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Higiene para no higienistas

Por: Cesar Augusto Alvarino Cruz


Ingeniero en Salud Ocupacional
Ponencia presentada en el 36 Congreso de Seguridad Salud y Ambiente
Consejo Colombiano de Seguridad
Colombia
Agosto 2003

La actividad laboral es indispensable para la vida, el desarrollo y el crecimiento


personal, elementos positivos en una sociedad. Estas actividades laborales
implican unos procesos, unas operaciones y el uso de materiales y sustancias que
generan, en mayor o menor medida, riesgos para la salud de los trabajadores, las
comunidades vecinas y el medio ambiente en general.

Estos factores perturbadores presentes en el medio ambiente de trabajo pueden


prevenirse mediante intervenciones adecuadas, que no solo protegen la salud de
los trabajadores, sino que reducen también los daños al medio ambiente que
suelen ir asociados al desarrollo económico. Cuando se elimina una sustancia
química nociva de un proceso de trabajo, ésta dejará de afectar la salud de los
trabajadores y contaminar el medio ambiente.

Palabras claves: HIGIENE INDUSTRIAL, HIGIENISTA INDUSTRIAL, RIESGOS


LABORALES, MEDIO AMBIENTE DE TRABAJO.

La profesión que se dedica específicamente a la prevención y control de los


riesgos originados por los procesos de trabajo es la higiene industrial. Los
objetivos de la higiene industrial son la protección y la promoción de la salud de
los trabajadores, la protección del medio ambiente y la contribución a un desarrollo
seguro y sostenible.

Las acciones preventivas de la higiene industrial se inician antes de que se


manifieste cualquier daño para la salud o antes de que se produzca la exposición,
por lo que el medio ambiente de trabajo debe ser monitoreado continuamente para
detectar, eliminar y controlar los agentes y factores peligrosos antes de que
causen un efecto nocivo, acciones que también contribuyen a un desarrollo seguro
y sostenible. Para atender las necesidades de la actual población mundial sin
agotar ni dañar los recursos mundiales y sin generar consecuencias negativas
para la salud y el medio ambiente, hacen falta conocimientos y medios para influir
en la acción (OMS 1992a); esto, aplicado a los procesos de trabajo, está
estrechamente relacionado con la práctica de la higiene industrial.
La salud en el trabajo requiere un enfoque interdisciplinario con la participación de
disciplinas fundamentales, una de las cuales es la higiene industrial, además de
otras como la medicina, la enfermería, la ergonomía y la psicología del trabajo,
razones por los cuales las directivas de las empresas, los trabajadores y demás
profesionales de la salud ocupacional deben conocer el rol del higienista industrial
en la protección de la salud de los trabajadores y el medio ambiente, y la
importancia de contar con recursos especializados en este ramo.

Asimismo es bueno recordar sobre la estrecha relación que existe entre la salud
en el trabajo y la salud ambiental, ya que el control de la contaminación de fuentes
industriales, mediante procesos adecuados de tratamiento y evacuación de
residuos y desechos peligrosos, se inicia en el lugar de trabajo.

La higiene industrial es la ciencia de la anticipación, la identificación, la evaluación


y el control de los riesgos que se originan en el lugar de trabajo o en relación con
él y que pueden poner en peligro la salud y el bienestar de los trabajadores,
teniendo también en cuenta su posible repercusión en las comunidades vecinas y
en el medio ambiente en general.

Existen diferentes definiciones de la higiene industrial, aunque todas ellas tienen


esencialmente el mismo significado y se orientan al mismo objetivo fundamental
de proteger y promover la salud y el bienestar de los trabajadores, así como
proteger el medio ambiente en general, a través de la adopción de medidas
preventivas en el lugar de trabajo.

Competencias del higienista industrial

El higienista industrial estará en capacidad de desarrollar las siguientes funciones


y actividades:

 Prever los riesgos para la salud que pueden originarse como resultado de
procesos de trabajo, operaciones y equipos.
 Identificar y conocer, en el medio ambiente de trabajo, la presencia (real o
potencial) de agentes químicos, físicos y biológicos y otros factores de riesgo,
así como su interacción con otros factores que pueden afectar a la salud y el
bienestar de los trabajadores.
 Conocer las posibles vías de entrada de agentes en el organismo humano y los
efectos que esos agentes y otros factores pueden tener en la salud.
 Valorar la exposición de los trabajadores a agentes y factores potencialmente
nocivos.
 Evaluar los procesos y los métodos de trabajo, desde el punto de vista de la
posible generación y emisión/propagación de agentes y otros factores
potencialmente nocivos, con el objeto de eliminar la exposición o reducirla a
niveles aceptables.
 Diseñar y recomendar estrategias de control y evaluar su eficacia, solo o en
colaboración con otros profesionales para asegurar un control eficaz y
económico.
 Participar en el análisis del riesgo global y la gestión de un agente, proceso o
lugar de trabajo, y contribuir al establecimiento de prioridades para la gestión
de riesgos.
 Conocer el marco legal para la práctica de la higiene industrial.
 Educar, formar, informar y asesorar a personas de todos los niveles en todos
los aspectos de la comunicación de riesgos.
 Trabajar con eficacia en un equipo interdisciplinario en el que participen
también otros profesionales.
 Identificar los agentes y factores que pueden tener un impacto medioambiental
y comprender la necesidad de integrar la práctica de la higiene industrial con la
protección del medio ambiente.

Técnicas de actuación de la higiene industrial

Las técnicas de actuación de la higiene industrial se relacionan a continuación:


Identificación de posibles peligros para la salud en el medio ambiente de trabajo.
Evaluación de los peligros, un proceso que permite valorar la exposición y extraer
conclusiones sobre el nivel de riesgo para la salud humana. Prevención y control
de riesgos, un proceso que consiste en desarrollar e implantar estrategias para
eliminar o reducir a niveles aceptables la presencia de agentes y factores nocivos
en el lugar de trabajo, teniendo también en cuenta la protección del medio
ambiente.

