Está en la página 1de 54

NOELIA LAZARTE 1

TEORIA GENERAL DEL PROCESO.

UNIDAD 1.- LA REGULACION JURIDICA EN EL PROCESO.

El derecho es un conjunto de normas que hacen a la conducta humana, de carácter obligatorio y que hacen a la
justicia. En esta definició n tenemos cuatro elementos esenciales: norma, conducta humana, obligatoria, hace a la
justicia. 

La primera gran distinció n que hacemos en el derecho, es el Derecho Pú blico, del Derecho Privado.

Hablamos de Derecho Pú blico cuando nos referimos a la relació n entre los particulares y el Estado, ya sea
personas humanas o jurídicas (funciones administrativas del Estado). En cambio el Derecho Privado es la rama
del derecho que va a estar encargada de estudiar y regular las relaciones entre los particulares.

1.- Derecho sustancial y formal:

Otra importante distinció n que podemos realizar, es entre el derecho sustancial o material (derecho de fondo) y
el derecho de forma.

El derecho de fondo nos brinda el conocimiento, cuá l es el derecho que tengo. Es el conjunto de normas que
establecen los derechos y obligaciones que determinan las reglas de conductas destinadas a los individuos. Así,
son derecho de fondo las disposiciones del derecho civil y comercial, penal, laboral, etc. El dictado de estas
normas de fondo es potestad exclusiva del Congreso Nacional. Art. 75 inc. 12 CN

El Derecho de Forma es el que regula los procedimientos a cumplirse ante los ó rganos judiciales quienes
aplicará n las normas jurídicas para resolver los distintos casos puestos a su consideració n. El típico derecho de
forma es el derecho procesal. Las normas que integran el derecho de forma son dictadas por cada uno de los
Congresos Provinciales. Tenemos así, el Có digo Procesal Civil y Comercial, Có digo Procesal Penal, Ley de
Procedimiento Laboral 11.653, Ley de Procedimiento Administrativo. Etc.

2.- Derecho Procesal:

Segú n Palacios. El derecho procesal es la rama del derecho que se refiere al proceso en sentido amplio,
entendiendo por tal a la actividad desplegada por los ó rganos del estado en la creació n y aplicació n de normas
jurídicas generales o individuales.

En sentido estricto, el derecho procesal es la disciplina que estudia por un lado el conjunto de actividades que
tienen lugar cuando se somete a la decisió n de un ó rgano judicial o arbitrario, la solució n de conflictos suscitados
entre dos o má s personas (partes) o cuando se requiere la intervenció n de un ó rgano judicial para que
constituya, integre o acuerde eficacia, a determinada relació n o situació n jurídica. (En sentido estricto, es sola la
aplicació n de la norma).

Contenido del derecho procesal: muchas son las materias que, no obstante interesar al derecho procesal,
pertenecen también a otros sectores del conocimiento jurídico. Son notorias, por ejemplo, las interferencias de
aquel con el derecho constitucional (sistema de designació n de los jueces, delimitació n de competencia federal,
debido proceso, etc.) y con el derecho administrativo (nombramiento, situació n, remoció n etc., de los funcionaros
y empleados judiciales).
NOELIA LAZARTE 2

En general, existe acuerdo doctrinario, en asignar al derecho procesal el estudio de las siguientes materias:

 Jurisdicció n y competencia de los ó rganos judiciales, y régimen jurídico a que se hallan sometidos los
integrantes de estos ú ltimos (facultades, deberes, etc. de los jueces y auxiliares). Jurisdicción.

 Régimen jurídico de las partes y peticionarios y de sus asistentes y representantes. Acción.

 Requisitos, contenidos, y efectos de los actos procesales y el trá mite del proceso a través de distintos
procedimientos que lo integran. Proceso.

Por lo tanto, puede decirse que el contenido del derecho procesal es el siguiente: jurisdicció n, acció n y proceso.

Autonomía del derecho procesal:

a.- La doctrina acepta corrientemente, la idea de que el derecho procesal se halla emplazado en un ámbito
secundario con relació n al denominado derecho sustancial o material. Se fundamenta, en apoyo a esta tesis, que
las normas que regulan el proceso carecen de un fin en sí mismas y constituyen solo un medio para lograr la
realizació n de los intereses tutelados por las normas sustanciales. Esta tesis es susceptible de numerosas
objeciones:

 Las normas jurídicas carecen en rigor de finalidad, pues no son má s que conceptos a través de los
cuales es posible interpretar una determinada realidad de conducta.
 Aunque se aceptase la idea de que carecen de un fin en sí mismas, se puede observar que lo mismo
ocurre con muchas normas mediante las cuales el derecho sustancial establece por ejemplo requisitos formales
de los actos jurídicos. Tal es el caso de la escritura pú blica para la compra de un inmueble, en este caso tampoco
regularían directamente el “goce de los bienes”, sino que se limitarían a establecer el medio adecuado para
obtener el goce.
 El esquema normativo completo del que el juez se vale para dictar sentencia, se halla
irremisiblemente integrado por disposiciones contenidas tanto en las leyes procesales como en leyes
sustanciales, ambas se encuentran en un pie de igualdad.

b.- El derecho procesal constituye una rama autó noma de la ciencia jurídica, porque opera dentro de un á mbito
de conductas fundamentalmente distinto del que se conceptualizan las normas del derecho material. La finalidad
específica de las actividades que en él se cumplen explica los vínculos jurídicos que surgen entre el juez y las
partes, así como los requisitos y efectos de los actos procesales, se encuentran regidos por principios propios,
ajenos a los del derecho material.

c.- El derecho procesal, pertenece al derecho pú blico, este es así por la posició n preeminente que en el proceso
asume el Estado a través de sus ó rganos judiciales.

3.- La norma procesal.

La norma procesal es una norma jurídica destinada a regular la realizació n de la funció n jurisdiccional del


estado.

Fuentes del derecho procesal: Son fuentes del derecho procesal todos aquellos criterios de objetividad, en
razó n de expresar la valoració n de la comunidad, o de sus ó rganos, acerca de una determinada realidad de
conducta, que pueden ser invocados por los jueces para esclarecer el sentido jurídico de las conductas que deben
juzgar durante el desarrollo del proceso.
NOELIA LAZARTE 3

-“criterios de objetividad”: son las fuentes o aquel listado de cuestiones objetivas a las cuales el juez puede
apuntar.

-“expresar la valoración de la comunidad o de los órganos”: La fuente puede tener nacimiento en la sociedad
o comunidad (ejemplo, la costumbre) o puede surgir de un ó rgano, ejemplo: del congreso por el dictado de una
ley o puede emanar de los jueces siendo la fuente la jurisprudencia.

-“Puede ser invocados o utilizados por los jueces para esclarecer el sentido jurídico de las conductas que
deben juzgar durante el proceso”. Es decir, que la fuente va a ser utilizada por el juez a los fines de darle un
fundamento a la solució n de los distintos conflictos que se le presentan.

Las fuentes del derecho procesal son la ley, la costumbre, la jurisprudencia que se divide en obligatoria y no
obligatoria, la doctrina, y la doctrina legal. A su vez estas las podemos clasificar:

Segú n su escala valorativa: tiene que ver a qué fuente recurre el juez primero:

 Ley en sentido amplio / costumbre.


 Jurisprudencia obligatoria.
 Jurisprudencia no obligatoria.
 Doctrina.

Primarias o secundarias: fuente primaria es aquella que se vale por sí misma, su existencia no deriva de
ninguna otra fuente. Mientras que las fuentes secundarias derivan de la interpretació n de una fuente primaria.

Obligatorias o no obligatorias: la fuente obligatoria es aquella de la cual el juez no se puede apartar en el


proceso, en contraposició n a las fuentes no obligatorias que el juez puede recurrir a ellas como una herramienta,
pero no es obligatoria para este.

La constitución: la Constitució n Nacional contiene diversas normas atenientes a la administració n de justicia, y


en general, a ciertos derechos y garantías que conciernen directamente a la regulació n del proceso civil. Como
por ejemplo, el Art. 18 CN, que establece la prohibició n de que “nadie sea juzgado por comisiones especiales, ni
sacado de los jueces designados por la ley antes del hecho de la causa”; o el Art. 27 CN “la inviolabilidad de la
defensa en juicio de la persona y de los derechos”.

Ley: Es una regla de conducta obligatoria, sancionada por autoridad pú blica y competente, con carácter general.
Es la fuente de derecho má s importante, constituye una fuente primaria y obligatoria.

Dentro de la ley, también tenemos una escala valorativa:

1. Constitució n Nacional.
2. Constitució n Provincial.
3. Leyes Nacionales / Decretos nacionales.
4. Decretos reglamentarios.
5. Leyes Provinciales / Decretos Provinciales.
6. Decretos reglamentarios.
7. Ordenanzas municipales.
8. Edictos policiales.
9. Reglamentos y acordadas.

Reglamentos y acordadas: son fuentes, primarias y obligatorias. A fines de facilitar el mejor funcionamiento de la
administració n de justicia y frente a la imposibilidad de prever los mú ltiples problemas de orden prá ctico que la
NOELIA LAZARTE 4

actividad procesal puede suscitar, las leyes suelen conferir a los tribunales superiores la facultad de dictar
normas generales, destinadas a complementar los textos legales referentes a ciertos aspectos de la organizació n
judicial y a la regulació n de los procedimientos.

La diferencia entre reglamento y acordada es que el primero puede versar sobre diferentes temas o puntos y
generalmente reglamenta cuestiones administrativas de la corte (ej.: cuestiones de licencia, horarios,
distribució n de tareas), en cambio la acordada puede versar solamente respecto de una cuestió n. Ejemplo:
acordada 2514 que habla de los escritos judiciales.

Costumbre: Es una conducta humana, que constituye una prá ctica constante y uniforme por parte de los
miembros de una comunidad con la convicció n de que tal comportamiento es obligatorio. Es una fuente primaria
y dentro de la escala valorativa la encontramos en el mismo pie de igualdad que la ley. Pudiendo ser obligatoria o
no, dependiendo la rama de la doctrina que se siga.

Elementos:

 Conducta constante.
 Realizada por una comunidad.
 Con la creencia de que es jurídicamente valido.

La costumbre se exterioriza de las siguientes maneras:

Secundum legem: La costumbre segú n la ley, es una prá ctica constante y uniforme, en la cual la propia ley me
indica que debo manejarme segú n los usos y costumbres del lugar. Tal es el caso establecido para los martilleros,
segú n el cual en las subastas judiciales, percibirá la comisió n establecida por ley, y en defecto de esta, por la
costumbre.

Contra legem: Es la prá ctica constante y uniforme de un acto donde la ley indica las formalidades que debe
cumplir, y en la prá ctica, sin que implique violació n a la norma, se desarrolla de otra manera. Un ejemplo de este
tipo de costumbre, lo encontramos en las subastas, donde está establecido que las ofertas deben realizarse a viva
voz, pero segú n las costumbres, estas pueden realizarse solo con levantar la mano, o gestos.

Praeter legem: Es aquella costumbre que viene a sanear lagunas normativas, donde la ley no determina có mo
nos tenemos que manejar, utilizamos los usos y costumbres. Esto en la prá ctica lo vemos por ejemplo en los
Juzgados; donde la confecció n de los oficios judiciales, cada ó rgano en particular, tiene sus propios requisitos
para la redacció n de los mismos.

Jurisprudencia: es la forma concordante en que los ó rganos judiciales se pronuncian en oportunidad de resolver
cosas similares. Es una fuente secundaria, y es la ú nica fuente que reviste un doble carácter de obligatoriedad.

La jurisprudencia es utilizada por los jueces para justificar el carácter jurídicamente objetivo que deben revestir
sus decisiones y constituyen por consiguiente fuente de derecho, careciendo de la obligatoriedad de la ley. La
jurisprudencia obligatoria, esta instituida por el CPCC de la nació n, que tras establecer que a iniciativa de
cualquiera de sus salas las cámaras de apelaciones podrá n reunirse en plenario con el objetivo de unificar la
jurisprudencia y así evitar sentencias contradictorias; de esta manera la jurisprudencia se torna obligatoria para
la misma cámara y para los jueces de primera instancia respecto de los cuales sea aquella tribunal de alzada; el
cará cter obligatorio perdura por 10 añ os, o podrá modificarse por medio de una nueva sentencia plenaria.
NOELIA LAZARTE 5

Doctrina: la doctrina es una fuente secundaria y no obligatoria. Es la interpretació n que le dan los juristas a una
sentencia, al ordenamiento jurídico, a una legislació n vigente, una ley en particular. Es utilizada tanto por los
jueces o abogados a los fines de poder darle un mayor esclarecimiento a algo que queremos explicar.

UNIDAD 2.- JURISDICCION Y COMPETENCIA.

1.- Jurisdicción; nociones generales: El lenguaje jurídico acuerda a la palabra “jurisdicció n” diversos
significados:

-se la utiliza para denotar límites territoriales dentro los cuales ejercen sus funciones especificas ó rganos del
estado, sean ellos judiciales o administrativos. Tal ocurre cuando se habla de la “jurisdicció n territorial” de los
jueces, y cuando se identifica el concepto con el de la circunscripció n espacial asignada a alguna repartició n
pú blica.

-las leyes suelen emplear este vocablo a fin de señ alar la aptitud o capacidad reconocida a un juez o tribunal para
conocer en una determinada categoría de pretensiones o de peticiones, confundiendo de tal manera la
jurisdicció n con la competencia, que es la medida en que ella se ejerce.

-se utiliza el término jurisdicció n con referencia al poder que, sobre los ciudadanos, ejercen los ó rganos estatales.

Etimoló gicamente, la palabra “jurisdicció n” proviene del latín: Juris dictio que significa decir el derecho.

Finalmente, desde el punto de vista técnico, se considera a la jurisdicció n como una de las funciones estatales,
definiéndosela como aquella mediante la cual los órganos judiciales del estado administran justicia en los casos de
litigios.

Pero ocurre que si a este esquema se lo confronta con la realidad jurídica positiva, se advierte que no toda la
funció n jurisdiccional se halla encomendada a los ó rganos del poder judicial. Es indiscutible que esa funció n la
ejercen también organismos administrativos y el propio legislativo. Y a la inversa, los ó rganos judiciales no
siempre ejercen actividad jurisdiccional. Es decir que nuestros poderes: Ejecutivo, Legislativo, y Judicial, ejercen
funciones propias e impropias:

El Poder Ejecutivo, ejerce funciones propias del Poder Legislativo, cuando realiza decretos de necesidad y
urgencia. Y ejerce funció n jurisdiccional, cuando indulta y conmuta penas.

El Poder Legislativo, ejerce funciones administrativas, es decir propias del Poder Ejecutivo, cuando dicta normas
específicas, como por ejemplo la creació n de monumentos. Y ejerce funciones propias del Poder Judicial, cuando
realiza el juicio político.

Así también, el Poder Judicial, realiza tareas administrativas y legislativas cuando dicta reglamentos y acordadas.

Jurisdicción: La Jurisdicció n o funció n jurisdiccional es desempeñ ada por el poder Judicial que actú a como
tercero imparcial y cumple funciones jurisdiccionales cada vez que se suscita un conflicto, una contienda, un
litigio. Esto quiere decir que el poder judicial a través de sus ó rganos va a resolver conflictos intersubjetivos de
intereses que se da entre dos o má s personas en carácter de tercero imparcial.

“jurisdicción es la facultad que tiene el estado para administrar justicia por medio de los órganos judiciales
instituidos al efecto, los cuales en función pública tienen por finalidad la realización o declaración de derecho
mediante la aplicación de la ley a casos concretos”.

Caracteres de la función jurisdiccional:


NOELIA LAZARTE 6

-Es un poder / deber, desde que comprende la facultad del juez o tribunal de decidir los asuntos que se someten a
su conocimiento y el deber en que se encuentra de administrar justicia cada vez que esa actividad sea requerida
en un caso concreto.

-Es ejercida por ó rganos independientes, que integran un poder del estado provisto de autonomía con relació n a
los poderes políticos, y que diferencia de los ó rganos administrativos, no se hallan sujetos a las directivas o
instrucciones de superiores jerá rquicos.

-Es indelegable, por cuanto el juez no puede delegar en otras personas el ejercicio de sus funciones, aunque por
razones de competencia territorial o en razó n de la personas, algunas veces se les permite delegar su funció n a
otros jueces.

Sin embargo, dentro del poder judicial hay otras funciones en manos de los jueces, como la jurisdicció n
voluntaria. Tradicionalmente se designa así a la funció n que ejercen los jueces con el objeto de integrar,
constituir o acordar eficacia a ciertos estados o relaciones jurídicas privadas.

2.- clasificación: la jurisdicció n la podemos clasificar en: jurisdicció n contenciosa, voluntaria, administrativa,
arbitral y preventiva.

La jurisdicció n contenciosa, es la que venimos mencionando, es la jurisdicció n que se ejerce cuando hay
contienda, el juez actú a como un tercero imparcial dirimiendo en un caso determinado. En contraposició n a la
jurisdicció n voluntaria, que tiene por objeto integrar, constituir, etc; situaciones o relaciones jurídicas.

La jurisdicció n administrativa, es la funció n jurisdiccional que cumple el poder ejecutivo a través de la llamada
administració n pú blica a nivel nacional, provincial o municipal (aunque también puede ser por alguna de las
dependencias del poder ejecutivo en ó rganos descentralizados o tribunales como el de faltas o el de cuentas) que
tiene por fin resolver conflictos que se generan entre la misma administració n pú blica (representando al estado)
y un particular.

La jurisdicció n arbitral, tiene lugar cuando se someten cuestiones litigiosas a “á rbitros”. Los tribunales arbitrales
no tienen jurisdicció n, por lo que en el marco de su competencia solo dictan “laudos” no sentencias. Carecen de
coacció n, por lo que si no se cumplen, los laudos pueden ser homologados en la instancia judicial que le
corresponda.

Por ú ltimo la jurisdicció n preventiva, es receptada por nuestro nuevo có digo civil y comercial en los arts. 1710 al
1716, estableciendo que los procesos se pueden iniciar antes de que el hecho dañ oso sea realizado.

3.- Principios constitucionales en relación al ejercicio de la función jurisdiccional:

Garantía del debido proceso: es una garantía constitucional segú n el cual toda persona tiene derecho a ciertas
garantías mínimas, tendientes a asegurar un resultado justo y equitativo dentro del proceso, a permitirle tener
oportunidad de ser oído y a hacer valer sus pretensiones legítimas frente al juez. Art. 18 CN.

Juicio previo: “Ningú n habitante de la Nació n puede ser penado sin juicio previo¨. Nadie puede ser castigado sin
haber sido previamente juzgado y sentenciado mediante el debido proceso. Esto significa que el individuo debe
ser acusado de la comisió n de un hecho ilícito concreto, presentá ndose pruebas en su contra; y debe tener la
oportunidad de defenderse alegando sus derechos y presentando las pruebas que tenga para demostrar su
inocencia.
NOELIA LAZARTE 7

Duración razonable de las causas: es el derecho de todo imputado a obtener un pronunciamiento del modo
má s rá pido posible. La existencia de una dilació n indefinida en el trá mite y decisió n del juicio, ocasiona agravio a
la garantía constitucional del derecho de defensa, produciendo una efectiva privació n de justicia

Juez natural: ¨Ningú n habitante puede ser… juzgado por comisiones especiales, o sacado de los jueces
designados por la ley antes del hecho de la causa¨. Este pá rrafo encierra el principio del juez natural o juez legal.
Son jueces naturales los juzgados y tribunales creados por la ley ante que se produzca el hecho que motiva el
proceso, sin importar el o los individuos que lo integren. No se puede hacer sacar al individuo de ese juzgado
natural, y formar una comisió n especial para que lo juzgue.

Inviolabilidad de la defensa en juicio: ¨Es inviolable la defensa en juicio de la persona y de los derechos…¨. La
Constitució n asegura al individuo que, durante el proceso, podrá hacer lo que sea necesario para defender su
persona y sus derechos; es decir, para demostrar su inocencia o la legitimidad de los derechos que invoca, etc.

Acceso a la justicia: Este derecho implica que ninguna controversia quede sin resolver. Sin acceso a la justicia,
las personas no pueden hacer oír su voz, ejercer sus derechos, hacer frente a la discriminació n, etc. La
administració n de justicia debe ser imparcial y no discriminatoria.

Igualdad ante la ley: Impide la aplicació n de excepciones y privilegios injustos o arbitrarios, lo que no impide el
tratamiento desigual en situaciones que lo ameriten, en virtud de lograr el equilibrio entre partes que no posean
igualdad de oportunidades, como la posibilidad a quien acredite su estado de pobreza de litigar sin gastos y
recurrir a un defensor oficial.

Tutela judicial efectiva: Derecho constitucional por el que toda persona puede ejercer libremente la defensa de
sus derechos e intereses legítimos ante la jurisdicció n. Es una garantía jurisdiccional a la no indefensió n y al libre
acceso a los tribunales a fin de obtener una resolució n fundada en Derecho, a su ejecució n y a la utilizació n del
sistema de recursos.

