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Cap 5 Gastroenterología Clínica PDF
Cap 5 Gastroenterología Clínica PDF
39
40 Gastroenterología clínica (Capítulo 5)
Fibras longitudinales
Esfínter Fibras circulares
esofágico
inferior Ángulo de His
Diafragma
Crura izquierda
Crura
derecha
Ligamento
frenoesofágico Diafragma
Comorbilidad
psicológica
Reflujo ácido
patológico
Pirosis
Reflujo ácido
fisiológico
Estímulo intra-
esofágico no
ácido
Grasa
intraduodenal
Figura 5--2. Mecanismos fisiológicos y fisiopatológicos que participan en la génesis del síntoma pirosis en las diferentes presenta-
ciones clínicas de la ERGE (modificado de Fass).
definidas como las relajaciones del EEI no relacionadas en todos los casos. Se estima que sólo dos tercios de las
con la deglución faríngea, sin peristalsis esofágica y con personas con una hernia en el hiato padecen ERGE; en
una duración mayor de 10 seg, puede explicar la ERGE el tercio restante el EEI continúa funcionando de mane-
hasta en 90% de los casos. ra adecuada y las personas no padecen ERGE.
Lo que ocurre normalmente en el momento de una No sólo la presencia de una hernia hiatal favorece
deglución es que las ondas peristálticas que inician en una mayor cantidad de reflujo, sino que hay otros fenó-
la unión del cricofaríngeo o esfínter esofágico superior menos asociados, como el tamaño del defecto del hiato
(EES) viajan a través del cuerpo esofágico y el tono del diafragmático, el porcentaje de fundus gástrico en situa-
EEI cae simultáneamente hasta cerca de 0 mmHg. De ción intratorácica y la presencia de una hernia no reduc-
esta manera, cuando la peristalsis alcanza la unión EG tible o fija dentro del tórax, que pueden aumentar la
la presión del EEI que se encuentra en 0 mmHg permite magnitud del reflujo y agravar el daño provocado por él.
el fácil paso del bolo hacia el estómago. En el caso de Un ejemplo de esto es el fenómeno conocido como re--
las RTEEI, la pérdida del tono del EEI ocurre sin el ante- reflujo, el cual surge en presencia de una hernia hiatal
cedente de una deglución o del inicio de una onda peris- no reductible. Al ocurrir el reflujo, un porcentaje varia-
táltica (figura 5--2). El mecanismo mediante el cual ocu- ble del material refluido hacia el esófago permanece en
rre este fenómeno no está claro, pero se cree que es el fundus gástrico herniado y no es devuelto al estómago.
favorecido por una respuesta fisiológica poco conocida Esta condición favorece que el material retenido refluya
o como resultado de la distensión del fundus gástrico y nuevamente hacia el esófago aumentando el tiempo del
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de la acción de algunas hormonas, como la gastrina y la contacto ácido, la pepsina y otras sustancias, como la bi-
colecistocinina. lis y las sales biliares, con el epitelio esofágico.
La función de la hernia hiatal es de especial interés
en la fisiopatología de la ERGE. El aumento del diáme- Aclaramiento esofágico
tro del hiato diafragmático, aunado al deslizamiento
proximal de la unión EG, modifica de manera importan- Es el mecanismo mediante el cual el material regurgita-
te la barrera antirreflujo. Se pierde la situación intraab- do hacia el esófago es devuelto al estómago. Existen dos
dominal del EEI y el ángulo de His, y el ligamento fre- grandes tipos de aclaración: la de volumen y la química.
noesofágico funciona de forma inadecuada debido a la El aclaramiento de volumen está dado por la peristal-
tensión a la que está sometido. Siempre se ha considera- sis esofágica y la fuerza de gravedad. Cuando una per-
do que la hernia hiatal es la principal causa de la ERGE sona se encuentra en posición de pie o sentada el mate-
y que su sola presencia justifica el diagnóstico sin más rial refluido cae nuevamente al estómago por el efecto
estudio. Sin embargo, esto no es necesariamente cierto de la gravedad. La peristalsis esofágica también partici-
42 Gastroenterología clínica (Capítulo 5)
pa en el barrido del material refluido al esófago y lo Dentro de los factores preepiteliales están la capa de
devuelve al estómago. Las condiciones que alteran la moco que, a diferencia del moco especializado del estó-
peristalsis esofágica, como la edad avanzada, la esclero- mago, no brinda la protección contra la retrodifusión de
dermia y los trastornos motores primarios del esófago, los iones hidrógeno (H+) ni los cambios de graduación
favorecen el daño epitelial producido por el material re- del pH entre la superficie luminal y la superficie epite-
fluido. lial. Esta capa de moco participa en la lubricación para
La peristalsis esofágica ineficaz (PEI) es un trastorno que el bolo deglutido se deslice con facilidad hasta el es-
motor primario del esófago que se diagnostica mediante tómago. No obstante, su presencia, su integridad y su
una manometría esofágica, y se define como la peristal- calidad ofrecen una capa protectora efectiva contra la
sis no transmitida o la ausencia de contracciones alter- presencia de sustancias extrañas en el esófago. Otro de
nando con la presencia de contracciones esofágicas con los factores preepiteliales es la presencia de bicarbonato
amplitudes menores de 30 mmHg en más de 30% de las producido y secretado por una minoría de células a todo
degluciones húmedas durante la realización de la mano- lo largo del esófago. La cantidad de bicarbonato produ-
metría. cida por estas células no se compara con la que excretan
El aclaramiento químico, por su parte, está dado por las glándulas salivales que, como se sabe, representa una
la neutralización que la saliva produce al entrar en con- parte importante del aclaramiento químico del órgano.
