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Trayectorias de desarrollo profesional docente

para un uso pedagógico de la argumentación


a partir del uso de soportes curriculares digitales
Maribel Calderón Soto* | Maximiliano Silva Barrueto**
María Constanza Villavicencio Rojas*** | Antonia Larrain Sutil****
María Cecilia Ramos Araya***** | Hugo Tapia Silva •
Álvaro Sánchez•• | Consuelo Moreno••• | Camila Morán Ramírez••••

El presente artículo tiene como objetivo describir las transformacio- Palabras clave
nes de prácticas pedagógicas y uso pedagógico de la argumentación en
docentes, a partir del apoyo de materiales curriculares soportados tec- Argumentación
nológicamente con un software piloto denominado argumentApp. Se Desarrollo profesional
utilizó una metodología cualitativa, mediante el estudio de cuatro casos docente
de profesores y estudiantes de cuatro escuelas de la Región Metropolitana Prácticas de aula
en Chile. Los datos, recogidos mediante observaciones de clases y entre-
vistas en profundidad, indican que los docentes incorporaron prácticas Soporte curricular
colaborativas en el aula y produjeron un mayor número de preguntas de Tecnología en el aula
argumentación. Se observan diferencias en el modo de apropiarse de la
herramienta tecnológica y de su aporte a la dinámica de aprendizaje en el
aula. Los resultados se discuten considerando el aporte de intervenciones
de desarrollo profesional situadas en un contexto concreto de práctica y
las dimensiones que permiten construir una intervención que favorezca
una enseñanza dialógica.

This article has as its objective to describe the transformations of pedagogical Keywords
practices and pedagogical use of argumentation in teachers, with the support
of curricular materials technologically supported by a pilot software named Argumentation
argumentApp. We used a qualitative methodology, involving the study Teachers’ professional
of four cases of teachers and students at four schools in the Metropolitan development
Region in Chile. The data, collected by observation of classes and in-depth Classroom practices
interviews, indicate that teachers incorporated collaborative practices in the
classroom and produced a higher number of argument questions. We ob- Curricular support
served differences in their ways of appropriating the technological tool and in Technology in the
their contribution to the in-class learning dynamic. The results are discussed classroom
considering the contribution of professional development interventions situ-
ated in a concrete context of practice and the dimensions which help con-
struct an intervention which favors dialogic teaching.
Recepción: 4 de marzo de 2019 | Aceptación: 3 de diciembre de 2019
DOI: https://doi.org/10.22201/iisue.24486167e.2020.169.59245
* Académica de la Universidad Alberto Hurtado (Chile). CE: mcalderon@uahurtado.cl
** Docente de la Universidad Alberto Hurtado (Chile). CE: maxsilvabarrueto@gmail.com
*** CE: constanzavillavic@gmail.com
**** Académica de la Universidad Alberto Hurtado (Chile). CE: alarrain@ahurtado.cl
***** Académica de la Universidad de La Serena (Chile). CE: mcramos@userena.cl
• Asesor académico de la Universidad de La Serena (Chile). CE: hgtapia@gmail.com
•• Analista de la Pontificia Univesidad Católica de Chile (Chile). CE: acsanche@uc.cl
••• CE: consuelomorenod@gmail.com
•••• CE: cimoranramirez@gmail.com

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Introducción1 en el aula. La pregunta es cómo transformar
estas prácticas. Una respuesta posible es foca-
La investigación del discurso en el aula mues- lizar el desarrollo profesional docente. Sin em-
tra la predominancia de la clase dialogada o bargo, salvo excepciones (Gómez Zaccarelli et
recitation script. El patrón de interacción más al., 2018), las distintas iniciativas que han inten-
tradicional ha sido conocido como IRF (inicio- tado promover el uso pedagógico de la argu-
respuesta-feedback): inicia con preguntas de res- mentación a través de estos medios han sido
puesta única y bajo desafío cognitivo, seguidas sólo parcialmente exitosas (McNeill y Knight,
de respuestas breves (Veyrunes y San Martín, 2013; Osborne et al., 2013). Distintos autores
2016), y termina con un seguimiento docente han identificado a las creencias y conocimien-
monosilábico de evaluación. Esto se observa tos docentes como impedimentos para el cam-
también en países latinoamericanos como Chi- bio de prácticas en el aula (Beyer y Davis, 2008;
le en distintas disciplinas (Larrain et al., 2014a; Pimentel y McNeill, 2013), bajo el supuesto de
Martinic y Villalta, 2015; Preiss et al., 2011). que el prerrequisito del cambio de práctica es el
Dada la necesidad de potenciar la capa- cambio de creencias. Últimamente, sin embar-
cidad de construcción de conocimiento más go, se han diseñado iniciativas para promover
allá de la recitación, desde comienzos del mi- el cambio en el discurso en el aula a través del
lenio se ha promovido la enseñanza dialógica, uso de materiales curriculares con interesantes
caracterizada por un tipo de interacción de perspectivas (Arias et al., 2017; Arias et al., 2016;
enseñanza y aprendizaje en la que los estu- Marco-Bujosa et al., 2017; Howe et al., 2015).
diantes participan activa y extendidamen- Más que pensar que primero se deben cambiar
te, expresan y discuten sus propias ideas en creencias y conocimiento, el supuesto que guía
interacciones auténticas y desafiantes en las estos esfuerzos es que el cambio docente puede
que formulan y exploran críticamente dife- iniciarse desde distintos puntos de partida (ver
rentes perspectivas (Alexander, 2004; Mercer Clarke y Hollingsworth, 2002).
y Howe, 2012; Sfard, 2007; Nystrand et al., 1997; En esta línea de investigación realizamos
Reznitskaya y Maughn, 2013, entre muchos un estudio cuyo objetivo fue describir la tra-
otros). Dentro de la enseñanza dialógica, el yectoria de transformación de prácticas y uso
uso pedagógico de la argumentación ha re- pedagógico de la argumentación en docentes,
cibido especial atención por su capacidad de a través del apoyo de materiales curriculares
promover tanto la comprensión de conceptos diseñados para promover la argumentación,
difíciles (Chen y She, 2012; Howe, 2009; 2017; soportados tecnológicamente. Las preguntas
Nussbaum y Sinatra, 2003; Ryu y Sandoval, de investigación que quisimos responder son:
2012), como el desarrollo del pensamiento y el ¿los docentes con mínima formación teórica
razonamiento (Kuhn y Crowell, 2011; Kuhn y en uso pedagógico de argumentación pue-
Udell, 2003). En particular, en la enseñanza de den aumentar su capacidad de propiciar la
ciencias se define como un objetivo pedagógi- argumentación en sus estudiantes y dar más
co impostergable (Osborne et al., 2013). espacio a interacciones entre pares con el uso
El problema es que el cambio en este tipo de este apoyo curricular?, ¿qué creencias se
de prácticas es un giro difícil de realizar para ponen en juego en la evaluación del material
los docentes, dada la clara brecha entre las curricular y el cambio en la dinámica del tra-
prácticas que sabemos que promueven el bajo en aula a través del dispositivo?
aprendizaje y aquéllas que realmente ocurren

Este artículo fue realizado gracias al apoyo financiero del Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico
1
de Chile, proyectos ID14I10094; ID14I20094.

