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Rev Esp Sanid Penit 2011; 13: 100-111

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JM Arroyo-Cobo. Estrategias asistenciales de los problemas de salud mental
en el medio penitenciario, el caso español en el contexto europeo

Estrategias asistenciales de los problemas


de salud mental en el medio penitenciario,
el caso español en el contexto europeo
JM Arroyo-Cobo

Coordinación de Sanidad Penitenciaria.


Secretaria General de Instituciones Penitenciarias. Ministerio de Interior

Resumen

Introducción: Se ha revisado la literatura científica sobre estrategias de atención a los problemas de salud mental en el
medio penitenciario.
Se aportan datos de las principales actuaciones puestas en práctica por las administraciones penitenciarias para responder a
las preocupantes cifras que señalan los más recientes estudios epidemiológicos de trastornos mentales en prisión, con tasas que
comparadas con la población general, duplican los Trastornos Mentales Comunes (TMC) y cuadriplican los Trastornos Menta-
les Graves (TMG) entre las personas que se encuentran en prisión.
Material y métodos: Se han revisado las bases de datos bibliográficas más importantes sobre las políticas asistenciales a
los problemas de salud mental en el medio penitenciario, que han sido publicadas por los responsables de las administraciones
penitenciarias en los últimos 10 años. Estos datos se han completado con datos obtenidos con el análisis de los indicadores
disponibles en la Coordinación de Sanidad sobre las estrategias propias en materia de asistencia a problemas de salud mental en
centros dependientes de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, en España.
Resultados: Hay poca literatura científica donde se enuncien las políticas asistenciales de las diferentes administraciones
sobre la asistencia a problemas de salud mental en el medio penitenciario. Las que lo hacen están de acuerdo en una serie de
afirmaciones: se debe ofrecer una respuesta terapéutica de igual calidad a la recibida por los enfermos en la comunidad, debe
ser un equipo multidisciplinar el encargado de atender a este tipo de pacientes, es preciso un esfuerzo de coordinación entre
las administraciones que en un momento determinado deben atender a estos pacientes, la asistencial, la social, la judicial y la
penitenciaria.

Palabras clave: salud mental; prisiones; estrategias nacionales; España; calidad de la atención de salud; equidad en salud;
trastornos mentales; terapéutica.

Health care strategies for mental health problems in the


prison environment, the Spanish case in a European context

Abstract

Introduction: A review was carried out of scientific literature on health care strategies for mental health problems in the
prison environment.
Data is given about the main activities put into practice by prison administrations as a response to the worrying informa-
tion that has come to light in recent epidemiological studies on mental disorders in prison, with figures that, when compared to
the general population, give results of double the number of cases of Common Mental Illness (CMI) and four times the number
of cases of Severe Mental Illness (SMI) amongst prison inmates.
Materials and methods: A review was made of the most important bibliographical databases containing health care poli-
cies for mental health problems in prison published by prison administrations in the last 10 years.
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This information was completed with other data obtained from an analysis of the indicators available in Health Care
Coordination on its health care strategies for mental health in centres run by the Secretary General of Prisons, in Spain.
Results: There is little in the way of scientific literature that clearly states health care policies for mental illness in the pri-
son environment. Those that do tend to agree with a number of affirmations that include the obligation to offer a therapeutic
response of equal quality to that received by patients in the community, the need for a multi-disciplinary team responsible for
caring for this type of patient, along with a coordinated effort between the medical, social, legal and prison administrations that
at a given time have to care for them.

Key Words: mental health; prisons; national strategies; Spain; quality of health care; equity in health; mental disorders;
therapeutics.

