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INCUMPLIMIENTO DE NORMAS

Institución: Universidad De Las Américas (UDLA)


Materia: Pluralismo Jurídico
Alumna: Andrea Pérez Chávez
Fecha: 17/04/2020

En el presente trabajo, se procedió a analizar dos noticias relacionadas con el


incumplimiento de normas en el ámbito nacional e internacional, dentro del mismo
contexto. La primera noticia, se relaciona con el Coronavirus en Ecuador, y como el
incumplimiento de decisiones legítimas de autoridad competente previsto en el artículo
282 del Código Integral Penal (COIP), al no respetar el toque de queda impuesto en el
país a efectos de contener la expansión del COVID-19, dejó hasta las 17:00 del día
domingo 22 de marzo de 2020, 708 detenidos y 41 sentenciados; los mismos que se
pueden ver enfrentados a sanciones con una pena privativa de libertad que van de uno a
tres años.
Dentro del mismo contexto de los fenómenos sociales, políticos y jurídicos que ha
producido el virus COVID-19, en España hasta el día miércoles 25 de marzo de 2020,
se registraban 926 detenidos y más de 102000 propuestas de sanción de acuerdo a los
datos presentados por el Ministerio del Interior de ese país, debido al incumplimiento al
Real Decreto 463/2020 mediante el cual se declaró el estado de alarma en España,
estableciendo que los únicos supuestos que permitían la circulación por una vía pública
son la adquisición de alimentos, productos farmacéuticos y de primera necesidad;
asistencia a centros, servicios y establecimientos sanitarios; desplazamiento a entidades
financieras y de seguros; traslados a centros de trabajo; retorno al lugar de residencia
habitual; repostaje de combustible; asistencia y cuidado a mayores, menores,
dependientes, personas con discapacidad o personas especialmente vulnerables; y
causas e fuerza mayor. Adicionalmente, el mencionado decreto precisa, que estos
desplazamientos han de realizarse individualmente salvo si se acompaña a personas con
discapacidad, menores, mayores o por causa justificada.
En ambas noticias claramente se puede inferir que las medidas impuestas en ambos
países, se han dado con el objeto de frenar la pandemia que actualmente afecta a
millones de personas en el mundo. Sin embargo, por diversos fenómenos posiblemente
de índole socio culturales y económicas, que serán analizados en el presente ensayo
desde las perspectivas emic y etic, y bajo los preceptos de Levi Strauss y Mauricio
García Villegas, se procederá a analizar que ha motivado a las personas a incumplir
estas normas en sus respectivos países.
De acuerdo a Levi Strauss, es imperativo buscar las estructuras que hay detrás de los
hechos socioculturales, dichas estructuras no suelen ser realidades empíricas, sino
inteligibles, modelos (que se caracterizan por ser sistémicos, inconscientes y
universales). En tal virtud, es importante analizar qué hecho sociocultural universal
motivó a personas de diferentes culturas, a violentar una misma norma cuyo fin era
similar; de acuerdo a la psicóloga Alejandra Libenson podría ser la creencia
antropocéntrica con respecto a “la omnipotencia del ser humano que no acepta los
límites, que en este caso es el límite entre la vida y la muerte”, mezclado con los males
culturales de nuestra época que son la soberbia, la falta de solidaridad y la
fragmentación del sentido de pertenencia a una tribu o familia real, ya que las mismas se
han fragmentado por pertenecer a tribus virtuales ya que la gente está más aislada por la
necesidad de producir dinero. Esta necesidad de producir dinero, deriva en
desigualdades económicas y como menciona Villegas García en su texto “Normas de
Papel: La cultura del incumplimiento”, este hecho deriva en un tipo ideal de
incumplidor denominado el “taimado” o el “marrullero”, que es una persona que dentro
de la sociedad se cree vivo y un rebelde, en el que se mezclan la pobreza y la hidalguía.
Otro concepto interesante a citar de Levi Strauss, se refiere a que "si la naturaleza
abandona la alianza al azar y a lo indeterminado es imposible para la cultura no
introducir un orden, de cualquier clase que sea, allí donde no existe ninguno. El papel
primordial de la cultura es asegurar la existencia del grupo como grupo y, por lo tanto,
sustituir en este dominio, como en todos los demás, el azar por la organización". Como
se mencionó anteriormente el hecho de que paulatinamente se ha ido destruyendo el
sentido de pertenencia a una tribu, pero sumado en ciertas ocasiones a la impulsividad,
la falta de límites personales hecho que demuestra que determinados individuos no
tienen tolerancia a la frustración ni capacidad de demorar un deseo, en este caso el
deseo de salir del aislamiento, deriva en otros tipos ideales de incumplidores
denominados el “déspota”, que es arrogante y vivo a la vez; y el “restaurador” que es un
rebelde y arrogante que no cree en la ley ni en la autoridad, y está dispuesto a luchar por
su derrocamiento y sustitución en nombre de otros valores. En ambas noticias, se pudo
analizar que existieron individuos, que inclusive agredieron a agentes de la seguridad y
el orden que intentaban que se cumplan las restricciones impuestas.
Según Levi Strauss "el establecer una regla de obediencia general, cualquiera que sea la
regla, el grupo afirma su derecho a vigilar lo que considera legítimamente como un
valor esencial”, sin embargo, de acuerdo a lo señalado por García Villegas, en países de
Latinoamérica, tales como Ecuador, al igual que en el resto de países del mundo, existe
una tendencia de resistencia e incumplimiento de las normas, además de que en
diferentes estratos socioeconómicos y estructurales, se fomenta en mayor o menor
medida el incumplimiento dando como consecuencia la configuración de diferentes
tipos de incumplidor.
Desde mi perspectiva, el incumplimiento a una norma que pretende regular el
comportamiento de los individuos dentro de una sociedad con el fin de evitar la pérdida
de más vidas humanas es algo necesario; sin embargo, desde la perspectiva de aquellos
que incumplieron con dichas disposiciones por necesidades socioeconómicas y que les
ha tocado elegir entre el hambre o el virus, esta medida es injusta porque atropella sus
necesidades reales y las de sus familias. Generalmente, este tipo de incumplimiento, se
ha dado con mayor fuerza en nuestro país, ya que de acuerdo a un análisis presentado
por la Revista Gestión Digital, en el mismo se presenta “una tasa de empleo informal de
46,7% y 60,1% de trabajadores no dispone de alguna cobertura pública o privada de
seguro. El mayor porcentaje de subempleo se encuentra en Guayaquil, con 16,2% de su
población, esto equivale a más de 198 mil personas que viven al día a día”. Como se
analizó previamente, las desigualdades económicas desembocan en un determinado tipo
de incumplidor, que a riesgo de equivocarme, es un alguien que las circunstancias le
fuerzan a serlo.
Por otro lado, también existen aquellos que como menciona García Villegas, son los
“déspotas” o “restauradores”, aquellos que bajo mi análisis y desde el enfoque de la
pandemia que agobia al mundo, son sujetos egocéntricos que no tienen una idea de la
magnitud del impacto que pueden desencadenar sus actos al incumplir una medida que
afecta miles de vidas. Sin embargo, y a riesgo de equivocarme, estos individuos en su
pensamiento se creen revolucionarios, que a como fin de satisfacer su delirio mesiánico
ponen en riesgo al resto de la población.

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