4.- Competencia. La podemos definir como la capacidad o aptitud que la ley reconoce a un juez o tribunal para
ejercer sus funciones respecto a una determinada categoría de asuntos o durante una determinada etapa del
proceso.

La competencia puede clasificarse en base a tres criterios: criterio territorial, objetivo, y funcional:

Territorial: se vincula con la circunscripció n territorial asignada por la ley a la actividad de cada ó rgano judicial.

El criterio objetivo: atienda a la naturaleza y al monto de las causas, y a él le corresponden respectivamente, la


competencia en razó n de la materia y en razó n del monto.

Criterio funcional: toma en cuenta la diversa índole de las funciones que deben cumplir los jueces que intervienen
en las distintas instancias del proceso, es decir competencia en razó n del grado.

Competencia ordinaria: Los jueces provinciales tienen competencia en la provincia de Buenos Aires, en razó n
del territorio, materia, grado y monto.

Competencia en razón del territorio: está determinada por los arts. 5 y 6 del CPCC de Provincia. Los elementos
que van a determinar quién es el juez competente en razó n del territorio son: el lugar donde se encuentran los
bienes (cuando hablamos de derechos reales), el lugar del domicilio de la parte, el lugar del domicilio del deudor,
el lugar de celebració n del contrato, el lugar de cumplimiento de la obligació n cuando se habla de un derecho
personal).
NOELIA LAZARTE 8

Competencia en razón de la materia: como sería materialmente imposible que el juez resuelva conflictos que
se resuelvan el cualquier lugar de la provincia, o que resuelva cualquier tipo de conflicto ya sea civil, penal etc. el
juez generalmente se especializa en uno de los fueros. En el departamento judicial de mar del Plata el mismo
puede ejercer su funció n jurisdiccional en el Juzgado Civil y Comercial, Juzgado Contencioso Administrativo,
Familia, Laboral (tribunales de trabajo), Penal (+Criminal y correccional, +Garantía, +Responsabilidad juvenil).

Competencia en razón del grado: la competencia en razó n del grado supone la divisió n del proceso en diversas
instancias, en cada una de las cuales el conocimiento del asunto se halla encomendado a jueces distintos. Nuestro
ordenamiento procesal, se halla estructurado sobre el sistema de la doble instancia, en virtud del cual el
conocimiento inicial del proceso corresponde a ó rganos unipersonales (juzgados) cuyas resoluciones son
susceptible de recursos para ante tribunales colegiados (cámaras de apelaciones). Sin embargo, los tribunales de
trabajo son de ú nica instancia porque al ser colegiados, las decisiones se toman por mayoría y se estaría teniendo
la opinió n de tres jueces y no de uno solo. Para recurrir las resoluciones de estos tribunales, se debe apelar
directamente a la Suprema Corte de Justicia.

En cuanto a las resoluciones de los juzgados penales de primera instancia, las mismas pueden ser recurridas a la
cá mara de apelació n, y hay un tercer grado de apelació n que son las cámaras de casació n penal. Luego si, la
ú ltima instancia sería la Suprema Corte de Justicia.

Competencia en razón del valor: la misma ha quedado desvirtuada ya que anteriormente se decía que tenían
este tipo de competencia los juzgados de paz que podían entender hasta cierto monto y no superior a éste. Hoy
esta competencia está determinada por la Suprema Corte de la provincia, ya que si hoy interponemos un recurso
de inaplicabilidad de ley, el monto de la sentencia debe ser determinado (si es menor de lo que dice el có digo, no
es recurrible). Esto significa que determinado tribunal puede entender cuando el monto del proceso no supera
cierta cifra o es mayor a tal otra.

Competencia en razón del sorteo o turno: los juzgados de primera instancia civiles y comerciales, contenciosos
administrativos, laborales, de paz y de familia que van a entender en una causa se establecen por sorteo. En
cambio, el juzgado penal que va a entender en la causa va a ser establecido por turno.

La competencia ordinaria es:

 de orden pú blico: porque hace a la organizació n del poder judicial. Por ende, las normas que rigen la
competencia que serían la ley 5827 y los có digos procesales de la provincia, no pueden ser alterados ni
modificados por acuerdo de partes o por decisió n del juez.
 indelegable: significa que el juez no puede delegar su competencia a otro juez.
 improrrogable: significa que ninguna de las competencias se pueden modificar en contra de lo que
dice el có digo procesal ni la ley 5827. Sin embargo, hay una excepció n que consiste en poder prorrogar o
modificar la competencia en razó n del territorio.

Prorroga de competencia:

Art. 1 CPCC Prov.: Carácter. La competencia atribuida a los tribunales provinciales es improrrogable. Exceptuase
la competencia territorial en los asuntos exclusivamente patrimoniales, que podrá ser prorrogada de conformidad
de partes.

La pró rroga consiste en un acuerdo entre los litigantes, en virtud del cual presentan su litigio ante un juez, que no
es el juez natural e inicialmente competente sino ante otro, es decir que modifican la competencia territorial.

Excepciones a las reglas de competencia:


NOELIA LAZARTE 9

A raíz de una declaració n de voluntad expresa o tacita de las partes o de una disposició n legal, las reglas
generales en materia de competencia pueden sufrir excepciones, en forma tal que se detraiga del conocimiento
de un ó rgano judicial el conocimiento de una o varias causas que, de acuerdo con esas reglas, recuadran dentro
de su competencia, y se las asigna al conocimiento de un ó rgano distinto. Dicho desplazamiento se verifica por
conformidad de las partes en los supuestos de competencia territorial y en asuntos exclusivamente
patrimoniales.

Un ejemplo de desplazamiento de competencia en forma expresa, es en los contratos de locació n, donde muchas
veces las partes acuerdan, y someten la resolució n de conflictos que se suscitaren entre ellas, a tribunales
arbitrales. De forma tacita, es el caso donde ante el inicio de una demanda, las partes pudiendo prorrogar la
competencia en razó n del territorio, no lo hicieren, así se entiende de forma tacita que estas la aceptan.

El desplazamiento de la competencia por disposició n legal funciona en las hipó tesis de conexió n y fuero de
atracció n.

Conexión: existe conexió n en sentido procesal, cuando dos o má s pretensiones tienen en comú n alguno de sus
elementos, o se hallan vinculadas por la naturaleza de las cuestiones involucradas en ellas. Produce un
desplazamiento de la competencia fundado en términos generales, en la necesidad de evitar el pronunciamiento
de sentencias contradictorias.

Fuero de atracción: razones de conveniencia prá ctica y el interés general de la justicia, aconsejan que sea un
solo juez quien entienda en ciertas cuestiones vinculadas a los bienes que han de ser recaudados, liquidados y
transmitidos bajo su direcció n. De tal circunstancia deriva el llamado fuero de atracció n, en cuya virtud el juez
que conoce en un proceso universal (sucesió n o quiebra), es competente para entender en las pretensiones
relacionados con el patrimonio o los derechos sobre que versa dicho proceso.

Conflictos de competencia, tramite de declinatoria e inhibitoria.

El actor inicia la demanda, en la receptoría general de expedientes (familia, laboral, civil y comercial). Si no se
pide la conexidad ni hay fuero de atracció n, la receptoría realiza un sorteo.

Se sortea el juzgado, y el juez cuando le llega la causa va a analizarla. Del aná lisis de la causa y la documental, el
juez determina si él es competente, en razó n de territorio, materia, grado, etc. Por lo tanto, el juez se va a declarar
competente o incompetente de oficio cuando conoce el expediente.

Si se declara competente ordena el traslado de la demanda al demandando. El demandado puede plantar que el
juez es incompetente en razó n, por ejemplo, del turno o sorteo, porque ya hubo una causa que determino la
competencia y hubo conexidad. Si es una cuestió n de familia, el juez competente va a ser el que determinó el
divorcio. Un tema vinculado a ello deberá iniciarse ante el mismo juzgado, porque hay conexidad entre las causas,
está n vinculadas entre sí. La primera causa que se inicia es la que determina en el futuro quien es el juez
competente.

Esto quiere decir, que la incompetencia la puede declarar de oficio el juez, o por el demandado.

El demandado puede oponerse a la competencia del juez a través de la declinatoria o excepción de competencia
e inhibitoria.

La declinatoria es una excepció n de competencia que puede oponer el demandado por cualquier razó n: grado,
turno o sorteo, materia, territorio, y valor. Y se plantea donde se tramita el expediente. Mediante la declinatoria el
demandado se presenta ante el juez que lo citó y le pide un pronunciamiento negativo acerca de su competencia.
NOELIA LAZARTE 10

“La declinatoria se substanciará como las demás excepciones previas y, declarada procedente, se remitirá la causa
al juez tenido por competente”. Art. 8 CPCC de la provincia.

La inhibitoria es una defensa en la cual el demando plantea la incompetencia del juez, pero cuando la
incompetencia es por el territorio.

“La inhibitoria podrá plantearse hasta el momento de oponer excepciones o de contestar la demanda si aquel
trámite no se hallare establecido como previo en el proceso de que se trata”. Art. 6 CPCC de la provincia.

En la inhibitoria, el demandado se presenta ante el juez que cree competente, pidiéndole que así lo declare y
remita un oficio inhibitorio al juez que está conociendo en la causa a fin de que se abstenga de continuar
conociendo en ella.

En cambio, la declinatoria es una excepció n de competencia por cualquier razó n: grado, turno o sorteo, materia,
territorio, y valor. Y se plantea donde se tramita el expediente.

En ambos casos el demandado plantea la incompetencia del juez que conoce en el proceso, dentro del plazo que
puede ser de 10 o 5 días dependiendo del tipo de expediente y del tipo de proceso.

Ni la declinatoria ni la inhibitoria configuran una pró rroga de competencia.

Alvarado Velloso considera que cuando la parte plantea la declinatoria o inhibitoria está claro que lo que se está
discutiendo la competencia del juez. Alvarado dice que es la competencia objetivo (objetivamente no es
competente). Cuando las partes plantean la recusació n porque considera que el juez es incompetente porque
tiene un vínculo con algunas de las partes o interés en el proceso es subjetiva.

Art. 4° CPCC Prov.: Declaración de incompetencia. Toda demanda deberá interponerse ante el juez competente, y
siempre que de la exposición de los hechos resultare no ser de la competencia del juez ante quien se deduce, deberá
dicho juez inhibirse de oficio. Consentida o ejecutoriada la respectiva resolución, se procederá en la forma que
dispone el artículo 8°, primer párrafo.

Art. 7° CPCC Prov.: Procedencia. Las cuestiones de competencia sólo podrán promoverse por vía de declinatoria
con excepción de las que se susciten entre jueces de distintos departamentos judiciales, en las que también
procederá la inhibitoria.

En uno y otro caso, la cuestión sólo podrá promoverse antes de haberse consentido la competencia de que se
reclama.

Elegida una vía, no podrá en lo sucesivo usarse de otra.

UNIDAD 3.- SISTEMA JUDICIAL ARGENTINO.

1.- Sistema judicial argentino: nuestra Constitució n, siguiendo el modelo de Constitució n Norteamérica de
1.787, creó un doble orden judicial.

De acuerdo a este régimen, existen en nuestro país, por un lado una justicia nacional que ejerce sus atribuciones
en todo nuestro territorio argentino, con respecto al conocimiento de los asuntos mencionados por el art. 116 de
la Constitució n Nacional. Y por otro lado, una justicia ordinaria o comú n que ejerce sus funciones a través de
ó rganos judiciales que cada provincia debe crear y organizar, arts. 5, 121, 123 y 126, de la CN. Y cuya
NOELIA LAZARTE 11

competencia abarca el conocimiento de todos los asuntos regidos por el derecho comú n y local, con las
limitaciones previstas por el art 75. Inc. 12 de la CN. (Có digos de fondo)

Competencia federal: la competencia federal es la facultad reconocida a los ó rganos que integran el poder
judicial de la nació n para ejercer sus funciones en los casos, respecto de las personas y en los lugares
especialmente determinados por la CN.

La jurisdicció n federal es ejercida por los tribunales federales; En primera instancia juzgados federales, en
segunda instancia la cá mara de apelació n y en lo penal la cámara de casació n penal, y por ú ltimo la corte.

La constitució n se encarga de fijar los casos en que debe intervenir el poder judicial de la Nació n por oposició n a
la regla general de que las provincias conservan todo el poder no delegado (art. 121, art. 5).

Características del poder judicial federal:

Es limitado y de excepció n: Por el art 121 de la CN. la regla es el poder judicial provincial.

Privativo y excluyente: Si una causa comienza en los tribunales federales no pueden en principio pasar a los
tribunales provinciales; Es decir que del orden federal no se puede volver al provincial.

Inalterable: Si un litigio se radica ante la justicia federal se debe finiquitar en la justicia federal, no puede pasar a
la provincia.

Se limita a causas judiciales: Cuestiones contenciosas, quedan fuera los procesos universales, concursos, quiebras
etc.

Improrrogable: Si surge en virtud de la materia y del lugar no se puede prorrogar, es prorrogable en virtud de las
personas en determinados casos

La jurisdicció n federal, delimitada por el art. 116, la clasificamos en razó n de la materia, de las personas y el
lugar.

Art 116: Causas en razón de la materia.

 Cuando se trata de puntos regidos por la Constitució n: Tiene que ser directa, inmediata y específica
para que sea federal. No basta que el derecho invocado este garantizado en la Constitució n Nacional. Tampoco
procede cuando la invocació n constitucional la efectú a el demandado como defensa.

 Causas que versen sobre las Leyes de la Nació n con la reserva del art 75 inc 12. Vale decir aquellas
leyes sancionadas en ejercicio de los poderes que le asigna el Art 75 al congreso, con la salvedad del inc. 12 del
mismo, es decir los códigos de fondo.

 Causas que versen sobre tratados internacionales: Su inclusió n se comprende en razó n de que los
tratados son un típico acto complejo federal. Tradicionalmente la corte consideraba que no siempre la
aplicació n de un tratado internacional habilitaba la jurisdicció n federal, se examinaba su contenido, para poder
concluir a que jurisdicció n se llevaría. En el 95 con el caso Méndez Valles se sentó una nueva doctrina con el
argumento de que la naturaleza federal del tratado alcanza también a su contenido.

 Causas de almirantazgo y jurisdicció n marítima: "hechos que suceden en el mar e involucra al trá fico
en altamar". Estas expresiones del art 116 son materias federales por su íntima conexió n con la navegació n,
delegada por las provincias al gobierno federal.
NOELIA LAZARTE 12

Art 116: Causas en razón de las personas.

 Causas en que la Nació n sea parte; Tanto actora como demandada; Y también la jurisprudencia ha
ampliado a causas cuando la nació n tenga alguna incidencia en determinadas entidades, por ejemplo, empresas
del estado nacional o entidades descentralizadas, se abre la competencia federal porque está en juego un interés
general, la responsabilidad del estado.

 Causas en que sean parte los vecinos de distintas provincias: ¿Que se entiende por vecino? Es la
persona que tiene su efectiva residencia, para ser vecino se requiere que este dos añ os en la provincia o tener
una propiedad inmobiliaria en la misma. Cuando se trata de vecino de diferentes provincias, interviene el
tribunal federal, la excepció n se puede prorrogar a la justicia provincial. Ej a través de acuerdo de mutuo, o al
interponer la defensa puede declarar la "defensa de incompetencia". Se trata solo de causas civiles y no
administrativas o penales, solo procede el fuero federal por distinta vecindad cuando ambos litigantes son
argentinos.

 Causas en que sea parte un ciudadano argentino y un extranjero. Por el solo hecho de ser extranjero
corresponde la jurisdicció n federal porque ha venido ocasionalmente a nuestro país. Ej vacaciones o bien que
este de forma permanente. Esta competencia es prorrogable a la justicia provincial por acuerdo de partes.

 Causas en que sea parte un estado extranjero, "Los estados extranjeros tiene inmunidad de
jurisdicció n ante la comunidad internacional debido a su soberanía"; Es decir que los estados extranjeros no
pueden ser llevados directamente a juicio ante otros estados ni otros organismos internacionales, hay todo un
procedimiento en que los estados extranjeros deben renunciar o delegar parte de su soberanía ante un
organismo internacional; Para ser llevados a juicio es necesario que renuncien a esta inmunidad de jurisdicció n.

 Casos concernientes a representantes de estados extranjeros acreditados en nuestro país. Poseen


inmunidad diplomá tica de la jurisdicció n del estado que los recibió . No pueden ser llevados directamente a juicio
en el país que se encuentran acreditados, pueden renunciar a la inmunidad diplomá tica (hay dos grupos
detallar).

Causas federales en razón del territorio:

Con prescindencia de la materia del litigio y de las personas intervinientes en él, la justicia federal conoce en
todas las causas producidas en los lugares sujetos a jurisdicció n federal. Es decir, en los territorios nacionales Art
75 inc 15, en la capital federal y en los establecimientos de utilidad nacional ubicados en las provincias en lo
relativo al fin especifico de ellos art 75 inc 30

Competencia de la Corte Suprema: Originaria y Exclusiva; Apelada.

Del art 117 dinaminan las formas en que intervienen la corte federal a fin de ejercer su funció n jurisdiccional y en
ciertos casos, también su funció n específica de contralor ultimo de la constitucionalidad en el orden interno:
competencia originaria o por apelació n. La primera está fijada en el art 117 y la segunda exige que sea el
congreso quien la delimite.

¿Có mo se ponen en funcionamiento? La competencia originaria se pone en funcionamiento a través de una acció n
que se manifiesta en la demanda con la que se inicia, es un proceso directamente en la corte; Mientras que la
competencia apelada se pone en funcionamiento a través de un recurso por el cual una parte afectada o
perjudicada por algú n vicio de una sentencia emanada de un tribunal que ha intervenido previamente pide su
rectificació n o modificació n.
NOELIA LAZARTE 13

Sobre la mencionada dualidad competencial de la Corte, el Congreso reglamento tempranamente su competencia


apelada Ley 48 de 1863, consagrando dos especies bien diferenciadas: La ordinaria y la extraordinaria, a las
cuales se accede, respectivamente por recurso de apelació n ordinario o extraordinario.

Competencia originaria y exclusiva de la corte: Surge en forma taxativa del art 117: "asuntos concernientes a
embajadores ministros y có nsules extranjeros y en los que alguna provincia fuese parte". Esta competencia no
puede ser ampliada ni restringida, tampoco prorrogarse.

Supuestos en que procede la competencia originaria:

 En todos los asuntos entre dos o má s provincias.

 Causas civiles (derecho privado o comú n, se excluyen causas penales y administrativos) suscitadas
entre una provincia y algú n vecino o vecinos de otra o ciudadanos extranjeros.

 Causas suscitadas entre una provincia y la Nació n o alguna de sus reparticiones autá rquicas.

 Causas suscitadas entre una provincia y sus propios vecinos cuando sea de aplicació n el derecho
federal. (Lo clave es que toca derechos federales)

 Causas suscitadas entre una provincia y un Estado Extranjero (Una prov. no particular)

 Causas concernientes a embajadores u otros ministros diplomá ticos extranjeros: Está n


comprendidas en la competencia originaria las causas que afecten directamente a dichos funcionarios o a las
personas de su familia o al personal de la embajada o legació n que tenga cará cter diplomá tico. La corte ha dicho
que la competencia originaria procede solo cuando los embajadores y ministros diplomá ticos extranjeros son
parte, ya sea como actores o demandados, también se ha aceptado dicha competencia en casos de procesos
penales, donde aquellos resultaren damnificados en su privilegios e inmunidades por la comisió n de un delito, en
cambio esta competencia no alcanza al personal domestico de la embajada. Respecto a la inmunidad diplomá tica
de que gozan los embajadores extranjeros frente al estado receptor, no está expresamente en la constitució n
pero surge del derecho internacional, e implica que para que proceda la competencia argentina se debe requerir
previamente la conformidad del gobierno extranjero correspondiente.

 Causas relativas a có nsules extranjeros: La competencia originaria solo corresponde si el proceso


versa sobre privilegios o exenciones de carácter pú blico y no sobre negocios particulares de los có nsules.

Competencia apelada de la corte suprema.

Cuando la corte interviene por vía recursiva se abre su competencia por apelació n, la cual puede ser ordinaria o
extraordinaria. La diferencia entre ambas competencias apeladas depende de la amplitud o restricció n con que se
puede acceder a la corte y con la que ésta puede actuar.

Competencia apelada ordinaria: Características:

 Si bien solo procede en tres casos es má s amplia que la extraordinaria, ya que la corte tiene plena
jurisdicció n. (Puede revisar cuestiones de hecho y de derecho) En este sentido se dice que la Corte actú a como
tribunal de tercera instancia, ya que la parte agraviada puede invocar cualquier motivo para criticar o descalificar
el fallo apelado.

 Solo procede contra sentencias emanadas de cá maras federales nunca de tribunales provinciales a
diferencia del recurso extraordinario.
NOELIA LAZARTE 14

 Prevalece sobre la extraordinaria en el sentido que la absorbe, en caso de que se interpongan ambos
recursos.

