A)    VISUALICE LOS 06 VIDEOS DE LOS PRINCIPIOS DSI  - PUEDE

PROFUNDIZAR EN EL CAPITULO IV  DEL COMPENDIO DSI

Videos-

-          La dignidad de la persona, a la luz de la DSI.

-          El bien común, a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia.

-          El destino universal de los bienes.

-          La subsidiariedad. Doctrina Social de la Iglesia.

-          La Solidaridad - Principio de la Doctrina Social de la Iglesia.

-          Los Valores Fundamentales de la Vida Social.

B)     HAGA UN RESUMEN - SINTESIS DEL CONTENIDO DE CADA UNO DE

ELLOS –  EVIDENCIADOSE EN SEIS PUNTOS  (SOCIALICELO CON SUS
COMPAÑEROS)

a.      La dignidad de la persona

 Ø  El ser humano es siempre un valor en sí mismo y por sí mismo y como tal
exige ser considerado y tratado.

 Ø  La Biblia enseña que el hombre ha sido creado «a imagen y semejanza de

Dios».

Ø  La persona jamás puede ser tratado y considerado como un objeto utilizable, un

instrumento, una cosa.

Ø  El ser humano es siempre un valor en sí mismo y por sí mismo y como tal exige
ser considerado y tratado.

Ø  El hombre es, en efecto, por su íntima naturaleza, un ser social y no puede vivir
ni desplegar sus cualidades sin relacionarse con los demás».

Ø  La dignidad humana requiere, por tanto, que el hombre actúe según su

conciencia y libre elección».

 b.      El bien común

·         El bien común es el conjunto de condiciones de la vida social que hace

posible el logro pleno de la perfección
 ·         El bien común es el conjunto de condiciones de la vida social que hace
posible el logro pleno de la perfección.

·         No puede ser parcializado, dividido, ni privatizado.

·         La persona no puede encontrar la realización sólo en si misma; es decir,

prescindir de su ser con y para los demás.

·         El bien común de una nación es un bien superior, anterior a todos los bienes
particulares o sectoriales, que une a todos los ciudadanos en pos de una misma
empresa, a beneficio de todos sus integrantes y también de la comunidad
internacional.

 ·         La iglesia católica propone una convivencia basada en la persona, quienes

son por naturaleza sociables, por ello deben procurar el bienestar de todos en su
conjunto.

 c.       El destino universal de los bienes

      Dios ha destinado la tierra y cuanto ella contiene para uso de todos los
hombres y pueblos.

      El hombre no es dueño absoluto, si no administrador de los bienes que Dios ha

puesto en sus manos para el uso de todos.

      Es fundamental replantear la responsabilidad personal en el uso de los bienes

para que no se confunda el ser con el tener.

      Es fundamental replantear la responsabilidad personal en el uso de los bienes

para que no se confunda el ser con el tener.

      La historia nos enseña que naciones destruidas en guerras devastadoras han
sido capaces de levantarse gracias al trabajo del pueblo.

      Los bienes no deben ser un fin en sí mismos, sino un medio para hacer posible
una vida digna y su uso debe regirse por el principio.

 d.      La subsidiariedad. Doctrina Social de la Iglesia

 v  La subsidiariedad significa que todas las sociedades de orden superior deben
ponerse en una actitud de ayuda (subsidium)  por tanto, de apoyo, promoción,
desarrollo- respecto de las menores.

v  La subsidiaridad es el principio que vela por la protección de las personas y los

grupos sociales en caso de que esté en riesgo su autonomía.

v  Este principio se impone porque toda persona, familia y cuerpo intermedio tiene
algo de original que ofrecer a la comunidad.

v  La subsidiaridad ha sido abandonado muchas veces en la organización de la

sociedad, por exceso o por defecto.
v  Los sucesores de San Pedro siempre hacen recordar a las personas que los
católicos estamos llamados a ser solidarios.

v  La Iglesia Católica se opone a todas las formas de individualismo ya sea político,

económico, social o de cualquier tipo.

 e.       La Solidaridad

 ·         La solidaridad confiere particular relieve a la intrínseca sociabilidad de la

persona humana, a la igualdad de todos en dignidad y derechos, al camino común
de los hombres y de los pueblos hacia una unidad cada vez más convencida.