El enfoque ideal de la prevención de riesgos es “una actuación preventiva


anticipada e integrada”, que incluya:

 La evaluación de los efectos sobre la salud de los trabajadores y del impacto


ambiental, antes de diseñar e instalar, en su caso, un nuevo lugar de trabajo.
 La selección de la tecnología más segura, menos peligrosa y menos
contaminante (“Producción más Limpia”).
 El emplazamiento adecuado desde el punto de vista ambiental.
 El diseño adecuado, con una distribución y una tecnología de control
apropiadas, que prevea un manejo y una evacuación segura de los residuos y
desechos resultantes.
 La elaboración de directrices y normas para la formación del personal sobre el
correcto funcionamiento de los procesos, métodos seguros de trabajo,
mantenimiento y procedimientos de emergencia.
La importancia de anticipar y prevenir todo tipo de contaminación ambiental es
decisiva. En la actualidad, existe una creciente tendencia a considerar las nuevas
tecnologías desde el punto de vista de los posibles impactos negativos y su
prevención, desde el diseño y la instalación del proceso hasta el tratamiento de los
residuos y desechos resultantes, aplicando un enfoque integral. Los aspectos
económicos se deben orientar hacia la consecución de tecnologías que ofrezcan
una buena protección de la salud y del medio ambiente, a pesar de sus posibles
altos costos iniciales, inversiones que se recuperarán en el largo plazo, por los
beneficios obtenidos en la salud de los trabajadores y en la protección del medio
ambiente. La protección de la salud de los trabajadores y del medio ambiente
debe iniciarse mucho antes de lo que habitualmente se hace, por lo que los
responsables del diseño de nuevos procesos, maquinaria, equipos y lugares de
trabajo deberán disponer de información técnica y asesoramiento en higiene
industrial y ambiental.

Identificación de riesgos

La identificación de riesgos permite determinar:

 Los agentes de riesgo que pueden estar presentes y en qué circunstancias;


 La naturaleza y la posible magnitud de los efectos nocivos para la salud y el
bienestar.

La identificación de los agentes peligrosos, que pueden ser de origen químico,


físico o biológico, sus fuentes y las condiciones de exposición requiere un
conocimiento exhaustivo y un estudio detenido de los procesos y operaciones de
trabajo, las materias primas y las sustancias químicas utilizadas o generadas, los
productos finales y los posibles subproductos, así como la eventual formación
accidental de sustancias químicas, descomposición de materiales, quema de
combustibles o presencia de impurezas. La determinación de la naturaleza y la
magnitud potencial de los efectos biológicos que estos agentes pueden causar, si
se produce una exposición excesiva a ellos, requiere de la consulta de información
toxicológica. La identificación de los peligros según su origen se clasifican en:

Peligros químicos

Son sustancias químicas que penetran al organismo principalmente por inhalación,


absorción de la piel o ingestión. El efecto tóxico puede ser agudo, crónico o de
ambos tipos. En el medio ambiente se presentan en forma de gases, vapores,
líquidos y aerosoles (polvo, humo y nieblas). Los gases son sustancias que
pueden pasar a estado líquido o sólido por el efecto combinado de un aumento de
la presión y una disminución de la temperatura. Los vapores son la forma gaseosa
de sustancias que normalmente se encuentran en estado líquido o sólido a
temperatura ambiente y presión normal. Los líquidos pueden estar compuestos de
una sustancia pura o de una solución de dos o más sustancias. Las operaciones o
actividades con líquidos pueden producir salpicaduras u otros contactos con la
piel, además de vapores nocivos. El polvo se compone de partículas inorgánicas y
orgánicas, que pueden clasificarse como inhalables, torácicas o respirables,
dependiendo del tamaño de la partícula. El humo está formado por partículas
sólidas vaporizadas a elevada temperatura y condensadas en pequeñas
partículas. La niebla está compuesta por gotas de líquido en suspensión, que se
forman por condensación del estado gaseoso al pasar a estado líquido o por la
fragmentación de un líquido en un estado disperso por salpicadura, formación de
espuma o atomización.

Peligros biológicos

Los peligros biológicos pueden definirse como polvos orgánicos de distintas


fuentes de origen biológico, como virus, bacterias, hongos, proteínas animales o
sustancias vegetales, como productos de la degradación de fibras naturales. El
agente etiológico puede derivarse de un organismo viable o de contaminantes o
constituir un componente específico del polvo. Los peligros biológicos se dividen
en agentes infecciosos y no infecciosos. Los peligros no infecciosos pueden
dividirse a su vez en organismos viables (hongos, esporas y micotoxinas), toxinas
biógenas (endotoxinas, aflatoxinas y bacterias) y alérgenos biógenos (hongos,
proteínas de origen animal, terpenos, ácaros y enzimas). Las enfermedades
profesionales por agentes infecciosos son relativamente poco comunes. Los
trabajadores en situación de riesgo son los empleados de hospitales, el personal
de los laboratorios, los agricultores, los trabajadores de mataderos, los
veterinarios, los trabajadores de los zoológicos y los cocineros.