La competencia apelada ordinaria procede en tres supuestos segú n decreto? 1285/58; La norma comienza
diciendo que La Corte conoce por apelació n ordinaria de las sentencias definitivas de las cá maras nacionales de
apelaciones, lo que incluye a las cámaras federales de todo el país.

 Primer supuesto: Causas en que la nació n directa o indirectamente sea parte, cuando el valor
disputado en ú ltimo término, sin sus accesorios, sea superior al monto que se fije por reglamentació n de la
propia Corte.

 En casos de extradició n de criminales reclamados por países extranjeros.

 En causas en que se produjeran apresamientos o embargos marítimos en tiempo de guerra, sobre


salvamento militar y sobre nacionalidad del buque, legitimidad de su patente o regularidad de sus papeles.

Competencia apelada Extraordinaria: La corte conoce, por la vía del recurso extraordinario federal con el
objeto de mantener la supremacía constitucional, de las sentencias definitivas producidas por todos los
tribunales de justicia del país, cá maras federales y superiores tribunales de provincia.

2.- Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Art 108. El poder judicial de la Nación será ejercido por una Corte Suprema de Justicia y por lo demás tribunales
inferiores que el congreso estableciere en el territorio de la Nación.

Es el ú nico ó rgano que esta expresado en la constitució n: encabeza el poder judicial de la nació n con competencia
en todo el territorio argentino. Con la reforma del 94 se ha producido un trasvasamiento de facultades que antes
estaban encabezadas por la corte a favor de un nuevo ó rgano, el Consejo de la Magistratura. Facultades
reglamentarias respecto a la justicia federal (sanciones disciplinarias), y relativas a la administració n de recursos
econó micos (presupuesto).

Integració n: De los Arts. 59 y 112 se infiere que está encabezada por un presidente, resultando evidente su
cará cter colegiado aunque sin determinar el nú mero de sus miembros. La reforma de 1860, al derogar el art. 91
de la Constitució n de 1853 que fijaba que la corte estaba compuesta por nueve jueces y dos fiscales deja librada
esta cuestió n al criterio del congreso. Salvo el breve periodo de 1960/66 (7 miembros) histó ricamente desde su
instalació n en 1963 la corte estuvo integrada por 5 miembros.

En 1990 con la ley 23.774 se ampliaba a nueve miembros y un procurador general, y en 2006 la ley 26.183 bajo
su reducció n de nueve a cinco miembros y un procurador general.

3.- Suprema Corte de la Provincia de Buenos Aires.

La constitució n provincial vigente destina la secció n 6ª al “poder judicial”.

Art. 160: “será desempeñ ado por una Suprema Corte de Justicia, Cámaras de apelació n, Jueces y demá s
Tribunales que la ley establezca”.

La suprema corte de justicia se compone de siete miembros, un procurador general, y ejerce su jurisdicció n en
todo el territorio de la provincia, el art 161 Const. Provincial Le otorga las siguientes atribuciones:
NOELIA LAZARTE 15

-ejerce la jurisdicció n originaria y de apelació n para conocer y resolver acerca de la constitucionalidad e


inconstitucionalidad de leyes, decretos, ordenanzas, o reglamentos, que estatuyen sobre materia regida por la
constitució n y se controvierta por parte interesada;

-conoce y resuelve exclusivamente en las causas de competencia entre los poderes pú blicos de la provincia y en
las que susciten entre los tribunales de justicia con motivo de su jurisdicció n respectiva;

-conoce y resuelve en grado de apelació n: (remitirse al Art. 161).

Para el resto de la composició n del poder judicial de la provincia de buenos aires, nos remitimos a la ley 5827 y
sus modificaciones: http://www.gob.gba.gov.ar/legislacion/legislacion/l-5827.html

La administración de justicia en la provincia de buenos aires, según ley 5827, será ejercida por los
siguientes órganos:

1. La Suprema Corte de Justicia.

2. El Tribunal de Casació n Penal.

3. Las Cá maras de Apelació n en lo Civil y Comercial, de Garantías en lo Penal y en lo Contencioso Administrativo.

4. Los Jueces de Primera Instancia en lo Civil y Comercial, de Familia, en lo Contencioso Administrativo, de


Garantías, de Garantías del Joven, de Responsabilidad Penal Juvenil, en lo Correccional, de Ejecució n en lo Penal y
de Ejecució n Tributaria.

5. Los Tribunales en lo Criminal.

6. Los Tribunales del Trabajo.

7. Los Jueces de Paz.

8. El Juzgado Notarial.

9. El Cuerpo de Magistrados Suplentes.

10. El Tribunal de Jurados.

Suprema Corte de Justicia:

Está compuesta por 7 miembros y tiene jurisdicció n en todo el territorio de la provincia. Con las siguientes
atribuciones:

 Competencia originaria y de apelació n en casos de constitucionalidad o inconstitucionalidad.


 Competencia originaria y exclusiva en las causas entre los poderes pú blicos de la provincia.
 Competencia en grado de apelació n en:

La aplicabilidad de la ley en que los tribunales de justicia en ú ltima instancia, funden su sentencia sobre la
cuestió n que por ella deciden;

de la nulidad argü ida contra las sentencias definitivas pronunciadas en ú ltima instancia por los tribunales de
justicia, cuando se alegue violació n de las normas contenidas en los artículos 168 y 171 de la Constitució n
provincial.
NOELIA LAZARTE 16

 Nombrar y remover todos los funcionarios y empleados auxiliares de la administració n de justicia


provincial.
 Representar al Poder Judicial.
 Observar la conducta de los Magistrados y funcionarios del poder judicial.
 Determinar la feria judicial y disponer de los asuetos que correspondan.
 Proponer el ejecutivo reformar de procedimientos.
 Dictar las reglamentaciones conducentes al debido ejercicio de sus funciones y su reglamento
interno.

Corresponde al Presidente de la Suprema Corte de Justicia:

1.- Representar al Tribunal y mantener las relaciones de éste con los demá s Poderes.

2.- Velar por el orden y economía internos del Tribunal, vigilancia y cumplimiento de sus deberes.

3.- Llevar la palabra en las audiencias y dar la venia para hacer uso de ella.

4.- Vigilar el despacho de las causas por parte de los miembros del tribunal.

5.- Tener bajo su directa inspecció n las Secretarías del Tribunal.

4.- Fuero Penal

Tribunal de casació n penal: El Tribunal de Casació n Penal se regirá en cuanto a su composició n, competencia y
funcionamiento por las disposiciones de la ley de su creació n nú mero 11.982.

Cá maras de apelació n y garantías en lo penal:

La Cá mara Apelació n y Garantías en el departamento de Mar del Plata estará integrada por 9 miembros divididos
en tres salas compuestas por 3 jueces cada una. La presidencia será desempeñ ada anualmente y en forma
rotativa por cada uno de los 3 miembros de cada sala.

5.- Fuero civil y comercial

Los Juzgados de Primera Instancia en lo Civil y Comercial ejercerá n su jurisdicció n en todas las causas de las
materias Civil, comercial y rural de orden voluntario o contencioso, con excepció n de la que corresponde a los
Juzgados de Familia y Juzgados de Paz.

Las Cá maras de Apelació n con competencia Civil y Comercial será n Tribunales de Alzada de los fallos y demá s
providencias recurribles dictados por los juzgados de primera instancia y por los Juzgados de Paz Letrados, con
excepció n de la materia de faltas.

La cá mara está compuesta por 7 miembros, dividas en 3 salas compuestas por 2 miembros cada una con un
presidente comú n. Los asuntos sometidos a la competencia del Tribunal, será n distribuidos proporcionalmente
por sorteo semanal entre las salas o sometidos a la consideració n y juzgamiento de la cámara en pleno si así
correspondiera, notificá ndose a las partes su resolució n. Dentro de la sala, los asuntos se resuelven por sorteo.

6.- Fuero contencioso administrativo

Corresponde a los tribunales contenciosos administrativos el conocimiento y decisió n de las pretensiones que se
deduzcan en los casos originados por la actuació n u omisió n, en el ejercicio de funciones administrativas, de los
ó rganos de la Provincia, los Municipios, los entes descentralizados y otras personas.
NOELIA LAZARTE 17

Está compuesto por 3 miembros y no es una cámara departamental si no que es regional ya que va a abarcar má s
de un departamento judicial (Mar del Plata, Dolores, Azul, Necochea y Bahía Blanca).

7.- Fuero de familia

Cada Juzgado contará con un Consejero de Familia y funcionará un Equipo Técnico Auxiliar que asistirá
interdisciplinariamente y colaborará con el Juez y el Consejero. Cada Equipo Técnico Auxiliar tendrá asiento en el
respectivo Juzgado, y estará integrado por un médico psiquiatra, un psicó logo y un trabajador social. El Juez y el
Consejero podrá n requerir la asistencia de profesionales y técnicos pertenecientes a las Asesorías Periciales de
su Jurisdicció n, así como la colaboració n de profesionales y equipos técnicos de los Municipios que integren el
á rea de su competencia territorial.

Hay seis juzgados y su ó rgano de alzada es la cá mara civil y comercial.

8.- Fuero Laboral

Los Tribunales del Trabajo de la Provincia de Buenos Aires tendrá n a su cargo la administració n de la justicia
laboral. Los Tribunales del Trabajo conocen:

En ú nica instancia, en juicio oral y pú blico, de las controversias individuales del trabajo que tengan lugar entre
empleadores y trabajadores y de las causas vinculadas con un contrato de trabajo, aunque se funden en normas
del derecho comú n.

En las acciones de las asociaciones sindicales con personalidad gremial.

En las demandas de desalojo.

En las demandas de tercerías en los juicios de competencia de la justicia laboral.

En grado de apelació n de las resoluciones definitivas dictadas por la asociació n sindical.

En grado de apelació n, de las resoluciones dictadas por las autoridades administrativas provinciales del trabajo
cuando las leyes pertinentes lo establezcan.

En la ejecució n de las resoluciones dictadas por la autoridad administrativa del trabajo cuando las leyes así lo
dispongan.

Estará n constituidos por tres Jueces y ejercerá n su jurisdicció n en el territorio de la Provincia con la competencia
que les atribuye la presente Ley. La presidencia será ejercida por el término de un añ o.

9.- Justicia de paz letrada

En cada Partido de la Provincia funcionará un Juzgado de Paz letrado con excepció n de aquellos en los cuales esté
instalada la sede asiento de cada Departamento Judicial, tendrá n asiento en la ciudad cabecera del Partido.

Atribuciones: alimentos; tenencias de hijos y regímenes de visitas; homologació n de acuerdos de liquidació n de


sociedad; há beas Corpus; adquisició n de dominio por usucapió n; Juicios ejecutivos y ejecuciones especiales.

10.- Ministerio Público

El Ministerio Pú blico es el cuerpo de Fiscales, Defensores Oficiales y Asesores de Incapaces que actú a con
legitimació n plena en defensa de los intereses de la sociedad y en resguardo de la vigencia de los valores jurídicos
consagrados en las disposiciones constitucionales y legales.
NOELIA LAZARTE 18

El Ministerio Pú blico se compone por el Ministerio Pú blico Fiscal y el Ministerio Pú blico de la Defensa como á reas
funcionalmente autó nomas. Son miembros del Ministerio Pú blico:

El Procurador y Subprocurador General de la Suprema Corte de Justicia. El Defensor y Subdefensor General de la


Provincia de Buenos Aires. El Fiscal y el Defensor del Tribunal de Casació n. Los Fiscales de Cá mara y los
Defensores Departamentales. Los Adjuntos del Fiscal y del Defensor del Tribunal de Casació n. Los Agentes
Fiscales y los Defensores Oficiales. Asesores de Incapaces. El Cuerpo de Magistrados Suplentes del Ministerio
Pú blico.

Son deberes y atribuciones del Procurador General de la Suprema Corte de Justicia:

Fijar las políticas generales del Ministerio Pú blico Fiscal y controlar su cumplimiento. Recibir denuncias y
promover investigaciones. Evacuar consultas de los miembros del Ministerio Pú blico Fiscal. Promover la acció n
de remoció n contra el juez o integrante del Ministerio Pú blico que haya incurrido en hechos o conductas que den
lugar a su enjuiciamiento.

Son atribuciones y deberes del Defensor Oficial

Fijar las políticas generales del Ministerio Pú blico de la Defensa y controlar su cumplimiento.

Registrar los casos de torturas y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes que se conozcan por
miembros del Ministerio Pú blico de la Defensa en el ejercicio de la funció n, aun cuando lo sean bajo el amparo del
secreto profesional y con las limitaciones que éste impone. Y poner en conocimiento el estado de la situació n que
surja del registro mencionado.

Evacuar consultas de los miembros del Ministerio Pú blico de la Defensa.

Ministerio publico. Ubicado en la secció n siguiente al poder judicial se reduce a una sola norma: Art 120.

Tradicionalmente el ministerio publico se dividido en distintas ramas, diferenciadas en razó n de la naturaleza de


sus funciones asignadas a cada una de ellas, má s allá de la funció n comú n a todas "contralor del cumplimiento de
disposiciones tendientes a asegurar la recta administració n de justicia".

 Ministerio publico fiscal: Actuando en procesos penales, civiles, comerciales, laborales e incluso
contencioso administrativo.

 Ministerio publico pupilar: actuando judicial o extra judicialmente para velar por la persona,
derechos y bienes de los incapaces.

 Defensores oficiales: Actuando en todo tipo de procesos para asesorar y representar a quienes se
encuentran en condició n de pobre y ausente, y en el proceso penal para aquellos que lo requieran con
prescindencia de su condició n personal.

11.- Dependencias judiciales

Registro público de comercio: En cada Departamento Judicial habrá una Secretaría de Registro Pú blico de
Comercio que integrará el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial. Tiene como funciones: tramitar
apremios; llevar un registro de los; certificació n de firmas de toda fotocopia.

Oficina de mandamientos y notificaciones: Tiene a cargo el diligenciamiento de los mandamientos y cédulas


de notificaciones. Se establecerá en las ciudades cabeceras de cada departamento judicial.
NOELIA LAZARTE 19

Receptoría general de expedientes: Funcionará una Direcció n General de Receptorías de Expedientes,


Archivos, Mandamientos y Notificaciones del Poder Judicial. Se organizará en tres á reas: Receptorías de
Expedientes y Registro Pú blico de Juicios Universales; Archivos; Oficinas y Delegaciones de Mandamientos y
Notificaciones.

Funciones:

La Direcció n General de Receptorías de Expedientes y Archivos cumple amplias funciones de organizació n y


control respecto de sus dependencias y todas las actividades que estas desarrollan, con el objetivo de garantizar
la mejor prestació n del servicio de justicia en las á reas de su competencia, en particular:

a) Receptorías de Expedientes: tienen a su cargo el sistema de ingreso, sorteo y adjudicació n de expedientes e


informaciones sumarias a los organismos jurisdiccionales de los fueros laboral, familia y contencioso
administrativo y civil y comercial y, con relació n a este ú ltimo fuero el sorteo de mediadores, llevando su registro
y las modificaciones producidas. Realiza el sorteo Defensores Oficiales para causas de los fueros laboral familia,
civil y comercial y contenciosos administrativa en los casos donde exista má s de una Defensoría en el
Departamento Judicial, de magistrados para el caso de excusació n, recusació n, vacancia, licencias prolongadas o
impedimentos y, en el caso de las Receptorías Descentralizadas, el sorteo de auxiliares de justicia. Asimismo
brinda los informes relativos a constancias obrantes en sus registros que en forma específica autoriza la
normativa.

b) Mesas Receptoras de Escritos: funcionan en algunas cabeceras departamentales, dependen de la Receptoría de


Expedientes departamental y tienen a su cargo la recepció n de presentaciones realizadas por litigantes,
profesionales o auxiliares de justicia destinadas a los distintos organismos jurisdiccionales de los fueros laboral
familia, civil y comercial y contenciosos administrativa del departamento judicial donde la oficina tenga su
asiento.

c) Archivos: recepcionan los legajos de expedientes y libros de sentencias y resoluciones que remitir los
organismos jurisdiccionales departamentales de todos los fueros en estado de archivo y de conformidad con las
exigencias vigentes. Organiza la distribució n del material en la dependencia para su conservació n, consulta,
desarchivo o, en los casos autorizados, proceder a la destrucció n de los expedientes pertinentes. Brinda las
informaciones autorizadas respecto de sus registros, expide las fotocopias del material solicitado por
magistrados.

d) Registro de Juicios Universales: comenzó a funcionar a partir del añ o 1970 y lleva el registro de la iniciació n de
los juicios sucesorios; Quiebras, convocatorias de acreedores y concursos civiles, determinació n de la capacidad
de las personas, internaciones ausencias con presunció n de fallecimiento y declaraciones de muerte (art. 98 C.C.),
evacuando las consultas y expidiendo los informes respectivos.

Ademá s, entre otras de las funciones que cumple la Direcció n General corresponde destacar la instrumentació n y
seguimiento de los procesos de destrucció n de expedientes, el registro de estadísticas, la producció n de informes
respecto de cuestiones de su competencia, la intervenció n en temas de personal de las dependencias, etc. Fuente:
http://www.scba.gov.ar/jurisdiccionales/receptorias/funciones.asp

UNIDAD 4.- EL JUEZ.


NOELIA LAZARTE 20

1.- concepto. Es un ó rgano pú blico que en calidad de tercero imparcial se encarga de dirigir un proceso judicial y
de resolver un conflicto de intereses mediante una sentencia; o constituir, integrar o dar eficacia a una situació n
o relació n jurídica.

Postura activista y garantista: hacia fines del siglo XIX existía una concepció n de juez, en el que solo se limitaba
a escuchar las partes y resolver. El papel del juez era el de un mero á rbitro, porque se consideraba que cualquier
injerencia del juez podría ir en contra de la garantía de las partes; a esta postura del juez en el proceso la
denominamos garantista. Luego con el có digo procesal austriaco, el proceso no solo importaba a las partes sino a
la sociedad; así nace el activismo, se busca la verdad real de los hechos. El juez dirige en forma activa, tiene
facultades para arbitrar, peticionar medios de pruebas, etc.

En nuestro país, el juez tiene un perfil activista. Esto lo vemos reflejado en el art 36 tanto del CPCC de nació n
como en el de provincia. Segú n el cual el juez aun sin requerimiento de parte, podrá por ejemplo:

-evitar la prolongació n del proceso.

-intentar una conciliació n total o parcial del conflicto o incidente personal.

-simplificar o disminuir las cuestiones litigiosas surgidas en el proceso o respecto de la etapa probatoria, etc.

2.- designación y remoción de los jueces en la nación y en provincia.

Designación y remoción, jueces de nación:

A) Corte Suprema de Justicia de la Nación

Es el ú nico ó rgano que esta expresado en la constitució n: Encabeza el poder judicial de la nació n con competencia
en todo el territorio argentino. Con la reforma del 94 se ha producido un trasvasamiento de facultades que antes
estaban encabezadas por la corte a favor de un nuevo ó rgano, el Consejo de la Magistratura. Facultades
reglamentarias respecto a la justicia federal (sanciones disciplinarias), y relativas a la administració n de recursos
econó micos (presupuesto).

Integració n: De los Arts. 59 y 112 CN se infiere que está encabezada por un presidente, resultando evidente su
cará cter colegiado aunque sin determinar el nú mero de sus miembros. La reforma de 1860, al derogar el art. 91
de la Constitució n de 1853 que fijaba que la corte estaba compuesta por nueve jueces y dos fiscales deja librada
esta cuestió n al criterio del congreso. Salvo el breve periodo de 1960/66 (7 miembros) histó ricamente desde su
instalació n en 1963 la corte estuvo integrada por 5 miembros.

En 1990 con la ley 23.774 se ampliaba a nueve miembros y un procurador general, y en 2006 la ley 26.183 bajo
su reducció n de nueve a cinco miembros y un procurador general.

Incompatibilidad: Art. 109 CN, para el presidente de la Nació n.

Requisitos de elegibilidad: Art. 111 CN exige un solo recaudo especifico "Ser abogado de la Nació n con ocho añ os
de ejercicio" y "tener las calidades exigidas para ser senador" Art 55 CN. Y deberá n prestar juramento en manos
del presidente de la Nació n: Art 112 CN.

Designació n: La reforma del 94 mantiene el sistema clá sico de elecció n de los miembros de la Corte a través de la
designació n por parte del Poder Ejecutivo con acuerdo del Senado (Dos tercios de los miembros presentes y en
sesió n pú blica convocada al efecto).

Remoció n: Juicio político. Art 59 y 60 CN.


NOELIA LAZARTE 21

B) Tribunales inferiores.

Integració n: Con respecto a lo que establece el Art 108 CN, Le corresponde al congreso establecer los demá s
tribunales inferiores.

Requisitos de elegibilidad: La Constitució n no establece requisito alguno para ser juez de los tribunales inferiores
y por ende deja librada la cuestió n a la reglamentació n legal, la reforma del 94 solo agrega que deberá tener en
cuenta la idoneidad de los candidatos: Art 99 inc. 4 CN. Esto estará a cargo del Consejo de la Magistratura.