Texto recibido: 23/06/2011 Texto aceptado: 10/09/2011

Introducción hecho no es solamente debido a un efecto especí-


fico de la prisión sobre las personas internas, sino a
En la última memoria de la Estrategia en Salud un conjunto de razones entre las que se encuentra de
Mental1, aprobada por el Consejo Interterritorial del manera principal la desaparición de los manicomios
Sistema Nacional de Salud, se establece la importancia como espacio que durante dos siglos ha albergado a
sanitaria y social de los trastornos mentales en España una buena cantidad de personas socialmente proble-
y se desarrollan los principios y valores básicos para máticas (trastornos de la personalidad, oligofrenias)
el abordaje y la adecuada atención de estos problemas y al considerable aumento de población general que
en todo el sistema asistencial público. carece de recursos de todo tipo o está simplemente
Los trastornos mentales son la causa más frecuen- marginada, entre la que hay que contar con un buen
te de carga de enfermedad en Europa2, constituyen un número de personas con trastornos mentales, en espe-
desafío creciente por su dimensión en términos sani- cial psicosis crónicas, que de una manera u otra acaban
tarios y por sus efectos sociales sobre la prosperidad, con facilidad en prisión. Sin contar claro está, con los
solidaridad y respeto por los derechos fundamenta- trastornos mentales provocados por el consumo de
les y dignidad de los enfermos3. En la conferencia de sustancias tóxicas1, 7-9.
Helsinki en enero de 2005 los 52 estados participantes Los servicios sanitarios de las prisiones deben
suscribieron la Declaración Europea de Salud Men- atender por tanto, un gran número de internos con
tal. Esta Declaración considera la salud mental, como trastornos mentales, bien porque los presentaran ya a
una prioridad sanitaria, económica y social y en con- su ingreso, porque se han exacerbado a consecuencia
secuencia, insta a los sistemas sanitarios europeos a de su estancia en prisión, o porque han debutado tras
formular estrategias en salud mental, que integren la el encarcelamiento. La propia OMS10-12, la ONU13, la
promoción y prevención de los factores determinan- Unión Europea6 y el Ministerio de Sanidad de nues-
tes y de riesgo, asociados a los trastornos mentales, tro país1 han editado recomendaciones generales para
las intervenciones terapéuticas, la rehabilitación, los impulsar, coordinar y orientar los esfuerzos de las ins-
cuidados y el apoyo social, potenciando la atención tituciones sanitarias públicas de manera que se garan-
comunitaria y las redes integrales de cuidados y traba- ticen en prisión, las mismas oportunidades de trata-
jando eficazmente para reducir el estigma asociado a miento que tienen los enfermos mentales fuera de los
la enfermedad, el enfermo y su entorno familiar.4 centros penitenciarios.
La OMS estima que en las sociedades occidenta- El objetivo de este documento responde a la ne-
les, la incidencia de alteraciones psiquiátricas es hasta cesidad de reflexionar sobre la manera más eficiente,
siete veces mayor en la población penitenciaria que en de utilizar los recursos penitenciarios disponibles
la población general5, tal y como se recoge en las Re- con el objetivo de alcanzar los estándares adecuados
comendaciones del Comité de Ministros del Consejo de calidad, en la asistencia a los trastornos mentales
de Europa6, en los últimos años y coincidiendo con el en prisión. Todo ello siendo respetuosos con las re-
aumento de la población penitenciaria, se ha observa- comendaciones y las estrategias promovidas por las
do un sensible incremento de algún tipo de trastorno mencionadas autoridades sanitarias, tanto nacionales
mental en las personas que ingresan en prisión. Este como internacionales.
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La Ley Orgánica General Penitenciaria (LOGP) manera coordinada se encargue del tratamiento de
establece la organización de la asistencia primaria en este tipo de enfermos18.
prisión y aun de la especializada y hospitalaria ya que La compleja organización de la vida en un cen-
su reglamento establece que cuando sea necesario, “los tro penitenciario, siempre presidida por el control y
tratamientos se efectuarán en centros dependientes de la disciplina, por las restricciones de todo tipo y la
otras administraciones públicas no penitenciarias”14. convivencia forzada, por los horarios rígidos y la mo-
La Ley General de Sanidad garantizó que el Sistema notonía, por el aislamiento emocional y la frustración,
Nacional de Salud prestara la atención a todos los pa- hacen muy difícil la construcción de espacios terapéu-
cientes en la misma red asistencial, y en el caso de ticos adecuados para el tratamiento de determinados
los pacientes mentales, integró los diferentes servicios enfermos mentales. A pesar de ello, estos espacios
y recursos de asistencia psiquiátrica en una sola red existen, en determinados módulos de la prisión, en la
pública. Precisamente la asistencia sanitaria peniten- enfermería, en talleres ocupaciones, en dispositivos
ciaria, que por el momento ha quedado fuera de esa en los que se facilita la compañía de mediadores o de
integración, es contemplada específicamente por la terapeutas voluntarios. La potenciación de estos espa-
Ley de Cohesión y Calidad de 2003, donde se insiste cios y la formación de todos los funcionarios de los
en la necesidad de que el dispositivo asistencial de la centros el manejo de personas con trastornos menta-
atención primaria en el medio penitenciario, sea defi- les, es una pieza importante en la construcción de am-
nitivamente transferida a los dispositivos asistenciales bientes positivos, donde se fomenten las relaciones de
de las comunidades autónomas con lo que se ganaría respeto entre los internos, de seguridad y de empatía.
en coordinación, en equidad, continuidad, justicia y Es importante crear la atmósfera necesaria para culti-
accesibilidad del usuario a los servicios sanitarios. En var la resiliencia protectora de la enfermedad y donde
el Código Penal español, tras la reforma de 1995, se se puedan poner en marcha terapias específicas para la