Peligros físicos

 Ruido: se considera ruido cualquier sonido no deseado que puede afectar


negativamente a la salud y el bienestar de las personas o poblaciones. Algunos
aspectos de los peligros del ruido son la energía total del sonido, la distribución
de frecuencias, la duración de la exposición y el ruido de impulso. La agudeza
auditiva es, en general, la primera capacidad que se ve afectada, con una
pérdida o reducción a 4.000 Hz, seguida de pérdidas en el rango de
frecuencias de 2.000 a 6.000 Hz. El ruido puede producir efectos agudos como
problemas de comunicación, disminución de la capacidad de concentración,
somnolencia y, como consecuencia, interferencia con el rendimiento laboral.
 Vibración: la vibración tiene algunos parámetros en común con el ruido:
frecuencia, amplitud, duración de la exposición y continuidad o intermitencia de
la exposición. El método de trabajo y la destreza del operador parecen
desempeñar un papel importante en la aparición de efectos nocivos a causa de
la vibración. El trabajo manual con herramientas motorizadas se asocia a
síntomas de trastornos circulatorios periféricos conocidos como “fenómeno de
Raynaud” o “dedos blancos inducidos por la vibración”. Las herramientas
vibratorias pueden afectar también al sistema nervioso periférico y al sistema
musculoesquelético, reduciendo la fuerza de agarre y causando dolor lumbar y
trastornos degenerativos de la espalda.

 Radiaciones ionizantes: el efecto crónico más importante de la radiación


ionizante es el cáncer, incluida la leucemia. La sobreexposición a niveles
relativamente bajos de radiación se ha asociado a dermatitis en las manos y
efectos en el sistema hematológico. Los procesos o actividades que pueden
originar una sobreexposición a radiación ionizante están muy restringidos y
controlados. Están los Reactores nucleares, tubos de rayos-x médicos y
dentales, aceleradores de partículas y radioisótopos.

 Radiaciones no ionizantes: la radiación no ionizante es la radiación


ultravioleta, la radiación visible, los rayos infrarrojos, los láseres, los campos
electromagnéticos (microondas y radiofrecuencia) y radiación de frecuencia
extremadamente baja. La radiación IR puede causar cataratas. Los láseres de
alta potencia pueden causar lesiones oculares y dérmicas. Existe una
preocupación creciente por la exposición a bajos niveles de campos
electromagnéticos como causa de cáncer y como causa potencial de efectos
adversos en la función reproductora de la mujer, especialmente por la
exposición a pantallas visualizadoras de datos. Todavía no se sabe con
certeza si existe una relación causal con el cáncer. No obstante, las revisiones
más recientes de los conocimientos científicos disponibles concluyen en
general que no existe asociación entre el uso de pantallas visualizadoras de
datos y efectos adversos para la función reproductora. Fuentes de Radiación
ultravioleta: soldadura y corte con arco eléctrico; tratamiento de tintas, colas,
pinturas, etc. con rayos UV; desinfección; control de productos Radiación
infrarroja: hornos, soplado de vidrio Láseres: comunicaciones, cirugía,
construcción.

 Temperaturas extremas: relacionadas con las exposiciones a calor y frío,


están en función de la temperatura y velocidad del aire en ambos casos. Para
el calor influye también la humedad relativa, la actividad física realizada por el
trabajador, el tipo de vestimenta empleada, el sobrepeso, la edad y el estilo de
vida que lleva. Las fuentes de exposición son las fundiciones, lavanderías,
textileras, trabajo a la intemperie, cámaras frigoríficas.

 Iluminación: es la energía visible del espectro electromagnético. La deficiencia


o excesiva iluminación pueden generar accidentes de trabajo o una baja
productividad. Las variables a tener en cuenta son la iluminancia, luminancia,
flujo luminoso, el contraste, el porcentaje de reflectividad de las superficies
limitantes de los locales de trabajo y el ambiente cromático.

Evaluaciones de higiene industrial

Las evaluaciones de higiene industrial se realizan para valorar la exposición de los


trabajadores y para obtener información que permita diseñar o establecer la
eficiencia de las medidas de control. La evaluación de riesgos se inicia en el
momento en que se descubre que determinado agente, capaz de producir un daño
para la salud, puede estar presente en el medio ambiente de trabajo, y concluye
con el control de ese agente para evitar que cause daños. La evaluación de
riesgos facilita la prevención de riesgos, pero en ningún caso la sustituye.

Evaluación de la exposición

El objetivo de la evaluación de la exposición es determinar la magnitud, frecuencia


y duración de la exposición de los trabajadores a un agente. La práctica de la
higiene industrial se ocupa de tres tipos de situaciones:

 Estudios iniciales para evaluar la exposición de los trabajadores.


 Control/vigilancia de seguimiento.
 Evaluación de la exposición para estudios epidemiológicos.

Una de las principales razones para determinar si existe una exposición excesiva
a un agente peligroso en el medio ambiente de trabajo es decidir si se necesita
alguna intervención. Esto consiste con frecuencia, aunque no siempre, en
comprobar si se respeta una norma adoptada, que suele expresarse en términos
de un límite de exposición profesional.

Las evaluaciones de seguimiento son necesarias en numerosas ocasiones,


especialmente cuando existe la necesidad de instalar o mejorar las medidas de
control o cuando se prevén cambios en los procesos o materiales utilizados.
Siempre que se realiza una evaluación de higiene industrial en relación con un
estudio epidemiológico para obtener datos cuantitativos sobre la relación entre
exposición y efectos para la salud, las características de la exposición deben
describirse con un alto grado de exactitud y precisión. Para que los datos de la
evaluación sean representativos de la exposición de los trabajadores y para no
malgastar recursos, debe diseñarse y aplicarse una estrategia adecuada de
muestreo, teniendo en cuenta todas las posibles fuentes de variabilidad.

Interpretación de los resultados

El grado de incertidumbre en la estimación de un parámetro de la exposición,


como la concentración media real de un contaminante atmosférico, se determina
mediante el tratamiento estadístico de los resultados obtenidos de diferentes
mediciones. La fiabilidad de los resultados dependerá del coeficiente de variación
del “sistema de medición” y del número de mediciones. Una vez lograda una
fiabilidad aceptable en los resultados, el siguiente paso consiste en considerar las
consecuencias de la exposición para la salud de los trabajadores.

