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Caso clínico

 Paciente de sexo masculino, de


raza negra, 21 años de edad,
por presentar aumento de
volumen en mandíbula,
asintomático y de evolución
desconocida.

 Intraoralmente se observa
excelente integridad dental y
buena oclusión dental, pero hay
aumento de volumen por
vestibular que compromete el
cuerpo y la sínfisis, mientras
que por lingual, la expansión de
la tabla es solo en zona de
canino y bicúspides inferiores
derechos.

 En radiografía panorámica inicial


(Fig. 1a), se aprecia imagen radiolúcida de 10 cm de longitud, multiloculada, localizada desde
distal del diente 46 hasta mesial del 33. Presentan rizólisis la raíz mesial del 46 y la raíz del 45,
con posible necrosis pulpar. Tenían movilidad mínima los dientes 46, 45 y 44; los demás
dientes presentaban vitalidad normal y el conducto dentario inferior se encuentra rechazado. No
hay alteración en la sensibilidad del nervio mentoniano.

 Previo a la biopsia inicial se hizo aspirado produciendo un líquido citrino (Fig. 2a) se dio un
diagnóstico de tumor odontogénico queratoquístico, por la presencia de una banda de
queratina (Figs. 3a y 3b). Posterior a este procedimiento, la lesión se sobreinfectó y el paciente
debió ser hospitalizado por la severidad del cuadro clínico; se encontró una cápsula constituida
por tejido conectivo con intenso infiltrado inflamatorio y un tejido epitelial con varias capas de
células la cual dio como diagnóstico: quiste radicular inflamatorio (Figs. 3c y 3d). Con este
diagnóstico se decidió planear un tratamiento quirúrgico agresivo.

 Se levanta un colgajo trapezoidal de distal del 46 a distal del 33. Al reflejar el colgajo se
encuentra tabla expandida en toda su extensión y perforada en zona de bicúspides (dientes 44 y
45) lugar donde se habían realizado las biopsias previamente.

 Se procedió a retirar toda la cortical vestibular expandida hasta tener acceso completo a la
cavidad quística (Fig. 2b). Se encuentra y remueve cápsula fibrosa gruesa que recubre el defecto
óseo (Fig. 2c). Antes de suturar el colgajo se rellena defecto óseo con colágeno fibrilar y se
medica con analgésicos y antibióticos. El tejido obtenido se envía a patología. El reporte
histopatológico del espécimen quirúrgico muestra un tejido fibroconectivo carente de epitelio y
se obtuvo un diagnóstico posquirúrgico (Figs. 3e y 3f) de quiste óseo aneurismático.

 El paciente se evaluó a los 8 y 15 días y luego a los 2 meses, a los 10 meses y a los 2 años. En
la cita de control a los 2 meses se encontró necrosis pulpar y fístula a nivel del 47, el cual estaba
adyacente a la lesión y se había amputado el ápice de la raíz mesial durante el procedimiento
quirúrgico. Se realizó la endodoncia y se resolvió la infección (Fig. 1b). Además presentó una
parestesia del nervio mentoniano derecho y se prescribe complejo B tabletas por un mes

 En la radiografía panorámica se observa un buen llenado óseo, pero en la tomografía


tridimensional muestra que hay un defecto de unos 6 mm de diámetro que comprometen el
ápice del 44 y del 43 que falta por regenerar el hueso y aún persiste la parestesia dos años
después (Fig 1d). En imagen intraoral se aprecia que el aumento producido por la expansión de
la lesión de la tabla lingual a nivel de dientes 43, 44 y 45 aún persiste (Fig 2d).

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