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Desarrollo profesional docente y de estos cuatro dominios, mediante la re-
cambio de prácticas pedagógicas flexión y la representación (enact). Por su par-
te, Opfer y Pedder (2011) plantean la noción
El desarrollo profesional es considerado un de “sistema complejo de actividad docente”,
proceso situado, interactivo, social, basado y señalan que el cambio ocurre dentro de un
en discursos y comunidades de práctica, que conjunto de sistemas anidados y con influen-
puede darse de manera formal o informal, cia recíproca: el profesor, la escuela y el sistema
intencionada o no, tanto en o fuera de la sala de actividad del aprendizaje. Para los autores,
de clases (Desimone, 2009; Putnam y Borko, un aprendizaje efectivo requeriría múltiples
2000). Requiere compromiso cognitivo y emo- movimientos entre los sistemas de influencia
cional, junto con la capacidad y voluntad para de los mundos docentes. La interacción de
examinarse y concebir alternativas de mejora creencias, prácticas y experiencias constitui-
o cambio (Ávalos, 2011). Se trata, entonces, de rían una orientación hacia el aprendizaje que
un proceso difícil, especialmente para el cam- podría ser útil cuando se produce una distan-
bio de prácticas en el aula (Lindvall et al., 2018; cia entre las expectativas personales y el senti-
Pehmer et al., 2015; Pimentel y McNeill, 2013). do de eficacia, rescatando la noción de conflic-
Boylan et al. (2018) estudiaron los mode- to cognitivo (Coob et al., 1990, cit. por Opfer y
los predominantes en intervenciones en de- Pedder, 2011) y “al borde del caos”; un punto de
sarrollo profesional docente y visibilizaron balance entre el caos y el orden donde la crea-
puntos comunes y divergentes entre diversas tividad y el cambio pueden ocurrir (Marion,
perspectivas. En el modelo inicial elaborado 1999). Finalmente, el modelo de Evans (2014)
por Thomas Guskey (1986; 2002), el cambio se posiciona en un nivel individual y estudia
se concibe mediante una intervención espe- los procesos cognitivos que ocurren cuando
cífica, que conllevaría al cambio, seguido de un profesor experimenta una experiencia de
una transformación en los resultados de los desarrollo profesional, y enfatiza la noción
estudiantes y, finalmente, un cambio en las de micro-desarrollo: episodios individuales
creencias docentes. Por su parte, Desimone que pueden constituirse en componentes de
(2009) enfatiza la importancia de las caracte- una visión mayor o descubrimientos de una
rísticas del dispositivo de desarrollo profe- mejor forma de hacer las cosas. Así, más que
sional, en el sentido de que éste debe generar un evento o producto, el aprendizaje docente
cambios en los conocimientos y habilidades debe ser concebido como un sistema comple-
de los docentes de tal forma que transforme jo, con múltiples puntos de partida (Opfer y
sus creencias y actitudes, lo que movilizará un Pedder, 2011; Clarke y Hollingsworth, 2002).
cambio en la instrucción y, consecuentemen- La pregunta es: ¿es posible, en países como
te, produciría una mejora en los aprendizajes Chile, promover el desarrollo profesional do-
de los estudiantes. Una propuesta distinta es cente, específicamente el cambio hacia una
elaborada por Clarke y Hollingsworth (2002), enseñanza más dialógica, a través de medios
quienes plantean que el desarrollo profesional innovadores que no asumen una trayectoria
ocurre en la relación entre cuatro dominios: lineal del aprendizaje, sino que la promueven
el dominio externo (fuentes de información, directamente desde el trabajo en el aula?
estímulos o apoyo, fuera del mundo personal
del docente), el dominio de la práctica (experi- ¿Por qué es tan difícil el uso
mentación profesional), el dominio de las con- pedagógico de la argumentación
secuencias (resultados) y el dominio personal como práctica dialógica?
(conocimiento, creencias y actitudes docen- Es bastante sabido que la noción de argumen-
tes). El cambio puede iniciarse en cualquiera tación es polisémica y puede referir a varios

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significados (Andriessen et al., 2003; Jiménez- dos al expresar sus puntos de vista y desafiar
Aleixandre y Erduran, 2008). No es posible los del resto (incluidos los docentes) (Mercer y
—ni directamente pertinente para efectos de Littleton, 2007). Segundo, se deben planificar
este artículo— revisar el conjunto de tradi- los temas curriculares para hacerlos polémicos
ciones que estudian la argumentación desde (Leitão, 2008) y para que los estudiantes puedan
distintas disciplinas, pero diremos que en discutir a partir de su conocimiento previo.
este texto se entenderá como “argumentación Tercero, se deben dar instrucciones explícitas
en aula” a la práctica discursiva que emerge respecto al uso de argumentación, y hacer pre-
cuando docentes y estudiantes formulan opi- guntas docentes que la propicien sin ambigüe-
niones, aportan y piden razones y desafían dad (Andriessen y Schwarz, 2009). Estas condi-
sus ideas (ver Osborne, et al., 2013). Se trata de ciones hacen que diseñar clases para promover
que los estudiantes no sólo contribuyan a la el uso pedagógico de la argumentación sea
construcción de conocimiento (Reznitskaya muy desafiante incluso para un profesor muy
y Maughn, 2013), o hablen de manera regular experimentado, y explican, en parte, por qué
con un lenguaje apropiado (ver Alexander, la efectividad de los programas de desarrollo
2004), sino que formulen argumentos para profesional es limitada. La pregunta entonces
sostener o desafiar una posición. Si bien la es ¿cómo hacer para promover la argumenta-
argumentación entre pares ha sido conside- ción en la enseñanza de ciencias?
rada clave para el logro del aprendizaje de los
estudiantes en ciencias, el uso pedagógico de El uso de materiales curriculares
la argumentación en la clase completa juega como medio de desarrollo profesional
un rol irremplazable (ver Larrain et al., 2018). docente para el uso pedagógico de la
Las preguntas del docente han sido considera- argumentación
das como la clave para promover la argumen- Existe actualmente creciente interés en los in-
tación en la clase completa (Chen et al., 2017; vestigadores en educación en evaluar el efec-
Murphy et al., 2018). to del uso de materiales curriculares como
La pregunta es por qué el uso pedagógico fuente de andamiaje y aprendizaje docente
de la argumentación es tan escaso en el aula (Herbel-Eisenmann et al., 2007) en pos del uso
cuando tiene tantos beneficios en el apren- pedagógico de la argumentación (Arias et al.,
dizaje. Una posible respuesta es que la argu- 2017; Marco-Bujosa, et al., 2017; McNeill et al.,
mentación es un tipo de habla muy sensible al 2017). Como materiales curriculares se entien-
contexto retórico en el que aparece, y requiere de cualquier recurso focalizado en el currí-
condiciones muy específicas para ocurrir. Es- culo y su enseñanza, ya sea respecto a un año
tas condiciones están típicamente ausentes en completo o a periodos de tiempo más breves,
el aula, por la forma histórica y social como se que incluye libros de textos, programas y
ha organizado el trabajo. Así, para que ocurra marcos curriculares, entre otros (Grossman
la argumentación en el aula se requiere dise- y Thompson, 2008). Es una interesante alter-
ñar la enseñanza para transformar salón de nativa para promover cambios en los países
clase en un espacio de pensamiento y debate latinoamericanos porque, particularmente
(Andriessen y Schwarz, 2009). los libros de texto, son parte importante de
Primero, se requiere cambiar la distribu- las rutinas escolares (Ball y Cohen, 1996; Leiva
ción de poder en el aula para promover las et al., 2000). El problema es que normalmente
oportunidades de habla tanto de docentes éstos ofrecen pocas oportunidades de apren-
como estudiantes: más espacios de trabajo dizaje para los docentes y no están pensados
colaborativo entre pares (Howe, 2010) y reglas para promover específicamente la argumen-
que permitan a los estudiantes sentirse cómo- tación en la enseñanza de ciencias.