Designació n: El Art 99 inc. 4 CN, Establece que le presidente nombra a los demá s jueces de los tribunales
federales inferiores en base a una propuesta vinculante en terna del Consejo de la Magistratura, con acuerdo del
senado en sesió n pú blica.

Remoció n: El art 114 inc. 5 CN, estable que el Consejo de la Magistratura le corresponde decidir la apertura de
procedimientos de remoció n de magistrados, ordenar la suspensió n y formular la acusació n correspondiente, por
las mismas causales establecidas para el juicio político Art. 53 CN pero removidos por un jurado de
enjuiciamiento.

Órganos introducidos por la reforma del 94.

Una de las reformas má s importantes introducidas por la reforma del 94 fue la introducció n de dos ó rganos: El
Consejo de la Magistratura, y el Jurado de Enjuiciamiento: Pertenecen al Poder Judicial y modifican la elecció n y
remoció n de los jueces; Se crea porque para ese entonces había una crisis en el poder judicial federal en relació n
al nombramiento y remoció n de los jueces.

A) Consejo de la Magistratura.

Este nuevo ó rgano es introducido por la reforma de 1994 en el art 114 CN junto con el jurado de enjuiciamiento
Art 115 CN, inspirado en el derecho continental europeo.

En cuanto a las tareas del nuevo ó rgano, aunque el art 114 empieza reduciéndolas a dos: la selecció n de
magistrados y la administració n de justicia; Tiene otras importantes tareas entre las que se destaca la de
intervenir en el procedimiento de remoció n de los magistrados de los tribunales inferiores.

Su organizació n y funcionamiento definitivos quedan supeditados a la ley reglamentaria y para su sanció n exige
una mayoría calificada: "mayoría absoluta de lo totalidad de los miembros de cada cámara".

Leyes a tener en cuenta:

 24.937/39. fines del 1997

 26.080 Del 22 de febrero de 2006. Integració n del congreso.

 26.855 De mayo del 2013: Algunos artículos de esta ley fueron declarados inconstitucionales por un
fallo de la corte, por esta razó n todo lo referido a la integració n del consejo tenemos que remitirnos a la segunda
ley.

El Consejo de la Magistratura es un ó rgano colectivo y plurisectorial. La Constitució n en el Art 114 solo se limita
a fijar los sectores que lo componen y remite a la ley especial para determinar su nú mero, designació n, duració n,
y remoció n.
NOELIA LAZARTE 22

Art 114: El consejo de la magistratura se integra por representantes "de los órganos políticos resultantes de la
elección popular, de los jueces de todas las instancias" y "por otras personas del ámbito académico científico".

Con respecto al termino "representació n" no necesariamente significa que no podrá n integrarlo ni legisladores ni
funcionarios del poder ejecutivo, ni magistrados ni abogados, sino que esos sectores deben designar a alguien
que actú e en su nombre y representació n.

Ademá s el Art. 114 fija dos pautas:

1. El consejo será integrado "perió dicamente", quedando a discreció n del congreso la duració n de los
mandatos.

2. Se debe procurar el equilibrio entre todos los sectores mencionados.

Integración:

 Ley 24.937/39: 20 consejeros, 9 el estamento político, 5 jueces federales, 4 abogados, y 2


provenientes del á mbito académico y científico.

 26.080: 13 miembros: 7 del estamento político, 3 jueces, 2 abogados, 1 representante del ámbito
académico científico.

 Ley 26.855 de los 13 miembros se aumenta a 19.

Lo que plantea esta ley que con 7 es importante para determinar ciertos casos (7 del estamento político) para
formar quó rum para las sesiones del plenario y adoptar decisiones con mayoría absoluta de miembros presentes.

Requisitos para ser elegidos: Se exigen las mismas condiciones que para ser juez de la corte suprema.

Duración de sus cargos: Por ley 24.937/39 duraban en sus cargos 4 añ os y podían ser reelegidos por un
periodo má s sin intervalos, por lo tanto 8 añ os en el cargo.

Con la ley 26.080 se pueden elegir por cuatro añ os y luego necesitan esperar un periodo intermedio para su
reelecció n.

Remoción: Con las primeras leyes los consejeros podían ser removidos por el propio consejo con las 3/4 partes
de sus miembros. Y las causales eran por mal desempeñ o y comisió n de un delito en el ejercicio de sus funciones.

Con la ley 26.080 se mantiene el mismo procedimiento solamente cuando se refiere a jueces, abogados o
representantes del á mbito científico académico. Con respecto a la remoció n de los miembros del estamento
político, le comunica al ó rgano al cual pertenece y este decide si se remueve o no.

Autoridades: Antes con las primeras leyes, el presidente de la corte es el presidente también del consejo. Con la
ley 26.080 el presidente del consejo es elegido por sus pares, es decir entre ellos eligen un presidente. Dura en
sus funciones un añ o.

Atribuciones:

El art 114 le da al consejo de la magistratura las siguientes atribuciones:

 "Seleccionar mediante concursos pú blicos los postulantes a las magistraturas inferiores". De este te
modo se instrumenta el control previo de idoneidad, que luego deberá tener en cuenta el senado al momento de
NOELIA LAZARTE 23

otorgar o no el respectivo acuerdo. El concurso pú blico deberá reglarse por una ley especial y por los
reglamentos que al efecto dicte el propio consejo.

 Emitir terna vinculante: "Emitir propuestas en ternas vinculantes, para el nombramiento de los
magistrados de los tribunales inferiores". Esta atribució n esta en directa relació n con el art 99 inc. 4 de la
Constitució n. Supone dos aspecto por un lado como se conforma la terna y por otro la obligatoriedad para el
poder ejecutivo. La propuesta debe ser formulada a partir de los concursos pú blicos "de oposició n y
antecedentes"; Si esto no es respetado, la integració n de la terna podrá ser revisada en sede judicial, no obstante
que la ley especial declare que son irrecurribles las decisiones al respecto. El vocablo "vinculante" implica que el
presidente no podrá proponer al senado a quien no integre la terna que le pone en consideració n el Consejo.
Dentro de ella el Presidente elige con total discrecionalidad. De esta manera con la reforma del 94 se le restringe
al Poder Ejecutivo la anterior facultad de elegir con absoluta libertad al candidato a la magistratura.

 Administració n financiera: "Administrar los recursos y ejecutar el presupuesto que la ley asigne a la
administración de justicia". El consejo ejerce la administració n del poder judicial. De esta manera las tareas
administrativas que antes estaban en la cabeza de la corte federal pasan al Consejo.

 Facultad disciplinaria: "Ejercer facultades disciplinarias sobre magistrados". Esta atribució n de


superintendencia se ejerce sobre los magistrados de los tribunales federales y no sobre los demá s funcionarios y
empleados del poder judicial, quienes siguen sujetos a la potestad disciplinaria de la corte y demá s tribunales
inferiores.

 Acusació n: "Decidir la apertura del procedimiento de remoción de magistrados, en su caso ordenar la


suspensión, y formular la acusación correspondiente". Reemplaza la anterior facultad exclusiva de la cámara de
Diputados de acusar ante el Senado en el trá mite de juicio político a los jueces inferiores, luego de reforma del 94
solo reservada para los jueces de la corte suprema. La facultad de acusar se complementa con la de suspender
"en su caso" al magistrado cuestionado, se evita así que un Magistrado acusado por algunas de las causales de
remoció n del art 53 siga ejerciendo la jurisdicció n.

 Potestad reglamentaria: "Dictar los reglamentos relacionados con la organización judicial y todos
aquellos que sean necesarios para asegurar la independencia de los jueces y la eficaz prestación de los servicios de
justicia". El consejo puede dictar reglamentos en las siguientes materias:

1. Administrativas: Lo relativo al personal judicial de todos los tribunales inferiores con excepció n del
perteneciente a la corte suprema en virtud de lo dispuesto en el art 113.

2. Econó micas: Con relació n a su atribució n del art 114 inc 3.

3. Procedimentales: Para complementar con la regulació n de los có digos procesales. Pueden ser
internos del consejo, y de concursos y escuela judicial.

Funcionamiento según ley especial. 26.855

El consejo puede actuar en sesiones plenarias o por intermedio de sus cuatro comisiones: "de selecció n de
magistrados y escuela judicial"; "de acusació n"; "de disciplina" y de "administració n y financiera"; Aunque el
ejercicio final de sus atribuciones se hace en plenario.

Las sesiones plenarias requieren un quó rum de doce sobre veinte de sus miembros presentes, salvo cuando se
requieran mayorías especiales.

B) Jurado de enjuiciamiento.
NOELIA LAZARTE 24

La reforma del 94 también modifico el procedimiento de remoció n de los jueces de tribunales inferiores en tanto
que los de la Corte Suprema continú an sujetos al anterior sistema de juicio político. Para ello el art 115 crea un
nuevo ó rgano especial encargado de la remoció n de aquellos magistrados que han sido acusados por el consejo
de la magistratura.

Es un ó rgano colectivo, plurisectorial e incompleto, ya que la constitució n se limita a fijar los sectores que lo
componen: legisladores, magistrados y abogados de la matricula federal y remite a una ley especial (la misma
que del consejo de la magistratura) determinar su nú mero, designació n, duració n y remoció n.

¿Có mo se compone? Por las primeras leyes eran 9 miembros: Tres jueces, tres legisladores y tres abogados. Con
la ley 26.080 pasan a ser siete miembros: dos jueces, cuatro legisladores, y un abogado.

¿Cuá nto tiempo duran en su cargo? No es un ó rgano permanente, el Consejo lo convoca cada vez que hay un
juicio para destituir un juez federal; No tienen duració n fija en sus cargos.

Causales de enjuiciamiento: El art 115 pá rrafos 1 remite a las causales del juicio político previstas en el art 53;
El art 17 de la ley 26.080 da algunos ejemplos de causales: Desconocimiento inexcusable del derecho,
incumplimiento relativo de la Cn. Y normas legales, aplicació n de sanciones disciplinarias, en el caso de que un
juez tenga varias medidas disciplinarias pueden tomarse como una causal, abandono de sus funciones.

Juicio de remoción: Su tramite no está previsto en la Constitució n, debiendo regularse por la ley especial; Sin
embargo la Constitució n fijo un plazo de caducidad que le pone fin al enjuiciamiento en caso de que
transcurrieren ciento ochenta días contados desde la decisió n de abrir el procedimiento de remoció n sin que
haya sido dictado el fallo; De esta manera se evita una prolongada incertidumbre que fue habitual en los
procedimientos de juicio político desarrollados por el congreso. Los efectos de la caducidad constitucional son:
Archivar las actuaciones y reponer al juez suspendido.

Tramite previsto en la ley especial: El procedimiento es oral y pú blico, con respecto del derecho de defensa del
acusado se le corre traslado al Magistrado acusado por el plazo de 10 días de la acusació n formulada por el
consejo; Podrá ofrecer todos los medios de prueba previsto en el có digo adjetivo; la resolució n del jurado debe
hacerse en un breve lapso. El fallo en audiencia pú blica y fundado en la prueba aportada por las partes, es
irrecurrible; La Corte dispuso que solo es recurrible solamente con el alcance que la corte le dio en el caso
Nicosia de 1993; Solo se puede recurrir cuando hay:

1. Violaciones al debido proceso legal.

2. Es recurrible todo lo que esta reglado, lo que es discrecional de las partes no.

Designación y remoción, jueces de provincia.

Art. 175 Constitució n Provincial: “Los jueces de la Suprema Corte de Justicia, el procurador y el subprocurador
general, serán designados por el Poder Ejecutivo, con acuerdo del Senado, otorgado en sesión pública por mayoría
absoluta de sus miembros.

Los demás jueces integrantes del Ministerio Público serán designados por el Poder Ejecutivo, de una terna
vinculante propuesta por el Consejo de la Magistratura, con acuerdo del Senado otorgado en sesión pública.

Será función indelegable del Consejo de la Magistratura seleccionar los postulantes mediante procedimientos que
garanticen adecuada publicidad y criterios objetivos predeterminados de evaluación. Se privilegiará la solvencia
moral, la idoneidad y el respeto por las instituciones democráticas y los derechos humanos.
NOELIA LAZARTE 25

El Consejo de la Magistratura se compondrá, equilibradamente, con representantes de los poderes Ejecutivo y


Legislativo, de los jueces de las distintas instancias y de la institución que regula la matrícula de los abogados en la
Provincia. El Consejo de la Magistratura se conformará con un mínimo de quince miembros. Con carácter consultivo,
y por departamento judicial, lo integrarán jueces y abogados; así como personalidades académicas especializadas.

La ley determinará sus demás atribuciones, regulará su funcionamiento y la periodicidad de los mandatos”.

La Ley Especial que reglamenta al Consejo de la Magistratura en Provincia es la 11.868.

Ademá s de las funciones y atribuciones enumeradas en el artículo 175 de la Constitució n Provincial, corresponde
al Consejo. Regido en el artículo 22.

1) Dictar su reglamento general.

2) Aprobar los títulos de los consejeros. En caso de advertir irregularidades o vicios en alguno de ellos los
remitirá al ó rgano del que emana con una memoria de las objeciones, quedando librada la resolució n final al
propio Consejo.

3) Designar al Vicepresidente y Presidente del Consejo.

4) Convocar a los consejeros académicos.

5) Dividirse en Salas para la conformació n de los jurados. (Sala examinadoras se dividen en 4 miembros cada una
y después del examen, está la parte de antecedentes.)

6) Designar al Secretario del Consejo, Prosecretario y auxiliares.

7) Convocar a concurso pú blico de idoneidad, antecedentes y oposició n para la provisió n de cargos vacantes.

8) Confeccionar y elevar las ternas al Poder Ejecutivo con cará cter vinculante.

9) Preparar y ejecutar su propio presupuesto de gastos con las partidas que le asigne la Ley de Presupuesto.

10) (Inciso incorporado por Ley 13553) Crear, organizar y dirigir la Escuela Judicial, la que establecerá métodos
teó ricos, prá cticos e interdisciplinarios de preparació n, motivació n y perfeccionamiento para el acceso y el
ejercicio de las funciones judiciales. Deberá contemplar una organizació n descentralizada, con representació n en
cada Departamento Judicial y garantizará la pluralidad académica, doctrinaria y jurisprudencial.

ART. 23° (habla de có mo se pueden postular las personas para participar en las ternas).

Inscripción: Toda persona que, reuniendo las condiciones establecidas en la Constitució n Provincial y en las
Leyes respectivas, se postule para ser designado como juez o miembro del Ministerio Pú blico de cualquiera de las
instancias ordinarias, deberá presentar su solicitud ante el Consejo de la Magistratura. La recepció n de las
postulaciones estará permanentemente abierta y se efectuará con la debida publicidad, en la forma, tiempo y
lugar que determine la reglamentació n.

La nó mina de los inscriptos se dará a publicidad para permitir las impugnaciones que correspondieren.

ART. 25°.-Convocatoria: Cuando se produzca una vacante, el Consejo convocará de inmediato a examen de
oposició n de los postulantes, designando al jurado que recibirá y evaluará las pruebas respectivas por mayoría
absoluta de sus miembros.
NOELIA LAZARTE 26

ART. 26.-Normas aplicables: El examen se hará sobre la base de la reglamentació n que apruebe el Consejo, será
pú blico y podrá n participar en él los postulantes admitidos.

Art. 27°: Salas examinadoras: A los efectos de la evaluació n prevista en el artículo anterior, el Consejo podrá
integrar salas examinadoras formadas por cuatro (4) de sus miembros permanentes, uno por cada estamento, en
la forma que establezca la reglamentació n. Se designará por sorteo a la sala que deba conocer en relació n a la
vacante de que se trate.

ART. 28°: Procedimiento ulterior: Una vez que la Sala examinadora dictamine sobre el desempeñ o de los
concursantes en la prueba escrita, y se hubieren reunido todos los demá s elementos de juicio requeridos, el
Consejo evaluará los antecedentes y la actividad profesional cumplida y entrevistará personalmente a cada uno
de los concursantes con la finalidad de apreciar su idoneidad, solvencia moral, equilibrio, madurez, conocimiento
de la realidad, sentido comú n, coherencia, creatividad, independencia de criterio, imparcialidad, equidad, apego
al trabajo, capacidad de liderazgo, vocació n de servicio, compromiso con el cambio, con los intereses de la
comunidad, el respeto por las Instituciones democrá ticas y los derechos humanos. Durante ese acto el
entrevistado deberá responder a las preguntas que a tal efecto formulen los miembros permanentes o
consultivos del Consejo. De todo lo expuesto se dejará constancia en acta.

Finalizadas las entrevistas, el Consejo podrá disponer alguna diligencia excepcional para mejor proveer, que no
hubiera podido disponer o concretar con anterioridad, que se evacuará dentro de los cinco (5) días.

El Consejo contará con treinta (30) días corridos para emitir decisió n acerca de la integració n de la terna. Para
emitir su terna vinculante será necesario el voto de los dos tercios de los Consejeros Titulares presentes.

Las Asociaciones Civiles sin fines de lucro con inscripció n en la Direcció n Provincial de Personas Jurídicas de la
Provincia de Buenos Aires y cuyo objeto social exclusivo tenga vinculació n con el mejoramiento del servicio de
Justicia, la Asociació n Judicial Bonaerense y los Colegios de Magistrados y Funcionarios, podrá n hacer llegar su
opinió n al Consejo sobre las condiciones de los postulantes.

ART. 29°: Remisión de la terna: Cumplido el procedimiento a que se refieren los artículos anteriores, el Consejo
elevará , en un plazo de cinco (5) días al Poder Ejecutivo, la terna vinculante de postulantes, por orden alfabético,
con los antecedentes respectivos.

De la propuesta del Consejo no se admitirá recurso alguno.

Importante: en la provincia de buenos aires, los jueces de la SCBA son removidos por juicio político, mientras que
los inferiores, son removidos por un jury de enjuiciamiento. La denuncia del funcionario se realiza en la suprema
corte, en la cá mara de enjuiciamiento, esta puede desestimarlo o iniciar el proceso de remoció n. El jury está
formado por el presidente de la SCBA, cinco abogados conjueces y hasta 5 abogados legisladores.

Remoción jueces de provincia: art. 182 y ley especial 13.661.

ART. 73 CN BS.AS.- Es de competencia exclusiva de la Cámara de Diputados:

1. Prestar su acuerdo al Poder Ejecutivo para el nombramiento de los miembros del Consejo General de Cultura y
Educació n;

2. Acusar ante el Senado al gobernador de la Provincia y sus ministros, al vicegobernador, a los miembros de la
Suprema Corte de Justicia, al procurador y subprocurador general de la misma, y al fiscal de Estado por delitos en
el desempeñ o de sus funciones o falta de cumplimiento a los deberes de su cargo.
NOELIA LAZARTE 27

Para usar de esta atribució n, deberá proceder una sanció n de la Cámara por dos tercios de votos de sus
miembros presentes, que declare que hay lugar a formació n de causa.

Cualquier habitante de la Provincia tiene acció n para denunciar ante la Cámara de Diputados el delito o falta, a
efectos de que se promueva la acusació n. La ley determinará el procedimiento de estos juicios.

ART. 182 CN BS.AS. Los jueces de las Cámaras de Apelació n y de primera instancia y los miembros del Ministerio
Pú blico pueden ser denunciados o acusados por cualquiera del pueblo, por delitos o faltas cometidas en el
desempeñ o de sus funciones, ante un jurado de once miembros que podrá funcionar con nú mero no inferior a
seis, integrado por el presidente de la Suprema Corte de Justicia que lo presidirá, cinco abogados inscriptos en la
matrícula que reú nan las condiciones para ser miembro de dicho tribunal, y hasta cinco legisladores abogados.
Los legisladores y abogados que deban integrar el jurado se designará n por sorteo, en acto pú blico, en cada caso;
los legisladores por el presidente del Senado y los abogados por la Suprema Corte de Justicia, a cuyo cargo estará
la confecció n de la lista de todos los abogados que reú nan las condiciones para ser conjueces. La ley determinará
la forma de reemplazar a los abogados no legisladores en caso de vacante.

Causales de remoción (establecidas en los arts. 20 y 21 de la ley 13.361):

ART. 20.- (Texto segú n Ley 14441) Los magistrados y funcionarios enumerados en el artículo 17 podrá n ser
denunciados por la comisió n de hechos cometidos con motivo o en ejercicio de sus funciones que pudieren ser
calificados como delitos dolosos por la Ley vigente.

Igualmente podrá denunciá rselos por la comisió n de las faltas indicadas en el artículo 21.