El proceso de evaluación termina sólo cuando se interpretan los resultados de las


mediciones. Estos resultados suelen compararse con los límites de exposición
profesional adoptados, cuya finalidad es ofrecer una orientación para evaluar los
riesgos y establecer objetivos de control. Cuando la exposición supera esos
límites, es preciso adoptar de inmediato una acción correctora, ya sea mejorando
las medidas de control existentes o introduciendo nuevos controles. Las
intervenciones preventivas se inician cuando la exposición alcanza el “nivel de
acción”, que varía según el país (p. ej., la mitad o la quinta parte del límite de
exposición profesional). Un nivel de acción bajo es la mejor garantía para evitar
problemas en el futuro.

Mediciones de control

Las mediciones que tienen como finalidad investigar la presencia de agentes y las
pautas de los parámetros de exposición en el medio ambiente de trabajo pueden
ser extremadamente útiles para planificar y diseñar medidas de control y métodos
de trabajo. Los objetivos de estas mediciones son:

 Identificar y caracterizar las fuentes contaminantes.


 Localizar puntos críticos en recintos o sistemas cerrados.
 Comparar diferentes intervenciones de control.

Las mediciones son también necesarias para evaluar la eficiencia de las medidas
de control.

Prevención y control de riesgos


El principal objetivo de la higiene industrial es la aplicación de medidas adecuadas
para prevenir y controlar los riesgos en el medio ambiente de trabajo. La
aplicación de las normas y reglamentos para proteger la salud de los trabajadores,
suele exigir la implantación de estrategias tanto de vigilancia como de control.
Cuando es evidente que existen riesgos graves, deben introducirse controles
incluso antes de realizar evaluaciones cuantitativas. En algunas ocasiones, puede
ser necesario sustituir el concepto clásico de “identificación-evaluación-control” por
el de “identificación-control-evaluación”, o incluso por el de “identificación-control”,
si no existen recursos para evaluar los riesgos. Las medidas de control pueden
clasificarse en tres grandes grupos: controles técnicos, prácticas de trabajo y
medidas personales.

El enfoque más eficiente para prevenir riesgos consiste en introducir controles


técnicos que eviten las exposiciones profesionales, actuando en el medio
ambiente de trabajo. Las medidas técnicas suelen exigir la modificación de
algunos procesos o estructuras mecánicas. Su finalidad es eliminar o reducir el
uso, la generación o la emisión de agentes peligrosos en la fuente o, cuando no se
pueda eliminar la fuente, prevenir o reducir la propagación de agentes peligrosos
en el medio ambiente de trabajo: Encerrándolo; eliminándolos en el momento en
que salen de la fuente; interfiriendo en su propagación y reduciendo su
concentración o intensidad.

Las prácticas de trabajo constituyen una parte importante del control; por ejemplo,
en relación con trabajos en los que la postura del trabajador puede influir en la
exposición, según se incline más o menos. La postura del trabajador puede afectar
a las condiciones de exposición (zona de respiración con relación a la fuente
contaminante, posibilidad de absorción por la piel).

Por último, la exposición profesional puede evitarse o reducirse colocando una


barrera protectora ante el trabajador, en el punto crítico de entrada del agente
peligroso (boca, nariz, piel, oídos), es decir, mediante el uso de instrumentos de
protección personal. No obstante, antes de recurrir a este tipo de equipo, deben
estudiarse todas las demás posibilidades de control, ya que constituye el medio
menos satisfactorio para el control rutinario de la exposición, especialmente a
contaminantes atmosféricos.

Otras medidas preventivas personales son la educación y la formación, la higiene


personal y la limitación de la duración de la exposición. Las evaluaciones
continuas mediante controles ambientales y vigilancia médica deben formar parte
de toda estrategia de control y prevención de riesgos.

Los aspectos que deben tenerse en cuenta para seleccionar una estrategia y una
tecnología de control adecuadas son el tipo de agente peligroso (naturaleza,
estado físico, efectos para la salud, vías de entrada en el organismo), el tipo de
fuente(s), la magnitud y las condiciones de la exposición, las características del
lugar de trabajo y la ubicación relativa de los puestos de trabajo. Las medidas de
control deben integrarse en programas de prevención y control de riesgos,
dotados de unos objetivos claros y una gestión eficiente, en los que participen
equipos interdisciplinarios formados por higienistas industriales y otros
profesionales de la salud y la seguridad en el trabajo, técnicos de producción,
directivos y trabajadores.

Tales programas deben abarcar también aspectos como la comunicación de los


riesgos, la educación y la formación sobre prácticas seguras de trabajo y
procedimientos de emergencia.

Asimismo, deben considerarse los aspectos relacionados con la promoción de la


salud, puesto que el lugar de trabajo es un entorno ideal para promover estilos de
vida saludables en general y para alertar sobre los peligros de las exposiciones no
profesionales.

Conexiones entre la salud en el trabajo y la salud ambiental

La principal conexión existente entre el lugar de trabajo y el medio ambiente


general es que la fuente de peligro suele ser la misma, ya se trate de una actividad
agrícola o industrial. Para controlar el peligro sobre la salud, puede resultar eficaz
en ambos casos un enfoque común. Así ocurre especialmente a la hora de elegir
tecnologías químicas para la producción. Si se puede obtener un resultado o un
producto aceptable con una sustancia química menos tóxica, la elección de dicha
sustancia química puede reducir o incluso eliminar el riesgo para la salud. En
muchos casos, sobre todo en el mundo en desarrollo, no hay separación entre el
hogar y el lugar de trabajo, de modo que el entorno es en realidad el mismo.

