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Turbo, 12 Febrero de 2020

Señores:
Administradores
Finca Rita María

Distinguidos hermanos en Cristo:

En nombre de la Iglesia Adventista del Séptimo Día reciba nuestro saludo cordial y nuestros
anhelos para que el Todopoderoso Cristo Jesús, le colme de abundantes bendiciones espirituales
y materiales en este nuevo año.

Es grato saber que dentro de las personas que laborar en su finca está Yeison Hernando Óyola
Márquez, identificado con la cédula de ciudadanía No. 71.240.803. El señor Yeison Hernando
Óyola Márquez Es miembro activo de la Iglesia Adventista del Séptimo, observador de las
doctrinas bíblicas de nuestro Señor.

Por principio bíblico él ha profesado obediencia cabal a los Diez Mandamientos de la Ley eterna
de Dios. En ésta se encierran los principios que han de regir la conducta humana con Dios y con
sus semejantes (ver Éxodo 20:3-17). Entre nuestros deberes para con el Creador, el Señor
requiere que le reconozcamos y adoremos en el Santo Sábado o día del Señor (ver Ezequiel
20 :12,20 y San Marcos 2 :12). Este es el día que Dios ha señalado para el reposo semanal de
todas las actividades laborales y para un uso santo exclusivo y no otro. Según nuestras creencias
es el día señalado por Dios para dedicarlo a Él, como se expresa a continuación:

“Acuérdate del día Sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás toda tu obra. Pero el Sábado
es el día de reposo del Señor tu Dios. No hagas ningún trabajo en él; ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu
siervo, ni tu criado, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas. Porque en seis días el
Eterno hizo el cielo y la tierra y el mar, y todo lo que contienen, y reposó el séptimo día. Por eso, el
Señor bendijo el Sábado y lo declaró santo”.
(Éxodo 20:8-11, Sagrada Biblia, versión Católica).

En este momento y debido a la reposición de tiempo en los días Sábado, El señor Yeison
Hernando Óyola Márquez o requiere que ustedes puedan reconocer su fe y su obediencia al
Señor y lo excusen de presentarse alaborar en el Santo Sábado, el cual va desde la puesta del sol
del viernes hasta la puesta del sol del Sábado (Levíticos 23:32). Antes o después de este tiempo
él está disponible para reponer ese tiempo cualquier otro día.
Permítanme añadir que tiene usted un privilegio especial contar con personas como Yeison
Hernando Óyola Márquez, que son temerosas de Dios y muy respetuosas de sus semejantes, en
el cual usted puede depositar plena confianza por su honestidad y rectitud.

Invoco el siguiente decreto, y sentencia de la corte constitucional:


El 19 de Febrero de 1998, siendo el Presidente de la República el Dr. Ernesto Samper Pizano, sancionó un
decreto el 354 de 1.998, en la cual se reconoce nuestra Iglesia como institución seria y respetuosa, y el
principio bíblico de la observancia del Sábado, y en el aparece un articulo especial al finalizar el
documento donde habla de la observancia del sábado, y donde el estado se compromete a respetar ese
derecho. Y rezaasí ese artículo adicional:

ARTICULO 23. VIGENCIA. Este convenio entrará en vigencia una vez el Gobierno
Nacional publique el decreto que contenga el presente convenio en el Diario
Oficial.

Artículo adicional para la Iglesia Adventista del Séptimo Día.


Con el fin de hacer efectiva la libertad religiosa y de cultos, establecida en el artículo 19 de
la Constitución Política, el literal b) del artículo 6o. de la Ley 133 de 1994:
a) El descanso laboral semanal, para los fieles de la Iglesia Adventista del Séptimo
Día, cuyo día de precepto o fiesta de guarda, es decir el sábado, podrá comprender,
siempre que medie acuerdo entre las partes, desde la puesta del soldel viernes hasta la
puesta del sol del sábado, en sustitución del que establezcalas leyes.

