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Unidad: 1.

Planificación del estudio


Condiciones ambientales para el estudio
Al igual que en cualquier otra profesión, el lugar de trabajo es
importante, en el estudio requiere unas condiciones para conseguir
que el rendimiento sea máximo:
• FIJO: Siempre a ser posible el mismo sitio, porque le ayuda a crearse
un hábito de estudio.
• PERSONAL: Debe estar decorado a su gusto. En este punto se debe
tener en cuenta, que en la mesa de estudio y el espacio inmediato
que rodea el área de estudio, no debe haber nada que no sirva
específicamente para el estudio, sobre todo elementos que puedan
tener valor sentimental (trofeos, fotos, posters). Todo esto no quita
que en el lugar de estudio se encuentre su gusto y tenga el sello de su
personalidad. Es posible que tenga que compartir su habitación, no
obstante cree su ambiente personal en un rincón, es importante que
disponga de un mobiliario para usted.
• AISLADO: Que le permita la concentración, para ello debe evitar:
a) Conversaciones, llamadas telefónicas en las horas de estudio. Si
comparte habitación arréglese para estudiar a distintas horas o acuerde
guardar silencio durante el período de estudio. La voz humana es la
principal fuente de distracción durante el estudio.
b) Música. Es desaconsejable para actividades que requieran una gran
concentración. Solo podría ser conveniente para contrarrestar los
ruidos inoportunos del exterior. Pero habría de ser un fondo musical,
con volumen bajo y sin pausas publicitarias. Si no hay ruidos exteriores
es preferible que estudie sin música. Por supuesto la televisión es
prohibitiva, ya que estimula simultáneamente la vista y el oído.
c) Ruido exterior. Elija, si puede, una habitación con poco ruido, alejada
de la sala de estar, TV, etc.
• ORDENADO: De tal forma que cada objeto tenga destinada una posición y
siempre que le haga falta pueda localizarlo con rapidez, de esta forma
ahorrará mucho tiempo buscando libros, apuntes y material, inútilmente.
Otro punto importante, es tener preparado a mano todo el material
necesario para afrontar su sesión de estudio. Por supuesto, al finalizar,
debe reintegrarlo a su sitio.

• ILUMINACIÓN: Es preferible la luz natural sobre la artificial. La luz debe


entrar por el lado contrario de la mano con la que escriba para no hacer
sombras. Lo mismo ocurre con la luz artificial, debe tener las mismas
características. Hay que cuidar que esté bien distribuida, que no sea
demasiado intensa ni demasiado débil, y por supuesto, que no se proyecte
directamente sobre los ojos del estudiante. Lo más adecuado es una
lámpara articulada con una bombilla de 60 W y de tonalidad azul, y otra
ambiental que ilumine el resto de la habitación, para que no haya
demasiado contraste.
• VENTILACIÓN: Es importante renovar el aire de la habitación con cierta
frecuencia, porque si no se puede sufrir los efectos de una mala
ventilación: dolores de cabeza, mareo, malestar general, cansancio,
sopor, que hará que rinda menos en su trabajo intelectual. No sirve
con salirse un rato a tomar aire fresco, porque no elimina los efectos
de una mala ventilación, es pues necesario, renovar el aire de su
habitación y para ello podría aprovechar los descansos.
• TEMPERATURA: Aunque no es fácil de controlar este factor, sobre
todo en verano, sí es conveniente saber que las investigaciones
realizadas indican que para la actividad mental la temperatura ideal
ronda entre los 17 y 22 grados. Por encima o por debajo de estos
valores se producen efectos indeseables, sobre todo en períodos
largos. El frío produce inquietud, nerviosismo; el calor, sopor,
inactividad. Por lo tanto, los dos dificultan la concentración. Un punto
importante en este tema, es el hecho de que haya una temperatura
homogénea en la habitación.
• MOBILIARIO: Lo ideal sería disponer de una mesa de estudio, una
silla y armario-estantería para colocar libros, carpetas y útiles de
escritorio. No obstante una mesa con la amplitud necesaria para
disponerse cómodamente con el material, y una silla de respaldo
recto serán suficientes para propiciar una situación activa ante el
trabajo de estudio.