tacto con el ácido que se ha quedado adherido al epitelio En cuanto a los factores epiteliales, las uniones estre-
esofágico una vez que ocurrió el aclaramiento de volu- chas que se dan entre las células planas estratificadas del
men. La concentración de bicarbonato en la saliva ayu- esófago representan la barrera más importante a este ni-
da mucho a esta neutralización. Cualquier patología o vel. Los estudios recientes realizados en los pacientes
condición que disminuya la salivación o modifique la portadores de enfermedad por reflujo no erosiva de-
calidad de la saliva, como el tabaquismo, el sueño fisio- muestran que una diferencia objetiva entre ellos y las
lógico y la xerostomía, afectará en gran medida el acla- personas sanas es el aumento del diámetro de los espa-
ramiento químico del esófago y favorecerá el daño epi- cios intercelulares o uniones estrechas entre estas célu-
telial. las. También se cree que a través de estos espacios au-
mentados en diámetro los H+ penetran fácilmente en los
Factores epiteliales estratos inferiores del epitelio provocando cambios y
Uno de los aspectos más importantes en la protección daño, sobre todo en los capilares y las terminaciones
del epitelio esofágico contra la acción lesiva del reflujo nerviosas (figura 5--3). Tan importante es la integridad
del contenido gástrico, quizá el más importante de todos celular que se calcula que retarda la retrodifusión de H+
y que establece la diferencia entre un individuo y otro en una proporción de 1:100 000, lo cual equivale a cerca
cuando son sometidos al mismo daño, es la variedad de de 5 unidades de pH.
mecanismos de defensa, reparación y restitución pro- El flujo sanguíneo capilar, la acción de las prosta-
pios del epitelio. Estos factores de protección se agru- glandinas y de los mecanismos de restitución y repara-
pan en preepiteliales, epiteliales y posepiteliales. ción celulares son considerados factores posepiteliales,
Quimiorreceptores
HCI Mecanorreceptores
Dolor
Hipersensibilidad torácico
Figura 5--3. Mecanismo propuesto para la aparición del dolor torácico no explicado en pacientes portadores de ERGE.
Enfermedad por reflujo gastroesofágico 43
los cuales son muy importantes para mantener la inte- cientes con ERGE. Entre los más utilizados está el de
gridad celular en el esófago. Johnsson, de tipo cualitativo, donde la respuesta afirma-
tiva a las cuatro preguntas que lo forman supone una
probabilidad de hasta 85% de que el paciente tenga ero-
siones esofágicas o una pHmetría anormal. El cuestio-
CUADRO CLÍNICO nario de Carlsson y Dent es el más utilizado en investi-
gaciones clínicas, ya que, a través de siete preguntas de
opción múltiple, permite evaluar a los pacientes con sín-
tomas de RGE. La escala utilizada de --7 a +28 permite
La mejor herramienta diagnóstica para el estudio del pa- establecer con una puntuación de +4 la presencia de
ciente con ERGE es un adecuado interrogatorio, con ERGE, con una sensibilidad diagnóstica superior a 90%.
una semiología completa y una alta sospecha diagnósti- Hasta hace pocos años se pensaba que estos síntomas
ca basada en el conocimiento de toda la fisiopatología de pirosis y regurgitaciones eran patognomónicos de la
y nosología esofágica. ERGE y en general así puede considerarse en la actuali-
En la actualidad se reconocen tres presentaciones clí- dad. Sin embargo, cada vez son más los casos de pacien-
nicas básicas de la ERGE: enfermedad por reflujo ero- tes con otros síntomas, en los cuales se ha demostrado
siva, enfermedad por reflujo no erosiva y esófago de una relación con la presencia de una cantidad anormal
Barrett. Cada una de ellas se diagnostica mediante una de ácido en el esófago y la faringe, con una sensibilidad
endoscopia. Sin importar el tipo de presentación clínica exagerada en el esófago o con otras alteraciones del sis-
de que se trate, los síntomas son compartidos y se pue- tema nervioso entérico (SNE). Estos síntomas, también
den presentar en todos ellos. conocidos como atípicos o extraesofágicos, incluyen
Los síntomas principales de la enfermedad por reflu- dolor torácico no explicado, también llamado de origen
jo, también llamados típicos o clásicos, son la pirosis y no cardiaco, asma bronquial por reflujo, tos crónica, la-
las regurgitaciones. La pirosis es la sensación de ardor ringitis posterior, aclaramiento faríngeo o “carraspeo”,
o quemadura en el pecho por atrás del esternón, debida globus faríngeo y caries de las caras palatina y lingual
a regurgitaciones y la percepción del contenido gástrico de piezas dentarias. Otros síntomas, como la sinusitis, la
refluido en la garganta e incluso en la boca. Se dice que fibrosis pulmonar idiopática, la faringitis, la otitis media
la presencia de estos dos síntomas dos o más veces por de repetición y la apnea del sueño, no han demostrado
semana eleva hasta 90% las posibilidades de establecer una relación directa con el RGE, por lo que continúan en
el diagnóstico de ERGE. estudio. Más adelante se revisarán algunas característi-
La causa más frecuente de la pirosis es la presencia cas de estas manifestaciones clínicas (figura 5--2).