ART. 21.- (Texto segú n Ley 14441) Las faltas a que se refiere el artículo 20 son las siguientes:

a) No reunir las condiciones que la Constitució n y la Leyes determinan para el ejercicio del cargo.

b) No tener domicilio real en el partido en que ejerza sus funciones, en la medida en que esta circunstancia
produzca real perjuicio a la administració n de justicia.

c) Gozar de beneficio jubilatorio o de pensió n nacional, provincial o municipal o haberse acogido a estos


beneficios.

d) Incompetencia o negligencia demostrada en el ejercicio de sus funciones.

e) El incumplimiento de los deberes inherentes al cargo.

f) La realizació n de hechos o desarrollo de actividades incompatibles con la dignidad y austeridad que el cargo
judicial impone.

g) El vicio del juego por dinero caracterizado por la frecuencia.

h) Dejar transcurrir en exceso los términos legales, sin pronunciarse en las cuestiones sometidas a su decisió n o
dictamen.

i) Comisió n de graves irregularidades en los procedimientos a su cargo o en los que hubiere intervenido.

j) La intervenció n activa en política.

k) Para los funcionarios judiciales, ejercer la abogacía o la procuració n, aunque sea en otra jurisdicció n, salvo en
causa propia, de su có nyuge, o de los descendientes y ascendientes.
NOELIA LAZARTE 28

l) Aceptar el cargo de á rbitro arbitrador.

ll) Contraer obligaciones civiles con los litigantes o profesionales que actú en en su Juzgado o Tribunal.

m) Ejercer el comercio o industria.

n) Desempeñ ar otra funció n pú blica no encomendada por ley, excepto la docencia.

ñ ) La realizació n de actos de parcialidad manifiesta.

o) Estar concursado civilmente por causa imputable al funcionario.

p) Negarse injustificadamente a que le sean practicados controles médicos que determinen su capacidad laboral

q) Toda otra acció n u omisió n que implique defecció n de la buena conducta que exige la Constitució n para el
desempeñ o de la magistratura.

r) Las que se determinen en otras leyes.

Los artículos 20 y 21 de la ley 13.661 establecen las faltas en las que pueden incurrir los jueces. A tal respecto,
un ejemplo de ellas se encuentra en el art. 167 y 168 del Có digo de Procedimiento civil y comercial de la
provincia de Buenos Aires.

ART. 167°: Retardo de Justicia. Los jueces o tribunales que por recargo de tareas u otras razones atendibles, no
pudieren pronunciar las sentencias definitivas, dentro de los plazos fijados por este Có digo, deberá n hacerlo
saber a la Suprema Corte con anticipació n de 10 días al vencimiento de aquéllos. El superior, si considerare
admisible la causa invocada, señ alará el plazo en que la sentencia debe dictarse por el mismo juez o tribunal o
por otros del mismo fuero cuando circunstancias excepcionales así lo aconsejaren.

El juez o tribunal que no remitiere oportunamente la comunicació n a que se refiere el pá rrafo anterior y no
sentenciare dentro del plazo legal, o que habiéndolo efectuado no pronunciare el fallo dentro del plazo que se le
hubiese fijado, perderá automá ticamente la jurisdicció n para entender en el juicio y deberá remitir el expediente
al Superior para que éste determine el juez o tribunal que deba intervenir.

Será nula la sentencia que se dicte con posterioridad.

En los Tribunales Colegiados, el juez que hubiere incurrido en pérdida de jurisdicció n deberá pasar de inmediato
el proceso a quien le sigue en orden de sorteo, en cuyo caso aquéllos se integrará n de conformidad con lo
dispuesto en la ley orgá nica del Poder Judicial.

Las disposiciones de este artículo só lo afectan la jurisdicció n del juez titular y no la que ejerza interinamente por
sustitució n, en caso de vacancia o licencia del titular.

Al hacerse cargo del juzgado, luego de un período de vacancia, aquél podrá solicitar una ampliació n general de los
plazos, proporcionada al nú mero de causas pendientes. 

ART. 168°: Causal de mal desempeñ o. La pérdida de jurisdicció n en que incurrieren los jueces de primera
instancia o de cámara, conforme a lo establecido en el artículo anterior, si se produjere tres veces dentro del añ o
calendario los someterá al proceso de la ley de enjuiciamiento.

El juez puede cometer faltas o delitos en su funció n, como el abuso de autoridad, así como fuera de su funció n. Lo
que hace el jurado de enjuiciamiento en un delito es suspenderlo, llamarlo a indagatoria, y lo pone a disposició n
NOELIA LAZARTE 29

de la justicia penal, es decir, no se abre un proceso, como si ocurre en el caso de una falta, en donde se abre un
procedimiento a través del jurado de enjuiciamiento.

Secretaria de enjuiciamiento: La Secretaría Permanente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y


Funcionarios funciona en la ciudad de La Plata. Se encuentra compuesta por un secretario y cinco (5)
Prosecretarios designados por el voto de la mayoría de la Cámara de Senadores de fuera de su seno.
Para ser designado Secretario se deberá reunir los requisitos exigidos para ser Juez de Cá mara

Es la oficina permanente, donde cualquiera puede denunciar. En este sentido, el art. 23 de la ley, indica que
pueden denunciar o acusar ante el Jurado: El Procurador General de la Corte, Los Colegios de Abogados, la
Comisión Bicameral creada por la presente ley, el Ministro de la Corte Suprema de Justicia designado por ese
Tribunal y cualquier otra persona física o jurídica que tuviere conocimiento de la existencia de un hecho que pueda
configurar alguna de las causales de remoción previstas por esta Ley.

Para presentar la denuncia ante ella se debe recurrir con un abogado patrocinante. En caso de querer hacer una
denuncia sin abogado patrocinaste, se puede acudir a la comisió n bicameral quien asume el rol de acusador y
luego lo eleva a la secretaria. Esto es así porque hay varios ó rganos acusadores, también se puede acudir a la
Suprema Corte.

Funciones y deberes: Las funciones y deberes de la Secretaría Permanente del Jurado de Enjuiciamiento de
Magistrados y Funcionarios se encuentran regulados en el art. 9 de la ley.

a) Solicitar al Presidente del Senado y al Presidente de la Suprema Corte de Justicia que realicen el sorteo de los
miembros que integrará n el Jurado de Enjuiciamiento.

b) Asentar las denuncias y acusaciones en el libro de “Registro de denuncias contra Magistrados y/o
Funcionarios del Poder Judicial”, dejando constancia de los datos del denunciante, del denunciado y menció n de
la prueba documental acompañ ada.

c) Deberá formar expediente, asignarle un nú mero que lo identifique y caratularlo con el apellido y nombre de los
Magistrados y Funcionarios acusados y los cargos que ocupan.

d) Efectuar las notificaciones a cargo del Jurado previstas en la presente ley.

e) Desempeñ arse como Actuario durante todo el trá mite del proceso.

f) Velar por la custodia de las actuaciones durante todo el trá mite del proceso.

g) Responder los pedidos de informe emitidos por el H. Senado, la H. Cá mara de Diputados, la Comisió n
Bicameral que se crea por la presente Ley o por el Consejo de la Magistratura.

h) Dar fe de todas las resoluciones emitidas por el Jurado o su Presidente.

I) Instrumentar la publicació n de todos los fallos del Jurado de Enjuiciamiento.

j) Rendir un informe cuatrimestral circunstanciado de las denuncias y actuaciones que se realicen a instancias de
éstas, a la Comisió n Bicameral que se crea por la presente ley y a las Presidencias de las Cámaras de Diputados y
Senadores.

Funciones del jurado de enjuiciamiento: Las funciones del jurado de enjuiciamiento se encuentran reguladas
en el art. 18 de la ley 13661.El Jurado tiene las mismas facultades que las leyes otorgan a los jueces.
NOELIA LAZARTE 30

a) Suspender en el ejercicio de su cargo al acusado, mientras dure el juicio, durante o al final del proceso. Ello
también genera costas y gastos. Ante esa falta se aplica un embargo de los haberes del juez, del 40 %, para gastos
y costas, y demá s.

b) Ordenar las medidas que considere pertinentes a fin de evaluar la verosimilitud de los hechos llevados a su
conocimiento

c) Destituir al acusado cuando se declare su responsabilidad por delitos o por faltas previstas por esta Ley.

d) Imponer las costas al acusado en caso de destitució n.

e) Imponer las costas al acusador cuando hubiese procedido infundadamente, siendo a cargo del Estado cuando
el acusador condenado fuese el Ministro de la Suprema Corte designado para denunciar y acusar, el Procurador
de la Suprema Corte y la Comisió n Bicameral creada por la presente Ley.

f) Remitir el proceso al Juez competente en caso de haberse declarado la responsabilidad penal de conformidad a
lo previsto en el artículo 185° de la Constitució n Provincial.

g) Remitir las actuaciones a la Suprema Corte de Justicia o a la Procuració n cuando encontrare hechos o
circunstancias que no resultando de la jurisdicció n del Jurado de Enjuiciamiento pudieren habilitar su
intervenció n por superintendencia.

El Jurado de Enjuiciamiento no tiene competencia para entender en la acció n civil por dañ os y perjuicios que
autoriza el artículo 57 de la Constitució n. La misma deberá deducirse ante los Jueces Ordinarios,
independientemente del proceso que regula esta Ley.

Denuncia: ARTICULO 25.- Las denuncias deberá n formalizarse ante la Mesa de Entradas de la Secretaría
Permanente del Jurado de Enjuiciamiento.

La Secretaría Permanente, al momento de la recepció n, procederá a:

a)  Solicitar al Presidente del Senado y al Presidente de la Suprema Corte de Justicia que realicen el sorteo de los
miembros que integrará n el Jurado de Enjuiciamiento al que le corresponderá intervenir. Al mismo tiempo
designará al o los integrantes del Cuerpo de Instructores del Jurado de Enjuiciamiento que intervendrá n en el
caso.

b)  Asentar la denuncia en el libro “Registro de denuncias de pedidos de enjuiciamiento a magistrados y/o


funcionarios de la Provincia de Buenos Aires”, dejando constancia de los datos del denunciante, del denunciado,
menció n de la prueba documental acompañ ada y los datos del sorteo mencionado en el apartado precedente.

c) Formar expediente, asignarle un nú mero que lo identifique y caratularlo con el apellido y nombre de los
magistrados y/o funcionarios denunciados y el/los cargo/s que ocupan.

d) Dejar constancia de las conexidades subjetivas y objetivas que hubiese, procediéndose en su caso a la
acumulació n de los expedientes.

e) Notificar al denunciado de la existencia de las actuaciones.

f) (Texto segú n Ley 14088) Notificar con copia de la denuncia recepcionada a la Procuració n General de la
Suprema Corte de Justicia o a la Suprema Corte de Justicia, segú n corresponda, requiriendo la remisió n de copia
certificada del legajo a la Secretaría del Jurado de Enjuiciamiento
NOELIA LAZARTE 31

g) Notificar con copia de la denuncia recepcionada contra integrantes del Tribunal de Cuentas, al Poder Ejecutivo
Provincial y al Tribunal de Cuentas para la registració n en el legajo personal del funcionario y la remisió n de
copia certificada del legajo a la Secretaria del Jurado de Enjuiciamiento.

El veredicto: Art. 44 Inmediatamente después de producidos los alegatos, el Presidente citará al jurado a sesió n
reservada a celebrarse dentro de cinco (5) días para dictar el veredicto.

3.- deberes del juez. Es deber primario y fundamental de los jueces el de administrar justicia cada vez que tal
actividad le sea requerida en un caso concreto.

El CPCC de la provincia impone determinados deberes en su Art. 34.

1°) Asistir a las audiencias de prueba, bajo pena de nulidad, cuando cualquiera de las partes lo pidiere con
anticipación no menor de dos días a su celebración, y realizar personalmente las demás diligencias que este Código
u otras leyes ponen a su cargo, con excepción de aquellas en las que la delegación estuviera autorizada.

2°) Decidir las causas, en lo posible, de acuerdo con el orden en que hayan quedado en estado, salvo las preferencias
a los negocios urgentes y que por derecho deban tenerla.

3°) Dictar las resoluciones con sujeción a los siguientes plazos (solo se cuentan los días habiles):

a) Las providencias simples, dentro de los 3 días de presentadas las peticiones por las partes o del vencimiento del
plazo conforme a lo prescripto en el artículo 36°, inciso 1, e inmediatamente, si debieran ser dictadas en una
audiencia o revistieran carácter urgente.

b) Las sentencias interlocutorias, salvo disposición en contrario, dentro de los 10   días ó 15 días de quedar el
expediente a despacho, según se trate de juez unipersonal o de tribunal colegiado.

c) Las sentencias definitivas, salvo disposición en contrario, dentro de los 40 ó 60 días, según se trate de juez
unipersonal o de tribunal colegiado. El plazo se computará, en el primer caso, desde que el llamamiento de autos
para sentencia quede firme, y en el segundo, desde la fecha del sorteo del expediente.

*las sentencias definitivas son la que ponen fin al proceso.

*Las sentencias de providencias simples son aquellas que tienden al desarrollo del proceso. Este tipo de
resolució n no define la resolució n de fondo, sino que responde a lo que las partes van pidiendo.

*Las sentencias interlocutorias resuelven cuestiones incidentales, es decir, conflictos que surgen dentro del
proceso, pero no ponen fin a la cuestió n de fondo, es decir, que no define si tiene razó n el actor en su demanda,
entre otras. Ejemplo: el beneficio de litigar sin gastos, las excepciones previas.

Un ó rgano unipersonal es un juzgado. Por ejemplo, en los juzgados civiles y comerciales tienen obligació n de
dictar la sentencia interlocutoria en el plazo de 10 días.

Un ó rgano colegiado son tres jueces, como por ejemplo el tribunal laboral. Tienen la obligació n de dictar la
sentencia interlocutoria en el plazo de 15 días. En este tipo de ó rganos primero se sortea quien va a decidir
primero, y luego se pasa el expediente a la segunda, que puede adherir en todo a la primera o puede adherir en
parte o dar otra resolució n, y luego el tercero es el que va a desempatar.

4°) Fundar toda sentencia definitiva o interlocutoria, bajo pena de nulidad, respetando la jerarquía de las normas
vigentes y el principio de congruencia.
NOELIA LAZARTE 32

EL DEBER DE MOTIVAR O FUNDAR SUS DECISIONES, es una garantía contra la arbitrariedad y tiene el fin de
asegurar el debido control sobre la actividad judicial que la ley impone a los jueces y documentar que las
sentencias sean derivació n razonada del derecho vigente y no producto de la voluntad individual del juez.

De los tres tipos de sentencias mencionadas anteriormente, salvo las providencias simples que no necesitan estar
fundadas, las otras tienen que estar fundamentadas por el juez, es decir, justificar lo que decide (porque le da
razó n al actor, porque rechaza la demanda, etc).

5°) Dirigir el procedimiento, debiendo, dentro de los límites expresamente establecidos en este Código:

a) Concentrar, en lo posible, en un mismo acto o audiencia todas las diligencias que sea menester realizar.

b) Señalar, antes de dar trámite a cualquier petición, los defectos u omisiones de que adolezca, ordenando que se
subsanen dentro del plazo que fije, y disponer de oficio toda diligencia que fuere necesaria para evitar nulidades.

c) Mantener la igualdad de las partes en el proceso.

d) Prevenir y sancionar todo acto contrario al deber de lealtad, probidad y buena fe.

e) Vigilar para que en la tramitación de la causa se procure la mayor economía procesal

El juez tiene la obligació n de dirigir el proceso, aquí se concentran varios principios procesales:

En el inc. A se hace referencia al principio de concentración

El inc. B refiere al principio de saneamiento: Si el juez advierte algú n error, por ejemplo, un nombre en algú n
escrito, algú n error que sea subsanable, es decir, que no afecta a ninguna de las partes, lo puede solucionar a
través del dictado de la resolució n judicial.

El inc. C al principio de igualdad; Inc. E al Principio de economía.

6) Declarar, en oportunidad de dictar las sentencias definitivas, la temeridad o malicia en que hubieren incurrido los
litigantes o profesionales intervinientes.

Facultades disciplinarias: las encontramos en el art. 35 del CPCC de provincia. La ley acuerda a los jueces para
mantener el decoro y buen orden de los juicios:

-mandar que se testee toda frase injuriosa o redactada en términos indecorosos y ofensivos, salvo que alguna de
las partes o tercero interesado solicite que no se lo haga.

-excluir de las audiencias a quienes perturben indebidamente su curso.

-aplicar las correcciones disciplinarias autorizadas por el có digo.

Facultades ordenatorias e instructoras: El Art. 36 del CPCC provincial confiere a los jueces diversas
atribuciones ordenatorias e instructorias.

Las potestades ordenatorias, son aquellas que tienden al mero desarrollo de la causa, hacen que la causa
continú e. Entre estas potestades figuran las de:

-tomar medidas tendientes a evitar la paralización del proceso. A tal efecto, vencido un plazo, se haya ejercido o no
la facultad que corresponda, se pasará a la etapa siguiente en el desarrollo procesal, disponiendo de oficio las
medidas necesarias.
NOELIA LAZARTE 33

-impulsar de oficio el tramite, cuando existan fondos inactivos de menores o incapaces, a fin de que los
representantes legales de éstos o, en su caso, el asesor de menores, efectúen las propuestas que estimen más
convenientes en interés del menor o incapaz.

-corregir los errores materiales, aclarar conceptos oscuros, o suplir cualquier omisión de la sentencia acerca de las
pretensiones discutidas en el litigio, siempre que la enmienda, aclaración o agregado no altere lo sustancial de la
decisión.

Las facultades instructoras está n relacionadas con la prueba y el esclarecimiento del juicio. Dentro de las mismas
se encuentran las de:

-ordenar las diligencias necesarias para esclarecer la verdad de los hechos controvertidos, respetando el derecho de
defensa de las partes.

-disponer, en cualquier momento, la comparencia personal de las partes para requerir las explicaciones que estimen
necesarias al objeto del pleito. La mera proposición de fórmulas conciliatorias no importará prejuzgamiento.

-decidir en cualquier estado de la causa de la comparencia de testigos, peritos y consultores técnicos, para
interrogarlos acerca de lo que creyeren necesario.

-mandar, con las formalidades prescriptas en este Código, que se agreguen documentos existentes en poder de las
partes o terceros en los términos de los artículos 385 y 387.

Sanciones conminatorias: Se encuentran reguladas en el art. 37 del Có digo Procesal de la Provincia.

Art. 37°: Sanciones conminatorias. Los jueces y tribunales podrán imponer sanciones pecuniarias compulsivas y
progresivas tendientes a que las partes cumplan sus mandatos, cuyo importe será a favor del litigante perjudicado
por el incumplimiento.

Las condenas se graduarán en proporción al caudal económico de quien deba satisfacerlas y podrán ser dejadas sin
efecto, o ser objeto de reajuste, si aquél desiste de su resistencia y justifica total o parcialmente su proceder.

Son sanciones de tipo pecuniario, es decir, econó micas, que se establecen en forma progresiva, es decir, que van
aumentando a medida que pasa el tiempo, y que ese importe va a ser a favor de la parte perjudicada. Son
subsidiarias, solo pueden aplicarse cuando no hay otra forma que hacer que la parte cumpla con su mandato

Estas pueden ser establecidas por los jueces en funció n del caudal econó mico de la persona que tiene que pagar.

Su finalidad es que las partes cumplan sus mandatos.

Las diferencias con las facultades disciplinarias es su finalidad, ya que en el primero es el buen orden y decoro en
el proceso, y la finalidad de este tipo de sanciones es que las partes cumplan con sus mandatos.

Declaración de temeridad y malicia. Segú n el art. 34 inc. 6 estas se declaran cuando se dicta la sentencia
definitiva. Es decir que el juez va a resolver la cuestió n de fondo, va a hacer lugar a la demanda rechazar la
demanda en todo o en parte, y en el caso de que considere que haya temeridad o malicia también lo va a resolver
y establecer en la sentencia definitiva en un punto determinado.

Puede incurrir en temeridad o malicia las partes o los abogados o ambos. Aquí se estable una multa para la parte
o el abogado que incurra en temeridad o malicia, o a ambos.
NOELIA LAZARTE 34

La temeridad es cuando una de las partes obra o actú a en el proceso a sabiendas de que no tiene razó n, es decir,
resulta evidente que no tiene razó n.

La malicia se configura cuando obstaculizo constantemente el curso del proceso. Por ejemplo, hay determinadas
cuestiones por las que el proceso resulta demasiado largo. Cuando el demandado, por ejemplo, sabe que va a
perder, incurre en malicia, para prolongar el proceso, como impugnar las pericias, pedir prueba innecesaria, etc.

SI el actor demuestra que el demandado incurre en malicia y el juez lo acepta, a este ú ltimo se le va a imponer
una multa al momento de dictar la sentencia definitiva. Por lo tanto, no solo deberá pagar el capital del juicio por
haber perdió sino también una multa impuesta por la declaració n de temeridad y malicia

La multa está regulada en el art. 45.

Art. 45°: (Texto según Ley 14365) Temeridad y Malicia. Cuando se declarase maliciosa o temeraria la conducta
asumida en el pleito por quien lo perdiere total o parcialmente, y no fuese aplicable el artículo 4° del Decreto-Ley
4777/63, el juez podrá imponer una multa a la parte vencida o a su letrado patrocinante o a ambos conjuntamente,
según las circunstancias del caso. Su importe se fijará entre el tres (3) y el diez (10) por ciento del valor del juicio, o
entre un valor equivalente de diez (10) Jus y setecientos cincuenta (750) Jus si no hubiere monto determinado, y
será a favor de la otra parte.

