De los artículos de la Fogata digital que enviaste el de Mattini me parece
impecable en forma y en contenido, sobre todo porque el "tono" estimula el
pensamiento y el debate. En los dos artículos restantes y a pesar de compartir muchas de sus ideas no encuentro el "espíritu del momento", considerando el espíritu del momento 1) la exposición crispada de "todas" las ideas que hay en la gente, las de mierda y las otras,2) el conocer, pero "no hacer valer" por parte de la gente las limitaciones de las herramientas que poseemos para cambiar las cosas de fondo;3) el conocimiento implícito de que sin "todos" no hay cambios porque el cambio es para "todos" 4) la paciencia para esperar a los rezagados y la impaciencia por resolver;5) el exponer claramente las propias ideas junto a la crítica a los demás. La gente preocupada por resolver de fondo hoy entiende, creo, que hace falta un nivel de organización que está vacante gracias a que quienes deberían funcionar para eso no lo hacen, no hay voluntad de acuerdos entre los partidos de izquierda, no se sientan a resolver sus diferencias y vuelcan a la sociedad variadas propuestas, como si la gente tuviera que elegir al "ma mejor".Ese no es el camino, y en ese intríngulis no incluyo solo a los partidos organizados sino a los "teóricos" independientes o no, la izquierda está generando un diálogo de sordos, ese es el mensaje. Creo que el parlamentarismo burgués está metido hasta el fondo en nuestras conciencias y hay que combatirlo. Eso no implica de ninguna manera que el otro camino posible y único sea el de los bifes. Hoy la gente unió en un solo haz su necesidad reivindicativa y política, por eso hay debates de cambio, las relaciones entre reforma y revolución son digamos "carnales", eso se va a hacer mas agudo con el tiempo gracias a que nos veremos cara a cara con el puño de los monopolios(los yankis). Nos encontraremos peleando codo a codo con gentes de las que hace seis meses nos separaba un abismo, hoy discutimos con vecinos o piqueteros que en su momento fueron carne de cañón de los milicos o de los partidos del sistema. Hay realidades cotidianas que son totalmente novedosas. Vas a un pueblo del interior y la intendencia parece ser el castillo del feudal, la gente sin un cobre y el intendente nadando en plata, y un odio consecuente que te eriza los pelos de la nuca. Estos gobiernos son el caos y la violencia, la gente quiere cambiar esto, no quiere nunca mas gobiernos o fuerzas que hipócritamente acusen a los demás de lo que ellas mismas generan. La gente está intentando combatir la injusticia, el caos y la violencia que generan estos hijos de puta. Fraternalmente. Adolfo. Como dijo un orador en la asamblea del domingo-“las vanguardias tendrán que hacer un gran esfuerzo por alcanzar a las retaguardias".