estipula que cuando una persona haya cometido un rehabilitación y la autonomía de los enfermos. Estos
delito penal y sea considerada inimputable por causa espacios deben ponerse a disposición de los pacientes
de enfermedad mental, el tribunal tiene la posibilidad sin que se conviertan en ghetos donde agruparlos y
de someterle a un tratamiento ambulatorio, o podrá separarlos del resto de internos de la prisión para que
imponerle internamiento psiquiátrico involuntario, no “entorpezcan” la vida normal del centro.
en una institución apropiada, por un periodo que en En 1998 se publicó en el Reino Unido uno de los
ningún caso será superior al de la pena que hubiera estudios más completos hasta entonces, sobre la mor-
podido corresponderle. Un importante flujo de en- bilidad psiquiátrica en los internos de las prisiones de
fermos psiquiátricos graves en el sistema penitencia- Inglaterra y Gales19. Este informe fue consecuencia
rio, tiene este origen judicial y una serie de implica- de un artículo en el que dos años antes Lord Rams-
ciones médico-legales que influyen en su evolución, botham, principal responsable de la Inspección de las
diagnóstico y rehabilitación. prisiones, denunciaba un trato discriminatorio de la
Las personas que están en prisión forman parte de administración británica en el manejo que se daba a
la sociedad, el éxito en su rehabilitación garantizará la los enfermos por el hecho de estar internados en pri-
reducción del riesgo de reincidencia de sus compor- sión.20 Este artículo, generó en Inglaterra y Gales una
tamientos antisociales. En la medida en la que estos corriente de opinión entre diferentes grupos socia-
comportamientos tengan relación con un trastorno les de presión, que provocó el inicio del proceso de
mental, el adecuado tratamiento de éste evitará aqué- transferencia de la asistencia sanitaria dependiente del
lla. La organización del tratamiento de los trastornos Servicio de Prisiones, al Sistema Público de Salud, un
mentales en prisión debe poder garantizar su equiva- proceso que culminó en abril de 2006.21
lencia y continuidad con el recibido para la misma en- Como ya se ha dicho, los países de nuestro en-
fermedad en la comunidad15-17. Los trastornos que se torno vienen experimentando desde los años ochen-
observan comúnmente en el medio penitenciario, se ta un aumento de presos con trastornos psiquiátri-
caracterizan por su complejidad, su cronicidad y por cos. En 1989-1990, en Holanda se realizó una inves-
su relación con factores sociales y físicos que empeo- tigación sobre la prevalencia de trastornos psíquicos
ran su pronóstico y su manejo, como por ejemplo su entre presos con penas breves, de entre 18 y 24 años
asociación con la adicción a drogas o con dificultades en el establecimiento penitenciario Nieuw Vossen-
de aprendizaje. Por esta razón y por la oportunidad veld. Los presos fueron entrevistados poco después
del abordaje conjunto en prisión de todos estos as- de su ingreso. Esta investigación arroja que el 79,9%
pectos del trastorno, es por lo que resulta muy con- de los presos, durante el año de la investigación o el
veniente que sea un equipo multidisciplinar el que de año anterior a la investigación cumplen los criterios
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para un diagnóstico DSM-III eje-I o eje-II (los tras- morbilidad y gasto en salud es claramente despro-
tornos del eje-I incluyen adicciones a las drogas o al porcionada24.
alcohol). El 32% ha padecido un año antes o durante En España, se han realizado dos estudios para co-
la investigación un trastorno del eje-I (excluidos los nocer el número y el tipo de enfermos mentales que
problemas de adicción), el 10% un trastorno afec- se encuentran en prisión, el primero de los estudios
tivo, el 17% un trastorno de ansiedad y el 8% un se hizo en 2006, a partir de 1.000 historias clínicas de
trastorno de esquizofrenia/esquizofreniforme. Es- internos elegidas de forma aleatoria en todas las pri-
tas prevalencias son claramente superiores a las de la siones del Estado y el otro estudio epidemiológico se
población general22. realizó en 2009 sobre una muestra de 707 internos uti-
En el último informe realizado en 2007 por la lizando entrevistadores específicamente entrenados y
Comisión Europea sobre las personas con trastor- la misma metodología empleada por los estudios más
nos mentales que se encuentran en las prisiones eu- prestigiosos de epidemiología de patología mental en
ropeas23 se advierte que alrededor del 12% de los población general25. Los resultados han sido muy si-
reclusos necesitan tratamiento psiquiátrico especia- milares en ambos trabajos, en el último se obtuvieron
lizado y esta cifra va en aumento. Hacer frente a las antecedentes de trastorno mental común en el 84.4%
necesidades que plantean estos enfermos en prisión, de los internos, trastornos por abuso o dependencia
es un problema que no está resuelto adecuadamente a drogas en el 76.2%. En el momento de la entrevis-
en ningún país europeo. Para los autores del informe, ta un 41.2% de los internos presentó algún tipo de
la raíz de este problema está en la deficiente interac- trastorno mental, en concreto Trastorno de Ansiedad
ción entre la psiquiatría comunitaria, la psiquiatría el 23.3%, Abuso o Dependencia a drogas el 17.5% ,
forense y las autoridades sanitarias penitenciarias. La Trastorno Afectivo, generalmente depresivo, el 14.9%
propia psiquiatría comunitaria adolece ya de falta de y Trastorno Psicótico el 4.2%26 (Figura 1).
recursos. Según la Organización Mundial de la Salud La respuesta a esta situación que la administra-
(OMS) los trastornos mentales y del comportamien- ción penitenciaria en España puso en marcha para el
to representan el 12% de la carga de morbilidad en territorio nacional, salvo Cataluña, se concentró en el
el mundo; sin embargo, el presupuesto para salud “Protocolo de actuación del PAIEM”, Programa de
mental de la mayoría de los países es inferior al 1% Atención Integral a los problemas de Salud Mental en
del gasto total en salud. La relación entre carga de prisión27.

