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Clínica y Salud

ISSN: 1130-5274
clin-salud@cop.es
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
España

BENEVIDES PEREIRA, ANA MARIA T.; MORENO-JIMÉNEZ, BERNARDO; GARROSA


HERNANDEZ, EVA; GONZALEZ GUTIÉRREZ, JOSÉ LUIS
La evaluación específica del síndrome de Burnout en psicólogos: el "inventario de Burnout de
psicólogos"
Clínica y Salud, vol. 13, núm. 3, 2002, pp. 257-283
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
Madrid, España

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=180618090002

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Clínica y Salud, 2002, vol. 13 n°. 3 - Págs. 257-283

ARTÍCULOS
La evaluación específica del síndrome
de Burnout en psicólogos: el
«inventario de Burnout de psicólogos»
Evaluating the Burnout syndrome in
psychologists: «The psychologists
Burnout inventory»
ANA MARIA T.BENEVIDES PEREIRA*
BERNARDO MORENO-JIMÉNEZ**
EVA GARROSA HERNANDEZ*
JOSÉ LUIS GONZALEZ GUTIÉRREZ***

RESUMEN

La investigación del “burnout” se ha extendido a una amplia variedad de


profesiones, asistenciales y no asistenciales, sin embargo el estudio del bur-
nout en psicólogos es relativamente escaso a pesar de ser una profesión con
alto riesgo de burnout. El “Inventario de Burnout de Psicólogos” (IBP) es un
instrumento elaborado específicamente para evaluar los procesos de burnout
en los psicólogos que consta de tres partes: características profesionales,
dimensiones del burnout y sintomatología de estrés asociada. La aplicación
del IBP a una muestra de 203 profesionales de la psicología, de lengua espa -
ñola y brasileña, ha mostrado claramente una estructura factorial de tres fac-
tores según el modelo asistencial clásico de burnout: cansancio emocional,
despersonalización y falta de realización personal. La sintomatología asociada
se factorializa en tres dimensiones: consecuencias psicológicas, físicas y

* Universidade Estadual de Maringá- Brasil


** Universidad Autónoma de Madrid
*** Universidad Rey Juan Carlos

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

sociales. Las tres partes del IBP están altamente asociadas de forma que las
características profesionales se asocian al nivel de burnout y los niveles del
burnout a la sintomatología percibida.

ABSTRACT

Burnout research has reached a variety of jobs, whether welfare-related or


not. Very few studies of burnout among psychologists exist, although this job
involves a higher burnout risk. The “Psychologists Burnout Inventory” (PBI) is
an inventory intended at evaluating burnout processes in psychologists. It
consists of three parts: job characteristics, burnout dimensions and associa-
ted symptoms. The PBI was administered to a sample of 203 psychologists,
whether Spanish speaking or Portuguese speaking (Brazilians), clearly sho -
wing a three-factor structure according to the classical burnout treatment
model: emotional exhaustion, depersonalization and lack of personal accom-
plishment. Associated symptoms cluster in three dimensions: psychological,
physical and social consequences. The three parts of PBI are closely related:
job characteristics relate to burnout level and the latter is related to perceived
symptoms.

PALABRAS CLAVE

Burnout, Psicólogos, Sintomatología, Evaluación, IBP.

KEY WORDS

Burnout, Psychologists, Symptoms, Evaluation, PBI.

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A. M.ª T. Benevides, B. Moreno-Jiménez, E. Garrosa y J. L. González

INTRODUCCIÓN d rome desarrollan síntomas muy


variados que interfieren negativa-
Desde que Fre u d e n b e rg (1974) mente en su trabajo, en su salud y
escribió por primera vez acerca del en su vida personal. A partir de
b u rnout, los trabajos que versan 1996 el modelo original fue modifi-
sobre este tema se han multiplica- cado por Maslach y Jackson y Lei-
do. Kleiber y Enzman (1990) refie- ter (Maslach, Jackson y Leiter,
ren más de 2.500 hasta el año de 1996) para incluir profesiones no
1989. Recorriendo las bases de asistenciales, formulándose opera-
datos Psyclit, Medline y Disserta- tivamente el síndrome como Can-
tion Abstracts de 1994 hasta enero sancio Emocional, Cinismo y Efica-
de 2000, se encuentran en los 6 cia profesional.
años 3.239 investigaciones, artícu-
los y libros relacionados con el bur- En estos años, han sido muchos
nout, demostrando la importancia los colectivos profesionales estu-
creciente y el interés de los científi- diados (maestros, médicos, enfer-
cos por el asunto. En castellano, la meros, etc.), pero son pocos, toda-
base de datos Teseo recoge 11 vía, los trabajos que se refieren a
tesis doctorales, 3 de ellas bajo la los psicólogos. La mayoría de los
categoría de “desgaste pro f e s i o- trabajos realizados con psicólogos
nal”. estudian casi exclusivamente psi-
cólogos clínicos y psicólogos
El “burnout” es un síndrome que docentes, con escasas referencias
puede afectar a profesiones muy a otras actividades pro f e s i o n a l e s
d i f e rentes, sanitarias, docentes, de los psicólogos. Acudiendo a la
policiale s y otras muchas. En literatura, se pueden encontrar
general, suele presentarse pre f e- estudios referidos a psicoterapeu-
rentemente en aquellas ocupacio- tas, pero en esta categoría se suele
nes que con frecuencia tienen que incluir psiquiatras, enfermeros de
atender e interactuar de form a salud mental, trabajadores sociales
asistencial con algún tipo de usua- y consejeros. Curiosamente es muy
rio o “cliente” que presenta necesi- poco o nada lo que se puede
dades más o menos importantes e encontrar sobre los psicólogos
imperiosas. El modelo operativo o rganizacionales, aunque hayan
inicial fue presentado por Maslach sido especialmente ellos quienes
y Jackson (Maslach y Jackson, más han investigado el síndrome.
1981) como un síndrome caracteri- Probablemente estos hechos estén
zado por Cansancio emocional, reflejando el dato más general,
Despersonalización y Realización advertido por algunos autores, de
personal. Las personas con el sín- que los psicólogos raramente se