Está ampliamente aceptado que los conocimientos científicos y la capacitación


que se requieren para evaluar y controlar los peligros para la salud de origen
ambiental son en su mayoría los mismos que se precisan para abordar los peligros
para la salud en el lugar de trabajo. La toxicología, la epidemiología, la higiene en
el trabajo, la ergonomía y la ingeniería de la seguridad son los instrumentos
básicos de la ciencia del medio ambiente. El proceso de evaluación y gestión de
riesgos es también el mismo: identificación de los peligros, clasificación de los
riesgos, evaluación de la exposición y estimación del riesgo. Los pasos siguientes
son evaluar las opciones de control, controlar la exposición, dar a conocer el
riesgo al público y establecer un programa continuo de vigilancia de la exposición
al riesgo. Así pues, la salud en el trabajo y la salud ambiental están estrechamente
ligadas por metodologías comunes, especialmente en materia de evaluación de la
salud y control de la exposición. En muchas ocasiones se han identificado peligros
para la salud de origen ambiental a partir de observaciones de consecuencias
adversas sobre la salud de los trabajadores, y es indudable que en el lugar de
trabajo es donde mejor se comprende el efecto de las exposiciones industriales.
Para llevar a cabo un estudio epidemiológico es necesario poder determinar tanto
la población expuesta como la naturaleza y el nivel de la exposición, así como
comprobar el efecto perjudicial sobre la salud. Suele ser más fácil definir los
miembros de una población laboral que los componentes de una comunidad,
especialmente en una comunidad muy cambiante; la naturaleza y el nivel de la
exposición a que están sometidos los distintos miembros de la cohorte suelen
estar más claros en una población laboral que en una comunidad; y los resultados
de altos niveles de exposición son casi siempre más fáciles de delimitar que
cambios más sutiles atribuibles a un bajo nivel de exposición. Dado que los
resultados negativos para la salud son más evidentes en los trabajadores, se ha
utilizado la información sobre los efectos de la exposición en el trabajo a
sustancias tóxicas para calcular el riesgo que presentan esos factores para la
salud de la comunidad en general. La epidemiología Ocupacional ha contribuido
en gran medida al conocimiento de los efectos de la exposición ambiental, lo que
constituye una razón más para vincular estos dos ámbitos.

A escala individual, la enfermedad profesional afecta al bienestar en el hogar y en


la comunidad y, en general, una persona que tiene problemas de salud por
insuficiencias en el hogar y en la comunidad no puede ser productiva en el lugar
de trabajo. Desde un punto de vista estrictamente científico, para realizar una
auténtica evaluación de efectos sobre la salud y establecer las relaciones dosis-
respuesta es necesario tener en cuenta las exposiciones totales (ambientales más
profesionales). Un ejemplo clásico es la exposición a plaguicidas: la exposición en
el lugar de trabajo puede verse considerablemente incrementada por la exposición
en el medio ambiente, a través de la contaminación de los alimentos y las fuentes
de agua, y de la exposición no profesional transmitida por el aire. Para
comprender la relación existente entre la exposición a plaguicidas y cualquiera de
los efectos sobre la salud notificados se han de tener en cuenta todas las fuentes
de exposición. En consecuencia, la evaluación simultánea de la exposición en el
lugar de trabajo y la exposición ambiental mejora la precisión de la misma en los
dos ámbitos. En los países desarrollados se observa una tendencia a la utilización
más eficiente de los recursos formando y empleando a profesionales en “salud en
el trabajo y salud ambiental”, unión que se operacionaliza a través de las políticas
integradas en salud ambiente y laboral.

Al diseñar los lugares de trabajo y decidir la estrategias de control en materia de


higiene industrial se han de tener en cuenta cuestiones ambientales de carácter
general. Sustituir una sustancia por otra que no sea tan tóxica puede tener sentido
desde el punto de vista de la salud en el trabajo, pero si esa nueva sustancia no
es biodegradable o daña la capa de ozono no será una solución adecuada para
controlar la exposición —lo único que se haría es trasladar el problema a otro sitio.
El empleo de los clorofluorocarbonos, que hoy se utilizan mucho como
refrigerantes en lugar del amoníaco, sustancia más peligrosa, es el ejemplo
clásico de lo que hoy sabemos que fue una sustitución inadecuada desde el punto
de vista ambiental. Así pues, al vincular la salud en el trabajo y la salud ambiental
se reduce el riesgo de adoptar decisiones erróneas en materia de control de las
exposiciones. Del mismo modo que la comprensión de los efectos sobre la salud
de diversas exposiciones perjudiciales ha partido muchas veces del lugar de
trabajo, el efecto sobre la salud pública de las exposiciones ambientales a esos
mismos agentes ha constituido un importante factor de estímulo para la limpieza
tanto en el lugar de trabajo como en la comunidad de su entorno.

Las normas de salud ambiental suelen ser mucho más estrictas que las de salud
en el trabajo. Tenemos un ejemplo de ello en los valores de referencia
recomendados por la OMS para determinadas sustancias químicas. La diferencia
suele justificarse con el argumento de que la comunidad comprende poblaciones
sensibles, como personas de edad avanzada, enfermos, niños pequeños y
mujeres embarazadas, mientras que la población laboral goza al menos de una
salud suficientemente buena para trabajar. También suele aducirse que el riesgo
es más “aceptable” para una población laboral, pues son personas que se
benefician de tener un empleo, y por consiguiente están más dispuestas a aceptar
el riesgo. La cuestión de las normas o criterios suscita vivos debates de carácter
político, ético y científico. Vincular la salud en el trabajo y la salud ambiental puede
contribuir de forma positiva a resolver esas controversias. A este respecto,
estrechar la relación entre los dos ámbitos puede redundar en una mayor
coherencia a la hora de establecer las normas.