Figura 1. C
 omparación de los dos estudios epidemiológicos realizados en prisiones españolas.

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debían describir y/o evaluar programas o estrategias


aplicadas sobre el total de la población penitenciaria
para procurar asistencia a problemas de salud mental.
Estos datos se han completado con el análisis de
los documentos de la Secretaría General de IIPP so-
bre su estrategia de atención a los problemas de salud
mental27, 28..
Se han aportado también los indicadores disponi-
bles en la Coordinación de Sanidad sobre el desplie-
gue del PAIEM y con los datos disponibles sobre la
situación de los Hospitales Psiquiátricos dependientes
de Instituciones Penitenciarias. Por tanto, este trabajo
se ha construido como una revisión sistemática de la
evidencia científica disponible, publicada en las bases
de datos más específicas y acreditadas y en las más ex-
Figura 2. N
 úmero total de centros que disponen del PAIEM en los tensas, sobre las estrategias que las administraciones
diferentes cortes temporales hechos hasta el momento. públicas han desplegado para abordar las necesidades
de los enfermos mentales que se encuentran en el sis-
tema penitenciario.

Resultados

Respecto a la revisión sistemática de la biblio-


grafía disponible sobre políticas asistenciales de los
problemas de salud mental en el medio penitenciario,
existe poca literatura publicada (Tabla 1). Además de
las recomendaciones de los Organismos Internaciona-
les, como la Unión Europea3, 6, la OMS4, 18, o los mi-
nisterios de sanidad1, la mayor parte de los documen-
tos disponibles corresponden a Europa, sobre todo al
Reino Unido.
Figura 3. N
 úmero total de internos incluidos en el programa
PAIEM en los diferentes cortes temporales hechos hasta Nº de trabajos País al que se refiere Base de datos
el momento.
7 Inglaterra y Gales Medline
2 España Medline
Material y Métodos 1 Nueva Zelanda Medline
1 Canada Medline
Se ha hecho una revisión bibliográfica en las prin- 1 Europa Medline
cipales bases de datos (PubMed, Scielo, CoChrane) y
1 Usa Medline
otras fuentes como los índices bibliográficos online
del Ministerio de Sanidad, del de Interior o el busca- 2 España Scielo
dor general Google, para revisar documentos sobre las 1 Inglaterra y Gales Scielo
políticas asistenciales a los problemas de salud mental 1 Inglaterra y Gales Cochrane
en el medio penitenciario, publicadas por los respon- 5 Inglaterra y Gales Otras Bases
sables de las administraciones penitenciarias en los úl- 2 Usa Otras Bases
timos 15 años. La búsqueda bibliográfica se ha hecho
7 España Otras Bases
con los términos: Prisons (and) mental health (and)
programmes (or) estrategies, tanto en inglés como 11 Unión Europea Otras Bases
en español. Se han descartado trabajos que descri- 1 Kenia Otras Bases
ben tratamientos y/o resultados concretos sobre una 43 TOTAL
muestra de pacientes sometidos a la jurisdicción de los Tabla 1. Documentos considerados aptos para entrar en la revisión,
tribunales. Los trabajos considerados para su revisión país de origen y tipo de base de datos en la que se encontró.