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

incluyen como objeto de sus pro- gers, 1982), irritabilidad y distancia-


pios estudios (Harrsh, 1983; Guy y miento físico (absentismo) o mental
Liaboe, 1986, Pereira, 1994). (falta de atención, sueño, aburr i-
miento).
Sin embargo, el ejercicio de la
psicología es una fuente de riesgos También como en otras profesio-
psicosociales. La psicología es una nes, los psicólogos pueden tener
ocupación donde el pro f e s i o n a l dificultades en sus relaciones labo-
mantiene una relación muy próxima rales y sociales, tanto con colegas
con las personas a las que debe como con amigos o familiares (Cray
atender. Esta relación tan estrecha y Cray 1977; Farber y Heifetz, 1982;
a menudo supone la implicación en Deutsch, 1985; Carvalho, 1988), y
p roblemas em ocionales que puede suceder que los problemas y
muchas veces llegan a repercutir dificultades en las relaciones les lle-
en su propia vida personal. Ade- ven muchas veces al aislamiento
más, los conflictos entre los intere- social (Greben, 1975; London,
ses de la organización, escuela, 1977; Will, 1979; Farber y Heifetz,
familia, empresa o institución, y las 1982; Guy y Liaboe, 1986,).
personas objeto de su trabajo sue-
len suponer dilemas personales P e ro además, los psicólogos
que sobre c a rgan y desgastan al suelen tener dificultades propias de
psicólogo. su actividad y profesión. A veces,
las actitudes desarrolladas en el
En el ejercicio profesional de la trabajo pueden extenderse y gene-
psicología se dan elementos comu- ralizarse a las demás situaciones,
nes con otras profesiones que pre- llevándoles al distanciamiento de
disponen al estrés y al burn o u t , las personas, a la observación y a
tales como el exceso de demanda la interpretación generalizada, lo
(Farber y Heifetz, 1982; Forn e y, que puede producir una profesio-
Wallace-Schutsman y Wi g g e r s , nalización de la vida y una irrupción
1982), la rutina (Deutsch, 1985; Will, excesiva del rol profesional en la
1979), la remuneración insuficiente propia identidad personal (Greben,
(Forney, Wallace-Schutzman y Wig- 1975; Farber, 1983; Guy y Liaboe,
gers, 1982; Pereira, 1994, Rao y 1986).
Mehrotra, 1998) o la presión cons-
tante (London, 1977). Lo mismo O t ro problema específico pro-
ocurre con las consecuencias habi- viene del hecho frecuente de que
tuales del estrés org a n i z a c i o n a l : los psicólogos sean objeto de una
agotamiento físico y emocional visión idealizada por parte de los
(Forney, Wallace-Schutman y Wig- pacientes y de las personas en

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genera l (Greben, 1975 ; Le me , ocasionar la actualización de viejos


1989; Cardoso, 1985; Dare, 1997), p roblemas o ser sentidas como
lo que puede facilitar que éstos se desencadenantes de problemas en
sientan impelidos a corresponder y ellos mismos (Farber y Heifetz,
confirmar las expectativas explici- 1982; Forney, Wallace-Schutman y
tadas. Con frecuencia, el psicólo- Wiggers, 1982). La propia compleji-
go considera que su función es la dad de su objeto de estudio se
de mantener una capacidad de manifiesta en el desarrollo de un
respuesta constante y estar siem- número tan amplio de escuelas o
pre predispuesto a atender y, si es abordajes teóricos que pueden lle-
posible, solucionar las demandas gar a confundir y sobre c a rgar al
de su clientela, lo que a veces es profesional (Bloch, 1982).
sentido más como una exigencia
imperiosa que como algo conve- Algunos investigadores han lla-
niente (London, 1977; Farber y mado también la atención sobre
Heifetz, 1982; Rao y Mehro t r a , una mayor incidencia dentro del
1998). colectivo de psicólogos del abuso
de alcohol y drogas (Thorenson et
La atención psicoterapéutica ha al., 1983; Forney, Wallace-Schut-
sido considerada como un factor man y Wiggers, 1982; Deutsch,
que puede causar un imp acto 1985), y del suicidio (Deutsch,
negativo en la vida personal del 1985; Cray y Cray 1977; Lester.
terapeuta (Guy y Liaboe,1986; Far- 1989).
ber y Heifetz, 1982; Will, 1979, Gre-
ben, 1975; Varma 1997). Los psico- Si embargo, la profesión del psi-
terapeutas suelen trabajar directa- cólogo no presenta sólo problemas,
mente con el estrés y los estresores sino también aspectos positivos
de sus clientes (Va rma, 1997), y tales como el desarrollo de una
están más expuestos a la intimidad, mayor capacidad de introspección,
a la interacción y a la implicación una mayor sensibilidad o habilidad
con sus clientes, asistiendo y parti- de auto-reflexión (London, 1977;
cipando en la lucha de personas Farber, 1983; Guy y Liaboe, 1986),
que presentan un malestar consi- mayor comprensión del comporta-
derable y dificultades emocionales miento de los demás y capacidad
importantes (Dare, 1997). Además, de ayudar a las personas (Farber y
algunas características del pacien- Heifetz, 1982), lo que le suele apor-
te, como el tipo depresivo o con tar una alta satisfacción personal
tendencias suicidas, así como en el ejercicio de la profesión (Rao
situaciones personales muy próxi- y Mehrotra, 1998).
mas a las del terapeuta, pueden Ante estos datos, cabe pregun-

