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ING. EN ENERGIA.
TAREA 2
Hay otros estudios que aseguran que un espacio de trabajo cómodo y diseñado pensando en
las funciones a desarrollar por cada trabajador puede aumentar la productividad hasta en un
20%.
Así es como muchos de los nuevos diseños de oficinas y espacios de trabajo, intentan
responder a las distintas situaciones que vive el profesional. El diseño de los espacios debe
realizarse en función de cómo quiere que trabajen y se relacionen entre sí en ese entorno.
Por eso se deben tomar en consideración distintos factores que son clave para mantener al
trabajador en un buen bienestar físico y mental lo cual permitirá estar motivado y
maximizar la eficiencia y la calidad en su trabajo.
A continuación te presentamos los factores a tomar en cuenta para mejorar los espacios de
trabajo:
La pantalla del ordenador o portátil: debe estar alineada a la altura de los ojos y
correctamente colocada para el empleado, para que adopte la mejor postura al
permanecer sentado durante su jornada de trabajo.
Un escritorio adecuado a la altura de la silla.
El uso del reposapiés: facilita el apoyo de estos en el suelo de forma natural.
También es muy recomendable usar un reposa manos al utilizar teclado.
La alfombrilla del ratón: debería incorporar reposamuñecas para que, al utilizar este
dispositivo, tanto la mano, antebrazo y muñeca puedan estar alineados.
Es trascendental elegir un buen mobiliario para conseguir una buena distribución de la
oficina. No solo nos hará sentir más cómodos a los empleados, sino también a los visitantes
y clientes.
Iluminación: Contar con un espacio de trabajo bien iluminado disminuirá la fatiga de los
trabajadores. Siempre que sea posible, se debe fomentar la luz natural, ya que permite un
mejor descanso, si no es posible es recomendable hacer pausas cortas para salir al exterior.
Por otro lado, es importante colocar los puestos de trabajo de forma que se evite cualquier
deslumbramiento o reflejo por parte de las distintas fuentes de iluminación.
Comunicación: Una buena comunicación en todos los niveles genera una mayor
satisfacción del trabajador. En este sentido, disponer de salas y espacios adecuados para
favorecer la comunicación, equipándolos si es necesario con máquinas de café o té, y
fomentar su uso de forma racional, ayudará a fortalecer las relaciones laborales y a
incrementar la productividad.
Espacio: Se debe procurar que el puesto de trabajo tenga unas dimensiones suficientes y
esté acondicionado de tal manera que haya espacio para permitir los cambios de postura y
movimientos necesarios.
Mantener una temperatura adecuada y estable en el lugar de trabajo supone un aumento del
confort de los empleados, que unido a un correcto funcionamiento de los equipos se traduce
en una mayor productividad. De hecho hay numerosos estudios que afirman que los
ambientes con temperaturas de 30ºC y menos de 15ºC reducen hasta un 10% la
productividad del trabajador, por lo que lo ideal es mantenerla durante el
verano entre los 21 y los 24ºC.Por lo tanto en Invierno debe de estar entre 20 ºC y 24
ºC ya que en esta época baja más la eficiencia de laboral en los trabajos.