La finalidad de las declaraciones de temeridad y malicia es mantener la buena fe de los abogados y litigantes al
momento de estar en un proceso. Por lo tanto, se involucran a los principios de honestidad, lealtad y buena fe.

4.- recusación: Es el acto procesal mediante el cual, los litigantes se pueden valer para excluir al juez del
conocimiento de la causa, en el supuesto de que las relaciones o actitudes de aquel con alguna de las partes o con
la materia del proceso sean susceptibles de poner en duda la imparcialidad de sus decisiones.

La ley admite dos tipos de recusació n, con causa, con el cargo de indicar y probar la causa o motivo, y sin causa,
sin necesidad de indicar el motivo de la imparcialidad del juez.

Recusación sin expresión de causa: el Art. 14 del CPCC de provincia, dispone:

Recusación sin expresión de causa. Los jueces de primera instancia podrán ser recusados sin expresión de causa. El
actor podrá ejercer esta facultad al entablar la demanda o en su primera presentación; el demandado, en su
primera presentación, antes o al tiempo de contestarla, o de oponer excepciones en el juicio ejecutivo, o de
comparecer a la audiencia señalada como primer acto procesal. Si el demandado no cumpliere esos actos, no podrá
ejercer en adelante la facultad que confiere este artículo.

Los jueces de la Suprema Corte de Justicia y de las Cámaras de Apelación no podrán ser recusados sin expresión de
causa.

Este artículo va a hablar contra quien procede la recusació n sin causa: ú nicamente contra los jueces de primera
instancia (cámara y suprema corte NO). Y solamente durante juicios ordinarios y procesos ejecutivos.

Puede ser que en algunos casos, pese a mediar una causa legal de recusació n, la parte decida recusar a los jueces
sin expresar causa alguna para ello, ya que la prueba de los hechos pertinentes resulta dificultosa o imposible.

Límites de recusar sin causa

Art. 15°: Límites. La facultad de recusar sin expresión de causa podrá usarse una vez en cada caso. Cuando sean
varios los actores o los demandados, sólo uno de ellos podrá ejercerla.
NOELIA LAZARTE 35

Consecuencias

Art. 16°: Consecuencias. Deducida la recusación sin expresión de causa, el juez recusado se inhibirá pasando las
actuaciones, dentro de las 24 horas, al que le sigue en el orden del turno, sin que por ello se suspendan el trámite, los
plazos, ni el cumplimiento de las diligencias ya ordenadas.

Recusación con causa:

Art. 17°: Recusación con expresión de causa. Será n causas legales de recusació n:

1°) El parentesco por consanguinidad dentro del cuarto grado y segundo de afinidad con alguna de las partes, sus
mandatarios o letrados.

2°) Tener el juez o sus consanguíneos o afines dentro del grado expresado en el inciso anterior, interés en el pleito o
en otro semejante, o sociedad o comunidad con algunos de los litigantes, procuradores o abogados, salvo que la
sociedad fuese anónima.

3°) Tener el juez pleito pendiente con el recusante.

4°) Ser el juez acreedor, deudor o fiador de alguna de las partes, con excepción de los bancos oficiales.

5º) Ser o haber sido el juez denunciador o acusador del recusante ante los tribunales, o denunciado o acusado ante
los mismos tribunales, con anterioridad a la iniciación del pleito.

6) Ser o haber sido el juez denunciado por el recusante en los términos de la ley de enjuiciamiento de magistrados,
siempre que la Suprema Corte hubiere dispuesto dar curso a la denuncia.

7°) Haber sido el juez defensor de alguno de los litigantes o emitido opinión o dictamen o dado recomendaciones
acerca del pleito, antes o después de comenzado.

8°) Haber recibido el juez beneficios de importancia de alguna de las partes.

9°) Tener el juez con alguno de los litigantes amistad que se manifieste con gran familiaridad o frecuencia de trato.

10°) Tener contra el recusante enemistad, odio o resentimiento, que se manifieste por hechos conocidos. En ningún
caso procederá la recusación por ataques u ofensas inferidas al juez después que hubiese comenzado a conocer del
asunto.

Art. 18°: Oportunidad. La recusación deberá ser deducida por cualquiera de las partes en las oportunidades
previstas en el artículo 14°. Si la causal fuere sobreviniente, sólo podrá hacerse valer dentro del quinto día de haber
llegado a conocimiento del recusante y antes de quedar el expediente en estado de sentencia.

Tramite del incidente de recusación: el trá mite de recusació n con causa, está regulado en los artículos 20 al 29
del CPCC de provincia.

Art. 20°: Forma de deducirla. La recusació n se deducirá ante el juez recusado y ante la Suprema Corte o Cámara
de Apelaciones, cuando lo fuese de uno de sus miembros. En el escrito correspondiente, se expresará n las causas
de la recusació n, y se propondrá y acompañ ará , en su caso, toda la prueba de que el recusante intentare valerse.

Art. 21°: Rechazo "in limine". Si en el escrito mencionado en el artículo anterior no se alegase concretamente
alguna de las causas contenidas en el artículo 17°, o si se presentase fuera de las oportunidades previstas en los
artículos 14° y 18°, la recusació n será desechada, sin darle curso, por el tribunal competente para conocer de ella.
NOELIA LAZARTE 36

Art. 22°: Informe del magistrado recusado. Deducida la recusació n en tiempo y con causa legal, si el recusado
fuese un juez de la Suprema Corte o Cá mara, se le comunicará aquélla, a fin de que informe sobre las causas
alegadas.

Art. 23°: Consecuencias del contenido del informe. Si el recusado reconociese los hechos, se le tendrá por
separado de la causa. Si los negase, con lo que exponga se formará incidente que tramitará por expediente
separado.

Art. 24°: Apertura a prueba. La Suprema Corte o Cámara de Apelaciones, integradas al efecto si procediere,
recibirá n el incidente a prueba por diez días. Cada parte no podrá ofrecer má s de tres testigos.

Art. 25°: Resolució n. Vencido el plazo de prueba y agregadas las producidas, se dará vista al juez recusado y se
resolverá el incidente dentro de 5 días.

Art. 26°: Informe de los jueces de primera instancia. Cuando el recusado fuere un juez de primera instancia,
remitirá a la Cá mara de Apelaciones, dentro de los 5 días, el escrito de recusació n con un informe sobre las
causas alegadas, y pasará el expediente al juez que sigue en el orden del turno para que continú e su
substanciació n. Igual procedimiento se observará en caso de nuevas recusaciones.

Art. 27°: Trá mite de la recusació n de los jueces de primera instancia. Pasados los antecedentes, si la recusació n se
hubiese deducido en tiempo y con causa legal, la Cá mara de Apelaciones, siempre que del informe elevado por el
juez resultare la exactitud de los hechos, lo tendrá por separado de la causa. Si los negare, la Cámara podrá
recibir el incidente a prueba, y se observará el procedimiento establecido en los artículos 24° y 25°.

Art. 28°: Efectos. Si la recusació n fuese desechada, se hará saber la resolució n al juez subrogante a fin de que
devuelva los autos al juez recusado. Si fuese admitida, el expediente quedará radicado ante el juez subrogante
con noticia al juez recusado, aun cuando con posterioridad desaparecieren las causas que la originaron.
Cuando el recusado fuese uno de los jueces de la Suprema Corte o de las Cámaras de Apelaciones, seguirá n
conociendo en la causa él o los integrantes o sustitutos legales que hubiesen resuelto el incidente de recusació n.

Art. 29°: (Texto segú n Ley 14.365) RECUSACION MALICIOSA. Desestimada una recusació n con causa, se aplicará n
las costas y una multa de un valor equivalente de hasta quince (15) jus por cada recusació n, si ésta fuere
calificada maliciosa por la resolució n desestimatoria.

Excusación: es el medio que tiene el JUEZ para apartarse de la causa si entiende que no podría cumplir con la
condició n de ser imparcial en la toma de decisiones. Al ser una obligació n para el juez, si existiere un motivo por
el cual deba excusarse pero no lo hace, esto constituye una causal de remoció n.

Art. 30°: Excusació n (CAUSALES). Todo juez que se hallare comprendido en alguna de las causas de recusació n
mencionadas en el artículo 17° deberá excusarse. Asimismo podrá hacerlo cuando existan otras causas que le
impongan abstenerse de conocer en el juicio, fundadas en motivos graves de decoro o delicadeza.

No será nunca motivo de excusació n el parentesco con otros funcionarios que intervengan en cumplimiento de
sus deberes.

Art. 31°: Oposició n y efectos. Las partes no podrá n oponerse a la excusació n ni dispensar las causales invocadas.
Si el juez que sigue en el orden del turno entendiese que la excusació n no procede, se formará incidente que será
remitido sin má s trá mite al tribunal de alzada, sin que por ello se paralice la sustanciació n de la causa.

Aceptada la excusació n el expediente quedará radicado en el juzgado que corresponda, aun cuando con
posterioridad desaparecieren las causas que la originaron.
NOELIA LAZARTE 37

5.- funcionarios judiciales: secretarios.

El adecuado desarrollo del proceso requiere la actividad de un conjunto de personas que colaboran con los jueces
y tribunales en la funció n de administrar justicia. En el orden nacional, tales auxiliares se dividen en funcionarios
y empleados:

-funcionarios: son los secretarios de primera y segunda instancia y a los demá s empleados de los tribunales
nacionales que perciben igual o mayor sueldo.

-empleados: el resto del personal.

El nombramiento y remoció n de los funcionarios y empleados que dependan de la justicia nacional se realiza por
la autoridad judicial establecida por los reglamentos de la Corte.

Para ser funcionario de la justicia nacional se requiere ser argentino mayor de edad (los secretarios y
prosecretarios de primera y segunda instancia deben ser ademá s, abogados graduados de la universidad nacional
o privada reconocida) y, para ser empleado, argentino mayor de dieciocho añ os debiendo darse preferencia,
respecto de estos ú ltimos, a quienes hayan completado estudio secundarios.

Los funcionarios y empleados no pueden ser removidos sino por causa de ineptitud o mala conducta previo
sumario administrativo con audiencia del interesado.

Secretarios: el secretario es el má s importante de los auxiliares del juez o tribunal, con quien colabora en los
actos de transmisió n y documentació n del proceso, ocupá ndose, fundamentalmente, de todo los relativo a la
ordenació n, formació n de material y custodia de los expedientes judiciales, y ejerciendo, ademá s, ciertas
funciones decisorias.

para ser secretario de primera instancia se requiere ser ciudadano argentino, mayor de edad y abogado graduado
en universidad nacional o privada reconocida, no pudiendo designarse en tal cará cter el pariente del juez dentro
del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad. En los arts. 38, tanto del CPCC de nació n, como de
provincia, encontramos algunos de los deberes de los secretarios.

UNIDAD 5.- MEDIOS ALTERNATIVOS DE RESOLUCION DE CONFLICTOS Y DEFENSA DE DERECHOS DEL


CONSUMIDOR.

1.- MEDIACIÓN, Concepto:

Es el procedimiento que desarrollado con anterioridad a la iniciació n o durante el curso del proceso, comienza
con la intervenció n de un tercero, ajeno al ó rgano judicial, que a través de la aplicació n de técnicas especiales de
comunicació n procura que se produzca el entendimiento entre las partes, y concluye con la celebració n
(eventualmente), por éstas de un acuerdo que compone el conflicto y reviste eficacia equivalente a la de una
sentencia firme. Se trata de una autocomposición.

La mediació n se encuentra regulada por la Ley 13.951 y el decreto reglamentario 2530/10.

La ley habla de que es un método alternativo de resolució n de conflictos judiciales que se da previo a la
interposició n de la demanda.

Solo se pueden llevar a mediació n conflictos judiciales, que luego puedan ser objeto de una demanda posterior.
Ejemplo: no se puede llevar a mediació n un tema doméstico.
NOELIA LAZARTE 38

Se la puede definir como una etapa de conciliació n previa al juicio, en la que las partes involucradas en un
conflicto buscan, a través de un profesional imparcial (el mediador), obtener una solució n vá lida para ambas
partes.

La ley, en algunos casos permite la mediació n y en otros obliga a realizarla.

En la mediació n no hablamos de actor o demandado, sino que hablamos de requirente (actor) y requerido
(demandado).

La asistencia de las partes a la audiencia de mediació n es obligatoria. No obstante, las mismas no está n obligadas
a arreglar o a llegar a un acuerdo.

El pedido de mediació n interrumpe el plazo de prescripció n.

La mediació n puede ser preprocesal o procesal: segú n se realice con anterioridad a la interposició n de la
demanda o durante el transcurso de un proceso ya iniciado. Desde otro á ngulo el procedimiento analizado es
facultativo, cuando su cumplimiento obedece a la libre determinació n de ambas partes, y es obligatorio cuando
viene impuesto por la ley.

Principios:

Los principios que rigen son: La mediació n se caracteriza por los principios de neutralidad, imparcialidad,
confidencialidad y consentimiento informado.

1) Principio de neutralidad e imparcialidad: el mediador no es un juez, es un abogado que hizo un curso de


mediació n y el otorgan una matrícula de mediador. El mismo deberá mantener la imparcialidad, ya que no debe
perjudicar ni beneficiar a ninguna de las partes intervinientes, también tendrá que actuar como un tercero ajeno
a las mismas. No puede estar a favor de ninguna de las partes, es decir, que debe mantener una posició n
imparcial.

2) Principio de confidencialidad: lo que sucede en la mediació n no puede ser llevado luego a juicio juicio y toda la
informació n que allí se otorgue es privada. Ejemplo: yo no puedo citar como testigo al mediador en el juicio,
porque lo que ocurre en la mediació n es netamente confidencial.

Objeto:

El objeto es promover y facilitar la comunicació n directa (porque estamos todos en una audiencia) entre las
partes que permita la solució n del conflicto. Se busca una comunicació n directa entre las partes para llegar a un
acuerdo que solucione el conflicto, y así evitar gastos y tiempo innecesario que demandaría el juicio.

Carácter (cuando es obligatoria o voluntaria)

La mediació n es obligatoria salvo los casos que enumera la ley como excepció n en el Art 4 de la ley 13951:
“Quedan exceptuados de la Mediació n”:

1. Causas Penales.

2. Procesos de familia. Ej. Divorcio, alimentos.

3. Procesos de declaració n de incapacidad y de rehabilitació n.


NOELIA LAZARTE 39

4. Causas en las que el Estado Nacional, Provincial, Municipal o los Entes Descentralizados sean parte
(contenciosas administrativas).

5. Amparo, Habeas Corpus e interdictos.

6. Medidas cautelares hasta que se encuentren firmes.

7. Las diligencias preliminares y prueba anticipada.

8. Juicios sucesorios y voluntarios.

 9. Procesos Universales (concursos preventivos y quiebras)

10. Las acciones promovidas por menores que requieran la intervenció n del Ministerio Pú blico.

11. Causas que tramiten ante los Tribunales Laborales.

12. Causas que tramiten ante los Juzgados de Paz Letrados.

Procedimiento:

Al interponer una demanda, el abogado lo primero que debe tener en cuenta, es si hay una obligació n de
interponer una mediació n previa o si es posible interponer directamente la demanda. Para eso es necesario
remitirse al art 4 de la ley 13.951.

En el caso de que sea obligatoria, el reclamante formalizará su pretensió n ye deberá presentar un formulario
(una planilla de mediació n) en la Receptoría de Expedientes (que es el mismo lugar en donde se interpondría la
demanda). Allí se van a sortear, por un lado, el mediador (que entenderá en el reclamo interpuesto) y por otro
lado, el juzgado que va a ser el que va a intervenir en el conflicto (que entenderá en la homologació n o litis).

La planilla debe tener nombre y apellido del requirente y del requerido y la pretensió n del juicio, es decir, por
qué causas se está reclamando y la materia sobre la cual versa.

Al día siguiente de dejar la planilla, el abogado debe volver a la receptoría de expedientes para saber que
mediador fue sorteado y en que jugado quedó radicada la causa.

El formulario será entregado en original y duplicado al reclamante, que deberá dentro del plazo de tres (3) días
presentarlo al Mediador designado, quien, a su vez, retendrá el original y devolverá al reclamante el duplicado,
dejando constancia de entrega en el mismo.

Luego el abogado debe llamar al mediador, y combinar una cita. Generalmente, el abogado le lleva al mediador la
planilla anteriormente nombrada, una declaració n jurada que se hace por una pá gina web y plata para pagar un
ius honorario y para el diligenciamiento de las notificaciones.

En la declaració n jurada que se hace por una pá gina web, el abogado del requirente debe cargar nombre,
apellido, dni, domicilio del requirente y del requerido, debe relatar brevemente cuales son los hechos, es decir,
porque se reclama y finalmente debe cargar los datos del abogado. La misma se imprime, se lleva plata para
pagar los honorarios y para el diligenciamiento de las notificaciones.

En esta cita con el mediador, se debe fijar una fecha de mediació n y notificar al requerido que todavía no sabe
que hay una mediació n en su contra. El Mediador dentro del plazo de cinco (5) días de notificado, fijará la fecha
NOELIA LAZARTE 40

de la audiencia a la que deberá n comparecer las partes, las que en ningú n caso podrá ser superior a los cuarenta
y cinco (45) días corridos de la mencionada designació n.

El Mediador dentro del plazo de cinco (5) días de notificado, fijará la fecha de la audiencia a la que deberá n
comparecer las partes, las que en ningú n caso podrá ser superior a los cuarenta y cinco (45) días corridos de la
mencionada designació n.

El mediador puede enviar la notificació n de la fecha de la mediació n:

1) De manera personal, es decir, que vallan las partes y firmen que se notifican de la audiencia.

2) Por cedula.

3) Por carta documento o acta notarial, adjuntando copia del formulario.

El mediador tiene la obligació n de notificar a las partes con una anticipació n de no menos de cinco días há biles a
la realizació n de la audiencia.

Ambas partes, de manera conjunta, podrá n tomar contacto con el Mediador designado antes de la fecha de la
audiencia con el objeto de hacer conocer el alcance de sus pretensiones.

Dentro del plazo estipulado para la Mediació n el Mediador deberá convocar a las partes a todas las audiencias
necesarias para el cumplimiento de la presente Ley, de cuya realizació n se labrará acta en todos los casos,
dejá ndose constancia de la comparecencia o incomparecencia de las partes, sus notificaciones y la designació n de
nuevas audiencias.

Notificadas todas las partes de la mediació n y llegado el día de la mediació n, todas las partes deben concurrir en
forma personal. Ademá s, La asistencia letrada será obligatoria (la parte debe asistir con un abogado).

Si alguna de las partes no va, y la mediació n fracasa por este motivo, se le debe imponer una multa a la parte que
faltó . La ú nica justificació n es que o el requirente o el requerido no pueda ir por causas de fuerzas mayor, la cual
debe ser acreditada.

La etapa de mediació n no puede durar má s de 60 días corridos a partir de la ú ltima notificació n al requerido,
pero puede ser que durante ese plazo se lleven a cabo varias audiencias. Es decir, que va a haber tantas
audiencias como sean necesarias para tratar de llegar a un acuerdo. En los procesos de ejecució n y en los juicios
por desalojo el plazo será de treinta (30) días corridos. Las partes, de comú n acuerdo, podrá n proponer una
pró rroga de hasta quince (15) días, que el Mediador concederá , si estima que la misma es conducente a la
solució n del conflicto.

. En los casos de incomparecencia injustificada de cualquiera de las partes a la primera audiencia, cada uno de
los incomparecientes deberá abonar una multa equivalente a dos (2) veces la retribució n mínima que le
corresponda percibir al Mediador por su gestió n.

Habiendo comparecido personalmente y previa intervenció n del Mediador, las partes podrá n dar por terminado
el procedimiento de Mediació n.

Será obligatoria la comparecencia personal de las partes y la intervenció n del Mediador. A las sesiones deberá n
concurrir las partes personalmente y no podrá n hacerlo por apoderado, exceptuá ndose a las personas jurídicas y
a las personas físicas domiciliadas a má s de ciento cincuenta (150) kiló metros de la ciudad asiento de la
Mediació n, que podrá n asistir por medio de apoderado, con facultades suficientes para mediar y/o transigir.
NOELIA LAZARTE 41

En conclusió n, fijado el día de mediació n todas las partes deben concurrir de forma personal con sus abogados. Si
alguna de las partes no va, y la mediació n fracasa por su culpa, se le impondrá una multa ya que es obligatorio
comparecer a la misma. Si la parte no puede asistir por un caso de fuerza mayor, se deberá elaborar un escrito
comunicando la situació n para que la multa no se efectue, y luego poder fijar una nueva fecha de mediació n.

Las actuaciones será n confidenciales.

El Mediador tendrá amplia libertad para sesionar con las partes, pudiéndolo efectuar en forma conjunta o por
separado, cuidando de no favorecer, con su conducta, a una de ellas y de no violar el deber de confidencialidad.

La asistencia letrada será obligatoria.