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

tarse por la extensión y los niveles el “Staff Burnout Scale for Health
del burnout del psicólogo. Por una P rofessión” (Jones, 1980), para
p a rte no cabe duda de que está médicos como el “Medical Person-
sometido a riesgos psicosociales nel Stress Survey” (Hammer, Jones,
importantes que pueden afectarle Lyons, Sixmith y Efficiando, 1985),
profesional y personalmente, pero para enfermería como el “Nursing
también parece que puede dispo- S t ress Scale” (Gray-toft y Ander-
ner de mecanismos y estrategias son, 1981) o el “Cuestionario de
de afrontamiento que le permitan Desgaste Profesional de Enferme-
un manejo adecuado de sus situa- ría” (Moreno-Jiménez, Garrosa y
ciones de estrés y de los factores Gonzalez 2000b), o para psicólogos
de burnout propios de sus activi- como el “Psychologist’s Burn o u t
dad profesional. En cualquier caso, Inventory” (Ackerley, Burnell, Hol-
parece importante tratar de evaluar der y Kurdek, 1988). Algunos de
el perfil del burnout del psicólogo. tales instrumentos no diferencian
específicamente los aspectos o
Aunque la evaluación del burnout dimensiones del estrés general del
se ha generalizado mediante el uso síndrome específico del burnout, o
del MBI, Maslach Burnout Inven- se han elaborado modificando la
t o ry, (Maslach y Jackson, 1981; formulación del MBI y adaptándolo
Maslach, Jackson y Leiter, 1996), a profesiones específicas (Teacher
una tendencia que ha apare c i d o Attitude Scale, Farber, 1984; Scho-
desde los comienzos del estudio ol Principal-Experiencied Burnout;
del tema ha sido intentar evaluar de Friedman, 1995)
forma específica y no sólo genérica
los elementos del síndrome en las El objetivo del presente trabajo
d i f e rentes profesiones, especial- es presentar los trabajos iniciales
mente en las asistenciales. Para sobre el “Inventario de Burnout de
ello se han elaborado cuestionarios Psicólogos” (IBP), dirigido a evaluar
de burnout propios para profesores específicamente las dimensiones
como el “Teacher Stress Inventory” del síndrome de burnout en la pro-
(Fimian, 1984), el “Teacher Burnout fesión de psicólogos y exponer sus
Scale” (Seidman y Zager 1986-87) características psicométricas bási-
o el Cuestionario de Burnout de cas. El IBP consta de una primera
P ro f e s o res Revisado (More n o , p a rte en la que se recogen los
G a rrosa y González-Gutiérre z , datos sociodemográficos y profe-
2000a). Igualmente, se han elabora- sionales de los sujetos, tales como
do cuestionarios específicos para la edad, sexo, grado de form a c i ó n ,
evaluación del burnout de profesio- área específica de trabajo en psico-
nales de la salud en general, como logía y otras semejantes. En su