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Los resultados de un estudio cuasi expe- realiza la clase, active instrucciones y espacios
rimental desarrollado por Arias et al. (2017) de participación directamente en las tabletas
para evaluar una intervención de materiales electrónicas de los estudiantes, y proyecte
curriculares para la enseñanza mostraron que contenidos en una pizarra compartida, con el
los estudiantes en el grupo de intervención fin de promover la argumentación, tanto en-
aprendieron significativamente más que los tre pares como en la clase completa. En el año
del grupo control a justificar predicciones, al 2016, se realizó un estudio aleatorio a nivel de
desarrollar justificaciones de mayor calidad. clase en el que se invitó a docentes que ense-
Por su parte Christine Howe y colaboradores ñaran ciencias naturales en cuarto año básico
(Ruthven et al., 2011; Howe et al., 2015) desarro- en establecimientos municipales de la Región
llaron materiales curriculares en el contexto Metropolitana, Santiago. La idea era compa-
del proyecto epiSTEMe de la Universidad de rar docentes que enseñan la misma unidad de
Cambridge, orientados al mejoramiento a conocimiento (Fuerza y Movimiento) en tres
través de la enseñanza dialógica en educación condiciones distintas: uso de argumentApp
secundaria (12-13 años). Los resultados de un (intervención tech-IT), uso de las mismas
estudio cuasi experimental mostraron que las planificaciones curriculares sin tecnología
clases intervenidas (12) mostraron ganancias (intervención impresa), y uso sin soporte cu-
pre-post en el conocimiento de las unidades rricular (control). Participaron 20 docentes
de ciencias significativamente superior a las de (7 en IT). Se videograbaron tres clases durante
control (12), aunque no fue del todo claro si el desarrollo de la unidad (al inicio, a la mitad
esto se debió al tipo de diálogo promovido. En y al finalizar). Además, 11 docentes (4 en IT)
Chile, Larrain et al. (2018) adaptaron uno de los accedieron a que se grabara una clase previa al
módulos del proyecto epiSTEMe: Fuerza y Mo- comienzo de la unidad. Al finalizar la unidad
vimiento, para promover la argumentación. se entrevistó a los docentes de la condición IT.
Un estudio de caso (Larrain et al., 2017) mostró Este artículo reporta un estudio de casos
que el uso de materiales curriculares sí ayuda múltiples realizado en el marco de este es-
a un docente sin ninguna formación en el uso tudio aleatorio. El objetivo fue describir las
pedagógico de la argumentación, a promover transformaciones de prácticas pedagógicas y
argumentación de manera progresiva en el uso pedagógico de la argumentación en do-
aula, cuando hay un acompañamiento relati- centes, a partir del apoyo de materiales cu-
vamente cercano y sesión a sesión. Ello sugiere rriculares soportados tecnológicamente con
que cuando los/las docentes usan los materiales argumentApp.
curriculares, éstos pueden ser un gran apoyo.
El problema es que los docentes rara vez Método
usan los materiales curriculares impresos,
porque tienen muy poco tiempo para leer y Se realizó un estudio de casos múltiple bajo
revisar antes de dar clases. Dado lo anterior, un enfoque cualitativo (Stake, 1999); el análi-
y que existe una literatura amplia en el so- sis se llevó a cabo mediante técnicas mixtas.
porte computacional para la promoción de Como se mencionó, se trata de un estudio que
argumentación entre pares (ver Andriessen profundiza y focaliza el análisis de las trayec-
y Schwarz, 2009; Noroozi et al., 2012), Larraín torias de un grupo de docentes que participa-
et al. (2014b) desarrollaron un software (argu- ron en el estudio aleatorio referido, tomando
mentApp) piloto que permite gestionar los en cuenta dos fuentes de información: obser-
materiales curriculares in situ, y facilita que el vación de clases y entrevistas.
docente acceda a las planificaciones mientras

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Participantes La versión piloto de argumentApp se desa-
Cuatro docentes y sus cursos participaron en rrolló en versión HTML. Se trata de un software
el estudio en la condición IT. Para efectos de que corre en un computador instalado en el sa-
este estudio, y considerando que se cuenta con lón de clases que se conecta a través de un router
grabaciones previas que permiten afirmar la (funciona offline) a tabletas electrónicas y a un
existencia y forma de un posible cambio antes proyector. El docente tiene una tableta con la
y después del uso de argumentApp, se selec- que accede a todo el guion de la clase, de acuer-
cionó a los cuatro docentes que accedieron a do con las planificaciones cargadas, y en el que
ser grabados, previo a la unidad. Los partici- puede activar tanto la pantalla que se proyecta
pantes se desempeñan en establecimientos en la pizarra como las tabletas de los estudian-
municipales mixtos de la Región Metropolita- tes. Éstos cuentan con una tableta por grupo
na, Chile; se trata de tres mujeres y un hombre, colaborativo de 4-6 participantes, a través de
cuyo promedio de edad al realizar el estudio la cual acceden a instrucciones y contenidos y
era de 36 años, con 7 años de docencia. Ni ellas pueden ingresar los acuerdos de las actividades
ni él eran especialistas en la disciplina. colaborativas. El docente puede proyectar las
respuestas grupales a través de su tableta para
Procedimiento y materiales poder desarrollar discusiones en plenario.
Para invitar a los docentes a participar en el Las planificaciones cargadas correspon-
estudio se estableció contacto con estableci- dieron a la unidad de Fuerza y Movimiento,
mientos municipales de la Región Metropoli- adaptada de epiSTEMe (Howe et al., 2015) por
tana a través de sus directores. Se desarrolló Larraín et al. (2018), y revisada nuevamente
un proceso de consentimiento informado para este proyecto. Las actividades propuestas
con los docentes que culminó en la firma por consideran situaciones problemáticas, la apli-
escrito de un documento que detalla los de- cación de los conceptos de la unidad a situa-
rechos de los participantes y el compromiso ciones de la vida cotidiana y el trabajo colabo-
del equipo con ellos. Una vez que el estableci- rativo e indagatorio, a la vez que promueven la
miento y los docentes aceptaron participar, se emergencia de ideas diversas y contrapuestas
realizó la asignación aleatoria de éstos a con- y el uso de un lenguaje argumentativo tanto
diciones experimentales. Luego, participaron en grupos de pares como en clase completa.
en una jornada de medio día en la universidad En general, cada clase comenzó con una ac-
para introducir el proyecto. tividad en plenario para activar y discutir
A partir de que los docentes comenzaron la conocimientos previos; después se abordaba
enseñanza de la unidad usando el software se la resolución de problemas en grupos de pa-
grabaron tres clases en las que se dio apoyo téc- res y, por último, nuevamente en plenarios
nico cuando se requirió. Al finalizar la unidad se presentaban y discutían resultados e ideas
se acordó una sesión de entrevistas estructura- grupales, organizadas por el docente, quien
da en un guion temático organizado en tres ám- debía orquestar las discusiones, formular con-
bitos: experiencia docente, expectativas de la troversias implícitas y guiar hacia un acuerdo
intervención y evaluación de la experiencia. consensuado de aula.
Las entrevistas fueron realizadas por parte del Para este proyecto la unidad total de aná-
equipo de investigación. Al finalizar el año se lisis se compuso de 9 clases, 5 de ellas de 90 y 4
trabajó con los docentes en sesiones de retroa- de 45 minutos, divididas entre 2 a 4 activida-
limentación y análisis de sus videos de clase. des, para facilitar el ajuste a los distintos pe-
riodos de enseñanza de los docentes.