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Las políticas enunciadas parten del análisis de las personas que ingresan en prisión, si los com-
unas necesidades cuya descripción se repite de manera paramos con la población general.
consistente en todos los documentos consultados: – Los cuadros observados requieren generalmente
abordajes combinados de manera simultánea, de-
– Los primeros datos referidos a la presencia de un bido al componente de cronicidad y comorbilidad
porcentaje de enfermos mentales entre los reclu- que presentan33.
sos, superior al encontrado en la comunidad, datan – El medio penitenciario no es el adecuado para tra-
ya de hace más de dos siglos29. Este dato se mantie- tar trastornos mentales graves, es un entorno cuya
ne y va en aumento a día de hoy. Las razones para finalidad es el control y la seguridad, no la cura-
explicarlo son múltiples: ción y la rehabilitación33.
• Unas de índole cultural, como la influencia de – Respecto a la cobertura de estas necesidades, las
una corriente de pensamiento en la sociedad propuestas que las estrategias hacen, tienen un co-
actual que pone más énfasis en la protección y mún denominador en los documentos publicados:
en la seguridad y menos en el cuidado y la cu- – La respuesta terapéutica debe ser de igual cali-
ración30, en parte provocada por el tratamiento dad a la recibida por los enfermos en la comuni-
alarmista que los medios de comunicación dan dad6, 18, 30, 33. Puesto que el derecho a la salud no
a los crímenes cometidos por enfermos menta- se encuentra afectado por la condena, debe poder
les31. ejercerse con pleno vigor. (principio de equivalen-
• Otras de gestión asistencial, como el cierre de cia asistencial)34. Respecto a la metodología para
los hospitales psiquiátricos sin dar alternativas a asegurar la equidad en la prestación asistencial, las
los enfermos necesitados de ese tipo de recurso. opiniones de los autores varían, por una parte se
Es consistente la relación inversa entre la dismi- sostiene la necesidad de que sea la misma institu-
nución del número de camas psiquiátricas hos- ción que presta la asistencia a las personas cuando
pitalarias y el aumento del número de presos están en libertad, la que la preste cuando están en
con trastornos mentales29. prisión, lo que sin duda aseguraría un trato equi-
• Otra razón es la inadecuada gestión de políticas valente, por tanto se fomenta la trasferencia del
públicas que no fomentan la coordinación entre personal asistencial desde la administración peni-
las administraciones encargadas del manejo de tenciaria a la administración sanitaria de la comu-
estos pacientes32, 33, lo que provoca una relación nidad como método ideal para asegurar la equidad
aparentemente irreconciliable entre los puntos en la prestación de este importante derecho29,  31.
de vista de la administración de justicia, que Esto es así en países de nuestro entorno como
persigue el cumplimiento estricto de la ley y de Francia, Inglaterra y Gales o Noruega y está en
la administración sanitaria que busca la curación proceso en Escocia y en nuestro país, muy avan-
y la rehabilitación como objetivo principal. Este zado en Cataluña. Por otra parte, se defiende la
sería el argumento fundamental para explicar actuación de equipos asistenciales especializados,
actuaciones erráticas de la administración con que ya trabajan con colectivos de exclusión y con
estos enfermos, a los que se les debería mante- cuadros complejos en la comunidad, para que ac-
ner al cuidado de terapeutas especializados que túen en el medio penitenciario, los grupos de Psi-
procuraran su rehabilitación social y al tiempo quiatría Asertiva Comunitaria, por ejemplo. En
sometidos a la tutela de los tribunales algo que todo caso se sostiene la necesidad de que la misma
hoy en día es extraordinariamente raro. organización especializada de la sanidad pública
• La relación entre delincuencia y marginación que actúa en los problemas de salud mental con
explica en parte la presencia de mayor porcen- los enfermos en libertad, lo haga con los enfermos
taje de trastornos mentales en prisión que tra- en prisión30.
dicionalmente se describen asociados a la ex- – Debe ser un equipo multidiscipinar el encargado
clusión social. La relación entre delincuencia y de atender a este tipo de pacientes con necesida-
drogadicción, añade este otro e importante fac- des de tratamiento complejas junto a un proble-
tor de desequilibrio mental a la población peni- ma de falta de soporte social. Se combinan además
tenciaria, el de los trastornos asociados al uso de diferentes diagnósticos de trastorno mental, que
sustancias psicoactivas. han evolucionado en el tiempo sin adecuado tra-
Todos estos factores, actuando en conjunto, tamiento o sin conciencia de enfermedad, casi en
pueden explicar en gran parte los elevados por- el 100% de estos enfermos hay asociado un pro-
centajes de antecedentes de trastorno mental de blema de adicción a drogas. Es necesario buscar
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espacios terapéuticos dentro de prisión para tratar gestores económicos de las cuentas públicas, que
estas adicciones, el modelo más defendido es el de destinar a estos pacientes de manera temprana al
