Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
An1 2TomasBuenaventura PDF
An1 2TomasBuenaventura PDF
1
Cf. Casas, G. Antropología filosófica. 2ª ed. Córdoba: EDUCC, 2008, p. 51-55.
2
Cf. Tresmontant, Claude. El problema del alma. Barcelona: Herder, 1974, p. 99-102.
J.D. ————————————————————————————————— 1
Facultad de Cs. Económicas MÓDULO 1, Unidad 2
EDUCACIÓN A DISTANCIA Guía de la Asignatura:
ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA
doctrina platónica de la materia, de lo sensible, del mal, del alma y del cuerpo, era
incompatible con el realismo bíblico, con el amor de toda la tradición hebrea por la
creación sensible y con la antropología, cuyos principales caracteres hemos recordado.
Ya observamos que los pensadores cristianos, desde las primeras generaciones,
habían notado, las dificultades que llevaba consigo la antropología platónica comparada
con la teología cristiana. Al fin, las tesis fundamentales de la antropología órfica y
pitagórica, recogidas por Platón, fueron rechazadas y condenadas por la ortodoxia.
No es, pues, de extrañar que Tomás de Aquino reemprendiera el análisis del Tratado
del alma, de Aristóteles. Ante todo, este análisis le parecía fundado en verdad y,
además, respondía a las exigencias filosóficas del cristianismo. Las dos razones, de
hecho, no son más que una sola.
En su Comentario de las sentencias, el maestro Tomás adopta una posición contraria
a la de la antropología platónica, criticándola y aceptando las conclusiones del tratado
aristotélico sobre el alma: «Decimos que la esencia del alma racional se une
inmediatamente al cuerpo, como la forma a la materia, y la figura a la cera» 3. En la
Summa contra Gentiles, Tomás prosigue y desarrolla la […] crítica de la antropología
platónica. Si el análisis platónico fuera exacto, si la concepción que Platón formula
sobre el alma y el cuerpo fuera verdadera, cuando el alma se va, el cuerpo debería
subsistir, ya que existe independientemente del alma, lo mismo que el alma existe
independientemente del cuerpo. Ahora bien, nosotros comprobamos que ello es falso,
porque, después de la salida del alma, la carne, los huesos, las manos y todas las partes
del cuerpo sólo son designadas por esos términos de una manera equívoca, ya que
ninguna de esas partes que constituye el cadáver, y no el cuerpo, puede realizar su
operación propia4.
El alma y el cuerpo no son dos sustancias que existen en acto, sino que del cuerpo y
del alma resulta una sola substancia en acto. El cuerpo del hombre, en efecto, no es el
mismo cuando el alma está presente en acto que cuando está ausente. El alma hace que
el cuerpo exista en acto5.
3
II Sent., d, 1, q. 2, a. 4.
4
Sum. Contra Gent., II, cap. 57, nº 1335.
5
Ibid., II, cap. 69, 1461. Claude Tresmontant estima que perdura una dificultad en la relación entre el
alma y el cuerpo explicada por Tomás: la unión del alma con el cuerpo, ya que el cuerpo para existir
como tal, debe componerse de una materia informada por el alma. En tal sentido debería hablarse de una
unión del alma con la materia para constituir un cuerpo orgánico vivo en acto. Hablar de la unión del
alma y del cuerpo es hacer como si el cuerpo subsistiera independientemente de la información
comunicada por el alma. Para evitar el dualismo, la palabra cuerpo debe significar (en Tomás y
Aristóteles) la materia que recibe la información.
6
Cf. Amerio, Franco. Historia de la filosofía. Madrid: Ibérica, 1954, p.168-171.
J.D. ————————————————————————————————— 2
Facultad de Cs. Económicas MÓDULO 1, Unidad 2
EDUCACIÓN A DISTANCIA Guía de la Asignatura:
ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA
7
Cf. Amerio, F., o. c., p. 174-176.
J.D. ————————————————————————————————— 3
Facultad de Cs. Económicas MÓDULO 1, Unidad 2
EDUCACIÓN A DISTANCIA Guía de la Asignatura:
ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA
J.D. ————————————————————————————————— 4