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Análisis de los datos de manera independiente). Dado que las se-
Análisis observacional siones tenían una duración variable se decidió
trabajar con la distribución proporcional del
Este análisis consistió en la observación y aná- tiempo para cada clase. En promedio el tiem-
lisis de los videos de clases. Se analizó tanto la po de duración de una clase videograbada fue
estructura de la clase (modo en que los docen- de 57.91 minutos (35.54-82.96).
tes organizan sus actividades pedagógicas), Los episodios de clase ampliada dialogada
como los enunciados docentes durante éstas. fueron analizados identificando el tipo de pre-
Respecto a la estructura, se desarrollaron cua- guntas docentes. Éstas se analizaron de mane-
tro códigos: clase ampliada instruccional (el ra inductiva, a través de códigos que recogie-
docente da instrucciones, monitorea la rea- ran la relación entre la acción y la operación, es
lización de actividad o controla comporta- decir, infiriendo la meta de la acción que rea-
miento); clase ampliada dialogada (el docente liza el docente y lo que espera que ocurra en
y los estudiantes entran en una secuencia de la interacción con los estudiantes en los episo-
preguntas y respuestas sobre una temática es- dios de trabajo con clase completa. El trabajo
pecífica, la tarea o los conceptos trabajados); de desarrollo inductivo de códigos se realizó
trabajo en grupo (colaborativo entre estu- entre dos observadores, proceso que derivó en
diantes) y trabajo individual (cada estudiante el desarrollo de seis códigos (Tabla 1).

Tabla 1. Descripción códigos preguntas docentes


Pregunta Descripción Ejemplo
Argumentación Invitan a los estudiantes a justificar y aportar Profesora (P): ¿quién piensa que es fuerza de
razones para sostener sus puntos de vista o a gravedad?
plantear y justificar su acuerdo o desacuerdo Estudiante (E): yo
con respecto a las ideas de otros (estudiante/ P: Diga lo que piensa. ¿Cómo sabe que es fuerza
profesor) de gravedad?
Estudiante: es fuerza de contacto
Profesora: ¿por qué piensa eso?
Participación Fomentan la participación de los estudiantes P: Muy bien, ¿alguien más?
en alguna pregunta específica. El docente no
cierra la interacción, más bien la continúa en
busca de respuestas
Uso de conoci- Promueven en los estudiantes el recuerdo, uso P: La masa, ¿qué dijimos? Que la masa era la
mientos previos o aplicación de conocimientos trabajados en propiedad de la materia que posee un cuerpo.
clases anteriores Sin mirar, ¿quién recuerda cuál es la unidad de
medida de la masa?
Trabajo con Orientan el uso del concepto o ideas trabaja- P: L, cuando sometemos el agua a temperatu-
concepto/tarea das durante la sesión ras muy altas ¿ésta se solidifica?
E: no
P: ¿qué pasa con esta agua?
Observación de Inducen la elaboración de reportes de observa- P: ¿qué ocurre con esta plastilina al aplastarla
la experiencia ciones o evidencia obtenida en actividades sobre la mesa?
(objetiva) indagatorias
Evaluativa correc- Sugieren que el estudiante reconsidere la E1: elemento: mar; estado: líquido; hielo:
ción / clarificación respuesta o clarifique su planteamiento. sólido.
P: ¿el hielo será sólido?
E1: ¡es gasoso!
E3: ¡gasoso! ¡Ja, ja, ja!
P: ¿será gaseoso?
E4: ¡no!
Fuente: elaboración propia.

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Análisis de redes Cambios en la dinámica del aula
Organización del tiempo - actividad
Para visualizar el cambio en el patrón de in-
teracciones en el salón de clases se realizó un La observación de aula de clase previa indica
análisis de redes con plenarios finales de clase que los docentes organizaban el tiempo de
ampliada dialogada (2 a 5 minutos) en dos cla- clases principalmente en dos actividades: cla-
ses de cada participante (previa a la unidad y se ampliada dialogada y trabajo individual.
durante la unidad). Los registros fueron trans- En tres de los cuatro docentes observados se
critos y luego se identificó el emisor y receptor utiliza también un tiempo de trabajo individual
de cada enunciado. Los datos fueron traspa- que ocupa un porcentaje importante (entre 40 y
sados a una matriz de doble entrada en la que 60 por ciento del tiempo). Sólo una docente uti-
se identificaron las relaciones entre los acto- lizó una parte del tiempo en un trabajo grupal
res, determinadas por la existencia o no de durante la sesión previa a la intervención.
comunicación durante la unidad de tiempo Como se puede observar en la Fig. 1, se
seleccionada. Se realizó un análisis de redes a produjeron cambios en la organización del
través de NETDRAW (Borgatti et al., 2002). Para tiempo y en las actividades en los cuatro casos
cada caso se realizaron comparaciones entre estudiados durante el uso de argumentApp.
los plenarios de ambas clases con base en me- En el caso 1, Sandra, mientras el tiempo desti-
didas de centralidad, utilizando UCINET (Bor- nado a clase ampliada dialogada se mantuvo,
gatti et al., 2002). el trabajo individual, que ocupó 42 por ciento
del tiempo en la clase previa, dio paso a tra-
Análisis de entrevistas bajo grupal (49 por ciento) en la tercera sesión
grabada. En el caso 2, Paulina, la predomi-
Cada entrevista fue transcrita y analizada nancia de la clase ampliada dialogada (73 por
mediante una codificación abierta a partir de ciento) disminuyó casi a un tercio y aumentó
los principios de la Teoría Fundada (Strauss y el tiempo destinado a trabajo grupal (cercano
Corbin, 2002); se generó una malla con cate- a un tercio del tiempo). En el caso tres, Pa-
gorías emergentes, con las cuales se construyó mela, mientras en la clase previa se realizaba
una síntesis del relato. Se realizó una valida- trabajo individual (44 por ciento) y clase am-
ción intersubjetiva en una primera instancia pliada dialogada (30 por ciento), en las últimas
con dos analistas y una segunda con el equipo clases de la unidad se observó un predominio
ampliado de investigación. de esta última (77 por ciento). Finalmente, en
el caso cuatro, Julio, predominaba el trabajo
Resultados individual (67 por ciento) en la clase previa,
pero en las últimas clases prevaleció la clase
Los resultados se describen en referencia a ampliada dialogada (91 por ciento).
cada caso; se sintetizan similitudes y diferen- Así, si bien en la clase previa, en tres profe-
cias entre los cuatro participantes en las acti- sores había un predominio de trabajo indivi-
vidades de aula y en la evaluación de la expe- dual, en dos de estos casos, Sandra y Paulina,
riencia de cada uno. se tiende a transitar a trabajo grupal entre pa-
res. En el caso de Pamela y Julio, sin embargo,
disminuye el tiempo de trabajo grupal en fa-
vor de la clase ampliada dialogada.