de ácido en el esófago, aunque este mismo síntoma tam-
bién puede ser provocado por la presencia de otras sus-
tancias, deglutidas o refluidas, que no necesariamente MANIFESTACIONES EXTRAESOFÁGICAS
poseen un pH ácido. Algunos ejemplos son las sales bi-
liares, los líquidos o alimentos con osmolaridad alta, los
volúmenes de gas en pacientes con sensibilidad esofági- Dolor torácico no explicado
ca alterada e incluso la situación particular de los pa-
cientes que, sin estímulo alguno, presentan este síntoma Se define como el dolor retroesternal recurrente de tipo
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y en cuyo caso se establece el diagnóstico de pirosis fun- anginoso no relacionado aparentemente con una patolo-
cional, de la cual se hablará más adelante. gía cardiaca. Se estima que 50% de los pacientes corona-
En cuanto a las regurgitaciones, se debe establecer el rios tienen síntomas esofágicos. Las patologías esofági-
tipo o sabor de las mismas, ya que, de acuerdo con la clí- cas (ERGE, trastornos de motilidad e hipersensibilidad)
nica francesa, pueden ser ácidas, amargas o dulces. Las representan de 50 a 60% de las causas de dolor torácico
amargas son una consecuencia de la llegada de bilis a la no explicado (DTNE).
boca y las dulces el resultado de la regurgitación de ali- El ácido provoca dolor por sí mismo y los pacientes
mentos y líquidos que no han llegado al estómago, con ERGE pueden desarrollar hipersensibilidad aun
como ocurre en el caso de la acalasia o de la estenosis con cantidades normales de ácido. Con la presencia del
orgánica de la unión EG, ya sea de origen péptico o tu- ácido también se puede despertar un aumento en la qui-
moral. miosensibilidad, que favorece un aumento en la sensibi-
Se han creado y propuesto algunos cuestionarios di- lidad de los mecanorreceptores y da lugar a la aparición
rectos que ayudan a detectar el mayor número de pa- del dolor (figura 5--4).
44 Gastroenterología clínica (Capítulo 5)
Anhidrasa Neutraliza
carbónica al ácido
Figura 5--4. Mecanismos propuestos en la fisiopatología de los síntomas laríngeos relacionados con la ERGE (Fass R: Aliment
Pharmacol Ther, 2004).
Además de la ERGE, algunos trastornos de la motili- ción del esófago distal y con las microaspiraciones del
dad esofágica, como el espasmo difuso, el esófago en ácido en la tráquea. La activación de vías aferentes en
cascanueces, la acalasia y el EEI hipertónico, pueden repuesta a esta acidificación favorece el broncoespasmo
explicar hasta 28% de los casos con DTNE. La hiper- y también la acidificación del esófago distal incrementa
sensibilidad esofágica y las alteraciones centrales en la hiperreactividad del epitelio bronquial a la metaco-
respuesta a estímulos en los mecanorreceptores esofági- lina y la capsaicina.
cos pueden explicar algunos casos de DTNE. En condiciones normales existen varios mecanismos
de defensa para evitar la llegada del reflujo a la faringe;
el esfínter esofágico superior (EES) es un buen ejemplo
Síntomas laríngeos de ellos.
Cuando el ácido clorhídrico se pone en contacto con
la faringe se incrementa la presión basal del EES evi-
Entre 39 y 55% de los pacientes con síntomas laríngeos tando una mayor llegada de ácido. Durante el sueño, la
tienen ERGE asintomática, pero a la fecha no existe un presión de este esfínter disminuye de 40 á 17 mmHg
método diagnóstico confiable que confirme la partici- a 8 á 3 mmHg en la fase más profunda, lo cual coincide
pación de la ERGE como causa de estos síntomas. con el incremento nocturno de la secreción ácida, favo-
En la actualidad, la etiología exacta de las manifesta- reciendo el daño de la faringe y la laringe en sujetos con
ciones supraesofágicas o extraesofágicas permanece ERGE. Durante la noche, la deglución, la salivación y
confusa. De cualquier manera, se aceptan dos hipótesis otros mecanismos de defensa disminuyen su función.