Comunidad Terapéutica, modificando aquellos as- recurso sociosanitario adecuado, reduce el ries-
pectos que sea necesario, para adaptar su funciona- go de comportamientos antisociales, con lo que
miento al medio penitenciario31, 35-37. se evitarán los gastos reiterados derivados de los
– Se valora la utilidad de los recursos asistencia- arrestos e investigaciones policiales, de los proce-
les en prisión como los únicos capaces de actuar sos judiciales, de las estancias en prisión, por no
con eficiencia en la lucha contra las desigualda- hablar del coste social que soportarán las víctimas
des sociales en salud. Son dispositivos capaces de de los posibles delitos, los familiares del enfermo y
detectar tempranamente las patologías asociadas el propio paciente34.
a la marginación social, rescatando a enfermos – Es necesario resolver las controversias y dilemas
crónicos de una espiral de deterioro y conflic- éticos y legales que determinan la actuación clínica
tos reiterados con la justicia. Los enfermos son en casos concretos, como por ejemplo, las condi-
detectados y estabilizados en prisión y tienen la ciones de aplicación del tratamiento en contra de
oportunidad de reincorporarse a la sociedad con la voluntad del enfermo, los protocolos de traslado
mejor nivel de salud, siendo derivados a dispositi- urgente desde los lugares de detención y custodia
vos asistenciales en la comunidad que tratarán su del enfermo mental, como las comisarías o los cen-
trastorno reduciendo el riesgo de recaídas y por tros penitenciarios, a recursos socio-asistenciales,
tanto de reincidencia en comportamientos antiso- tanto para diagnóstico de un cuadro agudo como
ciales a causa de su enfermedad28, 38. para la derivación y seguimiento una vez que el
– La necesidad de un entendimiento entre las ad- paciente sale del sistema penitenciario31,  33,  40,  41.
ministraciones, la de justicia, la administración Se acaba de publicar un análisis de la situación de
socio-asistencial, la penitenciaria, junto a la obli- estos hospitales dependientes del sistema peniten-
gación de atender el punto de vista del usuario y de ciario en el que se trata en profundidad este pro-
la sociedad, hace que se mencione reiteradamente blema28. El Justicia de Aragón ha dado a conocer
en los documentos consultados, la obligación de un informe en el que se debaten soluciones para
todas las instituciones y representantes sociales de resolver estas controversias, entre lo estrictamen-
entenderse y coordinarse30, 31. Sólo con un traba- te jurídico y lo estrictamente clínico, a la hora de
jo organizado y ágil de todos estos agentes, será decidir sobre el futuro del tratamiento de estos
posible poner a disposición de los pacientes, los enfermos mentales que entran en contacto con el
recursos necesarios y en el momento adecuado, en sistema judicial35.
la evolución de su proceso mental. – Es importante establecer un programa de forma-
– Es importante desarrollar una campaña de sensibi- ción continuada, tanto de los funcionarios de vi-
lización social dirigida tanto a la opinión pública, gilancia, como de los profesionales dedicados a la
como a los profesionales, socio-sanitarios y a los intervención terapéutica en las prisiones. La mejo-
actores judiciales, que contrarreste la doble estig- ra de sus capacidades les permitirá tomar concien-
matización que sufren los enfermos mentales que cia de la situación de estos enfermos en el medio
están sometidos a un proceso judicial. Este estigma penitenciario y de la influencia que todos los tra-
es responsable en parte, de que se piense primero bajadores penitenciarios tienen en la creación de
en estas personas como en delincuentes, más que ambientes terapéuticos en prisión42. También faci-
como enfermos, lo que les discrimina gravemente a litará su labor para evitar el estigma y la discrimi-
la hora de acceder a los tratamientos rehabilitado- nación con estos enfermos en prisión33.
res que necesitan39. Esto es especialmente grave en
el caso de aquellos pacientes que han sido declara- Respecto a la estrategia desplegada por la Secre-
dos no responsables de los delitos que cometieron taría General de IIPP para abordar la asistencia a los
y que afrontan medidas de seguridad, se diría que problemas de salud mental en el medio penitenciario,
impuestas más como un castigo, que como un tra- el análisis de necesidades es compartido en su mayor
tamiento30. parte con las premisas ya enunciadas en la bibliografía.
– Las razones económicas pueden estar en el fondo La respuesta a estas necesidades comenzó a plantearse
de una escasez de recursos para estos enfermos. en Junio de 2007 cuando se publicó el “Plan de Salud
Aunque podría parecer que la estancia por perso- Mental de IIPP”. Después de un periodo de pilotaje de
na en un recurso penitenciario es más barata que las actuaciones que se proponían en el plan, y tras la
en un recurso asistencial, es preciso mostrar a los evaluación de los resultados, se llegó al Protocolo de
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Aplicación del Programa de Atención Integral a Enfer- los profesionales externos a la institución peniten-
