El Samsara Trae Sufrimiento, El Darma Trae Felicidad - Tsenzhab Serkong Rinpoche

También podría gustarte

Está en la página 1de 5

El samsara trae sufrimiento, el Darma trae felicidad

Tsenzhab Serkong Rinpoche

Todos los seres desean la felicidad, nadie quiere ser infeliz. El Darma enseña los métodos para
deshacerse del sufrimiento y alcanzar la felicidad. El Darma que practicamos es, literalmente, algo que
nos sostiene. Esto puede explicarse de varias maneras: nos aleja del sufrimiento y nos proporciona
verdaderas herramientas para la felicidad.

La felicidad puede ser física o mental. También existen dos tipos de sufrimiento: físico y mental. Aunque
muchos de nosotros deseamos alcanzar la felicidad, ignoramos los métodos que nos pueden llevar a
conseguirla. Los métodos que nosotros utilizamos, nos llevan al sufrimiento.

Algunas personas matan y roban para vivir. Ellos piensan que esto les proporcionará felicidad. No, no es
así. Algunos otros tratan de alcanzar la felicidad siendo comerciantes, granjeros, etc. y lo hacen dentro
de los límites legales. Mucha gente se enriquece y se hace famosa utilizando estos métodos. Este tipo de
felicidad no es algo que pueda durar para siempre; no es la felicidad ulterior. No importa cuánta felicidad
o bienes materiales tengamos, nunca estamos completamente satisfechos. Aunque poseyéramos una
nación entera, siempre querríamos más.

El trabajo que hacemos para alcanzar la felicidad nunca termina. Siempre estamos intentando llegar por
los caminos más rápidos, coches y otras cosas. Pero este tipo de búsqueda nunca termina. Por eso se
dice que la existencia samsárica no tiene final, solamente da vueltas y vueltas. Esto es algo que podemos
entender: la búsqueda mundana nunca termina.

Una flor es fresca cuando es nueva, muere cuando envejece. No importa cuánto logres en esta vida,
algún día se acabará. Se acaba mientras el tiempo va pasando y pasando hasta llegar al final de nuestras
vidas, que es cuando experimentamos el mayor sufrimiento. Por ejemplo, un automóvil. Hemos pasado
por lotes donde los coches han sido tirados. Ese es el final, un estado en el todo se ha convertido en
basura. Aun cuando el coche está en buenas condiciones, nos preocupamos por él. Nos preocupa que se
dañe, nos preocupa el pago de los impuestos y el seguro, etc., etc. Este ejemplo lo podemos aplicar a
todos nuestros bienes materiales. Mientras más tenemos, más nos preocupamos por ellos.

El Darma es aquello que nos enseña el método para proporcionarnos felicidad mental. Para alcanzar
algún tipo de felicidad mental, no realizamos un trabajo físico: necesitamos trabajar con nuestra mente.
Sin embargo, la mente posee un largo flujo de continuidad, aún hacia vidas futuras y desde vidas
pasadas. En cada vida poseemos un cuerpo y tratamos de conseguir felicidad para ese cuerpo; pero a la
hora de la muerte, la mente continúa. Así que la felicidad que necesitamos desear no es solamente
aquella maravillosa y estable; sino una que permanezca durante nuestras vidas futuras y que no corte su
continuidad.

Darma no es cualquier tipo de actividad que realicemos, constructiva o no. La realización de acciones
positivas en beneficio de nuestra vida futura, eso es el Darma.

La felicidad o la infelicidad se derivan de nuestras acciones. Considerando éstas acciones kármicas, las
acciones negativas dan resultados negativos y las acciones positivas dan resultados positivos. Cualquier
cosa que podamos realizar bien en esta vida, plantar un campo o algo similar, es consecuencia de
acciones positivas que realizamos en vidas anteriores. Si estamos muy enfermos, o somos infelices, o
tenemos una corta vida, todo esto es resultado de acciones negativas que realizamos en el pasado.