al respecto: el contacto directo del material refluido del
estómago con la vía aérea y las estructuras faringolarín- Laringitis posterior
geas y la presencia de reflejos vagovagales específicos
(figura 5--3). Se estima que 42% de los pacientes con laringitis poste-
La mucosa laríngea es más sensible al ácido que la rior tienen ERGE. En un estudio de la incidencia de re-
mucosa esofágica, según lo muestra la expresión de la flujo ácido hacia la faringe, mediante el registro ambula-
isoenzima anhidrasa carbónica que participa con los torio de pH con tres sensores, se encontró que 75% de los
mecanismos intrínsecos de defensa contra las lesiones pacientes con laringitis posterior tuvieron ácido en la fa-
provocadas por el ácido. Se cree que la anhidrasa carbó- ringe comparados con 12% de los sujetos controles (p <
nica brinda protección mucosa mediante la neutraliza- 0.05). La presencia de ácido en el esófago proximal du-
ción del ácido. La expresión laríngea de esta isoenzima rante la noche también es más común en pacientes con
está disminuida en comparación con su expresión en el laringitis posterior. En cuanto al tratamiento, hay cierto
esófago. Además, se ha confirmado mediante sensores grado de consenso en el uso de inhibidores de la bomba
de pH localizados en la tráquea que las microaspiracio- de protones (IBP) a dosis doble por lo menos durante seis
nes de ácido se asocian con broncoespasmo. meses. En un estudio abierto 20 pacientes con síntomas
Por otro lado, un reflejo vagovagal puede ser el cau- supraesofágicos utilizaron 20 mg de omeprazol tres ve-
sante de las manifestaciones supraesofágicas en la ces al día por 12 semanas y lograron 63% de mejoría de
ERGE. Se cree que este reflejo inicia con la acidifica- la laringitis y, aunque ocurrió mejoría en los síntomas,
Enfermedad por reflujo gastroesofágico 45
Cuadro 5--3. Sensibilidad y especificidad banda angosta se pueden investigar, cada vez con mayor
de los estudios de la ERGE precisión, las características del epitelio esofágico, la
Estudio Sensibilidad Especificidad
morfología de los capilares, el sitio de la línea ZZ y su
integridad, y la presencia de erosiones, ulceraciones o
Cuestionario de sínto- 89 23 cambios epiteliales que indican metaplasia celular. Per-
mas
mite también realizar biopsias, cepillados y tinciones
Esofagograma 40 85
Prueba terapéutica 70--85 25--75
que ayudan a orientar de manera intencionada el sitio de
Endoscopia 70 96
las muestras histológicas. Es un estudio muy importante
pHmetría de 24 h 96 96 que permite categorizar de una manera objetiva el tipo
Impedancia eléctrica Pendiente Pendiente de presentación clínica de la ERGE en cada paciente. Se
Prueba de Bernstein 40--80 50--85 sabe que la presentación inicial es la que el paciente ten-
drá durante casi toda su vida, salvo algunos cambios
poco significativos y en un porcentaje muy bajo.
Un aspecto importante que se debe considerar es el
Para un endoscopista siempre es útil conocer el tipo momento adecuado para realizar la endoscopia. En tér-
de estenosis al que se enfrenta, para preparar el abordaje minos generales, un paciente con síntomas típicos de
diagnóstico y terapéutico para cada una. Por ejemplo, es RGE, como pirosis y regurgitaciones que se iniciaron
más fácil tratar de rehabilitar una estenosis de origen antes de los 45 años de edad y no se acompañan de sínto-
péptico, que suele ser concéntrica y de 1 a 2 cm de longi- mas de alarma, difícilmente será candidato a la práctica
tud, que una estenosis secundaria a daño por ingestión de una endoscopia. Por el contrario, un paciente con sín-
de cáusticos, que suele ser excéntrica, irregular y más tomas atípicos, con más de cinco años de evolución, que
larga y más fibrosa, lo cual la hace más resistente a la no ha respondido al tratamiento médico o que presente
rehabilitación. El riesgo de perforación es mayor en la síntomas de alarma, como dolor torácico, hemorragia
segunda. digestiva, disfagia o pérdida de peso no buscada, debe
someterse cuanto antes a una endoscopia (figura 5--5).
Una vez que se lleva a cabo la endoscopia se esta-
Endoscopia blece la presencia o ausencia de alteraciones epiteliales.
En caso de que existan, y de acuerdo con el tipo de daño
Para tratar de establecer si el supuesto RGE que se sos- epitelial que se observa durante la endoscopia, las pre-
pecha durante el interrogatorio ha causado un daño epi- sentaciones clínicas de la ERGE son: enfermedad por
telial se tiene que llevar a cabo una endoscopia diges- reflujo erosiva, enfermedad por reflujo no erosiva y esó-
tiva, que constituye el estudio metropatrón (llamado fago de Barrett (figura 5--6).
también “regla de oro”). Con este procedimiento y los Esta distinción no sólo se restringe a los aspectos
avances tecnológicos de magnificación e imagen de morfológicos de los hallazgos sino que también parti-
Inicio de
síntomas típicos
IBP
Endoscopia
Mejoría No mejoría
Síntomas crónicos
Vigilancia
Figura 5--5. Algoritmo para la toma de decisiones en la práctica de endoscopia digestiva en pacientes con ERGE.
Enfermedad por reflujo gastroesofágico 47
cipa en el aspecto funcional y en el pronóstico de cada clínicamente como esofagitis leves, y los grados C y D
una de las presentaciones, ya que el manejo, aunque constituyen esofagitis moderadas o graves (figura 5--7).
esencialmente es el mismo, no ofrece ni la misma res- La endoscopia también es muy útil para establecer la
puesta en el control de los síntomas ni el mismo éxito en presencia de cambios epiteliales a través de biopsias y
la cicatrización de las lesiones. permite la vigilancia en el tiempo de la metaplasia intes-
En la ERGE erosiva que se presenta entre 30 y 50% tinal completa, también conocida como esófago de Ba-
de los pacientes con síntomas de RGE la endoscopia rrett. De esta manera se pueden detectar las displasias de
ayuda a establecer la gravedad de la enfermedad toman- bajo grado, las displasias de alto grado e incluso los car-
do en cuenta las diferentes clasificaciones de los hallaz- cinomas in situ, y realizar las acciones pertinentes para
gos endoscópicos. La más conocida y tradicional era la tratar adecuadamente al paciente. Algunas técnicas de
clasificación de Savary--Miller, pero en 1994 un grupo tinción o cromatoscopia que utilizan sustancias como
de expertos mundiales se reunieron en la ciudad de Los lugol o azul de metileno permiten realzar las caracterís-
Ángeles, California, para estandarizar las clasificacio- ticas macroscópicas de los diferentes tejidos basándose
nes existentes hasta la fecha, las cuales no sólo facilitan en su capacidad para absorber dichos colorantes y así di-
el reporte de los hallazgos durante un estudio sino que, rigir la toma de las biopsias para obtener mejores y más
a nivel mundial, todas las investigaciones y todos los certeros diagnósticos.
