus valores normales.
La regulación del oxígeno en el líquido extracelular
El organismo tiene un mecanismo de control especial a través de la hemoglobina, debido a sus
características químicas que le permite mantener una concentración constante de oxígeno en el
líquido extracelular. Este se desarrolla así:
1. La hemoglobina se combina con el oxígeno a medida que la sangre atraviesa los pulmones.
2. Si la concentración de oxígeno en los capilares tisulares es alta, la hemoglobina evita la
liberación de oxígeno; si la concentración es baja, se libera suficiente oxígeno para establecer
la concentración adecuada. A este proceso se le denomina función amortiguadora de
oxígeno de la hemoglobina y depende del pH y de la concentración de CO2 en los tejidos.

Las características comunes en los sistemas de control

Los sistemas de control, poseen algunas características comunes que les permiten desarrollar de
manera adecuada sus funciones.

La retroalimentación negativa

La mayoría de los sistemas de control del organismo actúan mediante retroalimentación negativa,

que consiste en una serie de cambios que permiten reestablecer los valores medios o adecuados de
los diferentes factores, como la temperatura, las concentraciones de oxígeno y dióxido de carbono, o
la presión arterial, que tuvieron algún cambio drástico.

La retroalimentación positiva
La retroalimentación positiva, a diferencia de la negativa, genera inestabilidad y en ocasiones la
muerte del organismo, pues si hay una situación que altera los rangos normales de los diferentes
factores, no actúan los sistemas de control para reestablecerlos. 

EL SISTEMA NERVIOSO
Luego de que los órganos sensoriales y otros receptores perciben los estímulos del medio interno y
externo, el organismo debe coordinar una respuesta que le permita sobrevivir y relacionarse de
manera adecuada con su entorno. Esta función de coordinación es muy importante y en los animales
se lleva a cabo mediante el sistema nervioso.

Inteligencia artificial?

El concepto es muy controversial y tiene diferentes definiciones; algunas de las más comunes
afirman que la inteligencia artificial es un campo de la ciencia y la ingeniería encargado de
comprender, desde un enfoque informático, el comportamiento inteligente y, así, crear artefactos
capaces de percibir su entorno y generar acciones que les permitan responder a los cambios que
ocurran.

La integración de la información

La inteligencia artificial trata de imitar el comportamiento inteligente, que se caracteriza por tres
elementos: el aprendizaje, el razonamiento y la autocorrección, que ocurre particularmente en los
animales vertebrados como los humanos. Para esto, los ingenieros trabajan en tres modelos:
 La programación heurística que simula el comportamiento humano para resolver problemas.
 La evolución artificial que utiliza los principios de la genética y de la evolución biológica.
 Las redes neuronales que se basan en el estudio del sistema nervioso humano para resolver
problemas.

Basado en este último modelo, se establecen nuevas formas de computación y algoritmos

matemáticos que se aplican en el entendimiento y la simulación del sistema nervioso, que es un
conjunto de células, tejidos y órganos encargados de recibir y procesar información para generar
respuestas que le permitan al organismo afrontar los cambios que se presentan en su medio interno
y en su entorno.

Las respuestas originadas en el sistema nervioso, después de que los órganos receptores o
sensoriales perciben un estímulo, se llevan a cabo mediante diferentes estructuras del cuerpo
denominadas efectores. Las respuestas ejecutadas por los efectores pueden ser:

 Respuestas motoras, si el efector es un músculo esquelético, que se contrae o relaja y

permite el movimiento de alguna parte del animal.
 Respuestas secretoras, si el efector es una glándula que produce y libera sustancias
químicas como respuesta al estímulo nervioso. Su acción es mucho más lenta y prolongada
que una respuesta motora.

EL TEJIDO NERVIOSO Y LAS REDES NEURONALES

El tejido nervioso es el que conforma el sistema nervioso. Para que el sistema codifique la
información que recibe de los receptores, la transmita y la procese, las células del tejido nervioso se
comunican entre sí, como ocurre con las redes de información de ciertas tecnologías. Una red
neuronal es un modelo matemático basado en organismos biológicos que se simulan en
computadoras para producir respuestas inteligentes. En el sistema nervioso se destacan dos tipos de
células: las neuronas y las células gliales. Ambas forman estructuras como fibras nerviosas, nervios,
ganglios y centros nerviosos.

Las neuronas biológicas y artificiales

Las redes neuronales de los sistemas de inteligencia artificial no solo imitan el funcionamiento del
tejido nervioso, sino también el de su unidad básica: la neurona que es la unidad estructural y
funcional del sistema nervioso. Los mensajes viajan por nuestro cuerpo y se transmiten a través de
redes formadas por estas células. Las neuronas tienen diferentes formas y tamaños, pero comparten
una serie de características.

La parte más grande de la neurona es el cuerpo celular o soma, donde se ubican algunos
organelos y el núcleo, que ayuda a controlar las actividades celulares. Desde allí, se extienden unas
prolongaciones llamadas dendritas, que reciben y conducen el mensaje hacia el cuerpo de la
neurona. Otra estructura importante es el axón, una fibra alargada que transmite los mensajes a
otras neuronas desde el cuerpo celular; cada una posee un axón. El terminal del axón, la parte más
distante del cuerpo celular, contiene ramificaciones que pasan los mensajes hacia las dendritas de
las neuronas con las que se conecta. Una neurona artificial es, en cambio, un elemento básico de
procesamiento de la información gobernado por un algoritmo matemático, un dispositivo de cálculo
con una entrada mediada por un vector y una única salida.

Los tipos de neuronas

De acuerdo con su función, las neuronas se clasifican en tres tipos:
 Las neuronas sensoriales son sensibles a varios estímulos provenientes del medio interno y
externo. Se encuentran en los órganos de los sentidos, los músculos, las articulaciones y los
órganos internos.
 Las interneuronas proporcionan conexiones entre las neuronas sensoriales y las neuronas
motoras, al igual que entre ellas mismas.
 Las neuronas motoras estimulan las células musculares, incluyendo los músculos del
corazón, el diafragma, los intestinos, la vejiga y las glándulas.

Las células gliales

Algunos animales, como los vertebrados, poseen unas células conocidas como células gliales, que
ayudan a las neuronas para que conduzcan la información de una manera más eficiente. Aunque las
neuronas son las únicas células del sistema nervioso capaces de captar estímulos y generar
respuestas, el apoyo que reciben de las células gliales es fundamental para su desempeño.

Las células gliales se encuentran en mayor cantidad que las neuronas, y se encargan de protegerlas,
brindarles soporte y nutrientes. Existen cuatro tipos:

 astrocitos, oligodendrocitos, células de schwann, microglías