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DEBER
¿Qué es creer?
La palabra creer designa acciones que son sumamente frecuentes entre los seres humanos y
que consisten en: la aceptación de algo como verdadero o cierto (creo en todo lo que dice
mi mamá), la suposición o el pensamiento que se tiene sobre algo (creí que íbamos a ganar
el partido), disponer de fe hacia algo o alguien (creemos en Dios), generalmente una
religión, y depositar la confianza en alguien (creo en mi abogado y sé que me sacará de
esto).
Cada una de estas cuestiones mencionadas suelen ser expresadas en nuestro idioma en
términos de creer.
¿Qué es una creencia?
Una creencia es aquello en lo que creemos fielmente o también puede ser la opinión que
alguien dispone en relación algo o alguien. Estos son los dos usos que le atribuimos a este
concepto en nuestra lengua.
Tipos de creencias

Las creencias son fundamentalmente ideas memorizadas acerca de cómo es el mundo y


sobre cómo debemos actuar. Concretamente, son esquemas cognitivos, es decir, sistemas de
relaciones entre conceptos que figuran en nuestra memoria.
Por ejemplo, para algunas personas el término "antisistema" tiene connotaciones asociadas
con el terrorismo y la inseguridad, por lo que al entrar en este tema, sus pensamientos se
moverán a través del campo semántico de los actos vandálicos y la violencia; pero para
otras, tiene connotaciones positivas asociadas a la democracia participativa y la
colaboración, por lo que mediante este esquema se llegará a conclusiones muy diferentes.
Dicho esto, pasemos a ver cuáles son los tipos de creencias.
- Según si son normativas o no
Las creencias pueden ser descriptivas o, por el contrario, indicar una dirección en la que
deben ir nuestras acciones. Por eso distinguimos entre creencias descriptivas y creencias
morales.
Creencias descriptivas
Estas creencias son asumidas como un simple calco (imperfecto) de la realidad: muestran lo
que hay en el presente, lo queramos o no. Por ejemplo, hay personas que creen que la
evolución de las especies sigue una lógica por la cual los individuos deben combatir entre sí
para sobrevivir, mientras que otras creen que la evolución también crea marcos en los que
quienes más sobreviven son quienes colaboran.
Creencias morales o normativas
Este tipo de creencias son las que nos indican lo que está bien y lo que está mal. Por
ejemplo, creer que la desigualdad es algo que debe ser combatido.
- Según su vinculación con la religión
Históricamente, las religiones han tenido un peso muy importante tanto en la vida de los
individuos como en los acontecimientos políticos y sociales. Por eso conviene distinguir
entre creencias religiosas y creencias seculares.
Creencias religiosas
Las creencias religiosas, como su nombre indica, están ligadas a una religión,
independientemente del grado de extensión y popularidad de estas. Eso significa que se
adscriben a ideas dogmáticas que no deben ser cuestionadas, a ciertos rituales, y a
principios basados en lo sobrenatural.
Creencias seculares
Las creencias seculares no están ligadas a la religión, al menos directamente. Por eso, son
todas esas que no pueden ser englobadas en la anterior categoría.
Según el grado de consciencia
En muchos aspectos, hay creencias tan implantadas en nuestra manera de pensar que son
inconscientes, automáticas. Esta distinción es confusa porque no es sencillo saber hasta qué
punto una idea es inconsciente o no, o si una aparente creencia inconsciente solo surge en
momentos de emocionalidad intensa o bajo ciertas circunstancias, o si por el contrario está
siempre ahí, latente y escondida.
Creencias conscientes
Este tipo de creencias forma parte de nuestro discurso diario, el modo en el que
explicitamos nuestras convicciones ya sea de forma hablada o escrita, refiriéndonos a
nuestras opiniones.
Creencias inconscientes
Las creencias inconscientes se expresan a través de los sesgos, los actos involuntarios y los
experimentos mentales. Por ejemplo, una persona que asegura que mentir siempre está mal
puede darse cuenta de que realmente no piensa eso si se le plantea una situación en la que
no mentir tenga situaciones catastróficas.
- Según su utilidad
Las creencias también tienen un impacto sobre la propia calidad de vida. Es por eso que
distinguimos entre creencias adaptativas y desadaptativas.
Creencias adaptativas
Son aquellas que nos permiten ajustarnos a nuestro día a día sin causar sufrimiento a otros o
a nosotros mismos. La terapia cognitiva de Aaron Beck, por ejemplo, se basa en hacer que
nuestras creencias fundamentales sean adaptativas.
Creencias desadaptativas
Tal y como su nombre indica, son las que no nos permiten adaptarnos a nuestra vida de un
modo correcto, ya que generan estridencias y conflictos tanto intrapersonales como
interpersonales.
Por ejemplo, creer que lo correcto es pesar menos de 40 kilos es una creencia desadaptativa
relacionada con la delgadez extrema, y lo mismo ocurre con la creencia de que la
homosexualidad es antinatural o que hay razas inferiores. En el primer caso esta idea le
causa dolor principalmente a uno mismo, mientras que las otras causan sufrimiento a los
demás.
- Según si son internas o externas
Las creencias pueden estar dirigidas hacia uno mismo o hacia otros
Creencias sobre la propia identidad
Están muy relacionadas con la autoestima, el autoconcepto y las expectativas que ponemos
en nosotros mismos.
Creencias sobre el entorno
Estas pueden ser creencias sobre la sociedad en la que se vive, amigos y conocidos, etc.
Tiene mucha importancia en los llamados estilos de atribución, mediante los cuales
atribuimos las causas de lo que vivimos a los demás, a la suerte o a nosotros mismos.

Webgrafía:
https://www.definicionabc.com/general/creencia.php
https://www.definicionabc.com/general/creer.php
https://psicologiaymente.net/psicologia/tipos-de-creencias#!

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