endoscopistas utilizan la misma terminología. Esta cla- En épocas recientes se propuso una estrategia para
sificación de Los Ángeles categoriza las lesiones erosi- medir de manera objetiva y sistemática el grado de
vas encontradas durante un estudio endoscópico con le- extensión de la metaplasia intestinal. Primero se debe
tras del alfabeto que van de la A a la D de acuerdo con localizar el sitio donde terminan los pliegues gástricos,
la extensión y la gravedad de las lesiones. La esofagitis aun cuando formen parte de una hernia hiatal; después
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grado “A” se refiere a la presencia de erosiones longitu- se miden los centímetros hasta donde la metaplasia
dinales menores de 5 mm de longitud, no confluentes forma un anillo circunferencial, sin tomar en cuenta las
entre ellas. La esofagitis grado “B” se refiere a la pre- lengüetas o elongaciones del esófago de Barrett —esta
sencia de erosiones longitudinales mayores de 5 mm de medida corresponde a la circunferencia o “C” —; y fi-
longitud, no confluentes entre ellas. La esofagitis grado
“C” se refiere a la presencia de erosiones mayores de 5 Cuadro 5--4. Indicaciones para la realización
mm de longitud, confluentes entre ellas en dos crestas de manometría esofágica
epiteliales contiguas sin ocupar más de 75% de la cir- 1. Diagnóstico de trastornos motores primarios del esófago
cunferencia del esófago. La esofagitis grado “D” se re- 2. Localización del esfínter esofágico inferior antes de la
fiere a la presencia de erosiones mayores de 5 mm de pHmetría
longitud, confluentes entre ellas en dos o más crestas 3. Valoración de la motilidad esofágica previamente a la
epiteliales contiguas, que ocupan más de 75% de la cir- cirugía antirreflujo
cunferencia del esófago. Los grados A y B se consideran 4. Valoración de la disfagia posterior a la cirugía antirreflujo
48 Gastroenterología clínica (Capítulo 5)
Manometría
Figura 5--7. Clasificación de Los Ángeles, que estadifica las diferentes lesiones epiteliales encontradas durante la endoscopia
realizada en los pacientes con ERGE erosiva.
Enfermedad por reflujo gastroesofágico 49
Monitoreo de pH esofágico de 24 h
(pHmetría)
Anormal Normal
Positivo Negativo
Esófago Pirosis
hipersensible funcional
Figura 5--8. Algoritmo de estudio en pacientes con síntomas de ERGE y endoscopia normal. Se ilustran las variantes de esófago
hipersensible y de pirosis funcional con base en el resultado del índice de síntomas.
nueva molécula 10 veces más potente, con una mejor to- cionan con la disminución del EEI (grasa, choco-
lerabilidad y con menos efectos secundarios: la ranitidi- late, café, alcohol, bebidas carbonatadas, menta y
na, la cual constituía el medicamento más vendido a otros carminativos), así como realizarlas al menos
nivel mundial para el año 1988. Con estos nuevos medi- entre 3 y 4 horas antes de acostarse, para facilitar
camentos, la historia del tratamiento de las enfermeda- el vaciamiento gástrico y reducir el volumen del
des relacionadas con el ácido, como la ERGE, dio un giro contenido que pueda refluir al esófago.
importante, dejando a la cirugía como una alternativa de 3. Mantener un peso corporal adecuado y utilizar
manejo en complicaciones y eventos de emergencia. ropa holgada, para evitar el aumento de la presión
A finales del siglo pasado, el conocimiento más com- intraabdominal. Hay que evitar el ejercicio físico
pleto de la célula parietal y sus mecanismos de secre- después de comer, ya que también favorece el au-
ción ácida, específicamente de la bomba de protones mento de dicha presión.
H+K+ATPasa, permitió que en 1989 se lanzara al merca- 4. Dejar de fumar, ya que, además de que el tabaco
do una nueva generación de medicamentos capaces de relaja el EEI, favorece la mala calidad y cantidad
bloquear casi en su totalidad la secreción ácida del estó- de saliva que ayuda a la neutralización del ácido
mago, prácticamente libres de efectos adversos. El pri- adherido al esófago a través del aclaramiento quí-
mero en aparecer fue el omeprazol (1989), seguido del mico del mismo.
lansoprazol (1995), el rabeprazol (1999) y el pantopra-
zol (2000). Para 2001, la Administración de Alimentos Aunque estas y otras medidas específicas de cada región
y Medicamentos de EUA (FDA) aprobó el primer medi- geográfica son sugeridas para casi todos los pacientes
camento perteneciente a la segunda generación de inhi- que sufren de ERGE, sólo algunas de ellas, ante un rigu-
bidores de la bomba de protones: el esomeprazol, cuya roso análisis estadístico, han demostrado su validez o
característica bioquímica lo sitúa como isómero de una superioridad al ser comparadas contra cualquier pla-
sal específica, lo cual le permite disminuir la diferencia cebo utilizado e incluso contra la ausencia de aplicación
genética entre un individuo y otro en el metabolismo del de las mismas. Lo que científicamente ha demostrado
medicamento. una verdadera utilidad es el hecho de dormir en posición
de decúbito lateral izquierdo, evitar el consumo de bebi-
das carbonatadas y realizar ejercicio después de los ali-
Medidas higiénicas dietéticas mentos.