Evidentemente, todo lo expuesto son sugerencias para tener las


condiciones ideales; pero no siempre están a su alcance. En todo caso
debe intentar estudiar en las mejores condiciones posibles.
Condiciones físicas para el estudio
ESTADO NUTRICIONAL Y FÍSICO DEL ESTUDIANTE
a. La alimentación
Su alimentación y estado nutricional constituyen uno de los factores
internos más importantes en nuestro aprendizaje y rendimiento
académico.
La alimentación adecuada es aquella que cumple con las necesidades
específicas de la persona de acuerdo a su edad, promueve que
conservemos o alcancemos el peso esperado de acuerdo a nuestra talla
y previene el desarrollo de enfermedades que se presentan por
deficiencia o por exceso de nutrientes.
• Debemos buscar una alimentación sana, adecuada y rica en
nutrientes, Los estudios nos señalan que la gran mayoría de personas
salen de sus casas en la mañana sin comer, en estas horas, el cerebro
no puede utilizar el combustible de los alimentos consumidos el día
anterior y si, a continuación del ayuno nocturno, no se desayuna, los
niveles de azúcar sanguíneo sufrirán un continuo descenso. Cuando
estos niveles se hagan casi letales para el cerebro, el aprendizaje se
hace difícil, es probable que se aburran, se agoten y no aprenden
nada, bajando notablemente su rendimiento intelectual.
• Debemos evitar un desayuno lleno de azúcares o harinas, ya que
después de ingerir azucares (pan, galletas, mermelada, jugo de
naranja, refrescos, avena, café o té con azúcar, dulces) nuestro cuerpo
producirá una violenta elevación del azúcar sanguíneo, que estimula
la producción de insulina y producirá una abrupta baja de azúcar,
unas dos horas después de haber terminado de desayunar, ello
provocaría que nuestro rendimiento vaya en deterioro en forma
significativa, nuestro cerebro se ve obligado durante las mañanas a
poner en marcha los sistemas de emergencia que destruirán los
músculos para convertirlos en glucosa, el 80% del cerebro se dedica a
poner en marcha estos sistemas de supervivencia y sólo 20% se
dedica a poner atención, concentrarse, resolver problemas y
memorizar.
• Como podemos observar esto acarrea una fatiga o agotamiento
mental durante cada mañana y por supuesto aunque no perdamos la
inteligencia, sí estaría por debajo de su propia capacidad.
b. Importancia del desayuno
• En las horas matutinas se encuentran elevadas las hormonas que
convierten proteínas en energía, por ello un desayuno rico en
proteínas, permite que el cerebro las convierta en glucosa nueva cada
vez que el azúcar sanguíneo muestre un pequeño desnivel.

• Las proteínas de alta categoría pescado, pollo, leche, queso, etc.,


cuando se consumen en la mañana, se van convirtiendo en azúcar y
proporcionan estabilidad de los niveles de glucosa sanguínea a lo
largo del día: éstos son primordiales para el funcionamiento cerebral,
sobre todo en las áreas del aprendizaje y de la memoria. Esto permite
un excelente rendimiento escolar, evitando, además, la fatiga mental.
• Agregando al menos 40 gramos de proteínas al desayuno, la glucosa
sanguínea se mantendrá estable por unas catorce horas, el cerebro no
tendrá que ocuparse más por activar los sistemas de supervivencia y podrá
dedicarse por entero a las labores intelectuales. En esas condiciones no nos
volveremos más inteligentes, pero si estaremos en el máximo de nuestra
capacidad mental e intelectual. De esta manera podremos aprovechar al
máximo el rendimiento intelectual.

• Una buena alimentación debe ser rica en proteínas, vitaminas y en especial


las A, B ,C y D. Asimismo debemos de consumir alimentos que contengan
sales minerales como el calcio y fósforo. Tengamos cuidado con al ingesta
de bebidas alcohólicas y drogas ya que aminora el rendimiento físico e
intelectual. El consumo de la cafeína debe de ser en pequeñas dosis, de lo
contrario dificulta el sueño, incrementa la irritabilidad de la persona y
dificulta la concentración en el estudio y el rendimiento de la memoria.
c. El ejercicio y sueño.

