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“EL INVISIBLE TONET”

 ¿Te gusta hacer travesuras?, ¿A quién no? pero... ¿Conviene ser travieso en todo
momento?

A continuación te presentamos un cuento que te hará reflexionar al respecto. Léelo


con mucha atención y luego – cuando el profesor lo indique – intégrate a un grupo
de trabajo para comentarlo y analizarlo.

DESARROLLO DEL CUENTO:

Había una vez un chico llamado Tonet que siempre iba a la escuela sin haber
estudiado ni haber terminado sus tareas.
 “¡Ah! – se decía aquel día mientras iba a la escuela – Si fuera invisible no tendría
que estudiar ni trabajar.”
Llegó a la escuela el último, se sentó en silencio y cerró los ojos esperando la
llamada de atención del profesor.
Nadie dijo nada... Al poco tiempo, el profesor dijo:
 “Que lástima, hoy no ha venido Tonet, esperamos que no sea grave su
enfermedad”.
Tonet comprendió entonces que su deseo se había cumplido: ¡ Por fin era invisible !

De tanta alegría dio un salto y fue a parar junto al papelero. Se levantó y comenzó a
deambular por la clase, divirtiéndose mucho: tirando el pelo a un compañero, a otro
le quitaba el lápiz, haciendo cosquillas a las niñas, escondía papeles al profesor...
¡Qué desorden se armó! ¡Que discusiones más interminables, se culpaban
mutuamente de las diabluras de Tonet, al que no veían!

Cuando Tonet se cansó de este juego se fue de la escuela, se subió a un autobús y


se coló sin pagar el pasaje, puesto que el chofer no podía verle. Había un asiento
vacío y se sentó. En la parada siguiente se subió una señora con una cesta y se
sentó encima de las rodillas de Tonet que estuvo a punto de ahogarse.

Cuando la señora vio que se mantenía sentada a un palmo del asiento y que era
móvil, gritó:
 “Este autobús está embrujado, estoy sentada en el aire...”
Comenzaron a discutir todos los pasajeros sobre aquel hecho y decidieron presentar
una queja oficial contra los transportes públicos.

Tonet se bajó dejando el jaleo en el autobús. Tenía hambre y entró a una pastelería
cogiendo, a manos llenas, toda clase de pasteles. La dependiente que veía como
desaparecían los pasteles, acusó a un señor que compraba caramelos y se inició una
gran pelea, “que si yo no soy”, “que si usted es el único ladrón”... cuando la cosa se
puso fea, porque vino un policía a ver que pasaba, Tonet se escabulló y volvió a la
escuela. Quería hablar con sus amigos y explicarles lo mucho que se había
divertido. Al llegar los vio como se reían y empujaban, pero... por más que les
hablaba, no le oían. Les tocaba, tiraba de los pelos a su amigo y ni caso, jugaban
entre ellos y no le veían.
Cuando volvió a casa, su madre estaba en el balcón esperándole como siempre.
 “¡Mamá, mamá, hola!” – saludó como de costumbre, pero su madre no le vio.

Una vez en casa oyó como su padre decía:


 “¡Quizá dónde habrá ido que tarda tanto!” “¡Estará con los amigos y no se
acuerda de volver!”.
 “¡¡Pero si estoy aquí!!” – gritaba Tonet.

Impotente, Tonet salió a la calle llorando y se fue al parque donde jugaba con sus
padres cuando era pequeño.
 “No quiero ser invisible nunca más – se lamentaba angustiado -. Quiero que mi
padre me castigue, que mi madre me riña, que el profesor me pida los trabajos y
me pregunte cada día. ¡Quiero jugar con mis amigos! ¡Qué triste es ser invisible!
¡Estás solo, muy solo!”,
 “¿Por qué lloras?” – le preguntó un viejecito que estaba sentado junto a él en el
banco, tomando el sol.
 “ Pero... ¿Es que usted me ve?” – dijo Tonet perplejo.
 “Claro que te veo. Cada día cuando vas y vuelves de la escuela.”
 “Pues yo no lo he visto nunca a usted”
 “Ya lo se”. Nadie se fija en mí, soy viejo y estoy solo, y ningún chiquillo me ve, soy
invisible para vosotros.”
 “¡Tonet! – gritó la madre desde el balcón. Sube inmediatamente y no pongas más
furioso a tu padre”
 “Ya voy – dijo Tonet contento”.
 “¿No te da miedo el castigo que te mereces?” – le dijo el viejo.
Tonet abrazó al viejecito y le dio un par de besos muy fuertes, diciéndole:
 “Usted me ha salvado”.
 “¡Caramba!, que exageración” – dijo el viejecito.

Y AHORA EN GRUPOS:

1) Analiza el cuento, hacer una puesta en común de la actitud de Tonet.

2) Completar el cuento haciendo vivir a Tonet otras circunstancias antes del


desenlace final. (después de la pastelería se va al cine, o al fútbol, etc...)

3) Escriba su propio cuento como grupo que se ha vuelto invisible.

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