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segunda parte, el IBP consta de las los cuales 98 (48%) eran de lengua
dimensiones del síndrome de bur- española y 105 (51,7%) brasileños.
nout, Cansancio emocional, Des- En el total de la muestra 144
personalización y Realización per- (70,4%) eran mujeres y 58 (28,6%)
sonal según la definición clásica eran hombres. La edad media de
propuesta por Maslach y Jackson toda la muestra era de 39,54 y la
(1981) para profesiones asistencia- desviación típica de 9,24, siendo el
les. Una tercera parte del instru- más joven de 22 años y el mayor
mento, el Inventario de Síntomas de de 72. Había diferencias notables
Estrés (ISE), analiza la sintomatolo- en el tiempo que hacía desde su
gía menor, física y psicológica, aso- graduación como psicólogos, el
ciada a las consecuencias del bur- más reciente de todos ellos tenía
nout profesional. solo un año de experiencia y 42
años el de mayor antigüedad en el
La hipótesis básica que ha dirigi- ejercicio. El área de actuación pro-
do la realización de este trabajo ha fesional era muy variada, 141 traba-
sido que era posible elaborar un jaban en el área Clínica, 41 en
instrumento específico para la eva- Organizaciones, 36 en Escolar, 32
luación del burnout del psicólogo en el ámbito de la Salud, y 29 en la
que recogiera las tres dimensiones Docencia. Otras áreas menos
del burnout asistencial con elemen- representadas eran la Jurídica (15)
tos propios de la conducta profe- y la Familiar (15), aparecían igual-
sional del psicólogo y que los nive- mente otras áreas con una repre-
les de burnout estaban asociados a sentación muy escasa. En algunos
una sintomatología de estrés. En el casos los sujetos respondían a dos
trabajo se exponen los datos explo- áreas o incluso más. El total de la
ratorios acerca de la validez facto- muestra tenía la licenciatura de psi-
rial, consistencia psicométrica y cología, pero algunos contaban con
validez convergente del instrumen- estudios complementarios, 30
to. Complementariamente se expo- (14,8%) de ellos tenían el doctora-
nen algunos elementos sobre la do, 65 (32,0%) tenían alguna espe-
validez de constructo. cialidad y 54 (26,6%) tenían un
Master.

MÉTODO
Instrumentos y variables
Muestra Elaboración del IBP

La muestra estaba compuesta Se procedió inicialmente a un


por un total de 203 psicólogos, de análisis de las re f e rencias biblio-

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

gráficas mencionadas en las prin- consistencia y de su re d u c i d o


cipales bases de datos, como n ú m e ro de ítems. La form u l a c i ó n
Psyclit y Medline, para encontrar de los mismos fue efectuada con
los estudios referidos al burn o u t un criterio amplio de las conductas
del psicólogo y las características de despersonalización (More n o -
principales del mismo. Sobre tales Jiménez y Oliver, 1993 ), y al mismo
datos se elaboró una base de 56 tiempo específicas del ejerc i c i o
ítems re p resentativa de las tre s profesional de la psicología, a fin de
dimensiones operativas del bur- poder recoger sus diferentes mani-
nout: Cansancio Emocional, Des- festaciones manteniendo la fiabili-
personalización y Realización Per- dad interna. La escala inicial estaba
sonal. Los ítems fueron elabora- compuesta de 23 ítems. Ejemplos
dos de forma que pudieran apli- de ellos son:
carse a las diferentes áreas de la
práctica profesional de la psicolo- • Hay personas con las que
gía: educativa, organizaciones, clí- tengo que trabajar cuyas conduc-
nica, etc. Los ítems fueron redac- tas me irritan.
tados desde el primer momento • Tengo que esforzarme para no
en castellano y portugués bajo la p e rder la paciencia con algunas
s u p e rvisión de dos jueces bilin- personas de mi trabajo, lo que
gües. resulta difícil.

La d imensión de Cansancio La dimensión de Realización Per-


Emocional estaba representada por sonal se hizo siguiendo el modelo
16 ítems que se referían a la pérdi- operativo original de Maslach y
da de valor, falta de motivación y Jackson (1981) de incluir ítems
cansancio ante la perspectiva del referidos a la valoración positiva del
trabajo. Contenían enunciados p ropio trabajo y a la satisfacción
tales como los siguientes: con el mismo. Como en las varia-
bles anteriores, la escala contenía
• Debido a mi trabajo, me siento 17 ítems. Ejemplos de ellos son:
agotado física y emocionalmente.
• Apenas he comenzado mi tra- • Siento que realizo un trabajo
bajo ya me siento cansado. profesional muy importante.
• Obtengo satisfacción personal
La dimensión de Despersonaliza- en mi profesión.
ción fue cuidada especialmente,
debido a los problemas habituales Elaborados teóricamente los
que se han encontrado en esta ítems en función de la definición
dimensión acerca de su falta de operativa del Maslach Burn o u t

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Inventory –Human Services Survey Peñacoba, 1996; Peñacoba 1996 ).