La salud en el trabajo y la salud ambiental están estrechamente ligadas por el


hecho de que la fuente de la amenaza para la salud suele ser la misma; sus
metodologías comunes, especialmente en materia de evaluación de la salud y
control de las exposiciones; la contribución aportada por la epidemiología del
trabajo al conocimiento de los efectos de las exposiciones ambientales; los efectos
de las enfermedades profesionales sobre el bienestar en el hogar y la comunidad,
y, a la inversa, los efectos de las patologías ambientales sobre la productividad de
los trabajadores; la necesidad científica de tener en cuenta las exposiciones
totales para determinar las relaciones dosis-respuesta; la eficiencia en el
perfeccionamiento y aprovechamiento de los recursos humanos resultante de
dicha vinculación; la mejora en las decisiones sobre control de las exposiciones
derivada de esta visión más amplia; mayor coherencia a la hora de establecer las
normas, el hecho de que vincular la salud ambiental y la salud en el trabajo es un
incentivo más para rectificar los peligros a que están expuestas tanto la población
laboral como la comunidad.
La tendencia actual en materia de intervención se orienta hacia la prevención de
las emisiones a través del empleo de nuevos combustibles y de la mejora de las
tecnologías de combustión, así como de la modificación de los propios procesos
productivos mediante la implantación de las denominadas tecnologías productivas
“limpias”. Esta filosofía de prevención —que precisa, asimismo, un enfoque más
global— tiene, al menos, cuatro ventajas sustanciales para el mundo del trabajo y
el medio ambiente. A diferencia de las tecnologías que actúan en el “ultimo
eslabón de la cadena”, que incrementan los costos de producción sin aportar por
regla general incrementos de la productividad ni rendimientos económicos, las
tecnologías productivas limpias suelen generar mayor productividad y beneficios
económicos tangibles. Las tecnologías productivas limpias no sólo suelen
redundar en un uso más eficiente de los recursos naturales y la energía, sino
también en una reducción de las cantidades y la toxicidad de los residuos
generados. Las políticas de implantación de las tecnologías productivas limpias
pueden y deben comprender la adopción de medidas diseñadas para mejorar la
situación de la salud y seguridad dentro de la empresa. La participación de los
trabajadores en la protección de la salud, la seguridad y el medio ambiente en el
marco de los procesos tecnológicos limpios vigorizará la moral y el nivel de
comprensión y de rendimiento laboral de los trabajadores, cuya importancia para
el logro de una producción de calidad es bien conocida.

Relación entre higiene industrial, evaluación y gestión de riesgos

La Higiene Industrial es una rama de la Salud Ocupacional definida por la ACGIH


como la “ciencia y el arte dedicados al reconocimiento, evaluación y control de
aquellos factores ambientales o tensiones emanadas o provocadas por el lugar de
trabajo y que pueden ocasionar enfermedades, destruir la salud y el bienestar, o
crear algún malestar significativo entre los trabajadores o los ciudadanos de la
comunidad”.

Por lo tanto al hablar de SALUD OCUPACIONAL, necesariamente se tendrá que


abordar el tema de la HIGIENE como una de las principales herramientas con que
cuenta el prevencionista, evaluando y controlando las condiciones ambientales del
medio laboral.

Con estos temas pretendemos que el personal asistente a estos temas adquiera
los conocimientos y herramientas básicas sobre los factores de riesgo ambientales
más comúnmente encontrados en las diferentes organizaciones y la forma en la
cual pueden aportar desde su propio campo.

En el programa de buscaremos abordar los temas teniendo siempre presente los


siguientes aspectos:
 Reconocimiento del factor de riesgo
 Evaluación
 Control del riesgo

Estudio de las condiciones ambientales. Estrategias de muestreo en el


medio ambiente laboral

 Reconocimiento inicial: es la actividad previa a la medición, cuyo fin es


recopilar toda la información necesaria para determinar la metodología para la
medición.

 Estudio detallado de ruido: el propósito de un estudio detallado de ruido


es definir las áreas en donde la exposición de los trabajadores es superior al
limite permisible de 80 dB(A) y establecer los controles necesarios para
minimizar el riesgo de exposición.

Lo usual es tomar mediciones aleatorias en el área o sección ( muestreo


estadístico de área ) y evaluar los oficios o puestos de trabajo. Sería ideal evaluar
todos y cada uno de los empleados expuestos para determinar individualmente el
nivel de exposición, la sobre exposición o la no - exposición al ruido, pero es poco
practico hacerlo. Por lo general se evalúan los oficios de manera estadística y los
hallazgos de estos muestreos se generalizan para obtener conclusiones aplicables
al resto de los empleados.

Existen dos maneras de realizar los estudios detallados de ruido:

 Con sonómetro: las áreas y puestos de trabajo en los cuales se detecte que
los oficios son fijos, es decir que el trabajador u operador de la máquina en
evaluación permanece frente a ésta el mayor tiempo de la jornada laboral, la
medición de ruido puede realizarse con sonómetro y según las técnicas de
muestreo recomendadas.

 Con dosímetro: cuando la medición con sonómetro se dificulta debido a los


movimientos y desplazamientos constantes, tiempos de exposición irregular y
por una exposición del trabajador variable, el sonómetro es poco practico para
medir los niveles variables de ruido. Por lo tanto, para determinar en forma
más precisa el nivel sonoro continuo equivalente al que se encuentra expuesto
un trabajador, se recomienda utilizar el dosímetro.

Existen, en el estudio detallado de ruido, otras estrategias de muestro que


consideran la toma de datos como elemento fundamental de la medición, por
ejemplo :
 Muestreo de área: las mediciones son realizadas en forma aleatoriamente
(muestreo estadístico) en sitios y puntos fijos del área o sección. Pretende
establecer y determinar la influencia de las diferentes fuentes de contaminación
sobre una exposición ocupacional por ruido para el personal que labora
permanentemente en toda el área o sección.

