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DANIEL BERTEAUX. Los relatos de vida.

Perspectiva etnosociológica,
Barcelona, Ediciones Bellaterra, 2005, 143 páginas.

Junto a Fraser, Thompson, Catani o dos al asunto —El método biográfico: el


Ferrarotti, Berteaux es uno de los princi- uso de las historias de vida en las cien-
pales autores que mostraron a los soció- cias sociales (1992), de Pujadas, y La
logos europeos el potencial actual de los historia oral: métodos y experiencias
relatos biográficos orales, entrefinalesde (1994), de Marinas y Santamarina- ocu-
los setenta y los primeros años ochenta pan un lugar de primera fila en la litera-
del siglo pasado. Un cuarto de siglo des- tura metodológica española. Parece que
pués de las atractivas reflexiones meto- ya era hora de poner de largo esta prácti-
dológicas, que distinguieron a nuestro au- ca de investigación, por una de sus refe-
tor del grupo referido, y cuando los rencias de mayor peso institucional.
relatos de vida se han convertido en capí- En lugar de entrar en los debates que
tulo específico de manuales de técnicas rodean la reflexión metodológica sobre
de investigación social y en repetido ob- las historias de vida, por ser debates que
jeto monográfico de revistas especializa- parecen proyectados por toda la exten-
das, la presenta obra se recibe con nota- sión del oficio de sociólogo, Berteaux se
bles expectativas. Unas expectativas aún autolimita a una perspectiva con la que
mayores si se tiene en cuenta que se des- plenamente se identifica: la perspectiva
conoce obra de Daniel Berteaux en nues- etnosociológica. Una forma de entender
tro idioma' exclusivamente dedicada al el propio oficio de sociólogo que aquí le
tema. Expectativas en un país en el que se conduce a defender lo que el mismo autor
han conjuntado serias, rigurosas y, sobre denomina una posición realista, ya que
todo, comprometidas voluntades en el asume que hay una realidad social histó-
impulso de las historias de vida, historias rica —objetiva, diríamos- que el investi-
orales y, en general, los relatos biográfi- gador quiere conocer, para lo que se sirve
cos orales, con una importante serie de de variados y distintos recursos, entre los
investigaciones empíricas publicadas y que se incluyen los relatos de vida. Por lo
tesis doctorales evaluadas, además de que tanto, se adtnite que hay unas condiciones
dos de los textos exclusivamente dedica- materiales, una existencia del aconteci-
' Sin embargo, se ha publicado en inglés su
miento histórico, que se proyecta en la
Daniel Berteaux, Life Story and Life History, conciencia, de manera que ésta trabaja
Newbury Parte: Sage, 1982. posteriormente tales acontecimientos.

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ISSN: H 39-5737
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El primer capítulo se dedica a presen- atención sobre las escasas diferencias que
tar la perspectiva etnosociológica. Toma- percibe el lector entre lo que Berteaux
mos sus propias palabras: «la hipótesis llama etnosociología y lo que se suele en-
central de la perspectiva etnosociológica tender como investigación empírica so-
es que las lógicas que rigen el conjunto ciológica cualitativa. Al menos, tal como
de un mundo social o mesocosmos se dan algunos entendemos ésta. En el texto, la
igualmente en cada uno de los microcos- propuesta del nombre parece deberse a
mos que lo componen: observando con una táctica de distancia de la concepción
atención uno solo, o mejor varios de es- de la investigación sociológica como
tos microcosmos, y por poco que se logre mero análisis de los discursos, en los que
identificar las lógicas de acción, los me- éstos conforman una realidad autónoma
canismos sociales, los procesos de repro- de lo que podría comprenderse como ex-
ducción y de transformación, se deberían periencias o prácticas sustanciales. Para
poder captar al menos algunas de las ló- Berteaux, la acción discursiva se enmarca
gicas sociales del mesocosmos mismo» en las prácticas y contextos de los sujetos
(pág. 18). Pero, sobre todo, el capítulo se sociales, subrayándose en este calificativo
centra en señalar qué objetos sociales son la exigencia de generalizar a colectivos a
particularmente pertinentes para el uso partir de los casos concretos abordados.
de esta perspectiva y en qué contribuye Pero, para quien esto escribe, el acento en
en el condicionamiento de los mismos. que: «el conocimiento sociológico es por
Hace hincapié en un consejo extensible al definición el conocimiento de fenómenos
conjunto de la investigación social: traba- colectivos» (p. 35) refuerza la asimila-
jar sólo sobre objetos sociales bien cir- ción entre etnosociología e investigación
cunscritos. En este marco, los relatos de sociológica cualitativa. Ahora bien, ha de
vida ponen en relieve aspectos y dan ra- reconocerse que es una asunción que, es-
zones de acontecimientos vitales. pecialmente en lo relativo a la capacidad
Párrafo a párrafo se van dejando apun- de generalizar desde los casos abordados,
tes para la reflexión metodológica. Co- pueden no compartir una buena parte de
bra especial énfasis el registro de recu- los practicantes de la propia investigación
rrencias como base para el paso de lo social cualitativa.
particular a lo general. Un paso que dis- Al otro gran pivote del texto de Berte-
tingue la observación sociológica de otras aux es la consideración del relato de vida
formas de observación más o menos pró- como una narración. Se materializa en
ximas (periodística, etnográfica). Una re- una narración y, por lo tanto, la construc-
currencia que cobra sentido a partir de la ción de la situación de entrevista ha de
construcción de un diseño muestral que estar dirigida a su obtención. Así, mien-
garantice la diferencialidad de sujetos y tras el trabajo muestral, como esfuerzo
situaciones. Pues bien, la exposición de la de realidad a través de la redundancia, es
diferencialidad hay que situarla entre las la dimensión procedimiental; la narración
mejores aportaciones del texto. es la dimensión material.
El establecimiento de lo diferencial en En el tercer capítulo se desarrollan las
las recurrencias y de la recurrencia en lo tres funciones que pueden tener los rela-
diferencial constituye el núcleo analítico tos de vida: función de exploración, ana-
de los relatos de vida. A partir de aquí, se lítica y expresiva. Tres funciones que
desarrolla el cuerpo normativo de esta pueden ser respectivamente dominantes
práctica de investigación. en distintas fases de un mismo diseño de
Antes de seguir con la referencia al de- investigación. Ahora bien, salvo en la
sarrollo del texto, conviene llamar la búsqueda de la recurrencia-saturación y