(MBI-HSS, Maslach y Jackson, La opción por elaborar un instru-
1981) y atendiendo a los diferentes mento nuevo y diferente en vez de
resultados de la literatura sobre el optar por alguna de las listas de
tema, los ítems fueron evaluados sintomatología (Moreno-Jiménez y
por cuatro jueces encargados de Ximenez, 1996) fue debido a la
apreciar la validez aparente de la conveniencia de un listado amplio
formulación del ítem y su corres- de sintomatología no médica que
pondencia teórica con una de las re p resentara los problemas de
t res dimensiones. Los ítems que salud exentos de gravedad, tanto
no fueron respaldados por tre s de tipo psicosocial como físicos, lo
jueces fueron eliminados. La esca- que no parecía ser el objeto de
la de respuesta elegida fue seme- otros listados.
jante a la propuesta por el MBI-
HSS, escala de tipo likert con una En una primera fase se analizó
amplitud de 6 categorías en el la sintomatología asociada al bur-
rango de 1-6. nout (Gil-Monte y Peiró, 1997 ;
Schaufeli y Enzman, 1998), re v i-
En su primera parte, el IBP inclu- sando diferentes instru m e n t o s
ye una serie de cuestiones de tipo para la evaluación de la sintomato-
sociodemográfico relativos a las logía (Moreno-Jiménez y Ximenez,
variables estrictamente demográfi- 1996). El objetivo no era elaborar
cas y profesionales: área de actua- un listado de consecuencias pato-
ción profesional, tipo de formación lógicas o médicas del burn o u t ,
postgrado, línea teórica pre f e re n- sino disfunciones asociadas a las
cial, tiempo de finalización de los consecuencias del estrés crónico
estudios de grado, tiempo de tra- p ropio del ejercicio pro f e s i o n a l .
bajo, etc. Para ello se utilizó como punto de
partida el listado de secuelas del
est rés crónico ela borado p or
El “Inventario de Síntomas Moreno y Peñacoba (1996), com-
de Estrés” (ISE) pletándolo en función de la re v i-
sión bibliográfica.
Junto al IBP se elaboró el ISE
como una tercera parte del instru- El instrumento así elaborado
mento con el objetivo de evaluar contaba con 30 manifestaciones
las secuelas psicológicas y fisioló- sintomáticas asociadas teórica-
gicas del burnout. El ISE fue elabo- mente al burnout y al estrés cróni-
rado a partir de la Escala de Sínto- co. Teóricamente quince de ellas
mas de Estrés (Moreno-Jiménez y eran básicamente de tipo físico fun-

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

cional o psicosomático y quince de publicación científica de los resulta-


ellas psicológicas o sociales. Ejem- dos del estudio.
plos de síntomas físico-funcionales
eran el dolor de cabeza, o los dolo- Debido al interés en obtener un
res musculares. Ejemplos de sínto- muestra integrada por psicólogos,
mas psicosociales eran irritabilidad aunque con distintas áreas profe-
fácil, o dificultad para controlar la sionales, se solicitó la colaboración
agresividad. del Colegio Oficial de Psicólogos
de Madrid al amparo del Convenio
La escala de respuesta a la fre- con la universidad Autónoma de
cuencia de sintomatología va de 0 Madrid. Para la muestra de lengua
“nunca” a 4 “asiduamente”, lo que p o rtuguesa se colaboró con el
permitía un grado de discriminación “Conselho Regional de Psicología”
que en otras investigaciones (Peña- de Maringá. A la muestra de lengua
coba y Moreno-Jiménez 1999) ha portuguesa se le aplicó simultanea-
demostrado su eficacia en la distri- mente el MBI a fin de evaluar la
bución de la sintomatología de la validez convergente del IBP.
muestra. Como en el caso del IBP,
los ítems fueron elaborados en cas- El procedimiento de envío se rea-
tellano y portugués, verificándose lizó a través de correo electrónico y
la correspondencia por un procedi- mediante correo postal. Se envia-
miento de jueces bilingües. ron 477 protocolos del IBP a psicó-
logos asociados al Colegio Oficial
de Psicólogos de Madrid mediante
Procedimiento correo electrónico y 250 por correo
postal, incluyendo un sobre para la
El instrumento así elaborado, con devolución del instrumento cumpli-
las partes descritas y una página mentado. Ciento quince fuero n
de presentación y motivación del devueltos por razones de dirección
objetivo de la investigación, fue postal o electrónica. En el momen-
enviado a una muestra de psicólo- to de cerrar la recepción de proto-
gos en ejercicio profesional tanto colos se habían devuelto, correcta-
de lengua española como de len- mente respondidos, 98 protocolos.
gua portuguesa. El IBP iba acom- En la muestra de psicólogos de len-
pañado de una declaración en la gua portuguesa el número de pro-
que cada uno de los participantes tocolos enviados, por vía electróni-
en la investigación declaraba cono- ca principalmente, fue de 241 y el
cer los objetivos de la investigación n ú m e ro de protocolos re c o g i d o s
y participar voluntariamente en la fue de 105.
misma, autorizando además la

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A. M.ª T. Benevides, B. Moreno-Jiménez, E. Garrosa y J. L. González

