MARÍA

Cuidadora de un super Héroe

 TEXTO CLAVE
“Entonces su hermana dijo a la hija de Faraón: ¿Iré a
llamarte una nodriza de las hebreas, para que te críe
este niño? Y la hija de Faraón respondió: Ve. Entonces
fue la doncella, y llamó a la madre del niño, a la cual
dijo la hija de Faraón: Lleva a este niño y críamelo, y yo
te lo pagaré. Y la mujer tomó al niño y lo crio”.

Éxodo 2:7,8
 INTRODUCCIÓN
Fíjate que todos conocemos diferentes súper héroes,
¿verdad?
Me gustaría hacerte un desafío ahora: escriba en un papel
el nombre de uno o dos súper héroes y a lado el nombre de
alguien quien salvó o ayudó al súper héroe. Puedes elegir
el que quiera. Puedes ser un super héroe de verdad o una
historia que has visto o escuchado.
¿Te das cuenta que todos necesitamos ayuda?
I. UNA HISTORIA DIFERENTE
Cierto día, mientras el Faraón inspeccionaba las obras de
construcción en su reino, se dio cuenta que había hebreos por
todos lados (en los campos de cultivo, en los hornos de ladrillo,
en los puertos, construcciones, etc.) preocupado y con miedo
decidió hacerles más duro el trabajo, maltratarlos y para evitar
que más niños nacieran ordenó a dos parteras que mataran a
los varones recién nacidos.
Su estrategia no dio muy buen resultado por lo que tenía que
usar otro método, así que decretó que todo varón que naciera
desde ese día en adelante fuese arrojado al rio Nilo.
I. UNA HISTORIA DIFERENTE
Cuando las familias hebreas se enteraron de este decreto
tuvieron gran temor y dolor, era algo tan cruel que no parecía
verdad, pero el Faraón era muy sanguinario y orgulloso que no
le importaba nada ¡Imagina a esas pobres madres!
Éste era el tiempo más difícil en la historia de Israel y como
nunca antes desearon salir de Egipto. Comenzaron a orar
fervorosamente para que Dios los librara de inmediato.
I. UNA HISTORIA DIFERENTE
Amirán y Jocabed, una pareja de hebreos, cambiaron toda
su felicidad por noches de angustia y llanto. María y Aarón
esperan ansiosos la llegada de su hermanito, pero también
son conscientes de la orden de Faraón por lo que María,
una valiente y audaz señorita, ora todos los días pidiendo
que Dios cuide de su familia y de su pequeño hermanito.
I. UNA HISTORIA DIFERENTE
Jocabed dio a luz y nadie se tiene que enterar, María quiere
contar a todos sobre su nuevo hermanito, pero tiene miedo
que los soldados se enteren y vayan por él, así que en
secreto ayuda a mamá a cuidar del bebé y evitar en mínimo
ruido posible.
Han pasado tres meses, Jocabed y María se las ingeniaron
para mantener al bebé en secreteo, pero ya no pueden
más, piden ayuda a Dios, y a Jocabed se le ocurre una
brillante idea.
II. CUANDO LLEGA LA CRISIS
Mientras María cuida amorosamente del bebé, Jocabed tejió una canasta de juncos
de papiro y la recubrió con brea y resina para hacerla resistente al agua, cuando la
brea secó preparó una suave camita y con gran ternura pusieron al niño en ella.
Muchas lágrimas brotaban de los ojos de aquellas mujeres pues sabías que era una
bebé especial, temían lo que podía pasarle, pero su confianza en Dios las fortalecía,
así que después de darle un tierno beso cerraron la canasta y la pusieron a flotar en
el rio Nilo; la mamá quería acompañar el recorrido para que nada malo pasara, pero
sería muy evidente, así que María decidida y sin temor, se escondía sigilosamente
para vigilar al tierno bebé. Cuando tomas decisiones difíciles pero correctas, los
ángeles pelean junto a ti.
II. CUANDO LLEGA LA CRISIS
Al poco tiempo, la hija del Faraón bajó a bañarse en el río, y sus sirvientas se
paseaban por la orilla. Cuando la princesa vio la canasta entre los juncos, mandó a
su criada que se la trajera. Al abrir la canasta la princesa vio al bebé. El niño lloraba,
y su corazón se conectó. «Seguramente es un niño hebreo», pensó.
Mientras las doncellas se arrimaban para mirar el niño de cerca, preguntándose qué
podrían hacer con él. María, con mucha determinación, confianza y fe, se acercó a la
princesa y sin titubear –le dijo– “Perdóneme, alteza, ¿Quiere que vaya a buscar a una
mujer hebrea para que le amamante al bebé?” Dios le dio las palabras y las fuerzas
para dirigirse ante la princesa, ella era su instrumento para salvar al que libertaría a
Israel.
II. CUANDO LLEGA LA CRISIS
A la hija del faraón, le pareció una genial idea ya que le resolvería el curioso dilema que tenía
entre manos.
—¡Sí, consigue a una! —contestó la princesa.
María, corrió como el viento para encontrar a su madre.
–¡Mamá, Mamá! - gritaba mientras llegaba a la casa con la respiración agitada ¡Apresúrate!
¡Ven conmigo! ¡La princesa ha encontrado a mi hermanito!
¿Cuánto tiempo crees que le tomó a Jocabed ir desde su casa hasta la ribera del rio? –Yo creo
que no mucho, jamás había corrido tan rápido en su vida.
“Toma a este niño y dale el pecho por mí —le dijo la princesa a la madre del niño—. Te pagaré
por tu ayuda”. Así que Jocabed se fue con el bebé a su casa y lo amamantó.
 CONCLUSIÓN
¿Qué situaciones complicadas estás viviendo ahora en tu familia?,
¿Ves a Papá y Mamá discutir a cada instante a causa de estas
situaciones?, ¿Los ves llorar llenos de impotencia por no saber qué
hacer? ¿Sientes que, por ser un chiquillo, no te toman en cuenta?
¿Crees que se olvidaron de ti? ¿Tienes miedo de enfrentar nuevos
desafíos? Hoy quiero que sepas que, así como Dios usó a María para
salvar al libertador de Israel. Dios quiere usarte a ti para hacer cosas
grandiosas.
 CONCLUSIÓN
María, ¿Era una chiquilla? –Si. –¿Tuvo miedo? –claro que sí. –
¿Le tomaban en cuenta? Tal vez no. –¿Era importante para
Dios? –Pues era muy importante.
Dios no usa a personas famosas o a los súper héroes para
hacer su obra, él usa a jovencitos y señoritas como tú, que
aparentemente no tienen nada para ofrecer y que nadie les toma
en cuenta, pero que en sus manos se convierten en
instrumentos valiosos e indispensables.
 LLAMADO

Dios llamó a María para su obra, y él te está llamando a

ti HOY.