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Figura 1. Distribución de tiempo dedicado a distintas
estructuras de clase por sesión y participante
Caso 1. Sandra Caso 2. Paulina
7.41 9.76 1.79
17.86
11.11
8.93 29.63 36.59 35.71
42.11 39.34
26.39 48.65

7.89 13.11 13.89 32.1 21.95 26.79


10.81 73.21
50 47.54 48.61 40.54
30.86 31.71 35.71

C. previa Obs. 1 Obs. 2 Obs. 3 C. previa Obs. 1 Obs. 2 Obs. 3


Clase ampliada dialogada Clase ampliada instruccional Clase ampliada dialogada Clase ampliada instruccional
Trabajo grupal Trabajo individual Trabajo grupal Otra

Caso 3. Pamela Caso 4. Julio


13.95 20 7.14 11.48 8.62
30.23
47.92 2.86
44.19 66.67 50.82
25.58 4.17 100 91.38
11.63 77.14 4.92
44.19 47.92
30.23 26.19 32.79

C. previa Obs. 1 Obs. 2 Obs. 3 C. previa Obs. 1 Obs. 2 Obs. 3


Clase ampliada dialogada Clase ampliada instruccional Otra Clase ampliada dialogada Clase ampliada instruccional Otra
Trabajo grupal Trabajo individual Trabajo grupal Trabajo individual

Fuente: elaboración propia.

Preguntas docentes durante argumentación entre la sesión previa (0) y la


la clase ampliada dialogada sesión 3, siendo el cambio más evidente en los
casos de Paulina y Pamela, quienes mientras
Con todas las preguntas enunciadas en la ac- en la sesión previa presentaban uso de pregun-
tividad de clase ampliada dialogada se calcu- tas de argumentación en 16.9 y 5.7 por ciento,
ló el porcentaje correspondiente según tipo en las últimas sesiones alcanzaron 56 y 51.2
de pregunta para cada sesión. En la Tabla 2 por ciento respectivamente. La proporción de
se describe la proporción de preguntas du- preguntas de conocimiento también cambió,
rante la sesión previa, la primera clase graba- pero en sentido inverso, es decir, disminuyó
da de intervención (1) y la última (3). Todos su presencia. En este caso Pamela fue quien
los docentes aumentaron en preguntas de cambió más, proporcionalmente. Respecto a

Tabla 2. Frecuencia proporcional del tipo de preguntas


en clase ampliada dialogada por participante y clase
Sandra Paulina Pamela Julio
0 1 3 0 1 3 0 1 3 0 1 3
ARG 36.4 62.1 44.6 16.9 32.4 56 5.7 55.2 51.2 28.1 17.8 40.6
UCP 34.1 0 0 13.6 0 0 58.6 0 0 26.6 1.4 2
PAR 13.6 12.1 12.2 16.9 5.9 32 2.3 6.0 14.6 15.6 42.5 18.8
UC 9.1 1.7 10.8 37.3 30.9 0 29.9 10.4 2.4 20.3 1.4 14.9
EV 6 .8 6.9 13.5 15.3 0 8 2.3 13.4 4.9 4.7 5.5 22.8
OBS 0 17.2 18.9 0 30.9 4 1.1 14.9 26.8 4.7 31.5 1
Nota: ARG=Pregunta de argumentación; UCP=pregunta de uso de conocimientos previos; PAR=pregunta de partici-
pación; UC=pregunta de uso de conceptos; EV=pregunta evaluativa; OBS =pregunta de observación; 0 =clase
previa a la unidad; 1=primera clase grabada de la unidad; 2=segunda clase grabada de la unidad; 3=tercera
clase grabada de la unidad.
Fuente: elaboración propia.

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las preguntas de participación, no se obser- discurso, en dos casos se habría dado también
va un patrón de cambio claro. Las preguntas la emisión de mensajes por parte de algunos
respecto de conceptos y tareas se mantuvie- estudiantes (Fig. 2). Por otro lado, en los casos
ron estables en el caso de Sandra, disminu- de Pamela y Julio no se observaron cambios:
yeron en Paulina y Pamela, y aumentaron en el docente controló absolutamente la emisión
Julio. Las preguntas de corrección tendieron de mensajes durante los dos plenarios analiza-
a aumentar en Sandra y Julio, y a variar, sin dos, de manera que el grado de centralidad de
tendencia clara, en Paulina y Pamela. Final- salida del profesor se mantuvo en el máximo
mente, en las preguntas de observación de la (100 por ciento). Así mismo, es posible obser-
experiencia hay una tendencia al aumento en var que, en los casos de Sandra y Paulina, el
Sandra y Pamela, y de variación sin tendencia grado de centralidad de entrada del docente
clara en Paulina y Julio. disminuyó. En el caso de Sandra pasó de 53 a
20 por ciento, y en el caso de Paulina de 20 a
Patrón social de interacciones 10 por ciento. Esto quiere decir que el profesor
pasó a ocupar un lugar menos central en la
Durante la actividad plenaria evaluada se pudo recepción de comentarios o preguntas, lo que
observar que predomina el discurso docente daría cuenta de un plenario donde los estu-
en la emisión de mensajes en los cuatro casos; diantes son capaces de comentar más entre sí.
sin embargo, hay diferencias. Específicamen- Nuevamente, en los casos de Pamela y Julio el
te en los casos de Sandra y Paulina, se aprecia lugar que ocupaba el profesor como receptor
un cambio importante entre la clase previa y de comentarios y preguntas se mantuvo relati-
la segunda clase grabada (clase 2). La centrali- vamente estable entre una clase y otra.
dad de salida del docente (es decir, quien emi- A continuación (Tabla 3) se resumen los
te los mensajes) cambia de 100 por ciento de cambios en las dinámicas del aula por caso.
centralidad a 66.7 por ciento y un 76 por ciento Se observa que en el caso de Sandra y Pauli-
para cada caso. Esto indicaría que, en la acti- na hay claros cambios tendientes al aumento
vidad de plenario, si bien el docente mantiene de su capacidad de incentivar la argumen-
una fuerte presencia en la organización del tación y el trabajo colaborativo, así como las

Figura 2. Mapa de redes de interacción plenario


Caso 1. Sandra Caso 2. Paulina
Clase previa Clase 2 intervención Clase previa Clase 2 intervención

Caso 3. Pamela Caso 4. Julio


Clase previa Clase 2 intervención Clase previa Clase 2 intervención

Fuente: elaboración propia.