RESULTADOS el que se obtuvieron los resultados


que aparecen en la tabla nº 1.
Estructura de los instrumentos.
Análisis factorial del IBP En este segundo análisis facto-
rial, los tres factores representan el
Después de analizar los datos 46,86 % de la varianza explicada.
sociodemográficos y profesionales El primer factor reúne los ítems de
principales de la muestra, se proce- Realización Personal y explica un
dió al análisis factorial del IBP a fin 18,2 %, el segundo está formado
de conocer su estructura factorial. exclusivamente con los ítems pro-
Para ello se procedió con el méto- cedentes de la formulación teórica
do de componentes principales y del Cansancio Emocional y explica
rotación varimax. En un primer aná- un 16,9%, finalmente, el tercer fac-
lisis con solución forzada a tres fac- t o r, que procede de los ítems de
t o res en función de la estru c t u r a Despersonalización, explica un
teórica del instrumento, los tre s 11%. Sólo en esta última dimen-
factores explicaban un 36, 12% de sión uno de los ítems satura tam-
la varianza total. El primer factor bién en Cansancio Emocional; no
coincidía con la Realización Perso- obstante, se ha optado por mante-
nal y explicaba un 13,5% de la nerlo debido a la estructura global
varianza, el segundo que reunía los del cuestionario (anexo 1).
ítems de Cansancio Emocional
explicaba el 13,4% de la varianza, y El análisis de consistencia de los
el tercero, con los ítems proceden- ítems de las tres dimensiones apa-
tes de la dimensión teórica de Des- rece en la tabla nº 2.
personalización explicaba el 9,02%
de la varianza. Como se puede observar, la con-
sistencia, evaluada por el índice
Aunque la estructura del cues- alfa es bastante aceptable para las
tionario resultaba re l a t i v a m e n t e dimensiones de Realización Perso-
clara, se procedió a una selección nal y Cansancio Emocional y dismi-
de los ítems en función de dos cri- nuye para Despersonalización, aun-
terios: 1) se eliminaron todos los que sigue siendo aceptable según
ítems que presentaban una satura- los criterios psicométricos habitua-
ción inferior a 0,40, y 2) se supri- les (Nunnally y Bernstein, 1995).
mieron todos los ítems que satura-
ban en más de una dimensión. Para establecer una primera
Aplicados estos criterios se proce- aproximación a la validez de cons-
dió a un nuevo análisis factorial en tructo se procedió a establecer el

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

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A. M.ª T. Benevides, B. Moreno-Jiménez, E. Garrosa y J. L. González

análisis de correlaciones entre las correlación positiva entre las dos


t res dimensiones del IBP, para últimas, tal como la teoría prevé.
comprobar que se sigue el patrón
c o rrelacional de las dimensiones Establecida la validez factorial del
operativas del síndrome reconocido IBP mediante el análisis factorial y
en la literatura. Los datos aparecen el análisis de consistencia, se pasó
en la tabla nº 3 a determinar los parámetros bási-
cos de las tres dimensiones esta-
Los datos indican una corre l a- blecidas. En este caso, por razones
ción negativa entre Realización Per- teóricas recogidas en la discusión
sonal y Cansancio Emocional y se añadió una cuarta dimensión
Despersonalización, así como una resultado de invertir las puntuacio-

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

nes de Realización Personal, así nº 5 recoge la matriz de correlacio-


como una puntuación promediada nes, incluyendo las dimensiones
global de burnout. Los parámetros Falta de Realización Personal y
aparecen en la tabla nº 4. Burnout global con las dimensiones
La variable FRP corresponde a del MBI, en el que también se ha
Falta de Realización Personal y es calculado por el mismo pro c e d i-
el resultado de invertir las puntua- miento una puntuación de Burnout
ciones de los ítems de la dimensión global.
de Realización Personal. La razón
de ello es la conveniencia de poder En la tabla nº 5 aparecen en
elaborar un resultado global del negrita las correlaciones entre las
cuestionario, de interés y valor para dimensiones del IBP y sus corres-
algunos trabajos tanto prácticos pondiente s del MBI. Se puede
como de investigación, comple- o b s e rvar que en todos los casos
mentariamente, la puntuación en las correlaciones son positivas y
Falta de Realización Personal per- significativas como cabía esperar.
mite una comparación directa con Relativamente altas son las corres-
los resultados de las otras dos pondientes a Cansancio Emocional
variables. y a la puntuación global de Bur-
nout.
A una parte de la muestra anali-
zada, la submuestra de habla por-
tuguesa, se le aplicó complementa- Análisis factorial del ISE
riamente el MBI a fin de obtener
una prueba de la validez conver- El análisis factorial del ISE no
gente entre el MBI y el IBP. La tabla verificó el modelo teórico de dos

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tores, la varianza explicada resultó


claramente inferior, con un porcen-
taje del 34,86%. La solución de tres
factores tendía igualmente a mejo-
rar la saturación de los elementos.
Dada la coherencia teórica de la
opción de tres factores que agrupa-
ba los síntomas en físicos, psicoló-
gicos y sociales, se optó por man-
tener la solución de tres factores,
tal como se recoge en la Tabla nº 6.

Los resultados de la opción man-


tenida para el ISE de tres factores
se recogen en la Tabla nº 7

Aunque en general la resolución


factores principales, sino que mos-
de tres factores resulta teóricamen-
tró tres factores que explicaban un
te clara, el primer factor, síntomas
40,326% de la varianza. Cuando se psicológicos, agrupa a tres elemen-
forzó el análisis factorial a dos fac-

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La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

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tos que teóricamente parecen más cia aceptable, claramente menor en


bien propios de la sintomatología el factor de sintomatología física,
física: 3) exceso de apetito, 17 ) aunque dentro de los márg e n e s
aumento del consumo de alcohol y habituales de aceptabilidad. Los
1) dolores de espalda o cuello. factores de Síntomas Psicológicos
Igualmente tres elementos, teórica- y Síntomas Sociopsic ológicos
mente de tipo físico, aparecen con obtienen niveles de consistencia
una saturación menor de la inicial- claramente satisfactorios.
mente exigida de 0,40. Son los ele-
mentos: 5) dolores de cabeza, 23) Los estadísticos básicos referi-
presión arterial alta y 23) presión en dos a las puntuaciones en los tres
el pecho, a pesar de lo cual se los factores del ISE indican claramente
mantuvo en la escala final de Sínto- que la muestra no se caracteriza
mas Físicos (anexo 2). por el desarrollo de síntomas, sino
que en los tres factores los valores
El análisis de consistencia de medios se mantienen próximos a
cada uno de los factores del ISE se 1,00. Los datos aparecen en la
recoge en la tabla nº 8. Tabla nº 9.