mos Mentales en centros penitenciarios (PAIEM), pu- ciaria como los especialistas en psiquiatría, o los
blicado en Septiembre de 200927. En este documento se terapeutas y trabajadores sociales que participan
resumen las directrices de la Secretaría General sobre la desde las ONGs, se canaliza y coordina con el resto
asistencia a los problemas de salud mental en el medio de actividades que proporciona el equipo multidis-
penitenciario que son básicamente los siguientes: ciplinar, en las reuniones del equipo PAIEM27.
– Las controversias entre los planteamientos estric-
– Como la asistencia especializada y hospitalaria de- tamente jurídicos y los fundamentados en crite-
pende de las instituciones sanitarias de las CCAA, rios clínicos respecto a la derivación, tratamiento
su colaboración es indispensable para garantizar y custodia de alguno de estos enfermos mentales
una igualdad en la prestación, en tanto no se cum- sometidos a la tutela de los tribunales, se mantie-
pla la Ley de Cohesión y Calidad que establece la nen en nuestro país, como se señalaba también en
transferencia a las instituciones sanitarias de cada los documentos de los países de nuestro entorno
Comunidad Autónoma de la asistencia sanitaria consultados de la bibliografía. En España, es espe-
de atención primaria en los centros penitenciarios, cialmente llamativo el problema suscitado con los
hasta hoy cubierta por el Ministerio de Interior. enfermos sometidos a medidas de seguridad, por
– El PAIEM prevé la creación de equipos multidisci- tanto declarados no responsables de su conducta
plinares en los centros, impulsados por el director delictiva. Los tribunales pretenden con esas medi-
y los subdirectores de tratamiento y de sanidad, das, asegurar un correcto tratamiento y por tanto,
pero compuestos por todos aquellos profesionales alcanzar la rehabilitación de estos enfermos, que
que pueden intervenir en las actividades asistencia- sin embargo agotan el tiempo de la medida de se-
les con estos enfermos en su vida diaria en prisión: guridad privativa de libertad hasta el último día, en
personal sanitario, psicólogos, educadores, traba- un recurso asilar de bajo perfil rehabilitador como
jadores sociales, profesionales de Asociaciones u es un Hospital Psiquiátrico Penitenciario.
ONGs, juristas, maestros, monitores deportivos u – Los hospitales psiquiátricos dependientes del siste-
ocupacionales y funcionarios de vigilancia. ma penitenciario se encuentran sobreocupados por-
– Toda la Estrategia de Salud Mental de la Secreta- que soportan una excesiva derivación de enfermos
ría General no podría desarrollarse sin potenciar que han entrado en el sistema judicial pero que no
la formación continuada de aquellos profesionales encajan en el perfil clínico de un enfermo mental que
que desarrollan una labor más asistencial con estos precisa asistencia hospitalaria. Las causas de esta de-
enfermos, médicos, enfermeros y psicólogos. Para rivación inadecuada son múltiples, descoordinación
estos profesionales se convoca un curso de 60 ho- entre la administración judicial, penal y socio-asis-
ras cada seis meses desde hace cuatro años. Desde tencial, estigmatización de estos enfermos, que cau-
este año, hay también convocatorias de formación sa rechazo en los recursos comunitarios de los que
en línea sobre el funcionamiento y objetivos del podrían beneficiarse, presión social ante la enferme-
PAIEM para todos los funcionarios que se inte- dad mental para que prime la seguridad frente a la
gran en los equipos multidisciplinares en los cen- rehabilitación, ausencia de políticas de prevención y
tros. control de la enfermedad mental en pacientes cróni-
– El PAIEM establece el punto de unión para el abor- cos con una red de apoyo social deficitaria, lo que
daje de los problemas de salud mental, a menudo provoca que esos enfermos acaben empeorando y
complejos y cambiantes, que se observan entre los teniendo comportamientos antisociales, en ocasio-
internos que están en un centro penitenciario cum- nes reiterados y finalmente graves.
pliendo una pena o a la espera de juicio. Sirve de – Se han recopilado una serie de reflexiones apor-
conexión con otros programas específicos de trata- tadas por expertos que han venido trabajando en
miento, por el ejemplo el de las adicciones en pri- los últimos dos años, en grupos multidisciplinares
sión, que proporciona el Grupo de Atención a los que de manera multicéntrica se han reunido perió-
Drogodependientes (GAD) o el programa de Dis- dicamente en algunas CCAA para debatir sobre
capacitados Intelectuales. A partir del PAIEM se enfermos de su comunidad sometidos a medidas
puede establecer un diagnóstico temprano, un plan de seguridad e ingresados en los Psiquiátricos Pe-
de tratamiento individualizado y un seguimiento nitenciarios, en lo que se ha denominado “Comi-
tutorizado de las disfunciones adaptativas. De igual siones de Análisis de Casos” (CAC):
forma, es posible ver cómo el enfermo evoluciona • No se han aportado datos que demuestren un
dentro del programa rehabilitador. La actividad de aumento del riesgo para la seguridad en la co-
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munidad, al actuar primando la derivación del • N