vacío su acción dura entre 20 y 60 min, por lo que la do- venta mundial después de la AspirinaR. Estos medica-
sis recomendada es de 0.5 a 1 mL/kg/dosis en un total mentos no sólo lograron controlar los síntomas típicos
de 4 a 8 dosis al día, administrado entre 1 y 3 h después de la ERGE por más tiempo y de manera más duradera,
de los alimentos. sino que también lograron cicatrizar las lesiones erosi-
Existe una nueva generación de antiácidos que no se vas y ulcerosas de los pacientes con ERGE en un tiempo
limitan exclusivamente a la neutralización del HCl, sino menor y con una alta tasa de éxito. El porcentaje de cu-
que poseen propiedades que les ayudan a depositarse ración de la esofagitis con ARH2 oscila alrededor de
exclusivamente en los sitios donde el epitelio tiene al- 52.0%, en comparación con el placebo, que apenas su-
gún tipo de lesión, gracias a su capacidad para reaccio- pera 20%.
nar con los cambios eléctricos a nivel de membrana Los antagonistas de los receptores H2 (ARH2) inhi-
cuando éstos han desaparecido, o bien a su facilidad ben la secreción de ácido gástrico mediada por la hista-
para unirse a las sales biliares, evitando el daño que pro- mina y otros ARH2 de manera competitiva, con una
ducen en el epitelio sano. Algunos de estos nuevos anti- acción que depende de la dosis (el grado de inhibición
ácidos son el sucralfato, el almagato, el magaldrato y la es proporcional a la concentración del fármaco en el
hidrotalcita. plasma). Asimismo, inhiben la secreción de ácido me-
Aunque pueden favorecer el control de la pirosis en diada por la gastrina y la dependiente de los agonistas
forma rápida en algunos pacientes con ERGE leve a mo- muscarínicos, aunque en menor medida. Los ARH2 se
derada, el tiempo de acción es muy limitado y no mues- absorben con rapidez y eficacia después de la adminis-
tran ninguna superioridad sobre otros medicamentos, tración oral; sin embargo, están sujetos al metabolismo
como los antagonistas de los receptores H2 de histamina hepático y en los niños tienen un mayor aclaramiento
(ARH2) o los IBP. renal (70%) que en los adultos; por lo tanto, en presencia
de trastorno renal se requiere reducir la dosificación. La
ranitidina tiene un mayor metabolismo hepático, por lo
Procinéticos que en pacientes con insuficiencia hepática es necesario
disminuir la dosis. Los efectos secundarios más fre-
cuentes de la cimetidina son la cefalalgia, los mareos,
Los procinéticos pueden emplearse en pacientes selec-
las náuseas, las mialgias, la pancitopenia, los trastornos
cionados ya que han demostrado un leve incremento en
de la función inmunitaria, la ginecomastia, la colestasis
la ganancia terapéutica. Adicionalmente existen estu-
y un leve incremento de la concentración plasmática de
dios clínicos en los cuales se ha evaluado la eficacia de
creatinina. Con el uso de ranitidina se han referido efec-
la coadministración de procinéticos con inhibidores de
tos similares, aunque son menos frecuentes.
la bomba de protones, mostrando resultados positivos
en su uso de manera conjunta.
Los procinéticos existentes en la actualidad son la Inhibidores de la bomba
cisaprida, restringida en pacientes que tienen enferme-
de protones H+K+ATPasa
dad vascular concomitante; la metoclopramida y la
domperidona, que poseen algunos efectos secundarios
Sin duda, son el mejor grupo de medicamentos para el
a nivel del sistema nervioso central, y la cinitaprida, la
tratamiento de la ERGE en cualquiera de sus formas y
cual no tiene efectos adversos y, por lo tanto, presenta
etapas clínicas. El primero en aparecer fue el omeprazol
mayor seguridad en su empleo.
(1989), seguido del lansoprazol (1995), el rabeprazol
La evidencia disponible en la actualidad con otros
(1999) y el pantoprazol (2000). En 2001 la FDA aprobó
agentes promotores de la motilidad, como el tegaserod
el esomeprazol, el último de los inhibidores de la bomba
y el baclofén, es insuficiente para poder recomendar su
manejo en pacientes con ERGE. de protones (IBP) comercializado en México. Desde su
inicio han demostrado en forma clara y contundente su
superioridad en el tratamiento de la ERGE, tanto en el
control de la pirosis y otros síntomas atípicos como en
Antagonistas de los receptores H2 la cicatrización de las lesiones epiteliales (figura 5--9).