·         Nunca como hoy ha existido una conciencia tan difundida del vínculo que se
manifiesta entre los hombres y los pueblos.

·         La solidaridad debe captarse, ante todo, en su valor de principio social

ordenador de las instituciones.

·         La solidaridad no necesita un crecimiento sustancial en orden a afianzar la

conciencia ciudadana y la responsabilidad de todos por todos.

·         No se trata, tan sólo, de que crezca la cantidad de donativos para aliviar los
males de otros ante acontecimientos dolorosos o catástrofes.

·         La solidaridad transforma las relaciones en el lugar de, y de esta manera

transforma la sociedad

f.       Los valores fundamentales de la vida social

 Ø  La verdad:

-       La verdad es un valor fundamental que desde siempre la humanidad busca

ansiosa.

-       En el cristianismo la Verdad ocupa un lugar central. El Hijo unigénito de Dios,

cuyo nacimiento nos preparamos a celebrar, está lleno de gracia y de verdad.

-       El mismo Jesús se autodefinió como la Verdad: Yo soy el Camino, la Verdad

y la Vida.

-       La Verdad del Evangelio, más que para ser conocida intelectualmente, es
para ser realizada, para que viviendo en la verdad y en el amor, crezcamos
plenamente unidos a Cristo.

Ø  La libertad.

-       Según el Evangelio, la libertad es fruto de la verdad.

-       La verdad los hará libres.

-       Sólo reconociendo sinceramente la verdad de nuestros pecados, Dios nos
perdona y nos libera de las ataduras espirituales con que éstos nos aprisionan.

-       La libertad, por otra parte, debe ejercerse como capacidad de rechazar lo que
es moralmente negativo, cualquiera sea la forma en que se presente.

Ø  La Justicia.

-       La justicia es un atributo de Dios.

-       Decimos Dios es justo; que apelamos a la justicia divina.

-       De Cristo confesamos que vendrá con gloria a juzgar a vivos y muertos.

Ø  La vía de la caridad.

-       Es un conjunto de virtudes y, especialmente entre las virtudes, los valores

sociales y la caridad.
A)    VISUALICE LOS 06 VIDEOS DE LOS PRINCIPIOS DSI  - PUEDE
PROFUNDIZAR EN EL CAPITULO IV  DEL COMPENDIO DSI

 VIDEOS VISTOS.

a.   La dignidad de la persona

b.  El bien común:

c.   El destino universal de los bienes:

d.  La subsidiariedad. Doctrina Social de la Iglesia:

 B)     HAGA UN RESUMEN - SINTESIS DEL CONTENIDO DE CADA UNO DE

ELLOS –  EVIDENCIADOSE EN SEIS PUNTOS  (SOCIALICELO CON SUS
COMPAÑEROS)

 a.       La dignidad de la persona: La dignidad humana es un valor y un derecho

innato, inviolable e intangible de la persona, es un derecho fundamental y es el
valor inherente al ser humano porque es un ser racional que posee libertad y es
capaz de crear cosas.

Ø  La persona jamás puede ser tratado y considerado como un objeto utilizable, un

instrumento, una cosa.

Ø  Todos los seres humanos, tienen tanto, derechos que exigir y deberes que
cumplir.

Ø  El hombre es, en efecto, por su íntima naturaleza, un ser social y no puede vivir
ni desplegar sus cualidades sin relacionarse con los demás».

 b.      El bien común: Es aquello que puede ser aprovechado o utilizado por todas
las personas. Dicho de otro modo: de un bien común pueden obtener beneficios
todos los individuos de una comunidad.

·         No puede ser parcializado, dividido, ni privatizado.

·         La persona no puede encontrar la realización sólo en si misma; es decir,

prescindir de su ser con y para los demás.

·         La construcción del bien común se verifica en la promoción y defensa de los

miembros más débiles y desprotegidos de la comunidad.