Los resultados del análisis de Para confirmar la relación teórica


consistencia indican una consisten- supuesta entre los factores y

CLÍNICA Y SALUD 273


La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

dimensiones de bur nout y las cial propuesto y que reproduce la


secuelas o consecuencias sintomá- estructura clásica del burnout asis-
ticas, se procedió a establecer las tencial (Maslach y Jackson 1981,
correlaciones entre las dimensiones 1986) consistente en tres dimensio-
del IBP y los factores del ISE. nes: cansancio emocional, desper-
Se observa que todas las corre- sonalización y realización personal.
laciones de las dimensiones del IBP Los índices alfa de cada uno de los
son significativas al nivel de 0,01, factores resultan aceptables, aun-
como se predecía desde el modelo que una vez más, el índice de des-
teórico. Los valores más altos apa- personalización resulta el más bajo,
recen en la dimensión de Cansan- tal como ha sucedido en las dife-
cio Emocional con el resto de fac- rentes adaptaciones del MBI-HSS
t o res del ISE. Son los Síntomas (Schaufeli, 1998). Teniendo en
Psicológicos los que tienen mayo- cuenta la relevancia concedida a la
res correlaciones con las dimensio- elaboración teórica de este factor,
nes del IBP, siendo seguidos por la tendencia a mostrar una consis-
los Síntomas Sociopsicológicos y tencia menor podría indicar que la
ya en tercer lugar por la Sintomato- naturaleza de esta factor es hetero-
logía Física. génea, con indicadores más pro-

DISCUSIÓN pensos a mostrar una variabilidad


mayor entre ellos (Moreno-Jiménez
El análisis factorial del IBP mues- y Oliver, 1993).
tra una estructura de factores que
corresponde al modelo teórico ini- Una posible ventaja de la confi-

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A. M.ª T. Benevides, B. Moreno-Jiménez, E. Garrosa y J. L. González

guración del IBP es el número equi- dos factores restantes. La correla-


librado de ítems por factor, diez ción global de ambos cuestionarios
para realización personal, diez para es moderadamente alta (r =.613), y
cansancio emocional y 10 para las correlaciones entre los factores
despersonalización. Es pro b a b l e equivalentes de cansancio emocio-
que según la teoría psicométrica nal son ligeramente superiores a las
(Nunnally y Berstein, 1995) el mayor globales (r =.641), y disminuye para
número de ítems en cada uno de los otros factores, despersonaliza-
los factores en comparación con el ción y realización personal. La dis-
MBI-HSS pueda conducir a índices minución de las correlaciones para
de fiabilidad más altos. las variables de Despersonalización
y Falta de Realizacion Personal es
La matriz de correlaciones del congruente con el desarrollo de un
IBP muestra la estructura habitual modelo específico del burnout de
de los factores del modelo clásico psicólogo en el que cabe esperar
del burnout (Gil-Monte y Peiró, que las variaciones provengan prin-
1997). Los resultados encontrados cipalmente de las respuestas de
muestran el patrón de correlacio- adaptación, de las respuestas de
nes encontrado por Lee y Ashforth afrontamiento específicas a la apa-
(1996) en su estudio del MBI-ES. rición inicial del síndrome (Gil-
Las correlaciones más altas se Monte y Peiró 1997; Chern i s s ,
encuentran entre cansancio emo- 1980).
cional y despersonalización, mien-
tras que las más bajas, aunque Las medias de los tres factores,
s i e m p re significativas, apare c e n tal como son evaluados por el IBP,
entre cansancio emocional y reali- no muestran puntuaciones altas en
zación personal. Tales re s u l t a d o s relación con el rango de respuesta
sugieren que la estructura factorial p ropuesto (1-6), lo que indicaría
del IBP se ajusta psicométricamen- que en la muestra estudiada el nivel
te al modelo de burnout propuesto de burnout no es elevado. En el
por Maslach y Jackson (1981). análisis de los parámetros de los
t res factores se ha procedido a
Los análisis de converg e n c i a i n v e rtir la puntuación de Realiza-
entre el IBP y el MBI indican que ción Personal transformándola en
todos los factores del IBP correla- la de Falta de realización personal.
cionan positiva y significativamente De esta forma, se puede proceder
con sus equivalentes del MBI-HSS. a comparar directamente los tres
Uno de ellos, el cansancio emocio- factores entre sí. Se ha procedido
nal, con una correlación moderada- igualmente a obtener una puntua-
mente alta, y algo más baja en los ción global de burnout, tal como ha