En términos generales, todos los IBP son lo mismo,
Fueron introducidos en 1976 y con la cimetidina se dio pero existen algunas diferencias entre ellos que mere-
un giro completo y definitivo en el manejo de las enfer- cen ser mencionadas. Se ha comentado la ventaja del
medades relacionadas con el ácido. En 1981 se aprobó pantoprazol acerca de su menor metabolismo hepático
la ranitidina y se convirtió en el medicamento de mayor y, por ende, menor riesgo de interacciones con otros me-
Enfermedad por reflujo gastroesofágico 53
Figura 5--9. Gráficas comparativas que muestran el porcentaje de éxito en el control de los síntomas y en la curación de la esofagi-
tis después de ocho semanas de uso de IBP, ARH2 y placebo (Chiba N: Gastroenterology, 1997).
dicamentos que se metabolizan a nivel del citocromo único factor que hasta el momento ha demostrado la ne-
P450, lo cual evita el ajuste de dosis en pacientes de ma- cesidad de vigilancia es el nivel de vitamina B12.
yor edad. Existen estudios que indican una mayor rapi- Nadie duda en la actualidad de la potencia, eficacia y
dez de acción en el control de los síntomas con uso de seguridad a corto y largo plazo de los IBP. Sus indicacio-
lansoprazol y rabeprazol; sin embargo, el desarrollo de nes clínicas cada vez son más claras y mejor demostradas
nuevos compuestos, como el esomeprazol —un isóme- en ensayos clínicos bien diseñados, con estrategias de
ro óptico del omeprazol—, ha logrado entre 45 y 47% tratamiento a largo plazo y con mejor costo--beneficio
de pacientes libres de pirosis en el primer día de trata- y mejor costo--eficacia para los pacientes. Aún falta es-
miento, en comparación con el omeprazol (de 32 a tablecer su utilidad y seguridad entre la población pe-
37%), así como una semana completa sin síntomas des- diátrica. Por otro lado, durante el embarazo los IBP re-
pués del quinto día de tratamiento (omeprazol = 8 a 9 presentan la primera línea de tratamiento en el espectro
días). En estos estudios, la desaparición de la sintomato- de la ERGE, tanto en el manejo inicial como en el trata-
logía se correlacionó en forma más fidedigna con la miento de mantenimiento con una estrategia continua,
curación de la esofagitis en 83% de los casos (omepra- intermitente o a libre demanda.
zol = 73%), ofreciendo ganancias terapéuticas totales Es oportuno comentar la función de los IBP no sólo
de entre 11 y 13%, independientemente del grado de en el tratamiento, sino también en el diagnóstico de la
esofagitis. El esomeprazol ha sido estudiado en estrate- ERGE o de los síntomas relacionados con el ácido. La
gias de tratamiento a largo plazo y en el caso de la “libre manera de hacerlo se basa en la llamada “prueba tera-
demanda” promedia una toma cada tres días con resulta- péutica” o “tratamiento de prueba”. Al principio, tanto
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
dos clínicos similares a la estrategia de dosis continua. el doctor Ronnie Fass como el doctor Sammy Achem
A pesar de su eficacia, la principal preocupación establecieron la utilidad de esta prueba en pacientes con
acerca del uso de los IBP sigue siendo la seguridad en dolor torácico de origen indeterminado. Consiste en ad-
su uso a largo plazo. Entre los principales aspectos refe- ministrar un curso de IBP con dosis doble antes del de-
rentes a la seguridad farmacológica de estos compues- sayuno y dosis estándar antes de la cena durante un pe-
tos se encuentran la hiperplasia de las células parecidas riodo de dos semanas y en valorar el control e incluso
a las enterocromafines (ECL), la aparición de tumores la desaparición de los síntomas en un paciente. De esta
carcinoides, la gastropatía atrófica, el sobrecrecimiento manera se podía inferir la relación de los síntomas con
bacteriano, las infecciones enterales y la malabsorción la presencia de ácido en el esófago. Más tarde, esta prue-
de grasas, vitaminas y minerales. Los estudios realiza- ba sufrió modificaciones y en la actualidad se utiliza a
dos a diferentes niveles confirman la seguridad de di- dosis estándar antes del desayuno y antes de la cena du-
chos compuestos a largo plazo, incluso a dosis tan altas rante dos semanas, para establecer en forma empírica la
como 120 a 140 mg al día en el caso del gastrinoma; el presencia de ERGE. Es obvio que esta prueba sólo se in-
54 Gastroenterología clínica (Capítulo 5)
dica en pacientes menores de 45 años, con síntomas de eficaces y seguros en la historia de la farmacología mé-
ERGE de reciente inicio y sin datos de alarma. dica, cuyo único contra es una disminución en los nive-
Las estrategias para el manejo de las diferentes pre- les de vitamina B12 en algunos pacientes. Para que una
sentaciones clínicas de la ERGE son distintas. En el persona requiera suplementos de esta vitamina es nece-
caso de la ERGE erosiva se establece el uso de IBP al sario no consumirla durante al menos seis meses, lo cual
menos durante ocho semanas, ya que sólo en este tiem- es difícil que ocurra en las poblaciones urbanas.
po se pueden alcanzar tasas de cicatrización de las ero- Un concepto importante que hay que tomar en cuenta
siones mayores de 90%. En algunos casos de esofagitis es la presencia de ERGE refractaria al tratamiento mé-
grados C y D de Los Ángeles se pueden llegar a requerir dico, la cual se define como la falla para lograr una com-
hasta 12 semanas. En el caso de la ERGE no erosiva el pleta curación de la esofagitis y una respuesta satisfac-
control de los síntomas no es tan exitoso, ya que oscila toria sintomática después de haber concluido un curso
entre 60 y 65% en el mejor de los casos. Esto demuestra completo de dosis estándar de IBP.