·         La iglesia católica propone una convivencia basada en la persona, quienes

son por naturaleza sociables, por ello deben procurar el bienestar de todos en su
conjunto.

 c.       El destino universal de los bienes: Es una idea en la teología católica, por
la que la Iglesia católica declara que los bienes de la creación están destinados al
género humano en su conjunto, pero también reconoce el derecho individual a la
propiedad privada.
v  La historia nos enseña que naciones destruidas en guerras devastadoras han
sido capaces de levantarse gracias al trabajo del pueblo.

v  Es fundamental replantear la responsabilidad personal en el uso de los bienes

para que no se confunda el ser con el tener.

v  Dios ha destinado la tierra y cuanto ella contiene para uso de todos los hombres
y pueblos.

v  El hombre no es dueño absoluto, si no administrador de los bienes que Dios ha

puesto en sus manos para el uso de todos.

v  Es fundamental replantear la responsabilidad personal en el uso de los bienes

para que no se confunda el ser con el tener.

v  Los bienes no deben ser un fin en sí mismos, sino un medio para hacer posible
una vida digna y su uso debe regirse por el principio.

 d.      La subsidiariedad. Doctrina Social de la Iglesia: En la Doctrina social de

la Iglesia se entiende por principio de subsidiariedad el principio en virtud del cual
el Estado sólo debe ejecutar una labor orientada al bien común cuando advierte
que los particulares o los organismos intermedios no la realizan adecuadamente,
sea por imposibilidad o sea por cualquier otra razón.

v La subsidiaridad ha sido abandonado muchas veces en la organización de la

sociedad, por exceso o por defecto.

v La subsidiaridad es el principio que vela por la protección de las personas y los

grupos sociales en caso de que esté en riesgo su autonomía.

v La subsidiariedad significa que todas las sociedades de orden superior deben

ponerse en una actitud de ayuda,  por tanto, de apoyo, promoción, desarrollo-
respecto de las menores.

v Este principio se impone porque toda persona, familia y cuerpo intermedio tiene
algo de original que ofrecer a la comunidad.

v Los sucesores de San Pedro siempre hacen recordar a las personas que los
católicos estamos llamados a ser solidarios.

v La Iglesia Católica se opone a todas las formas de individualismo ya sea político,

económico, social o de cualquier tipo.

 e.       La Solidaridad: Debe captarse, ante todo, en su valor de principio social

ordenador de las instituciones, según el cual las “estructuras de pecado”, que
dominan las relaciones entre las personas y los pueblos, deben ser superadas y
transformadas en estructuras de solidaridad, mediante la creación o la oportuna
modificación de leyes, reglas de mercado, ordenamientos.

 ·         La solidaridad no necesita un crecimiento sustancial en orden a afianzar la

conciencia ciudadana y la responsabilidad de todos por todos.
·         La solidaridad debe captarse, ante todo, en su valor de principio social
ordenador de las instituciones.

·         La solidaridad confiere particular relieve a la intrínseca sociabilidad de la

persona humana, a la igualdad de todos en dignidad y derechos, al camino común
de los hombres y de los pueblos hacia una unidad cada vez más convencida.

·         Nunca como hoy ha existido una conciencia tan difundida del vínculo que se
manifiesta entre los hombres y los pueblos.

·         No se trata, tan sólo, de que crezca la cantidad de donativos para aliviar los
males de otros ante acontecimientos dolorosos o catástrofes.

·         La solidaridad transforma las relaciones en el lugar de, y de esta manera

transforma la sociedad

 f.       Los valores fundamentales de la vida social: La doctrina social de la

Iglesia indica los valores fundamentales de la vida social de los humanos.

1. La verdad:

-       La verdad es un valor fundamental que desde siempre la humanidad busca

ansiosa.

-       En el cristianismo la Verdad ocupa un lugar central. El Hijo unigénito de Dios,

cuyo nacimiento nos preparamos a celebrar, está lleno de gracia y de verdad.

2. La libertad.

-       Según el Evangelio, la libertad es fruto de la verdad.

-       Sólo reconociendo sinceramente la verdad de nuestros pecados, Dios nos

perdona y nos libera de las ataduras espirituales con que éstos nos aprisionan.

3. La Justicia.

-       La justicia es un atributo de Dios.

-       Decimos Dios es justo; que apelamos a la justicia divina.

4. La vía de la caridad.

-       Es un conjunto de virtudes y, especialmente entre las virtudes, los valores

sociales y la caridad.