CLÍNICA Y SALUD 275


La evaluación específica del síndrome de burnout en psicólogos: el «inventario de burnout de psicólogos»

sido propuesta por diferentes auto- cuentes de un aspecto teóricamen-


res (Burke, Shearer y Deszca, 1984; te relevante de tipo psicosocial. Los
Fimian, 1984), lo que permite una tres factores muestran niveles de
visión global del síndrome que no consistencia aceptables. Como
tiene por que oponerse a una com- ocurría con los niveles de burnout,
paración de perfiles (Maslach y las medias de los tres consecuen-
Jackson, 1986). Las bajas puntua- tes del burnout consideradas no
ciones obtenidas podrían ser debi- resultan alta, lo que indica que la
das a la muestra, pero podrían ser muestra no es especialmente sinto-
igualmente propias de la población mática. No obstante, posteriore s
de psicólogos, lo que sería necesa- trabajos deberán confirmar o des-
rio comprobar mediante nuevos y cartar la solución aquí propuesta.
más amplios estudios.
La matriz de correlaciones entre
El Inventario de Síntomas de el IBP y el ISE indica que los tres
Estrés (ISE) responde a una visión consecuentes tienen una mayor
teórica del burnout como una pro- correlación con el cansancio emo-
ceso de antecedentes, síndrome y cional, lo que es habitual en este
consecuentes (Cherniss, 1980). En tipo de estudios (Glass, McKight, y
realidad, dado que la delimitación Va l d i m a r s d o t t i r, 1993), re s u l t a d o
conceptual entre síndrome y con- que ha llevado a algún autor (Shi-
secuencias no siempre resulta clara rom, 1989) a considerar el cansan-
(Schaufeli y Enzman, 1998), el ISE cio emocional como el aspecto
es una prolongación específica del básico del síndrome, y las otras
IBP, menos centrada en los aspec- dos variables como aspectos del
tos estructurales del modelo y más proceso de respuesta. Resulta rele-
dirigida a evaluar las consecuen- vante considerar que la falta de
cias funcionales del síndrome. realización presenta una correlación
mayor con las consecuencias psi-
Los resultados factoriales encon- cosociales (r =.276), mientras que
trados indican que los consecuen- la despersonalización lo hace con
tes más que en dos factores, como los síntomas psicológicos (r =.300).
mantenía la propuesta teórica ini- Estos resultados parecen apoyar el
cial, se agrupan en tres factores o modelo de Leiter (1993) que propo-
grupos de consecuentes: compo- ne que la disminución de la realiza-
nentes psicológicos, sociopsicoló- ción personal tiene un contexto
gicos y físicos. La solución de tres más sociodemográfico y profesio-
factores parece más correcta tanto nal que derivado del proceso psi-
por la mayor varianza explicada cológico del síndrome. La desper-
como por la inclusión en los conse- sonalización sería más bien una

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A. M.ª T. Benevides, B. Moreno-Jiménez, E. Garrosa y J. L. González

actitud de respuesta al elemento afectados por el problema?. En


desencadenante del síndro m e cualquier caso, este hecho no es
dependiendo de los factores psico- inusual. Pereira (1994) y Nagelsch-
lógicos y de la personalidad del mith (1995) evaluando la personali-
sujeto. El menor índice de correla- dad de psicólogos ya señalaban la
ción se encuentra entre las dimen- dificultad de conseguir coopera-
siones despersonalización y sínto- ción por parte de los colegas.
mas físicos (r =.241). Una observa- Pereira (1995) ha negado la hipóte-
ción semejante ha sido efectuada sis de que ello sea debido al instru-
por Calvete y Villa (2000). Estos mento utilizado, o de que la forma
autores creen que este dato com- del instrume nto determine el
probaría el aspecto defensivo de la número de personas que aceptan
dimensión Despersonalización, de participar, más bien se trataría de
forma que las tasas más altas de una característica de la muestra
despersonalización se encuentran profesional.
asociadas a la ausencia de sínto-
mas psicosomáticos y que los índi- Los datos aquí presentados no
ces más altos de problemas psico- son sino un resultado exploratorio
somáticos cursan con una puntua- con un nuevo instrumento elabora-
ción menor en despersonalización. do para estudiar e investigar espe-
cíficamente una población escasa-
Un dato relevante y crítico de la mente estudiada y, sin embarg o ,
investigación realizada ha sido el claramente afectada por este pro-
bajo índice de retorno de los proto- blema. A pesar de lo reducido de la
colos enviados, lo que suscita no muestra, y de la insuficiencia de
pocos inte rrogantes sobre las estudios sobre el instrumento pro-
características de los remitentes y puesto, algunos de los resultados
s o b re la generaliza ción de los obtenidos indican que puede ser
resultados. Este dato plantea inte- de utilidad para explorar de forma
rrogantes sobre los datos que se más completa el campo del bur-
habrían obtenido con una tasa de nout en el ejercicio profesional de la
respuesta mayor. ¿Son justamente psicología, una necesidad que se
los profesionales que no han con- hace cada vez más urgente. El
testado aquellos que presentaban estudio con muestras mas amplias
mayor burnout o es exactamente al y separadas deberá comprobar los
revés y han respondido los más resultados iniciales expuestos.

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