Y sobre la frase que reza “siempre que medie acuerdo entre las partes”, la corte
constitucional aclaro en:

Sentencia T-982/01
LIBERTAD RELIGIOSA-Alcance social/LIBERTAD RELIGIOSA-Fundamento colectivo

La libertad religiosa no sólo tiene que ver con la posibilidad de que todo individuo tenga y desarrolle
libremente un mundo espiritual propio. El texto constitucional confiere alcances sociales a dicha
protección, al garantizar que se practiquen y realicen ciertos actos como consecuencia de profesar
creencias religiosas. Por su naturaleza, el derecho individual a la libertad religiosa tiene un fundamento
colectivo y una protección comunitaria. La práctica formal y colectiva de un culto no es la única
manifestación social de la libertad religiosa.

Es claro para esta Sala que las convicciones de todo miembro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día
de que el día sábado debe guardarse para la adoración al Señor es una de sus principales creencias y
festividades, y una de sus principales prácticas religiosas. En esa medida, está cobijada por el ámbito de
protección de la libertad de religión y cultos. Una de las creencias fundamentales de los adventistas, es
que deben guardar el día sábado a Dios. Obligarlos a trabajar ese día conlleva desconocer por completo
ese ámbito de protección de la libertad religiosa e implica obligarlos a actuar en contra de una de sus
creencias centrales.

No puede aceptar la Sala una interpretación según la cual, el goce efectivo del dere cho constitucional
fundamental de la accionante dependa de un acuerdo entre ella y su empleador. A la luz de la
Constitución y los tratados citados, es preciso reconocer que dentro del ámbito de protec ción del
derecho
de la accionante se encuentra la posibilidad de observar el sabath. El objeto del acuerdo entre las
partes, entonces, es para que el empleador y trabajador decidan cómo, cuándo y bajo qué
circunstancias se recuperará el tiempo en el que la persona no puede trabajar, debido a que ejercita su
derecho a consagrar el sábado a Dios. El acuerdo tiene por objeto hacer efectivo el derecho sin que se
perturbe la organización empresarial, es decir, conciliar la libertad religiosa con el deber de trabajar,
según las circunstancias de cada empresa. Esta es la interpretación conforme a la Constitución.

El objeto del acuerdo entre las partes, entonces, es para que el empleador y trabajador decidan
cómo, cuándo y bajo qué circunstancias se recuperará el tiempo en el que la persona no puede
trabajar, debido a que ejercita su derecho a consagrar el sábado a Dios. El acuerdo tiene por objeto
hacer efectivo el derecho sin que se perturbe la organización empresarial, es decir, conciliar la libertad
religiosa con el deber de trabajar, según las circunstancias de cada empresa. Esta es la interpretación
conforme a la Constitución.

3.8. En conclusión, a la luz del artículo 19 de la Constitución y el artículo 6 de la Ley Estatutaria 113 de
1994, es claro que las personas, en ejercicio de su libertad religiosa, tienen entre otras garantías el
derecho “de practicar, individual o colectivamente, en privado o en público, actos de oración y culto;
conmemorar sus festividades, y no ser perturbados en el ejercicio de estos derechos” y, tampoco, podrán
ser “obligados a actuar contra su conciencia”.

Eso implica, que cuando es parte esencial de la libertad de religión y culto la consagración de un día
para la adoración de Dios, esta actividad se encuentra dentro del ámbito de protección del derecho. Tal
es el caso de los miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, que debido a sus particulares
creencias tienen el derecho fundamental constitucional de consagrar a Dios el tiempo comprendido
entre la puesta del sol del viernes y la puesta del sol del sábado.

Aprecio altamente su atención y una noble consideración de su parte para nuestro derecho de
petición.

Su amigo y servidor,

________________________________
Victoriano Pomare
Pastor Iglesia Adventista
Distrito JIREH - Currulao
Cel. 321 898 62 48

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