• Con respecto al ejercicio, sabemos que el estudio y en general


las labores de tipo intelectual reducen la actividad física en
pequeños desplazamientos entre lugares lejanos y cercanos. El
traslado en grandes distancias, que seria una de las pocas
posibilidades de realizar un poco de ejercicio, es evitado por
razones de tiempo y comodidad. Los riesgos son presentar en el
futuro, atrofia muscular y una decadencia general del cuerpo.
Camine una hora al día y practique o realice algún deporte.
• Con respecto al sueño, podemos señalar, que el sueño es el mejor
condicionador que tiene el organismo Lo libera del cansancio, lo
desintoxica y junto con la reconstrucción de energías produce
también el descanso de la mente. Ocho horas son el promedio de
tiempo necesario para el sueño de una persona. Si presentara
dificultades al dormir o sus horas de sueño no son completadas, es
probable que sufra de dolores de cabeza, de trastornos digestivos,
fatiga, malestar general e irritabilidad. Así mismo puede presentar
dificultades al escribir, leer, fijar la atención, se presentarán olvidos y
en general bajo rendimiento académico.
Técnica Cartografía Conceptual
Condiciones psicológicas para el estudio
• El rendimiento de una persona es el resultado de la combinación de una
serie de factores psicológicos que son los responsables de la actitud
concreta con la que se enfrenta a los retos de su trabajo diario. Estos
factores están relacionados íntimamente con la manera en que esa
persona se ve a sí misma y cómo percibe su papel dentro del equipo o la
organización de la que forma parte.
• Estos seis elementos no son inmutables: muy al contrario. Una misma
persona tendrá predisposición a destacar en unos aspectos y flaquear en
otros, pero aparte de esto va atravesando diferentes niveles a lo largo del
tiempo, incluso en una misma jornada laboral. Lo interesante es conocer
estos factores para aprender a controlarlos y alentar aquellos que
contribuyen positivamente al rendimiento. Así podremos alcanzar el
estado psicológico óptimo para tener un alto rendimiento, tanto de forma
individual como en equipo.
1) MOTIVACIÓN
• Una persona motivada se caracteriza por poseer un firme deseo de
conseguir algo, bien sea para sí mismo (motivación de logro) o para
compararse socialmente (competitividad, aspecto que veremos más
adelante en este artículo).
• Las metas marcadas pueden ser de dos tipos: hacia la tarea (logros
concretos relacionados con la ejecución y el dominio de destrezas)
y/o hacia el resultado (el objetivo final). Las personas con un alto
rendimiento se caracterizan por orientar su motivación de logro hacia
la consecución de las metas del primer tipo, las tareas. Se marcan
pequeños retos en el día a día que son perfectamente asumibles y
que una vez alcanzados les hacen un poquito mejores para llegar al
objetivo final. Al mismo tiempo, les reportan una satisfacción a corto
plazo que realimenta su motivación y autoconfianza.
• No se trata de obviar por completo la meta final, sino de dedicar
nuestras energías a subir peldaño a peldaño una escalera de 100
escalones. Si desde el primer escalón miramos hacia el último, es
probable que nos desanimemos o incluso que nos tropecemos
porque no prestamos atención a dónde ponemos el pie. En cambio,
si subimos escalón a escalón seremos más conscientes de lo que
hemos ido conquistando, y finalmente, paso a paso, alcanzaremos
la cima.
2) CONCENTRACIÓN
• Una persona concentrada es capaz de focalizar su atención sobre los
elementos relevantes de la tarea, que en ciertos casos demandará un
foco más amplio (atendiendo varios aspectos de la misma) y en otros
uno más estrecho (centrándose en uno o dos primordiales).

• En términos generales, suele contribuir al rendimiento el adoptar un


espectro amplio la primera vez que nos enfrentamos a un desafío
para luego centrarnos en los aspectos principales.
3) SEGURIDAD
• Una persona segura confía en sus propias habilidades y competencias
para lograr el éxito en la tarea que se propone. La actitud es muy
importante: los primeros que debemos creer en nuestras
posibilidades somos nosotros, ya que la falta de
autoconfianza genera pensamientos limitantes que nos impiden dar
lo mejor de nosotros mismos.
• No debe confundirse con ser una persona confiada. Las personas
confiadas tienden a subestimar la dificultad de la tarea, lo que
conlleva con toda probabilidad una inadecuada dedicación de
atención y activación. En estos casos, el rendimiento es muy bajo.
4) ACTIVACIÓN
• Una persona adecuadamente activada es capaz de ajustar su estado
mental a las demandas de la tarea que se dispone a realizar,
independientemente de si personalmente es de naturaleza tranquila o
inquieta. Es decir, consiste en dimensionar el esfuerzo y la tensión: ni tan
poco que no lleguemos, ni tanto que nos pasemos.

• Este factor es importantísimo: si afrontamos una maratón como si fueran


los 500 metros lisos fracasaremos por agotamiento, y también a la inversa
por no haber dado el máximo. Esto es perfectamente aplicable al día a día
en el trabajo: a veces tareas no prioritarias despiertan una gran tensión en
nosotros simplemente porque son urgentes, cuando lo verdaderamente
importante todavía se queda en el cajón.
• La tensión y las subidas de adrenalina son respuestas biológicas muy
útiles para mantenernos alerta, pero cada tarea, en función de su
dificultad e importancia, precisa un nivel de activación concreto. Ser
capaz de detectar esto y saber adecuarlo a cada tarea es una
habilidad que contribuirá de forma decisiva al éxito/fracaso de dichas
tareas en el futuro.
5) COMPETITIVIDAD
• La competitividad está relacionada las ganas por realizar las tareas al
máximo de las propias capacidades, independientemente de la
motivación para la consecución de los objetivos. A una persona
competitiva puede no importarle el objetivo final y en cambio desear
intensamente salir victoriosa.