- Si hay acuerdo se labrará un acta en la que deberá constar los puntos de acuerdo, firmado por el Mediador, las
partes y los letrados intervinientes. Para darle validez, se deberá presentar ante el Juzgado para que se someta a
homologació n dentro del plazo de diez (10) días contados a partir de su elevació n. Si no homologa el acuerdo, se
procederá a iniciar el juicio con una interposició n de demanda por parte del requirente. Si lo homologa, termina
el proceso.

Este acuerdo homologado tiene carácter de sentencia definitiva, por lo que si el requerido no cumple se puede
ejecutar forzadamente a través de un juicio ejecutivo.  

- Si no hay acuerdo igualmente se labrará acta de cierre de mediació n, cuya copia se entregará y la firmaran las
partes y el requirente quedará habilitado para iniciar la vía judicial correspondiente. Se deberá agregar subtitulo
que establezca que se llevó a cabo la mediació n pero que no se llegó a un acuerdo. En este caso el reclamante
quedará habilitado para iniciar la vía judicial correspondiente.

La demanda se presenta ante el Juzgado que había salido sorteado y comienza el juicio.

El Juzgado, podrá formular observaciones al acuerdo, devolviendo las actuaciones al Mediador para que, en un
plazo no mayor de diez (10) días, intente lograr un nuevo acuerdo que contenga las observaciones señ aladas.

En caso de incumplimiento del acuerdo de Mediació n homologado, éste será ejecutable ante el
Juzgado homologante por el procedimiento de ejecució n de sentencia establecido por el Có digo Procesal Civil y
Comercial. En este supuesto, el Juez le impondrá al requerido una multa a favor del requirente de hasta el treinta
(30) por ciento del monto conciliado.

Requisitos para ser Mediador:

Art. 26 de la ley 13.951: Para ser Mediador judicial se requerirá : poseer título de abogado, tres (3) añ os en el
ejercicio de la profesió n, encontrarse debidamente matriculado y adquirir la capacitació n requerida y restantes
exigencias que se establezcan reglamentariamente.

Tener la matrícula de mediador no obstaculiza ejercer la profesió n de abogado.

Honorarios del Mediador:

Si se llega a un acuerdo pueden acordarse honorarios de los abogados, o pedir que lo regule el juez cuando
homologue el acuerdo segú n la Ley de honorarios de los abogados.

- ¿Quién debe afrontar el pago de los honorarios?: Lo puede afrontar el requerido (parte vencida), o puede
estipularse que lo paguen mitad y mitad, es decir requerido y requirente.  
NOELIA LAZARTE 42

Deberá abonar al mediador en concepto de honorarios el equivalente de nueve jus arancelarios.

Si el reclamante desistiera de la mediació n cuando el mediador tomó conocimiento de su designació n, a éste le


corresponderá la mitad de los honorarios a que hubiese tenido derecho.

Si al mediador por alguna cuestió n se le pagó antes, es decir, en la audiencia de mediació n, esto se va a tener que
manifestar y se descontará de los honorarios que regule el juez al final.

Recusación y Excusación:

Los mediadores pueden ser recusados o puede excusarse únicamente con expresión de causa.

Diferencia entre mediación, conciliación y negociación

MEDIACION: es un mecanismo de autocomposició n, aquí un tercero va a resolver ese conflicto , la decisió n debe
ser cumplida , voluntariamente o a través del uso de la fuerza . Aquí hablamos de el requirente vs el requerido ,
en este supuesto un mediador colabora con las partes para que ella encuentren la solució n que satisfaga sus
pretensiones, asegurando la confidencialidad de las actuaciones. El mediador puede ser elegido por: acuerdo de
partes por sorteo a propuesta del requirente por el juez . La audiencia puede ser conjunta o individual. Antes de
iniciar el proceso judicial.

Las partes quedan exentas de mediació n si acreditaren que antes del inicio de la causa, existió mediació n entre
mediadores registrados por el Ministerio de la Justicia.

Las actuaciones referidas a la mediació n son confidenciales, debiendo ocurrir las partes personalmente con
asistencia letrada obligatoria.

El proceso de mediació n no será de aplicació n en los siguientes supuestos: causas penales, acciones de


separació n persona y de divorcio, amparo, habeas corpus, etc. Las actuaciones referidas a la mediació n son
confidenciales, debiendo ocurrir las partes personalmente con asistencia letrada obligatoria.

CONCILIACION: es un medio anormal. Un acto procesal celebrado entre el tribunal de la causa o ante un
organismo administrativo, a fin de que un 3ro logre que las partes lleguen a un acuerdo que ponga fin al conflicto.
Es un acto trilateral, realizado con la colaboració n de un 3ro que propone formulas para ayudar a quienes está n
en conflicto .La conciliació n puede ser pre-procesal (antes del proceso) es un trá mite de conciliació n
administrativo si hay acuerdo se ejecutara judicialmente porque solo los jueces tienen dicha atribució n. Procesal
(dentro el proceso) el rol del conciliador es el juez -el cual propone formulas conciliatorias. Las audiencias
previstas por el art 360 CPCC (audiencia preliminar) la audiencia del art 34 inc. 1° si hay acuerdo se labra un acta
homologado por el juez, en cambio si no hay acuerdo continua el proceso, labrá ndose un acta que deja constancia
que no se logro el acuerdo conciliatorio. . Son de carácter obligatorio también está n previstas las audiencias
facultativas del art 36-facultades del juez.  Tendrá n autoridad de cosa juzgada. El juez interviene activamente.

NEGOCIACIÓN: Son las tratativas que llevan a cabo las partes sin la presencia de un tercero ajeno a ellas; esto es,
las partes tratan de solucionar un conflicto por sí o por medio de apoderados y asistidas o no por otras personas
que colaboran en la negociació n, aunque éstas actú an con parcialidad, tratando de obtener la solució n má s
favorable para su representado o asistido. Es fuera del proceso, pero puede ser antes o después de iniciado el
proceso. Es bilateral.

Autotutela y autocomposición.
NOELIA LAZARTE 43

Auto composición: Es un estado intermedio de solució n de conflictos. Es tratar de resolver las diferencias con el
otro, sin tener que acudir al 3º imparcial.  Es decir, es la forma en que se solucionan los conflictos surgidos por las
propias partes y que esta consiste en la renuncia total o parcial de una o ambas partes a un derecho o a una
compensació n por algú n dañ o.

En la renuncia o remisió n alguna de las dos partes o las dos tienen que ceder para poder llegar a ese auto
composició n. Esto es difícil ya que no siempre una de las dos partes quiere ceder, llegando a que no puede haber
forma de arreglo sin intervenció n, donde va a haber dos tipos de interventores:

- Mediador: sin propuesta

- Negociador: con propuesta

Auto tutela: Se denomina así a la reacció n directa y personal de quien hace justicia por mano propia. Es lo
contrario a la tutela jurisdiccional que es aquella garantía que prevé el Estado de acceder a un tercero imparcial
para la resolució n de conflictos de relevancia jurídica. En la autotutela, no hay diá logo y está prohibido en el
Estado.

2.-ARBITRAJE

Proceso arbitral:

Junto al proceso judicial, la ley admite la posibilidad de que las partes sometan la decisió n de sus diferencias a
uno o má s jueces privados que no dependen del poder judicial nacional o provincial, a los cuales se denomina
á rbitros o amigables componedores, segú n deban o no sujetar su actuació n a formas determinadas y fallar con
arreglo a las normas jurídicas. En ambos casos, los tribunales estará n compuestos por un nú mero de á rbitros que
sea impar.

Solo podrá n ser sometidos bajo pena de nulidad, aquellos conflictos que versen sobre derechos que puedan ser
objeto de transacció n, es decir, derechos disponibles o renunciables, de carácter exclusivamente patrimonial y
que no comprometan el orden pú blico.

De esta manera, las partes pueden pactar mediante un acuerdo expreso de voluntades, renunciar a la
competencia judicial para someterse a una competencia arbitral. Es decir, que prorrogan la competencia de un
ó rgano judicial a favor de un tribunal arbitral.

- Las partes deciden someter sus conflictos a la decisió n de "jueces privados" (á rbitros o amigables
componedores). La decisió n del á rbitro (laudo) es obligatoria y tiene la misma eficacia que una sentencia judicial.
Sin embargo, puede preverse un laudo no obligatorio.

Es una institució n de derecho pú blico porque el Estado ejerce una funció n de control del procedimiento seguido
y del laudo que en él se pronuncia. Mediante decisió n del juez se puede otorgar el auxilio de la fuerza pú blica
para la ejecució n del laudo, pero só lo en caso de un trá mite regular donde se hayan respetado los principios
fundamentales del debido proceso.

Clasificación:

- Por su origen:
NOELIA LAZARTE 44

-Voluntario: Cuando las partes espontá neamente se someten a él mediante la celebració n de un compromiso sin
que exista, como antecedente, un acuerdo de voluntades en el que se haya estipulado la exigibilidad de dicho
acto.

-Obligatorio: Cuando la celebració n del compromiso arbitral es exigible en virtud de una disposició n de la ley que
lo impone (arbitraje obligatorio legal) o de un convenio anterior (clá usula compromisoria) en el cual las partes lo
han previsto como medio  de solucionar sus diferencias (arbitraje obligatorio convencional).

Formas y modo:

-Á rbitros de derecho: Deben observar el procedimiento del juicio ordinario o del juicio sumario, salvo que las
partes hubiesen convenido otro, y el laudo que dicten coincide, en cuanto a sus formas y contenido, con las
sentencias judiciales.

-Amigables componedores: Pueden proceder sin sujeció n a formas legales, respetando naturalmente el derecho
de defensa de las partes y fallar segú n su saber y entender

Laudo: es la decisió n definitiva de los á rbitros o amigables componedores sobre las cuestiones comprendidas en
el compromiso. No se trata de un acto jurídico emanado de un ó rgano del Estado pero es sustancialmente
equiparable a una sentencia, una vez firme posee la autoridad de cosa juzgada.

La competencia arbitral puede pactarse de dos maneras:

1) Antes de que exista un conflicto: se pacta a través de una cláusula compromisoria.

2) Luego de que se produzca un conflicto: se pacta a través de un compromiso arbitral que es un convenio en
cuya virtud las partes pueden decidir someter la resolució n del conflicto a un tribunal arbitral. Este compromiso
deberá formalizarse por escritura pú blica o instrumento privado, o por acta extendida ante el juez de la causa, o
ante aquel a quien hubiese correspondido su conocimiento.

Clases:

- Tribunales arbitrales de derecho: son los llamados tribunales arbitrales propiamente dichos, es decir, que son
los á rbitros. Se llaman “de derecho” porque los á rbitros deben ser abogados.

- Tribunales arbitrales de equidad: son los llamados amigables componedores. Los mismos son á rbitros, pero no
necesariamente van a ser abogados, por ende, no es obligatorio que funden sus laudos o que sigan normas
preestablecidas para el proceso sumario.

- Institucionalizado: se trata de un tribunal que ya existe y depende de una determinada institució n. En este caso,
no se va a formar a pedido de las partes ni disolver una vez que se solucionó el problema.

- Ad- hoc: en este caso, el tribunal se forma al efecto de solucionar ese conflicto.  El mismo es una asamblea o una
convocatoria creada para cumplir una determinada finalidad y luego se disuelve.

Procedimiento:

Estos procesos se inician ante el secretario del tribunal de á rbitros que se encuentra en el colegio de abogados o
ante la cá mara de administradores la cual va a llamar a un tribunal arbitral. Allí se presenta la demanda
acompañ ada de la prueba documental.
NOELIA LAZARTE 45

El tribunal arbitral analiza si se cumplen los recaudos formales, si la cuestió n es susceptible de que sea sometido
a á rbitros y si está pactada la competencia. Para esto ú ltimo se presenta la clá usula o compromiso para acreditar
que hubo un acuerdo entre las partes de someter el conflicto al tribunal arbitral.

En caso de que se cumpla todo esto, se le corre traslado al demandado, se fija una audiencia y se cita a las partes a
una conciliació n. Al mismo tiempo, el tribunal manifiesta que si no se llegare a una conciliació n, en el mismo acto
se van a determinar cuá les son los hechos controvertidos y cuá l es la prueba a producir

Todo esto genera que los juicios arbitrales logren el dictado de la sentencia con mayor celeridad que los
tribunales judiciales.

Por otro lado, si en la clá usula compromisoria, en el compromiso, o en un acto posterior de las partes no se
hubiese fijado el procedimiento, las partes se someterían al ad hoc, y en este caso los á rbitros se van a someter a
un trá mite ordinario o sumario, segú n lo establecieren teniendo en cuenta la naturaleza e importancia econó mica
de la causa. Esta resolució n será irrecurrible.

Contrato de arbitraje en el CCyC

ART 1649.- Definición. Hay contrato de arbitraje cuando las partes deciden someter a la decisió n de uno o má s
á rbitros todas o algunas de las controversias que hayan surgido o puedan surgir entre ellas respecto de una
determinada relació n jurídica, contractual o no contractual, de derecho privado en la que no se encuentre
comprometido el orden pú blico.

ART 1650.- Forma. El acuerdo de arbitraje debe ser escrito y puede constar en una clá usula compromisoria
incluida en un contrato o en un acuerdo independiente o en un estatuto o reglamento. La referencia hecha en un
contrato a un documento que contiene una clá usula compromisoria constituye contrato de arbitraje siempre que
el contrato conste por escrito y la referencia implique que esa clá usula forma parte del contrato.

ART 1651.- Controversias excluidas. Quedan excluidas del contrato de arbitraje las siguientes materias: a) las
que se refieren al estado civil o la capacidad de las personas; b) las cuestiones de familia; c) las vinculadas a
derechos de usuarios y consumidores; d) los contratos por adhesió n cualquiera sea su objeto; e) las derivadas de
relaciones laborales. Las disposiciones de este Có digo relativas al contrato de arbitraje no son aplicables a las
controversias en que sean parte los Estados nacional o local.

ART 1652.- Clases de arbitraje. Pueden someterse a la decisió n de arbitradores o amigables componedores, las
cuestiones que pueden ser objeto del juicio de á rbitros. Si nada se estipula en el convenio arbitral acerca de si el
arbitraje es de derecho o de amigables componedores, o si no se autoriza expresamente a los á rbitros a decidir la
controversia segú n equidad, se debe entender que es de derecho.

ART 1653.- Autonomía. El contrato de arbitraje es independiente del contrato con el que se relaciona. La
ineficacia de éste no obsta a la validez del contrato de arbitraje, por lo que los á rbitros conservan su competencia,
aun en caso de nulidad de aquél, para determinar los respectivos derechos de las partes y pronunciarse sobre sus
pretensiones y alegaciones.

ART 1654.- Competencia. Excepto estipulació n en contrario, el contrato de arbitraje otorga a los á rbitros la
atribució n para decidir sobre su propia competencia, incluso sobre las excepciones relativas a la existencia o a la
validez del convenio arbitral o cualesquiera otras cuya estimació n impida entrar en el fondo de la controversia.

ART 1655.- Dictado de medidas previas. Excepto estipulació n en contrario, el contrato de arbitraje atribuye a
los á rbitros la facultad de adoptar, a pedido de cualquiera de las partes, las medidas cautelares que estimen
necesarias respecto del objeto del litigio. Los á rbitros pueden exigir caució n suficiente al solicitante. La ejecució n
NOELIA LAZARTE 46

de las medidas cautelares y en su caso de las diligencias preliminares se debe hacer por el tribunal judicial. Las
partes también pueden solicitar la adopció n de estas medidas al juez, sin que ello se considere un
incumplimiento del contrato de arbitraje ni una renuncia a la jurisdicció n arbitral; tampoco excluye los poderes
de los á rbitros. Las medidas previas adoptadas por los á rbitros segú n lo establecido en el presente artículo
pueden ser impugnadas judicialmente cuando violen derechos constitucionales o sean irrazonables.

ART 1656.- Efectos. Revisión de los laudos arbitrales. El convenio arbitral obliga a las partes a cumplir lo
estipulado y excluye la competencia de los tribunales judiciales sobre las controversias sometidas a arbitraje,
excepto que el tribunal arbitral no esté aun conociendo de la controversia, y el convenio parezca ser
manifiestamente nulo o inaplicable. En caso de duda ha de estarse a la mayor eficacia del contrato de arbitraje.
Los laudos arbitrales que se dicten en el marco de las disposiciones de este Capítulo pueden ser revisados ante la
justicia competente por la materia y el territorio cuando se invoquen causales de nulidad, total o parcial,
conforme con las disposiciones del presente Có digo. En el contrato de arbitraje no se puede renunciar a la
impugnació n judicial del laudo definitivo que fuera contrario al ordenamiento jurídico.

ART 1657.- Arbitraje institucional. Las partes pueden encomendar la administració n del arbitraje y la
designació n de á rbitros a asociaciones civiles u otras entidades nacionales o extranjeras cuyos estatutos así lo
prevean. Los reglamentos de arbitraje de las entidades administradoras rigen todo el proceso arbitral e integran
el contrato de arbitraje.

ART 1658.- Cláusulas facultativas. Se puede convenir: a) la sede del arbitraje; b) el idioma en que se ha de
desarrollar el procedimiento; c) el procedimiento al que se han de ajustar los á rbitros en sus actuaciones. A falta
de acuerdo, el tribunal arbitral puede dirigir el arbitraje del modo que considere apropiado; d) el plazo en que los
á rbitros deben pronunciar el laudo. Si no se ha pactado el plazo, rige el que establezca el reglamento de la entidad
administradora del arbitraje, y en su defecto el que establezca el derecho de la sede; e) la confidencialidad del
arbitraje; f) el modo en que se deben distribuir o soportar los costos del arbitraje.

ART 1660.- Calidades de los árbitros. Puede actuar como á rbitro cualquier persona con plena capacidad civil.
Las partes pueden estipular que los á rbitros reú nan determinadas condiciones de nacionalidad, profesió n o
experiencia.

ART 1662.- Obligaciones de los árbitros. El á rbitro que acepta el cargo celebra un contrato con cada una de las
partes y se obliga a: a) revelar cualquier circunstancia previa a la aceptació n o que surja con posterioridad que
pueda afectar su independencia e imparcialidad;

b) permanecer en el tribunal arbitral hasta la terminació n del arbitraje, excepto que justifique la existencia de un
impedimento o una causa legítima de renuncia;

c) respetar la confidencialidad del procedimiento;

d) disponer de tiempo suficiente para atender diligentemente el arbitraje;

e) participar personalmente de las audiencias;

f) deliberar con los demá s á rbitros;

g) dictar el laudo motivado y en el plazo establecido.

En todos los casos los á rbitros deben garantizar la igualdad de las partes y el principio del debate contradictorio,
así como que se dé a cada una de ellas suficiente oportunidad de hacer valer sus derechos.
NOELIA LAZARTE 47

ART 1663.- Recusación de los árbitros. Los á rbitros pueden ser recusados por las mismas razones que los
jueces de acuerdo al derecho de la sede del arbitraje. La recusació n es resuelta por la entidad administradora del
arbitraje o, en su defecto, por el tribunal judicial. Las partes pueden convenir que la recusació n sea resuelta por
los otros á rbitros.

ART 1665.- Extinción de la competencia de los árbitros. La competencia atribuida a los á rbitros por el
contrato de arbitraje se extingue con el dictado del laudo definitivo, excepto para el dictado de resoluciones
aclaratorias o complementarias conforme a lo que las partes hayan estipulado o a las previsiones del derecho de
la sede.

Juicio arbitral (arts. del CPC)

ART 774°: Objeto del juicio. Toda cuestió n entre partes, excepto las mencionadas en el artículo 775° podrá ser
sometida a la decisió n de jueces á rbitros, antes o después de deducida en juicio y cualquiera fuere el estado de
éste.

La sujeció n a juicio arbitral puede ser convenida en el contrato o en un acto posterior.

ART 775°: Cuestiones excluidas. No podrán comprometerse en árbitros, bajo pena de nulidad, las cuestiones que
no pueden ser objeto de transacción.

ART 776°: Capacidad. Las personas que no pueden transigir no podrá n comprometer en á rbitros.

Cuando la ley exija autorizació n judicial para realizar actos de disposició n, también aquélla será necesaria para
celebrar el compromiso. Otorgada la autorizació n, no se requerirá la aprobació n judicial del laudo.

ART 777°: Forma del compromiso. El compromiso deberá formalizarse por escritura pú blica o instrumento
privado, o por acta extendida ante el juez de la causa, o ante aquel a quien hubiese correspondido su
conocimiento.

ART 778°: Contenido. El compromiso deberá contener, bajo pena de nulidad:

1°) Fecha, nombre y domicilio de los otorgantes.

2°) Nombre y domicilio de los á rbitros, excepto en el caso del artículo 781°.

3°) Las cuestiones que se sometan al juicio arbitral, con expresió n de sus circunstancias.

4°) La estipulació n de una multa que deberá pagar, a la otra parte, la que dejare de cumplir los actos
indispensables para la realizació n del compromiso.

ART 781°: Nombramiento. Los á rbitros será n nombrados por las partes, pudiendo el tercero ser designado por
ellas, o por los mismos á rbitros, si estuviesen facultados. Si no hubiere acuerdo, el nombramiento será hecho por
el juez competente.