 o hay evidencias de relación entre enfermedad
enfermo mental sometido a medidas de seguri- mental y criminalidad. La enfermedad men-
dad hacia recursos con alto potencial asistencial tal puede causar comportamiento delictivo, en
sobre recursos con alto potencial de control, si la medida en la que contribuye a un estilo de
se elige el perfil adecuado de enfermo. vida caótico, vulnerable socialmente, estigmati-
• Una adecuada derivación reduce la reinciden- zante y marginal. En otros casos la perniciosa
cia. influencia individual de un proceso mental gra-
• Una adecuada derivación ahorra costes sociales ve o crónico está en el antecedente de un acto
y económicos. incomprensible, impulsivo e impredecible que
• Una adecuada derivación precisa la creación de conduce a una conducta delictiva.
mecanismos estables de coordinación entre ad-
ministraciones, que sean capaces de afrontar de
manera flexible y ágil todas las distintas necesi- Discusión
dades asistenciales que la, a menudo, caótica ca-
rrera psicosocial de un enfermo complejo, pue- Hace ya unos años que todos los responsables de
da plantear a lo largo de su vida. La eficiencia en instituciones penitenciarias de los países occidentales y
la respuesta permitirá que el sistema jurídico no especialmente en Europa, han llamado la atención de la
se verá obligado a intervenir. sociedad sobre el elevado número de personas con tras-
• La adecuada derivación implica, al menos, el tornos mentales que se encuentran en los sistemas peni-
correcto entendimiento de dos complejas ad- tenciarios, los datos más fiables multiplican por cuatro
ministraciones, la sanitaria y la judicial. Ambas la presencia de trastornos mentales graves entre inter-
trabajan sobre una misión, visión y valores muy nos si se comparan con población general, por dos, si la
distintos, con una cultura muy diferente, por lo comparación es con cualquier tipo de trastorno mental,
que los acuerdos entre sus representantes son y si comparamos la adicción a drogas de los ingresos en
laboriosos. prisión con la población general, por quince o incluso
• Según la evidencia publicada un 81% de los en- por cien, en sustancias como la cocaína o la heroína res-
fermos sometidos a medidas de seguridad, son pectivamente. El hecho de encontrar un crecimiento de
reincidentes en la comisión de actos delictivos, la proporción de trastornos mentales entre las personas
generalmente menores, por lo que el fenómeno que están en prisión, no debe hacer pensar en la correla-
de la “puerta giratoria” de enfermos que entran ción trastorno mental y delincuencia, o prisión y dete-
y salen del sistema penitenciario es frecuente. rioro mental, estamos hablando de enfermos mentales
• Estas altas tasas de reincidencia se asocian con crónicos, con varios años de evolución de sus procesos,
la presencia de enfermedad mental junto a Tras- cuyo deterioro acaba por desembocar en un fracaso de
torno por Uso de Sustancias Psicoactivas (Pato- su capacidad de adaptación social entrando en com-
logía Dual). portamientos delictivos propios de la exclusión social,
• Los delitos cometidos por enfermos mentales drogadicción, hurtos, lesiones, robos43, 44. En casos ex-
graves se relacionan con un abandono de la me- cepcionales de enfermedad mental, generalmente con la
dicación. No hay reincidencia en este tipo de presencia de signos premonitorios claros, se comenten
enfermos. delitos extremadamente violentos e irracionales, con
• El éxito en la reducción de la reincidencia está resultado de muerte. La Institución Penitenciaria en
claramente asociada a una adecuada derivación nuestro país, ha debido reorganizarse para hacer frente
que asegure la continuidad del tratamiento del al reto de tratar este contingente de enfermos dentro de
enfermo en un recurso asistencial. Un mecanis- las prisiones. En las centros penitenciarios de todo el
mo que haga una búsqueda activa del enfermo Estado salvo Cataluña, que tiene transferida la respon-
en su entorno y facilite su adherencia terapéuti- sabilidad de la Administración Penitenciaria, esto se ha
ca asegura esta continuidad. hecho poniendo en marcha un Programa de actuación
• Recursos asistenciales de este tipo trabajando en específico, el PAIEM, que reúne todas las directrices
coordinación con las autoridades penitenciarias sobre las que los expertos están de acuerdo a la hora de
y judiciales, en el caso de enfermos que están so- abordar la asistencia de los problemas de salud mental
metidos a medidas de seguridad, o incluso han en prisión, la multidisciplinariedad, abriendo la parti-
cumplido una pena, pero necesitan un segui- cipación a todos los profesionales de la prisión intere-
miento de su enfermedad, garantizan una ade- sados en los enfermos y con trato directo con ellos, la
cuada derivación y evitan la reincidencia. equidad, haciendo de enlace con los servicios especiali-
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zados de psiquiatría de la comunidad para que puedan gen en la necesidad de establecer la responsabilidad de
actuar dentro de la prisión desde el primer momento, los actos delictivos, separando la responsabilidad de
de igual modo las ONGs e instituciones del tercer sec- los enfermos de la de los criminales.
tor que tienen un papel de mediación insustituible en La tutela de los tribunales sobre la evolución de la
la labor de reinserción social encuentran en el PAIEM enfermedad mental de los reclusos y muy especialmen-
el soporte necesario para su trabajo en los centros. El te de los enfermos declarados no responsables de su
PAIEM pone a disposición de los enfermos todos los delito y sometidos a medidas alternativas a la prisión,
espacios terapéuticos del centro, talleres, módulos de marca una delicada parte de las actuaciones asistencia-
respeto, GAD, programa de discapacitados, deportes, les en el sistema penitenciario. Es preciso fomentar una
terapeutas específicos, habilidades sociales, etc. y lo labor de compenetración de las instancias judiciales y
hace en base a la construcción de un programa indivi- sanitarias a través de la comunicación de los distintos
dualizado de tratamiento y rehabilitación. El programa puntos de vista y de la construcción de los puentes
permite un seguimiento tutorizado del proceso reha- necesarios para establecer una mutua comprensión de
bilitador de cada interno y responsabiliza de su fun- dos universos con esquemas de pensamiento y obje-
cionamiento a las máximas autoridades gestoras de los tivos muy diferentes. Uno, el cumplimiento de lo le-
centros, desde el equipo directivo mismo a los máximos galmente establecido, el otro, el beneficio del paciente.
responsables de sanidad y tratamiento de las prisiones. Debemos ser capaces de conseguir ambas metas.
Probablemente el manejo plenamente equitativo de es- Respecto a las actuaciones que las administracio-
tos pacientes hubiera estado más asegurado si la misma nes públicas tienen con los enfermos mentales que son
institución sanitaria que atiende a estos enfermos fuera declarados no responsables de determinadas conductas
de prisión, los atendiera también dentro, es decir, si se delictivas, en ocasiones graves, y que son sentenciados
hubiera materializado la transferencia sanitaria orde- a someterse a tratamiento para conseguir su recupera-
nada por la Ley de Calidad y Cohesión de 2003. Des- ción y evitar cualquier riesgo de reincidencia, la impre-
graciadamente y a día de hoy, un servicio de atención sión obtenida por este informe es que los resultados
primaria, como el que presta la sanidad penitenciaria, obtenidos hasta el día de hoy son muy mejorables. A la
aislado del resto de la estructura asistencial de la que espera de las conclusiones definitivas de las seis CAC,
es dependiente para prestar una asistencia integral, es por el momento cabe decir que resulta muy necesa-
decir de la asistencia especializada y hospitalaria, debe rio que se establezcan espacios de coordinación entre
salvar los problemas estructurales de organización y todas las administraciones que en algún momento tie-
coordinación con esa institución que le es ajena, la ins- nen responsabilidades en la actuación con este tipo de
titución encargada en cada Comunidad de la prestación enfermos. Es preciso mejorar mediante una actitud de
sanitaria, para procurar a las personas que están en pri- sincera corresponsabilidad y colaboración, la eficacia
sión, la misma calidad asistencial que reciben cuando de la respuesta que, por el momento, se le está dando
están en libertad. por parte de los poderes públicos a estas situaciones.
Por tanto, la Secretaría General de Instituciones
Penitenciarias se está esforzando en seguir las estra-
tegias aceptadas mayoritariamente por todos los ex- CORRESPONDENCIA
pertos, a la hora de abordar los problemas de salud
mental entre los reclusos, si bien lo hace afrontando JM Arroyo-Cobo
graves problemas estructurales, no se olvide que no Talleres Editoriales Cometa, S.A.
hablamos de una institución sanitaria y que por tanto Ctra. Castellón, Km. 3,400
depende de la colaboración del resto de la sanidad pú- 50013 Zaragoza
blica para alcanzar sus objetivos en esta materia.
Sin embargo, quizá sea la relación con la institución
judicial lo que establece definitivamente la especifici- Referencias Bibliográficas
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