• La competitividad conecta con otros aspectos psicológicos como la


actitud, la convicción y la autoconfianza de la que acabamos de
hablar.
6) COHESIÓN O PERTENENCIA
• Como guinda, hablaremos de la cohesión o de pertenencia. Una
persona no puede dar el máximo rendimiento si no es como parte de
una entidad mayor: un equipo, una organización. Una persona
cohesionada es consciente de que no camina sola en busca de sus
metas, sino que persigue un objetivo común.

• Las dinámicas positivas que genera un grupo cohesionado


contribuyen tanto a los objetivos generales del mismo como a los
objetivos personales de cada uno de sus miembros.
• Estos seis factores no solo condicionan el nivel de rendimiento en el
día a día: también son los responsables de “poner techo” a la
progresión de una persona dentro de una organización. Cuando fallan
aspectos como la motivación o la seguridad en uno mismo,
difícilmente podemos seguir evolucionando y llevar nuestras propias
capacidades un paso más allá, que es, en definitiva, en lo que consiste
el crecimiento.
• ¿Y qué hay de ti?
• ¿Notas que flaqueas en alguno de estos puntos?
• ¿Crees que podrías llegar más lejos si trabajases la forma en la que
ves las cosas o te relacionas con tu equipo para mejorarlos?
Preparación para los exámenes
• Sabemos y entendemos que los exámenes son la prueba de fuego del
estudiante, sirven para saber si estamos o no aptos para el dominio
de concepto.
• Los exámenes tienen su técnica. Para realizarlos con éxito, debe de
preparar con tiempo la asignatura, estar en buenas condiciones físicas
y emocionales, como adoptar actitudes adecuadas durante su
desarrollo.
• La proximidad a un examen, a muchos nos llevan a hacer cosas
excepcionales, como por ejemplo no dormir, no comer, por la
ansiedad natural que representa la evaluación.
• Vamos revisar los tres momentos de la evaluación: ANTES, DURANTE
Y DESPUES.
Antes de la evaluación
a. La preparación del examen debemos de realizarlo el primer día de
iniciada la asignatura, más no estudiemos un día o dos días antes del
examen.
b. Antes de preparar una prueba es aconsejable que nos sentemos en
nuestro escritorio y pensemos: ¿Qué debo de hacer? y ¿De cuánto
tiempo dispongo y cuánto necesito?
c. Realicemos repasos periódicos
d. Repasemos en base a resúmenes y esquemas
e. El mismo día no debemos de estudiar, solo revisar el material.
Durante el examen
• Es importante mantener la calma, nada mas que sentarnos, relajarnos
y realizar 10 respiraciones profundas y lentas, podremos apreciar que
en la medida que vaya pasando el tiempo, disminuye el nivel de
ansiedad.
• Sigamos las instrucciones que dé el profesor antes de iniciar el
examen. Leamos atentamente las instrucciones impresas en la hoja
del examen y no demos nada por supuesto. Si no entendemos algo,
levantemos la mano y preguntemos al profesor.
• Una vez que hayamos leído las instrucciones, distribuyamos el tiempo
que disponemos entre las preguntas, según su importancia y
reservemos unos minutos para revisar el examen una vez que lo
hayamos terminado.
• Comencemos a responder por la pregunta que mejor conozcamos.

• Procuremos destacar con claridad las ideas y cuidemos su redacción.



• No respondamos telegráficamente a las preguntas, sólo en el caso
que no se nos pide un esquema sino el desarrollo.

• La presentación del examen debe de ser aceptable, la letra debe de


ser legible y cuidemos de nuestra ortografía.
Después del examen
• Unos días después del examen el profesor le devolverá el examen
corregido, no nos conformemos con mirar solamente la nota, leamos
y escuchemos los comentarios del profesor, que suelen centrarse en
los fallos más habituales de la clase y en la forma correcta como se
debía haber respondido a las preguntas del examen.

• Si nos han quedado dudas sobre la valoración de alguna pregunta,


consultemos al profesor, haciendo gala de la mayor educación posible
y escuchemos con atención sus explicaciones y sugerencias.
Tipos de exámenes
A lo largo de la vida universitaria, tendremos que someterse a
exámenes de características muy diferentes.
Tenemos:

a. Los exámenes escritos tipo ensayo, en la que se nos pide que


desarrollemos uno o varios temas, que comparemos y/o comentemos.

b. Las pruebas objetivas, las cuales miden la capacidad de síntesis y de
discernimiento, eliminan la subjetividad del docente en la corrección,
pero miden con menor profundidad los conocimientos. Entre estas
contamos con :
✓Pruebas de enlazar
✓Pruebas de verdadero falso
✓Pruebas de completar
✓ Pruebas de elección múltiple

c. Los exámenes orales


Bibliografía Consultada
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