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la mención a que las primeras entrevistas ceso de producción: «Observar el esfuer-


pueden tener una función exploratoria (p. zo de rememorización de un sujeto que se
53), no hay apartado dedicado a aspectos esfuerza por reconstruir el hilo de su iti-
del diseño como: cuántas entrevistas o nerario biográfico es una fuente de in-
qué relación con el fenómeno social han formación sobre lo que tiene sentido para
de tener (¿en todos los diseños han de su- él» (p. 82).
cederse los dominios respectivos de las Al final del quinto capítulo se recoge,
tres funciones o depende del objeto de desde la distancia, otras formas de análi-
investigación?). Todo parece dejado a un sis. Una distancia que es especialmente
espacio de mensajes, que toman la for- marcada con respecto a las corrientes que
ma de augurios, desde el campo, que el sitúan la biografía como objeto socioló-
profesional sabrá interpretar: «desde que gico en sí, en lugar de utilizarlo para
los sociólogos hacen un trabajo de cam- otros objetos sociológicos.
po, siempre han hallado una forma un El análisis comparativo (sexto capítu-
otra de resolver los problemas» (p. 63). lo) desarrolla el tejido entre modelo y re-
La obtención de los relatos recoge la currencias de los relatos de vida, tipos
narración más expresiva del libro. Parece ideales y decisión de finalizar el trabajo
tratarse de un relato de vida (autobiográ- de campo. El séptimo, como parece lógi-
fico) sobre la experiencia de conseguir co en una sucesión que quiere ser iso-
relatos de vida (biográficos). Una expe- morfa del propio proceso de investiga-
riencia que lleva a varios principios de la ción, se destina a la reducción del
práctica: imaginación para encontrar a las material en un modelo. Un modelo en el
personas adecuadas, huida de los cana- que el material empírico ha de actuar
les estandarizados, presentación adecuada como fiscal. Es decir, ha de ser especial-
del investigador a las personas, y otros mente capaz de integrar aquello que pa-
principios más éticos que prácticos, aun rece contradecirlo. Es por ello que se
cuando tengan su proyección en lo que hace hincapié en las falsas pistas, que
es una buena práctica del relato de vida, Berteaux recomienda recoger en el infor-
como es el principio prioritario de respe- me, al modo de las populares y televisi-
to al otro. vas «tomas Msas». Si el informe se rige
El quinto capítulo se dedica al análisis por el principio de reproducir la investi-
del relato de vida, subrayándose el singu- gación —y no el modelo teórico resul-
lar. Singularidad que se presenta frente a tante de ella— ha de reflejar todos sus
la idea de elaboración de un corpas. Cada procesos, incluidos los errores.
relato de vida se concibe como un jalón Salvo el olvido de algunos cierres de
en un proceso y no sólo como un ele- paréntesis, se ha conseguido una cuidada
mento en una totalidad de materiales. ¿Es edición y traducción de un texto, destina-
pertinente tal distinción? Para quien se do a convertirse en referencia como entre
inicia, puede ser básico que se comprenda sus principales receptores: los alumnos
la necesidad de hacer el itinerario de la de sociología. Consciente de tales desti-
investigación paso a paso. No obstante, la natarios, la obra acaba con una retahila
comparación entre relatos de vida, ver- del deber ser del sociólogo. Así, la con-
dadero motor analítico, se hace a partir clusión se afana en vincular los relatos
del Corpus resultante, especialmente de vida con la profesionalización del so-
cuando se vuelve a las entrevistas ya rea- ciólogo, al que eleva a la consideración
lizadas y previamente analizadas. de profesional de la democracia.
El análisis ha de centrarse tanto en lo
que se dice, el resultado, como en su pro- Javier Callejo

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