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interacciones entre estudiantes durante la control total de las interacciones; en estos ca-
clase dialogada. Si bien en Paulina y Julio se sos, aunque se promueve la argumentación,
observó también lo primero, no se perciben no se logra que los estudiantes piensen acerca
cambios en lo segundo, pues mantuvieron el del pensamiento de sus compañeros/as.

Tabla 3. Síntesis de cambios observados según caso


Caso Cambios clase previa vs. sesión 3
Sandra = clase ampliada dialogada
 trabajo grupal
 preguntas de argumentación y de observación experiencia
 preguntas conocimientos previos
 centralidad docente en plenario
Paulina  clase ampliada dialogada
 trabajo grupal
 preguntas de argumentación y de participación
 preguntas uso de conceptos
 centralidad docente en plenario
Pamela  clase ampliada dialogada
 preguntas de argumentación y de observación experiencia
 preguntas conocimientos previos y de conceptos
= centralidad docente en plenario
Julio  trabajo individual
 clase ampliada dialogada
 preguntas de argumentación y de observación experiencia
= centralidad docente en plenario
Nota: = sin cambios;  aumento;  disminución.
Fuente: elaboración propia.

Trayectorias de participación posibilidad de participar; estaban entreteni-


Así como se observan cambios en las prácti- dos y preocupados de redactar bien. Descri-
cas docentes a través del análisis presentado, be que al incorporar trabajo colaborativo se
los docentes los reconocen en su propio relato, desgastó menos, pues los grupos aportaban y
donde comentan variaciones, cambios y ten- trabajaban por la misma causa.
siones de su proceso, tanto respecto del uso Su rol durante la unidad fue cambiando:
del material curricular, como del trabajo con en un comienzo era mediadora de conteni-
los/las estudiantes. dos, pero luego pasó a ser mediadora de apren-
dizajes. Si bien en un inicio se sintió compli-
Sandra. Considera que ser docente implica de- cada con esta nueva forma de enseñanza, en
mostrar seguridad y plantearse cosas nuevas, algún momento todo se volvió una rutina y
aunque sea difícil. Sin embargo, con temor las complicaciones iniciales desparecieron,
y nervios acepta el desafío, reconociéndose empoderándose. Percibe que, si bien antes ella
débil en el manejo tecnológico y con desco- promovía la argumentación en su enseñanza,
nocimiento de la unidad. Describe sus clases lo hacía de otra manera.
tradicionales como monótonas, centradas en Evalúa que su experiencia fue significati-
la pizarra y en explicar conceptos. Reflexiona va, pues observa un cambio en los estudiantes,
que la tecnología les dio a sus estudiantes la quienes comenzaron a expresarse de otra forma:

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…aprendieron a defender su postura. La forma Paulina valora el hecho de que sus estu-
en que ellos aprendieron a desenvolverse con diantes entendieran el sentido de la dinámica
un compañero fue lo que más me enriqueció; y comenzaran a interesarse más por hablar y
yo sé que son inteligentes, pero del momento participar; asegura que la materia trabajada
en que ellos me salían con respuestas fantásti- con el apoyo curricular digital fue aprendida
cas, increíbles, y sólo por el hecho de que se die- con mayor profundidad. Percibe que los niños
ra el tiempo de que ellos pensaran, ellos pudie- confían más en ella y, también, que ella se rela-
ran conversar entre pares, eso a mí me pareció jó más. Respecto a la percepción de cambio en
fantástico. Fue un enriquecimiento personal sus prácticas plantea que percibe un cambio,
saber que ellos pueden más y exigirles más. pero no radical: ahora recoge la opinión de sus
estudiantes y valora el aprendizaje entre pares.
Paulina. Sin formación previa en didáctica de
las ciencias considera que un docente siempre Pamela. Inició su participación en el estudio
debe tener dominio de las temáticas y manejo pues, aunque percibió presión del equipo di-
disciplinar. La intervención se percibió como rectivo de la escuela, creyó que era una opor-
una novedad y oportunidad de aprendiza- tunidad para apropiarse de la enseñanza de las
je. En particular, el uso de estos materiales le ciencias de manera novedosa. Describe a sus
hizo más ligero el trabajo de planificar. estudiantes con falta de autonomía, problemas
Sin embargo, en un comienzo todo fue de convivencia y conflictivos. Destaca en ellos
problemático. Tenía temor de que los estu- problemas de lectura y escritura, que atribuye a
diantes no alcanzaran el contenido/aprendi- características familiares y de contexto, lo que
zaje. Además, inicialmente había desorden dificulta la comprensión de contenido disci-
en el grupo, que le demandaba mucha energía plinar como el de las ciencias. En sus clases re-
para asegurar que trabajaran. Organizó los porta utilizar power point, pizarra y video, con
grupos de manera selectiva según desempe- énfasis en el trabajo en clase ampliada y trabajo
ño, dejando un “líder innato en cada grupo” individual. Respecto al uso de soportes curri-
y asegurándose que los estudiantes más “dis- culares, considera que fue rigurosa en seguir y
ruptivos no estuvieran juntos en un solo gru- decir lo que estaba sugerido por el material.
po”. Inicialmente le resultaba difícil diferir la En un comienzo experimentó diversas
entrega de contenido sin dar inmediatamente dificultades: le resultó complejo que los es-
las respuestas correctas ni corregir los errores tudiantes participaran, que formaran grupos
(parte de su rol). En un momento de la inter- de trabajo y que usaran el material de experi-
vención se produjo un cambio que le hizo re- mentación. Comenta que le fue difícil trabajar
significar el desorden: con argumentación, pues los estudiantes se
desconcentraban:
Era indudable que hubiese ruido si tenían que
conversar entre ellos. Entonces a uno también Una vez tuve que parar, fue imposible seguir
le cuesta eso porque a uno se le juzga mucho avanzando, peleaban mucho. Entonces tuvi-
también por el dominio que uno pueda tener mos que conversar, les expliqué la situación
del curso. Pero también uno tiene que enten- que no podían seguir así… pero igual costó,
der que hay un desorden y hay un desorden costó porque no es un proceso que aprendan
pedagógico. de un día para otro, lleva tiempo.