Por ejemplo, existen dos comerciantes: uno es exitoso y el otro no. Esto es resultado del karma anterior.
Puedes ver a dos hombres de negocios; uno trabaja muchísimo y no es exitoso, mientras que el otro no
tiene que trabajar tanto y sin embargo es exitoso. Otro ejemplo: si matas seres vivos, tendrás una vida
corta y te enfermarás. Pueden preguntarle a su gueshe-la acerca de todo esto.

Si te abstienes de realizar actos negativos, no renacerás en un reino inferior, sino como humano o en un
reino superior. Pero, aún si renaces como humano o como un dios, esto no te da la completa felicidad,
todo es parte de la naturaleza del sufrimiento. ¿Por qué es así? Si logras una posición alta, caes a una
baja; si estás en una posición inferior, subes a una más alta. Esto trae un gran sufrimiento. Por ejemplo, si
tienes hambre, comes; pero si comes mucho, te enfermas. Si tienes frío, prendes la calefacción y te
acaloras demasiado; entonces tienes que refrescarte. Existen todo tipo de sufrimientos como éstos.

El Samsara, (la existencia incontrolablemente recurrente), consiste en estos tipos de sufrimiento. Es el


resultado del karma y de diferentes emociones y actitudes perturbadas. Debemos desarrollar la
sabiduría (conciencia discriminativa) del vacío o de la no identidad inherente.

Los dieciséis arhats y muchos otros aryas, son ejemplos de aquellos que han logrado poner fin a su
samsara. Aunque podemos poner fin a nuestra propia existencia samsárica, no basta con esto, porque
nadie ha sido más amable con nosotros que todos los seres limitados (seres sintientes). Los productos
lácteos provienen de la amabilidad de los animales. Si disfrutamos la carne, ésta viene de animales que
han sido sacrificados estando sanos. En el invierno, usamos abrigos de piel y de lana proveniente de
otros animales. Ellos son muy amables al proporcionarnos todo esto. Necesitamos retribuir esa
amabilidad de los seres vivientes procurando lograr el estado de la budeidad nosotros mismos, entonces
podremos facilitar el logro de las metas de todos los seres limitados.

Los sravakas y los arhats no pueden satisfacer todos los propósitos de los seres limitados. El único que
puede hacer esto es un Buda, así que esto es lo que debemos hacer para verdaderamente poder
ayudarlos. Necesitamos convertirnos en Budas nosotros mismos.

¿Cómo? Siguiendo las enseñanzas del Darma. En India, existían los mahasiddhas de grandes logros;
contamos con la historia de las vidas de ochenta de ellos, pero en realidad existen un sinnúmero de
aquellos que alcanzaron la iluminación durante su propia vida. En el Tibet tenemos el ejemplo de
Milarepa y de otros grandes maestros de las escuelas kagyu, nyingma, sakya y gelug

Una vez alcanzado el estado de un Buda, nuestros esfuerzos en el Darma terminan. El trabajo en el
Darma es muy difícil en un principio, pero se va facilitando cada vez más; y en la medida en que
progresamos, vamos siendo cada vez más y más felices. Terminamos nuestro trabajo con el Darma en un
estado de completa felicidad. El trabajo mundano sólo nos trae más sufrimiento.

Por ejemplo, cuando las personas mueren, su vida llegando a su culminación o al final causa sólo tristeza
y gran sufrimiento, no sólo para ellos, sino también para aquellos que dejan, por ejemplo, en sus
funerales. Necesitamos pensar en esto y realizar algún tipo de trabajo con el Darma. Alcanzar la
culminación o final del Darma habiendo obtenido la iluminación, solamente nos puede brindar felicidad,
no únicamente a nosotros, sino también a los demás.

Necesitamos abstenernos de cometer las diez acciones negativas. Si realizamos acciones positivas,
experimentamos felicidad, y si realizamos acciones negativas, experimentamos infelicidad. Necesitamos
examinar los resultados de nuestras acciones, así como examinar a nuestra propia mente como la causa
de nuestras acciones. Cuando examinamos lo que hacemos, nos damos cuenta de que poseemos las tres
actitudes y emociones venenosas: el apego, la aversión y la ignorancia.