 Muestro personal: también llamado “dosimetría de ruido”. Las muestras son


tomadas en forma individual, colocando el equipo de medición directamente al
trabajador que se moviliza constantemente por todas las secciones o áreas de
trabajo debido a las características propias de su labor. Dicho desplazamiento
lo expone a diferentes niveles de ruido en su actividad diaria.

 Muestreo de maquinaria: las mediciones de ruido son tomadas en un


ambiente próximo a las máquinas que en una evaluación general previa
registraron los niveles más altos de ruido. Este muestreo permite establecer las
condiciones criticas de ruido de la máquina y definir los controles técnicos más
apropiados, sin que se afecte la producción de la empresa.

La evaluación de la exposición al ruido requiere considerar la localización y el


número de las mediciones realizadas, tanto en el pasado como en el presente, en
los puestos de trabajo identificados en el panorama de factores de riesgo. Se
sugiere que dichos registros sean conservados y utilizados como elementos
fundamentales para el subsistema de información en el seguimiento propuesto en
la metodología de este sistema de vigilancia epidemiológica

Legislación nacional e internacional

En la aplicación de indicadores para evaluar el sistema de vigilancia


epidemiológica y de su impacto como metodología, debe considerarse la
legislación vigente para definir los parámetros de referencia de los niveles
permisibles de ruido en la empresa. En Colombia la legislación para el factor de
riesgo ruido se establece en las siguientes resoluciones :

 Resolución Número 08321 de Agosto 4 de 1983 del Ministerio de Salud:


normas sobre protección y conservación de la audición de la salud y bienestar
de las personas, por causa de la producción y emisión de ruidos.

 Resolución Número 01792 de Mayo 3 de 1990 del Ministerio de Trabajo,


Seguridad Social y de Salud: norma por la cual se adoptan los valores límites
permisibles para la exposición ocupacional a ruido.
Parágrafo: los anteriores valores limites permisibles de nivel sonoro, son
aplicables a ruido continuo e intermitente, sin exceder la jornada máxima laborable
vigente, de ocho ( 8 ) horas diarias. Por lo cual se adaptan valores limites
permisibles para la exposición ocupacional al ruido.

Legislación internacional:

 Criterios de la ACGIH: anualmente la ACGIH (American Conference Industrial


Hygienists) publica una lista de TLV’s ( Thershold Limis Values) ; en 1969
contempló por primera vez los estándares correspondientes a ruido. En 1975, la
ACIH modificó el TLV a partir de un estudio realizado por NIOSH ( National
Institute for Occupational Safety and Health) sustituyendo la expresión del
tiempo máximo de exposición por la siguiente expresión :

Controles técnicos

Las técnicas de control de ruido se basan fundamentalmente en los diferentes


tratamientos que pueden efectuarse a las ondas sonoras, en los procesos y en las
modificaciones a las maquinaria implicadas en la generación de ruido y
vibraciones. Los metodología para el control técnico se pueden dividir en dos
grupos : activos y pasivos.

Procedimientos activos de control técnico

Consisten en la eliminación o reducción de la generación de ruido, sustituyendo


equipos o componentes ruidosos de las máquinas. Este tipo de control es más
efectivo y los resultados obtenidos son mucho mejores que en otros tipos de
control. Sin embargo existen varias limitaciones en la implementación de estas
medidas de control : costo elevado, diseños inapropiados para la producción y
controles irrealizables por las características del equipo, en algunos de los casos.
Algunos de los controles pasivos de ruido son:

 Distribución planificada y adecuada de equipos ruidosos.


 Acondicionamiento acústico de las superficies del recinto contaminado con
ruido.
 Instalación de cabinas, barreras o mamparas colocadas entre la fuente y el
receptor.
 Control del ruido y de las vibraciones en sus trayectorias de propagación.
 Encerramiento de equipos y diversas fuentes de ruido.
 Incremento en la distancia existente entre la fuente y el receptor.
Controles administrativos

Los controles administrativos son, generalmente, más factibles de realizar pero


menos eficientes en su propósito. Los costos de instauración de estas medidas
son aparentemente más viables para la empresa: Algunos de los métodos de
control administrativo son :

Rotación de los trabajadores

La rotación de personal pretende disminuir la exposición individual a niveles


nocivos de ruido en las diferentes áreas o secciones contaminadas. Este
procedimiento involucra un incremento del número de trabajadores en el área o
sección contaminada con ruido, desplazando a los que trabajan en las áreas o
secciones silenciosas.

Este tipo de control es difícil de llevar a cabo ya que requiere de una vigilancia
especial de los niveles cotidianos de ruido que perciban los trabajadores para
evitar una exposición peligrosa en un gran número de individuos. Además de las
dificultades administrativas que se pueden presentar : diversidad de tareas a
realizar, diferencias salariales de los puestos de trabajo y diversidad en la
asignación de responsabilidades por las tareas y equipos de trabajo. Se deben
analizar claramente las ventajas y las desventajas que tendría el exponer menos
personas al ruido con mayor tiempo de exposición o un mayor número de
personas expuestas pero con un tiempo menor de exposición.

Producción moderada

Consiste básicamente en mantener en funcionamiento la maquinaria más ruidosa


durante el menor tiempo posible. Pretende controlar los límites máximos de
exposición al ruido. Sin embargo, este tipo de control de la exposición al ruido es
difícil ya que puede afectarse seriamente la producción.

Uso de elementos de protección personal

En muchas oportunidades resulta difícil o imposible reducir el ruido utilizando


métodos de control técnico. Las principales dificultades para un adecuado control
técnico son los altos costos de las medidas o la imposibilidad de adaptar los
controles propuestos a los equipos generadores de ruido. En estos casos
específicos de presencia del factor de riesgo, se recomienda el uso de los
elementos de protección auditiva. Es importante aclarar que estos equipos no son
una medida de control de ruido ya que los niveles de ruido en el ambiente
continúan siendo iguales o mayores que el inicial ( debido al desgaste propio de
los equipos ). El uso de estos elementos de protección personal se recomiendan
como un último recurso, después de haber agotado todas las posibilidades de
control del ruido.