En este escenario, percibe un cambio en Ante esta situación, conformó los grupos
ella: ahora se concibe como mediadora, pues colaborativos de pares según las habilidades
debía afirmar la confianza de sus estudiantes. percibidas. Si bien en un comienzo pensó

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que por sus características los estudiantes no Síntesis de resultados
aprenderían, esta visión cambió cuando ob- Si se articulan los análisis de las observaciones
servó los resultados que obtuvieron en la y las entrevistas se advierte que, mientras Julio
prueba de conocimiento de la unidad. Luego mantiene un discurso muy coherente respecto
de esto, expresó que a pesar de lo caótico de la al uso pedagógico de la argumentación, y con
experiencia aprendieron más que con el tipo ello denota una comprensión del rol que debe-
tradicional de enseñanza. Percibe, además, ría cumplir en la enseñanza, al mismo tiempo
que con el uso de materiales ella misma avanzó valora particularmente aspectos que son rela-
en su comprensión de la unidad y en recurrir a tivamente tangenciales, como los materiales
la indagación científica para la enseñanza. concretos de experimentación. Si bien éstos
son centrales en un enfoque indagatorio y de
Julio. Lleva más de una década realizando argumentación, lo son por el rol que juegan en
docencia en ciencias con muy buenos resul- promover el pensamiento científico, y no en sí
tados en las pruebas estandarizadas naciona- mismos. Es este docente quien menos cambió
les. Decidió participar en el estudio porque su práctica, desde los puntos de vista estructu-
consideró que los docentes deben tener un ral (tipo de actividad), interaccional (quiénes
perfeccionamiento constante y no improvi- participan en la interacción) y pragmático (qué
sar. Reporta que implementó la unidad a ca- preguntas hace). De esta manera, aunque se
balidad, ciñéndose al contenido del material plantea como alguien que hizo lo que se espe-
curricular. Describe su trabajo durante el uso raba, continuó centrado en lo que sabía hacer
del material como limitado a ser un guía y “es- y que le daba resultados; usó los materiales cu-
timulador de argumentación, pues todas las rriculares, pero adaptados a su enseñanza tra-
respuestas son válidas y vale la pena escuchar dicional, sin promover cambios significativos.
todas las voces, aunque sean erróneas”. Reco- A diferencia de lo anterior, Sandra, Pamela
noce que es poco hábil con la tecnología y que y Paulina cambiaron sus prácticas, pero refie-
la grabación de sus clases le produjo tensión. ren que se sintieron tensionadas por tener que
Señala que sus estudiantes requieren apoyo enfrentar una nueva práctica, que implicaba
y que tienen “tendencia a caer en el error”. perder el control en el aula. Un aula más bu-
Respecto al trabajo en grupo, considera que lliciosa y más desordenada, en donde se habla
éste es un espacio para que los estudiantes se y se piensan ideas erradas, se vive en un inicio
potencien entre ellos, pero que debe ser con- de manera problemática. En el caso de Sandra,
trolado: “Bueno, siempre yo he monitoreado la pérdida de control entra en conflicto con la
el trabajo, o sea cada vez que ellos están tra- idea del docente como quien sabe y tiene se-
bajando uno los va monitoreando, porque no guridad acerca de lo que sabe y hace. Abrirse a
puedes dejarlos solos y que hagan lo que ellos ser una docente que no necesariamente tiene
estimen conveniente solamente”. la verdad, se vive de manera difícil. Para Pau-
Reconoce que sus estudiantes tienen dis- lina, la pérdida del control tensiona la idea de
tintos modos de aprender, lo que se aprovecha que el docente debe dar respuestas correctas
mejor si se reúnen estudiantes “aventajados” y controlar el conocimiento que se tramita
con “descendidos”. De la experiencia como en el aula. Permitir la discusión y el pensa-
medio de aprendizaje significativo, valora es- miento de ideas incorrectas sin corregir de
pecialmente el uso de material concreto para inmediato se experimenta problemático. Para
el trabajo colaborativo, y considera que en sus Pamela y Paulina, la pérdida de control entra
clases tradicionales trabaja más contenido en conflicto con la idea de que el aprendizaje
que lo que plantea la intervención. ocurre, sobre todo, en las interacciones entre

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estudiantes y docentes. Dar tiempo conside- pedagógico de argumentación pueden trans-
rable al trabajo en grupo, y abrirse a lo que ahí formar sus prácticas de aula con el uso de este
pudiese pasar, se vive de manera desgastante. apoyo curricular?, ¿qué creencias se ponen en
Ahora bien, pese a estas tensiones, las do- juego en la evaluación del material curricular
centes visualizan un cambio en los estudian- y el cambio en la dinámica del trabajo en aula
tes a partir del uso del material, lo que se per- a través del dispositivo?
cibe como un indicio clave para la reducción Respecto de la primera pregunta, sí es
de la tensión y en favor de la percepción de que posible que los docentes promuevan la argu-
el enfoque pedagógico es útil. Para Sandra, mentación en los estudiantes. Los resultados
los estudiantes se vuelven más interesados muestran que, con el apoyo de material curri-
e involucrados, y más capaces de argumen- cular, docentes con mínima formación peda-
tar de manera nueva. En el caso de Paulina, gógica sobre argumentación logran cambios
en el desorden empieza a aparecer un orden que han sido reportados como difíciles de
donde el ruido es condición necesaria para conseguir: aumentar el trabajo colaborativo
pensar y aprender. Para ambas, esto conlleva entre pares, aumentar proporcionalmente las
un cambio en el rol: desde la trasmisión de preguntas que promueven argumentación en
conocimiento hacia la mediación de procesos clase ampliada, y aumentar la interacción en-
de aprendizaje que ocurren, mayormente, en- tre estudiantes durante este mismo segmento
tre estudiantes. Cambia la concepción pasiva de clases. Las preguntas de este tipo se han
de los estudiantes a reconocer la importancia considerado la clave para el logro de argumen-
de su actividad en su proceso de aprendiza- tación en aula y se han reportado como una
je. En ambos casos, la reducción de tensión práctica difícil de conseguir porque está an-
que acompaña el cambio de práctica ocurre clada en condiciones retóricas muy específi-
a partir de la observación de efectos en los cas y demandantes para los y las docentes (ver
estudiantes durante el proceso. En el caso de Andriessen et al., 2003; Leitão, 2008), y debido a
Pamela, esto no ocurre durante, sino después su alta demanda cognitiva (Larraín et al., 2014;
del uso de materiales curriculares y a partir Preiss et al., 2011). Así, observar un cambio tan
de la constatación, una vez que la experiencia importante y complejo en el transcurso de an-
había terminado, de que éstos aprendieron tes a durante el uso de materiales curriculares
más. Esto puede explicar por qué el patrón sorprende y, a la vez, cuestiona el modelo tra-
de interacciones durante la clase dialogada y dicional lineal de aprendizaje docente y cam-
la estructura de las clases no cambió de ma- bio de práctica, donde el punto de partida es el
nera clara. Durante el uso del material ella se conocimiento docente (Desimone, 2009; Gus-
mantiene tensa toda la unidad, lo que lleva a key, 2002); además, apoya la idea de que dichos
que decida alterar las condiciones propuestas materiales pueden ser importantes promoto-
y organizar las clases según sus propios crite- res de cambio y aprendizaje docente (Arias et
rios. Sin embargo, una vez que ve resultados al., 2016; Herbel-Eisenmann et al., 2007).
reconstruye la experiencia de manera positi- Sin embargo, estos cambios no son radi-
va, tanto para el aprendizaje de los estudiantes cales ni completos en la medida que el uso de
como en relación con su propia práctica. materiales curriculares no supone que el do-
cente sea un simple ventrílocuo, sino alguien
Discusión que se apropia de éstos para establecer un diá-
logo no exento de tensión, lo que nos lleva a
Recordemos que las preguntas de investiga- nuestra segunda pregunta respecto a qué se
ción que quisimos responder son: ¿los do- pone en juego en la práctica docente. El he-
centes con mínima formación teórica en uso cho de que Julio y Pamela manifestaran una