Como resultado del apego, la aversión y la ignorancia tenemos 84000 clases de emociones y actitudes
perturbadas. Estos 84000 engaños son nuestros principales enemigos, así que, a éstos los buscamos
mirando hacia dentro, no alrededor de nosotros. De éstos 84000, lo principales son las tres actitudes
venenosas y la peor, es la ignorancia que habita ahí en nuestro propio flujo mental.
En resumen, necesitamos mirar dentro de nosotros y tratar de terminar con estos enemigos internos. Es
por eso que los seguidores del Buda darma son llamados “introspectivos” (nang-pa), porque siempre
están mirando hacia dentro. Si ponemos fin a las emociones y actitudes perturbadas en nuestro flujo
mental, entonces le ponemos fin a todo nuestro sufrimiento. Una persona que trabaja para lograr esto
es conocida como seguidora del Darma.

Una persona que trabaja con el Darma para eliminar las emociones y actitudes perturbadas dentro de sí
misma, realiza una actividad del Darma conocida como el vehículo hinayana. Si trabajamos en eliminar
nuestros engaños no sólo para deshacernos de nuestro sufrimiento, sino que vemos a los demás como
más importantes y trabajamos en eliminar nuestros engaños para ayudarlos a eliminar también sus
emociones y actitudes perturbadas, entonces seremos practicantes mahayana. Sobre la base de este
cuerpo físico, necesitamos tratar de convertirnos en mahayanistas, y el resultado será poder alcanzar el
estado iluminado de un Buda.

El punto principal es siempre tratar de beneficiar a todos y nunca causar daño de ningún tipo a nadie. Si
recitamos “Om mani padme hum”, necesitamos pensar: “Que la fuerza positiva de realizar esto,
beneficie a todos los seres limitados”.

Es difícil obtener los cuerpos que poseemos como base para nuestro trabajo, nacer como humano, no es
algo fácil de lograr. Por ejemplo, observen el globo terráqueo; la mayor parte la ocupan los océanos, y
piensen, cuántos peces hay en estos océanos. La forma de vida más numerosa es la de animales e
insectos. Si nosotros pensamos en todo el planeta y en el número de insectos y animales que hay, nos
daremos cuenta de cuán raro, poco común es nacer como humanos.

Video: Matthieu Ricard — “¿Qué es felicidad?, ¿qué es sufrimiento?”

Para activar los subtítulos, por favor selecciona el ícono “Subtítulos” que está en la esquina inferior
derecha de la pantalla. Para cambiar el idioma, por favor selecciona el ícono “Configuración”, después
selecciona “Subtítulos" y elige el idioma de tu preferencia.

Resumen

En el Darma, las realizaciones y los destellos de entendimiento profundo se van dando lentamente, no
ocurren en tan sólo unos días, semanas o meses. Incluso sólo unos cuantos seres humanos piensan en el
darma, ya no digamos que lo realizan. Necesitamos realizar un trabajo constante durante largo tiempo.
Ustedes cuentan aquí con un gueshe bien calificado que puede contestar todas sus preguntas. Con el
tiempo, el Buda darma continuará creciendo y se expandirá. Es algo que está vivo y sigue creciendo.
Cuando el Buda enseñó por primera vez, solamente tenía cinco discípulos. A través de éstos se
extendieron sus enseñanzas y hoy día sigue presente de forma muy importante.

Hoy día contamos con alguien igual a Shakyamuni, Su Santidad el Dalai Lama, quien estará aquí en
octubre. Cualquier enseñanza que Su Santidad les transmita, tómenla con el corazón y practíquenla con
sinceridad. La esencia de las enseñanzas es nunca dañar a criatura alguna y no tener pensamientos
dañinos, tratando sólo de beneficiarlos. Este es el punto principal. Si ustedes actúan así, recibirán
grandes beneficios en el futuro.

Transcripción de un seminario, Longueuil, Quebec, Canada, agosto de 1980; traducido por Alexander
Berzin; traducido al español por María Clara LeAL

También podría gustarte