La designació n só lo podrá recaer en personas mayores de edad y que estén en el pleno ejercicio de los derechos
civiles.

ART 782°: Aceptación del cargo. Otorgado el compromiso, se hará saber a los á rbitros para la aceptació n del
cargo ante el secretario del juzgado, con juramento o promesa de fiel desempeñ o.
NOELIA LAZARTE 48

Si alguno de los á rbitros renunciare, se incapacitare o falleciere, se lo reemplazará en la forma acordada en el


compromiso. Si nada se hubiese previsto, lo designará el juez.

ART 783°: Desempeño de los árbitros. La aceptació n de los á rbitros dará derecho a las partes para
compelerlos a que cumplan con su cometido, bajo pena de responder por dañ os y perjuicios.

ART 784°: Recusación. Los á rbitros designados por el juzgado podrá n ser recusados por las mismas causas que
los jueces. Los nombrados de comú n acuerdo por las partes, ú nicamente por causas posteriores al
nombramiento.

Los á rbitros no podrá n ser recusados sin causa. Só lo será n removidos por consentimiento de las partes y
decisió n del juez.

ART 785°: Trámite de la recusación. La recusació n deberá deducirse ante los mismos á rbitros, dentro de los 5
días de conocido el nombramiento.

Si el recusado no se abstuviere de intervenir, conocerá de la recusació n el juez ante quien se otorgó el


compromiso o el que hubiese debido conocer si aquél no se hubiere celebrado.

Se aplicará n las normas de los artículos 17° y siguientes, en lo pertinente.

La resolució n del juez será irrecurrible.

El plazo para pronunciar el laudo quedará suspendido mientras no se haya decidido sobre la recusació n.

ART 786°: Extinción del compromiso. El compromiso cesará en sus efectos:

1°) Por decisió n uná nime de los que lo contrajeron.

2°) Por el transcurso del plazo señ alado en el compromiso, o del legal en su defecto, sin perjuicio de la
responsabilidad de los á rbitros por dañ os e intereses, si por su culpa hubiese transcurrido inú tilmente el plazo
que corresponda, o del pago de la multa mencionada en el artículo 778°, inciso 4°, si la culpa fuese de alguna de
las partes.

3°) Si durante 3 meses las partes o los á rbitros no hubiesen realizado ningú n acto tendiente a impulsar el
procedimiento.

ART 787°: Secretario. Toda la sustanciació n del juicio arbitral se hará ante un secretario, quien deberá ser
persona capaz, en el pleno ejercicio de sus derechos civiles e idó nea para el desempeñ o del cargo.

Será nombrado por las partes o por el juez, en su caso, a menos que en el compromiso se hubiese encomendado
su designació n a los á rbitros. Prestará juramento o promesa de desempeñ ar fielmente el cargo ante el tribunal
arbitral.

ART 788°: Actuación del tribunal. Los á rbitros designará n a uno de ellos como presidente. Este dirigirá el
procedimiento y dictará , por sí solo, las providencias de mero trá mite.

Só lo las diligencias de prueba podrá n ser delegadas en uno de los á rbitros; en los demá s, actuará n siempre
formando tribunal.

ART 789°: Procedimiento. Si en la clá usula compromisoria, en el compromiso, o en un acto posterior de las
partes no se hubiese fijado el procedimiento, los á rbitros observará n el del juicio ordinario o sumario, segú n lo
NOELIA LAZARTE 49

establecieren teniendo en cuenta la naturaleza e importancia econó mica de la causa. Esta resolució n será
irrecurrible.

ART 790°: Cuestiones previas. Si a los á rbitros le resultare imposible pronunciarse antes de que la autoridad
judicial haya decidido alguna de las cuestiones que por el artículo 775° no pueden ser objeto de compromiso u
otras que deban tener prioridad y no les hayan sido sometidas, el plazo para laudar quedará suspendido hasta el
día en que una de las partes entregue a los á rbitros un testimonio de la sentencia ejecutoriada que haya resuelto
dichas cuestiones.

ART 791°: Medidas de ejecució n. Los á rbitros no podrá n decretar medidas compulsorias, ni de ejecució n.
Deberá n requerirlas al juez y éste deberá prestar el auxilio de su jurisdicció n para la má s rá pida y eficaz
sustanciació n del proceso arbitral.

ART 792°: Contenido del laudo. Los á rbitros pronunciará n su fallo sobre todas las pretensiones sometidas a su
decisió n, dentro del plazo fijado en el compromiso, con las pró rrogas convenidas por los interesados, en su caso.

Se entenderá que han quedado también comprometidas las cuestiones meramente accesorias y aquellas cuya
sustanciació n ante los á rbitros hubiese quedado consentida.

ART 793°: Plazo. Si las partes no hubieren establecido el plazo dentro del cuá l debe pronunciarse el laudo, lo
fijará el juez atendiendo a las circunstancias del caso.

El plazo para laudar será continuo y só lo se interrumpirá cuando deba procederse a sustituir á rbitros.

Si una de las partes falleciere, se considerará prorrogado por treinta días.

A petició n de los á rbitros el juez podrá prorrogar el plazo si la demora no les fuese imputable.

ARTÍCULO 794°: Responsabilidad de los árbitros. Los á rbitros que, sin causa justificada, no pronunciaren el
laudo dentro del plazo, carecerá n de derecho a honorario. Será n asimismo responsables por los dañ os y
perjuicios.

Juicio de amigables componedores:

ART 804°: Objeto. Clase de arbitraje. Podrá n someterse a la decisió n de arbitradores o amigables
componedores, las cuestiones que pueden ser objeto del juicio de á rbitros.

Si nada se hubiese estipulado en el compromiso acerca de si el arbitraje ha de ser de derecho o de amigables


componedores, o si se hubiese autorizado a los á rbitros a decidir la controversia segú n equidad, se entenderá
que es de amigables componedores.

ART 805°: Normas comunes. Se aplicará al juicio de amigables componedores lo prescripto para los á rbitros
respecto de:

1°) La capacidad de los contrayentes.

2°) El contenido y forma del compromiso.

3°) La calidad que deban tener los arbitradores y forma de nombramiento.

4°) La aceptació n del cargo y responsabilidad de los arbitradores.

5°) El modo de reemplazarlos.


NOELIA LAZARTE 50

6°) La forma de acordar y pronunciar el laudo.

ART 806°: Recusaciones. Los amigables componedores podrá n ser recusados ú nicamente por causas
posteriores al nombramiento.

Só lo será n causas legales de recusació n:

1°) Interés directo o indirecto en el asunto.

2°) Parentesco dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad con las partes.

3°) Enemistad manifiesta con aquellas, por hechos determinados.

En el incidente de recusació n se procederá segú n lo prescripto para la de los á rbitros.

ART 807°: Procedimiento. Cará cter de la actuació n. Los amigables componedores procederá n sin sujeció n a
formas legales, limitá ndose a recibir los antecedentes o documentos que las partes presentasen, a pedirles las
explicaciones que creyeren convenientes, y a dictar sentencia segú n su saber y entender.

ART 808°: Plazo. Si las partes no hubiesen fijado plazo, los amigables componedores deberá n pronunciar el
laudo dentro de los tres meses de la ú ltima aceptació n.

ART 809°: Nulidad. El laudo de los amigables componedores no será recurrible, pero si se hubiese pronunciado
fuera de plazo o sobre puntos no comprometidos, las partes podrá n demandar su nulidad dentro de cinco días de
notificado.

Presentada la demanda, el juez dará traslado a la otra parte por cinco días.

Vencido este plazo, contestado o no el traslado, el juez resolverá acerca de la validez o nulidad del laudo, sin
recurso alguno.

Juicio pericial:

El juicio pericial se da en el marco de un proceso judicial. Allí se designa a un perito para que actú e como á rbitro
y resuelva cuestiones de hecho, es decir, una cuestió n fáctica y no jurídica, porque la misma escapa del
conocimiento del juez. En esos casos el perito no actú a como un mero auxiliar de justicia, porque la pericia
arbitral tendrá los efectos de la sentencia, no siendo admisible recurso alguno.

Esto quiere decir que parte de la decisió n el juez la delega lo que diga el perito. En estos casos, el patrocinio
letrado o el apoderamiento son obligatorios. Para su ejecució n, luego de agregada al proceso, se aplicará n las
normas sobre ejecució n de sentencia.

Tiene lugar cuando se encomienda a una o má s personas especialmente versadas en alguna materia, la decisió n
definitiva de un conflicto exclusivamente relativo a una cuestió n de hecho concretada expresamente. Conduce al
pronunciamiento de una decisió n.

ART 811°: Procedencia. La pericia arbitral procederá en el caso del artículo 514°, y cuando las leyes establezcan
ese procedimiento con el nombre de juicio de á rbitros arbitradores, peritos o peritos á rbitros, para que resuelva
cuestiones de hecho concretadas expresamente.

Los peritos á rbitros deberá n tener las condiciones exigidas para los amigables componedores y especialidad en
la materia. Procederá n como aquellos, sin que sea necesario el compromiso.
NOELIA LAZARTE 51

La pericia arbitral tendrá los efectos de la sentencia, no siendo admisible recurso alguno. Para su ejecució n, luego
de agregada al proceso, se aplicará n las normas sobre ejecució n de sentencia.

3.- DEFENSA DE DERECHOS DEL CONSUMIDOR:

Conjunto de normas y principios que tienen por objeto la tutela de la parte débil de la relació n de consumo.

Constitución Nacional:

Art. 42.- Los consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen derecho, en la relació n de consumo, a la
protecció n de su salud, seguridad e intereses econó micos; a una informació n adecuada y veraz; a la libertad de
elecció n, y a condiciones de trato equitativo y digno.

Las autoridades proveerá n a la protecció n de esos derechos, a la educació n para el consumo, a la defensa de la
competencia contra toda forma de distorsió n de los mercados, al control de los monopolios naturales y legales, al
de la calidad y eficiencia de los servicios pú blicos, y a la constitució n de asociaciones de consumidores y de
usuarios.

La legislació n establecerá procedimientos eficaces para la prevenció n y solució n de conflictos, y los marcos
regulatorios de los servicios pú blicos de competencia nacional, previendo la necesaria participació n de las
asociaciones de consumidores y usuarios y de las provincias interesadas, en los organismos de control.

Art. 43.- Toda persona puede interponer acció n expedita y rá pida de amparo, siempre que no exista otro medio
judicial má s idó neo, contra todo acto u omisió n de autoridades pú blicas o de particulares, que en forma actual o
inminente lesione, restrinja, altere o amenace, con arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, derechos y garantías
reconocidos por esta Constitució n, un tratado o una ley. En el caso, el juez podrá declarar la inconstitucionalidad
de la norma en que se funde el acto u omisió n lesiva.

Podrá n interponer esta acció n contra cualquier forma de discriminació n y en lo relativo a los derechos que
protegen al ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, así como a los derechos de incidencia
colectiva en general, el afectado, el defensor del pueblo y las asociaciones que propendan a esos fines, registradas
conforme a la ley, la que determinará los requisitos y formas de su organizació n.

Toda persona podrá interponer esta acció n para tomar conocimiento de los datos a ella referidos y de su
finalidad, que consten en registros o bancos de datos pú blicos, o los privados destinados a proveer informes, y en
caso de falsedad o discriminació n, para exigir la supresió n, rectificació n, confidencialidad o actualizació n de
aquéllos. No podrá afectarse el secreto de las fuentes de informació n periodística.

Cuando el derecho lesionado, restringido, alterado o amenazado fuera la libertad física, o en caso de
agravamiento ilegítimo en la forma o condiciones de detenció n, o en el de desaparició n forzada de personas, la
acció n de há beas corpus podrá ser interpuesta por el afectado o por cualquiera en su favor y el juez resolverá de
inmediato, aun durante la vigencia del estado de sitio.

Aspectos procesales de la defensa de los Derechos del Consumidor: Ley  13133:

- Competencia:

Art. 30.-  Será n competentes para resolver las controversias derivadas por las relaciones de consumo los
Juzgados de Primera Instancia en lo Civil y Comercial o los Juzgados de Paz Letrados.
NOELIA LAZARTE 52

Los Juzgados de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo será n los competentes para resolver las
controversias que se susciten entre prestadores de servicios pú blicos o concesionarios de obras pú blicas y
usuarios, en cuanto se encuentren regidas por el Derecho Administrativo.

- Legitimació n:

Art. 26.- Cuando los consumidores y usuarios resulten amenazados o afectados en sus derechos subjetivos, de
incidencia colectiva o intereses legítimos, se encuentran legitimados para interponer las acciones
correspondientes:

a) Los consumidores y usuarios en forma individual o colectiva.

b) Las Asociaciones de Consumidores debidamente registradas en la Provincia de Buenos Aires.

c) Los Municipios a través de las Oficinas Municipales de Informació n al Consumidor (OMIC).

- Efectos y alcance de la sentencia:

Art. 28: Cuando se trate de acciones judiciales para la prevenció n o solució n de conflictos, las sentencias tendrá n
los siguientes efectos:

a) Si admiten la demanda, beneficiará n a todos los consumidores y usuarios afectados o amenazados por el
mismo hecho que motivó el litigio, quienes podrá n por vía incidental en el mismo proceso acreditar la
legitimació n, su perjuicio, ejecutar la sentencia, y en su caso liquidar los dañ os.

b) Si rechazan la demanda, no impedirá n la acció n de los consumidores y usuarios titulares de un interés


individual, que no hayan intervenido en el proceso.

c) Si el rechazo de la demanda se fundó en la insuficiencia de pruebas, cualquier otro legitimado diferente al actor
podrá intentar otra acció n valiéndose de nuevas pruebas.

A tales efectos, la parte resolutiva de la sentencia deberá ser publicada a través del medio de comunicació n que el
Juez considere má s conveniente, a cargo de quien resulte vencido.

Conciliación y arbitraje de controversias individuales del trabajo en la Pvcia. De Buenos Aires.   Ley
10.149:

Art. 7 – Cuando las partes voluntariamente se someten a la instancia administrativa, la Subsecretaría de Trabajo
intervendrá en la conciliació n y arbitraje para dirimir las diferencias u homologar los acuerdos en las
reclamaciones por cobro de salarios, indemnizaciones por despido o por cualquier otra causa. La concurrencia de
las partes a la primera audiencia será obligatoria, y se efectuará bajo apercibimiento de ser conducido por la
fuerza pú blica.

La asociació n profesional con personería gremial de la respectiva actividad que nuclea a trabajadores que
resulten afectados por diferendos laborales individuales de los enumerados en el artículo precedente podrá
denunciar y representar a dichos trabajadores ante tales situaciones, requiriendo la intervenció n de la
Subsecretaría conforme al procedimiento del presente capítulo. En los casos en que la asociació n profesional
efectú e la denuncia y/o ejerza la representació n del trabajador, éste deberá, en la primera audiencia, ratificar
dicha representació n.
NOELIA LAZARTE 53

Art. 8 (1) – La incomparecencia injustificada a la primera audiencia hará pasible al responsable, ya se trate de
persona física o de existencia ideal, de una multa que se aplicará de acuerdo con lo que establece el art. 44, previo
cumplimiento del proceso sumario que corresponda.

Art. 9 – Rehusado por la parte patronal, principal o empresaria el sometimiento a la instancia administrativa, el
funcionario actuante dará traslado de las actuaciones a la dependencia que corresponda, para ofrecer al
trabajador o sus derechohabientes el patrocinio jurídico gratuito para recurrir ante los Tribunales del Trabajo.

Art. 10 – Efectuadas las presentaciones, se procederá , sin forma de juicio, a recoger los antecedentes necesarios
para decidir el o los puntos debatidos, cumpliéndose estas diligencias a pedido de las partes o de oficio y
concluyéndose el diferendo con la resolució n o laudo correspondientes, que se ejecutará en los Tribunales del
Trabajo en caso de incumplimiento.

Art. 11 – La Direcció n Provincial de Relaciones Laborales y los delegados regionales en su jurisdicció n podrá n
delegar en uno o má s funcionarios la investigació n de los hechos y el trá mite del expediente, salvo la resolució n
final.

Art. 12 – El laudo será dictado por el delegado regional y/o director provincial de Relaciones Laborales, de la
Subsecretaría de Trabajo, dentro de los diez días de dictada la resolució n que establezca que el expediente se
encuentra en condiciones de laudar.

El plazo para dictar el laudo o la resolució n definitiva no podrá exceder en ningú n caso de sesenta días, desde que
tomó intervenció n la Subsecretaría.

Art. 13 – Contra el laudo, procederá el recurso de apelació n que deberá interponerse por escrito dentro del
tercer día há bil de la notificació n ante el funcionario que dictó el acto respectivo, debiéndose elevar las
actuaciones al subsecretario de Trabajo, el que sin má s trá mite confirmará o revocará el laudo recurrido.

Art. 14 – La resolució n final del subsecretario de Trabajo será apelable ante el Tribunal del Trabajo con
jurisdicció n en el lugar en que se ha prestado el trabajo, dentro del tercer día de notificado. El recurso deberá
interponerse y fundarse por ante la autoridad administrativa que dictó la resolució n.

Art. 15 – Si la resolució n del subsecretario de Trabajo condenase al pago de cantidad determinada, el recurso de
apelació n ante el Tribunal del Trabajo só lo se concederá previo depó sito del importe establecido en la resolució n
final. El depó sito previo que establece el presente artículo podrá suplirse por cauciones reales suficientes que
cubran el importe correspondiente, pudiendo constar las mismas en dació n de bienes a embargo, valores, avales
de instituciones bancarias oficiales u otras garantías a satisfacció n de la Subsecretaría, conforme lo determine la
reglamentació n respectiva.

Art. 16 – Consentida la resolució n final en caso de incumplimiento, procederá su ejecució n por ante el Tribunal
del Trabajo donde se ha prestado el trabajo. A los efectos de la acció n respectiva, el testimonio o fotocopia de la
resolució n condenatoria o de su parte dispositiva, firmado por el subsecretario de Trabajo o funcionario
delegado, constituirá título suficiente a los efectos contenidos en el Cap. VI de la Ley 7.718.

Art. 17 – Las controversias individuales o plurindividuales que se susciten en jurisdicció n de la provincia, como
consecuencia de suspensiones por razones disciplinarias, se encuentran sometidas a la conciliació n y arbitraje
obligatorio por ante la Subsecretaría de Trabajo. La concurrencia de las partes es obligatoria y se efectuará bajo
apercibimiento de ser conducida por la fuerza pú blica. No justificá ndose en el plazo de veinticuatro horas la
inasistencia, la Subsecretaría de Trabajo impondrá las sanciones correspondientes. En estos casos el
procedimiento será el establecido por los arts. 10 a 15 de esta ley.
NOELIA LAZARTE 54

Art. 18 – El depó sito previo o la sustitució n por cauciones reales, a los efectos de la apelació n ante el Tribunal del
Trabajo que se establece en el art. 15, no regirá para los casos en que el recurso lo interponga el trabajador, sus
derechohabientes o la asociació n profesional de trabajadores con personería gremial.

Función de las Delegaciones regionales:

Art. 65 – La Subsecretaría de Trabajo ejercerá las atribuciones y funciones asignadas por la presente ley, a través
de los organismos administrativos y de las delegaciones regionales que fije el Poder Ejecutivo.

Art. 66 – Las delegaciones regionales realizará n las funciones encomendadas por esta ley a la Subsecretaría de
Trabajo, dentro de la jurisdicció n y con las facultades que la reglamentació n les atribuya.

Ellas son: Tiene a su cargo el conocimiento de las cuestiones vinculadas con el trabajo en todas sus formas y
especialmente:

a) Intervenir y decidir en la conciliación y arbitraje de las controversias individuales del trabajo y en los de instancia
voluntaria.

- Intervenir en los conflictos colectivos del trabajo que se susciten en establecimientos o empresas privadas,
empresas u organismos del Estado provincial, que presten servicios públicos, servicios de interés público que
desarrollen actividades industriales o comerciales, excepto cuando por acto expreso el Ministerio de Trabajo de la
Nación se haya abocado a su conocimiento por exceder aquellos límites de la provincia, afectar la seguridad o el
orden público nacional o el orden económico-social de la Nación, los transportes o las comunicaciones
interprovinciales.

- Intervenir en la liquidación de las indemnizaciones por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales.

-Aplicar sanciones por la inobservancia de las disposiciones que regulan el trabajo en todas sus formas y por el
incumplimiento de los actos y/o resoluciones que se dicten.

-Controlar el trabajo a domicilio, el de mujeres y menores y el servicio doméstico.

-Promover la difusión de la legislación laboral, realizando campañas que pongan en conocimiento las obligaciones y
derechos de obreros y empleadores y los métodos de seguridad industrial de higiene y salubridad.

*Subsecretaria de trabajo: La Subsecretaría de Trabajo, dependiente en lo administrativo del Ministerio de


Acció n Social y con autonomía funcional, es el ó rgano con competencia y jurisdicció n para entender en materia
de trabajo en la provincia de Buenos Aires (art. 2)

También podría gustarte