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resistencia más clara a entrar en diálogo con que algunas creencias de los profesores se
los materiales, y que hayan tenido un cambio vinculan a un sistema más amplio, dentro del
más acotado, sostiene la idea de que el cambio cual aquéllas referidas a la autoimagen tienen
requiere una apertura a apropiarse de la “voz un rol fundamental, y donde el impacto va
ajena” que habla a través de los materiales. Si más allá del ámbito profesional, observándo-
esta apertura no se da, el cambio se dificulta. se situaciones en que se apunta a valores y me-
Ahora bien, aun estableciendo un diálogo con tas personales. Podría considerarse que cual-
el material, el cambio nunca es completo y quier intervención orientada a favorecer una
automático (Herbel-Eisenmann et al., 2007); mejora en los aprendizajes de los estudiantes
pasa por hacer propias estas nuevas formas, y en la que el docente se involucra podría es-
por involucrar una mezcla de prácticas nuevas tar relacionada, en mayor o menor grado, a
con antiguas. Esto sugiere que no es necesario una imagen de sí que es puesta en juego. Más
que el docente esté totalmente persuadido de aún, estos resultados sugieren que, coherente
un cambio de práctica para que éste ocurra, con lo que plantean Clarke y Hollingsworth
y que puede darse con un proceso productivo (2002), una intervención orientada al cam-
de tensión: tensión que proviene de ejercitar bio docente puede iniciarse a partir de cual-
prácticas desconocidas y nuevas pero que, quiera de los cuatro dominios que describen.
en cierto punto, probablemente para volver- Los materiales curriculares digitales pueden
se sostenible, requiere de un proceso de con- concebirse como el dominio externo, que in-
vencimiento. De hecho, para Opfer y Pedder fluye sobre el dominio de la práctica, esto es,
(2011) esta tensión e inseguridad del docente es las prácticas docentes promotoras de un uso
necesaria para que el cambio pueda darse. En pedagógico de la argumentación, en sus di-
el caso de Paulina y Sandra, su resistencia ini- mensiones estructurales, interaccionales y
cial las hizo perseverar en la lógica de la inter- pragmáticas, independientemente de la pro-
vención, mientras en el caso de Pamela y Julio fundidad de su conocimiento pedagógico
los llevó a regresar a la dinámica habitual de respecto al tema. Esta práctica promovería
trabajo de aula. Los resultados no dejan claras cambios en los estudiantes, y representaría el
las razones de esta resistencia desvinculante, dominio de los resultados, que, con todas las
pero podemos hipotetizar que la sensación variaciones y valoraciones antes detalladas,
de pérdida o de inversión de energía podría transformaría la relación entre el dominio
ser suficientemente alta para ambos como de práctica y el dominio personal (entendido
para que resultara más conveniente volver a como un conjunto complejo de concepciones
las prácticas iniciales y proteger de esta forma sobre el aprendizaje, la enseñanza, los estu-
una idea de sí como docentes. diantes y el rol docente), desde una relación
Resulta particularmente interesante que de tensión y enfrentamiento, a una de mutua
este proceso de convencimiento, con la consi- transformación. Así, es el cambio en los estu-
guiente disminución de tensión, se relacione diantes el que emergería como clave para mo-
en el discurso de las docentes con la obser- vilizar una transformación en los docentes.
vación de cambios en los estudiantes. Esto Es, quizás, un micro-momento (Evans, 2014);
denota el profesionalismo con que actúan una conversación que se escucha al pasar en
los docentes, que muchas veces se disfraza de los grupos, una idea que no habían considera-
resistencia al cambio: no se trataría de sim- do que fuera posible de expresar por un estu-
plemente resistir, sino de hacerlo hasta tener diante de cuarto básico, o una discusión más
seguridad y evidencia de que los estudiantes compleja, lo que en el caso de Sandra y Pau-
se benefician de las nuevas prácticas. En esa lina sostiene la posibilidad de transformar y
línea, Mornata y Bourgeois (2011) sostienen validar la práctica efectuada.

102 Perfiles Educativos | vol. XLII, núm. 169, 2020 | IISUE-UNAM | DOI: https://doi.org/10.22201/iisue.24486167e.2020.169.59245
M. Calderón, M. Silva, M.C. Villavicencio et al. | Trayectorias de desarrollo profesional docente para un uso pedagógico…
Bajo este modelo hemos intentado cubrir Finalmente, queremos señalar que, si bien
los diversos elementos en juego al momento el estudio es acotado, pues no aborda toda la
de trabajar el desarrollo profesional situado en complejidad del proceso de argumentación
un contexto concreto de práctica. Considera- en el aula, y no plantea una mirada de los
mos que la contribución que realizaron Clarke eventuales procesos de transferencia involu-
y Hollingsworth (2002) es útil para diseñar crados, una fortaleza es que la integración de
modelos de intervención profesional docente distintas herramientas de análisis permitió
en la medida que permite elaborar propuestas contrastar el uso del material curricular en
que no niegan la complejidad del proceso, sino el aula con el discurso sobre éste de cada do-
que indican las relaciones entre los dominios cente. Sin embargo, y como proyección para
que pueden ser intervenidos. Pese a lo anterior, trabajos futuros, sería importante considerar
no podemos asegurar que el cambio ocurra, ni la opinión de los estudiantes respecto de la in-
que ocurra de la misma forma para todos; pero tervención, en la medida que son claves en la
con un material exhaustivamente diseñado, dinámica del aula. Así mismo, un desafío me-
que tensione las dinámicas tradicionales, po- todológico es trabajar con un mayor número
demos establecer un primer paso: la necesaria de casos sin perder la profundidad del análisis
tensión que favorezca la emergencia de prácti- de cada uno.
cas más diversas y desafiantes en el aula.

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