La protección individual al factor de riesgo debe estar orientada como un recurso


complementario para el control del efecto del ruido sobre el receptor. La selección
del tipo de elemento a utilizar, los niveles de protección ofrecidos por estos
elementos, la aceptación por parte de los trabajadores y las condiciones
específicas de trabajo que requieren su utilización, son algunos aspectos que
serán considerados más adelante.

Evaluación del impacto de las intervenciones

En nuestro medio, el tema de la higiene se ha visto siempre dirigida a un grupo


muy pequeño de personas, lo que ha dificultado el control de los factores de
riesgo.

Conscientes de la necesidad de que este tema sea abordado por grupos


multidisciplinarios tendientes a buscar ambientes de trabajo mas saludables,
buscando que la higiene ocupacional sea abordada por un grupo de profesionales
de manera interdisciplinaria, sin que se requiera que estos sean necesariamente
higienistas, sino que aporten a la solución de problemas cada uno desde su
campo formativo, para lograr ambientes de trabajo mas saludables.

Una de las principales estrategias que buscan que este abordaje sea por medio de
grupos interdisciplinario son la conformación de los Grupos de Mejoramiento para
el control del factor de riesgo al interior de las empresas, conformados por áreas
como producción, mantenimiento, proyectos, los cuales deberán contar con un
grupo asesor liderado por el departamento de seguridad industrial.

Estos grupos de mejoramiento deben tener como base el compromiso y la acción


gerencial, que sirva de apoyo para el trabajo en el control integral de los riesgos.

En nuestro medio los mayores avances en este aspecto se han logrado en el


control del ruido, en el cual se considera que de 108.000 trabajadores expuestos
hay 10089 trabajadores con algún grado de deterioro auditivo inducido por ruido.

Lo que más preocupa a nivel de control ambiental de ruido, es que es un factor de


riesgo para el cual existe muy buen diagnóstico, pero hay muy poco control.

Las entradas para estos grupos de mejoramiento deben ser entre otros: Los
resultados de los exámenes médicos, los casos de enfermedad profesional
diagnosticadas o en estudio, el inventario de las fuentes y las evaluaciones
ambientales que se realicen en las empresas. Estos grupo de mejoramiento se
deben conformar como un trabajo mancomunado entre la empresa y la asesoría
de la ARP. Estos grupos tendrán como objetivo conformar un equipo
multidisciplinario para el desarrollo de proyectos de control de los diferentes
factores de riesgo y contribuir a la obtención de ambientes de trabajo mas sanos,
saludables y seguros. El compromiso de los diferentes niveles de la organización y
de la asesoría de la ARP deberá ser evidente.

Estos grupos comienzan con una etapa de sensibilización y capacitación a los


integrantes del equipo. Lo principal es que las actividades realizadas por estos
grupos deberán manejarse como proyectos y no como actividades puntuales y
contar con presupuestos específicos. Dentro de los beneficios de estos grupos
esta el disminuir la prevalencia y la incidencia de las enfermedades profesionales,
buscando el consiguiente impacto en la productividad y calidad de vida de los
trabajadores a través de un control integral del factor de riesgo.

Las estrategias que se recomienda adopten los grupos de mejoramiento son:

 Conformar el equipo, buscando que participen las diferentes áreas y niveles de


la organización.
 Elaborar un inventario de las fuentes de generación de los contaminantes.
 Elaborar y ejecutar un plan de capacitación para los diferentes factores de
riesgo a controlar.
 Elaborar inspecciones de grupo al proceso que lleven a identificar las
diferentes situaciones a controlar.
 Plantear alternativas de solución a corto, mediano y largo plazo.
 Implementar las soluciones propuestas por el grupo.
 En casos en que se requiera estos grupos deberán contar con la asesoría de
personas externas, especialistas en el tema.
 Es importante que estos grupos puedan compartir experiencias exitosas con
otras que hayan logrado avanzar en el proceso.
 Lo ideal es que estos grupos estén integrados a los diferentes grupos de
mejoramiento que posea la empresa.
 Un aspecto clave es que los grupos soporten los procesos de certificación.
 Otro aspecto a tener en cuenta es que las diferentes acciones de mejoramiento
cuenten con la suficiente documentación de las actividades realizadas para
poder demostrar el impacto de las actividades realizadas.

Dentro de los recursos con que deberán contar estos grupos de mejoramientos
son:

 La base de estos procesos es el “compromiso y acción gerencial”.


 Los grupos de mejoramiento deberán contar con el apoyo y la participación de
las ARP.
 El personal que haga parte de estos grupos deberán contar con la inversión de
tiempo disponible para las diferentes actividades a realizar.
 Como lo mencionamos anteriormente, se debe contar con un pull de expertos
que soporten estos procesos para el avance de los mismos.

Dentro del equipo que conforma los grupos de mejoramiento se encuentra:

 Departamento de mantenimiento.
 Departamento de producción.
 Departamento técnico.
 Salud Ocupacional.
 Grupo asesor externo (ARP- Especialistas en el tema específico.)

Un aspecto determinante en estos grupos es el definir indicadores que permitan


determinar el avance de estos grupos, los cuales deberán ser tanto de proceso
como de impacto. Dentro de los indicadores de proceso se deben tener en cuenta:

 Reuniones efectuadas /reuniones programadas


 Visitas realizadas / Programadas
 Informes técnicos realizados.

Dentro de los indicadores de Impacto se deben tener en cuenta:

 Controles realizados / controles propuestos.


 Prevalencia de enfermedades.

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