la complejidad de la fisiopatología en la producción de Se estima que la incidencia de ERGE refractaria al
los síntomas en los pacientes con esta afección, y es en tratamiento ocurre en cerca de 30% de los casos y que
ellos donde la impedancia eléctrica intraluminal pudie- antes de establecerla como diagnóstico se debe descar-
ra tener alguna utilidad clínica. De hecho, se ha visto tar el hecho de la falta de apego del paciente al trata-
que en un grupo de pacientes con ERGE no erosiva el miento, la presencia del fenómeno de fuga ácida noc-
uso de medicamentos tricíclicos a dosis bajas puede me- turna, el metabolismo acelerado del medicamento por
jorar e incluso controlar los síntomas. En el esófago de parte del paciente, la presencia de reflujos no ácidos y
Barrett el uso de IBP debe ser indefinido, sin importar la hipersensibilidad esofágica, entre otras.
los síntomas, ya que la sola presencia de esta metaplasia
supone el cambio en la sensibilidad del tejido al ácido. Cirugía
En los pacientes jóvenes con esófago de Barrett y buena
respuesta al control del ácido con IBP se debe tomar en Es el mejor tratamiento para los pacientes con síntomas
cuenta la posibilidad del manejo quirúrgico ante la posi- típicos y buena respuesta clínica a los IBP, y para los que
bilidad de consumir IBP durante toda la vida. no padezcan otras patologías u otras variantes de la
Un aspecto especial del manejo de la ERGE es la pre- ERGE (cuadro 5--6).
sencia de sus manifestaciones atípicas. Como se sabe, Su éxito se basa en la corrección de la barrera antirre-
la conducta actual consiste en el empleo de IBP a dosis flujo, que evita no sólo el regreso del ácido, sino de todo
doble, como el omeprazol de 20 mg o su equivalente an- el contenido gástrico, incluidos la pepsina, las sales
tes del desayuno y antes de la cena durante 14 días. Si biliares, el alimento y otros factores que pueden ser no-
hay una respuesta favorable en la disminución de los civos. Esto supone un mayor control durante un mayor
síntomas, entonces se puede considerar que el paciente tiempo, incluso en situaciones especiales como el esó-
responderá a este tratamiento en el largo plazo. Se indi- fago de Barrett.
can al menos tres meses continuos de manejo para todas En cuanto a la técnica quirúrgica se sugiere utilizar
las manifestaciones relacionadas con la ERGE, como la la de Nissen de 360_, ya que ha demostrado mejores
laringitis posterior, la tos crónica, el asma y las caries resultados en el control de la ERGE a largo plazo. Aun-
dentales. que esta técnica no difiere por el tipo de acceso, en la ac-
Los trabajos recientes señalan que, cuando en tres tualidad se prefiere el procedimiento laparoscópico, que
meses no hay una mejoría o un control de los síntomas, ofrece más ventajas de visualización durante la cirugía,
es difícil que dichos síntomas estén relacionados con menos invasión y una recuperación en un tiempo más
ERGE, por lo que se indica continuar el estudio del pa- corto. Como es de suponer, el tratamiento quirúrgico re-
ciente orientado a otras patologías.
Finalmente, hay dos aspectos importantes del mane-
jo de la ERGE con IBP. Por ser la ERGE una patología Cuadro 5--6. Indicaciones para
crónica y recurrente se debe utilizar un tratamiento de la realización de cirugía antirreflujo
mantenimiento, que valore la dosis eficaz mínima que 1. Pacientes con ERGE erosiva con buena respuesta a IBP
garantice el control de los síntomas y la aparición de re- 2. Pacientes que requieren de altas dosis continuas de IBP
caídas. Algunos detractores de los IBP han propuesto 3. Esófago de Barrett
que su uso prolongado puede tener diversos efectos co- 4. Pacientes jóvenes que reúnan las indicaciones anteriores
laterales; sin embargo, la prueba del tiempo los ha colo- 5. Pacientes que no desean continuar con la toma del IBP
cado como uno de los grupos de medicamentos más (relativa)
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balón que, al ser insuflado en el tercio distal del esófago, tintivas, el diagnóstico definitivo se realiza mediante
hace que las agujas penetren en la capa submucosa y una histopatología, que confirma la presencia de glán-
muscular provocando una lesión térmica mediante la ra- dulas productoras de moco en un epitelio intestinal me-
diofrecuencia que se les aplica. taplásico.
La consecuente cicatrización de estas quemaduras La posibilidad de encontrar Barrett en una endosco-
aumenta el tono y favorece el incremento de la presión pia oscila entre 6 y 8%, y la probabilidad de que este epi-
del EEI. telio se transforme en adenocarcinoma es de 0.5% al
Se sugiere utilizar este método en pacientes con her- año.
nia hiatal menor de 2 cm de longitud, sin erosiones eso- Se recomienda la vigilancia de los pacientes con
fágicas y con buena respuesta a los IBP, por lo que se endoscopia y biopsias circunferenciales de cada 2 cm
cuestiona mucho su verdadera utilidad clínica, ya que durante periodos de tres años cuando se detecta meta-
no ofrece ninguna ventaja en comparación con los otros plasia intestinal, de 6 a 12 meses cuando se confirma
esquemas de tratamiento médico o quirúrgico. displasia de bajo grado y cada tres meses cuando se con-